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EL ENEAGRAMA COMO HERRAMIENTA DE

AUTOCONOCIMIENTO

CARMEN ÁLVAREZ GARCÍA


calvar14@gmail.com

PARQUE DE TOLEDO
ABRIL 2021

1
ÍNDICE

PRESENTACIÓN.............................................................................................................................. 3
CONCLUSIONES ............................................................................................................................. 4
¿QUÉ ES EL ENEAGRAMA? ............................................................................................................ 6
¿QUÉ ES UN ENEATIPO? ................................................................................................................ 8
LAS TRÍADAS ................................................................................................................................ 10
LOS NUEVE PUNTOS .................................................................................................................... 11
IDENTIFICACIÓN DEL TIPO DE PERSONALIDAD ........................................................................... 11
EL UNO ........................................................................................................................................ 13
EL DOS ......................................................................................................................................... 15
EL TRES ........................................................................................................................................ 16
EL CUATRO .................................................................................................................................. 19
EL CINCO ...................................................................................................................................... 21
EL SEIS.......................................................................................................................................... 24
EL SIETE........................................................................................................................................ 26
EL OCHO ...................................................................................................................................... 29
EL NUEVE ..................................................................................................................................... 31
LOS SUBTIPOS.............................................................................................................................. 34
SUBTIPOS UNO ............................................................................................................................ 35
SUBTIPOS DOS ............................................................................................................................. 38
SUBTIPOS TRES ............................................................................................................................ 42
SUBTIPOS CUATRO ...................................................................................................................... 46
SUBTIPOS CINCO ......................................................................................................................... 50
SUBTIPOS SEIS ............................................................................................................................. 55
SUBTIPOS SIETE ........................................................................................................................... 58
SUBTIPOS OCHO .......................................................................................................................... 63
SUBTIPOS NUEVE ........................................................................................................................ 67
EL CAMINO DE RETORNO AL SER ................................................................................................ 71
ACTITUDES Y PUNTOS DE VISTA “SANADORES” PARA LOS DISTINTOS ENEATIPOS ................... 71
APÉNDICE I .................................................................................................................................. 73
APÉNDICE II ................................................................................................................................. 75
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS ................................................................................................... 76

2
PRESENTACIÓN

Este trabajo es una recopilación, ordenación y síntesis de los títulos que recojo
en la bibliografía. Se trata de facilitar el acercamiento a un tema, presentándolo
de una forma asequible y, a la vez, lo más completa posible. Entraría en la
categoría de “Estudios de temas particulares” u “Otras producciones”.
El punto de partida ha sido la experiencia personal que supuso un verdadero
punto de inflexión, un antes y un después de haber conocido esta nueva
herramienta de estudio y tipología de la personalidad.

OBJETO DE ESTUDIO. Después de explicar qué es un eneagrama y qué es un


eneatipo, el objeto de estudio serán los nueve puntos o eneatipos del
eneagrama: las nueve personalidades, caracteres o “máscaras” (en griego)
arquetípicas con sus tres subtipos. Esos nueve puntos se relacionan formando
tres tríadas que se fundamentan en los tres componentes básicos de la psique
humana: instinto, sentimiento y pensamiento. Cada punto se presenta con su
número, unos adjetivos y expresiones que lo definen y, lo más importante: su
pasión (“pecado capital”) y su virtud.
Como apoyo para el autodiagnóstico he incluido el Test Rápido de Identificación
en el Eneagrama (TRIE) elaborado por Riso y Hudson.
A continuación, se presentan los tres subtipos que corresponden a cada número
con una(s) palabra(s) que los sintetizan y algunas consideraciones de cómo
podría uno, a partir de ahí, ir acercándose a su esencia, a su ser.

INTERÉS. Este estudio tiene un doble interés: por un lado, facilita un proceso de
autodiagnóstico basado en una buena comprensión de la tipología. Por otro, el
interés último, tras su conocimiento, sería su trascendencia para poder
acercarnos a nuestra esencia, a nuestro “ser” real. Conocer el rasgo dominante
de nuestro eneatipo es conocer lo que, precisamente, nos impide crecer.

PUNTO DE VISTA. Naturalmente, el punto de vista para acercarse a esta


herramienta se puede llevar a cabo desde multitud de facetas y niveles de
profundidad. En este caso, en concreto, nos limitamos a enumerar y describir los
rasgos que corresponden a la región del ego en que nos desenvolvemos, a “las
sombras”. Son los aspectos más fácilmente “visibles” para nosotros.
Debido a la dificultad real de reflejar todos los rasgos de personalidad, con toda
la gama de sutiles variaciones posibles, animo a todos los interesados que
quieran profundizar en estos temas, se sirvan de la bibliografía que cito al final.
Recomiendo, especialmente, los libros monográficos, individuales, sobre cada
uno de los Eneatipos publicados recientemente en la Editorial La Llave.
Finalmente, antes del listado bibliográfico, se incluyen dos apéndices:

3
En el Apéndice I, recojo algunas referencias, en relación con este tema, que se
encuentran en el “Libro de Escuela” de Canarias, 1976.
En el Apéndice II presento la interpretación del Test Rápido de Identificación en
el Eneagrama (TRIE) elaborado por Riso y Hudson.

CONCLUSIONES

Los seres humanos tenemos una gran facilidad para pensar que las cosas y la
realidad, “deberían ser” tal y como nosotros las entendemos. Tal y como nosotros
las vemos y las sentimos.
Nos resulta muy difícil admitir que nuestra realidad es así debido al color de las
“gafas” a través de las que la miramos.
Damos por hecho que nuestras “gafas” para verla no existen. Que, en todo caso,
si alguien ve o siente las cosas de modo diferente es porque, en su caso, sí que
tiene gafas ya que tiene un punto de vista diferente al mío que,
incuestionablemente, es el verdadero.
Nuestras gafas son nuestro eneatipo, nuestro carácter o personalidad en el cual
estamos verdaderamente “enjaulados” y que nos condiciona absolutamente toda
nuestra vida: nuestras actividades, nuestras relaciones, nuestras valoraciones…
Supone un gran impacto identificarse con un carácter y comprobar el nivel de
concreción de los rasgos que se ven descritos.
En los últimos tiempos, el Eneagrama se ha puesto especialmente “de moda”.
Hoy en día, además de innumerables libros, también podemos encontrar
numerosos vídeos explicativos, cursos presenciales, cursos online…
Cuando, en 2008, Borja Vilaseca publicó su popular libro sobre el Eneagrama:
“Encantado de conocerme”, ya había en el mercado, según él mismo dice, 39
libros sobre el tema.
De cualquier forma y, en mi opinión, esta democratización y masificación del
conocimiento, no invalida su esencial verdad ni su utilidad como herramienta
para el autoconocimiento.
Me parece vital rescatar la verdadera importancia de este sistema de
autoconocimiento, independientemente de “las modas del momento” por tres
razones fundamentales:

4
Permite integrar la biografía: Cuando se mira la biografía a la luz del eneatipo
se empieza a entender todo. Todos los anhelos, los comportamientos, las
decisiones que hemos tomado…
Permite entender y aceptar a los otros: Entiendes que los demás, los otros,
sólo pueden comportarse de la forma en la que lo hacen. No hay otro modo
posible. Están “gobernados” por su eneatipo y si no responden a tus
expectativas, no es porque tengan nada personal contigo.
Permite evolucionar a partir de ahí: Una vez se es consciente del eneatipo
dominante, se tiene la posibilidad de intentar transformar aquellos aspectos que
son destructivos para uno y para los demás. En ese proceso de transformación,
uno puede ir viendo:
- ¿Qué queda atrás?
- ¿Qué va emergiendo?
- ¿Qué sirve y qué no sirve?
- ¿Qué tareas son favorables para ese proceso de transformación?
- ¿Qué se necesita comprender?

5
¿QUÉ ES EL ENEAGRAMA?

EL ENEAGRAMA

FLUJO DE LOS MOVIMIENTOS: 1-4-2-8-5-7-1 y 9-6-3-9

El eneagrama es una figura geométrica simbólica. Se trata de un triángulo


y de un exagrama incluidos ambos en un círculo. Sirve para poder estudiar la
compositiva, la relación y/o el proceso que se da entre los elementos estudiados.
En este caso, voy a centrarme sólo en la compositiva, en lo puntos,
dejando abiertas las posibilidades de estudiar relaciones y procesos para los que
deseen adentrarse con más profundidad en todas las posibilidades que ofrece.

6
Fue introducido en Occidente a principios del S.XX por G.I. Gurdjieff1
procedente, según él mismo afirma, de una comunidad mística sufí, los
Sarmounis2.
Según relata el propio Gurdjieff en Encuentros con hombres notables3:
«Es el nombre de una famosa escuela esotérica, la que, según la tradición, fue
fundada en Babilonia 2500 años antes del nacimiento de Cristo y cuyas huellas
se encuentran en Mesopotamia hacia el siglo VI o VII después de Cristo […] se
atribuía a esta escuela la posesión de un saber muy elevado, que contenía la
clave de numerosos misterios ocultos».
El eneagrama aplicado a estudiar el “ego” o “la personalidad” nos viene de Oscar
Ichazo4 quien lo presentó ante la Asociación de Psicólogos de Chile en 1969.
Oscar Ichazo lo llama “Protoanálisis”5. Se trata de un conjunto de nociones
relativas a este tema y decía que constituían una disciplina transmitida por un
“esoterismo cristiano” con el cual él había tenido contacto en Afganistán6.
Reconocía 27 caracteres: nueve caracteres principales cada uno de los cuales
presenta tres variantes: autoconservación, sexual y social.
Será Claudio Naranjo7 quien desarrolle, posteriormente, la Psicología de los
Eneatipos a partir del Protoanálisis de Oscar Ichazo.

1
G. I. Gurdjieff (Alexandropól, 14 de enero de 1866 – Neuilly-sur-Seine, 29 de octubre
de 1949) conocido como George Ivánovich Gurdjieff, fue un controvertido maestro
espiritual, místico, escritor y compositor de origen ruso, quien se autodenominaba “un
simple Maestro de Danzas”.
2
Claudio Naranjo, Ensayo sobre la psicología de los Eneatipos, págs. 17 y 18: «El nombre
significa “las Abejas”. Han sido a menudo acusados de ser cristianos disfrazados,
budistas, sectarios musulmanes, o de mantener convicciones incluso más antiguas
derivadas de Babilonia. Otros afirman que sus enseñanzas sobrevivieron al Diluvio, pero
no sabría decir a cuál».
3
G. I. Gurdjieff, Encuentros con hombres notables, 1982, págs. 104-105.
4
Oscar Ichazo, fundador del Instituto Arica para el Conocimiento. Entre los asistentes,
se encontraba John C. Lilly quien también estuvo en Chile trabajando con Oscar Ichazo.
5
O. Ichazo, Between Metaphysics and Protoanalysis: a theory for analysing the human
psyché, 1982.
6
Claudio Naranjo, 27 personajes en busca del ser. Experiencias de transformación a la
luz del eneagrama, 2019.
7
Fundó el Instituto SAT (Seekers After Truth) [Buscadores de la Verdad], una escuela
de integración psicoespiritual. Se le considera un pionero de la psicología transpersonal
y un integrador entre psicoterapia y espiritualidad.

7
En un principio, toda la transmisión de contenidos se hizo siempre de forma oral
entre los interesados en estos temas, con el acuerdo expreso de no darlos a
conocer fuera de esos grupos de estudio. Este acuerdo no fue respetado, y
pronto fueron apareciendo en Berkley y luego en un área más extensa diferentes
publicaciones más o menos rigurosas e, incluso, cursos sobre el Eneagrama
respondiendo a distintos intereses.
Ha sido recientemente (una vez cumplidos los 80 años) cuando Claudio Naranjo
se decidió a poner por escrito de forma muy sistematizada todas las
características de los diferentes tipos y subtipos.

¿QUÉ ES UN ENEATIPO?

Es un esqueleto o molde psicológico. De igual forma que todos venimos


con un esqueleto físico “de serie”, también traemos, “de serie”, un esqueleto
psicológico, una especie de molde psicológico a través del cual vemos e
interpretamos la realidad. Es el eneatipo que nos acompañará toda la vida.
Ese esqueleto o “molde” es lo que también se conoce como: “personalidad”,
“ego” o “yo”, en oposición a nuestra “verdadera esencia” o “ser”. Es nuestra
“máscara”.
Si bien es cierto que todos poseemos características de todos los eneatipos, y
que, según la etapa vital en la que nos encontremos, se manifiestan más unas
que otras, siempre hay un eneatipo que es el dominante.
Ese esqueleto nos resulta útil para manejarnos y nos capacita para dar
respuestas en un medio “hostil” en un primer momento en el que nos sentimos
desvalidos. El problema se presenta si nos identificamos con él y no podemos
trascenderlo.
En principio, vendría a ser una respuesta compensatoria para superar la herida
y la desconexión con el ser que supone el nacimiento. Esa misma herida que
todos sufrimos, cada uno empieza a experimentarla y a interpretarla desde
dentro de ese “molde” o “jaula psicológica” que condiciona nuestros
pensamientos, sentimientos y acciones en el mundo.
Esos diferentes moldes explicarían los diferentes caracteres de los diferentes
hijos, en una misma familia con similar carga genética, similar medio,
educación… Cada uno tiene su “personalidad”.

8
Hay que dejar claro que un eneatipo no dice nada acerca de la calidad humana
de una persona.
Identificarlo bien es lo que va a ayudar a mejorar y cambiar aquellos aspectos de
uno que lo bloquean, que no le dejan estar bien, que no te ayudan en las
relaciones con los demás.
El eneagrama nos lleva lejos porque comienza el trabajo a partir de donde
estamos realmente. Arroja luz, con claridad y sin juicios sobre los aspectos de
nuestra vida que están oscuros y permanecen aún sin liberar.

9
LAS TRÍADAS

Los nueve tipos no son categorías aisladas. Están relacionados de un modo cuyo
sentido trasciende los tipos psicológicos individuales.
Las tríadas son importantes para el trabajo de transformación porque especifican
dónde está nuestro principal desequilibrio representando los tres principales
grupos de problemas y defensas del ego.
Se fundamentan en los tres componentes básicos de la psique humana: instinto,
sentimiento y pensamiento. Estas tres funciones están desarrolladas con
“centros” del cuerpo humano, y la personalidad se fija principalmente en uno de
esos centros.
Paradójicamente, si el tipo de una persona está en la tríada del sentimiento, eso
no significa que tenga más sentimiento que los demás, o si está en la tríada del
pensamiento que sea más inteligente que los demás. En realidad, en cada tríada,
la función que le corresponde (instinto, sentimiento o pensamiento) es la función
que con más fuerza ha formado el ego a su alrededor y es por tanto el
componente de la psique menos capaz de funcionar libremente.
TRÍADA DEL INSTINTO: E8, E9 y E1
Tiempo mental: presente.
Su “tema”: la (falta de) paz.
Les importa: “lo que hacen”, la realidad.
Debajo de las defensas del ego tienen muchísima ira.

TRÍADA DEL SENTIMIENTO: E2, E3 y E4


Tiempo mental: pasado.
Su “tema”: la (falta de) autoestima.
Les importa: “lo que los demás piensen de ellos”, su imagen.
Debajo de las defensas del ego tienen muchísima vergüenza.

TRÍADA DEL PENSAMIENTO: E5, E6 y E7


Tiempo mental: futuro.
Su “tema”: las (falta de) referencias.
Les importa: mejorar su seguridad.
Debajo de las defensas del ego tienen muchísimo miedo.

10
LOS NUEVE PUNTOS

IDENTIFICACIÓN DEL TIPO DE PERSONALIDAD

El trabajo con el eneagrama comienza cuando uno identifica su tipo y empieza a


comprender sus características dominantes.
Si bien esa identificación es un trabajo de introspección personal, debido a la
cantidad de información inicial con la que uno se encuentra, puede ser útil
servirse de algún tipo de cuestionario que sirva para reducir las posibilidades e
ir acercándose al tipo básico.
Presento a continuación un cuestionario básico que puede servir como un primer
acercamiento (con todos los reparos que hay que tener con este tipo de útiles).
No debemos olvidar que el autodescubrimiento es un proceso que no termina
con la identificación del tipo de personalidad, esto es más bien sólo el comienzo.

TEST RÁPIDO DE IDENTIFICACIÓN EN EL ENEAGRAMA DE RISO-HUDSON


Se trata de elegir el párrafo de cada grupo que más fielmente refleje las actitudes,
los comportamientos y la “filosofía” propia. No hay que buscar una coincidencia
total, el objetivo sería identificarse con la idea, el sentimiento y el tono general
del párrafo. Es más recomendable una elección “intuitiva” que analítica.
La combinación de las dos letras elegidas (una por grupo) nos dará,
posiblemente, una aproximación a nuestro eneatipo.

11
GRUPO I
A. Tiendo a ser bastante independiente y confiado: pienso que la vida va
mejor cuando la esperas de frente. Me fijo objetivos, me comprometo y
deseo que ocurran las cosas. No me gusta quedarme sentado, prefiero
realizar algo grande y dejar mi huella. No busco necesariamente
confrontaciones, pero no me dejo llevar ni empujar tampoco. La mayor
parte del tiempo sé lo que quiero y voy a por ello. Tiendo a trabajar mucho
y a disfrutar mucho.

B. Tiendo a estar callado, y estoy acostumbrado a estar solo. Normalmente


no atraigo mucho la atención en el aspecto social, y por lo general procuro
no imponerme por la fuerza. No me siento cómodo destacando sobre los
demás ni siendo competitivo. Probablemente muchos dirían que tengo
algo de soñador, pues disfruto con mi imaginación. Puedo estar bastante
a gusto sin pensar que tengo que ser activo todo el tiempo.

C. Tiendo a ser muy responsable y entregado. Me siento fatal sino cumplo


mis compromisos o no hago lo que se espera de mí. Deseo que los demás
sepan que estoy por ellos y que haré todo lo que crea que es mejor por
ellos. Con frecuencia hago grandes sacrificios personales por el bien de
otros, lo sepan o no lo sepan. No suelo cuidar bien de mí mismo; hago el
trabajo que hay que hacer y me relajo (y hago lo que realmente deseo) si
me queda tiempo.

