Las Tablas Esmeralda

de Tresmegisto ó Thoth el Atlante

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 TABLA N° I

LA HISTORIA DE THOTH, EL ATLANTE

Yo, Thoth, el Atlante, Maestro de los Misterios, Guardia de los Registros, Rey
poderoso, y Mago, que he vivido de generación en generación, estando en el
momento de pasar a los Salones del Amenti, determiné escribir estas Tablas para
aquellos que han de venir: registros de la poderosa sabiduría de la Gran Atlántida,
a ellos las dejo como guía.

Desde la gran ciudad de KEOR, Egipto, escribo acerca de la isla UNDAL de la

Atlántida. En el lejano pasado comencé esta encarnación; no como los pequeños
hombres de la edad presente hicieron; no como esos poderosos de la Atlántida que
vivieron y murieron; yo podía vivir de un eón a otro eón, sabía cómo renovar mi
vida en los Salones del Amenti, donde el Río de la Vida fluye Eternamente y
progresivamente avanza.

Mil veces diez, he descendido por el camino oscuro que conduce a la luz, y tantas
otras veces he ascendido de las tinieblas a la luz, para que mi fuerza y poder
fueran renovados.

Ahora, por un tiempo he descendido y los hombres de KHEM no me conocerán

más, pero, a su debido tiempo, sin nacer surgiré de nuevo, poderoso y potente,
pidiéndole cuentas a aquellos que dejé detrás de mí. Por lo tanto, que se cuiden,
hombres de KHEM. Si falsamente traicionaron mis enseñanzas, les arrojaré de su
elevado cargo y caerán en las tinieblas de las cuevas de donde han venido. No
traicionen mis secretos, no se los den a los hombres del Norte, ni a los hombres
del Sur, pues entonces mi maldición caerá sobre Uds. Recuerden y escuchen mis
palabras, pues seguramente regresaré una vez más, y requeriré de Uds. aquello
que guardan. Desde mucho más allá del tiempo y más allá de la muerte Yo
regresaré, y La Ley les premiará o castigará de acuerdo a lo que hayan hecho con
lo que les confié.

¡Grande fue mi pueblo en los antiguos días! Más grande que lo que puede
concebir este pequeño pueblo que ahora me rodea; pues mi pueblo que conocía la
Sabiduría antigua, buscó dentro del corazón del Infinito, el conocimiento que
perteneció a la juventud de la Atlántida. Éramos sabios porque nos dieron su
Sabiduría “Los Hijos de la Luz”. Ellos vivían entre nosotros, éramos fuertes con
el Poder obtenido del Fuego Eterno; y de todos éstos, entre los más grandes de los
hijos de los hombres, estaba Thoth-Me, mi padre, el guardián del Gran Templo, el
eslabón entre “Los Hijos de la Luz”, que moraban dentro del templo, y las razas
de los hombres que habitaban las diez islas de la Atlántida. Él era el intérprete de
“Los Tres, y el Morador de UNAL”. Él le hablaba a los Reyes de la nación con la
voz que tiene que ser obedecida.

En UNAL crecí; de la niñez a la virilidad fui enseñado por mi padre en los

misterios antiguos, hasta que con el tiempo el fuego de mi sabiduría expandida se
rompió en un fuego consumidor. No deseaba yo otra cosa sino obtener la
sabiduría total, hasta que a mí llegó el llamado del Morador del Templo,
pidiéndome que me presentase ante Él. Pocos fueron entre los hijos del hombre
los que lograron ver Su Rostro sin morirse, porque “Los Hijos de la Luz” no son
como los hijos del hombre, cuando no están en cuerpos físicos.

Al fin llegó el día en que me mandó a buscar El Morador. Entre los hijos del
hombre fui Escogido y enseñado por El Morador para que sus Propósitos fueran
cumplidos, propósitos que no han nacido aún en la matriz del tiempo. Largos años
moré en el Templo de UNAL residencia del Morador, siempre aprendiendo y
ganando más sabiduría cada vez; hasta que me tocó acercarme a la Luz emitida
por el Gran Fuego. El me enseñó el camino para ir a Los Salones del Amenti, el
mundo subterráneo, en donde el gran rey se sienta sobre su poderoso trono. ¡Con
toda reverencia me incliné en homenaje ante los señores de la vida y de la muerte,
recibiendo como premio o regalo la llave del conocimiento de la vida!
Libre estaba yo en los Salones del Amenti, ya no estaba atado a la muerte por los
círculos dé la vida. Viajé más allá de las estrellas, hasta que el tiempo y el espacio
desaparecieron. Entonces, habiendo bebido el contenido de la Copa de la
Sabiduría, miré dentro de los corazones de los hombres y ahí encontré aún más
grandes misterios, y me regocijé, porque solamente en la búsqueda de la Verdad
podía mi alma ser aquietada y la llama interna ser saciada internamente.

Después, a través de las edades, viví viendo a mi alrededor a aquellos que

probaban de la copa de la muerte y volvían una vez más a la Luz de la vida.
Gradualmente, desde los Reinos de la Atlántida, pasaron las oleadas de
consciencia que fueron una conmigo, sólo para ser reemplazadas por la
humanidad de una estrella inferior.

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En obediencia a la Ley, la palabra del Maestro creció como una flor. Abajo hacia
las tinieblas se volvieron los pensamientos de los Atlantes, hasta que al final en su
ira se elevó su AGWANTI. El Morador pronunció la palabra, llamó al poder; y
desde las profundidades del corazón de la tierra, los hijos del Amenti la oyeron, y
enseguida dirigieron el cambio de la flor de fuego que Arde Eternamente,
cambiándola y desviándola, usaron EL LOGOS o palabra Sagrada, hasta que su
fuego cambió de dirección.

Entonces, sobre el mundo irrumpieron las aguas caudalosas ahogando, hundiendo

y cambiando el equilibrio de la Tierra hasta que solamente quedó “El Templo de
la Luz”, erecto sobre la gran montaña en UNDAL, todavía elevándose sobre las
aguas; algunos habían ahí gritado, y fueron salvados de las corrientes y de la
muerte.

El Maestro entonces me llamó, diciendo: “Reúne a mi gente, llévalos usando lo

que te he enseñado, llévalos lejos de estas aguas, hasta que lleguen a la tierra de
los bárbaros barbudos de KHEM, quienes moran en las cuevas de los desiertos.
Allí seguirás el plan que conoces”.

Después reuní a mi gente y entré en la gran nave del Maestro; en la mañana nos
elevamos, oscuro bajo nosotros estaba el Templo, súbitamente lo cubrieron las
aguas, desapareciendo de la tierra, hasta que llegó el tiempo señalado.
Rápidamente huimos hacia el sol de la mañana, hasta que debajo de nosotros
vimos la tierra de los hijos de KHEM. Enfurecidos, vinieron con garrotes y
espadas, llenos de cólera, buscando cómo matarnos y destruir a los Hijos de la
Atlántida. Entonces, levanté mi vara y emití un rayo de vibración, que se estrelló
sobre ellos dejándolos quietos como fragmentos de piedra en la montaña. Después
les hablé con calma y paz, diciéndoles del poder de los de Atlántida, contándoles
que éramos hijos del Sol y sus mensajeros. Ellos quedaron acobardados a mis
pies, cuando los libré del poder de mi rayo.

Largo tiempo vivimos en la tierra de KHEM, hasta que se hicieron obedientes a

los mandatos del Maestro; El, mientras tanto, dormía y vivía una Vida Eterna. Yo
envié algunos Hijos de la Atlántida en muchas direcciones para enseñar, de
manera que de la matriz del tiempo pudiera surgir la nueva sabiduría alcanzando a
más de sus hijos.
Por mucho tiempo moré en tierra de KHEM, haciendo grandes obras con la
sabiduría que había dentro de mí. Muy elevados y sabios crecieron los hijos de
KHEM con la Luz del Conocimiento, regados por las lluvias de mi sabiduría.
Hice perforar un sendero subterráneo hacia el Amenti, con objeto de poder retener
mi poder, viviendo de edad en edad como un Sol de la Atlántida, conservando la
sabiduría, y preservando los registros, y tener ese lugar para ir a recuperar mi
juventud y mis energías.

Poderosos crecieron los hijos de KHEM, conquistando a la gente de sus

alrededores, creciendo espiritualmente se elevaron por las Fuerzas de sus Almas.
Ahora, por un tiempo me alejaré de aquellos, para ir a los Salones de Amenti, que
están en las profundidades en los subterráneos de la Tierra, me veré ante los
Señores Poderosos, cara a cara y una vez más contemplaré al Morador...

Ese día me elevé bien alto, llegué a la entrada en donde había una puerta, después
seguía el camino que conduce al Amenti. Pocos hay que tengan el valor de
enfrentarlos, pocos son los que pasan por el portal oscuro del Amenti. Me elevé
sobre el pasaje, Yo era una poderosa pirámide, usé el poder que vence la fuerza de
la Tierra (gravedad)... Profundo, bien profundo, coloqué una cámara de fuerza
motriz o energía, con ella cavé un pasaje circular alcanzando la gran cumbre. Allí,
en la cúspide, coloqué en el hueco un cristal, enviando el rayo dentro del “Tiempo
—Espacio” del Amenti.

Otra cámara yo construí ahí y la dejé al parecer, vacía, sin embargo, dentro de ella
están ocultas las llaves del Amenti. Aquél que con todo valor se atreva a penetrar
los reinos de la oscuridad, tiene ante todo que purificarse con un largo ayuno,
acostarse en el sarcófago de piedra en mi cámara, y entonces le revelaré los
grandes misterios. Pronto me seguirá, lo encontraré, aún entre las tinieblas de la
tierra. Yo Thoth, Señor de Sabiduría, lo encontraré, lo defenderé y seré uno con él
siempre.

Yo construí la Gran Pirámide, diseñada con el mismo plan de la pirámide de

fuerza de la Tierra, que arde eternamente, para que también pueda permanecer a
través de las edades. En ese edificio guardé mi conocimiento de “La Ciencia
Mágica”, para que yo la encuentre nuevamente cuando regrese del Amenti. Oh sí,
mientras he dormido en los Salones de Amenti, mi Alma voló libre y encarné y
moré entre los hombres, en una forma o en otra.

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Soy emisario del Morador sobre la tierra, cumpliendo sus mandatos, para que la
humanidad pueda elevarse. Ahora regresaré a los Salones del Amenti, dejando
detrás de mí algo de mi sabiduría. Preserva y guarda por tu bien los mandatos del
Morador, eleva siempre muy por lo alto tus ojos hacia la luz. Seguramente a su
debido tiempo llegarás a ser uno con el Maestro, seguramente, pues por derecho
tú eres uno con el TODO.

Ahora, sepárate de mí, y conoce mis mandamientos, guárdalos y conviértete en

uno con ellos; y yo estaré contigo, ayudándote y guiándote hacia la luz.
Ahora, ante mí se abre el portal y desciendo a las tinieblas de la noche.
 TABLA N° II

LOS SALONES DE AMENTI

Muy profundo, en el corazón de la tierra, se encuentran los Salones del Amenti;

más allá de las islas sumergidas de la Atlántida, están los Salones de los Muertos
y Salones de los Vivos bañados por el fuego del infinito. ¡TODO!

En el pasado lejano, perdido en el espacio — tiempo, los Hijos de la Luz miraron

abajo hacia el mundo; vieron a los hijos de los hombres sufriendo con su
esclavitud, atados por la fuerza que vino del más allá; sabían ellos que solamente
libertándolos de la esclavitud podría la humanidad elevarse de la Tierra hacia el
Sol. Hacia abajo descendieron y crearon cuerpos haciéndolos a la semejanza de
los hombres.

Los Maestros que dominan todo el Poder y Sabiduría, dijeron después de formar
sus cuerpos: “Somos aquellos que se formaron del polvo cósmico ; tomando vida
del Todo Infinito; para vivir en el mundo como Hijos de los hombres, y sin
embargo diferentes a los hijos de los hombres”. Escogieron entonces un lugar
para vivir, más allá bajo de la capa terrestre, donde con su poder abrieron grandes
espacios, en lugares aparte de los hijos de los hombres. Se rodearon por fuerzas y
poderes, protegidos del mal, y de los Salones de los Muertos.

Entre un lado y el otro pusieron ellos otros espacios, llenándolos con los éteres de
Vida, y con la Luz de arriba. Después ellos construyeron sus Salones del
Amenti, para que pudieran morar allí eternamente, viviendo eternamente. Treinta
y dos están allí de los hijos de la Luz, quienes han venido a vivir entre la
humanidad buscando cómo liberar de la esclavitud de las tinieblas a los que
estaban atados por la fuerza del más allá.

En las profundidades de los Salones de Vida, creció una flor de luz, flameante, la
cual, expandiéndose, fue rechazando la noche. Colocaron en el centro un rayo de
Gran Potencia dador de Vida, dador de Luz, llenando con sus poderes a todo aquel
que se le acerque, golpearon tronos a su alrededor, tiene treinta y dos lugares,
uno para cada uno de los Hijos de la Luz, colocados de tal manera, que
constantemente les da la radiación, llena con la Vida de la Luz Eterna. De tiempo
en tiempo ellos dejan sus primeros cuerpos creados, sobre la Flor de Luz, de modo
que se llenen con el Espíritu de Vida Divina Infinita. Cien años de cada mil, Ellos

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tienen que buscar en la Flama de Luz, vida para sus cuerpos; la fuerza o poder de
esa luz, despierta y acelera El Espíritu de Vida en ellos.

En ese círculo se sientan de eón en eón, los treinta y dos Grandes Maestros,
viviendo una vida incomprensible y desconocida para los hombres. Ahí en los
Salones de Vida, duermen, a veces. libremente y entonces flotan sus Almas entre
los cuerpos de los hombres. De tiempo en tiempo, mientras sus cuerpos duermen
encarnan en cuerpos humanos. Entonces, enseñan y guían a la humanidad hacia
adelante y hacia arriba afuera de las tinieblas dentro de la Luz. Ahí en los Salones
de Vida, llenos con su Sabiduría, viven del fuego frío de la vida, ahí están
sentados los Hijos de la Luz. En las épocas en que ellos despiertan salen de las
profundidades para ser luces o soles entre los hombres, pues ellos son infinitos
entre los hombres finitos.

Aquel que a través del progreso crece elevándose sobre las tinieblas, se eleva
asimismo de la noche, hacia la Luz, se libera de los Salones del Amenti y de la
Flor de la Luz y de la Vida. Entonces, se guía por la Sabiduría y el Conocimiento
adquirido, pasando a ser de hombre a Maestro de Vida. Allí, él puede vivir como
uno con los Maestros, libre de las ataduras de las tinieblas de la noche.

Sentados cerca de otra flor radiante, están los siete Señores del Espacio- Tiempo,
los que existen encima de nosotros, ayudándonos y guiándonos con su Infinita
Sabiduría, hacia el sendero a través del tiempo conocido por los hijos de los
hombres. Poderosos y extraños, velados con su poder; silenciosos, con su
conocimiento atraen la Fuerza de Vida, de un modo diferente, no obstante, unidos
con los hijos de los hombres. Diferentes, y no obstante unidos con los Hijos de
la Luz.

Guardianes, y vigilantes de la fuerza que esclaviza al hombre, están listos para

liberarnos cuando alcanzamos la Luz. El Primero y Todopoderoso está sentado
con Su Presencia Velada. El, el Señor de los Señores, el Infinito, es el Número
Nueve, quien rige sobre los otros Señores de cada ciclo Cósmico, pesando y
vigilando el progreso de los hombres.

Debajo de Él, se sientan los Señores de los Ciclos: Tres, Cuatro, Cinco, Seis,
Siete y Ocho, cada uno con su misión, cada uno con sus poderes, guiando y
rigiendo los destinos del hombre. Ahí están sentados, Poderosos y Potentes, libres
del tiempo y del espacio, no de este mundo, sin-embargo semejantes a él. Son los
Hermanos Mayores de los hijos de los hombres. Juzgando y ayudando con su
Sabiduría, vigilan el progreso de la Luz entre la humanidad.

