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Deucalion (Deurrish)

Beacon Hills, una ciudad llena de misterios.


Eichen House, el peor lugar que podrías pisar.
Un anuncio de trabajo, un joven soldado y un lugar lleno de secretos.
Capitulo 1

La noche había caído en Beacon Hills, un auto entro a la ciudad, en su placa se podía
notar que no era originario de ahí. El auto avanzo por varias calles, hasta que se
detuvo frente a un gran edificio, el motor se apago y de dentro del auto, salio un
joven de al menos unos 27 años.

Jordan Parrish había sido retirado del ejercito de los Estados Unidos, después de que
quedo inconsciente cuando estallo una bomba, que él intentaba desactivar. Había
estado vagando en su ciudad, pero él necesitaba algo más, necesitaba sentirse útil,
necesitaba salir de su propia ciudad.

Así fue como le llego una noticia, necesitaban un guardia en un instituto mental, a
Jordan le pareció el trabajo perfecto. Estaría lejos de su ciudad, el trabajo no era
peligroso, y no tendría que interactuar con nadie más que con los internos. Envió su
curriculum y espero, rogaba al cielo, que le dieran el trabajo. En una semana, le llego
un correo a su e-mail, lo habían aceptado, y lo querían en la ciudad a más tardar el
primero del siguiente mes.

Como solo tenia su departamento, decidió alquilárselo a uno de sus compañeros, que
le daría mejor uso, pues la novia de este, estaba embarazada. Alisto en dos maletas
sus cosas y tomando su auto, empezó a conducir hacia la extraña Beacon Hills.
Felizmente las ciudad donde vivía era una ciudad que estaba muy cerca de Beacon,
solo tardo un día en llegar, salio en la noche y llego también en la noche.

Jordan miro el gran edificio donde trabajaría “Eichen House”, tenia que admitir que
el nombre le aterraba, pero ¿acaso no todos los institutos mentales daban miedo?

-Bueno, esta es tu nueva vida Jordan. Es hora de que comencemos un nuevo


capitulo.- se dijo así mismo.

Tomando sus maletas se acerco al edificio, estaba nervioso, algo le decía que ese era
el lugar a donde pertenecía. Toco el interruptor de afuera.

-¿Quien?- preguntaron.

-Buenas noches, soy Jordan Parrish. Vengo a hablar con el director.- contesto.

-Si, lo estábamos esperando, pase.- dijo la voz, a la vez que las grandes puertas de
fierro se abrieron.

Llevando sus maletas entro al terreno, todo era lúgubre, un lugar que en definitiva
aterraría a cualquiera. Al llegar a la puerta principal, esta se abrió y una mujer lo
recibió.

-¿Jordan Parrish?- pregunto, a lo que el asintió.- Deja tus maletas aquí y sígueme.-

Jordan obedeció lo que la mujer le dijo, dejo sus maletas en un costado y la siguió,
miro a los alrededores, algunos pacientes se encontraban fuera de sus habitaciones,
pero los enfermeros y los guardias parecían no incomodarse con eso.
Siguiendo a la mujer, subió al segundo piso, donde tuvo que esperar un momento,
pues tenían que darle permiso para entrar a la oficina del director. Tras unos
segundos, le permitieron entrar.

-Jordan Parrish, un gusto, soy Richard Dawson, director de Eichen House.- se


presento el hombre estirando su mano.

-Es un gusto señor.- contesto Jordan estrechando su mano con la del hombre.

-Bien, ¿que tal el viaje? Un poco cansado, me imagino.- comento Richard volviendo
a sentarse.

-No mucho, cuando has estado en la guerra, te acostumbras a no dormir.- contesto


con una sonrisa.- Pero, lo importante es que llegue.-

-Bueno, entonces hablemos de tu nuevo trabajo, nos impresiono tu curriculum, nunca


hemos tenido a un ex militar en nuestro centro. Antes de hacer esto más profundo, te
diré lo superficial, seras el guardia de un interno.- empezó a explicar el hombre.

-¿De uno solo?- pregunto confundido.

-Es un interno peligroso, necesitamos que seas su guardia y si es posible lo atiendas.-


continuo Richard.

-¿Atenderlo?-

-El hombre del que te hablo es ciego, Jordan.- contesto el director.- Sabiendo eso,
¿aceptas el trabajo?-

Jordan analizo todo lo dicho por el hombre, aún le faltaba saber más, pero debía
aceptar para que esa información se le fuera proporcionada. Tenia que elegir bien.

-Acepto el trabajo.- accedió el chico.

-Bien, firma este documento, es para que todo lo que veas aquí se quede en
confidencia.- le explico y Jordan asintió. Tomo los papeles y firmo.- Perfecto, ahora
te explicare más a fondo. Primero, este es un instituto mental, tenemos internos como
los que has visto al entrar, pero también tenemos unos pacientes que son algo
especiales.-

-¿Que tan especiales?- pregunto Jordan preocupado.

-Ya lo veras, este interno al que debes cuidar es traicionero, te dije que es peligroso,
pero ahora esta, como decirlo, sedado. Sera imposible que te lastime.- explico.

-¿Cuales serán mis obligaciones?-

-Cuidar del interno, acompañarlo en sus horas de paseo, si es posible, me atrevo a


decir que el hombre le pedirá que le lea algo.- dijo el hombre.
-Señor, tengo una pregunta, ¿por que los otros guardias o los enfermeros no se hacen
cargo del interno?- pregunto confundido Parrish.

-Bueno, eso es por la reputación que el hombre lleva encima.- contesto Richard
apoyando sus brazos en la mesa.- Este hombre es un asesino, mato a su manada....-

-¿Manada?-

-Si, la manada es la familia, él mato a su familia, y a muchas otras personas. Aún nos
sorprende que no haya matado a sus dos hijos.- dijo pensando.- También te
encontraras con otros internos iguales, puedes ignorarlo, solo tienes que estar atento a
tu interno.-

-Esta bien.-

-Bueno, te dejare ir, para que puedas conseguir un departamento donde puedas
quedarte. Tu sueldo sera de 5 000, cada medio mes tienes un día libre, también tienes
derecho a un mes de vacaciones, que podrás tomar después de seis meses de trabajo.
Con respecto a los días que te tienes que quedar aquí, tendrás tu cuarto en la celda del
hombre.-

-¿Dormiré con el interno?- pregunto Jordan confundido.

-No, la celda del interno es doble, el dormirá en la celda de al fondo, y tú en la de


adelante.- explico el hombre.- Entonces, porque no ahora vas a encontrar un nuevo
departamento, y mañana a las 6 te esperamos.-

-Gracias señor, entonces mañana me tendrá aquí.- le dijo levantándose y estrechando


la mano del hombre.

Salio de la oficina y bajo las escaleras, al llegar a la recepción, ya no había ningún


interno, la misma mujer que lo había llevado donde el director, se le acerco.

-¿Ya te vas querido?- pregunto la mujer.

-Si, volveré mañana. Ahora tengo que encontrar un buen departamento.- contesto
Jordan.

-¿Sabes? Hay un edificio que alquila mientras vende el departamento, esta en el


centro de la ciudad, se que tienen varios departamentos disponibles, y vienen
amueblados.- le contó

-Oh, eso es perfecto, iré a buscar el edificio. Mañana vendré a mi primer día de
trabajo.- dijo Jordan tomando sus maletas.

-Cierto, de una vez te daré tu uniforme, ven para que te midas.- le dijo, Parrish dejo
sus cosas otra vez, y la siguió hasta un pequeño cuarto.

Después de elegir su uniforme y que la mujer le diera lo que necesitaría en la semana,


volvió a tomar sus cosas y salio de Eichen, llego a su auto y se metió, para luego
conducir hasta el centro. Al llegar, se estaciono y empezó a caminar, quería conocer
un poco la ciudad, antes de quedarse encerrado.

-Si, creo que estoy perdido.- se dijo mirando a todos lados.

-Disculpe, ¿necesita ayuda?- pregunto un chico de unos 17 años.

-Si, me dijeron que por aquí hay un edificio que alquila departamento a la vez que los
vende.- contesto.- Y pues, no se donde esta.-

-Oh, ese sitio esta justo aquí.- dijo el menor señalando el edificio que estaba frente a
ellos.

-Vaya, en definitiva me perdería en esta ciudad.- comento Jordan riendo.- Gracias...-

-Stiles, Stiles Stilinski.- se presento el chico.- ¿Así que eres nuevo? ¿Has venido a
trabajar a Beacon?-

-Si, en Eichen House.- contesto Jordan, y vio como el menor se estremecía.- Mi


nombre es Jordan Parrish.-

-Es un gusto. Y bueno, suerte en tu nuevo trabajo Jordan.- se despidió el chico.

Jordan lo vio alejarse, Stiles parecía ser muy agradable, entro al edificio y toco la
primera puerta. Esta se abrió, y salio un hombre.

-Buenas noches, me dijeron que aquí se alquilan departamentos amueblados.- dijo.

-Si joven, yo los alquilo y si quiere mientras paga el alquiler, también estará pagando
la compra del departamento.- le explico.

-Si, eso es lo que quiero. Yo empezare a trabajar en Eichen House, tengo días libres,
pero no todo el tiempo, yo le pagare todo a tiempo, solo necesito un lugar a donde
venir a dormir, cuando tengo mi día libre.- explico Jordan mientras el señor asentía.

-Calma muchacho, mientras no dejes de pagar el alquiler y los servicios, yo no tengo


problema si solo vienes a dormir una vez al mes.- le dijo el hombre.- Por cierto, soy
Johan Derrick.-

-Jordan Parrish.- se presento el menor.

-Bueno Jordan, entra para que firmes el contrato.- le dijo, permitiéndole la entrada.

Jordan entro, el departamento del señor, era el mismo modelo que el de los otros
departamentos, llenaron el contrato y luego firmaron los documentos.

-Bueno, sígame, lo llevare a su nuevo departamento. Usted es ahora legalmente el


dueño de todas las cosas que están dentro, tiene el derecho de cambiar los muebles,
usted me entiende- le explico Johan mientras subían por el ascensor.- Los
departamentos que están desocupados son los del quinto piso, por el momento serias
él único inquilino de ese piso. Hay un solo televisor, el del cuarto principal.-

-Perfecto, tampoco soy de mucho televisión, soy más de libros.- explico Jordan.

-Bien, este es su departamento joven Parrish.- dijo el hombre abriendo la puerta.- Sus
llaves, y si mañana se va temprano, deje el departamento cerrado, yo al transcurso de
la semana le haré una pequeña limpieza.-

-Muchas gracias Johan. Una cosa más, ¿sabes donde puedo ir a comer algo?-
pregunto Parrish sonriendo.

-Claro, al frente hay varios restaurantes.- le explico.- Bueno muchacho, me retiro,


disfruta de tu departamento.-

-Gracias.- Jordan entro a su nuevo departamento, y lo primero que hizo fue ir a su


cuarto a tirarse a su cama.- Al fin, una cama.-

Tras estar un rato echado, se levanto y guardo sus cosas en los cajones, tomando su
toalla, probo su nueva ducha y se dio el baño que necesitaba, amaba el agua, le
encantaba cuando el agua le caía, era algo perfecto para él.

Después de la ducha, se cambio y salio del departamento, bajo por el ascensor, y lo


primero que hizo fue meter su camioneta en el garaje, luego camino hasta el frente de
la calle, donde se puso a ver que podía comer, hasta que decidió que ese día comería
pizza.

-Aquí tiene su pizza señor.- le dijo la chica sirviéndole.

-Gracias.- contesto Jordan.

-¿Es nuevo por aquí?- pregunto.

-Si, recién hoy llegue a la ciudad.- dijo Parrish.

-Oh, ¿vienes a trabajar?- la chica no paraba de sonreír.

-Si, en Eichen House.- contesto el chico, a lo que la mujer dio un respingo.- ¿Sucede
algo?-

-Es que ese lugar es muy aterrador, y lo que se dice que pasa adentro.- contesto la
chica.

-¿Que cosa sucede?- Jordan quería saber.

-Son solo rumores, se dice que en ese sitio en el sótano hay gente que se ven como
nosotros, pero que en verdad son monstruos.- contesto la chica algo atemorizada.

-¿Monstruos?- pregunto Parrish.


-Si, ya sabes, esos que tienen garras y colmillos.- explico.

-¿Quien te dijo eso?-

-Nadie, yo antes fui interna de Eichen y todos hablaban del ala escondida.- le contó.-
el ala que según muchos se escondía en el sótano. Cierto día, sin que los guardias se
dieran cuenta, baje al sótano, lo único que recuerdo haber visto, fueron unos ojos
rojos. Después de eso, no me atreví a bajar, y aunque me dieron el alta, trato de no
hablar de eso con nadie, no quisiera que me vuelvan a meter.-

-¿Y por que me lo dices a mi?- pregunto Jordan mirándola.

-No lo se, simplemente quería que lo supieras.- dijo la mujer alejándose.

-Oye, ¿cual es tu nombre?- pregunto antes de que fuera a atender a alguien más.

-Meredith.- contesto con una sonrisa.- Suerte en tu nuevo trabajo Jordan Parrish.-

Jordan asintió y se puso a comer su pizza, hasta que se dio cuenta, ¿como es que
Meredith sabia su nombre? Él no se lo había dicho, levanto la cabeza y busco a la
mujer, pero parecía que se había esfumado, confundido termino de comer y se acerco
a pagar.

-Disculpe, ¿donde esta Meredith?- pregunto Jordan al cajero.

-¿Meredith?- pregunto el chico.

-Si, ella me atendió.- contesto Parrish.

-No tenemos ninguna mesera llamada Meredith.- le dijo el chico mirándolo.-


¿Necesita algo más?-

-No, gracias por todo, quédese con el vuelto.-

Jordan salio del local y camino con tranquilidad hacia su nuevo edificio, dándose
cuenta de muchas cosas, Meredith había tomado su pedido antes que otra mesera,
viendo eso la chica quería hablar con él desde un principio, también estaba ese echo
de que la chica sabia su nombre, sin que el se lo dijera.

Al llegar a su departamento, trato de olvidar todo, mañana empezaría su nuevo


trabajo, necesitaba descansar, se tiro en su cama listo para dormir, más lo único que
vio al dormir fueron unos ojos rojos que lo llamaban.

El molesto sonido del despertador, lo hizo girarse más de tres veces en la cama, tomo
su celular y apago la alarma, para luego quedarse tirado un rato en la cama.

-Vamos Jordan, hoy es tu primer día de trabajo.- se dijo así mismo.


Tomo un bolso, guardo todo su uniforme, y otras mudas de ropa, se arreglo bien, y
salio del departamento, ni siquiera tenia ganas de desayunar. Bajo en el ascensor,
pero antes de salir, toco la puerta del señor Johan, quien salio al instante.

-Ya me voy a trabajar señor Johan, le dejo a cuidado mi departamento, y esto de


adelanto.- le dijo entregándole dinero.- Nos vemos a mitad de mes.-

-Suerte en tu trabajo hijo.- lo despidió.

Eichen House no estaba tan lejos de su nuevo departamento, así que decidió ir
caminando a su nuevo trabajo, total no llegaría tarde. A penas llegó, toco el
intercomunicador.

-Buenos días.- saludo una mujer al otro lado.

-Buenos días, soy Jordan Parrish.- saludo el hombre.

-Oh, ya te abro Parrish.- le dijeron y al instante las puertas se abrieron.

Jordan entro y de frente se paso al recibidor, marco su asistencia en un reloj, y luego


espero, pues el director bajaría, para llevarlo hasta la celda donde se encargaría del
interno.

-Buenos días Jordan, ¿listo para tu primer día?- pregunto el hombre llegando.

-Si señor.- contesto Jordan.

-Bien, sígueme.-

Parrish siguió al hombre, pero a diferencia de otros enfermeros y guardias, ellos no


siguieron por el mismo camino, si no que bajaron a lo que el joven creía era el
sótano.

“Se dice que en ese sitio, en el sótano, hay gente que se ven como nosotros, pero que
en verdad son monstruos.”

Las palabras de Meredith resonaron en su mente, acaso ¿él tendría que cuidar de uno
de esos monstruos? Pasaron por varias celdas.

-Como te dije ayer Jordan, este no es un centro mental normal, y tu nuevo trabajo
tampoco. Ahora Parrish, bienvenido a Eichen House, hogar de lo sobrenatural.- dijo
el director.

Jordan siguió al director, mientras por una de las celdas, una mujer con ojos azules lo
miro, luego en otra celda, vio una mano con escamas agarrar un barrote. Pero ese no
era el piso donde el nuevo guardia, era más abajo.

Pasaron al lado de unas celdas con vidrios transparentes, un hombre lo miro y le


sonrió con sorna, mientras que una mujer le hizo una señal de muerte. Pero no fue
hasta llegar donde una joven pelirroja estaba que todo se volvió extraño, la joven se
pego de la nada al vidrio.

-Si sigues el camino de tus compañeros, si haces lo mismo que ellos hacen, morirás.-
dijo la chica.

-Es suficiente Martín.- dijo uno de los guardias, golpeando el vidrio, a lo que la chica
se refugio en una esquina de su celda.

-Basta Bronski.- dijo un señor algo mayor que Jordan.

-Jordan, te quiero presentar al doctor Valack.- dijo el director.- Él es quien les da las
inyecciones a nuestros internos. Doctor, el guardia nuevo, Jordan Parrish.-

-Un gusto Jordan, y espero que te vaya bien.- dijo el hombre sonriendo.- Déjame
presentarte con tu interno. Deucalion, tu nuevo guardia llegó.-

Jordan se acerco y entonces vio como un hombre que estaba echado en una cama, se
volteo, sus ojos eran negros grisáceos, ni siquiera había alguna pista de blancura.

-Bienvenido Jordan Parrish, tú y yo nos vamos a divertir mucho juntos.-

Capitulo 2
-Tranquilo Deucalion, no asustes a tu nuevo guardia.- le advirtió Bronski sonriendo
con burla hacia Jordan.

-A diferencia de ti Bronski, que con un rugido te orinas en tus pantalones, Jordan no


esta asustado, es más, esta intrigado, ¿verdad?- pregunto Deucalion sin mirar a nadie.

-Pues si, en verdad es así- contesto Jordan.

