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REGLAMENTO INTERNO

JUNIO DE 2023

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REGLAMENTO INTERNO DEL EJIDO NCPE. HUATUSCO
MUNICIPIO DE BACALAR, ESTADO DE QUINTANA ROO.

CONTENIDO

INTRODUCCIÓN
ANTECEDENTES
TÍTULO PRIMERO DISPOSICIONES GENERALES
DE LOS EJIDATARIOS, EJIDATARIAS, POSESIONARIOS,
TÍTULO SEGUNDO
POSESIONARIAS, AVECINDADAS Y AVECINDADOS
Capítulo Primero De las Ejidatarias y los Ejidatarios
Capítulo Segundo De las Obligaciones y Derechos de las Ejidatarias y los Ejidatarios
Capítulo Tercero De la Aceptación y Separación de Ejidatarias y Ejidatarios
Capítulo Cuarto De la Pérdida de Derechos Ejidales
Capítulo Quinto De la Actualización de Padrón Ejidal
Capítulo Sexto De las Avecindadas y Avecindados
Capítulo Séptimo De las Posesionarias y Posesionarios
TÍTULO TERCERO DE LOS ÓRGANOS DEL EJIDO
Capítulo Primero De la Asamblea
Capítulo Segundo De las Formalidades de las Asambleas
Capítulo Tercero Del Comisariado Ejidal
Capítulo Cuarto Del Consejo de Vigilancia
De la Elección de los Órganos de Representación y Vigilancia del
Capítulo Quinto
Ejido
De la Remoción de los Integrantes de los Órganos de
Capítulo Sexto
Representación y Vigilancia del Ejido
TÍTULO CUARTO DE LAS TIERRAS EJIDALES
Capítulo Primero De las Tierras para el Asentamiento Humano
Capítulo Segundo De las Tierras de Uso Común
Capítulo Tercero De las Tierras Parceladas
TÍTULO QUINTO DEL USO Y APROVECHAMIENTO DE LAS AGUAS DEL EJIDO
TÍTULO SEXTO FONDOS COMUNES
TÍTULO SEPTIMO DELITOS, FALTAS Y SANCIONES
TÍTULO OCTAVO DEL DESARROLLO FORESTAL SUSTENTABLE
De la Organización para la Administración de los Recursos
Capítulo Primero
Forestales
Capítulo Segundo Del Ordenamiento y Desarrollo Forestal
Capítulo Tercero De la Asistencia Técnica
Capítulo Cuarto De las Plantaciones Forestales Comerciales
Capítulo Quinto De la Comercialización de Productos y/o Servicios Forestales
Capítulo Sexto De los Servicios Ambientales
Capítulo Séptimo De la Conservación y Restauración Forestal
Capítulo Octavo Del Aprovechamiento, Protección y Fomento de la Fauna Silvestre
Capitulo Noveno Del Aprovechamiento de los Recursos No Renovables
TRANSITORIOS

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INTRODUCCIÓN

El Reglamento Interno es un instrumento jurídico formal, que tiene por objeto


regular la organización socio-económica y el funcionamiento del ejido,
establecer los derechos y las obligaciones de sus integrantes, normar sus
actividades productivas conforme al régimen de manejo sustentable adoptado
para garantizar el aprovechamiento integral de sus tierras y demás recursos
naturales, siendo de observancia obligatoria para todos los ejidatarios y la
violación de sus preceptos sancionada conforme a lo que establece el propio
Reglamento en concordancia con la Ley Agraria y demás disposiciones que
resulten aplicables.
El artículo 10 de la Ley Agraria establece que "Los ejidos operan de acuerdo con
su reglamento interno, sin más limitaciones en sus actividades que las que
dispone la Ley. Su Reglamento se inscribirá en el Registro Agrario Nacional, y
deberá contener las bases generales para la organización económica y social del
ejido que se adopten libremente, los requisitos para admitir nuevos ejidatarios,
las reglas para el aprovechamiento de las tierras de uso común, así como las
demás disposiciones que conforme a esta Ley deban ser incluidas en el
Reglamento y las demás que cada ejido considere pertinentes”.
El presente Reglamento Interno se integra por ocho títulos que contienen las
disposiciones generales del ejido, los ejidatarios y las ejidatarias, posesionarios,
posesionarias, avecindados y avecindadas, los órganos del ejido, y las tierras
ejidales, así como lo relativo al desarrollo forestal sustentable de las tierras con
recursos forestales para propiciar el aprovechamiento de los recursos naturales
bajo un enfoque de rentabilidad económica en un esquema de manejo
sustentable que redunde en mejores condiciones de vida de los titulares de
derechos agrarios sustentado en el marco de la Ley Agraria y la Ley General de
Desarrollo Forestal Sustentable.
El logro de la igualdad y el empoderamiento de mujeres representa un desafío
para los países, puesto que, a pesar de los grandes avances en esta materia, ellas
siguen siendo discriminadas de distintas maneras y ven limitadas sus
oportunidades de desarrollo. Esto se refleja en obstáculos para el ejercicio de sus
derechos sexuales y reproductivos; en la incorporación de las mujeres en el
mercado laboral en condiciones de desventaja con respecto a los hombres; en
que en ellas continúa recayendo la responsabilidad, casi exclusiva, del trabajo
doméstico y de cuidados no remunerado; en que son las mujeres quienes en
mayor medida dependen económicamente de otras personas al no contar con
ingresos propios y están más propensas de caer en pobreza; además, las mujeres
están subrepresentadas en diversos espacios de toma de decisión y su
participación plena en el ámbito político se ve obstaculizada. La manifestación
más extrema de la discriminación hacia las mujeres es la violencia, sea
emocional, económica, patrimonial, física o sexual, la cual ocurre en diversos
espacios como el familiar, el comunitario e institucional.

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Todo ello hace necesario que los países realicen esfuerzos mayores que van desde
adecuaciones y fortalecimiento a los marcos jurídicos, normativos e
institucionales, el establecimiento de presupuestos etiquetados para la igualdad y
la reorientación de las políticas públicas, hasta la promoción de un cambio
cultural profundo libre de estereotipos de género, que amplíe las posibilidades
de erradicar todas las formas de discriminación contra las mujeres y las niñas en
todos los ámbitos.
La Ley General para la igualdad entre hombres y mujeres, establece que mujeres
y hombres deben tener acceso con las mismas posibilidades y oportunidades al
uso, control y beneficio de bienes, servicios y recursos de la sociedad, así como a
la toma de decisiones en todos los ámbitos de la vida, social, económica,
política, cultural y familiar.
Este reglamento fue elaborado y aprobado por la asamblea general de ejidatarios,
respetando las costumbres y tradiciones del ejido y con fundamento en los
Artículos 27 fracción VII párrafos primero, segundo, tercero y cuarto de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; 10 Y 23 fracción I de la
Ley Agraria.

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ANTECEDENTES

El Ejido N.C.P.E. HUATUSCO, del Municipio Bacalar, Estado de Quintana Roo, que fue creado
por resolución presidencial de dotación de tierras de fecha 02 de febrero de mil Novecientos
Setenta y Seis, beneficiándose con 8,300, 00-00 hectáreas, Publicada en el Diario Oficial de la
Federación con fecha 26 de marzo de 1976, ejecutándose la resolución mediante acta de posesión
y deslinde definitivo con fecha 21 de febrero de 1981.
Asimismo, con fecha 24 de Julio de 1994, se celebro al interior del ejido, Asamblea de
Delimitación, Destino y Asignación de Tierras Ejidales y Derechos sobre las mismas, acto por el
que de conformidad con lo dispuesto por el articulo 56 de la Ley Agraria y su Reglamento en
materia de Certificación de Derechos Ejidales y Titulación de Solares, en la cual se aprobaron los
planos general e interno del ejido en los que se señala una superficie general de 8, 243-04-09.20
hectáreas, correspondiendo dentro de este orden a la zona de asentamiento humano una
superficie de 60-73-43.03 hectáreas, distribuidas los solares de la siguiente manera: 107 solares
asignados, 9 de servicios públicos, y 8 solares no asignados y 41 vacantes, haciendo un total de
165 solares. Así también con fecha 29 de Septiembre de Mil Novecientos Noventa y Cuatro se
celebro al interior del ejido, Asamblea de Delimitación, Destino y Asignación de Tierras Ejidales
y Derechos sobre las mismas, acto por el que de conformidad con lo dispuesto por el articulo 56
de la Ley Agraria y su Reglamento en materia de Certificación de Derechos Ejidales y Titulación
de Solares, en la cual se aprobaron los planos general e interno del ejido en los que se señala una
superficie general de 8, 243-04-09.20 hectáreas, correspondiendo dentro de este orden a la zona
de asentamiento humano una superficie de 60-73-43.03 hectáreas, 8,179-05-11.45 hectáreas a las
tierras de uso común, de las cuales se descuentan 40 hectáreas para la parcela escolar y 40
hectáreas corresponden a la parcela de la UAIM, cabe aclarar que estas ultimas no se delimitaron.
Por otra parte, el ejido, en asamblea celebrada en términos de los artículos 10, 23 fracción I, 24 al
27, 30, y 31 de la Ley Agraria, con fecha 15 de enero del año dos mil Seis aprobó la modificación
y/o actualización del reglamento interno:

De igual forma, el ejido, en asamblea celebrada en términos de los artículos 10, 23 fracción I, 24
al 27, 30, y 31 de la Ley Agraria, con fecha _____de _____ del 2023, acordó aprobar y expedir
el presente:

REGLAMENTO INTERNO

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TITULO PRIMERO

DISPOSICIONES GENERALES

Artículo 1°. Este Reglamento tiene por objeto regular la organización


socioeconómica y el funcionamiento del ejido, establecer los derechos y las
obligaciones de sus integrantes, normar sus actividades productivas conforme al
régimen de manejo sustentable adoptado para garantizar el aprovechamiento
integral de sus tierras y demás recursos naturales, para los efectos de la gramática
a utilizar se entenderá por:

I. Ley: Ley Agraria


II. El Núcleo Agrario: El N.C.P.E Huatusco, del Municipio de Bacalar, Q.
Roo.
III. Procuraduría: Procuraduría Agraria
IV. Secretaria: Secretaria de Desarrollo Territorial y Urbano
V. Ejidatarios: Mujeres y Hombres Titulares de Derecho que tienen dicha
calidad
VI. Posesionarios: Mujeres y Hombres Titulares de Derecho que tienen
calidad de avecindado y que son titulares de tierra en el Núcleo Agrario.
VII. Sucesores: Mujeres y Hombres susceptibles de adquirir derechos
VIII. Avecindados: Mujeres y Hombres Titulares de Derecho que tienen dicha
calidad
IX. Jornaleros Agrícolas: Mujeres y Hombres que se desempeñen en el Núcleo
Agrario, sin contar calidad alguna, pero si realizando actividades propias
del campo, percibiendo un salario por su fuerza de trabajo.
X. Sujetos de Derecho: Los incluidos en las fracciones V, VI, VII, VIII y IX.

Artículo 2°. El reglamento podrá revisarse y modificarse por acuerdo de la


asamblea, cuando así lo amerite. Cuando se modifiquen sus disposiciones, se
procederá nuevamente a inscribirlo en el Registro Agrario Nacional.
Artículo 3°. El Ejido "N.C.P.E. Huatusco", tiene personalidad jurídica y
patrimonio propio y es propietario de las tierras que le fueron dotadas por
resolución presidencial, mismas que fueron regularizadas a través del Programa
de Certificación de Derechos Ejidales y Titulación de Solares "PROCEDE".
Artículo 4°. El ejido manifiesta que con base a los artículos 10, 14, 74 Y demás
relativos de la Ley Agraria, para su desarrollo agrosilvopecuario y
socioeconómico, cuenta con los recursos; que les permite contener las bases
generales para la organización económica y social que constituyen el sustento
económico de la vida en comunidad en el ejido. Para efectos del Reglamento
Interno el ejido reconoce y divide las tierras de uso común en parcelas internas
económicas o de hecho o trabajaderos y reserva forestal; por estas se entenderá
como:

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Parcelas Internas económicas o de hecho o trabajaderos. - Corresponde a la
superficie de tierra ejidal que por uso y costumbre trabajan en lo individual cada
uno de los ejidatarios, siendo ésta una superficie variable en una unidad o más de
una, según las condiciones de aprovechamiento de los recursos naturales, dicha
área de trabajo sirve para satisfacer las necesidades de producción de alimentos
de los ejidatarios para sus familias o con fines de producción comercial a escala.
Dichas áreas están debidamente deslindadas al interior del ejido y son
reconocidas y respetadas por cada uno de los ejidatarios en lo individual de
manera interna.
Área Forestal. - Tierras de uso común que no han sido reconocidas a ningún
ejidatario en lo individual como su trabajadero o parcela interior económica o de
hecho, reservándose la asamblea general el reconocimiento del uso de la
superficie. El área forestal permanente del ejido es una superficie de 2000-00-00
hectáreas. Todos los beneficios materiales y económicos le corresponden al
ejidatario, de acuerdo con la proporción de sus tierras, siempre y cuando este
cumpliendo con sus obligaciones.

TIERRAS DE ASENTAMIENTO HUMANO


Integra el área necesaria para el desarrollo de la vida en comunidad del ejido,
que está compuesto por los terrenos en que se ubica la zona de urbanización,
fundo legal y su reserva de crecimiento en su caso.

CUERPOS DE AGUA
Comprende estos: las lagunas, cenotes, aguajes y aguadas, comprendidos de las
tierras de uso común, los cuerpos de agua que no hayan sido reconocidos en lo
individual serán de uso común, así mismo la superficie a orilla de los cuerpos de
agua, después del derecho de vía o zona federal también serán de uso común. Si
se reconocieran dichas áreas en lo individual se deberá asentar en el libro de
registro y deberá hacerse por aprobación de la asamblea general de ejidatarios
debiendo el interesado sacar los permisos correspondientes y cubrir los requisitos
de ley.
INFRAESTRUCTURA
Se conforma por todos los caminos de acceso, derecho de vía, troco, brechas,
áreas con infraestructura que se dotaron en su momento y que no han sido
reconocidas en lo individual o en grupos de trabajo.

Artículo 5°. El ejido manifiesta que con base a los artículos 10,73,74 de la Ley
Agraria y 41, 42 y 46 del Reglamento de la Ley en materia de certificación de
derechos ejidales y titulación de solares. Reconoce que cada uno de los
ejidatarios cuenta con una superficie de 58 hectáreas de terreno de tierras de uso
común, denominada como parcela interna económica o de hecho o trabajadero,
mismos que se deberá reconocer por asamblea general, en la cual realizan todo
tipo de actividades agropecuarias a fin de satisfacer las necesidades de sus familias
en cuanto al aprovechamiento de los recursos.
Que dicha área es respetada y reconocida por cada uno de los ejidatarios al estar
debidamente deslindada internamente.

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Artículo 6º. Para la aplicación y cumplimiento de este reglamento, la asamblea
faculta al comisariado ejidal para que acuda a realizar las gestiones necesarias ante
las diversas dependencias de los gobiernos federal, estatal y municipal con el
propósito de recibir la asesoría y autorizaciones y demás servicios que requiera.

Artículo 7°. El ejido contara con un libro de registro a cargo del comisariado
ejidal, en el que se asentaran el nombre y datos básicos de identificación de los
ejidatarios, así como los siguientes datos:

➢ Los derechos que les corresponde sobre las tierras de uso común.
➢ La ubicación y colindancia de las áreas de trabajaderos o parcelas
interiores, así como las permutas (altas y bajas) de las mismas entre
ejidatarios, una vez que la asamblea lo apruebe con el acta
correspondiente y con la firma del comisariado ejidal, así mismo los
avecindados o posesionarios, en caso de querer ceder la superficie a otra
persona deberán darlo a conocer a la asamblea ya que en caso de omitir
esta disposición la asamblea podrá acordar recoger el área
correspondiente.
➢ Todo lo relativo a los contratos de cesión de derechos ejidales y demás
contratos que en su caso suscribieran los ejidatarios o el ejido.
➢ Todos los demás actos jurídicos que realicen sobre los derechos ejidales.

