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PRIMERAS PREGUNTAS
¿Puede considerarse que el psiquismo está predestinado por el
funcionamiento biológico del organismo? ¿Qué consecuencias tiene una
respuesta afirmativa a esta cuestión?
¿El pensamiento, la conducta o los procesos psíquicos pueden ser
explicados maquínicamente?
OBJETIVOS
Reconocer el interjuego de fuerzas que condicionan el desarrollo del
psiquismo humano.
Considerar diferentes posiciones en Psicología respecto de la idea de
desarrollo.
Abordar el problema de la reducción de los procesos psíquicos a
sustratos biológicos, o a funcionamientos mecánicos o cibernéticos.
CONTENIDOS
* Atomismo / Determinismo / Mecanicismo / Organicismo.
* La reducción de los procesos psíquicos a lo biológico: el pensamiento, la
memoria y las emociones como funciones del sistema nervioso central.
* Las tendencias mecanicistas en Psicología: Conductismo y Psicología
Cognitiva con base en procesamiento de información.
* Cercanías y divergencias entre Neurociencias, Conductismos y
Psicología Cognitiva con base en procesamiento de la información
(PCBPI).
* Crecimiento, maduración y desarrollo. Diferentes perspectivas sobre la
noción de desarrollo.
* Las Psicologías del Desarrollo y sus contextos de producción.
PALABRAS CLAVES
crecimiento / maduración / patrones de funcionamiento biológico
reduccionismo biologicista / mecanicismo en psicología / organicismo
desarrollo / contingencia / relación con el otro
Neurociencias
Conductismo / conducta–comportamiento / hábito / estímulo
Psicologías Cognitivas con base en Procesamiento de la información
Psicologías del Desarrollo
BIBLIOGRAFÍA:
BIBLIOGRAFÍA COMPLEMENTARIA:
- LEDOUX, Joseph; “El cerebro emocional”. Ariel Planeta, Buenos Aires, 1999.
- POZO, Juan Ignacio; “Teorías cognitivas del aprendizaje”. Ed. Morata, Madrid,
1993. (Cap.II)
Uno de los dos problemas que se introducen en esta Unidad –problema que
alcanza el interior de las Psicologías y toca a disciplinas cercanas a ella
(Neurología, Psiquiatría, etc)- consiste en la tendencia a suponer que pueden
construirse simplificaciones que expliquen los procesos psíquicos, a partir de
apreciaciones que privilegien el funcionamiento biológico del organismo o de
sus estratos físico-químicos-eléctricos. En pocas palabras, pretendemos
desconocer y reducirla en
problematizar la razón que desconoce la “realidad psíquica” en beneficio de una
“realidad material-orgánica” o reduce aquella a esta. También, poner en cuestión
a aquellas disciplinas que asintiendo o contrariando las dualidades mente
(conciencia)-cerebro, se inclinan por sugerir que explicando el funcionamiento
cerebral se resuelven los enigmas de lo mental. El origen de esta tendencia
sostenida desde la aparición de la Psicología como ciencia hasta nuestros
tiempos, merece una atención especial. Por ello en el texto ¿La realidad
psíquica ha escapado del organismo? hemos propuesto la idea de una “metáfora
localicista”: que ha atravesado la historia buscando ubicar en el cuerpo, en el
cuerpo en tanto orgánico-biológico, la disposición de la psiquis –o antes, del
“alma”- y precisar sus fundamentos biológicos. Se pretende “localizar” el
psiquismo, ubicarlo en relación a cierta materia orgánica y a un cierto
funcionamiento biológico. El término “mente” es tal vez el que mejor cabe a los
partidarios de estas perspectivas y siguiendo estos planteos nos introduciremos
en los reduccionismos biologicistas en psicología. El texto de nuestra
bibliografía comienza rastreando al respecto, la ligazón inicial entre
concepciones filosóficas y psicológicas; continúa mostrando tendencias de de
fusión entre ciertas corrientes en Psicología y las Ciencias Biológicas -o la
Física- y, la posterior vinculación de la primera a las prácticas clínicas en
neurología, medicina o psiquiatría, en tanto éstas dispondrían de principios
explicativos y modos de operar sobre el psiquismo ligados similares a los
aplicados al cuerpo biológico. Principios y modos de operación que son
alentados por los avances científicos y tecnológicos generados en nuestros
tiempos.
