El hombre que vio con los ojos del más allá

Cada noche un hombre se sentaba a la orilla de su cama con su cigarro en mano y su botella de
vino, pensando noche tras noche en aquella muerte que le había marcado su amigo ahorcándose
desde su balcón. Trataba de entender que tan destruido tenía que estar una persona para querer
cometer ese acto tan desgarrador, pero a la vez sentía mucha curiosidad por querer intentarlo,
hasta que un día tomo el valor de hacerlo y decirle a su mucama en cuanto vea que se está por
desmayar corte la cuerda con el machete que le dejaba en mano. Cuando el hombre decidió
hacerlo vio que ya no le quedaban fuerzas, su vista comenzó a oscurecer, el nudo en su garganta
cada vez se hacía más pequeño hasta que de pronto llegó su mucama aterrada por lo que estaban
viendo sus ojos y corto la soga. El hombre al reaccionar pudo contar su experiencia casi suicida,
dijo con muchos nervios… Segundos después de atarte la cuerda al cuello, comienzas a sofocarte,
sientes que ya no eres tú el de tu propio cuerpo, hasta que llega el arrepentimiento, deseas no
haberlo hecho y apreciar tu vida cuando de repente llega el diablo susurrándote al oído ¡hazlo!
Con una sonrisa brillante y saltando sobre tus hombros para que pierdas la conciencia lo más
rápido posible hasta el punto de morir. La mucama relato que al momento de cortar la cuerda
salió corriendo porque había sentido que algo la perseguía con mucha rabia. Desde entonces el
hombre dijo que cuando tomas la iniciática de querer ahorcarte te arrepientes, pero te das cuenta
de que, si no hay alguien que te salve, el diablo te lleva a la fuerza.