Artículo 8°. El ejido o los ejidatarios, con la anuencia de la asamblea general


conforme a lo previsto en la Ley Agraria, podrán celebrar cualquier acto jurídico
no prohibido por la ley para el mejor aprovechamiento de las tierras ejidales, así
como para la comercialización y transformación de productos, la prestación de
servicios y cualesquiera otros objetos que permitan a los ejidatarios el mejor
desarrollo de sus actividades, como son:

I. Organizarse, constituirse o ser integrante de figuras asociativas; para la


producción rural.
II. Formular contratos de asociación o aprovechamiento sobre sus tierras de
uso común;
III. Otorgar en garantía el usufructo de sus tierras, y
IV. Aportar tierras de uso común a sociedades civiles o mercantiles.
V. Aportar tierras de uso común que corresponden a su área de trabajo para
cualquier otra actividad agropecuaria y forestal.

Artículo 9°. De conformidad con las disposiciones contenidas en este reglamento


interno, el ejido tendrá los siguientes objetivos:
I. Regular, fomentar y orientar entre los ejidatarios la optima y racional
explotación de sus recursos a partir de utilizar mejores técnicas e
instrumentos de trabajo.
II. Promover la comercialización conjunta y la transformación industrial de
sus productos y recursos, con el propósito de obtener beneficios

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adicionales.
III. Evitar y combatir la depredación ecológica y de manera especial los
incendios forestales y la erosión de los suelos.
IV. Fomentar la ejecución de obras sociales y de desarrollo comunitario para
el beneficio de los ejidatarios y avecindados.

TITULO SEGUNDO

DE LOS EJIDATARIOS, LAS EJIDATARIAS, POSESIONARIOS,


POSESIONARIAS, AVECINDADOS Y AVECINDADAS

CAPITULO PRIMERO

DE LAS EJIDATARIAS Y LOS EJIDATARIOS

Artículo 10°. Para poder ser ejidatario de este núcleo se requiere:

I. Ser mexicano mayor de edad o de cualquier edad si se tiene familia a su


cargo o se trate de heredero de ejidatario.
II. Ser reconocido como avecindado del ejido, excepto cuando se trate de un
heredero;
III. Para los efectos de la ley agraria y este reglamento, la calidad de ejidatario
se acredita con los siguientes documentos:
A. Con el certificado de derechos agrarios expedido por autoridad
competente;
B. Con el certificado de derechos parcelario o sobre las tierras de uso común;
C. Con la sentencia o resolución relativa del Tribunal Unitario Agrario.
IV. Constancia de vigencia de derechos expedida por el Registro Agrario
Nacional, que acredite dicha calidad; o
V. Acta de Asamblea inscrita en el Registro Agrario Nacional.

CAPITULO SEGUNDO

De los Derechos y Obligaciones de las Ejidatarias y los Ejidatarios

Artículo 11°. Las ejidatarias y los ejidatarios en la medida que lo permitan la


capacidad y el desarrollo económico-productivo del ejido, tendrán, además de
los derechos y obligaciones establecidos en la Ley Agraria, los siguientes:

Derechos:

I.- Ejercer el uso, usufructo y disposición sobre las tierras de uso común y del
asentamiento humano, respecto de las que tengan reconocidos derechos, que la
asamblea haya reconocido mediante acta de asamblea, observando al efecto las
disposiciones contenidas en la Ley Agraria, sus reglamentos, este reglamento y
los acuerdos de la asamblea;

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II.- A que se le respete el área de trabajo que se encuentre en las tierras de uso
común, y que este usufructuando, la cual deberá de estar debidamente
mensurada para el efecto de evitar conflicto con los trabajaderos vecinos.
III.- Percibir las participaciones que les correspondan por concepto de utilidades
generadas por la explotación de los recursos renovables y no renovables; siempre
y cuando participen activamente en su cuidado, fomento y preservación, de
conformidad a los antecedentes documentales existentes del ejido o lo que se
acuerde por la Asamblea General o cuando se haya puesto al corriente de sus
obligaciones al momento del reparto para percibir el saldo correspondiente
según sea el caso.
IV.- Aprovechar la madera, huano y palizada o cualquier otro recurso natural en
la parcela económica o trabajadero que la asamblea les haya reconocido siempre
y cuando haya obtenido su permiso por parte del comisariado ejidal o del
consejo de vigilancia y sea para fines de autoconsumo. Dicho permiso será por
escrito y deberá contener el volumen de madera que va a usar o cortar.
V.- Disfrutar de permisos para ausentarse temporalmente del ejido hasta por seis
meses, previa solicitud por escrito a la asamblea; o al comisariado ejidal en caso
de urgencia, debiendo presentar a su representante con su carta poder ante la
asamblea y que sea mayor de edad, no debe ser ejidatario, debiendo cumplir éste
con todas sus obligaciones que tengan en el ejido, sin derecho de voz ni voto,
solo será por asistencia, a efecto de que al termino de su permiso se le pueda
prorrogar este, siempre y cuando esté al corriente de sus obligaciones en el ejido.
VI.- Recibir la indemnización que les corresponda por virtud de la afectación por
expropiación de su área de trabajo en las tierras de uso común y demás bienes
distintos a las mismas, conforme a la ley;
VII.- Asistir a las asambleas de manera personal o través de un mandatario;
mediante carta poder, debidamente suscrita ante dos testigos que sean
ejidatarios, en caso de no saber firmar, imprimirá su huella digital en dicho
documento, solicitando a un tercero que firme a ruego y suplica, asentando el
nombre de ambos. De conformidad con el articulo 13 del presente reglamento.
VIII.- Asistir a las Fajinas de manera personal o través de otra persona sin
excepción alguna, siempre y cuando sea mayor de edad.
IX.- Designar a quien lo sucederá en sus derechos ejidales, cuya lista de sucesión
habrá de depositar en el registro agrario nacional o formalizarla ante fedatario
público, a cuyo efecto deberán de observarse las siguientes disposiciones:

a) En los casos en que el ejidatario sea titular de derechos de un porcentaje


sobre tierras de uso común, podrá designar a un solo heredero para que lo
suceda en todos sus derechos ejidales.
b) El ejidatario en todo tiempo puede revocar la lista de herederos o lista de
sucesión, suscribiendo otra, de conformidad con los requisitos establecidos
por la ley agraria en su artículo 17.
c) Cuando el ejidatario no haya hecho designación de sucesores o cuando
todos y cada uno de los señalados en la lista de herederos no puedan

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heredar por imposibilidad material o legal, sus derechos ejidales de uso
común se transmitirán de acuerdo con el siguiente orden de preferencia:

I.- al cónyuge;
II.- a la concubina o al concubinario;
III.- a uno de los hijos del ejidatario;
IV.- a uno de los ascendientes, y
V.- a cualquier otra persona de las que dependa económicamente de el.

En los casos anteriores, la adjudicación de los derechos sucesorios será


competencia de los tribunales agrarios resolverla.

d) En los casos a los que se refieren las fracciones III, IV y V del inciso anterior,
si al fallecimiento del ejidatario resultan dos o mas personas con derechos a
heredar los herederos tendrán tres meses a partir de la muerte de este para
que decidan quien entre ellos conservara los derechos ejidales; de no
ponerse de acuerdo, el tribunal agrario proveerá su venta y repartirá el
producto en partes iguales, entre las personas con derechos a heredar. en
caso de igualdad de postura en la subasta tendrá preferencia cualquiera de
los herederos.
e) Cuando no existan sucesores, el tribunal agrario proveerá lo necesario para su
venta al mejor postor, de entre los ejidatarios y avecindados del núcleo de
población; el importe de la venta corresponderá al núcleo ejidal.
X.- Asistir a las asambleas de manera personal o a través de un mandatario, en
términos del artículo 37 de la Ley Agraria. Si no puede firmar, bastará con su
huella digital en dicho documento, solicitando a un tercero que firme la misma a
su ruego y en su nombre, asentando el nombre de ambos. Cuando la asamblea
trate los asuntos de las fracciones III, VII a XIV del artículo 23 de la Ley Agraria
no se aceptará mandatario.

Obligaciones:

I.- Asistir puntualmente, participar, firmar el acta de asamblea y anuencia


legalmente convocada, sin portar armas, ni estar bajo el efecto de drogas,
enervantes o bebidas alcohólicas; en caso de retirarse antes del termino de la
asamblea se le contabilizara como inasistencia.
II.- El ejidatario participara en la explotación de las tierras ejidales de uso común,
en la forma y términos que establezca el reglamento interno y la Asamblea para
los casos no previstos y que hayan sido aprobados por la misma;
III.- Participar en las labores de conservación, fomento y restauración forestal, o
de otra índole que se lleven a cabo en el ejido.

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IV.- Las ejidatarias y los ejidatarios que cedan una porción de sus derechos
agrarios, deberán firmar una constancia tanto el cedente como el que adquiere,
El que sede:
I.- Conyugue;
II.- Hijos e hijas del ejidatario (mayores de edad).
El cesionario:
I.- Dos testigos ejidatarias o ejidatarios legalmente reconocidos;
II.- Autoridades ejidales.

V.- Asistir personalmente y en su caso por medio de representante (articulo 13


del presente reglamento), a todas las asambleas legalmente convocadas, y que la
misma haya autorizado para la representación, salvo lo dispuesto por el articulo
14 de este reglamento;
VI.- Participar en las labores comunes que acuerde la asamblea, exceptuándose
de tales obligaciones a quienes justifiquen su incapacidad, pudiendo ampararse
en alguna de las siguientes causas:
1. Los menores de edad, salvo que tengan familia a su cargo;
2. Los mayores de edad disminuidos en sus capacidades físicas y/o mentales;
3. Los que presenten enfermedades crónicas;

En estos casos si el ejidatario no realiza personalmente esas labores deberá hacer


la aportación económica correspondiente para el pago a la persona que haya
participado en su lugar, a menos que la asamblea lo exente de esta obligación,
teniendo la libertad de enviar a la persona de su confianza para que efectúe las
labores comunes que corresponden debiendo ser mayor de edad, a quienes no
realicen las fajinas, el comisariado ejidal les comunicara la fecha y la actividad
que realizará, de manera voluntaria, con el objetivo de reponer su falta.

VII.- Informar a la asamblea sobre sus ausencias para los efectos que prevé este
mismo reglamento a efecto de que se les expidan los permisos correspondientes.
Todo permiso deberá ser por escrito para efectos del control que debe llevar el
comisariado ejidal, al vencimiento del permiso otorgado, el ejidatario deberá
presentarse ante la asamblea para ponerse al corriente en cuanto a fajinas y
asistencias a asambleas, en caso contrario se hará acreedor a una sanción que la
misma asamblea determinará en su momento.
VIII.- Participar en las campañas de prevención, control y combate de incendios
forestales dentro del ejido, de no hacerlo se hará acreedor a una sanción
económica que la asamblea acuerde.
IX.- Respetar y evitar el sacrificio o cacería de la fauna silvestre en los periodos
de producción y gestación de las especies.
X.- Dar a conocer a la asamblea acerca de cualquier persona que estén
empleando con el fin de evitar cualquier problema con los pobladores del núcleo
ejidal.
XI.- Mantener encerrados a sus animales tales como borregos y cerdos, chivos,
vacas, caballos, perros agresivos o que causen daño. En sus áreas de trabajo ejidal

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y que estén en vías de paso para el transporte. En caso de no obedecer esta
disposición se sancionará de acuerdo con lo que la asamblea determine.
XII.- Respetar los caminos a los trabajaderos y vecinales. Así mismo los
ejidatarios que tengan trabajaderos por dichos caminos deberán realizar la
limpieza de los mismos.
XIII.- Denunciar ante autoridad competente a quien se le sorprenda tirando en la
zona urbana, orillas en la carretera o en las parcelas económicas, basura, colillas
de cigarros y botellas que pudiera representar grave peligro para los bienes del
ejido o que pudiera con ello iniciarse un incendio forestal. Al sorprendido se le
sancionara de acuerdo con lo que la asamblea o autoridad competente determine
en su momento.
XIV.- Denunciar ante la asamblea todo tipo de actos que se celebren en
contravención a las disposiciones establecidas en la Ley Agraria y en este
reglamento, así como cuando tenga conocimiento de alguna actividad ilícita tales
como cultivo, siembra, distribución o venta de estupefacientes, drogas,
enervantes o cualquier otra sustancia psicotrópica, violación, robo en todas sus
modalidades (casa habitación, ganado de cualquier especie, etc.), a fin de que la
asamblea tome las medidas correspondientes.
XV.- Es obligación de todo ejidatario elaborar un croquis de las áreas que tiene
trabajando, debidamente firmada por todos los colindantes, el croquis deberá
presentarse ante la asamblea para su debida validación y aprobación en su caso.

Articulo 12°. Los ejidatarios tendrán la obligación de realizar las aportaciones


económicas que les sean requeridas, siempre y cuando se justifique el fin y sean
aprobadas por la asamblea, debiendo rendirle un informe a esta los órganos de
representación ejidal o los ejidatarios que se hubiesen responsabilizado de su
manejo. Siendo obligación del mandatario asumir los acuerdos y compromisos
que establezca la asamblea.

Artículo 13°. No podrán participar en las asambleas de ejidatarios:

I. Los representantes de ejidatarios que no se hayan acreditado conforme a


la ley y este reglamento.
II. Quienes porten armas o se encuentren bajo el efecto de bebidas
alcohólicas, droga o enervantes;
III. Personas extrañas al ejido cuya asistencia no esté debidamente justificada
de acuerdo con el asunto a tratar.
Artículo 14°. Se podrán exonerar de sanciones a los ejidatarios que por
enfermedad o por causas de fuerza mayor les resulte imposible asistir a la
asamblea de que se trate, debiendo para tal efecto demostrar a satisfacción de la
asamblea la causa de la falta a la asamblea, en caso de enfermedad deberá
recabarse el dictamen medico, la incapacidad o constancia medica
correspondiente a la brevedad posible y presentarlo a los órganos de
representación para su conocimiento con anterioridad a la asamblea, sin
embargo su representante deberá cumplir con todas las obligaciones del
ejidatario.

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Artículo 15°. Los ejidatarios que gocen de permisos para ausentarse
temporalmente (6 meses) del ejido perderán el derecho a un nuevo permiso que
les fuese otorgado, que se señalan en este mismo reglamento, si no se presentan
personalmente a la asamblea de ejidatarios al vencimiento del mismo, y en caso
de no poder asistir no lo hagan a través de su representante.

Artículo 16°. Para prorrogar un permiso se requiere que el representante del


ejidatario de que se trate haya cumplido con todas las obligaciones que el
ejidatario titular haya tenido con el ejido durante el periodo en que se autorizo
el permiso.

Artículo 17°. La asamblea no apoyará, ni gestionará y, en su caso, no autorizará


el otorgamiento de beneficios a los ejidatarios que no estén al corriente de sus
aportaciones, fajinas y asistencias a asambleas legalmente convocadas.

