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2022
Introducción ........................................................................... 7
Dedicatoria ........................................................................... 9
¿Quién Era? .......................................................................... 11
Caballero por Excelencia .................................................19
Anhela Escucharlo De Ti ................................................... 23
El Baúl de los Recuerdos ................................................... 41
Lo que se ve es Causado por lo que no se ve ...........57
El Perdón .............................................................................. 68
Sin usar la Fuerza ................................................................ 87
El Día de la Independencia ............................................ 99
¿Cuál es tu Pozo?.............................................................. 113
Metamorfosis...................................................................... 129
En Espíritu Y Verdad ......................................................... 147
¡Yo Soy el que habla Contigo! ......................................167
Agradecimientos................................................................179
Introducción
CAPÍTULO 1
¿Quién Era?
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José David Díaz Laza
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Sobre todo, al mediodía donde el Sol es más
intenso, no me sentaría en un lugar abierto, a
exposición de los rayos ultravioleta del sol, a menos
que tuviese algo imperioso que hacer allí.
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No pudo tener éxito con ninguno; una mujer
incompleta e insatisfecha por un hombre. Un
hombre que era el centro de, para ese instante su
vida amorosa, un hombre que no quería o no podía
casarse con ella. Puede que ese hombre fuese ya
casado, lo que añadiría más leña al incendio que era
su ya mencionada mala reputación. Pero a todo lo
anterior se le sumaba que era también estéril.
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¡AMBULANCIA!
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Capítulo 2
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La mujer samaritana: no solo se negó de huir del
lugar donde Jesús le hablaba, sino que entabló una
conversación allí con él, donde nuestro amante
DIOS la trató con tanto respeto y ternura que se
sintió abrumada. Debe ser difícil que las personas te
excluyan y que nadie te hable por errores que has
cometido, y quizá, después de tanto tiempo halló a
alguien que le dirigía la palabra, y prolongaría ese
tiempo lo que más pudiese.
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CAPÍTULO 3
Anhela Escucharlo De Ti
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negando todos, dijo Pedro y los que con él estaban:
“Maestro, la multitud te aprieta y oprime, y dices:
¿Quién es el que me ha tocado?”» Lc 8:45
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depender de la caridad de alguien, ya que no podía
trabajar. Entonces, ¿quién la alimentaba? Eso es un
misterio, podría ser algún familiar quien le indicaba
el lugar y hora a verse, o algún buen ciudadano
compadecido de su condición. No podía abrazar a
su madre, su padre, hermanos o hijos. Sus propios
hijos la llamarían inmunda porque así declaraba la
ley, aun esas personas que habían salido de ese
vientre que ahora estaba enfermo la escarnecerían
porque la ley lo demandaba.
¡PEDIR NO ES SUFICIENTE!
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instante. Demostró por su osadía que era digna
merecedora del reino de los cielos, había miles entre
la multitud y solo una con la suficiente fe para
arriesgarse y demostrar que el Padre no deja
avergonzado a los que en él confían.
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aunque lo planificó mucho y lo ejecutó de acorde al
plan PERFECTO, finalmente fue descubierta, el
miedo de la mujer era que públicamente tenía que
pronunciar que había quebrantado la ley. Me puedo
imaginar ese instante en la vida de esa mujer, el
instante en que Jesús la descubre. Imagino a los
piadosos diciendo: ¡Pobrecita!, me imagino a la
gente mirando al suelo y empezando a recoger
piedras a la espera de una simple señal para
lapidarla. Imagino a los discípulos inmóviles a la
expectativa de lo que el Maestro diría, imagino a los
fariseos indignados, pero lo que más quisiera saber
con certeza es: lo que pasaba en ese momento por la
cabeza de aquella mujer.
Una vergüenza más.
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mediante este sometimiento recibir de él lo que ha
preparado de antemano para nosotros.
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honrarla, no solo para que no la apedreasen en el
momento, sino para que ya nadie sintiera el deseo
de hacerlo. Hoy Jesucristo cerrará la boca de todos
aquellos que contra ti se han levantado; pondrá tu
silla más alta que la de ellos, y serás dignificada por
tu fe. Así que usa esa FE que salva y haz que la mano
de Dios se mueva a tu favor.
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toda la noche y parte de la mañana con la herida
vendada, al llegar a la casa cerca del mediodía, casi
no podía caminar, la pequeña herida que me había
producido dieciséis horas antes, se había triplicado
en tamaño y en grosor también, todo por haberla
vendado y encerrado para esconderla de mis padres,
para evitar que estos me llamaran la atención o me
castigaran. Ya que me hice la herida en un acto de
desobediencia a mis padres.
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haré blancos como la nieve. Más todo este proceso
de blanqueamiento de los pecados en nuestra vida
tiene un principio: ese principio es venir ante el
Señor a presentarle cuentas claras. Sí. ¡Él sabe todo
lo que tú has hecho! Pero es de tu boca y de tu
confesión que vendrá la sanidad de parte de Dios. El
perdón ya está preparado, solo tienes que invocarlo
pregonando una confesión delante de la presencia
de tu Dios, diciendo: Señor te he fallado en esta, en
aquella y esta otra área de mi vida: lo confieso para
que me perdones y así poder ser libre.
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CAPÍTULO 4
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Esa cadena lo detenía y lo tironeaba hacia atrás
cada vez que el perro avanzaba en dirección hacia
algo que quería. De la misma forma son las heridas
abiertas en la vida de una persona. No importa
cuántas veces quieras salir adelante; ese pasado que
no ha sido desechado te detendrá, no dejándote
avanzar. Necesitas desprenderte de lo viejo; de lo
que ya pasó, porque en el sí y en el amén de Dios,
tienes una realidad insuperable.
