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Revista de cultura de

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Indice

BLOCK, número 8, marzo de 2011

En la tapa: 'Iimbuctú.

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Universidad "Torcuato Di Tella
Rector: Lic. Manuel Mora y Araujo
Block, revista de cultura de la
arquitectura, la ciudady el territorio
Editores del número 8:
at Editorial
Fernando Aliata
Escuela de Arquitectura y Estudios Urbanos Eduardo Gentle
Decano organizador: Arq. Jorge Francisco l.iermur Director: Luis Muller AAA Fernando Aliata Historiografía
Arg. Jorge Francisco Liernur NA Eduardo Gentile
Carrera de Grado de Arquitectura Universidad Torcuato Di "Tella
Director Arg. Sergio Forster Consejo Nacional de Investigaciones Diseño gráfico: ET Luis Múller
Coordinadora Arq. Florencia Rausch Científicas y Técnicas
Gustavo Pedroza
Orientalismo y arquitectura moderna: 10
Maestría en Historia y Cultura de Universidad Nacional de Lanús Jorge Francisco Liernur
la Arquitectura y la Ciudad
Directora Dra. Arq. Claudia Shmidt
Comité de redacción:
AUT el debate sobre el techo plano

Mg. Noemí Adagio


Universidad Nacional de Rosario Ana María Rigotti Mojisei Ginzburg: bases de una teoría autónoma de 28
Programa para Graduados:
Dr. Fernando Aliata
la arquitectura y sus materiales específicos
Arquitectura y Tecnología: Universidad Nacional de La Plata
Coordinador Arq. Ricardo Sargiotti Consejo Nacional de Investigaciones
Cieniíficas y Técnicas DOTA Claudia Shmidt A propósito de la «Posdata Americana» de Pevsner 42

Arquitectura del Paisaje:


Coordinadora Arq. Cora Burgin Dra. Anahi Ballent
Patricio del Real Para caer en el olvido: Henry-Russell Flitchcock 48
Universidad Nacional de Quilmes
Preservación del Patrimonio: Consejo Nacional de Investigaciones y la arquitectura latinoamericana

E
Coordinador Arg. Fabio Grementien Científicas y "Técnicas

Maestría en Economía Urbana Dr. Alejandro Crispiani Adrián Gorelik Historias de Nueva York. Arquitectura, capitalismo 58
(c/Escuela de Gobierno): Pontificia Universidad Católica de Chile,
Director Dr. Lucas Llach Santiago y pensamiento crítico en Delirius New York

Arq. Eduardo Gentle


Universidad Nacional de La Plata Lecturas:
Consejo de Evaluación Académica Externa:

Arq. Francisco Bullrich Dr. Adrián Gorelik


Carla Berrim De la Konstruktion a la plástica: Sigfried Giedion 68
Dr. Werner Ochslin, EH Zurich Universidad Nacional de Quilmes
Arq. Jorge Silveta, Harvard University Consejo Nacional de Investigaciones y sus dos gencalogías para la arquitectura moderna
Arq. Rafael Viñoly Científicas y "lécnicas No está permitida la reproducción parcial
o total del material que aquí se publica.

Mg. Luis Miller Silvio Plotquin En torno al «regionalismo crítico» 74


Consejo Consultivo: Universidad Nacional del Litoral Las opiniones contenidas en los artículos son
de exclusiva responsabilidad de los autores.
Arg. Jorge Aslan Mg. Silvia Pampinella Alan Colquhoun: la aventura de la arquitectura moderna 78
Universidad Nacional de Rosario
Virginia Bonicatto
Arq. Francisco Bullrich ISSN: 0329-6288
Ana Gómez Pintus
Arq. Enrique Fazio (1945-2001)
Arq. Jorge Hampton Dra Ana María Rigotu Melina Yuln
Arq. Raúl L.ier (1944-2005) Universidad Nacional de Rosario Propietano:
Arq. Jorge Morin: Consejo Nacional de Investigaciones Universidad Torcuato Di Tella

EN
Arq. Josefina Santos Científicas y Técnicas La arquitectura y su reverso 81
Sede Alcorta: Sáenz Valiente 1010
Alejandro Crispiani
Arq. Clorindo "lesta
Dra. Claudia Shmide C142881j Buenos Aires, Argentina
Universidad "Torcuato Di Jella "Lel.: (54 11) 5169 7330 Francisco Díaz P. El éxtasis de la práctica y la crisis de la crítica. 89
E-mail: rrodniguezE uudiedu
Dra. Graciela Silvesuri Notas sobre la escena arquitectónica contemporánea en Chile
Universidad Nacional de la Plata Sede Miñones: Miñones 2177 UAT
Consejo Nacional de Investigaciones C1428ATG Buenos Aires, Argenuna
Cientificas y Técnicas "Lel.: (54 11) 5169 7000 TAE
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Editorial

Hace 14 años, en la introducción editorial del primer número de


A riesgo de transformarse de otro modo en puro caos o Este número de Block es especialmente significativo además
Block escribimos que la revista se sustentaba en una convicción
entropía «natural», creemos que la misma libertad se define en porque, como podrá comprobarse, ha sido construido con la par-
compartida por quienes integramos su Comité de Redacción: relación con bordes, y son esos bordes sobre los que conviene
«la afirmación del carácter cultural de las operaciones sobre la
ticipación de jóvenes colegas que poco a poco se van incorpo-
reflexionar. Sin negar que existan otros espacios, es éste el lugar rando al esfuerzo coral iniciado hace 14 años. Con profunda nos-
arquitectura, la ciudad y el territorio». Como es obvio, esa no cra desde donde Block procura observar este sector del mundo que
la única clave que nos impulsaba y permitía encarar el
talgia y cariño queremos recordar en este espacio a Martín Gascón,
proyecto
de la revista: «producto -destacábamos- de un largo proceso en el
se identifica con «la arquitectura, la ciudad y el territorio». quien se encontró entre quienes contribuimos a la construcción
de esta edición de la revista: una arrasadora enfermedad y su
que a través de discusiones personales, eventos institucionales,
En esta oportunidad decidimos desviar el foco, desplazándolo súbito fallecimiento nos dejaron sin su participación y su cálida
lecturas y encuentros (...) fuimos reconociendo referentes teóri-
q desde los «problemas» que caracterizan a nuestro objeto de presencia, y truncaron lo que prometía ser un fructífero camino
cos y focos comunes de interés».
interés, hacia los instrumentos con que nos acercamos a esos en este campo de estudios.
La concreción del número 8 que aquí presentamos es una
manifestación del raro privilegio que supone el hecho de que, a
problemas. Es necesario aclarar que dedicar un número a
<historiografía» no supone ni remotamente creer que daremos ¿Podemos fijar desde ya una cita para el número 9? ¿Alcanzaremos
pesar del tiempo transcurrido, no solamente esas mismas convic- cuenta del enorme campo de los estudios sobre la historia, por la mágica cifra portadora de un cero?
ciones e ideas continúan guiando nuestros estudios y nuestra
más que estos se reduzcan tópicamente a la que refiere a nuestro A juzgar por las dificultades materiales que deben vencerse en
práctica como investigadores e intelectuales, sino que seguimos cada salida de la revista, a lo largo del tiempo que transcurre entre
objeto. La intención es mucho más modesta.
creyendo en la capacidad transformadora que tiene, aún en su Por un lado se trata de hacer explícita una vez más la idea de un número y otro, muchas veces nos hemos encontrado pensan-
dimensión extremadamente modesta, la expresión escrita en
que tanto la Arquitectura como sus campos de existencia, la do que el ciclo pareciera haberse cerrado. Sin embargo, deben
la forma de una revista en el tradicional soporte del papel.
ciudady el territorio, no se constituyen exclusivamente por tener una nada despreciable potencia las fuerzas que nos impul-
Aunque exigua, la presencia de los ocho volúmenes de Block, con hechos, sino que estos forman una unidad inescindible con las san, la necesidad de contribuir a una mejor comprensión de lo
su nombre, sus colores diferentes y su clásico diseño en algunas
palabras que permiten incorporarlosa las representaciones del que nos pasa, nuestros deseos de cambio, puesto que, finalmente,
bibliotecas, constituye una ínfima y quizás irrelevante pero mundo y al diálogo social que constituye la cultura. Al procurar la meta de una nueva edición, y con ello la recuperación del diá-
explícita expresión de resistenciaa la volatilidad propuesta por
estudiar pues, como construcciones intelectuales individuales o
una abrumadoramente mayoritaria corriente de opinión de la
logo con los lectores logre alcanzarse, como nuevamente se puede
colectivas, algunas muy difundidas versiones o relatos sobre esos comprobar.
cultura contemporánea.
hechos intentamos también dejár en claro que los nuestros no Confiado en csas fuerzas reitero entonces mi saludo y agra-
Con su tinta negra indeleble impregnada en papel blanco, las son tampoco otra cosa que relatos que sc pretenden verosímiles, decimiento a todos quienes se interesan por nuestro trabajo y de
palabras escritas en ellos perseveran de un modo que las cons- distintas maneras lo han venido haciendo posible.
pero que sólo pueden basar-esa verosimilitud en la dura materia
tituye como una suerte de vigías de nuestra propia tozudez, de los datos, sabiendo que estos, inevitablemente se presentarán
de nuestra capacidad de mantener el rumbo que nos trazamos.
¡Hasta la próxima edición!
arropados por el aparentemente frágil embrujo de la retórica.
Podrá decirse que los cambios y la fluidez son lo opuesto a
Por otro lado y más allá de esa intención metodológica nos
la dictadura opresiva de las normas y las formas que se nos
intenta imponer desde el pasado, y que en esos cambios y esa AN pareció productivo dejar ver y tratar de hacer explícito un aspecto
del trabajo de investigación, consistente en el diálogo que cada
fluidez se manifiesta nuestra libertad. Nadie está en condiciones
mt: uno de nosotros establece con los textos que lo han precedido
Jorge Francisco l.iernur
de negar las extraordinarias aperturas que la reivindicación de
esa qucbradura ha supuesto para los seres humanos, como

una de las consecuencias más relevantes de la modernidad. Sin


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ocupándose de los propios objetos de estudio. Ese diálogo suele
ser silencioso y se produce naturalmente en el curso de los estu-
Director

OD dios. Creemos que ponerlo aquí en evidencia, aunque sea de


embargo, tampoco es posible negar, como lo dijimos en ia manera parcial, es productivo tanto por el esfuerzo de ordenarlo,
nuestras reflexiones sobre la belleza, la cara salvaje e inhumana

que supone la absoluta disolución de todas las formas y todos


END implícito en su expresión escrita, como por permitirnos estable-
los valores. Ms cer, también aquí, un plano de comunicación que incorpora a ese

¿2 diálogo las desconocidas voces de los probables lectores.


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La historia de la Arquitectura Modema se construyó paralela- el Warburg Institute que influyeron en autores de la siguiente

mente a su consolidación entre las décadas de 1920 y 1930. generación de la que forman parte Colin Rowe, Peter Collins,
Fueron los historiadores del arte alemanes, amparados en las teo- Alan Colquhoun, Reyner Banham, Joseph Rykwert y Kenneth
rías estéticas de fines del siglo XIX y principios del XX -producto Frampton. En conjunto, constituyeron un aporte renovador que
de la labor de Konrad Fiedler, August Schmarsow, Alois Ricgl, permitiría poner en juicio precisamente el carácter determinista
Wilhelm Worringer, Heinrich Wolfflin entre otros- quienes del Zeitgeist. Por otra parte, como ces sabido, en el ámbito italiano,
la llamada «Escuela de Venecia» capitalizaría un variado espec-
forjaron las bases para las interpretaciones que luego se transfor-
maron en canónicas. En ese contexto, Emil Kaufmann, Nikolaus tro de referentes provenientes tanto de la crítica de arte, la

Pevsner y Sigfried Giedion' construyeron, con diferencias, filosofía o el debate político, articulada en tornoa la figura de
distintos relatos convergentes, apoyados en gencalogías que vin- Manfredo Tafuri.
culaban diversos fragmentos del pasado con la producción de un A partir de este clima de debate, desde el punto de vista del tra-

presente que intuían cargado de esperanzas. Este relato anclaba bajo específicamente historiográfico, en la década de 1970 empc-
la Nueva Arquitectura como expresión del Zeitgeist cuya fuerza zaron a hacerse más notorias las investigaciones de carácter

estaba determinando las opciones técnicas, sociales, formales, y académico que revisaban la vigencia de la historia del Movimiento

espaciales. Entre las categorías histórico-estéticas que se crearon Moderno. A mediados de 1972, Juan Pablo Bonta publicó un
volumen enteramente dedicado a analizar el pabellón de Barce-
para esta Arquitectura -Modern Architecture, 1nternational Style,
Architettura Funzionale, Nouvelle Architecture- fue la acuñada lona de Mies van der Rohe. Su estudio se centraba en las diferentes

por Pevnser en 1936, «Movimiento Moderno», la que alcanzó


lecturas que del edificio había hecho la historiografía a lo largo

mayor fortuna historiográfica. 'lras la segunda posguerra las his-


del tiempo y de cómo, más allá de ciertos parámetros que podían
torias construidas por arquitectos que intentaban afianzar o objetivarse, se había construido una imagen canónica que sumaba
clarificar los alcances y contenidos de la nueva arquitectura y condensaba diversas interpretaciones.? Una lectura en clave
-Bruno Zevi, I.conardo Benévolo y Henry-Russell Iitchcock, semiótica servía aquí como instrumento capaz de ordenar los

por distinguir sólo las contribuciones más exitosas- sin des- diferentes discursos. De ellos, según Bonta, surgía la construcción
montar el dispositivo del Movimiento Moderno avanzaron en la de un canon, un relato que a lo largo de varios decenios fue

organización de un modelo que resaltaba una mirada homogénea, sintetizándose en una serie de tópicos avalados por la crítica,

pero que necesariamente seslayaba problemas centrales de la construyendo un mito alrededor del edificio de Mies.
producción arquitectónica contemporánea. El esquema de Bonta fue retomado por María Luisa Scalvini y
Fue entonces cuando, desde Inglaterrae Italia, se consolidaron María Grazia Sandri* quienes lo aplicaron a los discursos más
sendos focos de producción historiográfica cuyos aportes fueron generales acerca de la historia del Movimiento Moderno desde sus
desmantelando anteriores construcciones. En paralelo a la crisis primeras formulaciones para constatar la existencia de un relato
del paradigma de la Arquitectura Moderna, tal como se venía que, en líneas generales, se correspondía con el análisis de Bonta
practicando desde antes de la II Guerra, desde fines de la década para el Pabellón. El examen de Scalvini y Sandri, encontraba un
de 1950 en adelante, las practicas «heterodoxas» estuvieron patrón común que se iniciaba con la descripción de la situación
acompañadas por una sensibilidad histórica que ponía en cuestión crítica de la arquitectura del siglo XIX, para descubrir cómo,
esta tradición ya consolidada, cuyos interpretes pretendían ho- gracias a algunos clartvidentes pioneros, se comenzaron a diagnos-
mogénca. En este sentido las nuevas investigaciones ce interpreta- ticar las razones del mal y del desorden. Posteriormente, la
ciones trabajaron sobre las grietas del relato para comenzar a antorcha de la verdad que tanto había costado mantener a los
derruirlo. La forzada emigración a Inglaterra de algunos historia- iniciadores, era levantada por la actividad triunfal de un grupo de
dores del arte alemanes confluyó en la creación de ámbitos como héroes que consolidarían la formulación de una arquitectura

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La importancia de los antiguos monumentos ydesus

arqueológicos creció especialmente en la segundamitaddel


siglo X1X. Hasta ese momento la principal fuente de conocimiento
de la antigiiedad no clásica había sido la Biblia, pero después
del desenterramiento de los palacios de los reyes Asirios en 1840
de británicos y franceses, los estudios de estasciviliza-
En una de las más influyentes biografías de Ludwig Mies van der por parte
En dirección opuesta a esta afirmación, en las líneas que siguen
ciones crecieron en ambos países. Con la creación de su propio
Rohe, Franz Schulze reproduce el famoso fotomontaje del trataré de mostrar que la interpretación de Bonatz/Schmitthenner
Weissenhof Siedlung de Stuttgart en el que en vez de la solitaria Imperio, Alemania puso en marcha una política expansiva en Weissenhof Siedlung de Stuttgart, transformada en
era correcta, esto es que la referencia a las construcciones medio
su alianza con el Imperio
esas regiones y para cello consolidó
un pueblo árabe (foromontaje) 1934.
pareja que mira hacia la cámara en la tarjeta postal original, el orientales -mediterráneas pero originarias del norte de África-
Otomano. Con el apoyo de las políticas gubernamentales, sc
conjunto está habitado por gente de piel oscura vestida con las constituyó una de las componentes de la arquitectura moderna destinadas a organizar
crearon nuevas instituciones y estructuras
típicas dishdashas medio orientales, con sus cabezas cubiertas por según su formulación en el ámbito de la Europa germano par- 1899 la Deutsche
este nuevo campo de conocimiento. Desde
turbantes, capuchas o keffiyebs y agals. Para que no queden lante. Va de suyo que no pretendo negar otras razones
que dicron Orient Gesellchaft (Sociedad Oriental Alemana) comenzó sus
dudas acerca del sitio en el que los autores del fotomontaje sugic-
origen a esa arquitectura. Mi propósito en cambio es mostrar que trabajos en Babilonia, y después de 1903 se avanzó con excava-
ren que debería hallarse la construcción, un camello atraviesa el el caso constituye una prucba más del modo en que los procesos «construido "á la mauresque", casas de una sola planta sin venta-
ciones que remontaron el Tigris hacia Asia.
primer plano, contemplado por dos leones desde uno de los cruzados de fertilización constituyen la base dinámica de la cons-
Suzanne Marchand observó que «mientras los orientalistas nas, que parecen más bien un cementerio que
habitaciones». Del
patios de las viviendas. En la didascalia correspondiente Schulzc trucción de la arquitectura moderna, como lo son en general mismo modo Lamartinc consideraba que en Beirut «las casas de
ingleses, franceses y holandeses del (siglo X1x) hicieron del
nos informa que se trata de un pseudo «Pucblo árabe, una foto- de la creatividad humana, acelerada con la expansión del capita- la ciudad se elevaban agrupadas de un modo confuso, y los techos
Oriente su carrera yendo allá como oficiales o viajeros, los orien-
grafía anónima falscada del proyecto del Weissenhof Siedlung. lismo en todo el planeta. Sólo la hegemonía de una visión provin-
talistas alemanes de ese período hicieron del Oriente una carrera de las unas servían de terrazas a las otras»! Con la expansión del
1934».' Schulz agrega en el texto que dos de los más reconocidos ciana de la historia (autocentrada en el atlántico norte) explica
transformándose en académicos (...) es a partir del estudio del turismo, Jerusalén, una paradigmática ciudad medio oriental se
líderes de la cultura arquitectónica en Stuttgart -Paul Bonatz y
que se haya ignorado hasta ahora el inevitable entretejido global tornó accesible a un público curopeo cada vez. más amplio.
Paul Schmitthenner- consideraban a esta nueva arquitectura
antiguo Oriente como Alemania adquirió su fama orientalista».'
de los procesos de modernización.
Los estudios de la «Persia de Zoroastro, las esotéricas profun- Respecto de clla Léon Dhéralde escribía en 1881 que sus casas
como «un montón de cubos chatos, apilados formando terrazas
didades de la Antigua India, y las primitivas innovaciones de «están cerradas hacia la calle y no reciben el día sino a través de
horizontales (...) a la manera de un suburbio de Jerusalén». El
Asirios y Sumerios»> dieron lugar a un poderoso ataque del estrechas e infrecuentes aberturas enrejadas, o a través de patios
autor entiende que esta identificación era inapropiada y un ataque 1. «Nada más que una horrible masa de casas interiores; la mayoría tienen terrazas en piedra o en baldosas
conocimiento tradicional de la Antiguedad basado en los textos
a Mies quien, en cambio, sólo habría estado intentando reducir construidas con tierra» cerámicas». Por otra parte, habiendo sido parte del mundo islá-
los edificios a «masas cúbicas (...) como un modo de purificar la
griegos y bíblicos. Y fue principalmente en la Mitteleuropa donde
los resultados de ese impacto fueron mas contundentes. mico y/o del Imperio Otomano durante varios siglos, los habi-
forma arquitectónica». Para Schulze esa búsqueda de Mics estaba Desde el tratado de Kuchuck-Kainarji en 1774 las principales tantes de las principales regiones europeas de la cuenca del
basada en profundas razones filosóficas, técnicas y económicas, potencias occidentales comenzaron su expansión en los territo- Sin embargo, a pesar del creciente interés en las culturas y la Mediterráneo -sur de Italia, España, Portugal, Grecia, Dalmacia-
y nada tenía que ver con tópicos extra curopeos, tal como lo rios hasta entonces controlados por el Imperio Otomano. considerados como
historia de esas regiones, y a pesar asimismo del reconocimiento y en particular sus «sectores bajos», no eran
insinuaba la fotografía anónima. Con esa expansión los curopcos intensificaron su interés en los Refiriéndose a los partici-
de los valores y las implicancias de los monumentos artísticos y parte de la «civilización occidental».
Esta interpretación es un lugar común en la historiografía
magníficos monumentos de las grandes civilizaciones, y en el arquitectónicos orientales; a principios del siglo X1x la mentalidad pantes de una celebración en la basílica y plaza
de San Pedro en
de la arquitectura moderna. Conviene observar que a pesar de
pasado de csos territorios. Por supuesto que desde la publicación occidental no estaba en condiciones de atribuir valores estéticos a Roma, Stendhal escribió que los campesinos llegaban «acompaña-
sus obvias diferencias políticas, Schulze y Bonatz/Schmitthenner de la Historia del Arte Antiguo entre los Griegos de Johann dos por sus familias, no menos salvajes que ellos mismos».'*
las cúbicas y austeras casas que habitaban los contemporáneos en
coinciden en considerar que la identificación del Weissenhof Joachim Winckelmann diez años antes, los arquitectos y arqucó- esas mismas regiones. Por el contrano, esas construcciones eran Y características similares se describen en los relatos de viaje de
Siedlung con un pueblo árabe implicaría una suerte de logos habían avanzado en el estudio de la Grecia clásica. Pero fue consideradas como lamentables productos de la barbaric y el John Eustace" o de "Thomas Roscoe para quien en los pueblos
descalificación de su autor. a partir de la invasión napoleónica a Egipto cuando una «nueva la suciedad» y en sus casas «no cs
atraso cultural. que rodean Salamanca «abunda
Mas en general, es a partir de la suposición de una presunta
Antigedad» emergió como campo de estudios en los más avanza- En el primer informe acerca de la recientemente «descubierta» posible entrar sin disgusto»;? o de Hans Gadow quien pinta al
pureza de sus fundamentos europeos (0 a lo sumo curo norte- dos círculos académicos europeos. De acuerdo con Bruce Trigger villorrio de Llanaves «incomparable en su miseria, escualor y
ciudad de 'Iimbuctú, el francés René Caillié escribió en 1830:
americanos) que aún en nuestros días se ha seguido sosteniendo podemos decir que elos logros de las antiguas civilizaciones del «Mec había hecho una idea totalmente diferente de la grandeza y tristeza». Para la mayoría de estos observadores la existencia de
que «la arquitectura del movimiento moderno -esto es la arqui- Cercano Oriente fueron apropiados por la Europa occidental la riqueza de 'Timbuctú. La ciudad presentaba, a primera vista, esc lamentable panorama en territorio curopeo se debía a la
tectura de la Bauhaus, o la de los grandes maestros del raciona-
argumentando que eran los europeos occidentales, más que los nada más que una horrible masa de casas construidas con tierra».$ «perniciosa» y larga influencia árabe en esas regiones. David
lismo de los años veinte es una arquitectura abstracta, inter- pueblos que vivían en el Cercano Oriente los verdaderos herede- La literatura de viajeros del siglo XIX está atravesada por nume- Roberts opinaba que «ciudades esplendidas, en una época habita-
nacional (...). (Por el contrario) la ""mediterrancidad" es una actitud ros espirituales de aquellas civilizaciones. 1.0s arqueólogos
rosas muestras de este rechazo inicial. En 1853 Chanony descri- das por una población trabajadora y embellecidas con templos
hacia la arquitectura que nació como reacción a ese hecho».? británicos sostuvieron incluso que Gran Bretaña estaba colocada ahora estaban desiertas y
bía al pueblo de Fondouk (Khemis el Khechna) en Orán como y edificios, maravillas del mundo,

10 11
a
1837.
ti Eugene Delacroix, Fanáticos de Tánger,
das

Kees van Dongen, "Tánger, 1911.


laa

ic

cel o del reino de los sentimientos enoposiciónal


Timbuctú, dibujado por René Caillié en 1830. en lo primitivo,
"com naturaleza contra la artificiosidad, de
at dominio de la razón, de la
contra de la vulgaridad de la
la nobleza de la «cultura» en
DI"
«civilización».
desarrollada por Edward Said ha
La idea del «Orientalismo»
una gran masa de
sido excepcionalmente productiva e impulsó

ET
Desde el punto de vista que estamos
estudios sobre estos tópicos.
de Said abarca
considerando el concepto de «Orientalismo»
de Todorov. La mirada román-
ambas variantes de los paradigmas
tica es parte de la aproximación
de Homero.Viajeros, artistas,
políticos, antropólogos, arqueólogos, historiadores, filólogos
el «oriente» directa-
masas de gente común visitaban
y crecientes
Y de este contacto emergieron

PERIT
mente o con su imaginación.
se construyeron nuevas representaciones,
nuevas aproximaciones,

E y nuevos
valores se pusieron en circulación.
las expc-
Típica manifestación de los cambios producidos por
Delacroix luego de
riencias in situ es la famosa frase de Eugene
como Arabia y África reproducía un topos exótico»." Según
solitarias, o reducidas por el maltrato y la barbaric del credo con Marruecos (5-7-1832). Dirigiéndose
sus primeros encuentros
Musulmán».'": Z. Duckett Ferriman «el griego es racial y geográficamente
a sus connacionales
el pintor exclamó: «¡Y bien! Ustedes luchan y
Ernest Renan escribió en relación con Sicilia: «es más bien Europeo, pero no es Occidemal [sic] (...). El griego es Oriental ridículos que son!
de cien diferentes maneras, pero su Orientalismo no es asiático. conspiran, pero ¡que extraordinariamente
África (...). Atravesando los pueblos del extremo occidental, hacia cosa son la pacien-

El es un puente entre el estey el oeste»." Por supuesto, la Vayan al Magrebh (Barbarie) y aprendan que

PUED
Alkamo, uno tiene incluso la impresión de encontrarse en los villorrios o
cia y la filosofía». Con relación a nuestro tema,
Barbaria (Mahgreb)».' apreciación de las bajas calidades de su modo de vida no era dife- ciudades medio orientales fueron representados como
fondo en
rente de las opiniones que ya hemos visto sobre Españao ltalia.
En las primeras descripciones del Egipto moderno Edward la segunda versión de «El sultán de
sus pinturas épicas como
William Lane sostenía que elas casas de los sectores bajos, parti- Alexandre Danjean declaraba que en Agrigento (de origen de Tánger» (1838). Algunas
Marruecos y su corte» o «Fanáticos
cularmente los de los campesinos, en su mayoría están construr- griego) «el pueblo bajo, tan mendicante como el de Catania y urbanas de esos pueblos llega-
veces las blancas configuraciones
dos con ladrillos, con ladrillos crudos, unidos mediante barro. toda Sicilia, presenta todavía un grado mayor de descuido los
CE ron a los espectadores curopcos
con la baja intensidad de

Algunos son meros agujeros (...). En muchos pueblos, como y de miseria».?


fondos de pinturas de paisaje como en «Beirut» (c. 1861)
grandes palomares, de una forma cuadrada aunque con sus muros
ligeramente inclinados hacia adentro (como muchos de los
antiguos edificios Egipcios), o con la forma de un terrón de azú-
car, están construidos sobre los techos de otras casas, con

crudos, cerámica y barro».'


ladrillos
2. «Nadie resulta inmune a un paseo bajo
las palmeras»*
EN de Edward Lear, en «Tánger: la Ciudad Blanca» (1893) de John
Lavery, o en «Vista de Fez» de Asouau
uno de los centros más atractivos para
Mammeri. Jerusalén era
los visitantes occidentales,

y el viaje a Tierra Santa era uno de los itinerarios más


de nacientes compañías de turismo como la de Thomas
exitosos
Cook. En
"Teniendo en cuenta los esfuerzos que al mismo tiempo se La despectiva actitud en relación con las construcciones vernácu-
el apartado anterior hemos mencionado apreciaciones negativas,
estaban haciendo para construir una fundación común de la idea las en algunos territorios del sud de Europay el norte de África
pero munidos del filtro
romántico los ciudadanos de Londres,
se apoyaba en claras divisiones entre baja y alta cultura, y en la nobleza de
de Europa en la antigua Grecia era probablemente mucho más París o Berlín podían también apreciar la belleza y
problemático aun hacerse cargo del pobre y de algún modo
«extraño» pueblo que habitaba la Grecia contemporánea. Al
lo que Tzvetan Todorov llamó el paradigma de Heródoto." Para
"Todorov se adopta este paradigma cuando se considera a los
Ms esas austeras escenas urbanas gracias
a la particular interpretación

mt «Belén desde el Norte» (1892),


propuesta por trabajos como
comienzo del siglo XIX los viajeros contaban con las dos principa- «otros» como «bárbaros» o inferiores, como aquellos que con-
ARO «Nazaret» o «La cúpula de la roca, Jerusalén, duranteel
les representaciones de Grecia, la de la antiguedad o la de una centran los trazos opuestos a las virtudes que nos definen a
Ramadam» (1854-5) de William Holman Hunt; o en «Jerusalén
moderna provincia turca propuestas por Chateaubriand, quien
había escrito: «en vano, en Grecia, uno intenta librarse a las 1lu-
«nosotros». "Todorov ha mostrado que hay otra manera de ver a

los «otros», lo que el llama el paradigma de Homero. En este


Atar vista desde el Monte Scopus» (1925) de David Bomberg.
Los
claras
«Una calle de "1-Aghouar» (1853) y
«Pueblo de Argelia» (1853)

de Eugene Fromentin, o incluso, ya a comienzos


del siglo xx, en
AB techos planos, las terrazas, la ausencia de simetría axial, las del Sultán»
siones: la triste verdad se mantiene. Cubículos de barro seco, caso consideramos a los «otros» como el espejo invertido de «Asuán, madrugada» y «La calle de los guardias
volumetrías, la prescindencia de agregados decorativos, parecen la luminosa calidad de
(1923) de Albert Marquet. Pero además,

AMI
más apropiados para servir de abrigo a los animales que a nosotros mismos pero en relación a nuestros vicios. En el para-
haber ido crecientemente atrayendo a los observadores occidenta- también
los hombres»."" digma de Homero nuestra negatividad se transforma en las los espacios y la textura de la arquitectura se exponía
les, y estas características se presentan en «La casbah de Argelia» el objeto central de la pintura en
Para Henry Belle, primer secretario de la Embajada de Francia bondades de los que observamos. en los primeros planos como
(1874) de Alphonse Asselberg, «La Seguia en Briska» (1885) son los casos de «Una
calle de
en el Reino de Grecia entre 1862 y 1863, los campesinos griegos Durante el siglo XIX el segundo paradigma estaba representado de Gustave Gillaumet, en numerosas oportunidades, como
ai y «Lagghouat, Sahara argelino» (1879)
de la autenticidad
«se asemejaban a tribus Beduinas». Belle consideraba que «Grecia por la mirada romántica, por la búsqueda 1
"e
0d, 13
12
Paul Klee, Motivo en Amman.

Auguste Salzmann, Belén, 1854.

A los visitantes les impresionaba la unidad entre los paisajes


construida en esta arena desierta contorneada por muros y torres
casas». urbanos y naturales. Por ejemplo, en su reporte sobre Fez en
y calles y ,
1887 Ludwig Pietsch escribía que «especialmente duranic un
Para Luisa Villa, Wilfrid Blunt idealizaba «a los Árabes (a las
bello díasinlluvia y con un cielo de profundo azul y enérgica luz
tribus Beduinas, pero también a los guerreros Mahdistas) como
caballeresca amenazada por el del sol, en los que el mar (...) brilla (...) como una delicada y
representantes de una tradición
moderni- azulada seda turca, esas blancas superficies de los muros exterio-
invasor "progreso"» y frente al Egipto real que buscaba
zarse reivindicaba al que juzgaba esencial,
«de ningún modo un res de las casas dan un inimaginable fondo para las figuras colo-

readas que erguidas o en cuclillas se recortan contra ellos».>


lugar pintoresco de indulgencia sexual, pereza, crueldad, despo-
tismo y perpetua inmadurez. política, ni un repositorio eterno
de antiguos saberes, sino un sitio de austero saber y simplicidad,
donde las opiniones se debatían y donde, por fuera de tradicio- 3. La adopción del techo plano en la

nales implicancias religiosas, nuevas y progresistas políticas Europa germanoparlante


podían ser creadas con independencia de la tutela curopea, britá-
nica o de cualquier otra parte». Una de las características constitucionales de la arquitectura occi-

Por las razones que describimos más arriba, la aproximación dental ha sido la relación entre teorías y precedentes construidos
como forma de verificación. En este sentido hasta las primeras
simpática al mundo Árabe fue muy importante en la Alemania
Guillermina, y muchas instituciones destinadas a estos tópicos se décadas del siglo XIX el aparato tradicional de los arquitectos no
estuvo preparado para legitimar o incluso para «ver» los ejemplos
crearon allí durante el siglo X1X. La revista «La Antigúedad

Oriental» se publicaba desde 1820; en 1845 sc fundó la «Sociedad a los que aquí nos estamos refiriendo. Para la institución de la

Alemana Oriental», en 1887 la «Sociedad Oriental» de Berlín, y Arquitectura los modestos asentamientos de los campesinos
en 19% la «Sociedad del Cercano Oriente» en la misma ciudad. medio orientales comenzaron a adquirir una cierta visibilidad
Dos años más tarde Guillermo 1I* viajó a través del Imperio conceptual con la emergencia de los ideales románticos.
Otomano invitado por el sultán Abdilhamid II". «Su nueva polí- El libro de Herder /deas de Filosofía de la Historia de la
tica (Neuer Kurs) parecía responder a las intenciones de quienes Humanidad puede ser considerado como la primera Justificación
Argelia» (1875) de Jean Seignemartin, el Interior de un patio Había muchas razonas para romantizar la aproximación a esta ambicionaban hacer de Asia Menor la "India de los Alemanes". de la dignidad teórica de las producciones vernáculas, una justi-
Marroquí» (1860) de Alfred Dehodencga, y seguiría presente más cultura. Refiriéndose a los árabes Wilfred Scawen Blunt se
(...) Desde el comienzo del siglo X1X éstos se habían poco a poco ficación que, como es sabido, se sintetiza en el concepto de
tarde en «El muro blanco» de Jacques Majorelle (1930). Por
indignaba por «el contraste entre su noble vida pastoral de un apropiado del Oriente en el plano intelectual. Los nuevos medios «espíritu del pueblo». Veremos más adelante que, a la zaga de
supuesto que hacia el cambio de siglo, bajo las condiciones filosó- lado, con sus tropillas de camellos y caballos (...),y (...) la inno- de difusión como la prensa ilustrada y la fotografía habían Goethe, en el caso de la arquitectura pueden encontrarse trazas
ficas, económicas y estéticas que estaban determinando la emer- ble escualidez de los colonos franceses, con sus cantinas
y sus contribuido a vulgarizar el Oriente que, desde los años 1900, se románticas en el trabajo temprano de Schinkel. Pero fue John
gencia del cubismo, estas conformaciones arquitectónicas y cerdos». Blunt «los respetaba [a los árabes] como iguales, como transformaría en una verdadera moda».? Ruskin quien contribuyó con sus escritos a que las ideas a que
urbanas fueron más conscientemente observadas hacemos referencia alcanzaron una forma sistemática en esta
por muchos pares aristocráticos, como "caballeros del desierto"».3 Es verdad que muchos viajeros alemanes también se quejaban
artistas como modelos, precedentes u objetos preferenciales Desde la aproximación romántica las realidades árabes eran de la «suciedad» y el «desorden» que no parecían cuajar con disciplina. En efecto, fue en su Poética de la Arquitectura,
de representación. Esta fue la aproximación a nuestro tópico de observadas con perplejidad y de maneras contradictorias. de 1830, donde las habitaciones de los «sectores bajos» de la
una idílica imagen del «oriente». Pero había otras voces. Luego

pintores como Kees van Dongen, Marquet, Kandinsky, Macke 'Thackeray se entusiasmaba con las múltiples dimensiones de de su viaje a la región el conde Adalbert Sternberg escribía: sociedad comenzaron a ser tenidas en cuenta para la construcción
y Klee, como veremos más adelante. El Cairo, donde «los pintores pueden hacer una fortuna (...). «los salvajes no son los Árabes sino nosotros. Me pregunto en- de las ideas estéticas. En ese texto Ruskin definió al cottage
Pero no sólo a través de los pintores estas imágenes fucron Nunca vi tal variedad de arquitectura en mi vida, pintoresquismo, italiano con los rasgos de la «simplicidad de forma», y la
tonces: ¿quiénes son los bárbaros? Aquellos que construyen un
haciéndose frecuentes para el público europeo. incontables tarje- colores brillantes, luz y sombra»? Y en relación con Jerusalén, modo de vida urbano donde no hay ni policía ni servicios secretos «claridad», pero identificando a estos rasgos como parte del
tas postales, daguerrotipos y álbumes de fotografías registraban,
pese a referirse también a sus aspectos sórdidos Edward Lear o aquellos que en cada esquina cuentan con un agente del orden carácter decadente típico de Italia, un país de «desolación»,
reproducían y distribuían ampliamente las características de destacaba asimismo que el exterior de la ciudad estaba «lleno de porque de lo contrario se mataría o robaría abiertamente a la «glorioso en su muerte». A pesar de los valores estéticos
estas construcciones vernáculas medio-orientales, Para mencionar melancólica gloria y exquisita belleza». gente en las calles? Pregunto: ¿quiénes son los bárbaros?, ¿aque- que encontraba en el cottage italiano, Ruskin entendía que
sólo unos pocos ejemplos puede recordarse cl álbum fotográfico
Según Charles M. Doughtly se vivía en «espaciosas casas llos que dejan sus mercaderías sin protección y sin que por ello esas construcciones estaban determinadas por la «decadencia»,

de Jerusalén (1864) preparado por el sargento James Macdonald hechas de arcilla, en su mayoría con un piso superior; las venta- falte nada, o aquellos que blindan sus comercios con rejas, que «indolencia» y «abyecta pobreza» del pueblo italiano.*
siguiendo la Ordonance Survey establecida por las autoridades de nas eran celosías abiertas para el pasaje de la luzy el aire, los tienen que dotarse de timbres, iluminación eléctrica y cuidadores Fueron necesarias otras grandes contribuciones intelectuales
la ocupación Británica de Palestina, o el trabajo de fotógrafos
pisos de tierra apisonada, las rudas puertas de madera de palma, nocturnos para protegerse? (...) Y yo pregunto: ¿quiénes son los para entender que esas construcciones podían además ser con-
como Louis le Clereq en Trípoli (1859), Auguste Salzmann como en todos los oasis», y al llegar a Boreyda al atardecer bárbaros? ¿aquellos que tienen que mandara sus hijos a la escuela sideradas como fuentes de inspiración para los arquitectos
en Jerusalén y Belén (1854), Henri Duveyer o James Robertson
luego de atravesar las dunas del Nefud reconocía encontrarse bajo amenaza de represalias, o esos árabes que en cada pueblo modernos. La primera de ellas provino del concepto de
entre muchísimos otros. ante «¡un espectáculo de sueños! -una gran ciudad de arcilla mantienen a su propio costo sus escuelas y sus maestros?».* «tipología» elaborado por Goufried Semper, para quien los tipos
¿
14 15
Joseph Hofmann, bocetos de Capri, 18%.

eran «formas primitivas, prescriptas por necesidad, pero modi- del siglo XIX, -que se expresaría en libros como Degeneración de la que se empleó
La primera construcción modernista en
ficadas luego de los primeros materiales que se usaron para Max Nordau o después de la primera guerra mundial en el Volve-
el techo plano fue la casa Scheu de Adolf Loos en Viena.
corporizarlas»." La introducción del concepto semperiano de exitoso La decadencia de Occidente de Oswald Spengler- lo que<
remosa este tópico pero permítasenos recordar que cuando
«tipo» al debate arquitectónico es importante para el desarrollo
de nuestro argumento porque en él está implícita la noción de
abrió las puertas a la búsqueda de nuevas fuerzas en el mundo
de los «primitivos», tópicos extensamente estudiados desde dis-
NEens esa casa estuvo
terminada en 1912 «los paseantes de fin de semana
reaccionaron con alergia protestando porque parecía una casa
repetición de la forma, una noción que iba a adquirir un rol tintas ópticas por los historiadores del arte pero escasamente con-
argelina».
central en los debates acerca de la moderna «reproductibilidad».
Para Semper «como (sucede en la naturaleza), (...) la arquitectura
también tiene ciertas formas normales en su base»,* y estas for-
siderados en la historiografía de la arquitectura moderna.
Como producto de estas muchas y variadas transformaciones,
a finales del siglo XIX las construcciones vernáculas de origen
I Loos reconocía esta afinidad pero negaba cualquier referencia
de esa casa en relación con Argelia. Sin embargo, el hecho es

que él efectivamente
había visitado tanto ese país como Marruecos
mas permiten «variaciones infinitas, condicionadas por pro-

pósitos singulares». medio-oriental comenzaron a ser tomadas en consideración por AIDAOSCONMMNAMIRID<:I Óni
los arquitectos que buscaban una renovación de la disciplina.
en marzo de 1910, durante
la construcción de su famoso edificio

de la Michaelerplatz. Fue en el villorrio de Ain Snara donde


La idea semperiana de repetición de las formas implicaba la Así, en sus cartas desde Roma a su amigo Josef Hofmann, Josef luego de haberlos buscado en muchos otros sitios, encontró
posibilidad de considerar la arquitectura doméstica popular Olbrich decía no estar atraido por los «estilos eruditos» que finalmente los mármoles que quería para aquel edificio. Pero el
y anónima como una suerte de productos «naturales» de las encontraba en la ciudad, mientras que por el contrario, reconocía
* impacto del lugar en él fue tan importante que volvió a visitarlo
«necesidades» humanas, siempre vigentes a lo largo del tiempo. su fascinación por las simples y estercométricas construcciones
en diciembre del mismo año en viaje privado
de vacaciones
Esas ideas dieron un fuerte soporte al rescate de aquella arquitec- de Capri, «donde pueden encontrarse los primeros trazos de una con su esposa. Más aún, para Loos «desde hace cuatro siglos,
la
tura anónima de los espacios de «muerte» y «decadencia» donde espontánea arquitectura oriental». Y en efecto, más adelante > cubierta plana era el ensueño de los artistas de la construcción»,
los había localizado Ruskin. Sin embargo, él mismo no abordó los continuó su viaje hacia esa «arquitectura oriental» visitando el sólo que hasta el siglo XXX no se había descubierto una técnica
asentamientos que estamos considerando aquí.
Si bien tampoco en ese caso se aludiera directamente a nuestro
norte de África antes de su regreso a Viena.

El camino de Olbrich hacia una «arquitectura oriental espon-


AUDE que permitiera el uso
desde hace siglos»"
de «las terrazas (que) se utilizan en Oriente
en climas húmedos.

tema, el interés por las formas puras, simples y cristalinas no tánea» fue transitado sólo un año más tarde por otro vencedor de La arquitectura medio-oriental continuó atrayéndolo a lo

la Beca Roma, su amigo Josef Hof man. Nuevamente, no fueron SO


puede dejarse de lado a la hora de comprender los desplazamien- el
largo de toda su vida. Visitó la región en otras oportunidadesy
tos teóricos que fueron haciendo posible y necesaria la observa- los edificios renacentistas o los barrocos los que fascinaron al
impacto de los edificios que vio puede comprobarse en otros
ción y valoración de los ejemplos que estamos considerando. Joven arquitecto, sino las construcciones campesinas, y especial- aspectos de su trabajo, como en la casa Múller, donde según estu-
Desde Adolf Hildebrand a Wilhelm Worringer pasando por mente las que a la saga de Ollbrich encontró en Capri y en dios recientes habría aplicado el sistema de distribución espacial
Adolf Rig], la valoración de las conformaciones «cristalinas» o Anacapri.* en «Raumplan» frecuente en las casas islámicas de El Cairo.

cúbicas fue en aumento en el ámbito germano parlante. Por Ha sido observado que la admiración de Olbrich y Hoffman eno
otra parte sabemos muy bien que este interés no sólo provenía por este tipo de construcciones tenía su antecedente en el des- Como consecuencia del mismo contexto cultural vienés Bernard
desde este ámbito, como lo demuestran los estudios sobre la cubrimiento que de ellas había hecho Friedrich Schinkel durante o
Rudofsky decidió enfocar su disertación en los sistemas ver-
llamada «arquitectura del ¡luminismo». su viaje a ltalia en 1803. El antecedente es importante, pero la náculos de construcción en la isla de Santorini, iniciando de este
Abiertas las posibilidades teóricas de valoración de una actitud anti romana de ambos discípulos de Otto Wagner no era modo el hilo de Ariadna que guiaría su investigación hasta lo
arquitectura de simples masas cúbicas, aun hacía falta fundar la extraña en la Viena finisecular. Suzanne Marchand" estudió lo
que décadas más tarde consutúiría Arquitectura sin arquitectos,
legitimidad estética de las producciones populares o, más que llamó el «ataque a Roma» desde los países germano parlantes] una de las más influyentes propuestas generadas en el siglo XxX.

todavía, de las producciones populares extra couropeas implicando con ello un ataque a la hegemonía cultural de Francia £ Rudofsky estudió en la Escuela Técnica de Altos Estudios de
«no civilizadas». Para que estas pudieran constituirse en modelos en Furopa. Esta actitud era frecuente en quienes contrastaban la Viena en la década de 1920 bajo la influencia de Joseph Frank,
de referencia fue decisiva la ruptura de la centralidad y univoci- debilidad y degeneración del Imperio Romano tardío con la Oscar Strand, Oscar Wlach y Walter Sobotka. Strand había
dad del sistema clásico naturalista occidental y el reconocimiento primitiva energía de las tribus germánicas, y la imperturbable viajado a Italia antes de su graduación en 1906, y allí preparó su
de aproximaciones diferentes pero de no menos consistencia estabilidad de Oriente. disertación sobre «El principio de la decoración en el arte cris-
cultural, un reconocimiento para el que los estudios de Wólfflin o Aunque es obvio, cabe agregar que la multiétnica composición tiano primitivo», bajo la dirección de Karl Kónig. También Wlach
de los mismos autores recién citados tuvieron una fundamental del Imperio Austro-Húngaro y su particular colocación entre había viajado a ltalia en 1905 para preparar su disertación sobre
importancia. Oriente y Occidente contribuyeron a consolidar este punto el primer período del Renacimiento. Las propuestas de Frank, el Instituto de Historia del arte de Viena. Para María Welzig,
Sin embargo esto no era suficiente para, además, admitir la de vista. Como parte de este contexto cultural en 1902 emergió la y más tarde de Rudofsky «derivaban en gran medida del creciente «Rudofsky y Rainer mantuvieron un interés en la arquitectura
posibilidad y la necesidad de apropiarse o si se quiere de adoptar figura de Josef Strzygowski con su libro Roma u Oriente. interés en la filosofía, el arte, los estilos de vida y las culturas anónima, los estilos de vida y de habitacióny la cultura urbana
unos ejemplos que, como vimos, habían sido hasta entonces Hasta su muerte en 1943 Strzygowski <hizo sin cesar campaña a domésticas del Este». Como puede documentarse en el caso de del mediano y lejano Oriente» hacia donde viajaron desde 1925.
considerados en la mayoría de los casos como ejemplos de barba- favor de la apreciación y las intrínsecas bellezas de las formas Frank, detrás de su interés se encontraba la educación sobre los Desde 1929 Rudofsky pasó un largo tiempo en Santorini,
rie, pobreza o decadencia. Fue la sensación de «decadencia» populares y del Cercano Oriente», y ejerció una gran influencia estudios Orientales y Asiáticos en la Escuela de Historia del arte una isla que había sido parte del imperio Otomano durante más

de la civilización occidental, creciente a partir de los años ochenta en los historiadores, artistas y arquitectos austríacos.* de Viena, especialmente bajo la dirección de Josef Strzygowski en de dos siglos desde 1579 hasta su incorporación al Reino de
-

17
Grecia en 1821. En 1932 Rudofsky viajó a Capri, Nápoles, vernáculas de medio oriente alcanzó su mayor intensidad. Es Meno quien impulsó su construcción como una buena oportu-
Procida, Positano y finalmente a Milán. necesario recordar que el interés por la «nueva Antiguedad» nidad de recrear las imágenes que él había coleccionado durante
estuvo fuertemente determinado por la búsqueda de modelos
sus viajes al norte
de África.
La relación de Le Corbusier con el Oriente vernacular ya ha sido alternativos en relación con las reglas y la hegemonía cultural Lawericks, Oud y más tarde Mies van der Rohe eran a su vez
profusamente tratada por numerosos estudiosos. La profesora generadas en ámbito latino y particularmente en Francia a partir círculo reunido en tomoa la figura del gran industrial
parte del
Zeynep Celik sostiene por ejemplo que «ya en sus escritos de 1915 del siglo XVII. Ese interés fue estimulado por los numerosos alemán Karl Ernst Osthaus, un destacado miembro del Deutscher
aparecen referencias a la arquitectura y las formas urbanas islá- contactos directos de los arquitectos de Alemaniay el norte de Werkbund y uno de los más sofisticados protagonistas de la cul-
micas (...). Varias de sus casas tempranas, como la Jeanneret-Perret Europa con los monumentos de Egipto y la Mesopotamia. El clá- tura moderna Alemana.
En 1910 Osthaus planeaba construir una

(1912), la Favre-Jacot (1912) y la Schwob (1916) están inspiradas sico libro de Wolfgang Pehnt* sobre la arquitectura del expre- «Colonia de Artistas» en Hohenhagen, en relación con la cual
en las casas otomanas».* La mencionada en último término es sionismo es muy rico en mencionesa las obras de Hans Poelzig, recordaba: «¡Cuánto puede aprender Europa al respecto del
1

un muy conocido ejemplo, identificado usualmente por los habi- Walter Gropius, Hugo Háring, Otto Kohtz y Hermann Billing, Oriente Islámico!», y agregaba «no recuerdo haber tenido una
tantes de La Chaux de Fonds precisamente como «villa Turca». entre otros, inspiradas en los antiguos monumentos de Medio
impresión tan fuerte de una paz doméstica [Wohnfrieden] que en
Pero en realidad su relación con el mundo de estas construcciones Oriente. En el camino de los Jardines de Semiramis, el proyecto esas pequeñas callejuelas, separadas del mundo y cerradas por

podría remontarse más atrás que el famoso «viaje a Oriente» de la Casa de la Amistad en Estambul de Poclzig en 1916 decla- los altos muros de las casas».
de 1911, por lo menos al momento de su acercamiento a Auguste raba claramente la fascinación del arquitecto por las terrazas El persistente interés de Osthaus en Medio Orientea lo largo
Perret y su encuentro con Charles Gamier, producidos hacia orientales y el uso de la cubierta plana. Y muchos colegas de de su vida debe ser destacado porque el suyo fue uno de los
1907-1908. - Poelzig y artistas de Alemania, Austria, Checoslovakia y Holan círculos culturales donde las nuevas ideas estaban madurando y J- P. Oud, Villa Allegonda, en Katwijk-Aan-Zee, en
colaboración: con Kamerlingh Ohnes, 1917.
Cuando Le Corbusier estaba dibujando para los hermanos usaron esos nuevos conocimientos como medio de «romper los siendo difundidas hasta que alcanzaron su máxima síntesis y
Perret en París, el atelier estaba abordando la construcción de la antiguos prejuicios y normas». estado público en la escuela Bauhaus en torno a la cual se mani-
Catedral de Orán (Argelia), y la relación de Perret con esa ciudad En Holanda la fascinación por el antiguo esoterismo oriental festaron las más intensas confrontaciones a las que esas ideas

puede al menos retrodatarse a 1902, la fecha de su proyecto para dio lugar a la interpretación tcosófica del arte y la arquitectura dicron lugar. Diferentes estudios han analizado las razones que
el Teatro de la misma ciudad. Los hermanos Perret continuarían en los escritos de ]. I.. M. Lauweriks y de K. P. C. de Bazel. colocaron al «techo plano» en el centro de esos debates, transfor-
sus relaciones con el Oriente Cercano en las siguientes décadas a El interés por al lejano y cercano Oriente determinó que mando lo que en principio sólo era un debate técnico en una
través del proyecto y construcción de numerosos edificios en Wendingen, una de las publicaciones más representativas de suerte de «Kulturkampf», de guerra cultural. Especialmente

