CRISTO Y EL SCOUT

CARLOS KUNITZKI.

Introducción
Al escribir estas líneas estoy pensando en ti y en los muchachos que son tus
compañeros de grupo y también en todos aquellos que están bajo tu responsabilidad.
Cuando Baden Powell creó el escultismo para muchachos, no tuvo en mente fundar un
club, sino un movimiento que tuviera una mística y una meta bien concretas:
formar ciudadanos útiles para el mañana y que tuvieran la virtud de ir construyendo un
mundo nuevo basado en la creación del hombre nuevo en sus vidas.
Corremos muchas veces el riesgo de dar tanta importancia a los nudos, a las salidas, a las
fiestas..., en una palabra, a todo lo que sea actividad externa, que olvidamos lo más
esencial:
que todas esas cosas que no son fines, sino solamente medios que nos deben conducir a
formar al hombre humana y cristianamente...
Y aquí radica el peligro:

Muchas veces nos quedamos en los nudos, salidas..., y llegamos a dar la impresión de que
el escultismo no es más que eso: nudos y salidas... ; y es así como también, por ese motivo,
muchos desdeñan ser scouts, porque lo consideran cosas de chiquilines...
Si tú has leído, mejor, estudiado a Baden Powell, te habrás dado cuenta de una cosa:
que él, hombre de profunda fe, no se conformaba con un hombre- hombre, sino con un
hombre –hijo de Dios...
Tal es la razón de estas líneas: ayudarte a formar en tus scouts al hijo de Dios...
Mi escultismo de muchos años me ha llevado a compartir contigo estas experiencias
que no pretenden otra cosa que ayudarte en ésta, tu delicada y no fácil tarea.
Solamente te pido que tengas en cuenta lo siguiente:
lo que te pido aquí no es para leerse en una reunión de grupo; si así se diera... no estuve
muy inspirado el día que se me ocurrió escribírtelo.
Esto lo he escrito para ti, para que lo leas, lo asimiles, y una vez leído y asimilado, sí, lo
compartas con los demás.
Te digo esto porque tú sabes que algo leído es muy frío, en cambio, pensado, adecuado
a la circunstancia, cambia totalmente, aunque el contenido se mantenga el mismo.
Lo que tú digas, debes expresarlo con entusiasmo, con el corazón en la mano; si así lo
haces, comunicarás calor, vida y optimismo. En cambio, si tus palabras son frías,
trasmitirás desgano, indiferencia, muerte... Pero también te confío una cosa: si llegas a este
extremo, ha sonado para ti la hora de borrarte del movimiento, porque la palabra scout ya
perdió significado para ti, y comienzas a hacer mal en lugar de bien.
 Este librito no pretende aumentar tu cultura sino ayudarte a crecer en tu vida espiritual
y religiosa, para que Cristo sea alguien en tu existencia y no un personaje más del que has
tenido noticia por diversos canales.
No es fácil el trabajo porque Cristo es exigente, pero... para eso eres scout... ¿Te
acuerdas del canto que dice: “...la vida fácil desechad...” del “Cantad hermanos míos boy
scouts...?”
Por eso, lucha por construir en ti un hombre nuevo para poder, a su vez, crearlo en los
demás y así, conforme al sueño de Baden Powell, podrás dejar el mundo en mejores
condiciones de lo que tú lo encontraste...
Los títulos que te propongo no son más que una pista; tu inquietud, tu ingenio y
capacidad te permitirán aprovechar este material de múltiples maneras y descubrir muchas
otras ideas que a mí ni siquiera se me han ocurrido.
Un abrazo grande de este scouter que ama al Movimiento y que “siempre está listo para
servir”...
Preparando la salida
Desde hace un tiempo hay mucho revuelo en la Tropa... Es que falta un mes para el
campamento.
Todo es actividad, preparativos, planes, carpas, baterías de cocina...; en fin, los detalles se
van teniendo en cuenta para que todo salga bien.
¡Qué bueno es eso! : fijarse metas y, para llegar a ellas, poner en juego todas nuestras
facultades.
Es algo apasionante y es toda una aventura, como asimismo apasionante y aventura es
nuestra vida cuando a ellas le fijamos metas, bien pensadas, a las que nos esforzamos por
llegar, aun a costa de sacrificios, al igual que a este campamento, que nos esta costando
mucho trabajo.
Fijarse metas en la vida es cosa muy dignadle hombre, ya que le obliga a crear, prever,
trabajar
• con fe en sí mismo
• y con la esperanza puesta en éxito.

Qué pena dan esos muchachos que están boyando a la deriva, sin saber adónde ir, ni
que hacer, faltos de ideales que llenen su vida! Son los eternos niños con sus
infantilidades “matando” el tiempo en la calle, incapaces de leer un buen libro o de
gozar del aire puro en el deporte o en un paseo, solamente predispuesto para los
placeres fáciles superficiales.
Esto, por cierto, no es digno de un scout como tú.
Recuerda que “en la vida vamos a ser lo que sean nuestros ideales”... Podríamos decir
que hay una sola meta, la que nos enseñaron en la manada “Siempre Mejor”...
Es algo que está enraizado en la misma naturaleza del hombre el deseo de ser mejor en
todo.
Este anhelo íntimo lo ha puesto Dios en nosotros y Jesús nos lo recuerda cuando dice:
“Sean perfectos como mi Padre celestial es perfecto”...
Él aprender a hacer bien un nudo, un vendaje; aprender los teléfonos de urgencia,
primeros auxilios; guiarte por las señales de pistas, interpretar la brújula, la buena acción de
cada día... son otros tantos intentos de ser cada vez mejores y con ello estamos cumpliendo
con lo que Dios pide de nosotros...; pero para todo esto debemos poner nuestra cuota
• de sacrificio,
• de tenacidad.
• Y no dejarnos llevar por lo que es fácil y superficial.
 Hay muchos que ponen su vida al servicio de un ideal grande, noble, enseñando,
cuidando enfermos, dedicándose a las misiones, desempeñándose como buenos
padres de familias o diligentes profesionales, etcétera, y canalizan todas sus energías
para alcanzar la meta.
Esto lo consiguen:

