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INICIA DEMANDA POR DESPIDO

Señor Juez:

Dr. MATIAS GRIMBERG, Tº 107 Fº416 C.P.A.C.F. CUIT 20-30979881-4,


monotributista, D.N.I. 30979881, constituyendo domicilio procesal en Dorrego 675 Pº 1
“E” de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Tel.: 60911715, y constituyendo domicilio
electrónico en estudiogrimberg@hotmail.com bajo el C.U.I.T. precedentemente
denunciado, ante V.S. me presento y respetuosamente digo:

I - PERSONERÍA

Que conforme lo acredito con el acta poder que se adjunta y declaro bajo juramento que
se encuentra vigente, fui instituido apoderado del Sr. Di Serio, Pablo Miguel, quien
acredita su identidad con Documento Nacional de Identidad 27.383.810, de nacionalidad
argentina, nacido el 06 de noviembre de 1979, de estado civil soltero, con domicilio real
en la calle Quintana 4975, Virreyes, Provincia de Buenos Aires, Provincia de Buenos
Aires.

II.- OBJETO.-

Que vengo por la presente a impetrar formal demanda contra:


- CAZADORES COOPERATIVA DE TRABAJO LIMITADA, con domicilio
denunciado en la calle 24 de Noviembre 220 Pº 7 “D”, Ciudad Autónoma de Buenos
Aires.
- PRODUCTOS ROCHE S A QUIMICA E INDUSTRIAL, con domicilio denunciado
en la Av. Leandro N. Alem 986, Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Persiguiendo el cobro de la suma de PESOS DIEZ MILLONES CUATROCIENTOS


TREINTA Y SIETE MIL OCHOCIENTOS DIECINUEVE ($10.437.819) o lo que
en más o en menos surja de las probanzas de autos, con más su debida actualización por
desvalorización monetaria, intereses, gastos y costas, por las razones de hecho y de
derecho que a continuación paso a exponer. También solicito se condene a los accionados
a que me entreguen los correspondientes Certificados del Art. 80 L.C.T.-
III.- HECHOS. -

El 1 de marzo de 2016 la actora comenzó a laborar bajo las órdenes de CAZADORES


COOPERATIVA DE TRABAJO LIMITADA (CUIT 30-65896389-5), empresa del
rubro de seguridad, siendo aplicable el Convenio Colectivo de Trabajo 507/07 -
Sindicato de Vigiladores-.
La actora se desempeñaba prestando tareas de vigilancia y control de los establecimientos
de los codemandados. Como tal, la categoría laboral del actor fue la de Vigilador
Principal.
A lo largo de la relación laboral las tareas prestadas fueron realizadas principalmente para
objetivos del codemandado, a saber durante aproximadamente más de nueve años, en
todos ellos hasta su desvinculación de la Cooperativa.
Prestó tareas principalmente para las codemandadas en Esteban Echeverria 2240, Munro,
Rawson 3150, Pacheco y Otto Krause 4302-4500 de Malvinas Argentinas, todos ellos en
Provincia de Buenos Aires, entre otros para los objetivos de los codemandados.
La jornada laboral de la actora a lo largo de la relación laboral fue variando acorde a los
objetivos en que se desempeñaba, y si bien la denunciada fue de lunes a lunes de 07:00
horas a 19:00 horas, con un franco semanal. Estos horarios iban variando según a las
necesidades o directivas de sus superiores, de acuerdo a cada momento particular.
La mejor remuneración mensual neta ascendió a pesos sesenta y ocho mil.- ($68.000.-)
en el año 2022.
Durante el transcurso de la relación laboral la actora se desempeñó con total esmero y
dedicación, manteniendo un comportamiento correcto y responsable, cumpliendo además
las tareas con eficacia. Tal es así que jamás fue objeto de sanción disciplinaria alguna.
Lamentablemente, por lo que se referirá no podemos afirmar algo similar de las
accionadas. Las condiciones laborales fueron harto irregulares y fraudulentas.
CAZADORES COOPERATIVA DE TRABAJO LIMITADA, vulneró los derechos
laborales y previsionales de la actora ya que fue registrado como socio afiliada de la
misma cuando conforme a la realidad de los hechos se encontraba bajo la subordinación
técnica jurídica y económica de su empleador.
Ello es así, ya que jamás la notificaron, y por tanto no asistió a las asambleas ordinarias
ni extraordinarias como asimismo nunca fue partícipe de la distribución de ingresos
conforme al principio de cooperativismo.
Resulta llamativo que la actora haya tenido que presentar una solicitud de ingreso como
socio cooperativo ante una oficina de personal y que dentro de la solicitud debió consignar
sus trabajos anteriores a una manera de curriculum vital, como si estuviera ante una
verdadera posibilidad de obtención de un empleo, cuando lo que en teoría se debía tratar
de una simple afiliación a la cooperativa.
Además, CAZADORES COOPERATIVA DE TRABAJO LIMITADA, a quienes
ingresan a prestar tareas a firmar un telegrama de renuncia y otros papeles sin dar
explicación alguna, sino que los exige como condición para ingresar a la empresa
(distintos formularios relacionados a solicitud de ingreso como “socio cooperativo”),
todo ello en consonancia a la actitud fraudulenta de la patronal; de igual forma,
luego durante el vínculo laboral obliga a sus vigiladores a suscribir todo tipo de
documentación para mantener la fuente de trabajo aprovechándose de la imperiosa
necesidad económica.
También por decreto del poder ejecutivo nacional 2015/1994 (B.O.16-11-1994), se
dispuso que el Instituto Nacional de Acción Cooperativa no autorizaría “a partir de la
publicación del presente decreto, el funcionamiento de cooperativas de trabajo que, para
el cumplimiento de su objeto social, prevean la contratación de los servicios cooperativos
por terceras personas utilizando la fuerza de trabajo de sus asociados”.
También resulta significativo que la cooperativa contrate seguros de vida y accidentes
personales a sus supuestos asociados, actitud que bien podría asimilarse a la que tomaría
cualquier empleador que brinda servicios de vigilancia a la hora de cubrir su
responsabilidad ante eventuales accidentes que pudiera sufrir uno de sus trabajadores.
En consecuencia, durante la vigencia de la relación laboral jamás la empleadora le entregó
recibos de sueldos, abonando la remuneración de manera clandestina, impidiendo gozar
de las ventajas de poseer una obra social como así también el cómputo de servicios a los
efectos previsionales, todo lo que habla a las claras de su mala fe.
Para empeorar aún más la situación, la empleadora nunca le abonó a la actora el SAC
durante toda la relación laboral, ni las Vacaciones. Los reclamos sobre tales
comportamientos fueron callados a través de más improperios y amenazas, totalmente
ofensivos y obviamente carentes de fundamentación. Sin perjuicio de estos hechos
lamentables, el Sr. Di Serio continuó con sus tareas con la misma dedicación con la que
venía desarrollando habitualmente.
Estas conductas harto irregulares y fraudulentas del empleador se repitieron todos los
meses, pero en virtud de la imperiosa necesidad económica y siendo ésta la única fuente
de ingresos, se vio constreñida a tolerarlo, siendo los reclamos verbales acallados por la
patronal con el único fin de permanecer en su puesto de trabajo, por lo que a raíz de eso
y sumado a las injurias precedentemente expuestas, la actora decidió formalizar sus
reclamos a los fines de que ajuste su conducta a derecho y que cumplimente las
obligaciones que la ley le impone.
Ello lo llevó a cabo por medio de los envíos telegráficos que se detallan en el Punto IV.-
de esta demanda, lo que provocó que ante la negativa a tales requerimientos por la
Cooperativa es que el 10 de agosto de 2022 se consideró despedido por exclusiva culpa
del empleador.
En consecuencia, de tal desvinculación, le adeuda SAC jamás abonado, horas extras,
diferencias salariales, vacaciones adeudadas; remuneraciones agosto 2022 proporcional
hasta la fecha del distracto; la liquidación final, las indemnizaciones y multas previstas
en la legislación laboral y la entrega de los certificados del art. 80 debidamente
confeccionados.

IV.- ENVIOS TELEGRÁFICOS. -

Por lo expuesto, el 02 de agosto de 2022 la actora envió CD Nº 147767345 al domicilio


de la calle 24 de Noviembre 220 Pº 7 “D”, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a la
codemandada CAZADORES COOPERATIVA DE TRABAJO LIMITADA,
intimando a que regularice su situación laboral bajo apercibimiento de considerarse
despedida por su exclusiva culpa, el que se transcribe a continuación: "Intimo plazo 30
días proceda conforme Art 11 de Ley 24013 y regularice la relación que con Ud.
mantengo conforme las siguientes pautas: a) Fecha de ingreso: 01/03/2016; b) Tareas:
Vigilador; c) Remuneración mejor mensual: $68.000; d) Jornada laboral: lunes a lunes
de 9:00 a 18:00 horas o de 07:00 a 19:00 horas con 1 franco semanal. Sin perjuicio de
ello, intimo único plazo de 48 horas aclare situación laboral y se expida sobre: 1)
Reconozca las circunstancias que definen la relación laboral que nos une antes referidas;
2) Abone diferencias salariales y horas extras conforme categoría laboral, jornada de
trabajo descripta y adicionales CCT; 3) Abone SAC y Vacaciones adeudadas; 4) Efectúe
el pago total de contribuciones y aportes con destino a la obra social, seguridad social y
sindicales. Impugno toda la documentación que me vi obligado a suscribir para mantener
trabajo referida a mi condición de afiliado de la cooperativa y de monotributista atento
a la subordinación jurídica económica y técnica que nos une. Todo lo enunciado bajo
apercibimiento de considerarme injuriado y despedido por su culpa, reclamando lo que
por derecho me corresponde, con más las indemnizaciones, y multas de LCT, Ley 25323,
Ley 24013 y Ley 25345. Queda Ud debidamente notificado.- “

En idéntica fecha notificó a la AFIP mediante CD, dando cumplimiento así al Art.
11 de la Ley 24.013, que he remitido la aludida pieza telegráfica mencionada en el
párrafo precedente.