Egipto, Marruecos y Argelia. Holanda dedicara a esas culturas un amplio espacio, y en relación desde su empleo en la fábrica Fagus por parte de Walter Gropius a este tema sc encuentran sus novelas de 1897 Tarub, Bagdad

Por su parte Garnier había exhibido su famoso relevamiento con nuestro tema en particular debe recordarse que Lauweriks en 1911 la adopción de ese tipo de cubierta se transformó en un
famosa cocinera." Walter Gropius estaba también vinculado
para la reconstrucción de la ciudad romana de Tusculum en ilustró su artículo acerca de «El arte titánico» con un dibujo del caliente campo de lucha entre los sectores tradicionalistas y a este grupo, y no son pocos los estudiosos que han identificado

1904,* inspirada por las previas reconstrucciones de Delfos por pequeño pueblo de lydighast en Persia.* modernistas. La relación con precedentes medio-orientales fue como «romántica» a esta fase de su carrera, por lo menos hasta

Toumnaire (1894) y de Bérgamo por Pontremoli (1895), en un También de 1912, la Villa Allegonda en Katwijk-Aan-Zce cons- algunas veces negada o sostenida, tanto para defender como para 1923/24."
evento en el que el arquitecto también exhibió su proyecto para tituye otro ejemplo temprano del uso modemista de la cubierta legitimar el empleo de ese recurso. Inmediatamente después Sin embargo, teniendo en cuenta su proyecto para la casa
la Ciudad Industrial. La reconstrucción de la arquitectura domés- plana. La casa fue construida con la intervención de Johannes de la Gran Guerra los círculos expresionistas dentro de la cultura Sommerfeld en 1921, durante estos años Gropius parece no haber
tica de Tusculum estaba obviamente inspirada por las construc- Peter Oud, quien sería una de las figuras descollantes de la arqui- arquitectónica se sintieron parficularmente atraídos hacia el estado demasiado convencido acerca del valor programático del
ciones vernáculas contemporáneas que pudo conocer a través de tectura moderna, y uno de los líderes del grupo De Sul, junto «oriente», y en esos años se hace difícil distinguir una radical techo plano. Nadie puede negar la importancia de la exposición
los viajes que durante su estadía en la Villa Medici realizó no sólo con Piet Mondrian y Theo Van Doesburg. Sabemos acerca de la separación entre los distintos grupos que formaban esos círculos, constructivista de 1922 en Berlín ni de la llegada a esa ciudad
por Italia sino también por Grecia y por Medio Onente. Estas importancia de la tcosofía para la teoría y la práctica de ese en tanto sus participantes cambiaban continuamente sus posi-
de Lazlo Moholy-Nagy y Theo Van Doesburg en ese mismo año
reconstrucciones sirvieron como antecedente a las casas y edificios grupo. A pesar de las diferencias entre Laweriks y Oud, ambos
ciones relativas. Es igualmente difícil distinguir claramente entre
y de la posterior incorporación de ambos a la Bauhaus. Estos
de techo plano característicos de la ciudad utópica que publicaría la valoración de expresiones culturales «altas»
compartían el mismo clima cultural «orientalizante» de fines y el interés por hechos influyeron fuertemente en la adopción del techo plano
recién en 1917. Por supuesto que no es posible establecer un claro del siglo XIX, un clima estimulado en Holanda por investigaciones las construcciones «vernáculas». como expresión de una arquitectura abstracta y de matriz cúbica.

conocimiento de Le Corbusier sobre estos antecedentes y de y estudios desarrollados especialmente en la Universidad de Bajo el liderazgo de Herwarth Walden, el círculo de la galería A pesar de que estas ideas provenían del ámbito artístico no es
estas formas durante el tiempo en que estuvo ligado a ambos Leiden. La concepción de la casa no fue del propio Oud sino del «Der Sturm» estaba impregnado de curiosidad «oriental». Walden menos cierto que las superficies chatas y las conformaciones

maestros, pero tampoco es posible negar los estrechos lazos entre pintor Meno Kamerlingh Ohnes. Siendo un joven estudiante estaba casado con la poeta Else Lasker-Schiiller estercométricas eran también vagas aunque eficaces representa-
y, en efecto, ella
los primeros proyectos de techo plano para las casas Citroén en el momento en que se puso en marcha el proyecto, Oud fue tenía un especial interés en Palestina, habiendo publicado al ciones de procedimientos estándar ce industriales. Pero no
y el empleo de un dispositivo similar en los precedentes de parte invitado a construir la casa siguiendo las ideas propuestas por respecto Las noches de Tino en Bagdad en 1907, La princesa de puede dejar de advertirse también que las cubiertas chatas no
de Perret y Garnier. Kamerlingh Onnes. El pintor era hermano del Premio Nobel de Thebas en 1914 y las Baladas Hebraicas en 1913. En el «Café del eran las formas más apropiadas para estas regiones curopeas, en

Física Haike Kamerlingh Onnes, el paterfamiliae de una de las Este» Walden solía reunir entre otros a figuras como Carl relación con el desarrollo real de las tecnologías constructivas
De todos modos no fue en Francia sino en Alemania donde la más prominentes y activas familias de los círculos culturales de la Einstein, Alfred Kerr, Karl Kraus, Adolf Loos, Alfred Dóblin, y con los requerimientos del clima local. En efecto, si bien
conexión entre la nueva arquitectura y las construcciones Universidad de Leiden. Tratándose de una Villa en la playa fue y Kokoschka. Entre los libros de Paul Scheerbart vinculados los argumentos tradicionalistas estaban asociados al nacionalismo
i

18 19
cito postulado constructivo de Mies y, en consecuencia, sus
y el racismo, su punto más sólido contra el uso de este recurso Kandinsky y Gabricle Minter viajaron a África en diciembre resultado de una votación que tuvo lugar entre los estudiantes
era el técnico. El techo plano era considerado apropiado para los de 1904. Estudios del primero como «Calle del campo» o y profesores
sobre distintos proyectos, en la que la propuesta de experimentos con distintos materiales (hormigón, vidrio, ladri-
climas secos del norte de África, pero no para el frío, lluvioso «Pueblo Árabe» fueron realizados durante su visita a Túnez. Gropius resultó rechazada. La simétrica composición del llos) no debería confundirse con los reales problemas que
debía resolver, y mucho menos con sus preferencias estéticas.
y nevado clima del norte de Europa." Incluso un partidario, aun- Ambos artistas coleccionaron numerosos bocetos, dibujos y foto- proyecto de Muche suele vincularse a alguna afinidad con el Desde el punto de vista de los debates estéticos en los que él
que moderado, de la nueva arquitectura como Werner Hegemann grafías de los paisajes en El-Ariana y Sidi-Boud-Said, o detalles mundo clásico, así como se le atribuyc una relación con prece-
dentes romanos debido a su organización en torno a un atrio cen- estaba inmerso en aquel momento la «Casa en hormigón arma-
advertía que Schultze-Naumburg conocía perfectamente este arquitectónicos en Booten y en Kairouan. Incluso después del
tral. Pero Muche era miembro del movimiento expresionista, do» es un híbrido entre los principios arquitectónicos derivados
tema desde un punto de vista técnico ya que lo había empleado viaje Kandisnky siguió dibujando representaciones coloreadas de
del círculo de «Der Sturm». del «cubismo» y los derivados del «neoplasticismo». La adopción
en terrazas de sus propios edificios, y pensaba que la relación motivos tunecinos. El artista recordaba que «una vez pinté y una joven pero protagónica figura
Teniendo en cuenta su activa pertenencia al culto persa pre- del techo plano no es un exclusivo resultado de sus postulados
un paisaje "a partir de mis recuerdos" mejor que directamente del
que se proponía con los pueblos árabes era «convincente a
natural. Así pinté "El viejo pueblo" e hice más tarde muchos dibu- islámico de Mazdaznan junto con Johannes Itten, no deberían «constructivos», sino que debe ser comprendida por un lado por
primera vista».
descartarse otras referencias para la casa. Por un lado, con la necesidad de encontrar una clara solución de cubierta a la
La hipótesis que estamos tratando de demostrar parte de jos holandeses y árabes». Esto ocurría incluso en 1909 «cuando
sus cubiertas planas y su
forma piramidal no parece tanto una contorsionada composición de la planta, composición que
reconocer que la adopción del techo plano por parte de los arqui- en "improvisación 6" (africana) Kandisnky volvió a recurrir a los

casa romana como a un zigurat; por el otro su planta


cuadrada hubiera determinado una complicada solución de haber empleado
tectos germano parlantes y más en general por los arquitectos recuerdos "orientales" de su viaje a Túnez».>
con habitaciones rodeando el patio central era una de las
formas techos inclinados, pero, más importante, debe también haber
modernistas era ante todo consecuencia del impulso a la abstrac- Paul Klee visitó Túnez y particularmente Kairouan en 1914
estado condicionada por su adhesión a una estética abstracta,
ción que caracteriza a la cultura moderna. Se trataba, en otras con August Mackc y Louis Moillet. En cl libro sobre este típicas de las casas iraquíes que a la sazón eran conocidas en
el ambiente berlinés gracias a los estudios y publicaciones de los no figurativa.
palabras, deuna propuesta de origen estético cultural y no una viaje que Wilhelm Hausenstein publicó en 1921 el autor sostuvo
libros de Oscar Reuther La vivienda en Bagdad y en otros Además de sus relaciones con los grupos de la vanguardia
consecuencia de un requerimiento pragmático per se. Más aún: que los pintores estaban buscando un «encuentro de lo latino con
Estados de Iraq (1910) o de Félix Langenegger La arquitectura alemana Mies estaba fuertemente ligado a los grupos holandeses.
debió desarrollarse a contrapelo de elementales conveniencias el mundo de Anibal y los Sarracenos».* Con este viaje Klce
de Iraq (1911) entre otros. No es una coincidencia azarosa que él haya «holandizado» su
técnicas y económicas. buscaba un «compromiso de Occidente con Onente a través de
nombre precisamente en esos años. Ahora bien, en Holanda la
Si una solución de algún modo tan ilógica alcanzó un rol tan lo veneciano, lo adriático, quizás incluso de lo bizantino con
Pero hay otro más problemático ejemplo de uso del techo plano inclinación hacia una aproximación «cubista» o «neoplástica» a la
importante en la ideología modernista esto se debió a la presencia el Asia Menor, con Palestina y con el norte de África». Un mes
en 1923 que necesita ser tomado en consideración. Me refiero arquitectura era motivo de debate. Van Doesburg había trabajado
hegemónica de artistas en los principales centros de renovación antes de la publicación del libro en noviembre de 1921 Klce

fue invitado por Walter Gropius a ingresar en la escuela Bauha al famoso proyecto de Mies van der Rohe para la «Casa de en una estrecha relación con Oud hasta que ambos artistas rom-
arquitectónica. Dicho de otro modo, pesea la prédica «tecno-
lógica» de casi todos sus protagonistas, la revolución en la cultura y es bien sabido que desde entonces su rol en la escuela tendría
campo en hormigón armado». Dos temas deben ser analizados pieron su relación debido a que el primero creía en la posibilidad
aquí. El primero es el drástico cambio que la arquitectura de Mies de una arquitectura neoplástica, mientras que el segundo opinaba
arquitectónica no tuvo su principal núcleo movilizador en la una importancia creciente.

propia profesión sino en los contactos de algunos arquitectos con experimentó en ese período. Se ha sostenido que en este caso el que en relación con la pintura la arquitectura era una actividad
uso del techo plano cuenta con el precedente de su proyecto para más compleja que no podía ser «reducida» a los postulados neo-
vanguardias culturales que nada tenían que ver con la conserva- Puede sostenerse que la disputa sobre el techo plano comenzó
fr. la villa Króller Muller, de 1914, un proyecto cuyo aparente techo plásticos. Por el contrano, Oud estaba convencido de que conve-
dora práctica de la construcción. en 1922, desde cuando fue siendo empleado cada vez con más

plano debe obviamente ser relacionado con los precedentes nía dirigir la atención de la arquitectura hacia el cubismo como
Hemos visto la importancia que los expresionistas daban cuencia por los arquitectos modernistas alemanes. Mics van der
de su maestro Peter Behrens y con la arquitectura de Friedrich una fuente más apropiada de inspiración. En 1918 la revista
a la relación con «oriente». La otra corriente artística decisiva en Rohe lo hizo en los casos de las casas Peterman, Lessing y Eliat
Schinkel. Sin embargo entre Schinkel y la «casa de campo» la De Stuijl publicó un proyecto de casa con techo plano, obra de
la adopción del techo plano fue, como es sabido, el cubismo. en 1922-23. En 1922, en las «Comunicaciones del Werkbund
línea sufrió una interrupción. Después del proyecto de 1914 Mies Jan Wills," en 1919 una versión con techo plano de la «casa del
Este argumento ha sido visitado intensamente en los estudios de la Alemán», Herman Heuss se hizo eco de la férrea oposición que
empleó para todos sus edificios las tradicionales cubiertas matorral» (Huis ter Heide) de Robt Van't Hoff, y en el mismo
cultura moderna y no es nuestro propósito insistir al respecto. ese rasgo generaba advirtiendo que «la Asociación de Protección
inclinadas y nunca retomó,aquel tipo de techo a lo largo de los año dos esculturas de Vantongerloo que constituían interesantes
Una vez aceptado el principio de una agregación cúbica e incluso de la Patria ha anunciado la necesidad de desencadenar una
casi diez años que pasaron hasta el trabajo de la «casa de campo». intentos de articulación entre cubismo, neoplasticismo y arquitec-
abstracta de las masas como punto de partida para la arquitectura protesta contra el techo "plano y oriental».
Es bien sabido que esa casa es parte de una serie de proyectos en tura" Partiendo de su casual relación con la arquitectura «cubis-
moderna era evidente que los pueblos medio-orientales y su A partir de la Exposición de la Bauhaus en Weimar que tuvo
los que su autor experimentó con distintos materiales postulando ta» vernacular del Medio Oriente en la Villa Allegonda, Oud
arquitectura vernácula cran el mejor ejemplo para observar lugar en 1923 el uso del techo plano pasó a ser asumido como
un radical rechazo a las tradiciones pero también la necesidad de continuó sus investigaciones «cubistas» en proyectos de pequeñas
una bandera modernista. En el evento se exhibieron la Casa en la
y mostrar los precedentes que confirmaran la eficacia plástica y
un retorno a la construcción y la materia en la arquitectura. casas, pero su propuesta más importante después de aquella expe-
urbana de tal idea. Y ahora si se contaba con una sólida colina (Haus am Horn) de Georg Muche y el plan para un con-
Precisamente en declarada oposicióna las velcidades artísticas de riencia fue el proyecto de una fábrica en Purmerend, de 1919 y de
grilla teórica que hacía posible esa reivindicación. junto de viviendas de la Bauhaus en Dessau, del artista húngaro
muchos de sus colegas, Mies rechazaba con cello todo tipo de un depósito y destilería en 1920.* Si comparamos la fábrica de
Fred Forbat. Dicho plan no se construyó pero estaba constituido
El puente entre las visiones pictóricas, los precedentes medio-
Justificación «estética» de la nueva arquitectura. Oud con la casa para un artista que Van Doesburg expuso en
por un grupo de casas cúbicas en una colina, muy similar a lo
Como fue agudamente observado por Detlef Martins, su 1925 es posible observar que mientras la primera estaba agarrada
orientales y la formación de las nuevas ideas en arquitectura fue que sería más adelante el proyecto de Mies, como para ignorarlo
súbito pasaje de la tradición a la vanguardia en los primeros años a la tierra la segunda se suponía idealmente flotando en un espa-
construido por la presencia de dos figuras de liderazgo en ese como un precedente del Weissenhoff de Stuttgart. La casa en
veinte puede ser explicado cio no gravitacional infinito. Eran determinaciones tectónicas las
cambio fue una construcción muy controversial. Aunque ha sido; por su percepción de estar siendo
período, Wassily Kandinsky y Paul Klee, fascinados por el paisaje rechazado por los círculos más avanzados de Berlín.* Este
construido que tuvieron oportunidad de conocer personalmente atribuida con frecuencia a Walter Gropius, en realidad fue reali- que separaban al cubismo del neoplasticismo y el suprematismo a
cambio se expresó en su acercamiento al grupo de Dada. El explí- los ojos de los arquitectos.
en el norte de África antes de la Primera Guerra Mundial. zada en contra de las ideas del director de la escuela, como
¿
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20
El proyecto de Mies para la «casa en hormigón armado» es que sea valioso para la vida, y de este modo valioso para 4. ¿De quién es
el Mediteráneo? Siguiendo a Anne Ruel puede decirse que <la invención del
Mediterránco» tuvo lugar a lo largo del siglo XIX, transformando
«cubista» por su tectónica general y su agarre al piso, pero los la humanidad».
hemos podido observar que ciertas en un sustantivo lo que hasta entonces había sido usado como
calados de ventanas horizontales en los muros quebrando la con- En los párrafos precedentes
un adjetivo."
tinuidad de los ángulos, y la marquesina de la entrada en voladizo El debate acerca de la pertinencia no curopea del techo plano experiencias imágenes culturales extra-curopeas deben ser En la fase de construcción de una alternativa medio europea
tratan de obtener una combinación de elementos «en el aire» que alcanzó su expresión más explícita como resultado de una inicia- tenidas en cuenta para comprender la densa trama de considera-
tiva de Walter Gropius. En 1926 el director de la Bauhaus decidió sociales y económicas a la hegemonía latina/racional/francesa en la cultura europca, fue
era característico de las conformaciones neoplásticas. Como es ciones filosóficas, técnicas, políticas,
la emergencia de uno de los rasgos constitutivos de Friedrich Nietzsche quien instaló al Mediterráneo como un nú-
evidente en sus escritos acerca de este proyecto, Mies era cons- sacar la discusión fuera de Alemania, apuntando a la internacio
que explican
eleo civilizatorio excepcional. Pero según Georg Stauth y Marcus
ciente de la riesgosa y problemática solución constructiva que nalización del problema. El techo plano debería de este modo la arquitectura moderna.
Esas experiencias e imágenes recibieron diferentes nombres: Otto, Nietzsche reinventó la cultura griega clásica como una
debía inventar para el techo plano. No sólo por la especial aislación perder su caracterización como un recurso típicamente medio-
térmica que el uso de hormigón hacía necesaria, sino también oriental para transformarse en un rasgo universal e idiosincrático sarracenas, orientales, árabes,
de Asia Menor, islámicas, argelinas, perfecta expresión de la articulación mediterránea del este y cl
de la arquitectura moderna. Para esto Gropius presentó el tópico otomanas, persas, marroquíes e
incluso italianas o españolas. oeste. Para estos autores «Nietzsche localizó el principio dio-
por su empeño de generar una continuidad entre muro y cubierta
nisíaco en el lado "oriental" del Mediterránco, para distanciar este
para así hacer más abstractos los volúmenes, lo que lo obligaba a en la revista Die Bawswelt, proponiendo un cuestionario de - Vimos también que en los países germanoparlantes se prefirieron
llevar el agua hacia el centro de las superficies que como sabe cinco puntos. Aludiendo a los ejemplos que había expuesto en su las designaciones claramente no europeas buscando en ellas las principio de su específica gestación griega»."
La continua apelación de Nietzsche a la «luz» y al «sur» es
cualquier constructor, sólo en apariencia lejana 0 como concepto libro La Arquitectura Internacional del año precedente, bases para una posición alternativa a la herencia latina identi-
ficada con la hegemonía cultural de Francia en la cultura europea muy conocida, y en especial en relación con la música. Basta
pueden considerarse planas en climas húmedos." Por otra parte, Gropius defendía el techo plano como un recurso arquitectónico
recordar su exaltación de Bizet en «El caso Wagner»: «¡hace falta
en 1923 ya era claro que, si se trataba de responder a la naturaleza que debía pertenecer a todos los arquitectos del mundo y no ser hasta bien entrado el siglo XIX.
En paralelo o más bien como contracara a su vez de esa mediterrancizar la música!». Pero no debe olvidarse que el de
del material, las mejores aplicaciones del hormigón armado reducido a una única región. En su artículo Gropius establecía
Nietzsche era un proyecto curopeo. En Más allá del bien y del
conducían a crear membranas continuas y no discontinuas claramente su demanda de una forma cúbica y del techo plano búsqueda se fue creando una formulaciónalternativa.
Esta alternativa fue, y continua siendo, el concepto de la mal clogiaba a Bizet por haber escrito «para los nacidos en el
asociaciones de vigas, columnas y superficies planas verticales y/o como un requisito que podía alcanzar una buena resolución téc-

«Mediterraneidad» (Mediterranée) como ofensiva contracultural Mediterránco, "los buenos europeos"». Y en el siguiente aforismo
horizontales. Los trabajos de Hennebique y Perret eran muy nica, y era esta justificación técnica lo que buscaba con su cues-
conocidos como para que Mies ignorara su existencia. Que el tionario. Frente a quienes según él argumentaban que «esa "forma en relación con aquel intento de origen germano parlante. imagina «una música supra germánica, (...) de una música
Partiendo de la idea de la «Mediterrancidad», la diversidad local supra curopea que queda justificada aun ante
las pardas puestas
proyecto en hormigón armado constituyó un problema no oriental de la cubierta" no se correspondía con el área nórdica»
manifestacionesalo largo de la de sol del desierto, cuya alma es afín a la palmera y sabc
satisfactoriamente resuelto lo demuestra el hecho de que si bien sostenía que numerosas «experiencias prácticas han demostrado y las múltiples y complejas
costa de esc mar se unificaron como pertenecientes a una unidad
sentirse a gusto y deambular entre grandes y hermosas fieras
intentó su uso en la serie de sus casas (cúbicas) de los veinte sin embargo, que esas presunciones no tienen ninguna validez».S
esencial. Bajo este unificante paraguas conceptual, la discusión solitarias».
(hibridizadas con ladrillos), en la práctica recién volvió a usar ese Las opiniones coleccionadas por el cuestionario de Gropius sc
fue desplazándose luego hacia la determinación del carácter más Ruel lo ha llamado «una invención de los geógrafos», y ha
material casi tres décadas más tarde. Sería el empleo del acero publicaron en un número especial de «Die Neue Frankfurt.
lo que le permitiría una adecuada relación entre sus ideas cons- Revista mensual para los problemas de la construcción metropo- apropiado de esa síntesis. explicado de qué modo esta invención fue aplicada inicialmente
Sin embargo la idea de esa posible unidad «mediterránca» por Conrad Malte-Brun. Desde el punto de vista de
la geografía
tructivas y estéticas. De aquí que su proyecto para el «Weisenhoff litana» con el título de «El techo plano», en 1927. La creme
científica francesa fue recién después de 1876 cuando «el Medi-
Siedlung» representa su adiós al cubismo: en el siguiente año de la creme de los arquitectos modernos participaron en el núme- es actualmente discutida por numerosos antropólogos

como Joño de Pina-Cabral quien retóricamente se pregunta terránco fue reconocido como "ese gran mediador que modera los
de 1929, con el pabellón de Barcelona, Mies encontraría la nueva ro, la mayoría de ellos tratando de justificar la adopción de este
climas de todas las zonas ribereñas a las que facilita el acceso».
síntesis clásico/neoplástica que tan intensamente había estado recurso mediante argumentos técnicos, económicos y funcionales por ejemplo: «¿los montañeses del Algarve son más parecidos
a los de Marruecos que a losdel Miño? ¿Los andaluces En 1908 Elisco Reclus fue el primer «geógrafo que consagró el
buscando. Le Corbusier estuvo entre los pocos que reconocieron que el uso
se asemejan más a los tunccinos que a los gallegos? ¿Los de Mediterráneo como un objeto de estudio autónomo», concibién-
del hormigón armado permitía construir «un jardín oriental
Pisticce más a los libios oa los piamonteses? ¿Los griegos dolo incluso como «un espacio histórico, económico y cultural».*
Durante 1923 se construyó otra casa con techo plano, csta pleno de potente belleza». André Lurcat fue cl único que admitió
más a los egipcios que a los pobladores de los Balcanes?»." En su preciso estudio Ruel recurre a una cita a Pignaud que le
vez con una más directa relación con el Medio Oriente. En cfec- la importancia de la «influencia oriental» en la preferencia por el
Para Michacl Herzfeld «aquellos que venden las imágenes de permite sintetizar su idea sobre la «Mediterrancidad» como una
to, la casa Sternefeld fue la primera en la que Erich Mendelsohn techo plano en la arquitectura moderna. Más aún: en su presenta-
esta quintaescencia [mediterránea] a los turistas norteamc- construcción histórica y por lo tanto variable: «El Mediterránco,
aplicó este recurso, abandonando su previo compromiso con ción él atribuía por el contrario a prejuicios «nacionalistas»
las formas curvilíneas y orgánicas, tal como se había expresado en ricanos o de Europa occidental han dudado rara vez en otros tiempos, significaba equilibrio, medida, armonía; basta
(europeos) la resistencia a admitir esa influencia. Para Lurcat
en explotar la imagen uniformemente romantizada de una abrir un periódico para constatar que hoy día significa discordia
su Torre Einstein de 1921, aunque paradójicamente inaugurada había que reconocer la «configuración oriental» del techo plano,
"cultura mediterránea"».5 Herzfeld entiende que se trata de un (...) Reflexionar sobre el Mediterráneo, analizar esc concepto
también en 1923. Militante judío que a lo largo de toda su pero a su juicio «con estos nuevos medios de nuestra técnica
vida manifestó un profundo compromiso con las raíces medio nosotros estamos regresando a una antigua tradición, y de este «estereotipo (...), el cual sirve también el interés de las vago y seductor, cuyo prestigio sc presenta tanto más fuerte

orientales, en ese mismo año Mendelsohn visitó Egipto y modo estamos inconscientemente volviendo a las fuentes, a la naciones industrializadas que manejan los territorios del cuanto más su contenido se pone en duda, significa interrogarse
Mediterranco». sobre las relaciones entre real e imaginario, entre una existencia
Palestina en compañía de Hendricus Wijdeveld. Mendelsohn propia tierra podríamos decir». «Nuestras mejores configuracio-
Por supuesto que no es por casualidad que la construcción de deseada y una cristencia vivida (...). El Mediterránco, finalmente,
sintetizó su programa de integración entre este y oeste en nes útiles, que vuelven a acercarnos el eterno sentido de la arqui-

la idea de la «Mediterraneidad» se inicia con la desaparición no es más que la imagen que de él nos hacemos».
el prefacio de su entusiasta libro sobre «América»: «La prepara- tectura -admitía- nos han llevado naturalmente hacia Oriente,

de donde viene el camino de nuestra civilización, y de cuyas


del Imperio Otomano y con la ocupación de medio oriente por En 1902 la renovada expresión francesa de «la Mediterranée»
ción de Occidentey la sensible calma de Oriente podrán
las potencias occidentales. adquirió la que es considerada como su más precisa representa-
algún día canalizar la actividad de América hacia un camino eternas formas provenimos».

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ción en la escultura de una mujer de Aristide Maillol llamada pre- dujo una aproximación «imperial» al mismo tópico. Para él cra década de 1930.
Tel Aviv en la
cisamente «La Mediterranée». Las cualidades de esa mujer serían un sinsentido copiar la arquitectura clásica romana o morisca
del CIAM 1V en pueblo mediterráneo.
Parte!icipantes
la fuerza, la serenidad, la salud, propias -según escritores como en las colomias italianas, donde la arquitectura local era perfecta-

Robert Rey u Octave Mirabeau, entre otros- de «esta admirable mente moderna y apropiada a sus condiciones climáticas y

raza que bordea el golfo de Lyon (Rey)>," un raza, por otra técnicas, y donde, por añadidura, las casas vernáculas eran, a su
parte, preexistente «a la invasión de los Francos, y por ende no juicio reelaboraciones de la casa romana. Paradójicamente,
manchada por la "intelectualidad" (Mirabeau) germánica juzgada que los italianos usaran como referencia csas construcciones
decadente». vernáculas libias o etíopes no era sino un regreso a sus propias
fuentes." el mundo árabe, sino que con esta tachadura se adoptó asimismo
Luego de la Primer Guerra Mundial y de la derrota de Alema- recuperación del proyecto moderno através de la búsqueda de
nia el rechazo de las componentes «nórdicas» como causas y Adoptando un punto de vista humanista/populista, Giuseppe sus raíces en la zona
oriental del mar. En esta nueva fase la noción, vigente hasta nuestros días, de una idiosincrática
síntomas de decadencia se expandió bajo la influencia de pensa- Pagano introdujo por su parte en 1935 una interpretación de su carrera la alternativa debería fundarse en los «pueblos «alma latina» de esa supuesta unidad cultural.
dores como Charles Maurras. Para él «los Latinos eran repre- diferente de la arquitectura vernácula. Para Pagano era el pro- -
mjunca tocados por la civilización» y «él buscó las leyes "eternas" La victoria de ese paradigma fue consagrada en 1933 en un
sentados como un pueblo modelado por la tierra, unificado por blema de la reproductibilidad o de la repetición industrial lo que en la arquitectura
de la Antiguedad y vernácula de la cuenca evento internacional bien conocido. Como es sabido, después de

la luz del sol que compartían (...) En lugar de la raza y otras cate- debía impulsar a los arquitectos modernos a mirar a csas del Mediterráneo. Esta arquitectura, él creía, corporizaba haberse encontrado por tercera vez en Bruselas en 1930, el cuarto

gorizaciones restrictivas, los latinistas ofrecían una dedicación construcciones que el consideraba verdaderamente modernas, los principios fundamentales más que las reglas académicas»." Congreso Internacional de Arquitectura Moderna tuvo lugar,
a lo particular y externo, a las formas de la naturaleza y a los en la traza de los «objetos tipo» promovidos como ejemplo por Una Palestina Judía, pensaba, podría construir el encuentro precisamente, a bordo de un buque navegando el Mediterránco.
objetos y espácios de la vida cotidiana».7 Le Corbusier. El viaje se inició en Marsella, como clara demostración de
perfecto de los éxitos materiales de occidente con las verdades
Es importante recordar que este contraste entre el mundo ger- Hubo también un «Mediterráneo» judío. Y estc es cl que Eric eternas de oriente. la eficacia que esa idea había logrado alcanzar, manteniéndose
mánico, vivido en la inmediata primera posguerra como «deca- Mendelsohn propició contra la concepción Chug, esto es contra Y hubo también, por supuesto, una apropiación española del en el centro de la narrativa de la historia de la arquitectura

dencia», y la fuerza del «luminoso sur», fue igualmente determi- los arquitectos judíos en Palestina que, como Arich Sharon o Mediterráneo. Esta versión fue generada en el seno del grupo del moderna.
nante de lo que sería una de las más grandiosas versiones del Julius Posener, queriendo representar a Israel como nación GATCPAC. En el reportaje sobre Ibiza publicado en el sexto Paradójicamente tampoco esta vez, en verdad, se había
Mediterráneo como totalidad. Nos estamos refiriendo por moderna adoptaron el «estilo internacional», y rechazaron cual- número de su revista AC sugerían una relación entre las fachadas tratado de una natural afinidad surgida del «alma latina». Como

supuesto al trabajo de Fernand Braudel. El mismo reconoció que quier tipo de referencias «orientales» porque las ligaban al del proyecto de ]. J. P. Oud en el Weissenhoff de Stuttgart con las resultado de la más consistente investigación realizada sobre
«habría podido ser un historiador de Alemania. (...) Pero hice nacionalismo árabe. «Posener rápidamente descalificó al villorrio casas de pescadores de Sant Pol, y planteaban a estas últimas las relaciones entre el modernismo alemán y español, Joaquín
mi servicio militar en las tropas de ocupación de Renania, y árabe como modelo para los colonos judíos en Palestina, deses- como modelo a seguir." En su estudio de este tópico Antonio Medina Warmburg ha demostrado que «el viaje del Patris Il en
tuve una cierta desilusión de la Alemania (... y) al final me he timando que los árabes palestinos poseyeran un autorizado cono- Piza observó que los editores no «hablan ni del interior ni de los el verano de 1933 no fue una iniciativa de Le Corbusier, ni de

quedado con el Mediterráneo»? Y fue en Argelia, inmediata- cimiento de la arquitectura»."En sentido contrario, Mendelsohn problemas (higiénicos), ni de las particulares funciones que allí su discípulo Sert, ni de cualquier otro miembro del grupo

mente después de esa experiencia alemana donde Braudel «descu- buscó trasladar sus concepciones sionistas derivadas de Martin se cumplen». Para AC «la arquitectura popular mediterránea mediterráneo en el seno del CIRPAC, sino del delegado alemán
brió» el Mediterráneo, a comienzos de los años veinte, destinado Buber a sus ideas arquitectónicas. En palabras de Alona Nitzan- posee (...) unas constantes que se repiten a lo largo de todos los proveniente de la Bauhaus»: Marcel Breuer. Su propuesta tenía
allí como profesor luego de haberse graduado. Como agudamente Shiftan, «Buber profesaba que "las grandes tradiciones espiri- países mediterráncos, (...) países todos derivados de una misma un sesgo diferente al que caracterizó finalmente a ese viaje.

lo ha observado Giuliana Gemelli"* «Braudel no era más que un tuales" de Oriente actuarían como balance de los excesos materia- civilización». Finalmente, subrayando las características comunes Breuer había visitado España a fines de 1931 y había sucumbido a
hombre del nortc hechizado por el Mediterráneo, (...) El Medi- listas de Occidente (... y) sugería que los judíos cran agentes de esa arquitectura con la arquitectura moderna en otro artículo la fascinación de los «sencillos y bizarros pueblos españoles».?
terránco no era un espacio para él, sino sobre todo una patria» mediadores de esa misión». titulado «Raíces mediterráncas de la arquitectura moderna», la Pero, como había ocurrido en los casos ya mencionados, también
Entre 1931 y 1934 Mendelsohn se involucró junto con revista se preguntaba «¿por, qué se ha llamado germánica a la el discípulo de Gropius advirtió que la raíz de esas arquitecturas
que podía albergar sus «muchas raíces».
Wijdeveld y con Amedéc Ozenfant en la creación de una «Acade- arquitectura moderna?», e instalaba el tópico que seguiría debía buscarse más al sur y siguió su viaje hacia África. Desde
Muchos estudios se han realizado sobre los componentes e mia Europea Mediterránea» con el propósito de contrabalancear repitiéndose hasta nuestros días, a saber: «la arquitectura allí escribió a [Ilse Gropius «En Tetuán fui superado por la

impulsos «mediterráncos» en la arquitectura de Lc Corbusier y con una aproximación «clásica» lo que él juzgaba como una moderna, técnicamente, es en gran parte un descubrimiento de impresión de esta ciudad blanca. Admiré los rostros de los árabes,
no hay dudas acerca de su identificación, a finales de los años evolución excesivamente técnica de la Bauhaus en Berlín. los países nórdicos, pero espiritualmente cs la arquitectura su orgullo, su suciedad, su laxitud. Nada a izquierda o derecha

veinte, con la idea de una arquitectura mediterránea/greco/ Mendelsohn estaba entonces desencantado en relación con las mediterránea sin estilo la que influye esta nueva del camino, villorrios, negros, nómades, los mensajeros a caballo
latina/francesa como opuesta a un frío «germanismo» en la traza posibilidades de un modernismo orientado en esa dirección. arquitectura»." de Abdel Krim».
de las ideas de Maurras. «La tecnología -se lamentaba-- establece el predominio de una
Á pesar de las muchas interpretaciones
Con sutiles diferencias esa misma interpretación fue asumida concepción materialista de la vida, que ponc la cuestión del pro- y controversias culturales
desde comienzos del siglo XIX, en los últimos años veinte
por figuras destacadas en ltalia. Michelangelo Sabatino demostró pósito de la vida sobre la vida en sí misma»." La AFM sc instaló en ya
la importancia que varios de ellos, como Virgilio Marchi y Cavalliere en un edificio concebido por Wijdeveld pero éste fue comienzos de las años treinta, bajo el liderazgo de Le Corbusier,
no sólo se instaló la idea de
Fortunato Depero, dieron desde los primeros años veinte a las destruido por un incendio, y en 1933 Mendelsohn se vio obligado una genérica «mediterrancidad»

construcciones vernáculas de Capri, paradójicamente como inspi- a huir de Alemania. Desde ese momento él prestó mayor atención (europea) como referente originario para la verdadera arquitec-
hacia Palestina, reforzando su creencia en la posibilidad de tura moderna, tachando toda referencia
ración de proyectos futuristas. En 1931 Carlo Enrico Riva intro- a alguna deuda con

2
24 25
Notas 29. Ludwig Pietsch, Marokko. Briefe von den denischen Gesandtschaftreise nach Fi
des Deutschen Werkbundes», 22 de julio de 1922.
em Fribjar 1877, Leipzig, 1878. Citado en Khalid Lazaare, Marokko in dentschen 55. «Mirteliungen
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-Vorspiel

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título P,
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del Ra limo, dí un'archi a coloniale moderna. Ver Brian
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24. William Makepeace Thackeray, Combill to Cairo, 1847, citado en «"Innocents
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50. Paul Schultze Naumburg, «Mein baukúnstlerisches Vermáchtins. Das Dach»,
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la historia de la «disputa» sobre el techo plano en Alemania se encuentra en Richard
Medir
79. Ibidem.
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29-30 de sepuembre de 2005, 52. Vivian Endicott Barnett, Das bunte Leben. Wassily Kandinsky im LenbachhausY
27. L'Orient dans la culture allemande aux XVii1e et X1Xe sizcles. Actes du colloque Múnchen, Dumont Literatur und Kunst Verlag, 199%. AEMarcelBuIsGropi,Mad4enovimbrde193,na e noviembre de 1931
y Algeciras, invierno de 1931, BHA, Berlín.
organisé par le Centre d'Études Germaniques et Scandinaves (LIRA) de I'Université 53. Gúnter Brucher, Wassily Kandinsky. Wege zur Abstraktion, Minchen, Londres,
Nancy, 2, 9 y 10 de diciembre de 2004. Nueva York, 1999. q

28. Graf Adalbert Sternberg, Die Barbaren von Marokko, Leipzig, 1908. 54. Wilhelm Hausenstein, Kairvan Oder Geschichte vom Maler Klee, Miinchen, 19%

26
27

o-Ñ]Ñ]---;-]É]]-]][]][]]]]]
Ana Maríaaría Rigotti
Rig
"fici
edificio
i i i
Narkomfin, entendido como el más con-
revista SA y su
Moisei Ginzburg: bases de una sumado del período. Hay sólo una breve mención a Estilo y época
manifestación de una teoría de la arquitectura
teoría autónoma de la arquitectura como la primera
en la URSS. .
,
-orientada a acentuar la determina-
Esta línea de interpretación
y sus materiales específicos Lo esencial no eselproblema del método sino la
ción estructural,
técnica en la teoría de Ginzburg y a subrayar la

literatura considerada como una materia concreta y asimilación del constructivismo con lo constructivo y con el
particularidades específicas, (...) lo que nos caracteriza toda dimensión autónoma del arte es la
esfuerzo por desmentir
no es una teoría sino el deseo de crear una cenca

literariaautónoma 7
apartirdelascualidades que eontinúa Anatole Senkevitch en la introducciónala traduc-
inmíneecasdeDo: er dolo cióninglesa de Estilo y época, sin dudas la más importante por
la perdurabilidad de sus bipótesis.* La argu-
Leningrado, 1927 lo exhaustiva y por
una fascinación por la máquina cn sintonía
menta asociándola a
con el clima
del futurismo y a su formación en cl Instituto
atención fue recogida al año siguiente por el
libro tempranode Moisei Yarkovlevich Ginzburg finales de los 20s
Ritmo y arquitectura (Ritm v arkbitekture, 1923) y Estilo y época, Politécnico de Riga que le habría otorgado una sensibilidad res- (Moisei Ginzburg, Escritos 1923-1930, Madrid,
Vittorio De Feo? donde la figura de Ginzburg es presentada la estática y la dinámica cercanaa la idea de El Croquis Editorial, 2007), p. 444.
problemas de la arquitectura contemporánea (Stil":epokba, to a las leyes de

exclusivamente como fundador a la OSA (Ob"cdinemye construibilidad de Viollet-le-Duc como expresión honesta de los
problemy sobremennoi arkbitektury, 1924), el primero un ensayo Georgi Golts, desconocido, Andrei Burov, Le Corbusier,
fueron dos libros tempranos de Moisei Sovremennikh Arkhitektorov - Asociación de Arquitectos "materiales, énfasis en lo estructural y una interpretación nueva del Ginzburg, a finales de 1920 en Moscú en VV.AA. Cons-
y el segundo un tratado, tructivismo Ruso (Barcelona, Ed. Serbal, 1994), p. 62.
Ginzburg (1892, Minsk - 1946, Moscú) que, al tener sólo una Contemporáneos) y de su publicación sa (Sovreménnata trabajo en madera como vía a un nuevo lenguaje formal. Esta
Arkbitektura
edición en ruso, pasaron casi inadvertidos para la historiografía - Arquitectura contemporánea); un grupo combati-
explicación materialista de la arquitectura estaría reforzada por su Grupo ejecutivo de OSA en la dacha de los Vesnin
(S. Khan-Mogavedov, Pioneers ofSoviet Archuecture,
de la arquitectura moderna? Luego del acceso a los archivos de la
vo y utilitarista, orgulloso de su unión con la realidad socialista,
enfoque marxista, en relación al cual habría alterado sus deudas Londres, 'Thames and Hudson, 1987), p. 517.
casi ingenieriles* para una Paul Frankl al proponer una tcoría
Academia de Ciencias de la Urss, fueron motivo de una primera que habría desarrollado posiciones con Heinrich Wolfflin y

traducción al italiano en 1977 como corolario de la reivindicación arquitectura a cargo de la invención de los nuevos condensa- de la evolución de los estilos artísticos sustentada en el método
dores para la nueva realidad productiva y social. Incluso dialéctico, subrayando que no se trataría de un proceso formal
de su autor y del constructivismo en arquitectura como expre-
siones de una experiencia moderna alternativa, liberada de las menciona, como confirmatorios de esta interpretación, los autónomo sino determinado por contingencias materiales y

contradicciones y complicidades con el capitalismo, que permitía reproches del grupo antagónico VOPRA (Asociación de los arqui- culturales del contexto" Son los fundamentos de una estética
rescatarlos del fuego cruzado al que estaban siendo sometidas las tectos proletarios de toda Rusia) que le habría endilgado, por
positivista y la propuesta programática de una nueva arquitectura
su actitud negativa respecto a la consideración
de la arquitectura constructiva determinada por la revolución industrial y la
experiencias de Europa Occidental en los años veinte. Estahisto- emocional de
como arte, negar toda capacidad de influencia revolución rusa,* que constituiría un salto genético, una síntesis
riografía prefirió subrayar su carácter funcionalista radical y su
rol precursor de las teorías positivistas del proceso de discño. sus formas.
superadora del pendular ciclo secular entre gótico y clásico,
Este trabajo pone en cuestión estas interpretaciones ya canóni-
Cuatro años más tarde, Villes et revolution de Anatole Kopp* - tendiente a la racionalización creciente de la organización técnica
relación con el formalismo literario, fue escrito con el apoyo de la embajada, instituciones soviéticas y al productivismo;
cas, poniendo estos libros en y de los procesos de concepción próxima
de construir una teoría autotélica la publicación en Moscú de un catálogo general de la arquitectu interpretación que nosotros discutiremos subrayando la impor-
para destacar su propósito
de la Arquitectura como arte y de reflexionar sobre sus elementos
dedicado a los años 1917-32, que permitían por primera vez tancia adjudicada por Ginzburg, en su libro, a la arquitectura
reconocer las experiencias arquitectónicas de
la URSS no ya como en tanto arte como entidad autónoma y autotélica. En este mismo
característicos: espacio, materia y forma.
un simple juego de formas sino como
«la exacta respuesta a sentido altera el concepto de ritmo en Ginzburg -originario y
problemas funcionales formulados científicamente». Consagrala siempre presente en las artes preformativas que le permite
particularidad de la vanguardia soviética como aquella capaz asimilar la arquitectura a la música- por el movimiento asociado a
La construcción historiográfica
de transformar los presupuestos disciplinares desde la base la mecanización. Sin precedentes, el movimiento mecanizado
teórica
...no ejerció hegemonía intelectual, poética,
especulativa del materialismo dialéctico. Su condición de determinaría el nuevo método de composición, aunque no como
(otros la ejercieron con mayor fuerza) sin embargo por
su formación regular, por su ambivalente pero
cons- «realismo utópico», operativo para construir un modelo de nueva apología de la velocidad, sino como producto de una visión
tante método de investigación, por su proteiforme civilización posible, justifica no reducirla a una vanguardia racionalista extrema del mundo «que no tolera despliegues de la
adaptabilidad a las decisivas revueltas políticas; pero
también por su obstinada resistencia a retener «estruc- cultural como la europea y sus reparos meramente ideológicos a imaginación», impregnando el trabajo del arquitecto con la
turalmente» una línea estratégica dispuesta a disminuir una condición estructural aceptada como
dada. En este sentido, lógica del ingeniero y así diferenciándose de los artistas plásticos."
los vértices «superestructurales» y destacar los aportes
entiende legítimo considerar las propuestas del constructivismo Nosotros intentaremos demostrar como ese vínculo de la
deunatradiciónapoyadaenlastécnicasconstructivas
logró establecer una relación obligatoria (racional- como un cuadro histórica y teóricamente
alternativo al del arquitectura con la obra de los ingenieros está, en Ginzburg,
económica-moral) con la cuestión vivienda. (...) mediatizada.
Elproblema es que no murió, ni siguiera «civilmente» funcionalismo moderno y sus operaciones clasificatorias de los
con el estalinismo. hombres realizados con criterios exclusivamente económicos en Casi simultáneamente, Catherine Cooke" cuestiona la rela-
Guido Canella, Moisei Ginzburg o dell"
En esc marco, estima a
eurocostrutuvismo. un ambiente de desoladora banalidad.
-
ción establecida entre el Constructivismo y la construcción para
Ginzburg como una figura egregia por haber conceptualizado la circunscribirlo a la propuesta de un método funcional del
El interés por la arquitectura y la urbanística soviética fue inau- noción de condensador social que permitió contemplar como proyecto como aproximación sistémica a las condicionantes de la
una sola cosa la construcción del ambiente y
de una nueva socic- forma arquitectónica y colocarlo en una posición de antecedente
gurado en Italia por un número especial de la revista Casabella de
1962 que reunió un material todavía escaso e incoherente. Esta
dad. Concentra su actuación en la prédica militante desde la relevante de las preocupaciones por el proceso de diseño que
28 29
Para eso se vale de noma de su estructura interna. En este proceso, los dos libros al poema
ocuparonala disciplina en los años sesentas. pe la construcción
la distinción entre stroitelstvo (construcción real y física de aquí trabajados ocupan un rol central. Pero la contradicción
Se llama ritmo a toda alternancia regular indepen-
edificios) y konstruktsiia (construcción en un sentido lingiístico fatídica ocurre cuando se unena la Revolución, asumiendo dientemente de la naturaleza de lo que alterna.

vinculado a lo formal, que tiene más que ver con principios como propio su proyecto y transformando esta autonomía en Elritmo musicalesla altemanciadelos sonidosenel
tiempo. El rumopoético de las silabas en el tiempo;
filosóficos y artísticos que técnicos). En su argumento, Estilo y una manipulación de la organización sintáctica para lograr la
el coreográfico, de los movimientos en el tiempo.
el objeto de Existe también una apropiación de los dominios veci-
época tiene sólo lugar como eslabón de una cadena donde se mayor eficiencia al servicio del proletariado con
nos: se habla de la alternancia rítmica del día y la
habría establecido en forma preliminar la analogía entre el pro- extinguir sus culpas como sostenedores del arte. Así Ginzburg, noche, del inviemo y del verano. En sintesis se babla
Bra:amEor 4042 rPemrma comia 4:40 Quel ape
estable- pero sólo a partir de 1925, se
convierte en motor de una ideolo del rumo siempre que sepueda encontrar una repe- RECIO Duckmamuts 2 oVe,MAEII UN ye E Uat
yecto y la máquina como prototipo organizativo que, ución periódica de los elementos en el tiempooel espa- La oMNes
«Cant coda4 2D ADAar CANY AN TA PE
ciendo un nexo entre los desarrollos de Alexandr Rodchenko de la organización contribuyendo a ocultar la oposición entre cio. (...) El movimiento ríxmico es anterioralverso. Ms+ ePrcemma % epremiqmr 10 N.: oe
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ze -AEADA.CICRTAEMa.UE eA
de la idea en artículos los intereses de clasey el desarrollo de la producción en la No se puede comprender el ritmo apartir de la línea
ÑOEOECIDA 019415APQLA bb 12 AAAE a
y Alexci Gan y las formulaciones maduras de los versos; por el contrario, se comprenderá el verso Lio oTda A
tmsedsMOREeu US Aa A kia Antenas >.
del mismo Ginzburg publicados en 1926-7, alcanzaría luego fantasía de un fin de la alienación por el trabajo y creyendo con- a partir del movimiento rítmico.

su formulación matemática extrema en manos de Nikolai cretar el sueño de ser la guía moral de la vanguardia política. Ossip Brik, Ritmo y sintaxis, conferencia inédita, Lab canas de ed
1920. Temo Noviatas<Adacinoaoe 1 ADE MANE, CNCA.mensa-
PDD AAAA AA
Krasilnikov y Natalia Komarova." Un método disgregado en Un sueño que se extingue rápidamente con el Plan Quinquenal

una secuencia lógica de pasos en la que la consideración de


cuando los contratados son europeos y las propuestas de
Ginzburg comenzóa escribir Ritmo y arquitectura en 1921, tras
Fotos encabezando quinto capítulo de Stil:epokha
los elementos de la forma (espacio, superficie) sc desplaza a una Ginzburg de nuevas ciudades y condensadores socialistas resul VV.AA. Constructivismo Ruso (Barcelona, Ed. Serbal,
a los ojos del poder invenciones tan irreales y descartables su vuelta a
Moscú luego de los años de la Guerra Civil transcurri- 1994), p. 63.
tercera instancia y que nosotros interpretaremos de modo
> dos en Crimea. Para su construcción, recuperó el análisis de
como el Letatlin: «y es legítimo preguntarse si esta aventura
diverso, como un encadenamiento en la consideración de cada
de estudios en Italia
uno de estos materiales. Si bien Cooke hace referencia 2 puede considerarse como una tragedia o una necesaria ironía de monumentos realizados durante sus años
modelado sobre Esprit la historia». debido interrumpir por el estallido de la Gran Guerra
que el libro como producto final está que había
Nowveau, desestima la influencia de Le Corbusier en la cons- Desnudada por Tafuri la operatividad política del programa, en 1914. Iba
a ser su pasaporte para consolidarse dentro del

trucción de «un método operativo que aportaría a la arquitectura nuestra preocupación -en contraste con las lecturas que hacen círculo de los arquitectos y sus asociaciones: ya había sido nom-
de acumulación. Pero se pueden imaginar otros sistemas en los que la finalidad
las cualidadestan alabadas de la ingeniería y no sólo las formas» énfasis en su sesgo marxista y en una acepción del constructivism brado profesor de Arquitectura Renacentista de la MVIU (Univer-
práctica retrocede a segundo plano (aunque no desaparece enteramente) y los
de edi- atada a la idea de construibilidad- es medir la productividad teó- sidad Técnica de Moscú). Concluyó la escritura en enero de formantes lingúísticos tienen un valor autónomo. Jakubinski, Ensayo sobre la lengua
ya que Ginzburg sobre los mismos silos y ejemplares
rica de este vínculo sugerido entre el formalismo literario y los 1922, si bien logró publicarlo recién al año siguiente. poética, 1916."
ficación industrial había sido capaz de elaborar «una pequeña
hace que Vers une dos libros primeros de Ginzburg. No sc trata de una preocupa- Una primera parte del libro demuestra la relevancia del ritmo Aparece allí la semántica fónica de su lenguaje: la envoltura sonora de la palabra,
y consistente obra teórica marxista que
cs la fuerza motriz de su carácter acústico se vuelve significativo independientemente del sentido lógico y
architecture parezca más que nunca una pieza suelta de ción filológica por trazar referencia en relación a un contexto en la arquitectura inspira sus elementosy
concreto. Boris Eichenbaum, El capote de Gogol, 1918.
la evolución de sus formas- una suerte de sexto Grundbegriffa
periodismo». compartido. Nos interesa iluminar una voluntad equivalente por
Los hechos artísticos testimonian que la differentia specifica del arte no se expresa
Sin embargo, Guido Canella había comenzado a esbozar otra formular una teoría autónoma de la disciplina y de sus medios sumar a los cinco principios definidos por Heinrich Wolfflin, que
en los elementos que constituyen la obra sino en la utilización que se hace de ellos.
también define en relación a una polaridad de fuerzas: lo estático
perspectiva. En su introduccióna la primera traducción en occi- específicos a través de la historia, desde una interpretación La forma obtiene así otro sentido y no reclama ninguna noción complementaria,

vitalista en relación a principios entre los cuales el ritmo es su y lo dinámico. Justifica esta operación en la esfera
de la percepción ninguna correlación. Boris Eichenbaum, La teoría del método formal, 1927.
dente de ambos libros," presenta a Ritmo y arquitectura como una
contribución más original. dentro de una concepción empática de la experiencia estética.
obra escolástica orientada a aprovechar tácticamente el disposi- -

Riúmo y arquitectura y Estilo y época responden claramente al Ritmo es el registro del movimiento generador de una forma Muros, columnas, elementos constructivos y espacios son, para
tivo lógico analítico producto de su formación europea," que tes-
timonia una fase transitoria de preocupación estética del autor programa de Nikolai Ladovski para
el Grupo de Trabajo de desde la trayectoria regular de sus elementos (puntos, líneas, pla- Ginzburg, el material provisto por el mundo de la construcción
tradición apoyada Arquitectura del INKHUK enunciado en marzo de 1921.' Como nos) que permite sintetizar la percepción de los edificios como -una lengua cotidiana- que la arquitectura puede transfigurar
cuyo legado prefiere centrar en su aporte a una
contrapunto de horizontales y verticales, que Ginzburg registra desde su semántica fónica -el ritmo- a fin de imaginar una lengua
en las técnicas constructivas (que es como interpreta al construc-
medida preparatoria a futuros trabajos de investigación, esa decla:
ración llama a fundar las bases teóricas de la Arquitectura, preci- con una notación inspirada en la musical. poética donde la forma tenga un sentido que no reclame corre-
tivismo) asociada a la primacía moral y económica del problema
laciones ni complementos.
de la vivienda. Respecto a Estilo y época, es el primero en señalar sar su terminología y definición como arte, clarificar sus atribu

elementos caracterís- Quienes pretenden que la noción de economía de las fuerzas es una constante de Una segunda parte del libro propone una aproximación al pro-
la relación que establece con la teoría del formalismo literario y propiedades específicas e indagar en sus la lenguapoética y que, más aún, es su determinante, tienen una posición justificada
ceso dinámico de generación de las formas en razón de esta lógica
al fin del arte ticos más importantes: espacio, construcción yforma." Esa es en lo que concierne al ritmo. Viktor Shklovski, El arte como artificio, 1917.*
y del extrañamiento saturando la invocación
dominante del ritmo. Tres son los principios que, repitiéndose
de la revista L£F. Aunque tímidamente, destaca la decisión de la tarea que emprende Ginzburg discriminando recurrencias en
Tras definir tres modos en la percepción del ritmo de las forma- cíclicamente en la historia, ordenan los elementos en el espacio y
Ginzburg de no renunciar a la dimensión significativa, Monumen- un proceso de evolución cíclico, continuo y dialéctico de autoge-*
definen su carácter. El monumental propio de Egipto, la Grecia
neración de las formas en Arquitectura -la más pura y autóno- ciones espaciales volumétricas -el vertical que eleva, el horizontal
tal, de la Arquitectura avalando la interdependencia entre solu-
Arcaica y el Quattrocento, cerrado, simétrico, equilibrado e
ción estética, el efecto mecánico de la elección estructural y ma de las artes»- en relación al espacto (definido según una que apacigua y el inestable propio de los espacios circulares-
el derechoa la invención formal y la imagen en el terreno de la interpretación muy cercana al Zweckgesinnung de Paul Frankl, explica el rol de ciertos elementos (columnas, comisas, arcos, intemporal, de formas frías, discretas y espacios centrípetos, logra
como ámbito preformativo de la accióny la vida), lo material metopas, aberturas) como organismos conductores y trasmisores impresión de unidad por su efecto rítmico concentrado que
exploración tipológica. resulta de resolver la colisión de horizontales y verticales con
de ritmo más allá de toda referencia constructiva o funcional.
Estas intuiciones primeras son dos años más tarde desarro- (para lo que recurre al término clave del Grupo de Trabajo Cons
La analogía con las indagaciones claro predomino de las primeras." El armónico, propio de
lladas por Manfredo Tafuri para quien Ginzburg es la figura clave tructivista -7ektonika- pero en una acepción más cercana a que estaban llevando a cabo
los formalistas literarios son evidentes. Por ejemplo: la Grecia de Pericles, el Cinquecento y Bramante cuya sujeción
la vanguardia soviética, sostenida y la de Carl Bótticher) y laforma (que se especifica en la envolven
para demostrar las aporías de
a leyes geométricas y proporcionales confluye en un ritmo
atada a las del formalismo literario." Su trayectoria habría comen- como vaina estética responsable de la expresión de la dinámica

estático, de contenidos matemáticos? El pictórico, propio del


zado con un trabajo de laboratorio, analítico, ponicndo en evi- interna). Es en relación a estos materiales específicos que luego Lo fenómenos lingúísticos deben ser clasificados desde el punto de vista de la
dencia la anatomía del hecho poético y reconstruyendo las bases formula su método de creación funcional, ordenando su resolució idad propuesta en cada caso por el sujeto hablante. Si éste los utiliza con
dad puramente práctica de la comunicación se trata de lengua cotidiana
do,nde los formantes lingúísticos
Barroco y caracterizado por la expresividad de la relación libre de
sus partes y un espacio centrífugo que concurren en un ritmo
no tenen valor autónomo sino que son un medio
de la institución mediante la historización de la evolución autó- en forma secuencial.
.

