Está en la página 1de 25

See discussions, stats, and author profiles for this publication at: https://www.researchgate.

net/publication/296695249

La pregunta por el espacio. Ensayo de delimitación en una perspectiva


fenomenológica

Article · December 2015

CITATIONS READS

0 658

1 author:

Carlos Eduardo Sanabria


Universidad de Bogotá Jorge Tadeo Lozano
33 PUBLICATIONS   6 CITATIONS   

SEE PROFILE

Some of the authors of this publication are also working on these related projects:

Red de Investigación Cuerpo Danza Movimiento View project

Pedagogía, arte y ciudadanía View project

All content following this page was uploaded by Carlos Eduardo Sanabria on 03 March 2016.

The user has requested enhancement of the downloaded file.


Cómo citar:
Sanabria, C.E. (2015). La pregunta por el espacio. Ensayo de delimitación en una perspectiva fenomenológica. Revista Colombiana
de las Artes Escénicas, 9, 122-145.

LA PREGUNTA POR EL ESPACIO. ENSAYO DE DELIMITACIÓN EN


UNA PERSPECTIVA FENOMENOLÓGICA.*
THE QUESTION ABOUT SPACE: DELIMITATION ARTICLE IN A PHENOMENOLOGICAL
PERSPECTIVE

Carlos Eduardo Sanabria B.**

** Candidato a Magíster RESUMEN


en Estética e Historia
del Arte. Profesor El ensayo se propone indicar algunas delimitaciones y posibilidades de
asociado, Departamento cuestionamiento del asunto del espacio, visitando algunas reflexiones
de Humanidades, propuestas por el arquitecto y teórico de la arquitectura Christian
Universidad Jorge
Tadeo Lozano. Bogotá, Norberg-Schulz, particularmente en su análisis de la pérdida del lugar,
Colombia. en su libro Genius Loci. Esta lectura exigirá detenerse en un par de pilares
E-mail: carloseduardo.
sanabria@gmail.com
de su pensamiento, esto es, en el pensamiento de Martin Heidegger y de
Otto Bollnow.

PALABRAS CLAVE
Martin Heidegger, Otto Bollnow, Christian Norberg-Schulz, fenomenología,
experiencia del espacio, arquitectura.

ABSTRACT
This article aims to show some boundaries and possibilities of questioning
the issue of space, going over some reflections proposed by the architect
and architecture theorist Christian Norberg-Schulz, particularly in his
analysis of the loss of the sense of space in his book Genius Loci. This
reading will require a stop in a couple of mainstays of his thought, that is,
Martin Heidegger and Otto Bollnow’s thoughts.

KEY WORDS
Martin Heidegger, Otto Bollnow, Christian Norberg-Schulz, phenomenology,
space experience, architecture.

* Recibido: 3 de junio de 2015, aprobado: 10 de agosto de 2015.


El presente ensayo constituye un resultado parcial de la investigación “Hacia una cartografía del cuerpo en el arte contemporáneo”,
de la que el autor es su investigador principal. Esta investigación está adscrita al Departamento de Humanidades de la Universidad
Jorge Tadeo Lozano, y financiada por esta misma institución. Hace parte del grupo de investigación ‘Reflexión y creación artísticas
contemporáneas’ (COL0033999).

Revista Colombiana de las Artes Escénicas Vol. 9 enero - diciembre de 2015. pp. 122 - 145
Carlos Eduardo Sanabria B.

“Cosa grande empero parece y de cata familiares no encontramos una cosa


difícil el τόπος; es decir, el espacio-lugar” en el lugar habitual y, por ejemplo, no
(Aristóteles, Física, Libro IV, 4: 212a8) encontramos las gafas o las llaves en sus
“puestos” o lugares propios, agitamos
“Cuando se habla de hombre y espacio,
las manos, rebuscamos en los bolsillos,
oímos esto como si el hombre estuviera
trastocamos afanadamente lo cercano
a un lado y el espacio en otro. Pero el
espacio no es un enfrente del hombre, no tratando de traer al círculo de lo familiar
es ni un objeto ni una vivencia interior. lo perdido. Estas situaciones ordinarias,
No hay hombres y además espacio; porque cotidianas, habituales, dicen algo acerca
cuando digo ‘un hombre’ y pienso con esta del espacio, que sobrepasa su reducción
palabra en aquel que es al modo humano, o normalización a la mera representación
es decir, que habita, entonces con la palabra matemática o geométrica. Quizá nos
‘hombre’ estoy nombrando ya la residencia acercamos a lo que sea el espacio, de una
en la cuadratura, cabe las cosas” manera más originaria y previa a esa
(Martin Heidegger, “Construir habitar representación, si nos abrimos a él en
pensar”, 1994)
tanto que experiencia, acción, despliegue
del motivo humano. Y sin embargo, a
¿Cambia el espacio y nuestra experiencia pesar de querer con estos ejemplos de
del mismo cuando alguien deja la lo cotidiano romper una diferenciación
habitación? Cuando alguien parte de habitual entre el ser humano y el espacio,
casa, las paredes del hogar o bien nos ya estas palabras, estas formas de decir,
oprimen con su silencio, o bien se nos diferencian y separan lo que es desde una
alejan y sentimos lo propio como ajeno; el mirada más originaria algo perteneciente
umbral de la puerta trastoca sus tránsitos a una unidad, a un acontecer unitario,
y, al llegar, sentimos la soledad y, al salir, llámese espacio vivido, residencia, habitar
nos encerramos en nosotros mismos; las o demorarse.
cosas se extrañan y piden o evocan otras
manos, otras presencias, otras personas Ahora bien, ¿cuál es la pertinencia o, al
que ya no están. El espacio, al parecer, se menos, la necesidad, y de dónde viene esta,
modifica con el paso de la gente, con sus para plantear justamente hoy la pregunta
cercanías y sus ausencias, sus saludos, sus por el espacio? Y, lo que es aun más difícil,
abrazos, de manera que no es una mera ¿cómo plantear de manera renovada la
sustancia universal y extensa, sino acaso pregunta por el espacio, si no es que ya
algo que nos concierne de manera más está planteada? La larga tradición de
íntima y propia, de una manera tal que pensamiento occidental que ha planteado
entre los lugares y el cuerpo, entre la piel tal pregunta, que se puede remontar
y las paredes, entre la mirada y lo mirado, hasta el pensamiento presocrático, ¿no
entre el dedo que señala y lo señalado, hace ya, al parecer, prescindible el re-
la distancia es algo que involucra a las planteamiento de la misma pregunta?
dos partes pretendidamente separadas o
diferenciadas. En la fenomenología hay un recurso,
cuando se está tratando de hacer
De manera similar, cuando dentro de comparecer algo para indagar por su
la textura cotidiana de los espacios

Revista Colombiana de las Artes Escénicas Vol. 9 enero - diciembre de 2015. pp. 122 - 145 123
LA PREGUNTA POR EL ESPACIO. ENSAYO DE DELIMITACIÓN EN UNA PERSPECTIVA FENOMENOLÓGICA.

modo de ser, que abre una vía de acceso este caso, para plantear la propuesta de
y comprensión a este ser; consiste en pensar el espacio, comprendido como
preguntar inmediatamente a la cosa configuración espacial y no solo desde su
misma de que se trata y, si esta vía se ve comprensión como extensión o medida,
obstaculizada, buscar algún camino que propongo que atendamos a un par de
permita un acceso destacado a la cosa motivos: un poema de César Vallejo,
misma. Muchas veces este camino es el de Poemas póstumos, y un dibujo que
que indica el lenguaje o alguna forma hizo el pintor y arquitecto austríaco
destacada del lenguaje como, por ejemplo, Hundertwasser, para el libro The Power
el arte y la poesía. En este sentido, of Art Hundertwasser: The Painter-King
propongo que, antes de intentar hacer with the five skins, publicado por Pierre
aparentes la necesidad y algunos límites Restany, en Colonia, en 1998. Empecemos,
de la pregunta por el espacio, atendamos deteniéndonos, demorándonos, en este
a la manera en que este se da en algunas dibujo.
formas destacadas del lenguaje. Para

Fuente: tomado de The Power of Art Hundertwasser: The Painter-King with the five skins, publicado por Pierre Restany,
Colonia, 1998 © Hundertwasser Archive, Vienna.

Las cinco pieles. Friedensreich Regentag Dunkelbunt Hundertwasser.

¿Qué “habla” en el dibujo de Hudertwasser, Rilke (1989), y ponerlas a resonar con este
que pueda orientar el pensar en el sentido dibujo:
del planteamiento de la pregunta por lo
que sea el espacio? Casi imposible no Ich lebe mein Leben in
recordar algunas líneas de Rainer Maria wachsenden Ringen,

124
Carlos Eduardo Sanabria B.

die sich über die Dinge ziehn. pues que todos han partido.
Ich werde den letzten vielleicht
nicht vollbringen, Y yo te digo. Cuando alguien se
aber versuchen will ich ihn. va, alguien queda. El punto por
donde pasó un hombre, ya no
[Vivo mi vida en círculos está solo. Únicamente está solo,
crecientes, de soledad humana, el lugar por
que se dibujan por sobre las cosas. donde ningún hombre ha pasado.
Quizá yo no complete el último, Las casas nuevas están más
pero trataré de alcanzarlo]. muertas que las viejas, porque
sus muros son de piedra o de
No creo que se trate de una nueva versión acero, pero no de hombres. Una
de antropocentrismo, sino más bien de casa viene al mundo, no cuando
un intento justamente por mostrar la co- la acaban de edificar, sino cuando
la empiezan a habitar. Una casa
pertenencia del ser humano y su entorno,
vive únicamente de hombres,
su co-pertenencia con esas “pieles”, que como una tumba. Sólo que la casa
no solo son una mera cobertura que se nutre de la vida del hombre,
esconda algún núcleo esencial, sino que mientras que la tumba se nutre de
más bien parecen configurar el todo de la muerte del hombre. Por eso la
lo que llamamos vida. Piel, ropa, casa, primera está de pie, mientras que
identidad y tierra no son ni nociones ni la segunda está tendida.
experiencias que se puedan pasar por alto
fácilmente, ni mucho menos agotar en su Todos han partido de la casa,
riqueza significativa en unas pocas líneas. en realidad, pero todos se han
Baste, para los propósitos de intentar quedado en verdad. Y no es el
recuerdo de ellos lo que queda,
acotar la pregunta por el espacio, señalar
sino ellos mismos. Y no es
que todas estas palabras y experiencias tampoco que ellos queden en la
hablan de algún tipo de límite que permite casa, sino que continúan por la
determinar aquello que sea el espacio. casa. Las funciones y los actos se
Vale la pena recordar aquí el sentido van de la casa en tren o en avión
griego de límite [πέρας] o, más bien, de o a caballo, a pie o arrastrándose.
frontera que destaca Martin Heidegger: Lo que continúa en la casa es el
una frontera no es donde algo termina, órgano, la gente en gerundio y en
sino justamente donde algo comienza a ser círculo. Los pasos se han ido, los
lo que es (Heidegger, 1994, pp. 135, 136). besos, los perdones, los crímenes.
Lo que continúa en la casa es el
pie, los labios, los ojos, el corazón.
Y, por último, busco orientación en la
Las negaciones y las afirmaciones,
palabra del poema en prosa del poeta el bien y el mal, se han dispersado.
peruano César Vallejo (1988, p. 323): Lo que continúa en la casa, es el
sujeto del acto.
—No vive ya nadie en la casa –
me dices–; todos se han ido. La
Al apelar a estas maneras destacadas en
sala, el dormitorio, el patio, yacen
que se buscan orientaciones para delimitar
despoblados. Nadie ya queda,
la pregunta por el espacio, solo se busca