• pensando mucho
• “acariciando” su idea

y así terminan por obsesionarse de ella, ordenando en este sentido cuanto tienen, aunque
muchas veces les exija esfuerzos muy penosos, verdaderos sacrificios.
Pero el que tiene constancia vence, y la alegría y satisfacción llenan su vida...
En la “ caminata de primera clase” tuvimos que cruzar ríos con agua hasta la cintura,
bañados llenos de mosquitos, pajonales y cañadones, pero cuando llegamos a la meta, nos
revolcamos en el suelo por la alegría, reímos y gritamos de pura satisfacción porque
habíamos llegado...
Así tú: siempre adelante, con dificultades o sin ellas, y cuando llegues,¡ nadie podrá
privarte del íntimo gozo de una meta conquistada!
Ni te molestes en poner atención en los que se te ríen, te aconsejan mal o simplemente
te miran con lástima. Ellos son los dignos de lástima, pues viven rastreros y sin ilusiones
Pero tú ... siempre adelante y cada vez más arriba....
 La mochila
Yo no sé por qué, pero el campamento me tiene trastornado, Falta una semana para
salir y ya tengo la mochila pronta.
Cada vez que entro en mi dormitorio la miro, la toco, la abro, la cierro, porque le
encuentro un no sé qué de misterioso, de fuerza de atracción...
Anoche, antes de acostarme, sentado en mi cama, la estaba mirando con tanto cariño e
ilusión que comencé a hablar con ella.
-Falta solamente una semana, ¡qué largo se me hace! Quisiera ya estar saliendo,
contigo a mis espaldas.
-¿No te preocupa mi peso?
-De ninguna manera; solamente te he cargado de cosas necesarias y no de tantas
cositas inútiles que te pone un pie tierno...
-Entonces ¿me llevas con gusto?, ¿No te molesto?
-Por supuesto que no y, aparte, te aprecio enormemente porque eres no sólo útil sino
indispensable en mi vida scout.
Es cierto que a veces te vuelves pesada, sobre todo cuando se trata de subir un cerro o
cuando los kilómetros parecieran que nunca pasaran... Pero también que agradable es
abrirte y sacar el alimento que mi cuerpo reclama.
-Me alegro de que pienses así, y ya que me aseguraste que no soy cargosa quiero
decirte algo que te va a ser muy útil en la vida...
Ni qué decir que abrí ojos y oídos para no perderme nada de lo que me diría la mochila.
Ella siguió:
-Todas las cosas hablan, hasta esa vieja mochila, tu compañera de tantas
aventuras...;mejor dicho: Dios, por medio de esta vieja mochila, quiere comunicarte
algo. Te felicito por tu buen criterio en prepararme con un orden de valores; esfuérzate
por ir cargando la mochila de tu vida siempre de cosas útiles, pues ya no eres un pie
tierno en la vida.
Tú has tenido en cuenta ciertos valores: primero las cosas más necesarias, luego las
menos, y en cuanto a las superfluas..., ni siquiera pensaste en ellas, porque te estorbarían.
En la vida deben estar primero los valores espirituales. En cambio, ¿no te fijaste cómo
los hombres buscan antes los materiales y entran en una carrera enloquecida por ver quien
tendrá más y mejor? Como si la persona valiera por lo que tiene y no por lo que es...
Jesús, nuestro hermano mayor, nos lo dijo: “Busquen primero el Reino de Dios, que
las demás cosas vendrán por añadidura”. Y el Reino de Dios lo buscas cuando te esfuerzas
por ser un buen scout, cuando la ley scout significa algo en tu vida, porque la ley scout es
una fotografía del Evangelio de Jesús y no queda solamente en papel sino que te esfuerzas
por convertirla en vida y hacerla carne de tu carne.
A veces pesa un poco, como yo, pero siempre vas a encontrar en ella lo que tu necesitas
para ser feliz y para tener fuerza.
 Trata de desechar en tu vida todo aquello que sea ordinario, bajo, rastrero, que solo
sirve para impedirte el caminar hacia Dios..., como las cosas superfluas de tu mochila, que
son inútiles y estorban para la marcha.
A veces tendrás que luchar contra viento y marea, pero ten ánimo porque tu hermano
scout, Jesús, te acompaña y te ayuda a llevar la carga y luego te servirá de agradable
descanso...
¿Te acuerdas cuando caminamos esos diez kilómetros?...
-Si, nos sentamos y tú me serviste de blanda almohada...
Te confieso una cosa: me dejaste pensando... y desde ahora te quiero más que antes
porque no solo me sirves para llevar cosas, sino que hasta resultaste ser mi maestra...
Gracias, y... hasta mañana.
El bordón.
Anoche, mientras yo hablaba con la mochila, no caí en la cuenta de que el bordón
estaba apoyado en el rincón, detrás de ella, silencioso, mudo, elocuente a la vez, con
sus tatuajes y adornos...
Pero hoy cuando me levanté...
-¡Hola!...
-¡Hola!...
-Anoche, cuando estabas hablando con la mochila, escuchaba complacido porque
veía en ti un scout simple y sencillo, capaz de admirar y, por tanto, capaz de escuchar.
De veras que no esperaba que el bordón interviniera en mis cosas, pero, aunque
estaba apurado, me quede escuchando porque ha sido mi compañero en muchas
oportunidades.
El continuó:
-¿Te fijaste como los niños de hoy tienen la capacidad para admirar? Viven muy
apurados. Créeme, esto es malo... Lo que les importa es ir picoteando de una cosa en
otra, ir a la caza de novedades, y por eso ni admiran, ni escuchan... y tampoco
encuentran a Dios, que se complace en estar oculto en las cosas y ser descubierto, como
si le gustara jugar a las escondidas...
¿Te acuerdas de lo que decía Baden Powell?
“Hay dos grandes libros que siempre debemos leer:
• La Biblia
• Y el libro de la naturaleza...”
Y, sin embargo, ni uno ni otro leemos...
Viven en otra onda, arrastrados por la corriente del nerviosismo: baile, ingles,
música, chicas, barra, TV, cine... y no tienen tiempo ni humor en el día para pensar,
entrar en si mismos, admirar; tampoco para orar, porque no le encuentra razón; y es
natural, a Dios se lo halla en la paz, en la serenidad y sosiego, y ellos viven en mundo
muy agitado.
Ayer, cuando la mochila te hablaba de los valores espirituales, estuve a punto de
interrumpirlos, pero me aguanté; hoy te lo voy a decir.
Para mantenerte dentro de los valores espirituales es necesaria una cosa: un bordón
en la vida, la oración...
La oración, comunicación con Dios, es la fuente de energía que necesitas para no
dejarte arrastrar por la corriente; ella te va a dar fuerzas para que la ley scout sea para
ti una ayuda positiva en la vida y no letra muerta...
-Verdaderamente yo rezo poco-le confesé avergonzado
-No hacerlo es forzar y violentar la forma humana.
Jesús nos dice que Dios es nuestro padre, y que cosa más natural que el hijo hable
con su padre..., ¿no lo crees? ; hasta sería un pecado no hacerlo...
Dios no tiene lugar ni horario; por tanto puedes hablar con él en cualquier sitio y
tiempo. Lo importante es que te acuerdes de hacerlo...
 Era en la sierra: yo estaba contigo en aquella oportunidad; tarde serena, todo era
paz... Realmente, algo portentoso; el sol se estaba escondiendo y pintaba de anaranjado
todas las cosas. ,
En esos momentos yo hacía de arco de fútbol, pero me olvide de mil partido y de
mi oficio, y me quede embelesado por lo que pasaba a mí alrededor..., y ustedes... nada;
claro, estaban muy “ocupados” y no podían ver ni oír. Esa contemplación era para mi
toda una oración...
Compañero mío: trata de “hacer silencio” con frecuencia en tu alma y ponte a
charlar con el Amigo, así como cuando hablabas ayer con la mochila, con toda
sencillez y franqueza. Ese Amigo nunca te va a fallar y siempre va a estar atento a tus
palabras. Ello te va a ser útil, muy útil, para que llegues a ser un verdadero scout.
El bordón se calló; yo me fui, pero antes de salir le dirigí una mirada que era
mezcla de gratitud y alegría...
La cantimplora.