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el nuevo estilo ha nacido. ¿Por qué ese desenlace fatal? Heinrich Wolfflin,
contemporáneo ha creado objetos brillantemente concebidos: el puente,
dinámico e impetuoso" Estos tres principios permiten a bres, coaccionando sus pies y su alma al unísono en un hacer El ingeniero la grúa. El artista contemporáneo debe crear Renacimiento y Barroco.
a vapor el aeroplano,
La máquina
colectivo y purificador." Queda así tendido un puente de plata
Ginzburg caracterizar, también, las fases internas de cada estilo:
entre la condición artística y la vida; entre una arquitectura que
objetos i ales en términos de fuerza, tensión y potencia en el plano de su acción
icológica y fisiológica en
la conciencia humana, y esa debe ser la base organizativa
una inicial marcada por la solidez, la de perfección cuando Estilo es una palabra ambigua que, pese a la diversidad de aplica-
de su trabajo->
no está «sometida a unas exigencias figurativas y a unas necesi
el tamaño se sustituye por la armonía entre las partes, y cl declive ciones, siempre reficre a «cierta unidad natural» en los fenómenos
cuando el ritmo se hace más intenso, anárquico y el ornamento des ajenas a sus formas (...) al igual que la música, es la más
considerados y como tal lo sintetiza Ginzburg en un lenguaje
el hecho de resultar directame
envuelve los clementos. pura de todas las artes» (p. 27) y lírico y figurativo que le permite anudar sin sobresaltos ni
El estilo
La investigación del formalismo parecía satisfecha ahora para la de ciertas condiciones materiales, prácticas y constructivas.
determinaciones forzadas arquitectura y época, preservando en
Puede dearse que el oficio de artista y cualquier otro
Al respecto debemos aclarar que en el recurso al ritmo de
arquitectura; la identificación de su condición eminentemente oficio «vanzarán entonces bacia una única meta, e todo momento su respectiva autonomía.
artística, que siguiendo a Shklovski se distingue del hacer pro- Ginzburg hay una leve discrepancia con la interpretación de B inevitablemente llegará el día en el que alfinal todas
esas líneas se cruzarán; es decir, el día en que descu-
su fuente evidente. Para Brik, el ritmo no estaba en las huellas;
saico por el carácter sensible de su fabricación, y una evolución briremos nuestro gran estilo, en el que se fundirán los Un examen de los frutos más variados de la actividad humana de cualquier época
la música, la danza y la poesía para revela que, a pesar de la diversidad provocada por causas orgánicas o individuales,
autotélica ajustada a leyes inmanentes a las formas mismas, regida por eso cra un privilegio de actosdelacreación ylacontemplación:cuandolos todos ellos tienen algo en común, alguna indicación que, en sus orígenes sociales
las cuales el registro material era la simple notación de una acció: arquitectos tracen sus proyectos en el mismo estilo en
por una coherencia interna que no
refiere a absolutos exteriores colectivos, da hugar al concepto de estilo. Las mismas condiciones sociales y cultura-
que los sastres hacen sus prendas; cuando el rimmo
ni necesita justificarse en ninguna función práctica. en el tiempo y el espacio. de un canto coral combine fácilmente lo insólizo y lo les, los mismos métodos de producción, el mismo clima, la misma actitud y la misma
diverso; cuando el drama épico y la farsa cómica psicología: todo esto deja una impronta común en las formas más diversas. (...) No
queden vinculados, pese a toda la diversidad de sus obstante, las leyes que eliminan el «azar» de la creación de cualquier producto
Hablando científicamente no se puede decir que la disposición de las huellas co
libro no ofrece más que las formas, por las características comunes de un mismo supone que cada faceta de la actividad creativa posee su propia expresividad espe-
tuya ritmo. De igual manera, el poema impreso en un cifica, (...) en estas leyes generadas por las diferencias en el método y lenguaje
Unpuenteentreelarte ylavida huellas del movimiento. Sólo puede ser presentado como ritmo el discurso poético lenguaje. Estos son precisamente los síntomas de
formales de cada forma artística, pueden distinguirse ciertas premisas comunes y
no su resultado gráfico. Ossip Brik, Rzmo y sintaxis,
1920.» cualquier estilo auténtico y saludable en el que, tras
un atento análisis, se descubrirá que la causalidad unificadas, algo que materializa el todo y lo mantiene unido, en otras palabras,
...RO nos interesael pasado como tal, (...) la historia e interdependencia de todos estos ferómenos en una unidad de estilo en el sentido amplio de la expresión (p. 114).

nos ofrece lo que la actualidad no puede damos, el relación a los factores fundamentales de la
Para Ginzburg, la noción puede extenderse a las artes plásticas y
material acabado (...) La historia difiere pues de la época (p. 110).
teoría no tanto por su objeto sino por su método, por el la arquitectura: está en la relación a la traslación del puntoo la En Ginzburg no hay alusión a un determinismo estructural
punto de vista que ella adopta. Esto explica el carácter línea generando la forma, que queda registrada en sus elementos en clave marxista;" por el contrano, la noción de estilo es la llave
de nuestros trabajos de historia que tienden siempre a
conclusiones tanto teóricas como históricas, al plantea- verticales y horizontales: notaciones de un movimiento que se ¿Cómo resolver la correlación entre la dinámica interna de las
para el ingreso de la metáfora orgánica como una razón tácita
mientode problemas nuevosy a la revisión de los formas de la arquitectura -que se sostiene autocentrada e inma-
anteriores. aprchende en acto. Será sólo más tarde, en Estilo y época, que nente--y las otras series sociales sin caer en el determinismo
que recorre todo Estilo y época desde una interpretación vitalista
Boris Eichenbaum, La teoría del método formal, 1927. logre imaginar un espacio preformativo donde el ritmo perma- que celebra la capacidad creadora del hombre y su potencialidad
nece conjugado en el tiempo, ordenando c impulsando
los positivista ingenuo 4 la Hyppolite Taine, o el aún más mecanicista de cambio en un puro devenir irrefrenable sin finalidad cstable-
de Plekhanov como ha sugerido Senkevitch? Ginzburg emprende
Quedaban pendientes cuestiones que alejaban la empresa del movimientos, coordinando la acción en el espacio. cida, y que aparece una y otra vez en sustitución a cualquier otra
su abordaje en Estilo y época, una teoría que asume la respon-
facilismo de las reconstrucciones diacrónicas. Era preciso hacer En cuanto a la relación entre la arquitectura y las otras series justificación. La inexorabilidad de las leyes y la pertinencia de los
sabilidad de orientar sus reflexiones sobre la época y traducirlas
de la historia una teoría, fuente de renovadas hipótesis de trabajo. sociales, económicas, técnicas-, ésta se enuncia tímidamente
propositivamente en criterios para identificar, ponderar y, principios se resuelve repetidamente aludiendoa la categoría
Ese es el propósito manifiesto en la introducción y en el párrafo sin otorgarle una franca entidad causal: nuevas formas habrían de «natural» que se emplea repetidamente con fines demostrativos,
eventualmente, justificar opciones entre las alternativas en juego."
final de Riumo y arquitectura que, así, se diferencia claramente manifestar el ritmo propio de los nuevos días. amparándose en su aparente obviedad.
del corazón erudito del libro.> La nueva forma no aparece para expresar un contenido nuevo sino para reemplazar Desde esta lógica orgánica, Ginzburg reemprende una nueva
El estilo se destruye a si mismo basta el final. El proceso se repite siempre, es la vieja forma que ha perdido su carácter estético. (...) De todas las influencias
Una vez reconocido ese mover incesante de las formas y sus necesaria la afluencia de nuevas fuerzas creadoras y nuevos genios para reiniciar las
reconstrucción de la evolución de las formas por los ya apun-
que se ejercen en la historia de una literatura, la principal es la de las obras sobre
principios, ¿qué factores podían explicar el cambio de onien- la fase primitiva y volver de nuevo a la monumentalidad. (...) Naturalmente tambi obras, (...) no es necesario multiplicar inútilmente las causas ni, bajo el pretexto tados andariveles cíclicos definidos por el ritno -monumental,
varía el objetivo de la arquitectura contemporánea que consiste en buscar aquellos de que la historia de la literatura es la expresión de la sociedad, confundir la histo-
tación, el agotamiento de una fase y el nacimiento de otro estilo? elementos de la forma y leyes para su combinación en que se manifieste el latir ria de la literatura con la de las costumbres. 1.as dos son cosas distintas. V. Shklovski, armónico, pictórico-, pero ahora desde una historia genética que
¿Cuál era el grado de autonomía de la arquitectura respectoalos rítmico de nuestros días (p. 101). Poética, 1919.5 autoriza a dejar de lado todo lo que no haya tenido la poten-
hechos sociales y políticos? ¿Podía seguir siendo encuadrada cialidad de crear algo nuevo, entre ellos lesfawx pas de los últimos
Y esta breve alusión a una arquitectura contemporánea queda
La evolución literaria, como la de otras series culturales, no coincide ni en su ntmo doscientos años de la arquitectura ecléctica; pero también de los
impunemente en el mundo del arte luego de la tajante declaración ni en su carácter con las series que le soú correlativas debido a la naturaleza específica
del material que maneja. Juri Tinianov, 1927.*
de Aleksei Gan anunciando que el arte había muerto? ¿Qué inscripta, por el momento, en las lógicas autotélicas del formalis modernismos de fin de siglo.

lugar podría tener, en tanto arte, la arquitectura en la Revolución? mo literario.


Lo hace preservando siempre un hiato entre arquitectura y época
Es en la cita que le sirve de epígrafe y en el último capítulo de ..-surge otro método de evaluación objetiva: el genético, eso es, el método que
La revelación de las leyes inmanentes a la historia de la literatura nos permite carac determina el valor de un fenómeno desde la óptica de sus relaciones con el
que, como irresoluble dualismo, también está presente en las
Ritmo y arquitectura donde Ginzburg ensaya una primera terizar cada sustitución efectiva de los sistemas literarios, pero no nos permiten crecimiento ulterior de un estilo, con la evolución de un proceso general. Y en vista
teorizaciones de Wólfflin." Justamente es él quien le provee del que un estilo artístico, cualquier fenómeno vital, no se regenera de repente
respuesta. explicar el ritmo de la evolución Di la dirección que sigue cuando se está cn pr
de varias vías evolutivas teóricamente posibles. Las leyes inmanentes a la evolución el dispositivo conceptual -la noción de cstilo- para resolver este sino que se apoya más o menos parcialmente en el pasado, es posible distinguir qué
literaria ofrecen sólo una ecuación indeterminada que admite varias soluciones en estilos son más o menos valiosos desde un punto de vista genético, en la medida
El ritmo es una coacción, genera un ansia irresistible de ceder, de ponerse al unísono, dilema dentro de los lineamientos del formalismo literario. Por cualidades para la regeneración, el potencial para crear algo nuevo
número limitado, sin dudas, pero que no llevan obligatoriamente a una única
no sólo los pies sino también el alma sigue el compás ¡quizás
también el alma de
los dioses!, se concluía. Se trató por consiguiente de constreñirles mediante el ritmo
solución. Elproblema concreto de la elección de una dirección o al menos de una estilo no refiere a la taxonomía de fórmulas para componer la o¡e118).
dominante, no puede resolverse sin analizar su correlación con otras series sociales. fachada clasificando el tratamiento de la superficie de los muros,
y ejercer una fuerza sobre ellos, se
les echaba al cuello la poesía como unmágico Por esta razón el eclecticismo, por más brillantes que sean sus representantes,
Esta correlación tiene sus leyes estructurales específicas. Considerar la correlación
lazo. Friedrich Nietzsche, La gaya ciencia, 1837. de los sistemas sin tener en cuenta las leyes inmanentes a cada sistema es un camino las aberturas u otros detalles; sino a una convergencia orgánica de es genéticamente estéril (-..) no crea nada nuevo, no enriquece el arte, y por consi-
funesto desde el punto de vista metodológico. Ossip Brik, Rumo y sintaxis, 1920. todas las expresiones genuinas de un época: desde el drama épico guiente el curso evolutivodel arte y da como resultado un menos, (...) es posible
reconocer, sin ninguna dificultad, que tendencias tales como el Modemismo
La cita es parte de un párrafo más extenso donde Nietzsche habla al humor de las calles, a la que alude la cita de Wolfflin que abre y la Decadencia, así como todos nuestros neoclasicismos y neorrenacimientos, no
de la esencia desinteresada del arte, que ha existido siempre en Quedaba por definir cuál sería esa dominante que definiría - como epígrafe a Estilo y época.* pueden pasar de ningún modo la prueba de la modernidad. Al haberse originado en
las mentes de arquitectos cultos y refinados, al haber producido imágenes bastante
tanto nos permite «enlazar» a los dioses, lejos de lo cotidiano y lo
la dirección y el ritmo de la inminente evolución. Y fue Credo,
logradas en sí mismas, esta costra estética superficial (...) representa una vana
manifiesto de su amigo Aleksandr Vesnin, el que le dio la res- Vemos nacer un movimien Í á 1 invención que resultó atractiva para un pequeño circulo de entendidos, pero que no
útil.? Al recortarlo estratégicamente, deja abierto otro sentido: miento en numerosos puntos; aquí y allá la forma antigua
cambia, la transformación repercute y, finalmente, nada podrá resistir a la comente, refleja sino la decadencia e impotencia de un mundo obsolescente (pp. 114-5).
ese mismo ritmo también sirve para enlazar cl alma de los hom- puesta: la máquina, el movimiento mecánico.
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Una evolución que se dirime en la polaridad de las leyes de La máquina a vapor y la fábrica de aviones Ansaldo en Turín;
un refrigerador
continuidad e independencia, donde resuenan las palabras del eje resultante de las fuerzas dinámicas en el
Dela mismamanera quecada parte dela máquina
el desplazamiento
de Mikolaj Kruszewski, que otorga al trabajo histórico el rol de A
materializa en una forma y material que corresponde Electric Elevator de Buffalo y la Torre de Tatlin; las diferencias
bitácora para definir el curso de un arte nuevo. a su fuerza ypotencia, a lamanera en quedebe a con distintos materiales en refrigeradores a vapor
en la expresión
dentro de un sistema, y por lo tanto su forma y mate.
Desde cierto punto de vista, el proceso de evolución de la lengua aparece como
rial no pueden ser arburariamente cambiados sin
y el
elevador Washburn Crosby Ges; la resolución volumétrica
el antagonismo eterno entre la fuerza progresista, determinada por las relaciones de afectar todo el sistema, así en un objeto hecho por un y alineación
de partes siguiendo el ritmoy la dirección de la
artista cada elemento es una fuerza materializada y nf
semejanza, y la fuerza conservadora determinada por las asociaciones de contigúi-
dad. M. Kruszewski, Esbozo de una ciencia del lenguaje, 1883. puede ser arbitranamente descartado o cambiado
sin destruir la operación del sistema es dear, del objery
producción de un elevador no identificado en Buffalo y el Pabellón
Alexander Vesnin, Credo, 1922.
del Departamento Cultural y Educativo de Zholtovski que sirve
Con independencia de cuál de estos caminos pueda seguir el arte (la emergencia de la introducción de los principios de la construcción
nuevos elementos o de nuevos métodos compositivos) la apariencia de un estilo para marcar
nuevo y consumado sólo es posible como fruto de estos dos principios: la continui-
dad y la independencia. (...) La ley de continuidad economiza el ingenio y los
Planteada la lógica intrínseca de la serie arquitectónica, Ginzburg: ingenieril en la arquitectura rusa."
Elevador en Buffalo (Moisei Ginzburg, Escritos 1923-
recursos creativos consolidando su experiencia y su destreza, mientras que la ley de
emprende el abordaje de las otras series. Hasta ahora había habidg 1930, Madrid, El Croquis Editorial, 2007), p. 210.
independencia constituye la fuerza motriz que confiere a la creatividad sus esencias
saludables y juveniles y la sutura de ese intenso aspecto de contemporaneidad sin
heraldos de la nueva época tanto en las artes como en el mundo
Los elementos Pabellón de Cultura de Zholovski (Moisei Ginzburg,
el cual el arte sencillamente deja de ser arte (p. 119). social y productivo: la industrialización y la estandarización los -
Escritos 1923-1930, Madrid, El Croquis Editorial,
nuevos materiales, el valor otorgado al trabajo y al ahorro de las
4 ¿Sigrifica esto que nos veremos obligados a empezar 2007), p. 210.
Y en esta reconstrucción del proceso incesante de transformación energías humanas racionalizadas por Frederick W. Taylor, la Grant
nuestra labor creativa desde el principio, fuera
y más
allá del ciclo completado? Desde luego
de las formas, introduce una nueva polaridad que es la que le que no. En
Guerra, la Revolución Rusa, las vanguardias plásticas, las cons- -. -- primer lugar sencillamente no podemos hacerlo, al
permite laudar sobre el perfil -de síntesis superadora- del nuevo trucciones industriales e ingenieriles. Había llegado el momento igual que una persona no puede saltarpor encima de sí
misma, un cambio brusco en los fundamentos básico
estilo." Nos referimos a la polaridad ancestral de las dos grandes de enfrentar una confluencia productiva y la clave, como dijé-
delpensamiento ylapercepcióndelserbumano ypor
lo tanto en la labor creativa- resulta fisiológicamente
culturas -mediterránca y nórdica- «que de una forma u otra ramos, la ubica en la máquina.
imposible, (...) en segundo lugar ni siquiera deseamos
participaron de manera continua en el desarrollo»: la greco-itálica, La máquina está detrás y la máquina enseña. Las lógicas y hacerlo, (...) Ls pregunta que queda por responder es
«un mundo perpetuamente impregnado de las esencias del anti-
propiedades de la modernidad se encarnaron en la máquina y se aeode steci loyacompletadop se nvalor?.153).
guo y absoluto», y «la sangre juvenil y virulenta de los bárba- trasladaron a las construcciones ingenieriles y, desde ellas, a las
ros del norte». No es necesario aclarar su filiación con la fábricas para, transitivamente, hacerlo próximamente en la
cuestión de los caracteres nacionales planteadas por Wolfflin
¿Qué tiene que decir la máquina respecto a esa superación
arquitectura. Pero esta transmisión no es directa. En particular, dialéctica del Clásico, síntesis de la planta mediterránea y el ritmo
como una suerte de sentido constante de las formas propias no tiene que ver con la analogía de las formas (y con este mando-
nórdico? Para responderlo, Ginzburg despliega un análisis por-
de un pueblo que «se afirma con menor o mayor claridad en ble caen no sólo el silenciado futurismo sino aun las formas
menorizado de cada uno de los elementos específicos de la
todos los estilos». Basta una apretada síntesis de su caracteriza- hieráticas de Le Corbusier); sino con los principios de un trabajo:
ción por Ginzburg que, como hemos dicho, tiene especial tras-
arquitectura -como dijimos, ya señalados por Ladovski- y que
creativo que encuentran modulaciones formales que operan como
en el plano literario había sido el objeto del Formalismo. Edifica
cendencia en su teoría: la deliberada claridad de la solución nexos (aunque no determinantes) entre máquina y arquitectura.
sus definiciones en diálogo con las categorías polares concep-
espacial meridional, que adquiere expresión formal en organis- (Raumform) y tiene que ver con el modo en que estosespacios
EJ arte auténtico nunca consiste en imitar, nunca abandona sus cotas organizativas,
tualizadas por Paul Frankl." Más tarde propondrá su organiza- están delimitados. En clla opta
mos extendidos longitudinalmente con tipos que buscan lo por el polo aditivo (Raumadittion)
sino que representa un mundo autónomo de leyes y principios que sólo son ción según una resolución y mutua determinación orgánica
universalmente convincente y formas idiosincráticas del arte también asociable a lo mediterráneo: elementos claramente dis-
adecuados para la vida. Pero esta misma adecuación obliga al arte a ser moderno, en:
y gradual.
septentrional que no duda en sacrificar la claridad de la planta palabras de Wolfflin, «las formas del arte dicen las mismas cosas en su propio len- criminados, subordinados y agrupados en secuencia, cada uno
guaje que las voces que le son coetáneas». (...) Entender la significación de ese Ginzburg define el espacio al modo de los formalistas: en con su perfil geométrico y modo de iluminación característico.
y la nítida articulación de las partes en la consecución de una rotundo conjunto que es la vida moderna; impregnarse con sus preocupaciones y
sus placeres, de su paisaje, de sus cielos cruzados por cables y aviones en vuelo;
contrapunto con la construcción «prosaica». Siendo la construc- Eso es lo que las plantas de las fábricas enseñaban: la disposición
idea dinámica dando como resultado un ricoy ferviente
comprender las distancias que se han reducido gracias al movimiento de la máquina ción resultante de «la necesidad de aislar, de encerrar cierta
dramatismo. las calles atravesadas por la nítida silueta de un puente y, entre ellas, las manchitas
| racional de las máquinas, sin espacio vacante
para reducir el
intensamente resplandecientes de los transeúntes: percibir todo esto y formularlo porción de espacio con unas formas duraderas», era tarca del calculado gasto de energía de los operarios
En su argumentación sólo resta decretar el fin del clásico co
y los desplazamientos
una expresión adecuada es la tarea del arte moderno. Pero ¿cómo podremos salvar arquitecto <la organización de este espacio aislado, y de la forma coordinados de gentes y cosas.
que desde Grecia «rompiendo las barreras de las edades queda la distancia entre el conjunto de la modernidad y el monumento arquitectónico
cristalina que envuelve lo que es esencialmente un espacio amorfo
cuando nos damos perfecta cuenta que la única analogía posible radica en los princi
impregnado de nuevas energías y finalmente, en el siglo xv se pios del trabajo creativo y no en sus formas? (pp. 1934). (...) estableciendo el carácter particular de las experiencias espa- La máquina exige (...) la capacidad de articular un esquema en elementos distintos
transforma en una impetuosa corriente que brota turbulenta y relacionados entre sí por una cadena indestructible de interdependencia, donde cada
ciales, de las sensaciones provocadas por los interiores de las
majestuosamente». Una fase clásica que al Barroco le había Eso es lo que las imágenes vienen a demostrar. Hay fotos de obras, por sus límites espaciales y por el sistema que lo ilumina»
uno de ellos constituya un organismo independiente
que ponga claramente de
manifiesto la función para la que se hizo y a la que cada uno de sus componentes
correspondido llevar a la destrucción final, agotando su manantial silos y hangares, de puentes, grúas, aviones y locomotoras; tam- (Pp. 116). Entiende al espacio desde la convergencia de dos cate- están subordinados (p. 169).
hasta el derrocamiento final del viejo sistema y abriendo la posi-
bién de la terraza de la fábrica Fiat en Turín. Sin embargo, no gorías planteadas por Frankl. Una dimensión preformativa
bilidad de un nuevo estilo surgido de la integración dialéctica del Lafábrica es la consecuencia más natural del desarrollo de la máquina; reúne en su
son los mismos ejemplos -y en caso de serlo, no son las mismas
(Zaweckgesinnung), escenario para determinadas acciones y activi- interior todo un conjunto de máquinas
que a veces son homogéneas y otras hete-
espacio clásico y el ritmo nórdico. tomas- que los empleados por Le Corbusier en Vers une dades humanas donde rogéneas, pero que siempre están ligadas por el mismo propósito común [Zweck],
se diferencian un armazón de recorridos
(...) la colocación de estas máquinas, la dirección de sus ejes, la pendiente de lo
¿Cuál de estos dos sistemas de pensamiento arquitectónico [el del sur y el del norte] Architecture;* y el propósito y la estrategia son diversos. Cada Y equipamientos, que resulta de las intenciones
y jerarquías con distintoselementos está estrictamente organizada y, además, materialmente unido
las que el propósito (Zweck) por las cintas de las poleas y por los engranajes, (...) representa ya una verdadera
es el más conveniente para nosotros? Ambos lo son. Esto es lo que constituye el
capítulo es encabezado por dos imágenes cuyo objetivo es mostrag es interpretado y organizado obra de arquitectura con todas sus características espaciales (p.
197).
origen de su significación genética, de su valor potencial para el tiempo presente. La la materialización de los mismos principios creativos en máqui- como programa. Esta red de movimientos (Gewenungsnetz),
deliberada claridad de la solución espacial ¿no es éste el origen del racionalismo
moderno, de la atención que tan esmeradamente prestamos a la articulación precisa nas y construcciones ingenieriles y, eventualmente, en la arquitec para una concepción aditiva (mediterránea) del espacio,
del problema utilitario? La dinámica y su fuerza de penetración ¿no son éstos los
una see de
supone Respecto a la materia (estructura) es clara su consideración den-
tura. Por ejemplo: la estructura reticulada en una grúa y los
elementos del impacto artístico moderno?, ¿no son los atributos que con mayor puntos de calma (Rubenpunkte) a lo largo de líneas tro de los parámetros de la perspectiva materialista alemana
y
avidez. persiguen los arquitectos de nuestros días? (p. 154). andenes de la estación de Colonia; la dimensión volumétrica en
_de conexión (Vermittlugsachsen). La otra dimensión es formal su planteo de una relación inmanente de las formas
con las técni-

34
35
cas constructivas dentro de una tendencia sostenida hacia reso- La consideración de estas cuestiones constructivas, si bien
luciones más livianas resultantes de un aprovechamiento eficiente importante, tiene un rol secundario en la definición de la forma :
e ingenioso de los materiales, convergente en Die Tektonik der que sintetiza, en la sintaxis de elementos
horizontales y vertical eslE--
Hellenen de Carl Bótticher, en 1844. La de Ginzburg es una acep- la experiencia tectónica."
ción de tectónica como comprensión intuitiva de los comporta-
En la inmensa mayoría de los casos, el verdadero significado de la arquitectura, se *
mientos estáticos, distante de la acepción confusa de la Tektonika :4n rítmica del Palacio del Trabajo de los
distingue principalmente en sus aspectos constructivos. (...) Sin embargo, sería un
del Grupo Productivista vinculada al matiz ideológico desde grave error limitarse a hacer esta interpretación
de los monumentos arquitectónicos N(OSVesnin (Moisei Ginzburg, Escritos 1923-
dónde se manipulan los materiales industriales para eliminar la
Junto con la experiencia que adquiere al afrontar sus edificios, el hombre desarrolla 1930, Madrid, El Croquis Editorial, 2007), p. 179.
también un complejo sistema para encarar un mundo autosuficiente ligado a estas *
arbitrariedad del programa. construcciones. La psicofisiología" moderna ha establecido que diversos elementos >
formales (la línea, la superficie, el volumen) tanto en sí mismos como en distintas
3
yuxtaposiciones, provocan sensaciones de satisfacción o insatisfacción, al igual que
Como fruto de nuestra experiencia perceptiva, las leyes matemáticas de la estática y determinados colores y sonidos (pp. 1834).
la dinámica se animan como fuerzas vivas del mundo orgánico; por consiguiente,
desde el momento en que el hombre da sus primeros pasos, la forma ejerce una
influencia espontánea que se va haciendo cada vez más clara, nítida y concreta. (...) La plantea como una condicionante variable, según de qué fase ed
La construcción del organismo arquitectónico adquiere una significación distinta
el la evolución del estilo se tratare. "Tal es la etapa constructiva del
y autosuficiente; y en virtud de una clase particular de asociación, llamada motriz,
hombre trata de encontrar en esta construcción inanimada ese elemento de movi- estilo contemporáneo que, con esta mención, queda subsumida
miento que se traduce en el desarrollo de la forma y cuyo reflejo se produce durante
como antecedente reconocido del que se hace cargo para plantear:
su percepción. Las formas inanimadas (...) adoptan una vida distinta en nuestra
conciencia como fragmentos de movimiento universal. (...) El movimiento como tal una nueva fase orgánica todavía incierta.
se concentra en dos elementos básicos (el vertical y el horizontal) que entablan
una competencia o una lucha. (...) Por tanto, el sistema constructivo, en virtud de
nuestra experiencia perceptiva y de las características psicobiológicas del ser humano,
Cuando surge un nuevo lenguaje estilístico, cuando se crean sus nuevos elementos,
da origen a otro sistema autosuficiente que procede y depende de la construcción naturalmente no hay necesidad de diluirlos con ninguna otra cosa: lo nuevo nace
del mundo de la forma, o para ser más exactos un sistema estético. El mismo en su mayor parte como una necesidad constructiva y utilitana. Los elementos deco-.
rativos que surgen posteriormente no perturban su vida orgánica hasta el momento
componente es al mismo tiempo un elemento utilitario de la construcción y un
autónomo. La ¡uy
elemento estéticodela forma (pp. 184-5). que un exceso de ellos rebasa esos límites cayendo en un juego
tud de un nuevo estilo es primordialmente constructiva, su período maduro es cia, convirtiéndose con frecuencia en los instrumentos primordiales del artista. (...)
Y el ritmo de esta nueva arquitectura está planteado en concor- No cabe duda de que las cuestiones relativas a esta clase de factura de los elementos
orgánico y su decrepitud decorativa. (...) Desde este punto de vista trataremos de
evaluar el «constructivismo» moderno como fenómeno artístico. "Tal vez podamos dancia con la máquina. formales (...) impulsan al artista a abandonar su estudio y tener participación más
Es fácil relacionar esta concepción con la Kórperform de Frankl, directa e íntima en la ejecución de un monumento arquitectónico, donde la propia
comprender mejor tanto la amenazante consigna propuesta por los constructivistas
vinculada a las sensaciones psicológicas despertadas por las rusos como sus bravuconadas que son completamente naturales desde el punto de La máquina da origen, de modo natural, a la concepción
de organismos totalmente elección de los materiales y la manera de tratar la superficie de un muroo sus ele-
claramente expresadas de movimiento: mentos representarían la culminación natural de la metódica organización global de
vista psicológico y plenamente familiares para el historiador del arte (p. 189).
formaciones corpóreas limitadoras del espacio donde, en la pola- nuevos y modernos que poseen características
la labor creativa (pp. 172-3).
su tensión e intensidad,
así como su dirección nítidamente expresada. Estas caracte-
ridad Kraftzentrum (mediterránea) está implícita la apreciación La cuestión no radica -como algunos constructivista están tratando de hacernos rísticas dan lugar a la concepción de nuevas formas gracias a las cuales la tensión y la
de los esfuerzos estáticos centrados, es decir de un esqueleto de creer- en que esa emoción estética haya desaparecido; afortunadamente ahí no está
*
concentración inherentes a este movimiento se convertirán inadvertidamente en uno
el problema, y esto queda perfectamente demostrado en el trabajo de los propios En síntesis, la arquitectura sigue siendo arte. Aunque las lecciones
de los momentos fundamentales de la concepción artística (...) y así llegamos a la
elementos de sostén conductor de las fuerzas, firmemente constructivistas; más bien la cuestión radica en que bajo la influencia de las alterada conclusión final que nos impone la máquina: que es posible y natural que la composi- de la máquina marquen el ritmo y la dirección dominante,
adherido al piso y autosuficiente, dando la impresión de una condiciones de vida y la importancia de la economía y la tecnología moderna nuestra ción de los arquitectos modemos muestre una forma asimétrica o que, como mucho,
emoción estética, su carácter, se ba transformado. En nosotros sigue y seguirá exis- mo tenga más que un eje de simetría subordinado al principal eje de movimiento Ginzburg no renuncia a la voluntad de presentar la anatomía del
sólida masa muscular. tiendo siempre la necesidad de lo estéticamente desinteresado dado que constituye él (...) Los dibujos corresponden al proyecto del Palaciodel hecho arquitectónico como una estructura discursiva intrínseca-
y que no coincida con
una de las características fundamentales e inquebrantables de nuestra naturalez Trabajo realizado por los hermanos Vesnin y a su esquema dinámico que representa mente significante (aunque liberada de funciones representativas
Es natural que su inventiva no cese hasta encontrar un maternal que corresponda al física, o si se quiere biológica, pero la satisfacción de esa necesidad sigue un camino- un diagrama descriptivo de la concepción arquitectónica moderna (pp. 179-180).
distinto. El elemento decorativo más atractivo para nosotros es precisamente el que o narrativas) que obedece a una evolución autotélica en relación a
elemento necesario, hasta que ese elemento alcance su expresión más concisa y hasta
aparece sin adornos en su aspecto constructivo, así el concepto de lo constructivo
ba
que su forma adopte un perfil que garantice el movimiento más
económico en el
sus medios específicos y sus principios intrínsecos. Y el arte
sistema combinado general. (...) Así pues, bajo la influencia de la máquina, se forjan integrado dentro de sí el concepto de decorativo, se ha fundido con él y causado este Este ritmo tiene que ver con la imagen mental construida por el
enredo de conceptos (pp. 190-1). es una dimensión esencial de lo humano, aun en la Rusia
en nuestra mente unos conceptos de belleza y perfección como entidades que mejor observador del edificio que sigue remitiendo a una impresión
responden alascaracterísticasdel material que está organizando y a suutilización más
frontal. Todavía no alcanza a ser definida como la resultante de revolucionaria.
económica en la consecución de un objetivo específico, es decir, la máxima concen-
Laforma, para Ginzburg, se resuelve claramente en la envolvente
tración enla forma y lamáximaprecisión en el movimiento (...) dará origen a una una serie de impresiones diagonales y en escorzo de un conjunto
La necesidad en el arte, en la creación y consumo de tesoros artísticos, constituye
forma vigorosamente concentrada carente de todo carácter difuso (pp. 171-2). liberada, en sintonía con Le Corbusier, de toda referencia cons- fraccionado, propia de la polaridad múltiple de la Bildform de uno de los fundamentos más recónditos de la naturaleza del hombre, el mejor
tructiva. Es una suerte de Stilbilse, de vaina artística perfomativa2 medio de realizar la intensidad de ka vida humanay
Frankl; luego, tras la clara pronunciación por conjuntos volumé- su energía social y organizativa,

No hay en Ginzburg la voluntad de laudara favor de los nuevos y nórdica, como estrato explicativo que da cuenta simbólicamen:
d tricamente variados y extendidos en el terreno, esta apreciación
correspondiente en igual medida al salvaje, al niño y a la ultramecanizada persona
moderna (p. 193).
materiales o de proponer un sistema estructural como fundamento de una Kemform vital en el espacio y los esfuerzos de sostén del
resultará inevitable.
del nuevo estilo. Deja así abierta la posibilidad de encontrar contenedor material. Y la clave para su resolución cs el ritmo, Es en este mismo registro de la forma y la impresión estética
nuevas formas de empleo de la madera, material tradicional al que de allí la calificación de orgánica para esta etapa madura del de la envolvente que Ginzburg recurre a la tercera categoría del El método
solían recurrir los miembros de esta elite arquitectónica, tanto nuevo estilo.
Konstructivizm: la Faktura, relativa a la manipulación de los
por las dificultades tecnológicas que padecían como por verlas materiales y apreciable en su textura que, en tanto pasa a ser fun- El arte siempre ba estado emanapado de la vida y
El estilo arquitectónico se compone de una serie de aspectos espaciales y volumé-
como una puerta de conexión a la arquitectura nacional." nunca su color ba reflejado el color de la bandera que
tricos que están organizados según diversos conjuntos de características compositivas damental en la concepción arquitectónica, obligaría al arquitecto ondea sobre la ciudadela.
que dan lugar al problema dinámico del ritmo (p. 118). a tener una participación directa en la ejecución del monumento. V. Sbklovski.
Pese a lo común del lenguaje del estilo moderno, aparecerán las más diversas varia-
ciones, como el estilo de la madera o el del hormigón, el estilo del vidrio y del Al igual que la simplificación de los elementos arquitectónicos facilitan su orga-
hierro; y es que el cometido del arquitecto, como el del constructor de máquinas, nización más efectiva, la pérdida del papel autónomo de la superficie del muro lleva Puesto que en la máquina todo está organizado hasta el último milímetro, se deduce
Hasta aquí, estas piezas teóricas habían resistido la atracción del
supone no una improvisación arbitraria, sino una organización razonable del mate-
al arquitecto al claro entendimiento de su cometido más importante y profundo. que las cuestiones relativas a la calidad del material, a su tratamiento y a sus caracte-
rial que tiene a disposición. (...) Y es que toda la intención del poder organizativo de La superficie del muro y su articulación rítmica, la interdependencia proporcional de risticas superficiales -es decir si es rugosooliso, si tiene color o no- son casi tan color de la bandera.
los arquitectos denva de la utilización razonable del «trabajo» realizado por el todos los elementos: todo ello encuentra su propósito primordial en elproblema importantes como las cuestiones más esenciales ligadas a cualquier sistema de creati- Pero se abre una nueva etapa. Como numen intelectual de
material. (...) Resultará completamente natural que el hierro imponga un tipo de de envolver el espacio, crear sus límites y organizarlo siguiendo unos prinapios vidad. (...) Las cuestiones relativas ala factura
y la elaboración de un material
armonía; la piedra, otro; y el hormigón armado, algo completamente distinto (p. 171). definidos (p. 206). que, por tanto, se manifiestan con toda nitidez- adquieren una enorme importan- la OSA y redactor estrella de su publicación SA, la voz del príncipe

36 37
es escuchada. La suya deja de ser una operación deconstructiva M. Ginzburg. las aberturas, el tipo de cubierta, la nqueza de las divi-
¡ones de
Proyecto para el elementos funcionales, lasrelaciones entre volúme-
del hecho arquitectónico orientada a la búsqueda de los Palacio del Trabajo siones y otros
el orden rítmico de las fuerzas
fundamentos de una estética esencial espejada en las reflexiones (Moisei Ginzburg, nes que
se cruzan y entrecortan,
Escritos 1923-1930, los contrastes, la silueta.
del Formalismo literario, para reconvertirse en un método verticales y horizontales, la escala,
Madrid, El Croquis
Editorial, 2007), p. 233. la Faktura y el color. Todo debe ser manipulado
positivo de creación, vector de una propuesta eficiente puesta al - También con
el propósito del edificio con
servicio del nuevo comitente: los trabajadores, pero también
paraqque aparato psicofísico perciba,
el Estado. dida de energía: una versión funcionalista de la
la mínima per
Lo que en un primer momento se restringía a la enunciación de carácter.
vieja noción de
principios de un arte autónomo, desde su primer artículo en SA del pasado
se transfigura en la definición de un método lógico de invención La percepción pasiva y predominantemente sensitiva y contemplauva
seDetitodelyepresente
en gran medida por wna percepción activa y preferentemente
y delfuturo. (...) Es difícil imaginar que un
cognoscitiva
hombre moderno
para enfrentar la resolución de los problemas sin inspiración ¡e
sin tener en cuenta sus funciones como máquina
abstracta o individual." Un método que elimina la dualidad entre ba la forma de un automóvil
se trata de la percepción de la forma, el color olaconfigu-
de moverse. (...) Cuando
el carácter práctico y su forma resolviendo los problemas expre- ración el constructivista no resuelve estas cuestiones de modo general, sino en función
sivos conforme a la organización funcional y constructiva del de un propósito, unos materiales y unas condiciones de acción determinadas>

espacio donde quedan integrados -orgánicamente, de adentro


sino que
hacia afuera, partiendo de la planta como había sugerido No se trata de un proceso puramente intelectual,
M. Ginzburg. Proyecto Orgametal (S. Khan-
- débe ser entendido en relación a la experimentación concreta en
Le Corbusier los aspectos estéticos de la arquitectura sin caer Mogamedov, Pioneers ofSoviet Architecture, V.ondres,
una serie de proyectos
donde se verifica un pasaje desde la Thames and Ludson, 1987), p. 182.
en el sinuoso camino de la intuición subconsciente.

Por tanto la integridad de esta operación monista del constructivismo no se


exploración geométrica con juegos de grillas y transparencias M. Ginzburg. Narkomfin (Moisei Ginzburg,
abellón soviético para la Exposición de Artes Decorativas Escritos 1923-1930, Madrid, El Croquis Editorial, 2007),
fundamenta en el rechazo a la expresividad de los aspectos materiales (aspecto p. 3%.
frecuentemente atribuido al constructivismo) sino en la organización de este efecto de 1925, Palacio del Trabajo Rostov on Don del mismo año),
en el proceso mismo de formalización práctica y constructiva de esos objetos."
pasando por composiciones donde sc acentúan las características
funcionales de cada una de las partes del edificio (Orgametal,
Para ello recurre a la división analítica del proceso en tres fases,
1926), hasta la manipulación de volúmenes centrífugos que,
temporal y artificialmente aisladas, recuperando sus indagaciones articulados por puentes o corredores, despliegan la diferenciación
sobre los medios específicos de la arquitectura. de actividades como si se tratara de un tren de producción
La primera fase tienc que ver con el espacio, con el sentido con
(Narkomfin, 1928).
que el cual el propósito es interpretado y decodificado en un Su apreciación funcionalista distó del rigor materialista y el
programa resultante del análisis de los movimientos y la división determinismo constructivo promovido en los discursos más
de las funciones, estableciendo su mutua dependencia. Los M. Ginzburg.
radicales de la neue Sachlickeit o de otros integrantes de la inter-
Proyecto de Pabellón
resultantes son un gráfico de movimientos, un esquema de equi- soviético para la nacional constructivista como Karel Teige. Aunque mitigada en
pamientos y uno de necesidades físicas. El modelo cs la fábrica, Exposición de Artes sus consideraciones, la suya siguió siendo una defensa de la
Decorativas de 1925
pero llega la hora de aplicarloa la vivienda y los establecimientos (S. Khan-Mogamedov, dimensión expresiva de la arquitectura. Su «método funcional»
Pioneers ofSoviet
públicos. culminaba en la definición estética de la forma que no era mecá-
Architecture, Londres,
"Thames and Hudson, nicamente determinada por lo programático espacial y lo cons-
Un chub, las casas de los Soviets, un hospital, un comedor, una estación, un teatro,
1987), p. 182. tructivo, sino que seguía teniendo a su cargo, como en sordina, la
un cine, etc. (...) ¿Qué son todos estos usos modernos desde el punto de vista
del método funcional? Se trata de un sistema de procesos productivos y humanos manipulación artística de los efectos del ritmo.
que han de ser analizados, fragmentados y matenializados con la misma exactitud que
Sobre el signo de estos esfuerzos 'lafuri fue lapidario:
cualquier empresa industrial?*

«aferrados desesperadamente al único espacio que en el período de la NEP (Nóvaya


Estos esquemas derivan en un diagrama de espacios unidos por
ekonomicheskaya politika) estaba prohibido -la prefiguración de un mundo nuevo
gráficos de movimientos que reciben una definición volumétrica como proyecto abarcador de reorganización ética del universo de la producción y
sus proyecciones sociales- la casa comuna y el desurbanismo no son más que propa-
particular según una planta asimétrica, abierta, para hacer más ganda tecnificada. Y además propaganda que tiende, desesperadamente, a crearse una
legible la vida dinámica que se desarrolla en ellos. clientela, a justificar, con la apariencia de ser un mero aporte técnico, la autonomía
del mismo aporte del proyecto»?
La segunda fase tiene que ver con la estructura, con la configu-
ración material de cese interior según el cálculo de las posibilida-
Esa misma autonomía que su ensayo y su tratado habían de un aporte a la teoría de la arquitectura se mide en el devenir
des de los materiales disponibles (cligiendo los más ligeros y
defendido. histórico. El espesor de cada uno de los medios específicos sobre
dinámicos) y los sistemas constructivos (proponiendo los más
A pesar de la operación desmitificadora de Tafuri, hemos visto los que él argumentó extensamente -espacio, materia, forma-
racionales e industrializables).
cómo se ha simplificado el avance teórico de Ginzburg. Se lo ha recobran nuevos sentidos como un esfuerzo sistemático por des-
Nunca llega a renegar de la condición artística de la arquitec-
--
desprovisto de los matices de una maduración compleja en diálogo brozar radicalmente los principios de un hacer autónomo en un
tura sintetizada en su potencial expresivo; es la que organiza la

tercera etapa relativa a la envolvente. Tiene que ver con el cálculo


-no explícito- con el Eormalismo, deshistorizando la gestación período donde otros teóricos de la arquitectura nueva indagaban
y el desarrollo de un pensamiento complejo. Pero la productividad cuestiones semejantes.
de los efectos psíquicos y ópticos: la forma, particiones y propor-

,
39
Notas ciarse, evita cualquier mención aún cuando la noción de ritmo era recurrente en sy Grecia había sido el templo, la catedral para el gótico, el palazzo para el
retórica. Terminados sus estudios e iniciada la guerra regresó a Moscú donde pros. o qque para
¡miento, para la arquitectura contemporánea eran la vivienda obrera y los
1. Reproducido en Tzvetan Todorov (comp.), Teorías de la literatura de los formalis- guió su formación en el Instituto Politécnico de Riga para diplomarse en 1917 comoE
tas rusos, Buenos Aires, Siglo xx1, 2008, pp. 31-33 (París, Fd. Du Seuil, 1965). ingeniero-arquitecto.
nuevos condensadores sociales.
e - y. Heinrich Wolfflin, «Italien und das deutsche Formgefiihl» (1931) reproducido
2. Moisei Ginzburg, Rem v arkbitekture, Sredi Kollektsionerov, Moscú, 1923 20. En "T. Todorov, op. cit, p. 97.
Reflexiones sobre la Historia del Arte, Barcelona, Península, 1988, pp. 119-1950.
-cubierta de Ivan Rerberg, 118 páginas (10 3/4" X7 3/47), 2.000 ejemplares-; Stil": 21. Citado por Boris Eichenbaum, op. cit, p. 38.
22. En T. Todorov, op. cit, p. 221.
e Han sido múltiples las analogíasdiscutir
planteadas entre til": epobka y Vers une
(ver Kenneth Frampton, «Avant-propos»
epokha, problemy sobremennoi arkhitektury, Moscú, Gozidat, 1924, 38 páginas, Architecture que aquí no se van a
41 pl. de fotos en blanco y negro (9 X7 1/47, 2.000 ejemplares. Se ha trabajado con 23. Ibidem, p. 43. Guinzbowrg, Le style et Vépoque. Problemes de l'architecture moderne,
4 Moisti
la traducción italiana -Moisei Ginzburg, Saggi sull'architettura costruttivista, 24. No es difícil identificar algunas de las polaridades de Wólfflin: lo lineal, lo
Bruselas, P. Mardagan, 1986, pp. 7-9; Reyner Banbham, A Concrete Atlantis, US.
Milán, G. Feltrinelli, 1977, pp. 3-164- y la castellana -Moisei Ginzburg. Escritos cerrado, lo tectónico y unitario, la grandeza y simplicidad de lo clásico. También ¡al Building and European Modern Architecture 1900-1925, Cambridge,
1923-1930, Madrid, El Croquis Editorial, 2007, pp. 23-102. De esta última, la cita está presente la polaridad del espacio centrípeto y autónomo (Freibets), el límite 1982, pp. 231-236. Baste decir que algunos ejemplares de Esprit
MT Press,
directa con número de página. continuo de una forma espacial cerrada y la impresión de autosuficiencia y serenidad E habían Hegado a Rusia hacia 1922 y seguramente eran conocidos
Nouveau
3. Virtorio De Feo, URSS. Architettura 1917-1936, Roma, Ed. Riuniti, 1963. (Kraftzentrum) extraídos de las fases evolutivas de Paul Erankl sobre las que = Ginzburg; pero no es suficiente para poner en cuestión la originalidad de
4. «Se puede resolver la arquitectura como una fórmula algebraica que tenga como volveremos más adelante. esantenor a la edición del libro de Le Corbusier. Los argumentos
su propuesta que
elementos dados los principios y técnicas de la producción y por incógmita la 25. Es de notar la coincidencia con el léxico y la consideración tripartita de
V. Yormunski en Introducción a la métrica: «La orientación hacia determinado
incipales de Stil" ¿ epokba, si bien publicado en 1924, habían sido enunciados en
función de un edificio». V. De Feo, op. ar., p. 56. frente al MAO Sociedad de Arquitectos de Moscú el 18 de mayo
una conferencia
5. Anatole Kopp, Villes et Revolution, Architecture et urbanisme sovietiques des procedimiento rítmico precisa el carácter concreto de la obra y desde ese punto de dos artículos de su órgano oficial Arkbitektura, cuyo
de 1923 y desarrollados en
années vingt, París, Antropos, 1967. vista se pueden clasificar los versos en acentuales (la descripción de la batalla de
comité de redacción integraba con Leonid Vesnin y E. 1. Norbert. Luego leyó su
6. Anatole Senkevitch, Jr., «Moisei Ginzburg and the Emergence of a Constructivist Poltava), en versos armónicos y en versos entonacionales o melódicos». Citado por resto completo en febrero de 1924 frente a la RAKHN, la Academia Rusa de Ciencias
"Theory of Architecture», en Moisei Ginzburg, Style and Epoch, traducción y Bons Eichenbaum, op. cit, p. 61.
Agtísticas formada en 1921 y cuya sección de arquitectura presidía 1. 7-holtovski.
edición Anatole Senkevitch, Jr., MIT Press, Cambridge, MA, 1983. Su trabajo fue el 26. Aquí es posible no sólo identificar las categorías de pictórico, abierto, múltiple de Zholtovski formó parte de la Exposición de la Agricultura y
43. El edificio
resultado de su larga estadía en Moscú con una beca Fullbright-Hays (1977) y otra de WaHflin; sino de espacio centrífugo y subordinado (Gebundenbeit) y de derrow
el Artesanado realizada en Moscú en 1923, primera ocasión en que los arquitectos
del Committee on Soviet Studies de la Comell University (1981-2). frente a las fuerzas tectónicas (Kraftdurchlass) de Paul Frankl.
- tuvieron la oportunidad de dar a conocer sus elaboraciones innovadoras posteriores
7. «Un corolario de la teoría genética de Ginzburg es que las modificaciones estilísti- 27. Reproducido en T. Todorov, op. cit, p. 73. construcciones constituyeron el principal material de
ala Revolución y cuyas
28. Estos cambios en el sentido de la redacción del libro da cuenta del cambio
cas indican automáticamente un cambio en la configuración socio-económica en los *
referencia para elaborar su balance de la arquitectura moderna local. Allí Ginzburg
consumidores de arquitectura y artefactos culturales. Siguiendo este argumento mar- de dirección que el mismo Ginzburg había impreso a su carrera luego de integrarse
icipó con el pabellón de Crimea, un ensayo de adaptación de los principios
xista de base, el ascenso de una clase social poseedora de nuevos intereses y necesi- al estudio de los hermanos Vesnin a mediados de 1922, al mismo tiempo que se de la arquitectura tártara sobre la que había escrito varios artículos, en una vertiente
dades artísticas se acompaña históricamente de modificaciones estilísticas mayores.» incorporaba el hermano menor -Aleksandr- para realizar el concurso del Palacio de ¿onalista que rápidamente abandona.
A. Senkievitch, «Introduction», op. cif, p. 20. R al determinismo histórico, Trabajo. Activa figura del Grupo de Trabajo Constructivista, Aleksandr, había 44. Paul Frankl, Der Entwicklungsphasen der Neueren Baukunst, Teubner,
Senkievitch analiza sus deudas con Oswald Spengler y sobre todo con la perspectiva acompañado la convocatoria de Ossip Brik a dejar el NKHUK y la pintura de caba- Leipzig y Berlin, 1914, Prinaipios Fundamentales de la Historia de la Arquitectura,
abiertamente marxista de Georgi Plekhanov de movimientos artísticos nacidos llete para integrarse al mundo de la producción. A pesar de ser nueve años mayor, Barcelona, G. Gili, 1981. El libro fue escrito luego de asistir al curso de verano
directamente de los movimientos de la historia y un concepto científico de la estética. se convirtió en compañero inseparable de Ginzburg y fue su vínculo con el grupo dictado por Wolfflin en Munich en 1912 y constituye un intento de superar los
]
Respecto a Frankl, destaca la importancia de la noción de Zweckgesinnung pero no vanguardista reunido en torno ala revista /.£f: Aleksandr Rodchénko, Aleksei Gan, Grundbegriffe de su maestro adecuándolosa las especificidades de la arquitectura.
vinculada a la concepción de espacio, como lo trataremos acá, sino a la relación entre también Viktor Schklovski. De las cuatro categorías que plantea, dos tienen que ver con el espacio (Kaumform y
construcción e instituciones sociales. 29. Se trata de la introducción del capítulo 84 «Del origen de la poesia» del Seg Zweckgesinnung), una para la tectónica (Kórperform) y otra para la apreciación
8. Esto plantearía la dificultad de integrar las experiencias modernas occidentales a libro de Friedrich Nietzsche, La gaya ciencia, Madrid, Edimat, 1999, pp. 97-98 de la forma como imagen resultante de un recorrido (Bildform) con especificaciones
los albores del nuevo estilo, una distinción que para Ginzburg no es tal. (Die frohliche Wissenschaft, Leipzig, 1837). al ciclo Clásico
para un período postgótico (Neweren Baukunst) correspondiente
9. «Ginzburg está a favor de una simbiosis fundamental de los métodos del ingeniero 30. En este estudiado cambio de sentido respecto al original es posible rastrear su de Ginzburg. Según Senkevitch, Ginzburg conocía personalmente a Alexander
y el arquitecto, subrayando la importancia de los primeros en tanto que paradigmas deuda con Karl Bucher en Arbeit und Rbytbmus, Leipzig, 1996, con traducción rusa Gabrichevski, que había hecho el curso con Frankl y contribuyó a difundir sus ideas
de conceptualización». Ibidem, p. 26. en 1899, que estudiara el rol del ritmo como componente estructural del trabajo e en Rusia. 1a profundidad del conocimiento de Ginzburg de su libro y de los
10. Catherine Cooke, «Form is a function X» en Architectural Design Profile 0" 47, instrumento para regular el gasto energético. Ver Luka Stanski, op. cit. escritos de Wolfflin sugieren un wabajo directo con los libros como fuente.
Londres, Academy Editions, 1983, pp. 34-49. 31. Reproducido en '[. 'lodorov, op. at., p. 148. 45. Todos los pabellones de la Exposición de Agricultura y el Artesanado, como el
11. M. Ginzburg, «Novye metody arkhitekturogo myshlenia», en SA 1" 1 (1926), 32. Reproducido en T. Todorov, op. at., p. 143. El subrayado es nuestro. de Melnikov para la Exposition des Arts Décoratifs de 1925, estuvieron construidos
pp- 14; «Funktsionalny: metod I forma» en SA n" 4 (1926), pp. 89-92; 33. Alexander Vesnin, Credo, abril de 1922, reproducido en VV.AA., The Avant- en madera y constituyeron una reflerión sobre las posibilidades todavía abiertas a
«Konstrukuvizm kak metod latoratornoi 1 pedagogicheskoy raboty», en SA n" 6 Garde. Russian Architecture in the Ttwenties, Architectural Design, Londres, ese material.

