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Podemos leer 1 Corintios 6:18.

Y allí corroboramos que la finalidad del noviazgo es el


matrimonio y los novios cristianos deben llegar puros, deben guardar su castidad hasta
el matrimonio. Guardarse puro hasta el matrimonio es la voluntad de Dios.
Nuestro cuerpo es un templo de Dios, y por eso debemos cuidarlo, no caer en excesos,
para esta predica recomendamos leer Corintios 6:19.
Los novios cristianos deben mantener su fe en Dios, no deben decaer. En Efesios 2:10
señalan que eres importante para Dios. Tienes mucho valor para él.
Si tienes dudas acerca de si has escogido a la persona adecuada para iniciar un
noviazgo lee Romanos 8:14. El espíritu santo nos orienta y nos permitirá escoger a la
persona correcta.
Al leer Éxodo 20:3-5 encontramos que Dios está primero, el amor de Dios debe ser
mayor que el amor a la pareja. El noviazgo cristiano se debe basar en la palabra de
Dios. Los novios cristianos deben aprender a trabajar y compartir juntos las actividades
de la vida diaria, sin perder de vista que lo más importante es Dios.
No apresurar en la elección de pareja
Los novios cristianos no deben apresurarse al hacer la elección de su pareja, deben
escoger la persona correcta, para ello es necesario establecer que esperan entre si los
novios cristianos y que esperan del matrimonio. Si tienen dudas buscar un mentor, es
decir, alguien con mayor conocimiento y mayor autoridad que los oriente.
El noviazgo cristiano es un periodo de conocimiento mutuo conocer las virtudes y los
defectos, es comunicarse con sinceridad y respeto, pues la base de toda relación se
fundamenta en el respeto.
Se debe tener claro que Los noviazgos no son para pasar el tiempo; la meta del
noviazgo es el matrimonio. Por eso es necesario Conocer a la familia de la novia o
novia, y mantener una relación armoniosa con ellos, además, trabajar para ahorrar
dinero y establecer un acuerdo en cuanto a los gastos de la familia.
Las prédicas bíblicas establecen directrices que deben seguirse en el noviazgo
cristiano. Aunque también pueden ser prédicas sobre noviazgo y sexualidad.

¿Cuál es la Diferencia entre Amar y Estar enamorado?


En el siglo XXI el índice de divorcios del mundo es más alto de lo que nunca lo ha sido
en la historia de la humanidad, siendo hasta más del 50% la tasa de divorcios en varios
países, aunque el motivo es, la mayor parte del tiempo, justificable, no deja de ser
culpa de la pareja.
Existen muchos motivos por los que suceden estos divorcios, pero se podría decir que
esto radica en gran parte en que la personas no saben cuál es la diferencia entre amar
y estar enamorado.
Puede que estos términos sean similares y se refieran al mismo tema, tienen un
significado completamente distinto, y aunque las personas le resten importancia para
conocer la diferencia, lo cierto es que es un punto muy importante para evitar un
divorcio, el cual es considerado como un pecado en la Biblia (Proverbios 6:19).
Un enamoramiento puede sentirse por cualquier persona, y radica en una
característica específica de la persona, de igual forma este sentimiento puede ser algo
pasajero o culminar en una obsesión.
Por su parte, para amar alguien una persona tiene que pasar un largo tiempo con otra
persona e intimar con ella, e incluso no está garantizado que se sienta amor ya que
esto sucede de una forma muy espontánea. 
¿Cómo saber cuando alguien está enamorado?
Tal vez un enamoramiento es mucho más complicado que una simple atracción, pero
aún así, sigue siendo muy fácil identificarlo, una persona enamorada suele:
Pensar mucho en esa persona
Cuando una persona siente un enamoramiento, su imagen le viene constantemente a
su cabeza, aunque no lo desee.
Claro que estas fantasías nunca se deben repasar ya que desear a una mujer sin su
consentimiento es una forma de codicia, tachada como un pecado en la biblia (Mateo
5:27-28).
Pérdida del ritmo
Ligado al punto anterior, si se piensa mucho en una persona, entonces puede llegar
hasta el punto de perder actividades que se tenían programadas e intentar encuentros
con esa persona.
Esto no solo es un indicativo de enamoramiento, sino también debería ser una llamada
de atención para atender mejor sus responsabilidades.
Hablar mucho sobre esa persona
No tiene nada que ver si se es una persona tímida o no, cuando una persona gusta de
alguien simplemente busca una oportunidad para poder sacarla en una conversación
de repente, incluso si no tiene nada que ver con lo que se está hablando.
Interesarse más por su vida
Al sentir una fuerte atracción por alguien, se busca aprender más acerca de cosas
sobre su personalidad, sus gustos, su pasado, pequeños gestos que esta persona
pueda tener, e incluso le pregunta a sus cercanos sobre él/ella.
Cabe aclarar, esto puede ser algo tanto positivo como negativo dependiendo del
contexto en el que se encuentre.
Si bien un enamoramiento es síntoma que se busca tener una relación con esta
persona, esto no es algo completamente positivo ya que muchas veces esto hace que
fuercen las cosas y no consideren si esta persona es la pareja que Dios escogió para
él/ella.
En el peor de los casos posibles, el enamoramiento de una persona podría terminar en
un comportamiento obsesivo que resulte peligroso para todos los involucrados.

