Excelencia Ministerial

Instituto Bíblico “Fuego de Avivamiento”
Cátedra: Excelencia Ministerial Apóstol: Henry A. Troconiz P.
Contenido
I. La provisión de Cristo para Su Iglesia………………………………
II. El llamado divino……………………………………………………..
III. Dios equipa al que llama………………………………….………….
IV. La fidelidad al llamado………………………………………………..
V. Variedad y equilibro………………………………………..………..…….
VI. El apóstol…………………………………………………………..…….
VII. El profeta………………………………………………………….…….
VIII. El evangelista…………………………………………………...…..……
IX. El pastor……………………………………………………...……………
X. El maestro ………………………………………………..………….……
XI. La variedad de dones del ministerio……………………….………….…
XII. La función de los que ayudan……………………………………………..
XIII. El ministerio de Lenguas y la interpretación…………………..…………
XIV. La exhortación………………………………………………………………
XV. El ministerio de repartir……………………………………………………..
Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos una misma cosa, y que no haya entre vosotros divisiones, sino que estéis 1
perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer. (1 Cor. 1:10)
2
Lección I
LA PROVISIÓN DE CRISTO PARA SU IGLESIA
A. Él los dio. El Señor Jesucristo dio los dones del ministerio.
Efesios 4:8 y 4:11
8
…Y DIO DONES a los hombres.
11 Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros,
pastores y maestros.
B. ¿Cuándo los dio? Cuando Jesús ascendió a lo Alto llevándose con Él a los santos del
Antiguo Testamento que habían esperado la consumación del gran plan de la
redención de Dios desde que esperaban muertos físicamente en el Paraíso – el seno
de Abraham.
Efesios 4:8-10
8
Por lo cual dice: SUBIENDO A LO ALTO, llevó cautiva la cautividad, Y dio dones a los
hombres. 9Y eso de que subió, ¿qué es, sino que también había descendido primero a las partes
más bajas de la tierra? 10El que descendió, es el mismo que también subió por encima de todos
los cielos para llenarlo todo.
C. ¿De dónde vienen los dones? Estos dones del ministerio vienen y vinieron directamente
de la mano del Cristo exaltado que está sentado ahora a la mano derecha de Dios en
el cielo.
D. ¿Para qué propósito dio El los dones del ministerio?
Efesios 4:12
12
a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de
Cristo,
1. Para perfeccionar a los santos.
La palabra griega (KATARTISMOS) que traducida quiere decir “perfeccionar”
según el Diccionario de Palabras del Nuevo Testamento escrito por W.E. Vine,
denota el ajuste y preparación completa que significa un proceso que conduce a la
consumación.
Si uno de los propósitos por los cuales los dones del ministerio fueron dados
es para perfeccionar a los santos, ¿podrán ellos alcanzar la madurez sin esos
dones? ¡No!
2. Para la obra del ministerio.
3. Para la edificación del Cuerpo de Cristo.
E. ¿Hasta cuándo dio El los dones del ministerio?
Efesios 4:13
13
HASTA QUE TODOS LLEGUEMOS a la unidad de la fe y del conocimiento del
Hijo de Dios, A UN VARÓN PERFECTO, A LA MEDIDA DE LA ESTATURA
DE LA PLENITUD DE CRISTO;
Dichos dones del ministerio son la provisión propia de Cristo para la necesidad
continua del ministerio en Su Iglesia hasta que El venga por Su Iglesia.
Hace algunos años surgió una enseñanza errónea llamada “el ministerio del
cuerpo.” (Hay cierta verdad en esto porque Dios usa a todas las personas.) Pero
alguien enseñaba, “Ya no necesitamos pastores, ni ministros del Evangelio.
Dios ya no está usando a los ministros. Dios tiene un programa diferente
ahora.”
Las Escrituras dicen que dichos dones fueron dados al hombre por Cristo,
“HASTA QUE TODOS LLEGUEMOS…a un varón perfecto a la medida de la
estatura de la plenitud de Cristo.”
Hasta que Jesús venga, “todos nosotros” nunca podremos alcanzar ese estado de
madurez. Cuando Jesús venga, algunos bebés acabaran de nacer en la familia de
Dios. Ellos no habrán tenido tiempo de madurar.
Estos dones del ministerio son el programa de Dios para la madurez de los
santos hasta que Cristo venga por los Suyos.
F. ¿Cuál es el ideal supremo en todo ministerio?
Efesios 4:13-16
13
HASTA QUE TODOS LLEGUEMOS a la unidad de la fe y del conocimiento del
Hijo de Dios, A UN VARÓN PERFECTO, A LA MEDIDA DE LA ESTATURA
4
DE LA PLENITUD DE CRISTO; 14PARA QUE YA NO SEAMOS NIÑOS

FLUCTUANTES, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de
hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error, 15sino que
siguiendo la verdad en amor, CREZCAMOS EN TODO EN AQUEL que es la cabeza,
esto es, Cristo, 16de quien todo el cuerpo, bien concertado y unido entre sí por todas las
coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro,
recibe su crecimiento para ir edificándose en amor.
1. La Iglesia necesita estar rodeada de crecimiento espiritual para poder llegar a su

destinada perfección en Cristo.
2. Los niños espirituales se trastornan y se dejan conducir fácilmente por cosas
falsas.
3. Los dones del ministerio que Cristo puso en la Iglesia nos ayudan a crecer a Su
imagen.
4. No podremos alcanzar dicho estado sin la obra del ministerio quíntuplo.
5. Algunas áreas de la cristiandad no se han madurado completamente porque sólo
han reconocido dos o tres dones del ministerio: evangelistas, pastores y algunas
veces maestro.
Resumen: El propósito supremo de todo ministerio no es el glorificar ni ensalzar al
hombre de ninguna manera. Está dirigido totalmente hacia el Cuerpo de Cristo. Se
necesita el funcionamiento de dichos ministerios para edificar y vigorizar al Cuerpo
de Cristo.
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Lección II
EL LLAMADO DIVINO
A. Dios puso a unos en la Iglesia. Existe un llamado divino.
I CONRINTIOS 12:27-28
27
Vosotros, pues, sois el cuerpo de Cristo, y miembros cada uno en particular. 28Y A UNOS
PUSO DIOS EN LA IGLESIA, primeramente apóstoles, luego profetas, lo tercero maestros,
luego los que hacen milagros, después los que sanan, los que ayudan, los que administran, los
que tienen don de lenguas.
1. Efesios 4:11 dice, “Jesús constituyo.” Este pasaje dice “Dios puso.”
2. Este versículo de Corintios anuncia que el Cuerpo de Cristo es la Iglesia. La
Iglesia es el Cuerpo de Cristo. El Cuerpo de Cristo es la Iglesia.
B. Dios pone los dones del ministerio en la Iglesia – no el hombre.
1. Hay una diferencia muy amplia entre que Dios ponga a unos en la Iglesia y que
el hombre ponga a unos en la Iglesia.
2. Un estudio sobre la historia de la Iglesia revela que a través de los siglos, varios
grupos se han esforzado en regresar a lo que ellos llaman las prácticas del
Nuevo Testamento.
Ellos pusieron en marcha organizaciones que frecuentemente fueron algo
fabricado por el hombre – algo de la carne, algo humano.
Ellos “llamaron” y “pusieron” a personas que no tenían llamados divinos en
ciertos puestos o ministerios.
Esto no es bíblico
Dios es El que pone
Dios es El que llama.
C. Tú no entras en el ministerio – ni en ninguna fase de éste – solamente porque “tu”
sientes que es un llamado santo y quieres responder afirmativamente.
1. No puedes hacerte a ti mismo un don del ministerio.
2. Es peligroso el hacer algo simplemente porque “tu” quieres hacerlo.
D. No entras en el ministerio porque “otra persona” te dice que estás hecho para
el mismo.
Experiencia personal: Siendo pastor, yo contemplaba a los jóvenes de la Iglesia
que eran idóneos para el trabajo de Dios. Creo que algunos de ellos habían
recibido un llamado de Dios y estoy seguro que otros no lo habían recibido. He
visto como otros miembros de la iglesia arruinaban a algunos de los jóvenes
cuando se les aproximaban diciendo, “yo creo que tú has sido llamado para
predicar,” y así sucesivamente. Ellos trataron de hacerlo y fracasaron. Incluso
algunos de ellos dejaron la iglesia completamente.
1. No vayas porque alguien te llamó.
2. No vayas porque tu madre te llamó.
3. No vayas porque tu padre te llamó.
4. Esposos, si sois ministros del Evangelio y tenéis el llamado divino en
vuestras vidas, no tratéis de llamar a vuestra esposa. Dejad que ella sea la
ayuda idónea que ha sido designada por Dios para ser. Incluidla en toda
forma que os sea posible.
5. Esposas, si tenéis el llamado, no tratéis de hacer de vuestro esposo un
predicador cuando no lo es. Y no lo separéis de vuestra vida. Incluidlo en
vuestra vida e incluso en el ministerio, en toda forma que os sea posible.
6. Hay un llamado divino. Reconoce si lo tienes en tu vida, y no vayas sin éste.
E. ¿Cómo reconocer un llamado divino?
1. Tendrás la convicción en tu propio espíritu.

Tendrás el testimonio en tu propio corazón.
Experiencia personal: Yo sabía que había sido llamado en el interior de mí
mismo. ¿Cómo? Por medio de una intuición interna. Siempre estaba conmigo.
Formaba parte de mi interior lo mismo que mis orejas formaban parte de mi
exterior.
8
2. Dios se relaciona con el espíritu del hombre.

3. Aprende a escuchar tu propio espíritu.
a. Aprende a escuchar en los profundo de tu interior y sabrás muchas cosas que
de otra manera no sabes.
b. Pero si vives según el mundo, dedicado sólo una mitad de tu vida, una mitad
adentro y la otra mitad afuera, debido a que estás viviendo demasiado según
la carne, la carne te dominará y no estarás consciente de tu espíritu
c. Si estas completamente dedicado y consagrado a Dios para hacer todo lo que
Él quiera que tu hagas, te harás consciente de este algo que está dentro de ti.
d. Habrá una compulsión divina en tu interior.
F. Los métodos empleados para llamar al hombre no tienen importancia. Lo que es
importante es la obediencia al llamado.
1. Si los métodos fueran importantes, la Biblia los enfatizaría; pero no lo hace.
2. La Biblia dice mucho sobre la obediencia.
3. Algunas veces Dios obra de forma extraordinaria. Pero ésta no es la regla.
a. Las visiones. Algunas veces las personas tienen visiones. Pablo las tuvo. Yo he
tenido visiones. Pero la primera visión que tuve fue a los 15 años de estar en el
ministerio. Fui al ministerio sin ninguna clase de visitación “sobrenatural” (si
quieres llamarla así, porque todo lo que es de Dios es sobrenatural). Fui
dirigido solamente por la intuición interna, la evidencia interna.
b. La profecía. Los dones del ministerio no son puestos en la Iglesia por la
profecía. La profecía puede confirmar el llamado ya recibido.
Hechos 13:1-2
1
Había entonces en la iglesia que estaba en Antioquía, profetas y maestros: Bernabé,
Simón el que se llamaba Niger, Lucio de Cirene, Manaén el que se había criado junto
con Herodes el tetrarca, y Saulo. 2Ministrando éstos al Señor, y ayunando, dijo el
Espíritu Santo: Apartadme a Bernabé y a Saulo PARA LA OBRA A QUE LOS HE
LLAMADO.
Bernabé y Saulo no fueron llamados por la profecía. Ellos no fueron puestos por
profecía o por el hombre. Dios simplemente confirmo algo.
Experiencia personal: En la última iglesia que yo pastoreé, una noche estábamos
orando todos juntos alrededor del altar. Yo estaba orando e imponiendo las manos
sobre algunos según me dirigía el Espíritu.
De repente, fui atraído como por un imán hacia una jovencita muy callada que era
tímida en cierto sentido.
Cuando le puse las manos sobre su cabeza, yo me sorprendí a mí mismo diciendo:
“Esta es la confirmación de lo que Yo te dije hoy a las tres de la tarde cuando
estabas orando en el sótano de tu casa. Te dije que Yo lo confirmaría.”
Yo no sabía el significado de dichas palabras. Ni tampoco le pregunté a ella porque
se puso a llorar y a orar mucho más.
Más tarde la llamé por teléfono y le pregunte, “¿Aquellas palabras tenían algún
significado para ti? ¿Estabas en el sótano a las 3 de la tarde?”
“¡Sí!” dijo ella, “el Señor me dijo que me había llamado al ministerio y que lo
confirmaría esta noche en la reunión.”
Notemos aquí que ella no fue puesta en la Iglesia como ministro por la profecía. El
llamado fue confirmado por la profecía, pero ella no fue puesta por la profecía.
1. Si una tal llamada profecía no confirma lo que tienes en tu propio espíritu,
olvídalo.
Experiencia personal: Años atrás un hombre me dijo que hacía un año un
“profeta” había usado la imposición de manos sobre él dándole cinco dones
espirituales incluyendo el don de la sanidad y la palabra de ciencia.
El me dijo, “Yo le he estado observando y he notado que en Ud. Obra el
don de la sanidad y la palabra de ciencia. Yo sé que tengo dichos dones
porque él me dijo que los tenía. ¿Puede mostrarme cómo usarlos?”
Le pregunte, “¿Durante todos esos meses se han manifestado alguna vez?”
“¡No!” me contestó.
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Le dije, “Si yo estuviera en tu lugar me olvidaría de todo. En primer lugar, él

no te dio nada. Solo Dios puede dar. En segundo lugar, si los dones estuvieran
en ti, ellos se esforzarían en manifestarse. Tendrías alguna clase de intuición. Si
yo estuviera en tu lugar simplemente continuaría en la iglesia y sería fiel.”
Algún tiempo después volví a predicar en la misma región. Noté que había
continuado siendo un laico, fiel a Dios y que era una bendición en la iglesia. Si
él hubiera tratado de tomar otra responsabilidad, él se hubiera convertido en
una maldición.
G. El ver una necesidad no es un llamado al ministerio.
1. Si no tenemos cuidado, caeremos en la actitud general de la Iglesia que el ver
una necesidad es un llamado. Esto no es bíblico. Existe un llamado divino.
2. Naturalmente, como cristianos, cada vez que vemos una necesidad, nos
preocupamos de dicha necesidad y nos esforzamos con toda nuestra habilidad
para ministrar dicha necesidad. De acuerdo con la Biblia esto es correcto. Pero
no debe confundirse con el llamado divino al ministerio.
H. Una unción es prueba del llamado divino.
Experiencia personal: Hace muchos años, oí predicar a un hombre en una convención
de 5.000 personas o más. “El ver la necesidad es un llamado,” afirmaba él. A pesar
de estar en el ministerio, él dijo, “Yo no sé si alguna vez recibí un llamado para el
ministerio.”
Pensé para mí, “Si no nos lo hubiera dicho, todos nosotros lo hubiéramos notado en 15
minutos.” No había unción en él.
Cuando una persona es llamada, hay una unción que fluye de él o de ella. En caso
contrario, simplemente se ponen delante del público y hablan. Es bueno el hablar y
compartir con los otros lo que se tiene, pero esto es diferente al llamado al ministerio
y al ser puesto en la Iglesia.
I. Si Dios no te ha llamado para que dediques todo tu tiempo al ministerio, no lo hagas.
No te ira bien.
J. Cuando sabes que eres llamado por inspiración divina, esto soluciona para siempre la
pregunta. Ahí no debe haber más confusión sobre el asunto.
Experiencia personal: Como dije antes, entré en el ministerio sin ninguna clase de
visitación sobrenatural. Simplemente me dirigí por la intuición interna, la evidencia
interna. Y nunca he tenido dudas sobre este particular.
Sin embargo con el transcurso de los años, especialmente durante los 12 años que
pase de pastor, he visto a muchos ministros animados y desanimados, y que incluso
se preguntaban si verdaderamente habían recibido un llamado.
Yo puedo decirte la razón por lo cual ellos dudaban. Es porque estaban viviendo
según la carne y según el reino de la mente y no según el reino espiritual. Si bajaba
la asistencia de la Escuela Dominical, ellos se desanimaban. Sus rostros estaban
tristes. Si las ofrendas disminuían, también se desanimaban.
Podrías oírlos decir, “de todas maneras no sé si Dios me llamó para predicar o no.
Si consiguiera aumentar la asistencia de la Escuela Dominical al número de
antes…Si las ofrendas aumentaran hasta la cantidad de antes…Pienso que me
marcharé de la iglesia.”
Algunos de ellos me decían, “Hermano Hagin, ¿no te desanimas algunas vez?” Les
contestaba, “¡No!” Siempre estoy animado. Tanto si la audiencia es pequeña, como
si la audiencia es grande. Como ves, yo sé que Dios me ha llamado. También sé que
El me ha llamado a este lugar. Y aquí me quedo hasta que sea El quien me diga que
me vaya. Incluso si nadie viene excepto dos personas, yo compartiré con ellas lo
mejor que tengo y permaneceré fiel.”
“Nunca pienso sobre la frase, tal vez estoy fuera de la voluntad de Dios. Porque se bien
que Dios dijo “ve”. El es un Ser inteligente. Yo soy un ser inteligente. El me dirá
cuando debo marcharme.” Como ves, puedes preocuparte y desanimarte tú mismo,
puedes abrir la puerta al diablo para que se divierta dentro de ti.
Este era mi lema aun antes de leerlo en el libro de Wigglesworth. Yo pienso que
toda persona de fe lo diría.
No ando por lo que veo.