CAPITULO TERCERO

De la Aceptación y Separación de las Ejidatarias y Ejidatarios

Artículo 18°. La asamblea además de reconocer la calidad de ejidatario a favor de


quienes cumplan con los requisitos establecidos en el artículo 8 del presente
reglamento, también esta facultada a aceptar como ejidatarios a los individuos
que la misma asamblea les asigne y reconozca derechos cuando:

I. Se hubiesen adquirido por cesión de derechos sobre las tierras de uso


común;
II. Se trate de sucesores de ejidatarios legalmente reconocidos que hubieren
fallecido a los que el Tribunal Unitario Agrario haya declarado sucesor
preferente o haya adjudicado la titularidad sobre los derechos agrarios de
que fuera titular el extinto, respecto de las tierras ejidales y demás
inherentes a su calidad de ejidatarios en el ejido.
III. Se trate de sucesores designados de ejidatarios legalmente reconocidos que
hubieren fallecido a los cuales se les haya efectuado el traslado de
derechos en el Registro Agrario Nacional.
En los casos anteriores, los beneficiarios tendrán que cumplir con los requisitos
establecidos en el artículo 15 de la ley agraria, a excepción de los herederos:

I. Haber sido reconocido como avecindado en el ejido, cuando éste haya


adquirido derechos agrarios mediante cesión.
II. Cumplir con las disposiciones contenidas en el presente reglamento en lo
que les corresponda.
III. Cumplir con las disposiciones contenidas en el presente reglamento en lo
que les corresponda,
IV. Cumplir con la aportación de ingreso, acordada por la asamblea, siendo
esta de $ 1,000.00. para todos aquellos que no tengan parentesco con
algún ejidatario.

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Artículo 19°. Previa comprobación, por parte del comisariado ejidal, de los
documentos requeridos al solicitante, se convocará a asamblea en los términos
que la Ley Agraria prevé para estos casos. Tratándose de la asignación de
derechos sobre las tierras de uso común, los beneficiados con ésta deberán cubrir
los honorarios del fedatario público que asista a la Asamblea, en virtud de
tratarse de una asamblea de formalidades especiales, además de los gastos que se
generen por su reconocimiento.

Artículo 20°. El acta de asamblea que se elabore con motivo de la aceptación de


ejidatarias o ejidatarios deberá inscribirse en el Registro Agrario Nacional, para
los efectos legales correspondientes.
Así mismo siempre que se efectué algún cambio en el padrón de ejidatarios por
la aceptación de ejidatarios, se deberá asentar en el libro de registro y titularidad
de derechos del ejido.

Artículo 21°. La asamblea de separación de ejidatarias o ejidatarios se llevará a


cabo cuando se pierda la calidad de ejidatario o ejidataria por encontrarse en
algunas de las causales previstas en la Ley Agraria, por lo que el máximo órgano
se reunirá para verificar si dicha persona tiene adeudos con el ejido o si éste los
tiene con aquel, en los acuerdos se podrá establecer, entre otros aspectos, la
forma o los plazos para su liquidación.

Artículo 22°. La asamblea, de conformidad con el artículo 23 fracción II de la Ley


Agraria, resolverá la separación de los ejidatarios cuando se cumpla alguno de los
supuestos del artículo anterior, además de los siguientes:

I. Por fallecimiento del ejidatario, cuando se haya efectuado ante el Registro


Agrario Nacional el traslado de derechos agrarios de que fuera titular el
ejidatario a favor del sucesor preferente que hubiere designado en su lista
de sucesión.
II. Por la cesión legal de sus derechos sobre las tierras de uso común o
renuncia de los mismos.

III. Por haber abandonado el ejido y dejado de usufructuar durante cuatro


años sus parcelas internas económicas o de hecho o trabajaderos y
también haber dejado de cumplir con sus obligaciones como ejidatarios
(repique de mensuras, asistencia a asamblea, fajinas y demás que el ejido
considere necesarias para el buen funcionamiento del mismo) previo
juicio correspondiente ante el Tribunal Unitario Agrario.

El acuerdo de asamblea que se refiere a la separación del ejidatario tendrá efectos


declarativos y deberá inscribirse en el Registro Agrario Nacional para los efectos
legales a que haya lugar.

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CAPITULO CUARTO

De la pérdida de los Derechos Ejidales.

Artículo 23°. Son causas de la perdida de la calidad de ejidatario, las señaladas en


el artículo 20 de la Ley Agraria, siendo las siguientes:
I.- La cesión legal de sus derechos sobre las tierras de uso común.
II.- La renuncia de los derechos ejidales que expresamente haga el titular o por
escrito, ante la asamblea que para tal efecto se convoque, entendiéndose que lo
hace a favor del ejido.
III.- La renuncia por escrito que se realice ante dos testigos ejidatarios o
avecindados, y que se ratifique ante la asamblea cuando hubiere cedido sus
derechos sobre tierras de uso común.
III.- Por resolución firme de los tribunales agrarios en caso prescripción negativa,
y como se prevé en el articulo 20 de Fracción III de la Ley Agraria en
concordancia del Articulo 48 de dicho ordenamiento legal.

CAPITULO QUINTO

De la Actualización del Padrón Ejidal

Artículo 24°. El comisariado ejidal de acuerdo con las facultades que le confieren
la Ley Agraria y el presente reglamento realizará acciones encaminadas a la
actualización del padrón ejidal, entre las cuales se encuentran:

a) Hacer del conocimiento de la asamblea, la necesidad de actualizar el


padrón ejidal.
b) Solicitar al Registro Agrario Nacional el padrón de ejidatarios.
c) Revisar el padrón ejidal con el que cuenta el núcleo agrario que
representan o el que les expida el Registro Agrario Nacional.
d) Identificar los ejidatarios fallecidos, los que ya cedieron, enajenaron,
renunciaron, adquirieron dominio pleno sobre sus parcelas, que hayan
perdido o adquirido derechos por prescripción y que no cuentan con más
tierras dentro del núcleo agrario
e) Allegarse por sí mismos o a través de los familiares de los ejidatarios o
ejidatarias señalados en los supuestos de la fracción que antecede, de los
documentos con los que se acredite el hecho o acto señalado en la
fracción referida.
f) Remitir al Registro Agrario Nacional, la documentación de los ejidatarios
o ejidatarias señalada en los supuestos de la fracción d) del presente
artículo.
g) Solicitar al Registro Agrario Nacional, la actualización del padrón de
ejidatarios.
h) Hacer del conocimiento a la asamblea, que el Registro Agrario Nacional
les ha proporcionado el padrón actualizado.

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Artículo 25°. El comisariado ejidal tomará en cuenta el padrón actualizado de
ejidatarias y ejidatarios que le proporcione el Registro Agrario Nacional, para el
pase de lista de las subsecuentes asambleas.

CAPITULO SEXTO

De las Avecindadas y Avecindados

Artículo 26°. Las avecindadas y avecindados del ejido son aquellos mexicanos
mayores de edad que han residido por un año o más en las tierras del núcleo de
población ejidal, y que han sido reconocidos como tales por la asamblea o el
tribunal agrario competente. Así como los que previa anuencia de la asamblea
tengan en uso tierras de uso común en un periodo de un año, demostrando
buena conducta a juicio de la asamblea, haciendo constar tal hecho en acta de
asamblea, además de estar al corriente de sus cuotas, cooperaciones y fajinas
ejidales; o en su caso podrán ser reconocidos como avecindados mínimo 1 año
de estar trabajando en tierras ejidales, previa anuencia de la asamblea si a juicio
del 75 % el total de ejidatarios reconocidos, determina que su calidad moral y
buena conducta lo ameriten, además deberá presentar dos cartas de
recomendación, del lugar donde haya residido en los dos últimos años.
La asamblea podrá reconocer a los avecindados y otorgarles la calidad de
ejidatarios cuando cumplan con los requisitos que se señalan en este reglamento
y gozaran de los derechos que la ley agraria y este reglamento les confiere.

Artículo 27°. Para el reconocimiento de avecindados, se requiere que el


interesado entregue al comisariado ejidal lo siguiente:

I. Original del acta de nacimiento actualizado.


II. Copia de la credencial de elector vigente.
III. Constancia de vecindad por parte del subdelegado municipal,
IV. Antecedentes no penales.
V. En el caso de esposa de ejidatario solo pagaran los gastos que se originen
por las cuestiones administrativas del comisariado ejidal para adquirir la
calidad de avecindados, cuando son hijos de ejidatarios pagaran la
cantidad de $ 1,000.00 y cuando se trate de persona ajena, aportara la
cantidad de $ 2,000.00 para acceder a tal calidad agraria.

De los Derechos y Obligaciones de las Avecindadas y los Avecindados

Artículo 28°. Las avecindadas y los avecindados tendrán los siguientes derechos:
I. Adquirir un derecho sobre tierras de uso común, a través de la cesión de
los mismos.
II. Gozar de los beneficios que reciba el ejido por parte de instituciones
gubernamentales, municipales, estatales o federales
III. Gozar únicamente del uso de tierras de uso común previa autorización de
la asamblea, con la finalidad de realizar actividades agrícolas o pecuarias
en aquellas áreas que se le indique.

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IV. Posibilidad de participar en la subasta que realizan los Tribunales Agrarios
de los derechos del ejidatario o ejidataria, que haya fallecido y que no
cuente con sucesores.
Artículo 29°. Las obligaciones de las avecindadas y los avecindados son:

I. Realizar fajinas en el área urbana y en las áreas de servicio público del


asentamiento humano, tales como el panteón, escuela, clínica, cuando así
lo requiera la asamblea general de ejidatarios.
II. Realizar la limpieza de los frentes de su solar; en caso de aportaciones,
estás podrán ser económicas o en fajinas según sea el caso. De acuerdo
con las leyes aplicables.
III. Participar en las reuniones que para el efecto convoque la junta de vecinos
los órganos de representación legal.
IV. Mantener encerrados a sus animales tales como borregos, chivos, vascas
caballos y perros agresivos de no hacerlo serán acreedores a una sanción
de a cuerdo al daño causado por lo mismos, ya sea a personas o cultivos
ajenos.
V. Queda prohibido la crianza de cerdos dentro de la zona urbana.
VI. Deberán observar buena conducta y no incurrir en faltas o delitos que
pudieran causar un perjuicio a los habitantes del núcleo ejidal ya que al
incurrir en ello serán sancionados de acuerdo al presente reglamento
interno, entendiéndose por faltas o delitos que causen perjuicio a los
habitantes del núcleo los siguientes; cometer actos obscenos, provocar o
iniciar pleitos, atemorizar a la gente, invadir predios en el área de
asentamiento humano, amenazar a los ejidatarios o avecindados, del
núcleo ejidal, hacer uso de armas de fuego, punzocortantes o de cualquier
otro tipo que pudiera causar daño a cualquier persona que viva en el
poblado, cometer actos de robo, vandalismo y los demás que se señalen
en las leyes civiles o penales.
En caso de incumplimiento de las obligaciones establecidas en el presente
Reglamento Interno, al avecindado se le sancionara de acuerdo a la falta
cometida con tres salarios mínimos, a menos que acredite los motivos de su
inasistencia de acuerdo al numeral I, En caso de un acto de omisión de acuerdo
al numeral II Y III, se le sancionara suspendiéndole temporalmente todo tipo de
apoyo que reciba del ejido según acuerdo de la asamblea. Para el caso del
numeral IV y V la persona perjudicada deberá dar parte a la autoridad
competente a fin de que se realice el deslinde de responsabilidades, del
propietario del animal o en su caso pagar el daño o perjuicio ocasionado. Para el
caso del numeral VI, se denunciará ante la instancia competente a fin de que
tome cartas en el asunto y solicitar su desavecindad del núcleo de población al
considerarlas como personas no gratas.

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CAPÍTULO SÉPTIMO

De las Posesionarias y los Posesionarios

Artículo 30°. El posesionario y la posesionaria es aquel campesino o campesina


mexicano o mexicana mayor de edad o de cualquier edad si tiene familia a su
cargo, que adquiere ese carácter por virtud de:
I. Resolución del Tribunal Agrario que le reconozca la titularidad de una
parcela o sobre tierras de uso común;
II. Por cesión o enajenación de derechos parcelarios o de uso común; o
III. Por acuerdo de la asamblea, cuando lo reconoce y asigna derechos con tal
carácter.

Artículo 31°. Las posesionarias y los posesionarios tendrán los siguientes derechos:

I. Las posesionarias y los posesionarios tendrán derechos de uso y disfrute


sobre sus parcelas, así como del porcentaje sobre tierras de uso común del
que sean titulares;
II. Enajenar o ceder sus derechos cumpliendo con los requisitos de ley;
III. Aprovechar su parcela directamente o conceder a ejidatarios, ejidatarias,
posesionarios, posesionarias, avecindados, avecindadas o terceros su uso o
usufructo, mediante aparcería, mediería, asociación, arrendamiento o
cualquier otro acto jurídico no prohibido por la ley,
IV. Adquirir dominio pleno sobre sus parcelas, y
V. Suceder sus derechos parcelarios y/o uso común
VI. Recibir la indemnización en caso de expropiación.

Artículo 32°. Los posesionarios y posesionarias tendrán las siguientes obligaciones:

I. Cumplir con las disposiciones de la asamblea ejidal con relación a la


utilización de los recursos naturales;
II. Cooperar con las cuotas que se establezcan por la asamblea;

TITULO TERCERO

DE LOS ÓRGANOS DEL EJIDO

Artículo 33°. Son órganos del ejido:


I.- La asamblea
II.- El comisariado ejidal; y
III.- El consejo de vigilancia.

CAPITULO PRIMERO

De la Asamblea

Artículo 34°. El órgano máximo de decisión del ejido es la asamblea, la cual se


constituye con la presencia de los ejidatarios con sus derechos legalmente

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reconocidos y en su caso, con los representantes de los ejidatarios para los
asuntos en que la Ley permita su participación.
Artículo 35°. De conformidad con lo establecido en el artículo 23 de la Ley
Agraria, el ejido podrá celebrar dos tipos de asamblea:
I.- Asambleas de mayoría simple o que no requieren de formalidades especiales
para su validez, en las que se tratarán los asuntos a que se refieren las fracciones I
a la VI y XV del artículo 23 de la Ley Agraria; y
II.- Asambleas de mayoría calificada o de formalidades especiales, son aquellas
que deben satisfacer determinados requisitos formales para su validez y eficacia
plena, pues en ella se trataran los asuntos a que se refieren las fracciones VII a la
XIV del artículo 23 de la Ley Agraria.

Artículo 36°. La asamblea se reunirá el ultimo domingo de cada Tres meses, a


partir de las 08:00 horas y cuantas veces así lo requiera, de acuerdo con las
necesidades que tenga el ejido.
Artículo 37°. La asamblea deberá celebrarse en la casa ejidal, y solo por causa de
fuerza mayor, debidamente justificada, se podrá celebrar en lugar distinto a este,
lo cual deberá especificarse en la convocatoria correspondiente.
Artículo 38°. La convocatoria que se expida para tratar cualesquiera de los
asuntos señalados en las fracciones I a la VI y XV del articulo 23 de la Ley
Agraria, deberá ser expedida con una anticipación no menor de ocho días ni
mayor de quince a la fecha de celebración de la asamblea. Si se trata de asuntos
que se refiere en las fracciones VII a la XIV del citado precepto legal, la
convocatoria deberá expedirse por lo menos con un mes de anticipación a la
fecha programada para la celebración de la asamblea.
Artículo 39°. La asamblea podrá ser convocada por el comisariado ejidal o por el
consejo de vigilancia, ya sea a iniciativa propia o si así lo solicitan al menos 20
(veinte) ejidatarios, o el 20% (veinte por ciento) del total de ejidatarios que
integran el núcleo agrario, de acuerdo con lo previsto en el articulo 24 de la Ley
Agraria.
Artículo 40°. Si el comisariado ejidal o el consejo no convocaran a asamblea en
un plazo de cinco días hábiles, contados a partir de la solicitud que les hiciere el
número de ejidatarios que se indican en el artículo anterior, estos podrán
solicitar a la Procuraduría Agraria que convoque a asamblea. La Procuraduría
Agraria podrá también convocar a solicitud de cuando menos el 25 % del total
de ejidatarios del núcleo, para tratar lo relativo a la remoción de los integrantes
del comisariado ejidal y del consejo de vigilancia.