ELECCIÓN GRUPO I ____________

GRUPO II

X. Soy una persona que normalmente mantiene una actitud positiva y piensa
que las cosas se van a resolver para mejor. Suelo entusiasmarme por las
cosas y no me cuesta encontrar en qué ocuparme. Me gusta estar con
gente y ayudar a otros a ser felices; me agrada compartir con ellos mi
bienestar. (No siempre me siento fabulosamente bien, pero trato de que
nadie se dé cuenta). Sin embargo, mantener esa actitud positiva ha
significado a veces dejar pasar demasiado tiempo sin ocuparme de mis
problemas.

12
Y. Soy una persona que tiene fuertes sentimientos respecto a las cosas, la
mayoría de la gente lo nota cuando me siento desgraciado por algo. Sé ser
reservado con los demás, pero soy más sensible de lo que dejo ver. Deseo
saber a qué atenerme con los demás y con quiénes y con qué puedo contar;
la mayoría de las personas tienen muy claro a qué atenerse conmigo.
Cuando estoy alterado por algo deseo que los demás reaccionen y se
emocionen tanto como yo. Conozco las reglas, pero no quiero que me digan
lo que he de hacer. Quiero decidir por mí mismo.

Z. Tiendo a controlarme y a ser lógico, me desagrada hacer frente a los


sentimientos. Soy eficiente, incluso perfeccionista, y prefiero trabajar solo.
Cuando hay problemas o conflictos personales trato de no meter mis
sentimientos por el medio. Algunos dicen que soy demasiado frío y objetivo,
pero no quiero que mis reacciones emocionales me distraigan de lo que
realmente me importa. Por lo general, no muestro mis emociones cuando
otras personas “me fastidian”.

ELECCIÓN GRUPO II ____________

EL UNO

EL PERFECCIONISTA, EL REFORMADOR
IRA Y SERENIDAD
EL QUE QUIERE SER PERFECTO
Es el tipo racional, idealista, de sólidos principios, determinado, controlado y
perfeccionista.
Deseo básico: ser bueno, virtuoso, equilibrado, íntegro.
Su creencia básica es: “vales o eres bueno, si haces lo correcto”.
Su frase: “tengo una misión en la vida”.

13
En su mejor aspecto, el E1 es sabio, perceptivo, realista y noble, a la vez que
moralmente heroico.
Correcto, formal, poco espontáneo. Orientado más al deber que al placer.
Exigente y crítico consigo mismo y con los demás.
El E1 padece un durísimo y exigente juez interno.
Considera al placer como un valor negativo que interfiere en lo que “hay que
hacer”.
Su obsesión por mejorar las cosas se traduce en empeorar la propia vida y la de
los demás basándose en comparar todo suceso o experiencia con un código
preestablecido de valores, modelos, ideas, gustos, normas…
La imagen del Cruzado puede servir de paradigma. Alguien que puede matar y
destruir en virtud de la excelencia de su causa y sus nobles aspiraciones.
En las relaciones tienen una tendencia automática a imponer el propio rigor
mental y comportamental, pretendiendo de los demás el mismo perfeccionismo.
Muy exigentes consigo mismos y también con los demás. Muy críticos consigo
mismos y también con los demás. El E1 es el carácter más rígido e inflexible de
todos los del Eneagrama. Dan muchísima importancia a lo que hacen y dicen, y
se esfuerzan mucho en hacer las cosas "bien". Por esto se les llama los
perfeccionistas, por este afán y esfuerzo en procurar hacer las cosas lo mejor
posible; hacerlas "bien". Lo que apasiona a un E1 es la solución.
En definitiva, el E1 es el que siente que “tiene que empujar el río”.
IRA. Un sentimiento de injusticia ante las responsabilidades y esfuerzos que él
realiza en mayor medida que los otros.
CRÍTICA. El “yo quiero” se transforma en “tú deberías”
EXIGENCIA. Tendencia a sermonear, predicar y enseñar exigiendo un trabajo
duro y un cumplimiento excelente.
DOMINACIÓN. Asertividad solemne y segura de sí. Concepto aristocrático de
uno mismo, altivo y quizá condescendiente y protector.
PERFECCIONISMO. Más obediente a la autoridad abstracta de las normas que
a la autoridad concreta de las personas.
HIPERCONTROL. Control excesivo de la propia conducta. Desasosiego. Falta
de espontaneidad. Lógico. Metódico. Bloqueo de la expresión emocional.
AUTOCRÍTICA. Menosprecio. Incapacidad para aceptarse a sí mismo le lleva a
poner cada vez más ahínco en la búsqueda del mérito.
DISCIPLINA. La autoexigencia implica una voluntad de esforzarse a expensas
del placer lo que hace de que los unos sean especialmente trabajadores,
disciplinados y serios.

14
EL DOS

EL AYUDADOR, EL QUE DA
ORGULLO y HUMILDAD
EL QUE NECESITA AMOR
EL QUE BUSCA CONECTAR, VINCULARSE
Es el tipo afectuoso, amigable, efusivo, generoso, complaciente y posesivo.
Deseo básico: sentirse amado.
Su creencia básica es: “vales o estás bien si eres amado por los demás y eres
amigo de ellos”.
Su frase: “me interesan las personas”.
En su mejor aspecto, el E2 es generoso, altruista y siente un amor incondicional
por sí mismo y por los demás.
Son personas amables, dulces, cálidas y seductoras. De gran generosidad. En
este eneatipo es fundamental la estrategia del dar al servicio tanto de la
seducción como de la auto elevación o engrandecimiento de la propia imagen.
Todo es permisible en nombre del amor. La emoción es más importante que el
pensamiento. Una sensación de “sin mí no podrían arreglárselas”.
Los E2 tienen facilidad para percibir sus propios estados internos y los estados
internos de los demás. Esta capacidad de percepción en ellos mismos y en los
demás les permite ser muy hábiles estableciendo relaciones personales y
sociales, vinculándose emocionalmente con los demás. Pueden ser muy
empáticos.
Por otro lado, son personas que tienen una muy buena imagen de ellas mismas.
Creen que están mejor dotados que los demás; que tienen más que los demás;
que están más “llenos” que los demás…no es de extrañar que estén “orgullosos”
de ser como son.
Sienten que pueden dar mucho a los demás, sobre todo dar amor. Cuando se
habla del E2 hay que destacar el tema del amor. Para los E2 el amor es su más
alto ideal, es lo máximo. Hay una sobrevaloración de esta emoción. Para ellos el
amor todo lo puede y por amor todo vale. El amor es lo más valioso que existe.
Como luego veremos, lo que más quieren y desean los E2 es ser amados.
ORGULLO. La exaltación imaginaria de la propia valía y atractivo. La exigencia
de privilegios, la necesidad de ser el centro de atención…Su orgullo necesita que
el otro le considere indispensable e insustituible, sin tener conciencia de en qué
medida, en realidad, es él mismo quien depende del otro.
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NECESIDAD DE AMOR. Raramente se realiza en la vida sin un gran amor. Es
a través del amor de otro como satisface la necesidad de considerarse a sí
mismo como especial. La necesidad de intimidad le convierte en un tipo de
sensibilidad delicada y, más sutilmente, le conduce a una intolerancia de límites
y a la invasión del territorio del otro. Posesivo y super comprometido en las
relaciones.
Se podría definir al E2 como un “especialista del enamoramiento” situación que
hace que se sienta vivo.
SEDUCCIÓN. Vivamente interesados en ser atractivos. Los que están
necesitados de afecto por estar inseguros de él son a su vez cálidos, solícitos,
sensibles…
El apoyo ofrecido seductoramente por estos eneatipos podría llamarse apoyo
emocional o moral ofreciendo su amistad incondicional. La adulación y el
erotismo son otros medios de seducción.
No puede evitar conquistar personas y territorios y ni siquiera se pregunta si la
persona o el territorio son realmente interesantes para él.
ASERTIVIDAD. El E2 manifiesta sus deseos con asertividad, con “cara dura”.
Dentro de esta característica estaría la obstinación, el salirse con la suya, incluso
a costa de una escena emocional.
TENDENCIA A CUIDAR/ FALSA ABUNDANCIA. Se aficiona a una imagen de sí
mismo como dador, más que como receptor. Los niños reflejarían ese ideal en
el que un E2 puede volcar todo su amor, al ser pequeños seres con necesidad
de protección.
Confunde el propio placer con dar placer a otro. No tiene un contacto directo con
sus necesidades esenciales.

EL TRES

EL TRIUNFADOR, EL ESTRATEGA
VANIDAD Y AUTENTICIDAD
EL QUE NECESITA VALORACIÓN
EL QUE BUSCA DESTACAR

Es el tipo pragmático, orientado al éxito, adaptable, sobresaliente, ambicioso y


consciente de su imagen.
Deseo básico: sentirse valioso, aceptado y deseable.

16
Su creencia básica es: “vales o estás bien si tienes éxito y los demás piensan
bien de ti”.
Su frase: “si trabajo mucho, sé que seré capaz”.
En su mejor aspecto, se acepta a sí mismo, es auténtico, es todo lo que aparenta
ser: un modelo que inspira a otras personas.
Buscan el reconocimiento de los demás mediante sus logros, efectividad y dotes
sociales. El mundo es un teatro donde todos fingen y sin fingir no se puede tener
éxito. No hay lugar para la expresión de los sentimientos verdaderos. En el
mundo no habría lugar para uno si no es útil. Se sobrevalora el agradar a los
demás.
Son personas trabajadoras que se esfuerzan continuamente en alcanzar los
logros y los objetivos que ellas mismas se proponen. Les gusta ser eficaces y
eficientes en lo que hacen, y esperan ser valoradas por ello. Tienen facilidad
para adaptarse al entorno, con su gran capacidad para percibir las necesidades
de este y su habilidad para responder a estas necesidades con una actuación
que generalmente se puede calificar de “correcta” y “adecuada”.
No tienen tanta seguridad de sí mismos, ni tienen tan buena autoimagen, ni está
asentado este sentimiento narcisista que les hace creerse por encima de los
demás y que simplificándolo en una frase se podría resumir en: “yo soy fantástico
tal como soy y me valoro más que a los demás”.
No sienten que sean fantásticos por el simple hecho de existir. Sienten que
pueden llegar a serlo, pero que se lo deben ganar. Y este deseo de poder “ser”,
degenera en un deseo de poder; un deseo de querer ser reconocidos y sentirse
por encima de los demás,
Procuran encontrar este poder y esta seguridad mediante el logro de metas,
viviendo así, constantemente en la acción y en la exigencia para alcanzar estas
metas, pero sin estar nunca seguros de obtenerlo, y mucho menos de
conservarlo.
La manipulación del “sí mismo” como “producto para la venta” se manifiesta tanto
en el plano estético como en el de la eficiencia operativa. Esta estrategia implica
una desconexión de las propias emociones y necesidades.
En las relaciones, demuestran hiper adaptación y miedo al conflicto.
LA VANIDAD como forma de supervivencia psicológica. No tienen otro recurso
que el de “brillar”.
PREOCUPACIÓN POR LAS APARIENCIAS Vivir para las apariencias implica
que el foco de interés no está en la apariencia propia. Se pregunta: ¿sería yo
querido por lo que soy, si no fuera por mis logros, mi dinero, mi belleza? Le aterra

17
la posibilidad de revelarse al mundo sin una máscara y por consiguiente quedar
expuesto y ser rechazado.
ORIENTACIÓN AL LOGRO a la riqueza, al estatus social. Enfocan la vida de un
modo racional y práctico. Son rápidos, eficientes, competitivos, pragmáticos. Son
el paradigma del “triunfador”. Disponibilidad para cambiar de actitud o apariencia
según las modas. Para ellos es muy importante “quedar bien”.
HIPERACTIVAS en su búsqueda de éxito, estatus o aplauso tienen dificultades
para pararse y mirar hacia el interior. Sumergido en una agotadora actividad
pierde toda conexión con su verdad interior.
SOCIALMENTE BRILLANTES, entretenidos, entusiastas, de conversación
activa, agradables, ingeniosos. Tienen gran habilidad para la presentación: a
otros, cosas, ideas…
CULTIVO DEL ATRACTIVO SEXUAL del auto embellecimiento con el fin de
capturar la mirada del otro. No hay mujer tan dependiente de los cosméticos
como la del E3.
PRAGMATISMO Los E3 son organizados, competentes, prácticos, calculadores.
CONTROL. Hiper vigilantes, incapaces de rendirse, de autoabandonarse.
Necesitan tenerlo todo bajo control (desconfían de que las cosas puedan ir bien
si no las controlan).
SUPERFICIALIDAD. Siente que no tiene acceso a sus sentimientos profundos,
en el sentido de no saber quién es y de no conocer sus verdaderos deseos. Se
identifica con una autoimagen ideal construida como respuesta a las
expectativas de los demás.

18
EL CUATRO

EL INDIVIDUALISTA, EL ARTISTA
ENVIDIA Y ECUANIMIDAD
EL QUE NECESITA ATENCIÓN
EL QUE QUIERE SER ÚNICO

Es el tipo sensible, reservado, expresivo, dramático, ensimismado y


temperamental.
Deseo básico: descubrirse a sí mismo y su importancia; crearse una identidad a
partir de su experiencia interior.
Su creencia básica es: “vales o estás bien si eres fiel a ti mismo”.
Su frase: “nadie me comprende. Soy diferente y especial”.
En su mejor aspecto, los E4 son inspirados y muy creativos, capaces de
renovarse y transformar sus experiencias.
El deseo de tener lo que tiene el otro no es un deseo cuyo fin sea obtener
precisamente lo que el otro posee, sino más bien la única posibilidad de estar en
relación con él: “mientras sea carente, tengo la posibilidad de estar contigo y en
el mundo”.
El E4 representa una paradójica búsqueda incansable de la infelicidad.
El carácter envidioso se sustenta en la infravaloración. Para ello se fija en lo que
no funciona y en lo que falta.
Acostumbran a caracterizarse por no tener una buena imagen de ellos mismos.
Incluso aunque tengan éxito en la vida y puedan llegar a sentirse superiores a
los demás, siempre hay de fondo un cierto sentimiento inconsciente e irracional
de carencia, vergüenza y temor de ser de alguna manera defectuosos. En lo
profundo de estas personas pulsa una sensación inconsciente de carencia, a un
nivel existencial, que, en cierta medida, les hace sentir que les falta algo esencial.
Ponen en duda que sean dignos de ser queridos por los demás. Tienen una gran
capacidad de introspección, de verse a sí mismos, y como hemos dicho, de ver
su ego, su máscara, aquella parte negativa de sí mismos.
Sensibles, intensos, apasionados y románticos. Tienden a sufrir en soledad.
Albergan un sentimiento trágico de su propia vida y de la vida en general.
En la relación con los demás, se perciben inadecuados, culpables y se someten
a relaciones de abuso y prevaricación con el fin de reafirmar su posición de
víctimas.

19
Se dedican mucho a la relación y están siempre listos para sacrificarse. Tienen
una gran capacidad para empatizar con el sufrimiento ajeno.
Quieren ser únicos.
El cuerpo mismo es utilizado como un canal para llamar la atención del otro,
expresando las necesidades profundas a través del sufrimiento o las
enfermedades.
Poseídos por un profundo anhelo, dominados por la nostalgia. Melancólicos,
lánguidos y, en general, pesimistas.
Supone que a mayor necesidad (la suya), mayor derecho tiene a ser amado. Se
perciben cargadas de problemas y necesitadas de ayuda. La vida debe de
compensarle por todo lo que ha sufrido.
Tiene una extraña sensación de no ser tan bueno como los otros. Experimenta
un doloroso sentimiento de carencia y un ansia por aquello cuya falta se percibe.
La frustración es una consecuencia natural de la envidia.
Pesimistas frente a todo, incluso con respecto a sí mismos. Se alegran cuando
les sobreviene un nuevo fracaso y tampoco desean nada bueno para los demás.
ENVIDIA. La envidia es la pasión por controlar y calibrar la propia existencia
comparándola con la del otro. Puede manifestarse como una odiosa
competitividad con el privilegiado, o más sutilmente como una búsqueda
constante de lo extraordinario y lo intenso con una correspondiente insatisfacción
ante lo ordinario y lo no dramático.
AUTOIMAGEN POBRE. Surge del choque entre la percepción de una intensa
envidia y el correspondiente sentimiento de vergüenza y vileza por ser envidioso.
Sentimiento de inadecuación. Autodenigración.
CONCENTRACIÓN EN EL SUFRIMIENTO. Tiene una predisposición a sufrir
más de lo necesario. Internamente, idealiza el sufrimiento: “cuanto más sufro,
más noble soy”. Está convencido de que revisando continuamente el pasado y
lamentándose y sufriendo por él, será posible cambiarlo. La maniobra consiste
en concentrarse en el sufrimiento y expresarlo para obtener amor.
Adhesión al luto no sólo por las personas, sino también por los animales
domésticos
NECESIDAD DE CONMOVER. Exagera su posición de víctima que va de la
mano con una actitud de exigencia y reclamo. Adicto al amor se aferra a las
relaciones frustrantes. Precarias relaciones con los demás debido al alto nivel de
estrés al que los inducen.
PRODIGALIDAD. Personas atentas, comprensivas, dispuestas a pedir perdón.
Empáticos con las necesidades de los demás.

20
EMOCIONALIDAD. Sentimientos románticos. Dramatización del sufrimiento.
Sienten intensamente y lo expresan con su capacidad de interpretar papeles en
los que saben modular la expresión de los sentimientos.
ARROGANCIA. Aunque sufra de una mala autoimagen, su actitud hacia el
mundo externo es el de una “prima donna” o, al menos, la de una persona muy
especial. Cuando la demanda de ser especial se ve frustrada, saca el papel de
genio incomprendido.
REFINAMIENTO. Aversión a lo grosero. Puede describirse como estiloso,
delicado, elegante, sensible, artístico, con gusto…
INTERESES ARTÍSTICOS El arte le sirve para idealizar el dolor y transmutarlo
en un elemento de belleza.

