La relación entre los dulces y el amor se remonta a la antigüedad.

Históricamente, los dulces y

otros alimentos dulces se han utilizado en las ceremonias de matrimonio y en otras celebraciones
amorosas, como símbolos de amor, afecto y generosidad. Los dulces son un regalo popular en el
Día de San Valentín, una festividad que celebra el amor y la amistad. También se sabe que los
dulces liberan endorfinas en el cerebro, lo que puede hacernos sentir bien y felices, y esta
asociación de felicidad con el amor puede haber contribuido a la relación entre los dulces y el
amor. Además, compartir un dulce o un postre puede ser un gesto romántico y significativo entre
parejas o seres queridos. En resumen, los dulces se han asociado históricamente con el amor
debido a su uso en celebraciones amorosas, la liberación de endorfinas y su capacidad para
simbolizar la generosidad y el afecto.