Artículo 41°. La cédula de convocatoria deberá contener cuando menos los


siguientes datos:
I. El lugar, fecha y hora de celebración de la asamblea;
II. El orden del día, especificando claramente los asuntos a tratar;
III. La firma o huella digital del convocante; si este cuenta con sello, deberá
también estamparlo, y
IV. Lugar y fecha de su expedición.

20
Artículo 42°. Para efectos de su publicidad, será responsabilidad del convocante
fijar las cédulas de la convocatoria en los lugares más visibles del poblado y
cuidar su permanencia hasta el día de la celebración de la asamblea, sin perjuicio
de la responsabilidad que al respecto señala el artículo 25 de la Ley Agraria al
comisariado ejidal. Se establecen como lugares más visibles la casa ejidal, tiendas
del poblado.

Artículo 43°. Las asambleas serán presididas por cualquiera de los miembros del
comisariado ejidal y/o consejo de vigilancia, teniendo preferencia para ello el
presidente del comisariado ejidal o del consejo de vigilancia, según sea el caso,
en las que podrán participar con voz pero sin voto las organizaciones sociales e
instituciones del carácter publico o privado que sean invitadas tomando en
cuenta los asuntos que figuren en el orden del día de la convocatoria respectiva.

Artículo 44°. La asamblea por mayoría de votos designará a las personas que
integren la mesa de debates para que realice la conducción del acto, debiendo
integrarse por un presidente, un secretario y dos escrutadores.

Artículo 45°. La asamblea, una vez instalada válidamente, podrá constituirse en


sesión permanente, cuando así lo acuerde la mayoría de los ejidatarios presentes.
El presidente de la mesa de debates propondrá a la asamblea los periodos
necesarios de receso, a fin de que se acuerde lo conducente.

Artículo 46°. Para la instalación valida de la asamblea, cuando esta se reúna por
virtud de primera convocatoria deberán estar presentes cuando menos la mitad
mas uno de los ejidatarios, salvo que en ella se traten los asuntos señalados en las
fracciones VII a XIV del artículo 23 de la Ley Agraria, en cuyo caso deberán estar
presentes, cuando menos, tres cuartas partes del total de los ejidatarios
legalmente reconocidos.

Cuando se reúna en virtud de segunda o ulterior convocatoria la asamblea se


celebrará válidamente con cualesquiera que sea el número de ejidatarios que
concurran, salvo en el caso de las asambleas que conozcan de los asuntos,
señalados en las fracciones VII a la XIV del articulo 23 de la Ley Agraria, la que
quedará instalada únicamente cuando se reúna la mitad más uno del total de
ejidatarios que integran el padrón ejidal.

Artículo 47°. Si el día señalado para la asamblea no se cumplieran las mayorías de


asistencia requeridas para su validez, el convocante elaborará el acta de no
verificativo, misma que servirá de base para que de inmediato se expida la
segunda convocatoria, la que se celebrará en un plazo no menor a ocho días ni
mayor a 30, contados a partir de la expedición de la segunda convocatoria.
Artículo 48°. Cuando la asamblea no se haya celebrado por causas distintas a la
falta de quórum, para su instalación, la nueva asamblea que en su caso se
convoque, deberá reunir las formalidades exigidas para el supuesto de primera
convocatoria.

21
Artículo 49°. Las resoluciones de la asamblea se tomarán válidamente por
mayoría de votos de los' ejidatarios presentes y serán obligatorias para los
ausentes y disidentes, en caso de empate el presidente del comisariado ejidal
tendrá voto de calidad.
Cuando se trate alguno de los asuntos señalados en las fracciones VII a la XIV del
artículo 23 de la Ley Agraria, se requerirá el voto aprobatorio de dos terceras
partes de los asistentes a la Asamblea.

Artículo 50°. De toda asamblea se levantará el acta correspondiente, que será


firmada por los miembros del comisariado ejidal y del consejo de vigilancia que
asistan, así como por los ejidatarios presentes que deseen hacerlo. En caso de que
algún ejidatario o su representante no pueda firmar, imprimirá su huella digital
debajo de donde esté escrito su nombre. Antes de proceder a la firma del acta, el
secretario de actas deberá dar lectura al contenido del acta anterior, para
aprobación de la asamblea.
Cuando exista inconformidad sobre cualquiera de los acuerdos tratados en la
asamblea, los ejidatarios podrán firmar bajo protesta, haciendo constar tal hecho
en el acta que se levante con motivo de la asamblea.

Artículo 51°. De conformidad con lo dispuesto por el artículo 23 de la Ley


Agraria, sus reglamentos y por decisión de la propia asamblea, son de la
competencia exclusiva de esta, los siguientes asuntos:

I. Formulación y modificación del reglamento interno del ejido;


II. Aceptación y separación de ejidatarios, así como sus aportaciones;
III. Informes del comisariado ejidal y del consejo de vigilancia, así como la
elección y remoción de sus miembros;
IV. Rendimiento de cuentas o balances, sobre la aplicación de los recursos
económicos del ejido, así como el otorgamiento de poderes y mandatos,
V. Aprobación de los contratos y convenios, que tengan por objeto, el uso o
disfrute por terceros de las tierras de uso común;
VI. Determinar la distribución equitativa de las ganancias que arrojen las
actividades comunes y colectivas que se lleven a cabo en el ejido;
VII. Señalamiento y delimitación de las áreas necesarias para el asentamiento
humano, fundo legal y parcelas con destino especifico y, en su caso, la
localización y relocalización del área de urbanización;
VIII. Reconocimiento del parcelamiento económico o de hecho y regularización
de la tenencia de posesionarlos.
IX. La aportación de las tierras de uso común a una sociedad, en los términos del
artículo 75 de la Ley Agraria;
X. Delimitación, asignación de las tierras de uso común, así como su régimen de
explotación;
XI. División del ejido o su fusión con otros ejidos.
XII. Terminación del régimen ejidal cuando, previo dictamen de la Procuraduría
Agraria solicitado por el núcleo de población ejidal se determine que ya no

22
existen las condiciones para su permanencia.
XIII. Conversión del régimen ejidal al régimen comunal.
XIV. Los demás que establezca este reglamento, así como el articulo 23 de la Ley
Agraria.
Así también, la asamblea conocerá sobre lo siguiente:
➢ Presentación de los programas de trabajo de los órganos de
representación.
➢ Informe del comisariado ejidal o del consejo de vigilancia sobre el
cumplimiento que se haya dado a los acuerdos tomados por la asamblea
en sesiones anteriores.
➢ Conocimiento y resolución de diferentes problemas económicos y
sociales del ejido.
➢ Los demás que se requieran, por su importancia.
➢ Otras a juicio de la asamblea.

CAPÍTULO SEGUNDO
De las formalidades de las asambleas

Artículo 52°. La asamblea deberá celebrarse dentro del ejido en el lugar


habitual, salvo causa justificada.
Artículo 53°. La convocatoria que se expida para tratar los asuntos
relacionados de la fracción I a la XIII y XXIV, del artículo 24 del presente
reglamento, se emitirá con no menos de ocho días de anticipación ni más
de quince, por medio de cédulas fijadas en los lugares más visibles del
ejido. En la cédula se expresarán los asuntos a tratar y el lugar y fecha de
la reunión. Si el día señalado para la asamblea no hubiera el quórum
necesario para su validez, se elaborará constancia de no verificativo que
servirá de base para expedir la segunda convocatoria de manera inmediata.
En este caso, la asamblea se celebrará en un plazo no menor a ocho ni
mayor a treinta días contados a partir de la expedición de la segunda
convocatoria.
La convocatoria que se expida para tratar cualquiera de los asuntos
señalados en las fracciones XIV a XXIII, del artículo 24 del presente
reglamento, se emitirá con un mes de anticipación a la fecha programada
para la celebración de la asamblea, si el día señalado para la asamblea no
hubiera el quórum necesario para su validez, se elaborará constancia de no
verificativo que servirá de base para expedir la segunda convocatoria de
manera inmediata. En este caso, la asamblea se celebrará en un plazo no
menor a ocho ni mayor a treinta días contados a partir de la expedición
de la segunda convocatoria.

Artículo 54°. La asamblea podrá ser convocada por el comisariado ejidal o


por el consejo de vigilancia, ya sea iniciativa propia o si así lo solicitan al
menos 20 ejidatarios o el 20 por ciento de los ejidatarios que integren el
núcleo de población ejidal, de acuerdo con lo previsto en el artículo 24 de
la Ley Agraria.

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Artículo 55°. Si el comisariado ejidal o el consejo de vigilancia no
convocaren a asamblea en un plazo de cinco días hábiles, a partir de la
solicitud de 20 ejidatarios o el 20 por ciento de los ejidatarios, podrán
éstos solicitar a la Procuraduría Agraria que convoque a la asamblea.

Artículo 56°. El comisariado ejidal o el consejo de vigilancia podrán


convocar a iniciativa propia a asamblea de remoción de uno o del total de
sus integrantes, o si así lo solicitan al menos el 25% (veinticinco por
ciento) del total de ejidatarios del núcleo, y si no convocarán, el mismo
porcentaje de ejidatarios podrán solicitarlo a la Procuraduría Agraria.
Artículo 57°. Será responsabilidad del convocante fijar las cédulas de la
convocatoria en los lugares más visibles del ejido, y cuidar de su
permanencia, sin perjuicio de la responsabilidad que al respecto señala el
artículo 25 de la Ley Agraria al comisariado ejidal, para estos efectos se
considera como lugares apropiados el salón ejidal, tiendas, caseta
telefónica y otros que quedan a consideración del convocante.
Artículo 58°. No podrán participar en las asambleas de ejidatarios:

I. Los representantes de ejidatarios y ejidatarias que no se hayan


acreditado conforme a la Ley Agraria y este reglamento;
II. Quienes porten armas o se encuentren bajo el efecto de bebidas
alcohólicas, drogas o enervantes;
III. Personas extrañas al ejido, cuya asistencia no esté debidamente
justificada de acuerdo con los asuntos a tratar;
IV. Los que lleguen después de instalada la asamblea.

Artículo 59°. Las asambleas serán presididas por los miembros del
comisariado ejidal y del consejo de vigilancia, en las que podrán participar
con voz, pero sin voto, las organizaciones sociales e instituciones de
carácter público o privado que sean invitadas tomando en cuenta los
asuntos que figuren en el orden del día de la convocatoria respectiva.

Artículo 60°. La asamblea por mayoría de votos elegirá a las personas que
integren la mesa de debates para que dirijan la conducción del acto,
debiendo integrarse por un presidente, un secretario y dos escrutadores.
Artículo 61°. Para la instalación válida de la asamblea, cuando ésta se
reúna por virtud de primera convocatoria, y se traten los asuntos
relacionados de la fracción I a la XIII y XXIV del artículo 24 del presente
reglamento, deberán estar presentes cuando menos la mitad más uno de
los ejidatarios, salvo que en ella se traten los asuntos señalados en las
fracciones XIV a XXIII del artículo 24 del presente reglamento, en cuyo
caso deberán estar presentes cuando menos tres cuartas partes de los
ejidatarios y las ejidatarias.
Cuando se reúna por virtud de segunda o ulterior convocatoria, la
asamblea se celebrará válidamente con cualquiera que sea el número de

24
ejidatarios y ejidatarias que concurran, salvo el caso de la asamblea que
conozca de los asuntos señalados en las fracciones XIV a XXIII del artículo
24 del presente reglamento, la que quedará instalada únicamente cuando
se reúna la mitad más uno de los ejidatarios.
Artículo 62°. Si el día señalado para la asamblea no se cumplieran las
mayorías de asistencia requeridas para su validez, el convocante elaborará
una constancia misma que servirá de base para que de inmediato se expida
la segunda convocatoria, la que se celebrará en un plazo no menor de
ocho ni mayor de 30 días, contados a partir de la expedición de la
segunda convocatoria.
Artículo 63°. Para la asistencia válida de un mandatario a una asamblea
bastará una carta-poder debidamente suscrita por el titular ante dos
testigos que sean ejidatarios, ejidatarias, avecindados y avecindadas del
mismo núcleo al que pertenece el mandante. En caso de que el ejidatario
mandante no pueda firmar, imprimirá su huella digital en la carta y
solicitará a un tercero que firme la misma y asiente el nombre de ambos.

El mandatario sólo podrá representar a un ejidatario o ejidataria en la


asamblea para la cual se le confirió el poder; debiendo quedar asentada en
el acta de la asamblea, la participación del mandatario y el documento con
el que se acreditó.

En el caso de asambleas que se reúnan para tratar los asuntos señalados en


las fracciones III, VII a XIV del artículo 23 de la Ley Agraria, el ejidatario o
ejidataria no podrá designar mandatario.

Artículo 64°. Las resoluciones de la asamblea en las que se traten los


asuntos relacionados a las fracciones I a la XIII y XXIV del artículo 24 del
presente reglamento, se tomarán válidamente por mayoría de votos de las
ejidatarias y ejidatarios presentes y serán obligatorias para los ausentes y
disidentes. En caso de empate el presidente del comisariado ejidal tendrá
voto de calidad.

Artículo 65°. Cuando se trate alguno de los asuntos señalados en las


fracciones XIV a XXIII del artículo 24 del presente reglamento, se
requerirá el voto aprobatorio de las dos terceras partes de los asistentes a
la asamblea, así como la presencia de un fedatario público y un
representante de la Procuraduría Agraria.
Artículo 66°. De toda asamblea se levantará el acta correspondiente, que
será firmada por los miembros del comisariado ejidal y del consejo de
vigilancia que asistan, así como por las ejidatarias y ejidatarios presentes
que deseen hacerlo. En caso de que quien deba firmar y no pueda hacerlo,
imprimirá su huella digital debajo de donde está escrito su nombre.
Cuando exista inconformidad sobre cualquiera de los acuerdos asentados
en el acta, cualquier ejidatario podrá firmar bajo protesta, haciendo
constar tal hecho.

25
Cuando se trate de la asamblea que discuta los asuntos establecidos en las
fracciones XIV a XXIII del artículo 24, del presente reglamento, el acta
deberá ser pasada ante la fe del Fedatario Público y firmada por el
representante de la Procuraduría Agraria, que asistan a la misma, e inscrita
en el Registro Agrario Nacional.

Las actas de asamblea que se elaboren con motivo de los asuntos señalados
en las fracciones I a la XIII y XXIV del artículo 24 del presente
reglamento, se inscribirán en el Registro Agrario Nacional, para que
surtan los efectos correspondientes.

CAPITULO TERCERO

Del Comisariado Ejidal

Artículo 67°. El comisariado ejidal es el órgano encargado de la ejecución de los


acuerdos de la asamblea y en quien recae la representación y gestión
administrativa del ejido.

Artículo 68°. El comisariado ejidal estará constituido por un presidente, un


secretario y un tesorero, propietarios y sus respectivos suplentes en su caso.