Revista Colombiana de las Artes Escénicas Vol. 9 enero - diciembre de 2015. pp. 122 - 145 125
LA PREGUNTA POR EL ESPACIO. ENSAYO DE DELIMITACIÓN EN UNA PERSPECTIVA FENOMENOLÓGICA.

eso, orientaciones. Y un rasgo orientador al menos para nosotros, llamémonos


de esta última comparecencia del espacio, “modernos” o hijos de la arquitectura
es su carácter, digámoslo así, defectivo. Es moderna, comporta un peculiar sentido
decir, las palabras traen a la presencia un que atraviesa nuestro sentido del espacio;
modo cotidiano y ordinario del abandono así mismo, el habitar, como modo de ser
y la ausencia en que se nos hace patente del ser humano en el mundo también
la experiencia del espacio, esto es, la habrá de exigir nuestra calma y demora,
casa. Baste recordar aquí, como lo han para llegar a determinar la pregunta
señalado varios teóricos de la arquitectura por el espacio; finalmente, los ejemplos
moderna, por ejemplo Christian Norberg- que hemos destacado parecen llamar la
Schulz, que el habitar y la vivienda atención, de una manera velada, sobre
constituyen puntos de partida para la un difícil problema que incluso encuentra
reflexión y el despliegue constructivo de en el lenguaje mismo un gran obstáculo
la arquitectura moderna (cfr. Norberg- para su formulación, esto es, el problema
Schulz, 1980, p. 194). De esta manera, la de pensar la co-pertenencia de hombre
referencia a la casa, para pensar el espacio, y espacialidad en términos de relación,
no es un recurso nostálgico, sino acaso un sea esta de inclusión, continuidad o co-
esfuerzo por traer al pensamiento hacia determinación. En efecto, este lenguaje
la fuente de un problema y una relación comporta el germen de la diferenciación
que determina no solo nuestro habitar de lo que quizá es uno e íntegro.
cotidiano, como si fuera una actividad
más que desempeñamos en el día a día, En lo que sigue, propongo indicar
sino también un rasgo del modo de ser algunas delimitaciones y posibilidades
del ser humano mismo. de cuestionamiento del asunto del
espacio, visitando algunas reflexiones
Ahora bien, ese carácter defectivo del propuestas por el arquitecto y teórico
modo de darse, en el poema, la casa y de la arquitectura Christian Norberg-
su peculiar espacialidad, parece señalar Schulz, particularmente en su análisis
que ella no se reduce al espacio extenso de la pérdida del lugar, en Genius Loci. Si
que es contenedor de unos ocupantes bien un planteamiento más exhaustivo y
más o menos indiferentes. Más bien, su de largo aliento exigiría detenerse en un
ausencia, su partida, hace destacar en par de pilares de su pensamiento, esto es,
el poema la co-pertenencia de eso que en el pensamiento de Martin Heidegger
se llama espacio y de eso que llamamos y de Otto Bollnow, en todo caso estos
ser-humano, particularmente en el modo pensadores estarán presentes de manera
del habitar. La pregunta por lo que sea tácita en varios planteamientos.
el espacio, entonces, parece obtener
orientaciones desde distintos puntos: *
por un lado, por lo menos es necesario
hacer algún ejercicio crítico ante cualquier Sin siquiera pretender ser exhaustivo
intento de dar por sentado el espacio en la indicación de la publicación de
como algo meramente extenso y externo numerosos estudios sobre el asunto del
a nosotros mismos; además, la casa, espacio, desde perspectivas tan diversas

126
Carlos Eduardo Sanabria B.

como la geografía crítica, la teoría de la de una entidad autosuficiente. Más


arquitectura, los estudios post-coloniales adelante desarrollaré este punto.
y la indagación fenomenológica, sí
quisiera por lo menos mencionar algunos Solo por mencionar algunos referentes
atisbos muy significativos. muy elocuentes del siglo XX, vale la
pena recordar que desde Ser y tiempo
Un repaso general de los títulos (1927), Martin Heidegger hará varias
publicados por el teórico de la indicaciones determinantes sobre el
arquitectura Christian Norberg-Schulz asunto de la espacialidad, no en tanto
hace patente el marcado interés por la que espacio contenedor de los entes
aclaración de la comprensión del espacio, existentes, sino como rasgo ontológico,
el lugar, el habitar y la arquitectura. Y como dimensión del ser mismo, del ser
este mismo autor, al referirse a algunas humano y de la manera en que tenemos
de las fuentes de su indagación, esto es, que ver cotidianamente con las cosas.
a Martin Heidegger y Otto Bollnow, hace Por otra parte, parte del esfuerzo de
énfasis en la proveniencia del problema, Heidegger por discernir, por un lado, la
en una perspectiva muy fértil seguida en espacialidad propia del ser humano y,
los últimos 50 años desde la orientación por otro lado, la determinación científica
fenomenológica, y en algunos linderos o matemática del espacio, consiste no
del asunto. tanto en mostrar el supuesto error de
esta última determinación, sino más bien
Así, por ejemplo Bollnow, plantea por lo la dimensión originaria de la primera y
menos dos delimitaciones importantes el carácter fundante u originante de la
para abordar el asunto del espacio. Por un segunda. Es conocida, por otra parte,
lado, destaca la necesidad de diferenciar la prolífica reflexión de Heidegger y su
lo que él llama el “espacio vivido”, del insistencia en retornar a pensar el asunto
espacio matemático. Y, por otro lado, del espacio o, más bien, de la espacialidad,
insiste en rastrear la proveniencia del en todo su pensamiento posterior a la
problema desde los planteamientos más Kehre, particularmente en relación al arte.
originarios del pensamiento occidental, Así, por ejemplo, son indicadores claros
esto es, en la filosofía presocrática y de esta reincidencia “Construir habitar
en la lectura de la misma por parte de pensar”, “Observaciones relativas al
Aristóteles. Con esto, lejos de tratar de arte - la plástica - el espacio”, “El arte y
ganar para el problema una falsa dignidad el espacio”, por mencionar solo algunos
en la remota y antigua proveniencia del títulos.
mismo, solo quiero destacar un aspecto
muy relevante del problema: su rasgo Por su parte, Otto Bollnow insiste en esa
histórico, es decir, el hecho de que el especie de coincidencia de intereses en
asunto del espacio mismo está atravesado las obras de Eugène Minkowski (El tiempo
de historicidad. ¿Qué significa esto? Por vivido, 1933), del conde von Dürckheim
lo menos, que quizá convenga más que (1932), de Gaston Bachelard (La poética del
se hable de configuración histórica del espacio, 1958). Y la misma obra de Bollnow
espacio, que de espacio como si se tratara (El hombre y el espacio, 1963), constituye

Revista Colombiana de las Artes Escénicas Vol. 9 enero - diciembre de 2015. pp. 122 - 145 127
LA PREGUNTA POR EL ESPACIO. ENSAYO DE DELIMITACIÓN EN UNA PERSPECTIVA FENOMENOLÓGICA.

un esfuerzo de articular y rastrear esas presocráticos –siguiendo el recurso de


diversas reflexiones1. muchos estudiosos del problema del
espacio y de su planteamiento desde una
¿En qué radica esta relevancia perspectiva genealógica– para referirse a
irrenunciable, tan patente desde las esa larga tradición especulativa (filosófica,
primeras décadas del siglo XX, del metafísica y naturalista) sobre el espacio.
problema del espacio, del planteamiento Desde esos remotos orígenes, hasta
del problema del espacio? ¿Se trata acaso nuestros días, pasando por los postulados
de un nuevo problema para el pensamiento de Aristóteles, Ptolomeo, posteriormente
y la cultura, o de un problema específico Copérnico, Descartes, Kant y Newton, el
para un nuevo “estilo” de práctica espacio y su consideración exhiben una
arquitectónica que comience con el siglo? enorme variedad de aspectos a lo largo
¿Por qué desde entonces se asocia al de cambios históricos, cosmogonías,
pensamiento y a la “práctica” del espacio sistemas físico-naturales y posiciones
(si es que, al menos metodológicamente, conceptuales.
podemos hacer tal distinción) una
dimensión política e ideológica? ¿Se Ahora bien, esta condición comporta
puede hablar de arquitectura moderna, de al menos dos visos problemáticos: por
la misma manera y en el mismo sentido en un lado, la gran amplitud y variedad de
que se habla de arquitectura barroca? ¿Son aspectos a lo largo de la historia de la
en el mismo sentido “arquitectónicas” las filosofía occidental; y por otro lado, lo
construcciones de los “modernos”, así que nos llega a lo largo de su desarrollo
como las de sus predecesores?2 histórico, bajo el aspecto de una “teoría”
del espacio resulta ser un sedimento de
Ahora bien, respecto a la consideración conceptos históricamente adquiridos.
relativa al planteamiento histórico Es decir, en cuanto al primer aspecto,
del problema del espacio, es clara la es interesante considerar la constante
posibilidad de remontarse hasta los presencia del problema: la preocupación
y las indagaciones acerca del espacio no
También son muy provocativas las referencias a Binswanger,
son un problema “novedoso”, sino que
1