Como repercusión a la misiva enviada por la actora, en fecha 08 de agosto de 2022,


la empresa CAZADORES COOPERATIVA DE TRABAJO LIMITADA envió
misiva donde rechaza la CD enviada con anterioridad por parte de la actora y alega
una fraudulenta condición de asociado voluntario por parte del Sr. Di Serio con ésta.

En consecuencia, y ante el rechazo y negativa por parte de su patronal, de reconocer


la relación laboral y abonar lo adeudado, es que con fecha 10 de agosto de 2022 la
actora envió CD Nº 202293418 a su empleador, por el cual se consideró despedida
por exclusiva culpa de aquella, tal como se transcribe a continuación: “Rechazo su
Carta Documento del 8 de agosto del 2022 por ser maliciosa, falsa e improcedente. Niego
condición de "asociado voluntario" a la cooperativa, siendo ello para no registrar la
relación laboral, lo que es una injuria ya que no procede la aplicación de la ley 20337.
Niego que me haya desvinculado ni haya dejado de cumplir función desde fines de el 24
de mayo del 2022. Su conducta no se compadece con los principios de buena fe propia
de toda relación laboral. Ante su falta de: registración laboral, reconocimiento de los
reales términos de la relación laboral, efectuación de los pagos de aportes y
contribuciones, pago de diferencias salariales y horas extras, pago de SAC y Vacaciones
adeudadas, es que me considero gravemente injuriado y despedido por su exclusiva
culpa. Atento a ello, intimo plazo único de 4 días a que abone SAC y Vacaciones
adeudadas, SAC y Vacaciones 2022 proporcionales, liquidación final, diferencias
salariales, horas extras, indemnizaciones arts. 232, 233 y 245 LCT, y entregue en el plazo
de 30 días los certificados Art 80 LCT. Todo ello de acuerdo a la realidad de los hechos
descriptos con más las multas y apercibimientos conforme Ley 24013 Art 8 y 15, Ley
25323 Art 2, Ley 25345 Art 43 y 45 y LCT. Queda Ud. debidamente notificado.-"
Por último, el Sr. Di Serio volvió a enviar CD intimando a la entrega de certificados
del art. 80 LCT: “Atento haber transcurrido más de 30 días desde la desvinculación,
intímole para que dentro del plazo de dos días hábiles me entregue certificados de
servicios, remuneraciones y de trabajo en los términos del Art.80 LCT(Según ley 25.345)
y acredite dentro del plazo legal el depósito de aportes previsionales por el verdadero
salario percibido, bajo apercibimiento de iniciar acciones judiciales con fundamento en
los Art.80 y 132 Bis de la LCT según ley 25.345(y su decreto reglamentario 146/2001),
sanción conminatoria e indemnización- e iniciar denuncia administrativa y acciones con
fundamento en la ley penal tributaria.- A su vez, intimo plazo único y perentorio de 2 días
de recepcionada la presente; pague las indemnizaciones conforme Art 232, 233 y 245 de
la LCT conforme Decreto 34/2019 y su prórroga del Decreto 528/2020 bajo
apercibimiento del Art.2 de la ley 25.323. En caso de incumplimiento se le iniciarán las
acciones judiciales pertinentes al caso. Queda Ud. debidamente notificado.”.-

V.- RESPONSABILIDAD SOLIDARIA DEL CONTRATISTA, ART. 30 L.C.T.


El régimen de responsabilidad solidaria que gobierna las relaciones de subcontratación y
delegación entre las empresas, inserta en el Art. 30 de la L.C.T., importa una extensión
de la responsabilidad a la empresa principal por los incumplimientos de los
subcontratistas, cesionarios o contratistas.-
El trabajo realizado por CAZADORES COOPERATIVA DE TRABAJO LIMITADA
fue contratado en el marco de un contrato comercial de empresas con PRODUCTOS
ROCHE S A QUIMICA E INDUSTRIAL. Las tareas de vigilancia, coordinación y
custodia fueron realizadas para PRODUCTOS ROCHE S A QUIMICA E
INDUSTRIAL. Evidentemente, importando una actividad propia, normal y específica de
las empresas solidarias, como ser que el establecimiento de la empresa principal funcione
con la debida seguridad para poder desarrollar sus actividades principales.
Como ha sentenciado la jurisprudencia CNAT Sala VI Expte N° 2503/05 Sent. Def. Nº
60.128 del 28/12/2007« Roldán, Roberto c/ Securitas SRL y otro s/ despido » 9
(Fontana - Fera): “Teniendo en cuenta lo dispuesto por el art. 40 de la ley 24240 de
Defensa del Consumidor, es posible afirmar que la explotación de un predio como el que
utiliza el shopping codemandado Soleil Factory, trae aparejada una responsabilidad por
la seguridad de las personas que concurren a dicho establecimiento. Por lo que las tareas
cumplidas por el actor como dependiente de Seguritas SRL estaban vinculadas con la
seguridad de las personas que concurren a dicho establecimiento, por lo que cabe
concluir que en este caso, la relación entre las codemandadas resulta alcanzada por el
art. 30 LCT.”
La responsabilidad incoada, en razón de las obligaciones de contralor que se les prescribe
cumplimentar a las empresas principales no es una mera obligación de medios, capaz de
subsanar el incumplimiento contractual con la prueba de que realizó los actos tendientes
a evitar en incumplimiento contractual, sino que importa una real obligación de
resultado1.
PRODUCTOS ROCHE S A QUIMICA E INDUSTRIAL debieron de haber velado
por el cabal cumplimiento de la legislación laboral y previsional; quien no puede
desprenderse de responsabilidad acreditando un mero comportamiento tendiente a la
consecución de estos fines, sino que están obligados a evitar los incumplimientos
contractuales. Esto encuentra su fundamento en el deber y la atribución de contralor que
la ley le asigna al principal. Una vez producidos los incumplimientos laborales o
previsionales, la ley atribuye responsabilidad al comitente principal, y el trabajador puede
accionar contra aquél por todos los actos cometidos por su empleador. En este sentido, el
solo incumplimiento conlleva, necesariamente, la solidaridad de la empresa principal; no
sólo por los de naturaleza laboral, sino también por los de la seguridad social. Solidaridad
que se hace efectiva en los términos del Art. 705 del Código Civil, conforme el Plenario
CNAT N° 309 “Ramírez María Isidora c/ Russo comunicaciones e insumos y otros s/
Despido”.-
La voz “actividad” no hace referencia al objeto que pueda tener la sociedad, sino a la
función y las tareas que son propias del establecimiento de modo que pueda cumplimentar
los fines y el destino comercial del mismo. La custodia de la seguridad por parte de
subcontratistas forma parte del giro comercial necesario de PRODUCTOS ROCHE S
A QUIMICA E INDUSTRIAL, de modo que sin ellos no puede lograr cabalmente sus
objetivos.
Si bien puede darse el caso de que la empresa haya contratado con la CAZADORES
COOPERATIVA DE TRABAJO LIMITADA debido que no se encarga en forma
directa de brindarse la seguridad que necesita, esta actividad le es propia a su actividad
comercial. Este servicio de seguridad es menester para llevar a cabo su función; son una
verdadera condición sine qua non para poder desarrollarse y desenvolverse en el
mercado.-
Sostiene la doctrina que “debe entenderse, entonces, por actividad normal y específica,
toda aquella que permita dar cumplimiento con la finalidad de la empresa, es decir,
contribuyen al logro del resultado final y puede referirse tanto al objeto principal, como
a los trabajos que completan la terminación de ese producto o servicio final y sin el cual
no podría trabajar la empresa en su conjunto o sería obstativo para cumplir su finalidad
económica”2 .-
La actividad desarrollada por la CAZADORES COOPERATIVA DE TRABAJO
LIMITADA es parte del giro comercial normal y específico de PRODUCTOS ROCHE
S A QUIMICA E INDUSTRIAL, la tercerización y delegación de las actividades
propias de la empresa ha sido práctica común en el comercio, y el Art. 30 de la L.C.T.
viene a remediar los excesos que pudiera causar. - “Para que nazca el reproche de
responsabilidad previsto por el Art. 30 L.C.T., es menester que la empresa se desligue de
su actividad normal y específica, recurriendo a las figuras de contratación o
subcontratación para la realización total o parcial de la misma” (“Lopez Marcelo c/
Asociación Argentina de Actores”, CNAT Sala IX, 20/12/2001, RDTySS, 2007).- “La
actividad normal y específica del establecimiento comprende no sólo la principal, sino
también la secundaria de aquélla, con tal que se encuentren integradas habitual y
permanentemente al mismo y con las cuales se persigue el logro de los fines
empresariales” (“Morello Víctor y otros c/ Giuliano Luis y otra”, SCBA, 19/10/99, JA,
2000).-
“Si bien existe una tendencia restrictiva de la CSJN, en cuanto a la interpretación del Art.
30 LCT, lo cierto es que la atribución de responsabilidad debe determinarse en cada caso
concreto atendiendo al tipo de vinculación establecida entre las empresas. Corresponde
extender la solidaridad en los casos de actividades que se hayan integrado en forma
permanente al establecimiento, sean éstas la principal prestación del mismo o no. Por
actividad normal no sólo debe entenderse aquella que atañe directamente al objeto o fin
perseguido por la demandada, sino también aquellas otras que resultan coadyuvantes y
necesarias, de manera que aun cuando fueran secundarias, son imprescindibles e integran
normalmente con carácter principal o auxiliar, la actividad, debiendo excluirse solamente
las actividades extraordinarias o eventuales” (“Hansen Angel M. c/ Videlu SRL y otro”
CNAT, sala X, 30/09/00, RDTySS, 2007).-
“Por actividad normal y específica debe entenderse toda aquella que haga posible el
cumplimiento de la finalidad de la empresa. La actividad específica implica no sólo la
principal de la empresa sino también la secundaria o accesoria, en tanto esté integrada
permanentemente al establecimiento y coadyuve a su objeto final” (“Bogado Bustamante
José c/ ServiClean S.A. y otro” CNAT, Sala VI, 15/09/00, RDTySS, 2007).-
Por lo expuesto, se solicita se haga extensible la condena por responsabilidad solidaria a
PRODUCTOS ROCHE S A QUIMICA E INDUSTRIAL.-