No ando por lo que siento.
Ando por lo que creo.
Aprende que las cosas espirituales son más reales que las materiales.
Aprende a dirigirte a tu espíritu.
Tu espíritu te lo dirá.
Tu espíritu sabe cosas desconocidas por tu cabeza
12
Lección III
DIOS EQUIPA AL QUE LLAMA
A. Los dones del ministerio son personas – personas llamadas por Dios.
1. Felipe fue llamado evangelista.
2. Pedro fue llamado apóstol.
3. Pablo primeramente fue llamado profeta y maestro, más adelante apóstol.
4. Otros creyentes en el Nuevo Testamento son llamados los dones del
ministerio.
B. Dichos creyentes (dones del ministerio) que Dios llama son equipados por El mismo
con dones espirituales.
1. Dichos ministerios no están basados en los dones naturales sino en los dones
sobrenaturales.
a. Si la Iglesia y el ministerio no se dan cuenta de esto, se separan de lo
sobrenatural para ir a lo natural.
2. Cuando una persona nace de nuevo, Dios tiene en su mente un llamado para
que haga algo. Con el nuevo nacimiento, uno es equipado con ciertos
talentos espirituales que los equipan a ser útiles en el lugar donde son
situados en el Cuerpo de Cristo.
3. El ser lleno del Espíritu Santo lo mejora.
Experiencia personal: Yo predique dos o tres años sin el bautismo del Espíritu
Santo; no obstante, la misma unción caía sobre mí para predicar en aquellos
tiempos que ahora.
4. Dios equipa con los dones espirituales necesarios para ser útiles en el
ministerio al cual fueron llamados.
a. Los laicos pueden tener dones espirituales que obren a través de ellos.
Pero los ministros serán equipados para ministrar regularmente con
aquellos dones que sean necesarios para la obra a la cual fueron
llamados.
b. Los mismos dones espirituales cuando obran a través de ministros
tendrán una unción mucho mayor.
Ejemplo: Las lenguas, la interpretación o la profecía, tienen una unción
mucho mayor cuando obran por medio de un ministro que cuando
obran por medio de un laico.
5. La educación o cultura es buena – pero necesitamos más que tener una
buena educación cultural. La ambición que sea justa es buena (siempre
que anhele los deseos de Cristo) – pero necesitamos más que ambición.
Necesitamos un ministerio equipado con los dones sobrenaturales.
C. Los dones del ministerio consisten no en nombre sino en poder.
1. Fácilmente puedes decir que eres lo que quieras pero esto no prueba que
seas lo que dices que eres.
Puedes sentarte en un garaje diciendo que eres un coche, pero esto no
prueba que seas uno.
2. Puedes llamarte pastor, pero esto no prueba que seas uno.
Puedes llamarte apóstol, pero esto no prueba que seas uno.
Para saber si la comida está buena hay que probarla.
D. Toda la obra del ministerio es dirigida por Jesucristo.
1. El Nuevo Testamento presenta a Jesucristo activamente dirigiendo todas
las operaciones desde el trono de Dios.
Marcos 16:20
20
Y ellos, saliendo, predicaron en todas partes, AYUDÁNDOLES EL SEÑOR Y
CONFIRMANDO LA PALABRA con las señales que la seguían. Amén.
a. Observa que era el Señor quien estaba ayudando a esos primeros

discípulos.
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b. Era como su Señor y no meramente como su ayudador que obraba entre

ellos. Aunque Él es nuestro ayudador, por medio del Espíritu Santo, Jesús
también es nuestro Señor.
2. El Señor Jesucristo es la cabeza de la Iglesia.
a. Él es el único que da.
b. Él es el único que llama.
c. Él es el único que equipa.
d. Permitamos que sea Él quien lo haga.
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Lección IV
LA FIDELIDAD AL LLAMADO
Introducción: Algunos en el ministerio o nunca fueron llamados, o son
completamente infieles, ¿Por qué? Porque Dios no planeó ningún fracaso espiritual.
Bien seamos miembros individuales de Cristo o seamos llamados a ser dones del
ministerio, El no dio a unos que fracasaran y a otros para que triunfaran. ¡No! El
planeó que todos triunfaran. Por lo tanto, algunos ministros o son completamente
infieles o nunca fueron llamados. Como puedes apreciar, tienes que darte al
llamado de Dios en tu vida. Un buen ministerio no ocurre sin hacer nada, lo mismo
que un buen matrimonio. Tú tienes que cultivar y cuidar tu matrimonio.
A. Estudia. El tiempo empleado en la preparación nunca es tiempo perdido.
2 Timoteo 2:15
15
Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué
avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad.
B. Dedícate. Junto con el llamado va la dedicación.

C. Conságrate. Junto con el llamado va la consagración.
D. Sométete a la voluntad de Dios. Junto con el llamado va la sumisión a la voluntad de
Dios.
Comentarios: Cuando eres un principiante en el ministerio, no comienzas por el
puesto más alto. Lo mismo que para subir una escalera nadie comienza a subirla por
el escalón más alto. Se sube desde los primeros escalones hacia los de arriba. Tienes
que hacer lo mismo en el ministerio. Y algunas veces los primeros años en el
ministerio requieren muy grandes sacrificios. Pero si sabes que has sido llamado, te
quedaras en el ministerio no importa lo que te cueste.
Tienes que hacer esta clase de consagración a Dios: En el valle o en la cumbre, hundido o
triunfante, muerto o vivo, continuaré en el ministerio porque Dios me ha llamado.
Ya que has empezado por la fe, sabes que no terminarás de dicha manera trágica,
pero en ocasiones parecerá que sí. Parecerá como si estuvieras viviendo lo peor de los
tres puntos mencionados arriba – en el valle, hundido y muerto.
Pero si permaneces fiel en esas ocasiones cuando parezca que vayas a fallar,
cuando parezca que te estas hundiendo, cuando parezca que te estás muriendo
¡SUBIRAS A LA CUMBRE PORQUE CRISTO TE LLAMO!
Ejemplo: Hace muchos años, un matrimonio con sus dos niños pequeñitos fueron
al campo misionero. Eran misioneros pentecostales en un lugar donde no había
ninguna iglesia pentecostal. El me dijo que los primeros seis meses le parecía que
iba a morir de hambre junto con su esposa y los niñitos. El me dijo, “hubiera sido
muy fácil para nosotros regresar a nuestra casa, pero allí permanecimos porque
sabíamos que Dios nos había llamado. También sabíamos lo que la Palabra de
Dios dice. Y yo hice esta dedicación: “Aunque fallezcamos los cuatro, aquí
permaneceremos.”
Ellos no fallecieron. Antes de terminar el año tenían dinero en abundancia.
Pero esto no hubiera ocurrido si ellos no hubieran permanecido fieles. Si ellos se
hubieran afligido y quejado diciendo, “no sé porque nos ocurre esto. Si Dios nos
llamó a esta obra ¿Por qué hace esto con nosotros?” – Dios no hubiera podido
hacer con ellos lo que Él deseaba y ellos hubieran sido un fracaso.
E. Sé una persona íntegra.
1. Salmos 15:4 contiene una de las características de un peregrino espiritual,
“El que aun jurando en daño suyo, no por eso cambia.”
2. Los creyentes que tengan el llamado de Dios en sus vidas y que sean
íntegros, honestos y sinceros, quedarán firmes.
F. Desarróllate. Alcanza madurez y Crece.
1. Los ministerios son desarrollados. Para desarrollar el don del ministerio se
requiere tiempo.
2. Los obreros necesitan tiempo para equiparse con lo necesario para hacer
lo que Dios tenga para ellos. No sólo deben estar equipados; ellos deben ser
maduros.
3. Algunos comienzan a trabajar frecuentemente en una ramificación del
ministerio diferente a la que Dios los llamó.
18
a. Saulo (Pablo) es nombrado como uno de los cinco profetas y/o

maestros en el capítulo 13 de Hechos. Más tarde el Nuevo
Testamento lo llama un apóstol. Pero él no comenzó con el
ministerio de apóstol. El comenzó como un profeta y un maestro.
b. Felipe comenzó en el ministerio como un sirviente (Hechos 6:1-6). El
fue fiel en dicho cargo. Después recibió el ministerio de evangelista
(Hechos 8; 21:8).
c. Si Dios te llamó al ministerio de pastor, no comenzaras pastoreando

una iglesia de 2000 personas. No sabrías hacer ese trabajo. Puede ser
que comiences con un rebaño pequeño o como auxiliar, como
ayudante de pastor, como líder de jóvenes, etc.
d. Dios puede haberte llamado a ser evangelista. Con el tiempo puede
ser que predique a 5000 almas. Pero no comenzarás predicando a las
5000. Puede ser que comiences predicando a cinco personas.
e. No menosprecies el día de pequeñeces (Zacarías 4:10).
4. Toma tiempo para esperar y ver lo que Dios quiere que hagas. Permite que
Dios haga de ti el ministro que él desea que seas.
a. No digas, “Yo elijo este puesto.” No puedes escoger.
b. No trates de imitar a otro. Sé tú mismo. Anuncia la verdad de la
Palabra de Dios que te haya sido revelada permitiendo a Dios que te
use personalmente para introducirla en las almas. Entonces dicho
mensaje será tu mensaje.
c. No digas, “soy un maestro”. Detente y espera hasta asegurarte si en
verdad eres uno.
d. No digas, “soy un profeta,” simplemente porque hayas tenido una
revelación y varias palabras de profeta.
- Es muy probable que no lo seas.
- Incluso si tu llamado fuera el de profeta, no entrarías
inmediatamente. No serías capaz de serlo.
- Dios no quebrantará Sus propias normas. Su Palabra dice de no
poner un neófito o novicio en el puesto de diácono (1 Timoteo 3:6).
Dios no pondrá a un cristiano prematuro ni tampoco a un
predicador prematuro en el puesto de profeta.
e. Antes de anunciar el cargo que ocupas en el ministerio, debes crecer y
desarrollarte espiritualmente y tener más experiencia.
f. Si Dios te llama y te pone en cierto cargo del ministerio, no necesitarás
anunciarlo de todas formas. La gente se dará cuenta y si no lo hacen, es
porque no es tu lugar.
g. Si el ministerio está en ti en la fase de embrión, éste se desarrollará a
medida que te mantengas fiel.
h. Date cuenta que tienes el llamado de Dios. Después trabaja para Dios
donde quiera que estés. (Siempre es apropiado predicar y enseñar).
Después, cuando alcances alguna madurez mental y espiritual, Dios te
revelará el llamado que tienes.
5. Debes tomar tiempo para esperar en Dios. Po tiempo aparte para ayunar y
orar. Toma tiempo aparte para averiguar Su voluntad perfecta para tu vida y
ministerio.
a. Nunca me olvidaré de aquel día que arrodillado en el altar de mi iglesia
le dije al Señor: “¡Señor! Ya llevo esperando en Ti 10 años.”
- Tan claramente como la voz de un hombre hablando a mi lado
me dijo, “¡No!” Tú no has estado esperando. Yo soy quien lleva
10 años esperando. He estado esperando a que te decidas a hacer
la obra que tengo para ti.
b. Jesús me dijo en la primera visión en la que se me apareció. “Cuando
dejaste tu última iglesia, entraste en la primera fase de tu ministerio.”
20
Yo estaba sorprendido. Llevaba 15 años en el ministerio. Le dije, “Señor,

ya llevo 15 años en el ministerio y tú me has bendecido.” El contestó,
“¡Ciertamente!” Te bendije todo lo que pude. Bendije la Palabra que
predicabas porque Yo honro mi Palabra. Esto no quiere decir que te estaba
honrando a ti.” Entonces El agregó, “Muchos ministros del Evangelio viven y
mueren sin llegar a la primera fase del ministerio que tengo para ellos. Esta es la
razón por la cual muchos ministros mueren antes del tiempo.”
(Verás, si no estás en la voluntad perfecta de Dios, te encuentras en un
lugar donde Satanás puede atacarte. Si no estás en la perfecta voluntad de
Dios, es difícil de reclamar lo mejor de lo que te pertenece.) ¡Vivir y morir!
Lo pensé durante los años. Yo hubiera podido haber hecho lo mismo.
“¡Oh sí!” alguien dijo, “pero, el Señor te eligió.” ¡No! Dios nunca hizo nada
hasta que no comencé a buscarle. El nunca se movió ni me dijo nada.
c. Mantente abierto a Dios. Si te estableces en otro llamado, o en otra área del
ministerio y no mantienes las líneas de comunicación abiertas entre ti y el
Cielo, Dios te dejara continuar adelante y sufrirás las consecuencias de
estar fuera de la voluntad perfecta de Dios.
d. Cuando te encuentres solamente en la voluntad permisiva de Dios, te
parecerá que algo no marcha bien. Puedes notar la diferencia. Es como si te
lavaras los pies con los calcetines puestos.
G. No te entremetas en el puesto del ministerio que no sea el tuyo.
1. Según mi opinión lo que obstaculiza más a aquellos en el ministerio es el tratar
de sostener el puesto que no es el suyo. Lo triste del caso es que ellos viven y
mueren en dicho trabajo sin saberlo.
2. Puede costarte tu ministerio.
a. Carlos Finney fue el mejor ganador de almas y evangelista que hubo
desde los días del Nuevo Testamento hasta su tiempo. A los 80 años de
edad el escribió, “Yo sé muchas cosas de Dios, cosas profundas de Dios,
cosas que soy capaz de enseñar. Si enseño tales cosas, pierdo la habilidad
de ganar almas.”
¿Por qué no podía enseñar las cosas que él sabía? (Claro que podía
compartirlas con otras personas individualmente, pero él no las enseñaba
a toda la iglesia.) Porque éste no era su llamado. Deja que lo hagan los
que son maestros. Su llamado era para el puesto de evangelista. El fue
llamado para ser un ganador de almas. Si él hubiera cambiado de
ministerio, habría cesado de ser una bendición.
b. Parte de mi llamado es el de maestro. Yo puedo salvar a más almas
enseñando que cuando predicaba sermones evangelistico. Porque eso es
lo que Dios me dijo que hiciera.
3. El entrometerte en el puesto del ministerio al que no has sido llamado
puede costarte la vida.
a. Las cosas santas son sagradas. En el Antiguo Testamento, si alguien
entraba en el Lugar Santísimo sin ser Sumo Sacerdote, caía muerto
instantáneamente. Se había entrometido en el lugar que no le
correspondía.
b. Es peligroso jugar con las cosas santas.
c. El llamado de Dios es santo.
d. El ministerio de Dios es santo.
H. Desarrolla tu carácter.
1. De aquellos que están separados para un cargo del ministerio se requiere
más.
2. Da un buen ejemplo en todo tiempo.
3. Provee cosas que sean honestas delante de todos los hombres.
4. Ocupa tu lugar con dignidad.