-Parece que se pueden llevar bien.- dijo Valack sonriendo.- Entonces, la hora del
almuerzo, sera indicada mediante los altavoces, el interno te dirá si quiere salir o
comer en su celda, tras eso, también se indicara la hora que tienen para “convivir” en
su “patio”. Deucalion es el último en tomar una ducha, queremos evitar problemas, tu
trabajo es ayudarlo en ese momento.-

-Esta bien.- contesto el guardia.

-Bien, nos retiramos, y suerte.- el director, junto a Valack y el enfermero se fueron.

Jordan los observo irse, en la puerta había dos guardias, pero en todo el pasillo ni
uno, iba a ser el único guardia ahí, algo le decía que los internos se lo comerían vivo.
Antes de ingresar a su celda, fue a la celda de la chica pelirroja, toco en el vidrio,
hasta que la chica levanto su cabeza.

-¿Estas bien?- pregunto.

-¿Por que te preocupa?- pregunto ella.

-Porque no me gusto que ese tal Bronski te gritara, me asustaste, pero no era para que
él te tratara así.- contesto Jordan sonriendo.

-Tú eres diferente a ellos.- dijo la chica acercándose.- Tal vez si vivas.-

-¿Si hiciera lo mismo que mis compañeros moriría?- pregunto Parrish.

-Las voces, ellos dicen que los enfermeros y guardias morirán de forma desgarradora,
por eso te advertí.- dijo la chica.

-Soy Jordan Parrish, ¿y tú?-

-Lydia Martín.- contesto la chica, dejando ver una pequeña sonrisa, era muy linda,
pero parecía que no la atendían muy bien.

-Bueno Lydia, si alguna vez necesitas algo, yo estoy acá al lado.- dijo Jordan
sonriendo.

-Suerte con Deucalion, no creas todo lo que dicen de él, la verdad es mucho más
hermosa y triste, que la mentira que te han dicho.- dijo Lydia antes de volver a su
cama.
Jordan se quedo pensativo, ¿en que le habría mentido el director con respecto a
Deucalion? Entro a la celda, el hombre había vuelto a estar como lo había
encontrado, sentado en su cama, con los ojos cerrados y la cabeza hacia arriba,
Jordan lo observo, quería saber si estaba dormido o solo no quería hablar con él.

-Eso fue lindo de tu parte.- dijo el hombre sorprendiéndolo.- Ningún otro guardia es
amable con Lydia, le tienen miedo.-

-¿Por que le tienen miedo? Parece ser una chica muy linda.- dijo Jordan.

-¿Sabes lo que es ella? ¿Sabes lo que soy yo?- pregunto Deucalion girando su cabeza
hacia donde estaba él, pero sin abrir los ojos.

-No, solo me dijeron que eres peligroso.- contesto el guardia.

-Peligroso, si fuera peligroso ya me habría ido de aquí, los hubiera matado a todos.-
dijo el hombre sonriendo.

-Pero, te tienen sedado.- añadió Jordan.

-Un pequeño secreto guardia, nadie aquí esta sedado, Valack no nos seda.- confeso el
hombre riendo.- Él esta de nuestro lado, bueno, tiene que estarlo.-

-¿A que te refieres?- pregunto Parrish acercándose.

-Hace tiempo, antes de que llegara a estar aquí, le salve la vida a Valack, él tiene una
deuda, él es parte de mi manada.- contesto Deucalion.

-¿Manada? El director dijo que mataste a tu manada, el me dijo que manada era algo
así como tu familia.- dijo Jordan.

-Oh por Dios, ese idiota no te dijo nada.- comento el hombre, para luego pararse y
tomar el bastón que estaba a su lado.

-¿Necesitas algo?- pregunto el guardia parándose y acercándose a la celda.

-Puedo yo solo.- contesto Deucalion, quien con ayuda de su bastón se acerco a una
mesa que estaba en una esquina de la celda. Tanteando, tomo un libro y se acerco a la
pared de vidrio que conectaba con la “habitación” de Jordan.

-Abre la ventanita.- explico el hombre, Jordan miro la puerta de la celda, en el medio


de ella, había una ventana, suponía que por ahí, le daban de comer al hombre.

-Listo.- dijo, dejándola abierta.

Al oírlo, el hombre paso el libro hasta el lado del guardia, quien lo tomo, el titulo del
libro era “Bestiario”.

-Ese libro te sera de mucha ayuda.- dijo Deucalion volviendo a la cama.- Todo lo que
necesitas para sobrevivir aquí, esta en ese libro.-
-No entiendo, esto habla de monstruos, ¿hombres lobo?- se pregunto Jordan leyendo
una parte del libro.

-Lo que soy.- dijo el hombre llamando la atención del guardia, quien volteo a verlo,
justo cuando dejaba salir sus garras.- Soy un alpha.-

Jordan lo miro con asombro, gracias a Dios que había ese vidrio que lo aislaba del
hombre. Pero entonces, se sintió horrible, él no era quien para juzgar a otros, y no iba
a empezar ahora.

-¿Como paso?- pregunto.

-Simplemente nací así, si quieres que te cuente como paso todo, como se convirtió el
primer hombre lobo, eso no lo se. Hay varias leyendas.- contesto Deucalion.- No
estas asustado, ¿por que?-

-No lo se, creo que primero tengo que conocerte bien, como para asustarme.- contesto
Jordan sonriendo.- Entonces naciste, ¿otros no nacieron?-

-No, otros fueron mordidos, por otros lobos, por alphas.- explico el alpha.

-¿Todos los de aquí son como tú?- pregunto Parrish.

-La mayoría, pero hay más, sigue mirando el libro.- indico Deucalion.

-Banshee.- nombro Jordan.

-Eso es lo que Lydia es.- contesto el hombre.

-¿Las banshee´s no presagian la muerte?- pregunto el guardia.

-Así es, Lydia lo hace, su grito es el anuncio de una muerte. Había otra banshee, pero
escapo.- le contó Deucalion.

-¿Como escapo?-

-Nadie lo sabe, pero ella jamás estuvo aquí abajo, ella estaba arriba, creo que ni ella
sabia que era una banshee- contesto el otro.- ¿Que más?-

-Coyote- leyó Jordan pasando la pagina.

-Como nosotros.- dijo el hombre.

-¿Kitsunes?- pregunto el guardia.

-Zorros japoneses, hay una aquí, es muy tímida, casi ni habla la pobre.- menciono el
alpha con pena.

-Kanima. ¿Por que el dibujo tiene alas?- pregunto con temor Jordan.
-Es su forma final, hay uno completo aquí, y se que hay un lobo que fue un kanima.-
contó Deucalion, a la vez que jugaba con sus lentes.

-¿Es posible?- Parrish parecía muy interesado en saber todo sobre este nuevo mundo,
cosa que al alpha le agradaba.

-Si, sobre todo, si primero ese lobo no sabia quien era, no sabia su verdadera
identidad.- explico.- ¿Que más hay?-

-Wendigos.- leyó Jordan.

-Ellos comen gente.- dijo Deucalion, a lo que el menor lo volteo a ver.- Es difícil
alimentarlos, por lo que oigo, los internos que mueren o se suicidan, son su alimento,
hay una familia entera aquí, sería un peligro dejarlos libres.-

-Espero no encontrarme con ellos.- comento el guardia.

-No creo que eso suceda, no los dejan salir con nosotros, como te dije, muy
peligrosos.- contesto.- Hay otros seres, que ese libro no menciona.-

-¿Como cuales?- pregunto Jordan.

-Quimeras.-

-¿Que son?-

-Mutaciones, combinaciones de genes, unos tipos, llamados los doctores del miedo,
las crearon, cuando los mataron, trajeron a las quimeras, hay tres tipos, porque los
otros, lamentablemente murieron. Uno es un lobo mitad coyote, la otra una loba
mitad jaguar, y el ultimo un camaleón mitad.... Mmmm, en verdad no se que otra
mitad sea, es confuso.-

-¿Quien los trajo aquí?- pregunto Parrish frunciendo el ceño.

Antes de que Deucalion pudiera responder, un voz femenina hablo, y la reja interna
de la celda se abrió.

-Ah, nuestra hora libre.- dijo Deucalion tomando el bastón.- Vamos Parrish, te
presentare con todos, eres como el juguete nuevo, todos querrán estar cerca de ti,
pero al final, seguirás siendo mio.-

Jordan estaba parado al lado del alpha, quien estaba cómodamente sentado en uno de
los muebles, de la pequeña biblioteca. Así era el patio de los internos, había
estaciones, la mini biblioteca, el mini espacio para ver televisión, otro espacio
pequeño donde algunos se dedicaban a escribir o pintar. Hasta había un espacio para
que se ejercitaran, aunque Jordan no entendía porque debía haber alguno, pero dejo
de pensar en eso, cuando recordó, que todas las prisiones en el país, también tenían
algo así.

-Siéntese guardia, no va a crecer más.- dijo Deucalion riendo.

-Soy el único guardia aquí.- reconoció Jordan.- Y todos parecen mirarme con ganas
de matarme.-

-Es natural, piensan que eres como los otros guardias, tranquilo, mientras no te alejes
de mi lado, nada malo te pasara.- comento el alpha con tranquilidad, para luego
pararse, y caminar hasta los libros.- Detesto que los libros par invidentes no sean más
variados, llevo leyendo el mismo libro hace dos años.-

-¿Quieres que te lea alguno?- se ofreció Parrish.

-¿Como?- Deucalion estaba sorprendido.

-¿Que si quieres que te lea un libro? A mi no me molesta, también amo leer.-


contesto el oficial con tranquilidad.

-Vaya Parrish, me asombras a cada minuto.- dijo el alpha.- ¿Ves por ahí Flores En El
Ático? Si no lo encuentras, posiblemente Peter lo tenga.-

-¿Quien es Peter?- pregunto Jordan.

-El que esta a tu lado, guardián.- contesto otra voz, exactamente al lado de Parrish.

Jordan se giro, frente a él estaba el mismo hombre que le había echo la señal de
muerte cuando entro. El hombre era imponente y aterraba a cualquiera.

-Peter, te presento a Jordan Parrish, mi guardia.- dijo el hombre, teniendo mucho


cuidado en recalcar lo ultimo.

-Si, lo vi pasar junto a Richard.- dijo Peter sonriendo.- Peter Hale, ¿ya sabes que
somos?-

-Si, Deucalion me contó.- contesto Jordan, no se iba a dejar intimidar.- Tú eres un


hombre lobo, ¿verdad?-

-Un alpha.- añadió Peter, cambiando el color de sus ojos.- La pequeña Lydia me
contó que fuiste amable con ella, es bueno saber que al menos hay un guardia con
cerebro en este lugar.-

-¿Gracias?- pregunto Jordan confundido.

-Toma, este es el libro que Deucalion quiere.- dijo dándole el libro.- Bien, iré a ver si
alguien necesita algo.-

-Peter es un buen hombre, aunque deja salir su maldad cuando quiere.- contó
Deucalion sonriendo.
-¿Desde hace cuanto esta aquí?- pregunto Jordan sentándose junto al alpha.

-Es una historia para otro momento, no creo que a Peter le guste oír que hablen de él,
y menos de eso.- contesto el hombre.

Jordan no dijo nada más, en cambio se puso a ver a los demás internos, no le parecía
justo que ellos no recibieran luz del sol.

-¿Como es que alguien creo esto sitio? Me refiero, se que hay internos, que si están
enfermos, pero esto, atraparlos a ustedes. ¿Como inicio esto?- pregunto preocupado.

-Sinceramente, no tengo la menor idea. Si sabia que la gente era metida aquí, pero no
sabia quien inicio esto, y aún no lo se.- contesto Deucalion.

-Cuando estuve bajando con el director, note que hay un piso, el de arriba, que hay
internos como ustedes, ¿por que ellos están arriba y ustedes aquí?- pregunto Jordan
curioso.

-A ellos los estudian, quieren saber porque somos como somos, es un poco enfermo,
a parte, ellos son los más dóciles. Nosotros, bueno, no dejaríamos que nos hicieran
cosas, sin morderlos, o arañarlos.- dijo el alpha sonriendo, parecía haberse acordado
de algo gracioso.

-¿Quieres que te lea de una vez? O ¿lo hago en la celda?- pregunto Jordan.

-En la celda sera mejor.- comento Deucalion.-¿Ves por ahí a un muchacho rubio?-

-Hay dos, uno con rulos, y otro parece un niño.- dijo Parrish mirando a los chicos.

-El menor, ¿que esta haciendo?- pregunto el hombre.

-Esta parado en una esquina, solo.- contesto el guardia.

-¿Peter que hace?-

-Esta conversando con Lydia y otra chica.- Jordan no entendía que pasaba.

-¿Puedes llamar al chico, para que venga?- pidió el alpha.

Parrish levanto la mano, tratando de llamar la atención del chico, pero este estaba
mirando el suelo. Intento silbar, pero eso llamaría la atención de los demás, entonces
el chico levanto su cabeza, y eso aprovecho el guardia para llamar su atención.

Mirándolo extrañado, el chico se acerco con cautela, hasta que estuvo al frente del
guardia.

-¿Si?- pregunto.

-Liam.- lo llamo Deucalion, por lo que el chico se acerco al alpha.


-¿Estas bien? ¿Necesitas algo?- pregunto Liam preocupado.

-No, quería que conocieras a mi guardia.- dijo el hombre.- Jordan, el es Liam Dunbar,
es un hombre lobo, pero es un beta. Liam ha sido quien me ha ayudado a encontrar
libros, o me los leía, antes de que tú llegaras.-

-Es un gusto Liam.- dijo Jordan.

-Igualmente, se que fuiste amable con Lydia, eso fue lindo.- dijo el menor sonriendo.

-Liam, ¿cuantos años tienes?- pregunto el guardia.

-15 señor.- contesto.

-¿Quince años? ¿Como es posible que te hayan encerrado aquí siendo tan joven?-
Jordan estaba indignado, otra cosa que le agrado a Deucalion.

-Mi madre me metió.- le contó Liam con pena.

-Yo... Lo siento, iré a ver más libros.- dijo Jordan alejándose.

-Es un buen hombre, muy diferente a los demás.- comento Liam.

-Si, creo que estará bien aquí, sobre todo, porque pasara tiempo conmigo, y no con
los otros guardias.- añadió Deucalion.- Pero, no te hice venir para eso. ¿Como vas
con eso?-

-Ya escribí dos, pero tengo miedo de dejársela, ¿que voy a hacer? A parte, los
guardias verían que le estoy queriendo dejar algo, y me molestaran.- dijo el menor.

-Hijo, para eso se crea una distracción, y nadie mejor que este hombre ciego.- le dijo
Deucalion.- Tú, solo tienes que dejarle las cartas, y listo.-

-Espero que funcione.- dijo Liam aferrado a las cartas.

-¿De que hablan?- Peter estaba detrás de Liam, a quien se le erizo la piel.

-Liam me contaba lo que pasa por su celda.- contesto Deucalion, mentir se le daba de
lo mejor.

-¿Y como va todo por ahí, pequeño Liam?- pregunto Peter acercándose, logrando
poner muy nervioso al menor, quien retrocedió por puro instinto, hasta que choco con
un cuerpo.

-Peter, no molestes a Liam.- Derek, había tomando al menor de los hombros.- ¿Estas
bien?-

-Si, gracias Derek.- dijo Liam sonriendo, a lo que Peter gruño.


-Nunca me dejas divertirme.- dijo el hombre, sin dejar de mirar las manos de su
sobrino, que aún seguían sobre los hombros del menor.

-Deucalion, encontré un buen libro.- Jordan llegó con el libro en sus manos.

-Jordan, quiero presentarte a Derek Hale, sobrino de Peter.- lo presento.- Derek, mi


guardia.-

-Si, ya oí de él. Un gusto.- saludo el joven extendiendo su mano.

Antes de que Jordan pudiera responder, la misma alarma de hace una hora sonó, el
tiempo se había acabado, debían volver a sus celdas.

-Vamos, de regreso a sus celdas.- grito uno de los guardias.

Deucalion se levanto y usando sus ojos de alpha, vio a Liam salir primero, era
momento de la distracción. Entonces, decidió dejar caer el bastón, y utilizando el pie
de Derek se dejo caer, casi gritando.

-Deucalion, ¿estas bien?- le pregunto Jordan acercándose.

-Me golpee la rodilla.- mintió el alpha.

-¿Me pueden ayudar a levantarlo?- pregunto Parrish a los otros guardias, quienes se
acercaron con miedo.

“Vamos Liam, aprovecha el momento”, pensó Deucalion mientras era levantado y


llevado por los otros guardias.

Capitulo 3

-¿Seguro que estas bien?- le pregunto Jordan a Deucalion después de que los dejaron
en la celda.

-Si, solo me tropecé.- contesto el hombre queriendo no reír.

-Si claro, no soy tan tonto Deucalion, lo hiciste a propósito.- le dijo Parrish riendo.

-¿A propósito? ¿Ni tres horas de conocido llevamos y ya estas levantando falsos
testimonios?- pregunto ofendido el lobo, a lo que el menor negó con la cabeza, estaba
descubriendo que el hombre podía ser bromista cuando lo quería.

-Como digas.- Jordan se fue a sentar a la que sería su cama por un largo tiempo.

La celda se quedo en total silencio, ambos estaban en la misma posición, solo


sentados, Jordan no era de conversar mucho, y parecía que Deucalion tampoco era de
esos.

-¿Puedo preguntarte algo?- empezó el guardia.

-Ya lo estas haciendo.- respondió el otro, a lo que Jordan hizo una mueca, que
aunque el alpha no la vio, la escucho.- No te molestes guardia, has tu pregunta.-

-¿Como es posible que Liam este encerrado?- pregunto.- Es menor de edad, así sea lo
que sea, no es natural, sus padres debieron negarse a internarlo.-

-Jordan, en definitiva tu eres muy puro, como se nota que no has sido contaminado
con la maldad de Eichen.- comento Deucalion.- Te contare la historia del pequeño
Liam. Como te dije, hay dos maneras de ser lobo, una es que nazcas siendo lobo, otra
es que te muerdan, ese fue el caso de Liam, un alpha lo mordió, según lo que me
contó cuando llegó, había llegado recién a la ciudad, y al correr, se le había caído las
llaves, así que regreso por ellas, y entonces, este alpha lo mordió.-

-¿El alpha esta aquí?- pregunto Jordan.

