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El plan tiene por finalidad trazar el curso deseable y probable del desarrollo nacional o del
desarrollo de un sector (económico, social o cultural, etc.).
Tanto los programas como los proyectos se concretan a través de un conjunto de actividades
organizadas y articuladas entre sí, para alcanzar determinadas metas y objetivos específicos.
La diferencia entre un programa y un proyecto radica en la magnitud, diversidad y
especificidad del objetivo que se quiere alcanzar o la acción que se va a realizar: si es
compleja, habrá de ser un programa con varios proyectos; si es sencilla, un simple o único
proyecto podrá desarrollarla, como se explicó en clase (Revise su cuaderno, en el primer día
de clase).
Ejemplos:
DEFINICIÓN DE PROYECTO
3.- Todo proyecto tiene que alcanzar unos resultados, de acuerdo con los objetivos
previstos en su diseño y conceptualización.
- Concreta y ordena las acciones, lo cual nos permite calcular los costes, establecer
calendarios, etc.
- Es una referencia a la hora de hacer el seguimiento, control y evaluar resultados.
- Facilita la participación, (por un lado, porque nos ayuda a comunicar, discutir y contrastar
lo que queremos hacer, y por otro lado, permite incorporar las aportaciones parciales de
muchas personas).
- En la medida de que se trate de un documento donde se concretan objetivos, acciones y
recursos, se convierte en un buen instrumento para pedir la ayuda y colaboración de otras
personas e instituciones.
Datos Generales: (En este apartado debe ir: En la primer hoja el nombre del
proyecto, escudo de la universidad, fecha de entrega, en la siguiente hoja debe ir el número
de grupo, nombre y carné de los integrantes a doble espacio con la calificación del
coordinador al final de cada número de carné como: MB, B, R, éstas letras significan: MB
Muy Bueno, B bueno, R regrular) Si algún integrante del grupo no participó en la elaboración
del proyecto no escribirlo en el grupo, en la siguiente hoja introducción, valores.
Ejemplo: Juan Carlos Díaz Mazariegos 32456778 MB
En la fundamentación del proyecto hay que presentar los criterios y las razones que justifican
la realización el mismo.
En este punto, deben explicar en qué se fundamenta el proyecto, cómo surge, a qué
necesidades responde, las razones que lo motivan.
Todo ello debe completarse con datos de la realidad más próxima (análisis social, datos
estadísticos, análisis del entorno concreto...) que avalen los argumentos y razones que lo
justifican la realización del proyecto.
Las razones que pueden dar lugar a un proyecto suelen ser muy variadas: hay una
necesidad y no existe un servicio para satisfacerla, el servicio existente es insuficiente, se
quiere mejorar la calidad de la prestación, etc. En definitiva, se trata de identificar y analizar
el problema que se pretender solucionar.
2.- Objetivos generales y específicos
Se trata de indicar que queremos conseguir con nuestro proyecto, o qué efectos se
pretenden alcanzar con su realización.
El objetivo general, es el propósito central del proyecto. Los objetivos específicos son pasos
que hay que dar para alcanzar o consolidar el objetivo general.
Cuando se escriben los objetivos en el proyecto, la primera palabra debe ser un verbo y estar
en infinitivo. Por ejemplo: Fomentar la actividad recreativa en la niñez de la región.
3.- Metas.
Para que los objetivos adquieran un carácter operativo, que no sean abstractos, ideales hay
que traducirlos en logros específicos, es decir, hay que indicar cuánto se quiere lograr con la
realización del proyecto, dentro de un plazo determinado y en un ámbito o espacio también
delimitado. Las metas operacionalizan los objetivos, estableciendo cuánto, cuándo y dónde
se realizarán éstos.
4.- Actividades.
5.- Metodología.
En definitiva, una metodología que permita flexibilidad, dinamismo, innovación y eficacia. Por
ejemplo, metodología que se llevará a cabo en el Servicios para personas mayores de una
región. En este caso se podría plasmar de la siguiente manera:
6.- Destinatarios/as.
Se trata de identificar quiénes serán los beneficiarios inmediatos, a qué sector de población a
la que va dirigida la acción, (los directamente favorecidos por la consecución de los objetivos
y metas o efectos del proyecto) y quiénes serán los beneficiarios finales o indirectos, es
decir, aquellos a quienes favorecerán los impactos del proyecto.
Para el buen diseño de un proyecto es necesario identificar con precisión los destinatarios,
especificar el número de participantes y sus características (edades, ocupaciones, situación
social, laboral, económica, etc.). Criterios de inclusión y de exclusión en las diferentes
actividades que se realizarán en el proyecto.
- macro-localización, esto es, la ubicación geográfica del proyecto dentro del área: región,
comarca, ciudad, conjunto rural, etc-
- micro-localización, identificando dentro de un conjunto menor, como puede ser un barrio,
el lugar o zona en donde se desarrollará el proyecto.
8.- Temporalización.
Este componente del proyecto permite juzgar si el proyecto es viable o factible o no, permite
ver si existe una distribución uniforme de las actividades, si los plazos son realistas.
Todo proyecto requiere para su realización una serie de recursos para obtener resultados y
lograr los objetivos previamente fijados. Cuando se elabora un proyecto suelen distinguirse
cuatro tipos de recursos: humanos, materiales, técnicos y financieros.
Puede ser útil rellenar un cuadro como el siguiente, a fin de disponer de un listado completo
de los recursos que se requieren para cada una de las actividades. De este modo, se
asegura una mayor precisión y adaptación de los recursos, a las acciones que conlleva la
ejecución del proyecto.
Humanos: para ejecutar cualquier tipo de proyecto hay que disponer de personas adecuadas
y capacitadas para realizar las tareas previstas. Esto supone especificar la cantidad de
personal, las cualificaciones requeridas y las funciones a realizar, indicando quién es
responsable de qué y cómo está distribuido el trabajo.
Financieros: se realiza una estimación de las diferentes fuentes con que se podrá contar:
presupuesto ordinario, subvenciones, pago del servicio por los usuarios, ingresos o
beneficios, créditos, etc. Con ello, se podrá establecer la estructura financiera del proyecto.
Por último, decir que un proyecto en el que no hay recursos, no es más que una declaración
de buenos propósitos.
- Costo de personal: se calcula sobre la base del número de personas que participan, en
forma remunerada, en la realización del proyecto, especificando su cuantificación
(Sueldos) y la dedicación que se requiere en cada caso.
- Dietas: incluye los gastos por desplazamiento del personal (transporte, alojamiento y
alimentación), necesarios para realizar actividades fuera del lugar habitual de residencia.
- Imprevistos: en todo proyecto hay que prever una cierta cantidad de dinero para gastos
imprevistos. Esta suma se suele calcular sobre la base del 5% del total del presupuesto
de gastos.
Los indicadores de evaluación son los instrumentos que permiten comprobar con cierta
objetividad la progresión hacia las metas propuestas. Si carecemos de ellos, toda evaluación
seria inútil.
Los indicadores son “las medidas específicas y objetivamente verificables de los cambios o
resultados de una actividad.
Los indicadores sirven de patrón para medir, evaluar o mostrar el progreso de una actividad,
respecto a las metas establecidas y al logro de los objetivos.
Con el proceso de cierre se pretende finalizar formalmente el proyecto, sin dejar pendiente
ninguna actividad, es necesario adjuntar la documentación que verifica y justifica lo realizado
durante el desarrollo del proyecto, como: administración de personal, presupuesto financiero,
procesos de servicios utilizados en el proyecto, comunicación, contratos legales, entre otros.
El cierre del proyecto debe llevar: