Universidad Privada del Norte

Periodismo Narrativo

CRÓNICA Y
PERFIL
Cierre de ciclo

Presentado por:
Luciana Delgadillo Pérez

Julio 2023
 Presentación
Para este trabajo tuve que contactar al comando y a
mi amiga, y pedirles me otorguen un tiempo para
entrevistarlos. Ambos tenían una ocupada agenda.

Para el primer caso, mi fuente fue mi madre, pues

me pasó el contacto del comando (su ex-jefe),
mientras que para el segundo fui yo, al ser mi
compañera de colegio. El trabajo de reportería
realizado en ambos proyectos es Expositivo.

Por último, el fin de estas crónicas es dar a conocer

el detrás de "cámaras" del famoso rescate en la
Embajada de Japón agregando datos de la propia
boca de un comando que participó en el Operativo,
tanto como dar a conocer el proceso por el que ha
pasado una estudiante para conseguir sus metas.
 Crónica

La historia detrás del rescate

que nadie dio por hecho
Luciana Delgadillo Pérez
Lima – 04 JULIO 2023

Hace 26 años se produjo el mejor rescate de todos los tiempos, después de que el 17 de diciembre de 1996, 14 terroristas
(12 hombres, 2 mujeres) irrumpieran en la residencia del embajador japonés Morihisa Aoki, cuando se celebraba el
natalicio del emperador japonés Akihito. Al evento asistieron 500 invitados entre japoneses, peruanos, políticos,
militares, etc, de los cuales 72 fueron retenidos por 4 meses, hasta que el 22 de abril fueron rescatados por el Comando
Chavín de Huántar. ¿Cuál fue el crimen que cometieron estas personas para ser secuestradas?

Se conoce que se tenía planeado que Néstor Cerpa y Miguel Rincón
tomaran por asalto la Embajada. Sin embargo, la captura de Rincón
detuvo los planes por un tiempo. Es así que la toma se retrasó hasta el
17 de diciembre.
El día del asalto a las 8:20pm los 14 terroristas ingresaron por la
propiedad colindante, que en ese momento se encontraba vacío,
volaron la pared limítrofe con dinamita y avanzaron hasta la
residencia.
Mientras se buscaba llegar a un acuerdo con los terroristas, por otro
lado, el presidente Alberto Fujimori había autorizado el uso de la
fuerza si no se llegaba a un consenso. Es así que paralela a las
conversaciones, se fue entrenando al Comando Chavín de Huántar, un
equipo élite de operaciones especiales conformado por militares,
marinos de guerra, etc, para llevar a cabo el rescate de los rehenes en
caso fuera necesario.

Al tener la residencia bajo su control, los terroristas empezaron a

liberar a ciertos rehenes que consideraban que no tenían “peso
político” como madres, ancianos, empleados del evento, todos a
pedido del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR). Sin embargo,
liberaron a Javier Diez Canseco, Alejandro Toledo y a la madre del
entonces presidente Alberto Fujimori, pero mantuvieron secuestrado a
Francisco Sagasti. Tanto Toledo (2001 – 2006) como Sagasti
(2020 – 2021) fueron futuros presidentes del Perú.