-No, se que lo mataron.- contesto el hombre.- El problema fue que Liam se


transformo al día siguiente, lo que en cierta forma de ver, es bueno.-

-¿Por que es bueno?-

-Porque algunas veces, la mordida o te convierte, o te mata. Cuando Liam se


transformo, fue frente a sus padres, no es una imagen muy agradable.-

-¿Los hirió?- Parrish se había acercado hasta estar pegado a la pared de vidrio que los
separaba.

-No, huyo antes de herirlos, entonces se encontró con la peor clase de ser humano.-
gruño Deucalion.- Cazadores. Ellos lo atraparon y luego de hablar con sus padres, lo
metieron aquí, su madre más que su padrastro, él no quería que ingresara a este sitio,
supongo que sabia de los rumores sobre el trato que nos dan. La cosa es que su madre
se impuso y firmo sin dudarlo los papeles de ingreso.-
-Entiendo que estuviera preocupada, pero ¿meter a tu hijo a un sitio como este?- se
pregunto Jordan con el ceño fruncido.

-Hay un día de visitas para nosotros, el único que viene a ver a Liam, es su padrastro,
o mejor dicho ex padrastro, pues después de todo eso, se separo de la señora Dunbar.-
siguió contando Deucalion.- Es triste ver a Liam esperando con ansias que su madre
venga uno de estos días a verlo, pero eso no pasara, oí al doctor Geyer decir que ella
se fue de la ciudad, y que cada vez que hablaba de Liam con alguien, se refería a él
como si estuviera muerto.-

-Esa mujer ni madre debería ser, pobre Liam, ¿él aun no sabe que ella ya no esta?-
pregunto Parrish preocupado.

-No lo se, yo supongo que Geyer le dijo la ultima vez que vino, porque después de
eso, él estaba muy decaído como para leer un libro.- contesto Deucalion.

-Eso es muy triste, simplemente no puedo imaginar a alguien de tu sangre, haciéndote


algo así.- comento Jordan con asco.- ¿Que hay de Lydia?-

-Es un caso igual de triste, su abuela también fue interna de Eichen, algo que la
familia Martín intento tapar, pero no puedes tapar el sol con un dedo.- Deucalion
sonrió con pena.- Cuando cumplió los 15, se activaron sus poderes de banshee, estaba
con un amigo, McCall creo que se llamaba, no recuerdo su nombre. Lydia había
tenido la necesidad de gritar, y eso hizo, lo siguiente que paso, es que el chico
termino tropezando, cayendo su cabeza en una roca, no había manera de salvarlo,
había muerto instantáneamente.-

-¿Culparon a Lydia?-

-No, creyeron que fue un accidente, pero entonces empezaron a atormentarle las
voces, las oí en su cabeza, sentía como le gritaban, las oía hablar. Eso acabo en que
ya no dormía, en que se mantenía despierta escuchando música fuerte. Su padre trajo
un doctor de Eichen, quien sabia lo de los Martín, como es obvio ese doctor dijo que
lo mejor era meterla aquí, y sus padres lo hicieron.-

-¿Ellos la vienen a visitar?- pregunto el guardia.

-No, en los cuatro años que lleva aquí, no han venido ni una sola vez.- contesto el
lobo tratando de no alterarse.- Por eso mismo, no saben lo que le han hecho a esa
chica.-

-¿Que le han hecho?- Jordan se había levantado de la cama.

-La han usado en sus experimentos, probando sus poderes de banshee, era su
conejillo de indias, hasta que Valack llegó, después de eso, todo paro. Valack la esta
rehabilitando en cierto modo.- contó Deucalion.

-Ustedes han sufrido mucho.- dijo Jordan con tristeza.

-Ni te imaginas, y eso que no sabes lo de los demás.-


-¿Me contarías?- pregunto el guardia.

-¿De quien quieres saber?- pregunto Deucalion.

-¿Que paso con los Hale?-

-Ellos... Han vivido desgracia tras desgracia.-

Peter miro la carta que tenia en sus manos, podrían no haberla firmado, pero
reconocería donde sea ese aroma, era del pequeño Liam.

-Bueno, ¿me contaras que dice tu carta?- pregunto Derek, quien estaba al costado de
la celda de su tío.

-No, no, no, esta es una de las maravillosas cartas de mi admirador secreto.- dijo el
hombre sonriendo.

-De seguro en esa carta, te dice que dejes de acosarlo.- lo molesto su sobrino.

-Derek, ¿sabes que día es hoy?- pregunto Peter dejando la carta a un lado.

-Si, lo se. Cora.- llamo a s hermana.

-Lo se.- dijo la chica, quien estaba al frente de ellos.- ¿Listos?-

Ambos lobos asintieron, en un abrir y cerrar de ojos, los tres lobos habían cambiado,
y con una sincronía inimaginable lanzaron un aullido en conjunto, que todos los
demás seres sobrenaturales respetaron. Un aullido que intentaba llegar hasta el cielo,
un aullido cargado de dolor.

Flash Back

Después del incendio de la casa Hale, de donde solo Peter, Derek, Laura y Cora
habían sobrevivido, los cuatro lobos vivían con tranquilidad en un pequeño
departamento, tratando de vivir tranquilos, pero no era algo que lograrían, no si
sabían que estaban en la mira de los cazadores.

-Es estúpido tener que estar escondiéndonos en nuestra propia ciudad.- señalo Peter.-
Mi abuelo fundo esta maldita ciudad, deberíamos ser reyes, no deberíamos
escondernos.-

-Peter, los cazadores nos pisan los talones, esperando que nos equivoquemos para
matarnos. No podemos caer en la tentación.- dijo Laura, quien había quedado como
alpha.

-Laura tiene razón Peter, hay que estar tranquilos.- le dijo Derek.- Recuerda que
somos los únicos que quedamos, tenemos que cuidarnos, sobrevivir.-
-Esta bien.- accedió el mayor.

Días después, llegó la luna llena, y con eso, el primer cambio de Cora, que termino
en un desastre, la menor había escapado, estaba sola en un lugar lleno de cazadores.
Sus hermanos, y tío no dudaron ni un segundo, fueron por ella. Fue ahí que una
flecha termino atravesando el corazón de Laura, cayendo al piso, mientras Derek era
capturado.

-Peter, Peter, tienes que matarme.- pidió la chica como pudo.

-No, no, no puedo hacer eso.- dijo su tío.

-Tienes que hacerlo, no quiero que el poder se pierda. Peter, toma mi poder.- Laura
ya estaba llorando.- No dejes que se vaya, tómalo y cuida de ellos.-

Peter derramo algunas lagrimas, mientras dejaba salir sus garras, para luego cortar la
garganta de su sobrina, quien murió al instante.

-Lo tengo.- un cazador lo tenia agarrado del cuello.- Increíble, mato a uno de los
suyos.-

-No lo hizo por esa razón que piensas, tomo su poder.- un hombre adulto se arrodillo
frente a Peter, quien lo miro con molestia, mostrándole sus ojos rojos.- Le dio el
poder de un alpha, aunque de nada te servirá, a donde vas a ir. En ese lugar, solo
seras conocido como un asesino, como el asesino de tu sobrina, mejor dicho, todos
ustedes serán asesinos, felicidades, son los causantes del incendio de la mansión
Hale.-

Peter dejo caer su mirada, sus manos estaban llenas de sangre, sangre de su sobrina,
de la hija de su hermana, sangre de su sangre, era cierto, era un asesino.

Fin Del Flash Back

-Y luego, los tres fueron ingresados aquí.- dijo Deucalion terminando con el relato.

-Los mataron, y luego los metieron aquí, sin su consentimiento, esta gente, es de lo
peor.- comento Jordan, a lo que el alpha sonrió.

-Jordan, Jordan, Jordan. Tú eres tan especial, no dejes que este lugar te quite la
humanidad que tienes, esa generosidad.- le aconsejo el lobo.

-Hey Parrish.- Jordan se volteo y miro hacia la entrada de la celda, una enfermera
estaba parada ahí.- El almuerzo.-

-Si.- se acerco y tomo los dos platos del almuerzo.

-Vendré por ellos, en una hora.- informo la mujer para seguir pasando.
Jordan espero a que se fuera, para luego cerrar la puerta de su celda, y luego caminar
hasta la puerta de la celda de Deucalion y abrirla.

-¿Podemos comer juntos?- pregunto el guardia.

-Claro, pero te lo advierto, la comida aquí es un asco.- le dijo parándose, mientras se


apoyaba en su bastón, pero este se resbalo, y por casi, el alpha termina en el suelo, de
no haber sido por los reflejos del menor.

-¿Estas bien?-

-Si, este maldito bastón se para resbalando en el piso, supongo que ya se ha gastado.-
comento Deucalion parándose, pero esta vez ya no uso el bastón, si no el brazo del
guardia, quien lo guío hasta la pequeña mesa.- ¿Que tenemos hoy?-

-Pues, es algo que parece pollo, y juraría que también hay arroz.- dijo Jordan mirando
la comida del alpha, en cambio la suya tenia dos piezas de pollo, que estaban bien
doradas, papa asada y una ensalada.- Puedes comer del mio, hay dos piezas, yo con
las justas como una.-

-Tranquilo, ya estoy acostumbrado a esta comida.- dijo el alpha empezando a comer.

Ambos comieron en silencio, pero Jordan no podía soportar que el otro hombre
estuviera comiendo esa basura, así que importándole poco lo que anteriormente le
había dicho, saco un poco de pollo con su tenedor.

-Abre.- le pidió, a lo que Deucalion se volteo.- Abre.-

-Parrish.- le dijo, pero al final lo hizo, por lo que el guardia no dudo en alimentarlo.-
Hay que admitirlo, eso esta más rico que esta porquería.-

-En tal caso deja esa porquería, y come mi comida.- le propuso Jordan.

-Bien, pero tendrás que dármela tú.-

Jordan sonrió ante el pedido, pero al final lo hizo, y ahora si, el almuerzo paso a ser
algo más llevadero. Cuando la enfermera volvió por el almuerzo, Jordan ya se
encontraba en su propia celda, como si nunca hubiera estado en la del interno.

-¿Le gusto el almuerzo Parrish?- pregunto la mujer.

-Estuvo delicioso.- contesto el guardia con una sonrisa.

-Bueno, suerte con lo siguiente, no quisiéramos estar en tu posición.- dijo la mujer


dejando confundido al joven.

-¿Como dice?- pregunto Jordan, pero la mujer solo sonrió y luego se fue.

-¿Paso algo?- pregunto Deucalion desde su celda.


-Es que la mujer dijo, que tuviera suerte con lo siguiente, ¿que es lo siguiente?-

El lobo dejo salir una pequeña risa, a lo que el guardia lo miro, ¿que era tan gracioso?

-Dentro de poco toca la hora de la ducha, necesito bañarme, soy ciego.- le dijo
dándole pistas, lo que Jordan capto con rapidez.

-¿Te tengo que bañar?- pregunto Parrish abriendo los ojos, y emitiendo vergüenza,
que hizo reír al alpha.

-Tranquilo, puedo bañarme solo. Solo estaba molestándote.- admitió el alpha.

-Eres malo.- le dijo Jordan.- ¿Me seguirás contando?-

-¿Sobre los demás?- pregunto el alpha.

-Si.-

-Bien, ¿de quien quieres saber? Verdad, no has conocido a muchos, te contare sobre
nuestra primera quimera.-

-Quimera, ¿quien fue la primera en llegar?- pregunto el guardia interesado, mientras


se sentaba en su cama.

-Theo Raeken.- contesto el hombre echado en su cama.- Es interesante el asunto de


estas quimeras, aun cuando Theo fue el primero en ingresar, esos tipos hicieron otras
dos más, y luego desaparecieron.-

-¿Tipos? ¿Las hicieron?- Jordan estaba sorprendido por la nueva información.

-Si, las quimeras son creadas Jordan, toman a chicos que sean compatibles con otro
ADN, mientras que al chico lo convierten en un lobo, el otro ADN, es de un coyote,
al juntarlos, se crea una quimera.- le explico el alpha.

-¿Eso les hicieron a ellos tres?- pregunto el guardia.

-Si, según lo que me he llegado a enterar, es que a Theo se lo hicieron cuando era un
niño, pero el cambio no sucedió hasta que creció.- siguió contando el alpha.- Luego,
sus padres lo metieron aquí, sabia que venia a verlo su hermana Tara, pero creo que
le prohibieron venir, y pues, ya nadie lo visita.-

-¿A las otras quimeras, también las trajeron sus padres?- pregunto Parrish.

-No, a ellos los trajeron ellos.- contesto Deucalion.

-Parrish.- Valack estaba en la puerta de la celda.- Los demás internos ya terminaron


de usar las duchas, ya puedes llevar a Deucalion.-

-Bien, ahora lo llevo, ¿tengo que llevar algo en especifico?- pregunto Parrish.
-Deucalion sabe lo que tiene que llevar, él se entiende en su celda, deja que saque lo
que necesite, tú solo llévalo y que se duche.-

-Valack, mi bastón se ha gastado.- dijo Deucalion desde adentro.

-Bien, déjalo aquí afuera, iré a ver a Lydia y luego lo llevare para arreglarlo.-

Tras eso, Valack se fue y Deucalion se paro, cerro los ojos un momento, y al abrirlos
estos eran rojos, tenia que usar su visión de lobo para ayudarse. Se fue al perchero
que tenia y tomo una toalla, por la ropa no había problema, cuando volvía de la
ducha, había ropa limpia esperándolo.

Jordan observaba al hombre, era totalmente independiente, aún no entendía que hacia
ahí, el alpha ni siquiera había intentado atacarlo, ni armar una revuelta. Mientras
pensaba eso, se fijo en que el lobo se estaba desnudando frente a él, así que con un
sonrojo se volteo, para evitar verlo.

Cuando ya estuvo listo, toco la puerta de la celda, Jordan se apresuro en abrir,


Deucalion solo llevaba una toalla, y obediente a lo dicho, dejo su bastón en la celda
del guardia, y tomo el brazo de Parrish. Juntos caminaron hasta las duchas, o mejor
dicho, Deucalion guió a Parrish hasta ahí, pues el oficial ni siquiera sabia donde
estaban.

-Quédate aquí, cuando me haya secado, te llamare.- le dijo Deucalion al joven, quien
se quedo parado al comienzo de las duchas.

Pasaron unos minutos, cuando escucho la ducha cerrarse, y luego un fuerte golpe, y
un quejido. Olvidándose donde estaba y con quien se volteo y corrió a ayudar al
hombre.

-¿Que paso?- le dijo a penas llegó.

-Estaba muy mojado, me resbale.- contesto el alpha sentando en el piso, y entonces


Jordan lo noto.

El alpha estaba desnudo y para su mala suerte, lo primero que sus ojos vieron, fue el
miembro del hombre.

-¿Te gusta lo que ves?- pregunto Deucalion.

-Yo...- Jordan empezó a tartamudear.

-Puedes tocarlo si quieres.- el hombre parecía muy serio en lo que decía. Hasta se
atrevió a tomar la mano del guardia, hasta llevarla arriba de su miembro.

Jordan estaba estático, su cerebro parecía no unir cables, entonces escucho la risa del
hombre, y ahí despertó.

-Deberías ver tu rostro, es una broma Parrish.- Deucalion parecía divertirse con el
momento de vergüenza que el joven estaba teniendo.- Vamos, ayúdame.-

-Eso no fue gracioso Deucalion.- le dijo Jordan ayudándolo, y luego pasándole la


toalla.

-Pero si lo fue, tu cara fue épica.- el lobo seguía riéndose, aun cuando pasaron al lado
de las otras celdas. Sorprendiendo a los internos, porque nunca habían visto reír al
hombre.

Capitulo 4

-Ya deja de reírte.- pidió Jordan mientras entraban a la celda.


-Vamos Parrish, ¿no tienes sentido del humor?- le pregunto el alpha sonriente.

-Si, pero esa fue una broma de muy mal gusto.- contesto el guardia sentándose en su
cama.

Deucalion uso sus ojos de lobo para verlo, tal vez se había reído demasiado, se acerco
al guardia y con una de sus manos acaricio el rostro del joven, quien lo miro curioso.

-Lo siento, tal vez me excedí un poco.- le dijo sin separarse.

-Tengo que admitir que fue gracioso, pero bájale un poco a tus bromas.- le pidió
Jordan sonriendo y apoyándose un poco más en la mano del hombre.- Tu mano es
cálida.-

-Tu eres cálido.- comento Deucalion.

Estuvieron así por un buen rato, hasta que el lobo escucho pasos y se tuvo que
separar del guardia, pero se calmo al ver que era Valack el que entraba.

-Ya arregle tu bastón.- dijo el medico, entregándoselo al alpha.- Oí que tuviste una
agradable visita en los baños. Te oyeron salir muy feliz.-

-Solo me divertí un poco, ¿verdad Jordan?- pregunto el alpha, y pudo oler la


vergüenza en el oficial.- Pero ya paso, ¿que tal todo afuera?-

-Esta muy tranquilo, por cierto Parrish, algunos internos quieren que pases por sus
celdas, quieren pedirte algo.- informo Valack.

-¿A mi?- pregunto Jordan y el otro asintió.- Ok, iré más tarde.-

-Bueno, me retiro, con permiso.- dijo el hombre para luego salir de la celda.

-¿Que crees que me quieran pedir?- pregunto Jordan al alpha.

-Quien sabe, tal vez sea un favor.- contesto Deucalion echándose en su cama.- Bien
Jordan, ¿podrías leerme algo por favor?-

-Claro, espera iré por el libro.- dijo el joven levantándose de la cama, cerro la celda y
entro a la del alpha.

-Siéntate a mi lado.- le dijo el hombre haciéndole espacio.

-Bien, aquí vamos. Flores En El Ático, ¿me salto el prologo?- pregunto Jordan.

-Si, no es como si fuera parte esencial.- contesto Deucalion con tranquilidad.

“ADIÓS, PAPÁ
Cuando era joven, al principio de los años cincuenta, creía que la vida entera iba a
ser como un largo y esplendoroso día de verano. Después de todo, así fue como
empezó. No puedo decir mucho sobre nuestra primera infancia, excepto que fue muy
agradable, cosa por la cual debiera sentirme eternamente agradecida. No éramos
ricos, pero tampoco pobres. Si nos faltó alguna cosa, no se me ocurre qué pudo
haber sido; si teníamos lujos, tampoco podría decir cuáles fueron sin comparar
nuestra vida con la de los demás, y en nuestro barrio de clase media nadie tenía ni
más ni menos que nosotros. Es decir que, comparando unas cosas con otras, nuestra
vida era la de unos niños corrientes, de tipo medio.

