Está en la página 1de 9

I- PEQUEÑA HISTORIA DE DOS POEMAS

-Primero describe al rapsoda, a quien lo asimila a un orador, a un poeta. “Rapsoda era un recitador o pregonero
ambulante que cantaba poemas homéricos u otras poesías épicas.”
Pero Vidal-Naquet afirma que Homero no era un rapsoda, sino un aedo, al cual define como “cantor”, los cuales
recitaban poemas acompañados de un instrumento llamado “la forminge”.
La Ilíada y la Odisea, datan según el autor, de finales siglo IX A.C o el siglo VIII A.C. Durante estos años se consolida la
vida en “ciudad” en la Grecia europea. Estas ciudades no son gobernadas por el pueblo, sino por un grupo de
hombres con dinero, poder y riquezas.
En el año 1488 es la primera vez que los libros de Homero son impresos, en Florencia, Italia.
Vidal-Naquet explica que antiguamente la escritura tenía una concepción algo diabólica, ya que su función era
precisamente trasmitir mensajes de muerte o guerra. Es allí donde saca a relucir a los seres maléficos de ambos
libros de Homero, las sirenas; mujeres mitad mujer-mitad ave.
Luego afirma que la poesía como la escritura; es peligrosa.
En la Odisea, se reflexiona sobre el oficio del aedo, y sobre los peligros y grandeza que puede representar.
El oficio del aedo se consolida, con el desarrollo de la escritura alfabética, que los griegos tomaron de los fenicios
alrededor del 900 A.C.
Ambos libros fueron compuestos en un idioma en parte superficial basado en dos dialectos hablados principalmente
en el Asia Menor; el jónico y el Eolio.
Los 26 mil versos están escritos en una forma llamada “hexámetro dactílico” El acento de los versos es “tónico” es
decir, musical.
El texto de Homero se presentaba en rollos, llamados en latín”volumina”, incómodos de leer.
Los Humanistas del renacimiento, eran incapaces de leer los manuscritos de Homero.

II-LA HISTORIA Y LA GEOGRAFIA


-Según Estrabón, geógrafo contemporáneo de Virgilio y Augusto, la Troya Homérica se encontraba a pocos
kilómetros del Ilión; lugar que durante la Grecia Clásica y Helénica, se pensaba que se situaba Troya. El Asia menor
se volvió turca y la colina donde se alzaba Ilión recibió el nombre de Hissarlik.
Un comerciante alemán; Heinrich Schliemann descubre en 1873 el tesoro de Príamo. Luego de 3 años de
excavación encuentra mucho oro, plata y lapislázuli.
Once Troyas se han sucedido en Hissarlik, de las cuales la octava es griega y la undécima, romana.
La Troya II es la del tesoro de Príamo, la Troya VI, es la más atractiva.
En 1876, descubrió en Micenas, un conjunto de sepulturas reales, uno de los cadáveres tenia una mascara de oro,
que se le atribuye a Agamenón.
Las tumbas descubiertas por Schliemann son las originarias del sincretismo cultural ente Grecia y la “cultura
minoica” de Creta, esta unión es a partir del 1600 A.C.
La civilización “micénica”, desaparece en el ámbito económico y social, no en el sentido humano.
Esto quiere decir que en el centro de cada lugar de la civilización micénica existía un palacio gobernado por un
soberano”ouanax”. Sus tumbas eran de carácter monumental.
El hecho de que Homero haya querido evocar la Grecia Micénica no significa que la haya descrito. Es decir; el quería
representar una sociedad muy antigua. La gran mayoría de lugares que el evoca si se encuentran en Grecia
propiamente tal y si tienen influencia “micénica”, aunque en la Ilíada la Grecia Clásica, la patria de Homero, esta
prácticamente ausente.
Esta duda sobre si realmente existió lo descrito por Homero se complica aun mas cuando se sabe que algunos
objetos descritos por Homero ya habían desaparecido, según los arqueólogos, en la época en que compuso sus
poemas. Ejemplo de lo anterior es el casco del cretense Meriones.
Desde la antigüedad se consideraba que las escalas del viaje de Ulises desde Troya hasta la isla de los feacios eran
en gran medida Legendaria; pero el erudito francés, Víctor Berard, afirma que cada escala del viaje de Ulises
corresponde a un lugar geográfico determinado y hallable en un mapa.
Esto se complica aun mas, cuando se sabe que los relatos están divididos entre directos e indirectos. Los primeros
están relatados por el poeta mientras que los segundos es un personaje el que toma la palabra.
A todo esto, hay que agregarle que en La Odisea no abundan referencias topográficas, lo que complica aun mas el
entendimiento si realmente es real el viaje o mítico.
Cuando entramos a analizar la mitología que esta presenta en la obra, nos damos cuenta que es abundante; un
ejemplo de esto es cuando Calipso le ofrece a Ulises la “naturalización divina”. Ulises lo rechaza y opta por
recuperar a Penélope, por seguir siendo hombre. Esa elección de humanidad es lo que le da sentido a todo el
poema.