Artículo 69°. El comisariado ejidal tendrá además de las señaladas por la Ley
Agraria y sus reglamentos, las siguientes atribuciones y obligaciones:

I.- Convocar a asamblea en los términos de la Ley; así como cumplir con los
acuerdos que dicte la asamblea.
II.- Llevar el libro de registro, en el que se asentaran los datos básicos de
identificación de todos los ejidatarios y avecindados que integren el núcleo de
población; las participaciones de los derechos que les corresponden sobre las
tierras de uso común y todo lo relativo a cesiones y demás actos jurídicos que se
realicen sobre derechos ejidales, estando dicho libro a disposición de los
interesados para su consulta.
III- Procurar que se respeten estrictamente los derechos de los ejidatarios
IV.- Autorizar por escrito los permisos a todos los ejidatarios previo pago de
todas sus obligaciones y de fajinas, faltas a asambleas y cooperaciones, por
ausentarse temporalmente del ejido;
V.- Otorgar poderes para actos concretos que lo requieran, así como revocarlos
en su oportunidad dentro de las limitaciones que considere la asamblea.
VI. Entregar, cuando venza su periodo de funciones o se le remueva del cargo
conferido, la documentación, bienes y recursos que tuviere bajo su resguardo.
VII.- Podrá celebrar una junta cada vez que sea necesario (reuniones
extraordinarias) con los propósitos específicos que se determinen con motivo del
cumplimiento de sus funciones, previo citatorio de su presidente con tres días de
anticipación, a dichas juntas asistirán con voz y voto, así mismo podrán

26
participar con voz pero sin voto los representantes de instituciones oficiales, así
como los asesores privados del propio ejido.

Artículo 70°. El presidente del comisariado tendrá las siguientes atribuciones:

I. Presidir las asambleas cuando convoque, así como las juntas del
comisariado, ejercitando su voto de calidad, en los casos que así se
requiera;
II. Llevar la custodia de los libros del ejido y su actualización;
III. Asistir a las reuniones que le encomiende la asamblea y a las que sea
convocado para tratar asuntos relacionados con el ejido;
IV. Autorizar, conjuntamente con el tesorero, los documentos que impliquen
erogaciones con cargo a las finanzas del ejido;
V. Intervenir oportunamente en la solución preferentemente conciliadora y
apegada a la ley, en los conflictos que afronte el ejido con terceros o los
ejidatarios entre si o también con terceros.

Artículo 71°. El secretario del comisariado ejidal desempeñara las siguientes


actividades:

I. Atender la correspondencia y conservar ordenado el archivo del


ejido;
II. Elaborar las convocatorias y citatorios para la celebración de
asambleas y reuniones de los órganos de representación,
respectivamente
III. Levantar las actas de asamblea y de las juntas de los órganos de
representación del ejido;
IV. Revisar los asientos contables del ejido, cuando menos una vez al
mes;
V. Mantener permanentemente informado al comisariado ejidal sobre
su actuación.
VI. Presidir las asambleas y reuniones cuando no se encuentre el
propietario ni el suplente del Presidente del comisariado ejidal.
Artículo 72°. El tesorero del comisariado ejidal tendrá las siguientes atribuciones
y obligaciones:
I. Custodiar los fondos del ejido;
II. Cobrar las cuotas que se hayan acordado y aprobado en la asamblea
y expedir los recibos correspondientes; mismos que deberán estar
foliados
III. Firmar juntamente con el presidente del comisariado, los
documentos que impliquen erogaciones a cargo de las finanzas del
ejido;
IV. Llevar los libros de ingresos y egresos para el control estricto de las
actividades económicas que se desarrollen en el ejido, así como la
actualización del libro de contabilidad correspondiente;

27
V. Realizar cortes de caja con la periodicidad que acuerde la asamblea
o los miembros del comisariado;
VI. Dar cuenta a la asamblea cuando menos cada tres meses, sobre el
estado general que guardan las finanzas del ejido;
Articulo 73°. Queda establecido por reglamento, que solamente las autoridades
del ejido están autorizadas para realizar los tramites necesarios para la solicitud
de apoyos ante las dependencias o instancias correspondientes. De presentarse
alguna otra persona que coordine algún tipo de apoyo, sin ser ningún tipo de
autoridad, se le negaran firmas y sellos ejidales y tendrán la obligación de
reportárselo a las autoridades del ejido, y así permitir que estas realicen el
trabajo.

CAPITULO CUARTO

Del Consejo de Vigilancia

Artículo 74°. El consejo de vigilancia es el órgano encargado de vigilar los actos


del comisariado ejidal; estará constituido por un presidente, dos secretarios,
propietarios y sus respectivos suplentes, si es el caso.

Artículo 75°. El consejo de vigilancia además de las facultades y obligaciones que


le otorga la Ley Agraria, sus reglamentos y este reglamento, tendrá las siguientes
atribuciones y obligaciones:

I. Vigilar que los actos del comisariado ejidal se ajusten a los preceptos de la
Ley Agraria, sus reglamentos, este reglamento y los acuerdos de la
asamblea;
II. Revisar las cuentas y operaciones efectuadas por el comisariado ejidal, a fin
de darlas a conocer ante la asamblea y de ser necesario denunciar ante
esta, las autoridades del fuero común y fuero federal, las irregularidades en
que incurra el comisariado ejidal;
III. Convocar a asamblea cuando no lo haga o se niegue a realizarlo el
comisariado ejidal;
IV. Apoyar en sus actividades al comisariado ejidal cuando este se lo solicite.
V. Intervenir en coordinación con el comisariado ejidal en la solución
conciliatoria de los conflictos que surjan en el ejido con las áreas de
trabajo entre los ejidatarios o por cuestiones de organización para el
aprovechamiento de los recursos.
VI. Vigilar que los linderos del ejido se mantengan libre de maleza o en su
caso coordinarse con el comisariado ejidal y el subdelegado municipal
para convocar a los ejidatarios y avecindados a realzar la limpieza necesaria
de las mismas.
VII. Gestionar u Otorgar permisos en coordinación con el comisariado ejidal
respecto de la quema monte (rosa y tumba) así como de los potreros.
VIII. Vigilar que no exista la explotación de madera y material pétreo, fauna y
otros recursos naturales del ejido y denunciar ante las autoridades
competentes en su caso cuando estas se hagan clandestinamente.

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IX. Realizar un informe trimestral de sus actividades.

CAPITULO QUINTO

De la Elección de los Órganos de Representación


y Vigilancia del Ejido

Artículo 76°. Los miembros del comisariado ejidal y del consejo de vigilancia, así
como sus suplentes, serán electos en asamblea, el voto será secreto y el escrutinio
público e inmediato.
Artículo 77°. Para ser miembro del comisariado ejidal o del consejo de vigilancia,
se requiere:
a. Ser ejidatario
b. Haber trabajado en el ejido durante los últimos seis meses
anteriores a su designación;
c. Estar en pleno goce de sus derechos, y no haber sido sentenciado
por delito intencional que amerite pena privativa de la libertad,
d. Trabajar en el ejido mientras dure su encargo.
e. No tener antecedentes penales ni haber defraudado al ejido.
f. Estar al corriente en el cumplimiento de sus obligaciones.
Artículo 78°. El comisariado ejidal y el consejo de vigilancia desempeñaran su
cargo legalmente por un periodo de tres años.
Artículo 79°. Los miembros del comisariado ejidal y del consejo de vigilancia
después del término de su gestión no podrán ser electos para ningún cargo
dentro del ejido, sino hasta haber transcurrido un lapso igual a aquel en que
estuvieron en ejercicio.

Artículo 80°. Si al término del periodo para el que haya sido electo el
comisariado ejidal no se han celebrado elecciones, sus miembros propietarios
serán automáticamente sustituidos por los suplentes. Por su parte, el consejo de
vigilancia deberá convocar a elecciones en un plazo no mayor de 60 días,
contados a' partir de la fecha en que concluyan las funciones de los miembros
propietarios.

Artículo 81°. Los miembros del comisariado ejidal y del consejo de vigilancia que
se encuentren en funciones, estarán impedidos para adquirir tierras ejidales o
derechos sobre tierras de uso común pertenecientes a ejidatarios reconocidos, a
excepción de los que obtengan por herencia.

CAPITULO SEXTO

De la Remoción de los Integrantes de los Órganos de Representación


y de Vigilancia del Ejido

Artículo 82°. La remoción de los miembros del comisariado ejidal y del consejo
de vigilancia, podrá ser acordada por voto secreto en cualquier momento por la
asamblea que al efecto se reúna o que sea convocada por la Procuraduría agraria
a partir de la solicitud de por lo menos el 25% más uno de los ejidatarios del
núcleo agrario.

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Artículo 83°. Los integrantes del comisariado ejidal y del consejo de vigilancia
serán removidos en cualquier momento por la asamblea, previa convocatoria,
por alguna de las siguientes causas:

I) No realizar sus funciones de acuerdo con lo establecido en la Ley Agraria o en


el presente reglamento;
II) Infringir las disposiciones de la Ley Agraria y de este reglamento;
III) Malversación de fondos del ejido o de los ejidatarios, así como los aportados
para programas específicos por las instituciones oficiales, privadas o del sector
social;
IV) Realizar ventas o contratos de tierras ejidales y demás recursos naturales
renovables o no renovables del ejido en contravención a la ley o sin el
consentimiento de la asamblea, según sea el caso;
V) Por abandono injustificado de sus funciones.
VI) Por dejar de vivir en el ejido o dejar de trabajar las tierras ejidales.
VII) Por no cumplir y/o no hacer cumplir el presente reglamento interno.
VIII) Por faltar a dos asambleas generales de manera consecutiva.
IX) Por asistir a la asamblea en estado de ebriedad o bajo el influjo de alguna
droga o enervante.
El acuerdo de asamblea que determine la remoción total o parcial de los
integrantes de los órganos de representación y de vigilancia será inscrito en el
Registro Agrario Nacional, para que surta los efectos legales procedentes.

Artículo 84°. La asamblea deberá, preferentemente en el mismo acto en que se


determine la remoción, proponer a los ejidatarios que sustituyan en el cargo a los
removidos, quienes desempeñaran sus funciones únicamente por el tiempo que
falte para que se cumpla el periodo legal para el que fueron electos los
sancionados con la remoción.

TITULO CUARTO

DE LAS TIERRAS EJIDALES

Artículo 85°. Son tierras ejidales y, por tanto, están sujetas a las disposiciones
relativas de la Ley Agraria, las dotadas, reconocidas, restituidas o incorporadas
legalmente a este núcleo conforme a los antecedentes del ejido, que forman
parte del presente reglamento.
Artículo 86°. Las tierras del núcleo agrario se dividen en:

I. Tierras para el asentamiento humano;


II. Tierras de uso común; y
III. Tierras parceladas.

Artículo 87°. El Ejido o los ejidatarios podrán celebrar cualquier acto jurídico no
prohibido por la ley para el mejor aprovechamiento de las tierras ejidales, así
como para la comercialización y transformación de productos, la prestación de

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servicios y cualesquiera otros objetos que permitan a los ejidatarios el mejor
desarrollo de sus actividades, como son:

I. Constituir o ser integrante de figuras asociativas


II. Formular contratos de asociación o aprovechamiento sobre sus tierras
III. Aportar tierras de uso común a sociedades civiles o mercantiles, y
IV. Integrar sectores de trabajo
Para la celebración de estos actos jurídicos por el núcleo agrario se requiere la
autorización de la asamblea.
Artículo 88°. Por acuerdo de asamblea y con base en las recomendaciones de las
instituciones de salud y sanidad vegetal, en las tierras de la comunidad se
disminuirá gradualmente el uso de herbicidas o agrotóxicos que contengan como
ingrediente activo el glifosato, debido a sus efectos nocivos en la salud y el
medio ambiente, pues es considerado un producto cancerígeno y contaminante
de los maíces nativos o criollos. De igual forma se evitará la comercialización y
siembra de organismos genéticamente modificados (transgénicos de maíz,
algodón, soya, entre otros).
Artículo 89°. En caso de uso excesivo o mal manejo de herbicidas o agrotóxicos
dentro de la comunidad, el comisariado de bienes comunales lo hará del
conocimiento de las autoridades competentes para los efectos conducentes.
Artículo 90°. Se realizarán campañas de sensibilización por lo menos una vez al
año, sobre los efectos nocivos del uso de herbicidas o agrotóxicos que contengan
como ingrediente activo el glifosato, así como a cerca de los daños de la
comercialización, siembra y consumo de organismos genéticamente modificados,
para la cual se podrá solicitar apoyo a la Procuraduría Agraria y al Consejo
Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT).
Artículo 91°. Dentro del núcleo agrario, ningún ejidatario o ejidataria podrá ser
titular de derechos parcelarios sobre una extensión mayor que la equivalente al
cinco por ciento de las tierras ejidales, ni de más superficie que la equivalente a
la pequeña propiedad. Para efectos de cómputo, las tierras ejidales y las de
dominio pleno serán acumulables.
En el supuesto de que el ejidatario o ejidataria rebase los limites señalados en el
párrafo que antecede, se hará del conocimiento a la secretaria de Desarrollo
Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU), quien previa audiencia, ordenará al
ejidatario o ejidataria de que se trate, la enajenación de los excedentes dentro de
un plazo de un año contado a partir de la notificación correspondiente. Si el
ejidatario o la ejidataria no hubiere enajenado en el plazo indicado, la Secretaría
fraccionará, en su caso, los excedentes y enajenará los derechos correspondientes
al mejor postor entre los miembros del núcleo de población, respetando en todo
caso los derechos de preferencia señalados en el artículo 80 de la Ley Agraria.
Artículo 92°. Respecto a ellas, los ejidatarios, las ejidatarias, comuneros,
comuneras, ejidos y comunidades podrán formar uniones de ejidos o
comunidades, asociaciones rurales de interés colectivo y cualquier tipo de
sociedades mercantiles o civiles o de cualquier otra naturaleza que no estén
prohibidas por la Ley, para el mejor aprovechamiento de las tierras ejidales, así

31
como para la comercialización y transformación de productos, la prestación de
servicios y cualesquiera otros objetos que permitan a los ejidatarios y ejidatarias
el mejor desarrollo de sus actividades.
Artículo 93°. La asamblea podrá señalar en su caso, las superficies que habrán de
destinarse a servidumbres, además de las que los Tribunales Agrarios llegarán a
determinar para cumplir dicha función, las cuales se regirán por las leyes
respectivas, así como por las costumbres del núcleo.
Artículo 94°. Los miembros del comisariado ejidal que se encuentren en funciones
estarán impedidos para adquirir derechos sobre tierras ejidales a excepción de los
que obtengan por herencia.

CAPITULO PRIMERO

De las Tierras para el Asentamiento Humano

Artículo 95°. Las tierras destinadas al asentamiento humano son aquellas que
integran el área necesaria para el desarrollo de la vida comunitaria del ejido y
que aparecen en el plano del área del asentamiento humano del ejido y
comprende los terrenos en que se ubica la zona de urbanización y la reserva de
crecimiento del propio ejido. En la que cada seis meses se hará la limpieza de su
perímetro.
Esta superficie es inalienable (no se puede vender), imprescriptible (no prescribe
a favor de nadie), inembargable (no puede ser embargada) e irreducible (no se
puede reducir), salvo que el ejido decida aportar tierras del asentamiento
humano o de la reserva de crecimiento al municipio o entidad federativa para
destinarlas a los servicios públicos o al crecimiento urbano ordenado. Con la
intervención de la Procuraduría Agraria, la cual se cerciorará que dichas tierras
sean utilizadas para tal fin.

Artículo 96°. Para el deslinde y asignación de solares en la reserva de


crecimiento, se requerirá la intervención de las autoridades municipales y se
observaran las normas técnicas que emita la secretaria de BIENESTAR e
igualmente, las expedidas por el registro agrario nacional (RAN), así como la
normatividad local que resulte aplicable.

Artículo 97°. Los solares ubicados en la zona de urbanización son de propiedad


plena de sus titulares de acuerdo con la legislación aplicable en cada caso y cada
titular del solar debe mantenerlo limpio de lo contrario se le negará firmas y
sellos de la autoridades ejidales y municipales.

Artículo 98°. En relación con los solares del asentamiento humano que aun no se
encuentran titulados y que ya se han asignado, en el caso de que la persona a la
que se le asigno deseará cederlo tendrá que presentarse ante la asamblea para
informarlo y no se le permitirá venderlo.