EL CINCO

EL ERMITAÑO
EL INVESTIGADOR, EL CIENTÍFICO
AVARICIA Y DESAPEGO
EL QUE TEME EXPRESAR SUS SENTIMIENTOS
EL QUE DESEA SENTIRSE LIBRE

Es el tipo cerebral, penetrante, perceptivo, innovador, reservado y aislado.


Deseo básico: ser capaz y competente.
Su creencia básica es: “vales o estás bien si eres experto en algo”.
Su frase: ¿qué pasa realmente aquí? ¿y si lo intentáramos de otra manera?
En su mejor aspecto, es un pionero visionario, suele estar a la vanguardia y es
capaz de ver el mundo de un modo totalmente nuevo.
Personas con tendencia a ser introvertidas y tímidas. Les cuesta esfuerzo y les
causa un cierto temor enfrentarse a la vida y sobre todo a la gente. Prefieren ser
personas discretas, que pasan desapercibidas y que mantienen una cierta
privacidad en sus vidas. Les gusta ser autónomos, independientes y sienten
poca necesidad de cambiar sus creencias o su forma de hacer para adaptarse a
la mayoría.

21
Acostumbran a desarrollar un estilo de vida un poco minimalista, en el que no
exigen ni piden nada a otras personas y procuran que tampoco les exijan ni les
pidan nada a ellos.
Son personas reflexivas que se sienten cómodas y pasan mucho tiempo en su
mundo de pensamiento interno. Les gusta saber, conocer y entender cómo
funcionan las cosas y típicamente acostumbran a mostrar un mayor interés sobre
temáticas de tipo científico. Según C. Naranjo: «sustituyen la leche materna por
los libros».
En lo profundo de estas personas pulsa una sensación inconsciente de sentir la
vida y el mundo de una forma amenazante. Es una sensación que se podría
definir como un miedo al hecho de vivir o de existir en el mundo. Es algo
inconsciente y que les dificulta salir hacia el mundo; salir hacia afuera.
Tienen pocas relaciones, pero no se sienten solos. “Es mejor arreglárselas solo”
piensan. Consideran que cuantos menos compromisos tengan, mayor libertad y
felicidad es posible.
Limitan las relaciones a un número sostenible y las encasillan en categorías
precisas e inconfundibles entre sí. Que un “colega” se transforme en “amigo”
puede ser causa de gran confusión interior.
La tarea más grande respecto de las relaciones interpersonales es sostener las
expectativas y demandas del otro porque representan un vínculo y un
compromiso que no se siente seguro de poder atender o de poder librarse, dado
el caso.
Tiene constantemente el temor a ser “invadido” por el otro debido a su
hipersensibilidad y a su sensación de vulnerabilidad.
Consideran que el amor de la gente es solo aparente, que todo el mundo se
mueve por interés propio.
Procuran minimizar sus necesidades. Es mejor necesitar poco y no depender de
nada ni de nadie.
Esconden su necesidad tras un velo de indiferencia, resignación y renunciación
estoica.
El placer en todas sus formas no puede ser cultivado porque sería fuente de
perturbación emotiva y un peligro que llevaría a la pérdida de control.
La prohibición de la necesidad contribuye al empobrecimiento vital que subyace
a la compulsión de retener.
Nada debería de ser tan importante como para no poder prescindir de ello.
Su incapacidad inconsciente de dar refleja el aspecto predominante de su
estrategia: autodistanciamiento y abandono de las relaciones.

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Introversión. Es un espectador de los demás.
Las relaciones tienen siempre un estilo formal y afectivamente aséptico.
El aislamiento como interrupción de la relación con los demás y la interrupción
de la relación con uno mismo o con la representación de los otros en el propio
mundo interno.
Dentro de sí no tiene conciencia de ser también un cuerpo, así como es también
ajeno al cuerpo del otro, como si caminase en un mundo que no le pertenece. El
contenido intelectual se aísla de la emoción experimentada como si fuera algo
sucedido a otra persona y no le importara.
Aire juvenil en sus aspectos y maneras.
El E5 se siente neuróticamente diferente y quiere ser diferente. Eso pasa por no
sentir las mismas emociones que los demás y no moverse en la vida por sed de
poder y deseos consumistas.
AVARICIA es la necesidad neurótica de conservar lo poco que se siente haber
conquistado, o lo poco que se lleva dentro de sí. El E5 renuncia a lo que no tiene
mientras busca no perder lo poco que le queda.
RETENCIÓN, NO DAR. Falta de generosidad en cuestiones de dinero, energía
y tiempo. Tienen una gran dificultad en dar al otro algunas partes de sí, sean
emocionales o vínculos íntimos.
DESAPEGO PATOLÓGICO. Elusión del compromiso. Necesidad de
permanecer completamente libres, sin límites, sin impedimentos. Falta de
motivación para relacionarse.
MIEDO A SER ENGULLIDO Gran sensibilidad a la intromisión y a la
interferencia.
AUTONOMÍA El individuo necesita ser capaz de seguir adelante sin ayudas
externas. Necesita construir y almacenar sus propios recursos en su torre de
marfil.
INSENSIBILIDAD EMOCIONAL Algunos individuos del E5 pueden resultar
indiferentes, fríos, faltos de empatía y apáticos
APLAZAMIENTO DE LA ACCIÓN. Actuar requiere de un entusiasmo y de una
presencia de sentimientos, al tiempo que supone poner en marcha las propias
energías, lo que va en contra del principio de orientación retentiva de este
eneatipo.
ORIENTACIÓN AL CONOCIMIENTO. Típicamente intelectual. Relacionado con
la abstracción (en la que son notables) y la organización de la experiencia existe
un interés por la ciencia y una curiosidad por el conocimiento. El individuo nunca
se siente lo suficientemente preparado. Sustitución de vivir por leer

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SENTIMIENTO DE VACÍO La supresión de los sentimientos y el evitar la vida
llevan a un sentimiento de esterilidad, sequedad interna y falta de sentido que
intenta compensar con una rica vida intelectual para la que suele estar
constitucionalmente bien dotado.
HIPERSENSIBILIDAD En la medida en que no esté autistamente desconectado
de la percepción de los otros, será amable, tierno e inofensivo. Incluso al tratar
con el mundo inanimado. No quiere alterar el orden de las cosas. Le gustaría
incluso, poder caminar sin dañar la hierba que pisa.

EL SEIS

EL LEAL, EL DUBITATIVO, EL JUEZ


MIEDO Y CORAJE
EL QUE TEME TOMAR DECISIONES
EL QUE QUIERE ESTAR SEGURO

Es el tipo comprometido, orientado a la seguridad, encantador, responsable,


nervioso y desconfiado.
Deseo básico: encontrar seguridad y apoyo.
Su creencia básica es: “vales o estás bien si haces lo que se espera de ti”.
Su frase: “¿en qué puedo confiar?”.
En su mejor aspecto, los E6 son estables interiormente, seguros de sí mismos,
independientes y apoyan con valentía a los débiles e incapaces.
Es un carácter mental que se caracteriza por tener arraigado en el núcleo de su
personalidad una sensación de temor. Este miedo o temor se puede manifestar
de diferentes maneras, por lo que los E6 son algo difíciles de describir de forma
genérica.
Habitualmente, este miedo se exterioriza como preocupaciones e imaginaciones
de lo que puede salir mal. Su personalidad está impregnada de una especie de
actitud defensiva: tienden a ser desconfiados, de las personas y de la vida en
general. Como si tuviesen que estar un poco en alerta, por si acaso, por si sucede
algo o por si alguien tiene malas intenciones.
Las personas de este eneatipo pueden parecer muy distintas, externamente,
entre ellas y actuar de formas muy diferentes. Esto se debe a la estrategia que

24
cada una adopta para vivir con el miedo que siente. Se podrían simplificar las
posibles estrategias ante el miedo en tres actitudes básicas: huir, defenderse o
enfrentarse.
Tiene un sentimiento de no ser capaz de arreglárselas con los recursos propios.
Se cuestionan las intuiciones y deseos propios. Hay que desconfiar también de
la gente. Ven en la autoridad una salida y una seguridad, sobrevalorándola
ambivalentemente. Se perciben, exageradamente, según su relación con sus
superiores e inferiores.
Precavidos, reservados, maquinadores.
No tienen un auténtico sentido del humor, suelen ser serios. Se enorgullecen de
ser objetivos, racionales y nada emocionales.
Desconfianza y sospecha excesiva hacia los demás interpretando, a menudo,
las intenciones de los otros como maliciosas.
Duda de la lealtad de los amigos y compañeros de trabajo. No confía en los otros
pensando que cualquier información puede ser usada en su contra.
Buscan la claridad de las reglas y de las normativas. No toleran la incertidumbre
e imponen el orden y el sistema en sus vidas.
Según Jung, en la persecución de sus ideas son siempre testarudos, obstinados
e imposibles de influenciar.
Sólo pueden actuar tras haber sopesado cada paso y cada consecuencia
imaginable, sabiendo con mucha precisión dónde está y qué piensa.
Se preocupa innecesariamente por hechos que tal vez no sucedan nunca.
INDECISIÓN. Paralización ante la posibilidad de cometer errores, inmovilización
por la duda. Pérdida de contacto con el impulso. Evitación de las decisiones.
Exceso de cuidado y precaución. Propensión a la “recomprobación” compulsiva.
MIEDO. Al cambio, a cometer errores, a lo desconocido, a soltarse, a la hostilidad
y al engaño, a no ser capaz de sobrellevar las situaciones, a no sobrevivir, a la
soledad en un mundo amenazante, a la traición, a amar…
VIGILANTE. Actitud suspicaz y excesivamente cauta.
ORIENTACIÓN TEÓRICA. Es el más lógico de los eneatipos, un devoto de la
razón. Un cuestionador. Un filósofo en potencia.
FIDELIDAD exagerada a los individuos y causas. Necesidad de asociarse con
un compañero más fuerte que les de seguridad.
RESPONSABLES, correctos, bien informados, trabajadores duros, puntuales,
precisos.

25
RIGIDEZ. El temor a la autoridad y el miedo a cometer errores hace que
necesiten directrices bien definidas sobre lo que es correcto e incorrecto. Son
muy intolerantes con la ambigüedad.
ORIENTACIÓN HACIA LA AUTORIDAD. Ese miedo mencionado antes, le
condujo originariamente a la dulzura, la obediencia o el desafío…eso sigue
operando en relación a aquellos a quienes atribuye autoridad…vive en un mundo
jerárquico manifestando agresión a quienes están “por debajo” y sumisión a
quienes están “por encima”. Idealización de la figura de autoridad que se
manifiesta en una atracción por lo grande y lo fuerte.
DUDA Y AMBIVALENCIA. El E6 duda de sí mismo, duda de la duda, duda de
los demás…y teme estar equivocado. Vive en una incertidumbre crónica para
escoger un curso de acción con la consiguiente ansiedad y necesidad de apoyo
y guía externo. Su postura, ante el mundo, por el contrario, puede aparecer como
la de quien está absoluta y auténticamente seguro de todas las cosas.

EL SIETE

EL HEDONISTA, EL MULTITAREA
GULA Y SOBRIEDAD
EL QUE TEME SUFRIR
EL QUE QUIERE ESTAR ESTIMULADO

Es el tipo activo, amigo de pasarlo bien, espontáneo, versátil, codicioso y


disperso.
Deseo básico: estar feliz, contento. Encontrar satisfacción.
Su creencia básica es: “vales o estás bien si obtienes lo que necesitas”.
Su frase: “no quiero perderme nada”.
En su mejor aspecto, los E7 centran sus dotes en objetivos dignos. Son alegres,
muy capacitados y muy agradecidos.
Las personas del patrón de personalidad E7 son un carácter mental que se
caracteriza por desear y procurar que sus vidas sean una aventura emocionante
y repleta de muchas y distintas experiencias divertidas y placenteras. Tienden a
orientarse al futuro soñando en las posibles oportunidades de vivir estas

26
deseadas aventuras y experiencias. A menudo tienen un espíritu emprendedor
y pueden ser exitosos cuando están centrados. Pero estar centrados no es algo
fácil para los E7. Su tendencia a creer que algo mejor les espera y que hay
oportunidades mejores, les dificulta mantener un esfuerzo constante a lo largo
del tiempo para lograr sus objetivos. Pueden empezar un proyecto con mucha
energía e ilusión y al cabo de poco tiempo abandonarlo. Tienden a tener
dificultades para comprometerse y esforzarse cuando esto se debe de hacer de
forma continua y prolongada en el tiempo.
Tienen tendencia a actuar con una gran permisividad y autoindulgencia en su
búsqueda del placer. Es una tendencia a actuar con pocos sentimientos de culpa
o remordimientos por lo que hacen. Se podría decir que acostumbran a dejarse
llevar por unos valores éticos y morales hechos “a su medida”, para su
satisfacción y disfrute personal. Es un poco como si todo valiese para la finalidad
de alcanzar el disfrute y el goce. Como si no existiese ni el bien ni el mal, ni las
obligaciones ni los deberes. Una actitud de hacer lo que les conviene para su
interés. Como si lo más prioritario fuese materializar el deseo de su placer y por
ello todo, o casi todo, valiese.
Las personas del E7 también pueden ser permisivas y autoindulgentes con el
comportamiento de otros (siempre que, lo que hagan estos otros no les afecte a
ellos). Sería un poco aquello de “vive y deja vivir”. En cambio, les cuesta
empatizar con el sufrimiento de otros, porque esto sería contactar con el dolor y
esto es lo último que desean desde su actitud hedonista.
Orientado al placer, huye del sufrimiento y del dolor. Su deseo es estar bien y
que todos estén bien huyendo compulsivamente del sufrimiento. Considera que
el más listo es el que puede hacer lo que quiere.
Vive en un mundo mental, absorto en sus planificaciones y fantasías.
Buscadores de lo remoto, lo curioso, la variedad, la aventura y la sorpresa.
Su actitud optimista no sería posible sin una idealización del mundo y de las
personas más significativas que hay en él. Esto conlleva la suspensión de la
crítica y de la acusación. Y la presuposición de ser tanto amoroso como digno
de amor.
Sustituyen la acción por la imaginación. Planificador compulsivo, vive orientado
al futuro en un mundo mental de fantasía, planes, ideales…que nunca llega a
concretar en el presente.
Se sacia y aburre fácilmente con las cosas. Deseo compulsivo de variedad y
novedad. Las condiciones establecidas le ahogan.
Las armas que utiliza par encantar y obtener la aprobación del otro son la astucia
y la seducción. La autoindulgencia es su fijación.

27
Llevar adelante una relación (sentimental o social) significa adoptar estrategias.
Tiene siempre a mano un plan B que pueda resolver tanto el sufrimiento emotivo
como el peso de un compromiso.
El fantasma más grande para un E7 es no poder escapar o no tener una salida.
MEGALOMANÍA. Ilusiones de belleza éxito y grandeza. Ilusión de tener una
inteligencia superior. Ilusión de no tener límites a la hora de llevar a cabo sus
múltiples planes.
OPTIMISMO que no decrece ante la experiencia de la realidad.
GULA. Como intento de llenar un vacío insaciable. Su constante búsqueda de
experiencias los lleva de un aquí insuficiente a un allí prometedor. No presta
atención a lo común sino a lo más destacable, a lo extraordinario: lo mágico, lo
esotérico, lo remoto (ya sea geográfico, cultural o de los límites del
conocimiento). Esa búsqueda en el más allá sólo asegura la frustración de su
deseo de encontrar valor en lo presente y actual.
PERMISIVIDAD HEDONISTA. No sólo describe un rasgo del individuo en
relación consigo mismo, sino también una característica actitud de “laissez faire”
hacia los demás. Al congeniar con los vicios de los demás, esta permisividad se
convierte en complicidad. La alegría del individuo se mantiene por una visión del
mundo en la que no existe el bien ni el mal. No hay culpa ni obligaciones ni
deberes ni esfuerzos que realizar…basta con disfrutar.
REBELDÍA. Crítica aguda de los prejuicios convencionales. Enfoque psicológico
no jerárquico, igualitario en relación con la gente: ni se toma la autoridad
demasiado en serio ni se presenta a los demás como una autoridad.
FALTA DE DISCIPLINA. Perezoso, negligente. Falto de compromiso. Rara vez
lleva sus fantásticos proyectos a término.
COMPLACENCIA SEDUCTORA. Su felicidad y afabilidad hacen de él un
eneatipo complaciente inclinado a satisfacer tanto la gula propia como la de
aquellos a los que quiere seducir. Buenos anfitriones y grandes gastadores en la
medida en que la generosidad es una manera de comprar amor. Basa su éxito
en su encanto personal.
PERSUASIÓN. A los charlatanes les gusta influir en los demás mediante el
consejo. Manipular a través de las palabras.

28
EL OCHO

EL JEFE, EL ORGANIZADOR
LUJURIA E INOCENCIA
EL QUE QUIERE TENER EL CONTROL
EL QUE QUIERE SER PODEROSO

Es el tipo poderoso, dominante, seguro de sí mismo, decidido, voluntarioso y


retador.
Deseo básico: protegerse, decidir su camino en la vida.
Su creencia básica es: “vales o estás bien si eres fuerte y estás al mando de la
situación”.
Su frase: “soy dueño de mi destino”.
En su mejor aspecto, los E8 se controlan y usan su fuerza para mejorar la vida
de otras personas, volviéndose heroicos, magnánimos y a veces históricamente
grandiosos.
La pasión Lujuria denota una pasión por el exceso, «una pasión que busca la
intensidad, no solo a través del sexo, sino en todo tipo de estímulos: la actividad,
la ansiedad, las especias, la alta velocidad, la música a todo volumen, etc.»8
El E8 es un carácter excesivo. El más impulsivo de los caracteres de acción.
Desean mucho de la vida y se sienten completamente preparados para salir y
conseguirlo. Los E8 son personas enérgicas a las que les gustan las
experiencias intensas. El consumo de energía, la búsqueda de estímulos
intensos, la atracción por la violencia y el riesgo y la manifestación excesiva del
entusiasmo son manifestaciones típicas de los E8. Es su interpretación del “estar
vivo”.
Tienden a considerar que el mundo es como una selva donde el pez grande se
come al pez pequeño, y ellos han optado por ser el pez grande. Honran valores
como la fuerza y la dureza, y desprecian lo tierno y lo sensible. Son personas
que tienden a abordar las confrontaciones directamente; sin rodeos. Les gusta
ser independientes y autosuficientes, procuran controlar e intentar ser dueños de
su destino. Cuando están sanos pueden ser líderes naturales que inspiran a
otros, protegen al débil y se esfuerzan por la justicia. Pero cuando están insanos
pueden defender el concepto de ser “malos” y ser realmente agresivos y
violentos.