¿Cómo saber cuando alguien ama a otra persona?


El amor es el sentimiento más fuerte y más puro que puede manifestarse en la Tierra,
ya que esta es una de las formas que toma la justicia de Dios (Corintio 13:4-7), no
existe una guía universal para poder saber si una persona siente amor por otra, pero
algo que pueden hacer es:
Analizar la situación
Para determinar si se ama a la pareja con la que se está, lo mejor será que la misma
persona analice sus reacciones.
Cosas básicas como usar todo el tiempo libre para estar juntos, preocuparse
demasiado por la otra persona, incluirla siempre en sus oraciones o no encontrarle
ningún defecto pueden significar más de lo que se cree.
Autointerrogatorios
Esto quiere decir que un método para saber la razón de estos sentimientos es
recordarse a sí mismo, momentos clave junto a su pareja y pensar en posibles
situaciones futuras, esto sirve para poder aclararse de  las dudas que se sienten.
Sentir a Dios
La persona que nunca ha sentido el amor, nunca ha conocido verdaderamente a Dios
(1 Juan 4:8-21), por lo que si hay problemas para identificar los sentimientos de una
persona lo mejor que se puede hacer es entablar una relación más estrecha con Dios.
Pedir ayuda
Si una persona siente atracción por otra y no logra identificar si es amor, puede pedir
consejo a un pastor de la Iglesia a la que asiste para que le de iluminación, o también
hablar con alguien de confianza como sus padres que conocen todos sus gestos y
sabrán lo que sienten.
Cabe recalcar, un sentimiento de amor solo debería darse con una pareja que busca
tener un romance, esto debido a que el llamado «amor a primera vista» que retratan
en las películas no existe, ya que este es un sentimiento que requiere de tiempo y
mucha dedicación.
¿Por qué es importante saber cuál es la diferencia entre amar y estar enamorado?
Otra razón por la cual la tasa de divorcio se ha disparado en el siglo XXI como nunca
antes lo había hecho, es por la forma de manejarlo de los involucrados que buscan
adivinar sus sentimientos.
Es por esta capacidad de querer sentirse maduro que cometen toda clase de errores,
equivocándose en afirmar que sienten amor por una persona cuando es un simple
enamoramiento, y. por orgullo, se terminan casando, lo que termina usualmente en un
posterior divorcio.
Puede que la situación que acabamos de describir sea el peor de los casos, pero lo
cierto es que algo que sucede tan frecuentemente, ya sea por la mala educación o por
los medios de comunicación que dan la idea de un amor perfecto, es complicado
llamarlo así.
Entonces, así como un enamoramiento y un sentimiento de amar pueden ser una de
las mayores felicidades en la vida, pueden terminar en una gran desgracia si no saben
identificarlo, por lo que los cristianos deben hacer todo lo posible para hacer las cosas
bien con ayuda de la Biblia y la Iglesia.
¿Cuál es la relación que existe entre amar y estar enamorado?
Aunque estar enamorado y amar tienen sus diferencias, ningún sentimiento es mejor
que otro ya que todos son variaciones de este atributo llamado amor que conforma a
Dios (Santiago 1:8 y Juan 4:8).
Por lo tanto, es importante que ambos términos aparezcan en algún momento en un
noviazgo antes de poder casarse, debido a que esto será lo que indique que esa pareja
será con la cual pueden ir hasta el matrimonio y ser felices por el resto de su vida.
Así como un enamoramiento es peligroso por estar en riesgo de acabar en una