Ahí, ante ellos, fui conducido yo por el Morador, observé cómo se unían éste con
el UNO de arriba, entonces de El salió una voz que dijo: “Grande eres Thoth,
entre los hijos de los hombres. Libre por lo tanto de los Salones del Amenti,
excepto por tu voluntad, bebe de la Vida hasta el fin de la Eternidad. Por lo
tanto, la Vida Eterna, y la Muerte, son tuyas con la señal de tu mano. Mora aquí,
oh Sol del hombre: toma de la Vida en la forma que desees, Hijo de la Luz que
has crecido éntrelos hombres. ¡Elige tu trabajo, pues todas las almas deben
trabajar y jamás se libran del sendero de la Luz! Cada paso que avances te elevará
a la montaña, todo tu progreso extiende la meta, y te aproxima más y más a la
Sabiduría Infinita, delante de ti irá acortándose la meta. Libre eres ahora de los
Salones del Amenti, para caminar mano a mano con los Señores del mundo, cada
uno con un propósito, pero trabajando juntos, trayendo Luz a los hijos de los
hombres”.

Entonces de su Tono vino uno de los Maestros, y tomando mi mano me condujo a

través de todos los Salones escondidos profundamente en la tierra. Condújome a
través de los Salones de Amenti, mostrándome los misterios que son desconocidos
para el hombre. A través de los oscuros pasillos hacia abajo, me condujo dentro
del Salón donde se sienta la negra Muerte. Es un espacio muy vasto el que
conduce al gran Salón, rodeado por las tinieblas y sin embargo lleno con luz, la
luz material.

¡Ante mí; vi un gran trono de oscuridad, velada en él estaba sentada la noche. Más
oscura que la oscuridad, vi su gran figura, oscura como la negrura, pero no como
la de noche! Ante ella se detuvo el Maestro pronunciando las palabras que dan
vida, dijo: “Un maestro de las tinieblas, guía del camino de una vida a la otra vida,
anti Ti te traigo un Sol de la mañana, no lo toques jamás con el poder de la noche,
no llames su flama a las tinieblas de tu noche. Conócelo y míralo como uno de
nuestros hermanos, elevado de las tinieblas hacia la Luz. Libera su flama de tu
esclavitud, deja que brille libre a través de las tinieblas de la noche”.

Después se alzó la mano de aquella figura, y apareció mi flama que creció clara y
brillante. Se arrollaron velozmente las cortinas de las tinieblas, descubriendo el
Salón de las tinieblas de la noche. Después creció en el gran espacio ante mí, una
flama, después otras que salían del velo de la noche, incontables millones de ellas

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saltaron ante mí, algunas llameando como flores de fuego, otras daban una débil
sombra de radiación las cuales suavemente brillaban dentro de la noche. Vi
algunas que velozmente se esfumaban, otras que crecían de una pequeña chispa de
luz. Cada una rodeada por su débil velo de tinieblas sin embargo flameando con la
luz que jamás podía ser extinguida, viniendo y yendo como luciérnagas en la
época de primavera, estas flamas llenaban el espacio con Luz y con Vida.

Luego habló una voz, poderosa y solemne, diciendo: “Estas luces son las almas de
los hombres, creciendo de la muerte y hacia la vida. Cuando ellas crecen como
enormes flores, alcanzan el zenit de crecimiento en su vida, velozmente entonces
mando yo mi velo de tinieblas el que las cambia en nuevas formas de vida.
Constantemente marchan hacia arriba a través de siglos, creciendo, expandiéndose
en gigantes antorchas, que alumbran la oscuridad con sus poderes cada vez
mayores, libres y no obstante atrapadas por el velo de la noche. Así crece el Alma
del hombre, subiendo siempre sujeta y no sujeta por las tinieblas de la noche. Yo
la Muerte, vengo sin embargo no permanezco, porque la vida eterna existe en el
Todo; soy solamente un obstáculo en el camino, lista a ser conquistada por la luz
infinita. Despierta, Oh flama que ardes internamente, brilla y conquista el velo de
la noche”.

Entonces, en medio de las llamas, la oscuridad creció y de ahí salió una flama que
alejándose de la noche, flameó expandiéndose, siempre más brillante, hasta que al
fin no fue nada más que Luz. Entonces habló mi guía, la voz del Maestro: “Mira
a tu propia Alma cómo crece en la Luz, libre ahora para siempre del Señor de la
noche”.

Me condujo adelante por muchos espacios llenos de los misterios de los Hijos de
la Luz; misterios que el hombre todavía no conocerá, hasta que él también se
haya convertido en un Sol de la Luz. Hacia atrás El me condujo fuera de las
tinieblas al Salón de la Luz, luego me arrodillé ante los grandes Maestros, Señores
de todos los ciclos de arriba.

Habló El entonces con palabras de Gran Poder diciendo: "Has sido librado de los
Salones del Amenti, escoge tú el trabajo que prefieres hacer entre las criaturas del
hombre”. Entonces hablé yo: “Oh gran Maestro, déjame ser maestro del hombre,
conduciéndolo adelante y hacia arriba, hasta que ellos sean luces entre los
hombres. Quiero liberarlos del velo de la noche que los rodea, hacerlos
resplandecer con mi Luz que brillará entre los hombres”.
Hablóme entonces la voz: “Ve, de acuerdo con tu voluntad que así sea decretado.
Maestro eres tú de tu propio destino, libre de tomar o rechazar a la muerte a
voluntad. Toma el poder, toma la sabiduría, brilla como una luz entre la
humanidad”. Hacia arriba me llevó el llorador, yo regresé a servir y enseñar a la
humanidad mi sabiduría, Sol de Luz. Ahora nuevamente voy por el camino hacia
abajo, buscando la luz en las tinieblas de la noche.

Hermano, cuida y conserva tú mi archivo, que será guía para la humanidad.

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 TABLA N° III

LA LLAVE DE LA SABIDURIA

Yo, Thoth, el Atlante, dador de mi sabiduría, de mi conocimiento, dador de mi

poder, libremente lo doy a la humanidad. Se los doy para que ellos también tengan
sabiduría, brillen, y ese resplandor los guie a través del mundo en el velo de la
noche. Sabiduría es poder y Poder es sabiduría, uno con otro, perfeccionan el
todo.
No seas orgulloso, oh hombre, de tu sabiduría; habla con el ignorante, así como
con el sabio. Si alguno viene a ti, lleno de conocimiento, escúchalo y pon
atención, pues la Sabiduría lo es todo.

No te quedes silencioso cuando se hable del mal, pues la Verdad, como la luz del
sol, brilla por encima de todo. Todo aquel que viole la Ley será castigado, pues
únicamente obedeciendo la Ley viven y se sienten en libertad los hombres.

No causes el temor, pues el temor es una esclavitud, un grillete que ata las
tinieblas en los hombres. Sigue los dictados de tu corazón durante toda la vida,
haz más de lo que te ordena hacer.

Cuando hayan tenido riquezas, sigue los dictados de tu corazón, pues todo esto no
sirve de nada si hace que tu corazón sienta cansancio. Oye los dictados de tu
corazón y hagas lo que repugna a tu Alma.

Aquellos que son guiados, no son descarriados, pero aquellos que se pierden, no
pueden encontrar después un sendero recto. Si vives entre los hombres, vuélvete
Amor, que es el principio y fin del corazón.

Si alguien viene a ti a pedirte un consejo, déjalo que hable libremente, y así la

cosa por la cual viene a verte puede lograrse. Si ves que vacila en abrirte su
corazón es porque tú, el juez, has hecho algo indebido.

No repitas las cosas extravagantes que oigas ni tampoco las recuerdes después,
pues ésa es la expresión del lenguaje de uno que no está equilibrado. No hables de
ellos en una forma que él se sienta humillado, ayúdalo para que él aprenda la
sabiduría.

El silencio es de gran utilidad, una plática demasiado larga no es recomendable.

No te ensalces, no alabes tu corazón o tu vida por encima de las criaturas de los
hombres, pues el castigo es que seas puesto más inferior que el polvo.

Si quieres ser grande entre los hombres, ve que seas honrado por tu conocimiento
y tu bondad. Si buscas conocer la naturaleza de un amigo, no le preguntes a su
compañero, sino pasa algún tiempo viviendo con él. Discute con él probando su
corazón por sus palabras y por su conducta.

Aquello que llevas almacenado en conocimiento y amor, esas cosas que son tuyas,
volverán a ti multiplicadas si son compartidas con un amigo. El conocimiento es
considerado por el tonto como ignorancia, y las cosas que son beneficiosas, son
para él dañinas; ése vive en la muerte, por eso es la oscuridad su alimento.
El sabio deja que su corazón rebose de luz y de amor, pero mantiene su boca
cerrada.

¡Hombres! escuchen la voz de la sabiduría; escuchen la voz de la luz. Los

misterios que existen en el Cosmos, al descubrirse llenarán al mundo con su Luz.
Dejen que el que va a ser libre de la esclavitud de las tinieblas, adivine primero la
diferencia entre lo material y lo inmaterial, lo distinto entre el fuego y la tierra;
pues recuerda que, así como a la Tierra desciende lo que es terrenal, así también el
fuego asciende al fuego que está arriba y se vuelve ¡Uno! Todo aquél que sabe de
su propio fuego interno, sabe que tendrá que ascender y ser Uno con el Fuego
Eterno. El fuego interno es el más potente de todas las fuerzas, pues éste vence
todas las cosas, y penetra las cosas de la Tierra.

El hombre se sostiene, asimismo, solamente sobre aquello que resiste, así la Tierra
tiene que resistir al hombre, de lo contrario no existiría donde está. No todos los
ojos tienen el mismo grado de visión, pues para una persona un objeto aparece de
una forma y color, y es diferente para otra, así también el Fuego Infinito cambia
de color a otro color, y jamás es el mismo de un día a otro día.

Así hablo Yo, THOTH, de mi sabiduría para el hombre; ella es un fuego que arde
brillante en la noche, el que jamás se extingue en el velo de las tinieblas, y jamás
la apaga el velo de la noche.

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Dentro de los corazones de los hombres yo busco mi sabiduría, y no los encuentro
libres de la esclavitud de la lucha. Libérate de las fatigas, tu fuego, oh mi
hermano, o serás enterrado en las sombras de la noche.

¡Escucha, oh hombre! y oye esto. ¿En dónde cesan el hombre y la forma?

Solamente en conciencia invisible, una fuerza infinita de brillante radiación. Las
formas que tú creaste, iluminando tu visión, no son más que los efectos que le
siguen a tus causas.

El hombre es una estrella encadenada a un cuerpo físico, hasta que al final se

libere a su lucha. Solamente por el esfuerzo máximo y el trabajo constante,
lograrás que la estrella que está dentro de ti, florezca en una nueva vida. Aquél
que conoce el principio de todas las cosas, puede liberar su estrella de los reinos
de la noche.

¡Recuerda, oh hombre! ¡que todo aquello que existe es únicamente una forma de
la que aún no existe! Toda forma que existió pasó a lo que es hoy, y tú no eres una
excepción. Considera la ley, pues todo es Lev, no busques aquello que no es la
Ley, pues eso sólo existe en la ilusión de los sentidos.

La Sabiduría viene a lodos sus hijos, al mismo tiempo que ellos van a buscar la
Sabiduría. A través de las edades, la luz ha estado oculta: despierta, oh
hombre, y conviértete en un sabio.
En las profundidades de los misterios de la vida he viajado, buscando e
investigando aquello que está oculto. Escúchame, oh hombre; y sé sabio.

Lejos, debajo de la costra de la tierra, en los Salones del Amenti, yo vi los

misterios que están ocultos de los hombres.

Frecuentemente he viajado por los pasajes subterráneos bien profundos y ocultos,

he mirado la Luz, que es Vida entre los hombres. Ahí debajo de las flores de Vida,
siempre viví investigando los corazones, y los secretos de la humanidad. Encontré
que el hombre vive en las tinieblas, y la Luz del Gran Fuego está oculta
internamente. Antes de que los Señores de la oculta Amenti aprendieran la
sabiduría, yo se la di a la humanidad. Maestros son ellos de la gran Sabiduría
Secreta, traída del final del futuro de lo infinito.

Siete son ellos, los Señores del Amenti, soberanos de las criaturas de la Mañana.
Soles de los ciclos. Maestros de Sabiduría, los que no tienen forma humana, Tres.
Cuatro, Cinco, Seis, Siete, Ocho y Nueve son los títulos de los Maestros de los
hombres.

Lejos del futuro sin forma, y sin embargo formándose, vinieron como instructores
de la humanidad. Viven eternamente, sin embargo, no con la vida que ata a la
vida, Ellos son libres de la muerte. Ellos gobernaron por siempre con Sabiduría
Infinita, sin estar atados a los oscuros Salones de la Muerte.

Ellos tienen Vida, sin embargo, es otra clase de vida, libres de todo son los
Señores de Todo. Adelante de Ellos pasó el Logo de los Señores de Todo,
quienes tienen poder sobre todas las cosas. Inmenso es el aspecto de cada uno de
Ellos, sin embargo, se pueden esconder dentro de lo más pequeño, pues están
hechos con una forma cuya esencia es aún desconocida.

El número Tres, guarda la llave de toda la magia oculta, es el creador de los

Salones de la Muerte; enviando su poder que cubre con las tinieblas, atando las
Almas de los hombres, enviándoles tinieblas, atando la fuerza del Alma; es el
director de lo negativo contra toda la humanidad.

El número Cuatro es el que libera el poder, es el Señor de la Vida. De Luz es su

cuerpo llama es su rostro, es el liberador de las Almas de la humanidad.

El número Cinco es el maestro, el Señor de toda la magia, quien tiene la clave de

la palabra secreta. La PALABRA que repercute entre los hombres, como una
sinfonía de las esferas.

El número Seis es el Señor de la Luz, del sendero oculto, del sendero de las
Almas de las Criaturas de los hombres, quien nos guía a la liberación.

El número Siete es el Señor de la inmensidad, maestro del Espacio y de las llaves

de toda clase de Tiempos en diferentes dimensiones.

EL número Ocho es el que ordena el progreso, pesa y equilibra las acciones en el

viaje del hombre.

El número Nueve es el Padre, es inmenso e imperturbable, es el que forma de lo

que no tiene forma, y cambia lo que tiene forma a lo que no tiene forma.

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Medita en los símbolos que te he dado aquí, claves que han estado ocultas para el
hombre. Sigue subiendo hacia arriba, oh Alma del amanecer, vuelve tus
pensamientos hacia arriba, a la Luz, y a la vida. Encuentra en las llaves de
estos números que te traigo, la luz en tu sendero de una vida a otra vida.

Busca con sabiduría, vuelve tus pensamientos internamente, no cierres tu mente a

la Flor le la Luz.

Coloca en tu cuerpo una forma de pensamiento, piensa en los números que te

trajeron la vida. Claro es el sendero para aquel que tiene sabiduría, abre la puerta
al Reino de Luz. Derrama su flama como un Sol de la mañana, ciérrate a las
tinieblas y vive en el día.

Toma la Sabiduría, oh hombre, como una parte de tu ser, al Señor número Siete,
que no es lo que parece. Te doy, oh hombre, mi sabiduría, sigue el sendero en el
camino que te he marcado.

¡Maestros de Sabiduría, Sol de la MAÑANA, LUZ y VIDA para los hijos de los
hombres!
 TABLA N° IV

NACE EL ESPACIO:

Escucha, oh hombre, a la voz de la sabiduría, escucha mi voz de Thoth, el Atlante.

Libremente yo doy de mi sabiduría, lograda a través del tiempo y del espacio de
este ciclo, de los Maestros de los Misterios, viviendo yo eternamente, como un
hijo de la Luz, brillando con la brillantez de la estrella de la mañana. Yo Thoth, el
Maestro de la humanidad lo Soy de todos.

Hace mucho tiempo Yo, en mi niñez, estaba recostado bajo la comba del cielo, vi
a lo lejos las estrellas que otras noches brillaron sobre la sepultada ATLANTIDA,
soñando en misterios incomprensibles para los hombres. Entonces, en mi corazón
surgió un gran anhelo de conquistar el sendero que conduce a las estrellas. Año
tras año, busqué la sabiduría, buscando nuevos conocimientos, siguiendo el
camino, hasta que al fin mi ALMA haciendo un gran esfuerzo, rompió la
esclavitud a la que estaba atada. LIBRE quedé de la esclavitud del hombre—
terrenal libre del cuerpo físico y volé a través de la noche. Libre de la esclavitud
de la noche, entonces, hasta el fin del espacio busqué sabiduría, más allá del
conocimiento del hombre finito.

Lejos en el espacio, mi ALMA viajó libremente dentro del círculo infinito de la

luz. Extraños, desconocidos por la humanidad, vi algunos de los planetas
gigantescos, más allá de los sueños de los hombres. No obstante, encontré La
Ley, con toda su belleza, trabajando a través y dentro de la belleza infinita, lejos y
a través del espacio, volé con mis pensamientos.