Piaget, Strauss, Cassirer y Lassen. Cabría añadir el estudio fi-


losófico de Elisabeth Ströker, Philosophische Untersuchungen hunde sus raíces en la tradición filosófica
zum Raum, de 1965 (Frankfurt am Main; Vittorio Klostermann.
Hay traducción al inglés, como Investigations in Philsophy of
occidental. Y, en cuanto al segundo aspecto,
Space, Ohio University Press, 1987). Es claro que la insistencia hay que tener en cuenta que el carácter
del asunto sobrepasa los dictámenes de la antojadiza moda
académica, y más bien indica lo ineludible de un problema.
problemático de esta proveniencia de la
2
Estas dos últimas preguntas buscan hacer eco a un texto comprensión del problema del espacio
que tradujimos hace más o menos 6 años, en el Departamen-
to de Humanidades: “‘El origen de la obra de arte’ y el arte
como problema, se refiere al riesgo de que
moderno”, de Dieter Jähnig (cfr. Sanabria, 2004, pp. 121-164). este se nos cierre por presentarse bajo la
No quiero dejar escapar esta referencia a Jähnig, pues su in-
dagación iba en nuestro mismo sentido: por un lado, buscar la
forma de un problema de la historia de la
determinación de lo que llamamos “moderno”, al referirnos al filosofía o de la ciencia, como si se agotara
arte o la arquitectura; y, por otro lado, señalar la nueva com-
prensión del arte (y la arquitectura) moderno como construc-
en esta historia y ya estuviera consolidada
ción de mundo, esto es, como establecimiento, configuración e una teoría del espacio. ¿Cómo enfrentar,
instalación de lo espacio-temporal en la vida del ser humano,
una vez que ya no hay grandes narrativas religiosas, artísticas
entonces, esa posible evidencia del
o políticas trascendentes que aseguren y configuren su mundo asunto?
de manera previa.

128
Carlos Eduardo Sanabria B.

En un libro titulado Arquetictura. Éxtasis del ansia de novedades de nuestros circuitos


espacio, el tiempo y el cuerpo humano (Krell, culturales y académicos y por su potencia
1997), que se ocupa de pensar el problema normalizadora y niveladora, nuestros
del espacio y del cuerpo a partir de varias esfuerzos de comprensión terminan
inflexiones fundamentales de la historia achatando y anestesiando comprensiones
del pensamiento occidental (Platón, Freud, más auténticas y fértiles. Como dice Krell,
Husserl, Heidegger, Merleau-Ponty, “no sabemos si simplemente nos estamos
Bataille e Irigaray), el profesor David embromando con nuestra pequeña
Farrel Krell plantea que, en un mundo sabiondez, aprendiendo a satisfacernos
donde la depredación de la naturaleza con divertimentos, a estar satisfechos con
y del espacio habitable, y donde una de distracciones, si es lo único que tenemos
sus consecuencias, el desplazamiento de [...]”3 (Krell, 1997, pp. 3-4).
grandes sectores de población, parecen
haber ganado la partida, a pesar de los En lo que sigue, más que intentar plantear
esfuerzos de autocontrol, a veces honestos la pregunta por el espacio o, más bien,
a veces interesados, de los países más la espacialidad, quisiera buscar la vía
industrializados, no solo siguen vigentes de acceso al difícil problema y la justa
varios problemas fundamentales para el disposición para plantearlo. Si me
pensamiento, el arte y la arquitectura, sino atrevo a calificarlo de difícil, no es por
que siguen sin respuestas satisfactorias. alguna dificultad del conocimiento para
acceder al objeto-espacio, sino ante todo
Entre estos asuntos de nuestra mayor porque parece hundir sus raíces en varias
preocupación, que constituyen algunas direcciones, profundidades y sentidos
de nuestras más grandes y profundas tanto en la tradición del pensamiento,
incertidumbres, se encuentran el espacio y del arte y de la arquitectura occidentales,
el cuerpo. En efecto, afirma rotundamente como en lo que podríamos llamar
Krell que del espacio y del cuerpo hoy nuestra experiencia y nuestra vivencia
no sabemos nada; nada, sino que nuestra contemporáneas del espacio. En lo que
experiencia del espacio y del cuerpo, por sigue, trataré de explicitar y poner a la vista
un lado, se sustrae a nuestros intentos la complejidad de este planteamiento.
racionales de aprehensión a través
de nuestras geometrías y de nuestros **
instrumentos de medición, y, por el otro,
solo se nos hace comprensible hasta ahora En efecto, el asunto conductor no es el
a través de diversas imágenes como las espacio mismo, es decir, como si este fuera
de máquina, prisión, plaga, objeto/sujeto un objeto de un preguntar clarificador y
de placer o agresión, imágenes todas de esencialista. Ni puede reducirse a ser un
las que no podemos dejar de sospechar. objeto como si se tratase de una entidad
Y quizá el asunto de mayor preocupación existente en el mundo exterior, al lado
es la incertidumbre que sentimos sobre de los demás entes, o alrededor de ellos,
nuestros mismos esfuerzos cotidianos, o conteniendo los demás entes; ni mucho
como artistas, arquitectos o filósofos, por menos a ser un objeto de un pensamiento
dar cuenta de tales asuntos. Acaso por el
3
Traducción del autor.

Revista Colombiana de las Artes Escénicas Vol. 9 enero - diciembre de 2015. pp. 122 - 145 129
LA PREGUNTA POR EL ESPACIO. ENSAYO DE DELIMITACIÓN EN UNA PERSPECTIVA FENOMENOLÓGICA.

que lo asegurara y lo haga disponible como menos coherente, ponen de manifiesto


una sustancia maleable y dominable, a que ya sea por el lado de las funciones,
través de su instrumentalización. Así, los significados, las determinaciones
lo más urgente, por ahora, es abrir de estilísticas y otros factores extra-artísticos
nuevo la pregunta por el espacio, es no dan debida cuenta del problema del
decir, exhibir la necesidad de plantear la espacio en tales manifestaciones. Como si
pregunta misma. Incluso si atendemos el discurrir mismo del arte del siglo XX,
a una “perspectiva ingenua” o a nuestro por sus propias indagaciones, dinámicas
comportamiento medio cotidiano, para el y desarrollos, hubieran hecho saltar en
que nuestro tener que ver con el espacio es pedazos cualquier intento unificador de
un “hecho fundamental” obvio, parecería la comprensión del espacio, para aplicarla
que la pregunta por el espacio es superflua de manera uniforme a la diversidad de
y sobreentendida. manifestaciones escultóricas de este siglo.

Sin embargo, si volvemos a nuestros En segundo lugar, Albrecht llamará la


ejemplos del principio, si volvemos a atención sobre otros intentos diversos
la experiencia de configuración de la que tienen lugar en el siglo XX y que
espacialidad ordinaria a partir del influjo igualmente problematizan y se proponen
de las cosas, las acciones y las personas, analizar la realidad del espacio. Entre
entonces el espacio se vuelve un asunto tales intentos señala Albrecht las
complejo que involucra el ser mismo del demostraciones artísticas con el propio
ser humano y la facticidad del espacio. cuerpo y con acciones del cuerpo en el
espacio; la multiplicación de las formas
A este respecto, vale la pena volver la mixtas intermedias de factura artística,
mirada hacia otra fuente bibliográfica arraigadas en prácticas teatrales y del
que señala la relevancia de la reflexión, llamado arte mímico; y la conformación
conceptual y plástica, del espacio en el siglo de lo que rodea al ser humano, en las
XX. Se trata de Hans Joachim Albrecht, formas del environment ligado a formas
quien adelanta varias estrategias para de representación y configuración del
abordar el problema y el planteamiento espacio en la arquitectura y en el teatro
de la pregunta. En primer lugar, como (Albrecht, 1981, p. 14).
asunto central de su libro, pone al frente
el tema de una serie de manifestaciones En tercer lugar, y sobre la base del
artísticas escultóricas del siglo XX, que reconocimiento de esas diversas
tiene lugar en lo que llamamos “espacio manifestaciones artísticas escultóricas,
real”. Señala Albrecht (1981) que estas como prácticas artísticas mixtas y
manifestaciones se refieren al espacio de performáticas, Albrecht adelanta la
una manera señalada y lo problematizan. tesis de que el espacio actualmente no
Así sea solo desde la preocupación se comprende ni se experimenta como
disciplinar de la historia de la escultura, “una condición abstracta e inmutable
tales manifestaciones y su diversidad y de formas materiales”, sino más bien
su dificultad planteada de aprehenderlas como “un resultado específico del
con un instrumental conceptual más o proceso configurativo” (loc. cit.). En este

130
Carlos Eduardo Sanabria B.

punto, destaca Albrecht la declaración tecnológica e instrumental del mundo en


de Heidegger, en “El arte y el espacio”4, las vivencias y comprensiones posibles
respecto a nuestras posibilidades de del espacio; destacan la importancia de
comprender adecuadamente el asunto considerar el habitar (la habitación, el
del espacio, según la cual “[H]asta que no espacio habitable, la espacialidad) como
experimentemos lo peculiar del espacio, preocupación central de la arquitectura del
seguirá sin aclararse todo lo referente al siglo XX (muy probablemente, de manera
espacio artístico”. más destacada, a partir de la segunda
postguerra); y destaca el papel que juega
De esta manera, se introduce el marco de el lenguaje en nuestra indagación por
referencia de la reflexión fenomenológica el espacio y en el planteamiento de la
de cuño heideggeriano que, con las pregunta misma por el espacio (y en la
distancias debidas, planteará a través necesidad de tal pregunta), ya sea por los
de la indagación del espacio vivido en atisbos que este puede indicarnos (por
el reporte de Otto Bollnow, esto es, del ejemplo, las “manera” o giros espaciales
espacio como dimensión antropológica, de lenguaje que usamos para referirnos
y como experiencia de múltiples registros a las experiencias de la comprensión y
(que puede ir desde la configuración de comercio con el mundo), ya sea por
histórica del espacio como extensión en las vivencias espaciales mismas que se
Descartes, hasta como forma pura de la afincan en el lenguaje y prefiguran nuestra
intuición en Kant). comprensión del espacio mismo.

