PEQUEÑAS ACCIONES, GRANDES CAMBIOS

“No siempre podemos hacer grandes cosas,

pero sí podemos hacer cosas pequeñas con gran amor.”

- Madre Teresa de Calcuta

La sociedad ha crecido tan abruptamente, que las injusticias y necesidades se han

vuelto el principal detonante de las marcadas clases sociales. Millones de familias en

el mundo no gozan de una vida cómoda, provocando que el hecho de mantenerse en

un trabajo, hogar e incluso comer sea una tarea difícil del día a día. Es justamente por

ello, que nace en las personas el deseo de brindarle una ayuda por más simple que

sea a ciertas personas que lo necesitan, sin pedir nada a cambio, solo por voluntad.

Estas acciones pueden llegar a ser tan poderosas, que son capaces de generar en los

menos privilegiados una sensación de esperanza y apoyo, sin importar la magnitud de

la ayuda.

Justamente por ello, en nuestro país, han salido adelante muchos movimientos

solidarios que han tenido una gran aceptación por parte de los ayudados y

espectadores. En el presente escrito, quiero dejar de lado por un momento a los

grandes proyectos ya consolidados, para darle paso a grupos que poco a poco están

mitigando la incertidumbre que sienten las personas para con sus gobernantes…

El grupo juvenil, “Regálame una sonrisa” es originario de Lunahuaná y liderado por

Jordy Zapata desde el año 2013. Nació esta idea al incumbirse más en la política de

su distrito y darse cuenta que las campañas navideñas eran muy pobres y con

preferencias, tanto, que estas no lograban captar la atención ni el cariño de toda su

población, en especial, de sus niños. Realizó una convocatoria, en la que llegó a reunir

a tan solo 7 jóvenes, les comentó sobre su propósito y los invitó a compartir sus
propuestas; decidieron encargarse de alegrar la Navidad de sus paisanos de una

manera diferente y más inclusiva a las que normalmente se organizaban.

La emisora que dirige es la más escuchada en todo Lunahuaná, por lo que, es de gran

ayuda para la promoción de la campaña y recaudación de fondos; por medio de un

espacio realizan el llamado a la población para colaborar con lo que puedan; duplican

el dinero obtenido organizando actividades para poder contratar un show infantil y

comprar los regalos que se les entregará a los niños. Esta campaña se realiza una vez

al año, pero me atrevo a decir que es la más esperada por sus pobladores, pues en

vísperas navideñas, se ha vuelto normal escuchar la frase: “Ya se acerca la campaña

de la radio, ¿Irás?”, además, con el tiempo, sus asistentes han aumentado

considerablemente.

Como has podido darte cuenta, no hace falta ser poderoso ni juntarte con cantidad de

personas, lo único que importa es que tus acciones realmente cambien la vida de los

demás. Ser generoso con los que nos rodean genera un sentido por el cual esforzarse

cada año, nos regala automáticamente satisfacción y fraternidad. Tenemos que

aprender a no esperar que hagan las cosas por nosotros, sino que despertemos la

creatividad para unirnos junto a más personas para mejorar aspectos que impiden el

progreso.

Así como Regálame una sonrisa, encontremos nuestro lado más humano formando

parte de grupos así o ayudando con lo que solicitan, que también es fundamental.

Asimismo, pienso que si de verás queremos sembrar en las personas los valores, es

de suma importancia el que se incorporen estos en la educación, no solo en el colegio,

sino en el hogar, enseñando su gran impacto en la sociedad. Porque las pequeñas

acciones, generan grandes cambios.