Descansé ahí, en un planeta de belleza; notas de una música divina llenaban el

aire; ahí había formas, moviéndose en orden, grandes y majestuosas como
estrellas en la noche; basadas en armonía, en equilibrio, ordenado, símbolos son
de lo Cósmico, como lo son de La ley.

Muchas de las estrellas que pasé en mi viaje, tenían razas humanas en sus
mundos; algunas estrellas alcanzando enorme altura como las estrellas de la
mañana y otras luciendo muy bajo en la negrura de la noche. Cada una y todas
ellas, esforzándose en ir hacia arriba, ganando las alturas; y otras cayendo
verticalmente a las profundidades; moviéndose otras a veces en reinos de

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brillantez, viviendo en las tinieblas, ganando la luz.

Aprende, oh hombre, que la luz es tu herencia, aprende que la oscuridad es sólo

un velo, sellando en tu corazón la Brillantez Eterna de tu luz esperando el
momento para conquistar la libertad, esperando romper el velo de la negación.

Encontré que algunos hombres habían conquistado el éter, y viajaban libres en el

espacio, mientras que existían aún como hombres. Ellos usan la fuerza que es el
cimiento de TODAS las fuerzas que fluyen a través del Todo; condensándola la
fundieron en el éter, en unas formas que crecieron como ellos querían. Aventajan
en ciencia a todas las razas, poderosos en sabiduría son los hijos de las estrellas.

Por largo tiempo me detuve ahí vigilando y aprendiendo su sabiduría, los vi crear
del éter, ciudades gigantescas color de rosa y color oro; formadas del elemento
primordial, la base de todo lo material, el éter, esparcido y dominado por ellos.

Anteriormente estos hijos de las estrellas conquistaron el éter, y se liberaron de la

esclavitud del trabajo; hacían esto formando un cuadro mental y rápidamente lo
hacían crecer.
Luego mi alma avanzó a través del Cosmos, viendo siempre cosas nuevas
y viejas, aprendí que el hombre es verdaderamente nacido del espacio, que él
es un Sol del Sol, un hijo de las estrellas.

Aprende, oh hombre, que no importa el cuerpo que habitas, siempre serás uno con
las estrellas. Sus cuerpos visibles e invisibles no son más que planetas, que giran
alrededor de sus soles centrales. Cuando hayas obtenido la luz de toda la
sabiduría, serás libre para brillar en el éter, serás uno de los Soles que iluminan las
tinieblas externas, uno de los nacidos en el espacio creciendo en la luz. Así
como las estrellas con el tiempo pierden su brillantez, pasando la luz de ellas a la
gran fuente; así, oh hombre, tu alma sigue hacia adelante, dejando atrás la
oscuridad de la noche.

Formado fuiste del éter primordial; lleno con la brillantez que fluye de la fuente,
atado con el éter fundido en todo lo que te rodea, siempre flameando hasta que al
fin te libera. Eleva tu flama de las tinieblas, aléjate de la noche y te liberarás.

Yo viajé a través del espacio—tiempo, conocí a mi Alma y al fin quedé libre; supe
que ya podía poseer la sabiduría, tan pronto pasase al plano oculto de todos,
desconocido por todos, el cual se extiende mucho más allá de lo que conocemos.
Ahora, oh hombre, cuando tuve este conocimiento, mi Alma creció feliz, pues
ahora me consideraba libre. Escucha, Tú, nacido del espacio, escucha mi
sabiduría, ¿no sabes que tú también serás libre?

Escucha nuevamente humanidad, a mi sabiduría, que oyendo tú también podrás

vivir y ser libre. Tú no eres de la tierra no eres terrestre, sino hijo de la luz
Cósmica Infinita. ¿Ignoras, oh hombre, tu herencia? ¿Ignoras que tú eres
verdaderamente La Luz? Eres un Sol del Gran Sol; lo verás cuando obtengas
sabiduría, y estés verdaderamente consciente de tu semejanza con La Luz.

Ahora a ti te doy conocimiento, libertad y poder, para caminar en el sendero que

yo he caminado, mostrándote verdaderamente cómo por mi esfuerzo caminé el
sendero que conduce a las estrellas. Pon atención, oh hombre, y reconoce tu
esclavitud, aprende cómo liberarte tú mismo de tus ataduras. De las tinieblas
tendrás que elevarte hacia arriba, ser uno con la luz, y uno con las estrellas.
Sigue siempre el Sendero de la Sabiduría, sólo así se puede uno elevar desde
abajo. Todo el destino conduce al hombre hacia arriba, dentro de las Curvas del
Todo Infinito.

Conoce, oh hombre, que todo en el espacio está ordenado, es únicamente por ese
orden que tú eres uno con Todo. El Orden y el balance son las Leyes del
Cosmos, síguelas y serás Uno con el Todo.

Aquél que sigue el Sendero de la Sabiduría, debe abrirse y entregarse a la flor de

la vida, extendiendo su conciencia fuera de las tinieblas, subiendo y fluyendo a
través del tiempo y del espacio en el Todo.
Primero debes de entrar en un profundo silencio hasta que al final te
liberes del deseo, libre de todos los anhelos, para hablar en silencio, conquistando
por medio del silencio la esclavitud de las palabras. Abstente de comer, hasta que
pierdas el deseo por el alimento, eso también esclaviza el Alma.

Después, acuéstate en las tinieblas, cierra tus ojos a la claridad física. Centra la
fuerza de tu Alma en la pineal, el lugar de tu conciencia, sacúdela hasta que la
liberes de las ataduras de la noche. Pon en tu mente la imagen de lo que deseas
hacer, haz un cuadro del lugar que deseas ver en el astral, vibra hacia atrás y hacia
adelante con todo tu Poder, libera el Alma de su noche. Sacúdela con violencia y
con todo tu poder, hasta que al fin tu Alma quede libre y se proyecte.

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Poderosa más allá de las palabras es la Flama Cósmica, cuelga gigantesca en
planos desconocidos para el hombre, poderosa y equilibrada se mueve
ordenadamente como la música de las esferas; muy alejada del hombre. Hablando
con música, cantando con color, ha flameado desde el principio de la Eternidad
del Gran Todo.

Tú eres una chispa de la llama, Hijo mío, vive dentro del resplandor del color, y
vive en la música; escucha mi voz y serás libre. La consciencia cuando es libre, se
funde con lo Cósmico, se hace Uno con el Orden y la Ley del Todo. Repite esta
oración para obtener sabiduría, para que la venida de la luz alcance a Todos.

“Poderoso Espíritu de Luz que brillas a través del Cosmos, atrae la llama de mi
alma hacia tu armonía, eleva mi fuego fuera de las tinieblas, úneme a ti, oh
magneto de fuego que eres Uno con el Todo. Eleva mi Alma, Tú, poderoso y
potente Hijo de la Luz, no te apartes de mí, acércame más para poder fundirme
en tu hoguera, dentro de ella, Tú eres Uno con todas las cosas y todas las cosas
son Uno con el fuego abrasador y Uno con la Mente”.

Cuando hayas liberado tu Alma de su esclavitud, sabrás que para ti, las tinieblas
habrán desaparecido para siempre; y desde entonces a través del espacio podrás
buscar la Sabiduría, ya no estarás atado por cadenas que forjan la carne.

Adelante y hacia arriba, hacia el amanecer, brilla libremente, oh Alma, elévate

hacia los Reinos de Luz. Muévete en el orden, muévete en la armonía; libremente
te moverás con los Hijos de la Luz.

Conócete a ti mismo, mi LLAVE de la Sabiduría, oh hombre, seguramente te hará

libre.

.
TABLA N° V

EL MORADOR DE UNAL.

Muchas veces soñé con la sepultada Atlántida, oculta en las edades perdidas en la
noche. Eones y eones existió su belleza, como una luz brillante en las tinieblas de
la noche. En una de sus ciudades, Unal, vivía un Maestro Poderoso; gobernaba la
Tierra recién nacida, era el Señor de la Tierra en los días de la Atlántida. Era rey
de las naciones, maestro de sabiduría. ¡Luz a través de SUNTAL! Como guardián
del Sendero moró en su TEMPLO el MAESTRO de UNAL. LUZ de la Tierra en
los días de la Atlántida. Su nombre era Horlet.

Era el Maestro de un ciclo mucho más adelantado que la Atlántida, pero vivía en
un cuerpo como los demás hombres. No como los nacidos de la Tierra de un padre
y una madre. Él era Sol de un ciclo mucho más adelantado que los hombres de ese
tiempo. Tenía un cuerpo globular luminoso.

Sabe, oh hombre, que HORLET el Maestro jamás fue como uno de los hijos de
los hombres. Lejos en el pasado del tiempo, cuando la Atlántida primero creció
como un poder, apareció El allí, dueño de la LLAVE de la SABIDURÍA, para
mostrar el camino de la Luz a todos los Atlantes.

A esos hombres les enseñó el sendero del logro, el camino de la Luz que fluye
invisible entre los hombres. Podía dominar las tinieblas y conducir las ALMAS
de los HOMBRES hacia arriba a las alturas; para que fueran Uno con la
Luz.
Dividió los Reinos en secciones, y éstos fueron diez, gobernados por el pueblo. En
otro lugar, El construyó un TEMPLO, pero éste no fue construido por el pueblo.

Del ETER, El obtuvo la substancia con la cual moldeó y formó, usando el poder
de ITQLAN y dándole forma. Él lo construyó con SU mente. Milla por milla fue
cubriendo la isla, espacio sobre espacio creció en Su poder. En el espacio negro, o
sea en la luz material de la Tierra, Él vivía igual de oscuro como es el espacio-
tiempo. Pero profundo en su corazón llevaba Él la ESENCIA de la LUZ Divina.
Rápidamente el TEMPLO fue desarrollándose, moldeado y formado con el poder
de la PALABRA del MORADOR, o sea Horlet, quien pudo atraer lo invisible y
darle forma material.

Después construyó, dentro del templo, grandes recámaras, salones, los cuales
llenó con formas mentales que atrajo del ETER, y a estas estatuas las llenó con
Sabiduría que sacó de Su mente. Él no tenía forma en su TEMPLO; aunque fuera
de su TEMPLO aparecía a la imagen del hombre. Viviendo entre ellos, y no
siendo de ellos, extraño y muy diferente a todos era El, Horlet.

Después, El escogió entre el pueblo a TRES personas o consejeros que se

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convirtieron en un medio de comunicación. Estos Tres Mensajeros los escogió
entre los más adelantados para servirle de eslabones entre Él y el pueblo de
Atlántida. Ellos fueron los mensajeros que llevaron sus consejos a los reyes de la
humanidad. Eran sus representantes.

Luego El escogió a otros y les enseñó la Sabiduría y éstos fueron después los
maestros del pueblo. El los colocó en la lsla de UNDAL, para servir como
maestros de Luz a su pueblo. Así fue como UNDAL se convirtió en el convento
de los Instructores.

Cada uno de esos que fueron escogidos, enseñaron por espacio de cinco y diez
años, pues únicamente éstos que tenían el conocimiento podían llevar la Luz a su
pueblo. Así fue como vino el Templo de Unal a ser el lugar en donde vivía el
Maestro de los hombres, El Morador, Horlet.

YO THOTH, siempre busqué la sabiduría, en las tinieblas y en la Luz. Por mucho

tiempo en mi juventud viajé por el sendero buscando siempre nuevo conocimiento
que obtener, hasta que después de mucho esfuerzo, uno de los TRES
Representantes del Morador me trajo luz. Él me llevó ante EL MORADOR, en lo
más profundo del Templo, éste estaba frente a un Gran FUEGO, o sea la llama de
Maxin.

Ahí, en el gran trono, vi al MORADOR, vestido con LUZ y resplandeciendo

frente al fuego. Enseguida, ante Esa gran Sabiduría me arrodillé, sintiendo SU
LUZ penetrándome, ¡fluía a través de mí como oleadas! Luego oí la voz del
MORADOR: “Oh tiniebla, entra dentro de la Luz. Por mucho tiempo has estado
buscando el sendero de la Luz. Cada alma sobre la Tierra que se libera de sus
grilletes se hace libre de la esclavitud de la noche. De las tinieblas has surgido, y
te has aproximado a la Luz, tu meta.

Aquí, tu morarás como uno de mis hijos, y serás el guardián de los registros
recolectados por los sabios, y de ahora en adelante serás el instrumento de LA
LUZ. Listo debes estar, para hacer lo que se necesita, preservador serás de la
sabiduría a través de las edades de tinieblas, que rápidamente vendrán sobre los
hijos de los hombres. Vive aquí y bebe de toda la sabiduría, de todos los secretos
y misterios; hasta que hayas roto todos los velos”.

Después yo le contesté al MAESTRO de los CICLOS, diciendo: “Oh Luz que

desciendes a la humanidad, dame de tu Sabiduría; para que pueda ser instructor
de los hombres, dame Tu LUZ, para que pueda ser libre”.

Luego me habló nuevamente el Maestro: “De edad en edad vivirás a través de tu

sabiduría, hasta que las olas del océano sepulten a la Atlántida, tú retendrás la
Luz, aunque esté oculta en las tinieblas, y estarás listo para surgir de nuevo
cuando seas llamado. Anda ahora y aprende más; crece a través de la LUZ hacia
la Infinitud del TODO”. Por mucho tiempo moré en el Templo del Maestro
Horlet, hasta que al fin fui UNO con la LUZ.

Entonces seguí el sendero hacia los planos de las estrellas; y el sendero hacia la
LUZ. profundamente dentro del corazón de la tierra seguí otro camino,
aprendiendo los secretos de abajo como los de arriba; aprendiendo también en
los SALONES del AMENTI; aprendiendo la LEY que equilibra el mundo. En
los ocultos subterráneos de la tierra yo penetré, por mi sabiduría, profundamente,
a través de la costra de la tierra, dentro del sendero oculto por edades de la
humanidad. Descubierta quedaba ante mí cada vez más sabiduría, hasta que
alcancé un nuevo conocimiento, encontrando que todo es parte de un todo, grande
y aún más grande que todo lo que conocemos. Yo busqué la infinidad en el
corazón a través de lo profundo, encontré más misterios.

Ahora, cuando miro ese pasado a través de las edades, reconozco que la sabiduría
es ilimitada, y que siempre crece más y más a través de las edades. Una es con la
más grande Infinitud del Todo.

A pesar de que había Luz en la antigua Atlántida, las tinieblas también existían
ocultas en todo. De la LUZ descendieron dentro de las tinieblas algunos que
habían terminado su evolución, aquí se habían elevado sobre los hombres.
Orgullosos se sentían debido a su gran conocimiento, orgullosos convivieron con
el pueblo. Sabiamente podían discutir acerca de lo prohibido; pero fueron ellos los
que abrieron la puerta que conduce hacia abajo; tratando de buscar aún más
conocimiento, pero tratando de atraer y dominar a los seres que iban entrando a la
Atlántida.

Todo aquél que quiere descender, tiene antes que haber obtenido el más perfecto
equilibrio; de lo contrario quedaría atado por falta de la Divina Luz. Ellos
abrieron entonces, usando su poder y conocimiento, senderos prohibidos a los
hombres, desobedecieron La Divina Ley y la negación entró.

23
Pero en Su Templo de Unal, todo lo sabía el MORADOR, permaneciendo en
estado de AGWANTI, o sea el Tercer estado de Samadhi. Mientras su alma
vagaba libremente, vio como los Atlantes mal usando la magia que los
Instructores les habían enseñado, usaron este poder para abrir la puerta de un gran
enemigo. Rápidamente bajó el alma de Horlet, el Morador, ocupó su forma física,
salió de su estado de trance y llamó a sus tres Poderosos mensajeros o
representantes y dio la orden de sepultar a la Atlántida bajo las aguas.

Entonces, debajo de la costra de la tierra descendió el Morador, fue a los

SALONES de AMENTI. Horlet, luego, usando los poderes de los Siete Señores,
cambió el equilibrio de la Tierra, sumió a la Atlántida debajo de las oscuras olas,
después que vio fuera de peligro a sus Instructores. Clausuró la puerta que había
sido abierta, cerró la entrada que conducía a los mundos subterráneos. Todas las
islas fueron sepultadas excepto UNAL, y parte de la isla UNPAL, la de los hijos
del MORADOR. Los protegió para que siguieran siendo los instructores, luces en
el sendero para aquellos que vinieron después, luces para los hijos menores de
la humanidad.

