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ESQUEMA TEXTUAL

1. Titulo: El lenguaje corporal en el


trabajo
2. Introducción.
3. Desarrollo.
3.1 Importancia del lenguaje corporal:
3.2 El lenguaje corporal en una
entrevista:
3.3 El lenguaje corporal en el ámbito
laboral
4. Conclusión.
El lenguaje corporal en el trabajo

El cuerpo habla. No hay duda de que el lenguaje corporal es un método de


comunicación que a veces se pasa por alto. Pero dejar de lado o ignorar este tipo de
comunicación no verbal es un error muy grande que lamentablemente todavía se
comete a diario. Nuestros cuerpos se comunican todo el tiempo, transmitiendo
mensajes constantemente y, a veces, contradice con lo que decimos oralmente. Los
movimientos que haces reflejan tu personalidad, actitud y entusiasmo. Decir “una
acción vale más que mil palabras” no está hecha por casualidad ni porque suene bien.
La razón de ser que contiene va más allá de la simple lectura. Mientras que algunos
gestos son fáciles de entender (miradas apreciativas, caras sorprendidas o manos
cerradas y rígidas como signos de desaprobación), muchos otros requieren de mucho
conocimiento y atención. Muchas veces, el desconocimiento de esta lingüística puede
condicionarnos en lo que comunicamos. Por eso, el énfasis en interiorizarnos un poco
en él para sumar habilidades y conseguir más confianza y seguridad en uno mismo.

Ya sabes que en toda comunicación hay al menos un emisor, un receptor y un


mensaje. El lugar de trabajo es el ecosistema ideal en el que estos tres factores entran
en juego. El éxito de este proceso se logra equilibrando lo que se dice y lo que el
oyente entiende. Esta dialéctica se enriquece con otros códigos adicionales, propios
del lenguaje corporal. Imagina que entras en la oficina y gritando un saludo. Sus
compañeros de trabajo pueden pensar que algo anda mal. Asimismo, la discreción en
tu ropa es una de las señas evidentes de tu expresión corporal. Trate de mantenerse
fiel a la cultura de la empresa en la que trabaja. Evite ser demasiado formal, pero
especialmente demasiado informal. Y siempre cuida el aseo y la calidad de la ropa. ¿O
qué sentimiento te produce ver a otra persona con la mitad de la camisa fuera del
pantalón o de la falda?

Mucho cuidado a los que no se han dado cuenta de esto, o a quienes descuidan su
andar, posturas y gestos, ya que ellos están diciendo mucho de usted. Las personas
que acuden a una entrevista de trabajo deben tener mucho cuidado con sus
movimientos. Esta es una de las situaciones más peligrosas, donde tienes que darte a
conocer y lograr, con tu propia imagen y actitud, una visión positiva del interlocutor.
Para obtener esta aprobación, debe prestar mucha atención a su postura, la forma en
que se sienta, estar alerta y erguido, y mantener siempre el contacto visual con el
interlocutor. Lo ideal es que estés sentado con la espalda recta (o cruzando las piernas
con cautela), ligeramente inclinado hacia adelante y juntando las manos. Sin
movimiento de pies ni jugando con el lápiz. Esto hará que tu cuerpo hable bien de ti.
Nuestro lenguaje corporal debe adecuarse al ámbito en que uno se encuentre. En el
trabajo, se está expuesto a cientos de situaciones diversas; reuniones con jefes,
clientes, compañeros y demás, siendo imprescindible aquí, tener en cuenta un
correcto comportamiento físico ante cada escenario diferente. Si eres empleado,
deberás tener más atención todavía, sobre todo ante tus superiores, que seguramente
manejen este sistema de comunicación. Como hemos mencionado, uno debe estar
atento a las expresiones corporales que realiza, pero esto no equivale a decir que estés
meticulosamente cuidándote de cada movimiento que haces. Si actúas de esa manera,
tu cuerpo te jugará una mala pasada, y en vez de lograr ser claro con tus movimientos
físicos, terminarás confundiendo más acerca del verdadero mensaje que quieres
transmitir. No debes descuidar tu naturalidad. Esto es un aprendizaje diario, de a poco
se irán incorporando los conocimientos y atenciones necesarias para una eficaz
comunicación no verbal.

En conclusión, el lenguaje corporal es una forma de comunicación subestimada por


muchas personas y también desconocida para muchas otras, más esta es de mucha
utilidad al momento de comunicarnos en el ámbito laboral. Siempre habrá momentos
en el que tú cuerpo comience a enviar mensajes y comience a hablar por ti, incluso así
tú no lo quieras, el lenguaje corporal no hace uso de las palabras, ya que cualquier
sentimiento se podrá ver reflejado en ti, como, por ejemplo, la alegría puede reflejarse
en tu rostro si sonríes un poco o indicar tristeza si se te cuelga la cabeza, los párpados
y los labios, así mismo se pueden identificar muchas otras emociones. Por lo que es
hora de aprender a comunicarnos correctamente y expresarnos con nuestro lenguaje
corporal. Esto te será de mucha ayuda ya sea en el ámbito laboral o en tu vida diaria.

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