Artículo 99°. A las personas que se les asigne solares y no lo vivan se les quitara
por parte del ejido, sin devolverles ningún tipo de cuota o cooperación que se
haya aportado. A partir de que entre en vigor este reglamento tendrá un plazo de

32
un año para que construya y se habite ya que solares que pertenecen al ejido se
encuentran abandonados por lo tanto se recuperaran y se reasignaran a otras
personas que lo necesiten.

Artículo 100°. Después de haberse satisfecho las necesidades de los ejidatarios,


los solares excedentes podrán ser arrendados o enajenados por el ejido a personas
que deseen avecindarse en el mismo.

Artículo 101°. Es obligación de todos las ejidatarias, los ejidatarios,


posesionarias, posesionarios, avecindadas, avecindados y repobladores que
habitan en el ejido, cumplir con las fajinas y cooperaciones, así como los pagos
de agua y luz que le corresponden a cada uno, establecidos en el Reglamento
interno y/o asamblea ejidal; además en relación a las fajinas la persona que no
cumpla con estas deberá pagar la sanción correspondiente de $100.00 00/MN
por dicha fajina, cuando se trate de una faena o fajina dentro de la zona urbana
que no exceda más de dos horas.
De no cumplir con lo anterior, no se les tomara en cuenta en ningún tipo de
apoyo o beneficio que se solicite por las autoridades del ejido, hasta el momento
que cumplan con dichas obligaciones, salvo casos justificados, como situaciones
de enfermedad.

Artículo 102°. Queda establecido que, de no cumplir con lo antes estipulado por
las autoridades ejidales, será motivo en su caso de una posible remoción total o
parcial de los integrantes del comisariado ejidal y del consejo de vigilancia.

Artículo 103°. En la zona urbana del ejido quienes tengan animales domésticos y
no los encierren, los daños y perjuicios que llegarán a ocasionar estos, serán
responsabilidad de sus dueños, quienes asumirán la responsabilidad por los daños
ocasionados, tanto en terrenos urbanos, como en las áreas de trabajo colindantes
de la zona urbana. Todos estos casos serán turnados al subdelegado municipal en
coordinación con los órganos de representación ejidal para determinar lo
conducente.

Artículo 104°. Las personas que sean sorprendidas robando o causando daños en
la zona urbana o terrenos ejidales y sean ejidatarios, avecindados o habitantes del
ejido, serán turnadas ante las autoridades correspondientes.

Artículo 105°. A toda persona que no sea ejidatario y se le sorprenda robando,


además de turnarla ante las autoridades competentes, se le sancionará
expulsándola del ejido, de negarse a abandonar el núcleo de población se le
negará todo tipo de apoyo de las autoridades para cualquier solicitud y no se le
dará trabajo de ningún tipo. La persona o personas que lo apoyen, responderán
por ella y los daños que provoque.

33
CAPITULO SEGUNDO

De las Tierras de Uso Común

Artículo 106°. Las tierras de uso común constituyen el sustento económico de la


vida en comunidad del ejido y están conformadas por aquellas tierras que no
fueran especialmente reservadas por la asamblea para el asentamiento del núcleo
de población y, que no se trata de tierras parceladas. La asamblea regulara el uso,
aprovechamiento, acceso y conservación de dichas tierras.

Artículo 107°. Las tierras de uso común, conforme a lo dispuesto por la Ley
Agraria, son inalienables, imprescriptibles e. inembargables, salvo los casos
previstos en el articulo 75 de la Ley Agraria, cuando el núcleo considere aportar
dichas tierras a una sociedad civil o mercantil.

Artículo 108°. Las tierras de uso común podrán ser objeto de cualquier contrato
de asociación o aprovechamiento celebrado por el núcleo de población ejidal.
Los contratos que impliquen el uso de estas tierras por terceros tendrán una
duración acorde al proyecto productivo correspondiente, no mayor a treinta
años, prorrogables.

Artículo 109°. Corresponde al propio ejido y a los ejidatarios el, uso,


aprovechamiento y conservación de los recursos naturales renovables y no
renovables, que se encuentren dentro de las tierras de uso común, a cuyo efecto
se habrán de observar las leyes, reglamentos, decretos, acuerdos y demás
disposiciones administrativas que emitan las autoridades competentes de los tres
niveles de gobierno, resultando también aplicables los acuerdos de asamblea del
propio ejido, siempre y cuando no contravengan la normatividad vigente.

Artículo 110°. Para que una cesión de derechos individuales sobre tierras de uso
común se tenga como válida, debe ajustarse a los siguientes requisitos:

I.- Que se cuente con certificado de derechos sobre las tierras de uso común; a
demás de ser el caso deberá tener un croquis con medidas y colindancias de las
parcelas internas económicas o de hecho o trabajaderos, que en su momento
venia trabajando el ejidatario, previo reconocimiento de la asamblea.
II.- De no cumplir con lo anterior, la asamblea general de ejidatarios se deslinda
de cualquier responsabilidad, ante cualquier tipo de conflicto de esta índole.
III.- Otorgarse ante dos testigos, preferentemente ejidatarios debidamente
identificados;
IV.- Que se efectúe a favor de otro ejidatario o avecindado reconocido por la
asamblea general de ejidatarios;
V.- Que conste la notificación del derecho de tanto a que se refiere el artículo 80
de la Ley Agraria, así como la renuncia al mismo, por parte del (la) cónyuge e
hijos del cedente;
VI.- Realizar una aportación del 10 % a favor del ejido por conducto del
interesado al ingresar al núcleo agrario al firmar el contrato de cesión a titulo

34
oneroso.
VII.- la persona a la que se le cederá el derecho ejidal, estará obligado a
presentarse ante la asamblea de ejidatarios, el día que se le indique y que se vaya
a tratar su asunto.
VIII.- La cesión que se realice sobre las tierras de uso común deberá inscribirse
en el Registro Agrario Nacional parea los efectos legales a que haya lugar.

Artículo 111°. La cesión de derechos sobre tierras de uso común no implica para
el adquirente obtener la calidad de ejidatario, reservándose la asamblea la
facultad de reconocerle esa calidad, misma que se realizara inmediatamente
después de que el adquirente obtenga su certificado como posesionario, esto es
con el fin de tener un padrón de ejidatarios activos y actualizado.

El ejercicio de la anterior facultad es sin perjuicio del derecho del adquirente


para recibir proporcionalmente los beneficios de la explotación de las tierras de
uso común.

Artículo 112°. Los ejidatarios que sean aceptados en virtud de haber realizado
contratos de cesión de derechos, gozaran únicamente de los beneficios del área
de trabajo, parcela interna económica o de hecho del cedente y que este la haya
trabajado, previa anuencia de la asamblea; además de gozar de los beneficios a
través de los programas de gobierno federal, estatal o municipal sobre el área de
trabajo; tener derecho a beneficios de las tierras de uso común únicamente con
el porcentaje que señala el certificado y donde determine la asamblea, salvo que
esta apruebe una superficie adicional. Así mismo no gozara de los beneficios del
ejido por fondos comunes y demás prestaciones económicas que arrojen las
actividades del ejido; salvo que sea afectada el área de trabajo que le hubiese sido
reconocido.

Articulo 113°. Dentro de las tierras de uso común que la asamblea apruebe
corresponde a los ejidatarios el derecho de aprovechamiento, uso y usufructo de
sus parcelas internas, económicas o de hecho o trabajaderos, que por asamblea se
haya reconocido, mismos que son trabajados de manera individual por los
ejidatarios, según los usos y costumbres del ejido respetándose cada uno la
posesión que tiene de la misma.

Artículo 114°. Para que dentro de las tierras de uso común se reconozcan las
parcelas internas, económicas o de hecho o trabajaderos, la superficie señalada
deberá estar debidamente deslindada, para lo cual cada ejidatario con derechos
vigentes deberá elaborar un croquis con medidas y colindancias, firmando de
conformidad su colindantes a demás de presentarse en la asamblea para su
validación final, cabe señalar que el consejo de vigilancia dará su visto bueno al
croquis respectivo.

Artículo 115°. Corresponde a los ejidatarios, posesionarios y avecindados el


derecho de aprovechamiento, uso y usufructo de sus trabajaderos, mismos que

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son trabajados de manera personal por los ejidatarios del ejido según su usos y
costumbres del ejido, respetándose cada uno la posesión que tienen de la misma.
La superficie esta debidamente deslindada. Para lo cual deberá elaborar un
croquis con medidas y colindancias firmando de conformidad sus colindantes,
además de presentarse en la asamblea para su validación final; cabe señalar que el
consejo de vigilancia corroborará y dará su visto bueno al croquis respectivo.

Artículo 116°. En relación con la solicitud de apoyos destinados para ala


producción de la tierra queda prohibido que las personas que los soliciten y no
los requieran o justifiquen la necesidad del apoyo, se les incluye en la lista de
solicitud y solo que se otorgaran a las personas que cumplan con las siguientes
condiciones:

➢ Los ejidatarios reconocidos


➢ Los hijos y esposas de ejidatarios, avecindados y repobladores, que
comprueben que trabajan la tierra o que cuenten con una superficie
donde utilizar estos apoyos.
➢ Los casos excepcionales que o cumplan con lo anterior, deberán estar
totalmente justificados.
Artículo 117°. Los ejidatarios podrán realizar las acciones legales que consideren
más convenientes, previa autorización de la asamblea, sobre el uso y usufructo de
sus trabajaderos. Debiendo brechar cada uno de ellos para delimitar
perfectamente el área asignada, acordando en el presente reglamento que la
brecha colindante con los vecinos será de 50 cm por cada colindante y si es
monte será determinado por ellos a menos que estos acuerden establecer un
cerco que divida sus trabajaderos, cuando se efectué la apertura de brechas,
deberán estar presentes ambos colindantes o en su caso manifestar su
conformidad por escrito, lo anterior con el fin de evitar problemas entre los
colindantes.

Artículo 118°. Los ejidatarios que tengan mensuras colindantes con los ejidos
vecinos tendrán la obligación de dejar una brecha mínima de 10 metros.
Asimismo, dicha franja deberá mantenerse limpia, a fin de no perder el límite
con dichos núcleos.

Artículo 119°. Los caminos de acceso deberán respetarse, ya que fueron


debidamente designados para ello. En aquellas áreas donde se dan los casos de
cacería, se podrán poner falsos o rejas en los caminos, siempre y cuando se tenga
el acuerdo de cada uno de los ejidatarios que deban transitar por estos caminos.

Articulo 120°. Queda estrictamente prohibida la cacería y pesca (jaguey) en los


trabajaderos ajenos de cada ejidatario. Toda persona que desee realizar la
actividad tendrá que cumplir con lo siguiente:

➢ Contar con el permiso correspondiente o justificar que será para


autoconsumo.
➢ En caso de que el ejidatario desee cazar o pescar en trabajaderos que no

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son suyos, deberá solicitar el permiso del ejidatario correspondiente, si no
se le otorgase el permiso y aun así lo hace, entonces se responsabilizara de
todos los daños causados por su decisión.
➢ No se le permitirá la entrada a cazar o pescar (jaguey) a personas ajenas al
ejido.

CAPÍTULO TERCERO

De las Tierras Parceladas

Artículo 121°. Corresponde a los ejidatarios y ejidatarias el derecho de


aprovechamiento, uso y usufructo de sus parcelas, una vez que se haya
delimitado y asignado individualmente, conforme a la Ley Agraria.

Artículo 122°. El ejidatario o la ejidataria puede aprovechar su parcela


directamente o conceder a otros ejidatarios o terceros su uso o usufructo,
mediante aparcería, mediería, asociación, arrendamiento o cualquier otro acto
jurídico no prohibido por la Ley Agraria, sin necesidad de autorización de la
asamblea o de cualquier autoridad. Asimismo, podrá aportar sus derechos de
usufructo a la formación de sociedades, tanto mercantiles como civiles.

Las ejidatarias y las ejidatarios que posean tierras no formalmente parceladas


podrán realizar las acciones a que se refiere el párrafo anterior, previa
autorización de la asamblea.

Artículo 123°. Los contratos de uso y usufructo que se realicen sobre tierras
ejidales parceladas entre los titulares con terceros tendrán una duración acorde al
proyecto productivo correspondiente, no mayor a treinta años prorrogables.

Artículo 124°. En ningún caso, la asamblea ni el comisariado ejidal podrán usar,


disponer o determinar el aprovechamiento colectivo de las tierras parceladas del
ejido, sin el previo consentimiento por escrito de sus titulares.

Artículo 125°. Las parcelas que se encuentren sin asignar o vacantes, podrán
asignarse por la asamblea, a quien acredite los derechos sobre las mismas o a
quien lo solicite y determine la asamblea.

Parcela Escolar

Artículo 126°. La asamblea conforme lo establece la Ley Agraria en la asamblea


de Delimitación, Destino y Asignación de Tierras Ejidales, celebrada con fecha
29 de Septiembre de 1994, destino una superficie de 40-00-00 hectáreas para el
establecimiento de la parcelas escolar, misma que se destinó a la investigación,
enseñanza y divulgación de prácticas agrícolas, pecuarias y forestales, que
permitan un uso más eficiente de los recursos humanos y materiales con que
cuente el ejido.
La explotación y administración de la parcela estará a cargo de un comité de
administración y de vigilancia, los cuales estarán integrados por Padres de
Familia ejidatarios designados en asamblea general de ejidatarios legalmente

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reconocidos del ejido, y si la asamblea lo aprueba por padres de familia que sean
avecindados reconocidos legalmente, dichos órganos deberán:

1. Dar informes de actividades, cuentas y balances periódicamente y cuando


lo requiera la asamblea general de ejidatarios por escrito.

2. La parcela debe ser autosuficiente, desglosándose de la siguiente manera


las utilidades que se obtengan por el buen mantenimiento de la misma,
que estará a cargo del comité de administración y de vigilancia.
a. Para mantenimiento de la parcela escolar
b. Para gastos necesarios que la escuela requiera para el buen
funcionamiento del inmueble que constituye la escuela.
c. Para material didáctico, siempre y cuando haya una solicitud por
escrito de por medio, dirigido a la asamblea general de ejidatarios
legalmente convocada, la cual determinará si procede o no la
solicitud o por la premura del asunto podrá solicitarse por escrito al
comisariado ejidal, quien en la asamblea próxima inmediata deberá
darlo a conocer a la asamblea.

3. En caso de que la parcela no este funcionando por la mala administración


del comité de administración o de vigilancia, los mismos serán removidos
del cargo ya sea en conjunto o individualmente de la misma forma en que
fueron electos.

Unidad Agrícola Industrial de la Mujer.

Artículo 127°. La asamblea cuando así lo considere asignara el área delimitada a


esta parcela, misma que se destinara al establecimiento de unidades productivas o
industrias rurales, aprovechadas por las mujeres campesinas, mayores de 16 años,
del núcleo de población. En esta unidad se podrán integrar áreas o instalaciones
destinadas específica mente al servicio, desarrollo y protección de la mujer
campesina. El ejido conforme lo establece la Ley Agraria en la asamblea de
Delimitación, Destino y Asignación de Tierras Ejidales, celebrada con fecha 29
de septiembre de Mil Novecientos Noventa y Cuatro, asigno una superficie de
40-00-00 hectáreas para dicha unidad.

Artículo 128°. La unidad agrícola industrial de la mujer estará bajo el control y


dirección del comité de administración constituida por una presidenta, una
secretaria y una tesorera y sus respectivas suplentes, supervisadas por el comité de
vigilancia conformado por una presidenta, una secretaria y una vocal y sus
respectivas suplentes; todas ellas serán electas en una junta general de miembros
en la que participen las integrantes de dicha unidad, levantándose el acta
respectiva, pudiendo ser el órgano de representación del ejido el que sancione la
misma, de la cual habrá que informar a la asamblea.
Esta Unidad se regulará por el reglamento publicado en el Diario Oficial de la
Federación el día 08 de mayo de 1998.