Si eres llamado por Dios para ocupar cierto cargo en el ministerio, ese cargo
requiere respeto. Si tienes respeto por el puesto que ocupas en el ministerio,
enseñaras a la gente a que le tengan respeto.
22
Lección V
VARIEDAD Y EQUILIBRIO
A. Una de las cosas más fascinantes sobre los dones del ministerio de Cristo es su
variedad.
1. Apóstoles. El puesto de apóstol parece que abarca casi todos los tipos de
ministerio.
2. Profetas. El ministerio de los profetas es inspiracional. El habla por
inspiración directa y divina, y por revelación.
3. Evangelistas. El evangelista está dotado directamente por el Señor para
PREDICAR la Palabra.
4. Pastores. Los pastores cuidan del rebaño de Dios.
5. Maestros. Aquellos que ocupan el cargo de enseñar la Palabra, no por
habilidad natural, más por medio de la habilidad divina del Espíritu Santo.
B. Estos dones del ministerio han sido dados a la Iglesia para que haya equilibro en la
Iglesia.
1. Hay que notar lo bien que estaban equilibrados los dones del ministerio en el
gran centro misionero de la Iglesia Primitiva en Antioquía (Hechos 13:11).
2. El asunto del equilibrio es de importancia vital para obtener resultados.
3. Algunas iglesias, grupos de oración y otros, no conocen más que el
ministerio de una sola persona, de quien esperan que cumpla con todo
requisito.
4. En el otro extremo, hay aquellos que dan tanto valor e importancia a estos
dones que consideran que los ministros deben estar continuamente rodeados
de las manifestaciones de todos los dones espirituales.
C. Necesitamos apreciar la variedad de los dones del ministerio que Cristo puso en la
Iglesia, y también darnos cuenta de que todos los ministerios son esenciales para una
obra equilibrada y de crecimiento.
1. Con frecuencia se oye a los maestros hablando desdeñosamente de los
evangelistas, llamándoles superficiales y sensacionales.
2. Los evangelistas algunas veces censuran a los maestros acusándoles de ser
fríos y verbosos.
3. Los evangelistas y maestros con frecuencia se unen en decir que los profetas
son fanáticos y extremistas.
4. Todas las actitudes anteriores son malas.
5. Puede haber extremos en el uso de todo don del ministerio; pero no debemos
reprenderlo, porque podemos apagar el fuego del Espíritu Santo.
D. El plan divino es que cada ministerio que Dios ha puesto en la Iglesia corrija y
complemente al otro, supliendo así la necesidad de equilibrio y vigilancia.
1. El profeta es para inspirar al maestro.
2. El maestro es para estabilizar al profeta.
3. El evangelista es para continuamente recordarnos de las almas perdidas del
mundo y de la necesidad del Evangelio.
4. El pastor es para recordarnos que las almas necesitan mucho cuidado
después de haber sido ganadas.
5. Y el apóstol, sobre todo, es para inspirar y guiar a nuevas conquistas para
Cristo y la Iglesia.
E. Lo fundamental de todo ministerio es la unión – no la división.
Efesios 4:13 dice, “Hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe” y no “Hasta que
todos nos dividamos en grupos separados”.
F. Una persona puede ocupar más de un puesto en el ministerio; nosotros las
separamos para definirlas.
24
Lección VI
EL APÓSTOL
1 Corintios 12:28
28
Y a unos puso Dios en la iglesia, PRIMERAMENTE APÓSTOLES,
Efesios 4:11
11
Y él mismo constituyó a unos, APÓSTOLES;
A. El primer don del ministerio que hay al comienzo de la lista es el de apóstol.
B. La declaración más importante de la Biblia sobre este ministerio es que el mismo
Cristo fue un apóstol.
Hebreos 3:1
1
Por tanto, hermanos santos, participantes del llamamiento celestial, considerad al apóstol y
sumo sacerdote de nuestra profesión, Cristo Jesús
C. En griego la palabra apóstol se escribe APOSTOLOS y significa uno que es enviado,

un enviado.
D. Jesucristo es el mejor ejemplo que tenemos de uno que es enviarlo.
Juan 20:21
21
Entonces Jesús les dijo otra vez: Paz a vosotros. Como me envió el Padre, así
también yo os envío.
E. El verdadero apóstol es uno que siempre va con una comisión, él no va por sí mismo,
más es enviado.
1. Hechos 13 nos muestra cómo Bernabé y Pablo fueron enviados a los gentiles.
F. Las señales de un apóstol. La Biblia nos habla de las señales de un apóstol.
2 Corintios 12:12
12
Con todo, las señales de apóstol han sido hechas entre vosotros en toda paciencia, por señales,
prodigios y milagros.
¿Cuáles son dichas señales?
Señales, prodigios y milagros.
G. Para ocupar este puesto, uno tiene que tener una experiencia personal con el
Señor algo muy profundo y verdadero, algo fuera de lo corriente. No es un
nombramiento hecho de segunda mano o heredado por la tradición.
1. Notemos algo de Pablo cuando estaba defendiendo su apostolado: “¿No soy
apóstol? ¿No soy libre? ¿NO HE VISTO A JESÚS EL SEÑOR NUESTRO?...”
(1 Corintios 9:1). Pablo no vio a Jesús en una visión espiritual (Hechos 9:3-6).
Él tuvo una profunda experiencia espiritual con el Señor. Incluso su
conversión no fue una cosa ordinaria.
La experiencia espiritual de Pablo con el Señor fue tan profunda que en el
repartimiento de la Santa Cena podía decir: “Porque yo recibí del Señor lo que
también os he enseñado…” (1 Corintios 11:23). Lo que él sabía no lo había
aprendido de los otros apóstoles. Él lo recibió por revelación. Jesús se lo
dio. Ningún hombre enseño a Pablo el Evangelio que predicaba. El Espíritu
de Dios se lo enseño. “Más os hago saber, hermanos, que el evangelio
anunciado por mí, no es según hombre; pues yo ni lo recibí no lo aprendí
de hombre alguno, sino por revelación de Jesucristo” (Gálatas 1:11-12).
Nosotros hemos oído a otros predicar estas cosas, pero Pablo no las oyó.
Continuemos leyendo el resto de este pasaje en Gálatas sobre la revelación
de Pablo – que prueba la experiencia tan profunda que tuvo con el Señor.
Gálatas 1:13-24; 2:1-2.
13
Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que
perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba; 14y en el judaísmo
aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso
de las tradiciones de mis padres. 15Pero cuando agradó a Dios, que me apartó desde el
vientre de mi madre, y me llamó por su gracia, 16revelar a su Hijo en mí, para que yo
le predicase entre los gentiles, NO CONSULTÉ EN SEGUIDA CON CARNE Y
SANGRE, 17NI SUBÍ A JERUSALÉN A LOS QUE ERAN APÓSTOLES
ANTES QUE YO; SINO QUE FUI A ARABIA, Y VOLVÍ DE NUEVO A
DAMASCO.
26
¿Cuánto tiempo estuvo Pablo en Arabia? Nadie lo sabe. Pero fue en Arabia donde
Pablo recibió la revelación del Evangelio que escribió en cada Epístola.
18
DESPUÉS, PASADOS TRES AÑOS, SUBÍ A JERUSALÉN PARA VER A
PEDRO, Y PERMANECÍ CON ÉL QUINCE DÍAS; 19pero no vi a ningún otro de los
apóstoles, sino a Jacobo el hermano del Señor. 20En esto que os escribo, he aquí delante de
Dios que no miento. 21Después fui a las regiones de Siria y de Cilicia, 22y no era conocido
de vista a las iglesias de Judea, que eran en Cristo; 23solamente oían decir: Aquel que en
otro tiempo nos perseguía, ahora predica la fe que en otro tiempo asolaba. 24Y glorificaban
a Dios en mí.
Pablo regresó a Damasco tres años después, fue a Jerusalén y pasó dos semanas con
Pedro.
1
DESPUÉS, PASADOS CATORCE AÑOS, SUBÍ OTRA VEZ A JERUSALÉN con
Bernabé, llevando también conmigo a Tito. 2PERO SUBÍ SEGÚN UNA
REVELACIÓN, y para no correr o haber corrido en vano, expuse en privado a los que
tenían cierta reputación el evangelio que predico entre los gentiles.
Pablo llevaba predicando 17 años en dicho tiempo. Él no sabía lo que los apóstoles
predicaban. Él no los había oído. Solamente había pasado dos cortas semanas con
Pedro. Después de esto pasó 14 años predicando y fue entonces cuando el Espíritu
de Dios se le reveló diciendo que fuera a Jerusalén para tener comunión con los
hermanos. Claro está que Pablo tuvo una profunda experiencia religiosa con el
Señor Jesucristo.
H. La obra de un apóstol es poner el fundamento.
1 Corintios 3:10
10
Conforme a la gracia de Dios que me ha sido dada, yo como perito arquitecto PUSE EL
FUNDAMENTO, y otro edifica encima; pero cada uno mire cómo sobreedifica.
Efesios 2:20
20
edificados sobre el FUNDAMENTO DE LOS APÓSTOLES y profetas, siendo la
principal piedra del ángulo Jesucristo mismo,
1. La obra del apóstol consistía en poner el fundamento.

2. Los primeros doce apóstoles pusieron el fundamento de la Iglesia como los
primeros pioneros y predicadores del Evangelio. En segundo lugar, ellos
pusieron fundamento a la Iglesia al recibir el Espíritu Santo.
I. El ministerio de apóstol parece que abarca todos los otros dones del ministerio.
El resultado sobresaliente es la habilidad de establecer iglesias.
1. El apóstol tiene el don sobrenatural de “administrar”, el cuál aparece en 1 de
Corintios 12:28. La traducción de Weymouth lo llama “poderes de
organización”
2. Después que las iglesias son establecidas, los apóstoles pueden ejercitar
autoridad sobre las iglesias que hayan establecido (1 Corintios 9:1-2).
Comentarios: Hay muchos que se llaman así mismos apóstoles que quieren
dominar y regir al pueblo. Ellos dicen: “Soy un apóstol. Tengo autoridad.
Tienes que hacer lo que digo.” En los días nuevotestamentarios los apóstoles
podían ejercitar autoridad sobre las iglesias que ellos mismos habían
establecido. Pablo nunca ejercitó ninguna autoridad sobre la iglesia de
Jerusalén, o ninguna otra iglesia que los otros apóstoles habían establecido.
Recordemos que estos ministerios consisten en poder y no en meras
palabras. Si no tienen poder para establecer iglesias es porque no son
apóstoles.
3. Un misionero que es verdaderamente llamado por Dios y enviado por el
Espíritu Santo es un apóstol.
a. Hechos 13:2-4. “…Dijo el Espíritu Santo: Apartarme a Bernabé y a
Saulo para la obra que los he llamado. “Continuando en el versículo 4
dice: “Ellos entonces. ENVIADOS por el Espíritu Santo
descendieron…”
Ellos fueron “enviados”. Ellos hicieron el primer viaje misionero a los
gentiles.
b. E l Nuevo Testamento no menciona la palabra misionero a pesar de
ser un cargo muy importante. Pertenece al ministerio del apóstol.
c. El misionero tendrá la habilidad de todos los dones del ministerio
28
1) El hará la obra de evangelista.

Salvara a las almas.
2) El hará la obra de maestro.
Enseñara y afirmará a las almas.
3) El hará la obra de pastor
Pastoreará a las almas durante un tiempo limitado.
a) Al estudiar cuidadosamente la vida del apóstol Pablo, notamos
que él dijo que nunca edificó sobre fundamento ajeno. Él se
esforzó en predicar el Evangelio donde Cristo no había sido
predicado (Romanos 15:20).
El siempre se quedaba en un lugar desde seis meses hasta tres

años.
Verdaderamente su llamado no era el de pastor, pero se
quedaba suficiente tiempo para afirmar a las almas en la verdad
y después se mudaba a otro lugar.
J. ¿Hay apóstoles hoy?
1. Ninguno, tampoco Pablo puede ser considerado un apóstol en el sentido original
de los doce. Sólo hay doce apóstoles del Cordero (Apoc. 21:14).
a. La Biblia nos da las cualidades de los doce apóstoles cuando tenían que
seleccionar a uno para reemplazar a Judas.
Hechos 1:15-22
15
En aquellos días Pedro se levantó en medio de los hermanos (y los reunidos eran
como ciento veinte en número), y dijo: 16Varones hermanos, era necesario que se
cumpliese la Escritura en que el Espíritu Santo habló antes por boca de David
acerca de Judas, que fue guía de los que prendieron a Jesús, 17y era contado con
nosotros, y tenía parte en este ministerio. 18Este, pues, con el salario de su iniquidad
adquirió un campo, y cayendo de cabeza, se reventó por la mitad, y todas sus
entrañas se derramaron. 19Y fue notorio a todos los habitantes de Jerusalén, de tal
manera que aquel campo se llama en su propia lengua, Acéldama, que quiere decir,
Campo de sangre. 20Porque está escrito en el libro de los Salmos: Sea hecha desierta
su habitación, Y no haya quien more en ella; y: Tome otro su oficio. 21Es necesario,
pues, que de estos hombres QUE HAN ESTADO JUNTOS CON NOSOTROS
TODO EL TIEMPO QUE EL SEÑOR JESÚS ENTRABA Y SALÍA
ENTRE NOSOTROS, 22COMENZANDO DESDE EL BAUTISMO DE
JUAN HASTA EL DÍA EN QUE DE ENTRE NOSOTROS FUE
RECIBIDO ARRIBA, UNO SEA HECHO TESTIGO CON NOSOTROS,
DE SU RESURRECCIÓN.
b. Para ser uno de los doce apóstoles del Cordero, uno tenía que haberlos
acompañados – a los apóstoles y a Jesús – todo el tiempo en que Jesús
entro y salió entre ellos durante los tres años y medio de Su ministerio.
Pablo no estaba con ellos.
Los primeros doce apóstoles fueron enviados para ser testigos, del
ministerio de Jesús, de la obra, la vida, muerte, entierro, resurrección y
ascensión del Señor Jesucristo. Ellos ocuparon un lugar que ningún otro
apóstol o ministro podrá ocupar jamás.
2. En nuestros días hay apóstoles como lo fueron Bernabé y Pablo.
a. Además de llamar a Jesucristo, Apóstol, y a los doce apóstoles del
Cordero; el Nuevo Testamento también llama a otros apóstoles.
1) Bernabé y Pablo (Hch. 14:14).
2) Jacobo, el hermano del Señor (Gal. 1:19).
3) Andrónico y Junias (Rom. 16:7).
4) Silvano y Timoteo (1 Tes. 1:1 y 2:6).
5) Apolos (1 Cor. 4:4-9).
6) Dos hermanos a quienes la Biblia no da nombres (2 Cor. 8:23).
7) Epafrodito (Fil. 2:25).
La palabra “mensajero” escrita en estos versículos es la misma

palabra griega traducida “apóstol” en otras partes.
30
3. ¿Existe hoy el ministerio del apóstol? Gracias a Dios sí que existe.

Regresemos al capítulo 4 de Efesios.
Efesios 4:8; 11-13
8
Por lo cual dice: Subiendo a lo alto, llevó cautiva la cautividad, Y dio dones a los
hombres…” 11Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros,
evangelistas; a otros, pastores y maestros, 12a fin de perfeccionar a los santos para la
obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo, 13hasta que todos
lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón
perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo;
a. Si Dios ha quitado alguno de estos ministerios de la lista, la Biblia nos

debería haber dicho que El los había dado solamente por un tiempo
limitado.
b. TODOS estos ministerios fueron dados para la perfección de los santos.
Para la obra del ministerio, para la edificación del Cuerpo de Cristo.
Esto incluye a los apóstoles.
c. ¿Para cuánto tiempo los dio? Todos fueron dados “hasta que todos
lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un
varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo.”
K. ¿Cuáles son las señales que debemos ver en un apóstol de hoy?
1. Dones espirituales destacados.
2. Profunda experiencia personal.
3. El poder y la habilidad para establecer iglesias.
4. La capacidad de proveer adecuada dirección espiritual.
Comentarios: Si Dios te llamó para ser un apóstol, yo no me preocuparía en
absoluto, porque no comenzarías como apóstol. Pablo no era un apóstol en
su comienzo. Hechos 13:1 nos dice, “Había entonces en la iglesia que estaba
en Antioquía, profetas y maestros: Bernabé, Simón…Lucio…Manaén…y
Saulo.” Cada uno de esos hombres era profeta o maestro, o los dos a la vez
(uno puede tener más de un ministerio).
Luego, según las Escrituras, Pablo era profeta y maestro. Hechos 14:14 lo llama
un apóstol porque llegó a ser uno más tarde.
Acuérdate de esto: No te preocupes de nombres y títulos. Si yo no supiera a lo que
Dios me ha llamado, ni me preocuparía un solo minuto.
Si yo sintiera el llamado de Dios dentro de mí, simplemente enseñaría y
predicaría y dejaría que con el tiempo Dios me pusiera en el ministerio que Él
tiene para mí.
Al comenzar, Bernabé y Pablo no fueron nombrados apóstoles, pero con el
tiempo Dios los puso en dicho ministerio.
Recordemos esto: Dios premia la fidelidad. El no premia el cargo o servicio.
En el día del repartimiento de premios, un profeta no será mejor recompensado

que un portero que fue fiel en su ministerio de ayudante.
Los ministerios importantes tampoco reciben mayor recompensa; sólo tienen
una responsabilidad mayor.
¡Dios premia la Fidelidad!
32
Lección VII
EL PROFETA
Introducción: En febrero de 1959, el Señor Jesucristo se me apareció y me hablo
sobre el ministerio del profeta durante una hora y media. Dicha visión está
detalladamente escrita en mi libro YO CREO EN VISIONES. Muchas de la
información contenida en este libro, incluyendo la de mis libros EL MINISTERIO
DE UN PROFETA y EL DON DE PROFECIA, me fue revelado en dicha visión.
1 Corintios 12:28
28
Y a unos puso Dios en la iglesia, primeramente apóstoles, LUEGO PROFETAS….
Efesios 4:11
11
Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, PROFETAS….
A. ¿Hay profetas hoy?

