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Mercadotecnia Directa

La vaca purpura

GRUPO: 4RM4

Prof: Ruy Díaz Ma del Sagrario

Alumna: Romero Rodríguez Alondra Lizbeth

23/03/2023
En el libro de Godin se comienza argumentando que, si las empresas
tradicionalmente incorporan las cuatro “pes” del marketing, actualmente estas no
son suficientes. Por ello el autor crea el concepto de la vaca púrpura.
La vaca púrpura resulta un libro interesante, salpicado de ejemplos y anécdotas
por las que Godin nos lleva para transmitirnos ciertos conceptos sobre la forma de
hacer negocios hoy día. Trata sobre cómo aplicar la diferenciación del producto o
servicio de una empresa para hacerlo destacar sobre la competencia con una
oferta innovadora.
Actualmente el mundo está cambiando de una manera un tanto vertiginosa y por
ende las reglas del marketing igual. Las viejas prácticas que todos conocemos han
dejado de funcionar, pues estás han saturado los medios de comunicación y a la
mente del consumidor. Por ello para que los productos se vuelvan invisibles entre
tantas opciones que hay en el mercado, estos se tienen que hacer notar, hacer la
diferencia, y lograr que se vuelva una Vaca Púrpura.
Las vacas, después de ver una, o dos, o diez, son aburridas. Pero una vaca
púrpura es algo que llama la atención, que obliga a pararse, mirar e incluso
maravillarse. Es algo increíble, emocionante, diferente, algo que nunca se olvida.
Y lo más importante, es inherente, es parte del producto desde su nacimiento o no
lo es.
El gurú del marketing Seth Godin nos brinda en este texto su visión y opiniones
particulares sobre la función del marketing en las organizaciones y nos abre los
ojos a una nueva y sobresaliente mentalidad que hará que nuestros productos y
planteamientos de mercado dejen de ser perfectos para convertirse en diferentes y
transformadores.
¿Qué es una vaca púrpura?
Una vaca purpura es la persona capaz de convertir un producto corriente en único.
La analogía es que, si no estamos acostumbrados a ver vacas en un viaje por el
campo, nos llaman la atención todas, pero al cabo de un tiempo ya no tendremos
el mismo interés, pues son idénticas entre sí.
En cambio, si en ese mismo viaje vemos una vaca que resalta entre las demás el
impacto será mayor y esta quedará en nuestra memoria.
¿Cómo ser una vaca púrpura?
Ser una vaca púrpura consiste en superar el modelo empresarial tradicional. El
mensaje que nos da el autor es sencillo: no se trata de hacer las cosas bien, pues
esto es predecible y aburrido, sino en ser distintos.
¿Por qué hay tan pocas vacas púrpuras?
La respuesta es sencilla: ser diferente provoca miedo. Lo extraordinario no es
agradable para todos. La sociedad está acostumbrada a un orden establecido y
todo lo que se sale de la norma llama la atención. Por ese motivo, las vacas
púrpuras tienen éxito frente a la uniformidad.
En el competitivo mercado actual, no destacar es lo mismo que ser invisible. No es
fácil dar con la vaca púrpura y no se puede saber si funcionará hasta lanzarse a
por ella. Puede no ser lo suficientemente extraordinaria, pero para Godin el hecho
de no saber si funcionará es lo que hace que funcione.
¿Qué ganan las vacas?
Actualmente, existe menor resistencia a cambiar un producto si este no satisface
sus necesidades. Y, al mismo tiempo, las organizaciones tienden a arriesgarse
menos, lo que tiene como consecuencia que no destacan sobre las demás. Por
ello, lo extraordinario tiene cada vez mayores beneficios.
Descubrir una vaca púrpura es muy rentable, aunque su vida no sea infinita. Por
eso, se le debe extraer todo el valor a una buena idea, expandirla y obtener
beneficios durante tanto tiempo como sea posible.
No existe una fórmula para dar con la vaca púrpura, pero sí un proceso para
explorar los límites del negocio y dar con aquellos en los que se puede encontrar
una rentabilidad. Para ello, hay que analizar la empresa, su entorno y estar
dispuesto a innovar en algún aspecto
En su obra Godin comienza argumentando que, si bien las empresas que
tradicionalmente han incorporado las clásicas “p” (precio, producto…) del
marketing a su manera de proceder tenían más probabilidades de triunfar, en la
actualidad estas “p” son insuficientes para conseguir el éxito.

Es por ello que el autor crea y desarrolla el concepto de vaca púrpura. ¿Qué es
una vaca púrpura? Es convertir un acto corriente en un acto único. La lógica que
aplica es que, si no estamos acostumbrados a ver vacas, en un día de viaje por el
campo nos pueden llamar la atención las primeras que veamos, pero después de
un rato ya no les prestaremos mayor atención, pues al final serán todas iguales.

En cambio, si en ese mismo viaje, entre todas esas vacas del mismo color nos
topamos con una de color púrpura, el impacto será mucho más significativo, y su
pervivencia en nuestra memoria considerablemente mayor. La vaca púrpura es la
diferenciación frente a los demás.
Para Godin el marketing tradicional donde la publicidad de masas era el modelo
más efectivo ha dejado de tener vigencia. Los consumidores están demasiado
ocupados para atender al bombardeo de anuncios, pero por otro lado necesitan
dar con productos y servicios que resuelvan sus problemas. Y ahí es donde entrar
las vacas púrpuras.
La nueva p del marketing según seth godin: El marketing tradicional se basa en las
llamadas cuatro Ps: producto, precio, promoción y ubicación.
Pero en el mundo de hoy esto no es suficiente.
La competencia es feroz y las personas están saturadas y no prestan atención.
No tienes más que pararte a pensar cuántos impactos publicitarios recibes al día.
Por todas partes y a todas horas.
Godin no asegura que ser extraordinario y hacer las cosas de forma diferente
conlleve sin duda al éxito. Es, por supuesto, arriesgado.
Pero ejecutar una estrategia en la que se asumen riesgos es más seguro que
evitarlos por completo.
El modelo del marketing tradicional está agotado. Y las empresas que no se
atrevan a asumir riesgos y se enfrenten al cambio, estarán, en realidad, en peligro.
Muchas empresas tampoco se enfrentan a este cambio por temor a las críticas.
Pero, en realidad, aunque haya críticas, hablarán de la marca. Y eso no es malo.
Hoy en día, defiende el autor, la gente está más inquieta que nunca y hay menos
resistencias a cambiar de producto o servicio si el que recibe no le satisface. En
paralelo, las organizaciones se arriesgan menos, buscan lo seguro, lo correcto,
pero no destacan. Es por eso que lo extraordinario tiene cada vez mayores
beneficios.
Descubrir una vaca púrpura es muy rentable, aunque su vida media no es infinita.
Por ello hay que sacarle todo el valor a una buena idea, expandirla y obtener
beneficios el máximo tiempo posible. También es importante crear el entorno que
favorezca la aparición de nuevas vacas en el futuro.
En resumen, la idea principal del libro de Seth Godin es que para destacar en el
mercado actual es necesario algo extraordinario. Ya hay multitud de productos
correctos, buenos e incluso muy buenos, pero la vaca púrpura es otra cosa.
Innovación y diferenciación para dar con algo que realmente llame la atención. Y
una vez conseguido, atacar los sectores de consumidores que se caracterizan por
la innovación y ser early adopters, en lugar de tratar de llegar rápidamente al gran
público.

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