Finalmente, y como contraste a la ***


simplicidad de la comprensión y vivencia
ingenua, cotidiana y fáctica del espacio En lo que sigue, con el propósito de
en la vida humana, destaca Albrecht tres perfilar la cuestión del espacio y algunos
ámbitos contemporáneos que conciernen linderos para la formulación de la
fundamentalmente al espacio y que se misma, quisiera concentrarme en el
proyectan y afectan la configuración planteamiento que ha hecho Christian
antropológica misma del espacio vivido. Norberg-Schulz acerca del espacio hoy,
Estos son: las técnicas de viajes aéreos en su Genius Loci. Hacia una fenomenología
(aviones, técnica de cohetes), la actividad de la arquitectura (Norberg-Schulz, 1980).
de la construcción, y las formas de darse Propongo que nos demoremos en este
el espacio en nuestra vida en el lenguaje. texto, en parte porque Norberg-Schulz
plantea la búsqueda del lugar y del habitar,
Estos tres ámbitos nos plantean y reviven en contraposición a una comprensión
varios problemas para nuestra actual instrumental y funcionalista del espacio,
preocupación por el espacio: ponen el como los conceptos clave para abrir
énfasis en el impacto de la visión técnica, una comprensión más apropiada de la

4
No es casual que el texto de esta conferencia apareciera en
una edición de bibliófilo con el manuscrito de Heidegger
en litografía y siete lithocollages del escultor vasco Eduardo
Chillida, en la edición de Erker Verlag, St. Gallen, 1969 (véase
nota 1, en Duque, 2003, p. 139).

Revista Colombiana de las Artes Escénicas Vol. 9 enero - diciembre de 2015. pp. 122 - 145 131
LA PREGUNTA POR EL ESPACIO. ENSAYO DE DELIMITACIÓN EN UNA PERSPECTIVA FENOMENOLÓGICA.

espacialidad5, así como para comprender Occidente de la segunda mitad del siglo
la arquitectura como “concreción del XX, sino que además plantea algunas
espacio existencial”, para emprender exigencias significativas sobre el habitar
una orientación hacia una fenomenología mismo no solo a la arquitectura como
de la arquitectura, y para vislumbrar el concreción del habitar, sino también al
compromiso de la arquitectura con la pensamiento de la espacialidad y de tal
verdad (Norberg-Schulz, 1980, pp. 5-6). habitar. En este último sentido, es que
quisiera tratar de mostrar la riqueza
Por otra parte, es en este texto posible de revisitar esas reflexiones
donde Norberg-Schulz declara no fenomenológicas, particularmente de
solo la relevancia del pensamiento cuño heideggeriano, que pueden perfilar
fenomenológico y, particularmente, de el planteamiento mismo de nuestras
Martin Heidegger para abrir la dimensión preguntas actuales sobre la espacialidad y
existencial del espacio, esto es, la el habitar contemporáneos.
espacialidad, sino que además enfatiza la
importancia en este último de reconocidas Propongo que busquemos el
conferencias como Construir habitar planteamiento sobre lo que sea el lugar
pensar, pero sobre todo del análisis de la en medio de la urgencia del último
estructura del ser-en-el-mundo, expuesto capítulo del libro mencionado, esto es,
en Ser y tiempo, en 1927, como un punto en “El lugar hoy”. Sobre este nombre,
de inflexión fundante para comprender la quisiera hacer un par de acotaciones. En
espacialidad misma, así como el problema primer lugar, me he referido a una cierta
del lugar y del entorno como problemas urgencia del capítulo que me permito
que comprometen al ser humano en su subrayar en la referencia inicial que hace
integridad. el autor al asunto de la pérdida del lugar
hoy en relación a un evento que es una
Finalmente, la reflexión que propone profunda grieta para cualquier europeo
Norberg-Schulz sobre el lugar hoy no que se acerque de manera sintiente a la
solo deja ver sus presupuestos en punto historia del siglo XX: la Segunda Guerra
a su lectura de la pérdida y posible Mundial. En efecto, afirma Norberg-
recuperación del lugar y del habitar en el Schulz, que “[D]espués de la segunda
guerra mundial, la mayoría de los lugares
5
Aunque a lo largo del texto no he explicitado una diferenci- han sido sometidos a profundos cambios.
ación clara entre espacio, espacialidad y lugar, vale la pena, de
manera provisional, señalar algunas diferencias. En términos
Las cualidades que tradicionalmente
generales, siguiendo la lectura, que más adelante detallaré, que distinguían los asentamientos humanos
hace Heidegger acerca de la espacialidad del ser humano, en
Ser y tiempo, este último concepto se contrapone a la noción de
han sido corrompidas o se han perdido
espacio como entidad o como determinación físico-matemática irreparablemente” (Norberg-Schulz, 1980,
de la experiencia fáctica y situada del ser-en-el-mundo. Espa-
cialidad se refiere a un rasgo ontológico del ser humano, en el
p. 189).
sentido en que siendo hace espacio y es en la apertura de la
existencia; espacio se refiere, de manera más restrictiva, a la no-
ción de la tridimensionalidad, del contenedor, de la forma de la
Antes de tratar de comprender la noción
intuición. Así, al plantear la cuestión o la pregunta por el espa- básica de lugar, de su pérdida y esa misma
cio, se está tratando de lograr la disponibilidad para cuestionar
justamente esa noción aceptada del espacio como entidad, y
confrontación entre un ahora alumbrado
abrir la posibilidad de pensar el espacio como instancia de la por la penumbra de la irreparable pérdida
espacialidad originaria y fundante del ser humano.

132
Carlos Eduardo Sanabria B.

y un pasado o una tradición sujetos a un rotunda experiencia bélica7. Si bien


proceso de decaimiento y corrupción, particularmente la segunda mitad del siglo
quisiera detenerme en algunos motivos XX se caracteriza por una atomización
obvios. y explosión de diversas experiencias
del mundo, de la vida, de la naturaleza,
Es claro que la condición de partida del muy ligadas a las explosiones mediáticas,
análisis de Norberg-Schulz, esto es, para informáticas y genéticas, también puede
su consideración de la pérdida del lugar ser cierto que podríamos encontrar un
y de sus proyectadas posibilidades de hilo conductor en la centralidad que tiene
recuperación, es el contexto histórico de la la experiencia del espacio en la vida, una
Segunda Guerra Mundial. El hoy al que se experiencia arraigada en las rupturas y
refiere Norberg-Schulz indudablemente conflictos del siglo. Y un indicador claro
está marcado por ese evento histórico de de esta centralidad está en lo que los
la guerra, un evento que quizá acompaña historiógrafos de la arquitectura del siglo
tantas otras reflexiones sobre el lugar, la XX han señalado, como lo hace el mismo
espacialidad y la naturaleza, en pensadores Norberg-Schulz: el advenimiento de la
como Nietzsche, Benjamin y Heidegger, arquitectura moderna, la amplitud de su
por mencionar unos pocos6. El hoy no esfuerzo de pensamiento y de acción en
es solo, pues, la comprensión histórica la vida, tiene que ver con el problema del
que tendría un intelectual europeo en habitar y con la consideración del lugar
1979 –que es la fecha de publicación en existencial del ser humano.
italiano del libro de Norberg-Schulz–,
sino también la experiencia espacial Así, la tonalidad o el ánimo de la discusión
y temporal marcada por un tipo de parece tenderse entre un justificado y
espacialidad, asentamientos, lugares sano pesimismo sobre los efectos de las
y habitares conmocionados por una guerras mundiales en el tejido de las
relaciones humanas y el mundo, y entre
6
Sin pretender hacer una genealogía entre guerra y pensam-
un esperanzado y nostálgico optimismo
iento del lugar e incluso del errar o de la errancia como modo sobre las posibilidades de reconstruir o,
señalado de este tipo de experiencia, vale la pena pensar en,
por ejemplo, Nietzsche, el pensador caminante de las alturas,
por lo menos, recuperar cierto sentido
quien serviría en la guerra franco-alemana de 1870-1871, de la espacialidad, del lugar y del habitar
como él mismo lo destaca en el “Ensayo de autocrítica” de su
Nacimiento de la tragedia, y la influencia que tendrá esta experi-
propios del ser humano.
encia en la forja de algunas de sus imágenes destacadas y más
significativas, para señalar a aquellos intentadores futuros de
nuevos pensamientos, a los caminantes que se atreven a hollar
Ahora bien, justamente para lograr acotar
nuevos caminos y a perderse por otros no tan frecuentados. Así el sentido de lugar y de espacialidad
mismo, es conocida la ocasión de la famosa conferencia de Hei-
degger ante los arquitectos, en 1951, justo en el levantamiento
del embargo de los aliados al pueblo alemán; aquí también 7
Pienso que en este sentido, para nuestro momento situado y
valdría la pena pensar si la experiencia de la fragilidad y del para la comprensión de nuestra historia reciente del llamado
desarraigo, de la destrucción del hábitat por los bombardeos conflicto colombiano, es importante reavivar la urgencia de la
y las acciones bélicas, tienen algo que ver con el predominio pregunta por la experiencia del espacio, por las nuevas config-
de imágenes de pensamiento como en camino (hitos, caminos uraciones de la espacialidad de grandes sectores de población
de bosque, la voz del camino, en camino al habla), con una desplazada, desarraigada, desterrada, expropiada de su tenen-
explícita caracterización del pensar como un andar, un andar cia y querencia a la tierra. Quisiera que este ensayo tuviese un
similar al errar, que no solo se demora en sus estaciones y reco- aliento más amplio y ambicioso, para llegar siquiera a delimi-
dos, sino que además se arriesga a deambular por espacios no tar esta esfera; sin embargo, el intento se queda modestamente
necesariamente despejados y abiertos, sino muchas veces poco en el propósito de delimitar el sentido, esto es, la dirección y el
demarcados, tenues y penumbrosos. ámbito de un preguntar.