Hay que prestar especial atención en el texto citado a las conclusiones a las que
arriba. En ellas se recorren nueve puntos que corresponden a los modos de
construir conocimiento y de operar propios de las Neurociencias o de las
Psicologías de orientación biológica (Psicobiología). Particularmente bajo el
nombre de “Neurociencias” vamos a agrupar a un conjunto de disciplinas que de
una u otra manera responden a estos nueve puntos, encontrando en ellos razones
para sostener la metáfora localicista y la idea que el conocimiento del sustrato
orgánico del psiquismo humano, tanto como una modalidad mecanicista de
análisis, bastan para explicar los distintos niveles de conducta del hombre.
1 CHANGEUX, Jean-Pierre (1986); “El hombre neuronal”, Espasa Calpe, Madrid, p. 152.
El tema de las representaciones -sobre él cuál hemos trabajado con Usted en la
Unidad 1- es vinculado por el autor directamente a las imágenes mentales. El
interés por la existencia de imágenes mentales se encuentra ya desde los
pensamientos de Epicuro y Aristóteles hasta los de Locke, Hume y Condillac.
Pero la novedad respecto a ello reside, como lo asegura Changueux en que:
“Actualmente ya no se duda de la existencia de las imágenes mentales porque se
las puede medir”. ¿Cómo se hace para medir imágenes mentales? Existen
“tests”, que se encargan de evaluar el tiempo que tarda el cerebro en construir
una “representación” a partir de la presentación de estímulos gráficos, por
ejemplo, un conjunto de cubos que están en rotación; lo que se mide es el tiempo
que el sujeto tarda en descubrir que se trata siempre de la misma figura vista
desde distintos ángulos. Para resolver este problema el individuo,
supuestamente, debe hacer girar mentalmente una representación del objeto, una
imagen mental que se comporta como si tuviera rigidez física e incluso una
velocidad de rotación medible. Changueux acepta que éste, al igual que otros
experimentos, hacen que intervenga, desde luego, la introspección (especie de
mirada hacia el interior) del individuo, pero lo importante es que estos
experimentos conducen a unas medidas y éstas pueden reproducirse de un sujeto
a otro. Es así, como llega a admitir que la materialidad de las imágenes mentales
no se puede poner en duda. Las tecnologías actuales (resonancias funcionales,
magneto encefalogramas, etc) y la presencia de instrumentales para medición
resultan un recurso que da mayor consistencia a esa materialidad. Encontramos
aquí una fuerte tendencia a poder construir explicaciones “universales” sobre los
procesos psíquicos apelando a la medición o a la constatación de su
materialidad.
2 Op.Cit. p.160
busca la verdad, sino los derechos sobre patentes, las ganancias por prescripción
de determinadas sustancias para regular el stress, la ansiedad, el comportamiento
o la memoria, o la justificación de beneficios que en definitiva redundan para
mantienen
mantener ciertos consumos. En fin, las neurociencias se vuelven reduccionistas en
tanto
todo caso, no por el enfoque que caracteriza a los conocimientos que construyen
cómo por querer
sino cuando a dicho enfoque lo intentan ubicar en el centro de las cosas
la
alimentando una ideología de la intervención biológica sobre lo que no se
resuelve ni es conveniente resolver en ese plano.
Bibliografía:
- MALACHEVSKY, Jorge; “¿La realidad psíquica ha escapado del organismo?
Apunte de Cátedra, Santa Fe, 2002.
Bibliografía Complementaria:
- CHANGEUX, Jean-Pierre; “El hombre neuronal”, Espasa Calpe, Madrid, 1986
- GOLOMBEK, Diego; “Cavernas y palacios. En busca de la conciencia en el
cerebro”. Siglo XXI Editores, Buenos Aires, 2008.
