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Propiedades de los líquidos

PALABRAS CLAVES
Líquido, fluidos, viscosidad, fuerzas
intermoleculares, tensión superficial,
cohesión, adherencia, capilaridad.

Marco teórico

Para empezar ¿Qué es un líquido?


El líquido es uno de los tres estados de agregación de la materia. Un líquido es un fluido (además
de los gases) cuyo volumen es constante bajo condiciones de temperatura y presión constantes.
Las moléculas de los líquidos y gases no se mantienen en posiciones fijas, como ocurre con los
sólidos, se pueden mover libremente deslizándose unas sobre otras y esto impide que la materia
en dichos estados tenga forma propia; por lo cual un líquido toma la forma del recipiente que lo
contiene. Esta diferencia entre sólidos y líquidos se debe a la fuerza de unión entre sus moléculas.
En los sólidos dicha fuerza es lo suficientemente grande para mantenerlas en una misma posición,
en los líquidos es muy débil para dejarlas fijas, aunque lo suficientemente grande para
mantenerlas unidas. (Tippens, (2011))
Este estado de la materia suele considerarse un punto intermedio entre las cosas sólidas y las
gaseosas, y por lo general es resultado de la inyección de energía a las primeras o la sustracción de
energía a las segundas. La fluidez es una de las principales características de los líquidos y gases,
que determina su capacidad para abandonar un recipiente en favor de otro a través de conductos,
ya que las partículas de las sustancias en estos estados de agregación carecen de memoria de
forma, no insisten en una forma determinada, como los sólidos. Se denomina viscosidad a la
resistencia a fluir que ejercen las fuerzas internas de un líquido, que enlentecen más o menos su
deformación cuando se lo vierte fuera de su recipiente o se lo pone en marcha. (Uriarte, 2019).

Las fuerzas de cohesión dentro del líquido crean una fricción interna que reduce la velocidad del
flujo. Las intensidades de las fuerzas de atracción molecular de diferentes sustancias varían en
gran medida, pero en general son mucho más débiles que los enlaces iónicos o covalentes. Por lo
tanto, se requiere menos energía para vaporizar, o evaporar, un líquido o para fundir un sólido,
que para romper los enlaces covalentes de las moléculas. La intensidad de las atracciones
intermoleculares disminuye rápidamente al aumentar la distancia entre las moléculas. De este
modo, cuando una sustancia molecular como el HCl cambia de sólido a líquido a gas, las moléculas
mismas permanecen intactas. (Monografías plus, 2013)

Referencias

(Tippens, 2011) uaeh.edu.mx/scige/boletin/prepa4/n4/m14.html

(Monografías plus, 2013) https://www.monografias.com/docs/

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