Nuestro padre se encargaba de las relaciones públicas de una gran empresa que
fabricaba computadoras, con sede en Gladstone, estado de Pennsylvania, con una
población de doce mil seiscientos dos habitantes. Nuestro padre tenía mucho éxito en
su trabajo, porque su jefe venía con frecuencia a comer a casa y alababa mucho el
trabajo que papá parecía realizar tan bien.

«Es ese rostro tuyo, tan norteamericano, sano, abrumadora mente guapo, y esos
modales tan llenos de encanto lo que conquista a la gente. Santo cielo, Chris, ¿qué
persona normal podría resistirse a un hombre como tú?»”

-A mis hijos les encanta esa novela, aún no entiendo porque.- interrumpió el hombre
al joven.

-¿No es para ellos acaso?- pregunto Jordan interesado.

-Es una novela hermosa, muy dramática, con una historia muy triste.- contesto
Deucalion pensativo.- Pero a ellos les encanta.-

-¿Como se llaman tus hijos?- Parrish dejo el libro a un lado.

-Aiden y Ethan.- respondió el hombre.- Aunque biologicamente no son mis hijos.-

-¿Como?-

-Son hijos de un beta mio.- dijo Deucalion con tristeza.- Cuando me metieron aquí,
ellos se quedaron con dos amigos míos, Kali y Ennis.-

-¿Ellos también son lobos?- pregunto Jordan.

-Si, ambos son alphas, pero no tienen manada, no si después van a meterlos aquí.-
comento el hombre.

-Cuando entre aquí, el director me dijo que tú habías matado a toda tu manada, pero
que sorprendente mente habías dejado vivos a tus hijos. Supongo que eso es una
mentira.- dedujo Parrish.

-Así es, yo no mate a mi manada.- le contó Deucalion bajando la cabeza.- Lo hicieron


ver como si yo los hubiera matado, amaba a mi manada, eran mis betas, yo los mordí,
yo les enseñe a controlarse, yo amaba a uno de mis betas.-

-¿A uno?-

-Si, Marco. Fue mi primer beta, llegue a amarlo mucho, pero nunca se lo dije.-
confeso el alpha sonriendo.- Pero bueno, como te dije, los cazadores mataron a mi
manada, pero felizmente dejaron vivos a mis hijos, cuando me metieron aquí, ellos
iban a quedar en manos de los mismos cazadores, pero gracias a Dios, sus padrinos
eran mis amigos, así que ellos se hicieron cargo de ellos.-

-Casi no los viste crecer.- eso había entristeció a Jordan.

-Jordan, tú eres demasiado bueno, ¿como es eso posible?- pregunto el alpha girando
su cabeza para verlo.

-No lo se, supongo que siempre he sido así, soy muy empatico con las emociones de
los demás. Aun cuando era un niño, fui el más empatico de mi familia, creo que hasta
abusaban de eso, prácticamente me usaban de psicólogo familiar.- le contó Jordan
riendo.

-Jordan, ¿como es tu familia?- quiso saber Deucalion.

-Es una familia normal, supongo. No son muy cariñosos, nos reuníamos todos los
fines de semana, y siempre era lo mismo, una parrillada y ver un partido, y no
exactamente uno de fútbol, miraban cualquier cosa con tal de no hablarse.- le contó el
guardia.- Pero cuando mis padre murieron, ya no hubo más parrilladas, ya no hubo
más juegos, ya no volví a ver a mi familia.-

-¿Todos se distanciaron? ¿No pensaron en darte apoyo?- el alpha estaba intrigado,


ahora le sorprendía más como era que el hombre fuera tan agradable y bueno.

-Un par de días después el entierro, una tía se quedo conmigo, pero luego se fue. A
decir verdad, no me gusta estar con mi familia, son tan aburridos. Así que fue un
alivio cuando me inscribí en el ejercito, al fin tenia algo que hacer, y eso me alejaría
de pensar en mi familia.-

-¿Tuviste alguna novia?-

-No, soy un torpe con las chicas, con los chicos guapos es igual. En la escuela jamás
tuve novia, ni novio. Era un poco el nerd de biblioteca y que no tenia amigos, bien
triste.- contesto el guardia riendo.

-¿Y en el ejercito?- pregunto el alpha.

-Bueno, ahí debo admitir que me divertí un poco más. No tuve novio, pero eso no
impidió que me divirtiera un poco con algunos de mis compañeros.- comento Jordan
sonriendo.

-¿De que tipo de diversión me hablas?- pregunto Deucalion, le encantaba esta faceta
que estaba descubriendo del guardia.

-Bueno, jugué un poco con ellos, con sus cuerpos, con sus miembros, ya sabes,
experiencias gratificantes.- respondió Jordan con una mirada divertida.

-Me estas sorprendiendo mucho Parrish.- alago Deucalion.


-Y eso, que aun no sabes más de mi, pero ya es hora de dormir.- dijo el oficial
levantándose.- Mañana seguiré leyéndote. Que descanses Deu.-

-¿Deu?- pregunto el alpha mientras se echaba en su cama.

-Es bonito, ¿no? A mi me gusta, sera tu apodo.- contesto el guardia.

-Descansa Jor.-

-Entonces, ¿mañana podre salir?- pregunto Jordan queriendo estar seguro de todo lo
que le decían.

-Así es señor Parrish, le corresponde su día libre.- le comunico el director.

Llevaba ya dos semanas en Eichen, el lugar no le había parecido malo, los internos lo
trataban bien, y eso molestaba a algunos de los otros guardias y a unos cuantos
enfermeros, pero eso no le importaba, él estaba feliz estaba aprendiendo mucho
acerca de lo sobrenatural.

-¿Que pasara con Deucalion?- no quería dejar solo al alpha.

-No se preocupe, Valack se encargara de él.- le contesto.- Usted disfrute de su día,


libre de estos seres.-

-Muchas gracias señor. Me retiro.- dijo Jordan levantándose y saliendo de la oficina.

Bajo hasta la celda de Deucalion, donde el hombre estaba sentado en su escritorio, al


parecer estaba escribiendo algo, aunque el guardia no sabia que era.

-¿Que andas escribiendo?- pregunto entrando a la celda del hombre.

-¿Saldrás mañana?- pregunto el alpha.

-Si, ¿necesitas algo?- Jordan se fue a sentar a la cama del hombre.

-Así es, pero no solo yo. Los demás quieren pedirte algunas cosas.- le contesto
Deucalion.

-Bueno, entonces aprovechare que todo esta tranquilo, e iré a ver que quieren. Ya
vuelvo.-

Jordan salio de la celda, asegurándose en cerrarla, no porque desconfiara del alpha, si


no porque desconfiaba de los otros guardias. La primera celda que visito fue la de
Lydia, la chica siendo tan adorable, solo le pidió que le trajera perfumes, al parecer
antes de entrar, era de esas chicas populares, que siempre usaban un delicioso
perfume.
Después de eso, fue con Liam, quien le pidió si le podía traer algunas sodas, y si
podía entregarle una carta a su padrastro, quien trabajaba en el hospital.

-Peter, ¿vas a querer algo?- pregunto Jordan en la celda del mayor de los Hale.

-Si, Reese´s, un paquete de esas deliciosas galletas.- pidió el Hale casi babeando.-
Pero, no tengo dinero.-

-Tranquilo, yo lo pagare todo.- lo calmo Parrish.- Derek, Cora.-

-Gomitas.- pidió la menor, a lo que su tío y hermano sonrieron con ternura.

-Nada, pero gracias Parrish.- dijo Derek con un asentimiento de cabeza.

-Mmm, Parrish, los demás chicos también quieren pedirte cosas.- le indico Peter
señalando las otras celdas.

-Hola, ¿necesitas algo?- le pregunto a una chica de rasgos japoneses.

-Soy Kira.- se presento la chica, y luego deslizo una carta por debajo de la puerta.-
¿Podrías entregárselo a mi padre? Su apellido es Yukimura, trabaja en la
preparatoria.-

-Yo se lo entregare.- contesto Jordan tomando la carta

-Hey guardia.- Jordan giro su cabeza al oír como lo llamaban.- Soy Theo Raeken.-

-Es un gusto Theo.- contesto el guardia.

-Mi hermana se llama Tara Raeken, le gusta estar en la plaza principal de Beacon, es
fácil reconocerla, se parece a mi. Por favor entrégale esta carta, pero no puede
quedársela, ¿entiendes? La tiene que leer ahí, no quisiera meterla en problemas.-
pidió el chico.

-Tranquilo, yo me encargo.- dijo Jordan tomando la carta.- Bueno, iré a ver a los
demás.-

-Espera Parrish, Derek si tiene algo que quiere entregar.- le comunico Peter.

-¿En serio?- Parrish se acerco a la celda de Derek, quien le gruño a su tío, pero luego
deslizo una carta.

-Es para Stilinski. Es el hijo del sheriff.- le dijo el lobo con un poco de vergüenza.

-Oh, esta bien. Bueno me voy.- dijo el guardia despidiéndose de todos.

Camino hasta la celda de Deucalion, encontrando al hombre echado en su cama, ya


había terminado de escribir.

-¿Te entretuvieron mucho?- pregunto Deucalion.


-Un poco, conocí a otros chicos, son agradables.- contesto Jordan riendo.- Malia es
una chica muy gruñona.-

-Es natural en un coyote. ¿Te pidieron muchas cosas?-

-No, fue poco, ¿quieres que te traiga algo?- pregunto Parrish entrando a la celda del
hombre.

-No, pero quiero que vayas a entregarle una carta a mis hijos.- pidió mostrándole la
carta.- La dirección esta afuera del sobre. Y, una cosa mas.-

-Dime.-

-Puedes ver sus rostros cuando la lean, quiero saber que caras pusieron.- le dijo
Deucalion sonriendo.

-Así lo haré.-

El día libre de Parrish llegó, según lo que le habían informado, podía regresar al
siguiente día a primera hora. Tomo sus cosas, pero antes de salir, miro al alpha, aún
seguía durmiendo, bueno, eso creía.

-Volveré mañana, no hagas travesuras.- dijo bromeando.

-Tratare de comportarme.- contesto el alpha sin abrir los ojos.

-Creí que estabas dormido.- dedujo el guardia.- Ya vuelvo.-

-Diviértete, trata de disfrutar tu día libre.- le dijo el hombre sentándose en la cama.

Jordan sonrió y después de una corta despedida, salio de la celda y empezó a caminar
hacia las escaleras, se despidió de sus compañeros con un asentimiento de cabeza, y
salio del edificio, tomo una gran bocanada de aire, que bien le sentaba.

Asegurándose de que ninguna carta se le haya caído, tomo camino hacia su


departamento. Al llegar saludo al señor Derrick, quien lo recibió con una gran
sonrisa, y le hizo conversación por un rato. Tras eso, subió a su departamento, se
tomo una buena ducha, no le gustaban las duchas de Eichen, pero aun así, los usaba.

Después de una refrescante ducha, se puso ropa cómoda, lo primero que haría, sería ir
por los encargos que Peter y los demás le habían pedido. Revisando sus cuentas, vio
que hasta le sobraba, su amigo del ejercito, le había depositado el alquiler del
departamento.

Salio del edificio, y entro al garaje, tomo su camioneta y pidiendo indicaciones al


señor Derrick, se dirigió al market más cercano. Al llegar, tomo su lista improvisada
y empezó a llenar su carrito. Compro un paquete de las galletas que Peter le había
pedido, también compro un paquete de sodas, compro las gomitas para Cora, también
aprovecho en comprar un perfume que le gustaría a Lydia.

Tras eso, volvió a su departamento, para guardar todo lo que había comprado.
Después, tomo las cartas que le habían dado los internos y decidió ir al único lugar,
donde no se perdería, la preparatoria. Condujo hasta el sitio, y entro al lugar,
encontrándose con un mujer.

-¿Puedo ayudarlo?- pregunto la mujer.

-Si, estoy buscando al profesor Yukimura.- contesto Jordan.

-Oh, esta en el salón de maestros, lo guiare.- le dijo la mujer con una sonrisa.- Soy la
maestra Martín.-

-¿Martín? ¿Usted es la madre de Lydia?- pregunto Parrish, a lo que la mujer se


detuvo abrupta mente.

-¿Como conoce a mi hija?- pregunto la señora Martín.

-Soy guardia en Eichen, y se lo que le hacen ahí. Discúlpeme, pero creo que podre
ubicarme, no quisiera estar cerca de usted.- dijo el joven alejándose.

-Amo a mi hija.- dijo la mujer.

-Si la amara, nunca hubiera permitido que la metieran ahí.- dijo Jordan.

Siguió caminando, hasta que encontró la sala de profesores, toco un par de veces y
entro al sitio. Había tres profesores, pero rápidamente reconoció al padre de Kira.

-Buenos días, ¿profesor Yukimura?- pregunto al hombre, quien lo miro.

-Así es, ¿y usted?- pregunto el otro.

-Un gusto, soy Jordan Parrish, trabajo como guardia en Eichen House.- dijo, y estuvo
seguro que al oír el nombre del instituto, el profesor se estremeció.- Le traigo una
carta de su hija.-

-Vaya, es el primer guardia que hace eso.- le dijo a lo que Jordan sonrió.- Siéntese
por favor.-

-Gracias, aquí tiene.- le dijo Parrish entregándole la carta.

-Nunca quise meter a mi hija a ese sitio, me dijeron que si no lo hacia, la matarían, ya
había perdido a mi esposa, no podía perderla, tuve que dejar que se la llevaran.-
confeso el hombre con tristeza.

-¿Nunca van a poder salir de ahí?- pregunto Jordan preocupado.

-No lo creo, para ellos, todos los que están ahí son peligrosos, y ahí deben quedarse.-
dijo el señor Yukimura.- ¿Podrías esperarme un momento, mientras leo la carta?
Quiero responderle.-

-Tómese su tiempo, señor Yukimura.- le dijo Jordan con una sonrisa.

Capitulo 5

-Gracias por esperar joven Parrish.- agradeció el padre de Kira, entregándole una
carta.- ¿Podría dársela a mi hija?-
-Por supuesto señor. Una consulta, ¿le dijeron que su hija podría salir algún día?-
pregunto Jordan interesado.

-Ellos dicen que si, yo no les creo, Kira estará toda su vida en ese lugar.- respondió el
señor Yukimura con tristeza.- Aunque lo que más quiero, es que vuelva a mi lado,
nunca hay que perder las esperanzas, ¿verdad?-

Parrish asintió y luego se retiro, tenia más lugares a donde ir, guiándose por el
improvisado mapa que su casero le había echo, fue en camino hacia la comisaria,
tenia que encontrar a ese chico Stilinski, aunque le daba curiosidad saber, que tipo de
relación tenia con Derek.

Tras un rato conduciendo, al fin llegó a la comisaria, irónicamente pensó, que si no


fuera guardia en Eichen, capaz hubiera elegido ser policía. Dejo bien estacionado su
camioneta, y luego emprendió camino hacia el edificio, tenia que encontrar al sheriff.

Al entrar, una mujer se le quedo mirando curiosa, lo que lo estaba incomodando,


hasta que vio la placa: Romero.

-Disculpe, ¿usted es la hermana de Hayden?- le pregunto, a lo que la mujer lo miro


sorprendida.

-¿Conoce a mi hermana?- pregunto la oficial mirándolo seriamente.

-Trabajo en Eichen, y ella le envía esto.- dijo dándole la carta, a lo que su rostro se
ilumino.

-Hace meses que no recibo una carta de ella, ¿como esta? Ella esta bien, ¿verdad?-

-Hasta donde pude ver, ella esta bien.- le contesto Jordan.

-Gracias por traerla, otros guardias no lo hacen.- le dijo la hermana de la chica.-


¿Buscas a alguien más? ¿Puedo ayudarte?-

-Si, estoy buscando al sheriff.- le dijo.

-Esta en su despacho, pasa, y gracias otra vez.-

Con un asentimiento, Jordan camino hasta el despacho del sheriff, quien parecía estar
con alguien, pero igual se arriesgo y toco la puerta.

-Adelante.- se escucho desde adentro, así que el joven entro.

-Buenos días, ¿sheriff Stilinski?- pregunto viendo al hombre.

-Así es, ¿en que puedo ayudarlo?- pregunto el hombre.

-Soy Jordan Parrish.- se presento, por lo que la otra persona que estaba ahí, se volteo
a verlo.- Hey, eres tú.-
-Hola Parrish.- era Stiles, el chico que lo había ayudado cuando llegó a la ciudad.

-La carta es para ti.- se dio cuenta el guardia.

-¿Carta?- pregunto el menor confundido.

-Tengo una carta de Derek Hale para ti.- contesto Jordan sacando la carta.

-¿De Derek?- Stiles prácticamente salto de su asiento, y arrebato la carta de la mano


del guardia, para luego irse a leerla al sillón.

-Usted no es como los otros guardias, algo que me alegra.- le dijo el sheriff viendo a
su hijo.

-Disculpe si es molestia, ¿que tipo de relación tienen con los Hale? ¿Son familiares?-
pregunto Jordan.

-No, pero los conocemos. Estuvimos apoyándolos cuando ocurrió el incendio en su


casa, y bueno a Stiles siempre le ha gustado Derek.- le contó el hombre.

-¿Incendio?- pregunto Jordan preocupado.

-Alguien incendio su casa, mataron a muchos, solo Derek, Laura, Cora y Peter
lograron sobrevivir. A pesar de eso, ellos fueron metidos a ese horrible sitio.- dijo el
sheriff molesto.

-¿Sabe lo que son?-

-Si, ellos mismos me lo mostraron, debo de admitir que me asuste, pero luego
entendí, que seguían siendo ellos mismos, nada había cambiado.- le contesto el padre
de Stiles.- Varias veces he querido intervenir, pero Eichen se maneja sola, mi
autoridad no sirve de nada ahí.-

-Peter es agradable, con Derek converse un poco más.- le comento el joven.

-Dios, Derek es tan romántico.- dijo Stiles llamando la atención de los mayores.-
Papá, Derek dice que me extraña mucho y que quiere verme el día de las visitas.-

-Pues ya tienes 18, supongo que puedes ir a visitarlo.- le dijo el sheriff.- ¿Vas a
contestar a su carta?-

-¿Lo llevarías Jordan?- pregunto el menor al joven.