Revista Colombiana de las Artes Escénicas Vol. 9 enero - diciembre de 2015. pp. 122 - 145 133
LA PREGUNTA POR EL ESPACIO. ENSAYO DE DELIMITACIÓN EN UNA PERSPECTIVA FENOMENOLÓGICA.

propuestos por Norberg-Schulz, quisiera Un primer sentido de la pérdida del


rastrear su tematización a través del doble lugar puede relacionarse a esa pérdida
movimiento del capítulo mencionado, del mundo cotidiano de la vida.
esto es, de la pérdida y de la recuperación Indudablemente uno de los detonantes de
del lugar. Las preguntas obvias iniciales esta reflexión es la lectura de Husserl de
se refieren, por un lado, a las maneras en la crisis de las ciencias europeas (Husserl,
que se ha perdido históricamente el lugar, 1991), en donde señalará la incapacidad
en particular con el advenimiento de las de la ciencia moderna europea, dominada
guerras del siglo XX; y, por otro lado, al justamente por el método positivista y
lugar “originario” o propio que ha sido de las ciencias de fundamento físico-
perdido en ese proceso histórico. matemático, para interpelarnos “en
nuestra indigencia vital” (loc. cit.).
Por lo menos, podríamos indicar algunos Como es sabido, Heidegger entroncará
sentidos de la pérdida del lugar, muy su lectura de la metafísica moderna
conectados entre sí. En primer lugar, occidental en este sendero, para mostrar la
podemos relacionar la pérdida del originariedad de la vida cotidiana del ser
lugar con el predominio de una nueva humano de término medio, por encima de
experiencia del espacio, que hunde sus la experiencia cognoscitiva del sujeto de
raíces en el predominio del método la ciencia moderna.
físico-matemático y de la verdad como
correspondencia y disponibilidad en la Ahora bien, el predominio de la visión
imagen del mundo moderno. Aunque aquí metódica del ser, digamos, del ser
no pretendo rastrear el surgimiento de humano, del mundo, de la naturaleza y de
esta visión en la metafísica cartesiana, en la verdad, ha sido relacionado al destino
sus proyecciones en la visión newtoniana histórico de Occidente en el siglo XX. La
de la realidad y su basamento en la reducción del ser humano a un recurso
epistemología kantiana, sí es importante humano manipulable, de la naturaleza
al menos de manera sumaria señalar a materia prima o recurso disponible,
tal proveniencia. Con esto, solo quiero del mundo a un circuito regulado de
señalar el camino del predominio de interacciones, y de la verdad a un flujo
una visión metódica del mundo y de la de información verificable, parecen no
verdad, que hunde sus raíces en la llamada solo haber tenido consecuencias en los
filosofía moderna. Pero, ¿en qué sentido ámbitos restringidos de la indagación
el predominio del método comporta una epistemológica académica, sino que
pérdida del lugar? Norberg-Schulz da terminaron por configurar y reducir la
una posible indicación, cuando afirma experiencia vital del ser humano. De esta
que “Lo que se pierde, sin embargo, es el manera, el predominio del método, el
mundo cotidiano de la vida, que debería sometimiento e instrumentalización de la
ser la preocupación real del ser humano, vida en la lógica de la guerra, igualmente
en general, y de los planificadores y incidieron en la pérdida o, por lo menos,
arquitectos, en particular” (Norberg- transformación de los lugares después
Schulz, 1980, p. 8). de la Segunda Guerra Mundial. En este
sentido, Norberg-Schulz hablará de

134
Carlos Eduardo Sanabria B.

que las cualidades de los asentamientos vida cotidiana, la individualidad y la co-


humanos han sido corrompidos o se pertenencia?
han perdido irreparablemente (Norberg-
Schulz, 1980, p. 189). Y, enseguida, en una Al parecer, la pregunta por el espacio,
vertiginosa enumeración, señala Norberg- entendida como la indagación por
Schulz la cadena de pérdidas: la espacialidad, el lugar y el habitar,
comporta un amplio plexo de problemas.
Perdido está el asentamiento como En este sentido, es diciente una afirmación
un lugar en la naturaleza, perdidos del Norberg-Schulz sobre la crisis del
están los foci urbanos como ambiente (environment), no solo entendido
lugares para el vivir cotidiano, este en un sentido ecologista, sino ante
perdida está la edificación
todo como el modo de ser el ser humano
como un sub-lugar significativo
en el entorno, en el derredor, su modo de
donde el hombre podría
experimentar simultáneamente la ser espacial:
individualidad y la pertenencia.
Perdida también está la relación La crisis ambiental […] comporta
entre la tierra y el cielo. La una crisis humana. Evidentemente
mayoría de las edificaciones el problema ambiental ha de ser
modernas existen en un “no confrontado con inteligencia y
lugar”; no se relacionan con un eficiencia. En nuestra opinión, esto
paisaje ni con un todo urbano sólo se puede lograr sobre la base
coherente, sino que viven su de una comprensión del concepto
vida abstracta en una especie de de lugar. La “planificación”
espacio matemático-tecnológico no es de mucha ayuda si la
que apenas sí distingue entre naturaleza concreta y cualitativa
un arriba y un abajo. (Norberg- de los lugares se ignora. ¿De
Schulz, 1980, p. 190) qué manera, entonces, podría
ayudarnos a resolver nuestros
problemas reales una teoría del
¿Cómo pensar lo que sea la espacialidad y
lugar? (Norberg-Schulz, 1980, p.
el lugar, sus relaciones con la naturaleza,
191)
la ciudad, las edificaciones? ¿Qué tiene
que ver el lugar con la naturaleza, con Parece haber una especie de residuo o
el paisaje, con el cielo y la tierra? ¿Cómo
nostalgia metafísica en el planteamiento
accedemos nosotros hoy, desde los no-
de Norberg-Schulz acerca de la pérdida
lugares de las edificaciones y los foci del lugar, en la medida en que parece
urbanos, y cómo comprendemos la cargar una lamentación por un ethos o
naturaleza? ¿Cómo son las relaciones tonalidad apropiada, originaria, que se ha
entre lugar, naturaleza, paisaje, tierra
perdido y que debería ser recuperada…
y cielo? ¿Es correcto que planteemos
como si el lugar y el habitar auténticos
las cosas en términos de “relaciones”, tuvieran una especie de rasgo esencial, de
como si estuviéramos tratando con
ethos originario, propio del ser humano,
objetos aislados y separados? ¿Hay una como si la autenticidad o la propiedad
contraposición entre los lugares y los foci
del lugar se determinara homogénea y
urbanos? ¿Cómo articulan los lugares la excluyentemente, respecto a un lugar y

Revista Colombiana de las Artes Escénicas Vol. 9 enero - diciembre de 2015. pp. 122 - 145 135
LA PREGUNTA POR EL ESPACIO. ENSAYO DE DELIMITACIÓN EN UNA PERSPECTIVA FENOMENOLÓGICA.

un habitar urbano moderno inauténtico, la dupla que atrás mencionamos como


degenerado, perdido… espacio/lugar, y que ahora confrontamos
como espacio objetivo y espacio vivido o
**** vivencial, Bollnow parte por caracterizar
al primero.
En su obra Hombre y espacio (Bollnow,
1969) (publicada, en alemán, en 1963, y En efecto, el espacio objetivo, propio
en español en 19698), luego de rastrear del método físico-matemático, postula
el estatus de los replanteamientos sobre un espacio caracterizado por su
el espacio en la filosofía existencial y homogeneidad. Dice Bollnow: “[e]l
fenomenológica del siglo XX, Bollnow espacio no está estructurado en sí, sino
plantea como su preocupación central que es completamente uniforme y de este
pensar un concepto y una experiencia del modo se extiende en todas direcciones
espacio “vivencial” que se plantea como hacia el infinito” (Bollnow, 1969, p. 24). Es
alternativa del espacio matemático, que decir, el espacio objetivo no tiene zonas o
podríamos simplificar en el modelo del estructuras que lo diferencien a su interior,
espacio tridimensional euclidiano del sino que es un continuo homogéneo e
sistema ortogonal de ejes. Evidentemente, infinito. Por otra parte, este continuo lo
la preocupación de Bollnow nace no es para todo lo existente que tenga una
solo de una curiosidad académica entidad extensa, de donde se postule su
especializada, sino principalmente por lo caracterización como contenedor de todo
que podríamos llamar el “espíritu de los contenido existencial posible. Ahora bien,
tiempos”. Ha pasado algo menos de una al interior de este contenedor uniforme e
veintena de años luego de la Segunda infinito, “[n]ingún punto se distingue de
Guerra Mundial, y Europa, a pesar del los demás” (p. 24) y “[n]inguna dirección
optimismo inyectado con la inversión de se distingue de las demás” (p. 24).
capital aliado y norteamericano destinado
principalmente a la reconstrucción de Frente a esta perspectiva conceptual
la infraestructura de bienes y servicios para pensar el espacio como contenedor
urbanos en los países devastados por objetivo, Bollnow plantea la preeminencia
la guerra, no puede ni quiere olvidar de un espacio vivencial o existencial que
la reciente experiencia que, como se nos hace patente al pensar el habitar,
consecuencia mínima, puso en vilo esto es, una condición cotidiana, media
la tradición metafísica y cientificista y fáctica de todo ser humano. En este
occidental de pensamiento. Y con la respecto, Bollnow es bastante acucioso
suspensión de esta, también se abrió la en la caracterización de este espacio
posibilidad de pensar al ser humano en su vivencial. En efecto, en primer lugar, en el
corporeidad fáctica y en su modo de ser espacio vivencial existe un punto central
espacial. Para mostrar el contraste entre determinado, que de algún modo viene
dado por el lugar del ser humano que vive
8
Como curiosidad editorial, aún por desentrañar, vale la pena el espacio y “en” el espacio. No hay pues
señalar que la Revista Eco, publicó una traducción de una selec- una neutralidad general que nivele todos
ción del capítulo central de este libro en 1964, y que el libro
entero fue publicado, en castellano, en 1969. Véase Bollnow los puntos y zonas de lo existente “en” el
(1964, pp. 452-493).