- LEDOUX, Joseph.; “El cerebro emocional”. Ariel Planeta, Buenos Aires, 1999.
El texto principal que hemos seguido para tratar los fundamentos del Conductismo aquí
desarrollados, ha sido “Teorías Cognitivas del aprendizaje” de J.I.Pozo (Cap. II).
4 El método introspectivo es uno de los primeros métodos empleados en el estudio del psiquismo.
Consiste en un procedimiento mediante el cual un sujeto centra su atención en los propios
contenidos y procesos mentales. Dicho de de otra manera, el sujeto analiza qué pasa por su mente
sin que interfiera en ello estimulación alguna. Esta introspección es a continuación expresada
verbalmente, de manera que es el propio sujeto el que va reflejando y exteriorizando el
pensamiento intentando para ello ser lo más objetivo posible. A través de este método se pretende
hallar la estructura y características de los diferentes estratos de la mente.
puede experimentar. De allí que en tanto la conciencia no es observable, no tiene
cabida como categoría de estudio.
se
Para el conductismo el bebe nace como una especie de tabula rasa, o mejor
dicho, sólo portando un conjunto de conductas innatas (reflejos). El trabajo
experimental de esta corriente acerca de las respuestas emocionales de los niños
recién nacidos la lleva a concluir que el tipo y variedad de esas conductas
congénitas que constituirían “el equipo innato del ser humano joven” incluye
descripciones objetivas de un conjunto limitado de comportamientos. Un niño
podría ejecutar así movimientos utilizando diversos tejidos y órganos corporales
como la secreción glandular y la contracción muscular. Sin embargo este
limitado grupo de conductas innatas apenas es el origen de lo que será un
conjunto más importante de conductas que manejará el organismo
posteriormente.
El argumento sobre el rol fundamental del ambiente, resulta más evidente junto
a otro de los supuestos conductistas: el carácter pasivo del organismo, que se
limita a responder a las contingencias ambientales. Esto es, el sujeto del
Conductismo es pasivo; el aprendizaje no es una cualidad intrínseca al
organismo, sino que necesita ser impulsado siempre desde el ambiente. Esta
manera de ver las cosas subrayando la pasividad del organismo, convertirá al
Conductismo en una teoría que aportará su impronta a las concepciones de
educación y manipulación de masas que más insisten en que para instruir o
conducir la conducta de los hombres basta sólo con buenos programas de
estimulaciones y condicionamientos.
B.F. Skinner otro de los representantes del Conductismo sostiene que éste no es
sólo una disciplina que estudia científicamente la conducta, sino que lo eleva a
una Filosofía de la Ciencia dedicada al objeto y a los métodos de la Psicología.
Skinner también considera que hablar de estructuras mentales es innecesario y
perturbador, ya que se derivan de las del mundo por lo tanto igualan su origen.
Con ello quiere significar que la estructura de la conducta para él, sería una
copia isomórfica de las contingencias o covariaciones ambientales. El
antimentalismo -negación de la existencia de la mente- de autores como Watson
y Skinner, se diferencia del de otros conductistas más actuales que someten su
estudio a métodos objetivos conductuales: no niegan su existencia, pero recurren
a rigurosos métodos probatorios. Es una idea conductista que cualquier variable
mediacional o interviniente que se defina, ha de ser isomorfa con las variables
observables. La mente, de existir, es para el Conductismo copia,
correspondencia con la realidad. Skinner ha dicho: el aparato mental es el
sustituto interno de las contingencias, su estudio no aporta nada nuevo al estudio
de las contingencias. Entendamos aquí que se habla de “contingencias” pues se
supone que el sujeto se representa el mundo mediante la detección de
contingencias. Basta entonces con estudiar las contingencias en el mundo real, lo
observable y no apelar a la hipótesis abstracta de una “realidad psíquica”. Esta
corriente ha rechazado así, la estimación cognoscitiva de juicios de valor o
enunciados normativos por no ser esto más que un resabio de la psicología
basada en la abstracción. Respecto a esto entonces en la historia del
Conductismo pueden hallarse algunas variaciones: para los conductistas
radicales, sólo valía la pena el estudio del comportamiento en si (llegando a
aceptar la conciencia aunque nunca en términos de algo que implicara por parte
de una persona la posibilidad de realizar una inferencia). Los conductistas
metodológicos por su parte, podían llegar a aceptar que había algunos estados
internos inferibles, más o menos independientes de la conducta.