Con la lección que recibí de mi mochila y de mi bordón me ha resultado mucho

más fácil contemplar las cosas, escucharlas y sacar de ellas enseñanzas que antes jamás
se me habían ocurrido
Revisaba mi cantimplora echándole agua, cuando, a medida que se le llenaba,
cantando cada vez más agudo y haciéndose cada vez más pesada, se me cruzaron
estas ideas...
En realidad, ¡que poco vales! Aluminio forrado con tela o arpillera, y... nada más.
Pero como cambias de valor cuando estas llena de agua fresca y pura en una fatigosa
caminata. , y lo lindo es que tú no te jactas de ese valor, no cuentes si te aprecio mucho
o poco, siempre das... y das hasta lo último que tienes, hasta tu última gota.
Eres una bella imagen de lo que ha de ser el hombre.
En apariencia no vale mucho: fácilmente se enferma, va envejeciendo, se muere... Eso
es lo externo del hombre, pero hay algo interno, que no se ve y que le da realmente
valor: su condición de criatura e imagen de Dios...
Baden Powell lo ha comprendido maravillosamente y con el escultismo pretende
justamente eso: llenar al hombre de valores eternos y así, nuestro fundador quiere que
vivamos el Evangelio a través de la ley scout que trata de hacer al hombre de su
realidad:
Física, moral, sicológica, sobrenatural, etcétera.
Pero hay una cosa que te enseña esta vieja cantimplora:
que ese crecimiento, esas adquisiciones que has hecho no te las puedes reservar
avaramente para ti, sino que la debes compartir desinteresadamente con todo el que se
te presenta, y sin distinción...
Hace poco el Papa Juan Pablo II decía: “La difusión del anuncio de la salvación es
un grave deber, que corresponde a todo el Pueblo de Dios...”
Y el compartir con los demás tu riqueza espiritual es anunciar la salvación, es
evangelizar...
En otra parte decía: “Los que han recibido el don de la fe... no pueden
desinteresarse de millones de hermanos, a los que todavía no se ha anunciado la Buena
Noticia”...
¿Te has fijado como la egoísta aísla a las personas?...
El que esta en un grupo y no hace más que intervenir, programar, pero solo en vista
de su propio provecho o para sobresalir, pronto es detectado y se va presidiendo de él;
produce malestar en los demás y el grupo empieza a sentirse raro...
Es que el hombre ha sido hecho para compartir, por eso nadie es perfecto y todos
necesitamos de todos...
Jesús lo dice en su Evangelio”: Lo que has recibido gratis, dalo gratis”.
Tu espíritu generoso, tan propio del scout, no ha de esperar que los demás vengan a
pedirte; el inquieto adivina las necesidades de los demás y se adelanta remediarlas. Ese
es el verdadero espíritu cristiano; ése es el verdadero espíritu scout.
 Jesús dice que su Padre celestial da de comer a las aves del cielo y viste a los lirios
del campo, o sea, se adelanta; no espera que estén muriendo de hambre y de sed.
“El scout está dispuesto a servir y ayudar al prójimo en toda circunstancia”...
La carpa

Hemos dado la ultima inspección a las carpas: parantes, vientos, estacas, cierres,
etc... Todo en orden. Esto es importante porque la carpa debe tener un aire acogedor,
debe infundir un cierto grado de seguridad.
Yo no sé porque, pero la carpa es como un imán que atrae y hace sentirse a gusto...
Te invito a hacer una prueba: construye en el fondo de tu casa algo que tan
siquiera se parezca a una carpa y verás como tus hermanitos más pequeños se pasan el
día en ella, incluso con un cierto aire de misterio y hablando en voz baja...
Si sales con los lobatos y llevas una carpa ¡bueno! Es una lucha impedir que se
metan en ella.
Es que me imagino la carpa con la calidez de un corazón...
Si te acuerdas, en el Antiguo Testamento, el arca de la alianza, símbolo visible de
la presencia de Dios en medio de su pueblo, también estaba colocada en una carpa, por
expreso mandato del Señor, para significar que él vivía en el corazón de su pueblo; que
participaba de su misma suerte...
Estas consideraciones me traen a la imaginación la figura de scouter: cortes,
caballeroso; lleno de amor; o sea, lleno de Dios, que es Amor; un scouter con los
vientos, sus principios cristianos, bien firmes, que le dan solidez y seguridad para sí y
para los demás.
Porque eso es lo que ha de ser:
Un lugar, una persona, a la que pueden acudir todos los que están golpeados
por las inclemencias del tiempo, del medio ambiente, en el que corren el peligro de
sucumbir arrastrados por...
• La sociedad de consumo,
• La pornografía,
• La mentira
• La falsedad...

Personas que quieren ser buenas pero no encuentran en quien confiar; que
quieren ser honestas pero no encuentran un amigo en quien apoyarse y entre tus
scouts habrá muchos de ellos que, quizás, no se animen a decírtelo, pero cuyos
problemas tus adivinas...

Recuerda que no hay muchacho básicamente malo, sino que toda persona tiene
su campo de luz, y cuando se lo encuentran hacen maravillas con ella.
Más claro: “búscale la vuelta” hasta que puedas entrar en él; entonces serás tu
una carpa segura, cálida, acogedora llena del espíritu de BP. , que infundirá
confianza, alegría y seguridad en los demás.
Pero es natural: nadie da de lo que tienen...; por eso es necesario que tu vida se
llena del único que puede llenar: Dios y su Palabra, Cristo, que en el Evangelio te
da todas las pautas necesarias para hacer de tu vida, como decía Tagore, como una
flauta: “recta, sencilla y llena de música”...
 El ejemplo lo tienes en Baden Powell, hombre empapado de fe, conocedor
profundo del Evangelio y que se esforzó durante toda su vida en vivir la doctrina del
Maestro.
Esta vivencia colmó su existencia de paz, alegría, bondad, que son frutos del
Espíritu Santo. Y como el amor no puede quedarse encerrado en los estrechos límites
de una vida, quiso que todos los muchachos del mundo participaran de su misma
felicidad... Encontró en ellos el campo luminoso y los transformó, y los sigue
transformando, en verdaderos hombres, verdaderos cristianos, capaces de construir un
mundo nuevo porque se van revistiendo del hombre nuevo que nos dice San Pablo...
La generosidad, virtud típica del scout y del joven, ha de empujarte ha que
conozcas a Cristo y que de una vez por todas te dejes de superficialidades y
mediocridades tan en desacuerdo con el espíritu del scultismo de B.P.
A no ser que quieras hacer tu propio escultismo... ;pero entonces ya no es el de
Baden Powell .
Para terminar: en uno de los viajes en canoa, habíamos armado la carpa, para pasar
la noche, junto a un lago, con una hermosa vista hacia el espejo de agua. Alas dos de la
madrugada se levanto un viento huracanado que parecía arrancar del cuajo... Sacamos
los parantes y nos quedamos chatitos dentro de ella, pegados al suelo hasta que pasara
la tormenta...
A veces en la vida se levantan algunos temporales que amenazan arrasar con todo...
No te asustes y no pretendas tener tu carpa levantada...; humíllate y acude a la oración
y meditación de la Palabra de Dios, donde vas a encontrar la fuerza y la luz...Pronto
podrás armar nuevamente tu carpa y volver, con una nueva sonrisa, a la paz de un
nuevo día.
Esta es parte de la experiencia de mi vida; no la olvides, que te ha de ser muy útil.
 El local scout
Es casi imposible entrar en el local. La cercanía del campamento lo ha convertido
en un comercio mayorista: cajones, carpa, canoa, muchachos y más muchachos que
hablan, gritan, salen, entran..., poseídos por una agitación que tratan de disimular pero
que desborda a través de su piel.