1. Hay algunos que te dirán que hoy no existe el ministerio de profeta – que había
profetas en el Antiguo y Nuevo Testamento, pero que no hay ninguno hoy.
a. No hay evidencia en las Escrituras de los que dicen.
2. La Palabra de Dios nos dice que El mismo constituyó a unos apóstoles; a otros,
profetas; a otros evangelistas; a otros pastores y maestros (Efesios 4:11).
a. Algunos dicen que los únicos ministerios que tenemos hoy son los
evangelistas, pastores y maestros.
b. La Palabra de Dios no hace diferencias entre los ministerios. Me parece
que la lista o debe ser aceptada toda o no aceptemos nada de ella.
c. ¿Para qué propósito fueron dados? “A fin de perfeccionar a los santos para la
obra del ministerio, para la edificación del Cuerpo de Cristo”.
¿Es qué ya son perfectos los santos? ¿Hay alguna obra del ministerio hoy?
¿Necesita edificación el Cuerpo de Cristo? Entonces todos los dones del
ministerio deberían estar en funcionamiento.
d. Dichos dones del ministerio serán necesarios hasta que Jesús venga
por su Iglesia.
B. ¿Qué es lo que constituye la función de un profeta?
1. Comentando en lo que el Nuevo Testamento en griego dice sobre el
profeta, un profesional destacado en griego dice: “El profeta habla cuando
es impulsado con una inspiración repentina, iluminado por una revelación
súbita y momentánea. Aquí parece fundamental el hecho de hablar lo que
proviene de una revelación espontánea y que es relacionado con hechos del
futuro o con la voluntad del Espíritu en general.”
El profeta habla directamente inspirado por el cielo, una revelación
repentina – no algo que él pensó; es algo que recibió sin pensarlo en un
momento de inspiración repentina.
2. Para llegar al ministerio de profeta, primeramente uno tiene que ser un
ministro del Evangelio, separado y llamado al ministerio por Dios. El
profeta es un don del ministerio.
a. No hay profetas entre aquellos que nosotros llamamos laicos.
b. Un laico puede profetizar, pero uno no es un profeta por el mero
hecho de profetizar.
1) Pablo animaba a toda la iglesia de Corinto para que profetizaran (1
Corintios 14:1).
Después definió con simplicidad lo que es el don de la profecía:

“Pero el que profetiza habla a los hombres para edificación,
exhortación y consolación.” (Vers. 3).
Luego, la respuesta para la pregunta ¿Son todos profetas?
Ciertamente es ¡No! (1 Corintios 12:29).
2) Hay que hacer una diferencia entre la profecía y el ministerio de
un profeta – a pesar de que un profeta puede profetizar.
34
Hechos 21:8-11
8
Al otro día, saliendo Pablo y los que con él estábamos, fuimos a Cesarea; y entrando en
casa de Felipe el evangelista, que era uno de los siete, posamos con él. 9Este tenía cuatro
hijas doncellas QUE PROFETIZABAN. 10Y permaneciendo nosotros allí algunos
días, descendió de Judea UN PROFETA llamado Agabo, 11quien viniendo a vernos,
tomó el cinto de Pablo, y atándose los pies y las manos, dijo: Esto dice el Espíritu
Santo: Así atarán los judíos en Jerusalén al varón de quien es este cinto, y le entregarán
en manos de los gentiles.
Las cuatro hijas de Felipe profetizaban. Esto significa que estaban obrando en
el simple don de profecía hablando “…a los hombres para edificación,
exhortación y consolación” (1 Corintios 14:3).
Agabo era un profeta. Y a pesar de que un profeta pueda profetizar lo que le s
revelado, Agabo no está profetizando aquí. Simplemente está diciendo lo que
el Espíritu Santo está diciendo.
3. Para tener el ministerio de profeta, uno debe tener una manifestación más
consistente de al menos dos de los dones de revelación (palabra de sabiduría,
palabra de ciencia o el discernimiento de espíritus) más la profecía.
a. Los tres dones de revelación son:
1) Palabra de sabiduría: Una revelación sobrenatural del Espíritu de
Dios concerniente al propósito divino en la mente y voluntad de Dios.
Es una revelación que siempre habla del futuro.
2) Palabra de ciencia: Una revelación sobrenatural del Espíritu de Dios

concerniente a realidades o hechos en la mente de Dios relacionados
con personas, lugares o cosas. Es una revelación siempre en tiempo
presente o pasado.
3) El discernimiento de espíritus: Es un conocimiento profundo
sobrenatural del mundo de los espíritus. Es ver en el mundo de los
espíritus.
b. Cualquier creyente lleno del Espíritu Santo puede tener manifestaciones
de dichos dones según la voluntad del Espíritu y la necesidad. Pero un
profeta tomará el lugar de predicador o maestro teniendo una
manifestación más consistente de los dones. La diferencia está en que el
profeta tiene este ministerio. Llega a ser un don del ministerio en un nivel
más alto.
c. El profeta es aquel que tiene visiones y revelaciones.
d. Hay tres tipos de revelaciones y tres tipos de visiones. La revelación de tipo
mayor y la visión de tipo menor son similares y algunas veces un individuo
no puede ver la diferencia.
1) Una visión espiritual. Una persona puede tener una visión en su

espíritu o ver en su espíritu. Esta es la primera y la visión de tipo
menor.
Ejemplo: Saulo en el camino de Damasco. Relatando su experiencia,

Pablo nos dice que cuando la visión ocurrió sus ojos fueron cegados y
no podía ver. Pablo no vio al Señor con sus ojos físicos. El vio en el
reino espiritual. Más tarde Ananías oró por él para que recibiera la
vista.
2) Un éxtasis. Jesús me mostro que el éxtasis es la segunda clase de
visión más alta que una persona puede tener.
Cuando uno cae en éxtasis, sus sentidos físicos quedan en suspenso

durante el momento del trance. No está consciente del lugar donde
está ni de todo lo que tiene contacto con el mundo físico. No queda
inconsciente; lo que ocurre es que queda más consciente de las cosas
espirituales que de las cosas físicas.
Ejemplo: Pablo. Cuando Pablo fue a Jerusalén la primera vez él dijo,

“Y me aconteció vuelto a Jerusalén, que orando en el templo me
sobrevino un éxtasis.
Y le vi (a Jesús) que me decía: Date prisa y sal prontamente de
Jerusalén; porque no recibirán mi testimonio acerca de mí” (Hechos
22:17-18).
Pedro: El capítulo 10 de Hechos nos relata la visión de Pedro en la

cual el Señor le dijo que llevara el Evangelio a los gentiles. Pedro
subió a la azotea para orar y “le sobrevino un éxtasis” (Vers. 10).
36
Cuando le sobrevino el éxtasis, Pedro “vio el cielo abierto…” (Vers. 11)

Él estaba viendo en el reino del espíritu.
De la Biblia aprendemos que a Pedro y a Pablo les sobrevino éxtasis y
vieron en el mundo espiritual.
3) La visión consciente. Esta clase de visión es la mayor de todas. Cuando
ocurre, los sentidos físicos no están en suspenso. La persona tiene los ojos
abiertos. Posee todas sus capacidades físicas, pero puede ver en el mundo
del espíritu.
Experiencia personal: Esta es la clase de visión que tuve cuando Jesús se me
apareció en 1959 y me enseño sobre el ministerio del profeta. Yo vi a Jesús
que entraba en mi habitación. Yo oí Sus pasos. Lo vi entrar en mi
habitación tan claramente como he visto a cualquier hombre en mi vida. Le
vi sentarse al lado de mi cama. Oí Su voz lo mismo que puedo oír la voz de
cualquier otro hombre en mi vida.
e. Los profetas del Antiguo Testamento eran llamados videntes. Ellos veían y
sabían cosas sobrenaturales.
1) En la visión que tuve el Señor me recordó a Saúl cuando era muchacho y
estaba buscando algunas de las asnas de su padre que se habían perdido (1
Samuel 9). Cuando él las buscaba, el criado le sugirió ir al profeta para
preguntarle donde estaban las asnas, porque él sabría dónde estaban. Saúl
fue al profeta Samuel y éste le dijo que ya hacía tres días que las asnas
habían sido encontradas, y ahora andaban buscándole a él.
Samuel supo esto de una manera sobrenatural.
Samuel le pidió a Saúl que esperara, ya que tenía una palabra de sabiduría
concerniente al plan de Dios para él. Saúl entonces fue ungido para ser el
primer rey de Israel. Claro está que Samuel no sabía las aventuras de todas
las asnas que andaban por Israel. Es posible que hubiera muchas asnas
perdidas en aquellos tiempos. Pero Dios tenía un propósito al darle la
revelación en aquel dado tiempo, ya que se trataba del futuro rey de Israel.
Experiencia personal: Una vez visité a un pastor en el lugar donde estaba
construyendo una iglesia nueva. Después de mostrarme el proyecto los dos
nos marchamos a nuestros coches respectivos. De repente el Señor me
habló para que yo avisara a dicho ministro y le dijera que a no ser que se
juzgara a sí mismo respecto a su dieta, sus asuntos financieros y su falta de
amor por los hermanos, no viviría mucho más.
Salí de mi automóvil para decírselo pero alguien se adelantó y se puso a
hablar con él. Regresé a mi auto para esperar y allí me puse a pensar. Yo
sabía que probablemente no aceptaría las palabras que quería decirle ni
cambiaría la falta de amor que sentía por los hermanos y posiblemente me
daría una bofetada. Mientras estaba meditando en esto el ministro se
marchó sin yo poder avisarle de lo que el Señor me había dicho. Esa fue la
última vez que le vi; él murió tres años después a pesar que era bastante
joven.
f. La palabra “revelado” es usada en relación con el ministerio de profeta.
1 Corintios 14:29-30
29
Asimismo, los profetas hablen dos o tres, y los demás juzguen. 30Y si algo le fuere
REVELADO a otro que estuviere sentado, calle el primero.
1) El profeta puede comunicar sus revelaciones a través del ministerio

de la profecía.
2) El profeta puede comunicar sus revelaciones simplemente diciendo lo
que dice el Espíritu Santo.
3) Hay que juzgar las revelaciones.
Comentarios: Cuando Dios está obrando conmigo, me gusta si otros me
juzgan. Todos aquellos que se molestan cuando son juzgadas sus
revelaciones o profecías están equivocados. Posiblemente tienen orgullo
espiritual.
Alguien me dirá, “Pues, el Señor no comete errores”.
Ciertamente que no. Pero esos dones espirituales son manifestados por
medio de seres vivientes que son imperfectos.
38
Es como el agua que fluye por una tubería. El agua puede tomar un poco de
sabor de la tubería. Otras personas también tienen el Espíritu de Dios,
especialmente aquellos en el mismo ministerio, éste es el motivo por el cuál
la Palabra dice, “y los demás juzguen.”
Algunas veces los profetas anuncian lo que va a ocurrir.
1) Agabo.
El predijo que vendría una gran hambre (Hch 11:28).
El predijo lo que le ocurriría a Pablo (Hch. 21:10-11).
g. Algunos no creen que sea bíblico el dar profecías personales. Ellos no creen que
un profeta pueda tener un mensaje para un individuo.
1) Agabo lo tenía (Hechos 21:10-11). El no prohibió a Pablo que fuera a
Jerusalén. Simplemente le dijo lo que allí ocurriría, y ocurrió.
2) Muchas veces Dios me ha mostrado cosas como éstas que han
bendecido y ayudado a individuos. Necesitamos dichas
manifestaciones en estos días.
3) Dios nos muestra cosas de acuerdo a Su voluntad para prepararnos
para el futuro. Una persona, sin embargo, no puede usar el ministerio
del profeta cuando le parezca o quiera. Es como el Espíritu quiere.
4) Dios usa a algunos en algunas ocasiones para que lleven un mensaje a
cierta persona. Después, dichos individuos piensan que pueden ir
dando mensajes a todas personas. ¡No! Aquellos que siempre están dando
mensajes personales y profecías a toda persona están equivocados; ellos son
fanáticos y están en peligro.
Satanás puede guiarlos y ciertamente que lo hace.

h. Hay una similaridad entre el ministerio del profeta del Antiguo Testamento y
del Nuevo Testamento. No obstante, el profeta bajo el Nuevo Testamento no
ocupa la misma posición del profeta del Antiguo Testamento.
1) Las personas del Pacto Antiguo se dirigían al profeta para pedir
dirección y guía. Los únicos ungidos por el Espíritu de Dios eran el
rey, el sacerdote y el profeta.
El resto del pueblo no tenía la presencia tangible de Dios en sus vidas. La
Presencia de Dios estaba encerrada en el lugar Santísimo. Ellos no tenían el
Espíritu de Dios sobre ellos, ni en ellos.
Solamente algunas veces Dios decidía salirse de lo corriente, como en el caso
de Gedeón; por lo demás, el pueblo iba al profeta para ser guiados.
C. Bajo el Nuevo Pacto no es bíblico el buscar la dirección y guía de un profeta.
1. Jesús me dijo esto cuando se me apareció en 1959.
2. Nosotros tenemos un mejor pacto.
3. Nosotros tenemos la misma Presencia de Dios en nosotros que estaba
encerrada en el lugar Santísimo. Él está viviendo en nosotros.
Nuestros cuerpos se transforman en el templo de Dios bajo el Nuevo
Pacto (1 Corintios 3:16; 6:19; 2 Corintios 6:16).
4. Él está en nosotros para guiarnos.

“Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios”
(Romanos 8:14).
5. Todo creyente necesita aprender a ser guiado por el mismo Espíritu de

Dios. El no debería tener que ir a nadie para recibir guía.
6. Hay algunos – y no comprendo el motivo, ya que esto no es bíblico - que
tienen la tendencia de controlar las vidas de las personas.
Durante los años he notado que esto va y viene en ciclos. Muchas cosas
ocurren hoy en día y la gente piensa que han recibido una “nueva
revelación”. Pero yo vi las mismas cosas hace 35 años. Vinieron y se
fueron porque no estaban fundadas en la Palabra de Dios y lo mismo
ocurrirá hoy.
Ellos piensan que han recibido algo nuevo, y verdaderamente es el espíritu
de decepción y no el Espíritu Santo.
A través de dichas revelaciones, ellos intentan dominar las vidas de otras
personas.
40
Durante los años, he visto a algunos llamados profetas que les decían a las
personas cuando debían casarse y con quien debían contraer matrimonio. No
he visto ningún caso que haya marchado bien. Sólo he visto tragedias.
7. Debes saber en tu propio espíritu que Dios te está guiando. Está bien si
alguien confirma lo que ya tienes en tu espíritu – si no ocurre así, olvídalo.
8. El profeta Agabo tomó el cinto de Pablo y atándose los pies y las manos dijo:
Hechos 21:11-14
11
quien viniendo a vernos, tomó el cinto de Pablo, y atándose los pies y las manos, dijo:
Esto dice el Espíritu Santo: Así atarán los judíos en Jerusalén al varón de quien es este
cinto, y le entregarán en manos de los gentiles. 12Al oír esto, le rogamos nosotros y los de
aquel lugar, que no subiese a Jerusalén. 13Entonces Pablo respondió: ¿Qué hacéis
llorando y quebrantándome el corazón? Porque yo estoy dispuesto no sólo a ser atado,
más aun a morir en Jerusalén por el nombre del Señor Jesús. 14Y como no le pudimos
persuadir, desistimos, diciendo: Hágase la voluntad del Señor.
Notemos lo siguiente. Agabo dijo lo que iba a ocurrir, pero no dijo nada sobre
la voluntad de Dios para el caso. El no le dijo a Pablo que fuera o que no
fuera. El no dio ningún consejo personal. Simplemente le dijo lo que ocurriría
si iba a Jerusalén. Pablo era quien tenía que decidir.
Algunas personas piensan que Pablo no hizo la voluntad de Dios y que el
Espíritu de Dios le estaba diciendo que no fuera.
Esto no es cierto. Porque cuando Pablo fue detenido según lo dicho por
Agabo, Jesús se apareció a Pablo durante la noche.
Hechos 23:11
11
A la noche siguiente se le presentó el Señor y le dijo: Ten ánimo, Pablo, pues como has
testificado de mí en Jerusalén, así es necesario que testifiques también en Roma.
D. Hay que poner la Palabra antes de todo. Incluso si hay manifestaciones

sobrenaturales en tu vida, no edifiques tu ministerio sobre manifestaciones
sobrenaturales. Puedes desearlas y tenerlas. Pero edifica tu ministerio en la Palabra.
Incluso si eres un profeta, debes edificar tu ministerio en la Palabra.
1. Durante el avivamiento de la sanidad divina en los Estados Unidos, desde
1947 hasta 1958 aproximadamente, Dios me envió para que yo aconsejara
a algunos predicadores. Dios me dijo que les dijera: “No podéis edificar
vuestros ministerios con sólo dones espirituales. Desarrollad vuestros
ministerios de predicación. Continuad operando en los dones espirituales,
pero desarrollad vuestra predicación. Si no obedecéis, terminaréis siendo
basura espiritual.” Muchos terminaron como Dios dijo que terminarían.
El día de Acción de Gracias de 1954, les dije: “Cuando muchos de vosotros
hayáis dejado el ministerio, yo estaré predicando todavía.” Ellos me
miraron sorprendidos. Pero hoy la mayoría ya no predican.
Dios fue quien me inspiró para que les avisara a que dependieran más en la
Palabra que en los dones espirituales. Les dije: “Veis, yo edifico sobre la
Palabra y no sobre los dones espirituales, y la Palabra es eterna. Nunca
Falla.”
E. Es peligroso sentirse obligado a actuar.
1. Algunos de los llamados por Dios, ungidos y establecidos por El, cuando
ocupan ciertos ministerios piensan que “están obligados a actuar”.
Asimismo, cuando no se manifiesta el Espíritu de Dios, ellos tratan de tener
una manifestación de sí mismos. ESTO ES MUY PELIGROSO.
Está bien si hay alguna manifestación, pero si no lo hay, no trates de
producir una tú mismo.
2. En dos ocasiones el Señor me envió para que hablara a un cierto ministro.
El Señor me dijo que le dijera, “Está bien si hay manifestación en la iglesia,
pero si no la hay, continúa predicando y olvídate de la manifestación.”
Él Señor me dijo que le dijera, “Si no obedece, terminarás arruinando tu
ministerio.” Cosa que hizo y me es triste decirla. El no quería oír el
consejo. El me dijo, “Siento que estoy obligado a obrar manifestaciones.”
Le dije que estaba equivocado si pensaba de esa manera.
42
Yo tenía 36 años de edad en aquellos tiempos. Desde allí viaje a Scranton