Luego, EL MORADOR me llamó a mí THOTH, y me dio las órdenes de lo que se

debería hacer, diciendo: “Toma tú, Oh THOTH, toda tu sabiduría, toma todos tus
registros, toma toda tu magia, y condúcete como un instructor ante los hombres;
ve y cuida los registros hasta que llegue el tiempo, en que la Luz crezca ante los
hombres. Tú serás la Luz oculta a través de todas las edades, y sin embargo será
encontrada por los hombres iluminados. Sobre toda la tierra te damos poder, para
darla o quitarla. Reúne ahora a los Instructores de la Atlántida, reúnelos y huye
con el pueblo a las cuevas de rocas, y luego vuela a la tierra de los Hijos de
KHEN”.

Después, reuní a los hijos de la Atlántida dentro de una nave, llevé todos mis
registros, y también los registros de la sumergida Atlántida, reuní todos los
instrumentos de mi poder, muchos de ellos de poderosa magia.

Hacia arriba nos elevamos en las alas de la mañana, alto, muy alto, subimos
encima del Templo de Unal, dejando ahí a los TRES Divinos Maestros y al
Morador, en los subterráneos de los SALONES debajo del TEMPLO. Debajo de
las olas desapareció el gran TEMPLO, cerrando el camino a los SEÑORES de los
Ciclos, no obstante, para aquél que tiene el conocimiento, siempre estará abierto el
sendero de AMÉNTI.

Rápidamente volamos en las alas de la mañana, hacia la tierra de los hijos de

KHEM, Egipto. Aquí, con mi poder los conquisté y los goberné, elevando a los
HIJOS de KHEM a la LUZ.
Debajo de las rocas, en un subterráneo espacioso, enterré mi nave y ahí
espera para surgir en el momento en que el hombre será libre. Sobre la nave
construí una marca en la forma de un león, con algo de ser humano, ahí debajo de
la Esfinge descansa, pero mi nave será sacada de nuevo cuando sea necesario.

Aprende, tú, hermano, que en un futuro lejano vendrán invasores de lo más alto y
de los subterráneos, entonces despertarán todos Uds. los que tienen la Sabiduría,
desenterrarán mi nave y podrán conquistar con facilidad.

Bien hondo debajo de la imagen de la Esfinge yace mi secreto, buscando bien la

encontrarán en la pirámide que yo construí en Egipto. En una y otra está la Clave;
una piedra es la puerta que conduce a la verdadera Vida. Sigue la clave que dejo
detrás de mí, busca la puerta hacia LA VIDA y será tuya. Busca en mi pirámide,
profundamente en el pasaje que termina en una pared, utiliza la LLAVE de los
SIETE, y se abrirá para ti, mostrándote el sendero iluminado.

Ahora, a ti te he dado mi sabiduría, ahora a ti he mostrado el camino; sigue el

sendero, resuelve tú mis secretos, a ti te he mostrado el camino.

25
 TABLA N° VI

LA LLAVE DE LA MAGIA
Escúchame, aprende sobre la sabiduría de la magia, basada en el conocimiento de
los poderes olvidados. Hace mucho, mucho tiempo, en la época del hombre
primitivo, una guerra comenzó entre las tinieblas y la luz. Los hombres, entonces
como ahora, estaban llenos de tinieblas y de luz; pero mientras en algunos las
tinieblas los cubría del todo, en otros la luz llenaba su alma por completo.

Siempre ha existido esta guerra, la eterna lucha entre las tinieblas y la luz. Con
toda ferocidad se ha peleado a través de todas las edades, utilizando a veces
extraños poderes que desconoce el hombre actual.

Han existido Adeptos de la Magia Negra, quienes han luchado siempre contra la
luz; pero también ha habido otros Maestros llenos de brillantez, los que siempre
han luchado por conquistar las tinieblas. Donde quiera que hayas estado, en todas
las épocas y planos, seguramente habrás sido testigo de la batalla contra las
tinieblas. Hace muchas edades, LOS SOLES de la Mañana descendieron a la
Tierra, y encontraron al mundo lleno de negrura.

Desde un pasado remoto comenzó la lucha entre las tinieblas y la luz. Muchos
seres humanos en aquellos tiempos estaban tan llenos de tinieblas que solamente
una débil llamita de luz quedaba en sus almas, perdidos en la más completa
negación.
Algunos de ellos eran Magos negros o Xianeses que se esforzaban por llenarlo
todo con su poder; tratando de conducir a otros dentro de su terrible noche. Con
toda fiereza ellos, los Maestros de Luz, han peleado para eliminar las
tinieblas, mientras los enemigos nos aprietan los grilletes y las cadenas que atan y
arrastran al hombre al dolor y martirio de las Tinieblas. Ellos siempre han usado
la magia negra, traída a la humanidad por los poderes de las tinieblas, magia que
amortaja al alma del hombre.

Unidos en bandas o partidos, los HERMANOS DE LAS TINIEBLAS a través de

las edades, han sido los antagonistas de los hijos de la humanidad. Ellos siempre
caminan escondidos secretamente, con poder para volverse invisibles, o cambiar
de apariencia; eran encontrados, y sin embargo desaparecían ante el terror de los
hijos de los hombres.
Eternamente han caminado y trabajado en tinieblas, alevosamente ocultos de la
luz, son dueños de las tinieblas de la noche. Silenciosamente, secretamente, ellos
utilizan sus poderes, esclavizando y atando a las almas indefensas de los humanos,
en cualquier lugar o tiempo. Sin ser vistos vienen, y sin ser vistos se van; y el
hombre en su ignorancia, algunas veces los llama desde abajo para hacer
sortilegios.

Oscuro es el camino que viajan los HERMANOS NEGROS, más oscuro que la
negrura de la noche, viajan a través de toda la tierra y el espacio, se meten en
la mente humana a través de los sueños de los hombres. Ellos tienen el poder
dentro de las tinieblas que les rodean, para llamar a otros infames moradores fuera
de su plano. Ellos tienen poder para dirigir y enviarlos por los caminos que son
negros e invisibles para el infeliz hombre. Los HERMANOS NEGROS penetran
dentro del espacio-mente del hombre, y alrededor ellos pueden cerrar sobre él el
velo de su noche. Así, por el resto de toda su vida esa Alma obsesa mora en
esclavitud, atada a los grilletes del VELO-todo-poderoso del mal. Poderosos son
ellos en su conocimiento diabólico prohibido, prohibido porque esclaviza,
atormenta, es uno con la peor negación.

Escucha, y fíjate en mi advertencia, procura vivir libre de la esclavitud de la

noche. No le entregues tu Alma a los Hermanos de las Tinieblas yendo contra las
Leyes Divinas, procura que tu cara siempre mire hacia la LUZ. Los HERMANOS
de las TINIEBLAS buscan a tus Hermanos, a los que están viajando el sendero de
la LUZ. Bien saben ellos, que aquellos que viajan acercándose al SOL en su
camino hacia la Luz, tienen grandes poderes; razón mayor para atarlos con
tinieblas, obsesando a los Hijos de la LUZ.

Escúchame. Todo aquél que venga hacia ti, estúdialo, pesa sus acciones, haz un
balance, ve si sus palabras son de LUZ; pues muchos son los que caminan en la
OSCURA BRILLANTEZ con apariencias de Santos y sin embargo no son los
Hijos de la Luz.

Muy fácil es seguir el mal camino, fácil seguir el sendero que ellos llevan, pero de
todos modos, oh hombre, escucha mi advertencia: LA LUZ SOLO LE LLEGA
A AQUEL QUE SE ESFUERZA. Difícil es el verdadero sendero que conduce a
la Sabiduría, difícil es el camino que lleva hacia la LUZ. Muchos encuentran en
él los obstáculos que los lastiman y hacen caer, muchas son las montañas que hay
que subir hacia LA LUZ. No obstante, aprende, aquél que vence y es libre, será de
vivir en el camino de la LUZ.
NO sigas nunca jamás a los HERMANOS de las TINIEBLAS, sé siempre un hijo
de la LUZ. Pues debes saber, oh hombre, que al final la Luz lo conquistará todo; y
a las tinieblas de la noche las disipará la LUZ.

Escúchame hermano, y cuida esta sabiduría; de donde salió la oscuridad salió la

LUZ. Cuando las tinieblas desaparezcan y todos los Velos sean rotos, la luz se
tragará las tinieblas, resplandecerá dentro de la LUZ.

Así como existen entre la humanidad LOS HERMANOS NEGROS, así también
existen los HERMANOS DE LA LUZ. Estos antagonizan a los HERMANOS de
las TINIEBLAS, tratando de liberar al hombre de la noche, o negación. Ellos
tienen poderes, son poderosos y grandes, porque conocen LA LEY, los obedecen
los planetas. Ellos siempre trabajan con la armonía, dentro del Orden, liberando al
ALMA del hombre de la esclavitud del error, Secretos y ocultos, caminan los
Maestros de la Luz, ellos también sin ser reconocidos por la humanidad. Sin
embargo, debes saber que Ellos siempre caminan contigo, mostrándote el
CAMINO. Ellos siempre han luchado contra LOS HERMANOS DE LAS
TINIEBLAS, siendo conquistados y conquistando en una lucha sin fin. Pero al
final la LUZ será la que domine siempre, eliminando las tinieblas maléficas con
su Gran Poder.

Hermano, debes saber que siempre a tu lado, camina algún Hijo de la Luz.
Ellos son Maestros del Poder del SOL, aunque invisibles, son los guardianes de
la humanidad. Abierto ante todos está su camino, abierto para aquél que quiere
caminar en la LUZ. “Esos quedarán libres de la oscuridad de AMENTI, libres
para entrar en los SALONES, donde LA VIDA Reina Suprema. Ellos se volverán
SOLES y SEÑORES de la mañana, Hijos de la Luz para brillar entre los
hombres. Ellos aún son como el hombre, y no obstante ya son diferentes, dejaron
de sentirse divididos como en el pasado. ¡Uno han sido ellos, en la UNIDAD
Eterna, a través de todo el espacio desde el principio del tiempo! De Arriba
vinieron en UNIDAD con el Todo, con el Uno, ahí arriba del Primer espacio
Formado y que sin embargo no tiene forma.
Esos Maestros de la Luz le dieron sus secretos a los que los pueden guardar y los
protegerán de todo daño. Aquél que quiere viajar el sendero de un maestro, tiene
que estar libre de la esclavitud del pecado. Él tiene que conquistar lo que no tiene
forma ni figura, tiene que conquistar el fantasma del miedo. Tiene que obtener
todos los secretos, todo el conocimiento, viajar el sendero que conduce a través de
las tinieblas, conservándose siempre ante la Luz de su Ideal, de su Meta. ¡Se
encontrará con grandes obstáculos en el sendero, no obstante, tiene que
presionar sobre la LUZ del SOL, luchar! Escúchame, el SOL es el símbolo de
la LUZ, la cual resplandece al final de tu camino.

Ahora te he dado los secretos, para que puedas enfrentarte con el poder negro,
enfrentarte y conquistar el miedo de la noche. Sólo conociendo puedes
conquistar. Sólo conociendo puedes obtener la LUZ.
Ahora te he dado cierta enseñanza conocida por los MAESTROS, el
conocimiento que conquista todos los temores oscuros. Utiliza esta sabiduría que
te doy, y serás MAESTRO sobre los HERMANOS de la NOCHE.

Cuando llegue a ti la sensación de estarte acercando a la puerta oscura, examina

tu corazón, y trata de encontrar si la sensación que tienes ha venido desde
adentro. Si encuentras que tus propios Pensamientos son oscuros, elimínalos de
tu mente. Manda a través de tu cuerpo una oleada de vibración, primero
irregular, más intensa después, repitiéndolo una y otra vez, hasta que quedes
libre de esto. Principia LA OLEADA DE FUERZA en el CENTRO DE TU
CEREBRO, dirígelo en ondas de tu cabeza a tus pies. Visualízala luz blanquísima
y brillante que baja y te cubre.

Y si al llegar a tu corazón ves que en él hay tinieblas, es entonces seguro que una
fuerza malévola está siendo dirigida hacia ti. Sólo conociendo el peligro puedes
vencerlo, sólo por medio de la sabiduría puedes esperar ser libre. El conocimiento
trae sabiduría y la Sabiduría es Poder, logra esta sabiduría y tendrás poder: sobre
todo Véncete a ti mismo y vencerás toda tiniebla.

Busca primero, un lugar, un cuarto sin luz, traza un círculo a tu alrededor con un
cuchillo, o con incienso, permanece de pie en medio del círculo unos minutos,
utiliza esta fórmula y te sentirás libre. Levanta tus manos ahí donde estás, eleva
tus brazos por encima de ti, cierra tus ojos y mentalmente atrae LA LUZ
invocándola.
¡Llama al ESPIRITU de la LUZ que está en el Espacio-Tiempo! repite estas
palabras y serás libre: “Llena mi cuerpo. OH ESPIRITU DE VIDA, llena mi
cuerpo con el ESPIRITU de tu LUZ, ven de la FLOR luminosa que brilla entre las
tinieblas”. Nómbralos por su nombre. “El Tres, el Cuatro, el Cinco y Seis, Siete,
Ocho, Nueve”. Por sus nombres yo los llamo para que me ayuden, me ayuden,
me liberen y me salven de las tinieblas de la noche. Ven UNTANA, QUERTAS,
CHIETAL, y GOYANA, HUERTAL, SEMVETA y ARDAL. Por el poder de sus
nombres, Yo les imploro que me liberen de las tinieblas y me llenen de LUZ”.

Debes saber, oh hombre, que cuando hagas esto quedarás libre de los grilletes que
te atan, arrojando la esclavitud de los HERMANOS de la NOCHE. ¿No ves que
sus Sagrados nombres tienen el poder, para liberar por medio de Su vibración los
grilletes que te atan? Utiliza los cuando los necesites para libertar a tu hermano, de
manera que él también pueda salir de la noche.

Aprende que tú eres un guía y protector de tus hermanos; no permitas que

permanezcan en la esclavitud de la negación. Ahora a tí te he dado mi magia,
tómala y camina siempre en el sendero de la LUZ.

Que la Sagrada LUZ sea contigo, que la VIDA DIVINA sea contigo, un SOL
serás en el ciclo futuro.
 TABLA N° VII

LOS SIETE SEÑORES

Escucha y pon atención a mi Voz, abre tu mente-espacio y bebe de mi Sabiduría.
Negro es el sendero de la VIDA que tú viajas, muchos son los peligros que yacen
en tu camino. Busca siempre cómo obtener mayor sabiduría, al lograrlo habrá algo
de luz en tu camino.

Abre tu ALMA a lo Cósmico, y deja que fluya dentro de tu ALMA hasta ser Una
con Su Luz que es eterna; las tinieblas son transitorias, busca siempre, oh hombre,
sobre todo, la LUZ. Sabe que a medida que la luz llena tu alma, las tinieblas para
ti tendrán que desaparecer.

Abre tu Alma a los HERMANOS de la BRILLANTEZ, deja que ellos entren

y te llenen con Su LUZ. Eleva tus ojos a la LUZ del Cosmos, mantén siempre
tu cara hacia la Meta. Sólo obteniendo la luz de toda sabiduría, puedes llegar a
ser uno con la meta infinita. Busca siempre Unidad Eterna, busca siempre la Luz
de la meta.
Existe la Luz Infinita y la Luz que es finita, están separadas únicamente por las
tinieblas dentro del hombre. Busca cómo romper el Velo de tus Tinieblas, logra
unirte con la Luz para que seas Uno con Ella.

Óyeme, cantando la canción de la Luz y de la Vida. A través de todo el espacio la

Luz reina, lo abarca TODO, con su estandarte luminoso. Busca tú, eternamente
bajo el Velo de las tinieblas, y en algún lugar encontrarás la LUZ. Está oculta y
enterrada, perdida para el conocimiento del hombre, metida dentro de lo finito, ahí
lo Infinito existe. Extraviada, pero existente, fluye a través de todas las cosas,
viviendo en TODO es el CEREBRO INFINITO.

En todo el espacio no existe más que Una sabiduría, aunque aparentemente

dividida, es UNA en el UNO. Todo lo que existe surge de la LUZ, y la LUZ surge
del TODO.
Todo lo que ha sido creado está basado en EL ORDEN; la Ley gobierna el
espacio donde mora LO INFINITO. Del equilibrio vinieron los grandes ciclos,
moviéndose en armonía hacia el fin de la Infinitud.