VI.- FALTA DE ENTREGA DE CERTIFICADOS DE APORTES Y SERVICIOS


ART. 80 L.C.T.-
Hasta la fecha la codemandada CAZADORES COOPERATIVA DE TRABAJO
LIMITADA no ha entregado los Certificados de Servicios y Aportes en los términos del
Art. 80 L.C.T., por lo que solicito que se condene al accionado a entregar la
documentación mencionada dentro del término de 10 días -o el que V.S. prudencialmente
estableciere a los efectos-, bajo apercibimiento de fijar astreintes por cada día de demora
(Art. 666 bis del Código Civil y las facultades concedidas a los magistrados en el Código
Ritual, Art. 37).- Ello en atención a la diferente naturaleza jurídica de la indemnización
legal y de las sanciones conminatorias que se solicitan, entendiendo que aquéllas tienden
a sancionar la omisión del demandado que no cumple con la obligación impuesta,
mientras que éstas se fijan para compulsarlo a la efectiva realización de una obligación
de hacer. Cabe remarcar que prescribe el Art. 80 L.C.T. que la indemnización impuesta
“…se devengará sin perjuicio de las sanciones conminatorias que para hacer cesar esa
conducta omisiva pudiere imponer la autoridad judicial competente”.-
A todo evento, se deja constancia en autos que se ha intimado para que la demandada
haga la entrega de los certificados en cuestión. Sin embargo, la demandada se ha negado,
ya sea previo a las actuaciones administraciones o judiciales o bien en oportunidad de las
audiencias conciliatorias del SECLO. Sin perjuicio de todo lo expuesto, y para el supuesto
de que V.S. no considere ajustado al decreto reglamentario de este artículo, es necesario
destacar la evidente inconstitucionalidad del plazo de treinta días que la reglamentación
impone para intimar la entrega del Art. 80 L.C.T.3 , habida cuenta de la contradicción en
la jerarquía normativa que entra en juego entre la L.C.T. y el decreto mencionado. La
excesiva extensión de 30 días entra en evidente colisión con el plazo de 2 días que fija la
L.C.T. y por ello se ven repugnados los Arts. 28, 31, 75 Inc. 19, y 99 Incs. 2 y 3 de la
Constitución Nacional.-
En suma, la contraria no ha reconocido los reales términos de la relación de trabajo
habida, por lo tanto ha de suponerse que cualquier certificado que fuera expedido por ella
no reflejaría la realidad de los hechos. Ha dicho la jurisprudencia que: “Para más, en el
caso, aun cuando se admitiese que el trabajador retiró el certificado de servicios y
remuneraciones, el mismo resultó ineficaz para cumplir la obligación legal en
consideración a que contenía información inexacta sobre el monto de las remuneraciones
del actor” (in re “Saavedra Jorge c/ Consarg SA s/ ley 22250” CNAT, Sala III, Sent.
87.135, 27/9/05).-

VII.- SOLICITA APLICACIÓN DEL ART. 9 DE LEY 25.013


El Art. 9 de Ley 25.013 manda presumir que ante la “falta de pago en término y sin causa
justificada por parte del empleador, de la indemnización por despido incausado” el
empleador se ha desenvuelto con temeridad y malicia, en los términos del Art. 275 L.C.T.,
en cuyo caso se hace efectiva la sanción contemplada en la última de las normas citadas.-
Más aún en el presente caso cuando el incumplimiento del empleador se debió a la
concreción del fraude laboral mediante el cual se incluyó al actor en un régimen
inadecuado a mi empleo.-
Por ello, cumplidos los requisitos procede la condena al pago de “un interés de hasta dos
veces y media el que cobren los bancos oficiales, para operaciones corrientes de
descuento de documentos comerciales”, lo que desde ya solicito se haga efectivo.

