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CAPITULO III
La regulación artificial de nuestros ríos es una necesidad, tratando de satisfacer la demanda social, cada día
más exigente y cambiante, que pretende introducir una corrección en el ciclo hidrológico, ayudando a
minimizar las consecuencias extremas de inundaciones o de grandes sequías y mejoras para determinados
usos produce: en el riego, el abastecimiento, la producción de energía, etc.
Fig. 3.1 Se observa el embalse de las aguas, para las épocas de estiaje.
3.1 Definición:
Embalses, almacenamientos, atajados, azudes o reservorios, son los vasos que se cierran mediante una
represa, con el objeto de recoger las aguas de la cuenca, en la época de lluvias para ser soltadas en las
épocas de estiaje.
Son volúmenes de agua retenidos en un vaso topográfico natural o artificial gracias a la realización de obras
hidráulicas.
a) Ventajas
Mejoramiento en el suministro de agua, en épocas de sequía.
Aumento de las posibilidades y superficie de riegos.
Desarrollo de la industria pesquera.
Control de crecientes de los ríos y daños causados por inundaciones.
b) Desventajas:
Pérdidas en la actividad agroindustrial por inundación de zonas con alto índice de desarrollo.
Cambios en la ecología de la zona.
Posible incremento de la actividad sísmica, especialmente durante el llenado de embalses muy
grandes.
Perdidas de hábitats naturales, poblaciones de especies y de degradación de las cuencas arriba.
Desaparición y desplazamiento por inundación del embalse.
Emisión de gases por efecto invernadero.
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• Buena capacidad de almacenamiento, es decir, que se almacenen grandes volúmenes de agua, con costos
relativamente bajos.
• agua de buena calidad.
• Sitio apropiado para la colocación de aliviaderos u obras de toma
Para el análisis para la selección del tipo de represa o presas: se deben considerar los siguientes aspectos:
a) altura de la presa:
• Menores a 30 metros, el 80% son de presas de tierra.
• Mayores de 150 metros, el 60% son presas de concreto armado.
b) geomorfología de la cerrada: valles amplios (presas de tierra), valles estrechos (presas de
concreto armado).
c) Condiciones geológicas geotécnicas de la cimentación, es decir, cuando el macizo de
cimentación es muy deformable (rocas blandas o suelos) o de baja resistencia se construyen presas
de tierra.
d) Disponibilidad de los materiales de construcción.
• Áridos para las presas de concreto armado.
• materiales sueltos para las presas de tierra.
Es la capacidad necesaria para atender totalmente la demanda del proyecto. Esta capacidad deberá ser
incrementada para tener en cuenta la evaporación y otras que pudieran presentarse en el almacenamiento.
Se determina la capacidad máxima de un embalse teniendo en cuenta sus condiciones geológicas apropiadas
y que los rendimientos hídricos de la cuenca aseguren su funcionamiento. Para conocer la capacidad de
almacenamiento es necesario estudiar las diferentes ubicaciones de la boquilla de la presa
Qd = Q – D
donde :
Qd = Gasto por derivar
Q = Gasto en el emplazamiento de la represa.
D = Demanda del proyecto de riego.
3.5 Finalidad:
Una vez elegida la ubicación de la represa, es posible delinear la traza de aguas máximas del vaso
y determinar las áreas del espejo del agua del reservorio y los volúmenes almacenados, para lo
cual se procede a calcular las áreas y volúmenes cada que cubren las curvas de nivel dentro del
almacenamiento, cada 2 m.
- La localización de un vaso depende en gran medida del costo de la represa que controla el volumen
de almacenamiento y dependerá de las condiciones físicas e hidrológicas de la cuenca por encerrar.
- El aprovechamiento óptimo de un vaso ubicado en la cordillera de los andes, será necesario
efectuar una profunda investigación de su seguridad, mediante el estudio de glaciares y lagunas
peligrosas que pudieran afectar el vaso con desbordamientos imprevistos
- Los costos de expropiación de terrenos y de reubicación de obras civiles y ruinas arqueológicas
que pudieran aumentar su costo excesivamente.
- La traza máxima de inundación debe efectuarse un estudio minucioso de las condiciones de
estabilidad, permeabilidad y fugas de agua a otras cuencas.
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La ecuación de funcionamiento es :
Vf= Vi-Pe-Vs.
donde :
Vf = Volumen final o actual del reservorio en MM3.
Vi = Volumen anterior, en MM3.
Pe = Perdida por evaporación en MM3.
Vs = Volumen soltado ( salida) de la represa, en MM3.
MM3 = millones de metros cúbicos
Pe = C *S en ( MM3).
Al inicio de las soltadas ó salidas de agua de la represa puede incrementarse las pérdidas de infiltración en
el cauce, también las pérdidas de evaporación por lo cual analizar sus efectos en el escurrimiento fluvial
natural, es importante.