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TITULO QUINTO

DEL USO Y APROVECHAMIENTO DE LAS AGUAS DEL EJIDO


CAPITULO ÚNICO

Artículo 129°. Corresponde al propio ejido y a los ejidatarios previa autorización


de la asamblea, el aprovechamiento de las aguas que se localicen dentro de sus
terrenos, teniendo en consideración lo previsto en la Ley de Aguas Nacionales, y
demás leyes aplicables.

Artículo 130°. Los aguajes y cuerpos de agua comprendidos dentro de las tierras
ejidales que no hayan sido legalmente asignados individualmente serán de uso
común (para toda la comunidad) y su aprovechamiento, conservación y
mejoramiento se hará conforme a lo que determine la asamblea, siempre y
cuando no se contravenga lo dispuesto en la Ley Agraria o en la normatividad de
la materia.

Artículo 131°. La distribución, servidumbres de uso y de paso, mantenimiento,


contribuciones, tarifas, transmisiones de derechos y demás aspectos relativos al
uso de volúmenes de agua por el ejido y sus integrantes, estarán sujetos a lo
dispuesto en las leyes, reglamentos y demás disposiciones aplicables en la materia
y acuerdos de la asamblea.

TITULO SEXTO

FONDOS COMUNES
CAPITULO ÚNICO

Artículo 132°. Se entiende como fondo común los recursos económicos


obtenidos por el ejido que forman parte de su patrimonio, cuya fuente no es la
actividad o bienes de ejidatarios en particular sino de conceptos similares que
pertenecen al núcleo agrario de manera general, destinados a crear un fondo de
capitalización para realizar entre otras actividades: nuevas inversiones, creación
de empresas, obras o servicios de beneficio colectivo, cuya disposición debe
hacerse por acuerdo de asamblea. Dicho fondo se formará con los recursos que
se obtengan por los siguientes conceptos:

I.- La explotación y comercialización de los recursos forestales y otros recursos


naturales.
III.- Prestaciones derivadas de contratos celebrados por el ejido, conforme a lo
establecido en la Ley Agraria y otros ordenamientos que resulten aplicables;
IV.- De las indemnizaciones que correspondan al ejido por la expropiación de
tierras de uso común, en los porcentajes que acuerde la asamblea;
V.- Las cuotas o reservas acordadas por la asamblea para obras de mejoramiento
colectivo;
VI.- El importe de las sanciones económicas que imponga la asamblea a los

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ejidatarios por contravenir lo establecido en este reglamento y los acuerdos
aprobados valida mente por la misma;
VII.- Por contraprestaciones derivadas de la asignación de derechos sobre tierras
de uso común, según lo haya acordado la asamblea.

VIII.- Del arrendamiento o enajenación de solares excedentes, no asignados o


asignados a favor del ejido, que se efectúe a personas que deseen avecindarse en
el mismo.

Artículo 133°. El fondo común del ejido se destinará preferentemente a los


siguientes fines:
I.- Construcción de obras de infraestructura para apoyar a las actividades
productivas, de industrialización y comercialización de sus productos o para la
óptima explotación de sus recursos naturales;
II.- Gastos de oficina y comisiones de los órganos de representación y de
vigilancia, debidamente comprobados;
III.- Creación y consolidación de empresas del ejido.
IV.- Apoyos o préstamos a ejidatarios por motivo de enfermedad, previo
acuerdo de la asamblea general.

Artículo 134°. Para la adecuada administración y manejo de los bienes y los


recursos que conforman el patrimonio del ejido, la asamblea podrá acordar se
practiquen auditorias integrales, La propia asamblea aprobará la contratación de
los servicios profesionales, para realizar los trabajos correspondientes.

TITULO SÉPTIMO

DELITOS, FALTAS Y SANCIONES

CAPITULO ÚNICO

Artículo 135°. La asamblea aplicará los correctivos y medidas disciplinarias,


conforme a este reglamento a todos aquellos infractores que violen las
disposiciones contenidas en la Ley Agraria, Ley General para el Desarrollo
Forestal Sustentable, la Ley Estatal Forestal y este reglamento.

Artículo 136°. La aplicación de las sanciones económicas está encomendada al


tesorero del ejido, quien utilizará los medios de apremio necesarios a fin de
hacer efectivo el cobro de las multas en forma particular a los presuntos
infractores.

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Artículo 137°. La asamblea podrá imponer a los ejidatarios sanciones
económicas, por las siguientes causas;

I. Por no cumplir por una vez con los trabajos comunitarios o de fajina,
acordados por la asamblea; se sancionará al ejidatario o avecindado con un
salario mínimo.
II. Por no cubrir las cuotas que acuerde la asamblea como obligatorias, la
sanción será el doble de la cantidad acordada como cuota.
III. Por dejar de realizar las comisiones aceptadas ante la asamblea, por cuyo
motivo se afecten las actividades productivas del 'ejido o de grupos de
ejidatarios, la sanción corresponderá al cambio a la persona comisionada;
IV. Por cada inasistencia a asambleas de cada tres meses, la sanción será por
inasistencia la cantidad de $ 200.00, misma que deberá ser pagada a los
tres meses de realizada la asamblea.
V. Por cada inasistencia a asambleas Generales de ejidatarios legalmente
convocadas, la sanción será por inasistencia la cantidad de $ 200.00.
VI. Por abandonar la casa ejidal y sin firmar el acta de asamblea, sin el permiso
de la misma antes dar su clausura, se le considerará como falta y se le
cobrará la sanción correspondiente.
VII. Por no realizar la limpieza de la mensura ejidal se sancionará con el pago
de un jornal como este en esta región.

Artículo 138°.- la asamblea, asimismo, podrá imponer sanciones a los ejidatarios


por causas siguientes:

I. Negarse a cumplir sin causa justificada, las resoluciones de la asamblea o


los acuerdos de los órganos de representación y de vigilancia;
II. No asistir a cuatro o mas veces consecutivas y sin causa justificada a las
asambleas legalmente convocadas.
III. Asistir a las asambleas portando armas o bajo el efecto de drogas,
enervantes o bebidas alcohólicas;
IV. Mostrar una actitud ofensiva o de violencia hacia los órganos de
representación y de vigilancia o hacia los mismos ejidatarios;
V. Dar un mal uso a los recursos económicos y bienes propiedad del ejido
que le hayan conferido para su guarda o administración con algún
propósito especifico;
VI. Realizar para su provecho individual, la explotación de los recursos
naturales renovables y no renovables, sin contar con el permiso previo de
la asamblea y de las autoridades competentes, no se ajusten al mismo o no
observen la normatividad aplicable en cada caso.

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Artículo 139°.- atendiendo a las faltas que se anuncian en el artículo anterior, la
asamblea podrá imponer a los ejidatarios las siguientes sanciones:

I. por las conductas que encuadren en las causales contenidas en los


numerales I, del articulo anterior, los ejidatarios serán sancionados
con la suspensión de prestamos y beneficios que recibe por
conducto del ejido, hasta que cambie de actitud hacia los acuerdos
de la asamblea general;
II. Por incurrir en las conductas que encuadren en las causales en los
numerales III, V, VI del articulo anterior los ejidatarios podrán ser
sancionados con el pago de las cantidades que en cada caso
corresponda a la falta de que se trate y mientras no se cubran las
mismas o no se terminen de descontar de su participación de
utilidades que les correspondan por la explotación de los recursos
comunes serán suspendidos para participar en las asambleas
durante el tiempo que subsista su conducta omisiva de reparación
del daño económico e inclusive no podrán ser propuestos para
desempeñar ningún cargo de representación del ejido.

Artículo 140°. El ejidatario que se ausente por Dos años o más del ejido, sin
permiso o causa justificada o abandone el mismo por el plazo antes referido,
habiendo abandonado el cultivo que le correspondía en la explotación colectiva
de las tierras, así como su área de trabajo o parcela económica y sin demostrar
interés por regresar al núcleo agrario o continuar trabajando en las tierras del
mismo estará sujeto a los siguientes lineamientos:

I. Se le requerirá mediante tres notificaciones por escrito, en caso de


saber su domicilio o mediante cedulas publicadas que se fijaran en
los lugares mas visibles del poblado, a efecto de que se presente en
el ejido y manifieste al respecto lo que a su derecho e interés
convenga.
II. De no hacer acto de presencia o no manifestar nada ante la
asamblea con relación a su situación o aun manifestando que es su
deseo continuar como miembro del ejido pero no querer ponerse
al corriente de sus adeudos, aportaciones, obligaciones y demás
inherentes a su calidad de ejidatario, con los diversos documentos,
constancias, notificaciones, actas de asamblea, etc., que, en los
casos se hubieren recabado o acumulado durante su ausencia, el
ejido en asamblea lo suspenderá de sus derechos agrarios y por
conducto del comisariado ejidal, se remitirá el asunto al tribunal
unitario agrario competente, para que por sentencia del mismo, se
le separe de manera definitiva de sus derechos agrarios y demás
inherentes a su calidad de ejidatario en el ejido.

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III. Para efectos de lo señalado en la fracción anterior de este artículo
se deberán levantar las constancias respectivas y demás pruebas o
las actas resultantes de las asambleas de ejidatarios que para tales
efectos sean convocadas.

Articulo 141°. Todo ejidatario que se ha ausentado de ejido, sin haber cumplido
con el procedimiento correspondiente y se presente nuevamente con el interés
de reiniciar sus actividades en el ejido o en su caso, ceder sus derechos, estará
obligado a ponerse al corriente con todo lo que deba al ejido desde el momento
en que se ausento y además tendrá que pagar una sanción de $1000.00 por año
de ausencia a la tesorería ejidal. Lo anterior no aplica para aquellos ausentes pero
que a través de un representante han cumplido con sus obligaciones y están al
corriente.
Articulo 142°. El ejidatario que haya sido sancionado por haber incurrido en
alguna causal señalada en los artículos del presente reglamento interno y no haya
cumplido con sus obligaciones como ejidatario que motivaron la sanción o no se
haya puesto al corriente de sus adeudos con el ejido aun encontrándose viviendo
en el mismo, podrá ser separado de sus derechos agrarios por la asamblea, ya que
con su conducta solo causaría perjuicios al núcleo agrario, tales como el quórum
legal y el desarrollo del mismo. Derivado de ello el comisariado ejidal con las
actas de asamblea y en su caso de otros documentos relacionados con el caso en
particular que se presente, remitirá el asunto al tribunal unitario agrario, para su
resolución y separación definitiva.

TITULO OCTAVO

DEL DESARROLLO FORESTAL SUSTENTABLE

CAPÍTULO PRIMERO

De la Organización para la Administración de los Recursos Forestales

Artículo 143°. Los ejidatarios y las ejidatarias con derechos vigentes y los
posesionarios y posesionarias reconocidos por la asamblea deberán participar en
labores que se deriven del manejo forestal, la planeación comunitaria, brigadas
de cultivo, limpia del bosque, clareos, brechas, cercado, así como de la
capacitación y adiestramiento en temas específicos relacionados con el desarrollo
forestal, combate de incendios forestales y plagas, en los términos que se
determine por la asamblea y la Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable.

Artículo 144°. La asamblea podrá nombrar una Comisión Auxiliar para el


aprovechamiento de las tierras de uso común con vocación forestal, que apoyará
al comisariado ejidal, para el óptimo manejo de bosque y que estará encargada
de implementar y dar seguimiento a las actividades relacionadas con el
aprovechamiento, conservación y restauración forestal. Estará constituida por un

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presidente, y dos vocales nombrados por la asamblea por un periodo de tres
años.

Artículo 145°. El comisariado ejidal y las comisiones auxiliares que se nombren


para el aprovechamiento de las tierras de uso común con aptitud forestal,
fungirán como enlace ante las instancias de gobierno y organizaciones no
gubernamentales a fin de atraer programas, recursos, capacitación y asistencia
técnica para aprovechar de manera sustentable los recursos forestales.

Artículo 146°. La comisión auxiliar para el aprovechamiento de las tierras de uso


común forestales, así como las personas designadas para apoyar el
aprovechamiento forestal, serán nombradas y removidas por la asamblea, en
cualquier momento.

Artículo 147°. La comisión auxiliar para el aprovechamiento de las tierras de uso


común con vocación forestal estará facultada por la asamblea para:

a) Dar seguimiento a la elaboración, aprobación y aplicación del Programa


de Manejo Forestal.
b) Informar a la asamblea las reglas de operación y términos de las
convocatorias de los programas de apoyo a la actividad forestal que
impulsan las Instituciones de los tres órdenes de gobierno y otras
organizaciones no gubernamentales;
c) Dar seguimiento a la presentación oportuna de los proyectos en beneficio
del núcleo agrario y/o de sus integrantes.
d) Promover la correcta aplicación de los recursos recibidos para el núcleo
agrario.
e) Rendir informes al menos cada seis meses sobre el manejo de los recursos
forestales, el cual deberá ser aprobado por la asamblea.
f) Promover el reparto equitativo de las utilidades que obtenga el ejido por
la actividad forestal, por acuerdo expreso de la asamblea y con el apoyo
del comisariado ejidal.
g) Promover la capacitación y desarrollo de actividades que fortalezcan la
cultura forestal, realizando las gestiones correspondientes ante las
instancias de los tres órdenes de gobierno.
h) Impulsar acciones entre los ejidatarios y ejidatarias que promuevan la
conservación de suelo y agua, así como aquellas dirigidas a la prevención
de plagas e incendios forestales.
i) Identificar y proponer a las personas de entre el propio núcleo agrario que
fungirán como promotores.

Artículo 148°. La comisión auxiliar para el aprovechamiento de las tierras de uso


común con vocación forestal, para el desarrollo de sus funciones podrá nombrar
ejidatarios responsables de al menos 4 grupos de trabajo, autorizados por la
asamblea para:

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a) La elaboración, aplicación y seguimiento del Programa de Manejo
Forestal.
b) El seguimiento a la ejecución de las plantaciones forestales comerciales,
cuando las haya.
c) Las acciones de conservación y restauración forestal.
d) La comercialización local, regional, nacional y al exterior.

Artículo. 149°. Las ejidatarias, ejidatarios, posesionarias y posesionarios con


derechos sobre las tierras de uso común con vocación forestal tendrán además de
los ya señalados en el presente reglamento, los siguientes:

I. Derechos

a) Recibir la parte proporcional de utilidades, conforme su certificado de


derechos sobre las tierras de uso común.
b) Participar en cursos y talleres de capacitación.
c) Participar en los trabajos de la industria extractiva o industrial.
d) Nombrar a la persona que los representará en los trabajos de faenas,
incendios forestales, clareos, brechas cortafuego, podas, presas filtrantes
para conservación de suelo, acomodo de materiales; cuando el titular del
derecho no pueda participar por imposibilidad física, material o legal.
e) Aprovechar madera de fines domésticos propios.