VIII.- CONFIGURACIÓN DE FRAUDE LABORAL


Para evaluar si existe o no fraude laboral en el funcionamiento de una cooperativa de
trabajo, la Jurisprudencia mayoritaria entiende que es la auténtica participación del
asociado en la vida de la cooperativa la que determinará el encuadre jurídico apropiado;
por lo que cuando tal participación es ficticia, nos encontramos ante un fraude laboral liso
y llano.
Cuando una cooperativa de servicios presta servicios en terceras empresas y no en sus
propias estructuras, para eludir dolosamente el cumplimiento de las obligaciones
emergentes de las normas laborales y el prestador de las tareas sólo resulta socio en
apariencia, se produce una situación de fraude; por lo tanto, se comporta como una
empresa capitalista que brinda trabajadores a terceros, integrando el ritmo de producción
ajeno. De ahí que, objetivamente, se manifieste una situación de fraude, ocultando la
relación laboral a través del disfraz cooperativo o, en términos normativos, “aparentando
normas contractuales no laborales” (LCT art.14). En otro sentido, se sostiene que la
configuración del fraude estaría dada por la ausencia de cobertura médica, seguro de
accidentes de trabajo, de descansos y otros beneficios de que gozan los trabajadores de
acuerdo a las leyes vigentes.
En forma clara y contundente, LUIS E. RAMIREZ plantea que "la situación legal de los
trabajadores dentro de las cooperativas de trabajo es que están disfrazados de socios
cooperativistas" y agrega que "el supuesto socio cooperativista es un trabajador
dependiente de la empresa que utiliza y se beneficia con sus servicios, pero además es un
trabajador sin registrar por su empleador, es decir, un trabajador en negro, dando lugar
a que dicho trabajador pueda ejercer la facultad de intimar a la empresa usuaria, la
registración o blanqueo de dicha relación laboral de acuerdo a los términos de los Arts.
8, 11 y 15 de la Ley 24.013". Así, existe fraude laboral cuando un empresario valiéndose
de la utilización de una cooperativa de servicios, para evitar la responsabilidad de una
contratación directa, toma personal, le da órdenes e instrucciones, los forma de acuerdo a
sus necesidades y le paga sueldo, reconociendo que la Cooperativa le daba una
participación y un servicio a cambio, colocando al trabajador como socio del mencionado
ente social, no dándose los requisitos del art. 2 de la ley 20337, y quedando la figura
comprendida dentro del art. 23 de la L.C.T., siendo ambos responsables en forma solidaria
hacia el trabajador por las obligaciones emergentes de la relación laboral. Otro punto a
tener en cuenta, en cuanto a la diversidad de servicios que se ofrecen y espacios
geográficos que los abarcan, nos remite a la opinión destacada de VASQUEZ VIALARD
en el comentario al fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Provincia de Mendoza en
"RIOS O.M. C/COOP. DE TRABAJO TRANSPORTE AUTOMOTOR DE CUYO
T.A.C.", en el sentido de que: "Estimamos que también cabe excluir como tal -
Cooperativa de Trabajo - a aquella entidad que, no obstante el cumplimiento de los
resguardos formales, en razón del número de sus miembros, la sede geográfica en que
funcionan sus autoridades (muy distante del lugar en que se desempeñan ciertos
trabajadores) hacen prácticamente imposible que éstos puedan, en la práctica, ejercer
su derecho a conformar la voluntad societaria y efectuar un cierto control de gestión."
(T.y S.S.- Tomo 1992:328). Expresando en concordancia que “la distinción entre el
aporte en trabajo del socio cooperativo y el que corresponde a una relación laboral, sólo
puede formularse -por encima de la realidad fáctica que puede ser similar en ambos
casos- en virtud del examen de la causa jurídica que le da sustento (acto cooperativo o
laboral)”.
Es así que, en algunas ocasiones, nos encontramos con "Cooperativas Simuladas", que no
son tales en su esencia y en su finalidad, o a las que se les ha dado apariencia de tales pero
que verdaderamente encierran una empresa en las que sus verdaderos dueños pretenden
eludir la responsabilidad que les compete como tales. Otras veces, se trata de
Cooperativas que verdaderamente han comenzado siendo tales, pero que con el transcurso
del tiempo se han desnaturalizado y ya no responden a la realidad del cooperativismo
como tal. Por otra parte, el fraude se ve facilitado por la inexistencia de controles estatales
y se instrumenta contratando a trabajadores a quienes se les hace firmar documentación
en blanco, donde se encuentran notificaciones para concurrir a asambleas y poderes para
votar en representación, sin siquiera informarles que se incorporan a una Cooperativa de
Trabajo.
En lo que refiere a jurisprudencia, es para tener en cuenta el fallo de la Sala V de la
Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo, en el caso "MECATTI OSCAR
ROBERTO C/COOP. DE TRABAJO DISTRIBUIDORA DE DIARIOS Y REVISTAS
VILLA BALLESTER LTDA. Y OTROS S/DESPIDO" (26/08/2005), en el que condenó
a una cooperativa y a sus representantes por el despido injustificado de un empleado,
relación que la entidad había ocultado a través de la figura de asociado, y consideró la
existencia de un negocio jurídico simulado por el cual pretendía evadir las obligaciones
derivadas de un verdadero contrato de trabajo.
De esa manera, el Tribunal revocó el fallo de primera instancia que rechazó el reclamo
del trabajador, y por vía del principio de la primacía de la realidad, consideró que la
prestación que aquél realizaba en la cooperativa era "subordinada"; ya que si bien se
verificó, entre otras, la autenticidad de la solicitud de ingreso del actor, la notificación de
su aceptación en calidad de socio de la cooperativa y las constancias de "retiros", la Sala
entendió que están ausentes otros elementos que demuestran la affectio societatis que
resulta esencial en toda sociedad.
A consideración del Tribunal sólo se cumplieron algunos requisitos formales, pero "no
existe ninguna constancia que demuestre que el actor haya participado, o al menos que
se le hubiere notificado fehacientemente de la celebración de las asambleas ordinarias
ni extraordinarias, ni tampoco se arrimaron los instrumentos necesarios para verificar
la distribución del total de los ingresos según los principios del cooperativismo".
En consecuencia, para la Cámara se configuró un negocio jurídico simulado, pero a
diferencia de lo que sucede en el derecho civil - en el que hay acción entre los copartícipes
de la simulación ilícita (Art. 959 del C.C.) - en el derecho laboral y conforme al principio
protectorio es "irrelevante jurídicamente la voluntad del trabajador dirigida a la evasión
de las normas del derecho laboral. En consecuencia, el dependiente siempre tendrá
acción para poner en claro la simulación ilícita y beneficiarse con la aplicación de dichas
normas". Y ello es así ya que, según el Principio de la Primacía de la Realidad, basta con
que se den los presupuestos fácticos que tipifican una relación laboral para demostrar la
existencia de un contrato de trabajo, "cualquiera sea su forma o denominación" (conf.
Art. 21 LCT).
Por lo que el Tribunal extendió la condena a las personas físicas codemandadas,
representantes de la cooperativa. Y concluye diciendo que "una de las finalidades del Art.
23 de LCT es la de prevenir y evitar fraudes contra los trabajadores, los que pueden ser
consumados mediante el empleo de figuras que presenten una apariencia no laboral. La
interpretación adecuada del citado artículo no puede llevar a que se considere
desvirtuada la presunción mediante la sola prueba de meras formalidades, ya que tal
criterio implicaría vaciar de contenido concreto la previsión legal".
Otro fallo relevante, es el dictado por la Cámara de Trabajo de Córdoba, Sala 11, en autos:
"CAMINOS CESAR P. C/COOP. DE TRABAJO INDEPENDENCIA LTDA. Y OTRO"
(28/12/2004), que fijó ciertas pautas en concordancia con lo establecido por el régimen
legal vigente, reconociendo la solidaridad entre la empresa que se sirve del trabajo del
"empleado-asociado", y la cooperativa que actúa en fraude a la ley laboral. Los puntos
fijados por la sentencia a la que arribó el Tribunal, fueron: “1) Las cooperativas de
trabajo no pueden actuar como colocadoras de personas para terceros, actividad ésta
que ha sido expresamente prohibida por el Decreto 2015/94, en su Art. 1º.-
2) Las personas enviadas por la cooperativa a prestar servicios para terceros se
encuentran ligados a éstos por una relación de tipo laboral (Art. 27 LCT), y no pueden
ser considerados simples socios, pues se trataría de una formalidad sin contenido real
ya que no realizan aporte alguno de trabajo para la cooperativa, el que realizan lo hacen
para otra persona física o jurídica y reciben como contraprestación un pago de carácter
salarial por la realización de tareas como trabajadores y no como socios.-
3) La cooperativa de trabajo que medió en la relación entre el trabajador y la empresa
no puede pretextar que no existe relación laboral con su supuesto socio, ya que el aporte
de éste no lo fue en una tarea propia de la cooperativa, que no recibió la labor del
trabajador, sino que fue en otra distinta de un tercero que contrató con ella.-
4)Las cooperativas de trabajo no pueden actuar como colocadoras de personas en
terceros establecimientos pues esta es una forma sencilla de alterar toda la estructura de
la ley laboral y privar de la tutela respectiva al personal so pretexto de la existencia de
actos cooperativos entre trabajador y empresa donde presta servicios. En tal caso, se
torna aplicable lo normado en el Art. 29 LCT y el trabajador será considerado empleado
directo de quien utilice su prestación pues ello evidencia la existencia de una
interposición fraudulenta, que justifica la responsabilidad solidaria de la cooperativa
por todas las obligaciones derivadas de dicha relación laboral.-
5) La cooperativa de trabajo está constituida por asociados que trabajan para ella y la
retribución que perciben no puede ser otra que su participación en los resultados de la
empresa común. El asociado utiliza el servicio social (ocupación) y la cooperativa le
adelanta un precio provisional a cuenta del resultado final; cerrado el ejercicio y
aprobado el balance, se retornará a los asociados lo que la cooperativa les pagó de
menos durante el año.-“
De las consideraciones supra mencionadas, tanto por doctrina como jurisprudencia, a
todas luces se desprende que la demandada ha utilizado la figura de la cooperativa con
fines fraudulentos a la ley de orden público, vulnerando los derechos del actor, con la
finalidad de evadir las responsabilidades que de ella derivan. Es la propia conducta de la
demandada la que da lugar a la presunción de la elección, de su parte, de caminos
desviados para lograr que su incumplimiento de las normas legales, quede a salvo de toda
responsabilidad, encontrándose el trabajador obligado a aceptar la forma contractual
impuesta por su empleador. El consentimiento por parte del dependiente no hace más que
reflejar la falta de capacidad negocial del mismo, desigualdad que se acentúa como
consecuencia del elevado índice de desempleo y de la crisis económica actual. El
rigorismo de las formas siempre cede para que prime la verdad jurídica, si en el fondo
existe contrato de trabajo, así habrá de declararlo el tribunal y ordenar el pago de las
prestaciones a que haya lugar.
Por último, es importante destacar que, aún en el caso de que nos atengamos a la intención
de las partes en la oportunidad de la celebración del contrato de trabajo, la pacífica
jurisprudencia ha señalado que cuando la contratación es fraudulenta y desprovista de
toda legitimidad, tendiente exclusivamente a cercenar derechos del trabajador en
oposición a expresos dictados de la Constitución Nacional, no puede hacerse valer la
voluntad expresada en tales contratos, de por sí carentes de validez y corresponde, en tal
situación excepcional, aplicar la norma de rango superior, que garantiza a todo trabajador
público o privado un resarcimiento en el supuesto de despido arbitrario, por lo cual es
justo aceptar los parámetros de las disposiciones de los Arts. 245, 232 y 233 de la LCT,
modificado por ley 25877.