Sabe tú, oh hombre, que lejos en el espacio-tiempo, LA INFINITUD misma

pasará a través del cambio. Óyeme, y escucha la Voz de la Sabiduría, aprende que
Todo es del TODO eternamente. Sabe que a través del tiempo tú puedes buscar la
sabiduría, y que encontraras más y más luz en tu camino. Verás que cada vez que
retrocedas, tu meta te esquivará más día a día.
Hace mucho tiempo, en los SALONES de AMENTI, Yo THOTH, estuve delante
de los SEÑORES de los ciclos, ELLOS PODEROSOS, con sus aspectos
imponentes, me demostraron develada toda Su grandeza y poderío.

Conducido por el Morador los vi por vez primera, pero después, lucra de Su
presencia, me sentí con el poder para entrar a Su cónclave a voluntad. Muy
frecuentemente viajé por los senderos oscuros hacia el SALON donde la LUZ
brilla eternamente.
Aprendí de los Señores de los ciclos Sabiduría traída de los ciclos Superiores, o
sea de Universos que están por encima de nosotros, cuyo conocimiento extraído
del INFINITO TODO. Muchas fueron las preguntas que les hice a LOS
SEÑORES de los Ciclos, grande fue la sabiduría que me dieron. Ahora a ti te doy
de esta sabiduría, traída de la flama del Fuego Infinito.

En la profundidad de los SALONES OSCUROS, están sentados LOS SIETE

Maestros, quienes son las unidades de Conciencia de los ciclos anteriores,
manifestándose ELLOS en este ciclo, como guías del hombre para darles el
conocimiento del TODO. Siete son Ellos, tienen enorme poder, me enseñaron
para que Uds. lo aprendan a través de mí, para entregar a los hombres. Por mucho
tiempo permanecí ante ellos escuchando las palabras que no tenían sonido.
En una ocasión me dijeron: “Oh Thoth, ¿quieres obtener sabiduría? Búscala en el
corazón deja flama. ¿Quieres ganar más conocimiento y poder? Búscalos en el
corazón de la flama. ¿Quieres ser Uno con el corazón de la flama? Búscala
entonces dentro de tu propia flama, la cual vive escondida en ti mismo”.

Muchas veces me hablaron ELLOS, enseñándome la Sabiduría que no es del

mundo; mostrándome siempre nuevos senderos hacia la brillantez; enseñándome
la Sabiduría que procede de arriba. Dándome conocimiento de cómo opera la LEY
y el Orden de TODO.

Nuevamente me habló el Maestro HUERTAL diciendo: “De mucho más allá del
Tiempo-Espacio, desde el lugar del fin de la Infinitud, cuando tú y todos tus
hermanos no tenían aún forma, fuimos Nosotros formados del orden del TODO.
No somos Nosotros como los hombres, aunque una vez fuimos como los hombres.
Del Gran Vacío fuimos formados, de acuerdo con la Ley y el Orden. Pues debes
saber que todo aquello que es formado, en verdad no tiene forma, pues
únicamente tiene forma para tus ojos físicos”.

Y una vez más, me habló el Maestro HUERTAL, diciendo: "Hijo de la LUZ, Oh

Thoth, tú ya eres libre para viajar el sendero brillante hacia arriba, hasta que se
logre que la subdivisión de personas se conviertan en UNO. NOSOTROS fuimos
formados subsiguientes a nuestra orden, somos Maestros del Universo o ciclo
Tres, Cuatro, Cinco y Seis. Siete, Ocho, Nueve. Sabe, que éstos son los números
de los ciclos de los cuales descendemos hacia el hombre. Cada uno de nosotros
tiene un deber que cumplir, cada uno teniendo aquí una fuerza distinta que
controlar. LO INFINITO SE EXTIENDE MUCHO MÁS ALLÁ DEL TODO.
Allí en un tiempo que todavía no ha llegado, todos Nosotros nos convertiremos en
Uno, el cual es más grande que TODO. El tiempo y el espacio se están moviendo
en círculos, aprende a conocer su Ley y tú también serás libre; cuando lo sepas
serás libre para moverte a través de los ciclos y pasar a los guardianes que cuiden
las puertas de esos otros mundos”.

Luego, el Maestro ARDAL me habló diciendo: “Por eones y eones he existido,

sin conocer la VIDA y sin probar la muerte. Pues debes saber, que lejos en el
futuro, la VIDA y la muerte serán Una con el TODO. Cada una de ellas, cuando
están perfectamente balanceadas una con la otra, deja de existir como unidad
separada del todo. En los hombres de este ciclo, la fuerza de Vida es
desenfrenada, pero la vida al terminar en su crecimiento se convierte en una con el
Todo. Aquí Yo me manifiesto en éste, tu Ciclo, pero además Yo estoy allí en el
futuro del tiempo, y no obstante para mí el tiempo no existe, pues en mi mundo el
tiempo no existe, ya que nosotros no tenemos forma. Nosotros no tenemos vida
física sino únicamente existencia, lo cual es más completo, más grande y más libre
que lo que tú conoces. El hombre es una flama atada a la montaña, PERO
NOSOTROS EN NUESTRO CICLO SIEMPRE SEREMOS LIBRES. Aprende,
que cuando tú hayas progresado dentro de los Ciclos que se extienden por encima
de éste, la vida física pasará a las tinieblas, y sólo la esencia del Alma
permanecerá”.

LUEGO me habló el Maestro SEMVETA diciendo: “Todo lo que tú conoces no

es más que una pequeña parte, pues aún no has tocado lo más Grande. Lejos desde
el espacio donde LA LUZ REINA SUPREMA, vine yo dentro de la Luz,
habiendo sido formado, pero no como tú”.
“Mi cuerpo es de Luz, mi Ser no tiene forma, sin haber conocido la VIDA y sin
haber conocido LA MUERTE, no obstante, Soy maestro de todo lo que existe.
Busca para encontrar el sendero a través de las barreras, viaja el camino que
conduce hacia la LUZ”.

Ahora habló otra vez el Maestro ARDAL diciendo: “Busca y encontrarás el

sendero hacia lo superior; no es imposible llegar a crecer hasta tener una
conciencia más elevada, porque cuando DOS se convierten en UNO, ese UNO se
une al TODO, verás que las barreras se levantan y te dejan pasar libremente
llegando a ser libre sendero. Crece, progresa de lo que tiene forma a lo que no
tiene forma, y te liberarás del sendero terrenal”.

Así, a través de las edades escuché y aprendí el camino hacia el TODO. Luego
elevé mi pensamiento al Gran TODO, escuché meditando y aprendí cómo saber
cuándo ese Maestro me llamaba; y mi oración fue: “Oh Divina Luz que lo
compenetras todo, Tú eres Una con el TODO, y siendo el TODO eres el UNO,
fluye a través del canal de mi Espíritu y hazme libre, ayúdame a ser UNO con el
ALMA Universal, resplandeciente y limpia de la negrura de la noche. Yo, como
Hijo de la Luz, ordeno y pido, demando ser libre de toda negación”.

Yo no tengo forma para la luz del alma, aunque sin forma yo resplandezco
luminoso. Yo sé que la esclavitud de las tinieblas será rota, y caerán ante la luz.
Ahora te doy esta enseñanza: Procura vivir libre dentro de la Luz Viviente de
Divina brillantez, jamás le des tus espaldas a esa Luz, recuerda que tu espíritu
pertenece y vive en los Reinos Luminosos pues tú eres un hijo de la Luz.

Vuelve tus pensamientos hacia adentro, no hacia afuera, encuentra la Luz del
Alma Internamente, aprende que tú eres el Maestro, todo lo demás es traído
desde dentro. Crece hacia los Reinos de la Brillantez, sostén tu pensamiento en
la luz, sabe que eres uno con el Cosmos, una flama y un Hijo de la Luz.

Ahora te prevengo, que no debes dejar que tus pensamientos se desvíen, conoce
que la Brillantez fluye a través de tu cuerpo siempre. No te vuelvas a la luz
negativa que proviene de los MAGOS NEGROS, sino conserva tus ojos siempre
altos, tu ALMA en afinidad con la Luz.

Toma esta sabiduría y guárdala, escucha mi voz y obedece, sigue el sendero

hacia la Brillantez, y tú serás UNO con el sendero.
 TABLA N° VIII

LA CLAVE DE LOS MISTERIOS:

A ti, oh hombre, te he dado mi conocimiento, a ti te he dado de la Luz. Escucha,

ahora, y recibe mi sabiduría, que he traído de los planos superiores, más allá de
los ciclos.
Yo no soy un hombre, pues ya soy libre de las dimensiones y de los planos. En
cada uno he tenido que tomar un nuevo cuerpo, en cada uno he cambiado mi
forma. Ahora sé que lo que no tiene forma es todo lo que queda de lo que tiene
forma.

Grande es la Sabiduría de los SIETE, Poderosos son Ellos desde más allá.
Escucha estas palabras de sabiduría, escucha, y consigue que estas palabras se
vuelvan tuyas, encuentra en ellas lo que no tiene forma, encuentra las claves del
más allá. El Misterio no es más que el Conocimiento oculto o desconocido;
aprende y levantarás el velo, encuentra la sabiduría que está profundamente
enterrada, y conviértete en el maestro de las tinieblas y de la luz.

Profundos son los misterios a tu alrededor, ocultos son los secretos antiguos,
investiga con las CLAVES de mi Sabiduría, y con toda seguridad encontrarás el
camino. La Puerta hacia el Poder es secreta, pero aquél que logra, la abrirá. Mira
a la LUZ, oh mi hermano, abre tu alma, tu mente, y recibirás. No te retrases en
el valle de las tinieblas, vence al morador de la noche, conserva tus ojos alertas
al PLÁNO de la LUZ y tú serás UNO con la LUZ.

El hombre está en el proceso del cambio, hacia las formas que no son de este
mundo; él crece con el tiempo hacia lo que no tiene forma, un plano en un Ciclo
Superior. Sabe que tú debes perder tu forma antes de que seas uno con LA
LUZ.

Escucha, oh hombre, mi voz, que te habla de los senderos a la luz, que te muestra
el sendero hacia el logro, donde tú serás uno con la Luz.

Investiga los misterios del corazón de la tierra, conoce la Ley que existe, la que
sostiene a las estrellas en su equilibrio, por la fuerza dé la niebla primordial.
Busca la flama de la VIDA de la TIERRA, báñate en el resplandor de su llama,
sigue el camino que tiene tres ángulos, hasta que tú llegues a ser una flama.
Aprende a hablar con palabras sin voz, a aquellos que moran abajo, entre el
pequeño Templo alumbrado con Luz Azul y báñate en el fuego de toda la vida.

Sabe, oh hombre, que tú eres complejo, un ser de la tierra y además del fuego;
deja que tu flama brille resplandeciente, .se únicamente fuego. La sabiduría esta
oculta en las tinieblas; cuando está Iluminada por la Flama del ALMA,
entonces se encuentra la sabiduría v te conviertes en NACIDO de la Luz, un Sol
de la Luz, sin tener forma alguna. Busca continuamente la sabiduría, la
encontrarás en el corazón de la flama, que sólo por el esfuerzo constante puede la
Luz dentro de tu cerebro. Ahora he hablado con sabiduría, escucha mi voz y
obedece, rasga los velos de las tinieblas, brilla como una Luz en el sendero.

Al hablar de la Antigua Atlántida, hablé también de los días del Reino de las
Sombras, hablé de la llegada de los hijos de las sombras. De las grandes
profundidades vinieron estos seres llamados por la sabiduría de hombres egoístas
de la tierra, con el propósito de obtener el maléfico poder de ellos.

Lejos en el pasado, antes de que la Atlántida existiera, los hombres de ahí, vivían
en las tinieblas, usando la magia negra, invocando a los seres negativos. Así fue
cómo vinieron dentro de este ciclo, no tenían forma, eran de otra vibración y
existían sin ser vistos por los hijos de los hombres de la tierra. Sólo a través de la
sangre podían ellos tener forma de seres, sólo a través del hombre podían ellos
vivir en el mundo.

Anteriormente ellos habían sido dominados por los Sagrados Maestros, y llevados
más abajo del lugar de donde vinieron. Pero algunos permanecieron ocultos en los
espacios y planos desconocidos para el hombre. Vivieron en la Atlántida como
sombras, pero en ciertas ocasiones se aparecieron entre los hombres. Siempre que
se les ofrecía sangre, ellos venían a morar entre los hombres para servirlos
haciendo el mal.

Con la forma humana ellos se mueven entre nosotros, pero solamente en

apariencia física se parecen a los hombres. La raza Serpiente es la de ellos. Se
mezclan entre los Consejos, toman las formas que son semejantes a las de los
hombres. Asesinan por medio de sus artes a los jefes de los reinos, toman su
forma y gobiernan al hombre. Sólo por medio de la magia pueden ellos ser
descubiertos, sólo por medio de cierto sonido pueden sus caras ser vistas. Ellos
buscan a través del reino de las sombras cómo destruir al hombre y gobernar en su
lugar.

Bien sabes que los Maestros son poderosos en la magia, y fueron capaces de
levantar el velo de la cara de los hombres serpientes. Pueden enviarlos a su
guarida, por esto vinieron a la tierra y le enseñaron al hombre el secreto, la
Palabra secreta que únicamente el hombre puede pronunciar; con ella rápidamente
levantaron el velo de los hombres serpientes, y los arrojaron fuera de la tierra.

Sin embargo, cuídate hermano, pues el hombre serpiente aún vive, en un

lugar que se abre en ciertas épocas aquí en el mundo. Sin ser vistos, ellos
caminan entre ustedes, saben de los lugares donde se ejecutan los ritos mágicos,
una vez más a medida que el tiempo pasa, ellos vuelven a tomar la apariencia de
los hombres.

Ellos pueden ser llamados por el maestro que conoce la magia blanca o la magia
negra, pero sólo el maestro blanco puede controlarlos y atarlos mientras están
dentro de un cuerpo humano.

No te metas en el reino de las sombras, pues seguramente ahí aparecerá el mal, lo

negativo, pues sólo Un Maestro de la Luz puede conquistar las sombras del
temor. Conoce tú, oh mi hermano, que el miedo es un gran obstáculo; domínalo
como un maestro, y vive en la brillantez; así tus sombras pronto desaparecerán.
Oye y escucha mi sabiduría, la Voz de la Luz es clara, no entres en el valle de las
sombras, y sólo la luz aparecerá.

Escucha lo profundo de mi Sabiduría, Yo hablo del conocimiento que está oculto

para el hombre. Lejos he estado, en mi viaje a través del ESPACIO-TIEMPO, aún
fui al final del espacio de este ciclo. Ahí encontré la gran barrera, que retiene al
hombre y le impide salir de este ciclo. Por mucho tiempo miré a los SABUESOS
de la Barrera, acostados en espera de aquél que quiera pasar. En ese espacio donde
el tiempo no existe, débilmente percibí a los guardianes de los ciclos. Ellos sólo se
mueven a través de ángulos, ni ellos pueden entrar a las dimensiones curvas.

Extraños y terribles son los SABUESOS de la Barrera, yo seguí sus conciencias

hasta los límites del espacio. No pienses escapar de ellos entrando a tu cuerpo
físico, pues ellos siguen rápidamente al Alma, a través de ángulos, pero el Círculo
te dará protección, y quedarás salvo de las garras de los MORADORES que
vuelan en ANGULOS.
En cierta ocasión, hace mucho tiempo, me aproximé una vez a la gran Barrera y vi
en las playas en donde no existe el tiempo, las entidades sin forma de los
SABUESOS de la Barrera; siempre ocultándose en la niebla; más allá del tiempo
los encontré, y Ellos olfateándome a lo lejos se elevaron y dieron el gran grito de
campana que puede oírse de ciclo a ciclo, y volaron a través del espacio para
aprisionar mi Alma.

Entonces, rápidamente yo volé en círculos ante ellos para regresar a mi cuerpo

físico, corrí sin pensar en el fin, pues ellos, los decoradores, me seguían,
moviéndose en extraños ángulos desconocidos para el hombre. Siempre, sobre la
playa gris del fin del TIEMPO-ESPACIO encontré a los SABUESOS de la
Barrera, tratando de devorar mi Alma que intentaba penetrar al más allá.

Volé, a través de círculos, de regreso a mi cuerpo físico, volé y rápidamente, ellos

me siguieron. Siempre detrás de mí, corriendo, los devoradores me siguieron,
buscando a través de ángulos cómo atraparme.
Debes saber, que el Alma que se atreve a cruzar la Barrera, puede ser retenida en
esclavitud por los SABUESOS, por una eternidad más allá del tiempo,
reteniéndola ahí hasta que este ciclo esté terminado, quedando abandonada atrás,
cuando esta conciencia lo abandona.