(1927), pp. 160-6; Krailnikov y Komarova, «Metod issledovaniia formobrazo vanilla Academy Editions, 1991, p. 27. 46. En este sentido, y adhiriendo a lo afirmado por C. Cooke, es clara la acepción
sooruzheniia» en SA N* 5 (1929), pp. 183-4. 34. Recordemos que en ese momento eran tes las escuelas de arquitectura que que le dio Ginzburg a la noción de konstrukstia en el sentido linguístico, vinculado a
12. Guido Canella, «Moisej Gizburg o dell'curocostruttivismo» en Moisei Ginzburg, funcionaban: la MVru donde trabajaba Ginzburg, la del Instituto de Ingenieros un proceso de concepción, congruente con la elección de Alberti como referencia

Saggi sull'architettura costruttivista, op.cit., pp. VII-XXV. Civiles encabezada por Leonid y Victor Vesnin y la VEHUTEMAS, acrónimo de para dar cuenta de la lección de la máquina: «[.o que encontramos en la máquina,
13. Una excepción al poco interés que ha recibido este libro primero por parte de la Talleres de Enseñanza Superior del Arte y la Técnica creada en 1920 donde funcio- esencial y primordialmente es la más clara expresión del ideal de la creación
naba dos talleres: el neoclásico liderado por Iván Zholtovski y el OBMAS Taller de la 3
crítica, lo constituye el trabajo de Luka Skansi, «Horm, style, history, autonomy: armoniosa, que hace ya mucho tiempo fue formulado por el primer teórico italiano,
Ritm v arhitekture» en Fabrications, diciembre de 2007, cuyo objetivo es demostrar Izquierda Unida encabezado por Ladovski y a la que Ginzburg había accedido, pero Alberti en De re aedificatoria» (p. 169). Konstruksita está considerada en la misma
cómo los cambios que afectaron a las vanguardias soviéticas estaban firmemente desde una posición expectante, como profesor de Teoría de la composición arquitec- 3 dimensión de concinnitas en tanto armonía resultante de una ideación intelectual de
enraizados en la estética alemana de finales del siglo XIX y principios del xx. tónica. Para su posicionamiento equidistante respecto a ellas en el último capítulo dey la forma, dejando en segundo término aquellos atributos vinculados a la perfección
14. Manfredo "Iafuri, «Formalismo y vanguardia entre la NEP y el primer plan quin- Stil" i epokha, ver de la autora «Moisei Ginzburg, fundar el estilo», Seminario en la factura de los edificios. -
Intemacional La biblioteca de la arquitectura modera, Rosario, noviembre de 2009, 47. Supone una directa referencia a Wilhelm Wundt
quenal» en VV.AA., Constructivismo ruso K, Barcelona, Ed. del Serbal, 1994, pp. 946 y sus estudios experimentales
(VW.AA., La citta. ['Archittettura. URSS 1917-1978, Roma, Officina Edizioni, 1979, ISBN 978-987-23713-1-9. sobre la percepción de las formas. Su obra principal Grunzuge derphysiologiscben
pp. 16-65). 35. Citado por B. Eichelbaum, <a teoría del método formal», op. aiz., p. 51. Psychologie de 1874 había sido traducida por W. Kandinsky y publicada en ruso
15. Ibidem, p. 65. 36. Reproducido en T- Todorov, op. cit, p. 133. en 1880. Las de su discípulo Hugo Minsterberg, aplicando estas observaciones a la
|
16. Nikolai Ladovsla, <l'he working group of architects in INKHUK> reproducido en 37. Ver Michael Podro, «Wolfflin and the Classic Art» en The Critical Historians of optimización de las habilidades de los trabajadores, eran frecuente referencia de
VV.AA, The Avant-Garde. Russian Architecture in the Twenties, Architectural Art, New Haven, Yale University, 1982, pp. 98-116. las indagaciones de Ladovski.
38. Tanto Wolfflin como Le Corbusier cuando refieren al estilo no aluden a formas 48. Moisei Ginzburg, «Novye metody arkbitektumogo myshleniia» en SA
Design, Londres, Academy Editions, 1991, p. 25. El INKHUXK era el Instituto
de Cultura Artística, centro multidisciplinario de investigación financiado por el sino a un modo de percibir. Así lo define el primero al inicio de Kunstgeschichtliche E" 1 (1926), pp. 14 (reproducido como «Método funcional
: y forma» en Escritos
Estado y creado a principios de 1920 por el Narkompros, Comisariado del Pueblo Grundbegriffe (1915) «hay muchas características formales y del conjunto de todas
ellas resulta cada vez el estilo de la mirada, la representación de unaé
1923-1930, op. al, pp. 269-275). De este modo, daba por cumplida una primera fase
para la Educación y Arte. ». En «artística» del nuevo estilo caracterizada por la hipertrofia expresiva y el ingenuo
17. El primer punto del programa inaugural del primer director -Wassily H. WoHflin, Reflexiones sobre la historia del arte, Barcelona, Península, 1988, p. 15.
39. No hay en estos libros primeros, ni en sus posteriores artículos, ninguna
*
simbolismo de las formas de la máquina, en el que quedan incluidos tanto el período
emocional y esteticista de la arquitectura occidental como el simbolismo idealista
Kandinsky también había hecho hincapié en la indagación de los elementos funda-
mentales (omovnye elementy) de cada una de las ramas artísticas como fundamento referencia a Karl Marx y sus conceptos claves, sólo tres breves en su «Carta a de49.Tatlino el formalismo abstracto de ASNOVA.
Moisci Ginzburg,
de una estética científica. Le Corbusier» publicada en <a 0" 10 (1930) para corregir algunas interpretaciones «Konstruktivizm kak metod laborator noi T pedagogicheskoi
18. Reproducido en T. Todorov, op. ait., 147-8. Publicada en Novy Lef 3, 4, 5 y 6, 1927. del suizo. raboti» en sA n" 6 (1927),
pp. 160-167 (reproducido como «El constructivismo
19. Hijo de un arquitecto de renombre, al igual que otros hijos de familias judías se 40. Otra línea argumental tiene que ver con la primacía de determinados géneros. de trabajo, investigación y enseñanza» en Escritos 1923-1930, op. cit.,
vio obligado a continuar su formación universitaria en Europa debido alas dificulta- Es sabida la importancia otorgada por el Formalismo literario al estudio de los emani
des que encontraba para hacerlo bajo el régimen zarista. "Iras breves estadías en 50. Moisci Ginzburg, «ltogi ¡ perspektivy» en sA n" 4-5 (1927), pp. 112-119 (repro-
géneros (O. Brik y Boris 'lomashbevski sobre el verso; V. Sbklovski, Boris
PÉcole des Beaux-Arts de Paris y Toulouse, continuó su formación en la Accademia Eichenbaum y Vladímir Prop sobre la prosa estableciendo diferencias constitutivas como «Resultados y perspectivas de la arquitectura moderna» en Escritos

di Belli Arti de Brera, con sede en el Politenico de Milano, bajo la égida de Gaettano e históricamente caracterizadas en el cuento, la noxvelle, la novela y las distintas 1923-1930, op. cit., pp. 317-324).
Moretti. La ciudad acogía en esos años la emergencia del futurismo, no obstante, $. Moisei Ginzburg, «Konstruktivizm kak metod laborator...>
estrategias de los cuentos fantásticos). Para Ginzburg estos géneros toman la forma op. cit., p. 343.
de programas, como una suerte de puente entre la serie arquitectónica y la social: 32. M. Tafuri, «Formalismo
quizás por sus profundos lazos con las vanguardias rusas de las que procura diferen- y vanguardia...», op. cit, p. 28.

41
Claudia Shmidt
A propósito de la
«Posdata Americana» de Pevsner
de España- se explica porque éste era por enton- Nikolaus Pevsner,
la inicial omisión
de la sección británica de la Control Commission Esquema de la
ces, director arquitectura Europea,
Buenos Ares,
for Germany durante el traspaso de los monumentos, obras de Ediciones Infinito, 1957.
arte y archivos
al finalizar la Segunda Guerra. También es impor- Primera edición en
castellano. (Archivo
cante recordar que en 1949, el Museo de Arte Moderno de
Ediciones Infinito.)
Nueva York publicó Pioneers... bajo el nuevo título de Pioneers

of Modern Design, en una versión reescrita, con un lenguaje


suavizado -respecto del tono más panfletario de la primera cdi-
Especialmente compuesto para la impresión en paperback de holandeses apenas se mencionan; y que la arquitectura escandina- Y
ción- aceptando la «sugerencia» de las figuras más prominentes
An Outline ofEuropean Architecture publicado por Penguin va, directamente no aparecería.?
del MoMA -Philip Johnson, Edgar Kaufmann Jr., Henry-Russell
Books, el breve escrito «American Postscript» fue agregado por Más adelante, la adenda del «American Postscript» tendría
Hitchcock y Alfred H. Barr Jr.-, de sacar las expresiones
su autor, Nikolaus Pevsner en 1953, diez años después de la especial repercusión en las recensiones de las sucesivas ediciones 3
totalitarias.*
primera edición. Al igual que con otras obras, el historiador ale- del Outline, sobre todo de la lujosa Jubelee Edition de 1960.
Más complaciente, el director del Brighton Royal Pavilion,
mán, nacionalizado británico en 1946, corrigió y amplió reedicio- En esa oportunidad, James Ackerman por ejemplo, resaltaba que
Clifford Musgrave catalogaba al Outline -que ya llevaba más de
nes sucesivas además de supervisar las traducciones a otros idio- Pevsner decía que lo agregó para estimular a los británicos a
un cuarto de millón de copias vendidas-, como el primer acerca-
mas. Previamente, en la revisión de 1948, había incorporado un emular «nuestra energía para documentar la arquitectura nativa
miento a la arquitectura en Europa Occidental y América, a
apéndice presentando las diferencias respecto de las versiones y precavernos en contra del provincianismo». El historiador
partir de un estudio de las relaciones espaciales en los edificios." ediciones inglesas no contienen».' Pevsner dejó en claro que esos
anteriores. El motivo principal fue la disculpa por haber omitido norteamericano consideraba el Postscript como un documento
Es que aquella primera incorporación de España, que lo obligó a agregados fueron sugeridos por Taylor, quien además, respetó el
a España en una historia de la arquitectura europea. En el más personal que histórico, porque el autor no se animaba a
incluir breves menciones a obras en las colonias, implicó luego enfoque general y en cierto modo, los prejuicios respecto del
primer prólogo, fechado en 1942, sostenía que la arquitectura decir lo que realmente pensaba -que no había nada essentially
que en el «American Postscript», hiciera referencia a América del lugar del mudéjar (marginal desde esta perspectiva) en la confor-
española no había influenciado decisivamente el desarrollo de la original en la arquitectura norteamericana antes de Richardson 3 Norte, Central y del Sur, además del creciente lugar en el último mación de una expresión «española». Basta ver los dispares
«European architecture as a whole» pues el tema central del libro por lo tanto -continuaba Ackerman- se sentía en la necesidad - capítulo otorgado a la arquitectura del siglo XIX norteamericana. acentos de interés puestos en la fragmentada descripción del com-
era la «Western architecture», como expresión de la «Western de satisfacer esa aparente flaqueza. La reseña es fuertemente De todos modos es notable la naturalización de la extensión hacia plejo de la Alhambra de Granada, concentrada en el Palacio de
civilization» -desde sus inicios en el siglo 1X hasta el siglo X1X-, y irónica y crítica del maniqueísmo en los modos de presentar las el nuevo continente, en un libro que se propone construir el Carlos V como la pieza fundamental."
por lo tanto no justificaba un espacio en cel libro, más allá de las obras y los períodos históricos por parte de Pevsner, quien canon de la arquitectura occidental, como europea. Es necesario notar entonces, que esta primera edición en espa-
extraordinarias cualidades que muchos de sus edificios podrían «olvidaba» dar explicaciones sociopolíticas en varios casos (como Lo que interesa mostrar aquí, a propósito de la «Posdata ñol, fue recibida como una unidad (el Outline y el Postscript),
tener. En este sentido, las explicaciones para su inclusión posterior la enorme actividad arquitectónica luego del 1700 en el Imperio Americana» de Pevsner, es puntualmente, el impacto que produ- en la que las tres Américas aparecen ligadas a momentos de dis-

suenan un tanto inauditas. En el apéndice comparativo, primero Habsburgo y en Bavaria o los grandes encargos de los sectores jeron en la historiografía de la arquitectura en América Latina, las tinta intensidad -aunque necesarios a los fines del relato central.
señaló que luego de muchas dudas, inicialmente había resuelto más ricos del sur de Alemania, entre otros casos). Desnudando A dos primeras traducciones al español. Su inclusión en la primera Pero es particularmente en la «Posdata Americana» donde se hace
dejarla afuera por falta de espacio y además, porque nunca había criterio de los textos agregados a esta versión ampliada y revisadad
edición, inauguró la difusión masiva en Iberoamérica, del visible el lugar complementario, presentado comparativamente:
viajado allí. Pero admitió que en esta oportunidad la incorporaba, Ackerman se detiene en el último capítulo del libro en el que los ¿
A
Esquema de la arquitectura europea, publicado en Buenos Aires «la diferencia más evidente entre la historia de la arquitectura en
debidoa la «generosa» crítica publicada en The Architectural héroes son «the Nervis and Candelas who use new techniques -
por Ediciones Infinito, en 1957. Tomado de la misma versión de los Estados Unidos de América y en Europa Occidental, consiste
Review, por el historiador del arte inglés Geoffrey Webb, reco- to develop fresh, convincing and usefulforms»ylos villanos, en
Penguin de 1956 -de la cual salió la Jubelee Edition-, formó en que la primera, como parte de la arquitectura occidental,
nociendo que se sintió obligado, pues sus razones eran «incontro- tanto, son «all Brazilians, some Italians, Corbu at Ronchamp, tiene sólo menos de quinientos años, mientras en Inglaterra, en
parte de la colección «Biblioteca de Arquitectura», dirigida por
vertibles». En efecto, Webb le reprochó que España no podía etc., whoseforms make little social and technological sense».* Es Jorge Enrique Hardoy, Carlos Méndez Mosquera y José Rey Francia, en Italia, en Alemania, en los Países Bajos, en España,
faltar «ni en la más breve historia de la arquitectura europea».' conveniente recordar que el recelo de Ackerman puede sumarse
Pastor, dedicada a promover el conocimiento de las obrasy las existe una evolución consistente e ininterrumpida durante los
Según Pevsner, lo más importante para cualquiera que empren- a la fría relación que Gombrich, Saxl o Wittkower entre otros ideas del «Movimiento Moderno». La traducción estuvo a
cargo últimos mil años y aún más».'* Continúa remarcando la diferencia
diese precisamente, una historia de la arquitectura europea, o de colegas mantenían con Pevsner, un judío converso al protestan- del historiador del arte inglés René Taylor, quien había iniciado de concentración geográfica en un territorio que no tiene más de
arte o de filosofía o de drama o de agricultura, era decidir «en qué tismo, porque había dedicado su libro de 1940, Academies ofArt sus estudios en la Universidad de Barcelona, donde residió dos mil cuatrocientos kilómetros «desde el Báltico a Sicilia y
parte de Europa en cada momento, tienen lugar aquellos sucesos a su mentor, el colaboracionista Wilhelm Pinder (quien señalaba durante su juventud, aunque tuvo que interrumpirlos, por la desde Irlanda y Galicia hasta Prusia Occidental y Bohemia», en
que expresan más intensamente el deseo vital y los sentimientos los nazis dónde había obras de arte valiosas para ser secuestra- Guerra Civil Española. Luego de la Segunda Guerra Mundial, el que Carlomagno restauró el Imperio Romano, levantó
de Europa». Es por ello que incluía a Alemania en los edificios das).> Lee Sorensen hace notar también que Pevsner le debe entre 1949 y 1960 fue profesor en la Universidad de Granada «los monumentos de un juvenil espíritu occidental» y se sucedie-
ya
del siglo XvII -y no en su arquitectura del siglo XVI-; que el rol de a Pinder el modo en el que utiliza la noción de Zeitgeist, tomada
partir de 1962, dirigiría el Musco de Arte de Ponce, en Puerto ron los principales rasgos de estilo que definen la arquitectura

España en su «Western Mohammedan architecture» era dejado con el sesgo nacionalista de su maestro, así como la caracteriza- - de Rudolf Wittkower, se destacó por europea: los clunicenses -franceses y alemanes- desarrollaron el
_ Rico. Taylor, discípulo
de lado y en cambio ahora sí sería considerado su lugar en la ción de España como un restless country o de Alemania como sus estudios sobre el arte del Renacimiento
y Barroco españoles. románico; los «ingeniosos canteros de la Isla de Francia» crearon
«Western Christian architecture»; que la arquitectura de Bulgaria la poseedora de la auténtica arquitectura, comparada con Italia. Su participación fue clave, no sólo por la traducción sino porque el sistema gótico, entre otros. Pero fueron los italianos, quienes
no formaría parte por su origen bizantino; que los edificios En este sentido, la aceptación de la crítica de Webb -respecto de amplió «el desarrollo de la arquitectura en España que las se rebelaron contra el gótico, buscando una «nueva pureza»

43
do del clasicismo que tenía su origen en una experiencia de Antonio Gaudi, que sólo figura en las notas aclaratorias, figure en prolongó por casi una década en el que invitaron a Giulio Carlo
primero, una «nueva gracia» después, y por último una
«artificialidad forzada y autotorturante» en el Renacimiento cultura y no de vida y que según Pinder, estaba privado de inge- el testo como el arquitecto más significativo del Art Noxuveau». Argan, Fernando Chueca Goitia, Vincent Scully y Reyner
nuidad. Esta condición es para Hauser en cambio, un signo Consciente del alcance de la edición de Buenos Aires, explica que Banham entre otros. De este intenso emprendimiento que sc
y el Manienismo.
Esta singular lectura del «poderoso drama del nacimiento, positivo: dado que el programa teórico se refiere a los métodos y Gaudí es un genio pero además como «las premisas de su estilo prolongó por casi una década, surgieron tres de las pocas figuras
son totalmente diferentes a las de los maestros de que se aventuraron a construir un relato integrador de una
a los fines del arte, el manierismo es la «primera orientación son catalanas»
adolescencia, madurez viril y primeros síntomas de enveje-
estilística moderna»." Sin embargo, la relación entre manierismo otros países y por eso no podría compararse con
Horta o Endell." historia de la arquitectura adjetivada como latinoamericana:
cimiento de Occidente» le permite desplazarse a América. En pri-
instalada en el seno del En julio de 1960, Pevsner inició su gira sudamericana en Marina Waisman, Ramón Gutiérrez y Francisco Bullrich, quienes
mer lugar, porque todo lo importante sucedió antes de que en y «arquitectura moderna» ya estaba
Estados Unidos existiera algún «edificio occidental». En el resto debate inglés, con una seric de artículos académicos, como Argentina. El primer seminario dictado en Córdoba en el UEHA, se sumaban a la ya emblemática figura de Mario Buschiazzo.

el seminal de Wittkower, «Principles of Palladio's Architecture» fue en torno a la arquitectura del siglo XIX (subdividido en Early "Todos conocieron a Pevsner. Algunos protagonistas privilegia-
del continente, sólo se registra un «débil eco» en algunas iglesias
de 1944. Pero sin dudas, el impacto del ensayo de Colin Rowe, Victorian, Middle Victorian y Late Victorian a lo que se agregó dos de las instituciones académicas, culturales y políticas tuvieron
de México afirmando finalmente, que «el manierismo cs el primer
«The mathematics ofthe ideal villa», publicado en 1947, el mism oi el Ediwardian). Francisco Bullrich recordaba recientemente la oportunidad de compartir personalmente los eventos en los
estilo curopeo que sc refleja en suclo americano».
" que
El tiempo en el que se unen Europa y América como pares, año de finalización de su propia tesis (inédita) sobre los dibujos era «un período que no nos entusiasmaba demasiado pues que participó. Pero la amplia mayoría sc había relacionado

es en la Prehistoria, «en el sentido que damos al término en de Iñigo Jones, instaló la admiración hacia las «dramáticas todavía seguíamos con el ímpetu modernista de negación del con sus ideas a través de la difusión de sus textos en español. El

Europa para el Mediterráneo». Retomando las advertencias del cualidades del manicrismo» de un modo análogo al que sepostu- q siglo XIX, pero el seminano contribuyó a que nos formáramos impacto de la primera edición del Esquema no sólo estuvo
laba para las arquitecturas del renacimiento como aval a la rodeado de la efervescencia académica en el ámbito argentino
prólogo, vuelve a indicar que la Antigiiedad Grecia, Romay las una idea bien distinta». En el folleto de difusión del evento,

elaborado por el presidente, Enrico Tedeschi, se lo presentaba sino particularmente, de la penetración de un mundo de ideas que
civilizaciones mediterráneas de las primeras décadas cristianas arquitectura moderna." En este sentido, el manierismo oficiará
de aval también, para el inicio de una arquitectura genuina, con un elogio a sus dos obras más conocidas, «Pioneers» y el abrió disyuntivas políticas e ideológicas de honda significación.
hasta las iglesias bizantinas- «pertenece a una civilización distinta
latinoamericana. «Outline», el prmero como un texto en el que se trata «por pri- El auge del desarrollismo -un modo positivo de nominar al
a la nuestra». Del mismo modo puede decirse de la prehistoria

en América y todo lo que ocurre antes de Colón, de Cortés,


En 1957, la publicación del Esquema, repercutió intensamente 3 mera vez la arquitectura contemporánea como un momento dependentismo-, a través de la omnipresencia de la ideología de
históricamente definido» y el segundo, como una obra que habla la CEPAL. sentaba las bases de una nueva dimensión cultural
de Pizarro, de los peregrinos del Mayflower y de Penn. Si la en el ámbito de las escuelas de arquitectura de la Argentina.

En abril de ese año se habían realizado las Primeras Reuniones de la arquitectura del pasado, «que el movimiento modemo respecto de «lo latinoamericano».
arquitectura de Europa se inicia con Aquisgrán, la arquitectura
de Docentes de Historia de la Arquitectura en la ciudad de parecía haber rechazado al campo de la mera erudición (...) con Es en este sentido que la «Posdata Americana» adquiere un valor
occidental en América comienza a principios del siglo XVII,
con la catedral de Zacatecas en México o con la iglesia de Tucumán, promoviendo la creación de un centro de capacitación $ la sensibilidad actual, de un crítico de arte de hoy».'* A continua- especial, pues revela la invención de una arquitectura moderna,
de historia de la arquitectura = ción se transcribieron varios párrafos del prólogo del Esquema. enraizada en las más profundas entrañas de un mundo que
la Tercera Orden de San Francisco, en Bahía, Brasil, pues «quizás que agrupara a todos los institutos
de las universidades nacionales. Al año siguiente se fundó el Ya hacía tiempo que Tedeschi consideraba a Pevsner el «fundador necesitaba reafirmarse como Occidental, en el clímax de la
(...) tengan algo de bárbaro sensacional, pero también lo tiene
Instituto Interuniversitario de Especialización en Historia de la de los estudios de la arquitectura moderna», en relación a Guerra Fría. Una operación que se presenta en espejo de una
gran parte del churrigueresco español»."
Pioneers, texto que conocía en su versión del MOMA. En un construcción -ahora necesaria de la historia de la arquitectura
Para Pevsner entonces, el inicio de la arquitectura occidental Arquitectura fijando su sede en la ciudad de Córdoba. El consejo
de dirección del 1IEHA, estuvo de acuerdo, de manera unánime, artículo fechado en 1951, había destacado que su mayor mérito moderna latinoamericana. Esta es la dimensión que adquiere
en América está signado por el manierismo, mientras que la
era que «por primera vez» se planteaba un método histórico- la aparición de la segunda publicación del Esquema. Reeditado
«desenfrenada superabundancia de detalles» es propia del barroco en la importancia de invitar a una figura internacional como

Nikolaus Pevsner. Con las gestiones colectivas y el especial pro- crítico, basado en el «descubrimiento" de patriarcas y profetas nuevamente por Infinito, esta vez las modificaciones fueron pocas
pirenaico (y por ello prefiere ejemplificarlo con la Cartuja de
Granada aunque acepta que hubiera podido incluir ejemplos me- tagonismo de Marina Waisman, se logró financiación del British ignorados de la arquitectura moderna»." pero altamente significativas. El prólogo las sintetiza: «Desde cl

xicanos y brasileños). Entendía cl manierismo -siguiendo a Council, junto al esfuerzo de las universidades participantes y Luego de su estadía en Córdoba, Pevsner disertó en Rosario y año 1957 la edición original inglesa de este libro se ha ampliado

el auspicio del Fondo Nacional de las Artes. Al mismo tiempo Buenos Aires. Su viaje continuó, durante el mes de agosto por en varias partes. Aunque los cambios han sido en su mayor parte
Pinder y también a Dvorák-, como el período de la Contrarre-
forma que se corresponde con tendencias místicas y en el que se salía la primera edición en español de Pioneros del Diseño Santiago de Chile, Montevideo, San Pablo (pasó unas horas en pequeños, algunos son bastante considerables. Todos ellos han
abandona la significación del individuo ante fuerzas extrañas, Moderno: de William Morris a Walter Gropius, traducido por la Brasilia) y Río de Janeiro. En estas ciudades dictó generalmente sido vertidos a la segunda edición castellana por mi amigo
$ dos conferencias: «English Country Houses» y «The origins of Francisco Bullrich, a quien estoy sumamente agradecido por su
urbanista Odilia Suárez y la filóloga Emma Gregores, con diseño
espirituales o materiales como las que traía el orden impuesto por
los jesuitas. Ya en 1946, en un artículo titulado «The Architec- gráfico de Carlos Méndez. Mosquera. Nuevamente publicado Functionalism», en museos y universidades." Pero más allá de las labor. Aún recuerdo a menudo los días felices que pasé con
él en Buenos Aires durante 1960, cuando su mujer y la mía aún
por Ediciones Infinito en Buenos Aires, este
volumen ocupó un : impresiones que pudo llevarse de la arquitectura y las ciudades en
ture of Mannerism», analizó una serie de edificios del siglo xvi
estos países -que comentó ocasionalmente en artículos, en sus vivían. Es en memoria de ellas que escribo este prólogo.
italiano, «to prove the incompatibility of theirformal and lugar singular en la difusión de la obra en cl mundo de habla
Radio Talks" y en libros posteriores-, el paso por Sudamérica Londres, agosto de 1968.»
emotional character with that ofworks, both ofthe Renaissance hispana. Atentoa ello, Pevsner corrigió y amplió considerable-
mente la edición del MoMA de 1949. Destacando que los mayores3
dejó la huella de la autoridad de sus ideas. Esos años fueron fun-
and Baroque and then point to certain characteristic events in
dantes en la formación de varias generaciones de historiadores Bullrich y Pevsner entablaron una entrañable amistad que se
avances en las investigaciones de los últimos años fueron en torno
contemporary thought and feeling, to show the same spirit at
que comenzaron a construir un lugar para la historia de la mantuvo a lo largo de los años. Con una destacada trayectona y
work in history ofarchitecture»." Aunque poco antes del a la importancia del Art Nonvean -reseña los últimos trabajos

«American Postscript», Arnold Hauser había hecho notar que publicados y la exposición «Um 1900» realizada en Zurich Arquitecadntroelsámbitoacdémios,pertambiénde críticos que abrieron espacios de difusión de obras y textos de ya consagrado por la autoría del proyecto ganador del concurso

todavía en 1951 -cuando se publicó primero en inglés su Social en 1952 reconoce en cambio que, «si tuviera que escribir para la Biblioteca Nacional (compartida con su mujer, Alicia
la cultura arquitectónica
de nuevo mi libro, es aquí donde haría las modificaciones más en América Latina. Con la visita de
Cazzaniga y con Clorindo Testa), Bullrich había publicado al
History ofArt- la noción de manierismo arrastraba una carga
Pevsner, el tIEMA había inaugurado un nuevo ciclo que se calor de esas ideas su libro Arquitectura Argentina Contem-
peyorativa, que había que superar. Se trataba de un estilo deriva- importantes. Ahora me parece absolutamente necesario que .

45
poránea, en 1963.? Cierta impronta pevsneriana se trasluce en el precolombino es un enigma para todos». Si bien Bullrich, apo- nal a este discurso al promover la resistencia modernista a través
7. Clifford Musgrave, «A new edition of Pevsner's "Furopean Architecture», en
The Burlington Magazine, vol. 103, n" 704, noviembre de 1961, pp. 469-470.
armado general. Se trata de la identificación de las obras y los yado en las ideas de Richard Morse y de Jorge Enrique Hardoy, del lugar y las tradiciones técnicas -artesanales
de las coordenadas 8. N. Pevsner, «Prólogo a la primera edición en castellano», en Esquema de la

arquitectos que expresan la arquitectura argentina moderna. deja en claro el «mundo de diferencias culturales» que separa e industriales-
locales. Pero si el punto culminante de esa amal- Arquitectura Europea, Buenos Aires, Ediciones Infinito, 1957.
9. N. Pevsner, Esquema..., pp. 286 y 380.
La doble condición se fusiona en una sola, en una serie de arqui- la expresión en las distintas regiones del continente, no cejará cn 1 l - gama lo
representa Otra arquitectura en América Latina, de 10. N. Pevsner, «Posdata Americana», en FEsquema..., p. 455.
3
tectos y edificios que se destacan por su jerarquía y valores búsqueda de puntos en común, al igual que en la modalidad de Enrique Browne," paralelamente surgieron también, otras líneas
11. Ibidem, pp. 455-456.
12. Peter Draper recuerda la filiación con Pinder en Reassessing Nikolaus Pevsner,
identificando «nuestra arquitectura», con la blancura, la ausencia las selecciones pevsnerianas: «... como acechados por una angus-
$
de pensamiento que cuesttonan las bases mismas de la posibili- Inglaterra/E£.UU., Ashgate, 2004, p. 36. Sobre la conexión con ideas de Max Dvorák
de ornamento, la pureza y la sencillez. tia metafísica, los latinoamericanos volvemos nuestra mirada a los ver W. Eugene Kleinbauer, Modern perspectives in Western art history: an antbology
dad de la existencia de una autonomía del relato regional unifica-
oftwentieth century, Canadá, Medieval Academy of America 1989 (1971').
Pero más notable es el impulso que le dio a Bullrich la con- poderosos muros de Cuzco y creemos descubrir en la tensa dis- : dor, abiertas ya por Bullrich. 13. N. Pevsner, «The Architecture of Mannerism (1946)», en Harold Spencer,
fianza que le depositara Pevsner para la corrección y revisión de posición de los sillares, todo un modo de ver y sentir que pen--: En 1978, Leonardo Benevolo en su tercera edición castellana Readings in Art Elistory, 2 vols., Nueva York, Scribner, 1969, 1, pp. 119-48.
14. Amold Hauser, Historia social de la literatura y el arte, Madrid, Ediciones
la segunda edición del Esquema. Está claro ya que la «Posdata» samos debiera ser nuestro»? De todos modos, hasta aquí llegan -¿B italiana- proponía un abordaje opuesto que podría-
y sexta Guadarrama, 1964 (1951), p. 404. Aquí, Hauser cita a Wilhelm Pinder, «Zur
es en rigor, la Posdata Norteamericana. En esta ocasión su autor las coincidencias. Sobre el final de Nuevos caminos... advierte mos denominarlo
«universalismo crítico». Presentaba allí en su Physiognomik des Manierismus», en Die Wissenschaft am Scheideweger, Ludwig,
Kages-Festrschrift, 1932.
suprimió dos fragmentos significativos que indican el acuse de acerca de los riesgos del «participacionismo» y la fascinación de
"capítulo ampliado, «El nuevo ambiente internacional» y en el 15. Anthony Vidler, Histories oftbe Immediate Present: Inventing Architectural
recibo de las múltiples críticas acumuladas. Ya no figura la apolo- los jóvenes por la participación del público. Sin embargo, esto no Modemism, Cambridge, Londres, Mi1, 2008, p. 66.
$
agregado, «El tercer mundo y los asentamientos marginales», un 16. N. Pevsner, Pioneros del Diseño Modemo. De Willian Moris a Walter Gropius.
gía a Richardson ocupando un lugar en la historia de la arquitec- debería conducir a un «pintoresquismo del tipo propuesto hace 4 señalando que, si por un lado, las
punto de vista centrípcto, Buenos Aires, Infinito, 1958.
tura estadounidense igual al de William Morris en Inglaterra, en casi veinte años por Nikolaus Pevsner y The Architectural 3 experiencias más sobresalientes después de la segunda posguerra 17. Francisco Bulirich, «Seminario sobre la arquitectura del siglo XTX. Sir Nikolaus
Pevsner, Argentina. Córdoba. Julio de 1960» en Ramón Gunérrez, Olga Paterlini
el que elevaba a ambos a la categoría de «portaestandartes del Review», y en todo caso podría asimilarse más a las operaciones estaban en Brasil, Japón y Chandigarh, «el razonamiento plan- (coord.) Historia de la Arquitectura en la Argentina. Reflexiones de medio siglo.
Movimiento Moderno», por haber elegido un «precedente propias del pop-art.> La preocupación de Bullrich es clara en teado para Europa no puede repetirse para los otros países». 1957-2007, Tucumán, Cedodal, UNT, 2007, p. 28.
18. Enrico Tedeschi, «Nikolaus Pevsnesr. Programa de Actividades. Julio-agosto
en algún período anterior, con la mirada puesta en las necesidades cuanto al futuro de la arquitectura latinoamericana, que «ya es Por esta línea se encontrarán en la década de 1990 y en los prime- de 1960, Instituto Interuniversitario de Especialización en Historia de la
modernas». Otro fragmento que fue retirado, es el elogio del ras- parte de la arquitectura mundial» abriendo un interrogante ros años del siglo XX1, los trabajos de Jorge Francisco Liernur Arquitectura, Universidad Nacional de Córdoba, 1960», ibídem, pp. 30-31.
19. <(...) y no es de lamentarlo si consideramos que sirvió para dar a conocer arqui-
cacielos como producto de la «audacia norteamericana». En esas respecto de la validez de una especificidad regional. o Valerie Frazer entre otros. tectos interesantes como Ledoux o Mackintosh, Olbrich o Greene...» en Enrico

líneas se arrogaba la génesis de la idea en sede europea, adjudicán- La explicación ofrecida en la «Posdata Americana» respecto del La década que separa la primera de la segunda edición caste- Tedeschi, «La historia de a Arquitectura moderna de Pevsner a Zevi», en Nuestra
$
las Arquitectura, octubre de 1951, n* 267, pp. 310-317.
dosela a las «observaciones proféticas» de Viollet le Ducy a por qué se reajustó el texto en relación a América, alcanza a esta
Y llana del Esquema, se ordena antes y después de un hecho 20. Agradezco especialmente a Virginia Bonicauto por el aporte de esta información

estructuras de hierro en Inglaterra y Francia, pero afirmaba de altura, un punto de inflexión. Pero el pensamiento pevsneriano yal trascendental, por su proyección simbólica, para América Latina: obtenida en el Getty Research Institute.
q 21. Stephen Cames (ed.), Pevsner on Art and Architecture. The Radio Talks,
todos modos que, el gran ventanal horizontal corrido con la se había acendrado. Con la dimensión latinoamericana como la emblemática construcción de Brasilia. Desde esta articulación Londres, Methuen, 2002.
ausencia casi completa de ornamento, del edificio de Sullivan para nuevo escenario para la construcción de las historias de las arqui-3
puede decirse mientras tanto, que el efecto especular de la 22. F. Bullrich, Arquitectura Argentina Contemporánea, Buenos Aires, Nueva
Visión, 1963. Al respecto, ver Jorge Francisco .iernur, «El discreto encanto de nues-
Carson, Pirie Scott and Company en Chicago eran una avanzada tecturas nacionales, de aquí en más la tensión hacia la particu-- Y «Posdata Americana» dejó abierta la conciencia explícita, de que la tra arquitectura. 1930-1960», en Summa, marzo de 1986, n* 223, pp. 60-79.

inédita: «ningún país europeo había ido tan lejos como el Medio laridad regional, más que local, se entrelazará con los tópicos más 3 condición de posibilidad de una «visión latinoamericana» de 23. Y. Bullrich, Arquitectura Latinoamericana, 1930-1970, Buenos Aires,
Sudamericana, 1969; Nuevos caminos de la arquitectura latinoamericana, Barcelona,
Oeste, en la preparación del estilo actual». Sin estas declaraciones esenciales de la tradición de la historiografía modernista de la la arquitectura -en cualquier momento histórico- fue, ante todo,
1 Blume, 1969; New Directions in Latin American architecture, Londres,
de admiración a los Estados Unidos, esta edición de la Posdata Studio Vista, 1969.
arquitectura. La naturalización del manierismo -visto como una una construcción cultural y evidenció al mismo tiempo, que
a 24. Y: Bullrich, Arquitectura Latinoamericana... op. cit, p. 12.
suena más equilibrada respecto de la arquitectura moderna expresión de la Contrarreforma--, mágico y subyugante, que llevaba implícito en su seno, los propios riesgos de tal empresa.
25. F Bullrich, Nuevos caminos... op. at., p. 109.
curopea. transforma al individuo en un ser místico rendido a las fuerzas - 26. Nos referimos a la corriente de pensamiento liderada en especial por el filósofo
Y mexicano, Leopoldo Zea, en autores como Ramón Gutiérrez, Marina Waisman o
En simultaneidad con el trabajo de ajuste de la segunda edición espirituales, será recogido por autores como Ramón Gutiérrez o Roberto Segre.
del Esquema, Bullrich estaba escribiendo Arquitectura Latino- Damián Bayón. Es la consagración de un punto de partida que 27. Enrique Browne, Otra arquitectura en América latina, México, Cuili, 1988.
3 28. Leonardo Benevolo, Historia de la Arquitectura Moderna, Barcelona,
americana, 1930-1970; Nuevos caminos de la arquitectura latino- también había avalado Henry Russel Hitchcock en el catálogo deyg
Gili, 1978.
americana y New Directions in Latin American architecture, la exposición realizada en el MOMA en 1955, Latin American Notas

todos aparecidos en 1969.? El primero de ellos, preparado por Architecture since 1945, afirmando que la diferencia de la arqui- 1. Nikolaus Pevsner, «Appendix 3: A Comparison between this edition and the two

sugerencia de Antonio Bonet en ocasión de la celebración del tectura latinoamericana -respecto de la norteamericana funda- Penguin Editions of 1943 and 1945», en An outline ofEuropean architecture,
mentalmente se basa en el 7berian cultural background, Londres, J. Murray, 1948, p. 227.
X Congreso de la Unión Internacional de Arquitectos en Buenos
2. N. Pevsner, «Foreward», ibídem,
p. XV.
Aires, se propone presentar un panorama -que aborda sólo siete además de la falta de materiales y la «fuerza del clima». 3. N. Pevsner, An Outline ofEuropean Architecture, Balumore, Jubilee Edition,

Mientras el determinismo geográfico es una clave de larga data 4 Penguin Books, 1960. Fue una edición de 740 páginas con 600 ilustraciones, incre-
países debido a una «simple selección temática»- de la nueva mentando en más de 10 veces, las que integraban el original de 1943.
4. James Ackerman, recensión publicada
arquitectura de Latinoamérica. Si el Esquema se iniciaba con en la historia del arte, la noción de Zeitgeist, simbolizada en el en The Art Bulletin, vol. 43, n" 1, marzo de
1961, pp. 74-75.
«Crepúsculo y aurora», metáfora que cobijaba una prehistoria de Outline de Pevsner, seguirá su derrotero, desde aquel tono inicial: 5. Lee Sorensen, «Pevsner, Nikolaus», Dictionary ofArt Flistorians, 27 de noviembre
la arquitectura desde el templo griego hasta el siglo X, en el que nacionalista, reeditado en clave dependentista primero" y atrave-: de 2000,wwwdictionaryofarthistorians
org. Aún hoy el trabajo señero respecto del
pensamiento e influencia de Pevsner en la historiografía de la arquitectura, sigue
Aquisgrán «sintetiza la posición histórica de la arquitectura caro- sado por el «regionalismo crítico» de Kenneth Frampton después

lingia al final de la evolución cristiano-primitiva y comienzos de y signará buena parte de la historiografía de la arquitectura lati-
endo David Watkin, Morality and Architecture, Chicago, Oxford University Press,
6. N. Pevsner, Pioneers of the Modern Movement from William Morris
to Walter
la occidental propiamente dicha», los textos de Bullrich abren con noamericana, durante las siguientes tres décadas. Paradójica-
Gropius, Londres, Faber 87 Faber 1936, reeditado como Pioneers ofModern Design,
un capítulo titulado «Pasado y presente». Aquí, «el pasado mente, el ampliamente aceptado regionalismo crítico fue funcio- Nueva York, Museum of Modern Art, 1949.
46 47
Patricio del Real
Para caer en el olvido:

Henry-Russell Hitchcock y
la arquitectura latinoamericana
Henry-Russell 1fitchcock,
decture: Nineteenth and Twentieth Centuries,
pakimore, Penguin Books, 1958.