(Pensilvania) y después a Nueva Jersey para tener dos semanas de reuniones con
el Hermano A.A Swift, un gran hombre de Dios de 72 años de edad.
Comenté con el Hermano Swift lo que el Señor me había dicho sobre el otro
hermano y él me dijo: “Este hermano tiene la palabra de ciencia obrando en él.
Lo reconozco. Pero pasé muchos años en China y aprendí mucho sobre el poder
de lo oculto. Lo que algunos hermanos no saben es que si el Espíritu de Dios no
está en manifestación y se mueven en un área tratando de provocar algo en la
carne, se están abriendo ampliamente a la decepción de los poderes del
ocultismo. Esto ocurre porque ellos han dejado la Palabra de Dios.”
F. Discierne la diferencia entre el Espíritu de Dios y los espíritus de adivinación.
1. No debemos asustarnos de los espíritus malos – en realidad son los espíritus de
adivinación (o espíritus familiares) los que están obrando. Ellos son los que
conocen a las personas y se comunican con aquellos a través de los cuáles
operan.
2. Cuando Dios guió a Israel fuera de Egipto, Aarón tiró su vara y ésta se
convirtió en una serpiente. Los hechiceros tiraron las suyas y también se
transformaron en serpientes. No obstante las varas de Aarón y Moisés se
tragaron las varas de los hechiceros.
3. El diablo sabe algunas cosas pero no lo sabe todo como Dios. La Biblia nos
habla sobre los espíritus de adivinación. Ellos son reales. Ellos te conocen
incluso si estás lleno del Espíritu Santo y eres salvo. Si alguien está en contacto
con ellos, éstos le dirán cosas de ti.
Pablo echó fuera de una muchacha un espíritu de adivinación (Hch 16:16-19).
Ella adivinaba el futuro. Pero era un espíritu malo.
El diablo sabe las cosas que le ocurrirán a la gente si continúan andando como
andan. Si son sus hijos, él sabe exactamente todo lo que les ocurrirá.
4. Conozco a una persona a través de la cual la palabra de ciencia aperaba
supuestamente. El sabia cosas de las personas y era un charlatán con todo el
sentido de la palabra.
Yo estaba predicando en una iglesia y el pastor le invitó para que dijera
algunas palabras. Mientras estaba hablando una voz me decía al oído,
“Espíritus de adivinación.” Supe que lo que me decía el Señor era que tenía
espíritus de adivinación.
El tiempo pasó y cuando estaba en otra región del país, un buen amigo me
preguntó, “¿Conoces a fulano de tal?” “Si,” le contesté, “Se quién es él,
pero no le conozco personalmente.” El continuó diciéndome, “Pensé que
era un verdadero hombre de Dios debido a ese algo sobrenatural que obra
en él. El me ha engañado. Tenía una alhaja de mucho valor que había
heredado y la tenía escondida en un lugar seguro en mi casa.
Dicho individuo vino a mi oficina, describió el diamante exactamente
como era, me dijo el lugar donde yo la tenía y me dijo que el Señor le había
dicho que se la diera.
“Yo pensé que era de Dios lo que me decía porque era sobrenatural y se la
di.”
“Algunos días después, el mismo hombre estaba en mi oficina, perdió el
temperamento y maldijo a otro hombre. Después, antes de irse del pueblo –
y esto no es un chisme – sino una realidad – dicho hombre se enredó con
otro individuo en homosexualidad, engaño a unos muchachos y los metió
en un problema grande.”
Entonces compartí con él lo que Dios me había mostrado de él. Le dije,
“Lo que él tiene son espíritus de adivinación. Eso no es el Espíritu de Dios
obrando.”
5. ¿Cómo podemos notar la diferencia?
a. Leyendo Primera de Corintios 12:1-3.
1 Corintios 12:1-3
1
No quiero, hermanos, que ignoréis acerca de los dones espirituales. 2Sabéis
que cuando erais gentiles, SE OS EXTRAVIABA llevándoos, como se os
llevaba, a los ídolos mudos. 3Por tanto, os hago saber que nadie que hable por
el Espíritu de Dios llama anatema a Jesús; y nadie puede llamar a Jesús
Señor, sino por el Espíritu Santo.
44
Interpretemos esta Escritura según el contexto. Pablo está escribiendo

sobre las manifestaciones espirituales y las cosas que pertenecen al
Espíritu Santo. Es cierto que una persona puede decir que “Jesús es
Señor” usando sólo su cabeza. Una fila de pecadores podría decir eso. Lo
que la Escritura está tratando de decir es esto, “Cuando el Espíritu Santo se
manifiesta siempre da la gloria al Señor Jesús.” Cuando es el Espíritu Santo el
que se manifiesta, éste dice que Jesús es Señor. No da la gloria al
hombre, ni hace al hombre Señor.
b. ¿Esa manifestación da la gloria a Jesús? ¿Bendice a las personas? ¿Acerca a
las almas a Dios?
c. ¿Exalta al hombre (al manifestación)? ¿Atrae la atención hacia lo que es
humano?
6. No debemos temer a los espíritus malos. DIOS PUEDE SOBREPASAR
TODO LO QUE EL DIABLO HAGA. Las manifestaciones del Espíritu
Santo son reales. Tengamos las manifestaciones que en verdad bendicen a las
almas.
7. Seamos sensibles a Dios e invitemos al Espíritu de Dios para que se
manifieste entre nosotros en la variedad de ministerios que Jesús estableció en
la Iglesia.
G. El concepto erróneo que tienen muchos sobre el servicio de los profetas.
1. Muchos piensan que el profeta sólo debe profetizar.
a. El profeta no sólo profetiza . En verdad, frecuentemente cuando está
dando la revelación del momento, no está profetizando – sino que
simplemente está diciendo lo que le es revelado. Por ejemplo, Agabo
“daba a entender por el Espíritu” que vendría una gran hambre (Hechos
11:28).
b. El profeta no sólo tiene revelaciones. Algunos de los que dicen, “yo tengo
el llamado de profeta” (y puede ser que lo tengan) caen en error al estar
siempre tratando de tener revelaciones y profecías.
c. Ante todo, el profeta de Dios es un predicador o maestro de la Palabra.
d. La imposición de manos forma parte del servicio del profeta.
e. El ministerio de sanidad forma parte del servicio del profeta. Y cuando
el profeta ejercita sus dones de sanidades (o lo que sea), es el ministerio
del profeta en acción.
1) Jesús dijo de Eliseo:
Lucas 4:27
27
Y muchos leprosos había en Israel en tiempo del profeta Eliseo; pero
ninguno de ellos fue limpiado, sino Naamán el sirio.
Eliseo tenía un ministerio de sanidad y el pueblo lo sabía.

Naamán fue al profeta Eliseo porque una muchacha judía le había
hablado de él. Ella había sido capturada en la guerra contra Israel
y era una esclava en la casa de Naamán. Cuando ella supo que
Naamán tenía lepra dijo: “Si rogase mi señor al profeta que está
en Samaria, él lo sanaría de su lepra.” (2 Reyes 5:3)
2) Jesús sostenía el ministerio de profeta. Su ministerio de sanidad es

un ejemplo de la variedad de manifestaciones que no podrías ver
en el ministerio de un solo ministro.
3) El ministerio de sanidad de un profeta puede obrar a través de la
imposición de manos.
4) Puede obrar también de otras maneras.

a) Eliseo no puso las manos sobre Naamán. NI siquiera fue a
verlo. Él tenía una palabra del Señor. Él envió un mensajero
diciendo: “Ve y lávate siete veces en el Jordán, y tu carne se te
restaurara, y serás limpio” (2 Reyes 5:10).
b) Jesús impartió sanidad a través de la imposición de manos.

Pero en el caso de los diez leprosos, sin tocarlos les dijo: “Id
y mostraos a los sacerdotes.” Mientras iban fueron sanados
(Lucas 17:12-14).
46
Jesús escupió en tierra e hizo lodo con la saliva, y untó con el dedo los
ojos del ciego diciendo, “Ve y lávate en el estanque de Siloé” (Juan 9:6-
7).
¿Por qué obró así? Porque el Espíritu de Dios se lo dijo. El estaba

sirviendo como profeta y los dones de sanidades obraban a través de
Jesús. Otros fueron sanados cuando había una transferencia del poder
sanador con el cuál Él estaba ungido, fluyendo de Él. (Leer Hechos
10:38.) La mujer con el flujo de sangre es un ejemplo (Marcos 5:25-34).
(También leer Mateo 14:34-36; Marcos 6:56; Lucas 6:19.)
5) Jesús dijo, concerniente a la sanidad de Naamán a través del ministerio

de Eliseo, “Y muchos leprosos había en Israel en tiempo del profeta
Eliseo; pero ninguno de ellos fue limpiado, sino Naamán el sirio” (Lucas
4:27).
¿Por qué no podía Eliseo hacer lo mismo sanando a todos los leprosos
de Israel?
Naamán era un pagano. El adoraba al ídolo Dagón.
¿Por qué no podía Eliseo decirles a los leprosos de Israel: “Id y meteos
siete veces en el rio Jordán y vuestra carne será limpia como la de un
niño?”
¡Porque Dios no se lo dijo!
No puedes hacer más de lo que diga la palabra de Dios. Sin lugar a
dudas, en el caso de Naamán fue la palabra de Dios que cayó sobre
Eliseo y le dijo lo que tenía que hacer.
Experiencia personal: Hay algunos que también son sanados de dicha
forma hoy en día. Muchas de las sanidades de mi ministerio han
ocurrido así – pero yo no puedo hacer que obre para todos de la misma
forma. El Señor me dijo exactamente lo que tenía que hacer. Algunas
veces Él me dijo lo que debía decirles que hicieran; otras veces veía la
sanidad en una visión, y luego iba y hacia lo que había visto en la visión
en la reunión en la iglesia y las personas se levantaban de sus camillas.
No obstante, había personas en la misma reunión que vinieron en
camillas y se fueron de la misma manera.
Alguien sin conocer bien la Biblia dijo: “Esto no viene de Dios. Si
Dios hubiera sanado a una persona. El habría sanado a todos.”
En primer lugar, yo no era quien estaba sanando. En segundo lugar,
yo no había recibido ninguna palabra del Señor para los que no se
sanaron. Ellos podrían haberse sanado si hubieran creído y se hubieran
puesto en contacto con el Señor; pero de algunas formas no lo
hicieron.
2. Muchos piensan que un profeta tiene que saber todos los secretos de todas
las personas y todo lo que ocurra alrededor de él.
a. Esto no podría ser verdad. Porque si fuera así, Giezi el siervo de

Eliseo, hubiera sabido que su amo lo sabía todo y por nada en el
mundo hubiera hecho lo que hizo.
Naamán ofreció regalos al profeta después de ser sanado. Eliseo no
quiso aceptarlos. Cuando Naamán regresaba contento a Siria, Giezi
corrió hacia él diciendo: “Mi señor me envía a decirte: He aquí
vinieron dos jóvenes de los hijos de los profetas. El no desea nada para
sí mismo pero puedes darle un talento de plata y dos vestidos para
ellos.”
Naamán que estaba contentísimo por haber sido sanado de la
enfermedad tan terrible, dio a Giezi más de los que le pidió. Giezi
tomó los regalos y los escondió.
Pero cuando Giezi regresó a la presencia de su maestro, Eliseo le
pregunto de donde venía. Giezi contestó: “Tu siervo no ha ido a
ninguna parte.” Entonces le dijo Eliseo, ¿No estaba allí también mi
corazón, cuando el hombre volvió de su carro a recibirte?” (2 Reyes
5:26).
Pero si Eliseo hubiera sabido siempre todo lo que pasaba, Giezi, que
vivía con él conociéndole bien, habría sabido esto y nunca habría
intentado hacer lo que hizo.
48
b. El Señor te hace saber lo que El desea que sepas. Dios no te lo dice

todo.
Cuando murió, el hijo de la mujer sunamita ella se asió de los pies de
Eliseo y éste dijo “…Su alma esta en amargura, y Jehová me ha
encubierto el motivo, y NO ME LO HA REVELADO” (2 Reyes 4:27).
3. Algunos piensan que porque uno sea un profeta ellos pueden preguntar en
cualquier momento. ¿Tienes alguna palabra para mí?
a. Tú no puedes evocar tales cosas según los desees.
b. Puede ser que Dios te dé una palabra o no. La mayoría de las veces Él
no lo hará.
Comentarios personales: La palabra de ciencia, la palabra de sabiduría, el
discernimiento de espíritus, así como la profecía, funcionan en el cargo
del profeta. Ya que estos son dones espirituales, también obraran en las
vidas de cualquier creyente lleno del Espíritu, obrando de acuerdo con
la necesidad y con la voluntad del Señor. Pero la operación de estos
dones, no prueba que seas un profeta.
Poco tiempo después de recibir el bautismo en el Espíritu y hablar en
lenguas, comenzó a obrar en mí la palabra de ciencia. Yo comencé a
saber y a ver cosas de una manera sobrenatural. Pero esto no me hizo
un profeta.
Yo tenía 20 años de edad y era pastor de una iglesia rural, cuando fui
bautizado en el Espíritu Santo y tuve una visión espiritual. Vi a una
joven miembro de la congregación cometiendo pecado dos noches
antes. A pesar de que ella fue forzada a pecar, ella estaba pensando “he
pecado y Dios ya no me ama”. Su amiga había tratado de traerla a la
iglesia pero ella había decidido no regresar más.
Momentos antes de terminar la reunión, cuando tenía los ojos cerrados,
vi todo lo que sigue: La persona que estaba con ella, lo que ella hizo y
como ocurrió todo. Anuncié la visión en la iglesia de una manera que
nadie supo el nombre de la persona. Usé sabiduría.
(Si tienes revelaciones debes buscar la sabiduría de Dios para obrar bien.
No anuncies la revelación sin ninguna consideración. Es posible que
causes naufrago en cuanto a la fe y lo eches todo a perder de tal manera
que Dios ya no te muestre nada más. Puedes contristar al Espíritu de Dios
de tal manera que ya no te revele nada más debido a que no puede confiar
en ti.)
La jovencita cuando se convenció del perdón y amor de Dios, corrió al
altar llorando. Dios me había revelado esto para salvarla.
Algún tiempo después y todavía soltero, estaba pastoreando una iglesia