obsesión si la persona no está del todo saludable, también puede ser un indicativo de
un rasgo que resulta atractivo para una persona.
Aunque, sentir un enamoramiento por alguien no significa que vayan a terminar con
esa persona, por lo menos les ayuda a saber qué buscan en una relación.
Si este enamoramiento es recíproco y la pareja logra llevarlo por la vía correcta surgirá
el amor  entre ellos y podrán decirse que se aman en cualquier momento, lo cuál será
la confirmación que su relación durará para siempre.
Pero, si nunca llega a sentirse un amor verdadero y la pareja se casa, en algún
momentos ellos vivirán una gran infelicidad, con un sentimiento de vacío constante.
Muchos jóvenes hoy en día, se preguntan el por qué la iglesia enseña que se deba vivir
la virtud de la castidad en el noviazgo, pues consideran es sólo una estricta limitación a
la libertad para mostrar afecto entre dos personas que se aman y que la práctica del
sexo también forma parte de estas demostraciones, por lo que no habría que esperar
hasta el matrimonio.
Sin embargo, la realidad demuestra otra cara, pues cada vez son más las parejas que
practican sexo extramatrimonial y suelen ser menos duraderas en sus relaciones y
otras ni siquiera llegan a consolidar el compromiso del matrimonio, debido a que los
sentimientos son dejados de lado y el centro de sus vivencias se reduce solo al acto
carnal, tendiendo muchas veces a la falta de amor y a la infidelidad.
¿Qué nos dice la iglesia sobre la castidad?
El Catecismo de la Iglesia Católica en varios numerales nos habla y profundiza sobre
esta virtud, de los cuales solo mencionare algunos:
2341 La virtud de la castidad forma parte de la virtud cardinal de la templanza, que
tiende a impregnar de racionalidad las pasiones y los apetitos de la sensibilidad
humana.
2345 La castidad es una virtud moral. Es también un don de Dios, una gracia, un fruto
del trabajo espiritual (cf Ga 5, 22). El Espíritu Santo concede, al que ha sido regenerado
por el agua del bautismo, imitar la pureza de Cristo (cf 1 Jn 3, 3).
2348 Todo bautizado es llamado a la castidad. El cristiano se ha “revestido de Cristo”
(Ga 3, 27), modelo de toda castidad. Todos los fieles de Cristo son llamados a una
vida casta según su estado de vida particular. En el momento de su Bautismo, el
cristiano se compromete a dirigir su afectividad en la castidad.
2350 Los novios están llamados a vivir la castidad en la continencia. En esta prueba
han de ver un descubrimiento del mutuo respeto, un aprendizaje de la fidelidad y de la
esperanza de recibirse el uno y el otro de Dios. Reservarán para el tiempo del
matrimonio las manifestaciones de ternura específicas del amor conyugal. Deben
ayudarse mutuamente a crecer en la castidad.
Los Santos también nos dan algunas orientaciones sobre ella:
"Si queremos guardar la más bella de todas las virtudes, que es la castidad, hemos de
saber que ella es una rosa que solamente florece entre espinas; y, por consiguiente,
solo la hallaremos, como todas las demás virtudes, en una persona mortificada"
(SANTO CURA DE ARS, Sermón sobre la penitencia).
"Hace falta una cruzada de virilidad y de pureza que contrarreste y anule la labor
salvaje de quienes creen que el hombre es una bestia."(SAN JOSEMARÍA ESCRIVÁ,
Camino 121).
"Solo el hombre y la mujer casta son capaces del verdadero amor ". (SAN JUAN PABLO
II)
