Como se ve en las fotos de abajo, el proceso es muy fácil y hará que la reparación sea lo

suficientemente fuerte como para permitir un vuelo seguro.

Sin embargo, debemos destacar que la persona que repare la hélice, será totalmente responsable
de su seguridad. En caso de duda, mejor sustituir la hélice.

Las herramientas más comunes que necesitamos son las siguientes: una máquina Dremel con
diferentes cortadores, una espátula, pegamento EPOXY (regular y el tipo gelatina, una hoja de
afeitar, un cuchillo afilado, un trozo de plástico y...fe. No recomiendo el uso de Crazy Glue con
bicarbonato de sodio en la madera. ¡De mi investigación, aprendí que la diferencia de rigidez entre
la madera y el cianoacrilato (Crazy Glue) no asegurará una buena unión que resista las vibraciones!

Si la hélice tiene varias grietas, hay que intentar utilizar la menor cantidad de pegamento posible e
intentar que el pegamento penetre lo máximo posible en la grieta (hacia el buje) ( esto facilitará el
equilibrado)

Si la grieta es muy larga y termina en la punta de la hélice (que es muy común) debemos tratar de
insertar una cuña en la grieta para abrirla tanto como sea posible. Utilizando un EPOXY de dos
partes de fraguado rápido, intentaremos empujar el pegamento a través de toda la grieta.
Encontraremos un punto donde no podemos empujar más pegamento porque la grieta es
demasiado pequeña para que la espátula o incluso una cuchilla la atraviese. Esta parte habrá que
cortarla en otro paso.

Una vez aplicado el pegamento, apretamos la pala de la hélice y dejamos que salga el exceso de
pegamento. Para esto nos será muy útil el Epoxy tipo gel. Ahora podemos sujetar y apretar las
partes rotas. Una vez fraguado, el exceso de epoxi se puede cortar con una cuchilla o un cuchillo
afilado.

Después de esta operación, tenemos la grieta fijada desde la punta de la hélice tan lejos hacia el
buje como hemos podido alcanzar con el pegamento. Este punto de la grieta debe estar bien
marcado para ver por donde empezar a cortar en la ranura, como se describe más adelante.

Ahora hay que reparar el resto de la grieta.

Nota: toda grieta debe cortarse incluso un poco más allá de donde se desarrolló. Esto asegurará
que la grieta se detenga.

La imagen de abajo muestra una grieta que fue pegada con el método anterior (parte derecha de
la imagen).

La imagen también muestra cómo abrir más la grieta para poder aplicar el pegamento:
A veces, no podemos cortar hasta el fondo de la grieta. En este caso, utilizo un taladro pequeño y
taladro hasta el fondo de la pala de la hélice, asegurándome de que el taladro sigue el ángulo de la
grieta.

Esto asegurará que toda la superficie de la grieta quede pegada y no se vuelva a abrir.

En primer lugar, utilizo una capa poco profunda de un pegamento epoxi normal que al tener
menor viscosidad, puede fluir mucho mejor en la grieta. Una vez fraguada esta capa primaria,
utilizo un epoxi tipo Jell para completar la operación.

Nota: la segunda capa de pegamento debe ser vertida con moderación para que no sea demasiado
alta. He utilizado deliberadamente más cola en la foto para enfatizar esto.

Si usamos demasiado pegamento, incluso con mi método de "lámina de plástico" presentado a

continuación, ¡tendremos mucho que lijar! Usamos suficiente pegamento para tenerlo nivelado y
solo un poco mas alto que los dos labios de la grieta.

Ahora, utilizaremos un "nivelador de cola". Se trata de una lámina de plástico normal con la que
cubrimos la cola.

Empezamos por un extremo y aplicamos la lámina empujándola hacia abajo con un dedo.
Esto hará que la cola se disipe de forma bastante uniforme y, si la operación se hace con cuidado,
puede que ni siquiera necesitemos lijar.

El pegamento quedará emplumado y liso. Yo prefiero no lijar sino raspar el pegamento una vez
retirado el plástico. Usando una cuchilla de afeitar humedecida cuando el pegamento está medio
fraguado, puedo conseguir un acabado muy liso.

Usando papel de lija quitaremos parte del barniz original exponiendo así la madera a la humedad.
Esto supondrá más trabajo y mucho barniz. Si el epoxi se raspa con cuidado pero se deja sobre la
madera desnuda,

actuará como barrera contra el agua y no será necesario barnizar.

Cuando presenté la primera parte del proceso de reparación, mencioné que (contando desde la
punta de la hélice) deberíamos abrir la grieta y verter epoxi hasta donde podamos y luego apretar
las partes rotas entre sí

para eliminar el exceso de pegamento. Esto es muy importante porque, especialmente cerca de
las puntas, cuanto más pegamento utilicemos, más contrapeso habrá que añadir en la punta
opuesta.

La segunda parte de la operación consistió en cortar una ranura en la grieta para aplicar cola en
toda la superficie (que no podía abrirse a la fuerza) y reforzar así la grieta.

Pero esta operación añadía mucho peso, ya que el epoxi tiene mayor densidad que la madera.
Utilizar solo barniz para equilibrar la hélice puede no funcionar bien en este caso.
Por eso, aplico contrapeso en forma de plomo o alambre de soldar en un agujero pretaladrado
cerca del buje. El plomo se incrusta con epoxi.

La hélice que se muestra en la imagen tiene una bala de plomo del calibre 22 hundida cerca del
cubo. La hélice que se muestra en la imagen tiene una bala de plomo del calibre 22 hundida cerca
del cubo para equilibrarla. También he añadido un poco más de peso en forma de alambre de
soldadura como se ve en la imagen de abajo.

Normalmente utilizo más plomo y luego, con la Dremel, puedo equilibrar la hélice quitando parte
de él.

Este es el equilibrador que utilizo. Se trata de un dispositivo Paratour mejorado, aunque existen
otros tipos como el que ofrecen las hélices Beresh&Hirsh.

Tiene una burbuja y la hélice puede tener un equilibrado longitudinal y transversal. Después de
alisar la reparación y el equilibrado, hay que encerar la hélice.

Antes del primer vuelo, la hélice debe ser ejecutado un par de veces a plena potencia y
comprobar si hay grietas. He utilizado el método anterior durante años y nunca ha ocurrido que la
reparación cediera.

Importante:

Tenga en cuenta que una hélice desequilibrada puede ser muy peligrosa. Las vibraciones de gran
amplitud, a veces ni siquiera sentidas por el piloto, serán perjudiciales para todas las partes del
paramotor y para la propia hélice.

Se recomienda que las hélices de madera tengan comprobado el equilibrio de vez en cuando y
deben mantenerse en posición HORIZONTAL para que absorban la humedad uniformemente y así
mantener el equilibrio.

Las hélices de madera con alguna superficie de barniz dañada deben ser barnizadas de nuevo para
evitar que absorban la humedad.