5 Sugerimos a Usted que luego de estudiar la Unidad 4 donde presentaremos la Psicología Genética de Jean Piaget y su comprensión del sujeto
como activo, esto es partícipe de sus aprendizajes pueda establecer un contraste respecto de este punto, con la consideración del organismo pasivo
que provee el Conductismo.
como veníamos viendo, al procesamiento humano de información y a veces, a
las Teorías sobre Inteligencia Artificial. La otra, es más bien una línea “social”
de la Psicología Cognitiva entre cuyos exponentes Usted trabajo en la Unidad 1
con S. Moscovici y podrá apreciar que los intereses de esa teoría apuntan en una
dirección distinta: el conocimiento a partir de las representaciones sociales.
Finalmente autores como los que veremos en la Unidad 4 -J. Piaget (Psicología
Genética) y L. Vygotsky (Psicología Sociohistórica)- también son llamados
“conitivos”, aunque estudian la cognición - la conciencia o la inteligencia -
como constructoras de conocimiento. Sin embargo como comprobará en el texto
de Pozo, estos “otros cognitivos” - Piaget y Vigotsky- si bien se evalúan como
autores que influyeron en la formación de los fundamentos de la Psicología
Cognitiva ligada al procesamiento de información, se considera que constituyen
planteos divergentes a ella. Desde nuestro punto de vista, “lo cognitivo” que los
cuatro planteos poseen como denominador común se debe a que las cuatro
teorías coinciden con que la acción del sujeto estaría determinada por sus
“representaciones”, aunque para Piaget ellas serían “esquemas mentales”, para
Vygotsky se trate de “signos mentales” que el sujeto construye activamente, para
los Psicólogos sociales cono Moscovici sean concebidas como “representaciones
colectivas” y para los PC “con base en el procesamiento de la información”,
sean representaciones constituidas por algún tipo de “cómputo” (operaciones
mentales simbólicas básicas propias del procesamiento de información).
Hay una razón que nos ha llevado al tratamiento de la Psicología Cognitiva con
base en procesamiento de la información en la Unidad 3 –y dejar a Piaget,
Vygotsky y Moscovici en otras unidades del Programa. Esta razón ha sido que
ella puede vincularse con las Neurociencias y el Conductismo en cuanto a que
las tres perspectivas afianzan paradigmas de la subjetividad humana que se
vinculan entre sí: sujeto biológico y sujeto maquínico. Las tres responden
afirmativamente a la pregunta propuesta como título de la Unidad: “¿Puede
descifrase el psiquismo a partir de modelos biológicos o mecánicos?”. Más aún
podemos decir que hoy se encuentran a veces aliadas o contribuyen a afirmar un
marco general de apreciación de lo subjetivo. Para caracterizar este marco
podríamos aceptar la ayuda de D. Golombek 6: Démosle el estatuto de “sistema”
a la correlación entre las tres perspectivas. Se trata de un sistema básico en
contacto con el mundo. Aunque aclaremos, no cualquier idea de “mundo” se
correlaciona con la de sistema que se ha de proponer. Se trata de “.... una
definición orgánica del mundo…(como)… conjunto de estímulos que están (o
uno cree que están) afuera, siendo el afuera todo lo que existe fuera de los
límites del cuerpo. Frente a ese mundo…El sistema nervioso tiene como función
interpretar qué son esos estímulos y actuar en consecuencia…”. Este sistema
básico entonces contaría con tres componentes: un gran misterio central que
6
- GOLOMBEK, Diego; “Cavernas y palacios. En busca de la conciencia en elcerebro”.