Para una mejor interpretación de los cálculos se dibujan llamada curva de funcionamiento del reservorio.
Fig. 3.3
Se inicia de los posibles ejes de la presa, considerando en el análisis los aspectos geológicos, topográficos,
canteras cercanas y facilidades para la construcción de la presa.
Los levantamientos topográficos deben cubrir una cota de 50 m superior al nivel de coronación de la presa
y cubrir las posibles áreas de relleno de la presa.
Los estudios geológicos, deben comprender el área de la presa, el área de las canteras, los estribos y el
fondo de la presa, cuando es necesario deberán efectuarse estudios geotécnicos para estudiar la estabilidad
de las formaciones rocosas, fallas geológicas y buzamientos.
Se deben efectuar estudios sísmicos del área de la presa y del vaso, que permiten la seguridad plena de los
diseños.
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Definir los niveles máximos que pudieran alcanzar las aguas en la presa.
• Efectuar los estudios de permeabilidad de campo en el eje de la boquilla y el vaso.
• El estudio de la boquilla permite elegir el tipo mas conveniente de presa y analizar diferentes alternativas.
• La determinación de la altura de la presa depende de los recursos hídricos de la cuenca y de los posibles
usos de agua.
Los vertederos o aliviaderos tienen por objeto eliminar en el tiempo más breve las descargas de avenidas y
evitar que la presa se dañe.
La cota del aliviadero se fija con el nivel normal de almacenamiento, es decir con el volumen máximo
embalsable.
Desde el punto de vista hidrológico, el aprovechamiento más conveniente para un almacenamiento para
fines de riego dependerá del régimen de la corriente, de la capacidad del vaso y de la superficie de riego.
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Es conveniente aclarar que cuando el régimen de la corriente es muy variable, el punto de quiebre de la
gráfica es mas difícil de definir, ya que la línea adquiere fuerte pendiente desde el origen de los ejes.
EN = E m x0.77 - P m (1 - c)
La evaporación neta se calculará a partir de la expresión citada anteriormente:
Si el porcentaje de variación es mayor es mayor o igual que 40 , se calcularán los escurrimientos haciendo
el coeficiente de escurrimiento variable anualmente con el fin de conocer los volúmenes escurridos y su
variación en una forma mas apegada a su presentación. Si el porcentaje de variación es menor que 40 se
calcularán los escurrimientos con un coeficiente de escurrimiento constante.
escurrimiento variable anual, con lo cual nos acercaremos mas a la forma real de los escurrimientos.
Teniendo en cuenta que el coeficiente "c" depende de muchos factores además de la intensidad de lluvia,
la variación del mismo pudiera ser representada por una función exponencial y gráficamente por medio de
una curva de la cual podemos conocer los puntos A y B.
Puede operarse con un coeficiente variable, conociendo, para un período determinado la precipitación
media anual en la cuenca y el coeficiente de escurrimiento medio anual correspondiente, procediéndose en
la forma siguiente: consideremos que un sistema de ejes cartesianos las abscisas nos miden los coeficientes
de escurrimientos, y las ordenadas las precipitaciones medias anuales. Podemos fijar los puntos A y B que
tendrán por coordenadas : A (0,0) y B(cm, Pm), en donde cm es el coeficiente de escurrimiento medio anual
y Pm es la precipitación media anual.
B (Cm , Pm )
A(0,0) C
Por los puntos A y B trazamos una recta, que representará linealmente en forma aproximada la ley de
variación de la precipitación con el coeficiente de escurrimiento. Las precipitaciones en la cuenca han sido
determinadas previamente, por lo que conociendo la precipitación de cada uno de los años por analizar,
podremos determinar su coeficiente de escurrimiento utilizando la gráfica de proporcionalidad directa
citada.
Al determinar posteriormente los escurrimientos mensuales, se tomará un coeficiente de escurrimiento
constante para cada año.
Existen "Métodos Estadísticos" que se consideran más "exactos" para la determinación de la relación entre
precipitaciones y escurrimientos, sin embargo, el que acabamos de exponer es más sencillo y para nuestro
propósito los resultados obtenidos son satisfactorios al compararse con aquéllos.
Habrá ocasiones en que dada la variación del régimen, convenga deducir los escurrimientos, o si se quiere
realizar un estudio más lógico, aplicando coeficientes de escurrimiento variables cada mes, con el mismo
criterio explicado.