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Entendiendo que sin peso encima es más fácil
avanzar con persistencia y sin desmayar. Cuando te
deshaces del peso y del estorbo estás ligera como
una pluma; lista para correr avanzando hasta tu
destino profético .
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Las personas no olvidan nuestros errores, pero
Gloria en el Cielo que Dios si los olvida; y mejor aún
los perdona.
¡AYER NO ES HOY!
«No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a
memoria las cosas antiguas. He aquí que yo hago
cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis?
Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la
soledad». Is 43:18-19
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Cristo prefirió morir por nosotros a vivir una
Eternidad sin nosotros. Déjame decirte algo: “eres
consecuencia del amor de Dios en esta tierra y en
medio de ese amor estas tú. Existes en medio del
amor del Padre celestial. Acostúmbrate a vivir allí,
en medio de ese sublime amor. Eso callará las voces
que puedan levantarse en tu contra; si acaso aún las
escuchas, entonces él te demostrará que la palabra
que vale es la que sale de su boca. He aquí que yo
hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; me encanta
este verso porque no solo recibimos la invitación de
parte de Dios para ya no darle importancia al pasado
que nos atormentaba; nos oprimía, nos causaba
dolor y nos detenía, sino que también recibimos de
él la promesa que hará en nuestras vidas cosas
nuevas.
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Cuando un desierto es atravesado por un río,
definitivamente deja de ser desierto. Ya que el agua
empezará a producir vida y hierba, ocasionando que
este deje de ser el sequedal que antes fue.
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Al principio, en tu alma había una fuente que te
llenaba de fuerzas, eras un hermoso paraíso que
albergaba muchos sueños y metas. Todas prontas a
cumplirse, pero descuidaste esa fuente interior en tu
alma, dejaste a un lado lo que te abastecía, logrando
así que tu vida quedase desierta; sola y sin vida.
Todos tus sueños murieron. Solo han quedado
pequeños rastros del esplendor que un día tuviste,
aunque duela aceptarse, todo lo bueno ha quedado
atrás.
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Sé que el dolor es fuerte, piensas que esconderlo
es la manera de no pensar en ello, sé que piensas que
si lo ignoras algún día cesará, mas no es así. Si el
anhelo de tu alma es que el dolor termine de una vez
por todas, pues llévalo a Dios; sácalo a la luz delante
de él, dile que necesitas de su sanidad; de su verdad,
de su perdón y de su restauración, pues cuando esto
hagas, entonces le darás permiso para que él obre en
tu vida.
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CAPÍTULO 5
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Por esa razón es que los cristianos siguen
cayendo con el mismo pecado con el que caían
tiempo atrás; porque la atadura no ha sido soltada,
porque no hubo una verdadera liberación, y porque
el enemigo aún tiene sometida partes de su vida.
Para deshacerlo debe ser tratado desde la raíz. La
mayoría de las enfermedades tienen su raíz en lo
espiritual, por ello, Cristo iba de una vez a la raíz y
destruía la enfermedad, perdonando los pecados,
esos que eran los causantes de la enfermedad.
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«No hablaré ya mucho con vosotros; porque
viene el príncipe de este mundo, y él nada tiene en
mí». Jn 14:30
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Sino que fue preparada para ser la imagen de la
gloria de un Dios amoroso y poderoso; siendo
dirigida por la bondad del Santo Espíritu, que solo
anhela tu bienestar.
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Te narraré un cuento
Había una vez una mujer que aceptó al señor
Jesús y lo invitó a morar en su casa. La mujer le dijo:
Señor esta es mi casa, vivirás aquí conmigo. Como
tú no tienes televisor; ni refrigerador, entonces te
daré este cuartico de los chécheres, así no ocupas
mucho espacio.
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Jesús para que acudiera a su defensa. Jesús vino
prontamente; al verle, el enemigo de la mujer salió
huyendo de inmediato.
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áreas de tu vida, que no quede rincón que no le
pertenezca. De esa manera el podrá dar sanidad a
lo que lo necesita y llenar cada vacío para que
ningún espacio esté abandonado. Evitando que
pueda venir el enemigo a alojarse, además de
brindar una protección perpetua contra sus
ataques.
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CAPÍTULO 6
El Perdón
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«Ahora me gozo, no porque hayáis sido
contristados, sino porque fuisteis contristados para
arrepentimiento; porque habéis sido contristados
según Dios, para que ninguna pérdida padecieseis
por nuestra parte. Porque la tristeza que es según
Dios, produce arrepentimiento para salvación, de
que no hay que arrepentirse; pero la tristeza del
mundo produce muerte». 2 Cor 7:9-10.
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El perdón.
Involuntariamente, la persona que te pide
perdón te traerá a la memoria, aquello que te hizo;
que te dolió, que te hirió y que pensaste que ya no
te dolía, pero ahora que ves de nuevo a ese ser que
fue el causante de tu sufrimiento, caes en cuenta de
que nunca te dejó de doler solo que lo relegaste a un
rincón.
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En ese momento, cuando la persona viene
humillada; pero su confesión no hace más que
alterar la presunta tranquilidad de tus sentimientos,
la aparente estabilidad de tus emociones. En ese
mismo instante, donde concederle el perdón te
parece que es una manera muy fácil de librarlo. Esa
fracción de segundo donde puedes a manera de
venganza negarle su petición. Justo en esos minutos
donde te llueven en la mente cada uno de los
reproches que planeaste tiempo atrás; esperando el
poder expresarlos cuando se diese la oportunidad.
