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TESINA Terminada: December 2017
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El emprendimiento como una respuesta a la falta de oportunidad
laboral en los jóvenes Mexicanos.
Diciembre 2017
1
Índice
I. Antecedentes…………………………………………………....3
II. Planteamiento del problema……………………………….....5
III. Justificación……………………………………………………..6
IV. Objetivos………………………………………………………….7
V. Preguntas de Investigación…………………………………...8
VI. Marco teórico…………………………………………………….8
6.1 Definiciones y conceptos………………………………….9
6.2 El emprendimiento como respuesta al desempleo…..17
6.3 La Realidad del empleo de los jóvenes en Europa: El
caso España en su postura pro emprendimiento………...19
6.4 Características y evolución de los egresados del
Sistema de Educación Superior……………………………...23
6.5 Estructura y evolución del empleo de profesionistas..25
6.6 El equilibrio en el mercado laboral……………………....27
6.7 Actividad emprendedora, conocimiento y capacidad
de innovación…………………………………………………….33
VII. Marco Metodológico………………………………………………..35
VIII. Resultados…………………………………………………………..36
IX. Conclusión…………………………………………………………….38
X. Referencias...…………………………………………………………..40
2
I. Antecedentes históricos.
En la revista REVESCO 2013 los autores Lejarriaga Pérez de las Vacas, Bel Durán
y Martín López en su estudio “El emprendimiento colectivo como salida laboral de
los jóvene: análisi del caso de las empresas de trabajo asociado”, realizado a los
jóvenes de españa con una metodología descriptiva llegaron a las conclusiones en
una primera instancia de que los más afectados por las crisis económicas y
laborales son los jóvenes, sin embargo es en el emprendimiento colectivo una
respuesta clara para la crisis que enfrentaba España.
En el año 2014 la Doctora María Soledad Parra Miranda escribió un artículo para la
universidad Alberto Hurtado de Chile titulado “Emprender en tiempos de crisis” habla
sobre los distintos tipos de emprendimiento y donde es que se dan estos diciendo
que en el tiempo de crisis aumenta el emprendedor por necesidad que al contrario
del emprendedor por oportunidad decide emprender porque desesperadamente
necesita un ingreso para su familia y que estos difícilmente pueden aportar a un
crecimiento de la economía de un país.
3
En el año 2015 Marcelo Abad V. Presenta el artículo con el título “El
emprendimiento una herramienta para el combate contra crisis y la depresión
económica, en una investigación documental llega a la pequeña conclusión de que
el emprendimiento es una respuesta de alto valor para las naciones que deben
enfrentar los efectos de las depresiones económicas ya que aumenta el nivel de
cambio, genera empleos y aporta bienestar a la población.
4
II. Planteamiento del problema
5
revista Entrepreneur en el año 2016 plantea que del total de los emprendedores que
un pequeño porcentaje de los jóvenes emprende por necesidad es decir que es la
única opción para generar ingresos ya que no pueden conseguir un trabajo que
satisfaga sus necesidades, este tipo de emprendedores corresponde al 23% del
total de los emprendimientos en México, el porcentaje restante son emprendedores
por oportunidad, es decir que toman en cuenta una necesidad y buscan satisfacerla
mediante un servicio y a partir de ahí generan un negocio.
Este es el panorama para los jóvenes y para los jóvenes emprendedores en México.
III. Justificación
6
GEM en el 2016. La mayoría de los emprendimientos en México nacen del tipo de
emprendimiento por oportunidad, es decir que por la falta de buenos empleos los
jóvenes deciden emprender identificando oportunidades de su alrededor
comenzando así un negocio con capacidad de crecimiento (Parra-Miranda,M,S
2016). Estos emprendedores en etapas tempranas pueden llegar a generar hasta
seis empleos (GEM, 2016).
México según el Global Entrepreneurship Monitor por sus siglas (GEM) en el 2016
ocupaba el lugar 46 de 60 en deseabilidad de ser emprendedores y aunado a esto
ha ido mejorando sus políticas en cuanto al emprendimiento desde el 2012
encontrando en él una respuesta al desempleo y la falta de formalidad en los
jóvenes creando tanto instituciones como el INADEM y diferentes programas que
apoyan a los emprendedores de manera económica, en consultorías y apoyos
diversos haciendo que poco a poco se profesionalice al emprendedor con la
esperanza de que las acciones que se lleven a cabo por este grupo de personas
ayuden a la economía, generen empleos y aumente la formalidad en los jóvenes
mexicanos.
IV. Objetivos
Objetivo general.
De qué manera emprendimiento es una respuesta a la falta de oportunidad laboral
en los jóvenes mexicanos.
Objetivos específicos
● Describir el panorama laboral para los jóvenes en México
● Describir cómo la crisis económica motiva a los jóvenes a buscar otras
maneras de generar recursos.
