Oración de la mañana de Arsenie Boca

Señor Jesucristo, ayúdame a renunciar a mí mismo todo el día de hoy, porque quién sabe a
través de que tonterías armaré un gran conflicto, y así queriéndome mas a mí, te perderé a Ti.

Señor Jesucristo, ayúdame para que la oración de Tu Santísimo Nombre obre en mi mente
más que el relámpago en el cielo, para que la sombra de los malos pensamientos no me
oscurezca, porque aquí estoy pecando todo el tiempo.

Señor, tú que vienes en secreto entre los hombres, ten piedad de nosotros, que andamos
tropezando en las tinieblas. Las pasiones pusieron los barro sobre los ojos de la mente, el
olvido se fortaleció en nosotros como un muro, endureciendo nuestro corazón y todos juntos
hicieron el calabozo en el que te mantenemos enfermo, hambriento y sin ropa, desperdiciando
así nuestros días en el desierto, entristecidos y adoloridos.

Señor, tú que vienes entre los hombres en secreto, ten piedad de nosotros y prende fuego al
calabozo, enciende el amor en nuestros corazones, quema las espinas de nuestras pasiones y
haz la luz de nuestras almas. Señor, el que vienes en secreto entre los hombres, ten piedad de
nosotros, ven y habita en nosotros, junto con el Padre y con tu Espíritu Santo. Porque el
Espíritu Santo ora por nosotros con suspiros silenciosos, cuando el habla y la mente
permanecen impotentes.

Señor, tú que vienes en secreto, ten piedad de nosotros, porque no nos damos cuenta de lo
imperfectos que somos y lo cerca que estás de nuestras almas y lo lejos que nos alejamos a
través de nuestros pecados.

Pero haz brillar Tu luz sobre nosotros, para que podamos ver la luz a través de Tus ojos, para
que podamos vivir para siempre a través de Tu vida. ¡Nuestra Luz y Alegría, gloria a Ti! Amén.