¿Qué consecuencias puede traer el faltar a esta virtud en el noviazgo?
El faltar a la virtud de la castidad en el noviazgo, puede traer penosas consecuencias
no solo en el aspecto espiritual, sino también biológico, psicológico y hasta social.
Entre algunas de ellas tenemos:
En lo espiritual, se produce un alejamiento de Dios y de la vida sacramental-eclesial, ya
que la persona es consciente que ha vulnerado este mandamiento y ha cometido el
pecado de fornicación (sin deseos de arrepentimiento), abandona la práctica de la
misa dominical, la confesión y cualquier tipo de participación en la comunidad
parroquial. Este es el caso más común de muchos jóvenes, que una vez iniciada su vida
sexual fuera del matrimonio ya no se consideran católicos o viven la fe a su propia
manera.
En lo biológico, algunas jovencitas debido a la práctica sexual temprana, pueden
desarrollar frigidez en épocas posteriores. También se producen los embarazos no
deseados, pues, aunque la mayoría de los novios recurren a la anticoncepción
(añadiendo una mayor gravedad a su pecado de fornicación), y ya sea por descuido o
falla de los mismos métodos anticonceptivos, en muchos casos el embarazo es
inevitable. Otras en cambio, a causa de la inestabilidad amorosa o promiscuidad, son
foco seguro de enfermedades venéreas al quedar contagiadas por sus parejas.
En lo sicológico, se da una centralidad al goce sexual que se deja de lado el plano
afectivo y espiritual de la relación. También provoca una especie de esclavitud o
desigualdad entre la mujer y el varón, pues nadie puede negar que en las relaciones
prematrimoniales quien lleva la peor parte es la mujer. Esta al perder la virginidad, se
siente subordinada al novio que busca tener relaciones cada vez con mayor frecuencia;
no puede decirle que no, porque tiene miedo que él la deje, reprochándole que ella ya
no lo quiere. En otros casos, surgen temores de infidelidad o miedo a que la pareja
pueda encontrar mejores satisfacciones sexuales con otras mujeres, temor al
embarazo no deseado, promiscuidad en ambos, baja autoestima, inclinaciones
homosexuales, etc.
En lo social, se producen los casamientos precipitados que en algunos casos pueden
decaer en ruptura, por carecer de la debida madurez para enfrentar esta nueva etapa.
También a causa de los embarazos no deseados y abandono de la pareja que no asume
la responsabilidad, surgen las familias monoparentales (madres solteras).  En casos
peores, debido a la presión social, familiar e incluso de la misma pareja, muchas
recurren al aborto tras producirse un embarazo no deseado, el cual como sabemos,
sería la más grave y espantosa consecuencia.
Vivir la castidad es un actor de amor más que una obligación
Por consiguiente, como podemos darnos cuenta, la castidad es un elemento esencial
dentro de la etapa del noviazgo que busca caminar en santidad y sirve como tiempo
preparatorio para el sacramento del matrimonio, el en cual también se está llamado a
vivir esta virtud, pero bajo la figura de la fidelidad en la pareja.
Guardar la castidad en el noviazgo, debe ser visto como un acto de amor a Dios y a
nuestra pareja, a quien nos entregaremos total e incondicionalmente al casarnos. No
debemos verla por ello como una carga pesada, una norma rigurosa, sino como decía
San Josemaría Escrivá, que, si decidimos vivirla con firmeza, esta será nuestra corona
triunfal.
Yasmín Oré

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