Siglo XXI Editores, Buenos Aires, 2008, pag.65.
representaría al componente del sistema nervioso (objeto de investigación del
neurocientífico) y dentro del cual ocurriría el procesamiento de información
(razón de estudio de la PCBPI). Luego, una señal de entrada al sistema o imput
(componente de la percepción) y una de salida u output (componente
comportamental) (estas últimas descriptas por el modelo estímulo-respuesta del
Conductismo), que serían los que conectan al sistema con eso que no es el
sistema, o sea el mundo. Finalmente el sistema es un correlato neurofisiológico
del mundo. Asimismo, cuando ese sistema disfunciona las terapias cognitivas-
comportamentales (TCC) y los recursos neuroquímicos listos están para
acomodarlo. Las Neurociencias, la PCBPI y el Conductismo confluyen cada cual
a su manera y en suma, a la configuración de un paradigma de la subjetividad
que podríamos mencionar con un oxímoron: el sujeto biológico/mecánico. Y
decimos un oxímoron pues sería razonable hablar de un organismo biológico
que funciona mecánicamente, pero se llega a una paradoja si se califica de
biológico-mecánico a aquello –la subjetividad humana- que precisamente es lo
que es, porque escapa a ser reducido a esas calificaciones: organismo vivo o
máquina.
Bibliografía:
- POZO, Juan Ignacio; “Teorías cognitivas del aprendizaje”. Ed. Morata,
Madrid, 1993. (Cap.III)
Bibliografía Complementaria:
- GOLOMBEK, Diego; “Cavernas y palacios. En busca de la conciencia en el
cerebro”. Siglo XXI Editores, Buenos Aires, 2008.
- POZO, Juan Ignacio; “Teorías cognitivas del aprendizaje”. Ed. Morata,
Madrid, 1993. (Cap.II)
desarrollo
maduración
crecimiento
Usemos el esquema anterior para responder al interrogante: ¿Cada vez que hay
maduración se produce desarrollo? La respuesta es afirmativa. Pero si tratáramos
de contestar ahora, si cada vez que hay desarrollo se produce maduración, la
respuesta sería: “A veces si, a veces no”. Nos interesa la respuesta negativa –que
correspondería en el esquema al área de desarrollo que abarca cualquier punto de
la lúnula que no intercepta al “conjunto maduración”. Esto es, el esquema trata e
mostrar que si estudiáramos en esa área el desarrollo, el mismo puede estar
afectado allí por factores vinculares, sociales, libidinales y no sólo por cambios
biológicos (de crecimiento o maduración).
8 PIAGET, Jean, APOSTEL, J.B., y otros (1963); “La filiation des structures. Etudes d
´Epistémologie Génetique XV”, P.U.F., París, p.22.