Justo cuando te provoca dejar a dicha persona
humillada y avergonzada; cuando no quieres ni si
quiera escuchar sus razones, cuando la altivez se
aviva y cruza por tu mente un pensamiento que te
hace exclamar: ¡Así te quería ver! Arrastrándote
como la alimaña que eres. Tienes que pagar todo lo
que me hiciste. Cuando la carne y el ego pidan
venganza; justo allí, en esa misma fracción de
segundo, perdona y ciérrale la puerta al diablo en la
cara.
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Jesús tuvo que perdonar a una muchedumbre de
malagradecidos que trataban de matarlo; nos
perdonó a ti y a mí sin que se lo pidiésemos, si hay
algo de lo que estoy seguro, era que ni tú ni yo
habíamos nacido, y sin embargo, ya Dios nos había
perdonado. Sí, él nos perdonó.
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Como personas de raciocinio tenemos nuestros
estándares de moralidad; donde muy
limitadamente juzgamos lo que es bueno y lo que es
malo, calificamos como bueno lo que nos alegra, y
como malo lo que nos entristece y duele. Dichos
estándares hacen a algunas personas creerse
superiores a otras porque no tienen las mismas
fallas. Algo similar a lo que pasó con la mujer
adúltera.
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Sentido de moralidad
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La Biblia la describe en su breve paso como: ¡la
mujer adúltera! Nosotros le llamaremos: ¡la mujer
redimida! Los fariseos interrumpieron la enseñanza
de Jesús para exponer un caso referente a la ley. Una
ley que expresaba que cuando fuese sorprendido
alguien en el acto de adulterio; deberían sacarlos a
ambos desnudos y apedrearlos, tanto al hombre
como a la mujer. Dt 22:22. Toda la multitud tenía el
deber moral y religioso de apedrearlos, tal como
expliqué con la mujer del flujo de sangre.
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Cristo pasó de estar ante las cuerdas, a noquear
a los fariseos. En todo el nuevo testamento; para mí
es la respuesta más acertada y contundente de
Cristo, ante quienes lo tentaban. «Pero ellos, al oír
esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno,
comenzando desde los más viejos hasta los
postreros; y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba
en medio». S. Juan 8: 9. Salvó la vida de la mujer,
pues cada uno de los que querían apedrearla;
aunque hablaban la verdad, merecían recibir
pedradas también. Esto es importante.
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LA MEDIDA ES CRISTO
Muy aparte de la moral humana, los estándares
de DIOS son tan altos que nuestra manera de ser no
nos hace mejores personas que un asesino serial o
un violador. Pablo lo expresa claramente cuando
dice: «Mas eres inexcusable, oh hombre,
quienquiera que seas tú que juzgas; pues en lo que
juzgas a otro, te condenas a ti mismo; porque tú que
juzgas haces lo mismo». Ro 2:1.
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El Espíritu Santo inspiró a Pablo a escribir estos
versos para darnos los límites de sus estándares. El
espíritu Santo es: Santo y nada por debajo de esa
santidad será considerado como aceptable. Me
podrías decir: Oye, José David, pero yo no hago
aquello que juzgo; yo juzgo a un violador porque
son ruines y bajos sus actos, pero jamás he violado
a nadie. Yo juzgo a un adúltero porque sus acciones
destruyen a las familias y a la sociedad, mas yo
nunca he sido infiel a mi pareja. Juzgo a un asesino
porque son tan abominables sus actos que acaban la
vida y la existencia de un ser humano. Eso no se
refiere a mí, porque nunca he efectuado esos
pecados que aborrezco.
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«Pero por tu dureza y por tu corazón no
arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día
de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios, el
cual pagará a cada uno conforme a sus obras». Ro
2:5-6
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porque nuestra severidad para no perdonar será el
medidor que nos privará de hacer uso de esa
maravillosa gracia.
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CAPÍTULO 7
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Ese amor que es más alto que nuestras fallas. Por
ende, no está sujeto a nuestra fidelidad, sino a la
fidelidad de aquel que decidió amarnos primero.
Decidamos pues, confiar en ese amor que es lo
suficientemente bueno como para inspirar la
devoción de un corazón. Ese amor tan agradable
como para poder confiarle nuestros anhelos. Ese
amor tan perfecto como para comprender que nada
malo puede salir de ese inmensurable sentimiento
del Padre hacia ti.
Ese amor donde puedes descansar, en el cual
puedes confiar, que aleja todo temor, que te hace
libre, que te restaura. Ese amor que le inspiras al
Padre y en cuyo centro estás.
Volviendo a la samaritana:
«Respondió la mujer y dijo: No tengo marido.
Jesús le dijo: Bien has dicho: No tengo marido;
porque cinco maridos has tenido, y el que ahora
tienes no es tu marido. Jn 4:17-18.
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Es que estuviste en mi mente y en mi corazón
antes de que los cielos y la tierra fuesen creados; no
eres un accidente, mis manos te hicieron y te
formaron.
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JUNTO AL POZO
A solas en el pozo se encontraba una mujer
necesitada; fragmentada, solitaria y desamparada.
Junto a ella estaba el ser más especial que toda mujer
puede conocer ¡SU CREADOR!
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
La samaritana se preguntó por años si alguien
podría llenarla; si alguien podría saciar su alma que
estaba sedienta de amor y atención. Pero los lugares
en los cuales esta buscó respuesta a su interrogante
de ser llena y redimida, no lo hicieron, no le dieron
respuesta. Entre tanto, Jesús espero con paciencia a
que se agotaran todos los recursos que la mujer tenía
para obtener redención por sí misma, esperó a que
ella se diera cuenta de que nada podría saciar su sed.
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No dejes que el ímpetu de las fuerzas que
acompañan a la juventud te impida ver que todo lo
bueno que a tu vida puede llegar solo lo encontrarás
en DIOS.
PLAN ESTORBADO
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Entorpecer nuestros torcidos caminos es un acto
de Dios, que muestra su gran misericordia hacia
nosotros.