-Si, tomate tu tiempo, mientras iré a dejar un recado al hospital.- informo.

Deucalion suspiro otra vez, estaba en el patio con los demás internos, por esta vez, les
habían dado tres horas para estar afuera, cosa que le sorprendió al alpha, pero
tampoco se iba a quejar.

-Hola Deucalion.- Liam se había sentado al lado del mayor.

-Hola pequeño, ¿que tal te va?- le pregunto el lobo.

-Me respondió a la carta.- le contó el menor entusiasmado.

-¿En serio? ¿Y que te dijo?- hablar con Liam siempre ponía de buen humor al alpha.

-Que él también sentía lo mismo por mi, que le alegraba poder verme, aunque sea
solo por una hora. No puedo creer que el sienta lo mismo por mi.- dijo emocionado el
chico.- ¿Tú estas bien? Te noto un poco decaído.-

-Si, quien diría que extrañaría a Parrish.- dijo el hombre sonriendo.

-¿No crees que él pueda ser eso?- pregunto Liam.

-¿Tú crees?- Deucalion se había puesto pensativo.- Tal vez tengas razón.-

-¿Que hacen tan solitos por aquí?- Peter había llegado, seguido de Derek y Malia.

-Conversando un poco, ¿están listos para la súper sedada?- pregunto Deucalion.

-No me lo recuerdes, ¿le dijiste a Valack?- pregunto Peter, a lo que el otro alpha
asintió.

-Odio la luna llena.- se quejo Liam, por lo que el mayor de los Hale lo miro con
ternura.

-Tranquilo Liam, siempre es difícil acostumbrarse, pero nadie aquí es tan idiota como
para dejarte suelto ese día.- comento Derek con tranquilidad.

-No lo se Derek, aquí algunos parecen muy idiotas.- comento Deucalion.

-Deucalion, pareces un poco decaído, ¿estas bien?- pregunto Malia mirando al alpha
con preocupación.

-Es que no esta su guardia.- dijo Peter molestando.

-¿Es por eso?- pregunto la mujer coyote interesada.

-Podría decirse que si, en tan poco tiempo, me he acostumbrado mucho a su


presencia.- contesto el alpha.

-¿Como le estará yendo?- se pregunto Derek.- Se que Stiles y Noah no lo van a tratar
mal, pero tus hijos Deucalion.-

-Esos niños, son capaces de irse contra Jordan, ojala Ennis y Kali estén ahí, cuando
vaya.- pensó el hombre.- Pero dejando eso, ¿saben porque tenemos más horas libres?-
-Oí que un guardia decía que era porque en la luna llena no nos dejaran salir en todo
el día.- dijo Cora quien se había acercado con Hayden, la cual estaba fuertemente
agarrada al brazo de la loba.

-Bueno, hay que aprovechar nuestro tiempo libre extra.- dijo Malia mirando a cierta
banshee.

-Malia, ¿por que no intentas hablarle?- le propuso Derek tratando de no hablar fuerte.

-Me tiene miedo. Le teme a todos, no quiere que nadie cerca de ella muera.- contesto
la chica.

-Inténtalo, ella siempre esta sola, necesita una amiga, alguien a quien no le de miedo
lo que es.- le dijo el lobo.- Y tú, eres una de las personas que se, que no tiene miedo.-

-Gracias Derek.- dijo la chica y empezó a caminar hacia la banshee, quien estaba
sólita en un rincón del gran cuarto.

-Hola Malia.- la sorprendió Lydia volteándose a verla.

-¿Como sabias que era yo?- pregunto Malia.

-Eres la única que intenta hablarme, a parte, caminas hasta como coyote.- bromeo la
chica.- ¿Por que insistes en venir conmigo?-

-Porque me interesas Lydia, y me preocupo por ti.- le contesto la coyote acercándose.

-No deberías estar cerca de mi.- le advirtió la banshee.

-Lastima que detesto seguir las reglas.-

Jordan entro al hospital de Beacon Hills, tenia una carta que entregar al doctor Geyer,
haber encontrado al sheriff y al profesor Yukimura había sido fácil, pero un doctor,
eso si que iba a estar complicado, generalmente ellos andaban ocupados, con cirugías
y todo eso.

Se acerco a la recepción, y espero a que la enfermera que atendía, se desocupara de la


llamada que estaba realizando.

-Buenos días, ¿en que puedo ayudarlo?- pregunto la mujer con una sonrisa amable, a
Jordan le agradaba la gente así.

-Buenos días, estoy buscando al doctor Geyer.- le contesto Parrish.

-¿Geyer? Mmmm, creo que esta en cirugía, déjeme revisar.- le pidió la mujer
tomando el teléfono.
Mientras eso pasaba, Jordan se puso a mirar el lugar, hacia tiempo que no estaba en
un hospital, los detestaba, la ultima vez que había estado en uno, le habían informado
que sus padres murieron.

-Se encuentra en la sala de descanso.- le dijo la mujer sorprendiéndolo.- Esta en el


segundo piso, ya le dije que lo buscabas, así que te esta esperando afuera del cuarto.-

-Gracias señora....- se quedo callado, no sabia su nombre.

-Melissa McCall, y fue un gusto joven....-

-Jordan Parrish.- le dijo el guardia, para luego ir hacia el ascensor.

Subió al segundo piso, al salir del ascensor empezó a buscar a algún doctor, hasta que
encontró a uno, era moreno y alto. Con un poco de reserva, se acerco al hombre.

-¿Doctor Geyer?- pregunto.

-Si, ¿usted es?- pregunto el hombre.

-Jordan Parrish, soy guardia en Eichen House, le traigo una carta de Liam.- le dijo
con rapidez, mostrándole la carta.

-¿De Liam?- pregunto el doctor Geyer tomando la carta.- ¿Eres guardia? Debes ser
nuevo.-

-Si señor.- contesto Parrish.

-Me lo imagine, es raro que un guardia traiga el correo.- comento el doctor.- Gracias,
le puedes decir a Liam que iré a verlo el día de visitas, y que se calme en luna llena.-

-¿En luna llena?-

-Así es, él pierde la calma cuando es luna llena, solo dígale que lo quiero y lo
extraño.- le pidió el hombre.

-Por supuesto, con permiso doctor Geyer.-

El joven guardia salio del hospital, no sin antes despedirse de Melissa, viendo en su
reloj la hora, emprendió camino hacia la plaza principal de Beacon, tenia que
encontrar a Tara Raeken, para luego ir a recoger la respuesta de Stiles y al final, hacer
la visita que más temía, los hijos de Deucalion.

Theo entro a su celda sin negarse ni una sola vez, ya se había negado varias veces, el
castigo no era bueno, a la mala tuvo que aprender a seguir las reglas de Eichen, aún le
costaba entender, ¿como sus padres podían haber dejado que lo metan a un sitio
como ese?
Recordó como en esa ocasión, su hermana había peleado por él, se le había tirado
encima a uno de los guardias, lo había arañado, mordido, le había echo de todo, con
tal de impedir que se llevaran a su hermano.

Era natural que la chica se pusiera así, Theo y Tara eran los hermanos más unidos
que podían encontrar, pero como no serlo, si sus padres nunca les hacían caso.
Cuando Theo desapareció a causa de los doctores, la que fue a poner la denuncia
había sido Tara, ni sus padres lo habían echo.

-Theito.-

La quimera giro su cabeza al sentir el llamado, se trataba de Kate Argent, una mujer
jaguar, irónicamente, se había convertido en su mejor amiga, y era ironía, porque ella
era antes una cazadora.

-¿Que paso Kat?- pregunto acercándose un poco más a la puerta.

-Estoy muerta de aburrimiento, ¿en que piensas querido?- pregunto la mujer.

-En mi hermana, espero que Parrish le haya dado mi carta.- contesto Theo.

-Ese guardia es muy agradable, no como el resto, esos son unos idiotas.- comento
Kate con una media sonrisa.- Oye, escuche que mi súper familia va a venir.-

-¿A que van a venir esos idiotas?- pregunto la quimera, tal vez, detestaba un poquito
a los demás Argent, sobre todo al hermano mayor de su amiga.

-Yo que se, uno de los guardias lo dijo y bueno, yo escuche un poco.- le contó la
jaguar.- Pero al grano, ¿como siguen esos sentimientos?-

-¿Que sentimientos?-

-Theo no soy idiota, tú no odias a mi hermano, a ti te gusta, y quieres disfrazarlo con


odio, porque según tú, no debería gustarte un cazador.- le dijo Kate.

-Sinceramente, ahora me arrepiento de haberte dicho que tu hermano me atraía.- se


quejo la quimera.

-Chris no es malo, solo sigue ordenes de nuestro padre. Si fuera igual de malo, me
hubiera matado en vez de meterme aquí.-

-Te hubiera dejado huir.- corrigió el chico.

-Y si lo hubiera echo, mi padre me hubiera matado, en cierta forma, mi hermano me


salvo la vida. Supongo que me salvo a mi, dado que no pudo salvar a su esposa.-
dedujo Kate.

-¿Que le paso a su esposa?- pregunto Theo, eso no le habían contado.

-Fue mordida por un lobo, y nuestro padre la obligo a matarse, Chris no pudo llegar a
salvarla, cuando llego, ella ya estaba muerta.-

-¿No puedo quedarme con la carta?- pregunto Tara con tristeza.

-Lo siento Tara, pero Theo me lo pidió, dijo que no quiere meterte en problemas.- le
explico Jordan.

-Mi hermano aún encerrado, quiere protegerme.- comento la chica sonriendo.- La


leeré ahora.-

-Tranquila, tomate tu tiempo, yo esperare.- le dijo Parrish, a parte, eso le ayudaba,


pues estaba evitando ir a ver a los hijos de Deucalion, pues Peter había logrado
asustarlo.

-Listo.- dijo Tara devolviendo la carta al sobre.- Quien diría que mi hermano podía
escribir cosas tan bonitas.-

-¿Lo extrañas mucho?- pregunto Jordan.

-Demasiado, he conseguido un trabajo y estoy juntando mi dinero, para poder irme de


mi casa y así poder visitar a mi hermano, sin que me lo tengan que prohibir.- dijo la
chica con una sonrisa de tristeza.

-Le diré a tu hermano, eso lo hará feliz.- le comento el mayor.

-Gracias por hacer esto, no muchos lo hacen.- le dijo Tara sonriendo.- Eres un buen
hombre Parrish.-

Después de conversar un rato con la chica, Jordan emprendió camino hacia la casa
donde vivían los hijos de Deucalion. Llegó a la casa que indicaba el sobre, tenia
miedo, según lo que Peter le había dicho, era posible que los chicos no lo trataran
bien, todo por ser un guardia de Eichen.

Quitándose el miedo, toco el timbre, espero unos segundos, hasta que un chico de
unos 17 años abrió la puerta, antes de que pudiera hablar, otro chico igual al primero
se acerco.

-¿Ethan y Aiden?- pregunto con un poco de miedo.

-Si, ¿quien es usted?- pregunto uno de ellos.

-Soy Jordan Parrish, trabajo en Eichen House.- les dijo, a lo que los chicos gruñeron.-
Tengo una carta de vuestro padre.-

-¿De papá Deu? ¿Por que la trae un guardia?- pregunto uno.

-Porque soy el guardia de Deucalion, y yo no soy igual que los demás.- explico
Jordan tratando de sonar tranquilo.
-¿Como podemos creerte?-

-Pueden leer la carta, verán que digo la verdad.- les dijo entregándole el sobre.

Capitulo 6

“Queridos Ethan y Aiden:

Mis pequeños, no saben cuanto los extraños, pero antes de seguir contándoles mis
penas, el hombre que les esta entregando la carta, es mi guardia personal, al parecer
los tarados de Eichen, se cansaron de tratar conmigo, y contrataron a un solo
guardia. Jordan, como se llama el guardia, es una persona pura, en cierta forma, a
lo que digo con puro, es que él no tiene la maldad de los otros guardias, es bueno,
amable, una persona maravillosa, por favor, trátenlo bien, y si, estoy hablando
contigo Aiden.”

-Hay Dios, ¿como sabe eso?- pregunto Aiden mirando a su hermano.

-Es nuestro padre, sabe en lo que piensas.- le dijo Ethan sonriendo y luego miro al
guardia.- Es un gusto, soy Ethan.-

-Yo Aiden.-

-Yo soy Jordan y es un gusto conocerlos.- saludo Parrish ya más calmado.

-¿Quieres pasar?- pregunto Ethan haciéndose espacio para que entrara.

-Claro, gracias chicos.-

Jordan entro a la casa, le agrado lo que vio, era un lugar acogedor, la sala a donde
llego al ingresar, tenia muchas fotos, la mayoría eran de los chicos, pero entonces el
guardia vio una donde los gemelos de niños estaban encima de un hombre joven.

-Es papá, antes de que se lo llevaran a Eichen.- le explico Aiden al ver a Parrish tan
interesado en la foto.

-Ustedes eran unos niños, ¿como pudieron alejarlos de su papá?- se pregunto Jordan
sorprendido.

-La gente de Eichen, no tienen corazón, gracias a Dios que no se llevaron a nuestros
tíos, si no, hubiéramos ido al orfanato.- respondió Ethan.- Siéntate por favor.-

-Gracias, ¿por que no siguen leyendo la carta? Su papá quería que le dijera que
expresiones pusieron al leerla.- les contó el hombre.

-Papá es tan ocurrente.- dijo Aiden riendo.

“Me imagino y espero que ya hayan hecho pasar a Jordan a la casa, una cosa más,
no les parece que mi guardia es muy guapo, lo pude ver por un momento, ya saben,
vista de alpha. Jordan es muy apuesto, su padre esta en abstinencia desde hace
mucho, tal vez uno de estos días termine convirtiéndolo en su nuevo papi.

Bueno, ¿como han estado pequeños? Espero que bien, aunque no pueda ver, aún
llevo la cuenta de los días, y se que su cumpleaños esta próximo, así que pronto
podrán venir a verme, lo que me hace feliz. Hace tiempo que no hablo con ustedes,
su tía Kali dijo que su primera transformación fue dolorosa, me hubiera gustado
estar ahí, maldito sea Gerard Argent. Espero que todos ustedes estén bien, los
extraño demasiado.

Una cosa más, Ethan tu tío Ennis, me dijo que te gustan los chicos, debo admitir que
estoy gratamente sorprendido, pero te diré algo que se que la mayoría de hijos que
son como tú desearían escuchar, te amo y estoy orgulloso de ti.

Los amo chicos, y los extraño como no tienen idea, quiero que se cuiden. Espero
algún día nos dejen libres, pero por ahora, solo me queda esperar a que puedan
venir a verme. Recuerden que su padre los ama.

Con amor Deucalion.”

Jordan vio a los chicos, estaban llorando, la carta de sus padres los había conmovido,
con cuidado se acerco a los chicos, quienes al verlo, se lanzaron a abrazarlo, para
seguir llorando.

-Lo extrañamos demasiado.- dijo Ethan llorando en el hombro de Parrish.

-No fue justo, él no hizo nada malo.- siguió Aiden.

-Muchachos, yo se que su papá los quiere, y también se que algún día su padre saldrá
de ahí, y podrán subirse le encima como antes.- los consoló Jordan, haciendo reír a
los menores.

Peter se estiro en su cama mirando el techo, detestaba estar encerrado, quería ser libre
y pasear por Eichen de preferencia, visitando a cierto beta que lo traía loco.

-Hale.- lo llamaron desde afuera.

Levantándose de la cama, miro al hombre que lo miraba desde la puerta, era uno de
los enfermeros junto a Valack.

-¿Que necesitan de mi?- pregunto con una sonrisa de engreído.

-Ven un momento con nosotros, Dunbar se esta saliendo de control.- le explico


Valack.

-¿Que le hicieron?- pregunto Peter parándose.

-No hicimos nada imbécil- gruño el enfermero.

-A mi no me vas a venir a engañar, ¿que le hicieron?- repitió el alpha.

-Un enfermero lo golpeo fuerte, y Liam se salio de control.- le contó Valack.-


Necesitamos que nos ayudes.-

-Bien, sáquenme de aquí.- dijo Peter.

El enfermero miro al doctor, quien asintió, así que con un poco de pesar, abrió la
puerta, dejando salir al lobo, quien ni corto ni perezoso emprendió camino hacia la
celda de Liam, al llegar vio a varios enfermeros tratando de calmar a la fiera, pero sin
mucho éxito.
-Muévanse inútiles.- dijo el alpha asustando a los enfermeros.

-Háganle caso, y muévanse.- dijo Valack al ver que nadie se movía.

Cuando todos se movieron, Peter se acerco a Liam, quien le gruño al verlo, a lo que
el Hale puso los ojos en blanco.

-Vamos pequeño, no me hagas enojar.- le pidió el lobo, pero aún así el beta seguía
gruñendo.- Liam necesito que te calmes, si no lo haces, te van a hacer daño, y no
permitiré que eso suceda. Liam, por favor, mírame a los ojos, y cálmate, solo céntrate
en mi.-

El beta miro al alpha, quien cambio sus ojos alternando en rojo y azul, queriendo con
eso calmar al chico, y al final, lo logro, Liam había vuelto a la normalidad y ahora
estaba aferrado a Peter.

-Liam, necesitas volver a tu celda.- dijo Valack.

-¿Peter puede venir conmigo?- pidió el menor al doctor.

-No, él tiene que volver a su celda.- dijo un enfermero, a lo que Peter le gruño.

-Entonces, supongo que usted lo calmara si se sale de control, ¿verdad?- pregunto el


alpha.

-Bien, pero solo esta vez Hale.- accedió el enfermero, empujándolos hasta la celda.

Liam se hecho en la cama, mientras Peter se quedo parado mirándolo, el menor se


pego lo que pudo a la pared, y recién el alpha se hecho a su lado.

-Gracias Peter.- dijo Liam mientras le daba la espalda.

-Descansa un poco pequeño, y no tienes nada que agradecer.- le dijo el mayor


sonriendo.

Tras un momento, el menor se había quedado dormido, y Peter empezó a recordar


cuando Liam había llegado a Eichen

Flash Back

-¿Eres Talia?- pregunto Peter desde su celda.

-No, te dije que no soy nadie de la familia.- dijo Cora riendo.

-Bien, es que dijiste que eras gruñona, tu madre era una gruñona terrible.- se defendió
su tío, esa era la manera en que se divertían.