3.4. Unas palabras sobre el desarrollo, hacen al desarrollo.
Con esto se quiere decir que, una teoría del desarrollo humano, por la misma
naturaleza de nuestra especie, debe cuidarse en llegar a ser exclusivamente una
teoría sobre la naturaleza. La plasticidad del genoma humano es tal, que no
existe una forma única en la que el hombre se desarrolle y que este desarrollo
sea independiente de las oportunidades de realización proporcionadas por la
cultura en la que nace y crece. Se sabe por los trabajos realizados en
primatología y antropología desde hace dos décadas, que el punto crítico en la
evolución del primate que produjo la especie Homo tuvo lugar en el momento en
que la cultura adquirió un papel fundamental en la transmisión de instrucciones
sobre la adaptación. Esto es, el punto crítico en la evolución de primate a homo,
Las ideas de Freud, Piaget y Vygotsky (estos dos últimos autores a tratar en la
Unidad siguiente) son tan bastas y complejas que no podrán ser desplegadas
ampliamente en nuestro Programa. Haremos si en él, escala en algunos de sus
conceptos que son introductorios y pilares del Psicoanálisis o la Psicología:
conciencia, inconsciente, inteligencia, desarrollo, lenguaje. Nos dedicaremos sin
embargo ahora a la temática del desarrollo humano- que nos permitirá leer a
estos autores comparativamente, ya que sus teorías encierran explicaciones al
respecto. Son elegidas estas tres teorías, para ser contrastadas con las corrientes
analizadas en esta Unidad (Neurociencias, Conductismos y PCBPI) que
responden afirmativamente a la pregunta por si la subjetividad podría descifrase
y ser intervenida exclusivamente desde modelos biológicos y/o mecánicos.´
Un buen comienzo podría ser remarcar los contextos de producción de cada
teoría y señalar las influencias que pudieron sufrir de los pensamientos en boga
en sus tiempos, o tomar en cuenta la disciplina de la cual partieron en sus
búsquedas de respuestas. Algo de esto propusimos con Foucault al plantear una
Arqueología del saber: averiguar cuáles fueron las condiciones sociales que
posibilitaron la enunciación de ciertas teorías. También, podríamos destacar las
actitudes de cada autor hacia el conocimiento. Sigmund Freud, vive la mayor
parte de su vida en Austria, es médico, se especializa en Neurología, ejerce
como Psiquiatra. Su legado es el Psicoanálisis. Su principal momento
productivo transcurre a principios del siglo XX hasta la segunda guerra mundial
durante la cual muere. Jean Piaget, biólogo suizo, interesado por la Filosofía, la
Sociología y la Psicología, realiza sus primordiales desarrollos teóricos como
epistemólogo una vez terminada la segunda guerra y trabaja hasta sus últimos
días en la década del ´80. La obra de Piaget es conocida más que como una
Psicología, como una Episteniología Genética. Lev Vygotsky, ruso, su campo
de estudio es la Semiótica, muere muy joven antes de que su legado alcance un
reconocimiento mundial. Vive durante la revolución rusa y hereda de allí sus
ideas. Algunos autores sostienen que Vygotsky se inscribe en una Psicología
Sociohistórica. Algo llamativo, es que todos ellos hicieron grandes
contribuciones a la Psicología, sin ser estudiosos directos de esta disciplina; en
todos los casos aportaron concepciones innovadoras para su época, que fueron
resistidas en un primer momento y que sometieron a un viraje a ciertas nociones
que hasta entonces eran fuertes dentro del campo de la Psicología entre otros
saberes. Jerome Bruner, reconocido autor de la psicología contemporánea que se
nutre de los aportes de las tres figuras presentadas, dice que el impacto que
produjeron se debe a la incorporación de sus ideas a la cultura como
posibilidades. Las novedades que proporcionaron fueron de tal envergadura, que
el campo de conocimiento al que afectaron cambió de forma crítica. Por
ejemplo, si como sostiene Piaget, es posible que el hombre pueda aprender de la
experiencia, entonces las actividades escolares deberán estar organizadas de tal
manera que sea necesario el aprendizaje desde las experiencias.
Dentro de cada teoría podemos destacar algunas ideas. Tanto Piaget como
Vygotsky son referencias importantes a la hora de describir lo que nosotros
definimos como el sujeto epistémico o sujeto de conocimiento. Esto es, una
apreciación de la subjetividad humana que hace su recorte o hincapié
priorizando la construcción de conocimiento y las entidades mentales sobre las
que ésta se sostiene. El sujeto epistémico es un modelo, un modelo del
psiquismo que pondera la cognición y estudia cómo la subjetividad arma
estructuras para conocer el mundo. Vamos a tratarlo en profundidad en la
Unidad 4. Ambos autores, fueron también constructivistas en su concepción de
la inteligencia: plantearon que la inteligencia (Piaget) -o la conciencia
(Vygotsky)- es una construcción, fruto del encuentro dialéctico entre el hombre -
en la figura de sujeto epistémico o de conocimiento, y su entorno -tomado como
objeto de conocimiento. El hombre en el ejercicio de sus estructuras cognitivas,
al ponerlas en juego introduciéndose en la aventura del saber, sufre
transformaciones al igual que transforma su realidad. El conocimiento no es algo
dado de antemano de una vez y para siempre, sino que deviene de un proceso
donde el sujeto, desde sus experiencias, es protagonista, es constructor.