● Describir qué oportunidades existen de emprendimiento para los Jóvenes
● Desarrollar cómo el emprendimiento afecta en la economía del país
● El rol de las universidades en el emprendimiento en México
7
General
¿ De qué manera el emprendimiento es una respuesta a la falta de oportunidad
laboral en los jóvenes mexicanos?
Específicas
¿ Cuál es el panorama laboral para los jóvenes en México?
¿De qué forma la crisis económica motiva a los jóvenes a buscar otras maneras de
generar recursos?
¿Cómo afecta a los jóvenes la falta de oportunidades laborales?
¿Qué oportunidades tienen los jóvenes para comenzar a emprender?
¿Hasta dónde el emprendimiento afecta o beneficia a la economía del país?
8
6.1 Definiciones y conceptos
El análisis pretende explorar diversas vertientes del emprendurismo, primero hay
que entender que es el emprendurismo y el emprendedor. Dentro de la gama de
estudios sobre el emprendedurismo se pueden detectar tres vertientes. En la
primera de ellas, se encuentran los trabajos de los investigadores que se preocupan
por definir el concepto y su forma de evaluarlo (Herenkson, 1988; Paniagua, 2002;
Krause, 2004; Hisricha, 2005;Lerma, 2007; Longenecker, 2007; González-Molina,
2008), todos ellos coinciden en que la palabra emprendedor se deriva de la palabra
francesa entre prender, cuyo significado es emprender, encargarse de,
comprometerse, o de la palabra entrepreneur que significa aquella persona que
monta su propio negocio por la necesidad de ser su propio jefe.
Los mismos autores también estudian las características básicas que distinguen a
las personas emprendedoras en términos generales: detectar oportunidades de
negocios, evaluar y desarrollar una idea; conseguir los recursos necesarios; evaluar
y asumir riesgos; analizar las condiciones del mercado; poner en marcha un negocio
y planificar el futuro.
9
(2008), las competencias son una capacidad que utiliza varios recursos tanto
cognitivos como no cognitivos para enfrentar ciertas situaciones; no son sólo
conocimientos, habilidades o actitudes, sino acciones que integran y movilizan
recursos. Las competencias profesionales se adquieren en el proceso de formación,
pero se fortalecen en la práctica laboral.
10
Para Knigtlcitado en Krause (2004), el
emprendedurismo debe tener estos tres
elementos: liderazgo en cambios e innovaciones;
adaptabilidad al cambio y soporte del riesgo en
eventos fortuitos.
11
pertenezcan al sector informal de la economía
(González-Molina, 2008).
Dentro de los conceptos de emprendedurismo destacan los autores que definen las
características que deben tener los emprendedores. Para Paniagua (2002) es
aquella persona que crea su propio negocio por diferentes razones, entre las que se
encuentran: huir de la estructura empresarial y poner en práctica sus ideas
creativas, ser socialmente útil a la comunidad y a sí mismo.
Lerma (2007) afirma que la figura del emprendedor ha sido definida por economistas
y sociólogos quienes coinciden en que es una persona que inicia, hace, logra y
construye una empresa de la nada. 1609 Para González-Molina (2008) el
emprendedor debe reunir una serie de características básicas y necesarias, pero
aunque se puede decir que esta persona nace tiene que contar con una
determinada formación ya que una buena idea con una mala preparación
usualmente lleva al fracaso.
Autores como Longenecker (2007) consideran que uno de los indicadores para
medir el emprendedurismo es la tasa de autoempleo, las cual se mide sobre el
número de autoempleados sobre el total de la fuerza de trabajo, sin embargo esta
medida no puede dar información sobre las actividades innovadoras y no refleja
verdaderamente la idea de una visión emprendedora. Ante esto, Henrekson (1988)
indica que la tasa de autoempleo es un mal indicador para esta medida ya que
existen otras razones por las una persona decide buscar el autoempleo y no
precisamente por tener esta visión, como lo es la búsqueda de la sobrevivencia o la
pertenencia a la economía informal.
12
planteando cada vez más la relación entre su independencia, su apoyo a la
comunidad y el crecimiento basado en ideas propias y también, como un
mecanismo social para comprender su entorno.
Para ello tenemos que definir el emprendurismo social, existen muchos conceptos
del emprendedor social; una de sus principales características es que buscan la
creación de empresas que sean viables técnica y financieramente pero su principal
objetivo consiste en luchar contra la exclusión socio-laboral y la distribución del
ingreso inequitativo.
Según Puchol (2005) ser emprendedor social implica tener los siguientes rasgos:
ser capaz de reconocer una necesidad, reunir los recursos necesarios y realizar
acciones para poner a disposición de la comunidad aquellos bienes y servicios que
se necesitan sin olvidar las obligaciones ante la sociedad y asumiendo los riesgos
que se presenten, no solamente los financieros sino incluyendo los asociados a la
organización social.
