Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Papado
Imperio
Poderes existentes
Monarquías
Instituciones intermedias
Patria
Identidades Nación
nacionales Frontera
Cultura y lengua
Corte
Órganos centrales
Consejo
Burocracia
Estructura estatal Diplomacia
Instr. para contacto exterior
Ejército
Hacienda y finanzas
Francisco de Vitoria
Derecho Luis de Molina
Escuela jesuíta
internacional Francisco Suárez
Hugo Grocio
1.2.1. Una nueva forma política
El Papado
A lo largo de la Edad Media, dentro del mundo cristiano, el poder supremo había
Estado en manos del Papado. Un poder que traspasaba los límites de lo espiritual para
adentrarse en el área del poder secular, gracias a la concepción de que el Papa en su
condición de Vicario de Cristo, debía ejercer el gobierno universal. En este
sentido, la segunda autoridad de la Cristiandad la constituía el emperador, pero de
modo claramente limitado, ya que su legitimidad solo podía ser garantizada y
asegurada por medio del beneplácito del Sumo Pontífice.
Pero fue el Gran Cisma de Occidente lo que acabó por dinamitar el prestigio del
Papado, que se vio obligado a firmar concordatos con distintas monarquías, dando a
los monarcas el control fiscal y de nombramientos sobre el clero. En 1516 se
firmó el concordato con Francia y en 1523, con Carlos I.
El Imperio
Durante la Edad Media, los emperadores se habían visto amparados y justificados por
una ideología imperial, que les concedía la potestad máxima y universal, en
nombre de la Cristiandad. Esta doctrina, situó a los emperadores por encima de sus
súbditos, como legados divinos, es decir, como depositarios de un poder otorgado
por Dios. Como es lógico, estas pretensiones no tardaron en chocar con los intereses
del Papado, que no entendía la situación de la misma manera, pues consideraba que
el Sacro Imperio Germánico solo podía ejercer el poder de la espada, que
únicamente podía serle concedido y retirado por el propio pontífice.
Pero también el territorio germánico iba a poner frenos al Imperio. Los príncipes
alemanes comenzaron a defender la idea de que un rey era emperador en su
reino, y que por tanto no tenía que reconocer ningún otro poder temporal dentro
de su territorio, que no estuviese sometido a su control. Se inició así la transformación
de los reyes en pequeños emperadores, un proceso apoyado en la apropiación de
símbolos y atributos imperiales y en la sacralización del rey como Vicario de
3
Cristo. Particularmente en Francia, el origen divino del poder real implicó la
atribución de poderes taumatúrgicos al monarca, y la persecución de un modelo de
Estado absolutista.
Por otra parte, el impulso comercial y urbano dio como fruto la aparición de un
nuevo grupo social, la burguesía. El establecimiento de gobiernos corporativos,
por parte del nuevo estamento, en las ciudades, que defendieran las libertades
manufactureras y mercantiles, supuso un freno a las pretensiones feudales.
Además, en muchos casos los reyes favorecieron a la burguesía, otorgándoles
privilegios y acogiéndolos bajo su jurisdicción, lo que les alejaba del control de los
señores feudales. La excepción a esta norma la constituyó el norte de Italia, donde las
ciudades se mantuvieron autárticas y autónomas, transformándose en ciudades-
Estado.
El monarca debía convocar a estas entidades (formadas por representantes del clero, la
nobleza y las ciudades) con regularidad, para que le aconsejasen en los asuntos de
gobierno y autorizasen los impuestos extraordinarios. Es decir, que aunque el rey
fuera superior, debía ser aconsejado, y no podía gobernar fácilmente sin la colaboración
de las instituciones intermedias.
Por otro lado, la convocatoria de este tipo de asambleas tuvo otras dos consecuencias
importantes:
5
La tendencia a la constitución de grandes monarquías se había iniciado ya durante
el Medievo. Sin embargo, las monarquías del siglo XVI presentaban una importante
peculiaridad, se trataba de monarquías compuestas por entidades institucionales
y políticas, y por diferentes etnias, culturas y lenguas. Este fenómeno implicaba,
necesariamente, la existencia de movimientos de presión a favor de la integración
o de la desintegración política del Estado, en los que los intereses, las lealtades y las
identidades eran fuente de fuertes y complejos conflictos.