En una entrevista con Mosette Broderick, última asistente del nicaciones con arquitectos, personal diplomático, y contactos
historiador estadounidense Henry-Russcll Hitchcock, clla narra suministrados por una red de intereses canalizadas a través del
cómo éste, en la última revisión de su libro Architecture: MOMA. La exposición seguía la tradición -ya encausada en cl

Nineteenth and Twentieth Centuries en 1986, le comentó que museo de presentar una visión general de la arquitectura
rr
América Latina había sido sobrerepresentada debidoa su viaje moderna como en la famosa Modern Architecture en 1932, Brazil-39
a la región.' Latinoamérica estaba sin duda viva y presente en Builds en 1943 o Built in the USA: Postwar Architecture en 1953,
la mente de Hitchcock cuando salió a la luz su historia de la esta última, tanto como la primera, organizada por Hitchcock.

arquitectura occidental en 1958; un proyecto para la casa Architecture es un proyecto que antecede la exposición del
editorial Penguiny su serie Pelican de Historia del Arte dirigida MOMA. Hitchcock ya había planificado un año sabático del Smith,Y de la arquiectura. Así, reunidos en imágenes, los ejemplos
sobre lo que es importante.»* La arquitectura latinoamericana era
por Nikolaus Pevsner. Hacía sólo cuatro años de su viaje por la College (1955-56) para producir su libro y lo había coordinado pues importante, pero ¿importante en qué
sentido? Para -verdaderamente el ejemplo visual- latinoamericanos no son
región para la exposición Latin American Architecture since 1945, con la exposición del MoMA. Este libro, le señala Hitchcock a
Hitchcock la arquitectura latinoamericana representaba el ejemplos a destiempo; estos forman parte de un proceso global
organizada por el Museo de Arte Moderno (MoMa) de Nikolaus Pevsner, editor de la serie de Historia del Arte para la
: !
mundo fuera de Europa y los Estados Unidos; un mundo y espa- que ocurre simultáneamente. Pudiéramos afirmar entonces que
Nueva York. editorial Penguin, «es una proeza de condensación... algo así Latinoamérica no se encuentra en la antesala, o para usar la
cio temporal donde la arquitectura de Asia y África no encon-
Architecture: Nineteenth and Twentieth Centuries, presenta como treinta conferencias»? Importante cra la fecha de entrega
célebre frase de Dipesh Chakrabarty, en la «sala de espera» de la
traba lugar." Paolo Scrivano señala la importancia que el siglo
dos estructuras narrativas paralelas, una textual de 483 páginas del manuscrito, pues Rudolf Wittkower ya había tardado cinco -2 historia." El motivo de la historicidad de la región es que ésta
diecinueve posec en la narrativa y composición de Architecture.
con notas, y otra visual de 190 páginas de imágenes, que fueron años en producir Art and Architecture in Italy 1600-1750', y La dialéctica entre el siglo diecinueve y el veinte, la crisis y alcanzó independencia política precisamente durante o un poco
integradas en 1970, ya que hasta esa fecha las imágenes se Pevsner, como editor de la serie se impacientaba en sacar los títu-7 desintegración de la arquitectura del clasicismo romántico" y la antes (en el caso de los Estados Unidos) del periodo de clasicismo

presentaron al final del texto completo en la forma de láminas en reintegración durante el siglo veinte que restablece la unidad romántico, fundamento de la modernidad arquitectónica.'
blanco y negro. Lo que trato de rastrear y analizar en este texto al continentey visitar los edificios que incluye en su historia. entre función tipológica del edificio y la técnica, establece la La relación entre la arquitectura del clasicismo romántico con sus
es cómo y cuándo el libro de Hitchcock sufre transformaciones Para Hitchcock era fundamental el haber visto en forma presente i ; estructura temporaly el arco narrativo del libro. La continuidad variantes griegas y góticas, y los proyectos de construcción
que reflejan su comentario de 1986, y rastrear por qué la las obras que iba a incluir en su historia de la arquitectura de la historia es un elemento clave del proyecto historiográfico de nacional tomando como base a una cultura internacional establece
arquitectura latinoamericana va desapareciendo. occidental. Esta necesidad se centraba en la importancia de la Hitchcock. Ya en 1929, el historiador estadounidense había un patrón de unidad para todo el continente. Así, intento esta-

experiencia directa que junto al arte de la apreciación, guiado por declarado que pensar el presente como distinto del pasado cra blecer un paralelo entre la narración visual estilística desarrollada
Y
Architecture: Nineteentb and Twentieth Centuries" es el cruce de cl entendimiento de la práctica arquitectónica -no hay que una ilusión reforzada por la abúndante información sobre la con imágenes que Hitchcock utiliza y los grandes enunciados;

dos proyectos; el de la casa editorial inglesa Penguin, y la expo- olvidar que Hitchcock había intentado la práctica del diseño-
arquitectura del presente. La arquitectura contemporánea era la como por ejemplo, la independencia política del continente.

sición organizada por el MOMA. Hitchcock había organizado su establece las pautas de su formalismo" Así, hay una singular última pero no la final realización de la dialéctica de la historia. La interacción entre éstas establece un historial ideal, una telco-
vida para empezar con Architecture inmediatamente después relación entre su viaje a Latinoamérica y el proyecto de La labor del historiador era la de insertar las formas contempo- logía que se completará en el siglo veinte.
de terminada e inaugurada la exposición del MoMA, que había Architecture, pues Hitchcock acaba de visitar la región y su ráneas dentro de este desarollo histórico." Las formas con- Si el marco ofrecido por las imágenes establece un territorio
sido señalada para marzo de 1955 dentro del calendario de festivi- arquitectura tenía que haber estado presente, ya que para enero temporáneas revelan las fases de un estilo moderno. Esto le per- global y simultáneo, la fórmula narrativa de Hitchcock ejercida
dades del 25 aniversario del museo. La exposición sin embargo, de 1956, Hitchcock había terminado el primer borrador del texto": E mite a Hitchcock reunir arquitectos y obras bajo una visión en la frontera entre el historiador y el crítico, y fundada sobre un

sufrió varios retrasos, y no abrió hasta noviembre del mismo año. completo; hacía poco más de un mes de la inauguración de estilo tensado por la contradicción y la ambigisedad, resuclve las
que transciende espacios geográficos, nacionales y culturales.
Hitchcock había partido ya rumbo a Inglaterra, y no estuvo Latin American Architecture since 1945? El 13 de septiembre de
1 Esto es uno de los principales efectos de la información visual complejidades de un examen más detenido. Hitchcock delimita
presente para su inauguración. Aunque periódicamente recibió 1956, casi un año después de empezar a escribir en Londres, reunida al final del libro. las generalidades narrativas haciendo cambios de escala que
informes, comentarios y preguntas del museo durante el proceso Hitchcock, en una carta a Gibson Danes, entonces decano de la La arquitectura del siglo diecinueve en Latinoamérica se desa- enmarcan zonas geo-culturales en las cuales se desarrolla con

de armarla, éste nunca vio la exposición personalmente, sólo a facultad de arquitectura de la universidad de Yale, declara que rrolla a distancia pero en paralelo de lo que ocurre en Europa independencia y soltura los fundamentos de la modernidad y
través de fotos y comentarios que le llegaron después de ser había terminado su libro. y Estados Unidos. Pudiésemos observar esto como simple distan- otras que quedan rezagadas. «Qué bibliotecas nacionales», escribe
abierta al público. ciamiento neocolonial; pero lo importante es que en la propuesta Hitchcock, «necesitaban Venezuela o Colombia, qué galería de
Hitchcock, viaja a Latinoamérica a finales de 1954, recopilando Architecture: Nineteenth and Twentieth Centuries, esa proeza de 4 ilustrativa de Hitchcock, y en singulares momentos narrativos, escultura en el Medio-Oeste estadounidense.»'* Si las grandes
la información necesaria para la exposición. Este establece comu- condensación, es un proyecto que requería «una serie de juicios esta arquitectura ocurre simultáneamente con la de los «centros» acciones políticas en Latinoamérica se encuentran en el salón de
-

48 49
considerara un eclecticismo del gusto versus el desintegrador Henry-Russell Hitchcock,
eclecticismo de estilo, dentro de la descripción textual este Architecture: Nineteenth and Twentieth Centuries,
Baltimore, Penguin Books, 1958. a) MalinCay:NeveCop,Lon.Eirebm, je
edificio no es más que un típico hótelparticulier parisino." Para
Hitchcok Río de Janeiro no es más que un suburbio de París.
Importante es considerar que Hitchcock en su texto para la
exposición del MoMA declara que la arquitectura latinoamericana 4
del siglo diecinueve tanto como la de principios del veinte no ban a
sido tan estudiadas como la colonial y la precolombina; sin
embargo reduce este período a la influencia francesa en el Brasil
de Dom Pedro I y al México de Maximiliano, que establecen una
influencia que dura hasta principio del siglo veinte. Más curioso
es, que Hitchcock, en una carta al historiador James Ackerman
radicado en la universidad de Berkeley, California, le comunique
que en una charla que dio sobre la arquitectura latinoamericana
y su relación con el pasado, él «le hablaba a sus amigos Sud
Americanos ausentes, insistiéndoles que pusiesen más atención a
su pasado en su totalidad». Desde la torre de Fonthill Abbey a los forjados de Cerro Piloto, ambos viviendas; edición Hitchcock advierte que ésta no es una revisión drástica de
desde el Banco de Inglaterra al Edificio Polar, ambos casas de comercio como
la edición original. Sólo un párrafo aquí y otro allá han sido omi-
punca mejor ha sido alojado en el período que trata este libro; desde la Catedral de

La abundancia -si podemos considerarlo así- de ejemplos latino-


"Y Baltimore a Notre-Dame-du-L Laut, el registro de notables realizaciones presentadas tidos o rescritos; un epílogo ha sido añadido. «Sin embargo»,
en este libro no excede en variedad a ningún otro período de ciento cincuenta
americanos están contenidos en el capítulo final del libro, titula- continúa Hitchcock, «muchas correcciones y adiciones han sido
años en la historia del mundo occidental.

do: Arquitectura en los mil novecientos cincuenta, «Architecture efectuadas en detalle...»> Lo que sí cambia radicalmente, desde el
From the tower of Fonthill Abbey to the slabs of tbe Cerro Piloto, deellings botb;
in the Nineteen-Fifties»? En este capítulo, Hitchcock nos dice from the Bank ofEngland to the Edificio Polar, both housing business as it was punto de vista latinoamericano, es la narrativa pictórica, pues
never housed before the period witb which this book deals; from Baltimore es precismente «al final», es decir, en el período de la segunda
que opera no como historiador, sino como crítico: Cathedral to Notre-Dame-du-fNaut, the range ofnotable achievements recorded in
this book is not readily outranked in variety by any other bundred-and-fiftyyear posguerra que Hitchcock introduce «la influencial obra de Aalto
la historia, la expresión arquitectónica se encuentra nuevamente La historia de la arquitectura en la segunda mitad de este siglo puede ser escrita period in the history of tbe western world. y ejemplos característicos de la obra japonesa tardía», reduciendo
en su antesala, pues en las formas e instituciones culturales la
sólo en el futuro. Las breves visiones puesto que no son más que esto- aquí presen- la representación latinoamericana. Se incluye también en 1963
tadas de la producción de principios de la posguerra son la selección del crítico y
región no es capaz de zafarse de las «antiguas tradiciones» que la no la del historiador; una selección que fue inevitablemente influenciada por lo que Que la producción arquitectónica venezolana haya sido compa- importantes obras de Wright, Le Corbusier y Mics recientemente
el crítico conocía mejor de primera mano.> rada con la inglesa es ya un logro sin precedentes. La arquitectura terminadas.
atan a su anterior situación colonial. Hitchcock crea así una

estructura de estratos y zonas geográficas en la cual la tradición The bistory ofarchitecture in the second halfof bis century can only be written inglesa era para Hitchcock uno de los baluartes de la primera Hitchcock, el crítico, le interesa mantenerse al día, y la narra-
in tbe future. The glimpses -for they are no more tban tbat- ofearly post-war
correcta, el clasicismo romántico, es capaz de romper con el modernidad, y como señala Paolo Scrivano era un elemento fun- tiva visual sirve para presentar esos fugaces destellos del presente.
production given bere represented a erstic's and not an bistorian's selection, and a
pasado. Esta estructura fragmenta el territorio creando islas y selection that was incvitably much influenced by what the critic knew best at damental en la formación intelectual de Hitchcock.?* Que los En este juego de desplazamientos pictóricos, se observan juicios
zonas donde cada fuerza supuestamente se desarrolla; pero como first hand arquitectos Martín Vega y JoséMiguel Galia hayan sido genealó- críticos, pues si las inclusiones de 1958 reflejan como mencionó
Hitchcock sólo elabora el desarrollo del clasicismo romántico y gicamente relacionados con John Soane, héroc indiscutible del Hitchcock a la fundación Guggenhein en 1955 una serie de jui-
<a
sus zonas de desenvolvimiento, aquellas de «antiguas tradiciones» En 1958 Hitchcock establece una relación directa entre la posición X clasicismo romántico del siglo diecinueve, es inaudito. No pode- cios y valoraciones, las exclusiones de 1963 señalan nuevos juicios
crecen sólo en un vacío en espera de ser civilizado. Se reinstala así del crítico y el conocimiento de la obra arquitectónica en primera :, mos más que recalcar el valor fundamental que la arquitectura abocados mayormente contra la arquitectura latinoamericana.
x.
plenamente el destiempo de la dependencia, pues la tradición co- instancia. Esta disposición es general y establece la relación entre moderna Latinoamericana tiene para Hitchcock. Esta presenta los Si en 1958 Hitchcock cerraba el despliegue de láminas con el
rrecta es aquella que permite el desarrollo de lo autóctono a través el crítico y la arquitectura occidental en su totalidad temporal 4
-
albores de una nueva tradición, igual a aquellos que abrieron Edificio Polar de los arquitectos venezolanos, Galia y Vega, en
de una técnica vernácula, esto es, apropiada al territorio cultural. de la posguerra, y geográfica, aquella del mundo occidental. Esta los pioneros que éste clogió en su libro de 1929. 1963 lo cierra con el edificio Seagram de Mies van der Rhoe. Con
De ahí que en los Estados Unidos, y precisamente en los estados postura frente a una totalidad arquitectónica es elaborada en los esta sustitución se mantienen sin embargo los valores estilísticos

del noreste, se desarrollen tipologías constructivas autóctonas que subsiguientes tres párrafos que sirven a modo de conclusión y La celebración de la arquitectura latinoamericana que hallamos y formales ilustrados en 1958, pues no sólo no cambia la función
«Americanizan lo que tomaron prestado de Europa».? cierran el libro. En éstos, Hitchcock mantiene que la continuidad en la conclusión de Architecture: Nineteenth and Twentieth -ambos son edificios de oficinas- sino que se mantiene la refe-
En el caso latinoamericano Hitchcock establece una depen- y unidad en la producción arquitectónica se conserva, aún bajo -_-; Centuries tiene eco en las ilustraciones, pues Hitchcock cierra el rencia estilística inicial esta vez con el maestro mismo, pues
dencia casi inquebrantable, pues si el único ejemplo de la la sorpresiva iglesia de Ronchamp por Le Corbusier. Para subrayar 4: discurso pictórico del libro con una imagen de la Torre Polar. Hitchcock celebra el Edificio Polar precisamente porque despliega
arquitectura del siglo diecinueve latinoamericana que Hitchcock esta continuidad tanto temporal como geográfica Hitchcock El entusiasmo sin embargo, dura poco. Cinco año después que en Sud América la manera miesiana que se revela en la delicada

ilustra, el Palacio Itamaratí en Río de Janciro (1851-54) por despliega uno de sus más clegantes ejercicios narrativos donde - Architecture viera la luz, en su segunda edición de 1963, Hitchcock manera de la organización de los paneles en la base del edificio

-
]- M- Rebelo, alumno de Grandjean de Montigny, es, dentro del entreteje ejemplos del siglo diecinueve y veinte de la arquitectura despliega una elaborada estrategia de exclusión enfocada sobre caraqueño. Así pues, si el Edificio Polar es deplazado por la obra
discurso pictórico un ejemplo sobrio de lo que Hitchcock occidental: la arquitectura latinoamericana. En el prefacio de la segunda del maestro, éste permanence, pues las temáticas se mantienen.

50
Henry-Russell Hitchcock,
Architecture: Nineteenth and Twentieth Centuries,
Baltimore, Penguin Books, 1958.

En las páginas siguientes:


Henry-Russell Hitchcock, (e) LeComi:fee "subeoda,TeesimgaMar LL Terre, as
Archuecture: Nineteenth and Twentieth Centuries,
Baltimore, Penguin Books, 1963.

adeBoSigEMaterado MEe LoeMis

La sustitución del Edificio Polar por el Seagram puede verse lo que ya para esa fecha era considerado como un mero cliché So far Eastern Exrope, Asia, and Africa have on the whole, been leamers and tecnológicos; pero también depende de la presencia de agentes de
disciples of the West. Will the countries of Eastern Europe and the new countries of
como un halago, un comentario más que Hitchcock les otorga a formal. Sin embargo, otros ejemplos (latinoamericanos) del cambio. Los maestros de la arquitectura moderna mantienen su
Asia and Africa soon be making contributions towards a new world-style, suc
Latin Americans, and now
los arquitectos venezolanos. En una carta de Hitchcock a uso del brise-soleil desaparecen; así es eliminada la imagen as in the last few decades the North Americans, then the posición jerárquica como iniciadores de cambios dentro de una
1beJapanese bave made?
Martín Vega, fechada el 13 de enero de 1955, éste le comenta de la casa de Bratke, y la de los apartamentos de Lucio Costa en teoría dinámica de producción; estos son generadores de tuming
+
como había el Parque Guinle (1948-54) que Hitchcock celebra precisamente points o momentos cruciales en el desarrollo arquitectónico.
En el nuevo epílogo de 1963, Hitchcock parece acceptar la pro- Podemos entender la obra de Vega y Galia en Caracas como un
por la individualidad logradaa través del brise-soleil. Víctima
visto los estudios preliminares del rascacielos Seagram de Mies (h) a ser construido de esta eliminación son también los bloques de Cerro Piloto puesta del historiador estadounidense Walt Whitman Rostow, turning point en la arquitectura Latinoamericana. El Edifico
en Park Avenue. Lo interesante es que esperan poder abrir en el lado que da Polar más que una cabeza de playa de la arquitectura miesiana, es
a Park Avenue una plaza de cien pies de profundidad -no del todo como la Plaza
que ya en 1956 el escritor norteamericano Lewis Mumford quien en su libro The Stages of Economic Growth, a Non-
Venezuela pero producirá considerablemente más espacio del que Bunshaft le había criticado como un «embrión arcaico», en una referencia Communist Manifesto (Etapas de crecimiento económico, un una verdadera síntesis de la tradición arquitectónica que empieza

dio a Lever House.»


bastanta oblicua a las snztés corbusianas.?' Con la sustitución manifiesto no-comunista, 1960), mantiene las tesis de etapas de con el Ministerio y se fusiona con Mies. Sin embargo, ésta

en 1963 de estas obras latinoamericanas por aquellas de Kenzo crecimiento por las cuales pasa toda sociedad, etapas que imbrican aparentement no ofrece frutos, pues como hemos mencionado
Este comentario, que nunca vio la luz pública, hace un velado el movimiento progresista de la economía con la historia. Esta es abandonada en la edición de 1963.
Tange (Country Club de Totsuka, 1960) y Kunio Maekawa
alternativa antimarxista de modernización percibe las distintas Se mantiene la figura de Niemeyer con la Capilla de San
acto de presencia pues la juxtaposición de Lever House contra las (Sala de Conciertos Metropolitana de Tokyo, 1961), Hitchcock,
sociedades como organismos unitarios, que desarrollando fuerzas Franciso en Pampulha (1943), que aunque es reducida en prepon-
imágenes de la casa de Philip Johnson en New Canaan (1955-56) no sólo elimina el desarrollo latinoamericano del brise-soleil,

sino que redibuja la nueva geografía de la arquitectura de movimiento -desarrollo- inician la dinámica de la moderni- derancia es insertada en relación con Philip Johnson (Casa en
y aquella de Osvaldo Bratke (1953) en Sáo Paulo, inmediatamen-
tes antes de la última lámina donde se presenta el Edificio Polar, occidental. zación. Así, de un momento originario «tradicional», se crece New Caanan, 1955-56) y Ecro Saarinen (Aeropuerto Dulles,

nos hace saltar la página y leer las torres miesianas en sus ela- y se desarrolla en cinco etapas hasta convertirse en una sociedad 1960-63). Juxtapuesto así, entre la reacción anti-micsiana de
boraciones neoyorquinas y caraqueñas una contra la otra. moderna. Este movimento.teleológico occidental, presencia una Johnson y el arquitecto prototipico de finales de los años cin-
Esta nueva geografía precisamente en los albores de los
Esta estructura visual comparativa se mantiene en la edición de cuenta y principios de los sesenta" la figura de un sobrio y disci-
etapa singular del zake-offo despegue donde las viejas formas
1963. El Lever House, sin embargo, es sustituido por la torre
procesos de descolonización de África, y la decidida intervención 3 A plinado Niemeyer mantiene su rango de maestro. Permanece
"E que operan resistencias en la sociedad son eliminadas, presencián-
estadounidense en Vietnam (1961-62) marcan nuevos procesos - dose así un crecimiento sostenido e ininterrumpido. el juego de relaciones de la edición de 1958, pues la juxtaposición
Thyssen Haus (1958-60) de los arquitectos alemanes Hentrich 87 que afectan la arquitectura moderna. Los problemas de la
La incorporación de la tradición arquitectónica occidental, entre racionalismo miesiano y virtuosismo formal y técnico de
Petschnigg, que en su declarada ubicación dentro de la ciudad arquitectura de hoy, nos dice Hitchcock, deben ser considerados
resiste la urbanidad que Hitchcock señalase en los otros ejemplos manifiesta ese take-off fundamental para el desarrollo de la línea corbusiana expresada en la juxtaposición original entre
como problemas mundiales. Esta nueva categoría geográfica,
modernidad. Si Hitchcock prevee la posibilidad de que los países la Fábrica para General Motors de Saarinen (1951-55) y la misma
(¿jardín?) El lector puede advertir que las torres representativas «mundialidad», revela una estructura modernizante donde
del «internacionalismo miesiano» hacen una pronunciada «subdesarrollados» abandonen el tutelaje cultural, «como han obra de Niemeyer, se mantiene, y es reclaborada con nítida
sc despliegan etapas de desarrollo que demuestran las contribu-
abandonado el tutelaje político», esta independencia se genera claridad en 1963, al juxtaponer la obra de Saarinen contra la del
aparición al final de esta edición, pues la Lever House no es eli- ciones de la occidentalidad.
minada sino desplazada a una nueva comparación. dentro de la tradición occidental, «pues ni siquiera la arquitectura maestro mismo con el monasterio de La Tourette (1957-61)."

La yuxtaposición entre el muro cortina de Mies, elaborado actual japonesa está ni se prevee que esté... fuera de la tradición No se pierde la virtuosidad espacial de Pampulha, ahora es
Hasta el momento, Europa Oriental, Asia y África, han sido estudiantes y discí- -
en los apartamentos de Lake Shore Drive en Chicago (1949-51) pulos de Occidente. ¿Contribuirán los países de Europa Oriental y las nuevas arquitectónica de Europa Occidental».* acompañada y rcelaborada por el Acropuerto de Dulles,
naciones de Asia y África al nuevo estilo mundial, como lo hicieron en las pasadas La arquitectura occidental, símbolo, objeto y proceso de moder- en Washington D.C. Se mantiene también la dialéctica entre
y la fachada norte del Ministerio de Educación en Río de Janciro, décadas recientes, primero Norteamérica, luego latinoamérica y ahora hace el
nización y modernidad, depende de las presiones y desarollos Mies y Le Corbusier, principal narración, de forma negativa con
con su famoso brise-soleil, se mantinen en 1963 sin registrar Japón?"

52 53
FiArchitecture:
enry-Russellestas pági nas:Hitchcock,
Nineteenth and Tewentieth Centunies,
Baltimore, Penguin Books, 1963.

la reacción de Johnsony el uso de pilares de mampostería que Los brasileños en estos últimos años, podían diseñar y construir ellos
mismos Brasilia, Si volvemos al párrafo que cierra el último capítulo del libro,
vemos que los ejemplos venezolanos han sido eliminados y
tan bien o quizás mejor que los europeos o
los norteamericanos -ciertamente, mejor
éste añade en 1969 una oración que altera radicalmente el
para Hitchcock señalan un regresoa la relación entre muro y reemplazados. que los arquitectos portugueses
de su madre patriz- la hubiesen podido construir
ventana del siglo diecinueve. el contrario, han empleado a Le Corbusier y otros euro- contexto original:
para ellos. Los indios, por
han nombrado para el diseño y construcción de suuniversidad
peaos, y los iraquíes
Podemos leer el juego de desplazamientos y climinaciones de Desde la torre de Fonthill Abbey hasta los forjados de Cerro Piloto, ambos
a una oficina estadounidense encabezada por un arquitecto de origen alemán.* La bistoria de la arquitectura en la segunda mitad de este siglo puedeser escrita sólo
viviendas modelo; desde el Banco de Inglaterra al Edificio Polar, ambos casas de
imágenes en relación a la meritoria incorporación del Museo comercio como nunca mejor ha sido alojado en el período que trata este libro; desde
L
en el futuro. Las breves visiones -puesto que no son más que
esto- aquí presentadas,
Y The Brazilian could design and build in the last years Brasilia by themselves as
la Catedral de Baltimore a Notre-Dame-du-Haut, el registro de notables reali- de la producción de principios de la posguerra, son la selección del crítico y no la
Guggenheim (1943-46) de Frank Lloyd Wright; ésta, yuxtapuesta -
well, perbaps better than the Exropeans or North Americans -above all, certainly, ,
del historiador; una selección que fue inevitablemente influenciada por lo que el crí-
zaciones presentadas en este libro no excede en variedad a ningún otro período de
contra la Lever House, genera múltiples registros: hormigón versus tbe architects oftheir own Portuguese bomeland- conld have built it for them.
ciento cincuenta años en la historia del mundo occidental (1958). " tico conocía mejor de primera mano. ¡Será evidente que el autor ha regresado
The Indians, on the other hand, have employed Le Corbusier and other Furopears,
recientemente de Sud América!
acero, organicismo versus racionalismo, creatividad artística and the lrags have assigned the designing and building oftheir Universiy to an
From the tower ofFonthill Abbey to the slabs ofthe Cerro Piloto, deellings both; American firm headed by an architec ofGerman origin.
versus burocracía del diseño, individualismo versus maquinaria The history ofarchitecture in the second half of bis century can only be wntten
from the Bank ofEngland to tbe Edificio Polar, both housing business as it was
burocrática administrativa, etc. También podemos leerla como in tbe future. The glimpses for they are no more than tbat- ofearlypostwar pro-
never housed before the period with which bis book deals;from Baltimore
Cathedral to Notre-Dame-du-Haut, be range ofnotable achievement recorded duction given bere represented a critic's and not an historian's selection, and a
una vuelta a la temática presentada en Built in the usa, la condi- En el epílogo de 1963, encontramos una lectura positiva de la selection that was inevitably much influenced by what the critic knew best at first
in this book is not readily outranked in variety by any otber bundred-and-fiftyyear
hand lt will be evident hat he had lately returned from South America!
ción estadounidense de pluralidad, y hasta la supremacía arqui- period in the history ofthe western world. - región, en la cual Latinoamérica demuestra los últimos estadios
tectónica neoyorquina. Se elabora la centralidad de los Estados de la modernización y los beneficios de la continuidad de la

Unidos, y su producción múltiple, nacional (Frank Lloyd Desde la casa de campo Orné de Papworth a los forjados de Ioughborough Road, 4 civilización occidental, todo esto en independencia e individuali- ¿Qué se evidencia? Si esta frasc hubiese sido escrita en 1958,
ambos viviendas; desde el Banco de Inglaterra al 'I'hyssen Hauss, ambos casas de
Wright) e internacional (Mics). No podemos hablar sin embargo, de comercio como nunca mejor ba sido alojado en el período que trata este libro;
dad. Se entrelee una actitud de fast accompli, de proceso con- se leería como una declaración de hecho, como la imposibilidad

de estructuras de globalización pues Hitchcock opera dentro de desde la Catedral de Baltimore a Notre-Dame-du-1 laut, el registro de notables sumado. Esta actitud bastante simplista es la conclusión inevitable excluir la arquitectura latinoamericana y la necesidad de someter
:
realizaciones presentadas en este libro no excede en variedad a ningún otro período. W
marcos nacionales y macro-nacionales (Europa Ocidental) que no de alguien que en realidad no conocía bien la arquitectura de al lector de Architecture a las abundantes referencias y ejemplos
de ciento cincuenta años en la historia del mundo occidental (1963). E
abandonan el estado-nación, real o imaginario, como elemento la región, y mucho menos sus procesos y conflictos de de esta arquitectura. Leída once años después, en el contexto de
trom Papyortb's «Cottage Oré» to the slabs ofLoughborough Road, «model»
tanto organizativo como estructural. modernización. 1969, esta frase suena más como una apología poco entusiasta
deellings botb;from he Bank ofEngland to Thyssen Hans, both housing business as de
E t0as never boused before the period with wbich tbis book deals;from Baltimore La desaparición de los ejemplos latinoamericanos de en cl mejor de los casos, o como simple disculpas en el peor

Catbedral to Notre-Dame-du-Haut, the range ofnotable achievement recorded in ellos. ¿Había decepcionado la arquitectura latinoamericana?
Es cierto que Hitchcock no alteró el texto de manera radical; Architecture responden a un profundo desconocimiento que
this book is not readily outranked in variety by any otber bundred-and-fifty-year
esto hubiese sido una empresa difícil y demasiado costosa. period in the history of the western world. incrementa a medida que pasa el tiempo y cambian las condicio- ¿Había sido ésta un simple destello fugaz, digno sólo de la aten-
Sin embargo, si el cambio no fue cuantitativo sí lo fue cualitativo nes de la región. Esto nos fuerza a volver a la exhibición del ción de la crítica y no de la historia? Hay eco de esta decepción
en el comentario de 1986 con el cual abrí este texto, y puede
e intelectualmente estructural, pues con inserciones estratégicas Así como Cerro Piloto y el Edificio Polar desaparccen de las MOMA, pues como recalca el mismo Hitchcock al historiador
estadounidense James Ackerman, la exhibición representaba al releer su gran obra,
cambia radicalmente valoraciones de la arquitectura Latinoame- ilustraciones, estos desaparecen de la conclusión." Pero ¿estas
ser que en esos momentos de desilusión

«la totalidad o quizás hasta más de mis conocimientos de esas Hitchcock haga memoria de la advertencia que le hizo Colin
ricana, y así la distribución geográfica de la arquitectura moderna desapariciones constituye un jucio negativo en contra de la
occidental. Los cambios de 1963 inician una serie de cambios partes»? La presencia de la arquitectura latinoamericana en Rowe hace años: «recuerda», le dijo «que la gente allá abajo son
arquitectura latinoamericana?
Architecture se encuentra atrapada por la actividad muscística. todos caníbales»."
que continúan hasta la edición integrada de 1971 donde las dos La arquitectura moderna latinoamerica demuestra indepen-
operaciones narrativas (textual e ilustrativa) se fusionan. dencia y madurez, penúltima fase en los escalones de crecimiento -

Si volvemos al párrafo final que sirve de conclusión a la obra de Rostow pues, como demostraba la nueva ciudad capital de Si Hitchcock opera en base al desconocimiento, éste como es
en la edición de 1958 y la comparamos contra aquella de 1963, Brasil. natural crece, hasta convertise en un juicio de autocrítico.

4
55
Notas 26. Carta de Henry-Russell Hitchcock a Martin Vegas Pacheco, 13 de enero de
1955, ASD Exh. 590, Museum of Modern Art Archives, Nueva York.
1. «Latin America got over inflated because of his tip.» En conversación
con 27. Lewis Mumford, <The Sky Line, the Drab and the Daring», Nueva York,
Mosette Broderick, 12 de diciembre de 2008. 4 de febrero de 1956,
pp. 82-83.
2. De aquí en adelamie este texto será referido simplemente como: Architecture. 28. «Today, the problem must be posed in world terms.» Hitchcock, Architecture:
3. Carta de Henry-Russell Hitchcock a Nikolaus Pevsner, 12 de marzo de 1955. Nimeteenth and Twentieth Centuries, p. 435.
Henry-Russell Hitchcock Papers. Archives of American Art, Washington 1).C.
4. Finalmente sale a la luz en 1958.
29. Ibidem.
30. Ibidem.
5. Carta de Henry-Russell Hitchcock a Nikolaus Pevsner, 15 de marzo de 1955. 31. Ibidem, p. 434.
Henry-Russell Hitchcock Papers. Archives of American Art, Washington D.C.
6. Para un detallado análisis de la estructura
32. Con esta reelaboración se pierde la imagen de los Tribunales de Chandigarh, 1952-56,
e
y fuentes históricas de este tipo de 33. Hitchcock, Architecture: Nineteentb and Twentieth Centuries, -
formalismo ver: Marie Frank, «Hitchcock and Harvard. The Historical Context p. 427.
34. Ibídem, p. 427.
of Formalist Aesthetics», en Frank Salmon, Paul Mellon Centre for Studies in 35. Estos no desaparecen en la narrativa general.
Briush Art, and Yale Center for British Art, Summerson and Hitchcock:Centenary 36. Hitchcock, Architecture: Nineteenth and Twentieth Centuries.
Essays on Architectural Historiography, Studies in British Art; New Haven, Conn., 37. «It represents the sum total - or a bit more! of my knowledge of those parts.»
London, Yale University Press, 2006. Carta de Henry-Russell Hitchcock a James Ackerman, 8 de diciembre de 1955.
7. Carta de Henry-Russell Hitchcock a Arthur Drexler, 29 de noviembre
de 1955. Henry-Russell Hitchcock Papers. Archives of American Art, Henry-Russell Hitchcock Papers. Archives of American Art, Washington D.C.
38. Henry -Russell Elitchcock, Architecture: Nineteenth and Twentieth Centrries, a

Washington D.C. Baltimore, Penguin Books, 1969, p. Mi énfasis.


8. «My book is effectively completed and I am now making the last round-up of
39. «People down here are all cannibals
you know.» Carta de Colin Rowe a
missing illustrations...» Carta de Henry-Russell Hitchcock a Gibson Danes,
13 de septiembre de 1955. Henry-Russell Hitchcock Papers. Archives of American Henry-Russell Hithchcock, 15 de junio de 1955, Henry-Russell Papers. Archives of - o E
American Art, Washington D.C.
Art, Washington D.C.
9. Henry-Russell Hitchcock, boceto
para la solicitud de la beca Guggenheim,
Henry-Russell Hitchcock Papers. Archives of American Art, Washington D.C.
10. «Of the world outside Europe and North America, I know only South America
at first band, and that only sketchily, but in a volume at the proposed scale the
19th and 20h century architecture of Asia and Africa and the Antipodes willhardly
find much place.» Henry-Russell Hitchcock, boceto
para la solicitud de la beca
Guggenheim, Henry-Russell Hitchcock Papers. Archives of American Art,
Washington D.C.
11. Romantic Classicism.
12. Henry Russell Hitchcock and Vincent Joseph Scully, Modern Architecture:
Romanticism and Reintegration, 1st Da Capo Press ed., Nueva York, Da Capo
Press, 1993, p. XxL
13. Ibídem, p. 22.
14. Para el «waiting room of history», ver: Dipesh Chakrabarty, Provincializing

Europe: Postcolonial Thought and Historical Difference, Princeton Studies in


Culture/Power/History, Princeton, N.J., Princeton University Press, 2000.
15. «...independence of the principal colonies of the European nations, British,
Spanish and Portuguese was generally established in this period or just before it.>
Henry -Russell Hitchcock, Architecture: Nineteenth and Twentieth Centuries,
Baltimore, Penguin Books, 1958, p. 77.
16. Ibídem.
17. Ibídem, p. 77.
18. «Eclecticism of taste.» El «eclecticismo de
gusto» es una fuerza progresiva
balanceada por una nostalgia sentimental
que genera un conflicto entre el simple
deseo de copiar el pasado y aquellos
que utilizan el pasado para llamar al futuro.
Hitchcock and Scully, Modern Architecture: Romanticism end Reintegration,
p- XXI. El proyecto de Hitchcock es pues rescatar aquellas personas que, dentro del
eclecticismo decimonónico, utilizan los estilos del pasado
para buscar nuevos
valores, liberándose de las ataduras de la tradición.
19. «Might be taken for a bótelparticulier erected in the new questeras of Paris in
the earlier decades of the century.» Hitchcock, Architecture: Nineteenth and
Twentieth Centuries, p. 90.
20. <I will be talking to absent South American friends an urging that they
pay a
little more attention to their past as a whole.» Carta de Henry-Russell Flitchcock a
James Ackerman, 11 de enero de 1955. Henry-Russell Hitchcock Papers. Archives
of American Art, Washington D.C.
21. Hitchcock, Architecture: Nineteenthb and Twentieth Centuries,
p- 555.
En 1958 este capítulo se llama «Arquitectura en los mil novecientos cincuenta»:
«Architecture in the Nineteen-Fifties.> Este título cambia en 1963. Henry-Russell 1 Iichcock, .
Architecture: Nineteentb and Twentieth Centuries,
22. Ibídem, p. 426.
Baltimore, Penguin Books, 1963.
23. Ibidem, p. 427.
24. Paolo Scrivano, A Tbirty- Year Project: Henry-Russell Hischcock's Architecture:
Nimneteenth and Twentieth Centuries en Salmon, Paul Mellon Centre for Studies in
British Art, and Yale Center for British Art, Summerson and Hitchcock: C:rentenary
Essays on Architectural Historiography, p. 173.
25. Henry-Russell Tlitchcock, Architecture: Nineteentb and Twentieth Centuries,
Baltimore, Penguin Books, 1963, p. xx.

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Adrián Gorelik
Historias de Nueva York

Arquitectura, capitalismo y pensamiento crítico en Delirious New York mMadelon Vriesendorp, «Delito flagrante»,
¡lustración utilizada en la portada de la primera
edición de Delirious New York, 1978.

Manifiesto retroactivo Venturi, Izcnour y Scott Brown en Aprendiendo de Las Vegas:


El gesto crítico fue muy similar: descubrir en un paisaje
Es indudable que Delirious New York no es un libro de historia urbano realmente existente, producido anónimamente por el
urbana o de la arquitectura, aunque su apelación al pasado -ese colectivo de intereses que construye la ciudad -en el caso de
territorio incierto que está lejos de rendirse dócilmente a las Las Vegas, con claro predominio de los intereses comerciales
y
incursiones exclusivas de los historiadores es tan fuerte que publicitarios-, al margen de cualquier preceptiva de la arqui-
aparece en el mismo envés del título del libro: un «manifiesto tectura legítima, las fuentes de donde extraer la savia para la revi-

retroactivo para Manhattan».' No se espera que nadie consulte talización de una cultura arquitectónica exhausta de legitimidad.
este libro sobre aspectos de la historia de Nueva York, desde ya; Y podría decirse que en esta operación de estetización de lo En 1972 va a estudiar a Cornell, una de las escuelas de arquitec-
el realismo pero distorsionarlo a voluntad-, recupera en
pero la potente imaginación histórica que muestra Koolhaas cotidiano, ellos fueron incluso más radicales que Koolhaas, ya a cambio una posición clásicamente vanguardista: encontrar en tura más renovadoras para esa época en los Estados Unidos,
es mucho más que un vehículo anacrónico para sus ideas sobre la l
que su piedra Roseta todavía no había recibido ninguna el presente metropolitano las semillas del futuro. Busca responder tensionada productivamente entre las figuras de Colin Rowe y
ciudado la arquitectura: ilumina con originalidad episodios atención, aparte del desprecio: la alta cultura -a la que todas Oswald Mathias Ungers -la caracterización es de Rafacl Monco,
a aquella crisis de un modo análogo a como lo habría hecho
fundamentales de la historia urbanay reescribe un capítulo cen- estas operaciones anti-culturales se dirigen no había todavía ni E
Le Corbusier: doblando la apuesta. En un capítulo de Delirious... quien señaló que Koolhaas se convirtió en discípulo dilecto de
tral de la historia (y la historiografía) de la arquitectura moderna, siquiera reconocido que Las Vegas guardaba claves a la espera frente a la arquitectura
muy significativo respecto de su posición Ungers, y que de él extrajo tanto su preocupación por la ciudad
su «capítulo americano». de ser descifradas. En esto, Venturi, Izenour y Scott Brown
moderna europea, Koolhaas relata que Le Corbusier respondía como matriz. generadora de la arquitectura, como su afecto y

¿Qué significa, en todo caso, un «manifiesto retroactivo»? fueron muy consecuentes con su inspiración pop, corriente que
a la pregunta sobre los rascaciclos de Manhattan diciendo: respeto crítico por la arquitectura del Movimiento Moderno.
Con su gran talento para las fórmulas de alto impacto, Koolhaas generalizó en el arte contemporáneo el criterio de que el núcleo Desde Cornell se conecta con uno de los epicentros de la renova-
«son demasiado pequeños»? Pero es el mismo Koolhaas cl que
inventó un nombre para lo que en verdad es un híbrido entre de eficacia de una obra radica en la sorpresa que es capaz de moderna a contrapelo ción intelectual de la alta cultura arquitectónica norteamericana,
parece explicar la crisis de la arquitectura
interpretación urbana y manifiesto arquitectónico. Buena parte generar. Y aunque Koolhaas también estuvo desde siempre inte- de las habituales acusaciones de autoritaria, heroica y omnipo- el Institute for Architectural and Urban Studies (1AUS), creado
del aliento de Delirious New York surge de esa mezcla. El libro resado en el efecto sorpresa, la originalidad de Delirious New donde Koolhaas
tente, diciendo de modo desafiante: «fue demasiado tímida». Esa por Peter Eisenman en 1967 en Nueva York,
comienza postulando a Nueva York como la piedra Roseta del York no descansa en la novedad de su objeto: el rascacielos limitación del tan denostado se instala en 1974 y organiza la primera formación de su
parece ser para Koolhaas la verdadera
siglo XX y, por lo tanto, al propio Koolhaas como el Champollion de Manhattan ya había sido incorporado como un capítulo fun- | purismo de la arquitectura moderna: un refugio formalista Office for Metropolitan Architecture (OMA).? En el 1AUS y en
que nos descifra sus secretos. Pero -los historiadores urbanos lo damental de la historia de la arquitectura moderna y, más en D
el desafío puesto torno de su revista Oppositions -que Eisenman dirigía con
para negarse a enfrentar con verdadera ambición
saben bien, toda ciudad guarda, enigmática, en sus planos y general, la exégesis de Nueva York como «capital del siglo xx» ya la Kenneth Frampton, Mario Gandelsonas, Anthony Vidler y otros-
por la metrópoli real, es decis; la cultura de la congestión,
edificios, las claves de una civilización. Koolhaas busca algo más estaba completamente consolidada cuando Koolhaas comenzó
riqueza genuina de la modernidad. A entender esa cultura -y a se nucleaba una vanguardia cosmopolita que estaba en el mo-

específico en la historia de Nueva York: la quintaesencia de la a extracr de ella su manifiesto.


celebrarla- dedicó Delirions New York, el último manifiesto mento más creativo del desmontaje y la desideologización de la
modernidad. Y cuando el intérprete de la ciudad no es un Pero la inspiración pop de Aprendiendo de Las Vegas sin duda forma moderna -Diana Agrest, Rodolfo Machado y Jorge
moderno.
historiador, sino un arquitecto a la búsqueda de principios para explica algo más importante de sus diferencias con Delirious Silvetti, Michael Graves, entre otros-, con fuertes vínculos con
su arquitectura -a la búsqueda de un manifiesto retroactivo, New York, ya que mientras lo anónimo y popular que le interesa la cultura arquitectónica curopea, tanto a través de Aldo Rossi y
ocurre algo muy especial, porque tiene que inventar, como un al primero se resume en la superficie de una iconografía, la Mercantilismo y artificialidad el neorracionalismo italiano, como de la crítica a la ideología
artista más que como un traductor, la propia lengua celebración de la cultura de masas de Delirious... está dirigida a de la Escuela de Venecia, como, en términos filosóficos mucho
que espera ser
comprendida. Esto ya es toda una definición que nos ofrece una indagación de las estructuras profundas -también en el
Los principales rasgos biográficos de Koolhaas son muy conoci- más generales, de las renovaciones teóricas del post-estructu-
Koolhaas sobre el mejor papel que puede desempeñar el arqui- sentido psicoanalítico, con el que coquetea la inspiración surrea- ralismo parisino.
dos -al menos tanto como los de cualquier estrella mediática-:
tecto en la modernidad: producir metáforas capaces de ordenar e lista de Koolhaas- de la ciudad y su arquitectura. El «manifiesto nace en Rotterdam en 1944, pasa algunos años de su infancia De muchos de los tópicos de cesa revisión teórica se alimenta
interpretar la realidad metropolitana, convirtiéndola en retroactivo» de Venturi, Izcnour y Scott Brown, con su en las colonias holandesas de Indonesia, se instala en Amsterdam indudablemente Delirious New York, pero para volverse en
conocimiento social. combinación de Pop Art y realismo, proponía una superación contra de una de sus manifestaciones dominantes desde entonces,
a partir de 1956, donde trabajará de guionista de cine y perio-
Delirious New York tampoco cs, de todos modos, el primer de la crisis de la arquitectura modernaa través de un contex- la del reclamo de la autonomía de la arquitectura, en sus dos
dista, y en 1968 va a estudiar a la Architectural Association
manifiesto arquitectónico que surge de una interpretación urbana: tualismo populista; el de Koolhaas, con su apelación al surrca- versiones: la rossiana, que a través de la historia conducía a una
de Londres, en la que entonces estaba en pleno apogeo la versión
en 1972, seis años antes que Koolhaas, ya lo habían hecho lismo -que le permite al mismo tiempo potenciar descaradamente futurista y tecnológica del pop que daba el grupo Archigram. «nostalgia de lo urbano», y la más puramente neoyorquina,

58 59
exclusivamente motivada por el objetivo de racionalizar el suelo Downtown Athletic
que a través de la teoría lingiística y psicoanalítica conducía
comercial funciona, para él, sólo como una coartadaastuta "
Club (Starret 82 Van
a un regodeo hedonista con la forma. Dos caminos de la múltiple urbano como mercado y maximizar sus valores. Pero en ambas a través de una aparente eficacia, el máximo Vleck y Hunter, 1931),
que permite justificar, vista general e ilustra-
renovación en curso desde finales de los años sesenta, cuyo metáforas hay algo nuevo: la apelación sombría de Sennett a Max límites para las fantasías
de artificialidad: una libertad sin ción de Madelon
rechazo es uno de los rasgos más constantes en la carrera Weber introduce el carácter neutro de la retícula como caracte-
oníricas de la cultura de la congestión. Vriesendorp (que lleva
de Koolhaas hasta el día de hoy. rística de un tipo de dominación del territorio (que lo anula N
como epigrafe: «Una

máquina para solteros


Pero detengámonos un momento en el argumento del propio como tal); Koolhaas, por su parte, introdujo el conflicto dinámico
metropolitanos»). El
edificio es uno de los
libro, que Koolhaas elabora en Nueva York entre 1974 y 1978. entre orden y caos, pero quizás lo más novedoso -y sin duda
surrealismo, capitalismo y arquitectura modema ejemplos paradigmáti-
Es muy evidente la reivindicación holandesa en su hilo argu- provocativo- es su directa inversión de aquel tradicional repudio, cos de Koolhaas acerca

mental: encontrar la peculiaridad de Nueva York en su espíritu asumiendo un entusiasmo por las contradicciones de la retícula funcio- de la «lobotomias entre
Podríamos decir, entonces, que la retícula y el rascacielos la fachada neutra y el
comercial y en su necesidad de construir un mundo completa- (el capitalismo) que parece el de alguien que hubicra elegido que- York como la estructura teórica de la cul- interior revolucionario.
nan en Delirious New
mente artificial, rasgos que habrían implantado genéticamente las darse sólo con las páginas iniciales de cxaltación de la burguesía resultado y su motor. El relatohistórico
tura de la congestión, su
treinta familias que llegaron en 1623 para crear la colonia de del Manifiesto comunista: el capitalismo (la cuadrícula) como desarrolla para argumentarlo comienza en Coney
que Koolhaas
Nueva Amsterdam en el extremo sur de la isla de Manhattan. fuerza revolucionaria fuera de sí.
Island a fines del siglo XIX, un laboratorio de la cultura de masas
Esa combinación de mercantilismo y artificialidad tendría su Con el rascacielos hará una operación interpretativa muy los mundos artificiales más osados y se
en el que se inventan
momento heroico de plasmación en estructuras urbano-arquitec- similar, tanto en agudeza como en capacidad revulsiva. Es un
experimenta con las arquitecturas más ingeniosas para contener-
tónicas completamente originales -el rascacielos entre fines del artefacto que nace como el resultado de una ambición típica- lo
los, de modo que con lo «baratoeirreal» sc puede plantear
siglo XIX y la década de 1930. Pero hay un hito urbano anterior al mente especulativa: multiplicar todas las veces que la tecnología

momento heroico que se convertiría en su verdadera condición lo permita el valor del suelo. Pero el propio tamaño desmesurado
«potencialmente sublime»; continúa en Manhattan con el rasca-
cielos y sus teóricos (especialmente Hugh Ferris yRaymond
de posibilidad: el plano de los Comisionados de 1811, por medio al que llega impone nuevas condiciones a la arquitecturay el
Hood), que llegan al apogeo hacia 1940, momento a partir
del cual toda la isla, que estaba prácticamente vacía, fue trazada urbanismo y, especialmente, nuevas posibilidades a la cultura de del cual el manbattanismo entra en decadencia, especialmente
con una retícula homogencizante de bloques rectangulares: la congestión. En primer lugar, cada rascacielos se presenta como de la introducción de los principios de la arquitectura
por causa
el paraíso de la especulación -y Koolhaas, ingenioso, juega con el una ciudad dentro de la ciudad, en competencia contra todos los
moderna europea, que clausuran esa experiencia de intensa
doble sentido conceptual de este término, ya que la trama aman- demás, lo que implica que va a superponer en su interior todas ve ese intercambio transatlántico
c ingenua creatividad. Koolhaas
zanada regular implica, sobre todo, «un programa intelectual» las funciones posibles de modo completamente indiferente la eficacia y cl pragma-
como una nueva paradoja: en nombre de

que reclama «la superioridad de la construcción mental e indeterminado, disolviendo todo prejuicio zonificador de la
tismo, los inventores norteamericanos de la cultura de la con-
sobre la realidad». urbanística. En segundo lugar, el tamaño modifica la calidad
gestión habían llegado a construir la fantasía delirante de edificios
Koolhaas celebra la retícula no como forma urbana, sino de la relación entre la superficie envolvente y su contenido, colmados de placeres; en nombre del idealismo, la arquitectura
como malla flexible que permite -típicamente, de acuerdo a su
porque en tanto la actividad interior es potencialmente infinita, moderna europea propone edificios banales que sólo sirven
gusto por las paradojas teóricas el máximo de control para ya no puede pretender ser representada por una superficie para los negocios.*
el máximo de descontrol: impone una disciplina bidimensional exterior que proporcionalmente tiende a ser más pequeña cada Pero este juicio tajante de Koolhaas sobre la arquitectura
muy restrictiva (la manzana aislada como máxima unidad vez, disolviendo todo prejuicio moral de la arquitectura. Esa moderna europea podría dar una impresión errada si no
de intervención), pero que obliga a una anarquía completa en la «deliberada discrepancia» entre el exterior y cl interior -la «lobo- en el libro. Para cllo,
sc entendiera el lugar conceptual que ocupa
tercera dimensión, ya que cada manzana tiene necesidad de tomía», dice Koolhaas, con la que se cortan las «conexiones de razonamiento de Koolhaas con cl surrealismo, mucho más
conviene hacer un rodeo por su sistema retórico. Por una
sobresalir para triunfar en una competencia salvaje, y el incre- nerviosas» de la fachada con el funcionamiento interno del fundamental para que unmani- profundamente que lo que podría suponerse en base asu
parte, Koolhaas tiene una virtud
mento del valor del suelo tiene como único techo el cielo. edificio- les ofrece a los arquitectos una zona de «libertad sin fiesto arquitectónico cumpla su papel (es decir, para que convenza, apelación a Dalí o a la propia figuración de lasilustracionesdel
Para ello llega el invento de Otis -el ascensor mecánico- y su precedentes» (que se va a poner de manifiesto en cl Rockefeller libro. Estas fueron realizadas por su esposa Madelon Vriesendorp,
obligando a ver la realidad conocida de un mododiferente): de los proyectos ficcio-
resultado, el rascacielos. Center) y a la sociedad, un espacio artificial en el que se puede tiene verdadero talento epigramático. El libro está sembrado de en sintonía directa con la imaginería

Podríamos decir que Koolhaas no está haciendo otra cosa que dedicar sin restricciones a desarrollar formas de vida constan- nales que Koolhaas realiza en los años de elaboración de
imágenes memorables (como cuando dice que el rascacielos
interpretar la estructura urbana como un analogon del capitalismo temente innovadoras (como muestra por antonomasia el análisis Delirious New York y se publican como apéndice final («The
«le ofrece a los negocios los espacios abiertos de un "salvaje oeste"
más puro: afirma que la riqueza revolucionaria de Nueva York del Downtown Athletic Club). Así, para Koolhaas, el rascacielos City of Captive Globe», «Hotel Sphinx», o el concurso para
artificial, una frontera en el cielo»), paradojas iluminadoras ,

surge de la contradicción entre colectivismo e individualismo que sc convierte en el verdadero «condensador social constructivista», Roosevelt Island con OMA); y la mejor prueba de que la conexión
(Nueva York como una «metrópolis del caos estricto») y ocu-
lleva inscripta en su propia retícula. Unos años después, Richard la sociedad neoyorquina de las décadas de 1920 y 1930 logra rrencias ingeniosas (como cuando explica porqué los vagabundos
surrealista es más profunda por vía de la argumentación, es que
Sennett hará una interpretación equivalente: la cuadrícula muestra imponer la libertad en los estilos de vida que las vanguardias son los clientes ideales para la arquitectura moderna: siempre
el estilo iconográfico utilizado por Koolhaas -tanto en la
,

para él «la ética protestante del espacio».? Claro, la relación entre europeas propusicron sin éxito, y el Gran Gatsby se vuelve revo-_- necesitan higiene y protección, son amantes del soly el airc libre, arquitectura como en cl diseño de sus publicaciones variará
la retícula homogénea y el capitalismo parece muy obvia: lucionario sin dejar de tomar martinis. Y aquí se ve que de los ni la disposición drásticamente en los años posteriores a Delirions..., mientras que
y no les importa la doctrina arquitectónica
el repudio que la trama regular recibió tradicionalmente de los dos rasgos holandeses, el comercioy la artificialidad, Koolhaas su modo de razonar parece haberse
radicalizado con
formal). Pero más allá de esta felicidad de la escritura, es evidente
urbanistas modernos sc funda en que siempre se interpretó como prefiere ser realmente fiel al segundo, o mejor, que el espíritu básico que conecta el modo el tiempo.
que hay un recurso argumentativo
,

60 6l
-

Baile de 1931 en el hotel Astor: los arquitectos


disfrazados de rascacielos interpretando Amerikanismus
The Manhattan Skyline, reproducido en Delirious
New York y luego en La esfera y el laberinto, op. cit.
Dijimos que la originalidad de Delirious New York no estaba
en su objeto, ya que
Nueva York venía siendo unay otra vez des-

cubierta por la arquitectura moderna como una fuente de reno-


vación. Menos que menos es original que sea un europeo el que,
una vez más, la descubra:
la expresión amerikanismus se usó

en Europa Central desde fines


del siglo XIX para designar no sólo
e.
ENE.
Se trata de un modo de razonar en forma de teoremas, dando
porque es un camino para lo imprevisible, para el disparate. la forma más radical del materialismo, sino también la atracción,
apariencia científica a formulaciones de exaltada imaginación Pero no es una broma: ¿acaso no es esa una buena definición
mezcla de desdén y fascinación, que los curopeos comenzaron 4

(«cuanto mayor es el número de plantas apiladas alrededor del -también clásica- del mundo capitalista? El «método» le
a sentir por los Estados Unidos
como tierra libre de ataduras
=- h
hueco del ascensor, más espontáncamente se solidifican en e-.
una única forma», dice Koolhaas sobre el efecto del ascensor en
permite a Koolhaas mucho más que interpretaciones ingeniosas:
le permite jugar con una actitud ambigua sobre el mundo
para el despliegue
de la modernidad. También cn este sentido, el --- *o
la arquitectura; «más allá de cierta masa crítica, toda construcción
capítulo de Delirious... sobre los europcos en Nueva York es ene] i -_- -
real, celebratoria pero irónica, que muchas veces puede pasar significativo, una llamada de atención sobre el propio rol que -
se convierte en un monumento», agrega sobre el efecto del

tamaño, y podría darse una infinidad de ejemplos). Esa com-


como crítica cáustica -¿o acaso la mera evidencia, amoral y

desideologizada, del rumbo del mundo no es ya una forma de


Koolhaas sabe que está desempeñando dentro de una larga tradi-
ción. Porque aun cuando América tenga las claves de la moder-
-
o2ve
_e
maa
binación de razón y fantasía, ciencia y juego, ese regodeo en la la crítica?
nidad, su naturalización le impediría tomar conciencia de sí "

paradoja y el contraste en la propia estructura de los argumentos, Veremos que esa es una de las claves de la relación, «intensa -la modernidad radical no guarda registro de sí misma, interpre-
es un elemento a tomar muy seriamente cn cuenta, tanto cuando
pero distorsionada», que Koolhaas ha tenido con la realidad hasta tación de larga duración que está en la base de la archicitada frase
se piensa en la eficacia lírica de las formulaciones de Koolhaas, nuestros días.* Pero aquí me interesa volver sobre su relación
de Marx, «todo lo sólido se desvanece en el aire»-. Es la cultura
como cuando se piensa en sus opciones teóricas. Porque la com- con la arquitectura moderna curopea. Porque es cnormemente médium
europea la que, en esta ecuación, se presenta como
binación «fantasía/pragmatismo» es un eje fundamental en su
significativo que el capítulo dedicado a Le Corbusier esté cen- para dar sentido e incluso recuperar
el significado histórico
reivindicación del manhattanismo y en su propio modo de proce- trado en la exposición celebratoria de su «método», mucho verdadero de la piedra Roseta que una y otra vez encarnan los
der. Por eso, al propio Koolhaas le calza tan bien la definición más que en las críticas a la arquitectura moderna. Para Koolhaas, Estados Unidos.
que da de los teóricos de la congestión: «han contraído una esqui- Le Corbusier es, a pesar de su purismo anti-surrealista, un Vista general del Rockefeller Center,
El ejemplo clásico en la historiografía de la arquitectura
zofrenia que les permite simultáneamente extraer energía c Raymond Hood y asociados, 1931-1940,
paranoico-crítico de raza, un personaje delirante, en última ins- es, por supuesto, Siegfried Giedion, quien introdujo el reproducido en «la montaña desencantada»,
inspiración de un Manhattan entendido como fantasía irracional tancia tan genial y adorable como los desmesurados arquitectos/
«capítulo americano» en el relato canónico del Movimiento
de Manfredo Tafun, op. cit.