II. Obligaciones

a) Denunciar ante la asamblea y en su caso ante la autoridad competente,


actos que se celebren en contravención a las disposiciones establecidas en
la Ley Agraria y la Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable y su
Reglamento que afecten los recursos naturales con que cuenta el ejido,
tales como el parcelamiento en tierras de uso común en contravención del
artículo 59 de la Ley Agraria, el aprovechamiento inmoderado de recursos
renovables y no renovables, la tala clandestina, el robo de madera o de la
existencia de cultivos o actividades ilícitas que se realicen dentro las tierras
ejidales.
b) Participar en las labores de conservación, fomento, protección y
restauración forestal, así como en las plantaciones comerciales o de otra
índole que se lleven a cabo en el ejido de conformidad con el programa
de manejo forestal autorizado.
c) Colaborar con la autoridad correspondiente, cuando las circunstancias así
lo ameriten, en la movilización de contingentes a las zonas donde se
localice algún incendio forestal, particularmente aquellos ejidatarios que
sean propietarios de unidades de transporte;
d) Abstenerse de tirar basura en los terrenos del ejido y sus alrededores, así
como denunciar ante quien corresponda a quien viole esta disposición.
e) Elegir y/o desempeñar los cargos o comisiones que les confiera la
asamblea.

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f) Participar en el aprovechamiento de las tierras de uso común y demás
recursos naturales del ejido, en la forma y términos que se establezcan y
hayan sido aprobados por la asamblea.
g) Participar en las acciones de combate y control de incendios forestales, así
como de sanidad vegetal y animal cuando así lo determinen los comités
responsables y/o la asamblea y la comisión auxiliar para el
aprovechamiento de las tierras de uso común con vocación forestal.
h) Todas las que se deriven de sus derechos agrarios y las que se establezcan
por la asamblea.

CAPÍTULO SEGUNDO

Del Ordenamiento y Desarrollo Forestal

Artículo 150°. El aprovechamiento forestal del ejido estará normado por


instrumento legar correspondiente (Programa de Manejo, Aviso de
Aprovechamiento, Unidad de Manejo Animal, etc.) aprobado por la asamblea y
autorizado por la Secretaria del Medio Ambiente y Recursos Naturales
(SEMARNAT), mismo que deberá ser elaborado con el apoyo de un prestador de
servicios técnicos profesionales forestales. Los ejidatarios estarán obligados a
respetar las superficies y volúmenes de aprovechamiento por géneros, que en el
mismo se especifique.

Artículo 151°. La comisión auxiliar para el aprovechamiento de las tierras de uso


común de vocación forestal y el comisariado ejidal previo acuerdo de la
asamblea, dentro de sus atribuciones, serán los responsables de gestionar ante la
autoridad correspondiente las autorizaciones anuales de cosecha forestal de
acuerdo al programa de manejo autorizado para el ejercicio del año
correspondiente, así mismo, el comisariado ejidal deberán convocar a asamblea
con toda oportunidad, cuando se trate lo relativo a la contratación de productos
forestales.

Artículo 152°. El Programa de Manejo Forestal deberá contener al menos lo


siguiente:

a) El ciclo de corta y el turno.


b) La forma de cómo se haría el inventario forestal del ejido.
c) Cuanto se va a cortar por unidad mínima de manejo, el tratamiento del
arbolado y cómo se distribuirá el producto.
d) La forma en que se llevará a cabo la reforestación.
e) Las medidas a tomar para prevenir, controlar y combatir incendios plagas
y enfermedades forestales.
f) La forma en que se marcará el arbolado que se va aprovechar.
g) La inclusión de mapas en donde se especifique las áreas a cortar, la
clasificación de las superficies, la maquinaria que se va a utilizar.

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Artículo 153°. El aprovechamiento de los recursos forestales se realizará
preferentemente en forma colectiva, o como lo determine la asamblea,
considerando el porcentaje acordado por asamblea para recibir los derechos
sobre las tierras de uso común.

Artículo 154°. El consejo de vigilancia deberá estar al pendiente del área de


aprovechamiento del ejido, para evitar derribo sin marca, hechura de la rama,
daño a árboles dejados en pie por grúas, motosierras y hachas o cualquier daño al
arbolado. El consejo de vigilancia recibirá el corte y en caso de que la empresa
contratada haya hecho algún daño, se dará vista a la autoridad correspondiente
para que pague este daño. Esta obligación la llevarán a cabo ya sea el comité
auxiliar, el comisariado ejidal, el consejo de vigilancia y los ejidatarios en
general.
Artículo 155°. El aprovechamiento colectivo de los productos forestales del ejido
comprenderá una fase primaria que es la industria extractiva para llevar a cabo la
comercialización industrial y comercialización de los productos forestales. La
industria extractiva comprende toda la actividad forestal que se relaciona con el
derribo, troceo, limpia y apertura de caminos, así como el transporte de los
productos elaborados y semi elaborados; hasta los centros de transformación
industrial y una fase secundaria para la cual, la asamblea ejidal por conducto de
la comisión auxiliar de las tierras de uso común, podrá contratar un
administrador para que lo auxilie en las labores referentes al asierre de los
productos forestales, quien deberá rendir informes periódicos a la asamblea.
Artículo 156°. La extracción de los productos forestales comerciales deberá
documentarse dentro del área de corta, conforme lo establece la Ley General de
Desarrollo Forestal Sustentable o las normas vigentes y aplicables.
Invariablemente todos los integrantes del núcleo de población titulares de
derechos, avecindados, terceras personas autorizadas por la asamblea deberán de
observar las disposiciones contenidas en este reglamento.
Artículo 157°. El material que provenga de arbolado muerto o desenraizado por la
acción del viento o por los efectos de cualquier otro tipo de fenómeno de la
naturaleza, invariablemente deberá ser marcado, previo acuerdo con el
presidente de la comisión auxiliar para el aprovechamiento de las tierras de uso
común con vocación forestal y el consejo de vigilancia, y puesto a disposición
del tesorero del comisariado ejidal; siempre y cuando se cuente con la
autorización contemplada en el programa de manejo forestal que se le autorice al
ejido.
CAPÍTULO TERCERO

De la asistencia técnica

Artículo 158°. El ejido estará asistido por un responsable técnico forestal, con
capacidad y experiencia en la materia, cuya contratación será aprobada por la
asamblea, quien estará obligado a cumplir con las disposiciones contenidas en los
ordenamientos legales, lo que señale el programa de manejo forestal autorizado y
las Reglas de Operación de los programas institucionales de las cuales se apoyará
el ejido.

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CAPÍTULO CUARTO

De las plantaciones forestales comerciales

Artículo 159°. La asamblea para el aprovechamiento de las tierras de uso común


forestales, determinarán con base a estudios técnicos la posibilidad de establecer,
cultivar y manejar vegetación forestal maderable y no maderable, en terrenos
preferentemente forestales o temporalmente forestales, con el fin de producir
materias primas forestales, destinadas a su industrialización y/o comercialización.

Artículo 160°. Las plantaciones forestales comerciales, no podrán establecerse en


sustitución de la vegetación primaria nativa actual de los terrenos del ejido; en
apego a la Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable.

CAPÍTULO QUINTO

De la Comercialización de Productos y/o Servicios Forestales

Artículo 161°. La comisión auxiliar para el aprovechamiento de las tierras de uso


común con aptitud forestal, en coordinación con el comisariado ejidal,
promoverá ante las instituciones responsables del desarrollo forestal, la
comercialización de los productos y/o servicios forestales que se generen en el
ejido, así como de buscar su promoción en el ámbito municipal, estatal, nacional
e internacional.

Artículo 162°. El comisariado ejidal y la comisión auxiliar para el


aprovechamiento de las tierras de uso común con vocación forestal informarán a
la asamblea sobre los contratos realizados y por realizar, así como de las
utilidades que se obtengan por concepto de comercialización de productos,
materias primas o servicios, y propondrán la equitativa distribución entre los
ejidatarios.

CAPÍTULO SEXTO

De los Servicios Ambientales

Artículo 163°. La asamblea establecerá las acciones dirigidas a impulsar el


desarrollo de las potencialidades de los servicios ambientales que pueda generar
el bosque, la tierra y aguas del ejido que represente un ingreso económico en
beneficio de sus integrantes, mediante la promoción y gestión de los programas
que impulsan la protección de la biodiversidad, la recarga de acuíferos, la
conservación de manantiales, lagos, lagunas y la captura de carbono, buscando
en todo momento que los ingresos recibidos por este concepto queden
declarados en asamblea, quien determinará la distribución equitativa entre todos
los ejidatarios con derechos sobre las tierras de uso común.

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CAPÍTULO SÉPTIMO

De la Conservación y Restauración Forestal

Artículo 164°. Todo ejidatario, ejidataria, posesionario y posesionaria deberá


participar activamente en los procesos y campañas de reforestación que requiera
el ejido, además de aquellas acciones relacionadas con la conservación de suelos,
el combate y control de los incendios forestales, de plagas y enfermedades que
afecten el bosque.

Los ejidatarios, ejidatarias con derechos vigentes y los posesionarios y


posesionarias, reconocidos por la asamblea deberán participar en labores que se
deriven del manejo forestal, la planeación comunitaria, brigadas de cultivo,
limpia del bosque, aclareos, brechas, cercado, así como de la capacitación y
adiestramiento en temas específicos relacionados con el desarrollo forestal,
combate de incendios forestales y plagas, en los términos que se determine por
la asamblea y la Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable.

Artículo 165°. Es obligación de las ejidatarias y los ejidatarios participar del


cuidado de las áreas destinadas a las plantaciones forestales comerciales, que se
establezcan dentro del ejido y áreas restringidas o protegidas para su
conservación.

Artículo 166°. La comisión auxiliar para el aprovechamiento de las tierras de uso


común con vocación forestal en coordinación con el comisariado ejidal, el
consejo de vigilancia y el responsable técnico forestal, elaborarán el plan de
acción para la prevención, detección, control y combate de los incendios
forestales, mismo que será autorizado por la asamblea, actividad que deberá
realizarse previo a la temporada de mayor incidencia de los incendios forestales y
será revisado anualmente.

Artículo 167°. El plan contendrá las acciones y los criterios para la integración de
las brigadas preventivas y de combate contra incendios forestales, tomando en
cuenta las condiciones climáticas prevalecientes en la temporada y las actividades
que se detecten como riesgo originadas por la actividad humana.

Artículo 168°. El asesor técnico en coordinación con la comisión auxiliar para el


aprovechamiento de las tierras de uso común con vocación forestal, realizará la
evaluación de daños causados por los incendios y los presentará a la asamblea
ejidal con el fin de acordar las acciones convenientes para su restauración.

Artículo 169°. Los incendios que ocurran en el ejido serán reportados por los
integrantes del ejido ante la autoridad ambiental que corresponda, para que esta
a su vez actúe conforme al procedimiento para combatir los incendios forestales,
en coordinación con las autoridades civiles y militares, y de otras instituciones
públicas encargadas del cuidado de los ecosistemas.

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Artículo 190°. El comisariado ejidal realizará la gestión ante la Comisión Nacional
Forestal (CONAFOR), para la obtención de apoyos encaminados a la
reforestación de la zona devastada por el incendio.

Artículo 191°. La comisión auxiliar para el aprovechamiento de las tierras de uso


común con vocación forestal en coordinación con el responsable técnico, el
grupo de trabajo correspondiente y el consejo de vigilancia, realizarán recorridos
continuos en las tierras del ejido con el propósito de detectar la presencia de
plagas y enfermedades, y si fuera el caso, establecer un programa de atención
emergente.

Artículo 192°. Todos los integrantes del núcleo agrario están obligados a reportar
ante el comisariado ejidal, el consejo de vigilancia y la comisión auxiliar para el
aprovechamiento de las tierras de uso común con vocación forestal, el comité de
desarrollo forestal, el responsable técnico forestal y a la asamblea, la presencia de
focos de infección de plagas que afecte la masa arbolada.

Artículo 193°. El grupo de trabajo de conservación y restauración forestal en


coordinación con la comisión auxiliar para el aprovechamiento de las tierras de
uso común con vocación forestal, deberán cuidar que, en la actividad de pesca,
en cuerpos de agua ubicados dentro del ejido, no se utilicen venenos o
cualesquiera otra sustancia o instrumentos prohibidos que pongan en peligro de
extinción a las especies y de contaminación al agua.

Artículo 194°. Ante la presencia de plagas o enfermedades, el grupo de trabajo de


conservación y restauración forestal deberá impulsar acciones necesarias para su
combate y la propuesta de restauración de las áreas siniestradas; la comisión
auxiliar para el aprovechamiento de las tierras de uso común de vocación forestal
deberá notificar al respecto a las instituciones encargadas de ello de los tres
órdenes de gobierno.

CAPÍTULO OCTAVO

Del Aprovechamiento, Protección y Fomento de la fauna silvestre

Artículo 195°. La comisión auxiliar para el aprovechamiento de las tierras de uso


común con vocación forestal y el grupo de trabajo de conservación y
restauración forestal, en coordinación con el responsable técnico, están obligados
a formular un plan de acción para el aprovechamiento, protección y fomento de
la fauna silvestre, mismo que su aprobación estará sujeto a la decisión de la
asamblea.

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Artículo 196°. Todos los integrantes del núcleo agrario están obligados a proteger
y fomentar la presencia de la fauna silvestre nativa, así como avisar a la autoridad
correspondiente del mal uso y/o aprovechamiento que se haga de ella.

Artículo 197°. El comisariado ejidal, la comisión auxiliar para el aprovechamiento


de las tierras de uso común con vocación forestal y el responsable técnico, se
encargarán de facilitar y/o gestionar la capacitación y adiestramiento para todos
los integrantes del ejido en materia del aprovechamiento sustentable del bosque,
protección y fomento de la fauna silvestre.

CAPÍTULO NOVENO

Del Aprovechamiento de los Recursos No Renovables

Artículo 198°. El aprovechamiento de los recursos no renovables del ejido quedará


condicionado a las normas siguientes:

a) Se deberá acordar su extracción por la asamblea de ejidatarios y/o


ejidatarias.
b) El transporte de los mismos deberá de hacerse previa orden suscrita por el
comisariado ejidal y del presidente de la comisión auxiliar para el
aprovechamiento de las tierras de uso común con vocación forestal.
c) Cuando los ejidatarios, ejidatarias, posesionarios, posesionarias,
avecindados y avecindadas (opcional) vayan a utilizar los mismos en la
construcción de sus viviendas y para fines domésticos, la comisión auxiliar
para el aprovechamiento de las tierras de uso común con vocación forestal
deberá manifestarse sobre la utilización que se pretenda dar a dichos
materiales.

Artículo 199°. Para cumplimiento a lo dispuesto en el artículo anterior y


tratándose de personas extrañas al ejido, que al efectuar el transporte de estos
productos se rehúsen a efectuar el pago correspondiente de acuerdo con las
tarifas autorizadas por la asamblea, el comisariado ejidal deberá solicitar el apoyo
de las autoridades correspondientes para que se apliquen las sanciones que
procedan.

Artículo 200°. Queda prohibida la extracción y transporte de productos herbáceos


tales como: hoja de laurel, romero, plantas medicinales, canela, etc. quedando
limitado su aprovechamiento con fines domésticos y medicinales a ejidatarios,
posesionarios y avecindados.

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TRANSITORIOS

Artículo primero. - El presente reglamento interno fue aprobado por la asamblea de

ejidatarios legalmente convocada y constituida que se celebro en el Ejido NCPE.

HUATUSCO, del Municipio de Bacalar, Estado de Quintana Roo. El mismo podrá ser

modificado en cualquier momento según lo requieran las necesidades del ejido, por

acuerdo de la asamblea que al efecto se convoque y celebre conforme a la ley.

Artículo Segundo. - Lo no previsto en este reglamento interno será resuelto por la

asamblea de ejidatarios, observando en todo momento las disposiciones de la Ley

Agraria y otros ordenamientos legales, reglamentarios y administrativos que resulten

aplicables.

Artículo Tercero. - Inscríbase este reglamento en el Registro Agrario Nacional, con el


propósito de que surta plenos efectos entre los miembros de este ejido y también
respecto a terceros.

Artículo Cuarto. - El presente reglamento interno entrara en vigor una vez aprobado por

la asamblea e inscrito en el Registro Agrario Nacional.

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