Este fin de semana salimos para el campamento... y... ¿qué te parece? , ¿no suena
esto a muy natural?
¡Claro que sí!, siempre pasa lo mismo cuando se esta por comenzar una aventura.
El local scout es así... ;atrae, y tanto, que se convierte casi como la segunda casa del
muchacho.
Es muy acogedor y por eso viene para él a ser como un refugio.
Tu debes ser como el local....Quizá no te des cuenta o lo ignores totalmente...
Tu, para el scout, eres todo un símbolo y tu presencia entre los muchachos revistes
más importancia de la que tu crees; por eso es necesario que te preocupes, muy en
serio, de revestirte de virtudes que ayuden al chico a ir creciendo en su personalidad.
Esto, lejos de envanecerte y darte un aire de superioridad, más bien debe darte un
saludable miedo al comparar tu responsabilidad de formador de tus hermanos, con lo
que en realidad es tu vida.
Entonces, creo que estas páginas han de ser muy valiosas para ti: léelas, medítalas,
rúmialas, dirígelas...
Ha de ser preocupación tuya procurar la virtud de la mansedumbre:
que nunca te vean enojado ni ante ellos ni ante los demás, a no ser por rarísima
excepción, sino que tu rostro, lenguaje, actitudes...trasluzcan una paz y alegría
interiores que deben brotar de tu tranquilidad de conciencia y vida testimoniante. El
muchacho es muy influenciable, sobre todo por los más cercanos a él en edad, y no
debes perder de vista que tu misión en el grupo no es divertir niños sino orientarlos
hacia una vida plena de unión con Dios y de crecimiento personal en todos los niveles.
En otros términos: no olvides que tu misión en el grupo es la de evangelizar a los
muchachos.
El Papa Pablo VI nos explica el significado de “evangelizar”:
“Significa llevar la Buena Nueva a todos los ambientes de la humanidad y, con su
influjo, transformar desde adentro, renovar a la misma humanidad.
“He aquí que hago todas las cosas”. Pero la verdad es que no hay humanidad nueva si
no hay primer lugar hombres nuevos, con la novedad del bautismo y de la vida según el
Evangelio”...
Atiende, también, a lo que nos dice el Concilio Vaticano:
“El deber y el derecho del seglar al apostolado deriva... de su bautismo”...
Para poder realizar este trabajo, “El espíritu Santo” da a cada uno dones peculiares;
es la recepción de estos carismas, incluso de los más sencillos, la que confiere a cada
creyente el derecho y el deber de ejercitarlos para el bien de la humanidad”...
 Esta sinceridad de vivir de esta manera tu vida scout imprimirá en ella una alegría
profunda que no proviene de las cosas externas, que no tienen capacidad de darla, sino
de las raíces más profundas de un compromiso que se esta llevando con plena
conciencia y esfuerzo, a la realidad.
Como ves, mi amigo, la evangelización no es tarea exclusiva de sacerdotes y
religiosos sino de todo el Pueblo de Dios, y por tanto es necesario que tu formación
religiosa y , más aun, tu vida de mayor compromiso ocupen un lugar importante en tu
vida y sean una preocupación constante.
Quizás no te convenza del todo lo que aquí te propongo..; pero entonces te invito a
que te estudies a que estudies de Baden Powell, y quizás entonces veas las cosas con
mayor claridad.
L a reunion scout
Pensaba hablarte sobre la reunión scout en la que se van a completar los últimos
detalles del campamento: hora de salida, presentación de los equipos, transporte,
etcétera.
Como te dije, pensaba hacerlo yo... pero mi Amigo pidió hacerlo por mí, y
...¿cómo se lo iba a negar?
Yo me llamo Jesús y soy tu amigo. Los observo domingo a domingo en las
reuniones y no veía el momento de poder hablar con ustedes...
“Me encanta verlos reunidos, corriendo, gritando, formando circulo para escuchar,
porque todo aquello es un signo, un sacramento, de lo que mi Padre me recomendó que
enseñara con el mayor empeño:el amor el compañerismo, la amistad...
“Todo el Movimiento de Baden Powell se funda en: ayuda al prójimo, limpieza de
pensamientos y acciones, responsabilidad, corrección, etc., o sea, amos a si mismos y a
los semejantes, todo esto como medio o escalón para llegar a Dios.
“El evangelista Juan en su primera carta, en el capitulo 4, afirma: “El que dice:yo
amo a Dios y odia a su hermano, es un mentiroso”. ¿Cómo puede amar a Dios, a quien
no ve, si no ama a su hermano a quien ve?...
“Te invito a que leas él capitulo entero que tiene una sustancia extraordinaria. Pero
ese amor no se puede lograr sin estar unido a mí; te quiero recordar la comparación que
trae el mismo San Juan en él capitulo 15 de su evangelio: “Si el sarmiento no
permanece unido a la vid, no produce fruto. Te recomiendo que lo leas y sobre todo que
extraigas todo el sentido que puedas...
“¿Saben por qué oré por todos ustedes en la última cena que tuve con mis
apóstoles? Recuerdo que dije esto: “Que todos sean uno como tu, Padre, estas en mí y
yo en Ti. Sean también uno en nosotros: así el mundo creerá que tú me has enviado”
Para que haya fe en el mundo debe haber unión en el mundo de B.P. creó el
escultismo para que hubiera unión y por tanto para que hubiera más fe en el mundo”
“¡Que gran misión la de ustedes!: sembrar la unidad en el mundo..., pero recuerden
que esto solamente se consigue con un corazón lleno de amor hacia los demás”
“El apóstol San Pablo les habla como ha de ser ese amor, en la primera carta a los
corintios, capitulo 13:
“Si yo hablara todas las lenguas de los hombres y de los
ángeles, y me faltara el amor, no sería más que un bronce que
resuena y una campana que toca. Si yo tuviera el don de profecías,
conociendo las cosas secretas con toda clase de consentimientos, y
tuviera tanta fe como para trasladar montes, pero me faltara el
amor, nada soy. Si reparto todo lo que poseo a los pobres y si
entrego hasta mi propio cuerpo para ser quemado, sino tengo
amor, de nada me sirve.El amor es paciente, servicial y sin
envidia. No quiere aparentar ni se hace el importante.No actúa con
bajeza, ni busca su propio interés. El amor no se deja llevar por la
irá, sino que olvida las ofensas y perdona. Nunca se alegra de algo
 injusto y siempre le agrada la verdad. El amor disculpa todo, todo
lo que cree, todo lo espera y todo lo soporta.”
“Ahora te invito a que leas detenidamente la ley scout y me confieses si
encuentras o no-semejanza entre las dos cosas, y después, dime:
“¿No vale la pena jugarse por un escultismo autentico que esta basado en la
Palabra de Dios?...”

Mi amigo calló y no dijo más...

¿Y acaso será necesario añadir algo?... Honestamente creo que todo comentario
está de más y solo resta meditar y poner manos a la obra.
El campamento
Esa noche no pude dormir...; los nervios me tenían sobre ascuas. Me levante
temprano, me vestí como para salir y me quede sentado en la cama, como embobado,
no dando crédito a que ya había llegado el día de salida para el campamento.
Finalmente cargué la mochila, tome el bordón, me despedí de mis padres y... al
punto de reunión :la estación de ferrocarril
La tensión interna de cada uno no nos permitía hablar en voz baja; lo hacíamos a
gritos... y a gritos metimos las cosas en el vagón y del mismo modo llegamos al
término del viaje.
El lugar de campamento quedaba escasamente a dos kilómetros de la estación, así
que de inmediato emprendimos la marcha, siempre en un ambiente de conversación
festiva y clamorosa.
¡Llegamos!... Un monte con hermosa sombra y placentera frescura....A cincuenta
metros, el arroyo corría, entre piedras... En frente, el cerro como un austero vigía,
callado, pero lleno de fortaleza.
Lo más natural era empezar, de inmediato, a armar el campamento, y así fue. Cada
patrulla, en su lugar asignado, comenzó a preparar su “rincón”: la carpa, la cocina, pozo
de desperdicios, baños..., las cosas iban surgiendo en un clima de alegría general.
Cada uno se ocupaba de lo suyo, pero con un sentido de unidad y cooperación
estupendas, fruto de una paciente preparación espiritual y técnica a la vez.
Un mismo ideal impulsaba a todos... El más fuerte ayudaba al más débil; éste contribuía
en la medida de su capacidad, pero todos construían el campamento.
¡Qué hermosa la vida cuando la entendemos así!: no todos son iguales ni todos
tienen las mismas posibilidades, pero si cada uno aporta lo suyo, la existencia se vuelve
agradable y feliz.
Esto me hizo recordar que días atrás había leído en la Biblia:

“En cada uno el Espíritu Santo revela su presencia, dándole algo que es para el
bien de todos, porque todos formamos un solo cuerpo”...
“El cuerpo no se compone de un solo miembro, sino de muchos. Por eso, aunque el
pie diga: como no soy mano, no formo parte del cuerpo, no por eso deja de ser del
cuerpo”... Asimismo, aunque la oreja diga: ya que no soy ojo, no formo parte del
cuerpo, no por eso deja ser parte del cuerpo”... El ojo no puede decir a la mano: no te
necesito. Ni tampoco la cabeza puede decir a los pies: no los necesito”...
Qué feo y doloroso, cuando en un grupo, y todos vivimos en un grupo, se encuentra
una persona que se encierra en su egoísmo, en su comodidad, en su terquedad, y
solamente piensa en sí misma y en el provecho que puede sacar de los demás, sin
importarle las necesidades ni los problemas de su hermano...
Pero no hemos nacido para esto; el querer tiene siempre la razón , pasarlo bien,
satisfacer en todo momento nuestro gusto, no es natural.¿No te has fijado que todos
somos incompletos?... Por lo tanto necesitamos de los otros para nuestro progreso, pero
debo olvidarme de que también los otros necesitan de mí, y si me encierro en mi
egoísmo no dejo que los demás puedan progresar, sino que veo en ellos “cosas” que me
sirven y nada más. Y esto no solo es una falta de respeto hacia el otro sino que, sobre
todo, revela una ceguera que es peligrosa y lleva al fracaso por el camino más corto.
Gracias a esta actitud de colaboración y solidaridad conseguimos, a media tarde,
tener casi armado nuestro campamento, pues solamente faltaban pequeños detalles. Me
daba la impresión de que la íbamos a pasar muy bien...
Baden Powell estableció el sistema de patrullas precisamente para hacernos
entender que la ayuda mutua es algo fundamental en la vida de una comunidad: grupo,
familia, sociedad, etcétera.
Esto supone sacrificio, renunciar a quedarnos quietos, salir de nosotros y mirar a
los demás , tratar de adivinar y comprender sus necesidades. Son cosas que no se
consiguen de inmediato sino a través de una práctica constante, de cada día.
¿Comprendes la importancia que tiene la buena acción de cada día? E s un
ejercicio excelente que debes encarar, aunque seas mayor, con toda seriedad y no como
una “pavadita” para chiquilines y lobatos, como muchos desgraciadamente lo
consideran, por que no han ahondado en el valor de esa practica ni en el fin en que
Baden Powell la estableció. Tú que eres un scout inteligente, debes tomarla como
corresponde.

De un montecito cercano, entre diez trajimos un tronco y, gracias s ese esfuerzo

comunitario, tuvimos fuego durante todo el campamento... de lo contrario íbamos a
estar leñitas que de poco o nada nos hubieran servido.
Subiendo al cerro
El viaje, la fatiga del trabajo, la distensión de los nervios, todos contribuyó a que
por la noche cayéramos “como plomo” en la bolsa de dormir.
Nos costó levantarnos, pero nos esperaba la aventura de la subida del cerro, y eso
fue la pólvora que nos sacó de la carpa...
Parece que a los cocineros el trabajo no les hizo nada porque el desayuno estaba
pronto y el mate cocido con leche esparcía su aroma por el campamento, invitando a
reunirnos en el comedor.
¡Que bien cayo ese desayuno!; yo diría, mejor que nunca. Nos dejó como nuevos.
El cerro estaba ahí: sobrio, sereno, agradable, bien plantado, como seguro de si
mismo, invitándonos. Parecía decir:
“Vengan, van a ver que bien se esta aquí en la cumbre”...
Al comienzo, todos se mostraban muy dicharacheros, pero poco a poco la
conversación se fue apagando hasta que, más que palabras, se sentían los resoplidos y
el jadeo de la fatigosa subida...
No había camino; solo las ovejas habían dejado su cicatriz en el cerro: era una
huella hecha, sin pretensiones de guía, pero una huella segura que nos llevaría a la cima
sin peligro de despeñarnos.
No cabe dudas de que para un pie tierno es duro llegar a la cumbre, porque le hace
falta buen desarrollo muscular y previo entrenamiento, pero este trabajo queda
compensado con alegría de llegar, el aire que se respira y el paisaje maravilloso que se
aprecia desde la clima...
Yo también iba callado... Pensando ahora en ese momento, se me ocurre que
nuestra vida es igual que la subida a un cerro...
Comenzamos en el llano, caminando sin esfuerzos, como cuando niños, entonces
todo nos venia hecho, servido, masticado; solo era cuestión de aceptar: la autoridad de
mis padres, maestro, iglesia...
Ahora estoy caminando cuesta arriba. Todo ha cambiado: mi físico, mi sicología;
soy rebelde, cuestiono mi fe, rechazo la autoridad, etcétera.
¡Animo, amigo!, eso es muy bueno y debe dejarte contento porque estas caminando
hacía la cumbre de tu madurez de persona.
Pero, consejo de amigo, no te atolondres ante esos cambios sino aprende a
enfrentarlos con serenidad y por tanto usa la cabeza y no seas un rutinario imitador de
lo que “todos hacen”...
Se honesto contigo mismo. Ármate de serenidad, de ideales, de alegría y de
suficiente humildad para saber pedir consejos y escuchar. En los momentos poco claros
necesitas una orientación segura.
Como el deportista, que para ser eficiente tiene que trabajar, sacrificarse, abstenerse
de gustos, ejercitarse de paciencia y en la constancia, escuchar al técnico, tomar como
modelos a los que descollaron en el deporte, y después de mucha practica llegara a ser
verdaderamente un deportista.
El que lo quiere ser, pero sin sujetarse a los entrenamientos terminará en un
rotundo fracaso.
 Todo esto es el movimiento scout lo tiene en cuenta: juegos, espíritu de unidad o de
patrulla, servicio, buena acción, ley scout...
Tu debes compenetrarte de tal suerte que seas scout las veinticuatro horas del día y
de todos los días de tu vida...
Si solo eres scout durante lo reunión o el campamento, es éste el momento en que
todavía no has entendido el scultismo y estás haciendo que todos los esfuerzos de tus
scouters sean estériles...
Pero se scout de alma y veras lo que vi yo en la cumbre del cerro: panorama con
mucho horizonte, aire puro y fresco, paz, silencio y la mano de Dios en la naturaleza y
en mi vida...
Es formidable y te juro que vale la pena.
 Juego nocturno

Al mediodía ya estábamos de regreso, muy satisfechos, porque realmente valió la

pena...
Hubo algo que me quedó grabado: cuando nos reunimos en la cumbre, el JT, sin
duda, como yo mudo por la esplendidez del paisaje, nos dijo
“¿Se dan cuenta de esta hermosura y de lo pequeño que somos frente a todo esto?
Sin embargo, Dios ha puesto en éste, nuestro cuerpo tan pequeño, una grandeza mucho
mayor de la que tenemos ante nuestros ojos”.
Ahora pienso: que responsabilidad el tomar clara y total coincidencia de esto; y
recuerdo lo que me dice la Biblia: Dios nos a hecho a su imagen y semejanza...
Jesús nos asegura que somos hijos de Dios... San Pablo, que somos verdaderos
templos en los que habita el Espíritu Santo...
Realmente es un verdadero pecado el que yo desperdicie estos atributos y descuide
mi formación física, moral, espiritual, religiosa

No cabe duda: el escultismo es un movimiento magnifico, pues tiene en cuenta

todas estas realidades.
Por la noche practicamos el juego del grillo: había que desplazarse totalmente a
oscuras por entre los árboles del monte para descubrir donde se encontraba el
grillo...Animosos nos lanzamos a la aventura... El juego me costo dos buenos golpes...
No se veía nada, todo parecía igual ... Desorientado terminé en cualquier parte menos
donde estaba el grillo...
¡Cómo sentí la ausencia de la luz!
¡Que desorientado se va cuando falta la luz!
Recuerdo haber leído unas palabras del cardenal Pironio que me encantaría compartir
contigo:
“El mundo camina en tinieblas y espera de nosotros el testimonio, sencillo y cotidiano,
de esta luz. Ruedan por fuera los hombres envueltos en la incertidumbre, en la
búsqueda, en la soledad... Falta luz.
“Falta la luz que es alegría; falta luz, que es esperanza; falta luz, que es amor...
“¿Qué es ser cristiano? ¡Hombre de luz!... irradiar una alegría muy honda, una
esperanza inquebrantable, un amor sereno, ardiente, transformador.
Quisiéramos que aprendiéramos a ser de veras luz.
El mundo de afuera va rodando en la tristeza... Señor que yo le comunique la alegría de un
encuentro... El encuentro contigo, Jesús, el hermano y el amigo... El encuentro también con
ese otro hermano y amigo que va peregrinando conmigo en la historia...
“Ser luz: comunicar a los hombres una alegría nueva.”
“Ser luz: comunicar y anunciar a los hombres una esperanza firme.”
“El mundo se envuelve en la tiniebla del desaliento, del cansancio, del pesimismo, de la
desesperanza”
“Vivir en la luz es vivir en el amor. Es San Juan el que nos dice:
“Si alguien dice que camina en la luz pero no ama a su hermano, esta
mintiendo...Porque Dios es luz ... No vive en Dios porque no vive en su hermano”
“Descubrir a Dios es descubrir que El vive en el hermano... Amar a Dios es servirlo a
El, que vive en el hermano. Vivir en la luz es vivir en la luz fraterna”
“Por eso, ser luz en el señor, es disponernos a abrazar a los hombres sintiéndolos
sencillamente nuestros hermanos...”