III-GRIEGOS Y TROYANOS
-Durante la época clásica, simbolizada por los monumentos de la acrópolis de Atenas, se identifican dos tipos de
hombres, los griegos, llamados helenos entre si, y los barbaros.
La palabra bárbaro, no significa una distinción racial, sino la ausencia del idioma griego.
“Uno no es griego por nacimiento, sino que se vuelve griego por la educación, la paideia”.
Para Herodoto; los troyanos eran barbaros y Troya una ciudad bárbaro.
El término bárbaro era desconocido para Homero. Aunque Homero se preocupa por distinguir a los troyanos de sus
aliados.
Según Vidal-Naquet, bárbaro es el vecino más próximo de uno que no habla la misma lengua.
Entre Troyanos y Griegos existe una diferencia crucial. Los troyanos constituyen una ciudad, con heterogeneidad de
edades y géneros, las mujeres son esposas legítimas, mientras que los aqueos, solo comparten su lecho con
concubinas; incluso homero no señala el nacimiento de un solo niño.
Asombra el hecho que las relaciones entre enemigos en una guerra estén pinceladas con acciones de cortesía.
Cientos de lectores llegan a pensar que Homero toma partido por los Troyanos ante los Aqueos, incluso un critico
británico llega a sugerir que Homero era Troyano o al menos hijo de una Troyana.
Esta paradoja puede ejemplificarse cuando Aquiles mata a Héctor con ayuda de Atenea, pero también cabe recordar
que Héctor mata a Patroclo con la ayuda directa de otra divinidad, Apolo.
Esta paradoja entre mortales y dioses nos apresura a afirmar que tanto los troyanos como los aqueos son héroes
mortales, incluidos los hijos de divinidades. Esto no significa que todos los hombres sean iguales.
En otro aspecto podemos distinguir a Troya y Aqueos, por la presencia abundante de oro de Troya. También la
presencia del palacio de Priamo por parte de Troya, distinguí mucho a ambas culturas. Los Aqueos no son esposos
fieles, pero si son, como corresponde, monógamos.
Troya no conoce la rebelión y experimenta el “stasis” que tal como lo define Tucides es como un conjunto de
síntomas que indican una perturbación en el interior de los individuos y los estados.
Homero no conoce esta palabra y Troya no es una ciudad dividida, afirma.
Si la palabra stasis no es homérica, la idea de la guerra civil, la guerra intestina que se define como “Un conflicto que
sucede en el interior (de una organización, de una empresa, de una familia, de un país) entre dos bandos con poder
dentro de la misma”, esta muy presente en los textos homéricos. En este aspecto de la guerra, precisamente en la
destreza guerrera, nadie supera a Héctor, solo el mismo Aquiles, pero los aqueos en su conjunto aventajan a los
troyanos. En un aspecto más general, la orden y eficiencia son características de los aqueos (sitiadores), mientras
que el desorden y el miedo suelen ser encarnador por los troyanos (sitiados). Es así como muchos troyanos suplican
a sus adversarios vencedores, como Héctor a Aquiles. En los troyanos se advierte una conciencia aguda de que la
desgracia será colectiva, lo que se asimila mucho al concepto del “destino”. Como ejemplo podemos citar la
conciencia de los troyanos a que su ciudad seria destruida y desapareciera. Todo griego sabia que Troya esta
destinada a la muerte; esta sensación de predeterminación a sido muy bien ejemplificada por el poeta griego
Constantin Cavafis, a principios del siglo XX.

