Karla Alexandra Aranda Gutiérrez

EL DINERO
Antes de que llegara el dinero a nuestra humanidad, existió el trueque, esto de daba
en tiempos muy antiguos, lo que cada familia producía era para su consumo, es
decir, era una economía de autoconsumo, cuando estás familias llenaban sus
necesidades, lo que sobraba podía ser intercambiado.
Según se sabe, el dinero nació en las tribus del Neolítico: ellos intercambiaban lo
que le sobraba y se apoderaban el patrimonio del vecino así comenzó el flujo del
dinero.
El historiador griego herodoto atribuye la invención de la moneda a los lirios en un
pueblo de Asia en el siglo VII antes de Cristo. Después de ciertas excavaciones
realizadas en el templo artemisa en Efeso revelaron que en el año 640 antes de
Cristo existían unas monedas en forma almendrada que tenía marcas de su valor y
contenido metálico.
Después en el siglo VI antes de Cristo se les añadió una figura y es así cómo se
definen las características de una moneda: metal, figura y peso.
Los doblones, onzas y maravedíes que circulaban por España comenzaron a
despertar la codicia de piratas de todo el mundo. España disponía de estos metales
gracias a las minas que tenía apoderadas en Perú y el oro que conseguían de
México.
El dólar puede ser considerado como una de las monedas más importantes del
mundo ya sea por lo menos en América, puesto que en Europa el Euro está
tomando un buen puesto sobre otras monedas como el marco alemán.
Desde la primera aparición de la moneda hasta nuestros días ha pasado mucho
tiempo ahora tenemos también dinero virtual y electrónico que podemos usar sin
siquiera tocarlo.
Hablamos entonces de una evolución que empezó con cuentas de metal siguió con
cacao y conchas y termina nuestros días sin duda ser tangible ya no es un requisito
para que el dinero tenga valor.