VE = AxcxP m xF
El volumen escurrido medio mensual se calcula a partir de la expresión siguiente:
en donde:
VE = volumen escurrido medio mensual
A = Area de la cuenca hasta el sitio de estudio
c = Coeficiente de escurrimiento
P'm= Precipitación media mensual en la estación base
F = Factor de corrección
Para la determinación de la precipitación media anual en la cuenca, primeramente se usa el plano de isoyetas
regional, obteniéndose para el lugar, una precipitación Pc . Como este único valor de precipitación no es
suficiente para darnos cuenta de la forma en que varía el escurrimiento, necesitamos disponer de un mayor
número de datos que nos encaucen al mejor conocimiento del régimen. Para tal efecto, suponemos que
alrededor de la isoyeta determinada, existe una zona que tiene la misma ley de variación de precipitación y
que dentro de esa zona se encuentra localizada la cuenca, en cuyo centro de gravedad está ubicada una
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estación climatológica "imaginaria" con esas mismas propiedades. A continuación, elegimos una estación
pluviométrica, la mas cercana al centro de gravedad de la cuenca y que cuente con el mayor número de
observaciones en registros mensuales de precipitación. A esta estación se le dará el nombre de "Estación
Base", cuyo objeto fundamental es que a partir de sus datos, sea deducido un período de observación en la
estación ficticia y por consiguiente conocer los valores mensuales de la precipitación en la cuenca.
F = Pc
Pm
entre la precipitación media anual observada de la estación base:
Calculado este factor, bastará multiplicar por este factor las precipitaciones mensuales registradas en la
estación base para deducir las correspondiente a la cuenca.
Conocida la precipitación media mensual y haciendo uso de la expresión antes mencionada, se irán
determinando los volúmenes escurridos medios mensuales en el período considerado, para obtener
finalmente el escurrimiento total y el medio anual.
La capacidad de los azolves depende de la cantidad de azolves que continuamente transporta la corriente
de referencia, y su magnitud debe cubrir el volumen necesario para proteger el libre funcionamiento de la
obra de toma durante la vida útil de la presa. Por estudios efectuados se ha aceptado considerar un porcentaje
promedio anual de sedimentación del 0.15% del escurrimiento medio anual.
Por otra parte, se ha fijado para un pequeño almacenamiento una vida útil de 25 años. Por tanto, el volumen
C az = 0.0015* 25* V m
C az = 0.0375* V m
de azolves para la vida útil del pequeño almacenamiento es :
en donde :
Caz = capacidad de azolves en m3
Vm = volumen escurrido medio anual en m3
Conociendo los escurrimientos medios anuales V, y la capacidad de azolves, se disponen varias alternativas
para la capacidad total del vaso CT, calculándose los volúmenes derramados medios anuales Dm, durante
el período de estudio. Conviene anotar los porcentajes de los volúmenes derramados con respecto al
escurrimiento total medio anual. Es obvio que, en forma aproximada:
Capacidad total CT = escurrimiento anual V - Derrame anual D:
o sea que :
D = V - CT
Si V < CT entonces D = 0
D (V CT )
Dividiendo D entre el número de años del período de estudio se obtiene el volumen medio anual derramado:
D (V CT )
n n
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(V - CT)
Dm =
n
en donde :
D = Volumen derramado anual
V = Volumen escurrido anual
CT = Capacidad total propuesta
n = Número de años del período estudiado
Dm = Volumen derramado medio anual en el período
V ev = EN * Am
Para el cálculo de los volúmenes medios anuales evaporado, se utilizan la siguiente expresión:
siendo :
Vev = Volumen medio anual evaporado, en m3
EN = Evaporación neta en m
Am = Area media, en m2, localizada en la gráfica de áreas y capacidades, y correspondiente a una
capacidad media dada por la expresión:
CT + C az
CM =
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en donde :
CM = Capacidad media, en m3
CT = Capacidad propuesta, en m3
Caz= Capacidad de azolves, en m3
En este cálculo se ha propuesto que la evaporación es constante durante todo el período de estudio, lo cual
no es cierto, pero ya que el error que se comete al hacer esta consideración no es de gran magnitud, se
aceptará evitándose con ello efectuar el estudio de las evaporaciones mensuales.
Para determinar los volúmenes aprovechables correspondientes a cada una de las capacidades totales
propuestas partiremos de la igualdad:
Vol. escurrido medio anual = Volumen aprovechable. + Vol. derramado medio anual + Vol. evaporado
medio, Luego:
V aprov = V m - ( Dm +V ev )
expresión que se aplicará a cada capacidad total cuyos Dm y Vev son conocidos.
Para conocer la superficie beneficiada neta, bastará dividir el volumen aprovechable entre la demanda bruta
de riego, la cual a quedado definida al desarrollarse los estudios agrológicos.
Con los resultados obtenidos, estamos en posibilidad de construir una curva de "capacidades totales -
beneficios" con la que podemos definir nuestra capacidad conveniente, atendiendo al máximo beneficio
con la capacidad mínima, es decir, obtendremos la capacidad económica.