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Universidad de Huánuco

Facultad de Derecho y Ciencias Políticas


2021

Sistemas Procesales en el Derecho Romano

Docente: Arturo Jesús Saldaña


Torpoco
Estudiante: Juan Emmanuel Torres
Cloud
Curso: Derecho Romano
Sección: “B”

Huánuco – Perú
1. INTRODUCCIÓN

La organización del procedimiento cambió en el Derecho Romano. Se


han conocido tres sistemas de procedimiento civil. El primero data del
Antiguo Derecho y se aplica exclusivamente desde mediados del siglo VII
de Roma y del comienzo de la República, 509 antes de J.C., hasta la
época de los Graco1, 150 antes de J.C. Es un sistema oral y formalista
llamado Acciones de la Ley.
El segundo período es el sistema llamado Formulario o por fórmulas
escritas, que domina en la época clásica (del 1 al III siglo de la era
cristiana). Estos dos sistemas se desarrollan dentro de una organización
judicial muy particular, que combina el principio de la justicia arbitral con
la justicia estatal.
El tercer procedimiento llamado Extraordinario o Cognitio extraordinaria,
existía para ciertos casos especiales tanto en el tiempo de las “legis
actiones”, como después de la “Lex Aebutia”, y en virtud del cual el
pretor, por su propio imperio, sin que mediara “judicium”, dictaba la
resolución. Operada la transformación reorganización del estado imperial
en tiempo de Diocleciano2, el procedimiento extraordinario sustituyó
completamente al procedimiento formulario, y se abolió la división del
proceso ante el pretor y ante el juez.
El proceso en roma nos sirve hasta nuestros días para entender cómo se
constituyen las normas que regulan la utilización de los aparatos del
estado que aplican el derecho, ya que no es suficiente solo con tener un
derecho sustantivo que nos da derechos e impone obligaciones, ya que
al ser seres imperfectos en algún momento necesitaremos que se nos
reconozcan nuestros derechos, y el encargado de hacer esto es el
estado.
La importancia de este ensayo recae en el análisis de los primeros
procesos que se llevaron a cabo y del cual se influencian la mayoría de
sistemas en nuestro mundo moderno. Por lo tanto, en el presente trabajo
se estará tratando a través de diferentes registros históricos y autores,
los sistemas procesales en el derecho romano, resaltando la importancia
de cada una de ellas.
2. DESARROLLO
1
Eran hijos del general y estadista Tiberio Sempronio Graco y de Cornelia, de la familia de los Escipiones.
Durante este período, ambos hermanos obtuvieron el cargo de tribuno de la plebe, desde cuya
magistratura pudieron elaborar y proponer una serie de leyes que iban a favorecer a: La plebe urbana.
2
Diocleciano, nacido con el nombre de Diocles, fue emperador de Roma desde el 20 de noviembre de
284 hasta el 1 de mayo de 305. Nacido en una familia iliria de bajo estatus social, fue escalando puestos
en la jerarquía militar hasta convertirse en el comandante de la caballería del emperador Caro.
2.1 Conceptos fundamentales:

2.1.1 El derecho sustantivo


Es el conjunto de derechos y obligaciones para los ciudadanos en un
territorio durante un tiempo que se encuentran recogidos en normas, leyes o
reglamentos. Habitualmente el derecho sustantivo se utiliza como un
sinónimo del derecho objetivo.
Se denomina derecho sustantivo a aquel conjunto de derechos y
obligaciones que regulan la vida cotidiana de las personas y que se
encuentran recogido en códigos legales, así como el código civil, código
penal o código mercantil.
También se conoce a este derecho como el derecho de fondo, el que
establece los verdaderos derechos y obligaciones que rigen la vida de los
ciudadanos. Un concepto para apreciar es que este derecho es una
característica básica para el funcionamiento de un correcto sistema judicial
en cualquier país.

2.1.1.1 Características del derecho sustantivo


Las principales características del derecho sustantivo son:
 El derecho sustantivo se clasifica en derecho público o privado. El
derecho público afecta a las relaciones entre Estado y particulares y el
derecho privado afectan a las relaciones entre particulares. De aquí
también se podrían derivar las diferentes ramas del derecho actual.
 Igualmente, el derecho sustantivo se puede clasificar en derecho
imperativo y derecho dispositivo. El derecho imperativo hace referencia
a las normas que no pueden cambiarse por la voluntad de las partes y
son absolutamente obligatorias. Un ejemplo de estas normas es
aquellas que regulan la normativa de tráfico. El derecho dispositivo hace
referencia a normas que se pueden modificar por las partes en un caso
concreto. Los contratos por ejemplo también son un tipo de derecho
imperativo.
 El derecho sustantivo regula todos los ámbitos, desde el civil hasta el
laboral, administrativo, penal o mercantil.