y aplicar sus inauditos teoremas en una serie de pasos estricta- hombres de negocios neoyorquinos. Sus grandes limitaciones Moderno. En Space, Time and Architecture, libro basado Fotomontaje sobre el Rockefeller Center,
mente racionales». de curopeo habrían sido dos: no admitir que Nueva York era ya utilizado por Siegfried Giedion en Espacio, tiempo y
en las lecciones que dictó en 1938 en la Universidad de Harvard,
Como buen jugador, Koolhaas pone sus cartas sobre la metrópoli moderna que él creía que todavía había arquitectura para mostrar la nueva concepción
que inventar; recién llegado como emigrado, Giedion le da a la arquitectura espacio-temporal de la arquitectura urbana.
la mesa dedicando el capítulo (casi) final sobre los de anticipación del
curopeos en y no entender que la verdadera promesa de la condición metro- y el urbanismo norteamericanos el papel
Nueva York a presentar el «Método Paranoico-Crítico»,
politana estaba en la cultura de la congestión; de hecho, todo futuro, encontrando en su técnica utilitarista despojada de
que toma de Dalí pero le sirve para explicar a Le Corbusier. el programa de Le Corbusier habría consistido en crear
cualquier ambición estética -trátese de los rascacielos del loop de
Koolhaas describe el «método» como un modo de realizar una «congestión descongestionada».
Chicago como de las autopistas tempranas de Robert Moses
especulaciones conceptuales para producir una realidad Inspirar toda su interpretación en un «método» que la mejor expresión de las nuevas necesidades de la vida moderna.
autónoma, a través de una racionalidad extrema en los procedi- Le Corbusier representa como nadie es la mejor definición En este sentido, es elocuente su interpretación del Rockefeller
que
mientos que da como resultado una superrealidad delirante.
podría dar Koolhaas de su deuda con la arquitectura moderna. Center, sintetizada magníficamente en un fotomontaje que
Como vimos hasta aquí, es lo que Koolhaas ha estado practicando En definitiva, Le Corbusier no ha hecho más
que emplear «los mostraba los efectos espacio-temporales del rascacielos en
todo el tiempo en su interpretación sobre Nueva York, al instrumentos más racionales posibles, al servicio del objetivo más
punto la ciudad -una interpretación muy diferente en los contenidos
de que, por vía de lo inverosímil, logra presentar con verosimi- irracional posible», como dice Koolhaas cn el análisis del edificio
que la de Koolhaas, pero prácticamente idéntica en el gesto
litud el dispositivo urbano más característico de una cultura del Ejército de Salvación. Y podría decirse
que toda la teoría de crítico.
de la racionalidad económica, como una máquina deplacer la arquitectura de Koolhaas no hace mucho más
que reunir Pero de todos los sucesivos «descubrimientos de América»
y hedonismo. En verdad, el surrealismo le permite a Koolhaas las «dos ctapas» teóricas de Le Corbusier en una: el rascacielos realizados por la cultura arquitectónica europea, aquí me interesa
poner de cabeza una interpretación clásica sobre la racionalidad de Manhattan pudo convertirse en una «máquina recordar uno sugestivamente próximo de Delirious New York: el
para emocionar»_
moderna, la que relata, pesimista, el triunfo de una racionalidad de porque había sido concebido como una «máquina para habitar». libro del grupo de historiadores de Venecia, Giorgio Ciucci,
medios independizada de toda finalidad; por el contrario, Ese cs el delirio de la buena arquitectura urbana: un utilitarismo Francesco Dal Co, Mario Manieri Elia y Manfredo Tafuri,
Koolhaas celebra la racionalidad instrumental precisamente desbocado. La cittá americana, de 1973, especialmente el capítulo de Tafuri

62 63
sobre el rascacielos." Próximo en más de un sentido, volver más significativos esos contactos-" En primer lugar,
ya que no contrario, es la demostración de que la cultura delirante de los que Bigness, en relación a Delirious New York, es un manifiesto
sólo se publica en el momento en que Koolhaas está comenzando la idea de que en América se asiste «a un constante
proceso de norteamericanos fue capaz de sobreponerseala crisis, al menos retroactivo al cuadrado).'* Y es que la forma manifiesto no es
a trabajar en su libro, sino que además los críticos de Venecia
desideologización de la arquitectura», en términos de Tafuri; en r unos años más. en absoluto circunstancial en Koolhaas: también como
tenían una presencia frecuente -como A
ya mencionamos- en esa misma constatación se fundamenta, como vimos, el Propósito
En el caso del juicio sobre la arquitectura moderna europea, la Le Corbusier, todo postulado suyo -y toda obra de arquitectura-
el IAUs, a través de artículos en Oppositions inicial con que se presenta Delirious...: Nueva York como una"
y de cursos y situación es bastante similar: si ambos utilizan el caso americano se convierte en manifiesto, situación bastante paradójica, por
conferencias in situ."
gran montaña de evidencias sin manifiesto." En segundo lugar, l4 Y ara criticar un reformismo incapaz de comprender las lógicas cierto, para alguien que viene proponiendo un estatuto post-
La operación crítica de la que formaba parte este libro de los caracterización misma del rascacielos, «individuo anárquico» heroico para el arquitecto. De las cualidades específicamente
el rol que le tocaba jugar a la
venecianos fue explicada en cl magnífico prólogode Josep Quetglas profundas del capitalismoy
que realiza el equilibrio inestable «entre la independencia de la arquitectura en él (por haber sublimado su propio papel con arquitectónicas del gran tamaño, que ya vimos que había enume-
a la edición española: como parte del desplazamiento desde una
empresa individual y la organización del capital colectivo», ideología), Tafuri lo bacc para acumular conocimiento crítico rado a propósito del rascacielos (la importancia estructurante
primera etapa de «simple crítica a la ideología» (el momento Tafuri. El rascacielos, en los años veinte, es para Tafuri no sólo
en la tarea estratégica de oposición al capitalismo, mientras
del ascensor, la «lobotomía» entre fachada y contenido, etc.),
de demolición de los grandes mitos de la ideología arquitectónica la «expresión» de la economía capitalista más avanzada, sino Koolhaas salta en Bigness a una especie de parodia de teoría
Koolhaas se detiene extasiado en su caos dinámico. Pero las con-
progresista, que los venecianos llevaron adelante a finales de los su instrumento. Y también coinciden las críticas a la arquitectura
clusiones divergentes no vuelven superficiales ni contingentes nietzcheana de la arquitectura: una ciudad post-histórica ocu-
años sesenta), se trataba ahora de producir un «conocimiento moderna europea por su radicalincomprensión de este fenómeno, *
aquellas coincidencias. Por el contrario, podría decirse que dos pada por súper-edificios que tienen su propia lógica amoral, «más
no ideológico» de los procesos de desarrollo del capitaly del por su intento ilusorio de control, mientras que los arquitectos allá del bien y del mal», a la que debe someterse todo prejuicio
de las características más generales de la posición de Koolhaas
papel jugado en su interior por la arquitectura. El rol específico norteamericanos, desprejuiciados, sólo necesitan concentrarse en a hasta nuestros días coinciden con principios muy estructurantes disciplinar -Bigness como la arquitectura de los hombres
de América en esta tarea fue interpretado los controles parciales (como la Zoning Law de 1916) de este
por Quetglas a través de
Marx y Mario Tronti -compañero de los historiadores de la
EN de la empresa política de izquierda: la convicción marxista de póstumos.
«sistema desviado». Es la segunda «lobotomía», podríamos sa lo más atrasado (convicción que Pero el gran cambio a partir de la consolidación de su actividad
que lo más avanzado explica
arquitectura en la empresa político-intelectual de la revista avanzar con Koolhaas, ya no entre la envolventey el contenido
E llevaría el interés de Koolhaas de Nueva York a China), y como arquitecto, en los años noventa, es que el afán polémico y

Contropiano-: lo único que merece ser conocido -lo único de los edificios, sino entre el edificio individual
y el conjunto a] la centralidad dadaa la cuestión técnica como matriz explicativa provocador de los textos ha logrado incrementarse con una
cuyo conocimiento puede entrar a formar parte de la ciencia de del sistema urbano. de la ciudad y la arquitectura. Koolhaas parece utilizar a arquitectura mutante y en continua proliferación, que impide
oposición al capital», dice Quetglas- es cl nivel máximo alcan- Claro, a partir de estas coincidencias en el diagnóstico, la conciencia las armas de la crítica a la ideología buena parte de estabilizar a Koolhaas en una imagen. Un doble frente que le ha
zado por su desarrollo. En este plano todavía finalidad de ambas interpretaciones es completamente diferente.
muy general, su arsenal de provocaciones sigue surgiendo de allí-, pero la permitido ser hoy una figura decisiva como agitador cultural
lo que encuentra el pensamiento crítico en América es una doble "Tafuri buscaba desmontar el funcionamiento del sistema urbano barricada desde donde hace fuego está en otro lugar: no es un del mundo de la arquitectura y como agitador arquitectónico del
desideologización: de un capital sin pasado -pura fuerza de la capitalista mostrando que su ideología inexpresada en los años lugar externo al capital para desmontar sus procesos, sino el lugar mundo de la cultura (doble rol por el que, nuevamente, no
naturaleza-, y de una clase obrera sin marxismo. Y así como en veinte, a través del rascacielos, era sostener que el laissez-faire más interno posible para celebrar su triunfo sin matices. Por podemos dejar de recordar a Le Corbusier, el más genial agitador
esas condiciones de «pureza» se pudo dar tanto el mayor tenía en sí mismo la potencialidad adecuada
para autorregularse supuesto, no se trata de hacer, a través de esta confrontación de de la arquitectura del siglo xx).
avance del capital como el punto más alto de las luchas obreras -lo que iba a quedar desmentido en el Crack de 1929-; además de
posiciones, algún tipo de «denuncia» sobre una posible «traición Jeffrey Kipnis ha señalado con sagacidad que, contra lo que es
-Tront dixit-, la experiencia americana sirve para enfrentar a ser instrumento y expresión del sistema, el rascacielos, como más habitual en los principales arquitectos contemporáneos,
idcológica» que Koolhaas habría cometido, sino entender, en sus
la cultura progresista curopea con sus límites
y fracasos, «imagen», cumplía la función de convertir a Nueva York en mismos comienzos, la lógica de funcionamiento del pensamiento Koolhaas no fundamenta sus posiciones arquitectónicas con
potenciados doblemente por la confianza autoindulgente en «teatro de atracciones», impidiendo que se percibieran las leyes crítico sin duda más interesante de la arquitectura actual: el reflexiones sobre la filosofía o la teoría crítica, sino con una clara
su superioridad ideológica. de su ordenamiento productivo. En ese sentido, el detenido reflexión sobre la arquitectura (la manera de decirlo de Kipmis es
proceso de desideologización de la arquitectura fue, para
Ya en la dimensión más específica de la arquitectura análisis de Tafuri del proceso de construcción del Rockefeller
y Koolhaas, apenas la antesala que lo llevó a descubrir, ya en los inmejorable: «Argumenta Eisenman: "Durante cuatrocientos
los procesos urbanos, los venecianos encuentran en los Estados Center, después del Crack, es el mejor ejemplo de los parecidos y _ años setenta, el «fin de las ideologías» tan funcional al actual años, los valores de la arquitectura han surgido de la misma
Unidos el caso más avanzado de conversión de la ideología las diferencias con Koolhaas. La caracterización de Raymond fuente humanista. Hoy, esto debe cambiar debidoa las nuevas
mundo globalizado, del que élpretende ser al mismo tiempo el
y la cultura en técnica de transformación: el lugar donde puede Hood, su autor, y de la eficacia de su pragmatismo en el desarro- profeta y el crítico mordaz. percepciones alcanzadas gracias a la filosofía". Koolhaas contesta:
verse cómo una cultura urbana libre de las ataduras disciplinares llo de una obra realmente compleja y arriesgada, es largamente
"Hoy en día, todo esto ha cambiado de manera fundamental
(ideológicas) de la arquitectura y el urbanismo europeos, coincidente. Pero el Rockefeller Center, para Tafuri, fue el máxi- gracias al ascensor»).' Pero quizás justamente por eso, aunque
funciona como agente del poderoso proceso puesto en marcha en mo intento de generación de un modelo urbano (como quería
Después del delirio parezca paradójico, Koolhaas se ha vuelto un sismógrafo privile-
la propia determinación de la estructura urbana capitalista.
Giedion) y, al mismo tiempo, la demostración límite de su giado de la sociedad y el pensamiento, alguien que logra traducir
Los primeros tres capítulos del libro analizan esc fenómeno en
imposibilidad: pesealas ilusiones de autorregulación, el caos Un análisis de Delirious New York no puede dejar de ser, en las grandes mutaciones urbano-territoriales en interrogantes
los procesos de transformación del territorio de Manbattan demuestra ser un obstáculo
y la ciudad y para el desarrollo de nuestros días, también un modo de reevaluar la trayectoria socio-culturales y, en definitiva, filosóficos. En el mismo momento
en el desarrollo de diferentes corrientes urbanísticas, y el último «sus propias funciones de servicio general y direccional de la
E posterior de Koolhaas, habida cuenta de la potente actualidad de en que la relación entre la arquitectura y la sociedad parece cris-

capítulo, de Tafuri, lo analiza en el rascacielos y su territorio economía nacional». Koolhaas, en cambio, se desentiende de todo talizada en el «modelo Guggenheim» (la arquitectura como imagen
Xx su figura. La importancia de aquel libro inicial en la definición

privilegiado, la Manhattan de los años veinte y treinta. Juicio global sobre la metrópoli: al enfocar en la «cultura de la de todo su programa arquitectónico futuro fue confirmada de alto impacto para el marketing urbano), los diagnósticos des-
Los puntos de contacto con la interpretación de Koolhaas
--el
congestión» como únicafunción del manhattanismo, puede prejuiciados de Koolhaas y sus propuestas programáticamente
saltan a la vista -y el hecho de que se trate de libros
de empresas intelectuales tan contrastantes, no hace más
y, más aún, regodearse en aquellas aporías; por eso, el Crack de 1929 no es E3J por Koolhaas mismo cuando escribió Bigness, en 1994, nuevo
manifiesto dedicado a extraer la teoría que estaba «latente» anti-glamorosas desestabilizan la escena continuamente con nue-
que para él una divisoria de aguas, y el Rockefeller Center, por el en aquel primer manifiesto retroactivo (lo que significa vas preguntas y nuevos problemas, en una escalada discursiva que

65
parece un intento desesperado por recuperar un lugar central para planteado la cuestión de las «dos caras» de Koolhaas: esa especie A Raymond Hood, Proyecto Manhattan 1950
la arquitectura -de allí la cxasperación de textos como «What de Dr. Jekyll y Mr. Hyde que escribe contra el consumo desen- (propuesta de restructuración de Manhartan con
rascacielos multibloques), reproducido en
ever happened to urbanism» o, más aún, «Junk Space», con un frenado de la sociedad contemporánea, pero diseña los locales «La montaña desencantada», de Manfredo 'lafuri,

tono vanguardista que pasó de la felicidad surrealista a la caustici- op. cit. y en Delirious New York.
y la imagen de Prada; escribe contra la arquitectura espectáculo,
dad política del situacionismo." Este pasaje queda graficado
pero acepta encargos de su mayor promotor internacional,
también en la evolución del siempre provocador diseño de sus el Museo Guggenheim; escribe páginas iluminadoras sobre el
publicaciones, desde 5, M, X, X1. (en el que la importancia del fenómeno urbano en China, pero no deja de hacer allí sus
diseño llega al punto de que su responsable, Bruce Mau, aparece propios edificios de firma cuando lo llaman, ni de fascinarse ante
como co-autor del libro), a Content, que más que un libro -o una los aspectos más escandalosos de la urbanización asiática.
revista, como pretende ser-, ya parece una mezcla de montaje Por mi parte, creo que la relación «deliberadamente distorsio-
dadaista, historieta, graffiti y blog. nada» con la crítica a la ideología, presente ya en Delirious New
_
Esta multiplicidad de lugares que parece ocupar Koolhaas York, ofrece una pista diversa, a profundizar: la idea de que
en la escena contemporánea (ubicuidad que él ratifica a finales de Koolhaas ha mantenido -y exasperado- las lógicas y los procedi-
los años noventa creándole a OMA su doble, AMO, think tank mientos de esa crítica, pero invirtiendo su empresa política;
encargado de la producción teórica, la edición y las estrategias de o, mejor, de que ha buscado asumir a conciencia el papel positivo

organización e identidad, como una nueva «lobotomía» que se que la crítica negativa le da a quien está en la avanzada del
aplicara a su propia figura para dar entidad oficial a su creciente sistema, activando sus contradicciones. Aunque lo que logre (una investigación disimulada con un baile de disfraces, según Koolhaas); ver edición
tectónica y artística contemporánea, a propósito de su presencia en la cuarta
edición de «Arte/Cidade» en San Pablo, 2002: A. Gorelik, «Políticas de la represen-
esquizofrenia), la multiplicación de sus frentes de acción, como con ello no sea mucho más que una victoria pírrica, resultando española del libro, pp. 125-130. . o
7. Richard Sennett, The Conscience oftbe Eye. The Design and Social Life of Cities,
" tación urbana: el momento situacionista», Punto de Vista n" 86, Buenos Aires,
agitador y como constructor, es una de las explicaciones de las finalmente tan accesorio para el poder -por la naturaleza incon- Nueva York, Knopf, 1990. diciembre de 2006.
_ , 18. J. Kipnis, op. al
dificultades para caracterizarlo. De hecho, podría decirse que 3. Ver especialmente Eficacia 2, p. 269 de la edición española citada.
troladamente vanguardista de sus intervenciones, como ,
19. Market-Realism" es una de las categorías analíticas que Koolhaas, en sus juegos
9. Así define Koolhaas la relación del paranoico con la realidad, en el capítulo
hoy coexisten tres interpretaciones divergentes sobre el sentido impotente para inspirar caminos alternativos -por el carácter dedicado al «método paranvico-crítico» de Salvador Dalí, p. 238 de la edición espa- de lenguaje, presenta como marca registrada: ver su fascinante libro sobre la
ñola citada. urbanización china, Great leap Forward alusión irónica al segundo plan quinque-
político-ideológico de la producción de Koolhaas. Una primera en última instancia desmovilizador de su realismo cínico. o E.
10. Manfredo Tafuri, <I a montagna disincantata», en Ciucci, Dal Co, Manieri Elia y nal de Mao-., primer volumen de la serie de Harvard «1he Project of the City»,
interpretación lo ubica a la izquierda, no sólo por sus prácticas Es, indudablemente, la apuesta aporética de un gran paranoico, Tafun, La cittá americana, Bari/Roma, Laterza, 1973. Cambridge/Nueva York, 'faschen, 2001.
,
. 20. Michael Speaks, «Ios historias para la vanguardia», 8/ock n" 5, Buenos Aires,
11. Además, Koolhas y Tafuri compartieron en esos años, al menos, una misma
contra-culturales, sino por el modo en que ha minado a la pero una apuesta en todo caso apasionante para el pensamiento CEAC, diciembre de 2000.
publicación: el número especial de Architecture d'Aujourd'bui de 1976, dedicado a ,
arquitectura establecida desde su corazón (desde el programa), crítico, como ya demostró Delirious New York. los arquitectos de Nueva York, que lleva como artículo de fondo un balance de 21. Ver Hal Foster, Diseño y delito (y otras diatribas), Madrid, Akal, 2004, especial-
,
"lafuri sobre el grupo neoyorquino, «Las cendres de Jeffferson» Juego sería el capí- mente el capítulo 4, «Arquitectura e Imperio» (original en inglés: Nueva York,
proponiendo el edificio apenas como contenedor técnico capaz. tulo final de su libro, La sfera e il labirinto. La revista publica, junto a un conjunto Verso, 2002).
de favorecer la multiplicación de eventos casuales, de actividades de proyectos, el proyecto de OMA para Roosevelt Island, los proyectos ficcionales de
sociales no plancadas, capaz de «licuar programas rígidos Koolhaas que luego formarían el apéndice de Delirious New York -presentados
versión del capítulo sobre
ya bajo ese título- y, como «documento», una primera
en flujos, intensidades y sucesos indeterminados», según afirma
Coney Island. La presencia de Koolhaas en cl número se bace todavía más
Notas dominante porque la tapa es uno de los diseños oníricos de Madelon Vriesendorp.
Kipnis -uno de los defensores de la interpretación de Cfr. L'Architecture d'Aujourd'bui n" 186, París,agosto-septiembre de 1976.
izquierda-, quien opone esta concepción «infraestructural» al 1. Delirious New York. A Retroactive Manifesto for Manhattan, de Rem Koolhaas, ,
12. Josep Quetglas, «Marz en Detroit, 'Ironti en Venecia», en La ciudad americana,
fue publicado originalmente a fines de 1978 en una edición simultánea en Nueva Barcelona, Gili, 1975. De modo más abarcante, cabría decir que esta «segunda
«Neo-minimalismo» dominante. ,
York y Londres por Oxford University Press. Todas las citas en este artículo
etapa» de los venecianos consistió en el análisis crítico de los procesos arquitectóni-
Otra interpretación lo ubica a la derecha, no sólo son tomadas de la edición española, aunque mo utilizaré la traducción de su título
por su cos y urbanos de «los dos grandes sistemas», los Estados Unidos y la Unión
,
constante petición de Market-Realism", sino por la lógica
que me parece una elección poco feliz tanto por su significado como por su Soviética, y la variante reformista europea, la experiencia de la socialdemocracia en
sonoridad literaria: Delirio de Nueva York, Barcelona, Gustavo Gili, 2004. Parece Furopa Central.
empresarial con que ha organizado la producción global de su más acertado, en ese sentido, el título de la traducción portuguesa
que realizaron en
,
13. Las inspiraciones, a su vez, parecen haber trabajado -
a posteriori .
también en la
Brasil: Nova York delirante. Y hablando de esa traducción, debe ser aclarado otra dirección: Marco Biraghi ha señalado que 'lafuri fue <un lector atento y
que
arquitectura." Michael Speaks ha reivindicado en esta misma este artículo es una versión del estudio introductorio que realicé para la misma: divertido de Delirious New York, tomándolo más o menos abiertamente en La sfera
revista a Koolhaas como el principal introductor de la arquitec- ver A. Gorelik, «Os usos de Nova York: arquitetura e capitalismo», en Rem e il labirinto»; ver «Surfin Manbattan», posfacio a la edición italiana de Delirious

tura al «nuevo gran romance» entre los negocios y la cultura


Koolhaas, Nova York delirante, San Pablo, Cosac 8, Naify, 2008. Nev York, Milán, Electa, 2001, p. 292. Es fácil constatar, por ejemplo, la incorpora-
2. Robert Vemuri, Steven lzenour, Denise Scott Brown, 1eaming from Las Vegas, ción en aquel libro de 1980 (aunque los primeros textos que compondrán La esfera
corporativa, cuyo producto es una nueva generación de ejecutivos Cambridge, MIT Press, 1972. y el laberinto se remontan a 1974) de escenas de la historia del rascacielos empleadas
3. El capítulo es «¡Europeos, cuidado! Dalí y Le Corbusier conquistan Nueva York»,
por Koolhaas, como la del baile de disfraces de 1931.
surgidos como «héroes en la batalla por dominar y dar sentido y la cita está en la p. 265 de la edición española citada. 14. Las citas de Tafuri están tomadas de la traducción española: Manfredo 'Iafuni,
al complejo mundo lanzado por las fuerzas de la globalización» 4. Rafael Moneo, Inquietud teórica y estrategia proyectual en la obra de ocho «[.a montaña desencantada. El rascacielos y la ciudad» (1973), en La ciudad ame-

-en verdad, para Speaks, Koolhaas no termina de ser lo sufi-


arquitectos contemporáneos, Barcelona, ACTAR, 2004 (ver en especial, el capítulo ricana, de la Guerra Civil al New Deal, Barcelona, Gustavo Gili, 1975, pp. 389-512.
sobre Koolhaas, una excelente interpretación de toda su obra). 15. Rem Koolhaas, Bigness, en Rem Koolhaas y Bruce Mau, $, 4, X, X1, Rotterdam,
cientemente coherente con esta posición de avanzada, ya que a 5. OMA es formada por Koolhaas en 1975, con Elia
y Zoe 7enghelis y Madelon 010 Publisbers, 1995.
.
veces lo traiciona un esteticismo vanguardista que le impide llegar
Vriesendorp. 16. Jeffrey Kipnis, «El último Koolhaas», El Croquis, 1" 79, Madrid, 199%.
6. La fecha constata simplemente que en 1974 apareció el primer artículo de 17. Ver Rem Koolhaas, «What ever happened to urbanism» (1994), en 5, M, X, XL,
a las últimas consecuencias." Koolhaas desarrollando uno de los temas que compondrían el libro: «The
op. cit, y «Junk Spacer, en The Harvard Design School Guide to Shopping, segundo
Architect's Ball - A Vignette, 1931», en Oppositions 3, 1974, donde sc analiza la volumen de la serie dirigida por Koolhaas a partir de sus cursos en el GSD de
Finalmente, una tercera interpretación lo ubica en unaposición fiesta de enero de 1931 en el Hotel Astor en que los principales arquitectos de Harvard, «The Project of the City», Cambridge/Nueva York, 2001. He desarrollado
oscilante entre ambos extremos. Hal Foster es uno de los quc ha Nueva York vestidos de rascacielos interpretaron el ballet «The New York Skyline» el tema del rol de Koolhaas en la nueva vague situacionista de la alta cultura arqui-

67

rt
De la Konstruktion a la plástica: Carla Berrini
Sigfried Giedion y sus dos genealogías
para la arquitectura moderna"

el Konstruktion (entendida ésta como esque-


En 1928 Sigfried Giedion publicó Bauen misma atención respecto de la construc ráctica y espiritual. De igual modo,
de leto estructural), desplaza la noción de
in Frankreich - Bauen in Eisen - Bauen in ción del pensamiento sobre laarquitectura E armado del libro como manifiesto
el conte- forma como volumen para colocar en el
Eisenbeton.' El libro es considerado por la moderna desarrollado por Giedion. patalla en la disputa teórica por
centro la idea de una estructura que,
historiografía como el primer intento de nidode la discusión disciplinar, da cuenta
Giedion de su lec- al explotar su capacidad expresiva, sc ha
dotar a la arquitectura moderna de una de lo aprendido por
Barroco, quien, vuelto ella misma forma. La postulación
gencalogía arraigada en las construcciones Neves Bauen: la creación de una tura de Renacimiento y
de un Kem considerado en sí mismo
del siglo anterior. Celebrado en el mo- nueva armonia, 1928 ría afirmarse, «parafrasea» a su maes-
de su propia empresa." artístico, eclipsa también el debate abierto
mento de su aparición, la recepción inme- tro en virtud

se En este sentido, es central


la elección de por Carl Bótticher entre Kemform y
diata valoró su señalamiento de la (a par-
Bauen in Frankreich... se inaugura con la -- Kunstform." El cierre de la primera parte
tir de entonces) evidente conexión de las tríada Konstruktion, Industrie, y la pre- Francia como el lugar por antonomasia
e
esta nuevaarquitectura, del libro con la imagen de la Torre Eiffel
construcciones utilitarias en hierro del gunta por la Architektur. La secuencia de. ll para caracterizar
si atendemos tantoa las tcorizaciones
--- es la confirmación material del significado
siglo XIX con las arquitecturas de los años los términos altera el producto: la pro-
la Konstruktion. En ella
veinte.? El presente trabajo propone hacer francesas en relación a la noción de que le atribuyc a
puesta, sesgada por una visión evolu- nove-
estructura (introducidas por
Viollet-le- se advierte una experiencia espacial
foco puntualmente en la atención que cionista de la disciplina, tiene cl fin de
dosa: una nueva forma de equilibrio en
el autor brinda en este texto, a la creación caracterizar una nueva estirpe construc- Duc), como al lastre que supone para
contraria y
Giedion la tradición academicista francesa suspenso, aérea, flotante,
y la conquista de un nuevo tipo de tiva, la nenes Bauen, como la hija legítima la
de la industria, portadora de los proce- (vinculada a la École de Beaux Arts) en superadora de la piedra." Las piedrasy
espacio.
idea de volumen son los vestigios de una
Revisitar Bauen in Frankreich... per- sos de racionalización y estandarización general, y las renovaciones «teóricas»' en
era obsoleta, «escombros», como aguda-
mite reubicar el aporte de Giedion a la de la construcción. Para Giedion, «sólo la voz de Le Corbusier, en particular.
mente señala Banham," que necesaria-
construcción de las teorías de la arquitec- ahora los procesos anónimos de la pro- Giedion destaca y usa el temperamento
mente deben ser dejados atrás. Con la
tura moderna; aporte que, en parte, se ducción y los procedimientos interconec- constructivo francés, presente en el desa-
Torre Eiffel, 1839. Fotografía: Sigfried Giedion.
rrollo del Gótico y en la línea que traza elección de este modelo Giedion rechaza
Portada original de Bawen in Frankreich - Beuen ha desdibujado por el uso que el propio tados de la industria dan forma a nuestra
in Eisen - Banen in Eisenbeton (1928) diseñada por
desde Viollet-le-Duc uniendo a Henri toda discusión en términos estrictamente
Liszlo Moholy-Nagy. Giedion hace de este texto en su obra naturaleza».*
Labrouste, Auguste Perret y Le Corbusier, formales y corpóreos sobre la nueva
Le Corbusier, Viviendas en Pessac, Francia, 1925.
posterior, Space, Time and Architecture. La elección de la voz bawen (construir)

Fotografía: Sigínied Giedion. The growth ofa new tradition? de 1941. en el título del libro es el eco de esta afir- pero omite deliberadamente
todas las arquitectura y pone en foco la experiencia
Bauen in Frankreich... constituye el prin- referencias que éstos hacen a la naturaleza espacial inédita que ésta propicia: la con-
mación; y la noción de Architektur, en los
artística de la disciplina," operación que quista y la realización del espacio aéreo. presentados como el testimonio y los
cipal material del capítulo «Desarrollo de angostos términos que la circunscriben a
Y esto es lo que expresivamente muestra objetos concretos en los que se ha matc-
las nuevas posibilidades técnicas». Con le permite reforzar la idea de que, bajo el
planteos estéticos, frente al impacto de rializado una nueva manera de mirar.
estado actual de la construcción, el rol de en las fotografías."
ampliaciones de datos y casos que inclu- la industrialización y la estandarización
En esta dirección, la valoración que Este esqueleto es el modelo material de
la envolvente como definidora de la forma
yen a Estados Unidos e Inglaterra, le sirve en la construcción, para el autor, ya no
una forma inédita de percepción asociado
sc ha vuelto materialmente obsoleto.
hace del aporte de Le Corbusier está íntt-
para fundamentar -desde aspectos técni- puede resistir. Esta posición, defendida o
mamente vinculada a la cuestión de la a la experiencia espacial de simultancidad
Si Le Corbusier repetidamente rechaza
cos vinculados al uso del hierro y la
por el ala alemana durante los primeros -- entre el interior y el exterior, y también
estructura, y más precisamente, a la
irrupción de la industria en la construc- CIAM;' es la que se manifiesta en las agen- cualquier intento de asimilación de la
invención del sistema Dominó. Para entre y con la ciudad como lo demuestra
ción- el comienzo de una nueva tradición das a discutir y en sus actas (escritas en Arquitectura con la construcción -ela
Giedion, el mayor logro de Le Corbusier la fotografía de la portada del trasborda-
en arquitectura. Sin embargo, mientras alemán y en francés), cristalizando la Construction, C'est pour faire tenir,
- fue «traducir con la sensibilidad de un dor de Marsella. Se trata de una experien-
"e PArchitecture, CEST POUR ÉMOUVOIR»,
que en el texto de 1928 la conquista de polémica con Le Corbusier y su acérrima cia dinámica, totalizadora e indivisible
sismógrafo, en la forma de la casa,el
una inédita experiencia espacial se vincula defensa de la condición artística e intem- = y la cuestión de la estructura no integra
que desborda la opaca
secuencia interior-
. ninguno de los trois rappels a lordre equilibrio en suspenso que Eiffel en su
a la Konstruktion -a través de conceptos
poral de la disciplina. torre había anticipado». La condición
exterior y las diferenciaciones entre 1n-
de raigambre alemana y ejemplos de La operación que Giedion realiza en 1 que organizan Vers une Architecture,"
material de la arquitectura y su traslación teriores, volviendo transparente y super-
proveniencia francesa-, en Space, Time Bauen in Frankreich... para caracterizar y Giedion, en cambio, sostiene que el pro-
- la ciudad.
blema de la forma arquitectónica no a un esqueleto en hierro o en hormigón puesta la continuidad con
and Architecture... se explica apartir delinear la newes Bauen es claramente
La Torre es el ejemplo de una síntesis que
de las artes plásticas, en particular puede ser tratado de manera independien- -anticipados ambos por la industria y
* Las ideas preliminares del
presente trabajo han equiparable a la del Barroco diseñada por lúcidamente captados por Eiffel en su expresa un nuevo
sentimiento formal en
te del problema de la estructura. Forma
sido elaboradas en conjunto con Martín Gascón y del cubismo. Heinrich Wolfflin: la nueva era del hierro,
fueron presentadas como: Carla Berrini, Martín misma Torre y luego por el sistema Dominó de el que convergen, sin conflicto, arte e
Este cambio de perspectiva establece y estructura convergen en una
Gascón, «Sigfried Giedion: el guardián de la torre» superadora de la impronta individualista Le Corbusier-, dan cuenta del diseño industria: «El verdadero significado de la
en el Seminario Internacional [a Biblioteca de dos genealogías para una misma concep- (
entidad, la Konstruktion, que puede llegar
y disgregadora del Romanticismo, ha Torrc Eiffel descansa en su estructura...
la Arquitectura Moderna. Teorías de la Arquitectura
ción espacial, genealogías que implican a ser expresión y por lo tanto, conmover. serial, colectivo y anónimo inherente a los
reencontrado una nueva unidad, ma- Toda la carne fue despojada, todo se redu-
y del Proyecto (1901-1962), rAPyD, UNR, Rosario, modos de producción industrial, y son
recorridos diferentes y que merecen la Al otorgarle valor de expresión a la
18 al 20 de noviembre de 2009. nifiesta en todos los niveles de la vida

69
68
ce a partes conectivas y el aire que corre Estados Unidos, la filiación de la arqui- los instrumentos de la expresión con- Baven/Architecture:
dos posiciones disciplinares
en el interior, de una manera sin pre- tectura moderna con el cubismo aparecía temporánea». Allí destaca y celebra la
cedentes, sc vuelve el material formativo». delineada en los catálogos del MOMA de comunión entre el arquitecto y el pintor
En este sentido es clave la particular Alfred H. Barr"! y es en este país donde, condena las filiaciones artísticas y Sin duda, tanto Bauen in Frankreich...
y ya no
selección fotográfica que hace del conjun- precisamente, Giedion se establecerá a estéticas en las búsquedas de este arqui- como Space, Time... son «manifiestos de

to de Pessac y su descripción. Para Gic- la cultura arquitectónica moderna cons-


principios de la década de 1940 y tecto. La relación materializada de inter-

dion, la obra realizada por Le Corbusier truidos con material histórico»? pero en
publicará este libro. penetraciones entre espacios interiores
da cuenta de esta conquista del aire como En la genealogía del espacio que pre- nuevamente ponderada y en sentido bien diverso, tal como hemos
y exteriores es
material formativo, aunque no su teoría." senta en Space, Time..., Gicdion modifica esta dirección los logros de Le Corbusier intentado establecerlo a partir del análisis
Pessac no es un juego de volúmenes bajo su tesis inicial para asignarle un lugar son equiparables a los de Borromini. del valor de la noción de espacio, su
la luz, «en conjunto las casas de Pessac central a las artes plásticas (en particular, Nuevamente la estructura Dominó y los grado de autonomía en relación a su géne-
no son mi espaciales, ni plásticas, el aire el cubismo) y cambia el valor del esque- Cinques points d'une architecture nouvelle sis y las diferencias en su contenido pre-
flota a través de ellas. El aire se vuelve leto estructural como soporte espacial son valorados, en el mismo sentido que sentes en ambos libros.

un factor constitutivo, ni el espacio ni la en Bauen in Frankreich..., como sus ma- La genealogía que Giedion exhibe en
para instituir al plano cn su lugar. Esto
forma plástica cuentan, sólo las relaciones se percibe con claridad en la manera en yores aportes.
Bauen in Frankreich... es una histona

y las interpenetraciones; hay un solo que muestra la Torre Eiffel: la torre apare- Pero en Space, Time... la obra canónica material, que celebra los adelantosy las
espacio indivisible. La envolvente entre cl La elección innovaciones en la industria de la cons-
ce vinculada, ahora, a las pinturas de que elige es la Villa Savoye.
interior y el exterior cae, estas casas ex- Robert Delaunay de 1910, y a las declara- del ejemplo presenta dos temas ausentes trucción y que se ancla en las primeras

presan una transparencia flotante en ciones de Blaise Cendrars que la compa- en Bauen in Frankreich...: uno ces cl de construcciones utilitarias en hierro para
la cual los contornos se desdibujan, la ran con un «vaso de agua clara», y que se la relación y confrontación de la arquitec- anunciar desde allí el nacimiento de una
casa flota sin peso". refieren a Sacré-Ceeur y a las demás tura con la naturaleza (en Bawen in nueva estirpe constructiva -newes Banen-,

Robert Delauny, La 'Torre Eiffel, 1910. En Space,


cúpulas parisinas como «confites». Estas Frankreich..., la única «naturaleza» reco- capaz de sintetizar una innovadora expe- Time and Architecture, 1941.
declaraciones dan cuenta de que este nocible y celebrada es la de la artificiali- riencia espacial y material que gracias al
Le Corbusier y Pierre Jeanneret, Ville Savoye, Poissy
Cubism and Abstract: * nuevo espacio está completamente despo- dad presente en la ciudad y la continuidad esqueleto estructural inaugura una fluida 1928-1930. En Space, Time and Architecture, 1941.
la forma de una genealogía del espacial entre ésta y los interiores); el relación con la ciudad y su incesante
jado y liberado de las tradicionales codi-
espacio, 1941 ficaciones formales expresadas en volúme- otro, directamente vinculado a éste, es la devenir. Esta conquista espacial le impone
nes opacos y que es valorado, también, forma que asume en la arquitectura esa a la disciplina una radical revisión crítica

Bauen in Frankreich... demuestra, articu- relación, que en este caso refiere a un de las nociones heredadas de forma y del
por su continuidad y su fluidez. Para
lando una historia material y disciplinar, Giedion ya no son los constructeurs anó- volumen puro y al contraste con el fondo rol social y económico de la misma frente
Puente Transbordador de Marsella, 1905.
que la conquista del espacio aérco, anun- nimos del siglo X1X quienes descubren las natural. a las nuevas condiciones de producción,
Fotografía: Sigfried Giedion.
ciada en la Konstruktion, materializada en novedades y los cambios operados en la Con la introducción de estos temas por lo cual tendrá una preponderancia
el esqueleto estructural y posible de ser manera de percibir este espacio, sino los podemos sugerir que lo que ha cambiado central abocarse al contenido funcional del

captada sólo por el cine, ha alcanzado la artistas plásticos. Y le asigna al cubismo es, de alguna manera, la relación que mencionado espacio. En esta clave debe
fluidez y la simultaneidad de la experien- la «expresión de un estado de ánimo Gicdion establece con la técnica. La filia- ser ponderada su preocupación por el

cia entre y con la ciudad. colectivo y casi inconsciente» que logra ción de esta nueva experiencia espacial rol social de la disciplina expresada
En Space, Time and Architecture... la
captar «... la csencia del espacio, tal como | con las artes plásticas da cuenta de esta en torno, por ejemplo, a la vivienda para

nueva concepción espacial se manifiesta a es concebida hoy, en su multilateralidad


1
visión de la técnica más vinculada y relati- el Existenzminimum
través del uso de la voz Arquitectura. vizada a cuestiones estéticas y culturales, En su segunda rehabilitación histórica
y en la multiplicidad de relaciones poten-
Con esta elección, Giedion no sólo rees- Time
ciales que contiene». que a determinantes técnicos y cconómi- para la arquitectura moderna, Space,
tablece los lazos de esta «nueva tradición» El rol que le adjudica a Le Corbusier cos. La ampliación de la genealogía le and Architecture..., el mismo espacio
con la historia disciplinar, sino que pone es también ejemplificador para ilustrar permite recuperar el valor de la cualidad -ahora desligado y liberado de las condi-
el acento en la cualidad formal de esc este desplazamiento. Mientras que formal en la arquitectura, dimensión que ciones históricas y materiales que le die-

espacio? Y para indagar en la estética y cn Bauen in Frankreich..., para Giedion, en Bauen in Frankreich... queda eclipsada ron emergencia- encuentra su filiación

en la plástica de estas arquitecturas es fun- Le Corbusier cumple dos roles bien dife- en las artes plásticas y en cierta manera la
y condenada, sin olvidar que la extrema
damental la ligazón de la génesis de este renciados: el de arquitecto y el de teórico, celebración del esqueleto estructural reintroduce en el ámbito de las bellas
nuevo espacio con la pintura. No debe- desprecia la razón de sery la función de artes. Esto le permite trazar una historia
y este último es criticado. En Space, Time...
mos olvidar que ya en los años treinta, en le dedicará el capítulo «Le Corbusier y la envolvente en la arquitectura. de larga duración que se inicia en el

70 1
Pablo Picasso,
Renacimiento -que relativiza el rol de la Notas
9, «Sabemos que, una y otra vez,
le Corbusier similares en una fachada. Berlage fue quizás el último
Naturaleza muerta,
-en 1907- al que se le permitió hacer esto. Esto es
ca 1914. En Space, Time técnica y las condiciones económicas y sostiene que las leyes de la arquitectura son las mis-
1. Sigfried Giedion, Bauen in Frankreich - Bauen in los cambios de medios técnicos, permisible para una arquitectura antropomórfica
and Architecture, 1941. mas y no varían con
sociales en relación al hacer disciplinar, y Eisen - Bauen in Eisenbeton, Leipzig/Berlín,Georg
en un marco que parece
aludir más a leyes absolutas uniformemente elaborada. Pero en el caso de
Biermann, 1928. El libro tuvo una única edición de formas diferentes Corbusier es absurdo. Las proporciones que resulta-
en la que los elementos formales de la
3.000 ejemplares de los que sólo se habían vendido
presentes en todas las épocas bajo rán de la estandarización no están más restringidas
como en el caso de una
que a principios positivos
arquitectura y del espacio quedan en una 700, al final del año. Fue traducidoy reeditado
afirqación muy similar de Viollet-le Duc: "Si nos por las viejas fórmulas, pero además de esto, estas
fór-
en inglés casi setenta años más tarde: S. Giedion,
detenemos a conocer mejor el arte de tiempos anti- mulas no son válidas hoy porque una construcción
mutua relación de dependencia, afirma-
Building in France, Building in Iron, Building in 05, analizándolo pacientemente,
estableceremos los no es más una forma cerrada como el palacio renacen-
ción y coincidencia con la historia de las Ferroconcrete, Santa Mónica, CA., The Getty Center fundamentos del arte de nuestro siglo, reconoceremos tista, sino que demanda conexiones a las cosas pró-
for the History of Art and the Humanities, 1995. los datos materiales que varían permanen- ximas a él», p. 176.
artes plásticas. El espacio abierto y defi- que junto a
En su mayoría, las referencias para el presentetrabajo 18. Sigfried Giedion, Building in France..., p. 169.
temente, están los principios que son invariables y
nido por el desplazamiento libre de los ban sido tomadas de la reedición en inglés; para la historia preserva curiosidades, también con- 19. Ver en Sigfried Giedion, Espacio, Tiempo...
que, si
cotejar el uso de las palabras claves en alemán se ha tiene tesoros de saber y de experiencia que el hombre op. cit. Si bien en Baxen in Frankreich... es en
planos y por los interjuegos volumétricos, utilizado la edición original. Las referencias directas al la Torre Eiffel (1889) en donde localiza primero la
debe usar". Fin de la voz "Proportion' en Dictionnaire
es objeto de valoración desde sus cualida- libro están indicadas con el número de página en el reisonné de l'Architecture Francaise...» Ana María creación de este nuevo tipo de experiencia espacial, en

des formales y queda asociado en sus texto y en cursiva aparecen marcadas las palabras
Rigotn, Una cosa de vanguardia: Hacia una Espacio, Tiempo... data esta conquista hacia 1910 y
extraídas del texto publicado en el idioma la asocia directamente al cubismo. Para abordar ahora
cambios y modificacionesa la historia de
- Arquitectura, «La cuestión de la estructura: ossature
original. ys. carcasse», Rosario, UNR y ASP ediciones, 2009,
esta «no tan nueva» concepción del espacio, Giedion
2. Para consultar referencias en torno ala recepción alude a los catálogos del MoMA, principalmente a
la pintura. p- 104.
inmediata del libro, ver Bruno 'Laut, Modern 10. Ibídem, p. 98. Cubism and Abstract de Alfred Barr Jr. de 1936, p. 451.
Architecture, Londres, The Studio Limited, 1929; 11. La noción Tektonik de Carl Bótticher establece 20. Jorge Francisco l.iernur, «Departamento en Virrey
S. Giedion, Befreietes Wobnen, Zurich, Orell Fússli, del Pino: el equilibrio inestable», en Block, n" 2,
una dialéctica entre Kernform y Kunsiform: una rela-
1929, p. 16; María I.. Scalvini y M. G. Sandri, ción de interdependencia constitutiva entre un cora- Naturaleza, UT, Buenos Aires, mayo de 1998, p. 54.
L'immagine storiografica dell'architecttura contempo- zón que localiza en lo material, estático y funcional 21. Ibídem.
ránea, Roma, Officina Edizioni, 1984. Ver el capítulo (Kemform) y una envolvente artística orientada a 22. Ver en Sigfried Giedion, Espacio, Tiempo...,
«De Platz a Giedion», p. 24. Ver Vittorio Magnago
poner de relieve, en la forma,
la función del núcleoal op. at. De esta asociación del cubismoy el plano el
Lampugnani, Una storia dell'architettura del cual está íntimamente ligada (Kunstform). autor infiere que: si el cubismo ha surgido en el suelo
XX secolo en Sigfried Giedion: un progetto storico, 12. Sokratis Georgiadis, Sigfried Giedion, Building in de las culturas más antiguas de Europa, la francesa
Rassegna, n"25, Milán, Italia, 1979, p. 18. están
France, Building in Iron, Building in Ferroconcrete, y la española, éste es el motivo por el cual
3.5. Giedion, Space, Time and Architecture, the Santa Mónica, 'Ihe Getty Center for the History presentes en esta forma de concebir el espacio los
growtb ofa neto tradition, Cambridge, Harvard of Art and the Humanities, 1995. Esta afirmación elementos primitivos de un pretérito simbólico irra-
University Press, 1941. Hemos tomado aquí, clausura el debate abierto por Gottfried Semper en cional. Desde este momento iniciático común, que
S. Giedion, Espacio, tiempo y Arquitectura, elfuturo relación a la cuestión de la invisibilidad del hierro comulga en el cubismo, parte en indicaciones sobre
de una nueva tradición, Barcelona, Hoepli, 1958. Ver frente a la condición monumental de la Arquitectura las diferencias formales de los distintos desarrollos
el capítulo «Espacio-tiempo en Arte, Arquitectura el debate que investigaron en arquitectura. ll Purismo en
y y, como señala Georgiadis, «intenta superar
Construcción», pp. 445-530. que, desde la aparición del Crystal
Palace en 1851 y Francia, el Constructivismo en Rusia y el Neoplas-
4.5. Giedion, Buslding in France..., op. cit., p. 89. por más de ocho décadas, se inaugura en
la disciplina ticismo en Holanda. Este último es el movimiento
5. Helena Syrkus, «1928-1934 La Sarraz e la Varsavia sobre el uso arquitectónico del hierro. Debate que que llevó adelante la reducción de un
volumen de tres
funzionale», en Parametro Mensile Internazionale di se abre con Semper y Bótticher, atraviesa todo el dimensiones a un nuevo elemento de plasticidad:
Architetiura Urbanistica, n" 70, 1978, pp. 21-30. el plano. Reconoce este aporte de Theo Van Doesburp
siglo x1X y tiene como tema central a la "desmaterialt-
do
6. Heinrich Wolfflin, Renacimiento
y Barroco, zación" que la construcción en hierro había produ- comofund al paralaarquitectura,pl
Barcelona, Paidós, 1991. Publicación original cido». introducción, pp. 1-53. en su dibujo de 1920, relaciones entre planos horizon-
Renaissence und Barock, Basilea, Schwacke und Co, 13. Reyner Banham, Teoría y diseño arquitectónico en tales y verticales, ver figura 81, p. 157. Aquí señala
1888. El autor afirma la necesaria tarea de definir el la era de la máquina, Buenos Aires, Nueva Visión, cómo «los planos se compenetran recíprocamente en
dónde, el por qué y los personajes para avanzar en la 1975. Ver capítulo «Alemania: Los Enciclopedistas», una inédita visión del espacio de la cual es deudora
observación y la caracterización de un estilo. Sostiene p. 294 (1* edición en inglés de 1960). gran parte de la arquitectura contemporánea que
que para observar las características del estilo pinto- 14. La primera página de libro ofrece imágenes del desde entonces ha ido apareciendo», p. 459.
resco Roma es el lugar ya que allí <el Renacimiento transbordador de Marsella y de la Torre Eiffel. 23. Vittorio Lampugnani, op. at., p. 18.
alcanzó un grado de máximo de maduración y con Inmediatamente el autor nos remite a la figura 59, 24. Ver Sigfried Giedion, Befreietes Wobmen, op. cit.
Bramante ha expresado su estilo más puro. El relaja- nuevamente la Torre Eiffel, pero ahora acompañada
miento de la forma podía en Roma ser sentido en más del proyecto de Mart Stam de 1926, de una superes-
intenso grado que en cualquier otra parte», p. 14. tructura del Kokin Dam en Amsterdam. Estas imáge-
7. «El gótico respecto al románico no
supone transi- nes, en dos movimientos, dan cuenta de la tesis de
ción en la forma sino en el principio estructural. Giedion. En el pie de foto del proyecto de Stam
En eso el arte actúa como la naturaleza, el estilo es el
puede leerse: «Sólo ahora las semillas presentes en
corolario del principio. (...) Los romanos no son estructuras como las de la Torre Fiffel dan sus frutos
soñadores, no razonan sobre el sentido místico de una plenamente. La afinidad con un edificio como el de la
curva, no saben si el arco apuntado es más religioso Torre Eiffel no radica sólo en las conexionesy las
que el de medio punto. Fllos construyen, una cosa interpenetraciones establecidas por medio de estacio-
más difícil que fantasear en el vacío.» Eugene Viollet- nes suspendidas; uno llega a la conclusión observando
le-Duc, L'archittetura ragionata, Milán, Jaca Book, los dos edificios: que la arquitectura no tiene más
2002, pp. 315-317. (Ed. Francesa, Dictionnaire raisonné límites rígidos», p. 145.
de Varchitecture francaise du Xle au XVe size, París, 15. Sigfried Giedion, Building in France..., p. 186.
A. Morel, editeur, 1856.) 16 Ibídem, p. 143.
8. «El teórico: Corbusier ha ejercido tanta influencia 17. «En su teoría, Corbusier es menos audaz que en
en nuestro tiempo como teórico (su impacto en sus diseños. En Vers une Architecture hay un capítulo
América Latina es similar al que tiene aquí) como el sobre tracés régulateurs Hildebrandt lo tradujo
que ha ejercido a través de sus edificios.» S. Giedion, (en alemán) a Aufrissregles (reguladores de la eleva-
Building in France..., op. cit, p. 186. ción), es decir, a un intento de disponer triángulos