IV- LA GUERRA, LA MUERTE Y LA PAZ

-La Ilíada es el poema de guerra. Si es justo los dioses intervienen para frustrar los procesos de paz. La Odisea es el
poema de la paz, aunque los conflictos no están del todo ausentes y termina con la paz concertada entre Ulises y los
familiares de los pretendientes masacrados por el. A lo largo de la obra Ulises no aspira a hacer la guerra sino a
recuperar a su esposa y hogar, es esto lo que se ve simbolizado en el lecho conyugal. Esta oposición entre la guerra y
la paz aparece en el escudo que Hefesto forja para Aquiles, en el cual se enfrentan 2 ciudades; la de la paz y la de la
guerra. Este hecho se aprecia muy antiguamente en la bandera de Ur en Mesopotamia. Un dato curioso en los
poemas de Homero, es el hecho que jamás un héroe a combatido como lo narra Homero, incluso el hecho que los
héroes van a la batalla en carros de combate los cuales curiosamente, sabiendo que pueden usarse como armas de
combates solo lo usan para transportarse. Como se dijo anteriormente, durante la guerra hay momentos de
cortesía, cuyas normas Héctor precisamente invita a respetar. Cabe señalar que la inmensa mayoría de los muertos
en la Ilíada no sucumben en duelo, sino en lo que se llama la “aristeia”, que se define como “ una escena en la que
un héroe en la batalla tiene su o sus mejores momentos” y “Tal es la alta calidad del héroe en la ofensiva, que
Aristeia es una escena por lo general que resulta en la muerte de todos los que se ponen en su camino.”

La aristeia por excelente es la de Aquiles, tras la muerte de Patroclo.

La guerra, tenía objetivos diferentes para cada bando, los troyanos intentaban atravesar el muro constituido por los
aqueos e incendiar sus naves. Logran franquear el muro y poco les faltara para consumar la segunda hazaña. El único
héroe griego que muere es Patroclo. Se puede afirmar que la guerra se ha vuelto implacable, pero cabe señalar que
la Ilíada concluye con un acto de bondad protagonizado por Aquiles y Priamo, cuando el Anciano Priamo guiado por
Hermes le suplica a Aquiles que le devuelva el cadáver de Héctor, su hijo muerto. Es aquí donde el cadáver de
Héctor, pasa a bella muerte y la Ilíada termina con su majestuoso funeral. El combate y la muerte no son
forzosamente heroicos. Todas las armas no son iguales y todas las guerras no son dignas de todos los héroes, como
Héctor y Aquiles. Ambos bandos envían espías para recoger información. Estos actos serán la norma de la Odisea,
ya que todo el poema esta colocado bajo el signo del disfraz y la astucia. Un ejemplo es como Homero pasa muy
fácilmente de mendigo a joven, como si Homero quisiera encarnar en el personaje de Ulises todas las variaciones
posibles de la condición humana, desde el mendigo hasta el rey.