2.1.2 Derecho Adjetivo y Sustantivo


En contraposición al derecho sustantivo se encuentra el derecho adjetivo, el
cual es un derecho procedimental. Es decir, establece las normas que rigen
la actividad de los ciudadanos ante la actividad judicial.
El derecho adjetivo no establece ningún derecho u obligación de fondo. Es
decir, el derecho a la libertad, o el derecho a casarse o la prohibición de
robar no es derecho adjetivo, sino sustantivo. En cambio, el derecho a
recurrir una sentencia en apelación durante un plazo determinado es
derecho adjetivo.
El derecho sustantivo serían los códigos civiles, penales, mercantiles,
laborales y el derecho adjetivo sería el derecho procesal penal, civil, laboral
o administrativo.
Para entender mejor esta diferencia, vamos a ver un ejemplo. Dos personas
quieren iniciar un proceso de divorcio donde deberán acudir ante el juez
para que resuelva el pleito de divorcio y disuelva el contrato de matrimonio y
el vínculo matrimonial.
El juez aplicará el derecho sustantivo para disolver el vínculo matrimonial.
Así aplicará el derecho de familia para establecer las reglas por las cuales
se dividirá el patrimonio conjunto del matrimonio o el establecimiento de la
custodia de los hijos.
En cambio, el derecho adjetivo que también entra en juego en este ejemplo,
es utilizado tanto por el juez como por los cónyuges. Este derecho
establece plazos y formas para presentar la demanda de divorcio, acudir al
juicio o recurrir la resolución dictada por el juez.
Básicamente es la columna vertebral de la actividad judicial, ya que nos
sirve para entender como realizar los procedimientos necesarios para una
correcta resolución de las controversias. Daremos un ejemplo para ser más
concisos:
Imaginemos que un cónyuge quiere demostrar que un bien es privativo y no
debe ser dividido entre los dos. Esta prueba estará sujeta a las formalidades
recogidas en el derecho adjetivo. Deberá presentarse de una forma
concreta (normalmente por escrito) y en un plazo y momento procesal
determinado. El mal uso del derecho adjetivo puede hacer perder a la
persona que se le aplicase un derecho. Es decir, si no se siguen las reglas
del derecho adjetivo se pierde la aplicación del pertinente derecho
sustantivo.
En el ejemplo que teníamos con el matrimonio, si el cónyuge que quiere que
un bien sea declarado privativo no presenta la prueba en la forma exigida o
en el plazo determinado, puede perder la posibilidad de que este bien le sea
asignado por completo solo por temas formales y no de fondo.
Como recalcando lo ya antes mencionado es una especie de columna
vertebral con caminos y guías para saber el correcto procedimiento que ha
de ser realizado para la resolución de un conflicto.
2.1.3 Proceso y el procedimiento:
El vocablo proceso viene de pro (para adelante) y cedere (caer, caminar).
Implica un desenvolvimiento, una sucesión, una continuidad dinámica.
Fairen Guillén señala que “el proceso es el único medio pacífico e imparcial
de resolver conflictos intersubjetivos”.
Para Véscovi, “el proceso es el conjunto de actos dirigidos a la resolución
de un conflicto, y resulta, en último término, un instrumento para cumplir los
objetivos del estado: imponer a los particulares una conducta jurídica,
adecuada al derecho, y, a la vez, brindar a éstos tutela jurídica”.
Por su parte Monroy Gálvez dice que “el proceso judicial es el conjunto
dialéctico de actos, ejecutados con sujeción a determinadas reglas más o
menos rígidas, realizadas durante el ejercicio de la función jurisdiccional del
estado, por distintos sujetos que se relacionan entre sí con intereses
idénticos, diferentes o contradictorios, pero vinculados intrínsecamente por
fines privados y públicos”.
Según estos los autores antes mencionados nos dan a entender que el
proceso el medio más infalible para la búsqueda de una correcta resolución
de conflictos, y de paso seguir imponiendo obligaciones a los particulares
para cumplir los fines del estado a pesar de no competerle.
El proceso, significa desarrollo o avance; es dinámico como flexible; puede
apoyarse o seguir varios procedimientos; y su objeto principal es la de
optimizar recursos.
El procedimiento, se refiere a la acción de avanzar respetando pasos fijos;
es estático y rígido; se puede aplicar en un proceso completo o sólo parte
de un proceso; su objeto es conseguir un resultado en concreto de una
manera explícita.
Debemos entender que el proceso es un conjunto de formas procesales
requeridas con la finalidad que se desarrolle la función “jurisdiccional”; y el
procedimiento son aquellos actos que son cumplidos por las partes,
terceros, juez respetando las bases legales existentes como el tiempo y
lugar. En cinco palabras, “actos llevados dentro del proceso”.
Arnelutti, nos precisa que el procedimiento “Es el orden o sucesión de su
cumplimiento”.
Básicamente tenemos que comprender al procedimiento con la pregunta
“¿Cómo?” ya que va de la mano con el método que se debe ejecutar y un
punto fundamental que debemos de tener en cuenta es que un proceso es
flexible y dinámico ya que puede cambiar conforme pasa el tiempo,
mientras que el procedimiento es rígido.
En Derecho se emplea mucho la diferencia entre proceso y procedimiento,
para evitar confundirlos, ya que el primero es un juicio, mientras que el
segundo entra en las formalidades, las diligencias entre otros requisitos
necesarios y específicos para celebrar un juicio.
sin embargo, es fundamental que ambos términos se precisen, ¿por qué?,
nos podemos estar preguntando, pues principalmente por un mal manejo
del lenguaje jurídico que se les ha dado tanto por estudiantes y abogados;
para evitar caer en los mismos errores y para ello revisaremos algunos
autores.
Debemos entender que el proceso es un conjunto de formas procesales
requeridas con la finalidad que se desarrolle la función “jurisdiccional”; y el
procedimiento son aquellos actos que son cumplidos por las partes,
terceros, juez respetando las bases legales existentes como el tiempo y
lugar. En cinco palabras, “actos llevados dentro del proceso”.
Aquí quisiera recalcar algo muy importante, y que también puede ser un
error por mi parte debido a una mala interpretación, pero al parecer el
proceso es la guía que nos ayuda a saber como actuar, pero el
procedimiento es la acción o los actos que se realizan y deben cumplirse
por las partes, terceros y los jueces respetando las bases legales como lo
son el tiempo y el lugar.
Pero aquí nos hacemos una pregunta: ¿Qué es el procedimiento en
derecho? Pues son: Normas reguladoras para la actuación ante los
organismos jurisdiccionales, sean civiles, laborales, penales, contencioso-
administrativos, etc. La expresión de procedimiento puede tener dos
sentidos desde la perspectiva de Capitant: el amplio y el estricto.
Procedimiento en sentido Amplio: se trata de una parte o rama del Derecho;
y que tiene por objetivo establecer o encaminar las reglas relacionado a la:
Organización judicial, Competencia, Trámite de los juicios, Ejecución de las
decisiones etc.
Es decir, estamos frente al Derecho Procesal y de códigos procesales.
Procedimiento en sentido estricto: se trata del conjunto de actos que se
deben de cumplir o seguir para obtener lograr una solución judicial.
Otros autores como, Guillen y Vincent definen el término procedimiento
como un conjunto formalidades guiadas para someter una pretensión a la
justicia; por otra parte, Couture considera que se trata del método o estilo
para actuar ante los tribunales.
Como mencioné anteriormente son los actos-acciones que se deben seguir
durante el tiempo y el lugar determinados.
Por último, seria bueno mencionar lo que nos tienen que decir Piero
Calamandrei3, que enfatiza en el tema: el proceso como procedimiento
tienen diferentes significados técnicos: “El procedimiento es el aspecto
exterior del proceso. Este puede variar internamente del mismo proceso. Su
3
Procesalista italiano
actuar externa no pasa desapercibida, su trabajo administrativo que es
realizado en la praxis del derecho”; y también “El proceso va mucho más
allá de los actos de procedimiento. Es la suma, al considerar la estructura y
nexos que median entre los actos, sujetos que llevan a cabo tales actos, el
fin de los principios, las condiciones de quienes los producen, los deberes y
derechos”.
Teniendo en claro sus respectivos conceptos y significados del proceso y
del procedimiento tendría que recalcar un cuadro simple mostrando sus
principales diferencias.

Procedimientos Procesos
1.     Son implementados. 1.      Son gestionados.
2.     Pasos para seguir. 2.      Etapas para seguir.
3.     Personas, departamentos y 3.      Personas y departamentos
objetivos diferentes. diferentes, pero con objetivos iguales.
4.     Discontinua. 4.      Continua.
5.     Procesa información. 5.      La información es procesada en los
procesos.
6.     Existen y son estáticas. 6.      Se comportan y son dinámicas.

2.1.4 Acción:
Un concepto simple sobre la acción sería que los conflictos los resuelve el
Estado a través de su función jurisdiccional monopolizadora, en la medida
que un sujeto formule un pedido, pues el proceso funciona a pedido de
parte, según el principio romano “nemo iudex sine actore”. En
consecuencia, la acción no es otra cosa que reclamar un derecho ante el
órgano jurisdiccional, dándose inicio al proceso, el mismo que debe
culminar con una sentencia. Es decir que la acción nos permite tener
acceso al órgano jurisdiccional, más ello no significa que la parte accionante
sea la vencedora, pues eso depende del amparo o rechazo de la
pretensión, lo que sucede cuando se dicta sentencia. La acción se
materializa con la presentación de una demanda o de una denuncia, que
viene a ser el primer acto procesal del proceso postulado por el titular de la
acción.
La acción vendría constituyendo la el génesis de un juicio, ya que con el
inicio de la acción ante un órgano procesal se da el inicio al juicio, y este
culmina con una sentencia.

2.1.5 Definición de acción según Celso:


En sus orígenes la acción consistía en la actividad de reproducir
mímicamente ante un tribunal el hecho de la reclamación. De actividad
evolucionó al concepto de derecho a ejercer esa actividad. Celso 4, definió la
acción como el derecho a perseguir en juicio lo que se nos debe.
Definiciones como ésta, hicieron que durante mucho tiempo se confundiera
la acción con el propio derecho subjetivo.
Sin embargo, no es el mismo derecho reclamado, sino más bien un derecho
abstracto a reclamar ante el Juez un determinado derecho concreto, la
pretensión, que viene a ser el contenido de la acción. De esta forma la
acción obtuvo su autonomía, lo que a su vez constituyó el punto de partida
para reconocer la autonomía del derecho procesal.
Lo que Celso nos quiso decir, que mediante la acción debemos hacer
reconocer nuestros derechos y hacer que se respeten de acuerdo a como la
ley lo exige.

Todo lo expuesto en estos conceptos fundamentales, da, como resultado


aprender más acerca de los conceptos, para conocer el derecho del
proceso, y que nos servirá más adelante a desenvolvernos al conocer los
conceptos que más adelante se estudiará la llamada teoría general del
proceso.