Cuando la ley scout nos dice: el scout es amigo de todos sin distinción de razas,
credo..., lo único que pretende de nosotros es que anunciemos el Evangelio de Jesús
con nuestros hechos, que iluminemos a tanta gente, compañeros nuestros, cargados de
envidia, rencor, celos... que matan la autentica hermandad.
Hermano scouter: sé luz que ilumine, para que los demás no se rompan la cabeza
como me paso a mí en el juego del grillo...
Lo que sigue me paso en otro paraje
Debíamos ir a buscar agua potable a una distancia de tres kilómetros, más o menos;
salimos contentos y haciendo paradas y observaciones...El sol estaba bajo y de regreso
nos sorprendieron las primeras sombras. Comenzamos apretarle paso, pero no pudimos
evitar que la oscuridad ya nos envolviera. Nos encontrábamos en la orilla del monte y
no acertábamos con la entrada, pues todo nos parecía igual. Dimos vueltas y más
vueltas, entrábamos, salíamos llenos de nerviosismo, pero en vano, pues estábamos
perdidos en el monte...
De repente vimos un reflejo tenue de luz en el agua, nos acercamos y, sin saberlo,
estábamos al lado del campamento... Gritamos de alegría y lo primero que hicimos
fue... ¡Prender la luz!
La imagen del hombre que camina en la vida sin la luz de la fe..
 El arroyo
Era una de esas tardes pesadas, sofocantes, con mucho calor y nada de viento, que
aplasta los ánimos.
Aproveche el tiempo para llegar hasta el arroyo con la esperanza de que allí encontraría
el fresco que buscaba.
Una sombra me invito a sentarme; me descalce y metí los pies en el agua... ¡una
delicia..., nunca estuvo mejor! Te confieso que le dirigí una mirada de agradecimiento y
admiración; jugué con ella, y ella... siempre igual: corriendo y cantando es entre las piedras.
Te aseguro que si hubiéramos sido cien los que estábamos en el arroyo, a los cien los
hubiera refrescado, les hubiera cantado, y hubiera seguido corriendo con toda naturalidad...
¡Que fuerza formidable que tiene el agua!...
El poeta José Selgas decía que había dos cosas en el mundo que nunca lo cansarían: ver
correr el agua y ver jugar a un niño...

El agua es vida, es frescura, es potencia que mueve industrias; es también muerte y

sepultura...
Me encanta, cuando viajo en ómnibus, ver en el paisaje hileras de árboles que vayan
serpenteando: me dice que allí corre un arroyo...
El agua siembra la vida por donde pasa... y lo hace como apurada, como buscando su
casa para descansar y no para hasta zambullirse en el mar, y va corriendo solamente para
eso, para llegar.

Dios nos ha hablado y nos seguirá hablando a través de las cosas queriendo enseñarnos
una realidad que existe pero que nuestros ojos no son capaces de ver... Ya me hablo por
medio de una mochila, del bordón, del juego nocturno..., y ahora quiere hablarme a través
de este elemento tan precioso como es el agua.
 Al final de cuentas mi vida camina sin parar y también busca su casa, la casa paterna, la
del descanso, la de la felicidad sin fin... pero para llegar debe correr por su cauce, como el
arroyo, pues si se sale queda estancado y se convierte en charco que termina por secarse...
Y aquí mi pregunta: ¿Cuál ha de ser el cauce que conduzca mi vida?...Mi respuesta se
centró en esto: debo ser como el agua en el arroyo...
La frescura de una vida sana, física y espiritualmente sana, me llevara a repartir:
• Alegría por donde yo pase,
• Optimismo por aquellos con quienes yo conviva...

Y como por mi ley scout debo ser amigo de todos, es para mí un verdadero
compromiso ser como el agua: desbordar la vida en beneficio de todos sin mirar a
quien ni a cuantos.

¡Pobre de mí si me estanco o encierro en mi egoísmo! Seria ir asfixiándome, muriendo,

secándome... sin ser útil ni para mí ni para los otro.
Baden Powell, tratando de imitar a Jesús, pues leía el Evangelio con mucha asiduidad,
dio de sí todo lo que tenía, su propia vida, y vida abundante, a todos los muchachos del
mundo y de todos los tiempos... Eso es lo que hicieron los santos; eso es lo que tengo que
hacer yo.
Te confieso una cosa: a partir de ese encuentro con el arroyo, el campamento cambia
para mí...
• Mi alegría era más profunda...
• No me cansaba el estar dispuesto a colaborar con las diversas tareas de la
vida de patrulla...
Pero esto no puede quedar ni tener su punto final en este campamento, sino que debo
esforzarme por transplantarlo a mi vida de cada día, donde esté y a la hora que fuere.
¡Gracias, Dios mío, por hablarme así, de una manera tan sencilla, pero que me llega
hasta lo hondo y consigue transformarme!. Realmente tú me amas como una padre ama
a su hijo...
¡Gracias, Padre!...
No se me ocurrió nada más y quede, no se cuanto tiempo mirando como extasiado el
arroyo que seguía corriendo para su casa y lo hacía cantando...
 La playa... el baño.

Una de las cosas que realmente entusiasman en un campamento es el baño. Una buena
playita que brinde seguridad y un curso de agua es un elemento importante en la vida al aire
libre... Tras el cansancio del trabajo o de un juego fuerte, un baño resulta impagable.
En mis andanzas canoeras por el río Negro, después de remar seis o sietes horas, un
baño era algo fuertemente regenerador; parecía que me volvía la vida al cuerpo; me dejaba
como nuevo. Era algo así como el premio a la labor cumplida...
El agua tiene verdaderamente esa propiedad.
Por eso la historia y también Cristo tomaron el agua como signo externo o sacramento.
Cuando yo era niño, mis padres me llevaron a bautizar y el sacerdote derramó sobre mi
frente...
Cuando yo era niño, mis padres me llevaron a bautizar y el sacerdote derramo sobre mi
frente... agua, y esa agua corriente, al igual que esta el arroyo en que me baño, hizo brotar
en mí una vida nueva: la vida del hijo de Dios... Esa agua tuvo la fuerza para hacerme morir
al pecado, y la frescura para hacerme nacer de nuevo; por esa agua quede convertido en
hombre nuevo...
Justamente es eso lo que el hombre desea: una sociedad nueva sobre la base de un
hombre nuevo, y el Bautismo me hace hombre nuevo.
Ser hombre nuevo supone: morir
•Al egoísmo, a la vida fácil, a la sociedad de consumo, a la superficialidad, la
obsesión sexual, a la indiferencia...
Para resucitar:
• A la generosidad, limpieza de pensamientos y acciones, responsabilidad,
lealtad, caballerosidad...
 Siempre he pensado en lo doloroso que es morir a algo que esta muy arraigado en mi
vida; es como una operación en la que tratan de extirparme algo, pero ese trance
doloroso es necesario, si en realidad quiero salvar mi vida. Así lo decía Jesús: “El que
quiere seguirme, que renuncie a sí mismo, que cargue con su cruz y que me siga. En
efecto el que pierda la vida por amor mí, la hallara”. Y renunciar a mí mismo es
olvidarme de lo mío para pensar pensar en los otros, defender la dignidad de mi
persona contra mis inclinaciones deshonestas, amar, y ayudar sin buscar ni entrar en el
juego de la compensación, reconocer mis propios limites, en las relaciones con
personas del otro sexo superar las etapas de la cosificación para llegar descubrir a la
persona, aceptarme así como soy, a un en los aspectos que no me agradan, ubicarme en
mi realidad y no vivir en un mundo irreal que me proporciona la propaganda o la
envidia que induce a desear al vida que lleva a los otros saber luchar en mis dificultades
y no desanimarme por los fracasos.
Todo esto cuesta, y esto carga con la cruz, pero es también encontrar la verdadera
vida..., es a la operación que necesito.
¿No te decía que la ley scout es un calco del evangelino de Jesús?.
Es que Baden Powell sabía donde pisaba y lo que quería de la juventud..., y de lo que
era capaz la juventud.

