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Construimos Nuestra Identidad Personal Y Social: Actividad 1
Construimos Nuestra Identidad Personal Y Social: Actividad 1
¡Buenas tardes queridos estudiantes! Les doy la bienvenida a este nuevo día de trabajo que Dios
nos ha regalado. Quiero agradecer a cada uno de ustedes que están conectados en el WhatsApp
y ser parte de esta nueva estrategia Aprendo en casa.
¡Empecemos!
PRIMERO, ¡QUE NECESITAMOS!
¿Preparado (a)?
Coco es mi mejor amigo, le gusta la misma música que a mí y resulta que su papá también vive lejos y lo ve solo una
vez al mes. ¡Él está un poco incómodo ahora último, porque no le gusta que Adán se acerque!
Él quiere pasar conmigo el rato conversando y nos contamos todo, pero viene Adán y se mete en la conversación; a mí
eso a veces me gusta, la verdad, pero a veces yo también quiero que no se meta. ¡Ni yo me entiendo!
Isabel también es mi mejor amiga. Ella quiere que conozca más a Adán, dice que tratándolo me va a gustar, que es
muy divertido. Ya hemos salido una vez y no me gustó cómo me hablaba, a veces quiere demostrar que es más grande:
solo
me habla de las muchas “flacas” que ha tenido, de lo lindas que son, no sé...
Yo veo cómo Isabel y Julián están saliendo y la pasan bien; no son enamorados, pero están saliendo y a él le gusta
mucho ir con ella de la mano. Son amigos desde niños y un día se dieron cuenta de que se gustaban, ¿se habrán
enamorado? ¿Se puede cambiar así de amigos a enamorados?
Le preguntaré a Isabel y a Coco. Sé que a él no le va a gustar, pero quiero que me diga él, que también es hombre, por
qué no me siento cómoda con Adán. No me imagino teniendo algo con él, la verdad, pero Betty está allí insistiendo. ¿Y
si pruebo?
Construimos nuestra identidad, como personas únicas y como personas sociales, a través de nuestras relaciones
interpersonales.
Tú te relacionas contigo misma/o: con tus emociones, tus intereses, tu manera de ser. Así, se va construyendo esa
identidad.
También te relacionas con las y los demás: perteneces a una familia, un grupo o más de uno, te relacionas con
muchas chicas y chicos, y tienes vínculos afectivos importantes que te hacen sentir bien y te van dando una
identidad
social. A diferencia de otro tipo de relaciones, los vínculos se distinguen en un mayor nivel de confianza y de
reciprocidad.
¿POR QUÉ SON IMPORTANTES LOS VÍNCULOS?
Llenan nuestras necesidades emocionales, sociales, físicas, intelectuales; son necesarios para nuestra identidad
personal y social.
Las relaciones y los vínculos entre las personas son de distintos tipos. Pueden tener características en común tales
como la continuidad, espontaneidad y el tipo de aporte a las personas, etc.; sin embargo, los vínculos en comparación
con las relaciones se distinguen por el progreso en la confianza y reciprocidad. A continuación, veamos cuáles son
algunas de las características de las relaciones y vínculos entre las personas:
Durante la adolescencia, aparecen nuevas formas de relacionarnos con las personas. Empezamos a identificar nuevos
“destinatarios” de nuestra atención, de nuestro gusto y de nuestra atracción. Sentimos el deseo de empezar a
relacionarnos de otra manera. Experimentamos nuevas sensaciones, comenzamos a sentir diferente por otras u otros y
tenemos una fuerte necesidad de formar un vínculo nuevo.
En la historia, a Adán le gusta Ana, pero solo eso: “le gusta”. Isabel y Julián se sienten atraídos, pero están
conociéndose todavía.
Estas relaciones pueden o no generar vínculos nuevos e intensos tales como el amor.
¡Alerta! ¡Cada cosa por su nombre!
Existen expresiones que dan cuenta de creencias o maneras de entender las relaciones de pareja. Por ejemplo:
Estas expresiones no contribuyen a entender lo que nos sucede. En a), se prioriza la impresión o atracción y una
expectativa supuestamente aceptada o valorada socialmente; y b) expresa confusión en nuestros afectos. Frente a ello,
es importante reconocer qué nos sucede afectivamente, qué es lo mejor para nosotras/os y mantenernos firmes.
Es importante identificar nuestros afectos y llamarlos por su nombre. Si sabemos qué es lo que sentimos por las y los
demás, nos expresaremos de mejor manera, nos confundiremos menos y nos sentiremos más seguros
emocionalmente.
LA ATRACCIÓN EN EVOLUCIÓN...
En todas las culturas, cuando una persona se siente atraída por otra, hay reacciones físicas. Por ejemplo, si la ve o se
le acerca, se activa la sonrisa y se despierta un sentimiento de simpatía. Si se comienza a conocer e interactuar con la
persona, entonces empieza una atracción más personal. Esto podría aumentar las reacciones físicas: aceleración del
ritmo cardiaco, subida de la sangre al rostro o aumento de la sudoración de la piel. Además, se podrían generar
reacciones
emocionales: alegría, ansiedad o turbación; también reacciones mentales: se piensa en la persona recurrentemente y
esto no nos permite concentrarnos en otra cosa.
Muchos poetas, pero también los científicos, dicen que esto sucede cuando empezamos a enamorarnos. ¿Tú lo crees?
¿AMOR ROMÁNTICO?
Es importante que sepas que las personas experimentan una búsqueda permanente de afecto y de felicidad, y esto
podría traer como consecuencia el relacionarse con “un alguien especial”. Frente a dicha posibilidad, qué importante es
educarnos para relacionarnos bien.
El enamoramiento se caracteriza por el deslumbramiento y la ausencia de crítica: todo en la otra persona nos parece
perfecto y maravilloso. En un segundo momento, aunque nos sentimos bien, también tenemos mayor lucidez y menos
ansiedad, así que empezamos a notar algunas características que no nos gustan del otro: empieza la fase del
intercambio y acuerdos. Con el tiempo y los acuerdos que no se llegan a cumplir, nos llevan a la fase de tensiones y
polarización, hasta que en un momento dado solo quedan tres opciones: recomenzar con nuevos acuerdos y
negociación, romper la relación o que una parte se someta a la otra (ya no hay acuerdos ni negociación, pero la relación
sigue).
1. Piensa en tu relación contigo misma o contigo mismo: ¿cuáles son tus intereses?, ¿qué es lo que más te gusta de ti?,
¿qué te molesta?, ¿qué te gustaría seguir conociendo sobre ti?
2. Piensa ahora en tu relación con las demás personas, tus amigas y amigos, compañeras y compañeros, familia, etc.
¿Cómo son tus vínculos con estas personas? ¿Cómo crees que contribuyen en tu formación personal?
Recuerda: siempre sé creativo (a) y organiza lo elaborado utilizando el material que tenga a
tu alcance. Asimismo, comparte lo que elabores con tu familia. ¡No te olvides de guardar tu
producción en el portafolio!