Cabe resaltar que durante los 4 meses que duró el secuestro, el Perú
se posicionó en el ojo de la tormenta, logrando traer a reporteros de
todo el mundo que acampaban afuera de la residencia para captar lo
que ocurriera sobre el suceso.
Después de la toma de la Embajada de Japón, el gobierno mantenía
contacto con el líder del grupo terrorista a cargo del secuestro, Néstor
Cerpa Cartolini, para establecer un punto de negociación en que los
rehenes salieran ilesos. En ese momento los designados para negociar
eran el entonces ministro de Educación, Domingo Palermo (Ministro
de Educación), quién asistía a visitar a los rehenes buscando negociar
con su líder, Juan Luis Cipriani (Arzobispo de Ayacucho) y el
presidente Alberto Fujimori.
Carlos Vásquez, es un comando que ronda los 60 años que participó
en el rescate a la Embajada de Japón. No lleva tatuajes y su piel no ha
sido marcada por el roce de una bala o la hoja de un machete. Tanto él
como su estudio se muestran impecables ese día. Lleva camisa
celeste, jean azul oscuro y zapatos marrones tan bien lustrados que
casi se puede ver su reflejo. A pesar de los ladridos de sus perros que
abundan en la habitación, no se puede desviar la vista de su estudio,
el cual lleva un pilar de libros acomodados perfectamente, uno al lado
del otro, en un librero; y los diplomas y reconocimientos no pasan
desapercibidos en sus cuadros dorados, cual color del sol.
Carlos cuenta que al ser designado como parte del Comando Chavín de
Huántar cada día el Comando entrenaba en una réplica de la Embajada
construida, especialmente para el entrenamiento, en las instalaciones
de la Escuela Militar de Chorrillos. “Practicábamos de día y de noche,
incluso en la madrugada. Porque no teníamos conocimiento de cuando
se realizaría el rescate, así que debíamos estar preparados con
cualquier luz”, comenta el comando Carlos Vásquez en la comodidad
de su estudio, recordando esa época.
A pesar de que la operación es considerada una de las más exitosas del
mundo, se perdió la vida de un rehén y dos comandos. El magistrado
Carlos Giusti fue herido en una pierna, lo que le provocó una
hemorragia que le causó la muerte. Asimismo, los dos comandos
caídos, fallecieron protegiendo a otros rehenes. “Después del día del
rescate, asistí a terapia por la pérdida de mis 2 compañeros. Era difícil
lidiar con sus muertes en ese tiempo. Al día de hoy, ya no duele tanto,
pero aún se les extraña”, se sincera Carlos.

Después del suceso tanto Carlos Vásquez como el resto de comandos

fueron ascendidos por su hazaña. “Normalmente te ascienden según
tus méritos. Sin embargo, a tan solo 1 año de haber entrado ya había
sido seleccionado para la Operación. Y por como resultó la operación
nos ascendieron a teniente”, señala el comando.

Carlos comenta que el ascenso no fue correcto. “Yo creo que el

ascenso no fue lo adecuado. O sea, nos seleccionaron para cumplir un
deber, no era como que necesitáramos una recompensa. Teníamos que
ganarnos ese ascenso por el trabajo del día a día, no por un rescate al
que nos enviaron”, indica Vásquez.

Incluso el gobierno contrató mineros para que construyeran túneles

Sin embargo, aun así, su trabajo fue reconocido en años posteriores
subterráneos por los cuales se estimaba se iba a ingresar a la
siendo homenajeados en una ceremonia llevada a cabo en la
residencia real. Los túneles tenían similitud con la cultura preinca
Universidad San Ignacio de Loyola, en el 2016. Y además, fueron
Chavín de Huántar, es por eso que la operación fue bautizada con ese
declarados como héroes de la democracia, por parte del Congreso de la
nombre.
República, en el 2017.

Aparte de comentarnos sobre el entrenamiento que tenían

Desde ese entonces son invitados cada año a desfilar en el desfile
constantemente para llevar a cabo la misión con éxito, Carlos también
cívico militar por Fiestas Patrias que se realiza cada 28 de julio a lo
hablo sobre el equipo que llevaban. “Nosotros llevábamos 2 chalecos,
largo de la Av. Brasil.
uno antibalas y uno de armamento, en el de armamento llevábamos
revólver, radio, navajas, máscara antigás, fusil de asalto, municiones,
etc”. Asimismo, el día del operativo llevaban un casco militar y el
rostro pintado de negro y verde, al igual que un uniforme de militar
para camuflarse.

El día del rescate a las 3:23pm, un fuerte estallido dio inicio a la

operación. En el momento de la explosión, todos los terroristas
ubicados en el primer piso que jugaban futsal, automáticamente
subieron a vigilar a los rehenes.

“El objetivo del rescate no era matar a los terroristas, sino salvar a los
rehenes. Si en el camino alguno ponía en peligro la vida de algún
rehén, entonces debía ser abatido”, cuenta Carlos Vásquez. Sin
embargo, cuando ingresaron a la residencia entraron disparando sus
ametralladoras.
 Luciana Delgadillo Pérez
Mafer Castro Lima – 04 JULIO 2023

Perfil Entre golpes y pacientes

Tras una infancia entre series de peleas y una vida en el hospital, la futura enfermera
fusiona su vida con su deporte favorito, que implica repartir patadas y golpes.
¿Qué hay detrás de este contraste entre su carrera y su hobbie?