8
C. Naranjo, Carácter y neurosis, págs. 209-210
29
Una de las grandes diferencias entre los E1 y los E8 es que los E1 padecen un
durísimo y exigente juez interno, en cambio los E8 se sienten libres para actuar
con libertad, sin culpa, ni remordimientos, ni vergüenza.
Orientado al poder, la dominación, el control. Para él el mundo es una batalla
donde los fuertes ganan y los débiles pierden. Sobrevalora el apañárselas solo
y desprecia la necesidad. No teme el éxito ni el riesgo. Tiene un innato sentido
de aventura. Busca “fuera del hogar” una vida mejor. Para un ocho, el fin justifica
los medios.
Son pragmáticos y concretos. El futuro no existe y el pasado no es necesario.
Los E8 no suelen interesarse en actividades relacionadas con el
autoconocimiento.
Abandonan la expectativa de ser queridos. Dan por hecho que sólo conseguirán
lo que tomen.
Se plantean las relaciones de amistad comprometiéndose a defender a las
personas “cercanas” a condición de que estas no interfieran con su poder.
ACTITUD CASTIGADORA expresada como brusquedad, sarcasmo, ironía
humillante. Se toma la justicia por su mano en respuesta al dolor, humillación e
impotencia que sufrió en su primera infancia. Su estilo interpersonal es la
venganza: no se pueden dejar las cuentas sin cerrar.
REBELDÍA Prototipo del activista revolucionario. Ser “malo” es la forma
adecuada de ser.
DOMINACIÓN relacionada con la hostilidad. Le protege de una posición de
vulnerabilidad y dependencia.
INSENSIBILIDAD consecuencia de un estilo de vida agresivo no compatible con
el sentimentalismo o la pena. No puede entregarse a la ternura, debilidad o
fragilidad. No tiene capacidad empática. Con gran resistencia al dolor físico y
psicológico.
CINISMO, desconfianza de los motivos de los demás. Tendencia a considerar la
virtud como hipócrita.
EXHIBICIONISMO. Narcisismo. Los E8 son, a menudo, entretenidos,
ingeniosos, encantadores, fanfarrones y arrogantes.
AUTONOMÍA Autoconfianza. Rechazo de la dependencia.
PREDOMINIO SENSOMOTOR. predominio de la acción sobre el intelecto y el
sentimiento. Orientación hacia el aquí y el ahora centrándose en la esfera de los
sentidos y de las sensaciones corporales. No tiene por real nada que no sea
tangible y un estímulo inmediato para los sentidos.

30
Personalidad desobediente y desafiante. Rechazo a someterse a reglas.
Indiferencia ante el peligro con descuido de la propia seguridad y la de los
demás.

EL NUEVE

EL MEDIADOR, EL PACIFICADOR
PEREZA Y ACCIÓN ESENCIAL
EL QUE QUIERE EVITAR EL CONFLICTO
EL QUE BUSCA LA ARMONÍA

Es el tipo indolente, modesto, receptivo, tranquilizador, simpático y satisfecho.


Deseo básico: mantener la estabilidad interior y la paz mental.
Su creencia básica es: “vales o estás bien mientras los que te rodean sean
buenos y estén bien”.
Su frase: “Es igual. No me importa”.
En su mejor aspecto, los E9 son indómitos y abarcadores. Son capaces de unir
a las personas y de solucionar conflictos.
Por “pereza” se entiende la pereza de la conciencia. La conservación de un bajo
nivel de conciencia de modo que ningún estímulo, ni emotivo ni ambiental pueda
entrar en conflicto con un equilibrio preconstituido. Demuestra un considerable
rechazo hacia la introspección y el cambio desarrollando un estilo de vida dirigido
al olvido de sí mismo.
Las personas del E9 son un patrón de personalidad instintivo. Esencialmente
sienten la necesidad de estar en paz y armonía con ellos mismos y con su
entorno, y por ello procuran evitar los conflictos. Acostumbran a ser amables y
correctos, resultando ser habitualmente de trato fácil y agradable.
Los E9 son poco egoístas en el sentido que se adaptan con facilidad al entorno
y a las personas. A veces pueden esforzarse más por los otros, antes de por
ellos mismos, y es que actúan con una cierta tendencia a dejarse llevar por los
demás. Por ello, a pesar de su aparente alegría y jovialidad, por su tendencia a
dejarse llevar y anteponer los deseos de los demás a los suyos, de fondo pueden
padecer una cierta insatisfacción que puede tomar forma de tristeza o
resignación.

31
Cuando las personas de este patrón de personalidad obtienen determinados
placeres o disfrutes, esta sensación hace emerger inconscientemente, de lo
profundo de su ser, una sensación negativa que podríamos calificar de displacer.
Por ello, de una manera muy inconsciente, hay una tendencia a impedir la
satisfacción de sus deseos o necesidades, y así evitar la sensación de displacer
que se podría generar inconscientemente. Por ejemplo, si una persona del E9
tiene un buen abrigo un día que hace frío y ve que sus amigos no tienen abrigo
y pasan frío, tal vez a esta persona del E9 podría emergerle una sensación
negativa; como de culpabilidad. Muchas situaciones del tipo donde una persona
del E9 se siente aventajada sobre otras que lo están pasando mal, son propicias
para que al E9 le emerja una sensación displacentera muy parecida a la
sensación de culpabilidad.
Igualmente, también tiende a emergerles una sensación displacentera cuando
anteponen sus propios deseos e intereses a los del otro; tal vez de culpabilidad
por sentirse egoístas. Es como si estas personas tuviesen una gran facilidad y
sensibilidad para sentirse culpables. De hecho, el patrón de personalidad E9 es
el que más fácilmente conecta con la sensación de culpa; es el que siente más
culpa del Eneagrama.
Resignado, conformista, conciliador. Ante todo, evita el conflicto y el sufrimiento
no pensando demasiado y adaptándose. Piensa que cuantos menos conflictos
le rodeen, mejor.
Es un tipo de persona contenta y generosa cuya apatía no se revela tanto en la
aversión hacia los asuntos espirituales como la aversión a la exploración
psicológica y la resistencia al cambio. Inclinación a la estabilidad y a la
conservación.
PEREZA, INDOLENCIA. Más de la psique y del espíritu que lo que es
propiamente una tendencia a la inacción.
INERCIA PSICOLÓGICA. Escasez de experiencias interiores o
“ensordecimiento” respecto a escuchar a sus voces interiores. Narcotización.
SOBREADAPTACIÓN. Dificultad de expresar su desacuerdo hacia otros. Niegan
su individualidad subordinando sus deseos.
AUTOABANDONO. Desatención de las necesidades personales.
RESIGNACIÓN. La sobreadaptación abnegada implica resignación, abdicación
y renuncia a la vida y al cuidado de uno mismo. Juega a estar muerto para
permanecer vivo convirtiéndose en un muerto en vida en nombre de la vida.
“Mejor dejarse morir que arriesgarse a ser asesinado”.

32
GENEROSIDAD. Concienzudo, responsable y fiable. Dispuesto a “cargar con el
muerto”, él mismo se toma a la ligera para no ser una carga para los demás.
MEDIOCRIDAD. No están interesados ni en brillar ni en sobresalir. Con
frecuencia descuidan su aspecto personal.
DISTRACCIÓN. El E9 aborda la vida con la estrategia de “no querer ver”
simplificando el mundo externo e interno. Se suelen describir a sí mismas como
personas distraídas, confusas y de mala memoria.
NARCOTIZACIÓN. Un quedarse dormido mediante acciones de distracción
como el abuso en la comida o en el trabajo o en estímulos como la televisión o
la lectura de periódicos.

33
LOS SUBTIPOS

También llamados variantes instintivas. Indican los diferentes aspectos de la vida


en que se van a centrar los intereses y preocupaciones particulares de cada tipo.
Representan el terreno o aspecto en el que van a presentarse con más
frecuencia los problemas. Hay tres instintos fundamentales:

CONSERVACIÓN
A las personas de este subtipo les interesa lograr y mantener seguridad y
comodidad físicas, lo que se suele traducir en el interés por la comida, la ropa,
el dinero, la casa y la salud física. Ponen su atención en la supervivencia física
y en la satisfacción de las necesidades emocionales e intelectuales.

SEXUAL
Se tiene una constante búsqueda de contacto y una atracción hacia las
experiencias intensas, no sólo por las sexuales sino por cualquier situación que
prometa una carga emocional. Estas personas buscan el contacto intenso en
todo. Pueden encontrar intensidad en un deporte, una película, una
conversación…Tiene que ver con las relaciones íntimas y con la necesidad de
estar en sintonía o armonía con los demás.

SOCIAL
Las personas de este subtipo tienen un potente deseo de caer bien, de ser
aprobados, de sentirse a salvo con otras personas. Quieren ser aceptadas y
necesitadas en su mundo. Les interesa conservar la sensación de valía que
obtienen al participar en actividades con los demás. Se centra en las relaciones
con los otros como grupo y con la sociedad como un todo.

Para cada uno de nosotros, una de estas áreas de conflicto es más importante
que las otras. Es un área sobre la cual nos sentimos vulnerables y le dedicamos
más energía.
Hay una palabra o frase que describe el estilo o la preocupación principal de
cada subtipo y que lo sintetiza.

34
SUBTIPOS UNO

E1 CONSERVACIÓN:
PREOCUPACIÓN
Enfoca su perfeccionismo hacia sí mismo más que hacia los demás. La imagen
que tiene de sí mismo es la de ser demasiado imperfecto, por eso su actividad
se convierte en un constante y obsesivo mejoramiento de sí.
Firmes convicciones acerca de cómo deben de realizar su trabajo, su familia,
alimentación…se preocupan por todo. Sienten culpa si algo no sale perfecto.
Se puede entender esta necesidad de preocuparse por todo como una
exagerada necesidad de previsión y de tenerlo todo bajo control motivada a su
vez por un miedo a que se vea amenazada su supervivencia o conservación.
Tienen la creencia subyacente de que no son suficientemente buenos para
merecer que sus necesidades básicas sean satisfechas, y debido a esto, se
preocupan, imaginando anticipadamente que algo irá mal y que su supervivencia
estará en peligro. La satisfacción de sus necesidades básicas está cargada de
ansiedad en los E1 conservación.
Es el subtipo más amable, benevolente y cálido de los unos. También es al que
menos se le ve la ira. Transforma su ira en buena voluntad.
Proceso de cambio
El primer problema al que se enfrenta es que, al tener la ira tan controlada y
reprimida, le pasa inadvertida. El E1 conservación debido a su opción por el
cumplimiento del deber en detrimento del placer, y a su esfuerzo por mejorarse,
siempre cree que “está en el camino adecuado”.
Si la preocupación y la angustia, que son sus indicadores de compromiso, no les
sirven, ¿qué alternativa tienen? El primer paso sería caer en cuenta del
mecanismo del ego y eso siempre es traumático. En contrapartida, un trauma
puede ayudar: una crisis existencial, una ruptura de pareja, un fracaso
económico… Al perder el control de una situación, cuando la exigencia personal
no da réditos, cuando el esfuerzo es inoperante, cuando no hay nada más que
perder, la preocupación se diluye y la angustia desaparece. No puede haber
cambio sin “descender” al mundo de los sentimientos y de los instintos.
Cuando aparece la ira, la respuesta mecánica sería pasar a la acción. La
respuesta consciente y por tanto transformadora, sería afrontarla, ver de dónde
surge, expresarla sin necesidad de mantener una apariencia de bondad y
corrección. Al expresar la ira, uno también puede expresar el dolor, la
inseguridad, la vergüenza, la fragilidad, el miedo…todo aquello que lo hace “más
humano”.

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Conectar con la propia ira conduce también a conectar con las propias
necesidades. Las necesidades desatendidas generan ira y resentimiento.
Indicadores de transformación:
-La acción deja de ser una escapatoria para no enfrentarse a sentimientos
incómodos como el vacío, o la soledad. Se modula la acción: “Me desocupo cada
día más, dejándome en paz y dejando al otro y al mundo en paz”.
-La meditación, el retiro, el silencio empiezan a ser posibles.
-Se va despenalizando la vida instintiva. Se es menos duro con uno mismo Va
habiendo una apretura al placer (irse de vacaciones, descansar, darse un
masaje…)
-Las relaciones sociales se ven afectadas positivamente al ser más respetuoso,
tolerante y flexible con los demás. Empiezan a importar más las personas que
las reglas del juego.
-Ya no “se empuja el río”, se disfruta de sus aguas.
-Se encuentra la perfección en lo insospechado
-Se aceptan las cosas, aunque no siempre se entiendan.

E1 SEXUAL:
CELO, VEHEMENCIA
Muy apasionados cuando quieren algo sienten una fuerza que les legitima a ir a
por ello. Este subtipo se caracteriza por un fuerte espíritu de dominio y conquista.
También es el subtipo que menos procura disimular la ira manifestando su
descontento de forma abierta y agresiva. Falta de serenidad.
Enfoca su perfeccionismo en las relaciones íntimas y más cercanas idealizando
cómo debería de ser estas relaciones y valorando a sus íntimos según este ideal.
Los E1 sexuales tienen un estilo de comportamiento vivaz, afectado, hiper
animado y efusivo. Esta sensación constante de ser apasionados es la manera
en que se trasluce su «ardor» sexual en su estilo de personalidad.
Para un E1 sexual, la fuerza del impulso es suficiente como para que la persona
esté más dispuesta a cuestionar la censura de la autoridad que la fuerza de su
deseo.
Proceso de cambio
-Lo que más se echa de menos es la falta de serenidad.
-La falta de serenidad tiene que ver con ese impulso fogoso, con no controlar la
ira. La serenidad pasa por haber conquistado “mis tripas”.

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-El uso de la agresividad y de la capacidad de confrontación para ayudar a otros.
Indicadores de transformación:
-Ya no necesito que “se me vea” en mis relaciones personales y sociales.
-Ya no tengo una agenda llena de cosas pendientes por hacer. Dejo que el día
fluya, así tengo el tiempo necesario para lo que aparezca.
-Ya no me defiendo ni pretendo cambiara a nadie ni a nada. Comprendo que
cada uno hace lo que puede cuando puede y donde puede.
-La agresividad airada se va transformando en determinación.
-El juicio y la crítica se van transformando en aceptación.
-El perfeccionismo se va convirtiendo en “todo está bien en mí tal como está”
-Me siento serena conmigo y con el mundo.
-Me doy más tiempo para mí. Busco soledad, silencio e introspección. Necesidad
de estar con uno mismo.
-Mis deseos han quedado reducidos a casi nada: cada vez necesito menos para
vivir.

E1 SOCIAL:
INADAPTABILIDAD, SUPERIORIDAD
Desde muy temprano este subtipo ha sido un pequeño adulto.
“Seré fuerte, bueno, brillante, perfecto…así me amarán”.
Tienden a centrar su perfeccionismo en el ámbito social, incluido el voluntariado.
Consideran más importante solucionar los problemas sociales que ocuparse de
sus problemas personales por lo que a menudo, la familia no suele ser su
prioridad.
Por su gran sentido de la moralidad y de las normas sociales les cuesta
adaptarse a su entorno. Están convencidos de que las cosas deberían de
hacerse como ellos dicen.
Este es el subtipo más inflexible y convencido de que el mundo iría mejor si todos
hiciesen lo que ellos dicen. Tienden a sentirse superiores a los demás.
Tienen una imagen idealizada de sí mismos. Su sentimiento de superioridad
deriva de una “auto certificación” -dado que tiene de sí un concepto de persona
virtuosa y justa- que le confiere el mérito de ocupar un cargo de autoridad y
dominio.

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Los E1 Sociales expresan su torpeza y su inseguridad social como rigidez.
Tienen ideas rígidas sobre cómo deberían comportarse ellos y los demás, y su
pasión de la ira surge cuando sus ideas no se cumplen.
En vez de dejarse llevar por el flujo de lo que está ocurriendo en una reunión
social, intentan imponer lo que piensan que debería estar ocurriendo.
Proceso de cambio
-Me doy cuenta de que muchos de mis comportamientos cubren un sentimiento
de desvalorización e inadecuación. Necesito diferenciarme, ser especial,
mantener una identidad propia “si me adapto, muero”.
-La consecuencia es “no sentirse en casa” en ningún lugar. Es una sensación de
extrañamiento, de no pertenencia.
-Sentimiento de rechazo hacia la realidad tal como es.
Indicadores de transformación:
-Acepta que puede cometer errores (antes era impensable).
-Ya no siente miedo o sensación de peligro si los demás ven las cosas de un
modo distinto al suyo.
-Ya no importa que las personas sean más o menos “competentes” para
relacionarte con ellas.
-Aparecen sentimientos de gratitud hacia personas que nos han ayudado.
-Se comprende que el rechazo hacia los demás tiene que ver directamente con
el rechazo hacia uno mismo.
-Digo: “está bien así”, cada vez más a menudo.

SUBTIPOS DOS

E2 CONSERVACIÓN:
PRIVILEGIO: “YO PRIMERO”
Es el subtipo al que menos se le nota el orgullo y el que más claramente prefiere
recibir que dar. Es el más emocional, tierno, y de conducta, aparentemente, más
infantil de los tres subtipos.
Lo más prominente en este subtipo es la necesidad de amor, la necesidad
desnuda de amor, no obtenida por la seducción del E2 sexual, ni por la
autoimportancia del E2 social.