2.2 Sujetos Procesales del proceso Romano

 Actor o demandante: El demandante es aquella persona con


interés en adquirir un bien o servicio. Ello, con el objetivo de cubrir
una necesidad insatisfecha.
Un concepto que se ha mantenido igual a través del tiempo mi única
cuestión sería ¿si una empresa podría ser demandante en la Roma
antigua? 5
 Reus: Quien desconoce un derecho o no ha cumplido con alguna
obligación, acusado de una causa, incluso a veces asume el valor
de culpable. Los antiguos romanos explicaban la palabra reus a
partir de la palabra res (cosa, hecho, asunto), considerando que el
reus era el sujeto sobre el que se ponía en cuestión una cosa o
asunto, pero no se trata más que de una vieja etimología popular.
4
Fue un filósofo griego que vivió en el siglo II. Su figura transcendió históricamente debido
a que escribió una serie de textos contra el cristianismo, escritos y teorías que fueron
contestados por el filósofo Orígenes. Su obra más conocida, el Discurso verdadero (Λόγος
'ΑληΘής), fue criticada por este en su obra Contra Celso, escrita entre 70 y 80 años más
tarde y gracias a la cual se conserva parte de la obra de Celso.
5
Algunos romanistas señalan que la empresa nace en época romana a través de la actividad empresarial
de los gladiadores, quienes alcanzaban su libertad luchando, y luego convertían la lucha en un modo de
vida, y en actividad empresarial, llegando a convertirse en personas acaudaladas.
La palabra reus está presente en el viejo principio jurídico romano in
dubio pro reo (en la duda, a favor del acusado), que postula que
más vale en un dictamen judicial absolver a un posible culpable que
correr el riesgo de condenar a un inocente
 Cognitor: Representante judicial. Lo podía designar tanto el
demandante como el demandado, y debía ser investido de su cargo
en términos solemnes y en presencia de la parte contraria. Se
requería la capacidad legal para comparecer en juicio. El cognitor
surge durante el procedimiento formulario.
 Procurator: En el derecho romano se llama procurator omnium
bonorum a quien representa o administra todos los bienes de otro
individuo.
 Rex: Encargados de resolver las controversias en el periodo
monárquico. 6
 Gobernadores: Administran justicia desde las provincias.
Un gobernador romano era un funcionario elegido o nombrado para
ser administrador principal del Derecho Romano en todas las partes
de una o más de las muchas provincias que constituían el Imperio
romano.
 Pretor: Un pretor (en latín, praetor) era un magistrado romano
cuya jerarquía se alineaba inmediatamente por debajo de la
de cónsul. En los primeros tiempos de la República romana, el
término pretor servía para designar a los cónsules, porque estaban
colocados al frente de los ejércitos, pero en el año 366 a. C. se creó
en Roma, con el título particular de praetor, una nueva magistratura
cuya función principal era la de administrar justicia en la fase in iure,
conceder interdictos, restitutiones in integrum y otras funciones
judiciales, además estaba dotado del ius edicendi. Otras funciones
del pretor incluían las de convocar al Senado y los comicios,
promulgar leyes, gobernar provincias y comandar ejércitos.
 Ediles Curules: Los ediles curules eran magistrados patricios
ordinarios de la República romana, sin imperium, pero que gozaban
de potestas con poderes de coerción y represión. Los ediles curules
ejercían una magistratura ordinaria, porque formaban parte de la
estructura normal y permanente de la ciudad de Roma.
Otra función importante era la de resolver conflictos entre ciudadano
(urbano) y extranjeros (peregrino).
 Iudex: La palabra iudex significa «juez» en latín. El iudex es una de
las magistraturas del derecho romano y designa a la persona
encargada de decidir de forma objetiva e imparcial un conflicto
sometido a su decisión, por lo general por disposición de las partes.
El iudex desarrollaba el proceso y dictaba la sentencia.

6
Rey. El rey de los romanos, en su forma política primitiva, era jefe político, sumo sacerdote, por presidir
el culto, con poder jurisdiccional en lo civil y en lo criminal, comandante del- ejército y legislador
supremo. El cargo era vitalicio.
El iudex era juez por excelencia con actuación en la etapa in
iudicio del proceso. Ante él las partes ofrecían y producían
las pruebas, tocándole decidir la suerte del litigio con la sentencia, la
que debía ajustarse al derecho que los contendientes invocaban. Su
nombramiento se efectuaba a propuesta del actor o por sorteo de
listas confeccionadas por el magistrado para cada litigio y debían
exponerse en el foro.
Es el magistrado encargado de la segunda fase del Procedimiento
Formulario, conocida como apud iudicem, o fase ante el juez
(iudex). Esta fase es la que sigue a continuación de la fase in
iure (ante el pretor). El iudex debe solucionar el conflicto sometido a
su competencia, para lo cual debe decidir si otorga o no derecho a
uno u otra de las partes intervinientes en el litigio. Para ello emite
una sentencia, con efecto de cosa juzgada, la cual se funda en su
opinión crítica y objetiva.

Vemos aquí los actores-sujetos que formaban parte del proceso romano,
apreciando nuevamente que la mayoría de sistemas procesales de las
naciones del mundo son la misma versión que nos dejaron los romanos, no
obstante, mucho más actualizada a las circunstancias y necesidades de dichas
naciones, pero cuyo concepto es el mismo en cuando a funciones que deben
seguir durante el proceso.

2.3 Sistemas Procesales:

2.3.1 Procedimiento De Legis Actionis

El sistema de procedimiento empleado en la Roma del periodo arcaico


o monarquía es el de las acciones de ley, llamado de esa manera por
estar enunciados o reglamentados en la Ley de las XII Tablas 7 o en
otras leyes; no así los textos que debían pronunciarse y los gestos
rituales que los acompañaban. Aunado a esto, los pontífices
determinaban los días hábiles del calendario es decir los días fastos
(aquellos en que podía acudirse ante el magistrado en procura de
justicia) y los nefastos, durante los cuales sería imposible.

7
La Ley de las XII Tablas fue un texto legal que contenía normas para regular la convivencia del pueblo
romano. También recibió el nombre de Ley decenviral. Por su contenido, se dice que pertenece más al
derecho privado que al público. Fue el primer código de la Antigüedad que contuvo reglamentación
sobre censura. La verdadera importancia de las leyes o Ley de las XII Tablas reside en que esta
codificación constituye la conclusión del proceso de consolidación del Estado ciudadano romano, de la
civitas.
En los orígenes del Derecho romano, la protección de los derechos
del individuo se producía en el ámbito del grupo familiar por el
ejercicio de la potestas del paterfamilias, como jefe supremo de la
familia, cuando el conflicto acaecía entre personas integrantes de la
misma familia. Sin embargo, ante disputas y lesiones de derechos
entre individuos de diferentes grupos familiares, la venganza privada
era la forma habitual de resolverlos. Las nefastas consecuencias de la
venganza privada y un mayor interés por parte de la organización de
la civitas de controlar las actuaciones entre los grupos familiares y
gentilicios propiciaron la aparición, en el primer siglo de la República y
dentro de la Lex XII Tabularum, de un instrumento procesal: la actio,
es decir, como el instrumento jurídico-procesal ejercitado por la
persona que quiera hacer valer su derecho ante el tribunal legalmente
instituido. De esta manera, en base al tipo de acción que se ejercitase,
se desarrollaron dos tipos de procedimientos:

Ejecutivas Y Declarativas. Al primer grupo pertenecían la manus


iniectio o legis actio per manus iniectinem y la pignoris capio o legis
actio per pignoris capionem (toma de prenda); al segundo, la legis
actio per sacramentum (acción de la ley por apuesta o por el
juramento sacro), la legis actio per condictionem (acción de la ley por
requerimiento) y la legis actio per iudicis arbitrive postulationem
(acción de la ley por petición de un juez o un árbitro).

 Declarativos: Con la finalidad de que el proceso sirva para el


reconocimiento formal de un derecho.
 Ejecutivos: Son procesos que persiguen la ejecución o
cumplimiento material de un derecho ya reconocido, bien por
ley o bien por una sentencia previa de un juicio declarativo que
así lo reconozca.
Las acciones ejecutivas tienen aplicación en aquellos casos en que no
se requiere la opinión del juez respecto a la existencia de un derecho
sino la aprobación del magistrado para ejercer, posteriormente, la
violencia privada contra quien estando obligado a ello no se comporta
de la manera esperada impidiendo así la realización del derecho a su
justo titular. Es el caso del acreedor, reconocido como tal, que no ha
podido, por los medios ordinarios, conseguir que el deudor solucione la
obligación contraída.

