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Como bien sabemos en nuestra normativa colombiana 

las cryptomonedas no son
ilegales, no están prohibidas, por lo tanto están permitidas. Lo que no esté prohibido en
el derecho está permitido siempre y cuando no se vulnere el marco jurídico, no
solamente de carácter penal sino también las distintas materias judiciales. En este
momento en materia legal colombiana las cryptomonedas han pasado por una alegalidad
donde se ha pasado por distintos proyectos de ley que han venido tramitándose pero
ninguno se ha consolidado todavía como norma, de tal manera que actualmente tenemos
una regulación producto de pronunciamientos que han hecho distintas autoridades en
Colombia, entre ellas posturas como la Dian que hace referencia mencionando que "Son
considerados como bienes inmateriales o incorporales susceptibles de ser valorados,
forman parte del patrimonio y pueden conducir a la obtención de una renta. Si bien no
es una moneda reconocida y, por ende, no tiene un poder liberatorio ilimitado, es claro
que los criptoactivos son reconocidos como un activo.”  Esto con el fin de fiscalizar a
los contribuyentes que realizan operaciones con cryptomonedas.

Como se dijo anteriormente el congreso de la república colombiana aún no ha expedido


norma alguna dirigida a regular el funcionamiento y desarrollos relacionados con este
tipo de monedas, tampoco de plataformas donde estas se negocian o intercambian.
Sin embargo, existe un Proyecto de Ley que pretende reglamentar el servicio de
intercambio de este tipo de activos en el país; el cual se enfrenta a grandes retos por la
naturaleza y características de anonimato y no trazabilidad de los mismos.
Al respecto la institucionalidad del país ha realizado sus pronunciamientos al respecto
así:
a. La Superintendencia Financiera en
Cartas Circulares (29 de 2014 y 52 de 2017), previene acerca de los riesgos que tendrán
las personas con este uso, como lo son: inseguridad jurídica, especulación, volatilidad y
realización de actividades ilícitas y fraudulentas.
b. La DIAN, Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales, es más flexible, pues llama
a que los ingresos y ganancias producto de estas transacciones, estas deben considerarse
en la presentación de las declaraciones de renta.
c. El Banco de la República, “En su concepto 20348 de 2016 estableció: En general las
monedas virtuales no cuentan con el respaldo o la participación del Estado ni forman
parte de un sistema centralizado, controlado o vigilado. Al no tener los atributos ni estar
reconocidas o aceptadas como una moneda carecen de valor intrínseco y, en
consecuencia, su valor se deriva fundamentalmente de uso en el mercado.

En la actualidad se encuentra en trámite


en el Congreso de la República de Colombia, el Proyecto de Ley 268 de 2019 “Por el
cual se regulan los servicios de intercambio de criptoactivos ofrecidos a través de las
plataformas de intercambio de criptoactivos”, donde se busca tener un marco regulatorio
en este sentido.
Está contemplado en esta iniciativa legislativa lo siguiente:
• Prevención en la ejecución de
actividades delictivas y fraudulentas, tendientes al lavado de activos y financiación del
terrorismo.
• Legalidad de las operaciones.
• Prevención en la evasión de impuestos. • Creación del Riesgo Único de
Plataformas de Intercambio de Criptoactivos, administrativos por las Cámaras de
comercio colombianos.
• Sujeción a requisitos y limitaciones relacionados con los servicios prestados.
• Divulgación los riesgos materiales asociados con los servicios generados.
• Establecimiento y mantenimiento de un programa de seguridad informática que
garantice su funcionalidad por parte del Gobierno Nacional, a través del Ministerio de
las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones.
Obsérvese entonces que este proyecto lleva casi cuatro años en trámite, con el riesgo
que, cuando entre en vigencia y ante mercados y tecnologías que cambian tan rápido,
éste quede rezagado, obsoleto o quizás corto.
Sin embargo, estas regulaciones pasan por considerar asuntos de suyo muy relacionados
con el mundo de las criptomonedas, a saber: el anonimato y la trazabilidad de las
operaciones, la regulación propiamente dicha de los criptoactivos, los retos
procedimentales desde lo legislativo, financiero y tributario; transparencia y fidelidad de
los datos y muy sensible, todo lo relacionado con la evasión de impuestos.

Los cambios en Colombia que se vienen dando y de manera particular en el mundo del
comercio electrónico han propiciado entre otros de la aparición y desarrollo de las
monedas electrónicas o criptomonedas. Por lo tanto, el país aquí trae una
responsabilidad política pero especialmente jurídica, es el también conocido como
commerce o también negocios por internet u online.
El estado colombiano entre sus obligaciones tiene el deber de respetar, proteger y que se
hagan efectivos los derechos de los ciudadanos, en este caso específico, en lo
concerniente al ámbito económico comercial, y desde allí entonces, realizar las
regulaciones que sean necesarias para la defensa de esos derechos; será, por lo tanto,
garantizar la seguridad jurídica frente al comercio electrónico, específicamente en lo
relacionado con las monedas virtuales en Colombia. (https://repository.unilibre.edu.co/)

Las cifras de las criptomonedas en Colombia

De acuerdo con el informe de Cryptomarket sobre criptomonedas en Colombia, el país


es “uno de los países con mayor adopción en la región y sigue aumentando el volumen
de transacciones realizadas”.

Para Colombia, el 39 % de las personas han tenido alguna relación con este tipo de
divisas: 6 % son usuarios frecuentes, 10 % son usuarios casuales y 23 % son
“criptocuriosos”.
Sobre estos últimos, el informe de Cryptomarket señala que se convierten en un público
importante para un potencial crecimiento del ecosistema a corto plazo.

En cuanto a las divisas digitales más usadas en Latinoamérica y Colombia, estas


son: Bitcoin (81 %), Ethereum (48 %), Litcoin (27 %), Dogecoin (24 %) y USD
Coin (23 %). Sobre cómo han sido las transacciones, el estudio indica que el 33% de los
colombianos ha invertido en criptos menos de US$500, el 25 % entre US$500 y
US$1.000, el 10 % entre US$1.000 y US$ 2.000, y el 15 % más de US$2.000. Los
colombianos igualmente siguen comprando criptomonedas en plataformas o exchange
(61 %), pero también lo hacen en medios P2P, es decir, de persona a persona y sin
intermediarios. (https://es-us.finanzas.yahoo.com/noticias/criptomonedas-colombia-39-
personas-utilizado-230000760.html?guccounter=1, s.f.)

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