V-CIUDAD DE LOS DIOSES, CIUDAD DE LOS HOMBRES

-La presencia constante de los dioses es un aspecto asombroso en los relatos de Homero. Así como el al comienzo, le
pedí a la musa que relate la cólera de Aquiles, en la obra el aedo hace descender rápidamente a las divinidades a la
tierra. En la Ilíada los Dioses se sitúan en bandos contrarios, Atenea, Hera y Poseidón combaten con los aqueos, los
cuales vencen; mientras que en otro bando combaten Apolo, Ares y Afrodita. Dos Diosas tienen hijos con héroes
combatientes., como por ejemplo Aquiles, hijo legítimo de Afrodita. Además de tomar partido los dioses intervienen
físicamente., así como entre dioses y hombres también puede existe el amor. Los dioses se disfrazan, por ejemplo
Atenea se presenta ante Ulises como un Joven Pastor. Los dioses no tienen la misma sangre que los hombres; la suya
se llama “icor”. No consumen pan ni vino, sino néctar llamada “la bebida de la inmortalidad”. Poseidón responde
de forma furiosa la petición de Zeus para que dejara de intervenir a favor de los aqueos, esto demuestra que Zeus
no era tan respetado como se cree. Aunque en otros pasajes de La Ilíada Y la Odisea, insisten en la soberanía de
Zeus. De esta idea se pueden extraer tres ideas esenciales.

La primera habla de “echar suertes” como medio para asignar funciones (base de la democracia) como sucedía en
Atenas. La segunda es la del dominio “en común”, por ejemplo en la Acrópolis y el ágora en Atenas. Los arqueólogos
que excavaron la plaza pública (ágora), descubrieron un espacio en común, patrimonio colectivo de la ciudad. La
tercera es la expresa el termino “sin valor” o “despreciable”. Esto implica un concepto de jerarquía. Por cierto,
existen los iguales, o “pares”, como son en este pasaje los tres hijos de Cronos. Este término nos recuerda que entre
los dioses había algunos excluidos de la ciudad. En Esparta eran los Ilotas mientras que en Atenas los metecos y
esclavos. Desde luego, los aqueos, como ejercito de coalición no constituyen una ciudad en su sentido básico, no
obstante tienen dos instituciones esenciales; como La Asamblea, convocados por todos los combatientes
(Agamenón convoca una al principio de La Ilíada) y El Consejo, que congrega una elite de guerreros. Ambas
instituciones existen en el universo de los dioses. Un detalle importante, la asamblea de dioses se realiza
inmediatamente después de una asamblea de guerreros.

Homero presenta las instituciones divinas a imagen de las instituciones humanas que el conoce.

Zeus sabe que no es omnipotente, pero no deja de recordar que es mas poderoso que todos los otros dioses juntos
y es libre de expulsaron del Olimpo. La ciudad y el “oikos” que significan la propiedad territorial, comienzan a jugar
un papel fundamental, en cuanto a Ulises, lo que le interesa no es la ciudad de Ítaca, sino el oikos, o sus posesiones,
saqueado por los pretendientes. En el aspecto global de la religión, durante la época clásica y arcaica los pueblos
conocen el fraccionamiento, ya que cada pueblo tenía su propia religión y sus propios dioses, por ejemplo, Atenea
en Atenas, y el panhelenismo (sentimiento de unión en la religión).

La paradoja del poema homérico es que los dioses son a la vez próximos y remotos. Son próximos porque ciertos
héroes no les manifiestan siempre respeto y consideración, aunque lo normal es que sean remotos, ya que los
dioses se relacionan con los hombres por medio de sueños. En este ámbito aparecen los adivinos, los cuales se
comunican a través de sacrificios cruentos y salvajes. En la Odisea se señala la oposición entre el mundo salvaje y el
civilizado, en el caso de los griegos, al elegir entre ofrecer o no un sacrifico y así mismo los dioses pueden aceptar o
rechazar un desafío. Las relaciones entre los dioses del Olimpo y los príncipes troyanos son muy complejas.