-Muévete mocoso.- los Hale giraron su cabeza al oír la voz, para que lo siguiente que
vieran fuera un cuerpo cayendo frente a la celda de Peter.- Mocoso estúpido.-
-Hey, ¿por que lo tratas así?- pregunto Peter molesto.

-Cállate Hale, no te metas donde no te han llamado.- le riño un guardia.

-Me meto porque lo estas lastimando. Es un niño, déjalo en paz.- lo reto el alpha.

-Bien, quieres defender al mocoso, ven a defenderlo entonces.-

La puerta de la celda se abrió, y el guardia entro y sin avisar empezó a liberar


descargas al lobo, quien se retorció, para luego caer al piso, pero después, la
electricidad dejo de fluir, y luego se escucho un golpe seco.

Cuando Peter abrió los ojos, unos ojos azules lo miraban con preocupación, eran los
ojos más bellos que el lobo había visto, y solo estaban puestos en él.

-¿Estas bien?- pregunto el dueño de los ojos, y Peter se sintió morir, que voz tan
dulce estaba escuchando.- Oye, ¿estas bien?-

-Si, ¿eres un ángel?- pregunto Peter.

-No, me llamo Liam.- dijo el menor sonriendo.- Me trajeron aquí, mi mamá dejo que
me trajeran.-

-¿Que eres?-

-Un lobo, eso dijeron.- contesto Liam haciendo una mueca.

-Yo también lo soy, soy un alpha.- dijo Peter sentándose y viendo mejor al menor.-
Yo voy a cuidar de ti. No dejare que nadie te haga daño.-

-¿En serio?- pregunto el beta ilusionado, para luego lanzarse a los brazos del mayor,
quien lo abrazo con fuerza.

-Oh por Dios, Peter se enamoro.- dijo Cora con una sonrisa.

-¿Quien diría que encerrado podría encontrar el amor?- pregunto Derek también con
una sonrisa. Ambos merecían tener a alguien que los ayudara a sobrevivir el infierno
que era Eichen House.

Fin Del Flash Back

-Estamos esperando a cumplir los 18, para poder visitar a papá.- le contó Ethan a
Jordan. Los tres estaban sentados en el mueble de la sala, mirando fotografías,
mientras comían galletas y bebían sodas.

-¿Su cumple esta cerca?- pregunto Jordan pasando las paginas del álbum.
-Si, dentro de dos semanas.- contesto Aiden.

Los chicos se habían tomado en serio lo que su papá les había dicho en la carta, así
que estaban intentando de que Jordan se sintiera cómodos con ellos, los gemelos
habían decidido de que el guardia en verdad iba a convertirse en su papá.

-Ethan, Aiden, ¿de quien es la camioneta de afuera?- pregunto una mujer entrando a
la casa, pero se quedo parada al ver al hombre.

-Buenas tardes.- saludo Jordan.

-Tía Kali, él es el guardia de nuestro papá, nos trajo su carta.- explico Ethan.

-Oh, un gusto soy Kali, amiga de Deucalion.- se presento la mujer.

-El gusto es mio, soy Jordan Parrish.- saludo el guardia levantándose y estrechando
su mano con la de la mujer.

-¿Y tío Ennis?- pregunto Aiden.

-Viene con las compras, vayan a ayudarlo.- les dijo Kali, así que los gemelos salieron
rápido.- ¿Usted es igual a los otros?-

-No señora, no lo soy.- contesto con seguridad Parrish.

-Eso es bueno, bueno Jordan, ¿quieres quedarte a cenar?- le pregunto la mujer


sorprendiéndolo.

-Pues, si claro, me encantaría.- dijo Jordan sonriendo con un poco de incomodidad.

-Buenas tardes.- un hombre alto y musculoso, de aspecto rabioso apareció de repente,


con los gemelos detrás.

-Jordan, él es nuestro tío Ennis.- lo presento Aiden, se estaban comportando como


niños pequeños.

-Es un gusto señor.-

Tras las respectivas presentaciones, Jordan fue llevado por los gemelos a la cocina,
donde ellos mismos le mostraron como hacían las galletas, mientras que Kali y Ennis
cocinaban la cena, entre risas y alegría.

Y por primera vez en su vida, Jordan Parrish se sintió en familia, un sentimiento que
no había sentido hace mucho. Ayudo a los gemelos a hacer las galletas, llenándose de
harina, jugando con Ethan, amasando a Aiden, pasándole el rodillo encima, asustando
a Ennis y jugándole bromas a Kali. Se estaba divirtiendo, y no quería que ese día
acabara.

*
Las puertas del sótano de Eichen se abrieron, y por ella paso Chris Argent junto a su
hija, mientras llevaban un cuerpo desmayado. Pararon frente a unos guardias, que los
miraron con diversión.

-¿Que es?- pregunto uno de los guardias.

-Un wendigo.- contesto Chris.- El director nos dijo que podíamos visitar a Kate.-

-Las visitas son en otro día.- dijo el guardia.

-Y mis armas no distinguen de sobrenatural o torturador.- lo amenazo el cazador.

-Maldito...-

-Valdor, es suficiente.- Valack había aparecido.- Lo que el señor Argent dice es


cierto, el director les dio permiso, así que déjalos pasar.-

-Como diga doctor.- dijo Valdor con sumisión, sabían que después del director,
Valack era el más respetado de Eichen.

-Gracias doctor.- dijo Allison con una sonrisa.

-Dejen al sujeto aquí, ustedes pueden ir a ver a su familiar. Ah, Chris, él ya sabe que
ibas a venir, así que no te asustes cuando te empiece a insultar.- lo advirtió Valack.

Allison empezó a caminar riéndose de su padre, sabia que a su papá le gustaba Theo,
era tan obvio, siempre que iban a ver Kate, Chris terminaba peleando con la quimera,
pero lo gracioso de todo, y que solo Allison sabia, era que su padre salia con una
sonrisa después de una pelea con Theo.

-Tía.- Allison se acerco a la celda donde la mujer estaba sentada.

-Allison cariño, sabia que iban a venir, pero no creí que vendrían a verme.- dijo Kate
con una sonrisa.- Hola Chris.-

-Hola hermana, ¿que tal todo?- pregunto el cazador, sabiendo que era visto por cierta
quimera.

-No me puedo quejar, en verdad no puedo, pero hoy nos dejaron tres horas en el
patio, dicen que es por la luna llena, porque ese día no nos van a dejar salir por nada
del mundo.- les contó la mujer.

-¿Estarás bien ese día?- pregunto su hermano preocupado.

-¿Ahora te preocupas por ella?- y ahí estaba, sabia que en cualquier momento Theo
hablaría.

-Hola Theo.- dijo Chris acercándose a la celda del menor, quien se pego a ella para
empezar a gruñir.
-Cazador de pacotilla.- gruño la quimera.

-¿Como has estado?- pregunto el mayor.

-Mejor que tú, es que no me imagino como un hombre que mete a gente inocente a
este lugar, puede vivir bien.- contesto Theo.

-Pues duermo muy bien.- comento Chris, sabiendo que eso molestaría al chico.

-Eres tan detestable.- gruño Theo, y así empezó otra pelea entre los dos.

-Por Dios, ¿por que no pueden ser como la gente normal? Solo tienen que decirse que
se aman, y ya.- se quejo Allison mientras los veía.

-Son tan parecidos.- dijo Kate riendo.- Adoraba ver a tu padre con esa chispa
juvenil.-

-No te vayas aún.- pidieron los gemelos con cara de tristeza.

-Lo siento chicos, pero aún tengo que ir a recoger la respuesta de Stiles, y tengo que
alistar lo que les llevare a los demás, a parte, tengo que levantarme temprano, es
mucho.- dijo Jordan riendo.

-Cuando tengas libre, ¿vendrás a vernos?- pregunto Ethan.

-Por supuesto, y haremos más galletas.- contesto Parrish.

-Oh, espera.- Aiden desapareció con rapidez, para luego volver con un taper.- Son las
galletas, para que se las des a papá, y para que tú también las comas.-

-Chicos, ustedes son los mejores hijos que Deucalion podría merecer.- los alabo
Jordan, a lo que los menores sonrieron.

-Siempre seras bienvenido aquí, Jordan- le dijo Kali con una sonrisa.

-Los veo el día de la visita.-

Jordan salio de la casa, sintiéndose mal, le había gustado compartir un momento con
los gemelos y con Kali y Ennis. Se sentía extraño, sentía que estaba abandonando a
su familia, aunque no lo fueran.

Subió a su camioneta y condujo hasta la comisaria, después de unas disculpas por la


tardanza, Stiles le entrego la carta de respuesta a la de Derek, con una sonrisa y una
promesa de volverse a ver, se despidió y regreso a su departamento, antes de meterse
a su cama, alisto su maleta, metió las cartas y los pedidos de los prisioneros, al igual
que las galletas de los gemelos, decidió que comería junto a Deucalion.

Con todo eso listo, se metió a su cama, era increíble lo ansioso que estaba por volver
a Eichen, estaba comenzando a extrañar a Deucalion.

-Buenas noches Deucalion, ya mañana estaré ahí.- dijo antes de quedarse dormido,
sin saber que a una cuadra, cierto alpha esperaba con ansias a que su guardia
volviera.

Capitulo 7

-Bienvenido Parrish.- dijo la mujer de la recepción al verlo.

-Hola, ¿como estuvo todo por aquí?- pregunto tratando de ser amable.

-Todo estuvo tranquilo, aunque no podemos confiarnos, se acerca la luna llena.-


comento la mujer.- ¿Me dejas revisar tu bolso?-
-Claro.- accedió, y eso le temía, esperaba que no le quitaran los pedidos de los
internos.

-Te trajiste todo el supermercado.- bromeo la mujer.- Sinceramente, con la comida


que le dan a los internos, yo también les hubiera traído todo esto.-

-¿Lo sabes?- pregunto Jordan preocupado.

-Querido, no todos aquí somos malos con ellos, habemos quienes los respetamos.
Ahora ve, Deucalion debe estar esperándote. No te preocupes, abajo no te revisaran
nada.- le dijo, a lo que el oficial tomo sus cosas, y con una sonrisa, empezó a bajar
hacia el sótano.

Al llegar a la primera puerta, vio a uno de sus compañeros con una venda cubriéndole
el brazo, por lo que se le quedo viendo, hasta que el tipo se dio cuenta.

-Una lección novato, no le des la espalda a estos monstruos.- dijo el hombre


agarrándose el vendaje.

-Que extraño, hasta ahora, no me han hecho nada, ¿no sera acaso que lastimaste a
alguno y te la devolvió?- le pregunto Jordan mirándolo, a lo que el otro se acerco
molesto.

-Parrish, bienvenido.- Valack había llegado.- ¿Sucede algo?-

-Nada, aquí mi compañero me esta explicando que no debo confiarme de los


internos.- contesto Parrish con una sonrisa.

-Ya veo, bueno vamos a la celda, Deucalion ha traído un libro y quiere que se lo
leas.- dijo el doctor mirando a ambos hombres.

-Eres su guardia, no su asistente.- dijo el otro guardia.

-Es que yo tengo esta cosa ¿como se llama? Ah si, humanidad.- dijo Jordan, para
luego caminar hacia las celdas.

Al caminar hacia su celda, saludo a Lydia quien se veía un poco más arreglada que
otras veces, la chica le sonrió con ternura y le dijo que lo había extrañado, aunque
solo se había ido un día.

-Deucalion.- llamo al entrar, por lo que el alpha quien estaba apoyado en la pared se
giro a mirarlo.

-Jordan, que alegría verte.- dijo para luego reír, mientras el guardia negaba con la
cabeza.

-Traje un regalo, que te alegrara mucho, voy a cerrar la celda, espera.- le dijo Parrish
cerrando la puerta principal de la celda.
Tras eso, abrió la puerta que lo conectaba con la celda de Deucalion, tomo su bolso y
saco las galletas, entro con el alpha y cuando estuvo sentado en la cama del interno,
abrió el taper.

-Galletas.- susurro Deucalion.- ¿Tienen chispas de chocolate?-

-Si, y también, fueron hechas por tus hijos y por mi.- confeso el guardia.

-¿Que? ¿Hiciste las galletas con Aiden y Ethan?- pregunto el alpha sorprendido.

-Son unos chicos maravillosos. Nos divertimos mucho, prácticamente sepultamos en


harina a Ennis.- dijo Jordan riendo.

-Me alegra que te divirtieras, ¿los chicos leyeron la carta?-

-Si, y sus expresiones fueron de total amor, se notaba que te extrañan mucho, están
entusiasmados por venir el día de visitas.- le contó Parrish.- Ve comiendo algunas
galletas, iré a entregar los pedidos.-

Deucalion no respondió, pero mientras el guardia le daba la espalda, cambio el color


de sus ojos y miro al hombre.

-Que maravilloso hombre eres, Parrish.- dijo, cuando este ya se había ido.

-¿Por que les dan más tiempo fuera?- pregunto Jordan al ver que la hora normal había
pasado.

-Es por la luna llena, ese día no vamos a poder salir de nuestras celdas, son muy
cuidadosos.- contesto Liam, quien estaba disfrutando una de las galletas que Peter le
había invitado.- Detesto la luna llena, no puedo controlarme bien.-

-Es natural, solo tienes 16, y no has tenido a tu alpha cerca.- comento Peter
abrazándolo, cosa que sorprendió un poco a Jordan, pero decidió que le preguntaría a
Deucalion después.

-Aún así, lo odio. ¿Probaste las galletas que los hijos de Deu le hicieron?- pregunto el
menor.

-Si, probé una, estaba deliciosa. Por cierto Parrish, ¿sabias que Deucalion te extraño
todo el día libre que tuviste?- pregunto el Hale, queriendo molestar al alpha ciego.

-¿En serio?- pregunto Parrish mirando a Deucalion, quien se giro al sentir la mirada.-
Pues, yo también lo extrañe.-

-¿Como dices?- pregunto el lobo.

-Es que, no lo se, se sintió raro dormir sin tu presencia, me sentí extraño, solo quería
que el día se acabara rápido, para poder volver.-
-Ah, el amor.- suspiro Peter haciendo que el guardia se sonrojara.

-Peter, no seas molestoso.- le riño Derek.- Parrish, gracias por traer la carta de Stiles.-

-Es un chico agradable, un poco hiperactivo.- comento Jordan riendo.

-Es un gran chico.-

-Oigan, Theito esta molesto.- dijo Kate acercándose con el menor, quien tenia cara de
querer matar a todo el mundo.

-¿Que sucede Theo?- pregunto Derek.

-Yo se, yo se.- dijo Cora con Hayden a su lado, quien se veía más animada.

-Entonces, dinos querida Cora.- dijo Malia uniéndose.

-Cierto cazador esta aquí.- contó la chica, a lo que Theo gruño.- ¿Vieron? ¿Por que
no aceptas que te gusta ese hombre?-

-No me gusta, lo odio, lo detesto, es el ser más horrible del mundo.- empezó a decir
la quimera.- Si lo viera ahora mismo, le pegaría en la cara.-

-¿En serio? Hazlo.- dijo Chris, quien estaba detrás de Theo.

-Hola Christopher.- saludo Deucalion con cortesía, mientras que con una mano, tenia
bien agarrada el brazo de Jordan, como temiendo que lo alejaran de su lado.

-Deucalion.- saludo el cazador, pero se quedo observando a Parrish, quien no


entendía nada de lo que pasaba.

-No mires tanto Argent.- gruño Liam parándose frente a Jordan, pero antes de que
Chris pudiera decir algo, Peter estaba parado frente a él.

-¿Te podemos ayudar en algo?- pregunto el alpha, a la vez que con una mano atrás
agarraba la mano del beta.

-Solo quería hablar con mi hermana.- contesto Chris alejándose un poco.

-¿Conmigo?- pregunto con inocencia Kate.- ¿Que sucede?-

-Gerard tiene cáncer.- le contó el otro, a lo que todos se sorprendieron.

-¿Cáncer? ¿Al fin se va a morir el viejo?- pregunto la mujer con una sonrisa.- Gracias
señor, mis plegarias han sido escuchadas.-

-Kate... bueno, la cosa es que es terminal, y él quiere venir a verte.- dijo Chris en un
susurro, pero igual todos lo escucharon.
-No, eso si que no, yo no tengo nada que ver con ese hombre. Ni loca lo veré, no
Christopher, ¿entendiste? NO.- dijo Kate con molestia.

-Tranquila, que aquí el malo, no soy yo.-

-¿Seguro?- pregunto Theo mirándolo, a lo que el cazador lo observo.

-Así es quimera.- dijo el hombre sorprendiendo al chico.

-¿Como me llamaste?- pregunto la quimera.

-Mira Kate, solo vine a decirte eso, ahora me voy, ya no quiero seguir aquí. Con
permiso.- dijo Chris saliendo del patio.

-¿Que rayos paso?- pregunto Theo.

-¿No creen que se veía triste?- pregunto Parrish, y todos voltearon a mirarlo.- Es que
sus ojos se veían un poco apagados, como si lo hubieran herido emocionalmente.-

-Hay Dios.- dijo la quimera, a lo que Cora lo abrazo.

-Lo heriste, idiota.- dijo la loba, y todos dejaron salir un suspiro de resignación.

Tras unos días, la luna llena llegó a Eichen House, Jordan observo como todas las
puertas de los internos, se cerraron, incluso la suya, le habían advertido que cerrara
con seguridad la puerta interna de Deucalion. Le preocupaba muchos de los lobos,
pero Valack lo alivio diciéndole que había una forma de controlar a algunos, que no
se preocupara.

-¿Como te sientes?- pregunto Jordan pegándose al vidrio.

-Bien, me es más fácil controlarme, tengo años de experiencia.- contesto Deucalion


apoyando su cabeza en el vidrio.- ¿Tú estas bien?-

-Si, aunque es extraño no poder dar mis vueltas habituales.- comento Parrish riendo.

-Pero es lo mejor, algunos son inestables.- dijo Deucalion con tranquilidad.- En la


noche sera peor.-

-¿Lo sera?- pregunto el menor.

-Si, los betas y omegas se descontrolaran cuando se trata de una luna llena.- comento
el alpha.