Los cocineros
Ya habrás caído en la cuenta de que en un campamento en que hay comida abundante y
bien presentada, las actividades del día se desarrollan con mas influidse que si el estomago
esta medio vacío. Eso quiere decir que los ejercen el oficio de cocineros tienen un papel
muy importante que cumplir en la buena marcha del campamento.
Es aburrido enfrentarse con el hollín de las olas de todos los días, aunque supongo que
sabrás que si tienes la precaución de enjabonarlas antes de ponerlas al fuego, la limpieza
resulta sumamente fácil...
Pero a pesar de que sea un trabajo algo fastidioso, tiene la ventaja de hacernos caer en
la cuenta de que los demás nos necesitan. Naturalmente la dedicación diaria a las tareas de
la cocina no es tan sencilla ni fácil, sino, muy al contrario, exige de nosotros perseverancia
y mucha generosidad.
El día que se me ocurrieron estas reflexiones estaba sentado al pie de un árbol
observando a los cocineros:

Buscar agua, medir las porciones, picar la leña, quemarse los dedos, transpirar junto al
fuego y con toda concentración posible para que las cosas salgan bien... Y todo esto para
servir a sus hermanos scouts, para que ellos pasen lo mejor posible, para que tengan fuerza
y salud.
Una vez los apóstoles estaban discutiendo sobre quien iba a ser el más importante en
ese Reino que predicaba Jesús... Y el Maestro, que oía su conversación, se dio vuelta y les
dijo: “Los reyes y príncipes de la tierra se hacen servir por sus súbditos, pero que entre
ustedes no sea así; el que quiera ser el primero sea el servidor de todos, porque yo no he
venido a ser servido sino a servir”.
 Sin embargo, el mundo piensa al revés. La gente quiere dominar, sobresalir. Y entre
los scouts también se cuecen habas y no es raro encontrar a alguien que se desespera por ser
guía de patrulla, sobresalir a costa de los demás, llegar a ser jefe scout o presidente de la
asociación, porque quiere ser importante... con un total olvido d su propia misión , tan
claramente expresada en nuestro saludo scouter: “Siempre listo para servir”...
Hay un dicho que proclama: “El que no vive para servir, no sirve para vivir”.
El que no sirve a otros esta cometiendo una injusticia continuada, pues toda persona es
incompleta y por eso necesita de todos: de la escuela, de sus padres, de sus compañeros, del
zapatero, del panadero... de la sociedad
Ahora bien: si yo me formo y crezco, gracias a la sociedad, y no vuelco en ella mi
experiencia, capacidad, lo que sé y tengo, sino solamente vuelco aquello que redunda en
beneficio personal, me estoy aprovechando de ella y cometiendo una injusticia contra Dios
y contra la humanidad.
Ya nos lo dice el Evangelio: “Lo que has recibido gratis, dalo gratis”.
El apóstol Pablo dice que Jesús, dejando su condición divina, tomó la forma de siervo,
porque así lo quiso Dios, su padre; esto me dice que toda mi vida debe ser un servicio a los
demás, porque mi vocación es la de ser servidor.
Yo tengo condiciones que tú no tienes y por eso estas páginas quieren servirte a que
seas mejor; por tu parte, tienes cualidades de las que yo carezco...; si tú las viertes al medio
en el que vives, estas haciendo crecer a la sociedad de la que yo formo parte y por tanto yo
me estoy enriqueciendo, aunque no te conozca.
Si tú te niegas a hacerlo, me estas previendo a mí y a otros muchos de esa riqueza, y
nos vamos empobreciendo.
¿Viste qué riqueza encierran los cocineros de patrulla?...
Decía Tagore: “Y dormía y soñaba que la vida era alegría...
Desperté y vi que la vida era servicio.
Serví y vi que el servicio era alegría”...

La guardia nocturna
Una de las cosas más sensacionales en el campamento es la guardia nocturna.
Esa experiencia de soledad, silencio, responsabilidad, todo mezclado con una cierta
tensión nerviosa y quizá bastante miedo, es siempre motivo de muchos comentarios
para asustar a unos, impresionar a otros o simplemente descargar la propia emoción
…
Y esto resulta muy pintoresco porque la fantasía duplica y a veces triplica la
realidad de las cosas y cada uno se siente o un Tarzán o un Sherlock Holmes a
juzgar por la cosas que ha visto y oído…
A nosotros, los scouters ya veteranos, nos encanta oír estos relatos cargados de
fantasía, coraje y temeridad…
No cabe duda, la guardia nocturna es una de las cosas mas hermosas y con un
no sé qué de profundo que en estos momentos no se explicar, pero el encontrarme
sentado frente al fuego, quizás vuelto en mi poncho o frazada, a la mezquina
claridad de la fogata, sobre un fondo de oscuridad y silencio, aprieta el corazón.
Todo eso que durante el día se ha recorrido mil veces se torna misterioso en la
oscuridad de la noche…
Muchas veces durante la guardia he leído con la ayuda de la linterna, he
meditado, orado, pensado, siempre con esa conciencia de la responsabilidad que me
han confiado: velar por mis hermanos que están descansando.
Dios pone en mis manos y bajo mi cuidado todas esas inmensas riquezas, los
demás scouts, y yo debo cuidar de ellos. Eso quiere decir que no me puedo
dormir…; debo esforzarme por no dormirme a pesar del cansancio del día. Es un
riego y un sacrificio, pero vale la pena; son mis hermanos, y Dios quiere que en ese
momento yo sea como el padre, el tutor, l guardián. Esto me obliga a mantenerme
avispado, sereno: me obliga a reconocer los ruidos de la noche para no asustarme ni
confundir las cosas y sobre todo tener una buena linterna para que en las recorridas
pueda desempeñarme con eficacia.
Pero esto me lleva un poco más lejos… El juego del escultismo, porque el
escultismo es un juego, tiene por norma: que el muchacho mayor guié, forme, ayude
caminar al menor que esta con el; juega con el, estudia con él… Para esto necesita
tener sus ideas claras como la luz de la linterna, saber distinguir lo verdadero de lo
falso, lo que sirve de lo que no, enriquecerse a l primero a fin de poder enriquecer
luego a los demás… ¿Cómo voy a enseñar un nudo si no sé hacerlo, ni se para que
sirve?... ¡Imposible!
Y volviendo siempre al mismo punto de partida: para ser un buen guardián de
mis hermanos tengo que preocuparme de encarar en mi vida la ley scout.
Mira, muchacho, no fumes. El cigarrillo es malo, porque la nicotina, el
alquitrán, los pulmones…, y todo mi discurso se va a estrellar contra una pared si se
lo digo echando bocanadas de humo…