VI-HOMBRES Y MUJERES, JOVENES Y VIEJOS

-La ciudad griega era un “club de hombres”, del cual estaban excluidas las mujeres. A partir del 451, solo las
atenienses podían traer atenienses al mundo. Es Esparta las niñas no iban a la guerra. El imaginario griego creo a las
amazonas, mujeres guerreras tanto o mas hábiles que los hombres; La Ilíada las menciona dos veces. Algunos
autores modernos han creído que ese pueblo existió y ciertas mujeres las reivindican como precursoras suyas, en
una nueva prueba de la influencia del imaginario griego sobre nuestra manera de pensar. Las mujeres no abundan
en la Ilíada, pero la guerra fue desatada por el rapto de Helena. En el campo aqueo no hay una sola esposa legítima,
incluso Homero no menciona un solo nacimiento en el campo aqueo. Entre la multitud de troyanas, Andrómaca es la
única, aparte de Hécuba, a quien el poeta de La Ilíada identifica como esposa y madre. Andrómaca ha perdido a su
padre y a sus siete hermanos, todos estos muertos por Aquiles. Es imposible no vincular su nombre con la sobre
masculinidad. Ejemplo contrario, Dolon, el despreciable e indigno espía disfrazado de lobo. En conclusión,
Andrómaca esta llena de masculinidad; Dolon de feminidad. En la época de los poetas homéricos, la belleza
penetrara en la civilización griega, la cual esta representada en la seductora y peligrosa Helena. Esta encarna el
“eterno femenino”. En la Odisea, la presencia femenina es casi lo contrario de lo que se ve en La Ilíada. El ingles
Richard Bentley, insinúa que La Odisea, había sido compuesta para un público femenino. Samuel Butler, llego a
postular que La Odisea, fue escrita por una mujer, quien es Nausicaa. Esta hipótesis algo absurda, tiene bases en el
poema. Como por ejemplo, que el objetivo del viaje de Ulises es recuperar a Penélope, la mujer fiel, la que espera
durante cuatro años engañando a sus pretendientes. En fin, no cabe duda que el autor de La Odisea no es una
mujer, aunque dentro del poema se compare a Ulises con una mujer. Esta comparación es una de las cumbres de la
poesía homérica, puesto que se compara a Ulises con Andrómaca. En la Odisea, se presenta el mundo femenino
peligroso. Por ejemplo, las sirenas se presentan como cantantes destructivas y monstruos femeninos. Para finalizar,
podríamos decir que la ambigüedad es la característica de lo femenino en La Odisea. Una ambigüedad similar
aparece en los ritos de
Adolescencia. En Atenas clásica, los jóvenes dedicaban dos años hacia la plenitud de la ciudadanía. Se los llamaba
Efebos. En la época Arcaica, carecemos de conocimientos directos sobre los ritos, solamente se expresan en los
poemas de Homero. El paso de la infancia a la edad adulta, supone el éxito o el fracaso. La función del rito, es
dramatizarlo. El Joven que ha sabido enfrentar el mundo salvaje es digno de entrar a la sociedad de los adultos
civilizados. El único personaje que llega a la edad adulta durante el tiempo del relato es Telémaco., quien tenia
precisamente veinte años, quien por edad se convertiría en miembro de la asamblea. La hazaña de Telémaco, será
ese viaje, iniciado y finalizado con mañas, una fuga y un regreso clandestinos. Su primer combate será junto a su
padre en la batalla contra los pretendientes. El segundo ejemplo de una iniciación, es retrospectivo, como el anciano
Néstor. Este irá clandestinamente a una guerra, al principio como soldado de infantería. A partir de entonces, Néstor
es un Adulto. El tercer ejemplo de iniciación consumada es del propio Ulises. Euriclea, al lavar los pies de Ulises,
reconoce la cicatriz. Esta herida Ulises la recibió, de cacería. Apareció un jabalí y Ulises se adelanto a matarlo. Fallo y
el animal le arranco un trozo de carne debajo de la rodilla. La caza y el retorno al país son las señales
inconfundibles de un relato iniciático. Hay un héroe que no ah logrado salir totalmente de la adolescencia, Paris-
Alejandro, hermano de Héctor. Este es un hombre desdoblado, un arquero y un guerrero clásico a la vez. Cuando ve
a Melenao en el bando contrario, se comporta como un cobarde. Enfurecido por esta huida, Héctor insulta a su
hermano que no ah llegado a la edad adulta. Héctor moribundo sabe que la flecha de Paris matara a Aquiles. Por
consiguiente, sigue siendo un arquero, un hombre de astucia más que de guerra. Demasiado bello para ser varón,
Paris, es un efebo no consumado.