pentecostal. En la iglesia había una jovencita muy bonita que estaba
interesada en mí y yo en ella un poquito.
Nosotros teníamos reuniones los sábados por la noche, los domingos por
la mañana y por la noche. Debido a que ella era la que cantaba mejor, con
frecuencia cantaba algún cántico especial. Pero un sábado por la noche
ella no estaba allí.
El domingo por la mañana mientras yo estaba predicando vi por la
ventana de la iglesia un coche y a ella que salía para entrar a la iglesia por
el lado lateral. El hombre que estaba conduciendo el coche se marchó
rápidamente.
De repente fui transportado. Yo podía oír el sonido de mi voz porque
estaba predicando, pero no sabía lo que estaba hablando. Mi espíritu
estaba en otro lugar y ahora sé lo que querría decir Eliseo cuando dijo,
“mi espíritu fue contigo.”
Yo me encontraba en un pueblo a 24 Km del lugar donde estaba
predicando aquel domingo. Era sábado el día anterior. Ocurrió allá por los
años 1930. Las calles del pueblo estaban llenas de personas. Toda la gente
del campo estaba aquel sábado por la noche en el pueblo.
Yo estaba delante de una tienda en la calle principal. Veía a la jovencita
que bajaba la calle. Vi el mismo coche que se detenía junto a ella. Cuando
el conductor toco la bocina ella entró en el auto con él.
Después fui transportado al asiento trasero del auto. Ellos condujeron al
campo y allí cometieron adulterio.
50
Dios me mostró todo esto para protegerme. Varias veces Dios me mostró
cosas así para ayudar a otros. Pero dichas revelaciones no me hacían un
profeta.
A los 20 años de estar predicando, el discernimiento de espíritus comenzó a
obrar en mí. Pero esto no hacía de mí un profeta. No comencé a usar el
ministerio de profeta hasta 1958 y había estado en el ministerio desde 1934.
Si Dios te llamó para una obra, no podrías entrar en ella inmediatamente.
Cometerías muchos errores si lo hicieras. Pero Dios sabe poner un poquito
aquí y otro poquito allí. Si es la voluntad de Dios que le sirvas de cierta
manera y si eres fiel, con el tiempo y cuando pueda confiar en ti, El té
pondrá en el lugar que tiene para ti.
Dios no cambiara las normas establecidas en Su Palabra. El Espíritu de Dios
a través de Pablo dice de no poner a un novicio a cargo, “No un neófito
(novicio), no sea que envaneciéndose caiga en la condenación” (1 Timoteo 3:6).
Lo mismo es verdad en otros cargos del ministerio. Si se pusiera a un

novicio, satanás lo tentaría, lo enorgullecería y lo destruiría. Creo que
algunos han sido destruidos porque sentían el llamado en sus espíritus, pero
en lugar de esperar el momento apropiado de Dios, trataron ellos mismos sin
la ayuda de Dios.
Puedo ver la sabiduría de Dios en mi propio ministerio. Si hubiera recibido
las responsabilidades que tengo hoy cuando yo era un joven, hubiera
fracasado, porque era joven sin preparación mental ni espiritual. Yo hubiera
caído al borde del camino. Me hubiera inflado con tanto orgullo que no
hubiera podido salir por la puerta.
Me gozo al saber que Dios puede usarnos. Pero esto no me pone en las
nubes. Me humilla el saber que Dios quiere usarme. No me da ni una pizca
de orgullo. No me excito ni muestro emociones delante de muchas
situaciones. Yo me digo, “Después de todo, Dios usó a un asno para hablar
hebreo en el Antiguo Testamento. Eso no hizo de aquel asno nada especial.
Así que, si Dios se digna a usar a este asno ¡Gloria a Dios! Dios me usó y le
doy la gloria a Él.”
No te preocupes de nombres y títulos.
Y no te vayas de RHEMA diciendo, “Soy un profeta.” Puede ser que un
día lo seas o no lo seas. Deja que sea Dios quien te ponga, no trates de
hacerlo tú mismo.
Ni tampoco digas “soy un maestro.” Tal vez Dios desee hacerte un
evangelista. Espera y averigua lo que Dios desea que hagas.
52
Lección VIII
EL EVANGELISTA
Efesios 4:11-12
11
Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a OTROS, EVANGELISTAS; a
otros, pastores y maestros, 12a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para
la edificación del cuerpo de Cristo…
1 Corintios 12:28
28
Y a unos puso Dios en la iglesia, primeramente apóstoles, luego profetas, lo tercero maestros,
luego LOS QUE HACEN MILAGROS, después LOS QUE SANAN, los que ayudan, los
que administran, los que tienen don de lenguas.
A. La palabra “evangelista” ocurre sólo tres veces en el Nuevo testamento.

1. En Efesios 4:11, citado anteriormente.
2. En Hechos 21:8, la Biblia habla de “Felipe el evangelista:”
3. En 2 de Timoteo 4:5 Pablo le dijo a Timoteo (quien era pastor de una iglesia
nuevotestamentaria). Que “hiciera la obra de evangelista.”
B. La palabra “evangelista” significa: Uno que anuncia el Evangelio (las Buenas
Nuevas); un mensajero de buenas noticias.
C. El evangelista lleva el mensaje de la gracia redentora de Dios.
D. El tema principal del evangelista es la salvación en su forma más simple.
E. Felipe es el único ejemplo de evangelista que tenemos en el Nuevo Testamento.
Felipe es el modelo porque es el único que Dios nos ha dado.
1. Felipe sólo tenía un mensaje, este era Jesucristo.
a. El mensaje de Felipe a Samaria:
Hechos 8:5
5
Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, LES PREDICABA A
CRISTO.
b. El mensaje de Felipe al Eunuco.
Hechos 8:35
35
Entonces Felipe, abriendo su boca, y comenzando desde esta escritura, LE
ANUNCIÓ EL EVANGELIO DE JESÚS.
c. El evangelista tiene una característica muy notable: El anuncia a

Jesús, no importa cuál sea la escritura que use al comenzar. Ese es su
llamado. Ese es su mensaje.
F. El equipo sobrenatural que acompaña el ministerio del evangelista incluye
“milagros” y dones de sanidades.”
1. El evangelista es un don que viene directamente del Señor (Ef. 4:11). Sin
embargo, 1 Corintios 12:28, no menciona el nombre de evangelista.
(Tampoco menciona el nombre de pastor. Solo menciona los nombres de
apóstol, profeta y maestro. Pero no menciona al evangelista o al pastor.)
2. Yo creo que 1 Corintios 12:28 incluye al evangelista cuando dice “milagros
y los que sanan.”
a. Los milagros y dones de sanidades pueden ir también con otros
ministerios, pero sabemos por el modelo del Nuevo Testamento,
Felipe que deben estar en el evangelista.
Hechos 8:5-8
5
Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo.
6
Y la gente, unánime, escuchaba atentamente las cosas que decía Felipe,
OYENDO Y VIENDO LAS SEÑALES QUE HACÍA. 7Porque de muchos
que tenían espíritus inmundos, salían éstos dando grandes voces; y muchos
paralíticos y cojos ERAN SANADOS; 8así que había gran gozo en aquella
ciudad.
b. Estas son sanidades que siguen la predicación de Cristo. Si, como las
Escrituras dicen que “El llevó nuestras enfermedades, y sufrió
nuestros dolores,” no puedes predicar totalmente a Cristo sin incluir
la predicación de la sanidad.
54
3. Según mi opinión, el que llamamos muchas veces un “evangelista” es un

“exhortador”.
a. Hay un ministerio de la exhortación (Romanos 12:8).
b. Un exhortador exhorta para la salvación.

c. Los milagros y los dones de sanidades sobrenaturales no siguen al
ministerio de la exhortación.
d. Uno puede comenzar exhortando y después llegar a ser un evangelista.
G. Si la persona tiene el don divino o unción en su interior, dicha persona no necesita
rogar para ser un evangelista. Habrá un impulso divino que arde dentro de ella.
1. Felipe fue primero un diácono o ayudante en la iglesia (Hechos 6:1-6). Sin
lugar a dudas, podemos decir que Felipe fue ordenado diácono, pero nadie
le dio la comisión de evangelizar. Con todo, lo vemos en Samaria con el don
divino que ardía en su espíritu, ungiéndole para que predicara el Evangelio
con resultados gloriosos.
2. Pablo dijo, “Ay de mí si no anunciare el evangelio!” (1 Corintios 9:16). Si una
persona tiene verdaderamente el llamado divino que arde dentro, no importa
cuál sea su función, como Pablo él dirá. “¡Ay de mí si no anunciare el
evangelio!”
3. Dios mandó a Jeremías que profetizara contra Israel. También le dijo que
nadie escucharía su voz – nadie se convertiría. El lamento de Jeremías creció
tanto que él dijo: “Ya no voy a continuar haciendo esto. No hablaré más en
el Nombre de Dios.” Nosotros diríamos, “Ya no voy a predicar más.” “No
obstante,” Jeremías dice, “había en mi corazón como un fuego ardiente
metido en mis huesos…” (Jeremías 20:9).
H. Las señales del verdadero evangelismo mostradas en el ministerio de nuestro único
modelo en el Nuevo Testamento:
1. Publicidad sobrenatural.
a. Había algo que ver y oír en el ministerio de Felipe: “Y la gente,
unánime, escuchaba atentamente las cosas que decía Felipe, oyendo y viendo
las señales que hacía” (Hechos 8:6).
b. El evangelista Felipe, estaba dotado de los dones espirituales

necesarios para su ministerio – hacer milagros y los dones de
sanidades. Los dones que él tenía son la mejor forma de publicidad
que pueda haber.
2. El verdadero evangelista tiene que predicar la Palabra.
a. La predicación de la Palabra es esencial en todo ministerio de
evangelista.
b. El poder divino atraerá a la multitud. Los milagros y sanidades
detienen y llaman la atención de la persona. Pero es al creer en la
Palabra que las personas son salvas.
Hechos 8:12
12
Pero CUANDO CREYERON A FELIPE, QUE ANUNCIABA el
evangelio del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, se bautizaban hombres y
mujeres.
1) Los milagros y sanidades ya fueron anunciadas en los

versículos 6 y 7. Ellos vieron los milagros. Pero la Biblia no
dice, “Cuando creyeron en lo que vieron…” La Biblia dice,
“Cuando creyeron a Felipe que predicaba…”
2) Nadie se salvó antes de la predicación de Felipe. La
predicación trabajo el resultado de la salvación.
c. Pablo dijo a Timoteo: “Que prediques la Palabra” (2 Timoteo 4:2). Y
recordará que también le dijo que hiciera la obra de un evangelista.
d. La predicación de la Palabra es lo único que afecta la voluntad del
pecador.
56
3. Decisiones individuales.
a. La conversión es un asunto individual. Es algo personal entre el espíritu
humano y Dios.
b. Dios nos está diciendo algo al describir en el mismo capítulo la
conversión de multitudes en Samaria y la conversión de una persona el
etíope convertido al encontrarse con Felipe al final del capítulo.
c. El don supremo de un verdadero evangelista es el poder de atraer un
alma para que se decida a aceptar a Cristo
4. El evangelista necesita a los otros ministros.
a. La variedad de ministerios puestos por Cristo dependen unos de los
otros para conseguir resultados eternos.
b. Es importante que enviaran a Pedro y a Juan a Samaria.
Hechos 8:14
14
Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron que Samaria había
recibido la palabra de Dios, enviaron allá a Pedro y a Juan;
1) Felipe no parece haber tenido ningún discernimiento.

a) Algunos piensan que Simón el mago fue salvo (Vers. 13).
b) Pero Pedro tenía algún discernimiento espiritual. Él le dijo a
Simón, “…Tu corazón no es recto delante de Dios” (Vers.
21).
2) Felipe no tenía la habilidad para establecer una iglesia, ni para
afirmar a la gente en la Palabra, ni para enseñar.
3) Asimismo parece que no tenía el ministerio de impartir el
Espíritu Santo como hicieron Pedro y Juan (Vers. 14-17).
4) Felipe cumplió su obra trayendo a la gente a Dios. Después los
apóstoles enviaron a otros para que continuaran la obra.
c. Una persona es incapaz de hacerlo todo. Y no debe tratar de hacerlo.
Nuestra capacidad es limitada. Todos los ministros son limitados. Pero
Dios es ilimitado. Nosotros nos necesitamos los unos a los otros.
d. Howard Carter fue un gran pionero del movimiento pentecostal. El
fundó el primer Instituto Bíblico Pentecostal del mundo. Todavía existe
en Inglaterra. La revelación que Dios le dio concerniente a los dones y
manifestaciones del Espíritu Santo encontrado en 1 Corintios 12 es
considerada una verdad fundamental en el día de hoy.
Hacía años que yo venía leyendo sus libros cuando tuve la oportunidad
de conocerle personalmente en una de sus reuniones.
Él tenía el ministerio de la imposición de manos para que la gente fuera
llena del Espíritu Santo.
Después de la reunión nos dijo al pastor y a mí que acababa de dar la
vuelta al mundo en un viaje de dos años (Dios le había dicho que fuera
y que ministrara a los misioneros), imponiendo las manos sobre 645
misioneros denominacionales y oyéndoles hablar en otras lenguas.
Aquella noche avanzaron al altar 19 personas para ser llenos del
Espíritu. En 10 minutos les impuso las manos a todos y ellos hablaron
en otras lenguas.
Mientras estábamos hablando en la parte trasera de la iglesia una mujer
vino diciendo: “Hermano Carter. ¿Puede orar para que yo sea sana?
El contesto sonriendo, “No hermana. Yo oraría si fuera el único que
estuviera aquí. Pero la sanidad no es mi ministerio. Dios me usa
especialmente para que imponga las manos sobre los que deseen ser
llenos del Espíritu Santo. Para sanar Dios usa a mi esposa. Sanan casi
todas las personas a las que ella les pone las manos. Así es que ella usa
la imposición de manos para que la gente reciba sanidad y yo para que
sea llena del Espíritu Santo. Vaya a mi esposa.”
58
El reconocía que era un hombre limitado. Él podría haber puesto las manos
sobre ella lo mismo que podría hacerlo cualquier otro creyente. Pero hay
siervos de Dios que están dotados por el Espíritu de Dios para ministrar de una
manera especial.
Puede haber algunos que tengan el don para imponer las manos sobre los que
desean ser llenos del Espíritu Santo y sobre aquellos que desean sanidad, pero
el Hermano Carter no era así. El reconocía su limitación y al mismo tiempo
reconocía el ministerio de otra persona.
No hay nadie que sea todo – suficiente. Nos necesitamos los unos a los otros.
El ministerio de un evangelista es un ministerio en el que se viaja bastante.
60
Lección IX
EL PASTOR
Efesios 4:11
11
Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros,
PASTORES y maestros,
A. La palabra “pastor” es usada unas 15 veces en el Nuevo Testamento.
El trabajo del pastor es probablemente el más amplio y reconocido en el ministerio de
la cristiandad de hoy.
B. La palabra “pastor” es usada en referencia a nuestro Señor y Salvador, el Señor
Jesucristo, que es el Mejor Ejemplo de un verdadero pastor:
Juan 10:11
11
Yo soy el BUEN PASTOR; EL BUEN PASTOR su vida da por las ovejas.
Hebreos 13:20
20
Y el Dios de paz que resucitó de los muertos a nuestro Señor Jesucristo, EL GRAN PASTOR
DE LAS OVEJAS, por la sangre del pacto eterno,
1 Pedro 2:25
25
Porque vosotros erais como ovejas descarriadas, pero ahora habéis vuelto al PASTOR Y
OBISPO de vuestras almas.
1 Pedro 5:4
4
Y cuando aparezca el PRÍNCIPE DE LOS PASTORES, vosotros recibiréis la corona
incorruptible de gloria.
C. Jesús es el Príncipe de los pastores, el gran pastor, de todas las ovejas.

