Está en la página 1de 5

LA PRESENCIA DE MARÍA EN EL CICLO DE

TEMPORE

“En el ciclo de tempore son evidentemente privilegiados, bajo el aspecto


mariano, los períodos que recuerdan la espera del Salvador y su
nacimiento, mientras que es menos vistosa la memoria de María en
ciclo de pascua, en su preparación cuaresmal y en su prolongamiento,
que va hasta pentecostés, a diferencia de lo que ocurre en las liturgias
orientales, donde el recuerdo de María se distribuye de un modo más
equilibrado a lo largo del año”. P. 2044

El hecho de que se introduzcan memorias de la


Virgen en el año litúrgico pone en evidencia el
vínculo estrecho que existe entre la Madre y los
misterios del Hijo.
EN EL TIEMPO DE ADVIENTO
todo el tiempo posee una típica
característica mariana, subrayada, ya desde En las ferias entre el 17 y el 24 de diciembre,
el primer domingo, por algunos elementos María viene a ser el testigo silencioso del
de la liturgia de las Horas, como los himnos cumplimiento de las promesas; se leen los
y las antífonas, donde el nombre de María
evangelios de la infancia, episodios en los que
aparece con frecuencia; son también
variados los formularios que se ofrecen para María emerge en primer plano como
la antífona final de completas. protagonista.

ESPERA PRESENCIA MISTERIO CUMPLIMIENTO ORACIÓN

El tiempo de adviento En el breve espacio de cuatro semanas "En los formularios de la misa han sido
celebra la economía se acumula la celebración de tres recuperados preciosos textos eucológicos,
veterotestamentaria de misterios: la solemnidad de la entre los cuales conviene mencionar la colecta
la espera, en la cual está Inmaculada Concepción (8 de del 20 de diciembre, síntesis maravillosa de
ya presente María. diciembre) como celebración autónoma; teología y de piedad”. P. 2044
el anuncio a María y su visita a Isabel.
EN EL TIEMPO DE NAVIDAD

01
Celebraciones
Riqueza contenida
en los evangelios
Se propone repetidamente la alusión a
la visita de los pastores. Se celebra la Narran el nacimiento del Salvador
fiesta de la sagrada familia, que y de los episodios que le siguen,
hacen del tiempo de navidad una
menciona la presencia de María junto a
prologada memoria de la
José en Belén y en Nazaret; se alude a
maternidad divina, virginal,
la circuncisión e imposición del
salvífica de aquella que,
nombre de Jesús, se recuerda la
conservada intacta su virginidad,
presentación de Jesús en el templo y dio a luz al Salvador del mundo.
la adoración de los magos.

Nota: La reforma litúrgica ha recuperado para este tiempo también la


solemnidad de la Madre de Dios 1 de enero.

“...se prolonga hasta la presentación del Señor en el templo (2 de febrero), se


puede considerar una celebración de la maternidad de María y del papel que
ella desempeña en la manifestación del Señor en cuanto Salvador: bajo esta
luz hay que ver la presencia de María en las bodas de Caná, episodio
recordado también en la epifanía”. P. 2046
EN EL TIEMPO PASCUAL Y SU PREPARACIÓN CUARESMAL

En la liturgia cuaresmal, las referencias a la Virgen son más bien escasas, reducidas a
alguna mención en las preces de vísperas, la Marialis Cultus guarda silencio.

"Un esmerado análisis de los textos del triduo pascual muestra que, no obstante,
su sobriedad y su estilo eucológico, la liturgia romana no ha marginado en realidad
a la Virgen María”. P. 2046

Durante todo el tiempo pascual hasta pentecostés, la liturgia de las Horas se


concluye en completas con el júbilo del Regina Caeli.

La sobriedad de referencias marianas en este tiempo litúrgico es una invitación a fijar con
María los ojos y el corazón en el rostro del resucitado y a meditar sus palabras haciendo
exégesis a la luz de la resurrección.

“Pero la presencia implícita de María sugiere el leer también en este silencio tan discreto la
ejemplaridad de María para la iglesia que va caminando hacia la pascua en la escucha atenta de la
palabra, en el fiel cumplimiento de la voluntad de Dios, en la gran peregrinación de la fe”. P. 2048.
EN EL TIEMPO “PER ANNUM”

La memoria del sábado es la que da al ritmo de la semana una


impronta mariana, ya sea mediante la celebración votiva de la
Santa María en sábado con sus textos respectivos, ofrecidos en
el misal y por la liturgia de las horas.

La memoria cotidiana de la Virgen tiene lugar en la


plegaria eucarística de la misa y en la liturgia de las
horas.

“Recordemos que el cántico del


Magnificat se recoge, en algunos de
sus motivos, en la oración conclusiva
de vísperas de las cuatro semanas
del salterio”. P. 2048

También podría gustarte