Tras esa charla, Jordan le estuvo leyendo varios capítulos de una obra, hasta que la
noche llego. Y ahí empezaron los aullidos y gruñidos, Jordan solo los escuchaba sin
hablar ni preocuparse, después de todo, Deucalion le había dicho que no tenia que
preocuparse por ello.
Pero entonces, la bulla empezó a crecer, gritos y gruñidos, Jordan se levanto de su
cama y se pego al vidrio, queriendo saber que pasaba, vi a otros guardias correr hacia
el pasillo de Liam. Un gruñido lo hizo voltearse, Deucalion tenia sus ojos rojos, y sin
pronunciar ningún sonido, Jordan pudo leer la palabra que le dijo “LIAM”.

Tomando su tarjeta, Jordan abrió la puerta de la celda y corrió hacia la celda de Liam,
al llegar, observo como varios guardias y enfermeros eran golpeados contra las
paredes. El lobo estaba descontrolado y era muy fuerte, si lo enfrentaba, terminaría
con varios huesos rotos, tenia que encontrar una solución.

-Parrish.- oyó que lo llamaban, se giro encontrándose con Malia.- Necesita a Peter,
necesita a un alpha, Liam necesita a Peter.

Jordan asintió ante lo dicho por la chica, y sin atravesarse en el camino del beta,
corrió hacia la celda del otro alpha, quien estaba a medio transformar. Parrish miro a
sus compañeros, algunos adivinaron su intención y empezaron a negar con sus
cabezas, pero eso no le importo, y con un rápido movimiento, abrió la celda del lobo.

Peter salio con un gran rugido, que hizo silenciar a todos, con una mirada casi
asesina, los guardias se alejaron del beta, quien se giro a ver al alpha, pero con un
rugido corto, Liam agacho la cabeza y camino hacia el mayor, cuando llego, se apego
cariñosamente y empezó a restregar su cabeza como si fuera un cachorro pequeño.
Usando su fuerza sobrenatural, cargo al menor y se giro a mirar a Jordan.

-Abre mi celda, Liam se quedara conmigo hoy.- dijo Peter.

-De ninguna manera.- dijo uno de los guardias.

-¿Tú vas a detenerme?- pregunto el alpha, quien empezó a cambiar la forma de su


cara.

-Suficiente.- Valack había llegado.- Jordan abre la celda de Peter.-

Jordan camino hasta la celda del alpha y la abrió, dejando entrar a ambos lobos, Peter
dejo al menor en la cama y volvió con Jordan, mirándolo, estiro su mano, como
esperando que el otro hiciera lo mismo. Cuando Parrish lo hizo, le sonrió.

-Gracias por lo que hiciste, se podría decir que le salvaste la vida.- dijo el alpha.

-¿Estará bien? ¿No tendrás problemas con él?- pregunto preocupado.

-No, hay maneras de controlar a un beta, y justo ahora, necesita de una sola manera.
Dile a tus compañeros, que si no quieren ver algo no apto, no se acerquen a mi celda.-
advirtió el lobo, para luego cerrar la puerta.

Jordan se giro y miro a Valack, quien había escuchado todo, les informo a los otros
guardias, las advertencias del alpha. Por lo que Parrish regreso a su celda, al entrar
Deucalion se giro a verlo.
-Liam esta con Peter.- le contó mientras cerraba su puerta.

-¿Tienes perfume?- pregunto Deucalion.

-Si, en mi bolso.- contesto el guardia.

-Por favor, ponte lo. Hueles a celo.- dijo el alpha casi gruñendo.- Y aunque controle
mi cambio, no significa que puedo controlar mi libido.-

Jordan se apresuro en ir por el perfume y se lo hecho, cuando estuvo seguro de estar


súper perfumado, volteo a ver al alpha, quien asintió.

-¿Tuviste contacto con alguno de ellos?- pregunto Deucalion.

-Con Peter más que con Liam.- contesto Jordan.

-Peter esta en celo, bueno, al fin Liam obtendrá lo que necesita.- comento el hombre
sonriendo.- Descansa Jordan, que hoy no es nuestra noche. Hoy es la noche que un
alpha al fin reclamara a ese beta como suyo.-

Peter miro al beta que se encontraba echado en su cama, no esperaba que una ocasión
como esta se le presentara justo cuando su celo también había llegado. Lo que si le
sorprendió muy gratamente, fue enterarse de que al pequeño Liam, también le había
llegado su celo.

Un golpe al vidrio de su celda fue suficiente para que las luces se apagaran, después
de todo, no las iba a necesitar. Se acerco a la cama, Liam aún seguía despierto, pero
ya estaba más calmado, y ahora solo lo miraba expectante, esperando con ansias lo
que iba a suceder.

-Liam.- lo llamo Peter, quería hacer esto, pero no iba a violar al menor.- Sabes lo que
voy a hacer, ¿verdad?-

-Si, y quiero que lo hagas.- contesto el menor.

Eso fue suficiente para que Peter pudiera “atacar”, se quito el polo que llevaba, para
luego quitarle la ropa al menor, dejándolo desnudo encima de su cama, por unos
segundos, el alpha se quedo maravillado ante la vista del cuerpo de Liam, en su
mente, era el cuerpo más excitante que había visto.

Se termino de desnudar y se puso encima del beta, empezando a besarlo, el día que
Parrish había tenido su día libre, pudo besar a Liam, por primera vez, y ahora, se
había vuelto adictivo a esos labios, se había vuelto adicto a todo lo que era Liam.

Mientras los besos seguían, con una mano libre empezó a masajear el miembro del
menor, lo que ocasiono que Liam se separara del beso, para poder gemir. Decidido a
que el menor solo se dedicara a gemir, Peter se arrodillo entre las piernas del chico, y
después de mojar uno de sus dedos, lo introdujo lentamente en la entrada del chico,
quien volvió a gemir, pero esta vez logro sacar sus garras.

Para que olvidara la intromisión, Peter tomo el miembro de Liam y empezó a


lamerlo, eso logro el cometido, el joven beta había olvidado la incomodidad y se
estaba entregando enteramente al placer. Pasado unos minutos, Liam estaba listo para
recibir al alpha.

Levantándolo de la cama, lo hizo arrodillarse frente a la cama, se puso detrás del


menor, y tomando su miembro, lo puso en la entrada de Liam, puso su brazo frente a
la boca del chico, como indicándole que si le dolía, podía morderlo. Sin esperar
mucho, y de una sola estocada, entro en Liam, quien ante la sorpresa y el dolor,
termino mordiendo el brazo de Peter, hasta que empezó a salir sangre.

Peter se quedo quieto mientras el menor se acostumbraba, hacia tiempo que no tenia
sexo con alguien, y estaba feliz de que esta vez fuera con el chico que había puesto su
mundo de cabeza con su llegada. Empezó a moverse despacio, queriendo que el
menor lo disfrutara, para hacerle olvidar el dolor, volvió a su truco de antes, tomar su
miembro y empezar a masturbarlo.

Mientras más fuerte era su agarre en el miembro, Liam se iba olvidando del dolor,
tanto así, que él mismo se empezó a mover, haciendo salir el miembro de Peter hasta
cierta parte, dejando la cabeza adentro, para luego ir hacia atrás, volviendo a
introducírselo, aunque con un poco de fuerza.

Viendo que Liam ya estaba listo, Peter tomo con fuerza las caderas del menor y
empezó a moverse, primero lento, disfrutando, no de la sensación, si no de los
gemidos que el chico dejaba salir de su boca.

Salio del interior del menor, y con rapidez, lo dejo boca arriba, volvió a entrar, pero
esta vez, mientras entraba y salia, volvió a besar los labios del menor. Los gemidos
de Liam sonaban por toda la celda, y también por todo el pasillo. Peter acelero sus
embestida, ya lo sentía, sabia que pronto se vendría, y quería hacerlo dentro de su
ahora compañero, porque desde ese momento, eso era Liam, era su compañero.

Con un gran rugido que resonó por todo el pasillo, y hasta es posible, por todo
Eichen, Peter Hale se corrió dentro de Liam, y como un bonus especial, semi
convertido en lobo, mordió al menor en el cuello, marcándolo como suyo,
advirtiéndole al mundo, que ese beta, le pertenecía.

-¿Ahora que pasara?- pregunto Liam, mientras se bañaba.

Eran las dos de la mañana, habían llamado a Valack para poder asearse, y regresar a
dormir, el pobre doctor estaba muerto de vergüenza, así como otros guardias, había
escuchado todo lo que ambos lobos habían hecho.

-¿A que te refieres con eso?- pregunto Peter, mientras pasaba sus manos por el
cuerpo del menor.
-¿Que somos?-

-Pareja, creí que eso estaba claro.- respondió el alpha besando el cuello de Liam.-
¿No me quieres como tu pareja?-

-Claro que si, es que ¿podremos tener una relación aquí dentro? ¿Una relación en una
prisión?- Liam se volteo y miro a Peter, quien aprovecho para acariciar su rostro.

-No importa donde estemos, no importa quienes intenten separarnos, al final, tú eres
mio, y yo soy tuyo. Para siempre.-

Capitulo 8

Jordan toco la puerta del director dos veces, hasta que desde adentro le dijeron que
podía entrar, abrió y entro, el hombre que hacia poco había conocido estaba sentado
leyendo un periódico.

-Señor, ¿me mando a llamar?- pregunto el guardia, ya adentro de la oficina.

-Parrish, si, siéntate por favor.- le pidió y él obedeció.- Me ha llegado la noticia, de


que el día de la luna llena dejaste salir al interno, Peter Hale, aún cuando las reglas
dictaminan, que en este periodo, ningún interno debe salir de su celda.-
-Pues, lo lamento señor, pero si no hacia algo pronto, solo iba a quedar yo para
enfrentarme a Liam, y discúlpeme, pero soy solo un hombre, no tengo fuerza
sobrenatural.- se defendió Jordan.

-Bien, lo entiendo, pero ¿quien te dijo que Peter podía ser la solución?- pregunto el
hombre.

-Malia, ella me dijo que Liam necesitaba a su alpha, que necesitaba a Peter.- contesto
Parrish.

-¿Confiaste en su palabra? Y ¿si era una mentira?-

-Pero no lo fue, ella tuvo razón.- Jordan no parecía dar su brazo a torcer.

-Cierto, pero de igual forma, tiene que tener cuidado siempre Parrish, esos seres
pueden parecer humanos, pero no lo son, recuerde que siguen siendo bestias.- le dijo
el director.

-Si señor, lo se.- dijo el guardia, aunque por dentro pensaba, que las bestias parecían
más sus compañeros que los propios internos.- ¿Algo más?-

-Si, felicitarlo por su actuar, quizás no fue lo mejor, pero sin duda, evito un desastre.
Ahora, puede ir a seguir con su trabajo.- le dijo el hombre.

-Gracias señor, con permiso.- Jordan se levanto y salio de la oficina, gracias a Dios
no lo habían castigado, pero ahora tendría que andar con cuidado, sabia que sus
compañeros estarían atentos a cualquier falta que cometiera

Camino por entre las celdas, algunas estaban abiertas, pues esos internos no eran tan
peligrosos, y sobre todo que se merecían ser libres después de un encierro. Se detuvo
frente a la celda de Peter, después de lo sucedido en luna llena, Liam no había vuelto
a su celda, todo gracias a Valack, quien le había explicado al director que era
peligroso separarlos, que aún con todo el sedante del mundo, Peter escaparía para ver
a Liam, ahora que eran pareja.

-¿Como va todo?- pregunto acercándose a la celda.

-De maravilla Parrish.- contesto Peter, mientras Liam descansaba en su pecho.- Esta
agotado.-

-Si, Deucalion me tuvo toda la noche hablando con tal de no escucharlos.- le contó el
oficial riendo.

-¿Hablando? Mejor hubieran hecho lo mismo que nosotros.- molesto el alpha al


joven.

-Que gracioso Hale.- contesto Jordan con una sonrisa de lado.

-Vamos Jordan, ¿crees que no me he dado cuenta de como miras a Deucalion?-


pregunto Peter ya sin sonreír.- Y Deucalion siempre esta mirándote como si te fuera a
comer, son demasiado obvios.-

-Peter, creo que te esta fallando la vista, entre Deucalion y yo, nada va a suceder.-
dijo Parrish.- Bueno, te dejo descansar, porque parece que si no lo haces, empiezas a
decir tonterías.-

-Te aseguro Parrish, que un día Deucalion y tú, van a terminar como Liam y yo.- le
dijo Peter cuando el guardia se iba.

Jordan siguió su habitual camino, saludo a varios de los internos, poco a poco, se
había ganado el respeto y cariño de ellos, después de todo, había demostrado que no
era igual a los otros.

-¿Como esta Liam?- pregunto Deucalion, cuando llego a la celda que compartían.

-Ahora mismo, esta descansando.- contesto Jordan cerrando la primera puerta de la


celda, para luego abrir la puerta que lo conectaba con Deucalion.

-¿Y Peter?-

-Él esta de un humor magnifico.- respondió el guardia echándose en su cama, y


dejando salir un suspiro.

-¿Estas bien?- pregunto Deucalion al oírlo.

-Si, solo estaba pensando en algo.- dijo Parrish, para luego mirar al alpha, aunque
este no lo estaba viendo.

¿Acaso Peter tenia razón? ¿Y si el alpha le gustaba? Pero, ¿como no se habría dado
cuenta? ¿Tan ciego era? Bueno, por algo decían, que el amor era ciego.

-La emoción se siente en el aire.- dijo Deucalion riendo, mientras Jordan ordenaba un
poco la celda.

-Liam esta que salta sobre su cama, me dijo que esta ansioso de presentar a Peter con
su padrastro.- contó el guardia.

-Peter debe estar echo un manojo de nervios.- se burlo el alpha.

-Pues si, ahora esta atormentando a Derek, quien también anda nervioso, por la visita
de Stiles.- contesto Jordan sentándose en su cama.- ¿Tú no estas nervioso?-

-¿Te soy sincero? Estoy que muero de nervios, veré a mis hijos después de tanto
tiempo, estoy emocionado.- confeso el lobo.

-Son unos chicos adorables. Yo también estoy ansioso por verlos.- dijo Jordan,
ganándose una sonrisa de parte del mayor.
Mientras el tiempo pasaba, se pusieron a conversar de cosas banales, Jordan estaba
interesado en saber más cosas sobre el alpha. Para su mala suerte, las palabras de
Peter habían hecho efecto, ahora no podía dejar de pensar en si, Deucalion le gustaba,
y lo “peor”, es que había descubierto, que efectivamente, el hombre le gustaba.

-Aquí es.- un guardia apareció ante la puerta de la celda, acompañado por Ethan y
Aiden, quienes al ver a su padre, se lanzaron contra él, cayendo los tres encima de
Jordan.

-Jordan.- saludo Ethan dándole un beso en la mejilla.

-No es justo, yo quería ser el primero en saludar a Jordan.- se quejo Aiden, también
dándole un beso en la mejilla.

-Entonce, ¿Jordan recibe más besos que yo?- pregunto Deucalion haciéndose el
molesto.

-También hay besos para ti papá.- dijeron los chicos, y a continuación, lo llenaron de
besos.

-Mis muchachos, han crecido demasiado.- dijo el alpha tocando sus rostros.

-Papá, te extrañamos.- Ethan se hecho a llorar en el regazo de su padre, siempre había


sido el más emotivo.

-Y yo a ustedes, cada día los extraño más.- lo consoló Deucalion.

Jordan quien observaba la escena con ternura, miro a Aiden, él también parecía
querer llorar, por lo que se levanto y fue hacia el chico, para luego abrazarlo. Al
hacerlo, el menor se descargo, llorando como nunca antes lo había echo.

-Papá- Liam abrazo con fuerza a su padrastro al verlo.

-Mi muchacho.- el doctor no pudo evitar llorar, detestaba que su hijo tuviera que
estar en un sitio como Eichen, pero al menos, le permitían visitarlo, a pesar de que en
papeles, el no era su padre.

-Tengo mucho que contarte.- dijo Liam cuando se separaron, pero entonces noto las
lagrimas de su padre.- Papá, ¿estas bien?-

-Si hijo, es que me emociona verte. Bueno, ahora dime, ¿por que no estas en tu
celda?-

-Ah, bueno de eso quería hablarte, han sucedido un par de cosas. Una fue antes de la
luna llena, y la otra, en plena luna llena.- empezó Liam.- Desde que entre a Eichen,
hubo alguien que en el primer momento, me protegió, alguien del que me fui
enamorando.-
-¿Que paso en la luna llena?- el doctor Geyer se lo estaba tomando de la mejor
manera.

-Me salí de control, y un guardia, el que te llevo mi carta, el dejo salir a esta persona,
para que me ayudara, es un alpha, así que sabia como controlarme.- contesto el
menor.

-¿Como te controlo?-

-Con un rugido, pero eso no fue todo, después de eso, me quede con él en su celda, y
resumiendo, tu hijo ya no es virgen.- confeso Liam con una sonrisa nerviosa.

-Wow, supongo que es algo que debo asimilar rápido, porque presiento, que me lo
vas a presentar, ¿verdad?- pregunto el hombre.

-Si, aunque ahora esta en la celda de su sobrino, así que, déjame llamarlo.- dijo el
menor parándose y acercándose a la puerta de su celda, dejo salir un silbido.

De pronto Peter apareció en la puerta, algo agitado. Se paso una mano por el cabello,
para luego sonreír.

-Peter, el es mi padre, el doctor Geyer.- lo presento Liam.- Papá, el es Peter Hale, mi


novio.-

-Es un gusto conocerlo señor.- dijo Peter estirando su mano.-

-El gusto es mio, Peter.- contesto el hombre agarrando la mano de su ahora yerno.

-Bueno, iba ir a ver a Malia, así que, los dejo para que conversen un rato. Bye.- y así
Liam huyo, dejando solos a su padre y a su novio, solo esperaba que cuando volviera,
los dos siguieran vivos.

Malia golpeaba la mesa de su celda con sus dedos, estaba ansiosa por las visitas, su
padre iba a ir a verla, a parte había logrado que le permitieran que Lydia estuviera
con ella en ese momento, quería que su padre conociera a la chica que le había
robado el corazón, y también quería que Lydia sintiera que a pesar de lo que era, la
quisieran.

-Malia.- dijo el Sr. Tate al verla.

-Papá- la coyote salto de su silla, y se abalanzo sobre su padre, quien la abrazo con
fuerza.

-Mi niña, ¿como has estado? ¿Como te tratan aquí?- empezó el hombre con sus
preguntas.