González y Frank (2011) por su parte, consideran que el emprendedor social tiene
dos elementos que no se pueden separar: un componente personal que es
consistente con la búsqueda de independencia, libertad y beneficios económicos y
otro componente social, relacionado con el compromiso con los empleados y el
deber de obtener resultados económicos, sociales, cooperativos, públicos y
cognitivos.
13
Morrison (2002) menciona que el emprendedor social reúne una serie de criterios
sociales y económicos que no se pueden separar. En términos sociales es el
resultado de iniciativas de grupos de ciudadanos con poder de decisión para
distribuir los beneficios obtenidos y en términos económicos es una actividad
continua de producción, con un elevado grado de autonomía, de riesgo económico
y trabajo remunerado.
14
universidades deben tener los siguientes elementos: investigación, enseñanza,
apoyo al desarrollo de empresas, formación y consultoría, y los siguientes
procesos: el reconocimiento y desarrollo de la y la creación de valor.
15
universidades deben realizar dos tareas críticas: la primera consiste en fomentar el
emprendurismo a través de un modelo emprendedor propio que sea dinámico, en
donde se motive y sensibilice a los alumnos en la necesidad de la misión
emprendedora, mientras que la segunda se centra en el apoyo al desarrollo de
empresas, en donde buscan, reconocen y desarrollan las oportunidades de
negocios, la puesta en marcha de de las empresas y su crecimiento.Dalmau,
Alonso y Colomer (2003) consideran que la visión emprendedora fomentada por
las universidades deben tener los siguientes elementos: investigación, enseñanza,
apoyo al desarrollo de empresas, formación y consultoría, y los siguientes
procesos: el reconocimiento y desarrollo de la y la creación de valor.
16
Son muchos, pero no muy variados, los documentos de las diferentes instituciones
europeas en relación con el tema de los jóvenes. Y esa relevancia cuantitativa no
sorprende, ya que simplemente los datos del desempleo de este colectivo son tan
alarmantes y preocupantes que, sin duda, obligan a que se adopten medidas.
Ahora bien, la Unión Europea, debido a su margen de maniobrabilidad, de un lado,
y a su voluntad e intereses, de otro, no se mueve más que en el campo de la
propuesta y de las recomendaciones, por lo que son los estados miembros los
verdaderos protagonistas en la lucha contra el desempleo juvenil; aunque no sólo
en ello, ya que su ámbito de actuación debe extenderse a otras parcelas, con las
que este desempleo está íntimamente relacionado y sobre las que ya ha llamado la
atención la Unión Europea, como la inclusión social, la salud, la cultura, etc.
17
Mientras que las primeras, en una primera valoración de conjunto, no son otra
cosa, en su casi totalidad, que medidas obvias carentes de contenido, y que debido
a su falta actual de desarrollo se mueven en el ámbito de lo futurible; las segundas,
se han convertido en el convenido, primero, del Real Decreto Ley 4/2013 de
medidas de apoyo al emprendedor y de estímulo del crecimiento y de la creación
de empleo (en adelante, RDL 4/2013) y, después, en la Ley 11/2013 del mismo
nombre. En esencia, ni el RDL ni, con posterioridad, la Ley difieren, en absoluto, de
las propuestas de la Estrategia. Cuestión bien distinta es comprobar si esas
medidas responden a las orientaciones y recomendaciones comunitarias y, más
exactamente, a la Garantía juvenil. Si se acude a la Estrategia, como a la Ley, la
respuesta tiene que ser afirmativa. De hecho, en la primera, la propia Ministra
suscribe que “es coherente con las recomendaciones e iniciativas que, sobre esta
materia, ha realizado la Unión Europea, en particular con los objetivos y
planteamientos de la llamada “Garantía Juvenil” recientemente propuesta por la
Comisión Europea”, aunque, a renglón seguido, se reconoce que se “desarrolla
buena parte de las recomendaciones específicas o líneas de actuación que
propone el documento” comunitario. O sea, que no hay una transposición completa
de esta medida europea o, si se prefiere, existe una confesión pública de que esa
Garantía Juvenil no se ha recepcionado en toda su extensión. Ahora bien, y va a
ser el objeto de este trabajo, hay que comprobar si la parte que se ha desarrollado
responde, por entero, a los objetivos y documentos comunitarios o si, por el
contrario, no ha sido más que una libre reinterpretación de dichas pretensiones.
Esta adecuación es la que permitirá determinar si, en efecto, como se ha
publicitado desde el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, se han cumplido o
no los deberes por parte del Estado español. A lo que hay que añadir que no basta
con el mero cumplimiento formal de la voluntad de la Unión Europea, puesto que la
efectividad de cualquier política de empleo está totalmente condicionada por la
realidad del mercado de trabajo sobre el que pretende actuar; y en esto, sí que se
puede adelantar que la Ley 11/2013, como ya hacía el RDL 4/2013, y algo menos
la Estrategia, no han sabido ni afrontar el reto, ni aportar soluciones.