IX. LIQUIDACION
Conforme a su categoría, de acuerdo con las tareas realizadas por mi cliente de Vigilador
Principal, desde la fecha de inicio de la relación laboral (01/03/2016 hasta la fecha del
despido 10/08/2022), considerando el Convenio Colectivo de Trabajo Nº 507/07 -
Sindicato Personal de Seguridad, corresponde:

Sueldo básico: $88.061


Viáticos: $15.000
Presentismo: $10.200
Antigüedad: $ 5.283
Base Salarial Sin Hs. Extras: $118.544
Horas extras al 50%: $22.226
Horas extras al 100%: $88.907
Base Salarial Con Hs. Extras: $229.677
Mejor remuneración percibida: $68.000

La base salarial utilizada es la que no contiene horas extras por lo tanto, en caso de
probarse dichas horas, solicito se utilice dicha base al resto de los rubros indemnizatorios.
Conforme lo expuesto, solicito se condene a los accionados por los siguientes rubros y en
los montos que a continuación se enuncian:

INDEMNIZACION POR ANTIGÜEDAD $829.808

PREAVISO $237.088

SAC S/ PREAVISO $19.757

MES DE INTEGRACIÓN $80.304

SAC S/ MES DE INTEGRACIÓN $6.692

DIAS TRABAJADOS DE AGOSTO 2022 $38.240

SAC JAMÁS ABONADO $237.088

VACACIONES 2022 PROPORCIONALES $52.633

SAC S/ VACACIONES 2022 PROPORCIONALES $4.386

VACACIONES 2021 NO ABONADAS $99.576


SAC S/ VACACIONES 2021 NO ABONADAS $8.298

HORAS EXTRAS AL 50% $533.424

SAC S/ HORAS EXTRAS AL 50% $44.452

HORAS EXTRAS AL 100% $2.133.768

SAC S/ HORAS EXTRAS AL 100% $177.814

DIFERENCIAS SALARIALES $1.213.056

SAC S/ DIFERENCIAS SALARIALES $101.088

ART. 80 LCT $355.632


ART. 8 LEY 24.013 $2.504.242
ART. 15 LEY 24.013 $1.173.649
ART. 2 LEY 25.323 $586.824
TOTAL $10.437.819

El valor de las horas extras surge de sumar el sueldo básico más los adicionales, y se lo
divide por el resultante de 48 horas multiplicadas por 4,28 semanas que tiene el mes. Al
valor que resulto ser $577,02 se lo multiplico por 1,5 y por 2 para determinar que el valor
de la hora extra al 50% siendo $865,53 y el valor de la hora extra al 100% resulto
$1154,04.-
Para determinar cuántas horas extras laboraba la actora, primero tenemos en cuenta que
por convenio las primeras 48 horas trabajadas son consideradas como hora normal, y lo
que exceda eso se considerara hora extra al 50% o al 100% dependiendo el día y horario
en que se realicen. La jornada laboral de la actora a lo largo de la relación laboral fue
variando acorde a los objetivos en que se desempeñaba, y la que utilizamos para este
cálculo fue la que desempeñó de lunes a lunes de 07:00hs a 19:00hs, con un feriado
semanal, tomado el día martes.
Consideramos que si trabajaba en promedio a los fines del cálculo 4 jornadas de 12 horas
de lunes a viernes, cumpliendo con las 48 horas semanales y al finalizar la jornada del
viernes, el actor ya contaba con el máximo de horas semanales, por lo tanto las 24 horas
laboradas en excedente los días sábados y domingos se consideran al 50% y al 100%
dependiendo el día y horario en que eran realizadas.
En relación a las horas extras al 50%, las horas laboradas los días sábados de 07:00hs a
13:00hs, se computan como horas extras al 50% en razón del día y horario en que eran
realizadas, arrojando un total semanal de 6 horas. Estas horas son multiplicadas por 4,28
(semanas en promedio que tiene el mes), resultando en 25,68 en forma mensual.
Estas 25,68 horas se multiplica por el valor de la hora extra al 50% ($865,53) para
establecer el monto devengado mensualmente por el rubro en cuestión siendo $22.226.
Esta cifra es multiplicada por 24 meses (atento el periodo no prescripto en el que laboro
dichas horas extras) resultando $533.424, adeudados por la patronal a la actora por horas
extras al 50% durante la relación laboral.
Por otro lado, en cuanto al horario realizado los días sábados de 13:00 horas a 19:00 horas
y la jornada completa de los días domingos de 07:00 a 19:00 horas se consideran al 100%
en relación al horario y día en que era realizadas.
Por lo expuesto, la trabajadora realizaba un total de 18 horas extras al 100% semanales.
Estas 18 horas se multiplican por 4,28 en razón de la cantidad de semanas que tiene un
mes, arrojando un total de 77,04 horas al 100% en un mes.
Estas 77,04 horas se multiplican por el valor de la hora extra al 100% ($1154,04) para
establecer el monto devengado mensualmente por el rubro en cuestión siendo $88.907.
Esta cifra es multiplicada por 24 meses (atento el periodo no prescripto en el que laboro
dichas horas extras) resultando $2.133.768, adeudados por la patronal la actora por horas
extras al 100% durante la relación laboral.
A su vez, en relación a las diferencias salariales, la actora percibió como mejor
remuneración la suma de $68.000, mientras que la remuneración devengada por convenio
resultaba ser a la fecha de $118.544 sin horas extras. Por lo expuesto, se restó la suma
percibida por la actora a la devengada, resultando en un total de $50.544 mensuales
adeudados por el empleador al Sr. Di Serio.
En razón del período no prescripto estos $50.544 mensuales adeudados se multiplican por
24 (período no prescripto trabajado) resultando en un total de $1.213.056 adeudados por
el empleador al trabajador.

X- DERECHO. -
El derecho que me asiste se funda en lo normado por la Ley de Contrato de Trabajo, Ley
24.013, Ley 25.323, Ley 25.345, Ley 25013 CCT 507/07 normativa complementaria,
doctrina y jurisprudencia aplicable al caso. -
XI.- CONCILIACION LABORAL OBLIGATORIA. -
Se cumplió con el trámite previsto por la ley 24.635 de Conciliación Laboral Obligatoria,
sin arribarse a acuerdo alguno, quedando expedita la vía del reclamo judicial a cuyo efecto
se adjunta al presente las actas de cierre del procedimiento, labrada ante el respectivo
Conciliador designado por el SECLO, de fecha 08/02/2023 la cual se adjunta como
prueba.-

XII - PRUEBA.-
Se ofrecen las siguientes probanzas a los fines de acreditar los extremos invocados en la
presente demanda, haciendo formulación de reserva de ofrecer las demás pruebas en su
oportunidad procesal.

~ DOCUMENTAL:
Telegramas Colacionados Laborales y Cartas Documento:
CD Nº 147767345 con fecha 02/08/2022;
CD Nº con fecha 02/08/2022;
CD con fecha 08/08/2022;
CD Nº 202293418 con fecha 10/08/2022;
CD con fecha 05/04/2023.

Acta del SECLO de fecha 08/02/2023 acreditando haber dado cumplimiento a la instancia
de conciliación obligatoria;

~ DOCUMENTAL EN PODER DE LA PARTE DEMANDADA:


Solicito se intime al codemandado CAZADORES COOPERATIVA DE TRABAJO
LIMITADA, a que presente y exhiba en las presentes actuaciones los libros y
documentos legales, en especial libro de sueldos y jornales Art. 52 L.C.T., registro de
empleados, planilla de horarios, tarjeta reloj, recibos de haberes, libreta horaria, Conf.
Art. 20 Dto. 16115/33 reglamentario de la Ley 11.544, así como demás planillas, registros
contables, así como toda otra documentación que fuera necesaria para la cabal realización
de la pericia contable. Todo ello bajo apercibimiento del artículo 55 L.C.T.-

~ PRUEBA EN RESERVA:
Solicito la prueba Documental en reserva.
~ PRUEBA INFORMATIVA:
Al Correo Oficial, a fin de que:
- Informe de los Telegramas Colacionados Laborales de Ley 23.789 y las Cartas
Documento mencionadas sobre: fecha y datos de su emisión y recepción, datos de los
remitentes y destinatarios, y datos de la persona receptora;

XIII.- PRESUNCIÓN LEGAL DEL ART. 55 L.C.T.-


En el supuesto de falta de exhibición de libros, recibos de haberes, planillas o registros
en poder de los demandados o de la documental que debió haber sido confeccionado por
ellos, solicito se considere la presunción a favor del actor del Art. 55 L.C.T.- “Si el
empleador hubiere incurrido en la situación prevista en el artículo 55 de la ley de contrato
de trabajo, deben tenerse por ciertos los extremos que alega el trabajador y que debían
constar en los registros respectivos de acuerdo con el artículo 52, entre los que figuran:
fecha de ingreso y egreso; remuneraciones asignadas y percibidas y demás datos que
permitan una exacta evaluación de las obligaciones a cargo del empleador, debiendo
correlacionarse las falencias como presunciones a favor de la postura del reclamante, con
los contenidos que debían poseer los recibos de acuerdo con los artículos 140 y 141 de la
ley de contrato de trabajo si éstos no se hubieran exhibido en tiempo y forma al experto
ni se hubieran incorporado a la causa”, in re “Díaz Silvia S. c/ Centro de estudios
Brasileños y ot.”, CNAT, Sala II, 30/08/1999.-