VII- EL REY, EL MENDIGO Y EL ARTESANO

-Shakespeare había leído una traducción en ingles de La Ilíada, donde aparece Troilo, hijo de Priamo, ausente en los
poemas homéricos. En nuestro pensamiento, el concepto de jerarquía se opone al de igualdad, junto con el de
libertad. En mundo griego, que invento la democracia, no desconocía la igualdad, pero la reservaba, incluso en
Atenas, a una minoría, la de los ciudadanos varones. Lo que presintió Shakespeare fue confirmado por un gran
historiador contemporáneo, Moses Finley; “el mundo de los poemas homéricos, estaba estratificado por una
profunda brecha horizontal. En lo alto estaban los aristoi, literalmente “los mejores”. Abajo estaban los demás, la
multitud no definida por término colectivo alguno. El foso que separaba a las dos categorías raramente era
franqueado.

Los poemas homéricos nos dan mas ejemplo de caída social, que de ascensos. En la Ilíada, se recita lo siguiente:
“Enemigo poderoso es un rey cuando se enoja con algún inferior”. A los dominantes, o los pertenecientes a la escala
social superior, Homero los denomina “los reyes del linaje de Zeus”. Todos tienen una genealogía, que en la mayoría
de los casos se remonta a un dios, directamente a Zeus. Los reyes, tanto Agamenón como Ulises, poseen un arma
simbólica, el cetro. También este tiene una genealogía. Semejante transmisión del símbolo de poder, que incluye
tanto a quien fabrico el objeto como a aquellos, dioses u hombres, que reinaron con el, es evidentemente
excepcional.

El sociólogo francés, Marcel Mauss, escribió un ensayo sobre “el obsequio, forma primitiva de trueque”. Los poemas
de Homero contienen abundantes ejemplos de intercambio de obsequios. Los poetas trágicos darán un giro siniestro
a este trueque. Estos trueques se realizaban dentro de la categoría de aristoi. En La Ilíada, existía el comercio, mas
específicamente en la Isla de Lemnos, lugar en donde se exportaban vinos para consumo de los guerreros aqueos y
lugar de compra y venta de esclavos. En la Odisea, aparecen especialistas en comercio, los fenicios y también los
“tafios”. El problema radica en que en los poemas de Homero, no se honran a los comerciantes, tratándolos incluso
con palabras obscenas. Así como el comercio, en los poemas de Homero, la piratería eran igual de habitual, aunque
la moneda no existía.

En otro aspecto, la propiedad terrateniente era la base de la riqueza en la época en que Homero recitaba sus
poemas. Y allí, el conflicto entre ganaderos y agricultores es una de las características dominante en la economía
mediterránea. El mismo Agamenón, mas que un propietario de tierras, era un “pastor de hombres”; los troyanos
son “domadores de caballos”. En todo el poema, Homero evoca muchas veces el mundo campestre. En la Ilíada, la
presencia del hombre es notoria, cuando se cita “la tierra proveedora de trigo” , y en la Odisea, la situación en un
poco mas distinta cuando Telémaco, hijo de Ulises, compara la riqueza agraria de Esparta con la pobreza de Ítaca.

En la Atenas del siglo VI A.C, el que “labraba la tierra al servicio de un pobre”, pertenecía a la clase de lo thetes, la
mas baja de los ciudadanos. Según Eurimaco, para un hombre del pueblo es mejor trabajar que mendigar. Por otra
parte es importante recalcar que Ulises conoce los dos extremos de la escala social novelesca, es rey y mendigo.

Falta mencionar la escala social cuya situación es ambigua: los artesanos. Se ah dicho que son los héroes secretos de
la cultura griega, pero héroes secretos, y por ende, no se les honra como tales. Se admira la obra no al autor. El
único artesano verdadero de la Ilíada, es el dios cojo Hefesto, quien forja el escudo de Aquiles. En la Odisea, el
artesano también es un héroe en secreto.