18
6.3 La Realidad del empleo de los jóvenes en Europa: El caso España en su
postura pro emprendimiento
Y eso no quiere decir que las mismas proviniesen de seres visionarios, sino que la
realidad de la juventud no es tan distinta y, por no serlo, que no se han adoptado
las medidas adecuadas a nivel europeo ni, por supuesto, a nivel nacional. Medidas
caracterizadas, normalmente, por un enorme continuismo y falta de imaginación de
sus artífices pese a la cantidad ingente de órganos, reuniones formales e
informales, encuentros, etcétera, que se incorporan a la agenda comunitaria. Sin
perjuicio de un análisis detenido de los datos de empleo y de desempleo de los
jóvenes en el capítulo precedente de esta obra, hay que indicar, en este momento,
que la tasa de desempleo de los jóvenes en Europa se situó, en el tercer trimestre
de 2012, en el 22.7% más de 5 millones de desempleados, por tanto, muy por
encima del 9.2% de la tasa general de desempleo; al tiempo que su paro de larga
duración es, del mismo modo, muy elevado Aunque este es el dato central, hay
que continuar con la radiografía de la situación de los jóvenes, puesto que los
restantes y desesperanzadores parámetros, conjuntamente con el anterior, deben
servir de base al diagnóstico y, por consiguiente, al diseño de las medidas de
empleo. Así, las posibilidades de los jóvenes de encontrar empleo son muy bajas
sólo el 29.7%, de los que tienen entre 15 y 24 años, desempleados en 2010,
encontraron empleo en 2011; hay un alto índice de abandono escolar, lo que, a
19
efectos de empleo, se traduce en que el 54.2% de los jóvenes no están trabajando
cuando, sin embargo, el 70% lo quiere hacer; son muchos los jóvenes, quizás por
el llamado efecto desánimo, que no llevan a cabo una búsqueda activa de empleo
por ejemplo, el 12.4% de los jóvenes desempleados, aún queriendo trabajar, no
buscaron empleo en el segundo trimestre de 2012; el 12.9% lo que supone
aproximadamente 7.5 millones de los jóvenes entran en la “nueva” categoría de
ninis, es decir, sin empleo y sin educación o formación.
Pero la situación, siguiendo con los datos de la Unión Europea, no mejora para los
jóvenes empleados. En 2012, el 42% de los mismos había firmado un contrato
temporal –cuatro veces más que los adultos– y el 32% a tiempo parcial –el doble
de los adultos–. Todos estos datos ponen de relieve la situación intolerable, en
todos los sentidos, en la que se encuentran los jóvenes, que son, como repite
hasta la saciedad la Unión Europea, el futuro de nuestra economía y de nuestra
sociedad, por lo que no hay que ser especialmente avispado para saber que los
remedios y las soluciones tienen que ser inmediatas. Es un problema que no
admite el largo plazo; y quizás los poderes públicos han confiado demasiado en él.
Por ejemplo, en el programa de actuación comunitaria iniciado en 2010, al hilo de
las actuales directrices para el empleo, se ha diseñado ciclos trienales de
actuación; encontrándonos, hoy en día, en el inicio del segundo (2013–2015). Pues
bien, los avances que se han tenido –si nos remitidos a las señaladas tasas de
desempleo junto con las de abandono prematuro de la escuela o las de formación
universitaria– son tan escasos que, como mínimo, deberían obligar a las instancias
comunitarias a un profundo replanteamiento de la estrategia joven y, por ende, la
de los diferentes estados miembros. De hecho parece que la Unión ya es
consciente de
esta necesidad cuando reconoce que “se necesita urgentemente una respuesta
más rotunda...[ya que] está en juego el futuro económico y social de Europa.
20
esta segunda fase del proceso, en la que quiebra. Y ello, a pesar del tímido cambio
de rumbo acaecido con el diseño de la garantía juvenil. Esta ha supuesto dejar a
un lado el mundo de las vaguedades para instituir una medida real y, por supuesto,
aplicable.
Es cierto, a fin de que el discurso no resulta sesgado, que el margen de
maniobrabilidad comunitaria, pese a todo, no es particularmente amplio debido al
reparto de competencias en materia de empleo, pero no hay que olvidar tampoco
que, por aplicación del principio de subsidiariedad comunitaria, su intervención
tendría que ser más incisiva, puesto que la ineficacia, en términos generales, de
los estados miembros está más que puesta de manifiesto. El caso paradigmático
es España. Nuestra tasa de desempleo juvenil, se situaba a finales de 2012, y
según datos de la EPA recogidos en la Estrategia de Emprendimiento y Empleo
Joven, en el 55.1% para los menores de 25 años de ellos, el 35% son parados de
larga duración–; y esta tasa está por debajo de la realidad, si se parte, como hace
nuestra política de empleo, de que joven es toda persona por debajo de los 30
años. Pero los datos no son más afortunados con respecto a los jóvenes
ocupados. El 82.3% tiene contratos temporales, mientras que el 51% son
trabajadores a tiempo parcial; con la importantísima precisión, en sendas
ocasiones, de que son temporales y/o a tiempo parcial de forma involuntaria. Por
todo, la necesidad de adoptar rápidamente medidas que contrarresten este
desastroso resultado se hacía, y se hace, imperiosa –o, con palabras de la
Estrategia española, “inmediata y decidida”–. De hecho, la actuación tendría que
haber sido más temprana, puesto que las medidas que se adoptaron con la
reforma laboral de 2012, a juicio de la Unión Europea, fueron ineficaces e
inadecuadas como instrumentos para “mejorar las oportunidades de empleo de los
jóvenes”. Con lo cual, hay que confiar en que esta nueva intervención no responda,
en exclusiva, a la voluntad gubernamental de rendir cuentas a Europa y, en
cambio, olvide y desatienda las necesidades de los jóvenes españoles y, lo que es
más importante, las repercusiones de las medidas sobre el mercado de trabajo.