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CAPÍTULO 8
El Día de la Independencia
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Es una contrariedad, pero mientras más atados
estemos a Jesús y a su amor por nosotros, más libres
seremos.
El camino de la independencia no producirá en
tu vida más que dolor y pérdida, haciéndote creer
que tienes el control cuando realmente no tienes
dominio en el desenlace de tu historia. Es una
mentira que el diablo ha dicho a los seres humanos,
mentira que tristemente le ha funcionado desde Eva
hasta nuestros días. «Entonces la serpiente dijo a la
mujer: no moriréis; sino que sabe Dios que el día
que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y
seréis como Dios sabiendo el bien y el mal». Gen 3:4-
6. El diablo mintió a la mujer diciéndole que: al
comer del fruto prohibido no morirían, sino que
serían iguales a Dios. Desde el principio, fue la
intención de vivir en independencia lo que dañó
toda la perfección de la creación. Esa mentira del
diablo afloró algo en el corazón del hombre; una
independencia. La mentira del diablo fue algo que
anhelaron Adán y Eva, ignorando a su vez que ya
poseían aquello que codiciaron; «… serán abiertos
vuestros ojos, y seréis como Dios» Gen 3:6 Eva
pensó que Dios le había negado algo y quiso tomarlo
a la fuerza.
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Te preguntaré algo. Si realmente tienes el
control de tu vida, ¿por qué las cosas no te salen
bien? ¿Por qué no estás plena, completa o feliz? El
control es una ilusión, no es más que un espejismo
que tomamos como verdadero, pero que en
sustancia no puede crear nada. Si las personas tienen
el control de sus vidas, ¿por qué mueren sus
familiares? ¿Por qué hay gente abandonada? ¿Por
qué hay personas enfermas? ¿Por qué hay personas
sufriendo por desamor? Te daré la respuesta:
porque sencillamente no controlamos lo que
realmente importa. Puedes controlar cómo vestirte,
de qué color pintarte el cabello o las uñas. Pero
jamás podrás controlar que el hombre que te gusta
sienta lo mismo por ti; que alguien en quien confías
no te haga daño, o que no sientas dolor en tu alma
por las acciones de otro individuo.
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Lo único que sí puedes controlar es a quién
seguir, si al sistema que te miente aunque de una
manera atractiva o al Creador que te habla verdades
aunque te duelan Por otra parte, la dependencia: es
la incapacidad de valerse por sí mismo. Me encanta
esto porque nos define completamente. ¡Somos
incapaces!
Incapaces de controlar nuestro destino,
incapaces de comprender todos los aspectos y
factores que nos rodean, incapaces de crear nuestra
propia felicidad, incapaces si quiera de poder
dominar nuestras propias emociones.
La persona que es discapacitada; no tiene la
posibilidad de moverse por sí misma, no puede ir
adonde quiere, vestir como quiere, está a expensas
de aquel que le ayuda para su traslado.
Sencillamente es dependiente de otro, porque en su
vida hay una incapacidad.
De la misma manera nosotros debemos
permanecer dependientes de Dios como un
discapacitado depende de su ayudador. Debemos ir
adonde él nos lleve; comer lo que él nos sirva,
reconocer que necesitamos de su ayuda y dirección
para todas las áreas de nuestras vidas.
En resumen, tu dolor es causado por tu
propia terquedad de vivir o hacer todo a tu manera,
sin tomar en cuenta al Señor. La independencia y el
control son una mentira milenaria; una ilusión que
nos atrapa, ilusión porque son muchos más los
aspectos que no controlas, que aquellos donde sí
tienes el control. No controlamos lo que realmente
importa. De lo único que tienes el control, es de a
quién seguir. Si a Dios o al sistema.
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Al igual que la samaritana, nosotros pensamos
con nuestro intelecto y creemos que es imposible lo
que Dios ha prometido. A cada promesa que él nos
hace, miramos sus manos y las vemos vacías, acto
seguido, dudamos de sus palabras.
Dios te promete que:
• ¡No te quedarás sola! Miras sus manos vacías
y dices: pero si ni si quiera tengo
pretendientes
• ¡Multiplicaré tu descendencia! Miras sus
manos: pero no tengo hijos
• ¡Yo te sané! Miras sus manos: pero me sigo
sintiendo enferma
• ¡Yo te restauré! Miras sus manos: pero estoy
fragmentada
• ¡Yo te limpié! Miras sus manos: aún me siento
sucia, etc.
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lo tiene mientras esté fuera de la voluntad de Dios.
Ella luchó por su independencia, pero pagó un alto
precio en el trayecto. Luchó por independencia,
pero lo que obtuvo fue esclavizarse al pecado. Se
hizo independiente de DIOS para volverse
dependiente al pecado.
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«… y mi Padre le amará, y vendremos a él, y
haremos morada con él». Jn 14:23. Dios hará
morada contigo cuando tu amor y tu devoción hacia
cumplir sus preceptos estén por encima de cumplir
los tuyos propios.
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CAPÍTULO 9
¿Cuál es tu Pozo?
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¿Cuál es tu pozo?
Quizá tu pozo sea tener pareja; tu trabajo, el
dinero también puede ser un pozo, una carrera
universitaria, tu empresa o negocio, el matrimonio
deseado, la familia soñada, un hobby, etc. Cualquier
cosa puede ser, la elegida para edificar alrededor de
ella tu personalidad; haciéndola tu pozo y por ende
tu sustento. Aquello sobre lo que edificaste tu vida
no podrá llenarte y cada vez que el pozo se
conmueva, tu vida entera será trastornada. Jesús lo
dijo: «Cualquiera que bebiere de esta agua, volverá a
tener sed; mas el que bebiere del agua que yo le daré,
no tendrá sed jamás;». Jn 4:13-14. Jesús claramente
le dijo que el pozo era un círculo vicioso adonde
tendría que volver cada vez que tuviese sed. El pozo
en la vida de la mujer samaritana lo representaba un
hombre.