XIV.- SOLICITA ACTUALIZACIÓN MONETARIA - PLANTEA


INCONSTITUCIONALIDAD.-
En consideración al proceso monetario que pudiere verificarse desde el momento de
interpuesta la demanda hasta el efectivo cobro de las rubros que se reclaman en autos, y
ante la posibilidad de que las sumas demandadas pierdan su valor en términos reales,
solicito haga efectiva la actualización monetaria que corresponda atento que ello sería
lesivo de mi derecho de propiedad, a una remuneración justa y a la protección al trabajo,
todos ellos consagrados constitucionalmente, Art. 14 bis y 17 de la Carta Magna.-
Ello, afirmado consecuentemente por la jurisprudencia, afecta la constitucionalidad de las
normas que vedan la indexación, Ley 23.928 Arts. 7 y 10, Ley 25.561 Arts. 4 y 19, y el
Art. 5 del Decreto 214/2002 del P.E.N., en cuanto resultan lesivas a los derechos que la
Norma Fundamental asigna.-
Conforme se ha sostenido: “Es criterio de la Corte Suprema que los créditos afectados
por la depreciación monetaria y demandados judicialmente deben ser revalorizados y
también se ha establecido en precedentes, que la actualización de créditos salariales
responde a un claro imperativo de justicia, cual es el de eliminar los efectos perjudiciales
que la demora en percibirlos ocasiona a los trabajadores, atento a que las prestaciones de
esa especie tienen contenido alimentario y las indemnizaciones laborales se devengan,
generalmente, en situaciones de emergencia para el trabajador” (CS, 1979/05/03;
“Valdez,, Julio c/Cintoni, Alberto D.”; La Ley 1979-B, Pág. 441. En igual sentido:
CNTrab, Sala VII, 1990/09/10; “Pereira, Luis y Otros c/Lista de Servicios S.A.”; DT
1991-A, Pág. 89).- Indudablemente el criterio precedentemente expuesto resulta también
aplicable al crédito aplicable en autos que debe ser actualizado desde la fecha de su
exigibilidad hasta el momento de su efectivo pago de manera que conserve su valor.-
Tratándose de un crédito de naturaleza alimentaria, se deberá establecer una tasa y un
modo de actualización del monto de la condena, de manera tal que ésta preserve su valor
real.-
Un proceder contrario resultaría lesivo al derecho de propiedad: lo que se solicita no es
más que una protección a ese derecho que, de lo contrario, se estaría vulnerando.-
Así lo ha entendido la jurisprudencia, que señala: “A fin de no afectar el derecho de
propiedad de los trabajadores, corresponde mantener el valor real del crédito laboral
frente a los perniciosos efectos que la demora en percibir las prestaciones laborales
ocasiona, habida cuenta, del carácter alimentario de las mismas y los imperativos de
justicia que se imponen; porque si no se aceptase la actualización se les pagaría con una
moneda depreciada, cuyo valor adquisitivo sería inferior al que tenía la nacer el crédito”
(in re CNTrab., Sala VII, 1981/12/30; “Balarino Juan c/ Encotel”; JA 1983-I, Pág. 394).-
Por otra parte, el menoscabo del valor de lo que se reclama en la presente demanda
importaría un injusto beneficio para la demandada en desmedro de los derechos de mi
mandante; beneficio que no forma parte teleológica de la ley y que V.S. no debe permitir.-
En rigor, de no operarse como se solicita mediante una actualización monetaria o tasa de
interés que actúe sobre el crédito invocado acorde a la desvalorización monetaria, el sólo
transcurso del tiempo tendría los efectos de una quita a favor de la demandada sobre el
monto reclamado, solución que a simple vista resulta ridícula y que es menester evitar.
Valga recordar que este crédito proviene de indemnizaciones o deudas a favor del actor
que son producto de una conducta ilícita, y que tienen naturaleza alimentaria.-
“La igualdad que implica necesariamente la justicia resulta alterada cuando, por culpa del
deudor moroso, la prestación nominal a su cargo ha disminuido notablemente su valor
real y también la Constitución Nacional establece claras garantías del derecho de
propiedad que no es dado al legislador ni a los jueces ignorar ni recortar injustamente,
por cuya razón debe ampararse en mayor medida en el ámbito del derecho social, a la luz
del artículo 14 nuevo de la Constitución Nacional teniendo en cuenta el carácter
alimentario de la prestación“ (in re CNTrab., Sala III, 1979/11/19; “Parals, Aurora A.”,
DT 1980, Pág. 388).-
Atento a ello, solicito se actualice el capital objeto del presente reclamo conforme la
variación experimentada por el Índice de Precios al Consumidor desde la fecha de origen
y hasta la fecha de su efectivo pago, o según el criterio que V.S. considere adecuado.- A
todo evento, y en forma subsidiaria, solicito se prevea al momento de dictar sentencia una
tasa de interés que persiga la manutención del valor real del crédito invocado. En este
sentido se entiende que ello es atribución de V.S. en el ejercicio de una facultad
discrecional, de modo que se ajuste el valor real de la demanda a los principios de equidad
y justicia que se persiguen.-
La Corte Suprema de Justicia de la Nación sostuvo que “…la determinación de la tasa de
interés a aplicar en los términos de la artículo 622 del Código Civil como consecuencia
de régimen establecido por al Ley Nro. 23.928, queda ubicada en el espacio de la
razonable discreción de los jueces de la causa que interpretan dichos ordenamientos sin
lesionar garantías constitucionales en tanto sus normas no imponen una versión
reglamentaria única del ámbito en cuestión...” (Fallos 308:708).-

XV.- PLANTEA INCONSTITUCIONALIDAD DE LEY 24.432.-


Que vengo a plantear la inconstitucionalidad de los arts. 1º y 8º de la ley 24.432, en tanto
establecen que “... La responsabilidad por el pago de las costas, incluidos los honorarios
profesionales en todo tipo allí devengados y correspondientes a la primera y única
instancia, no excederá del veinticinco por ciento (25%) del monto de la sentencia, laudo,
transacción o instrumento que ponga fin al diferendo. Si las regulaciones de honorarios
practicadas conforme las leyes arancelarias o usos locales, correspondientes a todos los
profesionales y especialistas, superaran dicho porcentaje el juez procederá a prorratear
los montos entre los beneficiarios. Para el cómputo del porcentaje indicado, no se tendrá
en cuenta el monto de los honorarios de los profesionales que hubieran representado,
patrocinado o asistido a la parte condenada en costas”, lo que resulta lesivo para los
derechos consagrados en los arts. 14, 14 bis, 16 y 17 de la Constitución Nacional.-
En efecto, se afecta el derecho a trabajar y el de obtener por ello una retribución justa, así
como también el de propiedad misma, en condiciones de igualdad con sus pares letrados
de la parte demandada que muchas veces resultan groseramente conculcados.-
Más allá de las bondades que puedan tener -o no- los métodos, sistemas o escalas
utilizados para determinar el valor de la actividad profesional, lo cierto es que cualquier
pretensión de sustituirlo debe girar en torno a la idea de retribución o precio justo. Tal es
la inteligencia de la Constitución Nacional.-
Difícilmente puede concurrir a tal fin; viene tan sólo a constituir una suerte de cooperativa
compulsiva, para repartir el monto resultante entre quienes nada tienen que ver entre sí
(abogados, médicos, contadores, ingenieros calígrafos, balísticos, actuarios, mecánicos,
etc.).-
En lugar de buscar el valor correcto y justo de cada prestación, establece una injusta
garantía para el incumplidor moroso, que ha obrado contrario al derecho y que debe ser
sancionado; así, éste resulta protegido de las consecuencias de su propia ilicitud. Es decir
que -en los supuestos que nos ocupan- el legislador ha considerado que la propia torpeza
merece tutela social, en menoscabo de quienes se aboguen en resolver el proceso judicial
causado por ese mismo incumplimiento.-
Así, el incumplidor tiene totalmente garantizado un porcentaje de costas cuanto más
difícil haga la prueba de su ilicitud (requiriendo el uso de más medios de prueba y
esfuerzos probatorios), en perjuicio de profesionales que trabajaron para defender los
derechos de quien se vio damnificado por su conducta. Esta extraña idea legislativa
deviene inconstitucional por colisionar con los preceptos de nuestra Carta Magna,
contrariando - por absurda- al sistema mismo. No se advierte ningún motivo para
establecer pautas de retribución de un servicio prestado en un proceso judicial, en función
de los intereses de aquél que con su conducta originó la contienda.-
De esta forma se está produciendo un enriquecimiento ilegítimo con perjuicio del
patrimonio de quien ejerce regularmente una profesión liberal, quien deberá compartir
sus legítimas expectativas arancelarias con los peritos que requiera la acreditación del
derecho resistido. El tope impuesto por la ley beneficia al perdidoso que actuó en forma
antijurídica, con el correlativo detrimento de los honorarios profesionales que retribuyen
las labores de quienes se han dedicado a la comprobación de esa conducta.-
Todo esto surge de suponer que quien es judicialmente condenado al cumplimiento de
una obligación es una especie de víctima de jueces, abogados y peritos, mereciendo la
protección de la ley. Esta idea absurda parece subyacer en la normativa criticada,
atentando contra el sistema mismo, ya que ni el Poder Judicial ni sus auxiliares merecen
tal descalificación encubierta.-
Esta disposición aparece además como una clara violación a la distribución de facultades
entre el gobierno federal y los estados locales, con perjuicio de lo establecido en los Arts.
75 Inc. 12, 121, 123, 126 y Concs. de la Constitución Nacional, que tiene clara
correspondencia en la normativa provincial relativa a los procedimientos judiciales y los
aranceles profesionales.-
No cabe ninguna duda y parece innecesario abundar en mayores comentarios, en punto a
que el tema de las costas y las regulaciones de honorarios, constituyen cuestiones
estrictamente locales. Circunstancia que no ignora la propia ley 24.432, cuando modifica
al C.P.C.C.N. y a la Ley de Aranceles de la Capital Federal, actuando como legislatura
local de su ámbito.-
Pero al advertir que no puede hacer lo propio en ámbitos ajenos, pretende actuar en
idéntico sentido, so pretexto de incorporar normas del derecho común en el Código Civil
y la Ley de Contrato de Trabajo, para alcanzar y modificar en materia de costas y
aranceles, ámbito que le era extraño. Empero, no todo lo que se incluya en el Código Civil
puede considerarse legislación vigente, ingresando a las jurisdicciones locales desde los
códigos de fondo.-
Es así que entre las funciones delegadas por la Constitución Nacional al gobierno federal
(art. 121 de la C.N. se encuentra el de “... dictar los códigos Civil, Comercial, penal, de
Minería y del Trabajo y Seguridad Social en cuerpos unificados o separados, sin que tales
códigos alteren las jurisdicciones locales, correspondiendo su aplicación a los tribunales
federales o provinciales, según que las cosas o las personas cayeren bajo sus respectivas
jurisdicciones...” (art. 75 inc. 12 de la C.N.).-
Obvio parece destacar, que las facultades delegadas son de interpretación restrictiva,
mientras que las no delegadas deben ser evaluadas con amplitud, atento su naturaleza
residual. En principio, todo sería jurisdicción local, con excepción de lo que clara e
indudablemente haya sido delegado al gobierno federal.-
Sin ninguna duda, tal delegación no existe en el caso que nos ocupa, por lo que el
legislador nacional ha excedido su esfera de jurisdicción y lo normado debe ser
descalificado por contrariar al sistema constitucional.-
Evidentemente, si cada vez que el Congreso de la Nación quiere legislar en un tema que
no le compete, apelará a la simple maniobra de introducir sus ideas en los códigos de
fondo, podemos sostener que el sistema federal de gobierno ha dejado de existir.-
Legislar no consiste en subordinar el derecho a las necesidades de la coyuntura política o
económica de la época. Las necesidades de aquélla en procura del bienestar general -aún
en situaciones de crisis- no pueden socavar las jurisdicciones, las garantías y los
principios básicos del derecho, desarticulando la estructura del mismo sistema
constitucional.-