Vygotsky partiendo de una teoría marxista del hombre, pensaba que se utilizan
los instrumentos de la cultura para crear el presente y el futuro –siendo uno de
esos instrumentos la conciencia. Para él la conciencia es esencialmente social: la
mente humana ni crece naturalmente, ni se encuentra libre de las trabas de las
limitaciones históricas. Dirá: “Ni la mano ni la mente, por sí mismas, pueden
lograr mucho sin la ayuda de instrumentos que las perfeccionan y estos
provienen de la cultura. En este sentido el crecimiento es de afuera hacia
adentro. La cultura es creada por la historia y transmitida por los demás. La
inteligencia consiste en la capacidad para comprender y utilizar los dispositivos
intelectuales y lingüísticos, culturalmente transmitidos como prótesis de la
mente. El lenguaje tiene el doble papel de representar al mundo y de
comunicárselo a los demás...”.
10 Como vimos en esta unidad, el conductismo o behabiorismo es una escuela psicológica que se
centra en el estudio de la conducta humana reducida al análisis de los fenómenos objetivamente
observables, prescindiendo de nociones como conciencia o inteligencia (es decir, de la mente). De
clara impronta positivista, el Conductismo nace en los primeros años del siglo XX a partir de las
influencias de las Teorías del reflejo condicionado de I. Pavlov y de la Escuela Reflexológica de
V.M.Bechtérev.
que desencadena una tendencia clínica a llevar al sujeto a un estado genital –que
sería la fase final y “normal” a la que debería tender el psiquismo- y a considerar
que se ha enfermado por quedarse “fijado” a estadios pre-genitales
subrayo en verde
porque no reconozco la
relación con el tema Ya hemos visto en la Unidad 2 cómo es que estos efectos se van sucediendo: se
pero sí su importancia
juegan en los distintos momentos en los que el sujeto –aún antes de serlo- se
encuentra con el Otro. El resultado de esos encuentros es una cierta disposición
pulsional. Esto es, el conjunto de las pulsiones parciales (ligadas a la oralidad, al
campo de la mirada, a la pulsión invocante, etc) van a disponerse en el sujeto a
partir de los sucesivos encuentros con el Otro. Allí fundamentalmente se dan
alienaciones y separaciones, produciendo marcas singulares en el sujeto que lo
ligan a ciertas modalidades de goce. La resultante subjetiva de esa historia del
deseo hecha de vaivenes, es la disposición en el sujeto de una cierta
configuración de su sexualidad. Entiéndase que para el psicoanálisis “lo sexual”
remite a los modos de satisfacción o insatisfacción que quedan inscriptos como
huellas inconscientes, y el inconsciente así entendido, es el lugar de las marcas
que refieren a la sexualidad. Más que una teoría del desarrollo sexual al estilo
Karl Abraham, el psicoanálisis freudiano se pregunta por los meandros de la
causalidad psíquica, por los laberintos que llevan al deseo.
11 LACAN, J. (1976); “Escritos 1’, Siglo XXI, México, 3ra. Ed., pag.77.
neuromotríz. Para el Psicoanálisis, cuando el Otro alimenta, sea el Otro materno
o sea quien fuere, brinde alimento, sabiduría o alimente el odio, sea que alimente
con su pecho, la cuchara o la televisión… cuando el Otro alimenta, además de
alimentar transmite algo de su deseo o de su angustia, de su miedo o su alegría.
