QUIZAS EN

OTRA VIDA

PRÓLOGO
 23/08/1989

El aire despeinaba mi cabello, mi corazón estaba latiendo demasiado rápido, mis lágrimas
salían de mis ojos. Como mis padres pueden ser tan crueles, porque no simplemente me
dejan ser feliz con la persona que quiero.
- ¡Maldita sea me arrepiento de haberles contado! - mis lágrimas caían aún más rápido,
-mierda- en esos momentos solo me maldecía a mí misma, yo no era la culpable de haber
nacido haci, pero sin embargo mis padres me culparon, - ¡pero yo no hice nada malo! –
grité tan fuerte como pude.
Pero todo va a acabar hoy, me sentía tan cobarde por lo que estaba a punto de hacer,
pero simplemente ya no podía soportarlo, ¿estas segura? ¡Sí!; ya no hay vuelta atrás ¿y si
lo piensas mejor? ¡NO! Ya lo decidí, ¿Pero que pasara con ella? ¡tú la cuidaras desde ahí
arriba, no dejaras que la lastimen.
Ella mejoro mi vida de una manera tan especial,
-¿porque tenía yo que ser una mierda? ¿Por qué tuve que arruinarlo? – me estaba
empezando a sentir mal, sentí que cada vez me faltaba más el aire, -diablos- ahora se me
estaba dificultando respirar correctamente, recordé las palabras que mis padres me
dijeron:
“eres muy joven para saber que es el amor”
- ¡AAHH! – grite nuevamente esto provoco que mi garganta me doliera. – ¡LA AMO! –
después de decir eso llore aún más, es que es cierto la quiero, la amo, la adoro, ella es
todo para mí, todos a mi alrededor trataron de hacerme sentir lo contrario pero no lo
lograron y nunca lo lograran, a mis 16 años siento que ya conocí a la persona con la que
quiero pasar el resto de mi vida, para algunos por ejemplo para mis padres esto es una
tontería, pero para mí no lo es, siento que daría todo por ella,
- VENUS – sentí mucha nostalgia al pronunciar su nombre – MI HERMOSA JOVENCITA,
querida Venus espero que algún día puedas perdonarme, -llore- siempre estaré contigo en
tus sueños en tus recuerdos en tus pensamientos, - suspire - ¿Por qué todo esto tiene que
ser tan difícil? ¿Por qué nuestros padres quieren separarnos? – en ese momento se me
vinieron a la mente todo lo que nuestros padres nos hicieron pasar, todo lo que
intentaron para que supuestamente “volvamos a ser normales”.
- ¡¿Por qué no lo entienden?!- sentía mucha rabia acumulada en mi ser, justo en ese
momento escuche una respiración agitada detrás mío, - “no puede ser”- pensé, me voltee
y pude comprobar lo que estaba pensando,
- ¡Venus! – sentí alegría y tristeza al verla de nuevo, no la veía hace 1 mes ese mes que se
sintió como un año, no poder abrazarla no poder besarla no poder estar con ella era una
maldita tortura, los padres de ambas tras enterarse de nuestra relación nos separaron y
nos encerraron en nuestras casas no nos dejaron ir ni a la escuela, , note que estaba muy
agitada, - ¿Qué estás haciendo aquí? - le pregunte.
Ella aún estaba con la cabeza hacia abajo porque lo que obviamente no pudo ver que yo
estaba al borde de aquel edificio abandonado.
- Di……dime tú, ¿Qué…….que estás haciendo aquí? – pude ver que se le dificultaba mucho
hablar, seguro que fue porque estaba muy agitada – Que acaso no te acuerdas que hoy es
nu…nu – venus no termino de decir la frase, pude ver que se quedó como si hubiera visto
un fantasma
- Por favor vete- levante levemente la voz.
- ¡No!, ¿Cómo crees que te voy a dejar?, ¿Qué crees que estás haciendo?, -ella empezó a
llorar - esta no es la manera de solucionar las cosas, por favor- y so una pausa – no lo
hagas Andre, por favor no lo hagas, te lo ruego, no lo hagas, ¿acaso piensas dejarme sola?,
no recuerdas que me prometiste que nunca me dejarías, - yo observaba como se le caían
las lágrimas.
- Venus, por favor no me detengas, ya no quiero seguir así, si yo me voy tu estarás mejor,
tus padres ya no te enviaran al extranjero, podrás seguir aquí, - respire profundamente
lamentando mi cobardía.
- Y, ¿Piensas que si tú me dejas voy a ser feliz? ¿Cómo mierda voy a ser feliz? si la razón de
mi felicidad eres tú, tú y solo tú, Andre por favor de lo ruego no lo hagas – note que se
estaba acerando más a mí - Mi amor tú y yo solucionaremos todo, juntas pelearemos
contra nuestros padres para que nos dejen ser felices.
- ¿y tú crees que nos permitan estar juntas? – le dije no muy fuerte -
- no lo sé, pero estoy segura que juntas lo vamos a lograr, por favor no me dejes – ella
seguía pidiéndome que por favor no la dejara,