Es peruana, se llama María Fernanda como la ex
senadora de Colombia, pero prefiere que la
llamen “Mafer”, practica taekwondo como
deporte y se prepara para convertirse en una
futura enfermera de la Universidad Nacional
Mayor de San Marcos. Por las venas de Mafer
Castro Quispe recorren las energías de 2 países,
Japón y Perú, aunque esa singularidad no sea
entendida por muchos que la conocen.
Desde un tercer piso en una vecindad muy
confusa con paredes coral casi despintadas y
ladridos de fondo, en el distrito de Breña, en el
centro de Lima, Mafer habla sobre su elección
tanto con su hobbie como con su profesión de
una veterana de 20 años. Creció viendo el anime
‘Dragon Ball Z’ y al ver las peleas y los
movimientos que hacían los personajes se
interesó por las artes marciales. “Yo en realidad
no tenía en mente específicamente el taekwondo.
Con que fuera un arte marcial, ya sea karate,
taekwondo, boxeo, o cualquiera que exista, por mí
estaba bien”, cuenta Mafer.
Sin embargo, a pesar de tener el interés desde
pequeña, en ese tiempo no podía acceder a una
academia por causa de situación económica.
“Cuando pasé a segundo año me cambiaron de
colegio, y ahí conocí a una amiga que me dijo que
ella estudiaba taekwondo en una academia y
tenían una clase gratis para probar”.
Mi mamá y yo conversamos sobre lo que me dijo
mi amiga, y llegamos a la conclusión de que
asistiría a la clase solo para ver cómo era. Asistí a
la clase y me gustó. “Mi madre me dijo: “Si te
gusta, te voy a apoyar en lo que haga falta hija.
Desde entonces siempre asisto a mis clases de
taekwondo, salvo cuando llegó la pandemia”,
recuerda Mafer.
Así como la apoyo en su hobbie, la apoyo en su
carrera elegida. La madre de Mafer, siempre vela
por el bienestar de su hija, y trata de apoyarla
tanto económicamente como emocionalmente en
sus decisiones. Y vaya que en su elección de
carrera hubo muchos cambios.
Cuenta que desde pequeña tenía la ilusión de
estudiar Veterinaria, pues tenía ese pensamiento
infantil del gusto por los animales, como
cualquier otro niño cuando empieza. Pero pronto
entendió que no todo es color de rosa. Es así que,
tras años de tener esta carrera en mente, recién
en quinto de secundaria empezó a averiguar un
poco más sobre la medicina, porque ya sabía que
su rumbo iba por ahí. Entonces, fue por Medicina
Forense.
“Como en ese entonces mi mamá trabajaba en el
hospital como enfermera me llevó a la morgue
para experimentar que se siente estar ahí”,
recuerda Mafer. “Al ver que podía soportar estar
ahí, mi mamá asumió que si podía con la carrera.
Pero claro, para eso debía estudiar Medicina y
luego derivarme”, comenta Mafer.
“Un día, como mi mamá tiene sus trajes de
enfermera, me vistió como enfermera y la
acompañe para ayudar a las personas. Y como
estaba en el sector de Cardiología, me enseñó a
usar el electrocardiograma y me pidió sacarles el
pulso a las personas. Realmente me gustó lo
fascinante de esa área”, recuerda con anhelo.
“Otro día me llevó a piso para hacer uso del
electrocardiograma en los bebés. Y la verdad es
que nadie se dio cuenta que estaba camuflada. Las
demás enfermeras creyeron que era interna de
Enfermería. Y cuando la amiga de mi mamá me
dijo que me veía como enfermera, fue que entendí
que mi lugar era Enfermería”, comenta Mafer.
“Tiempo después, hace un par de años le pedí a mi
novio que me acompañara a la Universidad
Nacional Mayor de San Marcos al recorrido que
iban a ser por la carrera de Enfermería. En el tour
había una guía que explico cómo funcionaba la
carrera y todo lo que conllevaba”, revive Mafer.
“Cuando la vi me dije a mi misma: De grande
quiero ser como ella. Y cuando le pregunté me di