Ese ámbito ligado a la oralidad en donde el proto-sujeto se encuentra con el
deseo del Otro, es desde donde se organiza como sujeto, dispone sus pulsiones:
encuentra objetos para la pulsión -objetos contingentes, delimita cuáles van a ser
sus propias necesidades, qué tipo de satisfacciones ha de procurase, a qué
excesos o medidas ha de responder. Se delimita allí en él, qué grado de
moderación tendrá o qué tan mortífera será su búsqueda, tanto como detrás de
qué insatisfacción estará satisfecho. La oralidad, la analidad, la genitalidad
aparecen entonces como campos parcializados que se van organizando a medida
que el sujeto va construyendo su sexualidad, sus modos de satisfacción-
insatisfacción. Campos que si es que persiguen inconscientemente un propósito
es el de hacerse un deseo a partir de alienarse en primer lugar en el deseo del
Otro, para luego separarse de él. ¿Qué desea el Otro? ¿Qué desea el Otro de mí?
Preguntas sobre las que se buscan respuestas sin saber que se está en búsqueda,
preguntas sobre las que se tiene respuestas sin saber que se cuenta con ellas.
Preguntas que nacen en ese encuentro. Preguntas no generalizables, difíciles de
ser formuladas, pero que de hecho gobiernan una fantasmática. Los avatares del
deseo12 –en este caso ejemplificado vinculándolo al campo de la oralidad, pero
extendiéndolo a cualquier otro campo, por su singularidad, no pueden ser
asimilados entonces a un proceso de maduración ni de desarrollo, no responden
necesariamente a objetivaciones, ni pueden ser reducidos a conductas
observables.
Estos tres énfasis clásicos: liberación del pasado, procesamiento del presente y
aspiración al futuro se reencuentran en debates tradicionales para la Psicología
como los son: el debate sobre los supuestos efectos irreversibles de la
experiencia temprana, el debate sobre el equilibrio entre los factores cognitivos y
afectivos en el desarrollo, y el debate sobre la importancia de modelos eficaces
en grupos minoritarios como activadores de logro. Si bien existe la tendencia
conciliadora de suponer que una teoría para ser considerada “íntegra” debe
contemplar y complementar estos tres diferentes términos, cabe aquí alertar
sobre algo: las teorías se conectan rápidamente con las políticas que apoyan o no
algunos aspectos del desarrollo, y esto último es más acertado a la hora de
describir lo que realmente sucede en la práctica. O sea, las teorías sobre el
desarrollo no escapan a los momentos y las condiciones de desarrollo de las
teorías. Finalmente, coincidimos con Bruner en aseverar, que señalar las
diferencias entre una teoría y otra puede no asegurar un consenso, pero
garantizará una reflexión. ¿Qué más podemos pedir?
Actividad 3.1
1- Responda:
- ¿Puede considerarse que el psiquismo está predestinado por el funcionamiento
biológico del organismo? Explique su respuesta.
- ¿Qué ejemplos se desarrollaron para caracterizar una respuesta afirmativa?
- ¿Puede aportar Usted algún ejemplo adicional que coincida con la respuesta
reduccionista?
- ¿Cuáles fueron o son algunas de las consecuencias o efectos en el ámbito de las
prácticas sociales, que podrían atribuírsele al reduccionismo biologicista?
2- Comente qué ideas previas tendría Usted acerca del tema presentado en los
puntos 3.3 y 3.4 sobre las confusiones que muchas veces suscita hablar de
crecimiento, maduración o desarrollo. Luego de las lecturas de los puntos
indicados y del texto de Coriat y Jerusalinsky, ¿Agregó o modificó en algo sus
ideas previas al respecto?
Concepción de psiquismo:
Noción de desarrollo:
Categorías principales
ligadas al desarrollo:
Principales influencias
recibidas:
Actividad 3.2
a-Identifique en el texto“¿La realidad psíquica ha escapado del organismo?”
de J. Malachevsky las características centrales que identifican a las
neurociencias.
b- Consultando diccionarios de Ciencias Humanas o Sociales –Filosofía,
Psicología, Sociología- realice un glosario con los términos que se destacan en
el texto anterior: metafísica, materialismo, innatismo, cognitivismo, dualismo,
localicismo, psicoterapia, psiquis, introspección y otros en los que Usted dude de
su significado.