De acuerdo con las declaraciones de la propia Ministra de Empleo y Seguridad
Social, España ha hecho los deberes. Ahora bien, no cabe ocultar que la labor
española ha supuesto, en puridad, una relectura o reinterpretación libre, sesgada e
21
intencionada de las observaciones comunitarias siendo este el verdadero
problema, como se verá en estas páginas, de la efectividad de la Estrategia y de la
reforma contenida en la Ley 11/2013. Y para comprobarlo, basta con acudir, como
se va a hacer en el siguiente epígrafe, a las fuentes de la Unión Europea.
Los efectos de los notables cambios en la demografía del país han sido tres
principalmente: a) El descenso de la población en edades infantiles y jóvenes como
proporción de la población nacional; b) el aumento de la población en edades
activas, y c) el aumento -absoluto y relativo- de la población de la tercera edad.
22
superior y superior, en especial en esta última y en posgrado y, por tanto, se ha
acrecentado la proporción de la población de 14 años y más con estudios de
secundaria y mayores.
23
licenciatura egresaron de entidades privadas, cuyo número se elevó de 218 en
1991 a 737 en 2000; el número de sus egresados de licenciatura y posgrado creció
de 29 833 a 80 279. Estos elementos indican que las IES privadas son actores
cada vez más importantes en el panorama de la educación superior del país.
Otro cambio relevante fue la desconcentración de la matrícula de licenciatura y
posgrado. En este sentido, el Distrito Federal, Jalisco y Nuevo León, registraron
crecimientos medios anuales de 5.7, 4.7 y 4.7 por ciento, respectivamente,
menores a 6.7% observado en el país en su conjunto. En otras diez entidades la
tasa de crecimiento media anual fue superior a 10%. Como consecuencia de esta
dinámica, el coeficiente de Gini pasó de 0.277 a 0.138 entre 1991 y 2000, lo que
indica la notable desconcentración territorial de la producción de egresados
universitarios durante la década. El otro rasgo distintivo de la evolución de la oferta
de egresados en el período fue la mayor participación de las mujeres, que en 1970
fue de 15.5%, en 1980 de 29.8%, en 1990 de 40.3% y para 2000, 51.03 por ciento.
24
6.5 Estructura y evolución del empleo de profesionistas
Existen pruebas claras que muestran que el empleo habría sido más dinámico para
las personas con mayores niveles de escolaridad; particularmente dinámico fue el
de los profesionistas que registró 6.1% medio anual. El dinamismo del empleo de
las mujeres fue mayor que el de varones y existe una estructura de edades más
avanzada en la actualidad que al inicio de la década. Se observa también que la
mayoría mantiene una posición en la ocupación vinculada al trabajo asalariado y
en menor proporción en el trabajo por su cuenta son patrones.
25
Para evaluar la "calidad" de los empleos de los profesionistas se distinguen tres
grupos de ocupaciones: el Grupo 1 incluye ocupaciones típicas desarrolladas por
profesionistas; el Grupo 2 comprende ocupaciones de carácter comercial, técnico y
operarios calificados, y el Grupo 3 incorpora ocupaciones que pueden ser
desarrolladas indistintamente por personas con y sin educación profesional en su
mayor parte. Del análisis estadístico se derivan dos conclusiones de mucha
relevancia: a) una mayoría absoluta (60%) de profesionistas mexicanos se
emplean en ocupaciones preferentemente profesionalizantes (Grupo 1), y b) se
detecta, sin embargo, un crecimiento mayor del número de profesionistas en
ocupaciones de los grupos 2 y 3 durante la década, lo que estaría sugiriendo una
relativa saturación del primer grupo de ocupaciones que influyó en el
comportamiento del mercado laboral como se menciona más adelante.
26
importancia relativa se redujo, y c) los sectores dinámicos en materia de empleo
profesional ya señalados -servicios y comercial- aumentaron significativamente su
empleo en el Grupo 3 de ocupaciones que, como ya se ha dicho, tiene un carácter
residual, en tanto que los demás sectores redujeron la importancia del empleo en
el Grupo 1 de ocupaciones, esto es, las de carácter profesionalizante.
