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La Neurosis y su Relación con el Edipo y el Nombre del Padre

Pablo Buitrón

Escuela de Psicología, PUCE – Sede Ambato

Psicopatología Dinámica

M. Sc. Víctor Cuadrado

16 de abril de 2023
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La Neurosis y su Relación con el Edipo y el Nombre del Padre

Una vez que se entra al campo del psicoanálisis se puede explorar rincones

interesantes que contienen grandiosos postulados acerca del sujeto. Entre los aportes más

destacados de Sigmund Freud (padre del psicoanálisis) está el llamado Complejo de Edipo,

un tema controversial y a la vez poco estudiado, pues si bien es cierto que este tema lo

conocen alrededor del mundo, en nuestro país por diferentes temas y una destreza cultural

psíquica baja no es así; por ello el presente ensayo tratará de dar una cosmovisión relajada, y

a la vez un poco amplia sobre este tema del cual todos deberían estar enterados.

Para hablara de Neurosis en primera instancia debemos llegar al conocimiento sobre

el Complejo de Edipo. En psicoanálisis podemos encontrar en una primera instancia que este

se rodea mucho bajo la esfera del mito “Edipo Rey” de Sófocles, una historia que en breve

resumen relata que Edipo fue abandonado por sus padres cuando era niño porque querían

escapar del cumplimiento de un mal oráculo. Sin saber sus orígenes, el niño sobrevive y crece

como heredero de la familia real vecina y pronto recibe la misma profecía. En su fallido

escape desesperado de la maldición Edipo se convierte en el asesino de su padre y esposo su

madre. De esta forma se desata la teoría planteada por Freud en 1899 adentrado en su libro

Interpretación de los Sueños.

El Complejo de Edipo como tal lo plantea Freud para la descripción de un sentimiento

de deseo que genera el niño hacia su madre y el odio hacia su padre, el cual se genera por una

especie de “lucha de poderes”, entre padre e hijo por conseguir el cariño de la madre, sin

embargo, el niño sabe que su padre ganará el duelo, y este es el momento en donde se realiza

la “castración”, dando así final a este conflicto edípico. Intrínseco a esta lucha aparecerá el

nombre del padre, puesto que, el nombre del padre se instaura por primera vez al nombrar al

niño y su acción al instaurar la ley dentro del corte edípico.

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En un inicio Freud postula su Teoría Psicosexual, derivada de que en la época en que

vivió Freud, el deseo sexual estaba fuertemente reprimido, este se dio cuenta de que existe

una conexión entre las neurosis y la represión sexual, planteando así que a través de la

historia sexual del paciente se podía conocer la raíz del “síntoma”. Tomando en cuenta esto,

Freud comienza a hablar de que los niños tienen deseos sexuales innatos que necesitan

satisfacer mediante diferentes objetos y precisamente el Edipo entra en la Etapa Fálica, la

cual se caracteriza por ser prioritaria para el desarrollo de una identidad sexual en el sujeto.

Como antes se expuso, a pesar de que en un inicio los niños experimentan deseos

sexuales frente a sus madres, sin embargo, por miedo a la castración estos se ven eludidos

cuando sus padres imponen la ley en contra del incesto, lo cual también desata la

identificación con sus padres y la maduración de la identidad sexual.

No obstante, este tema no ha sido abordado solo por Freud, pues su cosmovisión ha

sido ampliada por autores como Anna Freud, Klein, Erikson, Winnicott y Lacan, lo cual

generó aportes, nuevos descubrimientos, extensiones y avances en la clínica psicoanalítica,

pues el tema se ha visto envuelto de muchas más ligazones a las primeras experiencias del

niño.

Klein amplió el concepto de Freud para incluir el miedo del niño a que el padre

suprima el deseo de amor, así como la ansiedad de estar separado de él, lo cual produce en el

niño sentimientos duales de amor y odio, frente a sus cuidadores. Winnicott, por otro lado,

habla del papel que juega la madre en este completo, puesto que cree que los niños

comienzan a amar a su padre a través del apoyo y sentimientos dados por la madre. Erikson

por su parte plateó que el Edipo manifiesta una lucha del niño por tener una identidad propia.

Con estos antecedentes, Lacan identifica al Complejo de Edipo concordando con lo

propuesto por Freud en cuanto a la identificación sexual nacida por la castración de esta

complejidad, no obstante, asegura que el desarrollo de la personalidad también está ligado al

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Edipo y por ello es esencial en la vida del sujeto, ya que, por otro lado, este genera que el

niño se introduzca a la cultura como tal.

Bajo el concepto de que el niño necesita obligatoriamente del cuidado de alguien más,

en este caso de sus cuidadores primarios o padres para su prevalencia lleva a Lacan a sostener

que el Edipo no depende de edad del niño, pues es algo innato. A partir de esto sugiere que

no se da como una lucha por el amor de la madre, si no como una expresión inconsciente por

ser independiente.