Sin embargo, la cuestión era aún más complicada, debido al carácter compuesto de
las monarquías del XVI, en las que podían coexistir diferentes identidades y tipos
de patriotismo: local, señorial, dinástico, regional… Mientras estas lealtades se
desarrollaban en el marco de una convivencia pacífica no había problema. Sin
embargo, cuando el patriotismo dinástico chocaba con el nacional, o el señorial con el
dinástico, los conflictos se apoderaban de la estabilidad interna del Estado. No es
raro, por tanto, que la defensa de la patria pasara, muy pronto, a convertirse en
elemento de defensa frente a las pretensiones absolutistas o centralistas, como
ocurriría en Países Bajos frente a la monarquía de Felipe II.
La frontera
Con objeto de reforzar su autoridad, todos los poderes: Papado, Imperio, reinos,
principados, se apoyaron en la creación de símbolos y referentes culturales, lo que
no sólo asentó su poder, sino que impulsó el fortalecimiento de las identidades
nacionales. En este sentido, cronistas e historiadores tuvieron un papel destacado,
al justificar, en tantas ocasiones, la situación presente de la nación mediante la
plasmación de un pasado idealizado, e incluso, mitificado. El hecho de que ésta
fuera una labor consciente o no, resulta algo discutible.
Estructura estatal
Corte
Gobierno central
Consejo
Burocracia
Diplomacia
Instrumentos
orientados al exterior Ejército
Limitaciones y medidas
Hacienda y
fiscalidad Deuda real
1. El gobierno central
La corte
El consejo
2. La burocracia
A finales del siglo XVI, la centralización del poder, es decir el sometimiento de los
señores feudales y ciudades bajo la jurisdicción del rey, junto con la asimilación,
conquista o herencia de nuevos territorios por parte de muchas monarquías,
conllevó la necesidad de desarrollar un orden administrativo, es decir, una
burocracia, que les ayudase a gobernar.
Diplomacia
Ejército permanente
10
o La artillería comenzó a tener un peso especial en la táctica y estrategia de
guerra.
La expansión mundial de las monarquías:
o Propició las disputas marítimas y coloniales.
o Hizo necesaria la construcción de una marina sólida.
o Requirió una ampliación y estructuración compleja de los órganos de
gobierno.
4. Hacienda y fiscalidad.
Limitaciones y medidas
Los monarcas intentaron hacer frente a estas dificultades, para llenar las arcas del
Estado, a través de nuevos impuestos, pero no pudieron escapar a la necesaria
negociación con asambleas y oligarquías, a la hora de aprobarlos.
El segundo medio utilizado por los reyes para ampliar sus ingresos fue el recurso a la
11
negociación y al comercio: venta de tierras, venta de oficios,
manipulaciones monetarias, privilegios económicos concedidos por el
Papado o la expropiación de los bienes eclesiásticos.
La deuda real
A pesar de todo, la agitada vida política de la Edad Moderna, llevó a los monarcas a
mantener, siempre, unos niveles de ingresos más bajos que sus niveles de gastos. Esto
obligó a las monarquías a recurrir a la banca privada internacional, grandes familias
de comerciantes que se habían convertido en prestamistas internacionales. De
este modo, fueron muchas las monarquías que cayeron en el endeudamiento. Las
que no pudieron subsanar esta situación acabaron en la bancarrota, y las que de un modo
u otro lograron hacer frente al problema, pero sin resolverlo, convirtieron sus deudas
en deudas a largo plazo. Como es lógico, este complejo sistema de préstamos, donde una
misma familia podía prestar dinero a distintas monarquías, creó un complejísimo
sistema de intereses, que entremezclaban los de las monarquías con los que las
grandes familias de banqueros.
Al tiempo que los Estados hacían lo posible por organizarse y estabilizarse dentro de
sus propios territorios, se fue tejiendo un entramado político internacional, en el que ya
fuera por los conflictos que los enfrentaban, o por los lazos que los unían, los Estados
acabaron contemplando la necesidad de regular las relaciones políticas y
diplomáticas entre sí.
12
caso, cada vez más pensadores comenzaron a negar el poder temporal del Papa,
que sólo debía ser depositario del poder espiritual. Únicamente la amenaza de la
Cristiandad podía justificar al Papado, para ejercer algún tipo de poder secular.
Hugo Grocio
o De origen holandés.
o Parte de las ideas de Francisco de Vitoria y de Francisco Suárez.
o Consideraba que el marco normativo, en el cual se desarrollaban, los
tratados internacionales, suponía en sí mismo un principio de ley
internacional.
o El principal objetivo de dicha ley internacional debía ser el sostenimiento de la
paz.