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Tuvo cinco maridos, y la persona con la que en
ese momento tenía intimidad ni siquiera su marido
era.
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Jesús no solo dijo que no tendrías sed jamás si
bebías del agua que él te da; sino que en ti habría una
fuente de agua fluyendo todo el tiempo. No tendrás
que salir a saciar tu sed en otro lugar, porque el agua
que Jesús te quiere dar es constante e inagotable,
creando en ti una fuente de autoabastecimiento,
dicha fuente es el mismo Jesús.
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«Nuestros padres adoraron en este monte, y
vosotros decís que en Jerusalén es el lugar donde se
debe adorar». Jn 4:20. Algo tan tristemente real en la
vida de los cristianos es: la prioridad que tienen
nuestras tradiciones sobre la voluntad de Cristo
Jesús. Cristo compite con nuestras propias
tradiciones, son ellas las que nos obstaculizan el
entendimiento, para que no se vea plenamente en
nuestras vidas la gloria de su presencia.
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sino una mezcla, para los samaritanos los
judíos se creían muy puros y por eso los
aborrecían.
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La mujer samaritana no entendía que la manera
de Jesús era la mejor manera. Ella tenía un conflicto
con Jesús sobre: en cual lugar debería adorar, y la
enseñanza que EL MAESTRO le daba no tenía
cabida en su mente radical y finita. Jesús le hablaba
de que la adoración real tenía que ver con la
disposición del espíritu, y no del lugar donde se
llevase a cabo. «Mas, la hora viene, y ahora es,
cuando los verdaderos adoradores adorarán al
Padre en espíritu y en verdad; porque también el
Padre tales adoradores busca que le adoren. Dios es
Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad
es necesario que adoren». Jn 4:23-24.
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José David Díaz Laza
¡LÓGICA IRREVERENTE!
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
«Naamám, general del ejército del rey de Siria,
era varón grande delante de su señor, y lo tenía en
alta estima, porque por medio de él había dado
Jehová salvación a Siria. Este hombre era valeroso
en extremo, pero leproso. Y de Siria habían salido
bandas armadas, y habían llevado cautiva de la tierra
de Israel a una muchacha, la cual servía a la mujer
de Naamám. Esta dijo a su señora: si rogase mí señor
al profeta que está en Samaria, él lo sanaría de su
lepra». 2Rey 5:1-3. Naamám un general asirio
escuchó que había alguien que podía sanarle de su
lepra, le dijeron que el profeta de Jehová le sanaría.
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José David Díaz Laza
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Me imagino entonces, que el temor del general
sirio era pensar que, al bañarse allí, en vez de
sanarse, todo podía empeorar. Naamám tenía
miedo y se encontraba realmente enojado porque
las cosas no sucedieron como él lo había imaginado,
pero las sabias palabras de la mujer cuya fe lo había
inspirado a ir en busca de un milagro, lo hicieron
caer en la realidad de la que sus argumentos lo
habían sacado.
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José David Díaz Laza
¡LÓGICA TRANSFORMADA!
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Capítulo 10
Metamorfosis
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José David Díaz Laza
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
¿Entonces por qué no lo hace? La respuesta es
sencilla, porque aún no ha sido renovada su mente.
Me dirás, ¡pero los gusanos no tienen mente! Yo te
contestaré que: si tienen, y tienen conciencia o
instinto de lo que es el ciclo de la vida; debe nacer,
crecer, multiplicarse y morir. Para un gusano
multiplicarse, debe ser transformado en mariposa,
ya que el gusano no se reproduce, es la mariposa la
que pone en huevos, las larvas de donde
posteriormente saldrán los gusanos. De eso se trata
todo. Si el gusano no decide cumplir su propósito,
morirá arrastrándose como el gusano que es, pero
justo en el momento que ya se cansa de arrastrarse,
que ya se cansa del calor del suelo, del polvo y la
arena, en ese justo momento, hay una renovación en
su mente y decide cambiar.
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José David Díaz Laza
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Quiero usar la metamorfosis como metáfora, ya
que no es muy distinto lo que vive un gusano para
convertirse en mariposa, que lo vive una cristiana
para alcanzar su propósito. Puede no ser de mucho
agrado que te comparen con un gusano, pero
créeme, sin Dios éramos menos que eso.
EL RINCÓN SEGURO
Así como el gusano se arrastra hasta un rincón
donde pueda ocultarse para el proceso de
transformación, así pasa también en nuestras vidas,
así también debes subir hasta un rincón seguro.
Cuando caen nuestras estructuras mentales, y
entendemos que lo que Dios tiene es mejor,
empieza nuestra búsqueda del rincón seguro. Ese
rincón seguro es la presencia de DIOS. Cuando ya
no creemos saberlo todo y entendemos que
tenemos necesidad de Dios; es allí donde la
transformación se empieza a palpar. Es en la
presencia de Dios donde podemos escondernos y
emprender el cambio. El gusano cuando entiende
que hay un cambio por efectuar en él, va en busca
del rincón seguro, pero ¿cómo se dirige hacia él?
Sino es ARRASTRÁNDOSE; se arrastra porque no
sabe hacer otra cosa. Lo mismo nos pasa, a pesar de
que sentimos que hay algo poderoso gestándose
dentro de nosotros, a pesar de que en nuestro
espíritu podemos percibir el cambio, subimos a ese
rincón seguro tal y como somos.