Algo que se puede ver en los aportes los diferentes autores es la suma expresión de la

rivalidad entre padre e hijo, pero hay algo más?. Por ejemplo, según Vega (s.f),

Lacan deja de lado el Edipo como mito y pasa a ocuparse del mismo en otro nivel, el

estructural. Se trata de una estructura en tanto es una organización con funciones y

donde cada personaje se define en relación al otro y al lugar que ocupa. El Edipo es

entonces entendido como estructura y el falo es el significante que articula y circula.

Este falo que circula como falta en la estructura es el falo simbólico; mientras que

aquel que atiende a la subjetividad del niño del primer tiempo del Edipo (ya veremos)

es el falo imaginario. Por ello, cabe recordar que un elemento no es imaginario o

simbólico en sí mismo sino en relación a su articulación con otros elementos. (p. 4)

Como podemos ver el otro y el falo son los conceptos que se suman a la acepción del

complejo de Edipo, esto desde la perspectiva del psicoanálisis lacaniano.

En el seminario 5 Lacan asegura que el Edipo es la entrada del significante al cuerpo y

además menciona que este complejo no está dentro del campo de lo real, pues ha pasado a ser

parte de lo simbólico por medio del lenguaje. Según Vega (s.f),

Lacan, se pregunta de qué se trata el Edipo? Y se responde: “Del deseo de la madre,

esto es capital, así como la metáfora paterna” (Lacan, 1969). El deseo de la madrees el

falo. Este falo se puede entender de dos formas: 1) es la referencia al deseo de la

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madre derivada de ausencia de pene y, 2) es aquello que simboliza el sinsentido del

deseo. El niño se identifica con lo que le falta a la madre (el falo) y por eso, es el

objeto de deseo del Otro. Sin embargo, esa complementariedad es imaginaria e

ilusoria ya que el deseo por definición no puede ser totalmente satisfecho. (p. 5)

Bajo esta complementariedad Lacan presenta al complejo de Edipo en tres tiempos, en donde

se explica de una formal total al deseo del otro a partir de la completud de la madre con el

falo.

Los tres tiempos son descritos por Vega (s.f) de la siguiente manera:

Primer Tiempo:

En este tiempo el niño se construye a través del estadio del espejo, y al estar en

una relación intensa con su madre, se identifica con el objeto de deseo de ella, el cual

es el falo, de esta manera queda alienado al deseo del gran Otro.

Segundo Tiempo:

Mediante la castración simbólica del Edipo por parte del padre se pierde en su

totalidad la identificación imaginaria del niño con el falo y la ilusión de completud por

parte de la madre.

Tercer Tiempo

El padre se posiciona por completo como una figura de la ley y portador del

falo, esto si la castración del Edipo su exitosa y produjo que el niño se identifique con

él para así pasar a formar su yo ideal.

Una vez entendido esto, podemos pasar a hablar sobre la Neurosis, en donde encontramos dos

principales conceptos, el primero dado por Freud; el cual define a la neurosis como un

trastorno psíquico, en donde el sujeto está afectado por sus pensamientos, los cuales son
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totalmente irracionales, sin embargo, terminan en la generación de comportamientos

indeseados. Por otro lado, Lacan en 1958 postula que la Neurosis proviene de la relación con

el Otro, pues el deseo es el deseo del otro, con el conocimiento previo de que su deseo es

evanescente. No obstante, en este caso, la razón se busca en una dificultad con la relación del

sujeto hacia el Otro, en donde se da paso a que el significante ordene el deseo.

Para llegar a la cura de la neurosis obviamente se tratará con terapia psicoanalítica, en

donde se debe analizar el complejo psíquico inconsciente del sujeto, puesto que solo así se

podrá llegar a ver los procesos que tiene a través del lenguaje psíquico y a partir de ello dar

una interpretación, misma que llevará al sujeto a su autoconocimiento y trasformación.

Como conclusión podemos decir que el Complejo de Edipo es un concepto

desarrollado en primer lugar por Freud y avanzado por demás autores que la clínica

psicoanalítica, el mismo explica una relación triangular entre padre, madre e hijo, en donde

este último buscar la identificación por medio de un conflicto de poder por el falo, el cual se

da contra el padre, sin embargo, en determinado punto este llega a aparecer como la figura de

“el nombre del padre” con el objetivo de la castración de los deseos incestuosos del niño

hacia su madre, lo cual posiciona al padre como el portador del falo, además de generar la

creación del yo ideal al niño e insertarlo en la cultura. Al saber que la segunda tópica el

psicoanálisis se completa con la formación del SuperYo a partir del resultado de la castración

del Edipo, se puede ver claramente la relación de estos dos con la Neurosis, pues esta se

representa como el conflicto o lucha entre el Ello y el Super Yo por dominar al Yo, y pues si

este último está débil terminará en la aparición de la Neurosis, lo cual provoca duda y puede

llevar al sujeto a varias instancias de conflicto psíquico en el cual predominan los

pensamientos irracionales o indeseados.

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Referencia

Vega, V. (s.f). El Complejo de Edipo en Freud y Lacan. Recuperado de:

https://bit.ly/3WDW3Bt