27
egresados netos lograron colocarse en ocupaciones profesionalizantes (Grupo 1);
el resto habría encontrado trabajo en ocupaciones menos especializadas (grupos 2
y 3). Lo anterior pone de manifiesto dos conclusiones: a) el número de egresados
necesarios para laborar en ocupaciones de carácter profesional fue mucho menor
que el número total de egresados del sistema de educación superior del país
durante la década, y b) el que el excedente de oferta de profesionistas encuentre
empleo en ocupaciones de carácter residual, sugiere que los egresados
universitarios desplazan de esas labores productivas a personas con menores
niveles de educación formal. Este fenómeno, por lo demás, no es privativo de
México: en la actualidad se registra en muchos países del mundo.
28
innovador, así como las teorías del emprendimiento con base en los derrames del
conocimiento.
Existe un amplio reconocimiento de que el conocimiento y la innovación están
arraigados al territorio, por lo que cualquier política de desarrollo local está
obligada a potenciar los procesos de innovación desde la dimensión regional para
que tenga éxito (Llisterri y Pietrobelli, 2011). El papel del espacio territorial ha sido
ampliamente discutido en la ciencia regional y también ha tenido un rol decisivo en
la perspectiva del análisis económico. A pesar de las diferencias existentes entre
las distintas propuestas de los denominados «modelos territoriales de innovación»
(Moulaert y Sekia, 2003), todos coinciden en adjudicar un alto grado de importancia
a las externalidades y a la proximidad geográfica como factor explicativo de la
innovación (Albuquerque, 2006).
La importancia de la proximidad territorial para generar capacidades de innovación
ha sido tema recurrente en la extensa bibliografía sobre los modelos regionales de
innovación. La mayor parte de la literatura considera que el proceso de aprendizaje
y el conocimiento generado son factores con atributos locales, de arraigo o
adherencia (stickiness) al territorio, que explican su escasa movilidad y la
existencia de capacidades localizadas y distribuidas desigualmente por los
espacios territoriales (Navarro, 2009)
La justificación de esa adherencia del conocimiento al territorio se explica
fundamentalmente desde la perspectiva evolucionista y en contraposición a las
tesis neoclásicas, por el hecho de que una parte importante del conocimiento tiene
carácter tácito y no es codificable. Para Lundvall , la transmisión del conocimiento
tácito depende del capital humano, de la interacción y convivencia de las personas
entre las que se transmite el conocimiento, que compartan códigos y determinadas
formas comunes a determinados contextos, como el idioma, las normas,
identidades; todo lo anterior genera confianza para que pueda tener lugar el
proceso de trasmisión. Por lo que desde esa perspectiva, la proximidad se
consideró al inicio una condición necesaria para la transmisión del conocimiento.
Por otro lado, recientemente el debate académico también ha puesto en duda la
necesidad de la proximidad física para la transmisión del conocimiento, a partir de
que consideran superada la dicotomía entre conocimiento tácito y explícito que
29
prevaleció en una parte importante del pensamiento científico sobre la teoría del
conocimiento hasta finales de la década de los noventa (Howells, 2002).
30
Otros trabajos de gran relevancia en el campo de la medición de las capacidades
de innovación son los de Archibugi y Coco (2004,2005), los cuales construyeron el
Índice ArCo o Indicador de Capacidades tecnológicas, compuesto por 3
subíndices: el de creación tecnológica (patentes y artículos científicos), el de
infraestructura tecnológica (Internet, teléfono, consumo de electricidad) y el de
habilidades humanas (matrícula terciaria científica, años de escolaridad e índice de
alfabetismo). Este índice les permitió construir una tipología de naciones y
diferenciarlas según los esfuerzos y los resultados obtenidos en el área de la
construcción de capacidades de innovación.
Precisamente, de la importancia del carácter regional en los estudios vinculados a
la innovación surge la necesidad de diferenciar los propios sistemas regionales
dentro de una nación, y por lo tanto definir tipologías de Sistemas Regionales de
Innovación en función de los recursos y resultados relacionados con los mismos
(Martínez-Pellitero, 2002).
Paralelamente a los estudios sobre los procesos de innovación a nivel nacional, la
importancia de la innovación a nivel regional ha sido puesta de manifiesto en varios
trabajos dirigidos a medir la innovación y construir tipologías que permitan clasificar
las regiones. En el caso de España en particular, son muy relevantes los trabajos
del Instituto de Análisis Industrial y Financiero (IAIF) de la Universidad
Complutense de Madrid destinados a construir una tipología de los sistemas
regionales de innovación (Martínez-Pellitero, 2002; Buesa, Heijs y Martínez
Pellitero, 2002; Buesa, Heijs, Baumert y Martínez Pellitero, 2003) y de establecer
cuáles son los factores determinantes de la capacidad innovadora en las regiones
para el caso de España (Baumert y Heijs, 2002; Buesa et al., 2003). Estos autores
construyeron el índice IAIF de la innovación regional, el cual está compuesto por 4
índices parciales que miden: el entorno regional y productivo, el entorno
universidad, el entorno administración pública y el entorno empresa.
