Está en la página 1de 7

ENSAYO

PRESENTADO POR:

JESSICA MACHADO PEREZ

UNIVERSIDAD DE CALDAS
EL QUERER UN BUEN FUTURO

(El transito de la adolescencia a la adultes)

“Renunciar a una pasión es como desgarrar con mis uñas una parte viva de
mi corazón”

Gabriele d´ Annunzio

INTRODUCCION :

Este ensayo se va a centrar en como eligen carreras los jóvenes hoy en día y qué
deciden hacer después de que terminan bachillerato, si es que estos deciden
seguir estudiando, y el por qué se inclinaron a las carreras, cursos o tecnólogos
que estudian o pretenden hacerlo. Muchos de los adolescentes se ven obligados a
estudiar algo que no quieren, sea por influencia familiar o por la posición
económica en la que se encuentran.

JUSTIFICACION:

Los recién graduados o bachilleres se ven consumidos por la pregunta ¿Qué voy a
estudiar? Teniendo en cuenta que muchos de estos se ven en una mala situación
económica, no saben qué quieren practicar, escogen alguna carrera que les
asegure un futuro laboral o se ven obligados por su entorno social y/o familiar a
estudiar algo completamente diferente a lo que sus pasiones les dictan, esto no
solo es causado debido a la presión social, unos no pueden siquiera soñar con
realizar la carrera de sus sueños, porque no pueden cargar con el costo que esto
tiene y terminan estudiando lo que puedan o les permita su condición.

Si algo podemos comprender respecto al tema hasta este momento es que los
jóvenes se ven en su mayoría obligados a elegir, no basándose en lo que quieren
o anhelan sino para lo cual les alcance, lo que sus padres les impongan,
persuadan o la tan famosa “carrera segura”.
En el caso de las personas que se ven en una grave situación financiera o no
están tan bien económicamente como para pagar una carrera universitaria, se ven
obligados a seleccionar algo que les pueda generar dinero, dejarlos trabajar
mientras estudian o algunos simplemente no escogen ninguna y se van directo al
trabajo pues no pueden darse el lujo de “estudiar” ,ya que es algo casi imposible
para ellos, en otras palabras, no pueden estudiar a tiempo completo porque
necesitan trabajar para costearse los estudios y al mismo tiempo de eso poder
abastecer las necesidades básicas que se tiene. Por otra parte, aquellos que
tienen la posibilidad de estudiar por lo menos un tecnólogo, los cuales duran en su
mayoría dos años, y son solo unos días a la semana, lo cual les brinda la
oportunidad a las personas para hacer otras actividades además de las
actividades académicas. Otros pueden acceder a un pregrado que son de tres a
cinco años, lo cual necesita mayor esfuerzo y dedicación de tiempo a ella, les deja
muy difícil el trabajar mientras se cursa la carrera.

Cuando una persona debe elegir su carrera universitaria, se encuentra,


en la mayoría de los casos, en una encrucijada, suele hacerse muchas
interrogantes: busca varias fuentes de información, analiza intereses,
realidad socioeconómica, expectativas de trabajo, entre otras que le
permita tener conciencia de las realidades a las que va a enfrentar.
Elegir la futura carrera que se va a estudiar significa casi siempre una
decisión importante y compleja, si se tiene en cuenta que en este
momento la mayoría de los jóvenes no saben exactamente qué quieren
en la vida, dónde están sus mejores oportunidades de desarrollo y sobre
todo que el ideal de su futura profesión muchas veces no se
corresponde con la realidad de esta (Camacho y Rubio, 2007).

Todas estas observaciones se relacionan también con casos donde están


presionados por su entorno o familiares y acaban estudiando algo de lo cual no
están convencidos o no quieren, solo para complacer a terceros y poder cumplir
con una expectativa o enorgullecer a estas personas que generan influencia en
ellos.

Un modelo que se le ha llamado «motivación interna-externa» es decir,


si bien los estudiantes aparentemente siguen motivaciones externas al
momento de elegir carrera, también es verdad que no pueden elegir si
la carrera no despierta en ellos interés, curiosidad y deseos de una
formación académica sólida. Es decir, los estudiantes siguen
motivaciones internas al momento de elegir una carrera (pensamientos,
proyecciones del futuro, etc.) y seleccionan una con el propósito de
obtener recompensas externas entre ellas, prestigio social y posición
económica, mismas que les ayudarán a satisfacer sus deseos de éxito
profesional. Sin embargo, las carreras tradicionales y saturadas siguen
ocupando los mayores índices de demanda, esto probablemente por la
poca información profesiográfica con que cuentan los alumnos. Este
sistema de «motivación interna-externa» se basa en Influencia Familiar,
oportunidad de desarrollo social, económico y laboral, características
personales, experiencias, posibilidades económicas, valores, información
profesiográfica, intereses y aptitudes. (María Cano, 2008)