XVI.- PLANTEA INCONSTITUCIONALIDAD DEL PAGO DE SUMAS DE


CARÁCTER NO REMUNERATIVO.-
Para el cálculo de la mejor remuneración mensual normal y habitual devengada y que le
hubiera correspondido percibir al actor y que será la base de la liquidación practicada en
la presente demanda, solicito a V.S. que tenga en cuenta las siguientes consideraciones
respecto a la inclusión por esta parte en esa base de cálculo de las mal llamadas “sumas
no remunerativas” que se le otorgaron al actor.
En la Argentina desde hace larga data y en especial en estas épocas, por medio de un
acuerdo entre partes se dejan sin efecto normas del orden público laboral, denominando
con nombre de asignaciones, remuneraciones, acuerdos, sumas y adicionales no
remunerativas, vales alimentarios, a cuenta de futuros aumentos, etc., lo que son
auténticamente remuneraciones. En consecuencia, los acuerdos entre los sindicatos y las
patronales con la anuencia de la autoridad pública, crean ciertos ítems como de carácter
“no remunerativo”, siendo innegable que forman la remuneración mensual, normal y
habitual, y gran proporción del salario del trabajador.
Estos engaños de llamar a las cosas por otro nombre, y en este caso a las remuneraciones
de los trabajadores, solo están destinados a beneficiar a actores que no son precisamente
estos últimos. Los trabajadores se ven seriamente perjudicados en su patrimonio, ya que
con esas remuneraciones no remunerativas se afecta el monto de su futura jubilación (en
el caso que corresponda tomar el promedio de las remuneraciones) y eventuales
indemnizaciones por accidentes de trabajo o despido. Amén de afectar también al sistema
previsional al ingresar inferiores aportes al mismo.
Esto debiera ser simple y definido a la luz del art. l03 de la L.C.T, que define al salario o
remuneración como la contraprestación que debe percibir el trabajador como
consecuencia del contrato de trabajo.
La Constitución Nacional, en su artículo 14 bis, dispone que las leyes aseguraran al
trabajador “retribución justa”. Pues bien, las "sumas no remunerativas", no sólo nos habla
de la clara redacción del art. l03 de la L.C.T., sino que funda su posición en los siguientes
argumentos:
l- Los acuerdos paritarios y/o cualquier nominación al respecto, son de categoría inferior
a la Ley de contrato de Trabajo.
2- El Convenio 95 de la O.I.T., cuya jerarquía es superior a la ley, conforme lo dispone
el art. 75 inc. 22 de la Constitución Nacional y por tanto superior a los decretos, y/o
denominaciones que se fije ahora o en lo sucesivo, consagra que: “SALARIO ES LA
REMUNERACION O GANANCIA, SEA CUAL FUERE SU DENOMINACIÓN O
MÉTODO DE CALCULO, SIEMPRE QUE PUEDA EVALUARSE EN EFECTIVO,
FIJADA POR ACUERDO O POR LA LEGISLACIÓN NACIONAL, Y DEBIDA POR
UN EMPLEADOR A UN TRABAJADOR EN VIRTUD DE UN CONTRATO DE
TRABAJO, ESCRITO O VERBAL, POR EL TRABAJO QUE ESTE ULTIMO HAYA
EFECTUADO O DEBA EFECTUAR O POR SERVICIOS QUE HAYA PRESTADO O
DEBA PRESTAR”.
En el caso de marras resulta de aplicación el convenio colectivo de trabajo 507/07 para
empleados del Sindicato de Vigiladores, en el marco del cual y por medio de la
negociación colectiva se establecieron acuerdos colectivos que fueran homologados por
el Ministerio de Trabajo de la Nación. A partir de ello se otorgaron sendos aumentos
salariales en carácter de asignación/suma no remunerativa, que luego en un futuro más o
menos mediato adquirirían carácter remunerativo.
Con los acuerdos de composición salarial mencionados supra, actualmente los salarios
básicos de convenio permanecen diferenciados de las demás sumas salariales otorgadas
posteriormente, las cuales mantienen aún hoy su carácter de no remunerativas, fruto de
las distintas prórrogas a la incorporación de las mismas al salario básico.
Ahora bien, dichas "asignaciones/sumas no remunerativas" a la luz de la normativa
vigente resultan excluidas de las bases de cálculo establecidas en los el arts 201, 232, 233,
245 de la LCT. Entendemos que no, por más que las partes pretendan darle naturaleza no
salarial o retributiva, las mismas tienen el carácter establecido en el art 103 de la LCT.
Afirmando lo antedicho respecto a la naturaleza remunerativa de las mal llamadas
asignaciones no remunerativas, la Sala X del fuero en autos 'Gimenez Patricia Dolores
c/Blockbuster Argentina S.A. s/ despido' - recientemente a dicho:
"Nuestra legislación laboral adoptó un concepto amplio de salario a través del
dispositivo del art. 103 de la ley de contrato de trabajo según el cual "...se entiende por
remuneración la contraprestación que debe percibir el trabajador como consecuencia
del contrato de trabajo". Es decir que cualquier pago originado en el trabajo recibido,
en la existencia del contrato o bien en la puesta a disposición de la fuerza de trabajo
tiene en principio naturaleza remuneratoria. Y digo "en principio" porque están
excluidas aquellas excepciones que surgen de la ley por no tener origen en las causas
mencionadas."
Evidentemente los aumentos salariales otorgados a los empleados del sindicato
mencionado, mediante los acuerdos colectivos no constituyen una gracia, donación o
beneficio destinado a mejorar la calidad de vida del dependiente por parte de sus
empleadores, sino que se trata lisa y llanamente el pago de la prestación de servicios
efectuada por el dependiente y por ello es de carácter remunerativo.
Al respecto, hace muchísimo tiempo Deveali ha dicho que el carácter oneroso de la
relación de trabajo "...se refiere no exclusivamente al trabajador, sino también al
empleador. Como se excluye el carácter gratuito en cuanto a las prestaciones del
trabajador, por igual razón corresponde excluir tal carácter en cuanto a todos los pagos
efectuados por el empleador y las obligaciones contraídas por el mismo y la exclusión
del carácter gratuito importa negar que se trate de donaciones" (Deveali, Mario L.,
Donaciones, gratificaciones e indemnizaciones en el contrato de trabajo, en D.T. 1946 -
172).-
La reforma constitucional del año 1994 se ha conformado el denominado en doctrina
"bloque de constitucionalidad federal" que está integrado, en lo que aquí interesa, no sólo
por nuestra constitución formal o escrita sino también por el mentado convenio de la
O.I.T, ratificado por nuestro país.
Tal convenio adopta un criterio amplio y similar al del dispositivo del art. 103 de la ley
de contrato de trabajo cuando define al "salario" como "...la remuneración o ganancia,
sea cual fuere su denominación o método de cálculo, siempre que pueda evaluarse en
efectivo, fijada por acuerdo o por la legislación nacional, y debida por un empleador a
un trabajador en virtud de un contrato de trabajo, escrito o verbal, por el trabajo que
este último haya efectuado o deba efectuar o por servicios que haya prestado o deba
prestar" (art. 1º).-
En definitiva, el fallo precitado termina diciendo: "Desde dicha perspectiva normativa y
aplicando la norma internacional de grado superior (art. 1º convenio 95 de la O.I.T.),
corresponde receptar el planteo formulado por la actora en la medida en que el aumento
acordado y calificado como "no remunerativo" constituye una ganancia que está ligada
estrechamente a la prestación de servicios, afectando esa calificación al derecho del
trabajador a una remuneración "justa" (art. 14 bis C.N.) y al derecho de propiedad (art.
17 ídem)".
Por otro lado, La Corte Suprema de Justicia de la Nación, en autos "Pérez, Aníbal R. v.
Disco SA" (01/09/2009), declaró la inconstitucionalidad del art. 103 bis, inc. c), LCT, en
tanto dispone que los vales alimentarios no tienen carácter salarial. Por unanimidad, la
Corte Suprema de Justicia de la Nación declaró la inconstitucionalidad del inciso “c” del
artículo 103 bis de la Ley de Contrato de Trabajo (Nº 24.700, de 1996, que modificó a la
20.744). Esa norma negaba el carácter salarial a los “vales alimentarios” y a las “canastas
de alimentos”, a los cuales denominaba “beneficios sociales”, lo cual impedía que su
importe fuese tomado en cuenta para calcular una indemnización por despido.
En ese orden de ideas, el máximo tribunal declaró: “Llamar a dichos vales, en el caso,
"beneficios sociales", "prestaciones de naturaleza jurídica de seguridad social, no
remunerativas"; mutar al trabajador en beneficiario y al empleador en beneficiador;
suplantar como causa del crédito o ganancia al contrato de empleo por un acto del
empleador ajeno a este último; introducir en un nexo oneroso para ambos celebrantes
una suerte de prestación gratuita por parte de una de éstas, el empleador, traduce una
calificación que, por repetir los términos de un precedente que guarda con el sub
discussio un estrecho grado de vinculación, resulta "poco afortunada, carente de
contenido, y un evidente contrasentido".
Los jueces subrayaron que la relación de trabajo muestra una especificidad que la
distingue de muchos otros vínculos jurídicos, puesto que la prestación de una de las
partes, el trabajador, está constituida por la actividad humana, inseparable e indivisible
de la persona del hombre y, por tanto, de su dignidad.
“(…) Así como es indudable que "salario justo", "salario mínimo vital móvil", entre otras
expresiones que ya han sido recordadas, bien pueden ser juzgados, vgr., en punto a la
relación adecuada entre los importes remuneratorios y las exigencias de una vida digna
para el empleado y su familia, también lo es que, además de ello, el salario se proyecta
con pareja intensidad a otro costado de la dignidad del trabajador. Se trata, en breve, de
que es preciso y necesario que a la persona trabajadora le sea reconocido, de manera
tan plena como sincera, que se ha "ganado la vida" en buena ley, que toda ganancia que
obtiene del empleador con motivo o a consecuencia del empleo, resulta un salario, i.e.,
una contraprestación de este último sujeto y por esta última causa. Y si mortificar la
dignidad de la persona implica, en general, hacerlo del fundamento definitivo y fuente
de los derechos humanos ("Aquino", cit., p. 3777), tal agravio se vuelve más que patente
cuando interesa a la dignidad del trabajador subordinado, habida cuenta del
encarecimiento que formula al respecto el bloque de constitucionalidad (…) Sólo es
calificable de "trabajo digno", el que "respeta los derechos fundamentales de la persona
humana, así como los derechos de los trabajadores en lo relativo a condiciones de [...]
remuneración" (…). Luego, dichos reconocimiento y contraprestación sólo pueden y
deben ser llamados, jurídicamente, salario, remuneración o retribución.”
Y agregaron: “Tiene dicho la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en un caso
estrictamente relacionado con el derecho del trabajo, que la obligación de respeto y
garantía de los derechos humanos, que normalmente tiene sus efectos en las relaciones
entre los Estados y los individuos sometidos a su jurisdicción, 'también proyecta sus
efectos en las relaciones interindividuales', lo cual alcanza al 'marco de la relación
laboral privada, en la que el empleador debe respetar los derechos humanos de sus
trabajadores'
Los ministros Highton de Nolasco, Fayt y Argibay enfatizaron que en diciembre de 2007,
el Congreso derogó los incisos b y c del artículo 103 bis y lo sustituyó por la ley 26.341,
y se refirieron al Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, que
en su artículo 6 dispone que el derecho a trabajar “comprende el derecho de toda persona
de tener oportunidad de ganarse la vida mediante un trabajo”. En su artículo 7 establece
al “salario” o la “remuneración” como la prestación debida por el empleador al empleado,
cuando el trabajo se materializa mediante relación de dependencia. En síntesis, si el patrón
paga al empleado por un servicio prestado, no es otra cosa que salario/sueldo. Por ello
para el cálculo de las indemnizaciones emergentes de los arts 233, 233 y 245 y en la
liquidación que se efectuará en el correspondiente punto del presente, las mal llamadas
asignaciones no remuneratorias, se incluyen en el cálculo de la remuneración normal y
habitual devengada, lo que solicito sea receptado en forma favorable por V.S. en razón
de los argumentos antes esgrimido.