D. Jesús es el Príncipe de los pastores. Un pastor está bajo la autoridad del Príncipe de
los pastores. Un pastor pastorea las ovejas de Dios.
E. Dios llama a personas y las prepara para pastorear un rebaño.
F. Los pastores son necesarios.
1. Cuando los creyentes comenzaron a juntarse en una iglesia de la localidad,
o en grupos, o asambleas, en tiempos nuevotestamentarios, ellos
necesitaban a alguien que los protegiera y los cuidara con amor. Esa es la
posición del pastor.
2. Jesús tenía compasión de la multitud “porque eran como ovejas que no
tenían pastor.”
a. Las ovejas sin pastor se esparcen y se pierden.
b. Vemos esto en los grupos que no tienen pastor.
G. Este ministerio requiere menos viaje.
1. La persona que haya recibido el llamado para pastorear un rebaño más o
menos permanecerá en la localidad del rebaño.
H. El pastor vigila el rebaño.
1. Jesús es el Gran Pastor. Él es la cabeza, el obispo de toda la Iglesia. El
pastor está bajo la autoridad del príncipe de los pastores. Él es la cabeza, el
obispo del rebaño local o grupo. Todo se centraliza en él. La cabeza
administra. La responsabilidad de administrar la iglesia se centraliza en el
cargo del pastor.
2. El cargo de pastor no se menciona en 1 Corintios 12:28. Pero si se encuentra
la palabra “administrar.” Creo que está es una responsabilidad del pastor,
que se encuentra en esta lista de los dones del ministerio que Dios puso en la
Iglesia.
3. ¿Es bíblico que la iglesia sea dirigida por la junta de diáconos o de ancianos?
a. En los tiempos de la Iglesia primitiva – cuando la Iglesia estaba en su
época infantil en cuanto a desarrollo – las asambleas fueron dirigidas
por los ancianos de la iglesia hasta que los ministerios se desarrollaron.
La traducción de la palabra griega para “anciano” significa persona de
edad. Los ancianos eran gente de edad, adecuados para tomar un
cargo de posición y responsabilidad.
62
Los únicos ministros que había en la Iglesia primitiva eran los doce
apóstoles. Un novicio no podía ser establecido como pastor del
rebaño. Luego, hasta que no se prepararan algunos de los llamados
entre los novicios – la preparación requiere tiempo – ellos
establecerían algunos de los ancianos, porque normalmente las
personas de edad son más maduras mentalmente, y los ponían a
cuidado del rebaño.
Esta situación no existe en nuestros tiempos.
Han ocurrido grandes problemas cuando algunos han dicho:
“Queremos una iglesia nuevotestamentaria. Regresemos a los Hechos
de los Apóstoles.” Entonces han establecido ancianos en la iglesia
para dirigirlas.
(Si, debemos regresar a la experiencia de los Hechos de los Apóstoles.
La misma experiencia que tuvieron ellos podemos tenerla nosotros
hoy. Pero si administramos la iglesia de hoy al igual que la Iglesia
primitiva, tendremos que regresar al desarrollo infantil de la
Cristiandad. ¡El Nuevo Testamento claramente nos revela que el plan
de Dios es que la Iglesia crezca!.
Los ancianos de hoy que son establecidos por el hombre no tienen un
llamado de Dios. No saben nada de la función del pastor, porque no
tienen un llamado; no están ungidos.
El escoger ancianos para que cuiden del rebaño – ya que incluso
cuando hay un pastor, los ancianos toman el control – no es bíblico.
Este es un proceso de retrocedimiento aceptando que, “Nunca hemos
crecido. Somos niños espirituales.”
Comentarios personales: Llevo predicando el Evangelio medio siglo y
he observado lo siguiente. Nunca he visto a una iglesia que realmente
tuviera el poder de Dios obrando en ella y estuviera cumpliendo con el
llamado de Dios, a no ser que el pastor fuera quien tuviera el cuidado
de la grey y tomara las decisiones.
Cuando existe una junta de diáconos, o junta de ancianos o cualquier
otra clase de dirigentes que tienen el dicho y el mando de la iglesia, no
he visto todavía a ninguna que funcione correctamente, ni donde el
poder de Dios no se hubiera desvanecido. Puedes ir a predicar a dichas
iglesias pero notaras que falta algo. Yo comparo estas iglesias con el
lavarse los pies con los calcetines puestos. Dios las bendice porque las
ama. Pero no puede bendecirlas totalmente, porque El no puede
aceptar las ideas del hombre.
4. Obispos. La palabra “anciano” se refiere en especial a la persona de edad y
de buen comportamiento. Después había un título más elevado que se
llamaba “obispo”.
Episcopos es la palabra griega que traducida es obispo y significa un guía en
su posición oficial.
a. Pablo usó la palabra “obispo” en su amonestación a los ancianos de la
iglesia de Efeso:
HECHOS 20:28
28
Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu
Santo os ha puesto por OBISPOS, PARA APACENTAR LA
IGLESIA DEL SEÑOR, la cual él ganó por su propia sangre.
Para apacentar la iglesia del Señor dichos ancianos tenían que ser
maestros. No podían haber sido solamente personas de edad cuidando
al rebaño sin ningún ministerio. Podemos ver que algunos de los
ancianos que fueron puestos para dirigir, crecieron hasta tener un
ministerio ellos mismos. Dios los transformó en ministros.
b. La palabra griega episkopos también es traducida por “obispado.”
1 TIMOTEO 3:1
1
Palabra fiel: Si alguno anhela obispado, buena obra desea.
Recordemos que la palabra episkopos es traducida en los otros lugares
por “obispo.” Aquí está hablando de un don de pastor. El pastor por
naturaleza apacienta las ovejas.
64
1) El cuadro formado por la Palabra es el de un pastor con su

rebaño. El pastor guía al rebaño. El pastor no se levanta por la
mañana diciendo, “Será mejor que reunamos a las ovejas
principales y les preguntamos la opinión que tienen del lugar
donde vamos a apacentar hoy.” ¡No! El pastor es quien
pastoreara el rebaño. El pastor es quien cuida del rebaño. El
anda por el camino y las ovejas le siguen.
2) Notemos que esta función del obispado es la función o cargo de
pastor. Si esta función no es la del pastor, entonces es una
función. Que no fue establecida por Jesús (Efesios 4:11). La
función del obispado aquí mencionada tiene que ser la misma
que la de pastor.
1 TIMOTEO 3:2-3
2
Pero es necesario que el obispo sea irreprensible, marido de una
sola mujer, sobrio, prudente, decoroso, hospedador, APTO
PARA ENSEÑAR; 3no dado al vino, no pendenciero…
3) Es el deber del rebaño el mantener al pastor. Pero el pastor no
debe servir por el dinero mal ganado. Su motivo debe ser servir
a Dios y a las almas.
1 TIMOTEO 3:3-5
3...no codicioso de ganancias deshonestas, sino amable,
apacible, no avaro; 4que gobierne bien su casa, que tenga a sus
hijos en sujeción con toda honestidad 5(pues el que no sabe
gobernar su propia casa, ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?)
4) Es definitivo que estos versículos hablan de la función del
pastor.
1 TIMOTEO 3:6
6
no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la
condenación del diablo.
5) No un neófito. Como ves, ellos no hubieran podido empezar
como pastores. Llevo tiempo para que Dios desarrollara estos
ministerios.
c. En el versículo que sigue vemos una vez más la función del obispo
pastoreando, enfatizando dicha función de pastor al terminar el
versículo.
1 TIMOTEO 5:17
17
Los ancianos que gobiernan bien, sean tenidos por dignos de doble
honor, mayormente los que trabajan en predicar y enseñar.
1) La Iglesia que leemos aquí está saliendo del estado de

niñez. Algunos de los ancianos escogidos para cuidar el
rebaño se han desarrollado.
Aquellos “que trabajan en predicar y enseñar” son
predicadores y maestros. Algunos de los ancianos y
otros obreros se habían desarrollado y ahora podían
llenar el cargo de pastor, ocupándose de la Palabra y
doctrina.
Verdaderamente con el paso del tiempo llegó el día en
que ya no eran necesarios los ancianos sin dones del
ministerio.
5. Es importante notar que la Iglesia Primitiva tuvo una niñez. La
característica de la niñez es el crecimiento – bien sea espiritual o de otra
clase. Pero el crecimiento requiere tiempo.
a. En este siglo, durante el comienzo de la época del movimiento
pentecostal, los creyentes tuvieron que regresar, casi por necesidad, al
estilo de administración que tenían en los Hechos de los Apóstoles.
Los pioneros con más experiencia iban a lugares donde no había
iglesias predicando el Evangelio completo.
Un hermano me contó que predico durante un verano en un lugar y
285 almas fueron salvas y entre ellas 90 recibieron el bautismo en el
Espíritu Santo.
Dicho hermano era un evangelista, no un pastor. No obstante, se
quedó con ellos tres meses, predicándoles cada noche, y comenzó con
66
ellos una iglesia. Cuando se marchó no había ningún pastor, entonces

el escogió a algunos entre los que tenían más experiencia para que
apacentaran el rebaño hasta que Dios preparara y pusiera a un pastor
en la iglesia.
Algunos de esos rebaños pasaban dos y tres años sin ningún pastor.
I. La función de pastor es una de las más importantes.
1. Prácticamente todos los dones del ministerio son vanos sin la ayuda del
pastor. No importa lo bueno que sea un evangelista, ni importa las almas
que fueron salvas, si no hay alguien que sepa pastorear a las ovejas –
pastorearlas y guiarlas en el camino de Dios – dichas almas caerán junto al
camino. No importa el número de bebés que nazcan en una casa u hospital,
si no hay alguien que los cuide ellos morirán.
2. Los pastores son los que recibieron más instrucciones en el Nuevo
Testamento. Los apóstoles no recibieron ninguna instrucción, tampoco los
evangelista recibieron instrucciones. Las otras funciones recibieron poca
instrucción. El pastorado es el cargo que recibe más directa instrucción
(considerando que los ancianos que enseñaron y predicaron, y los obispos
pertenecen al pastorado) que ninguna otra función.
3. El pastorado es el cargo mayor que hay, es el más respetado y el más
necesitado al cual Dios pudiera llamarte para que ocuparas. Es una causa
noble.
Comentarios personales: Debes obrar en lo que Dios te haya llamado. Pero
sinceramente digo que prefiero el ministerio de pastor a ningún otro. Este es
único ministerio al que yo aspiré. Y si yo fuera joven aspiraría a ese cargo.
Permite que Dios haga lo que desee, pero si yo fuera tú, yo hablaría con El
sobre el pastorado. Yo lo hice, pero Él me dijo que no.
J. El Espíritu Santo es el que transforma a los hombres en obispos, el hombre no
puede hacerlo.
K. Dios ha provisto un equipo sobrenatural para el pastor. El pastor debe estar

equipado con las armas sobrenaturales.
1. Los dones del Espíritu (1 Corintios 12) pueden manifestarse en las vidas de
cada miembro del Cuerpo de Cristo. Pero también estoy convencido que
dichos dones sobrenaturales son armas espirituales para aquellos que tienen
funciones en el ministerio.
2. Estoy convencido de que el pastor debe tener la palabra de sabiduría, la
palabra de ciencia, y también lenguas e interpretación.
También estoy convencido de que si no tiene dichos dones, puede pedirlos y
los recibirá. Yo los pedí.
a. Algunas veces, dichos dones no son tan espectaculares cuando obran
por medio de un pastor, aunque sí que están en operación.
b. Pastoreando de una manera sobrenatural.
1) En una de mis reuniones de avivamiento se salvó un joven con
sólo una educación del octavo grado. Más tarde recibió el
bautismo en el Espíritu Santo y seguidamente recibió el
llamado para predicar. El trabajaba en un aserradero de madera
y predicaba los fines de semana. La única preparación que tenía
era la que había recibido en su iglesia. Enseñe en varios
seminarios que tuve en su iglesia. Poco tiempo después era tan
solicitado para predicar que dejó el trabajo que tenía para
dedicar todo su tiempo a la predicación. Pasó 18 meses como
evangelista. La iglesia en la cual había crecido se quedó sin
pastor y le invitaron a que fuera como pastor por tres meses. Al
terminar los tres meses fue elegido pastor permanente y la
iglesia creció mucho más que antes de venir él.
Regresé para predicar en dicha iglesia y me maravillé de la
habilidad que tenía dicho hermano – un hombre que tenía poco
preparación cultural y entrenamiento.
Una sala grande que había en la iglesia había sido dividida para
construir una oficina para el pastor y una sala de espera. Yo
68
esperaba y oraba en dicha sala antes de comenzar las reuniones.

Algunas veces durante el día yo usaba la sala para estudiar.
La oficina del pastor y la sala estaban separadas por una pared
muy delgada; aunque no quisiera oír, yo podía oír todos los
consejos que dicho pastor daba a miembros que lo visitaban. En
aquellos tiempos yo llevaba 25 años en el ministerio – 12 de
pastor y 13 recorriendo iglesias. Dicho hermano sólo llevaba
cuatro años en el ministerio. Cuando las personas venían a él,
yo me maravillaba preguntándome, ¿Cómo contestará esa
pregunta? ¡Yo no sabría contestarla!
Pero cuando contestaba, las palabras que salían de su boca me
sorprendían. Yo sabía que el Espíritu de Dios estaba obrando
en él. Me dejaba encantado. Me dejaba sorprendido con los
ojos abiertos y la boca abierta, mientras pensaba, ¿Eso es un
milagro de Dios?
Después de pasar varios años allí se mudó a otra iglesia mayor.
Me invitó para que predicara allí. En aquellos días él llevaba
unos 10 años en el ministerio. Yo casi le seguía de un lado a
otro oyendo lo que decía. Yo sabía que tenía poco estudio y
tampoco tenía preparación. Con todo, me maravillaban las
palabras de sabiduría que salían de su boca cuando contestaba.
Yo sabía que era del Espíritu de Dios.
2) El hermano O.B Braune pastoreó la antigua Asamblea de
Rosen Heights en Fort Worth (Texas) durante más de 40 años
antes de que se retirara del ministerio. Estábamos en una
reunión de preguntas y respuestas y oí que alguien le
preguntaba, “¿Cómo puede Ud. Pastorear una iglesia durante
tanto tiempo? Y ¿Cuál es el secreto de su éxito?” El contesto,
“En mi opinión, el secreto mayor en el trabajo de pastor es
tener la respuesta ideal para toda persona que viene pidiendo
ayuda.”
Para que puedas contestar con la respuesta ideal tienes que
depender en el Espíritu de Dios.
3) Predique en varias ocasiones en las iglesias que pastorearon el
Hermano y la Hermana J.R Goodwin. Nunca he conocido a
otros pastores que pastorearan de una manera tan espiritual.
Cuando alguien de la iglesia necesitaba ayuda, ellos lo sabían
inmediatamente por el Espíritu de Dios.
4) Yo pastoreaba de la misma manera. Nunca tuve un programa
de visitación. Siempre sabía en mi interior cuando alguno
necesitaba ayuda.
Uno de los casos más sobresalientes ocurrió en la última iglesia
que pastoreé. Un contratista de edificios se había salvado dos
semanas antes. Mientras me estaba afeitando una mañana; el
Espíritu de Dios me habló diciéndome: “Quiero que animes a
Sam. Se enfadó ayer en el trabajo con un obrero y maldijo. Hoy
se quedó en su casa y está enfermo en la cama. El piensa que
Dios ya le ama ya que falló. Ve para animarle.”
Salí de mi cuarto con la cara medio afeitada para decirle a mi
esposa: “Querida, necesito visitar a Sam para animarle, antes de
hacer los encargos que tú necesitas.” Y le dije lo que el Señor
me había hecho saber.
Terminé de afeitarme y de vestirme. Estaba cogiendo mi
chaqueta cuando un coche se detuvo delante de la casa, oí que
mi esposa abría la puerta y guiaba a alguien al cuarto de estar.
Era la esposa de Sam que lloraba y me decía: “¡Oh! Hermano
Hagin, no le diga a Sam que yo he venido aquí. El está en casa
enfermo.” Ella nos explicó que Sam padecía de un mal de
espalda desde hacía mucho tiempo, algo que era crónico. El
mal estaba obrando una vez más y él no podía levantarse de la
cama. Después ella continuo diciendo, “Sam dice que ya no
regresará a la iglesia. Ayer se enfadó en el trabajo y algunos de
sus obreros dicen que él maldijo.
70
Él no se acuerda si lo hizo. Pero dice que Dios ya no le ama

porque falló ¿Quieres visitarlo?”
Yo le dije, “Puedes preguntarle a mi esposa. Todo lo que me
dices se lo he contado a ella. (Esta es la razón por la cual el
Señor me inspiró para que se lo contara a mi esposa.) El Señor
me habló sobre esto. Yo no necesito decirle a Sam que tú me lo
has dicho. Puedo decirle que Dios me lo ha dicho.”
Cuando llegué a su casa, llamé a la puerta de la habitación y
Sam dijo, ¡Entre! Cuando me vio, se puso tan avergonzado que
se puso la sábana sobre la cabeza. Y allí estaba un hombre de
43 años de edad con la sábana sobre su cabeza y llorando
fuertemente.
Me arrodillé junto a la cama y lo tomé, cubiertas y todo, entre
mis brazos, y me puse a llorar con él. Finalmente, tiré de la
sábana y abrazándole le dije, “El Señor me lo dijo todo.”
Gracias a Dios que El lo hizo. Cuando Dios obra de una
manera sobrenatural, esto convence a las almas de Su amos y
misericordia.”
Lección X
EL MAESTRO
EFESIOS 4:11
1
Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros,
pastores y MAESTROS,
1 CORINTIOS 12:28-29
28
Y a unos puso Dios en la iglesia, primeramente apóstoles, luego profetas, LO
TERCERO MAESTROS, luego los que hacen milagros, después los que sanan, los que
ayudan, los que administran, los que tienen don de lenguas. 29¿Son todos apóstoles? ¿Son
todos profetas? ¿TODOS MAESTROS?...
ROMANOS 12:4-7
4
Porque de la manera que en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los
miembros tienen la misma FUNCIÓN, 5así nosotros, siendo muchos, somos un cuerpo
en Cristo, y todos miembros los unos de los otros. 6De manera que, teniendo diferentes
dones, según la gracia que nos es dada, si el de profecía, ÚSESE conforme a la medida
de la fe; 7o si de servicio, EN SERVIR; o EL QUE ENSEÑA, EN LA ENSEÑANZA;
A. Los maestros y la enseñanza tienen una función muy bien definida e importante en
el Nuevo Testamento.
B. La palabra “maestro” es la única que aparece en las tres listas de ministerios.
C. Uno puede obrar como pastor y maestro, como profeta y maestro, como
evangelista y maestro, y así sucesivamente. Nosotros separamos las funciones para
poder definirlas.
1. Hechos 13:1 menciona los nombres de cinco hombres que eran profetas o
maestros, o profetas y maestros a la vez.
HECHOS 13:1
1
Había entonces en la iglesia que estaba en Antioquía, profetas y maestros:
Bernabé, Simón el que se llamaba Niger, Lucio de Cirene, Manaén…
a. Bernabé era un maestro (Hechos 11:22-26).
72
b. Pablo era un profeta y maestro.