Hasta el momento solo nos hemos enfocado en las influencias socioeconómicas y


familiares, a la par de esto también juega un papel muy importante lo que es el
país o región en donde nació el individuo, puesto que, muchos estudiantes no
logran tan siquiera ingresar a la educación básica o secundarias y es que el nivel
de bachilleres en algunos países debido a la situación social, económica y de
administración de este no son las mejores en consecuencia no se les brindan
muchas oportunidades a los jóvenes y adolescentes para soñar con un futuro y
una carrera universitaria. Es que el anhelo de superarse se les vuelve cada vez
más distante porque por mucho empeño que ellos tengan no se les brindan las
oportunidades para lograrlo.
No se puede dejar de lado el hecho de que acceder a una universidad además del
factor económico es algo muy difícil y que sin una buena educación se hace
extremadamente difícil, principalmente para estas personas que carecen de una
vida privilegiada que en su gran mayoría aspiran a las universidades públicas, las
cuales piden puntajes muy altos y pocos son los que pasan, también que existen
estas “palancas” las cuales ayudan a algunos, pero también les quitan la
oportunidad a otros y que mayormente son utilizadas por personas con
conexiones o buen estatus. Así que, aunque hayas podido recibir educación y
luchar por sobrevivir a una universidad, el pasar en esta, lamentablemente no
depende solo de si eres buen estudiante o no.

La elección de carrera también varía de acuerdo con el contexto, es


decir, con las políticas de ingreso a la educación superior de cada país.
Las normas vigentes en Ecuador y en Cuba, por citar dos países en
Latinoamérica, establecen exigentes exámenes de ingreso con el
declarado propósito de estimular la dedicación al estudio de los
estudiantes secundarios que aspiran a una posterior graduación
universitaria. La graduación universitaria argentina es muy baja y se
ubica detrás de la de Cuba, Colombia, Brasil y Chile (Guadagni, 2016)

Después de todo lo analizado podemos llegar a comprender de una manera más


concisa y especifica el cómo los estudiantes y jóvenes, se ven en la situación de
tener que escoger realizar una carrera (si es que puede acceder a esta), un curso
o tecnólogo dependiendo de en qué situación o ambiente se encuentren.

Lo planteado en este ensayo no se quiere decir que no existan estudiantes que


estén en la carrera de sus sueños o la deseada, u otros que estén en cursos o
tecnólogos por placer propio y no en consecuencia de que es su única opción para
estudiar, puesto que, estos casos si se ven y es muy gratificante saber qué estas
situaciones si se dan para estos jóvenes, ya que al estar donde de verdad ellos lo
desean su rendimiento es mejor con base en que están estudiando por pasión.
Que hoy en día los estudiantes se vean en la situación de no poder acceder a su
educación deseada, en el caso de los que no tiene los recursos económicos para
la sustentación de esta, es culpa en gran parte en el país del cual provienen, esto
lo menciona Guadagni, en la cita previamente hecha en párrafos anteriores. Claro
que ellos no escogen en donde desean nacer y que sus países no cuenten con las
mejores oportunidades, tampoco es culpa de estos jóvenes con aspiraciones a
crecer en la vida, pero a consecuencia de todo esto ellos tienen que hacer un
sobre esfuerzo si desean prosperar, porque de lo contrario se quedaran
estancados, más si no cuentan con un apoyo externo que es de vital importancia
para estos adolescentes que lo que más necesitan en esos momentos es apoyo,
tanto psicológico y económico.

CONCLUSION:

Un punto que es muy importante es que se deja mucho de lado lo que es el tema
de la orientación vocacional, respectos a los verdaderos intereses, fortalezas y
dotes de los adolescentes. Estos muchachos en la mayoría de los casos no saben
ni siquiera en lo que son buenos o pueden destacar, desconocen quienes son y
sus cualidades, lo cual los limita a pensar que no son buenos en nada y que no
pueden tener un buen futuro. La orientación vocacional se trata de ayudar a estas
generaciones a poder estudiar algo en lo que ellos se sientan cómodos, y no
decirles que estudiar basándose en criterios o deseos propios, como se hace
usualmente en los casos anteriormente mencionados. También buscar una
transformación y que se pueda acceder a una buena educación para así por
medio del estudio estos jóvenes se puedan abrir un paso en la vida,
independientemente de donde haya nacido o su situación económica.
Referencias

Carpio Camacho, A., y Guerra Rubio, L. M. (2007). A orientação profissional de


alumnos

da educação superior. Revista Brasileira de Orientação Profissional, 8(2), 11-24.

Guadagni (2016). Ingreso a la Universidad en Ecuador, Cuba y argentina. CEA,


5(44),

1-14.

María Alicia Cano Celestino, Rev. Mex. Orient. Educ. v.5 n.13 México fev. 2008

También podría gustarte