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LA SALVACIÓN

Sesión N° 4

1. DEFINICIÓN DE LA SALVACIÓN: La salvación es primeramente rescatar del


peligro, del daño o incluso de la muerte, a una persona, grupo o nación;

Es la restauración de una relación correcta con Dios, que fue perdida por el
pecado, hasta alcanzar la plenitud de la estatura de Cristo (Efesios 4;13-16).

Tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo Testamento, la salvación se


produce mediante la persona y obra del Hijo de Dios, nuestro Señor y
Salvador Jesucristo (Isaías 9:6). La Biblia revela que el hombre al pecar se
perdió, y se encuentra extraviado. Necesita encontrarse, ser hallado, necesita
ser salvo de los caminos de perdición. La salvación es un don gratuito,
ninguna obra denominación, religión, filosofía puede darnos salvación.

2. LA SALVACIÓN ES UN PROCESO (Marco 16:16; Hechos 22:16; Romanos


8:29)

Escuchar la Creer en la Arrepentim Bautismo Salvación Crecimiento


Palabra Palabra iento hasta la
estatura de
Cristo

“El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será
condenado” Marcos 16:16
“Sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual
recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino
con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin
contaminación.” 1° Pedro 1:18-19
¿Cuál fue el precio pagado por nuestra salvación?
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La Fe, la convicción y la confianza de que Cristo es nuestro Señor y Salvador y
fuimos rescatados por su preciosa sangre, como de un cordero de mancha y sin
contaminación. El hijo de Dios murió en nuestro lugar, cumpliendo la justicia de
Dios, como dice en Romanos 6:23 “Porque la paga del pecado es muerte, más la
dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro”
¿Qué entiende usted por la palabra dádiva en Romanos 6:23?
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El arrepentimiento significa cambio de actitud, pues Dios es el legislador, el Juez.
El hombre ha quebrado la Ley de Dios, y es hacia El que deberá mostrar
arrepentimiento. El arrepentimiento verdadero es una CONDICIÓN para la
salvación (Lucas 13:3), para que sean borrados nuestros pecados; para que
vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio (Hechos 3:19). Sin
embargo, en el bautismo somos: 1) perdonados y limpiados de nuestros pecados,
2) recibimos el don del Espíritu Santo (Hechos 2:38), 3) nacemos de nuevo (Juan
3: 3-5), 4) morimos y resucitamos con Cristo para una nueva vida (Romanos 6:3-4;
1° Pedro 3:22).
3. ¿QUÉ OCURRE AL SER SALVOS?

a) Caminamos hacia la santificación de nuestras vidas


b) Comenzamos nuestra caminata, presentando nuestros miembros a Dios, como
instrumentos de justicia (Romanos 6;13)
c) Presentamos nuestro cuerpo a Dios, como Santuario de Dios. (1° Corintio 6:
19-20)
d) Debemos producir cosas excelentes en nuestra vida de salvos (Hebreos 6: 7-9)
e) Hacemos buenas obras, aunque no somos salvos por obra, pero la salvación
genuina lleva al creyente a hacer buenas obras (Efesios 2:10) y ellas confirman
nuestra salvación, porque la Fe si obras es muerta y porque la Fe actúa
juntamente con las obras (Santiago 2:14-22)
f) Tenemos la necesidad que el Espíritu Santo nos santifique, porque sin la paz
con todos y la santidad nadie verá al Señor. (Hebreos 12:14). Somos santos
para ser instrumentos de Dios en la santificación de nuestra familia (1° Corintio
7:14).
g) Mortificamos nuestra carne (Juan 6:36). Vivir en la carne no agrada a Dios
(Romanos 8: 7-8). Debemos hacer morir lo terrenal en nosotros (Colosenses
3:5).
h) Debemos ser imitadores de Cristo, seguir su ejemplo y andar como Él (1°Pedro
2: 21; 1°Corintio 11:1; Colosenses 3:5; 1°Juan 2:6).

4. ¿PARA QUÉ DIOS NOS SALVÓ?


Dios nos salvó, para que lo adoremos, para que lo sirvamos, para que lo
glorifiquemos, para que seamos parte de su familia y sobre todo para que
fuésemos hechos conforme a la imagen de su hijo (Romanos 8:39).
La salvación, Dios no la quita. Pero, así como un regalo puede ser rechazado,
también nosotros podemos despreciarla. Si no cuidamos la salvación, podemos
recibir en vano la gracia de Dios (2° Corintio 6: 1-2). Debemos preservar, vencer y
guardar las obras hasta el fin para ser salvos (Mateo 10:22; Apocalipsis 2:26), así
no será borrado nuestro nombre del libro de la vida (Apocalipsis 3:5).
¡Dios quiere que tu tenga seguridad de que Su Salvación es eterna!
“Y el testimonio es éste: que Dios nos ha dado vida eterna, y esta es vida está en
su hijo. El que tiene al hijo, tiene la vida; el que no tiene al hijo de Dios, no tiene la
vida. Les escribo estas cosas a ustedes que creen en el nombre del hijo de Dios,
para que sepan que tienen vida eterna.” (1° Juan 5: 12 – 13)
Algunas personas tienen duda de su salvación. Esto por lo general sucede cuando
uno espera sentir algo, o hay algún pecado no confeso o cuando uno nunca
recibió a Cristo como su Salvador. Sin embargo, con Cristo no hay medias tintas.
No puede ser parcialmente o más o menos creyente. El matrimonio ofrece una
excelente analogía. Si usted le pregunta a un amigo si es casado, no le
contestará: “Bueno, a lo menos soy casado.” ¡Sabrá con seguridad si es casado o
no!
¿Cómo puedo compartir mi Decisión con mi familia y amigos?
Sea consecuente y amable, no sea agresivo cuando des tu testimonio. Tu familia
tiene que ver tus acciones con la misma claridad con que escuchan tus palabras.
Billy Graham ha dicho “la verdadera prueba de cada cristiano es cómo vive en su
hogar.” Tenemos que mantener FUERTES nuestras CONVICCIONES cristianas.

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