Por otra parte, Gayo8 considera que las acciones de la ley son cinco, a
saber: por apuesta sacramental, por petición del juez, por condición,

8
Gayo es uno de los juristas más enigmáticos, debido a que se carece de información sobre su vida. Por
ejemplo, se desconoce su nombre completo, pues Gayo era solamente su praenomen. Incluso, muchos
romanistas dudan en que verdaderamente haya sido un hombre y se ha llegado a plantear la hipótesis
de que fuese mujer.
por aprehensión corporal y por toma de prenda. Las tres primeras eran
contenciosas porque daban lugar a una contienda procesal entre actor
y demandado mientras que las dos últimas son ejecutivas.
El avance es notorio en cuanto a materia judicial, ya que pasaron de tomar la
justicia a mano propia, a ser regulada por medio de la ley de las 12 tablas, lo
cual le permitió un gran avance en el campo judicial

2.3.1.1 Características Del Procedimiento De Las Legis Actionis:

1) Es un procedimiento que pertenece al ordo iudiciorum 9 privatorum y,


por tanto, se desarrolla en dos fases:
- In iure: Ante un magistrado (magister), experto en materia jurídica
que inicia y encauza el proceso hasta la siguiente fase.
- Apud iudicem: Ante un juez (iudex) no experto en derecho, ante el
cual se practican las pruebas y dicta sentencia condenando o no al
demandado. Las sentencias son inapelables
2) Es un proceso muy solemne y formalista, en el que predominan las
declaraciones verbales u orales, regulado por el ius Civile y al que sólo
podían acudir ciudadanos romanos.
El modo en que se empezó a aplicar los procesos en el campo civil es cuando
menos sorprendente ya que crearon un sistema que fue la base de todos los
procesos que a día de hoy usamos.

2.3.1.2 Desarrollo del proceso:

- Citación (in ius vocatio)

La in ius vocatio era la citación del demandado para que acuda ante el pretor.
Cuando el demandado no quiere acudir ante el pretor al ser citado, hemos visto
que el demandante puede echarle la mano, es decir, ejercer un acto de
violencia física sobre la persona del demandado y conducirle de esta forma
ante el pretor.
He aquí una clara diferencia de cuanto a evolucionado estos sistemas, tal como
dice aquí, tu como demandante puedes llevar al demandado usando la fuerza
física, lo cual a día de hoy no se puede hacer o no debería hacerse.

- Litis contestatio y la designacion del juez o jueces

Después de la comparecencia celebrada por las partes ante el magistrado, si el


9
Orden que debe seguirse en la tramitación del juicio, pues el procedimiento de encuentra dividido en 2
etapas: desarrollándose la primera ante el pretor (in jure) para fijar la pretensión y la segunda ante el
iudex (apud iudicium) para desahogar pruebas, alegatos y pronunciar sentencia.
Estuvo presente durante la monarquía y la república.
proceso continuaba por no haberse producido la confessio o in iure cessio, los
litigantes actuaban ante el magistrado de conformidad con las declaraciones
solemnes que correspondiesen según la legis actio ejercitada. Estas
declaraciones eran acreditadas ante testigos, acto formal que constituía la litis
contestatio.

La designación del juez o del árbitro se procedía por común acuerdo entre las
partes o mediante sorteo. Los centumviri y los decemviri actuaban como jueces
en este procedimiento para posteriormente confiar al juez, árbitro o jueces el
poder de juzgar el caso concreto.
Una observación a tener en cuanta es que el derecho a día de hoy, no permite
elegir a los jueces que quieras para administrar tu caso, ya que estos vienen ya
preestablecidos, lo cual no pasa en un proceso arbitral, donde aún hoy en día
tienes esa opción.

- Fase ante el juez o apud iudicem

Se reanudaba el litigio con una breve recapitulación de los hechos que habían
dado lugar a la reclamación, en los comicios o en el foro. No obstante, si una
de las partes no comparecía antes del mediodía, perdía el litigio.

En materia de pruebas, era trascendental que los hechos fueran probados. Los
litigantes, además, tienen el deber de aportar las pruebas necesarias de los
hechos que alegan; el juez no tiene obligaciones de suministrar los medios de
prueba, no de realizar una investigación acerca de los mismos. Estos medios
de prueba son: las declaraciones de las partes bajo juramento y los testigos,
pero en épocas posteriores cobraron importancia los documentos y las pruebas
realizadas por los peritos, especialmente las que tenían relación con los
procesos hereditarios. El juez, por su parte debe someterse en ciertos casos a
reglas determinadas con objeto de apreciar y valorar los medios de prueba
aportados por las partes.
Tomando este concepto nos hace ver que en el tiempo de la antigua Roma
monárquica donde este proceso todavía estaba vigente, la importancia del
lugar y el tiempo, resaltando como valores fundamentales la puntualidad y
responsabilidad por parte de los actores para que el juicio sea concretado,
señalando un punto más es que las declaraciones bajo juramento y los testigos
tuvieron su mayor importancia como medio de prueba pero después tomaron
mucha más importancia los documentos realizados por los peritos.

- La sentencia

El juez jura que fallará el juicio y lo decidirá con arreglo a derecho, pero siendo
los árbitros ciudadanos particulares sin conocimientos jurídicos, era frecuente
que acudieran en consulta a un jurisconsulto.

La sentencia, en el caso de la legis actio sacramentum, decide cuál de las


partes ha ganado la apuesta sacramental, en las demás puede ser
condenatoria o absolutoria mientras que en las acciones divisorias (de la
herencia, de la cosa común y en la acción del deslinde), la sentencia constituye
derechos a favor de cada interesado al haber procedido a la división de cosas
que eran comunes y adjudicarlas ahora en partes divididas.

La ejecución de la sentencia: Se dio de dos formas:

a) Legis actio per manus iniectionem

Es un procedimiento ejecutivo, en virtud del cual el acreedor se apodera de la


persona del deudor delante del magistrado, en el caso de que el deudor no
presente un vindex10. El acreedor puede llevar al deudor a su asa, y pasados
sesenta días, venderlo como esclavo.

La lex Poetelia Papiria del 326 a.C abolió la prisión por deudas, incluso en el
caso de ejecución de la sentencia. Sin embargo, las leyes Publia y Furia
trataban de la acción corporal, estableciendo respectivamente la manus iniectio
al deudor principal a favor del fiador y ciertas disposiciones de la fianza.
Las duras condiciones de aquella época, nos hace ver como una de sus
variantes el que una persona podía a causa de una deuda, perder sus
derechos como ciudadano, aunque esto se cambió posteriormente no deja de
ser sorprendente la dureza de las épocas pasadas.

b) Legis actio per pignoris capionem

Consiste en el apoderamiento de algunos bienes del deudor, sin necesidad de


una previa condena y constituye un procedimiento ejecutivo. Los casos en que
puede ser utilizada esta acción especial tienen un marcado origen sacral y
público que se remonta a las XII Tablas.

Establecían la pignoris capio contra el que habiendo comprando una res para
sacrificarla a los dioses no pagó el precio y contra el que no paga el alquiler de
una caballería, siempre que tal alquiler se hubiese destinado a un sacrificio a
los dioses.

A decir de Darío Herrera Paulsen y Jorge Godenzi, la pignoris capio se


aplicaba a:

- A los militares (por un sueldo u otras prestaciones);


10
En Roma, en el procedimiento de la manus injectio, era aquel que intervenía a favor del deudor para
que fuera liberado del poder material del acreedor o para demostrar la impertinencia del acto.
- A los publicanos (cobradores de impuestos);

- A los casos que se relacionaban con la compra de ciertas especies, como una
hostia o un animal para sacrificarlos y que no se pagaban. En todas estas
circunstancias el ejercicio del derecho de prenda significaba una delegación del
poder público; era una reminiscencia del tiempo en que hubo acciones no
judiciales y sin proceso.
En los dos tipos de legis que acabamos de ver, la idea fundamental es la
importancia que se le daba al cumplimiento de las deudas, resaltando que el
incumplimiento de tus obligaciones como deudor se pagaba muy caro, ya sea
con el despojo de tus derechos como ciudadano o la toma de una de tus
pertenencias en los casos específicos ya remarcados.

2.3.1.3 Diferentes actives legis

- Legis actio per sacramentum

Es el procedimiento del derecho común, es decir, se emplea en todos los casos


en que la ley no indica otro: era un acto general.

Al respecto, Fernando Tola, menciona que el Sacramentum, consistía en


depositar una suma de dinero de cincuenta a quinientos ases por ambas
partes. El depósito se hacía en un lugar sagrado con el juramento que hacía la
parte, ante el rey, ante el cónsul, y cuando fue creada la pretura, ante el pretor.