136
Carlos Eduardo Sanabria B.

espacio. Además, en el espacio vivencial más bien, mostrar la preeminencia del


hay un sistema de ejes determinado, espacio vivencial sobre el espacio objetivo
relacionado con el cuerpo humano y o científico; es decir, que en el sentido
su postura erguida, contrapuesta a la de las condiciones de la experiencia y de
gravedad de la tierra, y no solo una la comprensión de la misma, primero
ortogonalidad postulada y objetiva. Es vivimos en un espacio vivencial definido
decir, los ejes del espacio vivencial están por el propio cuerpo y sus desplazamientos
fuertemente anclados a la experiencia del e interacciones, y luego, por tematización
propio cuerpo, y no son dos ejes abstractos o explicitación, llegamos a postular un
y eternamente invariables. De lo anterior espacio objetivo del cálculo y la medida.
se sigue que en tal espacio las regiones y Tal comprensión y experiencia del espacio
lugares son cualitativamente distintos, y vivencial surge del habitar humano como
no hay algo así como una homogeneidad un rasgo que se identifica con su modo
de puntos en el espacio. Más bien, en el de ser propio, esto es, como ser cuyo ser
espacio vivencial tienen lugar verdaderas consiste en aviar o espaciar “relaciones”
discontinuidades de una región a otra,
ordenadoras y comprensoras con aquello
y esto lo constatamos fácilmente en
y aquellos/aquellas con que tiene que ver
nuestra experiencia cotidiana urbana:
cotidianamente.
la distancia, objetivamente medible en
metros o kilómetros, no se mantiene
Ahora bien, ¿por qué plantear hoy
idéntica dependiendo de la hora del
día, el estado de ánimo, el destino de estas vetas de pensamiento? ¿De qué
nuestro andar. La distancia que se cruza manera nos ayudan a comprender
en un lugar desatendido de la ciudad, mejor el planteamiento del problema del
con poca iluminación, en soledad y en la espacio en la ciudad contemporánea?
noche, se dilata más allá de la identidad ¿Están los fenómenos artísticos críticos
y medición numérica y puede convertirse de nuestro ser espacial en la ciudad
en un tramo eterno o insalvable. Así, el contemporánea, relacionados con esta
espacio vivencial no es simplemente un manera de pensar el espacio vivencial?
contenedor extendible hacia el infinito, ¿Acaso no es pertinente volver a pensar
ni es un lugar contenido en un espacio lo que sea para nosotros el espacio, en
infinito. El espacio vivencial nos es dado nuestra época de especulación mercantil
siempre como un espacio finito, cerrado con el terreno habitable y construible en
y delimitado, según aquello a lo que nos nuestras ciudades; en nuestra época de
encontremos dedicados. No es, pues, una desplazamientos forzados de distinto
zona de valor neutra, sino que ante todo es tipo, que privan a miles y millones de
una experiencia que algunas veces puede personas de su experiencia de hogar,
animar, y otras veces detener, nuestro tierra, arraigo y pertenencia; en nuestra
modo de ser en el espacio. época de depredación industrial del
paisaje y de la tierra?
Hay que señalar que esta confrontación
entre el espacio objetivo y el espacio Para tratar de atender a todos estos haces de
vivencial no busca definir un grado mayor preguntas, nos detendremos brevemente
o menor de veracidad. Bollnow se propone, en algunos aspectos que Otto Bollnow

Revista Colombiana de las Artes Escénicas Vol. 9 enero - diciembre de 2015. pp. 122 - 145 137
LA PREGUNTA POR EL ESPACIO. ENSAYO DE DELIMITACIÓN EN UNA PERSPECTIVA FENOMENOLÓGICA.

plantea en el capítulo central de Hombre conservado y sobrevive en nuestra propia


y espacio –capítulo bellamente titulado construcción de moradas y entornos
“El amparo de la casa”–, justamente en habitables, para obtener directrices en
este momento en que no solo la tenencia su comprensión; y, en segundo lugar,
de vivienda se ha visto largamente para reconocer que nuestro habitar y
amenazada por las fluctuaciones del construir contemporáneos han pasado
mercado, las estrategias exclusivistas de históricamente por esos entornos de
la gentrificación y los males del urbicidio, atribución sacra y poética del mundo.
sino también la habitabilidad misma de
nuestros entornos, para lo cual Heidegger, Las preguntas que podríamos rastrear,
desde los años posteriores a la Segunda a partir del análisis de Bollnow, son:
Guerra Mundial del siglo XX ya había ¿Qué del mundo artesano se conserva en
llamado la atención sobre la importancia nuestro mundo tecnificado? ¿Qué es aún
de remontar el construir hacia el habitar, significante y revelador de ese quehacer?
de pensar el habitar como rasgo del ¿Qué potencial crítico podemos lograr
ser del ser humano, y de considerar la aún de esa manera simbólica y poética de
necesidad de aprender de nuevo a habitar ver el mundo?
poéticamente aquello que llamamos
nuestro mundo. Bollnow señala que en nuestro tiempo
secular, profano y tecnificado, la casa
Por decirlo de manera defectiva, guarda aún cierto carácter sagrado. A pesar
las indicaciones de Bollnow dirigen del dominio generalizado y nivelador de la
nuestra atención hacia un sentido y experiencia de las máquinas y la tecnología,
una experiencia del espacio vivencial la infortunada expresión de Le Corbusier
que, si bien no podemos asegurar que de la “máquina para habitar” puede
desaparece del plexo de experiencias en llegar a chocarnos por su impropiedad.
la ciudad contemporánea, si al menos es Y quizá esta sensación de impropiedad
nivelado o acallado por las formas más nos señale que el habitar no se puede ni
mercantiles y consumistas de imponer las se deja reducir a la racionalización del
formas posibles de espacialidad. Ahora mundo técnico-tecnológico moderno.
bien, si en nuestro intento de buscar Tendríamos que preguntarnos de dónde
orientaciones para pensar la valencia del viene esta sensación de impropiedad, si es
espacio y del lugar sentidos y vividos del simplemente la reacción de una añoranza
hombre en el mundo contemporáneo, pequeño-burguesa de paraísos pastoriles
miramos, siguiendo a Bollnow, el papel prometidos o deseados, o si en ella habla
centralísimo que juega el análisis de la un sentido que nos indique en la dirección
casa (no como objeto, sino como manera de un modo esencial de ser que atraviesa
de habitar y ser en el espacio) y de las nuestras experiencia corpórea, vital y
perspectivas míticas, sagradas y poéticas cotidiana. ¿Seguimos siendo “hogareños”
del espacio, no es por un impulso por alguna nostalgia anacrónica en el
nostálgico o arcaizante. Buscamos en tráfago e hiperintensificación de los
ese “residuo” milenario, ante todo para sentidos y de la experiencia, propios de
ver qué de lo más originario ha sido la ciudad moderna y contemporánea? ¿O

138
Carlos Eduardo Sanabria B.

hay unos modos de ser, de temporalidad incluso la ciudad misma. Como lugar de
y de modos de ser espaciales, que son confianza, la casa y el espacio habitual y
propios de nuestro ser-cuerpo que rompe habitable, constituyen “el lugar donde el
el marco de la configuración técnica de la hombre ‘habita’ en su mundo, donde se
vida? encuentra ‘en casa’ y siempre puede volver
‘al hogar’... Es la casa que [el ser humano]
Para Bollnow, en el habitar humano habita. Su casa se convierte en el centro
“quedan conservados ciertos residuos concreto de su mundo” (Bollnow, 1969,
insolubles de la vida arcaica, pp. 117-118). Para poner de manera más
incomprensibles desde un criterio intuible lo planteado, Bollnow menciona
racional utilitario” (Bollnow, 1969, p. 131). una bella inscripción de una casa ideada
Una señal que considera con cuidado por Hermann Broch:
Bollnow es el hecho de que incluso
quienes son despreocupados y desatentos En el centro de toda lejanía
con la propiedad ajena, sienten aún un se encuentra esta casa,
cierto respeto al transgredir o penetrar quiérela pues.
la casa del otro sin ser invitados. Y
como prueba de este comportamiento, Varias preguntas se pueden plantear
destaca el hecho de que en sistemas a partir de estos versos: ¿Qué significa
legales europeos, la “penetración o ese centro, por qué la lejanía, sobre todo
estancia ilegales en una morada ajena” en tan cercana implicación con una
o “allanamiento de morada” acarrea supuesta preeminencia del centro para la
una pena muy estricta que hace patente vida efectiva de los seres humanos? ¿Es
el hecho de que en la inviolabilidad de efectivamente el habitar una preocupación
la morada “vibra un peculiar carácter nuestra? ¿A quién de nosotros le preocupa
sagrado” (Bollnow, 1969, p. 131). Solo la casa, si es solo un sitio de paso (de
tendríamos que sensibilizarnos a los un paso agotado por las gravedades del
desplazamientos forzados, en los cuales tráfago cotidiano), al que solo queremos
obviamente la morada es desposeída, llegar para medio morir de cansancio, un
para poder aceptar algo del argumento sito de pobre recuperación del dolor?
de Bollnow. No es tampoco un simple
impulso social-romántico desear para los Los versos le abren el camino al sentido:
desposeídos el cuidado y confianza de un desde el ser humano mítico, el centro es
albergue fijo donde puedan desplegar sus primordial para las culturas en la medida
posibilidades humanas dignamente. en que es el lugar de reconocimiento,
de partida y llegada, de construcción
Ahora bien, “estar en casa” no es solo e identidad. Pero, además, la casa se
ocupar el espacio de la vivienda como encuentra en el centro: “en el centro
construcción, sino que es una forma de de toda lejanía”. Es decir, el “recinto de
ser en el mundo. No son arbitrarias las lo cercano y familiar... la pertenencia
expresiones corrientes del lenguaje, en propia...”, donde en rigor somos. Ahora
las que extendemos el sentido de la casa bien, Bollnow señala acertadamente el
hacia lo conocido, lo confiable, el barrio e doble y profundo sentido de los versos: el

Revista Colombiana de las Artes Escénicas Vol. 9 enero - diciembre de 2015. pp. 122 - 145 139
LA PREGUNTA POR EL ESPACIO. ENSAYO DE DELIMITACIÓN EN UNA PERSPECTIVA FENOMENOLÓGICA.