VIII- POESIA

-El mundo Homérico es un mundo poético. Desde la antigüedad los geógrafos han intentando en vano cartografiar
los viajes de Ulises. Por consiguiente volveremos a la poesía propiamente tal. El gran poeta francés René Char afirmo
lo siguiente: “Homero, dios plural, laboró sin enmiendas ni raspaduras para mostrarnos, rio arriba y rio abajo,
íntegramente el país de los hombres y los dioses”.

Dios plural, por que no hay un Homero singular, y que el poeta de La Ilíada no es el de La Odisea.

Sin enmiendas ni raspaduras, significa una forma irónica de criticar a quien analistas que cortas y separan los
poemas de Homero en versos.

Para Vidal-Naquet el mejor verso del poema, es el XXII, donde se relata el último combate y la muerte de Héctor. El
Héroe troyano huye, circunda tres veces las murallas de Troya. Antes de huir habla consigo mismo (monologo
interior), se pregunta si en lugar de enfrentar a Aquiles no seria mas conveniente permanecer dentro de las
murallas. Luego se le ocurre otra solución, deponer las armas, aguardar a Aquiles y proponerle la entrega de Helena
y sus tesoros. Esta disputa interior es el equivalente de un debate, como los que se realizaban en las asambleas de
las ciudades.
¡Ay de mi!, si en las puertas y en los muros
Entrara y, de todo el primero.
Polidamante en injuriosas voces
Me insultaría cual varón prudente,
Que a la ciudad las tropas reitérese
Me aconsejo en la noche malhadada
Que el valeroso Aquiles en la liza
Se presento de nuevo.
Yo no quise
Su consejo seguir; y mas valiera,
Ahora ya tantos campeones
Por la funesta pertinacia mía
Han perecido; a los troyanos temo
Y a las troyanas, y que algún cobarde
Diga hablando de mí. Perdí la hueste
Héctor.
Pero ¿Cómo el alma
con vanas ilusiones se deslumbra?
Iría yo e inexorable Aquiles
No de mi suerte compasión tendría,
Y menos respetara mi persona;
Que si una vez las armas yo dejase,
Viéndome el desarmado, sin defensa
Como a débil mujer me mataría.
No es tiempo ya de entretener a Aquiles
Con antigua consejas, como sueles
Solazarse doncellas y mancebos.

Asombrosa asociación de imágenes. Héctor resuelve combatir pero, antes de enfrentar el peligro real que se
presenta bajo la forma de Aquiles, huye perseguido por el hijo de Peleo. El poeta aprovecha la ocasión para evocar
brevemente los paisajes. Únicamente Héctor estaba vencido de antemano. Zeus es el árbitro del certamen, frente al
consejo de los dioses. Un celebre pre historiador afirma que “Homero manifestaba así un profundo conocimiento de
la prehistoria”. Esta extraña asociación de imágenes, hacen de Homero un poeta casi singular.

Atenea toma la forma de Deifobo, hermano de Héctor, entonces aquí aparece el “fantasma”. Esta le propone a
Héctor, combatir junto a el contra Aquiles. Como los dioses intervienen en el destino de los humanos, cuando
Héctor necesite la ayude de Deifobo, este no estará, y el destino fatal del troyano se cumplirá.

Para James Redfield, La Ilíada se podría llamar “la tragedia de Héctor”. Esquilo, Sófocles y Eurípides, se nutres de
Homero, particularmente de La Ilíada. La tragedia pone en escenas a los héroes de La Ilíada para destruirlos. Sin
Embargo, en las tragedias que se han conservado, Héctor no aparece como un héroe trágico, sino como un
“bárbaro”.

Los que adoran La Ilíada suelen ser indiferentes a La Odisea y viceversa. Para Simone Weil, La Ilíada era “la única
epopeya verdadera que posee occidente”. La Odisea parece ser una muy buena imitación. La Ilíada, obra prefería
por Vidal-Naquet, es una reflexión sobre la condición humana frente al mundo divino.