con la sorpresa de que es profesora de la carrera
en la universidad”, explica la estudiante. “Le dije
cuando ingrese la buscaré, pero justo el examen
que estaba cerca terminó anulándose”.
Después de todo este tiempo de aprendizaje,
tanto del deporte como de la carrera “Tanto el
taekwondo como la enfermería me han enseñado
a no rendirme. Algo que me recordó mi profesor de
taekwondo el día que me daba mi cambio de
cinturón”, recuerda Mafer. “Ese día me dijo “Mafer
no te rindas. Tú eres una luchadora y no debes
dejar de pelear por lo que quieres. Así como peleas
en clase, pelea en la vida”, rememora. “Ahí entendí
lo importa que es luchar. Un campeonato no
ganado o un examen desaprobado, no es el fin,
porque sabes que la has luchado”.
“El taekwondo me ha brindado disciplina, porque
a pesar de no ser totalmente disciplinada, soy
consciente que soy más disciplinada que antes.
Asimismo, me ha aportado la perseverancia,
porque recuerdo que siempre ganaba los
campeonatos, pero hubo uno que no gané y me
sentí mal por eso. Desde el inicio pensaba que
pasaría si no ganaba, y justo no gané. Y no fue
porque no sabía, sino porque ya tenía ese
pensamiento derrotista”, recuerda con añoranza.
"La otra chica era más alta y robusta. Tenía todo
para ganarle, pudiendo haber usado su peso en su
contra, pero como entré con el pensamiento
derrotista no supe aprovechar la oportunidad". Sin
embargo, mi entrenador me repetía “Sigue para
adelante, no te dejes vencer”, rememora con
anhelo. “Claro, después de haberme gritado como
nunca en la vida. De hecho, jamás lo había visto
tan molesto”.
“De igual manera, la enfermería me enseñó a
perseverar por los sueños, viendo a las personas
que han logrado ingresar. Y día a día lucho por
ese sueño de ver al lado de mi nombre en la lista
“Logró alcanzar vacante”. Cuando eso pasé voy a
llorar”.
“Ahora que veo en retrospectiva a la Mafer de hace
3 años, veo todo lo que he aprendido y caigo en la
cuenta de que todo lo sacrificado ha valido la
pena y no ha sido en vano”.
Este lugar, donde una gata blanca se está
echando una siesta, se ha convertido en el fuerte
de Mafer en el que día a día, 24/7 se quema las
pestañas para poder dar el 100% de sí y aprobar
un examen que definirá su futuro. Hace casi tres
años, Mafer lucha contra el complicado proceso
de dar el examen de admisión de la UNMSM.
Cada día Mafer recibe mensajes de apoyo de su
familia y amigos. “Varios amigos que ya
ingresaron me dicen que no me rinda. Me tienen
mucha fe. Debe ser porque saben cómo soy”,
comenta Mafer.
“La verdad siento que esta próxima vez, sí voy a
alcanzar vacante. Porque en realidad no estoy tan
lejos del puntaje que solicitan. Solo me falta un
último esfuerzo y podré decir con mucho orgullo y
lágrimas en los ojos “INGRESÉ”.
Este trabajo periodístico se realizó con éxito y
no hubo inconvenientes en las investigaciones
hechas.

Han sido útiles los relatos y experiencias de los

involucrados para obtener información "fresca"
y verídica de ellos mismos y sus vivencias.

El Periodismo Narrativo es muy valioso en la

actualidad porque ayuda a que las personas se
interesen por una lectura sana e informativa,
que busca enganchar al lector con su buena
redacción.
 LUCIANA DELGADILLO PÉREZ
Hola, mi nombre es Luciana. Soy una alumna del
7mo ciclo de la carrera de Comunicación y
Periodismo. Me gusta leer libros clásicos, escuchar
música, tomar fotografías y ver series y películas.
Soy una persona que sabe trabajar en equipo y sabe
congeniar con el resto para que el trabajo fluya de la
mejor manera. Aparte puedo trabajar bien bajo
presión y cumplo con todas las metas que me
propongo.
COMENTARIO
DEL DOCENTE

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