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Lo intentan conseguir actuando de un modo infantil. Agradan más los niños que
los adultos. A los niños se les disculpa todo. Los bebés son muy atractivos para
las personas de disposición maternal. Los rasgos infantiles mismos, son
seductivos. La seducción a través de la infantilidad implica necesidad de ternura,
delicadeza y fragilidad, pero también conlleva egocentrismo y evasión de las
responsabilidades.
Tienden a considerar que son merecedores de un trato especial y mejor, no por
importantes, sino porque tienen que “ser atendidos como princesitas”.
Los E2 conservación tienen miedo de ser olvidados y de que sus necesidades
no sean satisfechas, de modo que, debido a su ansiedad por la supervivencia,
cuidan a los demás para que los demás los cuiden a ellos.
El apego a lo infantil es un modo de vida, un estilo de vivir donde las
responsabilidades nunca descansan en uno o en sus decisiones, sino en las
circunstancias, en los otros o en el azar de la vida.
Proceso de cambio
Veo mi compulsión de mostrarme agradable y simpático para poder gustarle a
todos.
Veo mi expectativa de que satisfagan todos mis deseos por ser único y especial.
Me doy cuenta hasta qué punto mis relaciones son utilitarias. Siempre hay
ventaja y trueque de conveniencias.
El E2 siempre usa y acaba siendo usado por los demás por lo que al final, se
queda con una sensación de objeto y/o de ver al otro como objeto.
Veo el precio de mi comportamiento infantil, lo que pierdo cada vez que me
comporto como un niño. Todo lo que hago está destinado a quedarme sin la
capacidad de valerme por mí mismo.
Indicadores de transformación:
Hago un esfuerzo por tolerar la frustración, el peso de las cosas y las
consecuencias de mis actos.
Ya no me siento super poderoso/a. Aprendo a cuidar mi salud.
Experimento la libertad de ser adulto, de decidir libremente sobre mi vida sin ser
esclavo de mis “protectores”.
Puedo protegerme yo misma, ser autosuficiente y cooperar con otros.
Ya no me siento tan “agobiante y pegajosa” como antes con los demás.
Elijo las situaciones en las que quiero involucrarme. Ya no me ofrezco
compulsivamente a cada instante para logar seguir siendo la/el preferida/o.

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Acepto mis orígenes. Dejo atrás la sensación de haber nacido en la familia
equivocada.
Comprendo las vidas de mis padres y veo que mi demanda hacia ellos ha
disminuido también.
Acepto el desafío de exponerme al mundo adulto. Tengo recursos reales.

E2 SEXUAL:
CONQUISTA, SEDUCCIÓN
El más seductor y agresivo de los tres subtipos. Es el E2 por excelencia.
La necesidad de seducir de los E2 sexuales implica una necesidad del deseo del
otro. Arquetípicamente, estaríamos hablando de “las vampiresas”, “la femme
fatale”, una mujer hermosa de una belleza peligrosa que necesita tenerte
agarrado y podría terminar devorándote.
Otro arquetipo podría ser Helena de Troya. Por su belleza, los hombres están
dispuestos a perder sus vidas y a emprender una guerra.
El E2 sexual aspira a una irresistibilidad que pueda llegar a inspirar las mayores
pasiones. Piensa que inspirar una gran pasión puede solucionarlo todo en la
vida.
Muy orgullosos, no soportan ser rechazados. Antes rechazan ellos primero. Les
gusta conquistar “uno a uno” a todas aquellas personas que les importan. Para
ello, disfrutan averiguando y centrándose en las esperanzas, intereses, gustos,
necesidades…de los otros, para proporcionárselas y así ganárselos. También
seducen mediante el halago y el elogio.
Debido a su inseguridad respecto al deseo, los E2 sexuales o bien seducen o
bien fuerzan a los otros en las relaciones, dependiendo del sexo. Dentro de una
relación, tratan de convencer o de presionar a su pareja para que haga lo que
ellos desean, de nuevo actuando de una u otra manera según el sexo.
Proceso de cambio
Muchos “doses” sólo son capaces de llegar a un camino espiritual o a una
transformación a través de una crisis de relación en la que son ellos los
abandonados: “¿cómo es posible que, a mí, que soy el/la amante ideal me
dejen?”
Esta experiencia también puede ser una liberación: ya se puede dejar de
interpretar ese papel ideal, ya se puede soltar la creencia de que para ser amado
tengo que “hacer”, tengo que ser especial y único.

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Otro aspecto transformador para alguien que se siente el elegido es tomar
conciencia de sus propias limitaciones y vulnerabilidad.
Indicadores de transformación:
Sentirme amado por lo que soy, porque sí, (sin los atributos de belleza, poder e
inteligencia).
Entender que uno no es especial. Que no tiene que “sostener el mundo”.
Entender que no es “malo” necesitar cosas o tener carencias.
Poner bajo sospecha ese exceso de disponibilidad, esa sobreabundancia, ese
estar muy presente en la vida del otro
Poder reconocer el valor del otro sin que eso suponga, automáticamente, el
menosprecio de uno mismo.

E2 SOCIAL:
AMBICIÓN
Aquí, la pasión del orgullo se manifiesta como una satisfacción en la conquista
del público. Un E2 social necesita “ser alguien”. Eso supondrá “estar por encima”,
tener influencia y tener ventajas.
Es el subtipo más mental, contenido y disciplinado. Se esfuerzan en cuidar su
imagen pública. Su ideal es ser reconocidos socialmente por sus acciones de
ayuda social. Tienen una cierta tendencia a sentirse superiores. Quieren hacer
algo importante en el mundo y se sienten capacitados para ello. Se sienten
amados ocupando un lugar importante en la vida de sus amigos y familiares.
Confusión entre ser amados y ser reconocidos, por eso procuran rodearse de
personas reconocidas socialmente, personas de éxito y fama.
Los E2 sociales son escaladores sociales, muy conscientes de las jerarquías
sociales y deseosos de ser aceptados y apreciados por aquellos que ocupan
puestos altos, como una manera de resolver su sensación de no pertenencia.
Proceso de cambio
Su cambio sería un camino de humanización en el que tendría que pasar del
liderazgo a la paridad.
Un punto de inflexión se da cuando comienzan a notar el daño que son capaces
de hacer a los demás.
Suelen rodearse de personas menos capaces, menos desarrolladas,
dependientes… de modo que, en una supuesta competición puedan ganar
siempre con su “buenismo pseudo compasivo”. Esta actitud termina por evocar
en los demás un efecto devastador traduciéndose en un lento y crónico sentido

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de desvalorización que envenena las relaciones con esas personas que llegan a
ser dependientes y adorantes.
Indicadores de transformación:
Pueden hablar honestamente con los demás.
Se aprecia el efecto sanador que tiene el intercambio entre iguales.
Pueden abrirse a ver los efectos que las propias acciones causan en los otros.
Se aprende a reconocer y a dar nombre a emociones que estaban anestesiadas
(generalmente pertenecientes a la categoría de la vulnerabilidad).
Se comprenden las necesidades que subyacen a esas emociones.

SUBTIPOS TRES

E3 CONSERVACIÓN:
SEGURIDAD
Es el subtipo menos vanidoso de los vanidosos. Al estar determinado a ser
“buena persona”, para él, la vanidad es un tabú.
Crean alrededor de ellos una atmósfera de seguridad y suelen ser personas a
quienes se consulta para recibir un consejo. Son especialistas en la resolución
de problemas.
En el E3 conservación predomina el amor maternal como forma de canalizar el
amor a través de ser útil a los demás.
La necesidad de afecto se plasma en un constante cuidar al otro y en evitar que
surjan situaciones conflictivas o no adecuadas.
Desarrollan una especial autonomía ante la posibilidad de una seguridad
amenazada. Buscan hacer todo con la mayor seguridad posible.
Su pasión por la seguridad les lleva a simplificar y reducir sus intereses a lo más
práctico y útil. Prefieren hacer menos, pero con seguridad y en entornos más
pequeños.
Externamente parecen los más fríos, rígidos y duros. No muestran sus
emociones en público. Son trabajadores, responsables y siempre están en
acción. Anhelan que se les quiera por lo que hacen. Tienden a construir una zona
de confort desde la que interactúan. Son los menos vanidosos, serían los “anti-
vanidad”. Quieren aparentar que no les importa su imagen.

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Los E3 conservación equiparan la seguridad interior con tener dinero suficiente
y una posición acreditada en el mundo. Con este propósito, luchan
incansablemente para garantizar su supervivencia, que sienten en peligro
permanentemente. Éste es el subtipo del adicto al trabajo que no puede tomarse
un respiro, y de la persona que ha acumulado una fortuna con el esfuerzo de su
trabajo y siente que su supervivencia es aún precaria
Proceso de cambio
Empieza a ver que no puede poner en riesgo la propia salud y autocuidado por
demostrar que “puede con todo”.
Me doy cuenta de que todo es lo que es, de la forma que es y yo no tengo que
controlar nada.
Indicadores de transformación:
Cuando empieza a tomarse la vida como viene, en lugar de esforzarse en llevarla
por donde quiere.
Se relaja. Se diluyen las preocupaciones. Se va relativizando todo.
Disminuye el autocontrol y el control de los otros.
Paso de preguntarme ¿qué debo hacer? a ¿qué quiero hacer?
Se aumenta la capacidad expresiva y la asertividad al tiempo que se van dejando
atrás los rodeos, la manipulación.
La seguridad es ahora una seguridad interna.
Entiende que no se es “muy” o “más importante que”. Que se es uno más en la
humanidad.

E3 SEXUAL:
ATRACTIVIDAD (MASCULINIDAD/FEMINIDAD)
Es el subtipo más tímido, tierno, inseguro y dulce.
De los tres subtipos es el más dependiente. No suele mostrar agresividad y no
tolera ser rechazado.
Vive la crítica como algo muy amenazador ya que le destruye la máscara de
persona buena y perfecta.
Pone más energía en la relación con el sexo opuesto. Anhela que le quieran por
su presencia física y encanto. Se basan en su atractivo físico para llegar a los
demás. Quieren sentirse deseadas con el único propósito de lograr ser
reconocidas.

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Se usa la sexualidad para otros fines: lograr cariño, admiración, reconocimiento,
manipular como premio o castigo…
Para este subtipo, el atractivo físico y sexual parece la clave para ser deseado,
y por ello refuerzan las características de su sexo. Como norma general, los
hombres exageran su virilidad y masculinidad, y las mujeres intensifican su
feminidad. Cuando se sienten atraídos hacia alguien, adquieren los atributos del
ideal interno masculino o femenino de la otra persona.
Paradójicamente, luego, se sienten personas objetos tan sólo vistas por sus
encantos y belleza y no por su esencia que es lo que necesitan. También se
sienten utilizados muy a menudo.
Una separación es su peor pesadilla. Suele encadenar un amor con otro para no
vivir ese dolor y es asombroso lo rápido que puede desconectarse del amor
anterior.
Proceso de cambio
Necesita liberarse del ahogo que le supone la vanidad y el miedo a decir o hacer
lo incorrecto.
Empieza a entender que no pasa nada por entregarse emocionalmente al otro,
que, al revés, puede llegar a establecer relaciones que le llenen realmente.
Se da cuenta de que cuanto más usa la vida para el aplauso y el reconocimiento,
más infeliz y solo se siente.
Cae en cuenta de que quizá sea falsa la creencia que siempre ha tenido acerca
de “su gran capacidad para amar”.
Indicadores de transformación:
Empiezan a cuestionarse qué es realmente lo que sienten, quieren y cuáles son
sus necesidades.
Se ve libre para ser, sentir y expresarse auténticamente sin estar aprisionado por
la imagen física bonita.
El amor ya no es una meta ni una tarea. Se vuelve más independiente, sabiendo
que puede sobrevivir (incluso mejor) sin una pareja.
Va quedando atrás esa desconexión emocional, sexual y física. Ese miedo a la
intimidad real.
Comprende que no pasa nada por soltar la máscara y mostrarse auténtico.
Va quedando atrás esa parte “demasiado buena”: prefiere decepcionar a alguien
que traicionarse a sí mismo para no confrontar.
Disminuye la necesidad de tener el poder en las relaciones afectivas.

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E3 SOCIAL:
PRESTIGIO
El E3 social es alguien que tiene la pasión de brillar, no sólo a través del trabajo
sino también en la manera de presentarse ante los demás. Como si llevara
incorporado en su personalidad un “departamento de propaganda”.
La descripción de este subtipo dada por Ichazo (a través de Lilly y Hart) es la
“necesidad de una buena imagen pública”.
El E3 social es el más camaleónico de los subtipos y el más vanidoso entre los
vanidosos: necesitan el aplauso de todos, no sólo de algunos.
Sociables, simpáticos y divertidos, en comparación con los otros E3, este subtipo
es el que tiene el carácter más fuerte y reactivo.
Aman el poder.
No les gusta hacer pequeñas cosas que pasan desapercibidas. Les gusta hacer
grandes cosas que tengan reconocimiento social. Les gusta relacionarse con
personas que tienen estatus social y que la sociedad considera “importantes”.
Sienten que pueden llegar a ganarse la vida mediante su prestigio. Son los más
vanidosos de los tres subtipos y los más mercantilistas y camaleónicos con su
imagen.
Su vestimenta y conducta dependen del entorno en el que estén. Ostentosos, la
exhibición del dinero les da sensación de poder y de ser respetados y admirados.
Este subtipo orientado a la practicidad y al éxito, es el ideal actual de nuestra
cultura moderna y tecnocrática.
Proceso de cambio
Suele comenzar con el sentimiento de insatisfacción de lo obtenido que nos
mantiene perdidos con una gran desconexión interna y con una crisis de
objetivos en la vida.
Vemos lo vanas e inútiles que resultan nuestras acciones y lo superficiales que
somos.
Mediante el trabajo personal, aprendemos que lo descubierto es nuestro y para
nosotros más que para conseguir un nuevo triunfo que mostrar al mundo
Indicadores de transformación:
Se da un trato más suave y menos exigente para con uno mismo.
Frente a la necesidad del aplauso, aparece la necesidad de la pausa que nos
permite contactar con nosotros.
La autoestima deja de estar apoyada en el elogio.

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El “valgo porque hago” se transforma en “valgo porque existo”.
El mirar para controlar pasa a un mirar para descubrir.
Se puede estar con otros seres humanos de manera más paritaria, escuchando,
transmitiendo y creando.

SUBTIPOS CUATRO

E4 CONSERVACIÓN:
TENACIDAD, INTREPIDEZ: “LOS SUFRIDOS”
En este subtipo, la neurosis es la del esfuerzo por conseguir aquello lejano y
maravilloso que se perdió. “Voy a por ello cueste lo que cueste”.
Considera que sólo podrá superar la deficiencia que cree que tiene con una
actividad esforzada y tensa. “La vida es trabajo” hasta que eso se convierte en
“el trabajo es vida”.
Tienen una gran capacidad de autofrustración y aguante. “Hemos venido a este
mundo a sufrir y a aguantar”.
Son los más fuertes, los menos introvertidos y los que menos se lamentan.
La motivación podría encontrarse en la escena: “¿ves que no me estoy
quejando?, ¿me quieres ahora?”
Son muy intensos pudiendo llegar a reaccionar de forma agresiva. La
característica frente a los otros subtipos es su gran esfuerzo, disciplina y
perseverancia (llegando a parecerse al E1).
Nada les parece suficiente, siempre se autoimponen un poco más de esfuerzo.
No exteriorizan el sufrimiento, sufren en silencio, internamente, pero para
“compensar” este subtipo se permite rodearse de objetos bellos, comidas,
sexo…tendencia al lujo, lo explosivo y autoindulgente con algunas “malas
prácticas”.
En vez de quedarse limitados por las circunstancias, se precipitarán en busca de
lo que quieren y sienten que deben tener para sobrevivir. Realizan acciones para
protegerse, pero no consideran las consecuencias, y al final ponen su
supervivencia en peligro. Un E4 conservación puede, por ejemplo, comprarse
todo tipo de cosas bonitas de las que cree que no puede prescindir, y acaba
endeudándose por todas partes.

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Proceso de cambio
Hay un desgaste que se va acumulando en el esfuerzo por conseguir lo que haga
falta y le dé legitimidad (títulos, trabajo…). Al ser su “deficiencia” inventada,
nunca podrá ser compensada con logros concretos.
Sentir el descenso de la tonicidad, la sensación de cansancio es un primer apoyo
para empezar a asumir los límites propios y los de los demás.
Reconocer y asumir el narcisismo, la fantasía grandiosa de sí que hay detrás de
la mala imagen (todo lo que él podría ser si consiguiera un amor ideal, un trabajo
ideal o fuera descubierto por alguien importante…).
Indicadores de transformación:
Poder poner límite a las demandas de los demás. Poder decir “no” es un gran
paso. Significa que se tiene un valor independientemente de lo que se haga.
Disfrutar de lo que está bien sin pretender mejorarlo.
Reconocer lo lindo, lo satisfactorio. Saborear los éxitos.
La creatividad y el arte, propios de todos los E4, pueden estar al servicio de la
satisfacción en lugar de la exigencia y de la necesidad de llamar la atención.

E4 SEXUAL:
COMPETITIVIDAD, ODIO: “LOS INSUFRIBLES”
De los caracteres más intensos del eneagrama, a veces, pueden llegar a
confundirse a veces con un E8.
Demasiado insistentes, demandantes, exigentes…suelen resultar molestos y
generar rechazo. El rechazo los lleva a la protesta de nuevo, y de ahí otra vez al
rechazo.
Sensuales, cálidos. Son personas con mucha fuerza y orientadas a la acción.
Extremadamente competitivos en las relaciones personales, la competitividad
sería su motivación básica. “Envidio a los ricos y comienzo una revolución.
Envidio tu superioridad intelectual y te cortaré la cabeza…”
Incapaces de disfrutar de sus éxitos sin degradar los logros de los demás.
Estamos hablando de invalidación, desprecio y agresión que se expresa en la
desvalorización de lo envidiable (ejemplo de la zorra y las uvas supuestamente
verdes).
Tienden a proyectar la culpa de su malestar al exterior. Para ellos siempre hay
culpa. La culpa es su razón de vivir, el sufrimiento es algo importante: una
persona que no sufre es una persona que no vale.