Yo entré a mi cuerpo, haciendo los círculos que no contienen ángulos, creando

una forma, que dentro de mi forma fue formaba, hice con mi cuerpo físico un
círculo, es decir, pegué mi cabeza a la punta de mis pies, y perdí a los seguidores
en los círculos del tiempo-espacio. Desde entonces cuando salía yo de mi cuerpo
físico, tomaba precauciones, jamás me muevo angularmente, de hacer así mi
ALMA podría aprisionarse.

Aprende que existen los SABUESOS de la Barrera que se mueven sólo en

ángulos, y jamás a través de las curvas del espacio. Sólo moviéndote a través de
curvas puedes escapar de ellos, pues en ángulos te perseguirán. Oh hombre,
escucha mi advertencia, no trates de forzar la puerta del más allá. Pocos son los
que han tenido éxito en pasar la Barrera, y llegar a la LUZ Superior que brilla más
allá. Aprende que esos moradores buscan tales Almas para retenerlas en su
esclavitud.

Cuando hayas entrado a la forma física en que moras, haz la señal de la cruz y el
círculo combinado, abre tu boca y pronuncia LA PALABRA audiblemente y
estarás entonces libre. Sólo aquél que tiene mucha LUZ tiene la esperanza de
pasar sobre los guardias del camino, y luego debe moverse siempre a través de
extrañas curvas y secretos ángulos, que están formados en direcciones
desconocidas por el hombre.

Escucha hermano, y observa mi advertencia, no trates de pasar los guardias del

camino, más bien debes tratar de obtener tu propia Luz antes y con ella
ascender bien alto y así pasar el camino.

La Luz es tu meta final, busca y encontrarás al fin la Luz en tu camino.

 TABLA N° IX

LA LLAVE A LA LIBERTAD DEL ESPACIO.

Escucha, oh hombre, oye mi voz, las enseñanzas de la sabiduría y de la luz en este

ciclo; las que te enseñarán cómo disipar las tinieblas, y cómo traer más luz a tu
vida.

Aprende, oh hombre, cómo encontrar el gran sendero, el que conduce a la Vida

Eterna, así como se busca el SOL. Apártate de las tinieblas, busca cómo
convertirte en una Luz para el mundo. Conviértete en una lámpara para la Luz,
en punto local para esparcir el Sol de este espacio.

Eleva tus ojos al Cosmos, eleva tus ojos a la Luz, háblale al Morador, repite el
canto que llama a la Luz. Canta la canción de la liberación, canta la canción del
Alma, crea la vibración elevada que te hará Uno con el Todo. Fúndete con el
Cosmos, crece hasta llegar al Uno con la Luz, sé un canal lleno de orden, sé un
sendero de la Ley para el mundo.

Tu Luz, hermano, viene de la Gran Luz, y es la que brilla a través de la sombra

de tu cuerpo físico, liberada debe de elevarte sobre todas las tinieblas antes de que
puedas ser Uno con la Luz.

Las Sombras de las tinieblas te rodean, la vida física te llena con su fluido
negativo, pero aprende, oh hombre, que tú debes de elevarte sobre tu cuerpo
físico, de ir lejos proyectándote a los planos elevados que te rodean, los que
también son Uno contigo, o con otras partes de tu ser.

Mira todo a tu alrededor y verás tu propia luz reflejándose siempre aún en las
tinieblas que te rodean, tu luz interna se derrama a través del velo físico y
resplandece.

Estudia buscando la sabiduría, no dejes que tu cuerpo material te traicione,

camina, anda solamente en el sendero con la oleada de Luz, ésa que ilumina el
camino oscuro. Aprende que la Sabiduría vale mucho, que es duradera, que
existe desde que comenzó El Alma Universal, y ha creado la Armonía del caos,
gracias a la Ley que existe en el Sendero.
Escucha a las enseñanzas de sabiduría, escucha a la voz que habla de los tiempos
pasados. Siempre hablaré del conocimiento olvidado, les diré algo más sobre la
sabiduría oculta desconocida en la antigüedad, perdida en el medio de las
tinieblas, vive a tu alrededor, me rodea a mí.

Aprende que eres lo más grande de cuanto existe en la Tierra, esta verdad se
perdió y se olvidó después de que el hombre fue arrojado a la esclavitud, atado y
esposado por las cadenas de las tinieblas.

Hace mucho, mucho tiempo, que yo abandoné mi cuerpo físico y viajé libre a
través de la inmensidad etérea, circundando los ángulos que retienen al hombre en
esta esclavitud. Tú no eres más que un espíritu, el cuerpo físico no vale nada en
otros mundos, el Espíritu lo es todo. No dejes que tu cuerpo sea un grillete que te
domine, libérate de las tinieblas y viaja solamente en la Luz. Aprende a abandonar
conscientemente tu cuerpo proyectándote astralmente, y hasta que libre de los
instintos, tu Luz sea Uno con la Luz Divina.

Cuando estés libre de los grilletes de las tinieblas, y viajes en el espacio, hecho un
SOL salido de la LUZ, entonces, aprenderás que el espacio no es ilimitado, sino
que en verdad está limitado por ángulos y por curvas. Aprenderás, que todo
cuanto existe es únicamente un aspecto de cosas superiores, aún por venir. La
materia es fluida y sube como un vapor, constantemente cambiando de una forma
a otra forma más refinada o superior.

Siempre ha existido el conocimiento y la sabiduría, jamás han sido cambiados,

aunque enterrados en las tinieblas, jamás se han perdido, sólo están extraviados y
olvidados por el hombre.
Compenetrando el espacio en que moras existen otros espacios tan grandes como
éste, tu mundo, y están entrelazados a través del corazón de la materia física, y no
obstante están separados en su espacio propio, debido a las diferencias vibratorias.

Una vez, hace muchísimo tiempo, Yo Thoth abrí la puerta de entrada y penetré en
otros espacios, entonces aprendí los secretos que ahí se encierran. Profundamente
metidos dentro de la esencia de la materia física existen muchos misterios ocultos.

Nueve son las dimensiones entrelazadas, nueve son los ciclos del espacio, nueve
son las divisiones de la consciencia, nueve son los mundos dentro de cada
mundo y son nueve los Señores de los Ciclos que proceden de arriba y de
abajo.
El espacio está lleno de seres invisibles, pues el espacio está dividido por el
tiempo, busca la llave del tiempo-espacio, y tú podrás abrir la puerta.

Es verdad que a través del tiempo-espacio, la Consciencia seguramente existe,

aunque por lo que aprendimos antes, ignorábamos esto, y aunque fue algo oculto,
sin embargo, eternamente ha existido. La llave para entrar a tus mundos
internos sólo puedes encontrarla dentro de ti, pues el hombre es la puerta del
misterio y la llave es una dentro del Uno.

Busca dentro del círculo, usa LA PALABRA que te daré, abre tu puerta interna y
seguramente tú también vivirás. Hombre, tú piensas que vives una vida dentro de
la muerte, pues mientras estás atado al cuerpo, para ti la verdadera vida no existe.
Sólo el Alma que está libre en el espacio tiene vida, ésa que es realmente una
vida; todo lo demás es sólo una esclavitud, un grillete del cual hay que liberarse.

No pienses que el hombre nació de la tierra, aunque venga su cuerpo físico de la

tierra, el hombre nace del espíritu-luz, pero mientras no lo sabe, él jamás puede
ser libre. Las tinieblas rodean al nacido de la luz, las tinieblas envuelven atando su
Alma, sólo aquél que sabe lo que está buscando puede tener la esperanza de llegar
a ser libre.

Las sombras están cayendo a tu alrededor, las tinieblas llenan todo el espacio, más
tú debes de brillar. Oh Luz del alma del hombre, llena con ella las tinieblas del
espacio.

TÚ ERES UN SOL DE LA GRAN LUZ, recuérdalo y serás libre, no

permanezcas en las sombras, huye de las tinieblas de la noche. Haz que tu alma
muestre su Luz, Tú eres del Sol Nacido, y si haces resplandecer la gloria de tu
Luz, libre serás de las ataduras de las tinieblas, un Alma que se hace Uno con la
Luz.

Tú eres la llave hacia toda la sabiduría, dentro de ti está todo el tiempo y el

espacio; no vivas en la esclavitud de las tinieblas, libera tu forma de Luz de la
oscura noche.

REFLEXIÓN
“Gran Luz, que llenas todo el Cosmos, fluye totalmente hacia el hombre, haz de
su cuerpo una antorcha de Luz, que jamás pueda ser apagada entre los
hombres”.
Hace mucho tiempo, en un pasado, yo viajé dentro de ese espacio donde comenzó
el tiempo. Siempre busqué un nuevo conocimiento para agregarlo a la sabiduría
que conocía, no obstante, sólo aprendí que el futuro retiene la llave de la
sabiduría que yo buscaba.

Abajo hacia los SALONES DEL AMENTI yo viajé, buscando los conocimientos
mayores, pregunté a los SEÑORES de los CHOLOS el camino de la sabiduría que
yo buscaba. Le hice a los SEÑORES esta pregunta: “¿Dónde está la fuente de
TODO?" Me contestaron con un tono que fue poderoso; la Voz del SEÑOR de los
NUEVE dijo: “LIBERA TU ALMA de tu cuerpo, o sea proyéctate y ven
conmigo a la LUZ”.
Salí de mi cuerpo, y ante una llama que resplandecía en la noche, permanecí ante
los SEÑORES, bañado con el Fuego de VIDA. Entonces fui agarrado por una
gran fuerza, grande más allá de la comprensión del hombre.

Ahí, vi cómo se moldea el orden del caos y de los ángulos de la noche, vi a la

LUZ surgir del orden, y oí la voz de la Luz. Vi la flama de los Abismos
arrojando orden y luz, vi el orden surgir del caos, y vi la Luz dando Vida.

Después oí una voz: “Oye, y entiende que la Flama es la Fuente de todas las
cosas, ella contiene todas las cosas en potencialidad, el orden que envió la Luz es
LA PALABRA, y de la PALABRA viene la Vida, y la existencia de todo”. Y
una vez más habló la voz, diciendo: “La VIDA en ti es la PALABRA, encuentra
la VIDA dentro de ti, y tendrás el Poder para usar la PALABRA".

Por mucho tiempo contemplé la flama de la Luz, que fluía de la Esencia del
Fuego, realizando que la verdadera VIDA no es más que orden y que el hombre es
uno con el fuego Divino.

Regresando a mi cuerpo otra vez, me vi ante el Maestro ARDAL, escuchando la

voz de los CICLOS, vibré con los poderes que usaron y oí: “Sabe Tú, Oh Thoth,
que la VIDA no es más que la PALABRA del FUEGO, es la Fuerza de VIDA
que ves ante ti, no es más que la PALABRA en el Mundo en forma de fuego.
Busca en el sendero lo que es la PALABRA, y así los poderes serán tuyos”.
Después le pregunté al Maestro ARDAL, “Oh Señor, muéstrame el sendero, dame
tu guía hacia la sabiduría, demuéstrame dónde aprender la PALABRA”. Entonces,
me contestó el SEÑOR DE LOS NUEVE Ciclos: “A través del ORDEN tú
encontrarás el camino. ¿No viste que la PALABRA viene del Caos, no has visto
que LA LUZ viene del FUEGO? Acaba con el desorden en tu vida, equilibra y
ordena tu vida, subyuga todo el Caos de tus emociones y tendrás orden en la vida.

El ORDEN que sale del Caos te traerá LA PALABRA de la FUENTE, te dará el

poder de los CICLOS, y hará de tu ALMA una fuerza, la cual siendo libre, se
extenderá a través de las edades como un Perfecto SOL que salió de la FUENTE”.

Escuché esa voz, y las palabras se quedaron profundamente grabadas en mi

corazón, siempre he buscado el orden pues sé que en él encontraré LA
PALABRA. Todo aquél que lo logra, debe antes vivir en el ORDEN, pues a
través del desorden LA PALABRA jamás ha sido, o puede existir.

Toma estas palabras, oh hombre, como parte de tu vida, deja que sean tuyas y
trata de conquistar todo el desorden, y llegarás a ser Uno con la PALABRA, al
fin.

Esfuérzate en obtener la LUZ, en el sendero de la Vida, trata de ser Uno en

armonía con el ESTADO-SOLAR, busca ser únicamente la LUZ. Mantén tu
pensamiento en la Unidad de la luz con el cuerpo del hombre, sabe que todo es al
fin ordenado del Caos y se nace en la Luz.
 TABLA N° X

LA LLAVE DEL TIEMPO:

Escucha, oh hombre, toma mi sabiduría, aprende que los Misterios del Espacio
están profundamente ocultos. Aprende del PENSAMIENTO que creció en el
abismo, trayendo Orden y Armonía en el Espacio.

Sabe tú, oh hombre, que todo lo que existe se debe únicamente al Poder de la
Ley. Conoce LA LEY y te harás libre, y así no estarás atado por los grilletes de la
negación.

Lejos, a través de extraños espacios, he viajado dentro de las profundidades del

abismo del tiempo, aprendiendo extraños misterios, hasta que al final todo me fue
revelado. El misterio es sólo misterio, cuando es un conocimiento desconocido
para el hombre; cuando hayas sondeado el corazón de todo misterio, el
conocimiento y la sabiduría serán tuyos. Busca, y aprende que el TIEMPO es el
secreto, en donde puedes liberarte de este espacio.

Por mucho tiempo, yo Thoth, busqué la sabiduría, y por siempre la buscaré hasta
el fin de la Eternidad, pues sé que siempre ante mí retrocediendo, girando, se
mueve la meta que trato de obtener. Aun los SEÑORES de los CICLOS, saben
que todavía no han alcanzado la meta, pues con toda su Sabiduría, ellos saben
que LA VERDAD siempre está creciendo.

Una vez, en un pasado lejano, yo hablé con el Morador, y le pregunté sobre los
misterios del tiempo y del espacio; haciéndole esta pregunta: “¿Oh maestro, qué
es el tiempo?”. Dijo el maestro: “Conoce, Oh Thoth, que en el principio sólo
existía EL VACIO y la nada; no había tiempo, no había espacio, nada. Y dentro
de esa nada vino un pensamiento, que a propósito penetró y llenó ese VACIO. Ahí
no existía la materia, sólo Fuerza un Movimiento, un vórtice o vibración de ese
pensamiento el cual llenó el VACIO”.

Y yo le pregunté al maestro: “¿Fue este Pensamiento Eterno?” y el Morador

me contestó: “En el principio existió este Pensamiento y para que el
pensamiento pudiera ser Eterno tenía que existir el tiempo, así dentro de
todo el penetrante pensamiento creció LA LEY DEL TIEMPO. Por siempre,
el tiempo que existe a través de todos los espacios, fluyendo en un movimiento
rítmico y suave, que es eterno en un estado de fijación. El tiempo no cambia,
pero todas las cosas cambian con el tiempo, pues el tiempo es la fuerza que
sostiene los acontecimientos separados, cada uno en su propio lugar. El
tiempo no está en movimiento, pero Uds. se mueven a través del tiempo a
medida que sus conciencias se mueven de un acontecimiento a otro. Debido al
tiempo es que existen, todo es todo en una existencia del eterno UNO.
Aprendan que, aunque están Uds. separados por el tiempo, no obstante, son
UNO con toda la existencia del tiempo”. Entonces, dejó de oírse la voz del
Morador, y yo salí a meditar y estudiar el tiempo. Pues comprendí que en esas
Palabras estaba la Sabiduría y un medio para resolver los misterios del tiempo.

Frecuentemente pensé en las Palabras del Morador, luego traté de resolver los
misterios del tiempo. Descubrí que el tiempo se mueve a través de ángulos
extraños. Así pues, sólo por medio de las curvas podía yo esperar obtener la clave,
la cual me daría acceso al tiempo. Encontré que sólo moviéndome hacia arriba
y a la derecha podría yo liberarme del movimiento del tiempo.

Salí fuera de mi cuerpo, y me moví con los movimientos que me cambiaron en el

tiempo. Muy extrañas fueron las escenas que vi en mis viajes, muchos de los
misterios se me revelaron. Yo vi el principio del hombre, aprendiendo del
pasado que nada es nuevo. Busca, oh hombre, cómo encontrar el sendero que
conduce a través de los espacios que están formados en el tiempo.

