El libro comienza con la historia de un chico que en sueños vio a una chica la cual al ver en la calle no pudo creerlo pero lamentablemente estaba en compañía de un adulto que se dedica a la pornografía y perversión de niños lo cual la chica nota y le ayuda a escapar de este adulto al llegar a casa no le es posible asimilarlo ocurrido y al ser un adolescente no puede comprender la diferencia de una sexualidad sana con la de una sexualidad perversa por lo que busca ayuda en algunos libros y al no encontrar respuesta exclama a dios. Su madre le observaba y le cuestiona sus palabras y este comienza a relatar lo ocurrido, la madre queda impactada pues para ella también es un horror lo que experimento su hijo y le dice que debe acudir a la policía a denunciar pues este agresor sigue afuera el chico se apena y le suplica que no haga nada, la madre no tiene opción y decide ayudarle mostrándole algunos libros referentes a sexualidad y el chico va a la cama un poco más tranquilo.