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Dan gran importancia a la parte amorosa considerando que cuando encuentren
al amor perfecto serán felices. Muy cambiantes pasan de idolatrar a odiar muy
rápidamente.
Los E4 sexuales compiten con otras personas de su propio sexo para intentar
encontrar el amor. Su competencia se basa en una sensación de que el amor es
escaso y por ello es necesario luchar por él. Intentan convencer a sus rivales y
al objeto de su afecto de que son los mejores, y su deseo de que
«desaparezcan» sus contrincantes es una forma de odio. La elección del objeto
de su deseo depende de cuántos desean a esa persona, de modo que también
esto surge de la competencia.
Proceso de cambio
El gran obstáculo es reconocer que lo que considera como sincero y auténtico
en su manera de expresarse es en realidad puro odio y competitividad.
El cambio profundo llega cuando toma conciencia de cómo hace callar a los
demás o los amedrenta con el malhumor, el enfado o los desplantes. Ayuda el
hecho de captar cómo los demás tienden a ponerse diplomáticos con uno. Es
bueno escuchar los comentarios respecto a la dureza, agresividad y salidas de
tono.
Aprender a ponerse “a favor de uno” como forma de dejar de odiarse: comer,
abrigarse, organizarse, imponerse tareas y horarios…Disciplinarse como forma
de atajar la tendencia a la autodestrucción.
Enfrentar la distorsión que hacen de la realidad.
Ver lo cotidiano, lo que “todo el mundo hace” como gratificante y no un paréntesis
a la espera de algo más apasionante.
Indicadores de transformación:
Se reconoce que el impulso no es suficiente, que hace falta practicar la
perseverancia y que la falta de perseverancia no es falta de talento.
Se acepta que uno tiene miedo y que los otros también pueden hartarse de uno
y dejarlo plantado. Que es sabio pactar socialmente, cuidar del entorno y estar
bien en el mundo.
Reconoce que está hecho de la misma pasta que los demás y que todos
hacemos lo que podemos.
Reconoce que estar tranquilo no es sinónimo de vivir a medio gas.
Reconoce que no se merece el mal trato que se da, ni el que da a los demás.
Se da cuenta de que equivocarse no es un crimen, nadie se hunde, ni se va a
parar el mundo.

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Se da cuenta de que todo es bastante simple: uno tiene muy mal genio y muy
buen corazón.

E4 SOCIAL:
VERGÜENZA: “LOS SUFRIDORES”
Es el subtipo que más sufre al sentirse culpable ante cualquier deseo.
Se lamenta demasiado, es una persona muy llorosa y se pone a menudo en el
papel de víctima. Son personas que se infravaloran, se sienten menos que los
demás.
Podríamos hablar de “autosabotaje”.
El mundo está en su contra y, definitivamente, les ha tocado menos que a los
demás en el reparto de la vida.
Sienten que nadie les da lo que quieren o necesitan. Proyectan su propio odio
sobre los demás y no se hacen cargo de su envidia.
Sienten una feroz competitividad por el reconocimiento, por ser únicos y
especiales, por el lugar…
Dejan que otros tomen decisiones por ellos y así pueden legitimar su sentimiento
de insatisfacción y odio hacia el mundo por no poder realizar sus propias
elecciones o sostener sus puntos de vista.
En realidad, lo que ocurre es que los E4 sociales prefieren tragarse su propio
veneno antes que exteriorizarlo hacia las personas queridas con quienes tienen
una exagerada dependencia afectiva.
Tienen una mala imagen de sí mismos. Se sienten atrapados. Son muy sensibles
a las críticas y es el subtipo más masoquista.
Compensan su sentimiento de inadecuación social mostrándose divertidos y
graciosos ofreciendo una imagen optimista y alegre muy lejana a cómo se
sienten. Es el subtipo más emocional y extrovertido. Dulces y simpáticos en
público, se vuelven agresivos e iracundos en la intimidad.
Usan la herramienta de “dar lástima” para hacerse querer entrando en un círculo
vicioso de tener que estar mal para dar pena al entorno y llegar a conseguir lo
que quieren.
Los E4 sociales tienen la idea de que hay una manera correcta de ser, y están
permanentemente avergonzados porque ellos no son así. Tienen una sensación
básica de no encajar y de no ser capaces de hacer las cosas adecuadamente
para encajar. Al sentirse incapaces de integrarse en ese grupo social
“glamuroso” al que aspiran, se unen a “los excluidos”.

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Proceso de cambio
Se va desarrollando una mayor conciencia que se traduce en la toma de
responsabilidades en el ámbito laboral y en poder sostener compromisos a largo
plazo.
Se va teniendo una actitud más positiva frente a las dificultades que consiste en
ir buscando estrategias de salida para las situaciones complicadas.
Voy encontrando mi lugar en un grupo y en la sociedad y viviendo más
profundamente el sentido de la pertenencia.
Empiezo a desdramatizar la vida y a bajar el nivel de vergüenza en situaciones
de exposición.
Indicadores de transformación:
Me siento capaz de cumplir con mis responsabilidades tenga o no tenga energía.
Soy menos extremista y le voy dando un valor más relativo a las situaciones de
la vida y a mis emociones.
Tengo pensamientos positivos y reconfortantes sobre mí.
Soy más independiente en las relaciones afectivas.
Me siento más satisfecha con mi presente y no añoro el pasado.
Relativizo e idealizo menos lo que otros dicen o hacen y me permito alegrarme
por los logros de otros.
Ya no busco mi valor desde la competencia y la comparación con otros.

SUBTIPOS CINCO

E5 CONSERVACIÓN:
REFUGIO, CUEVA
Los más introvertidos, los que tienen menos recursos de sociabilización y los que
necesitan más períodos de aislamiento y soledad. Tienen aficiones e intereses
solitarios. No sienten la necesidad de vivir acompañadas. Hay un gran desinterés
hacia la gente, en general, por ejemplo, a perder el tiempo conociendo a alguien
que no resulte interesante por algo.
Tienen mucha fantasía y mucha imaginación.

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Es el subtipo más avaro en el sentido de su tendencia a no gastar para no
necesitar de los demás. Limita extremadamente sus necesidades y sus deseos
ya que para él cualquier deseo podría significar un “status” de “dependencia”.
Los conflictos se evitan y se viven a nivel interno. El precio es la autoagresión al
internalizar la rabia. Lo que se percibe como una agresión se convierte en un
gran resentimiento que no se permite expresar hacia afuera. Eso termina con un
alejamiento del que la otra persona nunca llega a saber la razón.
El E5 conservación suele acceder compulsivamente a las demandas externas
por evitar el conflicto hasta que se da cuenta de hasta qué punto eso implica una
traición a sí mismo y a renunciar a sus propias necesidades.
Tienen tendencia a anestesiarse, al olvido y a la confusión mental.
No quieren “desgastarse” poniéndole atención a cosas “banales”.
No “perder el tiempo” es una obsesión para los de este subtipo.
Necesita darse cuenta del apego tan grande que tiene a sus propias intuiciones,
ideas o deducciones y del empobrecimiento que supone aferrarse a ellas,
cerrándose a otros puntos de vista.
Quieren estar seguros de encontrar un lugar seguro donde poder retirarse y
donde poder aislarse del mundo. Por ello les preocupa la creación y vigilancia de
un refugio personal. Protegen su espacio y su privacidad, apartándose de los
demás y del mundo como una forma de cuidar de ellos mismos.
Como E5, que es el más mental de los caracteres mentales, es en el
pensamiento y en la reflexión incesante sobre la manera de sobrevivir a salvo de
perturbaciones, donde encuentra su refugio más grande.

Proceso de cambio
Se empieza a deshacer la autoimagen victimista que juzga al mundo como hostil,
inadecuado, hipócrita, ignorante…
Se toma conciencia de que la retirada y el esconderse son formas de agredir a
los otros.
Se toma conciencia de la propia vulnerabilidad y miedo a ser aplastado que lleva
a la evitación y a la desconexión.
Se cae en cuenta de la “poca vida” que tiene uno, y de que es bastante
insatisfactoria.
Se identifica ese ideal del yo tan elevado e inalcanzable, construido de sabiduría,
conocimiento profundo, omnipotencia…Al hacerlo y acercarlo a la realidad, se
consigue elevar un poco el nivel de autoestima que está especialmente bajo

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Indicadores de transformación:
Me permito experimentar situaciones de alegría, júbilo, risa descontrolada…sin
racionalizarlos ni intelectualizarlos.
Voy dejando de tomar las cosas (y a mí) tan en serio.
Dejo de mostrar mis característicos enfados castigando con el silencio, no
hablando y poniendo mala cara y voy pudiendo compartir lo que he sentido, mi
malestar interior.
Entiendo que, aunque comparta información sobre mí mismo, opiniones,
emociones…sigo teniendo un espacio de intimidad.
Soy capaz de organizar y celebrar una fiesta de cumpleaños, de ser el anfitrión.
No me importa que mis amigos se conozcan entre sí (sacarlos de los
compartimentos estancos donde los he colocado).

E5 SEXUAL:
CONFIANZA
La “confianza” sería el asunto básico para un E5 sexual. Las personas de este
subtipo tienden a ser las más amables, afables, comunicativas y románticas.
Entre ellos hay muchos poetas y artistas.
Su búsqueda es la del amor absoluto. Se trata de un ideal que no existe en el
mundo de los humanos.
Podrán ser y se atreverán a amar cuando aparezca por fin esa pareja.
Su mayor esperanza es la de tener una conexión profunda con una persona,
alguien que pueda comprenderles, que “se adapte a su cueva”. Necesitan a
alguien en quien poder confiar plenamente. Ese ser se convertiría en su único
foco de interés, el único al que darán afecto. No suelen encontrar a nadie que
encaje con ese ideal que tienen en mente porque es muy difícil pasar el filtro que
ponen. Tienden a exigir a su pareja mucho más de lo que ellos dan. La avaricia
se refleja en el conflicto que tienen entre querer estar solos y con su pareja. Les
es difícil acercarse a la persona que les gusta por su falta de habilidades
sociales, mostrándose fríos y distantes cuando la tienen cerca.
Los E5 sexuales carecen de confianza en su atractivo, en su capacidad de
relacionarse y en el desempeño de su sexualidad. Esto les dificulta dejarse llevar
por sus atracciones, a pesar de la falsa confianza que manifiestan como
compensación de no ser adecuados ni deseables.

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Proceso de cambio
Somos conscientes de que vemos la vida como una película que ocurre fuera de
nosotros. Somos observadores. No podemos entrar en ella. Darse cuenta de que
no se está en contacto con la realidad es el primer paso para el cambio.
La transformación empieza cuando se deja el mundo de la razón y se puede
llegar a la sensación. Recuperar los sentidos. La conexión con el cuerpo es
fundamental. El cuerpo es el lugar desde donde uno puede llegar a saber qué es
lo que necesita y quiere. La expresión emocional también es muy importante.
Indicadores de transformación:
Se va recuperando la capacidad de comunicarse con los demás, de expresar lo
que se piensa.
Se puede estar con alguien porque se le quiere, no por pura practicidad.
Se puede empezar a dar sin necesidad de retener o acumular para cuando no
haya: participación en trabajos voluntarios, obra social…donde uno se relaciona,
discute con otros y realiza labores sin esperar nada a cambio
Se abre el círculo de relaciones en las que somos capaces de expresar nuestra
emotividad, permitimos que ese flujo nos nutra espontáneamente y
comprobamos que es necesario el intercambio para no quedarnos “secos”.

E5 SOCIAL:
TÓTEMS
Sorprende que un carácter tan introvertido como el E5 tenga un subtipo social al
que le gusta relacionarse de forma grupal. El E5 social lo hace mediante el
conocimiento.
Las personas de este subtipo son las más intelectuales. Por su gran dedicación
llegan a tener un conocimiento experto en aquellas áreas que captan su interés.
Socialmente, procuran pertenecer a grupos donde el nexo sea el conocimiento.
En esos grupos son apasionados, habladores y participativos. Un tótem es un
objeto que se toma como símbolo icónico de una tribu. Tendencia a querer
encontrar y relacionarse con lo sublime con lo superior y lo quieren hacer a través
del conocimiento buscando todo el saber posible en lo referente a los temas que
les interesan. La avaricia, en este caso estaría relacionada con su saber, a la
hora de compartirlo, ya que consideran que es su mayor valor. Pueden llegar a
tener un cierto sentimiento elitista cuando creen que su tema de conocimiento
es algo muy importante.
Son muy conscientes de las jerarquías sociales, y como implica la palabra
tótems, quieren ser una de las caras de la escultura de los tótems venerados. Un

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tótem es un símbolo o un emblema que representa una familia o un grupo social,
y esto es lo que un Cinco Social vive en la sombra y también desea ser.
La altura de un tótem evoca una tendencia a mirar a lo alto, hacia lo ideal, la
tragedia es que ese mirar hacia las estrellas implica un desprecio de la vida
ordinaria y de las personas comunes.
Sólo le interesa la quinta esencia de la vida, el elixir de la existencia, el significado
último…esa “espiritualidad” le aleja paradójicamente de ser espiritual y al
empobrecerlo afectivamente y al alejarlo de la compasión.
Proceso de cambio
Se cae en cuenta de que se vive bajo una especie de “efecto sordina”: se está
en el mundo apagado, deprimido, las cosas resultan apagadas, iguales,
repetitivas, sin futuro ni proyecto. Se podrían hacer cosas, pero no se hacen, se
podría dar una respuesta, pero no se da.
Es también muy útil saborear el vacío de haber logrado lo que deseábamos,
conocimientos, reconocimiento…, y ver que no satisface el hambre íntima de
amor y contacto.
Indicadores de transformación:
Se acorta el diálogo interior: las explicaciones y racionalizaciones que implican
una demora de la acción.
Se abandonan las elucubraciones. Se confía menos en las teorías y en la
acumulación de conocimientos.
Ya no nos imaginamos solos ante la vida y vamos dando más espacio al
encuentro, a la convivencia y a la familia.
Van aumentando las relaciones de amistad paritaria en vez de las de “maestro
experto”.
Ya no nos sacrificamos ni sacrificamos a otros en el altar del Tótem.
Se comprende que “puede que no estemos siempre en la verdad” y se acogen
otras formas de ver la vida.
Se empieza a cuidar el cuerpo y a poner atención en su aspecto estético.
Jugar, pasear por el campo, gozar, trabajar…, se convierten en las cosas más
naturales de la vida y no una contradicción con la propia búsqueda de
realización.

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SUBTIPOS SEIS

E6 CONSERVACIÓN:
CALOR
El más emocional, tímido e introvertido, indeciso, vacilante, sumiso, inseguro.
Combinan una visión del mundo muy negativa con una personalidad cálida y
positiva. Buenos trabajadores, disciplinados. Serviciales con sus jefes, aunque
internamente tienen un punto de rebeldía. Se relacionan con las personas de
forma cálida y afable. Ese es su medio para conseguir las cosas: calor, cercanía,
dulzura…, usan el humor y el encanto. Suelen hablar bien de la mayoría de la
gente. En las relaciones “aparentan” ponerse por debajo del otro. Es el más
exteriormente miedoso. No le sale decir que esto es blanco o negro. Se necesita
mucho valor para decir que algo es blanco o negro. Trata constantemente de
ponerse a salvo y lejos del peligro. Cuando sienten miedo de otras personas
tienden a sonreír y a mostrarse cálidas.
Se trata de un eneatipo que necesita mucha protección. Su pasión característica
es la necesidad de contar con algo parecido a la amistad: un calorcito. Lo que
les caracteriza es esa búsqueda de calor. Sentir el abrazo de una familia, estar
en un hogar cálido, en un ambiente familiar donde no haya enemigos. Busca
personas que le puedan proteger.
El calor describe el estilo de autoconservación del Seis. Son cálidos, amistosos,
afables, haciéndose agradables a los demás como una forma de asegurar su
supervivencia. Colaboradores, con buena disposición y buen humor.
El término que utiliza Ichazo para este subtipo es afecto, lo que indica que esto
es lo que ellos consideran que es la clave para su conservación.
Proceso de cambio
Uno toma consciencia de que cabeza y corazón están separados y de que el
instinto, tan desconocido y amenazante está asociado a “lo malo”.
Hay una gran desconexión con uno mismo que hace que uno no se dé cuenta
de lo que le afecta, de la tensión interna en la que vive, hasta un tiempo después.
Se tiene la sensación de ser “un fraude” al sentir por dentro algo muy diferente a
lo que los demás ven por fuera.
Caigo en la cuenta de que soy yo el que ofrece la mano y protege al otro, en
primer lugar, para garantizarme una compensación futura en caso de necesidad.
La culpa se dispara automáticamente, con mucha frecuencia con el consecuente
malestar y miedo al castigo. Aunque todo esté en orden, uno internamente se
siente “culpable de algo”.

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Comprender todo esto abre la posibilidad de cambios más profundos.
Indicadores de transformación:
Se puede empezar a percibir y a expresar lo que le que siento/pienso/veo sin
que pase mucho tiempo.
Puedo identificar el miedo al atender a las sensaciones físicas que se producen
en mi cuerpo (ya no lleno mi mente de razonamientos que enredan, confunden
y desvalorizan).
Soy capaz de cortar relaciones sin pensar que “estoy en peligro” por haber
dejado de ser amable.
Al permitirme sentir el miedo, sin eludirlo, también puedo tomar decisiones.
Aunque con miedo, estoy aquí y hago lo que puedo.
Soy consciente del tabú de no destacar, de no hacerme muy visible. De la
creencia irracional de “si aparezco, me van a cortar la cabeza”.

E6 SEXUAL:
FUERZA
Este es el subtipo contrafóbico de los E6. Se enfrenta al miedo como sistema de
defensa. Por eso se llama “Fuerza” a esta necesidad neurótica. La imagen es la
de un “perro ladrador”, no siempre muerde, pero su aspecto es feroz, capaz de
intimidar.
Es el más activo de los subtipos E6. Buscan ganar seguridad en el cumplimiento
de sus objetivos. Les gusta impresionar al otro con sus acciones. Quieren que
se les valore por lo que hacen. No les gusta reconocer que tienen miedo, lo
disimulan con una actitud fuerte y temeraria. Creen que, si se muestran fuertes,
y con aspecto intimidante, no serán atacados. La mejor defensa es un buen
ataque. En relación con la autoridad, proyectan en ella sus miedos desafiando y
luchando contra ella.
La fuerza se cultiva, a menudo, a nivel físico, dedicando tiempo a deportes o a
experiencias físicas para sentirse fuertes muscularmente, resistentes a la
fatiga…
Los Seis Sexuales tienen una actitud subyacente de inseguridad respecto a su
atractivo sexual y su capacidad de provocar deseo. Básicamente temen no ser
amados, y aquí es donde su pasión del miedo se muestra con más fuerza. Tienen
miedo de realizar un contacto íntimo con el otro, e intentan esconder su miedo
mediante la exageración de su fuerza (en los hombres) y de su belleza (en las
mujeres).