centro de toda lejanía es, a la vez, allí donde ciudades alemanas y, sobre todo, del ser
nos reconocemos como lo que somos en humano moderno para el que el centro
la seguridad de lo habitual, pero también significativo del hogar, de la comunidad y
“allí donde la lejanía es más densa, más del arraigo en la existencia se han diluido
‘lejana’ que jamás, en el auténtico corazón en formas del desarraigo, el destierro,
de la lejanía” (Bollnow, 1969, p. 118). Así, el exilio y la dificultad en la tenencia
la casa es lo más próximo y lo más lejano, de vivienda. Así, en este panorama de
y habitar la casa es esencialmente ambas desarraigo y carencia de vivienda, se
cosas: estar en lo más habitual, conocido, convierte para el hombre moderno en
dado, pero por lo mismo en lo más una misión permanente la creación de
alejado por ser ya hábito; ser protección, un centro “construyendo y habitando su
amparo, cuidado, y simultáneamente casa” (Bollnow, 1969, p. 118).
destacar lo vulnerables y necesitados
de protección que somos; por ser lo más Nos volvemos ahora a una clarificación
cercano y habitual, comporta el riesgo de del habitar, en la consideración sobre la
la extrañeza y del olvido y que exige, por que el mismo Bollnow se apoya, esto es,
lo tanto, que se le ame. la conferencia de Heidegger, de 1951,
Construir habitar pensar.
Considero muy importante este punto
del capítulo sobre “El amparo de la casa”, *****
pues nos trae de nuevo a la presencia
las preguntas fundamentales de las Ya han pasado cerca de 60 años desde
que parte el libro mismo: ¿De dónde que Martin Heidegger fuera invitado a
proviene la importancia de la pregunta la segunda “Conferencia de Darmstadt”,
por el espacio? y ¿por qué, al pensar y presentada con el título “Hombre y
desplegar esta pregunta, la preeminencia espacio”, en 1951, y en la que dictara la
está ubicada en el habitar, más que en conferencia Construir habitar pensar. La
cualquier comportamiento con respecto mayoría del auditorio estaba constituida
hacia el espacio? por arquitectos y expertos del urbanismo
y la construcción, y atendía al pensador
Así, pues, las preguntas por lo que sea el buscando no obviamente sus orientaciones
espacio y por lo que sea el habitar como en materia de edificación y planeación,
modo de ser del ser humano, se plantean sino sus indicaciones en materia del
como ineludibles. En la medida en que pensar mismo. Solo eso. Y, sin embargo,
el hogar significa para Bollnow el centro tanto la situación histórica, política y
de la experiencia del espacio que es el ser social de la segunda postguerra mundial,
humano, va a plantear el carácter eminente como el asunto mismo del pensar, se
del estudio del mismo. Hay que destacar imponían a la reflexión y al hacer de
que no se trata de una consideración quienes emprendían la reconstrucción
diletante, subjetivista y “burguesa”, sino de la nación alemana recientemente
que parte de las situaciones expresadas sometida y de una Europa que habían
por Heidegger, en 1951, de carencia de padecido el fuego y la destrucción de
vivienda, de destrucción masiva de las los bombardeos aéreos masivos de los

140
Carlos Eduardo Sanabria B.

últimos meses de la Segunda Guerra artistas e intelectuales (curiosamente,


Mundial. En la conferencia mencionada, no tanto a los filósofos, con contadas
concluía Heidegger, retomando el sentido excepciones), y las interpretaciones
de su intento de pensamiento: del contenido no se hicieron esperar9.
Incluso, apoyándonos en Otto Bollnow y
Intentamos meditar en pos de la en recientes estudiosos del problema del
esencia del habitar. El siguiente espacio en Heidegger, podríamos rastrear
paso sería la pregunta: ¿qué el nudo del planteamiento crítico sobre
pasa con el habitar en ese tiempo el espacio, en varias disciplinas, hasta
nuestro que da qué pensar? Se
las primeras indicaciones del ser-en-el-
habla por todas partes, y con
mundo de la Analítica existenciaria de
razón, de la penuria de viviendas.
No sólo se habla; se ponen Ser y tiempo, de Heidegger. Pero lo que
los medios para remediarla. queremos plantear en este ensayo no
Se intenta evitar esta penuria es una genealogía de las ideas y de los
haciendo viviendas, fomentando problemas del espacio en la filosofía del
la construcción de viviendas, siglo XX, sino un problema fundamental
planificando toda la industria que se anuncia en el extenso anuncio que
y el negocio de la construcción. hace Heidegger sobre el problema del
Por muy dura y amarga, por habitar en nuestro tiempo.
muy embarazosa y amenazadora
que sea la carestía de viviendas,
Si señalamos el lapso transcurrido
la auténtica penuria del habitar no
desde el momento en que fuera dictada
consiste en primer lugar en la falta
de viviendas. La auténtica penuria la mencionada conferencia, lo hicimos
de viviendas es más antigua aún principalmente con el propósito de
que las guerras mundiales y las delimitar un período de tiempo que ha
destrucciones, más antigua aún visto cómo han cambiado la orientación
que el crecimiento demográfico y el interés de algunas preocupaciones
sobre la tierra y que la situación de los estudios humanísticos, sociales
de los obreros de la industria. y urbanísticos, y cómo los mismos han
La auténtica penuria del habitar estado acompañados (si no anunciados)
descansa en el hecho de que los por fenómenos y prácticas artísticos que
mortales primero tienen que
han hecho énfasis en tales cambios.
volver a buscar la esencia del
habitar, de que tienen que aprender
primero a habitar. ¿Qué pasaría si En efecto –y solo por destacar algunos
la falta de suelo natal del hombre hitos muy significativos–, en este lapso
consistiera en que el hombre no se han formulado los esfuerzos de
considera aún la propia penuria pensamiento más claros por desplazar
del morar como la penuria? el centro de importancia de la reflexión
filosófica desde la primacía de la
Han pasado ya casi 60 años, y desde 9
Además del enriquecedor y cuidadoso estudio de Otto Boll-
el momento en que fue pronunciada now (Hombre y espacio, Editorial Labor, Barcelona, 1969), véanse
los artículos de Eduard Führ, “On the perception of ‘Building-
esta charla dio mucho qué pensar, Dwelling-Thinking’ in architecture” (Führ, s.f.) y “Heidegger’s
particularmente a científicos, arquitectos, functionalist mediation of space, location, material, and work
of art” (Führ, s.f.).

Revista Colombiana de las Artes Escénicas Vol. 9 enero - diciembre de 2015. pp. 122 - 145 141
LA PREGUNTA POR EL ESPACIO. ENSAYO DE DELIMITACIÓN EN UNA PERSPECTIVA FENOMENOLÓGICA.

temporalidad (piénsese, por ejemplo, en malentendidos y las comprensiones


la primacía que adquiere la forma pura más o menos translúcidas en los que
de la temporalidad, en Kant, sobre la generalmente somos los seres humanos.
forma pura y sentido externo del espacio, Las señales nos convocan: una clara
tradición que podría extender su influjo producción bibliográfica, desde distintos
por toda la filosofía moderna, incluso frentes disciplinarios y profesionales;
desde su antecesor Descartes, hasta la prácticas y fenómenos artísticos modernos
filosofía de Henri Bergson y los primeros y contemporáneos que de manera
planteamientos de la fenomenología en explícita ponen en vilo nuestras habituales
Husserl), hacia la co-originariedad, si concepciones y experiencias del espacio y
no primacía, de la espacialidad del ser del ser en el espacio; fenómenos históricos
humano; así mismo, desde las tempranas propios de las dinámicas políticas, sociales
Intenciones en arquitectura (Norberg- y culturales del siglo XX y XXI que señalan
Schulz, 2001 [1979], del historiador que el ser humano es en el espacio, aunque
y crítico de la arquitectura Christian de maneras defectivas y dolorosas,
Norberg-Schulz, la arquitectura es vista, como los desplazamientos forzados, los
más que como un proceso constructivo urbicidios, los anexionamientos; y, como
dentro del espacio, como una actividad lo hemos trabajado en nuestro seminario,
destinada a señalar y significar lugares10; o, la vivencia cotidiana de seres humanos
resumiendo, los replanteamientos y crisis individuales, sociales e históricos que
de los fundamentos de los paradigmas encarnan y transforman la ciudad vivida
disciplinares, a lo largo del siglo XX, en en su decurso durante el último siglo.
campos como la geometría, la geografía
crítica, la psiquiatría fenomenológica, por ¿Cómo atender a semejante conjunto de
mencionar algunos casos. Estas crisis han cuestionamientos, desarrollos teóricos
tenido que ver con la preocupación por y fenómenos artísticos y sociales? Quizá
pensar el espacio, la noción de lugar y la por adiestramiento de filósofo o porque
corporeidad del ser humano, desde ese así lo demanden los asuntos mismos del
momento de cuestionamiento poderoso pensamiento, una vuelta al origen se
planteado por la horrenda conclusión de hace necesaria: al menos en el sentido de
la Segunda Guerra Mundial. lo originario heideggeriano, esto es, no
tanto o solo la vuelta al planteamiento de
Estamos, pues, siendo interpelados por el la pregunta por “ser”, como lo plantea en
asunto mismo que da mucho qué pensar: Ser y tiempo, sino por lo pronto la vuelta
nuestro ser en el espacio, acaso incluso a la indagación por aquello que funda
siendo obligados a poner en cuestión el las experiencias y comprensiones de lo
concepto mismo, al menos solo por la humano mismo. No se trata, entonces, solo
precaución del lenguaje, según la cual de constatar formas de ser espaciales en la
sabemos que las palabras mismas se ciudad contemporánea, sino también de
cargan de los sentidos de la tradición rastrear sus fuentes. Así, la pregunta por
y del pasado, del uso habitual y de los lo que sea el espacio o las experiencias de
10
Cfr. en este punto también el recorrido histórico que hace,
lugar en la ciudad contemporánea, debe
en el capítulo “Lugar: permanencia o producción”, Ignasi de atender, así sea brevemente, a las formas
Solà-Morales (2003).