Un pie tierno tenía que hacer la guardia nocturna… Temblaba de miedo con
solo pensarlo y de ningún modo quería realizar la tarea solo. Me quede con él.
Envueltos los dos en una frazada y sentados en un ronco junto al fuego nos pusimos
a conversar, no sin antes traer una buena braza de leña para alimentar el fuego.
- ¿Y…? ¿miedo?...
- Más o menos…
El fuego era grande y alumbraba todo el campamento chisporroteando
alegremente…; l mirábamos fijo, como hipnotizados por la danzas de las llamas.
Rompí el silencio:- ¡Qué lindo es el fuego!
¿Pensaste alguna vez que cuando el corazón del hombre esta lleno de fuego es
inquieto como las llamas de este fogón?... ¿Se afana, busca, trabaja, se llena de
ilusión?...
Jesús quería que nuestro corazón ardiera siempre en el fuego del amor para
servir mejor a los demás; en cambio, ¡Que fea es la oscuridad!; no se ve nada, se
tropieza con todo, corremos riesgo; pero si encendemos una luz, ¡Como cambian las
cosas! Dios quiere que la luz de Jesús Resucitado siempre nos ilumine en la vida
para que podamos caminar con seguridad, serenidad y alegría. Tenemos que tratar
de conocerlo más.
Mi compañero no soltaba palabra y así, entre estas y otras cosas, fuimos
haciendo tiempo. Al final le digo;- Bueno, me voy a dormir…El asintió con la
cabeza…
Al día siguiente
- ¿Y… como pasaste la guardia?
- Bárbaro, vos sabes que pensaba en mis cosas, en mi vida. en los
demás; recorrí varias veces el campamento y las horas se me pasaron
volando… pero sobre todo ¡no sentí miedo!
Le di un abrazo de alegría y le dije:- Sos un campeón, muchacho…
Los ojos se le iluminaron y una sonrisa grandota transformo su rostro.

Ley scout
 Muchas veces a lo largo de estas breves páginas te he mencionado la ley scout. No
podía ser de otra manera, porque ella debe impregnar toda nuestra vida. Y no hay una vida
scout y otra privada; no, la vida es única; por tanto, una vez que hallas echo tu promesa, el
espíritu de la misma te alcanza en todos los momentos de tu vida. No es como la camisa,
que te la puedes sacar, guardarla, y, cuando te parezca bien, volverla a poner. Tu promesa
ha de convertirse en el estilo de tu vida, lo que supone una lucha permanente contra
nuestras inclinaciones pecaminosas: vagancia, pereza, egoísmo. Por eso, el escultismo no es
para todos sino para los guapos y fuertes y… Para los que en verdad se aman a si mismos…
Quizá esto te suene a raro; es que no todos se aman a si mismos. En realidad solo se
ama a aquel que se desea el bien, a aquel que quiere crecer como persona, a aquel que tiene
ideales claros. Hay muchos que prefieren la pereza; estos no se aman pues todos sabemos
que la pereza es la madre de todos los vicios y los vicios empobrecen e impiden el
desarrollo de la persona humana…; por tanto, el perezoso no se ama a si mismo.
Para que la ley scout signifique algo en tu vida debes enamorarte del movimiento,
estudiarlo, comprender su mística, que es formidable, y… orar. Si, aunque te parezca
mentira, orar. B.P. lo hacia con frecuencia y el escultismo quiere llevarte al la superación
en tu vida y para ello necesitas la ayuda de Dios
Jesús ya lo decía:- “Sin mi, ustedes no pueden hacer nada “.
Se refería al plano sobrenatural de la gracia. Tu puedes llegar a ser un verdadero
maestro en nudos pero ser un mal scout porque la vanidad, sed demonio, o algunos vicios
mas, son los dueños de tu vida.
Yo te diría esto:- Ya que el movimiento esta fuertemente inspirado en el Evangelio de
Jesús, es necesario que conozcas a ese Jesús, lo estudies y trates de imitarlo. Esto ya lo
decía Banden Powell:- “Cuando no sepas que actitud tomar frente a una situación, piensa
como lo haría Jesús en tu lugar y trata luego de imitarlo.”
Así vas a poder interpretar el pensamiento del fundador y sobre todo sabrás leer entre
líneas, descubrir la riqueza de su espíritu.
Ten bien presente esto: la letra mata, pero el espíritu vivifica, da vida.
Mira: sólo vale la pena ser scout si se toma en este sentido; de lo contrario mas vale
que te alistes en alguna otra asociación juvenil que te podrá brindar mas medios, mas
comodidad, y en la que puedes pasar con menos lucha, pero, desde ya te lo adelanto, te vera
privado del enorme gozo de haber conquistado la cumbre del desarrollo de tu persona en
todos los niveles: físico, moral, intelectual y religioso.
Si por un motivo u otro el movimiento llegara a descuidar cualquieras de estos niveles,
se estaría desviando peligrosamente y dejaría de ser el escultismo de B.P. para convertirse
en un club de tantos o en un jardín de infantes en que se trata de cuidar y divertir a los niños
y nada mas…, pero no seria el escultismo de B.P. Seria otra cosa.

Conclusión

¿Sabes lo que pretendí con estas páginas?

 A pesar de lo que te decía en la introducción, estas líneas quieren ayudarte a que
aprendas a contemplar las cosas…
Contemplar no es lo mismo que observar. El que observa esta fuera de la cosa y la
examina: esto es así…, asá…, tiene tal forma, se conforma de esto o aquello…, pero se
queda fuera. En cambio, el que contempla deja que las cosas entren en el; y cuando las
cosas entran, cobran vida, se encarnan en nosotros, nos hablan y terminan llevándonos a
Dios.
Esto es lo que pretende B.P. al decir que el scout es amante de la naturaleza, al
promover la vida al aire libre, al aconsejarnos que sepamos leer en este libro maravilloso y
siempre abierto de par en par.
De esta manera cobra fuerza, sentido; no es algo muerto o ajeno a mi, que soy un ser
humano, sino que pasa a ser parte de mi vida, de mi historia, de todo lo que tengo y soy, y
ahí, en esa contemplación, es donde Dios se me revela, me habla, me enseña, y yo aprendo
y crezco…
Por estas líneas puedes comprender que otra riqueza encierra un campamento y
nuestro movimiento cuando se lo mira con ojos de contemplativo.
La facultad de la contemplación es adquirida mediante la práctica. O sea que, así como
practicamos los nudos, tenemos que practicar también la contemplación.
Muchas veces se piensa que eso de contemplar limita al disfrute de la actividad. Muy
al contrario: el que contempla ve mucho mas que el cégaton…; el cégaton no ve mas que
una vieja cantimplora de aluminio y quizá este juntando dinero para comprar otra mas
moderna, pero… te apuesto lo que quieras, que ahora tu no cambiarias tu cantimplora, ti
vieja cantimplora, por ninguna otra del mundo…, porque es para ti una compañera, una
amiga que te quieres y a la que tu quieres… Al cégaton muchas actividades no le dirán
nada y le pasaran aburridas en cambio, el contemplativo no solo ve la actividad sino
también mucho más allá de ella.
San Francisco de Asís era el hombre mas feliz del mundo porque todo le hablaba, con
todo conversaba, a todas las cosa las consideraba sus hermanos o hermanas…, lo que quiere
decir que entraban dentro de el y llegaban a formar parte de sus propia vida. Por eso amaba
tan entrañablemente la naturaleza y a los hombres, que son también parte de esa misma
naturaleza, y todo este conjunto lo inducía a hablar a Dios, que había echo cosas tan
hermosas para recrearnos.
¡Cuidado!, esto no es caer en ingenuidad; esto es tener la perspicacia debida para
valorar las cosas en toda su profundidad y no en la superficialidad del cégaton: utilidad y
provecho personal… Me explico: contemplar un pájaro me lleva al conocimiento de su
ubicación, de su fisiología, anatomía, hábitat…; pero también me releva su intimo
significado para mi y la exquisita bondad del que ha creado ese animal para mi provecho y
recreo, lo que me mueve a darle gracia…
El contemplativo ve las cosas en u contexto más amplio y completo que el que es
superficial y por eso goza profundamente de las cosas con un gozo interior que no puede
explicarse con palabras.
¡Aprende a contemplar!, y tu escultismo cobrara la vida que tu te mereces…