Estos magistrados, después de constituido el sacramento, nombraban al juez


que había de determinar si el sacramento era justo o injusto. La sentencia del
juez, al resolver este punto, resolvía también el pleito. La ejecución de esta
sentencia se hacía por el procedimiento ejecutivo.
Según María Eva Fernández Baquero profesora titular de derecho romano en
la Universidad de Granada, nos menciona acerca del legis actio sacramento:
Es considerada como una de las acciones más antiguas y consistía en una
apuesta sacramental, es decir, el que perdía el juicio debía pagar una cantidad
de dinero (sacramentum), previamente establecida, en concepto de pena y a
favor del pueblo.
De esta manera quedaba interpuesta la acción con su respectiva apuesta
sacramental. Este tipo de acción tenía dos versiones:
- Legis actio sacramento in rem: Tenía un carácter real porque servía para
reivindicar una cosa. Por tanto, es una acción con eficacia erga omnes, es
decir, se ejercita contra cualquier persona que tenga en ese momento el objeto.
- Legis actio sacramento in personam: ejercitada para reclamar un derecho de
obligación y, por tanto, tiene un carácter personal en la medida que sólo se
puede reclamar a la persona de la que exigimos un comportamiento
determinado
Viendo los puntos ya expuestos sobre el sacramentum, La idea a rescatar en
este caso se probaba la veracidad de tus obligaciones civiles sobre el objeto en
conflicto, haciendo una especie de apuesta que a mí parecer se ve un poco
exótico en cuanto a materia procesal.

- Legis actio per iudicis arbitrive postulationem

Aparece mencionada en las XII Tablas para reclamar deudas nacidas de una
sponsio y estipulación y para pedir la división de la herencia. El rasgo más
importante del procedimiento es la desaparición del sacramento y así como la
indicación de la causa en la que el demandante basaba su reclamación.

"El demandante decía: afirmo que me debes dar diez mil sestercios a causa de
un contrato verbal. Te pido que digas si es verdad o no. El adversario decía
que no era verdad, y el demandante decía: 'dices que no, y por ello, a ti, pretor,
te pido que nombres un juez o un árbitro."

Como agregando un poco más te contexto a esta Legis, como ya se había


mencionado, en esta acción desaparece la apuesta sacramental y se limita a
pedir al magistrado el nombramiento de un juez o arbitro como consecuencia
de que el demandado no acepta pagar la deuda que reclama la demandante
surgida por una sponsio o contrato verbal, o bien para pedir la división de una
herencia. De ella, también nos informa Gayo, Inst., IV, 17 a, con el siguiente
caso:

- Demandante: Afirmo que me debes dar diez mil sestercios a


causa de un contrato verbal: Te pido que digas si es verdad o no”
- Demandado: El demandado decía que no era verdad
- Demandante: “Dices que no, y por ello, a ti, Pretor, te pido que
nombres un juez o árbitro”.

- Legis actio per conditionem

Son más recientes que las anteriores y fueron creadas por la ley Silia para las
obligaciones de sumas determinadas; y por la ley alcurnia, para toda obligación
de cosa cierta. Aquí el demandante no tenía obligación de expresar la causa de
su reclamación y se limitaba simplemente a solicitar la comparecencia del
demandado a los treinta días con objeto de elegir el juez.
Oros autores11 nos dicen: Surge por una lex Silia (s. III a.C.) para poder
reclamar deudas ciertas de dinero. Más tarde, en el siglo II a.C. la lex Calpurnia
extendió su utilización para reclamar cualquier otra cosa cierta. Ante la negativa
del demandado de reconocer una deuda, el demandante sin tener que expresar
el motivo de su reclamación, se limitaba a solicitar la comparecencia del
demandado a los 30 días con objeto de elegir al juez, según podemos ver en
Gayo, Inst., IV, 17 b, con el siguiente ejemplo:
Demandante: “Afirmo que me debes dar diez mil sestercios: Te pido que digas
si es verdad o no”.
Demandado: El adversario decía que no
Demandante: “Dices que no, y por ello te emplazo para elegir juez dentro de
treinta días”.
Lo que aquí nos presenta es un pequeño avance en cuando a materia
procesal, ya que desde su introducción no fue necesario que el demandante sin
tener que explicar el motivo de su reclamación, se limitaba a solicitar la
comparecencia del demandado, lo cual se ve como un avance muy prospero.

- Legis Actio Per Manus Iniectionem


Es una acción ejecutiva tan antigua como la legis actio sacramento, que se
ejercitaba:
- Cuando el demandado no cumplía la sentencia dictada por el juez
condenándole a pagar al demandante. En estos casos, sólo se podía ejercitar
pasados los 30 días a partir del pronunciamiento de la sentencia.
- O bien, si se había producido la confessio in iure, esto es, cuando el
demandado reconocía ante el magistrado durante el desarrollo del proceso de
que el demandante tenía razón en sus pretensiones.
De esta acción nos informa la Ley XII Tablas, III, 4-6, así como Aulo Gelio,
Noct. Att., XX, 1, 46-47, relatando que el vencedor en el juicio, ante el
incumplimiento del condenado, podía tenerlo en su domicilio encadenado
durante sesenta días. El peso de las cadenas no podía exceder de 15 libras y
debía alimentarlo. En el transcurso de ese tiempo, debía llevarlo durante tres
días sucesivos al mercado y proclamar en público la existencia de esa deuda.
Si nadie acudía en ayuda del condenado para pagar la deuda durante esos
sesenta días, el vencedor del proceso podía vender al condenado como
esclavo en el extranjero (trans Tiberim), o bien darle muerte. En el supuesto de
que hubiese varias personas que ocupasen la posición de vencedoras en el
juicio, la muerte del condenado se desarrollaría troceándolo en tantas partes

11
María Eva Fernández Baquero
como vencedores existiesen y, si alguno recibía una parte del condenado
menor que otro, ello no era causa para un nuevo litigio. A partir de la lex
Poetelia Papiria del 326 a.C., la prisión por deudas quedó abolida,
respondiendo el condenado con su patrimonio y no con su persona.
Como vemos es una acción ejecutiva, que por darle alguna critica sería de
exagerada en cuanto a cumplimiento del castigo, y por si no fuera poco la
humillación pública que caía sobre el condenado, también lo podían matar sin
ningún problema, felizmente esto tuvo su finalización al condenar el patrimonio
más no la persona.

- legis actio per pignoris capionem


Es una acción de carácter ejecutivo recogida por Gayo, Inst., IV, 26-29,
concedida a determinados acreedores que no han obtenido el cobro de sus
créditos para que, al mismo tiempo que pronuncian unas palabras solemnes
(las cuales no nos han llegado al no estar recogidas en las fuentes), se
apoderen de bienes del deudor en presencia de testigos.
Por la poca información que se tienen de estos mi observación sería que tienen
una similitud con la pignoris capio, al hacerse con los bienes del deudor más no
con la persona de este, lo cual me parece mucho más razonable tanto
judicialmente como moralmente.

2.3.1.4 Decadencia del Sistema de las Legis Actionis

Darío Herrera nos hace ver que: el procedimiento "Legis Actionis" por su


carácter esencialmente formalista tenía muchas imperfecciones que el tiempo y
la evolución social hicieron más evidentes. Siendo un procedimiento basado en
la misma ley, no permitía una acción que la ley no contemplase. No se
otorgaba a la autoridad judicial ninguna posibilidad de suplicar a la inacción del
legislador. El sistema permanecía estático frente a la evolución de las
necesidades.