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Proceso de cambio
El primer paso es difícil: reconocerse E6 es reconocer el miedo como motivación
subyacente a su comportamiento y darse la posibilidad de sentirlo, cuando para
el E6 sexual, ser descubierto como miedoso significaría reactivar la sensación
de indignidad e inseguridad que trata de esconder a través de su pasión
específica: la fuerza.
También resulta muy difícil reconocer la acusación como filosofía de vida. Se
parte de una desconfianza de base en relación al otro, del que piensa que
seguramente le hará daño o le engañará. Acusando al otro de ser culpable, se
asegura de no ser señalado como malo, y, por lo tanto, culpable.
Es difícil reconocer cómo la acusación del otro permite preservar la parte buena
de sí y se encubre la profunda creencia de ser el verdadero reo, el verdadero
malo.
Indicadores de transformación:
Experimento que el único camino para deshacerme de la angustia de la vida es
la acción. La angustia desaparece cuando actúo (no cuando he actuado “bien”).
Puedo caer sin morirme y sin hacerme daño.
La reconquista de lo artístico es una de las etapas esenciales de la
transformación. Superar la vergüenza de ser un creador de arte significa
mostrarse, exponerse, reconocer el propio derecho a ser un vehículo de
creatividad.
La reconquista de la capacidad seductora y erótica es otro hito. Ser seductores
y sensuales significa acercarse al otro en vez de oponerse a él. Puedo abrirme
al otro sin preguntarme si este es confiable, disfrutando simplemente de la
oportunidad del placer, del amor y del afecto.

E6 SOCIAL:
DEBER
Es lo que Claudio Naranjo llama un “carácter prusiano”: frío, formal. Con gran
amor por la precisión e intolerancia por la ambigüedad. Sabe cuál es la línea que
tiene que seguir y lo hace de un modo muy eficiente.
Es el más intelectual y frío. Les cuesta conectar con su rabia. Ponen su confianza
y apoyo en una causa o grupo en el que creen. Leales, obedientes y devotos de
los de su grupo. Se muestran agradables y firmes para dar el mensaje de que
son amigables y seguros. Tienden a defender la ideología de su grupo y a
complacer a este y al líder. Siempre cuentan con un sentimiento ambivalente con
la autoridad, suelen obedecerla, pero la cuestionan. Busca en el ámbito social la
seguridad a través de sentirse afiliado a organizaciones o grupos donde se

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sienten protegidos al considerar que ahí integrados pertenecen a una fuerza
mayor. Se defienden del miedo cumpliendo las normas. Por su rigidez en el
cumplimiento de las normas y por exigir a los demás que las cumplan, se les
llama “deber” o “prusianos”.
Para un Seis Social, realizar adecuadamente lo que considera que es su deber
social es la única manera de ser.
Si quisiera “humanizarse” debería de olvidar el deber y conectar con el instinto y
con la intuición, con la vida.
Proceso de cambio
Saberme, reconocerme y aceptarme cobarde.
Me planteo ejercicios para enfrentar el miedo, para expresar mi desacuerdo con
alguna autoridad o para fallar de manera intencionada en alguna
“responsabilidad”, como llegar tarde a una reunión.
Practico el amor compasivo conmigo mismo para curarme la autoexigencia y la
autocrítica.
Comprendo que es importante aprender a actuar de forma inmediata para no dar
tiempo a que la duda aparezca (y así tampoco aparece la ansiedad).
Indicadores de transformación:
He soltado la necesidad de ser perfecto.
Aprendo a tolerar la incertidumbre.
Ya no me obsesiona que todo tenga que hacerse bajo mis códigos o puntos de
vista.
He disminuido el enjuiciamiento constante a los demás. Ya no necesito rebajar
o restarle autoridad a nadie para sentirme valioso.
He podido soltar la creencia de que “todo va a ir mal”.
Siento un profundo bienestar, gusto y alegría por ser como soy. Confío en mí.

SUBTIPOS SIETE

E7 CONSERVACIÓN:
FAMILIA
Es el más frío y duro de los E7. El menos soñador y el más práctico. Sin
problemas para pasar a la acción. Es aquella persona que hace alianzas y

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buenos tratos. El problema es que el propio interés, el egoísmo está detrás de
estas alianzas, aunque parezca negado.
El E7 conservación dedica su vida a la búsqueda y restauración de ese estado
paradisiaco primigenio, de esa “familia-mafia” en la que ocupó un puesto de
privilegio tácito.
Tiene tendencia a agruparse con un círculo cerrado de personas por la facilidad
de obtener así más beneficios personales, como en una pequeña mafia. “Yo
seré familia para ti y exijo que seas familia para mí”.
Aun cuando son defensores de su grupo, no se sienten atados a él (como sí le
sucede al E7 social). Su gula se manifiesta sobre todo en el disfrute de lo
material: objetos, experiencias…
Pareciera que con el E7 conservación no hay ninguna conversación que no lleve
a un negocio. Les encanta estar siempre trapicheando y haciendo pequeños
negocios. Con un punto de oportunista y tramposo, tiene buen olfato para sacar
siempre provecho y dinero. Piensa que, si no estás alerta para captar las
oportunidades, serás un perdedor,
Los E7 conservación intentan asegurarse su supervivencia asociándose y
cuidando de aquellos por los que sienten que tienen una afinidad o una conexión.
Se convierten en patriarcas, cuidando de su amplia “familia”.
Proceso de cambio
Caigo en cuenta de mi tendencia a “salirme siempre con la mía”, de toda la
energía que gasto en controlarlo todo y manejarlo sin que se note.
Caigo en cuenta de mi constante búsqueda de “anestesiarme” rodeándome de
gente, con actividades o con sustancias.
Veo la creencia tan arraigada irracionalmente en mí de que “en realidad, no hay
buena ley”. Así que todo vale, todo está permitido.
Veo que es falso que todos dependen de mí (soy tan bueno y generoso, ayudo
tanto…). Soy yo el que dependo de ellos.
Indicadores de transformación:
Soy capaz de distinguir deseo de necesidad.
Soy más flexible, menos radical en la dicotomía “esto sí/esto no.
La rutina me da paz (sabiendo que me puedo escapar de ella).
Empiezo a poder permanecer con las cosas tal y como son: a estar en paz con
“esto es lo que hay”.
Puedo comprometerme con una tarea y llevarla a término.

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Comprendo que los límites pueden ser saludables.
Comprendo que no “todo es mentira así que…” Que no todo vale.
Comprendo que todos queremos ser respetados.

E7 SEXUAL:
SUGESTIONABILIDAD
El E7 sexual es un soñador que no está interesado en las cosas de este mundo.
Es la gula de las cosas de un mundo más alto y avanzado. Mira las cosas con el
optimismo de aquél que está enamorado. Tiene una gran imaginación para
buscar novedades con las que huir del aburrimiento de lo cotidiano y rutinario.
Tienden a adornar y embellecer la realidad para que sea más placentera,
llegando en ocasiones a tener dificultades para distinguir la realidad de sus
fantasías.
Son enérgicos, ingeniosos, con gran deseo de acercarse a los demás y de
conocerlos, aunque a veces los tengan como un medio para combatir el
aburrimiento. Con gran habilidad para sugestionar y convencer con su palabrería
también tiene gran facilidad para autosugestionarse a sí mismos. Cambian muy
fácilmente de actividad o de plan, entusiasmándose rápidamente con algún
nuevo proyecto que abandonan con la misma rapidez al ver sus dificultades.
Huyen del aburrimiento y de la monotonía también en sus relaciones íntimas.
Los Siete Sexuales tienden a fundirse con cualquier idea, plan o persona con la
que contacten. Por tanto, son fácilmente influenciables, sobre todo por su pareja
o por alguien por quien se sientan atraídos. La perspectiva de tener una relación
con alguien dispara su tendencia a planear y programar, y la relación se ve
proyectada fácilmente hacia el futuro, con infinitas posibilidades asomando sobre
el horizonte. Por tanto, son sugestionables en el sentido de ser fácilmente
influidos e impresionados, y en el de verse enseguida impulsados a crear
infinidad de fantasías sobre una relación.

Proceso de cambio
Empiezo a desconfiar de mi propio raciocinio, del apego a las fantasías. De la
búsqueda de la intensidad y del “extra” en todo. Empiezo a diferenciarlas de la
realidad.
Empiezo a cansarme de dar un aspecto hacia los demás de despreocupación,
de payaso, como si no me afectara nada.

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Caigo en cuenta que la creencia sobredimensionada de que puedo con todo
oculta en realidad lo poca cosa que me siento y el malestar que conlleva.
Mi ensueño recurrente de un idílico y prometedor futuro en el que todo será
tranquilidad, paz y felicidad, tomo conciencia de que, o es aquí y ahora, o no
llegará nunca.
Caigo en cuenta del alto coste emocional que pago al considerar el mundo como
un gran mercado de extraordinarias ocasiones que hay que aprovechar y
disfrutar. La excitación y el entusiasmo se convierten en frustración y ansiedad
al no poder abarcarlo todo y tener siempre que renunciar a algo.
Indicadores de transformación:
Tengo menos ruido mental con las multiposibilidades, planes, oportunidades,
ideas excitantes…
También tengo un mayor silencio externo, menos necesidad de exteriorizar todas
esas maravillosas ideas. Hablo menos.
Planifico menos. Tengo menos necesidad de estrategias anticipatorias.
He ido perdiendo ese sacarle el punto humorístico a todo.
Soy capaz de sostener todas esas emociones desagradables (dolor, frustración,
desánimo…) sin manipularlas.
Puedo enfocarme en una actividad, llegar al fondo, profundizar y finalizarla.
Tengo más disciplina.
Puedo permanecer más tiempo quieto, sin moverme en un mismo lugar y con
una misma actividad. Deja de haber tantos frentes y actividades simultáneas.
Llego, incluso, a buscar más espacios sin rellenar, tiempos muertos sin actividad
externa ni interna,
Descubro la quietud como ese lugar íntimo en el que me puedo parar, estar sin
hacer nada y descansar. Esa quietud que conecta con el “todo está bien, nada
me falta, no hay que hacer nada”.
Nace una especie de honestidad y transparencia con uno mismo y con el mundo.

E7 SOCIAL:
SACRIFICIO
Es el contratipo siete en el sentido en que es difícil reconocer en él la pasión de
la gula por cuanto se esfuerza en esconderla con un comportamiento altruista
que “debería de purificarlo”.

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Es el más intelectual de los E7. También el más servicial, amable y generoso.
Con buenas habilidades sociales, suelen ser entusiasta e idealistas. Les suele
gustar ser defensores o luchar por alguna causa de tipo social, ecologista,
reivindicativa…Ese compromiso con las personas o con causas sociales, tiene
muchas recompensas egoicas (aprecio, reconocimiento, buena imagen…) pero
a la larga, les asfixia y les hace sentirse encerrados y sin posibilidad de disfrutar
de otras opciones.
“Sacrificio” es un aplazamiento de los deseos propios ante un ideal. También se
denominan “sacrificio” por el esfuerzo que hacen para obtener la imagen social
que desean. Tienen una gran gula de reconocimiento de su sacrificio. Ansían
que los demás les vean como buenos.
Siempre luchando entre el deber hacia una causa y el deseo de escapar. Se
sienten responsables de las personas de su entorno experimentando eso como
una carga que les ata. También esconden un pequeño “tramposo interno” que
intentan ocultar para ser vistos como “buenos”. Tienen mala relación con la
autoridad.
Los Siete Sociales se caracterizan por la renuncia a su libertad y aspiraciones
personales en función de los ideales sociales. Tienen una profunda sensación
de obligación hacia los demás y sienten que se deben sacrificar para cumplir lo
que ellos consideran son “sus responsabilidades”.
El E7 social oculta el interés propio tras un aire de amistosa hermandad.
Proceso de cambio
El camino pasa por ir disolviendo la compulsión de “niño bueno”, atravesando
dos escollos internos: la culpa y el egoísmo.
La culpa está proyectada culpando a otros por su falta de compromiso y
dedicación (con lo que yo he hecho…) o recriminándose a sí mismo por ingenuo
e iluso al esperar tanto del género humano.
Ahora empieza a desconfiar de sus propias intenciones, a sentirse bastante
miserable y a hacerse un lío entre lo que es altruismo y/o egoísmo.
Se empieza a reconocer la comodidad, la flojera, el narcisismo y el hambre de
reconocimiento y de amor tan insaciable.
La vía saludable para un E7 social es despenalizar el egoísmo y empezar a
amarse a sí mismo, legitimando sus necesidades reales en vez de disfrazarlas
fraudulentamente.
Indicadores de transformación:
Se va cayendo el idealismo (mezcla de ilusión, buenas intenciones,
ingenuidad…) que funciona como una droga intelectual para la acción. El temor

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a dejar de moverse por ideales es el de caer en la apatía, perder el combustible
que le permite intervenir en el mundo, existir socialmente, ser reconocido.
En el fondo late un hondo pesimismo hacia uno mismo, hacia las personas y
hacia el mundo.
Dejo de querer ser el salvador o ayudador permanente del otro, que tiene sus
propias responsabilidades. Entiendo que el mundo puede funcionar sin mi
presencia.
Entiendo mejor mi necesidad de ser querido, el miedo a no hacer lo que se
espera de mí.
Puedo mirar compasivamente la necesidad que tengo de que se valore lo que
hago.
La actividad compulsiva deja de tener sentido, las cosas se simplifican ayudando
a la experiencia de ser.

SUBTIPOS OCHO

E8 CONSERVACIÓN:
SATISFACCIÓN, EL SUPERVIVIENTE
La palabra que le corresponde “satisfacción” en el sentido de “esto tiene que ser
mío y tengo que tenerlo”. Persecución de la satisfacción de sus necesidades e
intolerancia a la frustración. No suele hablar mucho. No hay juegos de palabras
en un E8 conservación.
Sabe cómo sobrevivir en las situaciones más difíciles, cómo conseguir cosas,
cómo salirse con la suya. Se trata de un superviviente. Si bien es un término que
describe a todos los E8, es más indicativo del E8 conservación.
Es el subtipo más duro, más territorial y menos ruidoso. No tienen interés en dar
ninguna imagen especial y no les importa en absoluto lo que piensen de ellos.
Menos sociables y más hogareños que los otros subtipos. En el hogar mandan
con estilo dominante. Trabajadores incansables, viven en una eterna lucha por
tener más, intentando asegurarse de que nunca les pueda faltar nada. Pone
mucha energía en ser independiente mediante la posición jerárquica y la
seguridad financiera. Es el estereotipo de “hombre que se ha hecho a sí mismo
y creado su propia empresa”.
Los E8 conservación se concentran en lo que creen que les proporcionará la
satisfacción de sus necesidades, y engullen lo que creen que precisan, a menudo

63
a expensas de satisfacer sus verdaderas necesidades. De manera que el
impulso hacia la satisfacción apenas deja espacio para averiguar qué es lo que
realmente requieren. Su inseguridad respecto a la autoconservación se
manifiesta en dominar y controlar los comportamientos alrededor de lo que ellos
consideran su territorio, o en lo que respecta al mantenimiento y sostén.
Proceso de cambio
Comprender que hay algo más que lo puramente material y físico. Que la vida
va más allá de lo que se percibe sensorialmente.
Comprender que el amor existe, aunque sea una experiencia completamente
desconocida para nosotros.
Se trataría de llegar a la convicción de que el mundo y las personas no nos
pertenecen y no están a nuestra disposición.
Reconocer el derecho a la propia vida de los demás y confiar en su generosidad.
Entender que quizá, a veces, los otros tengan razón y que no siempre vayan
cargados de intenciones malvadas.
Indicadores de transformación:
Reconozco el dolor que me he causado y que he causado a los demás y no
quiero volver a pasar por ahí.
Tengo conciencia, en el presente, de las consecuencias que mis acciones
pueden tener sobre los demás.
Puedo detener la compulsión de la acción para ver qué es lo que
verdaderamente necesito y quiero.
Soy capaz de dejar que los demás me vean desprovisto de “mi poder”, como un
ser limitado y normal.
Dejo atrás la rebeldía. Rebeldía contra lo externo (necesidad de dominar la
realidad) y contra mí (estar cansado no es estar enfermo, ni estar enfermo es de
débiles…)

E8 SEXUAL:
POSESIÓN
El más intenso, desafiante y rebelde de los E8. También es el más provocativo.
Hace ostentación de que sus valores son diferentes a la norma. El impulso a
violar normas y leyes hace que no tengan sentido del límite ni de la moral.

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La “posesión”, en este caso, se circunscribe a agarrar al otro: el E8 sexual es
muy posesivo en sus relaciones. También tiene que ver con tomar posesión de
la escena entera: siempre quiere ser el centro, fascinante y seductor.
En relación a los otros subtipos, el E8 sexual es el más emocional. El E8
conservación es pura acción y el E8 social es el intelectual.
Les gusta ser y aparecer ante los demás como “el malo” despreciando a los que
muestran debilidad. Muy desconfiados, le dan mucha importancia a sus
relaciones más cercanas a las que ponen constantemente a prueba por si “son
traicionados”. Tendencia a la posesividad y al control con aquellos a los que
quieren. La pareja tiene un rol principal en sus vidas.
Tanto los hombres como las mujeres E8 sexuales tienden a poseer y a controlar
a sus parejas. A pesar de que suelen ser abiertamente dominantes, esto es un
intento de tapar su inseguridad respecto a ser amado y deseado. Tanto los
hombres como las mujeres ocho sexuales ven la relación como una conquista y
desean tener el poder en la relación para no tener que ser vulnerables y
dependientes. Cualquier tentativa del otro por moverse independientemente se
vive como un acto de agresión, como una traición a la protección que ambos se
han prometido.
El objetivo más difícil de alcanzar para un E8 sexual es creer que puede ser
amado y que puede ser capaz de amar.
Proceso de cambio
Percibo que las cosas no pueden ser afrontadas “a hierro y fuego”.
Me sorprendo al tomar conciencia de cómo la venganza es mi respuesta a todo
lo que no está de acuerdo con mi voluntad.
Me sorprendo cuando me consideran frío e insensible (siendo tan fogoso, sincero
y auténtico).
Caigo en la cuenta de que la operación de privar a los demás de su humanidad
(al considerarlos sólo objetos para mi propia autosatisfacción) es lo mismo que
hago conmigo: me percibo sólo como un cuerpo físico en acción cortando
cualquier relación con el mundo interior.
Indicadores de transformación:
Me siento más calmado, más tranquilo. Menos exigente conmigo y con los otros.
Me siento una persona mejor.
Soy capaz de renunciar a la atribución de “malo” que es mi núcleo identitario.
Puedo desarmarme, aunque esto suponga ponerme en una situación de
vulnerabilidad.