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José David Díaz Laza
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Cuando alguien es víctima de un asalto, el
primer movimiento que hace por instinto es
levantar las manos, es algo que en el lenguaje
corporal le dice al asaltante que su víctima no
representa ningún peligro para él. Al levantar las
manos, la victima también le está diciendo al
asaltante que no pondrá oposición alguna y que hará
lo que este último decidiere. Cuando la víctima
levanta sus manos, el asaltante procede a despojarlo
de sus pertenencias; le quita la billetera, el teléfono,
las joyas, el carro, etc. En fin, cosas que a la víctima
le duelen perder, aunque sin ellas pueda vivir. Así es
el Señor en nuestras vidas. En ocasiones, él hace una
irrupción en nuestras vidas, un asalto a nuestro ser
para despojarnos de lo que no les sirve a él. Nos
quita los apegos; las malas costumbres, los vicios, los
hábitos, etc. En fin, cosas que nos duelen, porque
estamos familiarizados a una manera de ver las
cosas, habituados a una pésima manera de vivir,
acostumbrados a una distorsionada manera de
pensar.
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José David Díaz Laza
LA CERA DE SU BOCA
Así como el gusano debe producir con su boca
una cera para cubrirse y para quedar adherido, así
mismo es de tu boca y de tu confesión que empieza
la sanidad. Lo he expresado en capítulos anteriores,
y no deseo redundar en lo mismo, pero que tú
confieses con una actitud correcta, es lo que dará
paso a la transformación. De nada sirve que vayas a
la presencia del Padre si en tu boca no hay una
confesión, si tu boca no pronuncia que por voluntad
propia acudes allí, porque entiendes que necesitas
ser transformada.
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Preséntate tal y como eres al lugar seguro, puedo
garantizarte que no saldrás igual que como entraste.
Así como la cera que produce el gusano con su boca
lo cubre, así tu confesión te encerrará hasta que la
transformación sea completa.
El gusano cubre todo su largo cuerpo con la cera,
dejándolo a oscuras. El hermoso ser se forma en un
lúgubre lugar, porque en el momento de la
transformación, su piel está sensible; debe cubrirse
no solo de los rayos ultravioletas, sino también de
que escape el olor que se produce al desgarrarse su
piel, llamando así a depredadores. Es a oscuras
donde se produce lo doloroso de la transformación.
Es a solas en tu habitación donde se gestan las
batallas más importantes de tu vida. Es un proceso
individual, nadie puede luchar por ti, aunque
alguien quiera ser parte de tu proceso, le será
imposible. Nadie entenderá completamente el
dolor de tu transformación, cada metamorfosis es
única, cada desgarrar de la piel duele de manera
distinta, doblegar la carne duele diferente para cada
persona, está enmarcado de manera diferente para
cada individuo. Por esa razón, en un mismo capullo
no hay dos mariposas juntas.
Es en soledad; porque en ese momento, hasta el
Padre celestial parece alejarse de nosotros, aunque
la realidad es; que está más cerca que nunca. Una
vez, en medio de una noche oscura, Dios le dijo a
Abraham que saliera fuera de su tienda. Al Abraham
obedecerle le dijo: «Cuenta las estrellas, si es que las
puedes contar, así será tu descendencia».
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Hay algo dentro de nosotros, pujando por
manifestarse. El Santo Espíritu que habita dentro de
ti quiere exteriorizarse; quiere que todos vean que,
en ti, ha sido realizada una obra diferente, algo de
envergadura, una obra de poder, algo que te
convierte en un ser que se desplaza por los aires, en
vez de arrastrarse, un ser celestial, en vez de uno
carnal. Todo eso el Espíritu desea manifestar en tu
vida, pero será en vano si la carne no es desgarrada
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Las puertas que habían estado por años cerradas,
son abiertas instantáneamente. En todo se produce
un cambio y una aceleración. Debido a que volar es
más rápido que arrastrarse, nos lleva menos tiempo
alcanzar un lugar, y menos esfuerzo conquistar algo.
Por estas y muchas cosas más decídete a vivir en
el espíritu
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José David Díaz Laza
PODEROSAS ANTENAS
La cabeza del gusano se abrirá en dos; de allí
saldrá una cabeza un poco más pequeña y esbelta,
pero con dos poderosas antenas que sirven para
captar señales de apareamiento y captar
movimientos que hagan los depredadores al
intentar cazarlas. Si la mariposa ve venir a un pájaro
de lejos, puede volar y esconderse, mientras que el
modo de transporte del gusano es muy limitado, así
vea venir el daño, no puede moverse con libertad.
La principal función de una antena es recibir o
enviar señales. En pocas palabras, cuando tu mente
es transformada y hay un cambio en tu manera de
pensar, notarás los planes que el enemigo está
orquestando contra ti, mucho antes de efectuarlos
recibirás las señales de dicho ataque, tal como la
mariposa recibe las señales de sus depredadores.
Cuando el diablo intente destruirte no te tomará
distraída, sino que ya habrás realizado los
respectivos ajustes para esquivar sus ataques. El
sabio ve el mal de lejos y se aparta, mientas que el
necio al quedarse recibe el castigo.
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Mientras más seas transformada, menos
vulnerable serás ante los ataques del enemigo. Verás
a las personas a través de la renovación que el
Espíritu Santo habrá hecho en ti. Podrás ver y
discernir la hipocresía de las personas que dicen
amarte o serte fieles y no lo son; de las falsas
amistades, de las maquinaciones en tu contra, de
estafadores o negocios fraudulentos. Porque
mediante el Espíritu tu verás cómo el Espíritu lo
hace. Pero las antenas de las mariposas no reciben
solo señales de ataque, también recibe señales de
apareamiento. Con esto no quiero decir que la
renovación de nuestra mente servirá únicamente
para conseguir una pareja amorosa, pero sí nos
garantiza conseguir la correcta.
