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estaba, en la penumbra, la silueta enclenque y en la mano izquierda apenas podía sostener la

pluma que sangraba tinta, a la luz de una única vela. Desparramados por la mesa, por los suelos;
por las paredes y el techo miles de hojas, empapadas de sangre. Describiendo con signos en
demasiados lenguajes e idiomas distintos; imitaciones del vaivén de la llama, de la tinta, del
recuerdo que asedia la cabeza y lo otro que no es ni ha sido.
La pluma se escurre finalmente por los dedos, en seco grito se ahoga en el firme y calla, con la
mano derecha apacigua -al menos intenta- del remolino que se forma de cabello, la causa de su
cansancio.
Se alarga la mano hacia el mueble abriendo sus secretos, dentro más páginas todas con una
misma idea, de diversos puntos de vista y lenguajes. La mano toma las que puede y las acerca al
fuego para que se consumán, dos o tres páginas quizás... en el resplandor vivido se vislumbra
sobre la madera un escrito en particular cuyas primeras letras describen: "El instante T...", la
atención perdida se centra en la negra tinta, que no significa nada, pues no pasan allí los días,
solo la noche eterna y el iluminar de una incandescencia infinita.
Las palabras sin sentido hacen eco en lo más Allí profundo de la memoria, se desbalanza sobre la
hoja, hambriento de sus ideas, lee...
Dice justo lo que debe decir, cada palabra una tras otra, en ese orden, le convence la razón, el
mundo se tambalea y parece girar en sentido opuesto el mundo, los ojos callan a la respiración
hasta que la lectura llega a la última letra...
Las hojas se quiebran entre los dedos, bruscamente se parten las frases, se queja el papel en
vano, hasta que las palabras dejan de ser palabras y solo son signos sin sentido... Ahora en la
penumbra solo hay pedazos, salvo por el cajón de secretos y la que describe: "El instante T..."
como principio.
La mano cansada levanta la pluma, se acerca a la mesa y comienza a escribir, bajo la existencia
plena de la mirada atenta, la memoria que no recuerda más que detalles, y la razón que no se
sabe existente.

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