Recientemente, un estudio chino revela los avances en la identificación de los
factores que determinan la capacidad de innovación regional en ese país (Yang,
Lee y Lin, 2014). Encontraron que aquellas regiones que tienen ratios más
elevados de inversión privada en I + D y empresas de propiedad extranjera, así
31
como estrechas relaciones universidad, industria y gobierno, experimentan una
capacidad de innovación superior.
32
Ante las insuficiencias de la nueva teoría del crecimiento económico (Romer, 1990)
y la función de producción de conocimiento en relación con la explicación de
capacidad de innovación de un territorio, Acs, Audretsch y sus colaboradores han
desarrollado la teoría del derrame del conocimiento del espíritu empresarial
(Audretsch, 1995; Audretsch y Keilbach, 2005; Acs y Armington, 2006; Audretsch,
Keolbach y Lehman, 2006; Acs, Audretsch, Braunerhjelm, Carlsson, 2009; Dilaver,
Bleda y Uyarra, 2014). El contenido fundamental de esta perspectiva consiste en
que los emprendedores, a través de la creación de nuevas empresas, desempeñan
un papel importante en la comercialización de nuevos conocimientos desarrollados
por instituciones de investigación o (generalmente grandes) empresas, las cuales
no están interesadas en comercializar los frutos de su investigación. Las
oportunidades empresariales en este escenario se revelan en la aparición de
nuevos conocimientos como resultado de la actividad de I + D y de agentes
económicos emprendedores que descubren sus valores potenciales de
comercialización, a diferencia de las empresas o instituciones establecidas que
prefieren no explotarlos. Esto es consistente con las características del
conocimiento como insumo o factor de producción diferente a los factores
tradicionales de producción (capital y trabajo): alto grado de incertidumbre, alto
grado de asimetrías y altos costos de transacción.
33
La teoría del derrame de conocimiento de la iniciativa empresarial sugiere un
importante canal de transmisión de los derrames de conocimientos que contribuyen
a una mejor comprensión del mecanismo del crecimiento económico impulsado por
el conocimiento y la innovación. En esa perspectiva se identifican los nuevos
conocimientos como fuentes de oportunidades empresariales. Muy importante
también es que se identifica el emprendimiento como un mecanismo que hace
posible los derrames de conocimiento, recuperando el eslabón perdido entre el
nuevo conocimiento o la actividad de I + D, la innovación y el crecimiento
económico. Esto es consistente con los descubrimientos de (Michelacci 2003),
según el cual la carencia de capacidad empresarial puede dar lugar a bajos
rendimientos de la actividad de I + D. También (Braunerhjelm, Acs, Audretsch y
Carlsson, 2010) han encontrado un efecto positivo de los derrames de
conocimiento de la iniciativa empresarial en el crecimiento económico después de
controlar la actividad de I + D.
Enfoque
Para la presente investigación determinamos un enfoque Mixto ya que a pesar de
hacer la recopilación de datos de fuentes secundarias muchas de estas llevaron a
cabo una investigación de carácter cuantitativo y los datos obtenidos en algunos
casos formaron parte del estudio de esta investigación. Sobre el enfoque mixto
Sampieri dice que existen gran variedad de fuentes de información que pueden
generar una idea de investigación es a partir de est información que el investigador
crea el enfoque con el que decide llevar su investigación habla además de que el
enfoque llamado mixto donde se combinan los dos grandes tipos de enfoque el
cualitativo y el cuantitativo.
34
investigación documental como “procedimiento científico y proceso sistemático de
indagación, recolección, organización, análisis e interpretación de información o
datos en torno a un determinado tema”. Sobre la investigación documental también
se dice que es una técnica que consiste en la selección y recopilación de
información por medio de lectura, crítica de distintos documentos, dicha
investigación puede ser de revistas, material de hemerotecas, tesis, libros etc.
(Baena,1985).
Metodología general
El procedimiento que se llevó a cabo para la realización de esta tesis fue
recolección de información importante en revistas, tesis, artículos, reportes de
organizaciones. Se hizo el uso del programa excel para el apoyo en la organización
de los datos a manera de fichas bibliográficas.
En cuanto al universo y muestra fueron los jóvenes emprendedores de la república
mexicana.
VIII.- Resultados
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Dicho informe menciona que en países como México, Argentina, Brasil y Paraguay,
cerca del 60 por ciento de los jóvenes trabajadores en un empleo informal seguirán
desempeñándose hasta un año después y únicamente el 30 por ciento podrá
encontrar estabilidad en un empleo formal.