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José David Díaz Laza
HASTA EL FINAL
Una cosa que no comenté en el proceso de
transformación del gusano es que: una vez que el
decide cambiar y entra al capullo, ya no hay marcha
atrás. Por más que se arrepienta después de haberse
ingresado en el capullo, solo tiene una forma de salir
del proceso de metamorfosis y es cambiando.
Porque lo único que abre el capullo son las alas, cosa
que el gusano no posee. Una vez iniciado el proceso,
o es transformado o muere dentro del capullo, pero
nunca más se arrastrará, nunca más se verá como
gusano.
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
«Estando persuadido de esto, que el que
comenzó en vosotros la buena obra, la
perfeccionará hasta el día de Jesucristo». Flp 1:6 Algo
importante de entender es que nuestra renovación
tiene que irse manifestando día tras día. Hoy
debemos ser renovados, y mañana también
debemos ser renovados, el Espíritu Santo nunca
dejará de trabajar en nosotros, porque la obra que ha
iniciado es buena y será perfeccionada hasta que ya
estemos en el cielo junto al Padre.
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Capítulo 11
En Espíritu Y Verdad
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Cristo cambiaba la manera de ver la ley; le decía
a la samaritana que no era adorador aquel que iba al
templo, sino aquel que cumplía con lo que Dios
Padre había establecido en su palabra. Que no la
hacía salva asistir al templo, sino vivir por fe. Los
judíos cumplían religiosamente la ley de subir a
adorar a Jerusalén, pero no la verdadera ley de Dios.
Ellos subían, pero su corazón no pasaba del suelo.
Ellos se presentaban, pero no adoraban, ellos
entraban al templo pero DIOS no podía entrar en
sus corazones. Pensaban que al cumplir
presentándose en el templo conseguían el respeto y
la admiración de Dios. No entendieron sus palabras
cuando les decía: «.. este pueblo de labios me honra,
mas su corazón está lejos de mí. Pues en vano me
honran. Enseñando como doctrina mandamiento
de hombre. Porque dejando el mandamiento de
Dios os aferráis a tradiciones de los hombres. Mr
7:6-8.
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
duermes. Porque la adoración no es un estado
intermitente que se enciende en el templo y se
apaga cuando ya no te encuentras allí. Sino que es
un completo estilo de vida. En espíritu y en verdad.
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José David Díaz Laza
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
expectativas por nosotros, para que también
podamos ser aprobados para Dios. El verso dice: «…
los verdaderos adoradores, adorarán al Padre en
espíritu y en verdad». Juan 4:23. Verdaderos que
adoran en verdad. Creo que está más que claro que
toda mentira o todo tipo de engaño, no será
admisible en la presencia de DIOS. Será desechada
cualquier cosa que no proceda del Espíritu y de la
verdad. Todo lo opuesto a lo espiritual es lo
religioso, y todo lo opuesto a la verdad es la mentira
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Además, recuerda que Dios aborrece todo
engaño y todo lo oculto, su estandarte es la verdad y
la misma es practicada por sus hijas. El Señor de
verdad se aproxima y espera que en ti no haya
engaño, ni hipocresías ni nada oculto. Pues Él, Padre
busca adoradores en Espíritu y en VERDAD.
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu
y en verdad es necesario que adoren». Jn 4:23-24.
OFRENDA AGRADABLE
Repito. Si tu corazón no está involucrado en la
relación que tienes con Dios, entonces todo lo que
haces será en vano. Es algo que se vio ejemplificado
con Caín y Abel. Muchas veces he oído enseñanzas
acerca de que Abel trajo lo mejor de su ofrenda,
mientras que Caín trajo lo peor. Eso no es
exactamente cierto, Abel ofreció una ofrenda más
excelente. Hebreos 11:4. ¡Eso es irrefutable! Pero la
excelencia de su ofrenda no tenía que ver tanto con
el tamaño y el volumen de la misma, sino de la
intención en el corazón de él al ofrecerla. «Y
aconteció andando el tiempo que Caín trajo del
fruto de la tierra una ofrenda a Jehová. Y Abel trajo
también de los primogénitos de sus ovejas, de lo más
gordo de ellas, y miró Jehová con agrado a Abel y a
su ofrenda. Gn 4:3-4 (negrita del autor).
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Dándonos a entender, que la calidad de una
ofrenda no está en la suma o cantidad, sino que es la
suma de una actitud correcta, expresada por un
corazón correcto, para honrar a su Dios con sus
bienes.
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José David Díaz Laza
ADORACIÓN GENUINA
El genuino adorador es aquel que no tiene
forma al adorar, que no se basa en un estereotipo o
que tiene argumentos de cómo hacerse las cosas,
simplemente es aquel que honra al Señor como este
quiere ser honrado, involucra su corazón, anda sin
engaños y satisface las necesidades de su Señor. El
adorador no tiene forma, sino que se amolda a la
forma de su señor. Toma la forma que su señor
quiere que tenga. David tocaba el arpa para adorar a
Dios, luego le cantaba componiendo Salmos, pero
en el momento en el que le tocó danzar, lo hizo con
la misma motivación con la que le cantaba, y en el
momento que le tocó ofrendar dijo: «… porque no
ofreceré a Jehová mi Dios holocaustos que no me
cuesten nada». 2 Samuel 24:24
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Cuando no hubo quien limpiara los pies de Jesús
apareció María y lo hizo, cuando no hubo quien lo
ungiera ella lo hizo, no le importó nada, ni la gente
que la veía, ni que la denigraran, simplemente, ella
le dio todo y se dio en todo para su Señor.