72 73
En tomo al «regionalismo crítico» Silvio Plotquin

El capítulo «Regionalismo Crítico: arqui- de prácticas divergentes entre sí, pero cado en el volumen Antiesthetics: Essays discursos «postestructuralista» como los
Historia crítica que Frampton trazaba un borde a partir de
tectura moderna e identidades culturales» en todas las circunstancias, reinterpreta- de Eisenman, Himmelblau, Koolhas,
dela arquitectura las omisiones de la curaduría de la pri- on Postmodern culture," Frampton estaba

que Kenneth Frampton incluyó en la ban una tradición concreta sin abandonar de arquitectura, escribiendo sobre la cuestión cultura- Zadid y de los compatriotas Gandelsonas,
moderna mera bienal veneciana
segunda edición ampliada publicada o rechazar la racionalidad modernista.
con la esperanza
de integrar dentro (siem- civilización, en un contexto de debate Agrest, Machado y Silvetti, entre tantos.
sobre la crisis del proyecto moderno ilu- En paralelo podría citarse aquella his-
en 1983, de su Historia crítica de la arqui-
Frampton reconocía que el ejercicio de la pre en positivo)
la memoria en la cultura
tectura moderna' se inscribió en un par- profesión había quedado atravesado, el énfa- minista. Cabe preguntarse cómo habría de tórica sesión del Partido Comunista
presente. En tal sentido es notable
ticular momento de la cultura arquitec- Italiano en Milán en marzo de 1983, cuya
a partir de los años cincuenta, por lógicas
sis puesto en la incipiente arquitectura implementarse tal matiz bi-frontal,
tónica internacional. En un contexto de otras disciplinas, hasta la sumisión a
española, de la cual destaca su impronta modernizar las fuentes y espabilar cultu- agenda debatiría el impulso de la demo-
de llamada al orden y resistencia contra el normasy leyes de supuesta objetividad y cratización interna o la búsqueda de una
topográfica y su definida poética cons- ras letárgicas, en el vértigo de la civili-

advenimiento de una práctica proyectual eficacia, no naturales al campo de los zación universal. La cuestión de la cultura nueva vía entre el «compromesso storico»
tructiva y el reclamoa la curaduría por la
evidenciada en la Bienal de Venecia de arquitectos, una «arquitectura renuncian- regional y la civilización global se ponía propuesto apenas dicz años antes por
omisión de Rafael Moneo y de Alvaro
1980 -que ya era reconocida dentro del do definitivamentea ser ella misma». -- en evidencia en aquella cita inicial de Paul Enrico Berlinguer para paliar los efectos
ro Siza. En estos tópicos se tendrá el germen
rótulo de post-modernismo-, el ciclo de Paolo Porthogesi,* autor de la presenta- Riceeur, que encabezaba el capítulo sobre de una modernidad nacional no realizada
de la tesis más madura sobre una práctica
ensayos y debates críticos pertenecientes a ción del catálogo de la Bienal, planteaba regionalismo crítico." Este parece pre- y las alternativas de las izquierdas.
regionalista y crítica desde una árca
esta década, tratan precisamente del fin o la imposibilidad de continuar en esas sentarse como la última oportunidad de La utopía marxista a la italiana atravesaba
fuertemente identitaria de Europa -la
la supervivencia del proyecto moderno. condiciones, el proyecto moderno futu- cel mismo tipo de crisis situacional que
Península Ibérica, por caso- claramente comprensión mutua entre modernización
Sin embargo, el efecto de esta posición es rista y positivista de las diversas vanguar- definitivo la utopía urbana-arquitectónica de la
al costado de las sedes de las vanguardias y vanguardia, cuyo divorcio
efímero. El propio Frampton comenzará dias de entreguerras y posguerra. Argu- modernidad de la entre y postguerra. Y,
de entreguerras.* No debe dejar de llamar despunta prontamente, con cl crack finan-
a volcar algunos de los elementos, de los mento contra el que Frampton declaró ciero de los años treinta y la Segunda del mismo modo, en el Reino Unido
la atención cómo la topografía de este
A
pares característicos de la «actitud» regio- -como en su momento declarase Guerra. el descontento secular con las formas de
borde reverberaría en la década siguiente
Portada de la edición española de Iistoria crítica de la nalista crítica, en sus trabajos posteriores Manfredo Tafurt, la imposibilidad de El mundo de la tecnología y las tec- la arquitectura moderna planteó por lo

LEA
en la construcción del perfil editorial de
arquitectura moderna de Kenneth Frampton. continuar proyecto arquitectónico alguno, menos estas dos salidas entre los escépti-
e inmediatos, que finalmente casi una
las publicaciones AV (Arquitectura Viva) nologías mismas, en el meollo del proyec-
Portada de la edición de «La posmodernidad» década después, migrarán hacia sus escri- sin antes descartar aquellos procedimien- revistas a las que se to moderno iluminista, resultaron inca- cos practitioners de los años setenta: un
y El Croquis. Ambas
compilación de diversos autores donde aparecieron

e
tos sobre la poética de la construcción, tos contradictorios con esta continui- de los años retomo a las formas históricas, cargadas y
publicadas por primera vez las reflexiones suman Quaderns del Colegio de Barce- paces, seguramente después
de Frampton acerca del Regionalismo Crítico. la tectónica? dad del hacer arquitectónico en sí. Era,
lona, Tectónica y Arquitectura del Colegio sesenta, de favorecer formas urbanas susceptibles de significados, o bien una
Vale la pena dedicar un par de líneas a continuidad formal de lo moderno pero
pues una posición extorsiva. Portoghesi, de Madrid, iniciarían sus tiradas con el significativas. Sumado a que, para estas
la reseña que Frampton publicara en decretaba el fin funcionalista de la fechas, en los Estados Unidos se desacele- no de su programa o su compromiso. Por
género «arquitectura española». En prin-
Global Architecture en ocasión de la pri- «prohibición moderna», -o tal vez en raba año a año la inversión en edilicia este lado se entendía como una demostra-
cipio reconociendo las filiaciones no
ción de que las formas de la arquitectura
*
|
" mera Biennale di Architettura di Venezia, atención al International Style de Johnson canónicas de la práctica local como la pública, con lo que las utopías modernas
mun
To fechada en esa ciudad en 1980. En ella y Hitchcock-, del accesoa la historia. arquitectura escandinava -en todo caso de resolver las carencias masivas arqui- moderna de entreguerras podían resultar
mantendrá dos puntos de vista: uno sobre Se trataba pues de una democratización y como espejo del reclamo similar de los tectónicas y urbanas fueron borradas bellas y significativamente detalladas,
la evidencia en dicha exhibición de las desacralización de las formas históricas paulatinamente de las agendas políticas es decir, procediendo con las formas de
arquitectos británicos que como cel propio
sutilezas partisanas de los denominados alegóricas y monumentales, propia de los el advenimiento del la arquitectura moderna como con las
Frampton-- logran posicionar las figuras y universitarias. Hacia
postmodemistas; otro sobre la estrategia formas históricas. Por el otro lado, sc
mass media y la circulación informática
distintivas, precisamente deMoneo, Siza, reaganismo, el interés en la cosa pública
propia de tematizar una alternativa «con- en ciernes.
pero también de Eisenmann o Ando.
se asentó en cero y con cllo las posibilida- expresaba el reclamo de significado a las
tinuista» de la cultura arquitectónica, Con la construcción de su idea de Otro germen visible está en la men- des de las utopías reformistas y funcio- formas que configuran la vida moderna y
-e- dh diseminada en las posibilidades locales «resistencia», Frampton en última instan- cionada síntesis entre la visión del mundo nalistas de principios de siglo. La ausencia la exigencia de que las formas del pai-
concretas. cia, pone sobre el tablero dos disconti- del Oriente histórico desde la coyun- de resultados, dio lugar a la difusión del saje urbano del último cuarto del siglo XX
"Tres años antes, en 1977, Frampton ya nuidades. La del proyecto modernista de tura arquitectónica de Occidente. discurso plástico del fracaso de la arqui- debían ser textos legibles, como lo
había reaccionado ante el «clima» susci- entreguerras y posguerra -discontinuidad Ello reverberará también en su presenta- tectura de vanguardia del proyecto moder- planteara Venturi, en Complejidad y
tado por la publicación de El lenguaje del presente, ocaso de una utopía futu- ción de Tadao Ando, y en la descrip- nista ilustrado, construyendo otros dis- contradicción."
de la arquitectura postmoderna de Charles rista- y la discontinuidad del pasado que ción de la pagoda en el interior de la lgle- cursos compensatorios, historicistas, pero ¿Cómo ha de ubicarse pues el fracaso:
Jencks, frente a la reducción de la arqui- vuelve a inyectarse «post» modernismos. sia de Bagsvaerd en Copenhague, de no históricos (Jencks y Philip Johnson, en cl campo de las formas modernas o en

tectura a puras imágenes.* Su respuesta Es posible, y sin dificultad, rastrear Venturi el campo de su proyecto teórico, funcio-
Jern Utzon."" por ejemplo) o populistas (Robert
fue precisamente la forja de una idea de la opción de Framptona favor de una En 1982, con la aparición de su trabajo nalista y racional? En The Fiction of
y Denise Scott Brown, por otro lado),
trinchera, resistente. Un concepto que caracterizados por una reacción conserva- Function Stanford Anderson" subrayaba
práctica arquitectónica continuista y <Towards a critic Regionalism: Six Points
The International
surgió en realidad, como la superposición crítica. for an Architecture of Resistance» publi- dora, a la par que se plantearon otros que, desde el iniciático

4
74 75
Style de 1932, Johnson y Hitchcock fueron Una vez más, se trataba de una estrate- Las prácticas del regionalismo expre- entre las fisuras de las relaciones entre
históricas universales). Esta inclusión
donde lo moderno no ha satisfecho su
capaces de abarcar los rasgos unívocos gia de solución a la cuestión de la Civili- san una sensibilidad muy fina hacia las Civilización y Cultura. Entendidas como subjetiva no generalizable, convierte al
de aquellas arquitecturas que configurarían zación y la Cultura. Ante el proyecto sin peculiaridades del suelo y al paisaje urba-
potencial activación de una utopía espe- «realismos» inefables, propios de la dis- regionalismo crítico desde esc lugar, en
ranzada, ésta debería realizarse con el
tal esperanto arquitectónico: pero entre control de lo informe, la resistencia de la una práctica resistente.
no íntegro, sin rechazar sentimentalmente
aporte marginal al completamiento persión o distopía del centro y sus sen-
esos rasgos, nunca cupo el «funcionalis-
forma-lugar. Contra el autismo lingiístico las tecnologías modernas ni las formas tidos, en ellas también se filtran los
de uña modernidad mundializada. Para
mo». Esc resto del compromiso moderno del «postmodem» estadounidense o la racionales. La clave textural, topográfica
Waisman la clave de todo regionalismo «regionalismos» como pensamientos frag- ¡
recibió su estocada mortal cuando durante crítica sentada en el populismo de los y material, es decir la experiencia ambula- mentadores en los quicbres-? Es allí |
una retaguardia i
no es temporal sino local:
í
el viraje conservador en ambas márgenes «Grays» de Venturi, el planteo frampto- toria y táctil del edificio por un sujeto, donde Frampton se muestra ansioso por
«desde aquí».
del Atlántico sobre el cruce de los años niano ataca la mera-visualidad de dichos refiere al lugar de esa arquitectura que es Notas
Escudándosc en un romanticismo en un nuevo paradigma unificado y cohe-

ochenta, ni el gobierno de Reagan ni el de proyectos: la fachada compensatoria, el el lugar de ese sujeto. En definitiva se rente, lo cual resulta paradójico, pues
la
Thatcher agendaron ninguna de las gran-
fuga, emprendiendo «un caminodiferente, 1. Kenneth Frampton, Historia crítica de la arquitec-

«galpón» bien acondicionado. trata de «un» lugar y no el ningún lugar verdadera potencia crítica de un regiona- tura moderna, Barcelona, Gustavo Gili, 1987 (segunda

des deudas sociales de sus metrópolis. Los Si Tzonis y Lefaivre operan con la de un estilo internacional. -
partir hacia nuevos mundos», Waisman edición ampliada), pp. 317-331. La primera edición
se contradice, como quién no
considerase lismo sería la de las «fracturas», la de fue K. Frampton, Modern Architecture: A Critical
arquitectos sc verían resignados a poster- hipótesis de un regionalismo que desde la Dos autores argentinos, Marina Wais-
tres mundos, como suficientes."
La di- la fragmentación. El regionalismo crítico Llistory, Londres, Thames and Hudson, 1980. El ar-
tículo se publicó por primera vez como K. Hrampton,
gar los emprendimientos urbanísticos posguerra intentaba restaurar o dialogar man y Roberto Fernández, pensaron
framptoniano suple una especie de
vergencia es una tercera vía, distante de la «Prospects for a Critical Regionalism», en Perspecta,
planificados, utópicos e imposibles sin con las utopías sociales de las vanguardias a su vez en relación a las posturas tras-nacionalidad renovada (una suerte vol. 20, MIT Press, 1983, pp. 147-162.
fuga antimoderna (y barroca como toda 2, «... en cierto momento continuar con el Regio-
mecenazgo estatal, orientándose hacia los de entreguerras, Frampton intenta en de Estados Unidos y Europa, la cues- de civilización universal), cuando lo
fuga) del «post» y del romanticismo nalismo Crítico pasó a ser casi una molestia para mí»,
Revista 3,
capitales corporativos, interesados ahora, cambio reinstaurar un regionalismo en los tión de la «región». Como rechazo a esta
resistente de retaguardia de Frampton. valioso sería la potencia fragmentadora, su en K. Frampton, «Reflexiones...>, en
marzo/abril de 1994, n* 2, p. 51. Corresponde a la
en patrocinar «arquitecturas parlantes» ochenta, para continuar la cultura racio- retaguardia, nuevamente central, de una No puede haber «spleen» en América, desvelamiento de las crisis de la moder- transcripción de la conferencia dictada en el marco de
elocuentes del rol que las corporaciones nal del proyecto moderno y su tradi- práctica regionalista y crítica, ambos nidad, su valoración simultánea de la V Bienal Internacional de Arquitectura BA'93.
dice Waisman, como si lo viejo fuera 3. K. Frampton, «The need for Roots: Venice 1980»
asumicrona partir de la crisis del petróleo ción (la modernidad) que arranca en el aportan dos calificativos complementa- los modos de producción locales, regio-
Europa y no este mundo. Como si efecti- en GA Document, n" 3, 1980, pp. 13-21.
del ?73. siglo XVIII. El regionalismo de Frampton rios: divergencia y convergencia. nalesy sitiales de los regionalismos 4. K. Frampton, «Reflexiones...», op. cif., p. 51-
vamente hubiera otro mundo distinto al
5. K. Frampton, «The need for Roots», op. at, p. 13.
Para Frampton, la vanguardia que tiene además una dimensión espacial Muy tardíamente, en 1990 a la par que de la modernidad, sugiere apropiarse con centrípetos. 6. Paolo Portoghesi, «The End of Prohibitionism» en
enarbolaba el postmodernismo vintage ancha (incluye todas las culturas vivas del pergeñaba su Historiografía para latino- Las prácticas que Frampton incluye en Gabriela Borsano, ed., The Presence of the Past: First
moderno eclecticismo, adaptar, entender, Intemational Exhibition ofArchitecture, Milán,
europco-estadounidense representaba globo) y otra ancha dimensión histórica americanos, Waisman redactaba este sin un regionalismo crítico, fueron en sus
Electa, 1980.
y en última instancia contentarse,
entonces sin más la impotencia de las van-
(que abarca toda la tradición racionalista breve lugar común con el que interpretaba de la moder- sedes reconocidas como modemnas. Es 7. Ibidem.
i
, ocuparse de los problemas 8. Ibídem, p. 21.
guardias, su propio final. Representaba y moderna)." Espesor y transversalidad sui generis la reconceptualización framp-
nidad. Trilladamente, supone que no decir que cumplen al mismo tiempo con 9. P. Buchanan, «Un florecimiento cultural», en
también el fracaso de la trayectoria mo- que serán -como se intenta explicar más toniana de categorías como «regionalismo» las exigencias programáticas dentro de AV Monografías, n" 113, 2005, pp. %-107.
es ésa la situación de Sudamérica en los
10. K. Frampton, Historia erítica de la arquitectura
dernizante, al borde de la devastación adelante- su punto más endeble. y «región».'* En cuanto al regionalismo ochenta. Y muy sudamericanamente, las posibilidades tecnológicas del mundo modema, op. cit, pp. 318 y 329.
nuclear (uno de los abismos frente a esa Frampton reconoce una tradición de crítico, Waisman, reclamaba un derecho 11. Hal Foster, ed., 7hbe Anti-Aesthetic Essays on
plantea una tercera vía: rota la identidad actual, ambas condiciones reales de ges-
Postmodern Culture, Nueva York, New YorkPress,
trayectoria) y la devastación ambiental superposiciones permanentes entre una propio particular, dado que donde se entre modernidad y progreso material, tión de la arquitectura. Aquí encajan los 1983. Hay edición española: «Hacia un regionalismo
(otro de los abismos). Desgastadas las po- civilización universal y las culturas loca- debería elaborar semejante línea de acción casos de Carlos R. Villanueva, Amancio
crítico: Seis puntos para una arquitectura de resis-
propone dejar de pensarla como tal, tencia» en La posmodernidad, Barcelona, Kairós, 1985.
sibilidades de una vanguardia, Frampton
concibe la alternativa de una retaguardia
les. En cse sentido cree que el regio-
nalismo es la práctica actual moderna
es en las «regiones» (espacios geográfi-

cos, culturales, humanos, distintos por


-
-
y suponer una identidad utópicá entre
Williams y Clorindo Testa, a quien re- 12. K. Frampton, Historia crítica de la arquitectura
moderna, op. cit, p. 317.
modemnidad, calidad de vida y sustentabi- conoce como dador del carácter del
13. Robert Venturi, Complexity and Contradiction in
o

crítica, puesta a favorecer una cultura normalizada de culturas regionales, naturaleza de las metrópolis del sigo XX). lidad. De este modo la propuesta de Banco de Londres, obra que le permite Architecture, MOMA, Nueva York, 1966.
de resistencia dadora de identidad. la ininterrumpida producción de cultura Con una suerte de trasvasamiento de reflexionar sobre la posición no-monu- 14. Stanford Anderson, «he Fiction of Function» en
Waisman supone una divergencia, que no
Assemblage, 1" 2, febrero de 1987, pp. 18-31.
¿Desde qué estrategia procedía vernácula, ese «lo cual no sea del todo vocablos, «regionalismo» y «región» se puede entonces considerarse una reta- mentalista de las prácticas arquitectónicas 15. A. Tzonis, I.. Lefaivre, «Regionalismo Crítico», en

Frampton a introducir esta retaguardia irreparable» del párrafo citado de confunden. Penoso pues es lo que ha «regionalistas». La escala pequeña no A/mbiente, 1" 51, octubre de 1986, pp. 21-27.
guardia, sino solamente esquivar el canto 16. «... Y la tradición no significa solamentelatradi-
crítica? Pues, a partir del concepto de Riceeur ante el desbaste de las diversas intentado Frampton, precisamente la de sirena de las modernidades «tardo» megalómana;"' la mimctización del edifi- ción del siglo diecinueve, o del dieciocho. Significa
Regionalismo Crítico, tal cual fuera acu- culturas particulares concretas. En esta fusión de los conceptos dependentistas cio con el paisaje natural o urbano, también, la tradición de este siglo», K. Frampton, en
y «post» estadounidenses y entregarse a «Reflexiones», op. cit., p. 51.
ñado por Alexander Tzonis y Liane producción implica revivir, reformular de «centro» y «periferia» en un continuo las seguridades de un paisanismo geográfico e histórico, se presentan como 17. Ibídem, p. 51.
Lefaivre.'> Se trata de imprimir una estra- entonces íconos e ídolos en las figuracio- moderno y dialoguista donde lo mo- 18. Marina Waisman, El interior de la bistoria.
historicista. prácticas realistas -ni herméticas ni abs- Historiografía arquitectónica para uso de latinoame-
tegia adversa no sólo al recurso melan- nes de una cultura cierta. En ese contexto derno, cartografiado independientemente En uno de sus textos impregnado de las tractas-, que incluyen elementos precisos, ricanos, 7 edición, Bogotá, Escala, 1993.
cólico o folklorista de las peculiaridades ubica el ejemplo de Utzon. Imponer de su grado de desarrollo, puede sumar tomados de culturas vernáculas propias 19. M. Waisman, «Cuestión de divergencia. Sobre el
teorías topológicas deconstructivistas 12, mayo-
del sitio sino, al mismo tiempo, adversa a al imaginario del templo transformaciones a la realización de aquel compromiso
regionalismo crítico», en Arquitectura Viva
de Derrida y Deleuze, Fernández ponía o ajenas. Se trata de inmediatizar la
junio de 1990.
*-__
la informe adopción de maneras popula- del tipo en el tiempo que ba pasado y moderno de las vanguardias arquitectóni- 20. l'ernández, K. «Crisis de la modernidad: las
en relieve quiebres y fisuras, entre aque- presencia y al experiencia del sujeto más fracturas regionalistas», Arquitectura Sur, 1" 2, sep-
res de solución y adaptación arquitec- la metamorfosis misma del edificio en cl cas de comienzos del siglo XX. Esto su-
llas que dejaban entrever las denuncias allá del reconocimiento visual (icónico) tiembre de 1990, pp. 37-42.
tónica o urbanística. tiempo. 21. Ibídem, p. 331.
pone decir para Frampton que en la fisura del fin de la modernidad; pero a su vez, o intelectual (referencias estilísticas

76 77
Alan Colquhoun: Virginia Bonicatto
la aventura de la arquitectura moderna Ana Gómez Pintus
Melina Yuln

La primera pregunta que emerge de la


intentos por mos- un capítulo que, a pesar de su brevedad,
mente homogéneo movimiento moderno. bición totalizadora, que pretendía una pesar de los reiterados
!
trarse como un todo unificado.
abre un espacio para analizar la obra
lectura de un texto como Modern era una "invención", es decir, una fabrica- unidad armoniosa y orgánica entre todos
hustórico. Desde el punto de vista formal, la pre- de arquitectos como Heinrich Tesscnow
Architecture publicado en 2002y tra- ción o un mito».* Al mismo tiempo, los fenómenos de cada momento en
a quien rara vez vemos tomar lugar
ducido al español tres años más tarde bajo tensión de abarcar todo el período de la
el título La arquitectura moderna: una
algunos autores resquebrajaron los pocos
cimientos remanentes de una noción
En la necesidad de crear un estilo arqui-
tectónico que fuera el reflejo de la unidad
modernidad arquitectónica, a la manera de los grandes relatos del Movimiento
desde Moderno.
historia desapasionada,' es qué puede unificada del modernismo: Anderson cultural de su tiempo -como había ocu- un manual, se ponc en duda cuando

la introducción se plantea la construcción Un papel especial es reservado para el


aportar un libro aparecido sesenta años desenmascaraba «la ficción de la función»: rrido con los estilos anteriores-, la realidad
del texto como la sumatoria de ensayos expresionismo y el futurismo. Ambos son
después de que Henry Russel Hitchcock Neil Levine evidenció la mímesis en la política y económica del siglo xX se
críticos capaces de ser leídos de forma 1n- abordados como opositores a las líneas
Junto a Philip Johnson consagraran obra de Wright; Wolf Tegethoff y Fritz contradecía con esc espíritu de la época
el Intemational Style o bien, treinta años invocado. La aspiración a una totalidad dividual. La ventaja del enfoque crítico predominantes del Movimiento Moderno
Neumeyer, y luego Evans, Hays y a través del uso que hacen de formas
ex-
en su
luego de los últimos cuestionamientos Martins, hicieron visibles las profundas cultural semejante a la del pasado -afirma es un análisis detallado -y erudito-

capacidad de ir tejiendo redes de relaciones presivas irracionales y de su deuda hacia la


posmodemnistas. tendencias simbólicas en la obra de Mies. Colquhoun-, se encontró con la disyun-
entre los actores y los complejos con-
filosofía estética alemana.
El desafío de Colquhoun es encon- Otros, incluso, encontraron las raíces tiva de no saber qué hacer con la moder-
textos de producción. Sin embargo, este
En el siguiente capítulo, la vanguardia
trar una rendija, una pequeña veta incx- estilísticas del radical futurismo italiano, nidad, una modernidad que planteaba una
cuando pre- holandesa comparte la escena con la
plorada que justifique retomar este en el burgués Art Nouveau? realidad en constante cambio, diluyéndo- esquema se vuelve en contra
rusa: De Stijl aparece como el propulsor
La cul- tende transformarse en un relato abarcador
objeto que ha sido recorrido por varios La mayoría de estos trabajos, siguen se y rearmándose constantemente.
Movimiento Moderno,
autores cuyos relatos pasaron a for- siendo deudores, en parte, del enfoque tura del siglo XX estaba definida por
el de la modernidad, reflejando un trata- y soporte del

tafuriano al alinearse dentro de una tradi- miento desparejo de los temas abordados. «(...) combinaba su entrega a la moderni-
mar parte de la «historia oficial» y que
capitalismo y la industrialización y enella, dad con un idealismo que asociaba al
El artículo inicial sobre el Art Nouveau
podría trazarse siguiendo una serie ción de historias de la arquitectura con- el Movimiento Moderno fluctuaba entre
demuestra un interés especial del autor cambio científico y técnico al progreso
compuesta por Hitchcock y Johnson temporánea cuya búsqueda es el funda- el rechazo a esa modernidad social y la
de acuerdo a cada tema tanto espiritual como material».* Mientras
(The Intemational Style, 1932), Nikolaus mento ideológico que subyacea la visión aceptación de su futuro tecnológico, en que irá fluctuando
de
Portada de la edición inglesa de la arquitectura a que la vanguardia rusa, portadora
Pevsner (Pioneers ofModern architecture del mundo que está siendo proyectada a un intento fallido de interpretar
el propio a lo largo del libro, para llegar exhausto
moderna de Alan Colquhoun
from William Morris to Walter Gropius, través de la arquitectura. En este sentido, un cargado capítulo final en el que
se grandes innovaciones, decae en 1932 atra-
espíritu de la época.
Portada de la edición española del libro de
1936), Sigfried Giedion (Space, time and El libro sc inscribe dentro de la co- comprimen los planes de Le Corbusier, el pada en una batalla ideológica donde el
Alan Colquhoun con el título de La arquitectura puede incluirse también el texto de estado toma el control de una arquitectura
architecture, 1941), completada más tarde rriente crítica del Movimiento Moderno, Team X, las megaestructuras y los pro-
moderna: una bistoria desapasionada. Colquhoun, en el cual se presenta la his-
por Bruno Zevi (Storia dell architettura toria de la arquitectura moderna «en el es decir, la que deja de conceptualizar yectos utopistas de los sesenta. política que deviene en un «monumenta-
Su historia se construye a lo largo de lismo autorizado».*
moderna, 1950) y Leonardo Benevolo espacio que queda entre las utopías idea- el modernismo en términos estilísticos y
una narración desencantada que se inicia
El relato regresa a Europa Central con
(Storia delVarchitettura modema, 1960). listas de las vanguardias históricas y las hace énfasis en su complejidad y hasta cn
comien-
un Le Corbusier que representa, a
Como señalara también Tournikiotis;? través con la presentación de un Art Nouveau
resistencias, complejidades y pluralidades su incoherencia cuando se mira a
al
os de la década del veinte, el retorno
recién hacia la década del sesenta, de la de la cultura capitalista».* Para ello, el del prisma del estilo. fragmentado, capaz de relacionarse con el
orden de la arquitectura moderna. Aun-
mano de Peter Collins (Changing ¿deals texto se despliega en una historia de las Colquhoun define al Movimiento anarquismo en Bélgica y de ser conserva-
que hacia fines
de esta misma década,
in Modern Architecture, 1965) y funda- dor en España. Al ocuparse de la Escuela
ideas, profundizando en el análisis sobre Moderno/Arquitectura Moderna como
su militancia en un grupo neosindicalista,
mentalmente de Manfredo Tafuri (Teoría las redes de significados y los modos de «una arquitectura consciente de su propia
de Chicago, su estrategia es la de oponer
el organicismo y la modernidad de dicha alineado ideológicamente con los movi-
e storia dellarchitettura, 1968) llegarían
producción para mostrar la arquitectura, modernidad y que lucha en favor del
Escuela contra el clasicismo de la costa mientos fascistas coetáneos de Francia e
las primeras revisiones que pusieron no como objeto final y triunfante sino cambio», es decir, como una rama de la
este norteamericana. En ese contexto, Italia, repercutiría en las transformaciones
en duda el carácter monolítico de la cons- como resultado de un proceso en el que producción arquitectónica del siglo XX, de su arquitectura.
trucción historiográfica del Movimiento sc combinan diversos actores, pujas y neutral Sullivan toma el lugar del héroe introduc-
que no se ubica en un campo
tor de la modernidad que, en una noble
«El primer contacto de Le Corbusier
Moderno. Lo que casi tres décadas más disidencias internas pertenecientes a cada sino que tiene un fundamento
con las ideas regionales se había producido
tarde, Sarah Williams denominó el movimiento y relaciones políticas. ideológico retirada, se aleja de la escena arquitec-
en 1910, bajo la influencia de los
defenso-
«discurso moderno», tomando como base Para Colquhoun el Movimiento Moder- El autor dice que su libro es «menos tónica al ver sus ideales mezclados con los
res de una Suiza de habla francesa
clásica
las discusiones y debates que Beatriz no fue una aventura. triunfalista que las historias anteriores del de un capitalismo creciente.
Con los neosindica-
Colomina -entre otros planteó en torno Movimiento Moderno». De esta manera, La Furopa anterior a la Primera Guerra y mediterrancizada.
Como aventura, se entiende algo que
listas se encontró con ideas similares pero
a la modernidad. ocurre de manera ocasional, un suceso ais- trata de ubicarse entre las utopías van- Mundial, es introducida a través de una
a escala global. Los neosindicalistas
creían
Como señala Williams, «En la primera corta reseña del panorama alemán. En ella,
lado, que tiene un resultado incierto y guardistas y la cultura moderna pero, sin dividirse en tres zonas
las relaciones entre identidad nacional que Europa debía
parte de la década de los ochenta, Giorgio hasta riesgoso pero que, sin duda, deja una embargo, sigue siendo una historia de los
romanticismo y "naturales". Bajo el influjo de semejantes
Ciucci concluye que la noción de movi- huella irrevocable. La aventura del Movi- maestros. En definitiva, esa era la natu- y modernización, entre
racionalismo son los temas principales en teorías, Le Corbusier empezó a pensar
miento moderno -incluso el aparente- miento Moderno fue justamente su am- raleza de la Arquitectura Moderna, a

79
78
Alejandro Gobriel Crispiani
La arquitectura y su reverso

desde la óptica de una arquitectura moder- En este punto Colquhoun retorna a sus Notas

na global en la que la tecnología entraría raíces heterodoxas, festeja las disidencias


1. Alan Colquhoun, Modern Architecture, Oxford,
en confrontación directa con las fuerzas
y contradicciones de la arquitectura Oxford Paperbacks, 2002; Versión en español,
La arquitectura modera: una bistoria desapasioneda
geográficas naturales en las distintas moderna y deja hacia el final del texto, un
Barcelona, Gustavo Gili, 2005.
macrorregiones».'* gusto amargo. La arquitectura moderna 2. Panayous "Toumikiotis, The £listoriogr 0)
Modem Architecture, Cambridge, MITo
St anteriormente Frampton había plan- ha sido despojada de todo su idealismo y
3. Sarah Williams Goldhagen, «Something to
teado el cambio estético en Le Corbusier homogeneidad para mostrarse como un talk about: Modernism, Discourse, Style», en
¿SAH,
influenciado por su viaje a Latinoamérica artefacto conflictivo que sólo se mantuvo Journal of tbe Society ofArchitectural Historians,
junio de 2005. En su trabajo, Williams propone enten-
y como parte de una búsqueda interna unido a partir del mito que ella misma der el modernismo en arquitectura como discurso
Se calcula, o al menos esas fueron las cifras que se manejaron en inocencia y comienzana ser vistas en su totalidad a partir de su

de sus tradiciones, Colquhoun no duda en -debates y prácticas, en respuesta a la modernidad en


ayudó a generar. vez. de concebirlo como un estilo. Años antes, Beatriz un principio, que más de un millón quinientas mil viviendas capacidad de producir daño físico. Un sentido en condiciones
invertir los términos y otorgar plena im- Su «historia desapasionada» hace Colomina había señalado que lo que servía de puntal normales lateral, que ticne que ver con la capacidad de violencia
al discurso moderno era la construcción de un ideal
quedaron dañadas, en diferentes grados, que fueron desde
portancia a la «plástica» ideología política referencia a ese mito que se diluye, a la
estético armado a partir de la selección operativa, no la destrucción total a daños menores, en el último terremoto de todo lo que nos rodea (algo que aunque efectivamente
de un Le Corbusier oportunista." aceptación de que el relato canónico, sólo de personajes, sino especialmente de fotografías tsunami ocurrido en Chile el 27 de febrero de 2010. siempre está latente no da la norma) sc apodera del entorno físico
y posterior
A la hora de abordar la arquitectura tomadas estratégicamente. Beatriz Colomina, Priv,
idealista y unificador, era ya insostenible Por muy inmunes que los medios de comunicación masiva y la cotidiano y lo transfigura.
and Publicity: Modern Architecture and Mass Media,
italiana, el eje continúa basándose en frente a una realidad diversa y fragmen- Cambridge, Mr Press, 1994. información general que solemos manejar nos hayan vuelto a estc Pero no se trató simplemente de un momento, de una situación
4. Giorgio Ciucci, «[l mito movimento moderno
cuestiones ideológicas: las relaciones entre tada -posición que lo coloca claramente única. El sismo de 8,8 grados en la escala Richter, que marcó a
e le vicende dei CIAM» en Casabella, 1" 463-464, tipo de cifras catastróficas, el grado de destrucción que éstas
vanguardias arquitectónicas y fascismo dentro de la crítica posmodernista-, noviembre-diciembre de 1980, pp. 28-35, 118, citado muestran no debería dejar de conmovernos y de interpelarnos a fuego lo construido, fue, como es bien sabido, el más fuerte de un
en «Something to talk about: Modernism, Discourse,
guían al capítulo desde las posturas del aunque esa postura radicalizada ya había Style», op. at., p. 158.
todos los que de una u otra forma estamos vinculados a los conjunto de movimientos telúricos que se prolongaron durante
racionalismo pro-fascista anterior a sido marcada por Tafuri, treinta 5. Williams hace referencia a textos como: Neil los edificios. Pero aún más de dos meses. Cada una de las réplicas renovaba y extendía
procesos de construcción de la ciudad y
la guerra hasta la postura antifascista que años atrás.
Levine, Wright and History», en The Architecture of este sentido amenazante de los edificios y los objetos. El adormc-
Frank Lloyd Wright, Princeton, Princeton University así, aunque con un esfuerzo de la imaginación tratemos de visua-
lidera Bruno Zevi en la posguerra y el Al decir que la suya es una «historia Press, 1996; Wolf Tegethoff, Mies van der Robe: The lizar y comprender la magnitud del daño que esto supone, esta cimiento de su capacidad de violencia tardó no poco tiempo en
Villas and Country Houses, Cambridge, MIT Press,
contextualismo del grupo BBPR. Una menos triunfalista» que las anteriores si- cifra de todas maneras resulta engañosa y reductiva. Entre otras producirse, e igualmente nunca llegó a serlo de manera completa.
1985; Fritz. Neumeyer, Tbe Artless Word: Mies van
pureza casi inocente se observa en la gue atado a un «discurso» que -a esta der Robe on the Building Art, Cambridge, urr Press,
razones, porque aunque hayan quedado sin daños e incólumes,
La reconstitución del primario sentido de cobijo que la arquitec-
1991; Robin Evans, «Mies van der Rohe's Paradoxical
arquitectura escandinava en una mezcla altura- ya es vetusto, porque continúa una enorme porción de las construcciones en Chile (sin excep- tura sc supone ha de brindar, tardó un tiempo relativamente largo
Symmetries», AA Files, 0" 19, Architectural
de clasicismo y modernidad donde la construyendo un relato de la Arquitectura Association, Londres, Spring, 1990; Michael K. Hays, ción la totalidad de las pertenecientes a las regiones V, VI Y VI1) en llevarse a cabo. Podría decirse que durante todo ese tiempo el

«nueva objetividad» hace su entrada con Moderna aunque ya sin la pasión de los «Odysseus and the Oarsmen, 0, Mies's Abstraction sentido de lo construido quedó descentrado, apuntando sólo
once Again», en Detlef Mertins, 1he Presence ofMies,
fueron sacudidas desde sus cimientos y todo su contenido, mate-
la obra de Sven Markelius y Gunnar primeros narradores. Princeton Architectural, Nueva York, 1994; Detlef rial y humano, sometido a un virulenta oscilación. La experiencia hacia la pregunta de su capacidad de resistencia y de permanecer
Mertins, <«Architectures of Becoming: Mies van der
Asplund a comienzos de los años treinta. Como sc ha señalado, la idea de plan-
Rohe and the Avant Garde», en Barry Bergdol! y de lo que podríamos llamar el habitar, tan naturalizada en todos en su lugar frente a las fuerzas naturales. Las muchas preguntas

Colquhoun va más allá de las visiones tear el libro como la sumatoria de una Terry Riley (eds.), Mies in Berlin, Museum of Modern los sentidos, se vio así violentamente trastocada. Sc pone de que cotidianamente nos ponemos frente al entorno físico, queda-
tradicionales que comprendieron al Art, Nueva York, 2001, citados en «Something to talk ban reducidas a una sola. En realidad podría decirse que durante
serie de ensayos independientes pero que manifiesto en estas circunstancias, hasta qué punto dicha expe-
about: Modernism, Discourse, Style», op. ait., p. 156.
Movimiento Moderno como el último pueden ser parte de un todo más extenso 6. La arquitectura moderna: una bistoria desapasio- riencia se encuentra fundada, podríamos decir, geológicamente, todo esc tiempo lo que se puso de manifiesto fue el reverso de
intento de encontrar respuestas unificado- nada, op. cit., p. 9. lo que en general constituye la experiencia de la arquitectura.
-aunque el propio autor confiesa no pre- 7. [bidem, p. 29.
abriendo un horizonte de radical incertidumbre y poniendo a
ras ante una realidad volátil y en cons- tender ser enciclopédico-, está hablando 8. La arquitectura moderna: una historia desapasio- todas las construcciones bajo una nueva y amenazante condición. Para usar, aunque sólo sca a modo referencial, las palabras de
tante cambio, planteándolo como una de que hay una «csencia» de la Arqui- nada,op. cit., p. 111. Francisco Díaz, justamente, ha hablado de esta condición en la Heidegger, podría decirse que durante ese tiempo se estuvo frente
9. La arquitectura moderna: una bistoria desapasio-
solución anacrónica a los problemas del tectura Moderna, aún con contradicciones nada, op. at., p. 135. cual tanto la arquitectura, al igual que los objetos que aloja, pierde a la pérdida de la fiabilidad de los instrumentos y de las cosas
10. La arquitectura moderna: una historia desapasio-
siglo XX. En su hipótesis, dicho mo- y diferencias y que el «mito» todavía nada, op. cit., p. 156.
de golpe su familiaridad y confiabilidad para convertirse en una creadas por el hombre con un fin mayormente utilitario. Esta fia-
vimiento no constituye un intento cons- puede ser revisitado. 11. Kenneth, Frampton, Modern Architecture: a amenaza concreta. Los medios de comunicación masiva, particu- bilidad es muy evidente en los instrumentos. Es en el momento
Critical History, Londres, Thames and Hudson, 1980.
ciente de unificación, sino más bien larmente la televisión, lo reflejaron repetidamente: muchos de los en que éstos se rompen o se descomponen cuando efectivamente
En español, Historia crítica de la arquitectura mo-
una mala interpretación del Zeitgeist, un dema, Barcelona, Gustavo Gili, 1998. entrevistados que apenas lograron salvar sus vidas, o que vivieron se hace presente hasta qué punto nuestra vida se estructura en

movimiento que no supo reconocer que la la confianza en ellos, en dar por sentada y segura sus respuestas
muy de cerca la amenaza que la arquitectura podía significar
característica fundamental de la moder- frente a nuestros requerimientos o necesidades. Es esta confianza
para ella, sólo querían deshacerse de sus viviendas, aunque estas
nidad era la falta de unidad y que, aunque fueran recuperables y hubieran sido una parte importante de su la que en cierta medida permite el funcionamiento fluido del
con grandes disidencias, intentó materia- mundo técnico en que nos movemos. El objeto que se descom-
patrimonio y de sus vidas. El carácter agresivo hacia la vida
lizar una doctrina que encontró su auge humana que el terremoto despierta en la arquitectura, no resulta pone o que deja imprevistamente de funcionar
hace aparecer
en la primera mitad del siglo en corres-
fácil de olvidar. En el mejor de los casos y aún sin destrozos, el hasta qué punto tenemos fe en ellos, sin saber nada o casi nada de
pondencia con los regímenes políticos de paisaje doméstico se reviste de un hálito perturbador. Un nuevo la naturaleza de su funcionamiento. En tal sentido, el mundo téc-
intención totalizadora. sentido se aposenta en las cosas familiares que pierden su nico se apoya en una creencia generalizada, cuyos fundamentos,

80 81
Fronmuspicio de la segunda edición de Marc-Antoine
Laugier: Ensayo sobre la arquitectura, 1753.

como con cualquier creencia, se desconocen o son meramente tinado a los médicos, a aquellos a quienes se acude en caso se asienta. La figura de la arquitectura aparece como mediando

estadísticos. La falla técnica hace aflorar esta creencia como de extrema necesidad, a veces de vida o muerte. La posibilidad de entre estos dos extremos. Le da la espalda al desorden de la

tal, nos la muestra con todas las limitaciones e inclusive peligros volver a una vida más 0 menos normal, en muchos casos depen- destrucción, pero éste, de todas maneras está presente en cl cua-
dió del diagnóstico de un arquitecto o un ingeniero en cons- dro general,debecho ocupa cl primer plano y está más cercano a
que implica. Pero esto suele ocurrir sólo durante un breve tienpo
y la experiencia en general se encuentra circunscripta a un solo trucciones. La «necesidad social» que la propia disciplina ha pre- la arquitectura que el naciente orden nuevo, al que ella señala

objeto o artefacto. gonado históricamente sobre sí misma, se hizo presente de golpe a la distancia. La arquitectura, en cierta forma, aparece como la

Con el sismo y sus réplicas, de alguna manera la falla técnica se y en una proporción y urgencia que no admitía ningún tipo de encargada de renovar el ciclo que va del nacimiento de la cons-
apoderó de todo, pero principalmente de la arquitectura y su retórica y que significó sin duda una prucba y una demanda que trucción y el primer cobijo, hecho con materiales vivos, como

posibilidad permaneció allí durante varios meses. La falla masiva aún están en pie. la madera aún en estado de crecimiento, a la destrucción y caída
de la arquitectura se hizo presente en algunos lugares como Si la arquitectura, como disciplina y como institución, supo del edificio, hecho con materiales ya muertos, como las piedras a

posibilidad nunca demasiado remota, en otros como realidad estar a la altura de esta situación y de estos reclamos, es algo que las que sólo parece esperarles su definitiva desintegración. Nadie
devastadora. La falla técnica en la arquitectura es completamente aún debe ser evaluado, si es que esta evaluación es posible. En tal mira al edificio destruido, pero éste está ahí, como una suerte
distinta a la que ocurre en los artefactos técnicos. Estos en cierta sentido, debería tenerse bien en cuenta que el terremoto interpeló de subconsciente o contrapartida del proyecto de arquitectura y de
manera están destinados a dejar de cumplir en algún momento su a la disciplina en su conjunto. Aunque lo que se le demandó en su la construcción. La mirada estética sobre la destrucción, aparece,

función; aunque no ocurra, ésta es como si fuera parte de los origen fue una respuesta eminentemente técnica y social, y nadie si se quiere, insinuada, pero desde luego no domina el cuadro
mismos. La falla técnica que amenaza la supervivencia de un duda que la misma debe ser dada con toda eficacia y que hacia como va a comenzar a ocurrir ya un poco más avanzado el

edificio no está en su naturaleza, produce un trastorno de otro ella deben dirigirse todos los esfuerzos necesarios, el terremoto y siglo XVII. La musa de la arquitectura parece emerger no de lo
tipo, máxime cuando se sabe que se trata de una situación exten- la destrucción causada por él arroja luz sobre todos los aspectos natural, si no de un desorden que de alguna manera le es propio.
dida a la totalidad de lo edificado. La pérdida de fiabilidad en de la disciplina, en tal sentido tiene una dimensión que no se Esa gramática rota de capiteles y fustes es en realidad en lo que
se respalda. Este desorden no es objeto de una mirada frontal, de
un edificio no se compara con la pérdida de fiabilidad en un agota en la respuesta más o menos pragmática, sino que afecta
objeto técnico. Es una experiencia mucho más ajena a su natura- también a la reflexión sobre sus fundamentos y su historia. una consideración directa, si no que se filtra de algún modo en

leza y que tiene otros alcances. También la teoría de la arquitectura, si quiere efectivamente ser el proyecto. La arquitectura le da la espalda a la destrucción, pero
En la construcción colectiva de esta experiencia, evidente- tal, tiene frente a sí al terremoto del 27 de febrero y a lo ocurrido esto no la hace desaparccer, es desde ese lugar que afirma su pre-

mente, los medios de comunicación masiva jugaron un papel después de él. Este suceso le compete, aunque no por eso debería sencia.

determinante, alimentando y acentuando por muchos canales ese esperarse la aparición de una teoría ad hoc, sino que, como en La arquitectura del siglo XX con las dos grandes guerras que lo

nuevo estado en que se mostraba la arquitectura. Estos medios los otros aspectos de la disciplina arquitectónica, probablemente marcaron, conoció la destrucción masiva de ciudades en una

actuaron un tanto como las réplicas, cuya decreciente intensidad se trate de una interiorización lenta y de más largo alcance. proporción mayúscula. En algunos casos esta destrucción fue
en cierta medida acompañaron. Le dieron imágenes, palabras irresponsablemente aplaudida, como en el futurismo. Pero aún
y extensión a lo evidente: la adormecida centralidad que tienen
sin llegar a estos extremos puede decirse que algo de esta manera
las construcciones para el desarrollo más elemental de la vida Un desorden primigenio de considerar el asunto está presente cuando se habla de la
cotidiana, que de repente tomó el lugar y el sentido que le «oportunidad» que representa para la disciplina cuando estos
corresponde, descentrando justamente todo lo demás. La posibilidad de destrucción que toda edificación afronta, procesos de destrucción, fuera cual fuera su origen, se producen.
Este descentramiento, como no podía ser de otra manera, como de proveer los insumos esenciales para la vida, como agua su condición de ser perccible, sea por las razones que fuera, ha No es de extrañar, tampoco, que un crítico como Reyner Banham,
también afectó fuertemente a la arquitectura como disciplina. y energía. Los medios de comunicación, particularmente la acompañando evidentemente al pensamiento sobre la arquitectura admirador del futurismo y sus ideas, postulara la necesidad de
El mismo movimiento que colocó a la arquitectura en el centro televisión, mostraron con insistencia lo que podríamos llamar en toda la edad moderna, entendida ésta en sentido amplio. pensar a la vivienda, y en definitiva al edificio concreto, como
de interés de los medios de comunicación, situación desde luego la dimensión humana de esta componente técnica, la manera Gran parte de la arquitectura que se tomó como modelo desde el algo desechable, que debería acoplarse a los procesos rápidos de
excepcional, hizo que ésta tuviera que replantearse completa- brutal en que ésta sc manifiesta a los usuarios cuando falla o sim- siglo xv y durante la época clásica mostraba esta condición, había obsolescencia y desaparición dictados por la técnica a sus objetos.
mente su jerarquía de problemas y desde luego generó la opor- plemente se pone en duda su eficacia. Las entrevistas constantes sido sujeto de una determinada destrucción. Esta consideración En su caso, ya no cs la contienda bélica la que garantiza la reno-

tunidad, no necesariamente aprovechada, para repensarse desde a los miles de damnificados por el terremoto pusieron en boca de del edificio derruido tuvo uno de sus momentos más llamativos vación necesaria del mundo físico, con su secuela de muerte
sus fundamentos. Desde luego, y como no podía ser de otra en el culto a las ruinas, pero este culto fue una de las variadas y violencia, sino las fuerzas del mercado. Más de cuarenta años
gente común un discurso sobre la técnica que evidentemente
manera, fue en términos amplios la componente técnica de la interpelaba, a escala masiva, al discurso y al conocimiento espe- maneras de acercarse a esas construcciones que no habían sopor- después de que Banham lanzara sus teorías, no puede decirse que
arquitectura la que se instaló con inusual intensidad en el medio cializado en este campo. La demanda sobre la arquitectura fue tado ya fuera a las fuerzas naturaleso al paso de la historia. la arquitectura no haya sido dócil a estas fuerzas del mercado,
de la escena y se hizo del protagonismo de diarios, radios y cana- evidentemente una demanda técnica, pero particularmente sociali- El famoso grabado que ilustra el Ensayo sobre la arquitectura pero no al precio de garantizar su periódica destrucción masiva.
les de televisión de Chile, por supuesto, pero también de todo zada y sin otros intermediarios que no fueran los propios medios de Laugier, puede ser un ejemplo. La arquitectura señala cl El orden de la arquitectura no es de la misma naturaleza que el
el mundo. Componente técnica de los edificios que el sismo puso de comunicación. El reclamoa la arquitectura fue directo, masivo nacimiento de la primera construcción humana, todavía viva y orden derivado de los objetos técnicos; su destrucción tampoco
a prueba en sus presupuestos más básicos, en su capacidad
y urgente. Como ha sido señalado también por Díaz, el arqui- en proceso de separación de los elementos naturales, pero se puede asimilarse a la de estos últimos. Banbam suponía que la
de mantenerse en pie y de brindar un adecuado cerramiento, así tecto pasó a ocupar un lugar social que en general suele estar des- apoya en un edificio destruido, al que no mira pero sobre el que destrucción sin desorden aparente que rige para el universo de los

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Derrumbe del edificio «Alto Bío Bío» en Concepción.

vu. DON En La "Tercera, 5 de marzo de 2010, p. 15.


Foto: Camila Lasalle (reproducción autorizada).