Además, el riguroso formalismo de las acciones hacía que la suerte del


proceso dependiese, de su estricta aplicación, so pena de nulidad. El rigor de
su interpretación las hace impopulares. Son también costosas. Por eso, antes
del fin de la República y a principios del Imperio, surgieron muchas "Legis" que
suprimieron paulatinamente las Acciones de la Ley, o limitaron su acción.
Surgió así el Procedimiento Formulario, oficializado por la Ley Aebutia y las
leyes Juliae (posiblemente, bajo el gobierno de Augusto).
Como lo menciona Darío Herrera las acciones cayeron por su propio peso, lo
cual, a un lado de ser tan formalistas, las volvió impopulares, lo cual derivó en
su paulatina decadencia.
2.3.2 Procedimiento Formulario

Se dice que fue la Ley Aebutia (130 a.C.) la que introdujo el nuevo
procedimiento al lado de las antiguas Acciones de la Ley. El paso de la fórmula
verbal (Legis Actionis) a la fórmula escrita, presentó varias dificultades en la
composición de las fórmulas. Los textos demuestran cómo, por diversos
procedimientos, sobre los cuales no hay datos muy precisos, el pretor logró
perfeccionar el nuevo sistema.
Siguiendo a Fernando Tola, el pretor, que en las acciones legis no tenía más
función que la de prestar su autoridad a la iniciación del litigio y remitir éste al
juez o árbitro, en el procedimiento formulario vio extendidas sus funciones,
porque, al redactar las fórmulas, podía conceder acciones que no estaban
amparadas en el Derecho estricto. Y fue esto precisamente la causa del
magnífico desenvolvimiento del Derecho en Roma, debido al edicto de los
pretores y a la obra de los jurisconsultos que aconsejaban al pretor.
El juicio en el procedimiento formulario constaba de dos etapas, las mismas
que en el procedimiento de las acciones de la ley: la primera era «in jure» ante
el pretor, y la segunda “in judicio” ante el juez .
El demandante por medio de la “in jus vocatio” obligaba al demandado a
presentarse ante el magistrado; si se resistía lo llevaba a la fuerza, a menos
que presentara un “vindex”.
Similar a lo antes visto en la legis actio, pero con la clarísima diferencia de que
ahora el pretor al poder redactar los documentos podía dar acciones que antes
no estaban amparadas en el derecho escrito.
Presentes las partes ante el magistrado, el demandante exponía su demanda
“editio actionis12”, presentaba documentos, exponía hechos, podía diferir al
juramento del contrario, hacer interrogatorios al contrario y pedir al magistrado
una fórmula “stricti juris13”. El demandado a su vez contestaba a la demanda
del adversario o interponía exceptiones, (se oponía a la fórmula in factum 14,
cuando ésta era pedida). EI magistrado, oídas las partes, concedía o denegaba
la acción. Si la concedía entregaba la fórmula al demandante.

12
Locución latina. Indicación de la acción. Notificación o traslado mediante el cual el actor ponía en
conocimiento del demandado la acción entablada contra él.
13
Las obligaciones 'stricti iuris', o también conocidas como de derecho estricto, se refieren a aquellas en
las que el juez debe centrar su labor en comprobar la existencia o inexistencia de la obligación, debiendo
apreciar en forma rigurosa todo aquello a lo que las partes se obligaron al momento de contratar.
14
Se trata de las acciones por medio de las cuales, el magistrado pretor podía intervenir para proteger
una relación de hechos no contemplados por el 'ius civile' y que, por no estar regulados de manera
específica, quedaban fuera de la tutela jurisdiccional.
2.3.2.1 Desarrollo de la fórmula:

1.- Editio actionis: Es una medida que no existía en el anterior proceso y


consiste en la obligación que tiene el demandante de informar al demandado
de la acción que iba a ejercitar contra él, así como los documentos y demás
pruebas que iba hacer valer en el juicio. Con ello, se pretende que el
demandado quede perfectamente informado de las razones que justifican su
citación ante el magistrado.
2.- Citación (in ius vocatio): Es la llamada formal que sigue realizando (como
en la legis actionis) el demandante al demandado para que acuda a juicio ante
el magistrado.
3.- Si no acude el demandado: Missio in possessionem y venditio bonorum:
El demandado debe acudir ante el magistrado y, en el caso de que no vaya,
ahora no se produce la manus iniectio ya que es sustituida por la missio in
possessionem (toma de posesión de los bienes del demandado) y la venditio
bonorum (venta en subasta pública de dichos bienes).
4.- Modo de evitarla: vindex y vas: vadimonium: El demandado podía evitar
las medidas anteriormente mencionadas enviando en su nombre a un fiador
(vindex) que garantizase la comparecencia del demandado en un momento
posterior. Una vez personado el demandado y si las actuaciones procesales no
hubieran finalizado en ese mismo día, el demandado estaba obligado a
presentar otro fiador (vas) para que garantizase su presencia en el día
señalado. Este segundo tipo de garantía se denomina vadimonium.
5.- Interrogationes in iure: La posibilidad que tiene el demandante de
preguntar algo al demandado en presencia del magistrado antes de proceder a
solicitar formalmente una acción, con el fin de conocer mejor cualquier
circunstancia sobre el conflicto que les ocupa y, de esa manera, asegurarse de
que la acción que pida sea la más correcta.
6.- Petición y concesión o no de acciones y excepciones: Es el momento
en que el demandante solicita la acción al magistrado y éste, previa causa
cognitio, la concederá o no. Una vez concedida, el magistrado también dará la
oportunidad al demandado para que responda con alguna alegación o exceptio.
Así, en este procedimiento y a diferencia del anterior, el magistrado acepta
escuchar y conceder todas las alegaciones de las partes con el fin de que el
resultado del proceso sea lo más ajustado a la realidad y equidad a la que se
aspira en todo litigio.
7.- Modos de paralizar y concluir el proceso: Antes de llegar a la redacción
definitiva de la fórmula y a la litis contestatio, el magistrado otorga la
oportunidad a las partes para que paralicen el procedimiento con cualquiera de
las siguientes medidas que vamos a analizar. En caso de adoptar alguna de
ellas, las partes darían por concluido el proceso y asumirían el compromiso que
acordasen; si, más tarde, alguna de las partes no cumple con lo acordado,
dicho incumplimiento daría lugar a un juicio ejecutivo, puesto que cualquiera de
estas medidas tiene el mismo valor que una sentencia. Dichas medidas son:
- Transactio o acuerdo entre las partes litigantes para paralizar el proceso.
Dicho acuerdo se podía consensuar y materializar por medio de una stipulatio
praetoriae ante el magistrado.
- Confessio in iure o reconocimiento por parte del demandado de las
pretensiones que persigue el demandante mediante su acción.
- Iusiurandum in iure o juramento necesario. Es una medida que pueden
solicitar ambas partes consistentes en pedir a la parte contraria si jura sobre la
veracidad o no de un hecho o de un acto. En el caso de que jure, la parte
contraria lo toma como cierto y aceptándolo como una sentencia. Por tanto,
paralizaría definitivamente el proceso.
8.- Redacción de la fórmula: Si no se producen ninguna de las medidas
anteriores, el proceso continúa y se procedería a la redacción de la fórmula en
los términos anteriormente expuestos.
9.- Litis contestatio: Es el momento procesal intermedio en el que, por una
parte, finaliza la fase in iure ante el magistrado; y, por otra parte, da lugar al
comienzo de la fase apud iudicem ante el juez. Además, se abre un periodo de
litispendencia de manera que ambas partes tienen la garantía que de ese litigio
van a obtener una sentencia ya que no hay ningún otro mecanismo procesal
que pueda detener el proceso. Por otro lado, se considera que la litis contestio
tiene un efecto novatorio, esto es, las acciones personales se materializan ya
en una cuantía económica y las acciones intransmisibles, por los mismos
motivos, se convierten en transmisibles. Finalmente, podemos decir que la litis
constestatio se produce una sola vez, ya que, si le ocurre algo a las partes o al
propio juez, se cambiarían los nombres en la fórmula, pero la litis contestatio no
se repite.
Como hemos podido observar, el nuevo desarrollo de la formula tuvo uno de
los más grandes avances en lo que es materia procesal, destacando
principalmente el castigo hacia el patrimonio y no hacia la persona lo, cual fue
lo más destacable en lo que esta aquí presentado durante el desarrollo del
proceso.