MARIA
En mi opinión, ella es la mayor adoradora del
nuevo testamento. Fue una mujer pecadora que fue
redimida por Cristo. Desde entonces, ella dedicó su
vida a ministrar el corazón de Dios. Un adorador no
es alguien que solo se acerca al Eterno para pedirle,
sino alguien que se acerca para darle algo. Si solo vas
al Padre a pedir, entonces no se te ha sido revelada
la adoración. Repito, no son palabras sino las
intenciones con la que expresas esas palabras.
María la hermana de Lázaro conmovió el
corazón de Jesucristo más de una vez, aun usando
palabras que otros igualmente usaron.
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
«Habiendo dicho esto, fue y llamó a María su
hermana, diciéndole en secreto: El Maestro está aquí
y te llama. Ella, cuando lo oyó, se levantó de prisa y
vino a él. Jesús todavía no había entrado en la aldea,
sino que estaba en el lugar donde Marta le había
encontrado. María, cuando llegó a donde estaba
Jesús, al verle, se postró a sus pies, diciéndole: Señor,
si hubieses estado aquí, no habría muerto mi
hermano. Jesús entonces, al verla llorando, y a los
judíos que la acompañaban, también llorando, se
estremeció en espíritu y se conmovió». S. Jn 11:28-
30; 32-33. María a pesar de que hizo el mismo
reproche que Marta, su hermana, lo hizo con una
actitud distinta. Ella al saber que el Señor había
llegado salió rápidamente a su encuentro y al verle,
su primera acción fue: postrarse a sus pies. Antes que
nada, lo primero fue reconocer la soberanía del
Señor, ella primero se postró, primero adoró y
luego le dijo lo mismo que le había dicho su
hermana Marta, pero con un resultado distinto, ya
que la actitud de María conmovió al Señor como no
lo hizo Marta.
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
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CAPÍTULO 12
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Cuando el pecado entró en la humanidad,
dañándola y pervirtiéndola, entró a través de Adán,
y sólo pudo ser redimido ese daño hasta que vino
Cristo Jesús, El postrer Adán. Cuando Cristo vino, él
sanó el daño que había entrado en la humanidad,
redimiéndola a través de su sacrificio en la cruz.
Bíblicamente hay ejemplos de cómo hombres han
sido usados por Dios para sanar el daño en el
corazón de las mujeres; daños que otros habían
ocasionado.
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Las palabras usadas por Jesús fueron las mismas
con las que se le conocía a Jehová, las mismas que le
habló en medio de la zarza a Moisés, Yo Soy él que
Soy.
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
¡Nadie puede saber todos los detalles de un
invento, excepto el inventor! Nadie puede reparar
cada daño que las mujeres pueden tener, solo Dios
que es el inventor mismo del ser llamado mujer. Los
traumas; esos pequeños detalles que te hacen
insegura, lo que te detiene para no dar tu máximo
potencial, cualquier falla que en tu ser se perciba, en
fin, todo lo que logra que tu funcionamiento en
general y en lo espiritual no sea pleno, solo Jesús lo
puede reparar.
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José David Díaz Laza
DEJANDO EL CÁNTARO
Entonces la mujer dejó su cántaro, y fue a la
ciudad, y dijo a los hombres: Venid, ved a un
hombre que me ha dicho todo cuanto he hecho. ¿No
será este el Cristo? S. Jn 4:28-29 . Después de haber
experimentado la gracia y el amor de Dios en su
vida; después de haber sido llena, después de que la
sed de su alma fue saciada, después de que Dios la
rebosó de amor y gracia, sencillamente se dio cuenta
de que no tenía necesidad de tratar de sostener algo
que no le servía para nada. Fue cuando le estorbó la
herramienta que la mantuvo en otro tiempo atada al
pozo. Cuando Dios la limpió se dio cuenta de que el
instrumento que fue utilizado para atarla al pecado,
aún seguía en su mano, a pesar de que ya no lo
necesitaba más.
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
La mujer samaritana. No fue egoísta; no se
quedó ella sola con la transformación que Cristo
ofrecía, sino que fue y le dijo a todos que había
alguien especial que le había quitado la sed, alguien
que le había desnudado el alma y había sanado su
corazón. Ella, la que fue despreciada y repudiada
por toda la ciudad, se dirigió a la ciudad y uno por
uno les dijo: que había alguien capaz de llenar
cualquier vacío del corazón con su sola presencia.
Ese fue el segundo paso; olvidó todas las ofensas.
Aún a sus exmaridos fue y les dijo que había
encontrado al Mesías, que este le había cambiado su
manera de pensar, era lo notable de su cambio, fue
evidente que tuvo un encuentro cara a cara con su
creador.
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A solas junto al pozo La historia de la samaritana
Ese cambio perfecto que Dios tiene para tu vida,
dará frutos y vendrán aquellas personas que un día
te rechazaron a pedirte que le des de aquello que
obró en ti tan maravillosa e inexplicable
transformación. Esas personas que se consideraban
más dignas que tú, luego de ver la obra de arte en la
que te convirtió el maestro, vendrán para recibir de
ti lo mismo que recibiste de Dios. «Y decían a la
mujer: Ya no creemos solamente por tu dicho,
porque nosotros mismos hemos oído, y sabemos
que verdaderamente este es el Salvador del mundo,
el Cristo». Jn 4:42.
BROCHE DE ORO
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Agradecimientos
Agradezco al Dios todopoderoso, quien me llamó y
predestinó desde antes de la fundación del mundo
para llevar a cabo esta obra.
A mi Señor Jesucristo, mi mayor ejemplo a seguir.
A mi amado Espíritu Santo; mi guía, amigo y fiel
compañero. De Él y solo de Él es la gloria, pues yo
solo redacto lo que recibí de Él. Solo tomé nota,
mientras Él dictaba.
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