XVII.- RESERVA CASO FEDERAL.-


Hago expresa reserva del caso federal para recurrir ante la Corte Suprema de Justicia de
la Nación a través del remedio previsto en el Art. 14 de la Ley Ntro. 48 por la lesión
flagrante e inadmisible de a las garantías y derechos constitucionales precedentemente
mencionados.

XVIII.- SOLICITA OPORTUNAS COMUNICACIONES DE LEY.-


Solicito que, en su oportunidad procesal y en el supuesto de que sea procedente, se le
comunique al Sistema Único de Registro Laboral y a la Administración Federal de
Ingresos Públicos los resultados del proceso, en los términos del Art. 17 de la Ley 24.013
y del Art. 132 de la L.C.T, a los fines de que se arbitre las medidas a que den lugar el las
prerrogativas del poder de policía que se arrogan estos organismos y se determine y
ejecute la deuda fiscal que con motivo de la presente litis se hubiere generado o
reconocido.-

XIX.- DENUNCIA CONVENIO DE HONORARIOS.-


Por las tareas profesionales reconozco un importe equivalente al 20% (veinte por ciento)
de todas las sumas devengadas judicialmente en autos sobre los rubros de capital,
actualización por desvalorización monetaria e intereses, a favor del Dr. MATIAS
GRIMBERG, Tº 107 Fº 416 C.P.A.C.F., ello sin perjuicio del derecho del profesional a
la percepción íntegra de los honorarios que fueran regulados en la calidad de costas a
cargo de la parte demandada, si así se dispusiera en autos.-

XX.- PRESTA JURAMENTO.-


Se otorga juramento manifestando que la presente demanda no tuvo radicación anterior,
siendo ésta la primera y única presentación interpuesta por ante el Poder Judicial que
invoca los hechos y derechos que se han puesto a consideración.-

XXI.- AUTORIZACIONES.-
Autorizo a tomar vistas del expediente, retirar copias, diligenciar oficios, cédulas y/o
testimonios, a retirar el expediente en préstamo, realizar fotocopias y demás actos
relacionados a la compulsa del mismo en forma indistinta, además de mi letrado
patrocinante Dr. MATIAS GRIMBERG, Tº 107 Fº 416 C.P.A.C.F., y/o al Sr.
ALFREDO H. GRIMBERG DNI 12.277.372 y/o al Dr. IGAL DANIEL SCHATZTº
130 Fº 774 C.P.A.C.F y/o al Sr. DAMIAN BENSOUSAN LAHMANY DNI 31.344.202
y/o el Dr. FABIO DAVID GLAJCH DNI Tº 124 Fº 344 C.P.A.C.F. y/o a la Sra.
MAGALI YAEL TROP DNI: 34.744.886 y/o al Sr. GUILLERMO EITAN SCHATZ
DNI 43.085.146. y/o RUBEN OBADIA BUENOS DNI 42.646.007; y/o KEVIN
MATIAS ELKAN DNI 37.124.878; y/o al Sr. EZEQUIEL AUGUSTO GÓMEZ
PUSCAR T° 139 F° 428 y/o URIEL BIRNBAUN DNI 38.995.109; y/o al Sr.
SEBASTIAN PALAIS DNI 39.466.591.-

XXII.- PETITORIO.-
Por todo lo expuesto, solicito a V.S:
1) Se me tenga por presentado, por parte y por constituido el domicilio procesal y
electrónico.-

2) Se dé traslado de la demanda por el término y bajo apercibimiento de ley.-

3) Se tenga presente la prueba ofrecida y se reserve la prueba documental en caja fuerte


por Secretaría, a cuyo fin agrego copia para el Expediente;

4) Se tenga presente el convenio de honorarios denunciado y las autorizaciones


conferidas.-

5) Oportunamente se haga lugar a la pretensión de la demanda en todos sus términos, con


más la actualización monetaria, intereses (Art. 274 L.C.T.) y con expresa imposición de
costos y costas a la contraparte.-

Proveer de conformidad, SERÁ JUSTICIA.

Signature Not Verified


Digitally signed by MATIAS
GRIMBERG
Date: 2023.05.10 18:55:03 ART

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