Si la liada es el libro de los principios, La Odisea es el debut de la literatura misma, con todo lo que ella supone de
imitación, mimesis en griego. Cuando Aquiles explica a Ulises que “desearía mas labrar la tierra al servicio de un
pobre, que reinar en un imperio de los muertos”, pone en tela de juicio el ideal de la muerte heroica propio de La
Ilíada. El valor ejemplar en esta es la bella muerte. La Odisea es una magnifica lección del arte de la supervivencia. La
Ilíada dentro de La Odisea se ah vuelto poesía, es cantada por las Sirenas, por un aedo en el país de los feacios y en
Ítaca. La gran singularidad en La Odisea es la integración del tiempo en el interior del relato. Ciertos personajes no
cambian en La Odisea; Néstor sigue siendo anciano, Helena siempre bella, etc. Sin Embargo, dos personajes
encarnan el transcurso del tiempo. Telémaco y Argos, el perro de Ulises. Vidal-Naquet afirma que en La Odisea esta
el origen de la comedia o el drama satírico, como también del género novelesco y los relatos de aventuras. El
único drama satírico que ha llegado integro hasta nuestros días es El ciclope de Eurípides, que desde luego deriva de
La Odisea.

IX-LOS PROBLEMAS HOMERICOS

-Para el poeta latino Horacio, Homero “quandoque bonus dormitat Homerus”, “Homero se echaba un sueño”. Dicho
de otra manera, a veces Homero es inferior a si mismo. En el siglo XX se descubrió una clave para el estudio de los
poemas homéricos, como poesías orales. El poeta no se limita a nombrar a los personajes, sino que se limita a
acompañarlos de epítetos. Lo mismo sucede con los dioses. A veces se repiten versos y hasta grupos de versos. El
descubridor del secreto fue un estudioso norteamericano, que escribía en francés, su nombre era Milman Parry.
Epítetos y formulas tienen una función precisa: Dar un descanso al aedo durante el recitado, que adquiere así un
carácter automático y les reserva una serie de “pausas” que le permiten extender o abreviar el poema a voluntad.
Milman Parry junto a su amigo Albert Lord, verificaron experimentalmente en los Balcanes la hipótesis que había
formulado a partir del texto de Homero.

Kosovo es una llanura habitaba principalmente por albaneses, pero que cumple un papel importante en el
imaginario del pueblo serbio, como se puedo verificar en la primavera de 1999. Alli un ejercito de cristianos serbios y
albaneses se enfrentaron en 1389 contra un ejercito de turcos turco otomano, en el llamado “Campo de los Mirlos”.
Los turcos resultaron vencedores, y el resultado de esta batalla dio lugar a una tradición épica. En los cafés de la
región, bardos serbios recitaban millares de versos y conocían de memoria monumentales epopeyas sobre las
batallas, en particular la del “Campo de los Mirlos”. Albert Lord registro las epopeyas serbias y verifico que, pasado
algunos meses y años, las modificaciones introducidas por los aedos no eran importantes. Las similitudes con los
poemas de Homero son decisivas. Antes de la consolidación por escrito de las dos epopeyas atribuidas a Homero,
uno o probablemente dos poetas geniales dotaron a La Ilíada y La Odisea de una estructura monumental. Aquiles
usaba un lenguaje propio y es este el que se formula la pregunta decisiva, la única sin respuesta. ¿Por qué los
Argivos (provenientes de Grecia) deben hacer la guerra a los troyanos? Esta pregunta tiñe todo el poema de una
melancolía esencial. Probablemente existieron poetas épicos anteriores a Homero, pero lamentablemente no
tenemos los medios suficientes para conocerlos. Contemporáneamente a Homero, también podemos asegurar que
existieron autores, los que conocemos de las seis epopeyas. La más importante es conocida bajo el titulo de
Cantares Chipriotas, que relata la guerra de Troya desde los orígenes. Desgraciadamente no queda casi nada de
esos Cantares Chipriotas. La verdadera y autentica “continuación de Homero” se encuentra en millares de vasijas
corintias, áticas o del sur de Italia que representan escenas de los poemas.

También podría gustarte