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E8 SOCIAL:
AMISTAD, COMPLICIDAD
Es una especie de “social antisocial”. Una persona que está en contra de las
normas sociales, un rebelde. Peros, en este caso su rebeldía surge de la
solidaridad. Resuena con la frase “tronar ante la injusticia”.
El más simpático y benevolente de los E8. Les gusta estar en grupos en los que
tienen una posición de poder. Defensores de los más débiles, a veces son muy
posesivos con el “control” de sus “defendidos”. Les gusta juntarse con otros
“rebeldes” para luchar contra las normas, el sistema o lo que sea. Conciben la
amistad como pactos de protección mutua. Que todos se beneficien de la
cohesión grupal. La amistad y la lealtad son valores muy importantes para este
subtipo.
Los E8 sociales intentan resolver su sensación de no pertenencia manteniendo
amistosas relaciones sociales. Ser un “colega” es lo que este subtipo considera
como la clave para resolver su inseguridad social. El “amigocho” establece
pactos que son hasta la muerte, complicidades que exigen absoluta lealtad. Aquí
la amistad es un lazo profundo, que implica una confianza y una lealtad eternas,
una sensación de fraternidad y de pertenecer a la misma banda.
Proceso de cambio
Quizás no todos te quieran matar, ni todos te quieran hacer daño…
Entiendo que entra más la palabra dulce que la sátira.
Siento que tengo derecho a mi parte salvaje, la honro y reconozco. Sólo tengo
que cuidar que esa parte no haga daño a otros.
Me ayuda la aceptación de quien en verdad soy.
Voy “volviendo a casa”, dejando atrás las heridas, liberando a mis rehenes
psicológicos.
Indicadores de transformación:
Empieza a haber situaciones que me inspiran más compasión que rebeldía.
Puedo mantenerme “presente” aunque me aburra la situación.
Puedo retirarme al mundo interior. Puedo estar quieto y meditar.
El que se aparta no es amigo, pero, ahora, ya no lo siento como enemigo.
Soy capaz de aceptar los límites.
Soy capaz de respetar a los demás.

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SUBTIPOS NUEVE

E9 CONSERVACIÓN:
APETITO
Es el subtipo más fuerte. Suelen tener cuerpos grandes.
La figura de Sancho Panza es un ejemplo literal de E9 conservación.
Es el que tiene un mayor contacto con sus necesidades y el que menos se deja
llevar por otras personas. Priorizan mantener un estado de relajación interior
evitando cualquier cosa que intuyan pueda interrumpirlo. Se intentan alejar de
los problemas del mundo buscando la comodidad en todo lo que hacen. Tienen
su propio ritmo y su propia filosofía de vida. Les gusta “consumir” actividades:
comida, lectura, televisión, teatro… en este consumo llenan su tiempo para
impedir que aparezca la “incomodidad” o sufrimiento. Son los más propensos a
pasar tiempo a solas cumpliendo con el estereotipo del perezoso tumbado en un
sofá comiendo, bebiendo y viendo la tv.
El foco de atención del E9 conservación es la satisfacción de sus apetitos y de
su hambre. La pereza, en el sentido que la hemos definido como pasión, se
manifiesta aquí, en sustitución de lo que realmente necesita, por satisfacciones
no esenciales. En el nivel más profundo, esto se manifiesta al sustituir las
gratificaciones realmente espirituales por gratificaciones materiales.
Es como si los hechos de la vida, todo lo ordinario tuviera la capacidad de obstruir
su conciencia y no existiera un nivel metafísico. De alguna manera, la pregunta
sobre el ser ha sido borrada de la vida de un E9 conservación.
Son personas muy amorosas, llenas de alegría y ternura, pero en lo más
profundo no tienen la sensación de ser amados. Su resignación es lo más
prominente.
Para un E9 conservación, lo más difícil es admitir que el otro tiene razón. Siempre
hay un “pero”. No está de acuerdo, está incómodo, pero antes de entrar en
contacto con la rabia o admitir su desacuerdo, se autoproduce confusión y niebla
intentando así distraerse y distraer a los demás. La confusión y la niebla
empañan la parte intuitiva del cerebro.
Una forma de contacto eficaz con un E9 conservación es el abrazo. Eso le
devolverá a la certeza de la vida terrenal después de un viaje a eso desconocido
que encuentra en su interior.
Proceso de cambio
Es imprescindible comprender la capacidad de perderse como forma de defensa.

67
Caigo en cuenta de que prefiero ser una máquina en “stand-by” que equivocarme
y crear problemas. El control remoto se lo dejo a otros.
La palabra “indolencia” es una pista para adentrarse en el propio laberinto sin
perderse.
Indicadores de transformación:
Ya no pienso: “estoy solo, de todas formas, tengo que hacerlo solo, no puedo
pedir ayuda, pedir tiempo para mí es crear problemas”.
La intuición y la creatividad son los instrumentos con los que puedo sustituir el
actuar compulsivo y la inercia.
Lograr en solitario una síntesis de uno mismo, es una gran conquista.
Puedo sentir y manifestar libremente mi aspecto dionisiaco.

E9 SEXUAL:
FUSIÓN, SIMBIOSIS
El E9 sexual experimenta la necesidad de ser a través del otro, de la fusión con
otra persona porque no consigue situarse sobre sus propios pies. Una verdadera
unión requeriría que dos personas caminaran sobre sus propios pies antes de
encontrarse. En este caso se produce una especie de sustitución. Esto les hace
ser personas muy cariñosas.
Es el más imaginativo y fantasioso de los E9. También son los más dulces y
emotivos.
Se les llama fusión por su búsqueda del bienestar uniéndose con el otro en una
auténtica simbiosis entregándose totalmente como si no tuviesen deseos
propios. Viven la vida a través del otro evitando prestar atención a sus
necesidades.
Tienen altas expectativas en relación a la pareja, esforzándose por buscar la
“pareja correcta” en un ideal de unión romántica.
Los E9 sexuales están impulsados por el deseo del amor de otro y de una unión
total, lo que les parece la clave de su felicidad. La fusión total con otro es vista
como lo que necesitan para sentirse completos. Tienden a fundirse fácilmente
con los demás, traicionando sus necesidades y perdiendo el contacto con ellos
mismos en el proceso
Proceso de cambio
Caigo en cuenta de mi gran problema de identidad, de mi completa falta de
estructura.

68
Veo como soy yo la que establezco siempre relaciones de dependencia que me
cuesta mucho romper aun cuando sean muy poco satisfactorias en todos los
aspectos.
Veo que no sé recibir ni dar. Yo no existo, no aparezco, no tengo derecho.
No reconozco mi fragilidad ni mi vulnerabilidad. Puedo con todo. Me cargo todo.
Veo que, sin hacer un trabajo interior, no tengo ninguna posibilidad.
Indicadores de transformación:
Puedo decir lo que quiero y no quiero. Puedo tomar del mundo lo que necesito y
a reconocer qué es lo que no necesito.
Tengo buena relación con el dinero y la abundancia. Una relación de confianza
y merecimiento.
Comienzo a tener sensación de pertenencia.
Veo a los otros y los otros me ven.
Puedo quererme y querer a otros con total aceptación, sin juicios.

E9 SOCIAL:
PARTICIPACIÓN
Es un “bonachón”. Es el más sociable, afable y extrovertido de los E9.
Son muy activos, orientados a las tareas, trabajan en proyectos y actividades
significativas para los demás. La participación es el medio que usan para
interactuar con el mundo. Lo hacen participando en algún grupo adormeciendo
y olvidando sus propias necesidades mientras priorizan las de este. Le dan
importancia a que haya armonía en el grupo y son muy hábiles mediando entre
las partes en conflicto. Eso les convierte en buenos líderes, generosos y
sacrificados ante cualquier tipo de responsabilidad.
Su máximo temor es el de ser expulsados del grupo. En las situaciones sociales
no se sienten cómodos, debido a su sensibilidad respecto a si son realmente
queridos o no. A menudo sienten que no saben cómo formar parte del grupo, y
en vez de ser ellos mismos, tratan de adaptarse, imitando las formas de
comportamiento y comunicación socialmente aceptables. Su pasión es la de
hacer lo necesario para pagar el peaje que les permita estar allí. Sienten que
tienen que dar mucho, y a la vez, ser simpáticos y agradables.

69
Proceso de cambio
Una parte esencial del trabajo tiene que ver con el despertar de los sentidos, con
recuperar la capacidad para ver, oler, tocar, oír…atravesar la “piel de elefante”
que hace de barrera entre nosotros y nuestro entorno.
Caigo en cuenta de que, al estar tan desconectado de mis emociones, instintos
y experiencias, no sé realmente qué es lo que necesito a niveles tan básicos
como si estoy cansado, hambriento, tengo frío o calor…
Me sorprendo al descubrir hasta qué punto yo soy generador de conflictos por
mi tendencia a “no mirar”, a “no darme cuenta”.
Veo que trabajo mucho para el grupo, pero, en última instancia me gusta que las
cosas se hagan a mi manera. No confío, tengo que supervisarlo todo e intervenir
en todo.
Veo que no tengo buen equilibrio entre el dar y el recibir. La balanza está
descompensada y no entiendo el rechazo que genera mi excesiva dadivosidad.
¿Cómo es posible?
Indicadores de transformación:
Entiendo que todos los conflictos que hay a mi alrededor son parte de la vida y
algo normal en la interacción humana.
Soy capaz de expresar enfado o desacuerdo y defender y mantener mi punto de
vista.
Entiendo que querer controlarlo todo es irracional e imposible. Todo está bien.
Puedo participar con otros sin sentir que tengo que hacer un trabajo extra, siendo
uno más.
Ya no estoy disponible todo el tiempo para todo el mundo.
Soy más selectivo en mis relaciones. Busco relaciones de más calidad, más
profundas.

70
EL CAMINO DE RETORNO AL SER

En este camino, encontramos varios denominadores comunes válidos para


todos los eneatipos:

-Aprender a conectar con las necesidades esenciales propias.

-Aprender a conectarse con el cuerpo y con las sensaciones físicas. Puede ser
a través de masajes, del baile, de hacer teatro…

-Aprender a poner límites, para uno y para los demás.

-Comprender la necesidad de tener tiempo no calendarizado.

-Aprender el arte de parar para hacer “nada”.

-Meditar (permanecer en silencio) permite la conexión íntima, rompe


automatismos y frena la compulsión.

ACTITUDES Y PUNTOS DE VISTA “SANADORES” PARA LOS


DISTINTOS ENEATIPOS

1- Esa persona podría tener razón. Quizá alguien podría tener una idea mejor.
Tal vez ya he hecho todo lo que podía hacer.

2- Quizá podría dejar que esto lo hiciera otro. A lo mejor esa persona me
demuestra su cariño a su manera. Podría hacer algo bueno para mí también.

3- Tal vez no necesito ser el mejor. Es posible que me acepten tal como soy.
Quizá no es tan importante lo que piensen de mí.

4- A lo mejor, no hay nada malo en mí. Tal vez los demás sí me comprenden y
me apoyan. Tal vez no soy el único que se siente así.

5- Quizá podría confiar en las personas y hacerles saber lo que necesito. Tal vez
podría vivir feliz en el mundo. Tal vez irá bien mi futuro.

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6- Esto podría resultar estupendamente. Quizá no es necesario que prevea
todos los problemas posibles. Tal vez podría confiar en mí mismo y en mis
juicios.

7- Quizá lo que ya tengo es suficiente. Tal vez no necesito estar en ninguna otra
parte en este momento. Quizá no me estoy perdiendo nada importante.

8- Es posible que esa persona no pretenda aprovecharse de mí. Quizá podría


bajar un poco la guardia. Tal vez podría dejarme tocar el corazón más
profundamente.

9- Tal vez sí soy capaz de influir. Tal vez necesito darme energía y participar.
Podría ser que fuera más poderoso de lo que creo.

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APÉNDICE I

A continuación, recojo unos comentarios del “Libro de Escuela” (Canarias 1976),


respecto a nuestra clasificación de los tipos en: Intelectual-Emotivo-Motriz-
Vegetativo.

Nos interesa solamente la filiación de cuatro tipos humanos grandes, que


no va a servir tampoco para mucho. Importa destacar que solamente dos
aspectos son válidos con respecto al comportamiento de un tipo humano.

Cuando hablamos de las diferencias entonces, entre las personas, esas


diferencias congénitas, esas diferencias no adquiridas, nos estamos
refiriendo a la velocidad de reacción frente a los estímulos y a la dirección
de la energía y nada más. Pag.17

Los tipos no determinan ningún carácter, no determinan la personalidad.


Pag.18

Esta es la clasificación primaria que no sirve para mucho, pero como


estamos reconsiderando cosas muy antiguas dichas, e incorporándolas a
nuestros esquemas, entonces, ha sido bueno detenerse un poco en ello.

Como ustedes ven, esto de la tipología está relacionado estrictamente con


la predominancia congénita de un centro con otro, predominancia que,
como hemos dicho, se altera fuertemente de acuerdo a las actividades
biográficas del sujeto. Pag.19

Hemos dicho que cada ser humano tiene una tendencia congénita al mayor
funcionamiento de un centro sobre los otros centros, lo que configura una
suerte de tipología, nos permite hablar de una tipología provisoria, que no
determina en absoluto ni el carácter ni el temperamento, pero que es un
dato de comprensión sobre el sujeto, que este sujeto modifica
considerablemente su tipo humano por su proceso biográfico.

(Libro de Escuela, Canarias, 1976, págs. 17-20).

En mi opinión, los eneatipos antes mencionados tendrían cierta relación con lo


que nosotros llamamos núcleo de ensueño, y ensueños compensatorios. Así
podemos leer en la página 26:

73
Ejemplos de núcleo son: un permanente sentimiento de culpa, por ejemplo.
Un señor tiene un permanente sentimiento de culpa. Él no ha hecho
ninguna cosa, o sí, pero lo que él experimenta es este estado de culpa, él
se siente culpable, siempre anda por los rincones. Eso no es una imagen,
él no tiene ninguna imagen, él experimenta una cosa.

El sentimiento trágico del futuro, por ejemplo. Todo lo que va a pasar va a


salir mal. ¿Por qué?, no se sabe. Un sentimiento continuo de opresión, él
está oprimido, él dice que no se encuentra consigo mismo, por ejemplo. El
dónde está, siente que las cosas se le vienen encima. Claro, no todos estos
núcleos son negativos, pero ponemos énfasis en lo negativo porque es más
dramático, impresiona más el registro de los escuchas.

Bueno, muy bien. Estos núcleos permanecen fijados durante años,


apareciendo los ensueños compensatorios a tales núcleos. Durante largo
tiempo estos núcleos están operando. Y entonces van dando lugar al
nacimiento de estos ensueños compensatorios.

Así, por ejemplo, si el núcleo que presiona constantemente es parecido al


sentimiento de abandono, si este sujeto se encuentra abandonado, si este
sujeto se encuentra desprotegido, si experimenta ese sentimiento de
desprotección y de abandono, es muy probable, aunque no es seguro, es
muy probable que surjan ensueños compensatorios de adquisición, de
posesión, etc., y que estas imágenes guíen las actividades del sujeto.

Así que por ahí encontraremos a muchas gentes ávidas, a muchas gentes
excesivamente ambiciosas, a muchas gentes que están orientadas y
lanzadas a adquirir gran cantidad de cosas, seguramente encontraremos a
mucha gente de ese tipo, que, en realidad, movida por esas imágenes
adquisitivas, etc, por aquello que les hace ver en el futuro gran seguridad,
cuando en realidad está trabajando en el fondo de ellas un núcleo de
desposesión, un núcleo de pobreza interna, un núcleo de abandono.

Pero ¿cómo experimenta esa desposesión y ese abandono? lo


experimenta como sentimiento, lo experimenta como clima. Este clima está
moviendo las cosas. Y estos ensueños que compensan la actividad de ese
núcleo, estos ensueños son los que van a guiar en una dirección
determinada.

(Libro de Escuela, Canarias, 1976, pág. 26).

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APÉNDICE II

INTERPRETACIÓN EL TEST RÁPIDO DE IDENTIFICACIÓN EN EL ENEAGRAMA


(TRIE)

CÓDIGO TIPO NOMBRE Y CARACTERÍSTICAS PRINCIPALES

AX 7 El entusiasta. Optimista, hábil, impulsivo.

AY 8 El desafiador. Seguro, decidido, dominante.

AZ 3 El triunfador. Adaptable, ambicioso, consciente de su imagen.

BX 9 El pacificador. Receptivo, tranquilizador, complaciente.

BY 4 El individualista. Intuitivo, esteta, ensimismado.

BZ 5 El investigador. Perceptivo, innovador, objetivo.

CX 2 El ayudador. Humanitario, generoso, posesivo.

CY 6 El leal. Encantador, responsable, defensivo.

CZ 1 El reformador. Racional, de sólidos principios y autodominio.

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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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Alma, Barcelona, Ed. La liebre de marzo S. L., 2004
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VILASECA, Borja, Encantado de conocerme, Madrid, DEBOLSILLO, 2008.
Edición ampliada, 2019.

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