36
El emprendimiento y sus efectos en la economía del país
Es difícil medir el impacto real en la economía del país, pero en 2013 veiamos que
las pymes aportan el 48% del PIB (Forbes, 2013), sería aventurado decir cuántos de
estos son emprendimientos, pero es una realidad que la mayoría de las empresas
pequeñas y medianas están relacionadas con estos emprendimientos.
El rol de las universidades en el emprendimiento en México
Queda totalmente probado que las universidades y el crecimiento en el
emprendurismo tiene una relación directa, ya que éstas fungen como una
incubadora y un motivante para que los jóvenes muestren sus proyectos como lo
menciona Javier Arreola en los núcleos de innovación e incubación que visitó en Tel
Aviv, Singapur y Sao Paulo (Arreola, J 2014) y que más que una moda que prolifera
en los centros de estudios, son verdaderas maquinarias para acelerar negocios,
esto tiene beneficios tripartitos, ya que no solo es el emprendedor quien toma
partido, sino la sociedad y la universidad también ven retribuido en manera de
apoyo económico el asistir en estas necesidades, además, es una inversión para el
futuro del país.
General
Seguirán existiendo oportunidades y apoyos para realizar esfuerzos ligados a
promover empresas, ya que son el motor económico - político del país, pero se
necesita una mayor educación financiera y desarrollar herramientas que reduzcan el
fracaso, en aras de crear más empleos, entre otros beneficios que promulgan una
mejor convivencia cuando existe un bienestar económico. Se puede decir que el
empleo y las empresas siempre estarán ligados de muchas maneras ya que
dependen directamente el uno del otro, y que si bien, las crisis siempre serán un
motivo para nuevas oportunidades, el emprendimiento solo es una pieza más dentro
de la incertidumbre que se genera en esos desencuentros económicos. Cabe
resaltar que es una excelente propuesta para incentivar el crecimiento y que las
universidades se conecten con la realidad de los jóvenes siempre será nutritivo, en
todo caso, no permanecer de manera contemplativa y ser parte del engranaje
37
favorece y genera confianza en un modelo que cada vez genera más adeptos
dentro del concepto y el mundo empresarial.
IX.- Conclusión
Se pueden determinar muchos supuestos válidos, ya que es un fenómeno
relativamente nuevo en la literatura aunque siempre había existido dentro del medio.
Encontramos que los jóvenes mexicanos responden a este estímulo en primer lugar,
debido a la precariedad de los salarios ya que en general existen oportunidades
pero son un espejismo de una situación que cada vez se repite más en todos los
ámbitos del sector laboral, la brecha salarial entre los puestos bajos versus los
intermedios es increíblemente grande y requiere una cantidad de tiempo que no
está en función de los requerimientos de los jóvenes mexicanos, asimismo, como
adendum, tenemos que mencionar que entre las jóvenes mexicanas en específico,
prolifera en mayor medida la diferencia en el salario, es por ello que la respuesta
natural es iniciar el proceso de iniciarse en el mundo empresarial, el cual permite, en
mucho de los casos, administrar el tiempo, los recursos y los esfuerzos sin
descapitalizarse económicamente y físicamente en un trabajo que probablemente
nunca les remunere de la misma manera.
En general el panorama futuro siempre ha lucido grisáceo desde la perspectiva de
todo aquel con una capacidad analitica dentro del promedio, parecia logico que el
estado de bienestar buscado siempre se tiene que poner en tela de juicio con todas
las hecatombes que suceden alrededor nuestro, es muchas veces donde surgen las
oportunidades para todos aquellos emprendedores que logran o han logrado
cambiar un poco la sintomatología de un lúgar donde todos habitamos pero
ciertamente nadie dispone de tiempo y recursos para acelerar el cambio o para ser
parte del mismo. Es prudente decir que las universidades han tratado de permear en
buena medida este modelo para fomentar la creatividad y habilidad de los
estudiantes, pero a su vez, el fracaso se encuentra en las complicaciones para
conseguir los recursos y que estas ideas y tal vez sueños, puedan convertirse en
una realidad.
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El estudio arroja varios datos interesantes acerca de lo que significa emprender en
nuestro país y sus consecuencias en distintas áreas como la economía. A
continuación, retomamos algunos de los datos más interesantes que arrojó el
mismo.
Estos son algunos de los puntos destacados del estudio en forma resumida:
● México tiene una economía basada en la eficiencia (con fortaleza en la
manufactura)
● La mayoría de sus emprendedores son impulsados más por oportunidad que
por necesidad
● Esto quiere decir que muchos emprenden como una decisión forzada por
falta de empleo
● La mayor participación es de personas entre 25 y 34 años
● 6.9% es la tasa de emprendedores establecidos en México
● México se ubica en el lugar 46 de 60 en cuanto a deseabilidad de ser
emprendedor
● 49% de las personas considera que emprender, es una opción de carrera
deseable
● 34% de las personas tiene miedo al fracaso
● 10% de los emprendimientos en etapa temprana espera generar más de 6
empleos
X. Referencias
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