No te olvides, durante toda tu búsqueda, que la Luz es la Meta, la cual debes

buscar para poder lograrla. Busca siempre la luz en tu sendero, y siempre para
ti la meta continuará. No permitas que tu corazón regrese jamás a las tinieblas,
deja que en tu Alma resplandezca la luz, como un Sol en el camino. Sabe que en
la Eterna Brillantez encontrarás a tu alma metida dentro de esa luz, jamás te
amarres a la esclavitud de las tinieblas, y ayúdala a que brille como un Sol de la
Luz.

Sabe que, aunque ahora está oculta en tinieblas, tu Alma es una chispa que
existe dentro de la verdadera llama. Sé Uno con la más grande de todas las
luces, encuentra en la FUENTE, el FIN de tu meta. La Luz es vida, pues sin la
Gran Luz nada puede existir. Aprende que, en toda la materia formada, es en tu
corazón donde la luz siempre existe, aunque esté atado a las tinieblas, la Luz
inherente siempre existe ahí.
 Una vez permaneciendo en los SALONES DE AMENTI oí la voz de los
SEÑORES DE AMENTI, diciendo en tonos que resonaban a través del silencio,
palabras de poder, impresionantes, irresistibles. Ellos repetían el Salmo de los
ciclos, las palabras que abren el sendero al más allá. Yo pude ver el gran sendero
abierto y miré por un instante al más allá. Vi los movimientos de los ciclos; los
que son tan vastos como el pensamiento de la FUENTE que los transporta.

Supe entonces que aún la infinitud sigue avanzando hacia un fin

inconcebible. Vi que el Cosmos está en Orden, que es una parte de un
movimiento que se extiende a través de todos los espacios, como una porción de
un orden menor a un orden mayor, constantemente se mueven en la armonía del
espacio. Vi también ciclos que como vastos círculos rodaban en el firmamento;
después supe que todo lo que ha sido, sigue creciendo para llegar a ser más
grande. En la lejanía se agrupan el espacio y el tiempo. Aprendí entonces que las
Palabras tienen el poder para abrirlos planos que están ocultos para el hombre.
Es en las Palabras donde yace oculta la clave que abrirá lo de arriba y lo de abajo.

Aprende y usa esta palabra que te doy ahora y descubrirás el poder de su sonido.
Pronuncia la palabra: “ZIN-URU” y encontrarás el poder, no obstante, recuerda,
entiende, que el hombre es de Luz y la Luz es del hombre. Escucha un misterio
más, uno de los más extraños que existe bajo el SOL. Entérate de que el espacio
está lleno de mundos, unos dentro de los otros mundos, sin embargo, existen
separados uno del otro debido a la ley vibratoria, a los diferentes grados de
vibración.
En una ocasión, mientras buscaba la sabiduría más profundamente oculta,
pude abrir la puerta que la obstruye del hombre, y llegué a otro plano de
existencia, el cual es más hermoso que el de la Tierra. Yo llamé a la Sabiduría
desde los espacios para que brillara como una luz en la Tierra.

Toqué el tambor de la Serpiente, me vestí con la túnica de color morado y

dorado, coloqué en mi cabeza la corona de Plata y alrededor de mí tracé el círculo
de cinabrio, hasta que éste resplandeció. Alcé mis brazos y pronuncié en voz alta
la invocación que abre el sendero hacia los planos del más allá; grité llamando a
los SEÑORES de los SIGNOS ZODIACALES en sus casas: “Señores de los dos
horizontes, vigilantes de las puertas triples, pido que permanezca uno de Uds. a mi
derecha, y otro a la izquierda, así como están LAS ESTRELLAS que se elevan en
su trono sobre el signo que gobiernan. Oh tú, príncipe negro de ARULU, abre la
puerta del camino nebuloso, y libera a la Sabiduría a quien tienes prisionera.
Que me escuchen Señores oscuros y Seres brillantes a mi inaudible voz
con la cual pronuncio sus nombres secretos, nombres que conozco y puedo
pronunciar, que me oigan y sigan mi voluntad”.
Luego, con la flama encendí mi círculo y la llamé a ELLA desde los planos de los
espacios más allá diciendo: “Hija de la Luz libérate de ARULU”. Siete veces lo
dije y siete veces pasé a través del fuego; sin haber bebido agua, dije: “Yo te
llamo de ARULU, de los reinos de EKERSHEGAL, de ahí yo te invoco, Señor de
la Luz”.

Entonces vi cómo ante mí se levantaban unas figuras oscuras; sí, eran ellos
las figuras de los Señores de ARULU, pasaron ellos delante de mí y se alejaron,
luego salió la Señora de la Luz. Quedó libre de los SEÑORES de la noche, libre
para poder vivir en el SOL de la tierra Sol, libre para vivir como una hija de la
Luz. Escuchen, hijos míos, mágico es el conocimiento y él solo es Ley. No le
temas a tu Poder Interno, pues él sigue a la Ley como lo hacen las estrellas en
el firmamento. Bien sabes que la sabiduría es magia para el ignorante, cuando
ella en realidad es sólo la Ley; también debes saber, que por medio del
conocimiento puedes aproximarte más cerca de un lugar en el Sol.

Escuchen, hijos míos, sigan mis enseñanzas, sean siempre buscadores de la luz,
brillen en el mundo de los hombres, para que así queden convertidos en una luz en
el sendero, la cual brillará a los hombres.

Sigan aprendiendo de mi magia, conozcan que toda la fuerza será de ustedes si así
lo quieren. No teman al sendero que conduce al Conocimiento, solamente deben
de apartarse del camino oscuro.

La Luz es tuya, rompe los grilletes y serás libre. Conoce que tu Alma está
viviendo en esclavitud, porque la amarra el temor, el cual la retiene en el umbral.
Abran sus ojos, y vean la gran LUZ del Sol, y no teman, pues todo es de
ustedes. EL SEÑOR del oscuro ARULU es el miedo, y asusta al que se ha
enfrentado con el miedo. Aprende que el miedo existe y fue creado por aquellos
que están atados por sus temores.

Sacudan su esclavitud, caminen en la luz del glorioso día. Jamás vuelvan sus
pensamientos a las tinieblas y así con toda seguridad serán Uno con la Luz.
El hombre sólo es lo que cree ser, sea un hermano de las tinieblas o un hijo de la
luz. Venid a la luz, hijos míos, caminad en el sendero que conduce al Sol.
Oigan a la Sabiduría, usen la palabra que les he dado, y con ella seguramente
encontrarán la Sabiduría y el Poder, así como la luz para caminar la larga senda.
Busca y encontrarás la llave que te he dado, y así siempre serán Hijos de la Luz.
 TABLA N° XI

LA CLAVE HACIA ARRIBA Y HACIA ABAJO:

Escuchen, hijos de KHEM, a las palabras que les doy para que les traigan la Luz.
Yo conocí a sus antepasados, desde hace mucho tiempo. Inmortal he sido a través
de todos los tiempos, viviendo entre ustedes, desde que su conocimiento comenzó.
Guiándoles ascendentemente a la Luz de la Gran Alma, siempre me he
esforzado apartándoles de las tinieblas de la noche.

Sepan ustedes, oh pueblo entre el que yo camino, que Yo, Thoth, tengo el
conocimiento, y la sabiduría conocida al hombre desde los antiguos días.
Guardián he sido de los secretos de la gran raza, poseedor de la llave que conduce
a la vida. Yo les he criado a todos, hijos míos, desde las tinieblas de los Antiguos
Días. Escuchen ahora, las palabras de mi sabiduría, escuchen ahora el mensaje que
les traigo. Oigan las palabras que les digo y serán elevados desde las tinieblas a la
Luz.

Lejos en el pasado, cuando por primera vez vine a ustedes, les encontré viviendo
dentro de cuevas de rocas. Yo les elevé por mi poder y sabiduría, hasta que
ustedes alcanzaron el adelanto como hombres civilizados. Les encontré sin ningún
conocimiento, solamente un poco más elevados que las bestias. Yo abaniqué la
chispa de sus conciencias, hasta que al fin flamearon como seres humanos.

Ahora les hablaré de un conocimiento muy antiguo, más allá del tiempo, que
puede concebir la raza humana. Sepan que nosotros los de la Gran Raza, o Raza
Mayor, tuvimos y tenemos un conocimiento, que es mucho mayor al que el
hombre tiene. Esta Sabiduría la obtuvimos de razas Nacidas en otras Estrellas: una
clase de sabiduría y conocimiento más elevado que el del hombre. A nosotros han
descendido los Maestros de Sabiduría, tan distantes de mí como yo lo estoy de
ustedes. Les doy Sabiduría, para usarla, y para hacerles libres.

En la pirámide que yo construí están LAS LLAVES o claves que al fin les
mostrarán EL CAMINO a la vida; trazando una línea desde la gran imagen que
construí en la cima de la pirámide, fue hecha como una puerta de entrada;
entonces tracen otra línea opuesta en el mismo ángulo y dirección, escarben y
encontrarán lo que Yo he ocultado. Allí encontrarán la entrada al subterráneo que
conduce a los secretos que escondí antes de que ustedes fueran seres humanos.
Yo les digo que conocí los misterios de los ciclos, ellos se mueven en
movimientos que son extraños para todo lo que es finito, pues todo lo que no es
finito está mucho más allá de la comprensión del hombre. Existen nueve ciclos,
siempre hay nueve arriba, y catorce abajo; moviéndose en armonía hacia el
lugar de unión, el que existirá en el tiempo futuro. LOS SEÑORES DE LOS
CICLOS son Unidades de Consciencia mandadas por otros con el fin de unificar
este Universo con el Todo. Muy elevados son Ellos en su Consciencia y en la de
todos los Ciclos. Ellos trabajan en armonía con la Ley. Los conocerán a su debido
tiempo cuando todo sea Perfecto aquí, entonces no existirá un Maestro superior al
otro, ninguno estará arriba ni otros abajo, sino que todos serán Uno en un grado
de Infinidad Perfecta, en una armonía con todo, dentro de la Unidad del Todo.

Abajo de la superficie de la tierra en los SALONES DE AMENTI están sentados

siete MAESTROS, los SEÑORES de los CICLOS, ninguno es más poderoso
que el otro, pues en la infinitud no existe ni arriba ni abajo. Pero siempre existe, y
siempre existirá LA UNIDAD DE TODO: será cuando todo esté completo. He
viajado a los SALONES DE AMENTI, frecuentemente y he permanecido con los
SEÑORES de TODO. Y así en la Fuente de su Sabiduría he bebido y llenado
tanto mi cuerpo como mi Alma con su Luz.

Ellos me hablaron y me dijeron de los ciclos, y sobre la LEY que les da a Ellos
una manera de existir. El Maestro ARDAL me habló diciendo: “Oh Thoth,
grande eres entre los hijos de la Tierra, pero existen misterios que tú no conoces.
Tú sabes que has venido de un espacio-tiempo el cual está debajo de éste, no
ignoras que tendrás que viajar en un espacio-tiempo más elevado, pero poco
sabes de los misterios que encierran, poco sabes de la Sabiduría del más Allá.
Aprende que tú, en el todo, en esta consciencia, eres sólo una célula en el proceso
de crecimiento”.

“La consciencia debajo de ti está siempre expandiéndose, en diferentes maneras a

las que tú conoces. El espacio-tiempo debajo de ti, está siempre creciendo en
cierta forma que es diferente a aquellas que fueron parte de los caminos que
conoces. Pues has de saber que ésta crece como un resultado de tu propio
crecimiento, pero no de la misma forma en la que tú creciste. El crecimiento que
tuviste, y tienes en el presente, crearon una Causa y un Efecto. Ninguna
consciencia sigue el mismo sendero de aquellos que van delante de él, siendo así
sería inútil la repetición. Cada consciencia en el ciclo en que existe, sigue su
propio sendero hacia la última meta. Cada una ejecuta su parte en el Plan del
Cosmos; cada una juega su parte en la meta final. Mientras más adelantado es el
ciclo, mayor es el conocimiento y mayor es la habilidad para fundirse en la
ley del todo".

"Aprende que tú en los ciclos inferiores al nuestro estás trabajando en las partes
más fáciles de la Ley, mientras que nosotros que estamos en los ciclos que se
extienden hacia la infinitud, nos esforzamos y edificamos con una Ley Superior".

"Cada uno tiene su parte para ejecutar en los ciclos, cada uno tiene su trabajo para
completar en su sendero. El ciclo que debe de estar debajo de ti aún no existe, será
formado al llegar la necesidad. Pues sabe, que la fuente de la Sabiduría envía los
ciclos porque está Eternamente buscando nuevos Poderes que obtener. Tú sabes
que ese conocimiento se gana solamente a través de la práctica, y la sabiduría
viene solamente del conocimiento; asimismo, son los ciclos creados por la Ley.
Ellos son los medios para ganar más conocimiento, pues en el Plano de la Ley está
la Fuente del Todo. El ciclo inferior no está verdaderamente debajo, sino que es
sólo diferente en vibración en el espacio y tiempo. La consciencia allí está
trabajando y probando cosas más fáciles a las que tú ya conoces, tú estás
trabajando en algo superior, así por encima de ti viven aquellos que están
trabajando como tú lo estás, pero en otras Leyes. La diferencia que existe entre
los ciclos es únicamente en el grado de habilidad para trabajar con La Ley”.

"Nosotros, que hemos estado en ciclos Superiores al tuyo, somos los que salimos
primero de LA FUENTE, así que a través del tiempo-espacio hemos ganado la
habilidad para usar las Leyes Superiores, las que están más allá del concepto del
hombre. Nada existe allí, que sea realmente inferior a ti, sino que es únicamente
una operación diferente de la Ley”. “Si miras hacia arriba, o miras hacia abajo,
encontrarás lo mismo, pues todo es una parte de la Unidad, la cual es la Fuente de
La Ley. La consciencia anterior a la tuyas una parte de ti mismo, así como
nosotros somos una parte de la tuya”.

“Tú, cuando niño, no tenías el conocimiento que alcanzaste al convertirte en un

hombre. Compara los ciclos con el hombre en su viaje del nacimiento hacia la
muerte, el ciclo debajo de ti es como un niño con poco conocimiento, y después es
como un niño va crecido, adelantando a medida que el tiempo pasa Nosotros
también crecimos como crece el niño a la edad viril, el conocimiento y la
sabiduría le viene con los años Así es también, Oh Thoth, con los ciclos de
consciencia, como niños con diferentes grados de crecimiento, no obstante, todos
ellos son de esa Fuente una. La Sabiduría y toda la Sabiduría regresando
nuevamente al Uno". Entonces, dejó de hablar y se sentó en el silencio en que
viven los SEÑORES. Luego, una vez más me habló, diciendo: “Oh Thoth, por
mucho tiempo nos hemos sentado en el AMENTI, guardando la Flama de Vida en
estos Salones. No obstante, debes saber que nosotros también somos una parte de
nuestros Ciclos, con nuestra Visión alcanzamos lo más distante. De todo cuanto
existe, nada importa más que el crecimiento que podemos obtener aquí con
nuestra ALMA; sabemos que lo físico es fugaz, que las cosas que los hombres
aquí consideran tan grandes, no valen nada para nosotros. Las cosas que buscamos
no son de la Tierra, sino que solamente ansiamos el estado Perfecto del Alma.
Cuando tú como el resto de los hombres puedan aprender que sólo el progreso del
Alma tiene valor al final, entonces verdaderamente serán libres de toda esclavitud,
serán libres para trabajar en armonía con La Ley.

“Debes de esforzarte por lograr la perfección, pues sólo así podrás obtener la
meta. Aunque sabemos que nada es perfecto aquí, sin embargo, ése debe ser tu
propósito y tu meta”. Se dejó oír la voz del Maestro ARDAL, y dentro de mi
conciencia Sus Palabras se quedaron grabadas. Así buscaré siempre más sabiduría
para llegar a ser Perfecto en la Ley y con el todo”.

Pronto fui a los Salones del Amenti, para vivir cerca de la flor del fuego frío de la
vida. Tú, a quien Yo he enseñado, no me verás más, sin embargo, viviré
Eternamente, en la Sabiduría que les he enseñado. Todo lo que el hombre es, se
debe a su sabiduría, todo lo que el hombre será es el resultado de esa causa.

Escucha mi voz y sé superior al hombre común. Levanta tu vista hacia arriba,

deja que la Luz llene tu Ser, busca unirte a los Hijos de la Luz. Sólo el
esfuerzo nos hace crecer y nos eleva al plano donde la luz es Todo y es del Todo.
Sé tú el que controle todo lo que te rodea, nunca dejes que los efectos de tu vida te
dominen. Por lo tanto, crea constantemente causas más perfectas cada día, y a su
debido tiempo serás tú un Sol de la Luz.

