LIBRES DE LA ANSIEDAD.

-Padre, levanto mi clamor hacia ti y te pido que me ayudes a controlar los pensamientos,
incluso cuando realizo esta oración. Establezco tu paz sobrenatural sobre mi mente y declaro
que todo pensamiento obsesivo se consume por el poder de la sangre del cordero. Libero mi
mente de quedarse estancada en pensamientos de preocupación y temor. Declaro el viento
fresco del Espíritu Santo soplando sobre cada pensamiento. Padre, tú me has dado autoridad
y control sobre la dimensión de mi mente. Mis pensamientos me pertenecen y ahora mismo
tomo control de ellos. Dirijo mis ideas hacia la revelación de la palabra, enfoco mis
pensamientos en tus bendiciones, en tus milagros y en tu paz sobrenatural.
-Declaro que mi vida está bajo tu control total porque me he entregado de corazón a tus
caminos. Por las mañanas declarare tu amor y tu misericordia y por las noches seré visitado
por tu cálida presencia. Padre, levanto esta oración entregándote esta área de mi mente porque
sin tu ayuda no puedo lograrlo.
-Declaro que Dios me ha dado total dominio sobre mis pensamientos. Es con su poder que
voy a ganar esta batalla por el territorio de mi mente. Ahora mismo es el Espíritu Santo el
que conecta mi mente con la mente del Mesías. Estoy capacitado y soy capaz de gobernar
sobre mis pensamientos. Renuncio a toda idea que este establecida en mi mente que me lleve
a creer que no puedo y que no tengo dominio.
-Declaro paz sobrenatural sobre mi mente. Ato todo pensamiento tormentoso que me haga
entrar en estados de continua ansiedad. Rompo con todo pensamiento limitante que me haga
dudar de la bondad y la misericordia de Dios. En el nombre de Jesús, renuncio a pensamientos
donde desarrollo escenarios trágicos y dramáticos. Rompo con todo desequilibrio emocional.
Entro en un nuevo tiempo de paz mental y aprendo a ejercer dominio sobre mi propia mente.
-No tengo temor de las amenazas externas porque habito bajo la cobertura del altísimo. No
tengo temor de las malas noticias porque tengo la convicción de que tu Espíritu Santo es mi
ayuda en el día de prueba. No tengo temor al fracaso porque estoy convencido que todo ayuda
para bien y bendición. No tengo temor al enemigo ni a sus demonios porque la sangre de
Jesús esta sobre mi vida y mi casa. No tengo temor de la enfermedad porque estoy convencido
de que para mi vida hay sanidad sobrenatural por el sacrificio de Jesús.
-Ahora mismo, en el nombre de Jesús, quito todo manto demoniaco que pretenda hacerme
entrar en desequilibrio mental y emocional. Le doy la orden a todo demonio que haya
influenciado la dimensión de mi mente que libere mis pensamientos, en el nombre de Jesús.
Me levanto en guerra contra toda estrategia del enemigo contra mis pensamientos. Renuncio
a la influencia de la brujería y las tinieblas en la dimensión de mi mente. Destruyo toda
impartición de maldad que haya desarrollado pensamientos de muerte en mi cabeza. Ato todo
espíritu de incredulidad que me susurre al oído que la oración no es efectiva para destruir el
poder de las tinieblas.
-En el nombre de Jesús, rompo con la influencia que ejercen las cadenas del enemigo
conectadas a mi mente. Le doy la orden de desalojo a toda entidad de las tinieblas que se
haya enseñoreado de mis pensamientos. Hecho fuera todo demonio de menor y mayor rango
que haya creado estructuras de malos pensamientos en mi mente. Padre, en el nombre de
Jesús, mi mente funciona correctamente, mis pensamientos no pueden ser usados por el
enemigo para hacerme entrar en estados de ansiedad. Le declaro al enemigo que mi mente es
territorio del reino de los cielos. Se rompe ahora mismo, todo virus del enemigo que este
infectando mi mente. Se rompe todo espejismo que me haga creer que algo terrible va a
suceder en mi futuro.
-Renuncio en el nombre de Jesús, a toda preocupación y miedo intenso a que cosas malas
sucedan en mi día. Dios me ha llamado a vivir por fe y entiendo que mi presente y mi futuro
se encuentran en sus manos. Padre, toma tú el control de mi ansiedad y dame las herramientas
necesarias para poder controlarla. Declaro que creceré en sabiduría y en conocimiento.
Pondré mi enfoque en todo lo que es verdadero, en todo lo que es noble y en todo lo correcto.
Mis pensamientos se enfocan en la bendición que tienes preparada para mí y para mi casa.
-Te pido perdón Espíritu Santo si en alguna ocasión he hablado mal de mi mismo. Me
arrepiento de todo corazón de pensamientos donde pongo mi enfoque en las cosas que me
hacen falta. Perdóname por pensar mal de mí mismo. Corrige todo pensamiento donde me
juzgo fuertemente por mis errores del pasado y del presente. Dios, tu mirada es la de un padre
amoroso, que me cubre y me cuida. Yo no soy mis defectos, yo no soy mis errores, yo no soy
lo que otros puedan pensar de mí. La definición de mí mismo la encuentro en tu palabra.
-Yo bendigo mi propia vida, declarando que no camino en temor, porque el Dios de lo
sobrenatural me fortalece y me da valentía para enfrentar el futuro y el presente. Padre, tú me
sostienes con la diestra de tu justicia.
-Yo tengo un padre celestial que opera grandes milagros para mí y para mi familia en esta
temporada. La crisis puede tocar mi nación y mi propia vida, pero yo estaré confiado como
un cachorro de león y veré con mis propios ojos como la prosperidad me alcanza.
-Yo vivo de forma extraordinaria porque todos los días puedo ver su operación poderosa en
la vida de mi familia, finanzas y ministerio. Ahora mismo yo me lleno de esperanza porque
Dios ha derramado de su amor en mi corazón por medio del Espíritu Santo.
-Hoy es un día cargado de bendición. Hoy es un día donde la nueva misericordia me cubre.
Hoy es un día donde todos mis planes y propósitos según tu palabra tendrán éxito. Yo soy un
hombre prospero. Yo soy un hombre bendecido. Yo soy un hombre poderoso en Dios para
destruir toda obra del enemigo. En mi mente habitan los pensamientos de la palabra que me
dirigen hacia la bendición. Yo hablo más de tu palabra que de problemas y aflicciones.
-Yo he destruido con el poder de la sangre de Jesús todo obstáculo de las tinieblas. En este
día tengo victoria sobre toda estrategia del enemigo. El ejercito del enemigo está sometido
bajo la planta de mis pies porque yo soy poderoso en Dios y se utilizar su palabra en medio
de la guerra.
-Yo soy hechura suya, creado a imagen y semejanza del padre de todas las cosas. Para esta
temporada Dios ha destinado mi nacimiento y mi levantamiento para realizar grandes obras
y concretar un propósito grande. Desde antes de la fundación del mundo Dios preparo mis
días, y en ellos estableció bendición y avance para mí y para mi ministerio.
-Espíritu Santo en este día yo recibo restitución. En este día yo recibo el perdón de todos mis
pecados porque tú me llamaste a vivir en santidad. En este día yo recibo sanidad completa de
toda herida del pasado. Este es el día que tu haz creado para depositar en mi vida una gran
unción sobrenatural. Jesús, tu redención en mi vida es una obra completa que tú mismo
espíritu va perfeccionando. Por eso declaro que todo pecado en mi vida esta derrotado.
Declaro que toda obra de muerte en la vida de mi familia esta derrotada. Yo soy un hombre
valioso para el reino de los cielos y camino bajo la llenura del Espíritu Santo.
-Declaro en este día que soy capaz de lograr todas aquellas cosas que me proponga. Yo
camino confiado en tus promesas porque sé que tu palabra no falla. Yo camino lleno de
esperanza porque reconozco mi necesidad de ti y de tu presencia. Yo disfruto de tu presencia
cuando me sumerjo en oración, no creo ninguna mentira del enemigo que me haga pensar
que tu presencia está lejos de mi vida. La presencia de Dios guía mi lectura de la palabra y
en ella encuentro manantiales de vida.
-Dios formara mi carácter para que pueda vencer todo reto que la vida ponga en mi camino.
Mi Padre celestial me dará respuestas grandes y llenará mis graneros con abundancia. Yo
tengo dominio propio y no existe reto que yo no pueda vencer en su nombre.
-Yo soy exitoso, victorioso, paciente, responsable, cuidadoso, ordenado. Yo soy un hombre
de Dios, lleno de su presencia, abundante en obras de justicia. Yo soy una persona libre
totalmente, las mejores ideas están en mi mente, la mejor bendición viene para mi casa y para
mi familia. Yo conozco al Espíritu Santo y todavía conoceré más de su profundidad. Yo soy
una persona prospera. Yo estoy bendecido desde la cabeza hasta los pies. Mi presente y mi
pasado tienen una carga asegurada de bendición.
-Yo no soy mis errores. Yo no soy mi pasado. Yo no soy lo que las personas dicen que soy.
Mi valor no lo definen mis pecados. Mi valor no lo define el mundo. Mi autoestima no la
define mi familia. Yo no culpabilizo a las demás personas de las cosas que me suceden. Yo
soy responsable de mí mismo y de mis emociones. Yo soy dueño de mi propia vida. Yo soy
dueño de mis propios pensamientos. Yo soy responsable de mis decisiones. No existe entidad
espiritual o ser humano que pueda ejercer dominio sobre mi vida porque Dios me ha liberado
de forma completa.