2.3.2.2 Estructura de las Fórmulas

Como bien lo recalca Tola Cires en su obra Derecho Romano – Obligaciones,


Contratos, Delitos y Acciones, la fórmula consta de partes ordinarias y partes
extraordinarias. Las partes ordinarias son cuatro: la intentio, la demonstratio, la
condemnatio y la adjudicatio. Las partes accesorias, que según determinados
casos concretos se agregaban a las fórmulas, eran principalmente las
prescripciones y las excepciones.
1º.- El nombramiento del juez o jueces
2º.- DEMONSTRATIO: Es aquella parte de la fórmula que se inserta al
principio de la misma para designar el asunto por el que se inicia el proceso. Se
reconoce por la expresión que aparece en la fórmula: Quod 15 (puesto que)
seguida de un sujeto y un verbo (“Puesto que Aulo vendió a…”).
3º.- INTENTIO: Es la parte de la fórmula en la que se expresa el derecho que
pretende el demandante.
4º.- CONDEMNATIO: Es la parte en donde se otorga al juez la facultad de
condenar o no al demandado, bien por una cantidad de dinero cierta o incierta
de dinero.
5º.- ADIUDICATIO: Es una parte de la fórmula que sólo se incluye si estamos
ante un juicio divisorio, ya que permite al juez adjudicar algo a alguno o a todos
los que actúan como litigantes ejercitando alguna de las acciones divisorias,
tales como:
- Actio familiae erciscundae, para la división de la herencia.
- Actio communi dividendo, para la división de un bien común.
- Actio finium regundorum, acción para establecer los límites entre fundos.
Ahora que ya hemos visto la estructura de las fórmulas sería bueno volver a
recalcar que la formula fue mediante su estructura permitió poder a mi
apreciación realizar el proceso de una forma más elaborada y trabajada
haciendo que las partes conozcan las acciones que se deben tomar en el juicio.

2.3.3 El Proceso Extraordinario

Contexto:
Surgen a partir de Octavio, año 17 a.C., dos leyes:
- Lex Iulia de iudiciis privatis: por la que queda abolido el procedimiento de las
legis actionis y estableciendo como único proceso del ordo iudiciorum
privatorum el procedimiento per formulam.
- Lex Iulia de iudiciis publicis: por las que se dictan normas sobre el
procedimiento criminal

15
La fórmula Quod omnes tangit ab omnibus debet approbari aparece recogida en el Codex de
Justiniano (v, 59, 5) y ha sido largamente estudiada en su origen, desarrollo y proyección por numerosos
estudiosos del Derecho y de Ia Historia del Pensamiento Político a Io largo de esta centuria
Esta amplia reforma que se inicia con Octavio en el Principado hace que
aparezca en Roma y en las provincias la cognitio extra ordinem o
procedimiento extraordinario, con las siguientes diferencias respecto de los
juicios del ordo iudiciorum privatorum:
a) Este juicio se desarrolla en una única fase, ante un magistrado-juez.
b) Llega a refundir en una misma jurisdicción los juicios privados y los públicos
o penales.
c) Las sentencias sí son objeto de sucesivos recursos de apelación hasta llegar
a conocerlos el propio Emperador, cuya sentencia sí sería ya inapelable o
firme.
Aunque en un principio fue este proceso menos frecuente, a partir de Adriano
(s. II d.C.) se refuerza su existencia. En la época de Septimio Severo (finales
del s. II y principios del s. III d.C.) la cognitio extra ordinem se implanta
definitivamente al imponerlo en los distintos ámbitos. El procedimiento
formulario fue suprimido por una constitución de los emperadores Constancio y
Clemente (s. IV d.C.) y, en lo sucesivo, este procedimiento sería el único
existente.
Como vimos estas tienen su origen durante los comienzos la época imperial
con Octavio, tiene como principal característica y diferenciándose de los otros
dos procesos existentes el que se desarrolla en una sola fase ante un
magistrado o un juez, como nos menciona al principio no eran tan frecuentes
ya que solo aparecen mayormente en las provincias, pero poco a poco fueron
tomando importancia, hasta implantarse como el sistema definitivo en Roma.

2.3.3.1 Características y diferencias con los sistemas anteriores

 Características Principales:
1º) Es un procedimiento que se desarrolla en una única fase, es decir,
ante un magistrado que al mismo tiempo actúa también de juez.
2º) Se unifica en este procedimiento la jurisdicción civil y penal.
3º) Desaparece la fórmula y la actio y la exceptio pierden su significado
original para convertirse en formas de pedir protección jurídica
mediante el escrito de demanda en donde debe incluir las pruebas que
quiera hacer valer.
4º) Las sentencias pueden ser impugnadas mediante un recurso de
apelación ante un superior jerárquico.

 Diferencias con los demás sistemas


1) No está sometido a las reglas de días fastos; tampoco hay dos
instancias.
2) No hay fórmulas.
3) El antiguo procedimiento se fundaba en el concepto de arbitraje
y dejaba a las partes un rol preponderante en la iniciación y
ejecución. El nuevo procedimiento descansa en la autoridad del
Estado.
Por lo tanto, en tal virtud, este procedimiento es más humano que el del “ordo”
y es el origen del propio proceso contemporáneo. Con esto se marca el inicio
de por así llamarlo los sistemas procesales modernos de la actualidad, claro
como antes ya mencionamos con sus respectivas diferencias pero que tienen
una misma inspiración en común la cual fue el proceso extraordinario romano.

2.3.3.2 Desarrollo De La Cognitio Extra Ordinem


1.- Citación: Reviste un carácter semioficial ya que puede ser: O un acto
privado (denuntiatio) invitando de forma oral o escrita el demandante al
demandado para que acuda ante el Tribunal; o bien mediante una orden
judicial o por medio de un edicto (evocatio), cuando el demandado se
encuentra en paradero desconocido.
2.- Si no acude el demandado: Declaración de rebeldía o contumacia, es
decir, el proceso continúa con la ausencia del contumaz hasta la sentencia.
3.- Presentar la demanda con todas las pruebas y dar traslado al demandado.
4.- Posibilidad de solicitar la dilatio litis: Posibilidad de parar el proceso, por
parte del demandante o por el demandado, con el fin de obtener pruebas que
no habían podido introducir con la demanda. Marco Aurelio estableció que sólo
se podía solicitar una vez y, en cuanto al tiempo que podía durar la
interrupción, Diocleciano estableció los límites temporales de 3, 6, o 9 meses
según la prueba a conseguir se encontraba en el mismo lugar en donde se
celebraba el proceso, o en otra provincia continental o de una provincia
transmarina, respectivamente.
5.- Comparecencia ante el magistrado-juez: Alegaciones de las partes:
Narratio (demandante) y contradictio (demandado).
6.- Litis contestatio: Acredita sólo la situación de litispendencia.
7.- Práctica de las pruebas: - Como medios de prueba se establecen:
- Las declaraciones de las partes y de testigos.
- Documentos públicos: expedidos por funcionarios; los expedidos por notarios
o tabellionis; o documentos privados: tienen el mismo valor que los públicos
siempre que estén firmados por tres testigos como mínimo.
- Pruebas periciales, es decir, informes o dictámenes de expertos o peritos de
las distintas profesiones u oficios: médicos, arquitectos, calígrafos, etc.
- Presunciones, es decir, hechos que se toman por ciertos por imperativo legal.
Distinguiendo entre las presunciones iuris tantum (admiten prueba en contrario)
y presunciones iuris et de iure (aquellas que no admiten prueba en contrario).
8.- Sentencia: Es redactada por escrito y leída a las partes en audiencia
pública, condenando al demandante o al demandado y en las que se incluyen
las costas procesales.
9.- Apelación de la sentencia: La sentencia puede ser objeto de un recurso
de apelación ante el mismo tribunal que dictó la sentencia y que elevaría ante
el superior jerárquico. Sólo el firme la sentencia no apelada o la que en última
instancia dicta el Emperador.
10.- Ejecución de la sentencia: actio iudicati16
En mis comentarios finales acerca del desarrollo del proceso extraordinario, y
también de los sistemas de proceso que existierón en Roma, es importante
saber que es en este desarrollo, esta, actualmente basado nuestro sistema
procesal, variando un poco es verdad, pero con el ADN del sistema procesal
extraordinario romano dentro de él, siendo la prueba más concreta de que
Roma fue la cuna del derecho.