13
o Defendía el derecho de Holanda a participar del comercio internacional,
amparándose en el ius communicationis, y en contra de las apetencias
portuguesas y españolas, fundamentadas en los privilegios concedidos por el
Papado.
14
- Problemas religiosos: Moriscos. Alumbrados. Expansión de la
Reforma Protestante.
- Problemas sucesorios.
- Problemas internos:
- Problema morisco.
- Traición del secretario Antonio Pérez y conflicto foral de Aragón.
- Dificultades de la hacienda.
- Problemas externos:
3. Eduardo VI (1547-1553)
5. Isabel I (1558-1603).
- Monarquía moderna.
15
- Largas y costosas guerras en Italia.
4. Francisco I (1515-1547).
5. Enrique II (1547-1559).
6. Francisco II (1559-1560).
7. Carlos IX (1560-1574).
9. Enrique IV (1589-1610).
16
- Problemas religiosos:
- Las reformas religiosas.
- Retroceso luterano y avance calvinista en el Palatinado.
- Expansión del catolicismo. San Pedro Canisio.
- Fernando I (1558-1564).
- Maximiliano II (1564-1576): Política a favor de protestantes.
- Rodolfo II (1576-1612): Sincero católico, muy unido a España, protector de
sabios.
- Matías I (1612-1619): Buen católico, aliado de Felipe III.
1.2.5.6. Escandinavia
- La Unión de Calmar (1436).
- Dinamarca y Noruega: Monarquía electiva. Importancia económica.
- Suecia: Corona hereditaria. Progreso económico a fines del XVI.
- Introducción del luteranismo como religión de Estado: Suecia por Gustavo I
Vasa en 1527; Dinamarca, por Cristian III, en 1536.
1.2.5.7. Polonia
- Monarca electivo que gobierna con el Gran Consejo y la Asamblea General.
- Predominio del catolicismo, infiltraciones calvinistas. El único lugar con
tolerancia religiosa.
- Incorporación definitiva de Lituania en 1569: Unión de Lublin.
1.2.5.8. Rusia
- Ivan III (1462-1505).
- Ivan IV (1533-1584; toma el título de Zar; reorganiza el Estado; anexión de
Kazan y Astracan en 1556; intento de asomarse al Báltico: Narva, 1558).
- Época de las turbaciones (1584-1616); desde la muerte de Boris Godunov,
cuñado de Ivan IV; período de tensiones sociales que llevan a Rusia a una
situación caótica, perdiendo la vida más de dos millones de personas).
17
1.2.5.10. La hegemonía española
1. Europa en la época de Carlos V (1516-1556).
5. Problemas con los turcos (1450-1620). 1571: Santa Liga con Venecia y el Papa:
Lepanto, 1571.
Recomendaciones
MOLAS, Pere; “El sistema político de la Europa Moderna” y “El Estado y la sociedad”
en MOLAS I RIBALTA, Pere et al.; Manual de Historia Moderna; Barcelona: Ariel,
1993.
En estos dos capítulos, el historiador Pere Molas hace una síntesis de los
elementos constitutivos del Estado moderno, y profundiza en su relación con la
sociedad.
18
Gran libro sobre la diplomacia, que examina los tipos de diplomacia existentes, sin
prescindir de su origen histórico. En las páginas señaladas, encontrarás, explicado de
modo concisa, la diferencia entre los embajadores residentes y los enviados
plenipotenciarios, así como una buena explicación de su origen italiano.
Arte Historia
Aparatos de gobierno
<https://www.artehistoria.com/es/contexto/aparatos-de-gobierno >
Nicolás Maquiavelo
<https://www.artehistoria.com/es/contexto/maquiavelo >
Bibliografía
LAPEYRE, Henri. Las monarquías europeas del siglo XVI: las relaciones
internacionales. Barcelona: Labor, 1979.
REINHARD, Wolfgang. Las Elites del poder y la construcción del Estado. México D.F.:
Fondo de Cultura Económica, 1997.
Actividades
El príncipe
2
Frecuentemente cambian las direcciones electrónicas. Si esto ocurriera, pongan en Google el nombe
del recurso, más “artehistoria” y el número del recurso que aparece en la dirección web.
19
El príncipe constituye uno de los textos clásicos sobre el arte de gobernar. Escrito en
1513, la obra de Maquiavelo se centra en la obtención y conservación de los
principados, en la seguridad de los mismos, en el modo de gobernar de los príncipes, y
por último, en la situación contemporánea de la Italia de su tiempo. Es un buen
complemento a todo lo que se ha explicado en este tema sobre las bases y
características del Estado moderno.
20