142
Carlos Eduardo Sanabria B.

en que somos humanamente espaciales finalmente la arena del mundo sirva de


y no entidades abstractas como sujetos escenario para un fortuito encuentro.
dentro de un contenedor contrapuestos a
objetos. A la base de la inminente pregunta que
intenta plantear y desplegar Heidegger
Una orientación tal para pensar al ser en su conferencia de 1951, está la
humano fue anunciada en el mencionado consideración de esta forma espacial
replanteamiento de Heidegger de la del ser humano: no tenemos que salir
pregunta por “ser”. En efecto, si la pregunta a encontrar el espacio, sino que somos
habría de tener alguna orientación, esta le ontológicamente espaciales y siempre nos
vendría del lado de la pregunta misma, movemos en entornos de familiaridad
particularmente del quién que formula la más o menos discernibles, dentro de los
pregunta, esto es, el ser humano mismo. cuales solemos encontrar las cosas en su
Uno de los pasos en la llamada “Analítica “lugar”. Ahora bien, la diferencia de casi
existenciaria del ser-ahí” es el estudio de la 25 años, la ruptura humana global de
estructura del ser-en-el-mundo que define la Segunda Guerra Mundial, la historia
al ser humano. Heidegger, en su empeño personal de Heidegger irresuelta con
por desestructurar la visión cartesiana el nacional-socialismo, y las propias
y moderna del ser humano como un yo dinámicas de despliegue de la modernidad
o un sujeto pensante, confrontado con en arquitectura y urbanismo que nos
objetos exteriores, dentro de un espacio irán adentrando paulatinamente en la
contenedor, destaca el hecho originario experiencia contemporánea de la ciudad,
de que el ser humano siempre está ya el arte y la cultura, dan un trasfondo
proyectado y situado en un mundo. Para nuevo y unas posibilidades interpretativas
comprender y pensar la relación hombre- enriquecidas a las declaraciones de
mundo no hay que hacer piruetas Heidegger sobre el espacio, el habitar y el
epistemológicas cartesianas, ni apelar a la construir.
existencia de Dios que garantice nuestro
ser en el espacio: somos/estamos siempre Para finalizar, señalo brevemente
ya en algún lugar, teniendo que ver con algunos puntos de inflexión de la
las cosas. conferencia “Construir habitar pensar”,
que pueden acercarnos a la comprensión
No pretendo seguir el decurso del análisis de la experiencia contemporánea de la
de esa estructura fundamental que es el ser- ciudad y, posteriormente, a la del arte,
en-el-mundo. Sin embargo, quiero señalar particularmente aquel comprometido con
que en la comprensión de tal estructura se el énfasis en las formas de replanteamiento,
pone en vilo la estructura de continente- recuperación o redespertar del sentido
contenido del “en” y la secuencialidad de espacio y lugar. Será trabajo de otro
del ser humano, las cosas y el mundo: ensayo, desplegar el sentido situado de
en nuestra experiencia ordinaria no nos estos puntos en nuestra comprensión y
comportamos como objetos dentro de experiencia del espacio vivido.
un contenedor espacial, ni seguimos
un protocolo epistemológico en el que Es necesario destacar que la conferencia
primero seamos, luego sean las cosas, y mencionada hace parte de un conjunto

Revista Colombiana de las Artes Escénicas Vol. 9 enero - diciembre de 2015. pp. 122 - 145 143
LA PREGUNTA POR EL ESPACIO. ENSAYO DE DELIMITACIÓN EN UNA PERSPECTIVA FENOMENOLÓGICA.

de preguntas que se expresan en dos habitaciones, casas, viviendas, sino que


conferencias adicionales. Así, “Construir también nos sentimos en casa, habitamos,
habitar pensar” debe leerse en la red de más allá de las solas construcciones.
problemas de “La cosa” (1950) y de “… Por otra parte, hay construcciones que
poéticamente habita el hombre…” (1951). parecen no estar dentro del ámbito del
Solo a manera de indicación, podríamos habitar: aeropuertos, autopistas, plantas
arriesgar la hipótesis de que la primera eléctricas11. Incluso, respecto a estas
conferencia se ocupa de pensar el últimas, sabemos que el ingeniero no vive
problema del habitar y el “espaciar” como en ellas, pero sí se siente en casa en ellas.
formas de ser del ser humano, que, a su Así, la región del habitar no se restringe a
vez, se encuentran en la base del construir tener vivienda o alojamiento.
(por ejemplo, arquitectónico); la segunda
se ocupa de pensar el habitar en relación Así, en segundo lugar, siguiendo el curso
a las cosas mismas, aquellas con las que de la experiencia del pensar mismo a
tenemos que ver todos los días, y la manera través del ejemplo, Heidegger pone en
como ellas nos arraigan justamente en el cuestión la lógica causal o funcionalista,
habitar mismo (por ejemplo, el diseño de según la cual el habitar es pensado como
“objetos”, como la jarra); y la tercera se fin del construir, y la idea misma de que
ocupa de pensar el cometido del lenguaje el habitar sea algo así como una actividad
(particularmente el lenguaje poético, que algunas veces emprendemos y otras
que es lenguaje en sentido preeminente) no. Siguiendo el rastro etimológico de las
dentro de ese despliegue del ser humano palabras, Heidegger retrotrae el construir
en el habitar. y el habitar (a través del alto alemán y
el antiguo protoindoeuropeo) hasta el
Ahora bien, al comenzar la segunda ámbito del ser. Señalamos rápidamente
mitad del siglo XX, la modernidad ha las conclusiones provisionales de
sido descrita como una situación de Heidegger: construir es, en sentido
desarraigo, carencia de vivienda, pérdida propio, habitar; habitar es la manera como
de la familiaridad encarnada en el hogar. los seres humanos somos sobre la tierra;
Incluso, como dice Hilde Heyne: “[e]n el
contexto de la filosofía… la modernidad 11
Aunque aquí no lo desarrollaremos, es importante señalar
frecuentemente se describe como una cierto carácter cuestionable de los ejemplos de Heidegger. A
partir de su diferenciación, enraizada en Ser y tiempo, de las
condición diametralmente opuesta a la posibilidades de ser del ser humano como existencia auténtica
del habitar” (Heyne, 1999, p. 15). Ante este oentre
inauténtica, Heidegger parece hacer una distinción similar
construcciones que acogen y promueven más “auténtica-
desarraigo de la modernidad, Heidegger mente” el habitar, y otras que no lo hacen tanto. Son conocidos
propone pensar, y pensar justamente los ejemplos de la casa de campo y el antiguo puente como
instancias que ayudan a aclarar el habitar, diríamos, auténtico.
el habitar. En primer lugar, propone Sería interesante preguntarse si dentro de las construcciones
que tratemos de distinguir, por vía de posibles de la ciudad contemporánea, y dentro de políticas, por
ejemplo, de recuperación del espacio público y del sentido de
ejemplos, el simple ocupar una vivienda o comunidad, no habría algunas que caen dentro del ámbito del
un lugar (a la manera del sujeto dentro de habitar auténtico contemporáneo, construcciones más “mod-
ernas” como ciertos puntos de encuentro de la comunidad,
un contenedor denominado habitación o “escenarios” de la vida pública, etc. Es obvio que no se trata
casa), para ver los límites más amplios, ricos de que las construcciones sean contenedores que pueden, en
mayor o menor medida, ofrecer un espacio para el habitar; más
y móviles del habitar: no solo habitamos bien, el habitar acontece, en el ser mismo humano, como una
posibilidad de vida.

144
Carlos Eduardo Sanabria B.

el construir puede desplegarse como el Heidegger, M. (1994). Construir habitar


cuidar el crecimiento (cultivar, abrigar) pensar. En M. Heidegger. Conferencias y
y como erigir edificios (arquitectura, artículos. Barcelona: Ediciones del Serbal.
planeación de ciudades). Heidegger, M. (2003a). Observaciones relativas
al arte - la plástica - el espacio/ El arte y el espacio.
Pamplona: Cátedra Jorge Oteiza, Universidad
REFERENCIAS Pública de Navarra.
Heidegger, M. (2003b). Ser y tiempo. Madrid:
Albrecht, H.J. (1981). Escultura en el siglo XX. Editorial Trotta.
Conciencia del espacio y configuración artística. Heyne, H. (1999). Architecture and Modernity.
Barcelona: Editorial Blume. A Critique. Cambridge: MIT Press.
Bollnow, O.F. (1964). El hombre y su casa. Husserl, E. (1991). La crisis de las ciencias
Revista Eco, 9(4-5-6), 452-493. europeas y la fenomenología trascendental.
Bollnow, O.F. (1969). Hombre y espacio. Barcelona: Editorial Crítica.
Barcelona: Editorial Labor. Krell, D.F. (1997). Architecture. Ecstasies of
De Solà-Morales, I. (2003). Lugar: permanencia Space, Time, and the Human Body. New York:
o producción. En I. de Solà-Morales. State University of New York Press.
Diferencias. Topografía de la arquitectura Norberg-Schulz, C. (1980). Genius Loci.
contemporánea. Barcelona: Editorial Gustavo Towards a Phenomenology of Architecture. New
Gili. York: Rizzoli.
Duque, F. (2003). Introducción. En M. Norberg-Schulz, C. (2001 [1979]). Intenciones
Heidegger. Observaciones relativas al arte - la en arquitectura. Barcelona: Editorial Gustavo
plástica - el espacio/ El arte y el espacio. Pamplona: Gili.
Cátedra Jorge Oteiza, Universidad Pública de
Navarra. Rilke, R.M. (1989). El libro de las horas.
Barcelona: Editorial Lumen.
Führ, E. (s.f.). Heidegger’s functionalist
mediation of space, location, material, and Sanabria, C.E. (Ed.). (2004). Estética. Miradas
work of art. Recuperado de http://www.tu- contemporáneas. Bogotá: Universidad Jorge
cottbus.de/theoriederarchitektur/Lehrstuhl/ Tadeo Lozano.
engl/fuehr/BWD2.html Ströker, E. (1987). Investigations in Philosophy
Führ, E. (s.f.). On the perception of ‘Building- of Space. Ohio: Ohio University Press.
Dwelling-Thinking’ in architecture. Vallejo, C. (1988). Poemas póstumos I. En C.
Recuperado de http://www.tu-cottbus.de/ Vallejo. Obra poética. Bogotá: Presidencia de la
theoriederarchitektur/Lehrstuhl/engl/fuehr/ República de Colombia.
BWD1.html

Revista Colombiana de las Artes Escénicas Vol. 9 enero - diciembre de 2015. pp. 122 - 145 145

View publication stats

También podría gustarte