Libre, deja que tu alma se remonte cada vez más alto, libre de la esclavitud y
grilletes de la negación de la noche. Eleva tus ojos al Sol rey del espacio y del
firmamento, a ti te toca ser un símbolo de la vida.
Aprende que tú Eres la Gran Luz, que lucirá perfecta en tu propia esfera cuando tú
seas libre. Jamás vuelvas a mirar el abismo oscuro, eleva tus ojos a los espacios
más altos, deja que tu Luz resplandezca libre en las alturas y tú serás un Hijo de
la LUZ.
 TABLA N° XII

LA LEY DE CAUSA Y EFECTO Y LA CLAVE DE LA PROFECÍA:

Escucha mis enseñanzas, oye la voz de Thoth, el Atlante. Yo he conquistado la ley

del tiempo-espacio, es mío el conocimiento del tiempo futuro. Yo, un hombre en
su marcha a través del espacio- tiempo, será UNO con el TODO.

Todo el futuro es un libro abierto para aquél que lo puede leer. Todos los efectos
traen sus causas, así como todos los efectos salieron de la primera causa. El
futuro no es liso o estable, sino que varía de acuerdo con las causas que traen
como consecuencia un efecto. Ten cuidado con las causas que siembras, y
seguramente encontrarás que todo es el efecto de las causas.

En el Gran Principio surgió un día la Primera Causa, la cual le trajo al ser humano
todo lo que existe. Tú mismo eres el efecto de una causa, y a su vez eres la
causa de otros efectos. Por lo tanto, debes cuidar que los efectos que produces
sean siempre las causas de los más perfectos efectos. Quiero que sepas que el
futuro jamás está en fijación, sino que éste sigue la acción libre de la voluntad
del hombre, a medida que se mueve a través de los movimientos del tiempo-
espacio hacia su meta, desde donde un nuevo tiempo comienza. El hombre puede
solamente leer el futuro a través de las causas que son las que traen los
efectos. Buscando dentro de la causación, seguramente encontrarás los efectos.

Escúchame mientras hablo del futuro, y de los efectos que le siguen a la causa.
Aprende que el hombre en su viaje hacia la Luz está siempre buscando cómo
escapar de la noche o negación. Siempre lo rodean tinieblas de la noche, como las
sombras rodean a las estrellas en el firmamento; y así como las estrellas en el
espacio, el hombre también tiene que llegar a brillar en las sombras de la noche.

Su destino lo conducirá siempre hacia adelante, hasta que sea UNO con la Luz; en
verdad, aunque su camino esté entre las sombras, también siempre ante él
resplandece la Gran Luz. Aunque el camino sea muy oscuro el hombre tiene que
conquistar las sombras que fluyen a su alrededor como una larga noche.

Lejos en el futuro vi que los hombres nacerán de la luz, libres de las tinieblas que
atan al Alma, viviendo en la luz sin las amarras de las tinieblas las cuales cubren
la luz, que es la luz de su Alma. Pero debes de saber que antes de que obtengas
esto, muchas más de las oscuras sombras caerán sobre tu luz, esforzándose en
apagarte con las sombras tenebrosas la luz de tu Alma que se esfuerza en ser libre.
Grande es la lucha entre la luz y las tinieblas, fue en toda la edad antigua y aún
sigue en esta edad siempre renovándose. No obstante, tú sabrás a su debido
tiempo, en un futuro lejano, que la luz lo será todo, y las tinieblas desaparecerán.

Escucha, oh hombre, mis enseñanzas, prepárate a defenderte a no dejar matar tu

luz. El hombre se ha levantado y el hombre ha caído, conforme las nuevas ondas
de consciencia fluyen del gran abismo debajo de nosotros, hacia el Sol que es su
meta. Ustedes, hijos míos, se han levantado de un estado que fue poco más o
menos el de las bestias, hasta que ahora entre todos los seres terrenales eres tú el
más grande ante mí, pero existen otros más grandes y poderosos que tú. Sin
embargo, te digo que, como tú, otros han caído antes, así también tú llegarás a un
fin, y sobre la tierra donde moras ahora, hombres barbados y salvajes morarán, y a
su vez ellos también se levantarán en la luz. Olvidada será la sabiduría antigua, sin
embargo, vivirá, aunque viva oculta de los hombres.

Es verdad que en la tierra que tú llamaste KHEM otras razas surgirán y otras razas
caerán, y tú serás olvidado por los hijos de los hombres. Sin embargo, tú te irás a
una estrella del espacio más allá de este planeta, dejándoles este lugar donde han
morado. El Alma del hombre se mueve siempre hacia adelante, y no está atado
a ninguna estrella. Va siempre moviéndose hacia su gran meta la que mira ante él,
donde se disolverá en la Luz del Todo. Siempre continuará hacia adelante, movido
por la Ley de Causa y Efecto, hasta que al final El y tú sean ambos Uno.

Después de que tú te hayas ido, otros vendrán a vivir en los lugares en que tú
vives, el conocimiento y la sabiduría será olvidada otra vez y sólo un recuerdo de
los Dioses vivirá. Así como Yo para ti soy un Dios por mi conocimiento,
igualmente ustedes también serán Dioses en el futuro debido a su conocimiento
muy superior al de los que vendrán de las edades; el hombre tendrá siempre
acceso a la Ley cuando él quiera.

Las edades o razas que vendrán, verán revivir la Sabiduría para aquellos que
heredarán tu lugar en esta estrella, ellos a su vez tendrán la sabiduría y
aprenderán a eliminar las tinieblas por medio de la Luz. Sin embargo, ellos
tendrán que luchar y luchar grandes esfuerzos a través de las edades para poder
lograr en ellos mismos la libertad de la luz. Muchos de los que queden atados en
las tinieblas se esforzarán en retener a otros, evitar que lleguen a la Luz; después
estallará ahí entre los hombres una gran guerra, que hará que la tierra tiemble y se
sacuda en su curso, y después los Hermanos de las Tinieblas entablarán la guerra
entre los Maestros de la Luz y los de las Tinieblas.

Cuando el hombre nuevamente conquiste el océano, y vuele en el aire, con alas

como los pájaros, cuando él haya aprendido a controlar la corriente que está en los
relámpagos, comenzará entonces la época de la guerra. Grande será la batalla
entre las tuerzas físicas, grande será la guerra entre las tinieblas y la luz. Las
naciones se levantarán una contra la otra a, usando las tuerzas de las tinieblas para
destruir la Tierra. Las armas de la guerra matarán a media humanidad hasta que la
mitad de las razas en la tierra desaparezcan. Después vendrán los Hijos del
Amanecer y darán su edicto a los hombres diciendo: “Oh hombres, dejen de
luchar contra sus hermanos, sólo así podrán encontrar la Luz. Dejen de ser
incrédulos, Hermanos, y sigan el verdadero sendero y conozcan sus verdaderos
derechos”.

Entonces los hombres dejarán de luchar hermano contra hermano, y padres contra
sus hijos. Entonces mi antiguo hogar de Atlántida se levantará del fondo del
océano. Entonces se desenvolverá la edad de la Luz, y todos los hombres buscarán
la Luz de su meta. Después los Hermanos de la Luz gobernarán al pueblo, y
será eliminada la oscuridad de la noche.

Es verdad que los hijos de los hombres progresarán hacia adelante y hacia arriba,
sus almas serán flamas de la Flama. El conocimiento y la sabiduría le pertenecerá
al hombre, pues se aproximarán a la Eterna Flama: la Fuente de toda la Sabiduría;
el lugar del principio, que todavía es UNO con el fin de todas las cosas, el
Absoluto.

En un tiempo que aún no ha comenzado, todos se unirán al UNO y UNO será el

Todo. El hombre es una Flama Perfecta del Cosmos y se tiene que mover
hacia adelante a un lugar en las estrellas. Siempre se moverán, aún de afuera de
este espacio-tiempo, dentro de otro más allá de las estrellas.

Por largo tiempo me han escuchado, hijos míos. Por largo tiempo han escuchado
la sabiduría de Thoth, ahora me aparto de ustedes para ir a las tinieblas, me voy a
los Salones de AMENTI, allí moraré hasta que en el futuro llegue otra vez la Luz
a los hombres. No obstante, sepan ustedes que mi Espíritu Eternamente estará con
ustedes guiando sus pasos hacia el sendero de la Luz.

Guarden los secretos que les dejo, y vivan seguros de que mi espíritu les guardará
siempre a través de la vida. Mantengan sus ojos siempre en el sendero de la
sabiduría, busquen la Luz como su meta final. No aten sus Almas a la esclavitud
de las tinieblas; procuren que libre ella aletee en su vuelo hacia las estrellas.

Ahora me alejo de ustedes para morar en el Amenti, sean ustedes mis hijos en esta
vida y la próxima. Llegará el tiempo en que ustedes también serán inmortales,
viviendo de edad en edad entre los hombres, como Maestros.

Guarden la entrada a los SALONES DE AMENTI, guarden los secretos que he

depositado entre ustedes, no permitan que la sabiduría le sea dada a los bárbaros,
el secreto lo deben conservar sólo para aquellos que buscan la Luz. Unan sus
Almas con la Gran Esencia, Unidos con la Gran Luz, dejen que su Consciencia
Superior domine. Que me llamen cuando me necesiten, usen mi nombre tres veces
seguidas así CHEQUETET, ARELICH, VOMALITES.
 TABLA N° XIII

LAS CLAVES DE LA VIDA Y DE LA MUERTE:

Escuchen la sabiduría, la Palabra que les llenará con la Verdadera Vida. La

Palabra diseminará las tinieblas, oigan la Voz que eliminará la noche.

El Misterio y la Sabiduría he traído a mis hijos. Conocimiento y Poder que vino

de la antigüedad. ¿No sabes que todos los Misterios se revelarán cuando al fin
encuentres la Unidad con el Todo? Serás Uno con los Maestros de los Misterios,
conquistador de la muerte; y serás Maestro de la Vida. Aprenderás ante la flor de
Amenti, en el capullo de vida que resplandece en esos Salones. En Espíritu puedes
llegar los Salones del Amenti, y tomar de nuevo la sabiduría que vive en la luz.
Sabe que la puerta que conduce al poder es secreta. Sabe que la puerta que
conduce a la vida está pasando por la muerte. A través de la muerte sí, pero no lo
que ustedes conocen como muerte, sino una muerte que es vida, y es fuego y es
luz.

¿Deseas conocer los secretos que están profundamente escondidos? Busca

entonces en tu corazón, donde el conocimiento está confinado. Aprende que,
dentro de ti, el secreto está oculto, la fuente de toda vida, y la fuente de toda clase
de muertes.
Escúchame mientras te digo un secreto que fue revelado, un secreto de la
antigüedad.

Profundo dentro del corazón de la tierra yace la flor, la fuente del Espíritu, la cual
ata todo en sus formas. Pues debes saber que la Tierra es un cuerpo viviente como
tú estás vivo dentro de tu cuerpo físico.

La Flor de la Vida es tu Verdadera casa Espiritual, y sus arroyos penetran la

tierra, como tú te metiste dentro de tu forma física, dándole vida a la Tierra y a sus
hijos, renovando el Espíritu de forma en forma. Este es el Espíritu, en su flama
dentro de la forma de tu cuerpo físico, él formó y modeló la forma dentro de la
cual te manifiestas en la tierra.

Tu forma es dual, balanceada entre dos polaridades mientras estés en su forma

física. Sabe que cuando se apresura tu corazón, LA MUERTE se aproxima, y esto
se debe a que tu equilibrio se ha sacudido, es porque un polo se ha perdido (late
muy ligero el corazón antes de parar).

Sabe que mientras esté en perfecto equilibrio, no podrá tocarlo el dedo de la

MUERTE. Hasta un accidente puede sólo llegar cuando el equilibrio se ha
perdido. Cuando se está en un equilibrio balanceado, se puede vivir mucho tiempo
y no llega la Muerte. Debes de ser un total conjunto balanceado, existiendo con
los dos polos balanceados. Cuando un polo es desequilibrado, enseguida se
desequilibra tu vida, y entonces la fría Muerte se aproxima y el cambio tiene que
llegar a la vida desequilibrada.

El secreto de la vida en AMENTI consiste en restaurar el equilibrio de los polos.

Todo lo que existe, tiene forma y está vivo debido al Espíritu de Vida en sus
polos.

¿No ves que en el corazón de la Tierra está el balance de todo y que tú existes
sobre ella? La fuente de tu Espíritu es atraída del corazón de la Tierra, pues en tu
forma física tú eres en verdad uno con la Tierra. Cuando hayas aprendido a
mantener tu propio equilibrio, entonces podrás atraer el equilibrio de la Tierra, y
existirás entonces, tanto tiempo como la tierra existe, sólo cambiando en forma
cuando la tierra también cambie. Sin probar de la muerte, unido con este planeta,
retendrás tu forma en el Amenti hasta que todo haya pasado.

Escucha, te daré el secreto, la manera de que tú también no tengas que cambiar

de cuerpo físico. Una hora todos los días debes acostarte con tu cabeza puesta en
el lugar del polo positivo (el norte), por otra hora todos los días tu cabeza puesta
en el lugar del polo negativo (el sur). Una hora, acostado frente al Norte y otra
hora, frente al Sur. Mientras tu cabeza esté colocada hacia el norte, concéntrate
en tu cuerpo físico desde el pecho a la cabeza; y cuando tu cabeza esté colocada
en el sur, concéntrate de tu pecho a los pies. Permanece en perfecto balance
mental un día completo de cada siete días cuando menos, y tu poder para retener
el total de su fuerza será tuyo. Si eres viejo, tu cuerpo se refrescará y tu fuerza
será como la de un joven. Este es el secreto conocido por los Maestros, con el
cual ellos apartan los dedos de la Muerte. No dejes de seguir el sendero que te he
mostrado, si te descuidas significaría la muerte.

Escucha mis palabras, y sigue este sendero. Conserva tu equilibrio y vivirás una
larga vida.
Escucha mis enseñanzas, ellas te darán poder sobre la Muerte. Cuando al final de
tu obra señalada desees pasar de este mundo a los planos donde los Soles de la
Mañana viven la existencia de los Hijos de la Luz, podrás pasar sin dolor y sin
tristeza, hacia el plano donde está la Luz Eterna.

Primero, acuéstate descansando frente al oriente, entrelaza tus manos sobre la

Fuente de tu vida (el plexo solar), concéntrate en ese asiento de vida, hazlo
girar visualizando un gran disco de luz divídelo en dos discos, envía uno hacia
el norte y el otro hacia el sur. Relaja bien todo tu ser un buen rato y de tu ser
saldrá una chispa plateada. Irá hacia arriba y hacia adelante, al Sol de la
mañana, mezclándose con su luz, y en unidad con su fuente. Allí flameará
hasta que el deseo tome forma, entonces regresará a un lugar ya formado.
Sepan que así pasan las Grandes Almas, cambiando a voluntad de vida en vida.
Así pasa también el Avatar, pidiendo su Muerte como pide su propia vida.

Esta es la clave para usar y colocar la consciencia a la hora de la Muerte de

manera que la Memoria no se pierda y sea llevada de una encarnación a la
otra.

Aprende el secreto que es Maestro del Tiempo. Aprende que aquellos a quienes
llamas Maestros, son Seres capaces de recordar sus vidas pasadas. Grande es
este Secreto, pero es fácil de dominar, dando el poder sobre el tiempo. Cuando
sientas que la muerte se aproxime, no sientas miedo, sabiendo que tú eres el
Maestro de la Muerte.

En este momento relaja tu cuerpo, no resista con tensión, visualiza en tu corazón

la llama de tu Alma, luego rápidamente llévala al lugar del triángulo, retenía ahí
por un momento, luego muévela a la meta, su lugar está entre el entrecejo, el
lugar donde la memoria de la vida debe gobernar. Mantén mentalmente tu
flama ahí en el asiento de tu cerebro, hasta que los dedos de la Muerte se apoderen
de tu Alma. Después, a medida que pases al estado de transición, seguramente
las memorias de las vidas las llevarás también. Entonces el pasado será uno con
el presente, toda la memoria será retenida. Libre serás de toda retrogresión, las
cosas del pasado vivirán en el presente en tu hoy.

Han escuchado la voz de mi sabiduría, obedezcan y vivirán a través de las edades

como Yo.