c. Los dos llegaron a ser apóstoles.
D. Uno que es maestro sin ser pastor (por ejemplo, uno que no tiene el cuidado de un
rebaño) generalmente tiene un ministerio recorriendo las iglesias.
1. Si alguien es pastor y maestro (y con frecuencia éste es el caso),
posiblemente tendrá un ministerio en un lugar determinado, a pesar de que
de tiempo en tiempo enseñe en otras iglesias.
E. El don de la enseñanza es un don divino.
Dios se está refiriendo a un cargo del ministerio cuando habla del maestro
(Romanos 12:4).
El está hablando de hombres y mujeres que son llamados por Dios, puestos por el
Espíritu de Dios, para sostener ese cargo y enseñar.
1. Hemos dejado la impresión de que estos dones aquí mencionados se refieren
a los maestros de escuela dominical.
a. La Iglesia Primitiva no tenía escuela dominical. Esta tiene solamente
100 años de existencia.
b. Naturalmente, una persona que conozca la Biblia puede enseñar todo
lo que sepa de ella. Todos los cristianos podemos y debemos compartir
los unos con los otros lo que sabemos enseñándonos y ayudándonos.
Pero éste no es el don de enseñanza al que Dios se refiere.
F. El ministerio de la enseñanza requiere un don divino.
1. Experiencia personal: Yo había predicado durante muchos años. No era
maestro. Yo era estrictamente un predicador. Todo lo que yo había
aprendido era “el mensaje del evangelista,” o lo que llamamos la salvación
en su forma más simple. No tenía ni siquiera un mensaje de pastor para los
santos de la iglesia. Pero ¡Oh! ¡Yo amaba tanto la predicación! Con
humildad puedo decir que estaba listo para predicar con todo mí ser. El
poder de Dios caía cuando estaba predicando y grandes cosas comenzaban a
ocurrir.
Comenzaba a predicar tan rápidamente que las personas me decían, “Más
despacio por favor, que no podemos enterarnos ni de la mitad de lo que Ud.
Está hablando.” Las palabras manaban de mí como un manantial. En
verdad, yo creía – según mi falta de madurez y crecimiento espiritual – que
cuando se estaba ungido había que predicar rápidamente como una
locomotora, moviendo los brazos como un molino de viento, y escupiendo
algodón.
No me gustaba enseñar. A pesar de enseñar la clase más grande de la escuela
dominical en la iglesia que pastoreaba, me alegraba mucho cuando
terminaba dicha clase cada domingo para comenzar a predicar en el culto de
la mañana. Me desagradaba tanto enseñar que algunas veces cogía el
cuaderno del maestro unos 45 minutos antes de comenzar a enseñar la clase.
Posiblemente yo enseñaba bastante bien. La clase creció y las almas eran
bendecidas. Pero yo me gozaba cada domingo por la mañana cuando
terminaba dicha clase; respiraba fuertemente diciendo, “Gracias, Dios mio.
La clase terminó, otra semana más.” La enseñanza no me gustaba. No
formaba parte de mí.
Pero un jueves a las 3 de la tarde del mes de junio de 1943, en la casa que
tenían para el pastor de la iglesia, al cruzar la sala de estar para ir a mi
dormitorio, de repente algo cayó dentro de mí.
Me es difícil explicarlo, pero se parecía a una moneda que cae en un teléfono
automático. Puedes oír la moneda cuando cae dentro de un teléfono
automático. Yo podía casi oírlo. Y sabía que podía “sentirlo.” Algo cayó
dentro de mí y esto venia del cielo.
Me paré porque el Espíritu de Dios vino sobre mí. Y sin ni siquiera pensarlo
vinieron a mi mente las palabras siguientes: “Ahora puedo enseñar.” Podía
reconocer que se trataba del Espíritu de Dios. Era un don de Dios. Era una
capacidad divina.
Me gusta comprobar las cosas – eso forma parte de mi naturaleza. Así que
comencé a ejercitar el don de la enseñanza lo miércoles por la tarde. Los
miércoles a las 2:30 de la tarde se reunían unas seis u ocho señoras para orar.
Ellas eran soldados de oración que llevaban las cargas de otros.
74
No elimine el tiempo de la oración pero comencé una serie de enseñanzas

sobre diferentes temas, ejercitando el don de enseñar.
Nunca anuncie públicamente estas reuniones. Los creyentes sabían que las
señoras tenían la reunión de oración, pero no se había anunciado desde el
púlpito que yo estaba enseñando. No obstante, las señoras hablaron con sus
esposos sobre lo que estaba ocurriendo. Algunos de los maridos dejaron el
trabajo antes de la hora de salir para poder asistir a la reunión. Ellos se lo
dijeron a otros y el grupo creció. Pronto el edificio se llenaba todos los
miércoles a las 2:30 de la tarde – algo muy extraño para aquellos días.
Todo esto me sorprendía. Algunas veces yo me maravillaba y movía mi
cabeza en señal de sorpresa. Me admiraba el saber que podía sentir la misma
unción de Dios cuando estaba enseñando tranquilamente, que cuando
estaba gritando en mi predicación moviendo mis brazos como si fuera un
molino de viento.
G. El maestro no se hace maestro meramente debido a una virtud de capacidad
natural que tenga o una inclinación hacia la enseñanza.
1. La habilidad inclinación hacia la enseñanza pueden ayudar a este don –
pero no se trata de algo natural.
a. He conocido a maestros de escuelas públicas que eran maestros antes
de nacer de nuevo. Fueron salvos y llenos del Espíritu Santo;
enseñaron en clases de la Biblia en la iglesia. Todo esto está muy bien
que lo hicieran, pero esto no es lo que llamamos el don del ministerio
de enseñar.
H. No hay ningún ministerio de enseñar que sea seco y muerto con el poder del
Espíritu Santo. Será como ríos de agua viva.
1. Pablo compara el ministerio de enseñar con el hombre que riega.
1 CORINTIOS 3:6-9
6
Yo planté, APOLOS REGÓ; pero el crecimiento lo ha dado Dios. 7Así que
ni el que planta es algo, NI EL QUE RIEGA, sino Dios, que da el
crecimiento. 8Y el que planta Y EL QUE RIEGA son una misma cosa;
aunque cada uno recibirá su recompensa conforme a su labor. 9Porque
nosotros somos colaboradores de Dios, Y VOSOTROS SOIS LABRANZA
(jardín)…
a. Un ministerio del Evangelio en los Estado Unidos, fue invitado para
visitar una región famosa por sus invernaderos y criaderos de plantas.
Un hermano de edad avanzada, le invitó para que visitara el
invernadero que él cuidaba. El ministro en dicho lugar se asombró
diciendo: “Nunca he visto plantas que tuvieran tanto crecimiento.”
Pasaron dos años y el ministro regresó de nuevo a la misma región.
Pidió que lo llevaran al mismo invernadero y él dijo: “En el mismo
momento de entrar, noté que había algo que no marchaba bien.” Era
el mismo invernadero. Tenía la misma clase de plantas. Pero no eran
tan elegantes como antes. Había mucha diferencia.
“No es lo mismo que hace dos años. ¿Qué ha pasado?” Ellos sabían el
motivo. “El hermano viejecito que cuidaba y regaba las plantas murió.
Ahora hay otra persona que cuida las plantas.”
b. Mucha obra de Dios ha sido arruinada porque le faltaba agua de riego
para poder radiar por el Señor y para transformarse en plantas
maravillosas en la viña del Señor.
c. Cuando el regadío – es decir, la enseñanza de la Palabra de Dios – se hace a
través de un don espiritual ya que uno es llamado y dotado para enseñar, la
Palabra deja a las almas satisfechas y avivados, lo mismo que cuando se riega
una planta que esta sedienta – ella se aviva y refresca.
d. Si la enseñanza no aviva a las personas, simplemente es porque no se
enseña con el poder del Espíritu.
2. Apolos era un maestro. Se dijo de él que “fue de gran provecho.”
76
HECHOS 18:27
27
Y queriendo él pasar a Acaya, los hermanos le animaron, y escribieron a
los discípulos que le recibiesen; y llegado él allá, FUE DE GRAN
PROVECHO A LOS QUE POR LA GRACIA HABÍAN CREÍDO;
a. Aquellos ya habían creído por la gracia de Dios – ya eran salvos.
b. Apolos les ayudó mucho al ejercitar su don de enseñanza.
I. La incredulidad y la dureza de corazón pueden causar divisiones, incluso cuando la
enseñanza se hace con el poder del Espíritu.
1. Esto ocurrió bajo el ministerio de Jesús. Ellos no aceptaban las enseñanzas
de Jesús. En una ocasión la Biblia dice, “Desde entonces muchos de sus
discípulos volvieron atrás, y ya no andaban con El” (Juan 6:66)
J. El verdadero maestro debería apartarse de causar divisiones de la misma manera
que se aparta de una plaga.
K. No obstante, no podemos negar los principios fundamentales de las doctrinas de
Cristo.
1. En Hebreos 6:1-2 encontramos los principios fundamentales de las doctrinas
de Cristo. Esas doctrinas son fundamentos que no se pueden negar.
a. El arrepentimiento de las obras muertas.
b. La fe en Dios.
c. La doctrina de los bautismos.
d. La imposición de manos.
e. La resurrección de los muertos.
f. El juicio eterno.
L. Otras cosas no son fundamentales y no debes crear división.
M. Debes usar sabiduría.
1. No vayas y trates de convertir a todo el mundo de la noche a la mañana al
mensaje de fe. Muchos nunca lo recibirán. Como quiera que sea debes
amarlos, porque el Señor continúa amándoles y no los abandonará.
N. El trabajo de un maestro es edificar no destruir.
1. Cristo constituyó maestros para que edificaran al Cuerpo de Cristo.
2. La palabra “edificar” significa “construir” o “infundir virtud”. El no
constituyó a los maestros para que dividieran al Cuerpo.
a. Si notas que algo está causando división – aunque sea verdad – puedes
retroceder para evitar conflictos.
b. Pablo mismo dijo a la iglesia en Corintios y a los hermanos que eran
hebreos: “Tengo muchas cosas para deciros ahora, pero no voy a
hacerlo porque no estáis preparados para recibirlas.”
Pablo continuaba amándoles, pero él sabía que eran como niños que
necesitaban crecer.
O. Los maestros siempre deben estar listos para mirar la verdad desde nuevos puntos
de vista.
1. La revelación señala el ministerio de un maestro.
2. Yo no escucharía a un maestro que no estuviera dispuesto a aprender.
3. Mantén humildad de espíritu y humildad de mente.
4. Mantén tu mente abierta y siempre lista para aprender.
5. No seas uno de ésos que “lo saben todo.”
a. Yo todavía estoy aprendiendo, ¿aprendes tú? Sería una cosa terrible si
todo lo que sabes ahora fuera lo único que supieras en el futuro.
b. Dios me ha ido revelando verdades en Su Palabra, y cuando la
revelación vino, me sentí tan estúpido que le dije a mi esposa, “me
sorprendo que haya sido tan ignorante.”
c. Mientras más sabemos, más no damos cuenta de lo que no sabemos.
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d. Un gran y sabio hombre de Dios, W.I Evans, solía decir: “Sabemos

tan poquito. Porque mientras más aprendemos, menos vemos lo que
sabemos.”
P. He aquí una revelación que el Señor me presento. En verdad, fue Jesús quien me
la comunicó en una visión que tuve cuando se me apareció en el mes de febrero de
1959 cuando me habló de las funciones que yo tenía de profeta y maestro. Esto me
pasmó. Con todo. El me lo probó usando la Palabra.
Él dijo: “La función de maestro para la iglesia es más importante que hacer
milagros y que los dones de sanidad.”
Jesús dijo, “El apóstol Pablo por medio del Espíritu Santo los enumera de acuerdo
con su importancia, cuando dice: Y a unos puso Dios en la iglesia,
PRIMERAMENTE apóstoles, LUEGO profetas, lo TERCERO maestros,
LUEGO los que hacen milagros, DESPUÉS los que sanan…” (1 Corintios 12:28).
Para la iglesia, enseñar es lo más necesario. El hacer milagros y los dones de
sanidad nunca establecerán a un cristiano en la fe.
Algunos piensan que el llamado de maestro es inferior. No es inferior
Recordemos que nos necesitamos los unos a los otros.

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Instituto Bíblico “Fuego de Avivamiento”

Cátedra: Excelencia Ministerial Apóstol: Henry A. Troconiz P.

DE LA PLENITUD DE CRISTO; 14PARA QUE YA NO SEAMOS NIÑOS

1. La Iglesia necesita estar rodeada de crecimiento espiritual para poder llegar a su

1. Tendrás la convicción en tu propio espíritu.

2. Dios se relaciona con el espíritu del hombre.

Le dije, “Si yo estuviera en tu lugar me olvidaría de todo. En primer lugar, él

No ando por lo que veo.

a. Observa que era el Señor quien estaba ayudando a esos primeros

b. Era como su Señor y no meramente como su ayudador que obraba entre

B. Dedícate. Junto con el llamado va la dedicación.

a. Saulo (Pablo) es nombrado como uno de los cinco profetas y/o

c. Si Dios te llamó al ministerio de pastor, no comenzaras pastoreando

Yo estaba sorprendido. Llevaba 15 años en el ministerio. Le dije, “Señor,

4. Ocupa tu lugar con dignidad.

C. En griego la palabra apóstol se escribe APOSTOLOS y significa uno que es enviado,

1. La obra del apóstol consistía en poner el fundamento.

1) El hará la obra de evangelista.

El siempre se quedaba en un lugar desde seis meses hasta tres

La palabra “mensajero” escrita en estos versículos es la misma

3. ¿Existe hoy el ministerio del apóstol? Gracias a Dios sí que existe.

a. Si Dios ha quitado alguno de estos ministerios de la lista, la Biblia nos

En el día del repartimiento de premios, un profeta no será mejor recompensado

A. ¿Hay profetas hoy?

Después definió con simplicidad lo que es el don de la profecía:

2) Palabra de ciencia: Una revelación sobrenatural del Espíritu de Dios

1) Una visión espiritual. Una persona puede tener una visión en su

Ejemplo: Saulo en el camino de Damasco. Relatando su experiencia,

Cuando uno cae en éxtasis, sus sentidos físicos quedan en suspenso

Ejemplo: Pablo. Cuando Pablo fue a Jerusalén la primera vez él dijo,

Pedro: El capítulo 10 de Hechos nos relata la visión de Pedro en la

Cuando le sobrevino el éxtasis, Pedro “vio el cielo abierto…” (Vers. 11)

1) El profeta puede comunicar sus revelaciones a través del ministerio

Satanás puede guiarlos y ciertamente que lo hace.

4. Él está en nosotros para guiarnos.

5. Todo creyente necesita aprender a ser guiado por el mismo Espíritu de

D. Hay que poner la Palabra antes de todo. Incluso si hay manifestaciones

Yo tenía 36 años de edad en aquellos tiempos. Desde allí viaje a Scranton

Interpretemos esta Escritura según el contexto. Pablo está escribiendo

Eliseo tenía un ministerio de sanidad y el pueblo lo sabía.

2) Jesús sostenía el ministerio de profeta. Su ministerio de sanidad es

4) Puede obrar también de otras maneras.

b) Jesús impartió sanidad a través de la imposición de manos.

¿Por qué obró así? Porque el Espíritu de Dios se lo dijo. El estaba

5) Jesús dijo, concerniente a la sanidad de Naamán a través del ministerio

a. Esto no podría ser verdad. Porque si fuera así, Giezi el siervo de

b. El Señor te hace saber lo que El desea que sepas. Dios no te lo dice

Algún tiempo después y todavía soltero, estaba pastoreando una iglesia

Lo mismo es verdad en otros cargos del ministerio. Si se pusiera a un

A. La palabra “evangelista” ocurre sólo tres veces en el Nuevo testamento.

c. El evangelista tiene una característica muy notable: El anuncia a

3. Según mi opinión, el que llamamos muchas veces un “evangelista” es un

b. Un exhortador exhorta para la salvación.

b. El evangelista Felipe, estaba dotado de los dones espirituales

1) Los milagros y sanidades ya fueron anunciadas en los

1) Felipe no parece haber tenido ningún discernimiento.

C. Jesús es el Príncipe de los pastores, el gran pastor, de todas las ovejas.

1) El cuadro formado por la Palabra es el de un pastor con su

1) La Iglesia que leemos aquí está saliendo del estado de

ellos una iglesia. Cuando se marchó no había ningún pastor, entonces

K. Dios ha provisto un equipo sobrenatural para el pastor. El pastor debe estar

esperaba y oraba en dicha sala antes de comenzar las reuniones.

Él no se acuerda si lo hizo. Pero dice que Dios ya no le ama