2.4 Clasificación General de las Acciones

- Acciones civiles y acciones honorarias o pretorias: Las primeras


reguladas por el ius civile y las segundas por el ius honorarium. Estas últimas
pueden ser:
Acciones Ficticias: En las que el magistrado ordena al juez que juzgue
fingiendo un hecho o derecho que no existe, aunque en la realidad sí ha podido
suceder.
Acciones Útiles: En las que el magistrado el ámbito de las acciones civiles a
supuestos no comprendidos por ellas pero que requieren una solución jurídica.
Acciones In factum: Basadas en el ius civile, regulan conductas dolosas que no
han sido reguladas por el ius civile.
Acciones con transposición de personas: Son aquellas en las que el magistrado
introduce también un elemento ficticio, esto es, que la condena afecte a una
persona distinta de la que, en principio, debía afectar. Estas acciones se
utilizan cuando la condena tiene o debería recaer en una persona que no tiene
suficiente capacidad procesal para actuar como parte en un proceso. En tales
16
(Actio iudicati) Cumplimiento forzado de la sentencia (normalmente había un plazo de 30 días). Es una
acción ejecutiva, es decir, tiene por objetivo obtener el cumplimiento forzado de una obligación
indudable.
casos, como es el supuesto de las acciones adyecticias, de los
comportamientos por los que podían ser condenados los filius o filia o esclavos
responde siempre el paterfamilias. De ahí que, de manera ficticia, aparezca él
como responsable, aunque, en la realidad, no fue él quien realizó dichos
comportamientos.
- Acciones in rem y acciones in personam: Con independencia de que sean
acciones civiles o pretorias, las acciones se dividen también en: Acciones
reales (in rem) para reclamar una cosa (res) contra el que en esos momentos la
tenga en sus manos. Por eso se dice de ellas que son acciones con eficacia
erga omnes, es decir, frente a todos, frente a cualquier persona que en esos
momentos tenga en su poder el objeto. Mientras que las acciones personales
(in personam) sólo se pueden ejercitar contra el deudor o deudores
determinados, aquel o aquellos a los que sólo se les puede exigir el
cumplimiento de una obligación.
- Acciones arbitrarias: Son aquellas en las que el magistrado permite al juez
que el demandado pueda restituir o exhibir la cosa reclamada antes de dictar
sentencia, con la finalidad de tasarla y otorgarle un concreto valor pecuniario.
- Acciones de buena fe y de derecho estricto: En las primeras, el juez tiene
la autorización del magistrado para que juzgue en términos de equidad, es
decir, le da amplios poderes para que tome en consideración cuantos
elementos y circunstancias sean necesarios para condenar o no al demandado.
Sin embargo, en las de derecho estricto, el juez tiene que atenerse
rigurosamente a lo contenido en la fórmula.
- Acciones derivadas de actos ilícitos: Pueden ser:
Acciones penales: Son las que van dirigidas a conseguir una pena (poena),
consistente en una suma de dinero en concepto de resarcimiento del daño
causado, pero, a diferencia de las acciones civiles, se les otorga un valor doble,
triple o cuádruple del daño. Además, se caracterizan porque son: Cumulativas
(si son varios los autores del delito, todos tienen que pagar de manera
individual el importe de la pena entera), intransmisibles pasivamente (sólo
responde el autor del delito y no sus herederos, al menos hasta la
litiscontestatio) y noxales (si el delito es cometido por un filius o un esclavo, el
paterfamilias se puede liberar de la responsabilidad entregando al filius o al
esclavo a la víctima del daño).
Acciones reipersecutorias: Son las que persiguen obtener la devolución o
recuperación de una cosa.
Acciones mixtas= Son las que permiten perseguir conjuntamente la cosa y una
pena.
- Acciones temporales y acciones perpetuas: Las primeras, son las que
tienen un periodo de tiempo limitado para ser ejercitadas, fuera de dicho plazo
se dice que la acción ha prescrito; mientras que las perpetuas son aquellas que
no prescriben al no tener un plazo delimitado para su ejercicio. Con todo, a
partir de Teodosio II todas las acciones contaron con un plazo para su ejercicio,
fuera de dicho plazo o bien no establecido de manera expresa tenían una
vigencia máxima de 30 años.
- Acciones privadas y acciones populares: Son privadas aquellas acciones
que sólo pueden ser ejercitadas por el propio interesado; mientras que la
populares pueden ser ejercitadas por cualquiera ya que reprimen determinados
comportamientos ilícitos que afectan a la pacífica convivencia en sociedad y
que cualquier persona podría verse afectada (ejm: no arrojar líquidos o sólidos
desde un edificio a la vía pública; contra los que tengan animales peligrosos sin
atar, etc.).
Observando esta parte final del ensayo antes de comenzar las conclusiones es
importante destacar que las acciones mencionadas, sirven en el proceso para
realizar los actos para que se lleven a cabo el correcto. Agregando un poco
más que la acción es el derecho a poner en actividad el aparato jurisdiccional,
con esta frase me quedo para apreciar que la acción tiene que ver con la
realización correcta del proceso.

3. Conclusiones:

- Puedo decir que el sistema procesal romano, más específicamente el sistema


procesal extraordinario, sirvió como fuente e inspiración para los modelos de
sistemas procesales modernos, de los cuales el nuestro no es la excepción,
tenemos, el alma y el ADN del sistema procesal romano, y por que no, tenemos
al derecho romano como padre no solo de nuestro sistema civil, sino también
de todo nuestro sistema judicial, así como en la mayoría de países en el
mundo.
- El derecho romano ha sido fuente de inspiración, para la creación de los
diversos sistemas procesales que hay en el mundo.
Vimos también, en el presente trabajo que es un ensayo más de los millones
que siempre se hacen, diferentes fases de la evolución del sistema procesal
romano hasta llegar a el sistema que mejor se adecuó a la vida de los
ciudadanos de la Roma antigua, exponiendo que los sistemas procesales
romanos tuvieron tres fases:
- En un primer momento, que pertenece al derecho romano clásico, en donde
la acción era un “ius persequendi in iudicio", es decir, era equivalente a una
potestad jurídica de requerir al tribunal la satisfacción de un crédito o la entrega
de una cosa. Conforme a esta concepción sólo se concibió la acción, mas no
los derechos sustanciales que la sustentan.
- En un segundo momento, se involucra el derecho a la ficción, por lo que la
acción es realmente para sus defensores el propio derecho en movimiento.
- Y por último que es el que poseemos actualmente, la acción se desprende
del derecho material y, se transforma en un poder jurídico autónomo, en el que
la ficción como instituto procesal entra en el sistema del derecho con un
significado propio e inconfundible con las otras acepciones.
- En mi conclusión final quiero enfatizar el sistema procesal romano tuvo
muchos cambios desde su creación, pero lograron hacer que esos proyectos
se lleven adelante, al principio sí con muchas fallas, pero nunca
conformándose con lo que tenían y buscando a través los siglos, la mejor
manera de organizar un sistema procesal. Concluyendo que, así como los
romanos, nosotros debemos buscar el mejor sistema para coexistir como seres
humanos, buscando principalmente el bien común y priorizando nuestra
libertad individual.
Fuentes Bibliográficas:
- HERRERA PAULSEN, Darío
1999 “Derecho Romano”, E, Editorial Gráfica Horizonte S.A., Lima-Perú

- TOLA CIRES, Fernando


1997 “Derecho Romano” Editorial San Marcos, Lima-Perú.

- CARRIÓN LUGO, Jorge.


2000, “Tratado de Derecho Procesal Civil” Editorial Grijley, Lima-Perú

- ARIAS RAMOS, J.
1974, “Derecho Romano” vol. I, Madrid

- Hubert Edinson Asencio Díaz


2008 “Sistema Procesal En El Derecho Romano” , INVESTIGACION EN
DERECHO, http://hubertedinsonasenciodiaz.blogspot.com/2008/09/sistema-
procesal-en-el-derecho-romano.html

- Elena Trujillo
2021 “Derecho sustantivo”. Economipedia.com,
https://economipedia.com/definiciones/derecho-sustantivo.html

- Derecho en línea
2019 “Diferencia entre Proceso y Procedimiento en Derecho”, Derecho
Online, https://elderecho.online/derecho-procesal/diferencia-entre-proceso-y-
procedimiento-en-derecho/

- María Eva Fernández Baquero


2013, “Procedimiento Civil Romano”,
https://digibug.ugr.es/bitstream/handle/10481/27353/PROCEDIMIENTO
%20CIVIL%20ROMANO.pdf?sequence=1

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