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Iglesia de San Francisco, Curicó, Chile, Viviendas afectadas por el terremoto sobre
durante una de las réplicas, marzo de 2010. Av. José Miguel Carrera, Curepto (vi Región
Foto: Alejandro Crispiani. del Maule, Chile), marzo de 2010.
Foto: Alejandro Crispiani.

objetos técnicos yde todos los objetos de consumo masivo, iba tura como si fuera a perdurar por siempre, parece más cercana dad privada, hasta qué punto reposa en ella lo que Quatremere de para los del siglo XXI. La «promenade» entre las góndolas de mer-
en algún momento a llegar inevitablemente al edificio y a la a los hechos.
Quincy llamó el «buen orden de la vida civil». Esto se puso de cancías empujando el carro respectivo, esa primera apropiación
ciudad. Que sea o no así en algún futuro es difícil de predecir. Algo obvio y fundamental saltó a la vista con violencia después manifiesto en muchos niveles. En principio, muchas imágenes se pausada de los objetos que dócilmente se ofrecen a la mano para
Lo que es innegable es que los tiempos rápidos que se preveían del sismo: hasta qué punto la arquitectura asegura el orden de lo pusieron en circulación para ilustrar la caída de este buen orden. ser luego consumidos en otro ámbito y cuando esta apropiación

en los «alegres sesentas» para este proceso no ban tenido la material en su conjunto, hasta qué punto sigue siendo aún hoy en Quizás la más literal, y una de las más recurrentes en la prensa se haya hecho efectiva merced al paso por las cajas, es probable-

velocidad esperada. día el principio de orden irremplazable. En principio, al recorrer nacional e internacional fue la del edificio «Alto Bío Bío» cn mente una de las «escenas madre» de nuestra cultura. La foto

Mientras tanto, lo ocurrido en Chile mostró otra perspectiva. los poblados, en su mayoría de construcciones antiguas, asolados Concepción, que se cortó en su base desplomándose, cayendo de El Mercurio mostraba, en este caso también, el reverso. Las
En primer lugar, es de destacarse que gran parte de la arquitectura por el terremoto, resultaba difícil apartar la mirada y no dejarse literalmente de espaldas pero conservando su forma original. mercancías han saltado de las góndolas y han invadido los pasillos

y de la edificación moderna resistió con daños menores al terre- fascinar por el espectáculo de la destrucción, por la vista de El terremoto no redujo a escombros al cuerpo prismático del edi- de circulación, pero no han sido destruidas. Las estudiadas rela-
moto, lo que hizo que el número de víctimas fuera reducido, la arquitectura derrumbada en masa. Rara vez. puede verse el ficio, sino que simplemente lo volteó. No resultaba fácil, en prin- ciones entre el orden de éstas y el cuerpo humano, que son la
si tenemos en cuenta la magnitud del sismo y lo poblado del área reverso de la arquitectura con tanta nitidez. El orden material
cipio, descifrar la imagen. lodos los elementos arquitectónicos base de la eficiencia espacial del supermercado, se han hecho
en la que se dio. La resistencia a la destrucción de los edificios fue de las viviendas, que rige ya sea para los materiales de cons- estaban cambiados de posición. Lo que se suponía una fachada en trizas. Se transita sobre un colchón de mercancías y éstas son

por lo tanto, vital. El edificio en pie siguió siendo manifestación trucción, el mobiliario, los enseres domésticos, los elementos altura, pasó a ser un muro de altura media y extendido horizon- recogidas del piso. El carro del supermercado se ha hecho inútil,
de vida, y su permanencia aseguró el orden necesario para ésta. de arquitectura, la ropa, los adornos y todo lo que puede conte- talmente. Esta suerte de transformación radical del medio físico, otra forma de llegara ellas impera. Esta disposición espacial que
Fueron las edificaciones históricas las que más se vieron afec- ner una casa, se mostraba completamente trastocado o había el cambio de lugar y posición de todas las cosas, fue uno de los muestra la fotografía refleja la caída del dispositivo sobre el

tadas. Construidas en la mayoría de los casos con adobe, las mis- desaparecido. La confusión de todas estas cosas había reempla- grandes temas de las imágenes de los medios gráficos y televi- que se basa el supermercado y con él del sistema cotidiano más
mas constituían el tejido de muchos pueblos y pequeñas ciudades zado al espacio doméstico, en muchos casos. En otros, este sivos. l.as imágenes de barcos varados en el centro de la ciudad de usual para llegar a la obtención de los insumos más básicos, como
de la región que padeció el terremoto. Salvo un porcentaje menor, espacio, aún en pie, había quedado sacudido y partido. La relación "Talcahuano ilustraron esto de manera dramática y espectacular. ser en este caso alimentos. Muchos de los edificios de estos

la edificación moderna resistió a la destrucción. Las torres de interior/exterior cambió fundamentalmente; aun en el caso de las También hubo imágenes que apuntaron a un tipo de caos que supermercados no sufrieron grandes daños por el terremoto, pero
fachadas vidriadas y hormigón armado que marcan a sectores viviendas en pie esos interiores ya no eran un cobijo sino una finalmente habría de dominar la atención en los días inmediata- este sacudió, junto con el entorno construido, la estructura de

enteros de Santiago, así como la arquitectura inmobiliaria en altu- amenaza. El espacio de la calle se volvió confiable, era el refugio mente subsiguientes al sismo. Se trataba de aquellas imágenes la propiedad. Podría decirse que ésta se agrietó junto con la
ra, apenas sufrió desperfectos. Fue la arquitectura baja y de cierta frente a lo construido. Lo que la dislocación material masiva tras- que, en principio, se referían al efecto que este trastocamiento del arquitectura. La foto en el supermercado muestra una de esas
antigiedad la que fue dañada en muchos casos de manera irrepa- tocó y sumió de alguna manera en el caos fue lo que podríamos orden espacial tuvo en el régimen de propiedad tanto de los edi- grietas, quizás la que más consecuencias acarreó, que llevó a los
rable. Desde esa perspectiva y contrariando las hipótesis de llamar la solidaridad del entorno artificial. Fue esta solidaridad ficios como en los objetos, pero principalmente de estos últimos. saqueos en los días inmediatamente posteriores al terremoto y
Banham, el edificio moderno es evidentemente cada vez. más fundamental, que tiene que ver con la cohesión de todas las esca- Una fotografía de una joven en un supermercado, publicada el a la subsiguiente intervención militar.

indestructible, al menos frente a los agentes naturales. La ciudad las de lo construido pero también con todos los rangos de pro- lunes 1 de marzo, ilustraba esto. El supermercado es, por antono- Los saqueos y el pillaje en los supermercados, que fueron
actual, probablemente, tenga una capacidad de permanencia como piedad que se proyectan sobre él, lo que quedó en entredicho o masia, el lugar donde el orden de los objetos se hace más visible, particularmente intensos en los días posteriores y en los que apa-
ninguna otra ha tenido. Las fantasías con respecto a su desapa- destruido. este orden y esta visibilidad determinan sin concesiones m1 mayo- rentemente intervinieron estamentos sociales muy dispares y

rición que la cultura arquitectónica del siglo XX tantas veces Lo que se vio en principio con una claridad excepcional y reve- res distracciones el espacio interno de este tipo de edificio y las por razones muy variadas, fueron, de las consecuencias del sismo,
cobijó, no parecen fundadas. La máxima de Aldo Rossi, de que ladora, no tanto por su novedad sino por su intensidad, es hasta acciones que se dan en él. Es un espacio profundamente familiar uno de los hechos más traumáticos para la sociedad chilena. Estos

es necesario «construir para los museos», es decir, hacer arquitec- qué grado es la arquitectura la que da forma y cuerpo a la propic- para los habitantes del siglo xx y probablemente siga siéndolo tuvieron lugar principalmente en la ciudad de Concepción,

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- Saqueos en Concepción.
En La Tercera, 1 de marzo de 2010, p. 11.
le Foto: Luis Sergio (reproducción autorizada).

Destrucción en el puerto de Talcahuano.


Saqueo en un supermercado de Concepción.
En El Mercurio, 5 de marzo de 2010, Cuerpo C,
p- 1. En El Mercurio, 1 de marzo de 2010, Cuerpo A,
p. 11
Foto: Víctor Toro (reproducción autorizada).
(reproducción autorizada).

epicentro del sismo, pero los medios los expandieron a una escala otra manera, podría pensarse que esa «solidaridad» efectiva del pública pidiendo y celebrando esta decisión) saltaron a las tapas como ponernos a calcular cómo será el próximo saqueo».' Inte-

planetaria. El terremoto era irreversible y hasta cierto punto entorno material construido a la que nos hemos referido anterior- de los diarios. El fantasma del desabastecimiento también estaba resa aquí, antes que los argumentos específicos del autor, la

esperable. Los terremotos son sucesos constitutivos de la historia mente, que demostró en muchas zonas su insuficiencia frente al presente, otro punto que emparentabaa la situación con el golpe imagen que se construye. Arquitectura, medios de comunicación
de Chile. La «muerte» de al menos una porción de la arquitectura terremoto, se suponía debía ser compensada por la otra solidari- contra Allende en el 73. Pero los saqueosy el pillaje mostraban masiva y objetos técnicos de consumo masivo han mostrado
nacional forma parte de su desarrollo como nación, además dad, por la que hace a la cohesión social. A la solidaridad rota de una avidez aparentemente nueva, más vinculada con la abundan- con el terremoto no tanto el <lado oscuro» de sus relaciones, si
por
supuesto de las otras secuelas de los sismos. En sí mismo, el lo físico, se suponía habría de responderle la solidaridad intacta cia que con la necesidad. Pusieron en duda, por supuesto, la no, aparentemente, el verdadero estado actual de las mismas.
terremoto del 27 de febrero no sacudió ninguna de esas estructu- de los ciudadanos. Los saqueos hicieron pensar otra cosa. «calidad» del desarrollo logrado en los últimos años y alimenta- En lo sugerido por García-Huidobro, la casa se presenta como
ras identitarias tan cultivadas, en general, por la cultura local. La conmoción de las estructuras físicas también se había reflejado ron las críticas desde distintos sectores de la derecha al gobierno. una barrera a los contenidos y a las formas que los medios de

Los saqueosy el pillaje posterior sí. Estos pusieron en entredicho en las estructuras sociales. Muchas de las cartas a los lectores Pero lo que se necesitaban, en principio, eran explicaciones y comunicación masiva en definitiva inculcan o dejan de inculcar.
el núcleo de muchos de esos discursos identitarios, fundados jus- respuestas. En ese momento se hicieron presentes, justamente, Quizás la casa sea el lugar donde éstos son efectivamente consu-
que publicaron los principales diarios en esos días mostraban el
tamente en una representación de raíces profundas en el caso
estupor creado por esta situación. El hecho sin duda más traumá- algunas voces académicas consultadas por los medios de difusión midos, pero esto no quiere decir que en el fondo no se les
de Chile, la de la «solidaridad nacional», uno de los grandes pila- tico fue que no se trató de saqueosy pillajes empujados solamente masiva. El Mercurio, por ejemplo, le dedicó una página completa oponga. Esta oposición derivaría, en gran parte, en que la casa es
res supuestamente de la «identidad nacional». Es una represen-
por la necesidad de abastecimiento de insumos mínimos si no
al tema en la Sección Internacional del diario del domingo la sede de las relaciones familiares o personales, en definitiva lo
tación muy presente en los medios de difusión masiva, en los 7 de marzo. Bajo el título «Saqueos: ¿Porqué?» se consultó a un más fuerte que podría oponerse a la comunicación masiva
que se extendió a todo tipo de mercancías, inclusive electrodo-
notuciarios y los comentarios de actualidad, pero también en la mésticos. En tal sentido, resultaba claro que no estaban empuja- grupo de políticos e intelectuales. En general, como se planteaba corriente. Desde esta idea, la casa y el sistema de relaciones per-
publicidad y no es tan inusual encontrar estribaciones de ella en dos por la necesidad de superviviencia o el temor, o no solamente. desde el título de uno de los principales articulistas, el senador sonales que alberga y alimenta, también sería lo que resguarda
el ámbito de las ciencias sociales, la literatura o aun de laarqui- Se centraron principalmente en supermercados por la Unión Democrática Independiente, Jovino Novoa, las a los objetos de consumo del torrente de imágenes que los hacen
y fueron pro-
tectura. Es una representación que como todas tiene sus propias
tagonizados por estratos sociales diversos, como ya se ha dicho, interpretaciones de lo sucedido apuntaban a la aparición del «lado deseables desde esos mismos medios. El terremoto, en la conser-
ceremonias, la mayoría de ellas mediáticas, como por ejemplo la incluyendo (según pudo verse, aparentemente, en algún caso por oscuro del alma nacional», del reverso de lo que se manifiesta vadora visión de García-Huidobro, habría mostrado hasta qué
anual Teletón, una maratón de la solidaridad destinada a recoger cuando reina el orden de lo construido. Pero para otros comenta-
televisión) a sectores medios. Fueron los objetos de consumo punto este sistema de relaciones personales estaría debilitado
fondos para niños con discapacidad, televisada en vivo y en masivo, hechos descables por la publicidad y aún sin estrenar, los ristas, no menos vinculados al ala conservadora de la cultura y frente a los medios de comunicación masiva. Indirectamente hace
directo. Es un tipo de programa que, por supuesto, existe en la política, se habría puesto de manifiesto otra cosa, en sintonía reposar en «la casa», como construcción efectiva, prácticamente
que fueron objeto de pillaje, no los objetos contenidos en las
muchos países, pero que en Chile alcanza un particular impacto casas, con respecto a las cuales los casos de robo fueron los espe- con lo anterior pero distinta, más vinculada al mundo, podría la única contención frentea ellos. Ese sería el problema de la
social, siendo su realización una de las «fechas» anuales. También rados en estas circunstancias. decirse, que acompañaa los objetos saqueados. Según Joaquín situación actual, sólo el entorno físico se les estaría resistiendo,
con el terremoto se llevó a cabo una Teletón para ayudar a los La intensidad de los saqueos en las ciudades más afectadas García-Huidobro «Imaginemos, por un momento, a un consumi- con todas las limitaciones y peligros que esto implica.
por
damnificados. Esta fue, entre otras cosas, también una respuesta a el sismo, como ejemplo Concepción, fue tal dor de teleseries, de realities y de programas de prevención del Esta idea, que asocia al entorno físico construido con la forma-
que llevó, como se
los saqueos, una de las varias respuestas que se elaboraron en las sabe, al gobierno de centro izquierda de la Concertación a tomar sida (...) ¿de dónde va a sacar un mísero argumento que le diga ción o educación personalizada del individuo (ambos finalmente
semanas siguientes al sismo. una medida que sc parecía mucho a un salto atrás en la historia: que no hay que sacar una lavadora de un local cuya puerta acaba implican la relación con cosas y seres concretos) enfrentandoa la
En un primer momento, los saqueos jugaron un papel sacar el ejército a las calles. El orden histórico también pareció de ser forzada por unos delincuentes? La tarea del próximo vez a ambos con los medios de comunicación masiva, donde reina
par-
ticularmente disolvente de la idea «el terremoto nos une», idea gobierno (y de la próxima oposición) es enorme. Pero si piensan la imagen, circuló abundantemente en relación con los saqueos,
por unos días sacudido: imágenes de soldados armados custo-
supuestamente fundamentada históricamente. Por decirlo de diando el orden público (y una que se trata únicamente de levantar casas la cosa será tan simple en los días inmediatamente posteriores al terremoto. En la página
parte importante de la opinión

87
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Francisco Diaz P.
El éxtasis de la práctica
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y la crisis de la crítica
Calle de Curepto
Notas sobre la escena arquitectónica contemporánea en Chile
después del terremoto,
marzo de 2010.
Foto: Alejandro Crispiani.

Portada de El Mercurio,
1 de marzo de 2010

(reproducción autorizada).

Parece un hecho que en los últimos años, la arquitectura chilena dicado a Santiago de Chile de las Guías de Arquitectura Latino-
ha alcanzado un nivel de calidad destacado en el mundo entero. Si americana. Por su corta extensión, y por el hecho de ser un
bien desde Chile es difícil saber qué tan cierta puede ser esta texto de difusión masiva, resulta paradigmático observar cuáles

valoración, algunas evidencias como el número de publicaciones' son los focos que llaman la atención de González Montaner

o exposiciones? internacionales dedicadasa la arquitectura chi- al presentar la práctica contemporánea en Chile.


lena, podrían confirmar la idea de Fernando Pérez de que el El primero de ellos es el nuevo estatus que, de un tiempo a
nuevo tono sc ha percibido «tal vez más desde fuera que desde esta parte, habría alcanzado la arquitectura chilena: «Hace años

dentro».? En este sentido, resulta interesante notar como críticos que se viene hablando del fenómeno chileno. Alejandro Aravena,
ya citada de El Mercurio, por ejemplo, prácticamente no hay tamente conservadora de la arquitectura sintetizada en la casa,
extranjeros se han hecho eco de este «momento», poniéndolo Mathias Klotz, Smiljan Radic, entre otros, se han vuelto emba-
articulista que de unau otra manera no haga mención a ella. La que ya en Adolf Loos había sido reivindicada, fue lo que estos en un contexto continental; así se entiende por ejemplo, que Jadores que saltaron los Andes y el Pacífico para conquistar las
destrucción de la arquitectura habría dejado en claro el poder de medios destacaron una y otra vez. Pero más allá de su intenciona- Jorge Liernur advierta que el momento actual de la arquitectura páginas de los medios especializados».* De acuerdo a esta primera
esc otro tipo de formación, que aparentemente brindan los lidad, la sola emergencia de estos discursos mostró el grado de chilena «es de una inusual riqueza y quizás no es exagerado idea, un grupo de arquitectos chilenos habría salvado esta cons-
medios. Un diagnóstico que en algunos casos sobrevuela estos fricción que se dio entre arquitectura (como entorno construido tricción geográfica generada por el Pacífico y los Andes, para
anticipar que, después del "milagro" brasileño de los cuarenta
artículos podría simplificarse de la siguiente manera: a la recupe- pero también como disciplina) y comunicación masiva. Fue diseminar por el mundo la «buena nueva» de la arquitectura
y cincuenta, quizás éstc vaya a constituirse como un nuevo
ración y reconstrucción del entorno físico debía seguirle de cerca una intensidad temporaria, pero que al menos en los primeros
episodio que la región aporte a la construcción del canon moder- chilena; porque si bien se hace referencia explícita a estos tres
una reconsideración de las formas y los sistemas educativos en nista internacional»,* o que Miquel Adriá afirme con certeza
momentos pareció invadirlo todo, que duró más o menos
personajes, se deja entrever que ellos serían sólo los embajadores
sentido amplio, una refundación que los hiciera tan firmes frente lo mismo que la puesta en duda de los discursos identitarios ya de algo mayor, de un país completo que, por medio de la arqui-
que «la arquitectura chilena de los últimos veinte años destaca de
a la comunicación masiva como debían ser los nuevos edificios mencionados. Este estado de excepcionalidad implicó, como ya se forma notable dentro del desigual panorama americano».* tectura, materializa los logros que ya había alcanzado en la
frente a los futuros sismos. Destrucción de la arquitectura y mass ha señalado, un desafío a la disciplina en todos sus niveles. Esta se El afán por atrapar esta atención internacional ha estado en el economía y la política. Pero esta idea es interesante además, pues
media de alguna manera se potenciarían, habría una corriente de vio forzada a responder y a actuar en campos en los que no suele centro de las preocupaciones arquitectónicas de los últimos años pone en relación a una cierta producción nacional (chilena), con
comunicación entre ellas que iría mucho más allá del hecho que la incursionar, o en los que incursiona bajo ciertas condiciones en en Chile y, a la luz de las evidencias, parece ser que los resultados un contexto internacional, dando a entender de forma tácita

destrucción de lo edificado es siempre un poderoso alimento general favorables a su propia autonomíae identidad. La vuelta a han sido los esperados. Sin embargo, para un país que aún no que algo no existe si no está en los medios internacionales, que si
de estos últimos. la normalidad no implica que estos desafíos abiertos hayan sido abandona el tercer mundo -y que por ende debiese apostar por no es exportable, no vale como ejemplo; desde esa perspectiva,

Lo que se publicó en El Mercurio fue, evidentemente, sólo respondidos (los profesionales relacionados con la reconstrucción el calificativo de «fenómeno» tendría una doble lectura: por una
L capitalizar internamente cualquier logro internacional la sola
una fracción (muy sesgada políticamente) de una infinidad
y la solución del problema habitacional lo saben bien). Las pre- posibilidad de que el presente glorioso no se traduzca en un esta- parte indicaría algo inesperado, superlativo y sorprendente, que
de discursos que desde distintos sectores se centraron en la rela- do permanente, debiera seruna preocupación prioritaria. Si este
guntas sobre la naturaleza y el sentido de nuestra disciplina rompería con ciertas lógicas «esperables» u «obvias» en el con-
ción inevitable, por esos días, entre entorno construido y mass también tuvieron en ese momento un sentido de urgencia, que momento no pasa de ser un espejismo de éxito en una historia texto internacional de la arquitectura; por otra, implicaría la
media. Si en algunos casos, por las razones que fuera, se trató ha pasado pero que no debería perderse completamente. más bien plana, tendremos generaciones completas condenadas a certeza de algo temporalmente localizado, irrepetible (porque
de demostrar la contraposición esencial de estos dos sistemas en la nostalgia o al escepticismo. En ese contexto, el presente texto si un fenómeno es permanente ya deja de serlo), en otras
definitiva formativos de la sociedad, uno basado en la relación intenta -desde dentro- advertir sobre aquellos peligros ocultos palabras, un estado de las cosas que tendría los días contados.
con lo existente y concreto y el otro en un flujo de imágenes tras la estela del éxito, con la -tal vez ingenua esperanza de que La segunda idea fuerza que expresa González Montaner en su
intangibles, también hubo otras visiones (particularmente en el dicha advertencia contribuya a consolidar el panorama completo, prólogo, es una cierta percepción de que en Chile es más fácil
discurso televisivo) en muchos casos contrarias a ésta. En cierta Nota aún opacado por el tamaño de los personajes de primera línea. hacer obras, como si hubiese un cierto espíritu nacional que
manera, lo que la línea argumental que sigue García-Huidobro
1. Joaquín García-1 luidobro: «El último saqueo», en El Mercurio, Santiago de Chile,
le diera primacía a la producción de cosas, por sobre su reflexión
soslaya es algo bastante obvio: frente a la destrucción de la 7 de marzo de 2010, Sección A, p. 4.
previa: «como dice Solano Benitez, a diferencia de otras ciudades
arquitectura la posición de la comunicación masiva no fue por donde, ante la aparición de un proyecto, automáticamente se de-
supuesto la celebración sino todo lo contrario. Lo que se trasmi- bate si debe hacerse o no, en Santiago se debate cómo hacerlo».
tía era la valoración de la arquitectura, particularmente en los Un ejemplo de esa mirada foránca, es el texto con que el arqui- Más allá de lo efectivamente real que pueda parecernos esa afirma-
aspectos que hacen al mantenimiento del orden cívico. La faz jus- tecto argentino Berto González Montaner prologa el volumen de- ción a quienes vivimos en Chile, lo llamativo de esta idea es la

88 89
percepción externa de que en Chile somos buenos haciendo cosas donde fue alumno de Manfredo Tafuri. Durante sus primeros tación basada en la posibilidad de que las masas plásticas pudiesen «...tengo la intuición que, con afán de ponerse al día, desde hace
y definiendo el «cómo» hacerlas, en relación a otros países latino- años como arquitecto, su ejercicio estuvo centrado en la docencia entrar en resonancia con la voluntad humana. Esta admiración al menos 15 años las escuelas de arquitectura empezaron a correr
americanos que -como sugiere Solano Benítez- se entramparían en la Escuela de Santiago, y en una práctica profesional inde- detrás de los arquitectos profesionales activos. Si esta intuición
por Borchers lo llevó a seguir sus huellas por Europa, y desarro-
en la eterna discusión acerca del «qué», o del «si se debe o no». pendiente intermitente, centrada en proyectos de pequeña escala llar un exhaustivo análisis y levantamiento de una serie de templos es correcta, no tiene ningún sentido estar ligado a las escuelas de

Lo curioso es que la cita deja entrever una cierta admiración hacia auto encargados, y algunos trabajos en colaboración como la
dóricos en ltalia y Grecia, estudios que Aravena autoeditaría arquitectura para desarrollar cualquier tipo de investigación.
esa cultura homo faber que tendríamos los chilenos, entendiendo Biblioteca de la misma escuela, realizada junto a Teodoro en 1995, publicando un pequeño libro titulado Del magno templo Es más, me parece mucho más flexible y dinámico el campo laboral
que es esa capacidad de evadir los cuestionamientos para poder Fernández y Cecilia Puga. Al dedicarse a pequeñas obras sin la
griego;" tras este periplo, su ortodoxia y radicalidad teórica le en cuanto a generar especulación, explorar la representación, y,

hacer cosas, la que habría permitido que tuviese lugar el «fenóme- presión de clientes desconocidos, Radic pudo desarrollar una llevarían a decir que en Chile sólo existían «tres obras de arquitec- por supuesto, arriesgar en cuantoa la ejecución de proyectos.
no chileno» que se mencionaba antes. De forma implícita por obra de gran calidad. De esa forma, podía tomar varios años tura». La vertiente teórica de Aravena, llegó a su punto más alto En la "realidad" (como es llamado el campo laboral al interior
tanto, el texto le decía a sus lectores (probablemente arquitectos reflexionando sobre un proyecto, tal como se puede apreciar con la publicación del libro Los hechos de la arquitectura," junto de las escuelas de arquitectura) la flexibilidad y el dinamismo
argentinos, en su mayoría) «si pudiéramos llegar y hacer las cosas en el caso de «La Habitación» de 1997," un notable refugio en
a Fernando Pérez y José Quintanilla. Este libro, que logra una son forzados -o, si se quiere, promovidos- por la competencia

de esa forma, podríamos ser nosotros los fenómenos». Chiloé (en el sur de Chile) para él y su esposa, en el cual una
amalgama entre las ideas de la Escuela de Valparaíso, Juan Borchers entre profesionales, encarnada y descarnada en los medios

De todas formas, pese a que es posible discutir su precisión y densa reflexión conceptual acerca de la idea de «refugio» es «teoría bajo políticas de marketing generalizado...
y Aldo Rossi, tiene por virtud la simplificación de una
alcance, la percepción de Solano Benítez citada por González amalgamada con una operación formal y técnica, que transforma críptica» (Valparaíso, Borchers), y su encaminamiento hacia una ...Extrañamente, un buen estudio profesional es un buen lugar
Montaner, no es tan errónea. Si bien en Chile no es tan simple y al proceso de construcción de la obra en una historia en sí teoría de la proyectación (Rossi). Posteriormente Aravena edita- para aprender y enseñar arquitectura; siempre ha sido así. Por
fácil llevar a cabo un proyecto, es efectivo que para la mayoría de misma, cargando de sentido al objeto incluso desde antes que esté ría dos libros más, basados en compilaciones de textos y obras de esta razón, el período de años inmediatos al egreso de los alum-

los arquitectos las preguntas se refieren al «cómo», mientras que terminado. Esa capacidad de describir un proyecto a partir de terceros El lugar de la arquitectura en el 2002, y Material de nos es tan relevante para su formación, o deformación. Quizás

la pregunta por el «si se debe o no» casi no se escucha en la una telaraña de reflexiones laterales -más que como una secuencia
arquitectura en cl 2003. Para esc entonces, su carrera profesional por esto también muchas escuelas de arquitectura han incorporado
nueva generación. lógica de decisiones- poniendo atención en aspectos no necesa- había despegado gracias a la construcción de la Facultad de las prácticas profesionales y las becas vinculadas a ellas cn su
El otro acierto de González Montaner está en los nombres: riamente ligados a las decisiones de proyecto, sino más bien a las Matemáticas en Santiago en el año 2000, obra que le valió el reco- malla de educación formal.»'*
Aravena, Klotz y Radic. Se trata de tres figuras singulares, difíci- ideas y referencias personales puestas en juego en la obra (como nocimiento de sus pares nacionales (Premio Bienal de Arquitec-
les de situar, y que, curiosamente, se encuentran en una misma si en cada proyecto fuese escribiendo un capítulo de una futura tura del año 2002 en Chile), e internacionales (segundo lugar en el En otra entrevista otorgada a una revista de estudiantes de la
generación, una misma ciudad y una misma escuela, desde donde «autobiografía»)," es la que le permitió a Smiljan Radic -cuando Premio Mics Van der Rohe, en el 2000). Tras el éxito de esa obra, Escuela de Santiago, Alejandro Aravena toca -con una postura aún
salen como embajadores hacia el mundo. Dos de ellos -Aravena y aún su producción era relativamente escueta- tener un scllo Aravena comenzó a dictar clases de forma intermitente en Har- más radical- un punto similar, a propósito de una pregunta
Radic- merecen una atención especial ya que, si bien sus carreras propio que lo diferenciara de sus pares generacionales, entrando vard, lugar donde se contactó con el arquitecto Pablo Allard y el acerca del contraste entre los años en los que él fue estudiante y

y enfoques ponen en crisis esta idea del arquitecto chileno como en la categoría de «arquitecto intelectual». Así, no resulta extraño
ingeniero Andrés Iacobelli, con quienes daría inicio a ELEMENTAL, la actualidad:
un homo faber, las vueltas de la vida y la profesión los han llevado que él, en conjunto con el matemático Manuel Corrada, haya la famosa oficina dedicada a la vivienda social, que ha convertido
a terminar tomando una postura radicalmente práctica, que no escrito «Chile, Tierra Neutra», uno de los textos introductorios a Aravena en un personaje reconocido internacionalmente. «...Había algo de querer demostrarle algo a alguien de forma
sólo relativiza sus posturas iniciales, sino que también pone del número 650 de la revista Casabella, publicado en noviembre Como puede verse, ambas carreras evidencian un fuerte énfasis generalizada. Eso no hay ahora, tal vez sea signo de los tiempos,
en duda a la profesión completa, en una operación que, de llegar de 1997, y dedicado por completo a la nueva arquitectura chilena teórico ce intelectual, ligado a un ejercicio docente que precede el más que problema de escuela. Difícil de entender porque se
a materializarse, confirmaría el «fenómeno chileno» al anular de los 9%0, donde además aparecían dos obras de Radic." reconocimiento profesional tanto a nivel nacional e internacional. cae en lo sociológico.

toda posible descendencia de esta generación dorada. Aravena por su parte, tras titularse en 1992, también continuó a Se trata de dos personajes que, como docentes, incubaron su Pero por otro lado, no está mal que sea así, porque viene re poca
estudios de posgrado en Venecia, donde fue alumno de Tafuri, carrera al interior de la Escuela de Santiago de forma previa a su competencia detrás de uno, y esto influye en la cantidad de pega
y pudo tomar contacto con Franceso Dal Co. Luego, comenzó a despegue profesional. En ambos casos, tanto los contactos realiza- que yo puedo esperar tener si sale gente apática. Porque hay algo
desarrollar una carrera docente en el área de la teoría arquitec- dos durante sus estudios en Venecia, como su propia labor do- muy extraño en bacer clases, ¿por qué yo querría preparar un
tónica, continuando la labor iniciada por Fernando Pérez en la cente, les permitieron desarrollar una línea de pensamiento y em- tipo que me puede quitar la pega? Entonces, no está mal que esta
Klotz (1965), Radic (1965) y Aravena (1967) se titularon en la Escuela de Santiago. Incluso antes de obtener su título, a fines
pezar a destacarse incluso antes de haber tenido obras construidas. generación sea tan apática, porque estoy corriendo carreras
Escuela de Arquitectura de la Universidad Católica de Santiago de los años ochenta cuando en Chile la palabra «teoría» remitía a Una biografía común que, a la luz de lo que se puede apreciar en ganadas en el ámbito profesional...»'>
(en adelante, «Escuela de Santiago»), entre fines de los años «poesía» y, por ende, a la Escuela de Valparaíso, Aravena participó la actualidad, ambos parecen empeñados en tornar irrepetible.
ochenta y comienzos de los noventa. Klotz inició inmediatamente -junto a Andrea Ortega y José Quintanilla- como uno de los trans- Si leemos con atención lo dicho tanto por Radic como por
una carrera profesional independiente, que lo distinguiría de criptores de los «Seminarios Amereida», dictados por Alberto Aravena, podemos apreciar una nueva coincidencia entre estos
sus pares generacionales con bastante rapidez. Aravena y Radic Cruz y Godofredo lommi -líderes de la Escuela de Valparaíso- dos connotados arquitectos. Ambos -con distintos grados de
recorrieron un camino más largo, más en sintonía con la idea del durante tres semestres consecutivos en la Escuela de Santiago. En intensidad- manifiestan un evidente desinterés por la labor
«arquitecto intelectual», lo que los convierte en casos dignos sus publicaciones iniciales, Aravena también da cuenta de una
Un ejemplo de este empeño, se puede observar en una docente en arquitectura. Radic lo menciona abiertamente por
de analizar con más detalle. fuerte admiración por Juan Borchers, otra figura mítica de la tco- entrevista a Smiljan Radic publicada recientemente por la revista medio de su hipótesis acerca de que las oficinas privadas de
e
Tras titularse como arquitecto en 1989, Smiljan Radic sigue un ría de la arquitectura chilena, quién desde los años cincuenta hasta Bomb. A propósito de una pregunta respecto de la relación arquitectura serían las encargadas de mover la disciplina en la
posgrado en estética en el Instituto de Arquitectura de Venecia, su muerte en el año 75, intentó generar una teoría de la proyec-
entre la docencia y su obra, Radic comentaba: actualidad, y lo corrobora al rechazar la mayor parte de las ofer-

9% N
tas de docencia en los últimos años. Aravena por su parte, plantea En un notable artículo publicado en 1985, la arquitecta confluencia de dos interlocutores: el arquitecto-operador, y el Portada revista ARQ Materia
n* 39, de agosto de
el problema de la enseñanza en términos de competencia laboral, argentina Marina Waisman describía la relación entre estas esferas arquitecto-crítico. Ambos roles, al desarrollarse en paralelo, no 1998, dedicada a la
«materia». La imagen
y ratifica su postura al suspender su trabajo docente hace un par como una cadena, cuyos componentes se influencian y retro-
pueden ser interpretados por la misma persona, ya que «la estre- de la portada corres-
de años, y focalizar su labor formadora por medio de las prácticas alimentan. Según Waisman, «el diseño no es una actividad cientí- cha alianza de la crítica con la operación conduce necesariamente
ponde a la obra Campo
profesionales ofrecidas por su oficina ELEMENTAL.
Esta última coincidencia no deja de ser paradójica. Si las dos
fica, sino que es de naturaleza ideológica»; así entendido, el
ejercicio práctico del diseño arquitectónico, estaría siempre supe-
a su compromiso, incluso en un caso extremo como cel presente;

estar juntos actores y espectadores es algo casi imposible».


Público en Culiprán de
Smiljan Radic, una e,
plaza pública en una
entrevistas hubiesen sido respondidas por arquitectos profesiona- ditado a una forma precisa de entender la realidad, un conjunto La confusión de los roles ha generado malentendidos endémicos localidad rural en las
afueras de Santiago,
les, aquellos que han dedicado su vida por completo al oficio y de ideas, valores o preferencias (que en el peor de los casos, puede con respecto a la labor de la crítica. Cada vez. que se instrumenta-
cuyas «esculturas» eran
al trabajo en el mundo real, no nos extrañaría tanto su opinión; homologarsc a los «gustos»); en definitiva, una teoría. Pero el liza para favorecer ciertas prácticas, o que se traduce en Juicios sin unas esferas de barro
construidas en base
pero en los casos de Radic y Aravena la situación es distinta, pues «operador», al tener que vérselas con la realidad y poner a prueba el espesor histórico y cultural necesario, la crítica se desvirtúa a una ancestral técnica
ambos califican dentro de lo que podríamos llamar «arquitectos en la práctica aquel sistema de valores, tiene la capacidad de des- utilizada para construir
y pierde validez, pues su ejercicio irresponsable hace que se con-
hornos.
intelectuales», ambos desarrollaron la docencia mientras sus
carreras profesionales despegaban, ambos fucron constantemente

publicados en los medios de difusión académica, y ambos han


cubrir falencias, olvidos o imprecisiones en la teoría sobre la que
se funda su diseño. De ser así, y de lograr a través de la operación

arquitectónica un avance sobre la teoría, estará llevándola a su


funda con la mera «opinión», que cualquiera podría emitir.
El problema es que en el mundo contemporáneo, nos hemos
acostumbrado erróneamente a asociar al homo faber (en cual-
<a
establecido sus redes internacionales a partir de esa plataforma punto crítico, es decir, criticándola desde la práctica. quiera de sus variantes: operador, emprendedor, etc.) con la figura
universitaria. En otras palabras, ambos -y en ceso reside la princi- Pero desde fuera del ejercicio operativo del diseño, o sea, del «experto». Al convertir al «productor» en «experto», sc esta-
pal diferencia que tienen con Klotz- han sido los prototipos desde el estudio y la investigación académica, pueden a su vez, ser blece automáticamente una ligazón entre acción y pensamiento incluyó también a la producción crítica y teórica de aquel
de un modelo de arquitecto intelectual, capaz de dominar tanto la observadas las falencias, imprecisiones u omisiones de las momento. Así, la crítica pasó a formar parte del estigma de un
que no siempre es tan clara, ni mucho menos fructífera. Más aún,
teoría y la práctica, que la Escuela de Santiago ha intentado pro- prácticas. La sistematización, precisión y fundamentación de al colocar al productor en la posición de experto, le quitamos período olvidable, y se empezó a abogar por una arquitectura
mover como sello. Sin embargo el que los dos arquitectos -por ese proceso de estudio, conduce a la producción de una nueva
espacioa los verdaderos expertos, anulando el diálogo entre las que intentaba ser silenciosa, pero con obras de calidad. A partir
distintas razones- rechacen la docencia, no sólo viene a enturbiar teoría crítica, con lo cual se completa el círculo virtuoso que dos esferas. Sin darnos cuenta, nos hemos rendido ante la máxima de allí, propuestas teóricas y críticas sumamente lúcidas y consis-
esa cadena virtuosa que había logrado armar la Escuela de
permite empujar el avance de la disciplina de forma integral, en el populista de renegar de todo aquello que establece distancia con tentes como las de Waisman y muchos otros, quedaron rápida-

Santiago para la promoción de las nuevas generaciones, sino que cual todos los componentes actúan a la par y en conjunto. la realidad cotidiana; así, optamos por bajar las escalas de riguro- mente en el olvido. La máxima acerca de que la arquitectura debe

además pone de manifiesto un «estado de las cosas» que no Para que esto suceda -siguiendo a Waisman- la crítica debe sidades mínimas aceptables, permitiendo que accedieran al estrato seguir al «espíritu de la época», unida al miedo de ser parte de
es inusual en el mundo de la arquitectura contemporánea. En ese entenderse como una actividad íntimamente ligada a la historia. de expertos aquellos que un par de décadas atrás habrían sido ese estigma, hizo que una generación completa olvidara todos los

sentido, lo manifestado tanto por Radic y Aravena no sería La selección del material histórico supone una aproximación calificados como natves. A la inversa, las reflexiones profundas y avances de dos décadas de crítica, y actualizara sus posturas

relevante -ni preocupante- por el talante de quiénes lo dicen, sino crítica, desde un punto de vista informado y preciso. La crítica abstractas han ido desapareciendo del mapa discursivo contem- alineándolas con la de la generación más joven. Al menos en el
mas bien porque pone en evidencia una forma contemporánea de
por su parte, no puede desentenderse de la condición histórica poráneo, mientras ese mismo mapa se ha ido llenando con caso chileno, esta fue una de las formas por medio de las cuales el
entender la arquitectura que intenta romper los equilibrios entre del objeto de análisis, pues si lo hace corre el peligro de no debate y la crítica se fueron silenciando, hasta casi desaparecer
imágenes y slogans fáciles de consumir y comunicar.
las distintas capas que conforman la disciplina, inclinando la comprender adecuadamente el objeto de estudio, ya que la arqui- Las causas de este fenómeno son variadas, y van desde por completo. En su reemplazo, se exacerbó la figura del
balanza hacia el ámbito profesional por sobre la esfera intelectual, tectura, como hecho cultural, está indisolublemente atada a la el aumento en la oferta de escuelas de arquitectura (en el caso «productor» (antes conocido como arquitecto-operador), pues
en una batalla que si bien no es nueva en la historia de la arqui- historia. Según este argumento, la crítica, entendida como una chileno), hasta el impacto de las nuevas tecnologías de informa- independiente de la calidad de los discursos, lo más importante cra
tectura, presenta nuevos aspectos que la hacen totalmente distinta forma de hacer historia, operaría en paralelo al diseño, tomando ción, que facilitan el acceso al conocimiento diseminando los recuperar la calidad de las obras.
de querellas anteriores, y que amenazan con tener consecuencias de él el objeto de estudio, e influyéndolo a través de la problema- Sin embargo, tras más de una década de éxtasis de la práctica,
expertizajes. Más allá del análisis de estas causas (cuyo alcance se
nefastas para la disciplina. tización de sus productos. Por ende, el trabajo de la crítica no encuentra fuera del presente texto), hay una posible hipótesis que nos encontramos en un punto de inflexión que hace necesaria una

remitiría a la «corrección» del diseño (crítica operativa), sino a un si vale la pena considerar, pues afecta al núcleo del problema revisión de esta postura. Las nuevas tecnologías de producción de
análisis en clave histórica y cultural de las elecciones y operacio- que estamos presentando, y que se refiere a la ligazón que existe arquitectura (que permiten una velocidad inusitada para generar
Ud nes realizadas por quienes generan los objetos arquitectónicos. entre la arquitectura y el llamado «espíritu de la época». productos virtuales previos a la obra), los nuevos medios de difu-
Del argumento de Waisman se desprende una dialéctica base Cuando Marina Waisman escribía su artículo, a mediados sión de la arquitectura (que ponen en circulación mundial inme-
Si viviéramos en un ambiente gobernado de los 80, la arquitectura latinoamericana -y mundial pasaba por diata esas promesas de obras), y el silencio cómplice de la crítica,
por el ámbito profe- que dinamizaría el campo de conocimientos de la arquitectura:
sional, por las oficinas de arquitectura, la retroalimentación por una parte está cl arquitecto, operando en la realidad y uno de sus momentos más inestables. Diversos movimientos han terminado por generar un efecto de divinización del arqui-
o el «dinamismo» de la práctica (usando las palabras de Radic)
poniendo en crisis las teorías, y por otra, estaría cl crítico que, y corrientes cuestionaban los efectos de la arquitectura moderna, tecto productor-operador, que obviamente conduce al laissez faire

quedaría enteramente confiado a las preocupaciones e inves- evaluando la producción arquitectónica desde un punto de vista mientras una fuerte preocupación por lo local llevaba a muchos de la esfera práctica. Con el operador como divinidad, la arqui-
tigaciones personales de los arquitectos en ejercicio, o bien a las histórico, problematizaría la práctica y conduciría a la generación arquitectos a renegar del «espíritu de la época» y volver la tectura se ha visto afectada por una suerte de «síndrome de

presiones que el mercado les impone. De esta forma se rompe de nuevas teorías. mirada hacia la historia. Hasta el día de hoy, ese período ha sido Duchamp»: «si yo digo que esto es arquitectura, entonces lo es».
la dialéctica que conjuga los componentes que dinamizan Lo interesante de esta forma de entender la relación entre sumamente cuestionado por las generaciones posteriores, sobre Así se entiende que, tanto Radic como Aravena puedan decir
el campo de conocimientos de la arquitectura: práctica y crítica. crítica y práctica es que, como una relación dialéctica, exige de la todo por el tipo de obras que produjo. Esc cuestionamiento, tan libremente que las escuelas ya no son útiles: ¿Por qué alguien

92 923
ARQUITECTURA

Portada del libro Arquitectura reciente en Chile, las


-] los procesa, negocia con el cliente y luego produce resultados que Notas
lógicas del proyecto, editado en julio del 2000 por
ARQ ediciones. En la portada aparece una imagen
o_
-
le deben tanto a su propia capacidad, comoa la capacidad del
1. Entre las publicaciones recientes de números monográficos de arquitectura
de la fachada de la Facultad de Matemáticas, la primera e medio de permitirle hacer ciertas cosas. Dicho de otra forma, la chilena se destacan, por mencionar sólo algunos, los números de Arquine n" 52,
obra pública de Alejandro Aravena que recién se .- 2010, A+U n* 430, 2006:7, Arquitectura Viva n" 85, 2002, que se suman alas tres
inauguraba por ese entonces. libertad experimental de la que hablaba Radic no es tal, puesto
monografías que 2G ha editado sobre arquitectos chilenos: Mathias Klotz n* 26,
que esa libertad siempre está constreñida por las posibilidades de Smiljan Radic n* 44 y Cecilia Puga 0" 53.
Portada del libro Aproximaciones, de la arquitectura 2. A modo de ejemplo, vale mencionar las exposiciones colectivas «Chile, Territorio
al detalle, editado en diciembre del 2001 por la realidad. A diferencia de disciplinas basadas en la «oferta»
para la Arquitectura», desarrollada en la tienda Paro Chile de Nueva York en el
ARQ ediciones. El libro es un compilado de obras de
diferentes arquitectos que comparten una preocu-
(aquellas en que el operador no requiere de un encargo, como la 2009, «Nueva Arquitectura Chilena» realizada en el Colegio de Arquitectos de
Serbia en Belgrado en el 2007, y «Espacio Comemporáneo en Chile» llevada a cabo
pación por los detalles de arquitectura. Curiosamente, poesía), la arquitectura en su esfera profesional siempre depende en el 2002 en la Unión de Arquitectos de Cataluña en Barcelona. Además debe
en la portada del libro aparece la imagen widimen-
de una «demanda», que debe ser satisfecha por sus productos. considerarse el hecho que Chile ha presentado pabellones propios en las tres últimas
sional de «r3» un proyecto de Smiljan Radic que hasta
ediciones de la Bienal de Venecia (X, 2006; XI, 2008; XIL, 2010), agregando también
la fecha no ba sido construido. Desde este punto de vista, los resultados obtenidos por la esfera
los montajes individuales que para la misma bienal realizaron Elemental en el 2008,
profesional son siempre negociaciones, en los que el presupuesto, y Smiljan RKadic y PvE en el 2010.
-- la cultura, la propia apertura del cliente y los medios de produc-
3. Fernando Pérez, «<Poéticas del Caso: Chile de la Palabra a la Materia». En revista

Arquitectura Veva 1" 85, julio-agosto de 2002, p. 28.


ción, son tan o más determinantes que el talento del operador. 4. Jorge Francisco Liernur, «Portales del Laberinto. Comentarios sobre la Arquitec-
tura en Chile, 1977-2007», en: AA.V.; Portales del 1aberinto, Arquitectura y Ciudad
Esto no sería problemático si es que el estadio cultural de la
en Chile, 1977-2009 (curador ]. E. Liernur), Santiago, Ed. UNAB Co-op, 2009, p. 58.

" media fuese alto, y los medios de producción estuvieran a dispo- 5. Miquel Adrií, «Editorial». En revista Arquine n* 52, Nueva Arquitectura Chilena,
verano 2010.
sición de todos. En un mundo así, los resultados de la negociación
6. CAL: Guías de Arquitectura Latinoamericana: Santiago de Chile. Investigación y
debería ir a una escuela a aprender cómo hacer arquitectura, -entre una espesa capa de pesimismo una predilección por las entre el operador y su cliente serían siempre productos virtuosos; textos Francisco Díaz. P.; Editor Berto González Montaner, Buenos Aires, Diario

si el «cómo» ya no se define en una escuela, sino en una oficina de Arquitectura de Clarín, 2008, p. 5.
arquitecturas rupturistas, no porque ellas fuesen novedosas, sino pero lamentablemente no vivimos en ese mundo. 7. Ibid
privada? porque atentaban contra el corazón mismo de la representación En consecuencia, si la esfera académica se dedica a perseguir los 8. Smiljan Radic Clarke, «Alrededores», en revista ARQ n" 39 «Materia», Santiago,
1998, pp. 28-33.
arquitectónica y sembraban una duda razonable sobre ella. productos de la esfera práctica, llevándolos a la enseñanza sin 9. En efecto, Radic describe su admiración por Rossi, y su idea de una arquitectura
La duda -que es una forma silenciosa de crítica- colaboraría en el haberlos digerido con una reflexión crítica, el desarrollo discipli- autobiográfica.
v lento proceso de desmantelamiento de la arquitectura, ahogando nar se estanca. Si la esfera profesional siente que las únicas exi-
10. La Biblioteca de la Escuela de Arquitectura, desarrollado junto a Teodoro
Fernández y Cecilia Puga, y un pequeño edificio de oficinas en Chiloé, realizado de
a los arquitectos o forzándolos a inventar algo nuevo, como una
gencias a las que debe responder provienen de sus clientes, el forma independiente.
En una entrevista realizada por el equipo de la revista Materiales, escalera cuyos peldaños desaparecen apenas avanzamos, y que dinamismo forzado del que hablaba Radic sólo sería un problema
11. Alejandro Aravena, Del magno templo griego, Santiago, 1995.
12. Alejandro Aravena, «Van der Laan en 'lierra del Fuego», revista ARQ n" 41
publicada en 1983,'* Manfredo Tafuri recordaba que «Dios hay uno nos obliga a estar constantemente subiendo para no cacr. de mercado; así, sería el mercado (por si sólo) el que determinaría «Naturaleza», Santiago, 1999. En dicho artículo, Aravena sólo menciona a los auto-
solo», en referencia a Miguel Ángel y su influencia en el resto de Desde esc punto de vista, al que ciertamente estuvieron expues- el curso de la disciplina. No es difícil encontrar evidencias de esto res de sólo dos de las tres obras, sin indicar los nombres de las obras: Juan Borchers,

y los sacerdotes Martín Correa y Gabriel Guarda. De los apuntes de las clases del
los artistas. Al mencionar esta frase, Tafuri nos hacía ver que el pro- tos tanto Radic como Aravena durante su paso por Venecia, en la arquitectura actual. La competencia entre oficinas privadas curso «Introducción a la Arquitectura» que Aravena dictó en la Escuela de Arquitec-

pio acto de divinizar una figura, trae implícita nuestra propia in- resulta extraño que ambos se desentiendan de la crítica al renegar ha conducido a una profusión del «efectismo», en la que el objeto tura de la Universidad Católica de Santiago (Escuela de Santiago) en 1998, fue posi-
ble recuperar los nombres de las tres obras: Edificio «Copelec» en Chillán, obra de
ferioridad. Y si bien los contextos son distintos (no debemos olvi- de su espacio de operación: la academia. Más aún, es curioso que
arquitectónico basa su relevancia en el grado de «interés» 1964 realizada por Borchers, Suárez. y Bermejo; La Iglesia del Monasterio Bene-
dar que Tafuri se autodefinía como historiador), es posible mirar ambos coincidan en negar a las nuevas generaciones las oportu- dictino en Sannago, obra de 19%5 realizada por los sacerdotes Guarda y Correa; la
(económico o mediático) que genera. tercera sería la «Ciudad Abierta en Ritoque», realizada por la Escuela de Valparaíso
el presente desde ese lente, y caer en cuenta del peligro implícito nidades que ellos mismos tuvieron. En defensa de ambas figuras Asumiendo como un hecho esta realidad, y conscientes de que desde 1972 en adelante.
tanto en las propuestas tácitas de Radic que la oficina privada vale la pena recordar que la idea de Radic no es tan antojadiza, 13. Fernando Pérez; Alejandro Aravena; José Quintanilla, 7.0s bechos de la
no podemos cambiar a los operadores ni mucho menos censurar
Arquitectura, Santiago, Ediciones ARQ, 1999.
es el mejor lugar para formar a alguien como arquitecto- o de
pues es un hecho que la academia ha olvidado su rol crítico, y los nuevos medios, la tarea de balancear el desequilibrio actual 14. «Entrevista a Smiljan Radic», revista 80M8 n" 106, invierno 2009.
Aravena que el único lugar donde ces posible aprender de él es su efectivamente se ha abocado a perseguir los temas producidos en La entrevista completa puede ser revisada on-line en el sitio: btp://bombsite.com/
recae en quienes hasta ahora hemos sido espectadores. Por su
issues/106/articles/3247.
propia oficina-. El sistema de trabajo jerárquico que opera en casi las oficinas privadas de arquitectura.
capacidad de proponer temas que el mercado tiende a evadir, 15. «Entrevista a Alejandro Aravena», revista Cientodiez n" 1, 2004. La entrevista
todos los estudios de arquitectura, conducea la divinización del El encandilamiento con las prácticas va de la mano con una completa puede ser revisada on-line en el sitio: bitp://www.cientodiez.d/revistas/
y que no son rentables para los medios, la academia tiene la vol01/entrevista_aravena.himl. (Nota de los editores: «cantidad de pega» o «quitar
Jefe que finalmente es quién paga- y con ello a la obvia inferiori- evidente baja en la producción de conocimientos por parte de la responsabilidad de señalar -por medio de la crítica- las fisuras, la pega» pueden interpretarse como «cantidad de trabajo» o «quitar trabajo».)
dad de los empleados. Si bien ese sistema puede utilizarse con fi- academia. Evitando y evadiendo la reflexión crítica sobre las prác- olvidos y omisiones tanto de la esfera profesional como de la
16. Marina Waisman, «Alienación e integración en el traspaso de ideologías», en
revista Summa n" 212, Buenos Aires, mayo de 1985.
nes educativos, lo que finalmente se forma en cse esquema son se-
ticas, parece más fácil estar informado sobre lo que sucede «afue- esfera mediática. Por lo tanto, si seguimos descansando en la 17. Manfredo Tafuri, Teorías e Historia de la Arquitectura, Madrid, Editorial
cuaces o continuadores, pero difícilmente profesionales autónomos.
ra», para luego transmitirlo directamente a las nuevas generaciones. consoladora frase «así son los tiempos actuales» (que nos hace Celeste, 1997, p. 255.
18. Entrevista colectiva realizada en Buenos Aires en 1981, por el grupo del
El propio Tafuri miraba compasivamente a los continuadores Como mencionábamos anteriormente, el peligro de esta pereza creer que el «dejarnos llevar» nos conectaría con el mítico Programa de Estudios Y listóricos de la Construcción del Habitar, y luego publicada
de un cierto lenguaje, prefiriendo (de entre las pocas alternativas académica reside en la divinización del arquitecto-operador. Una en la revista Materiales en marzo de 1983, según se indica en el sitio
«espíntu del tiempo»), sólo estaremos siendo cómplices, por butp://07000.bazaramericano.com/arquitectura/materiales/entrevista_tafuri.bim
disponibles) sólo a quienes tenían la capacidad y la voluntad de vez que la academia se niegaa reflexionar críticamente, y por medio del silencio, de la desaparición de la crítica. Cuando eso desde el cual fue consultada por el autor de este artículo en septembre y
ende a producir nuevo conocimiento, el desarrollo de la disciplina octubre del 2010.
romper una censura, es decir, de cambiar las reglas del juego. suceda, y los arquitectos-operadores no tengan más constriccio-
Consciente de que la arquitectura es sólo una forma de conoci- queda por completo confiado al operador quién, por más que en u nes que las que provengan de sus propios encargos, habremos

miento inventada por el hombre (por lo tanto prescindible, sus discursos haga parecer que sí lo hace, en la realidad no define
completado -tal como anticipara Tafuri hace 40 años- la tarea de
instrumentalizable y no trascendental), Tafuri dejaba entrever sus propios problemas y temáticas. El operador recibe encargos,
entregar nuestra disciplina al mercado.
E
cali, 95
mts
Cantidad de ejemplares: 500
Tipografía: Garamond Stempel y Futura
Interno: papel obra de 120g
Tapas: cartulina ecológica de 2208

Diseño gráfico: Gustavo Pedroza


Preimpresión: NF Gráfica SRL.
Impresión: Instituto Salesiano de Artes Gráficas

Registro de la propiedad intelectual n" 910.348


Hecho el depósito que marca la ley n* 11.723

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