-No es que diga, que bruto que bien me tratan aquí, pero me tratan algo bien, no me
puedo quejar.- dijo la chica riendo.- Te quiero presentar a Lydia, te conté de ella en
mi carta.-

-Si claro, estoy ansioso por conocerla.- dijo el Sr. Tate.

-Lyd, ven aquí.- Malia estiro su mano y Lydia se acerco con cuidado.- Papá, ella es
Lydia, mi chica.-

-Malia.- Lydia la miro como si hubiera dicho algo peligroso, pero el padre de la chica
solo sonrió.

-Tranquila querida, se que están juntas, a parte desde que Malia te conoció, no ha
echo nada más que hablar sobre ti en cada una de sus cartas.- le contó el hombre
riendo.- Es muy efusiva, hasta en sus cartas.-

-Papá- Malia lo miro con un puchero, mientras Lydia dejaba salir una pequeña risa,
por lo que la coyote sonrió, le encantaba ver a su chica reír.

-Bueno Lydia, cuéntame un poco de ti, porque esta señorita, solo me dijo lo linda que
eres, y hay que admitir que tenia razón, eres una chica muy linda.- la alabo Henri.

-No hay mucho que contar señor, hasta los 15 años, llevaba una vida normal, luego
mis poderes se activaron y mis padres no pensaron en mejor idea que meterme aquí.-
le contó Lydia.- Luego tuve la alegría de conocer a Malia, era muy insistente, a pesar
de que le dije que se alejara de mi, ella siguió y siguió metida, hasta que me rendí.-

-Un poco insistente.- dijo el Sr. Tate mirando a su hija, quien sonrió con inocencia.

-Tú me enseñaste, que en la vida hay que ser insistente con las cosas que queremos, y
pues, eso hice. Quería a Lydia, así que fui insistente.- se defendió Malia.

-Y luego, Finstock se atrevió a reprobarme, a mi, ¿puedes creerlo?- pregunto Stiles


sentado en las piernas de Derek, quien oía atento todo lo que el chico decía.

-Imposible, eso es una tremenda injusticia. No merecías reprobar, ese profesor esta
mal de la cabeza.- dijo Derek sonriendo.

-Por supuesto, tú si me entiendes.- Stiles se giro para mirar a su novio.- Te extraño


Derek, a Cora, y Dios, hasta extraño a Peter.-

-Yo también te extraño, creo que este tiempo que nos dan para vernos, no es
suficiente. Stiles, te necesito conmigo siempre. Necesito verte más tiempo, necesito
acariciarte, necesito besarte, muero por besarte.- confeso Derek con pena.

-Entonce, aprovechemos este momento, aprovechemos este instante, y lléname de


besos, marcame como tuyo, haz lo que quieras conmigo. Solo no dejes de decir
cuanto me amas.- pidió el menor.
-Stiles, te amo tanto.- dijo el lobo, antes de empezar a besarlo.

-¿Ellos saben que estas acá?- pregunto Theo a su hermana.

-Si lo saben, me importa muy poco. Después de leer tu carta, me fui de esa casa, no
podía seguir viviendo con esos monstruos.- contesto Tara con molestia.

-Pero, ¿y tus estudios? ¿Donde estas quedándote?- pregunto preocupado su hermano.

-¿Te acuerdas de Camden Lahey?- pregunto Tara, a lo que el otro asintió.- Bueno,
después de que su padre murió, y como su hermano también esta encerrado aquí, me
ofreció un cuarto. He conseguido trabajo en una heladería, Camden no me esta
cobrando nada, solo me a pedido que lo ayude a pagar los gastos de la casa. Así que
estoy bien.-

-Tara, todo esto, tu no tendrías porque pasar por esto. Como siempre, termino
metiéndote en problemas.- se quejo Theo.

-Theo, tú no tienes la culpa de nada, ellos son los únicos culpables, en vez de
ayudarte, decidieron meterte en este sitio. Son los peores padres del mundo, ¿y sabes
que le han mentido a la familia?- pregunto la chica indignada.

-¿Así?-

-Si, el otro día llame al abuelo, y me pregunto por ti, que porque ya no le llamabas.
Así que tuve que decirle lo que paso contigo, le conté todo, al principio no me creyó,
estuve horas y horas al teléfono. Hasta que por fin, y me dijo, que le pasaba plata a
nuestro padre, por nosotros, que lo que ganaba papá, no era suficiente para
sobrevivir, así que como buen abuelo, el cubría nuestros gastos, o en si, solo los
míos.- dijo la chica.- A penas supo la verdad, me dijo que cancelo todos los cheques
que había enviado, y que no volvería a mandarle nada a nuestro padre. Que ahora me
mandaría a mi, y me mando a decir, que vendrá el mes que viene, y quiere visitarte.-

-Amo a nuestro abuelo, es dulce y cariñoso, aún no entiendo como nuestro padre
puede ser su hijo.- se dijo Theo.

-Son los misterios de la vida. Pero, dejemos de hablar de eso, ahora cuéntame, ¿que
pasa con el cazador ese, Argent?- pregunto Tara interesada.

-No pasa nada con él, ¿que podría pasar?- empezó a preguntar con rapidez la
quimera.

-Por Dios, eres tan obvio. Siempre te pones a la defensiva cuando se trata de algo que
te gusta.- se burlo su hermana.- Dime, ¿como es? ¿Es joven o viejo? ¿Guapo o feo?
Aunque tú jamas elegirías a alguien feo, tienes excelentes gustos. Vamos, quiero
saber más del hombre que te roba el aliento.-

-Tara, por favor, como si suspirara por Chris, y si es guapo, pero no es que digamos
un modelo de revista, no, él es más, el daddy que he buscado todo este tiempo.
Maduro, pero no tanto, con una barba increíblemente sexy, y debajo de esa chaqueta,
que señores brazos, sus polos se le quedan tan pegados, que puedo ver sus pectorales.
Y su voz, Dios mio, su voz me lleva al cielo, gruesa y varonil, pero ¿sabes que me
encanta? Sus ojos, son los ojos más bellos que halla visto, y cada vez que me miran,
siento que me transportan a un lugar sereno.-

-¿Y dices que no te gusta?- pregunto Tara.- Es cierto, a ti no te gusta Chris, tú estas
enamorado de él.-

-Entonces, entre al equipo de lacrosse, y conocí a un chico muy lindo, su nombre es


Danny, estuvimos saliendo un par de meses, pero creo que no era lo que el quería, a
parte de que se fue a otra ciudad, y desde ese momento, he estado totalmente soltero.-
contó Ethan a su padre.

-Tranquilo, ya llegara el indicado.- lo consoló Deucalion.

-Bueno familia, vuelvo en un momento, que tengo que dar mi vuelta. Sigan
conversando, en un momento vuelvo.- dijo Jordan saliendo de la celda.

-Bien, ahora que Jordan se fue, dinos papá, ¿como es eso de que quieres que él se
vuelva nuestro papi?- pregunto Aiden.

-¿No es adorable? Sinceramente chicos, fue amor a primera vista.- respondió el alpha
para luego reír, por su pésima broma, a lo que los chicos rodaron los ojos.- Amo
como es, es amable, dulce, es perfecto.-

-Pero es humano, y los humanos no duran tanto como nosotros.- opino Ethan.

-Eso se soluciona, podría morderlo.- contesto Deucalion con tranquilidad.

-Pero, ¿él siente algo por ti? No es bueno que te ilusiones, y luego descubras que no
sentía lo mismo. ¿Sabes que debes probar? Bésalo, si responde, es que tu le gustas, en
cambio, si te golpea o yo que se, pues, puedes intentar conquistarlo.- propuso Aiden.

-Escucha lo, es la voz de la experiencia.- se burlo Ethan.

-Que gracioso hermanito, pero al menos, yo si tengo citas- se la devolvió.

-Muchachos, por favor, los amo, pero no estoy para sus peleas.- pidió el alpha.-
Ahora, hablemos de cualquier otra cosa, que Jordan ya esta volviendo.-

Cuando Jordan entro a la celda, vio a Ethan y Aiden tomándose fotos con su padre,
algo que le pareció sumamente tierno, pero fue cuando el alpha se volteo a mirarlo,
cuando sintió como su rostro enrojecía. En definitiva, Deucalion le gustaba.
Capitulo 9

La visita de los gemelos paso extremadamente rápido, sobretodo para Deucalion,


quien estaba disfrutando del ambiente familiar, ahora que Jordan se había unido. Se
divertía viendo como Ethan y Aiden prácticamente metían al guardia en cada cosa
que contaban.

-Bueno muchachos, ya es hora.- dijo Jordan mientras se levantaba de la cama.

-¿Tan rápido se fue el tiempo?- pregunto Ethan mirando su reloj.

-Lo siento, pero son las reglas.- se disculpo Parrish.

-No te disculpes Jordan, no hay problema, igual mañana tenemos escuela, y no


hemos terminado la tarea de química.- dijo Aiden también levantándose.

-Cuídense, sean buenos estudiantes, traten bien a sus tíos, y por sobre todo,
protéjanse, no quisiera verlos aquí, esto no es un lugar para ustedes.- les dijo su padre
poniendo cada una de sus manos, en una de las mejillas de sus hijos.- Los amo.-

-Y nosotros a ti padre.- dijeron los gemelos al mismo tiempo.

-Vamos chicos, yo los llevare hasta afuera.- se ofreció Jordan.- Ahora vuelvo
Deucalion.-

-Aquí espero.- dijo el hombre recostándose.

Parrish camino con los chicos colgados de sus brazos, como si no quisieran soltarlo
nunca, lo que le pareció tierno. Pero a medio camino se detuvo, pues en la puerta
estaban los Argent, traían consigo a una persona.

-Ethan, Aiden.- los gemelos se giraron al oír el llamado, encontrándose con Stiles.

-Hey Stiles, ¿viniste a visitar a tu novio?- pregunto Aiden molestando.

-Si, ¿y ustedes? ¿A su papá?- pregunto el chico.- ¿Por que no podemos pasar?-

-Esta entrando un nuevo interno.- contesto Parrish, a lo que Stiles se adelanto, pero se
quedo quieto al ver a los Argent.

-Claro, la basura entregando a un inocente.- comento Stiles muy alto, llamando la


atención de Allison, quien lo miro.

Los que tenían familiares en Eichen e iban a la escuela, no le hablaban a la chica, así
que prácticamente andaba sola siempre, y como era obvio, Stiles no la pasaba.

-Stiles, cállate.- le pidió Ethan.

-Pero eso es lo que son, son basura, meten gente que no es peligrosa, los alejan de las
personas que los aman, me dan asco.- Stiles se estaba desahogando.

-Muchachos vamos, agárrenlo y vamonos.- pidió Jordan, no quería tener problemas.

Ethan y Aiden tomaron cada uno un brazo de su amigo, y empezaron a llevárselo,


aún cuando este seguía hablando. Tras dejarlos en la calle y viendo que se fueran
sanos y a salvo, regreso a su celda, sorprendiéndose de que fuera tan tarde, pues ya
había salido la luna.

Al entrar a su celda, se dio con la sorpresa de que Deucalion ya se encontraba


descansando, tratando de no despertarlo cerro la puerta de su celda y apago las luces,
al poco rato, las luces de afuera se apagaron, al final solo la tenue luz de la calle
iluminaba la celda.

Jordan empezó a quitarse el uniforme, para poder ponerse sus pantalones de dormir,
cuando estuvo listo, se quedo parado frente a su cama, sabia que tenia que ir a
dormir, pero también sentía que tenia que hacer algo.
Alejándose de su cama, se acerco a la de Deucalion, estiro su mano y acaricio el
rostro del hombre, de repente, el alpha levanto su brazo y también acaricio el rostro
del guardia, sorprendiéndolo. Pero si eso le había sorprendido, lo que paso a
continuación lo dejo en shock, Deucalion lo estaba besando.

Flash Back

Ethan salió de la celda, necesitaba usar el baño, Jordan le había indicado donde era,
pero ahora estaba perdido, lo peor tampoco recordaba donde estaba la celda de su
padre, era un pésimo lobo. Estaba a punto de ponerse a aullar, esperando que su padre
o hermano lo oyera, pero alguien llamo su atención, lanzando le pedacitos de papel a
la cabeza, al voltear vio a un chico de ojos verdes mirándolo.

-¿Quien eres?- pregunto el chico desde su celda.

-¿Quien eres tú?- pregunto Ethan de regreso.

-Hey, yo pregunte primero.- se quejo el otro.- Eres un lobo, se nota, pero quiero
saber, ¿por que no estas encerrado aquí?-

-Porque no soy tan tonto para dejarme atrapar por los Argent.- contesto el hijo de
Deucalion.- Mi nombre es Ethan Steiner.-

-Un placer Ethan, yo soy Jackson Whittemore.- se presento el chico sonriendo.- ¿Y


que haces aquí? ¿Has venido a visitar a alguien?-

-A mi padre, Deucalion.- contesto Ethan.- ¿Como llegaste aquí?-

-Mis padres prácticamente me regalaron a Eichen.- contesto Jackson sonriendo de


lado.- Por eso es que nadie se atreve a venir a verme.-

-Se supone que nuestros padres deberían protegernos, pero algunos han nacido sin
ese instinto.- comento Ethan acercándose un poco.- ¿Eres lobo o que?-

-Fue mordido por un alpha, y aunque debería haberme transformado en un lobo, me


transforme en un kanima, luego volví a ser un lobo, muy extraño. Pero aun, tengo
cosas de kanima.- le contó Jackson.

-¿Como que cosas?-

-Mis uñas siguen segregando veneno de kanima, mis ojos también cambian de color.-
explico el lobo cambiando sus ojos, y por un momento Ethan vio los ojos de un
kanima.- Y también tengo cola.-

-¿Tienes una cola? Eso es asqueroso.- dijo Ethan haciendo una mueva, para luego
sonreír.

-Que hermosa sonrisa tienes.- dejo salir Jackson, a lo que el otro chico se sonrojo.
-Oye, tengo que irme, ¿sabes donde esta la celda de mi padre?- pregunto, aunque
después se arrepintió.

-Claro, llegas a la esquina de este pabellón, y giras a la derecha, sigues de frente hasta
que te encuentres con su celda. Fue un gusto conocerte Ethan, espero volver a verte,
en una próxima visita.- dijo Jackson recostándose contra la pared.

-Cuando vuelva, vendré a visitarte, y Jackson, tal vez no te lo dicen mucho, pero eres
un chico muy guapo.- le dijo Ethan sonriendo.- Cuídate.-

Jackson se pego a su celda y observo al chico irse, era la primera vez que después de
tiempo conversaba con alguien, y justo había sido el chico más lindo que alguna vez
había visto, en definitiva hoy soñaría con Ethan, y no serían sueños dulces, oh no,
estos prometían ser sueños calientes.

Fin Del Flash Back

-Este es el día mas aburrido en todo Eichen.- se quejo Peter dejándose caer en uno de
los sillones.- Pequeño, ven a sentarte.-

-Ya no hay lugar.- dijo Liam, pues Deucalion y Theo también estaban sentados.

-Claro que hay sitio, aquí están mis piernas, para que te sientes.- le sugirió el alpha.

-Por cierto Peter, ¿que tal te fue con tu suegro?- pregunto Deucalion buscando
molestar al Hale.

-Fue interesante.- respondió Peter haciendo una mueca.- Fue muy explicito con
respecto a mi relación con Liam.-

-¿Que te dijo? Hasta ahora no has querido decirme.- comento Liam haciendo un
puchero.

-Créeme amor, tú no quieres saber, por tu bien, no quieres saber.- respondió Peter
acariciando la mano de su pequeño novio.

-Le preguntare a mi padre.- amenazo el menor.

-Bueno, ¿y que tal tu visita Theo?- pregunto el alpha ciego.

-Mi hermana se largo de la casa de mis padres, algo que me alegra mucho, y también
me dijo que le contó todo lo que pasa a mi abuelo, y que en la próxima visita vendrá
a verme.- contó Theo con una sonrisa.- ¿Que tal la visita de tus hijos?-

-Maravilloso, me alegre de ver a mis hijos.- contesto Deucalion para luego reír, a lo
que los otros pusieron sus ojos en blanco.- ¿Entendieron? Ver. Soy genial con mis
chistes.-
-Son los peores chistes del mundo.- opino Peter.- Oye, y ¿por que nuestro guardia
favorito esta tan alejado de nosotros?-

Todos miraron hacia el mismo sitio que el alpha miraba, ahí en un rincón junto a
Malia y Lydia estaba Jordan, parecía conversar algo serio con las chicas.

-¿Paso algo entre ustedes?- pregunto Theo mirando a Deucalion.

-No, de seguro tenía algo que conversar con las chicas.- contesto el alpha.

Habían pasado dos días del beso que se habían dado en la oscuridad, y es que
prácticamente se durmieron besándose, algo que había alegrado al alpha, pero cuando
despertó al día siguiente, el guardia no estaba en la celda, pero cuando regreso,
Jordan con las justas y le hablaba al alpha.

-Te esta mirando.- dijo Lydia al girar su cabeza.

-Dios, eso me pone más nervioso, ¿que hago chicas?- pregunto el guardia aterrado.

-Pues, gira y sonríe, no le hagas creer que no te gusto el beso, porque sabemos que no
te gusto.- dijo Malia como si fuera lo más obvio.

Jordan giro levemente su cabeza, encontrándose de lleno con la mirada del alpha, a lo
que se ruborizo, pero al final hizo lo que la coyote le indico, y le dedico una sonrisa
cálida, que sorprendió al hombre, pero que retribuyo con otra sonrisa.

-Ok, eso fue demasiado tierno.- dijo Malia con burla.- Ahora, ¿hicieron algo más que
besarse?-

-¿Algo como que?- pregunto el guardia confundido.

-Si hacen las cosas que yo hago con mi pelirroja, cuando tenemos nuestro tiempo
juntas.- comento la chica riendo, a lo que Lydia le metió un codazo.

-A lo que la bruta esta se refiere, es a que si tuvieron sexo.- explico la banshee.

-Oh, no no no, solo nos besamos hasta quedar dormidos.- contó Jordan.

-Pero, ¿tú quieres llegar a más?- pregunto Malia mientras subía y bajaba sus cejas
rápido.

-No lo se Malia, recién me acabo de dar cuenta de lo que siento por ese hombre,
estoy aterrado.-

-Bueno, mi consejo es que hables con él, porque él te beso, debe sentir lo mismo por
ti, así que pueden hablar de que sienten, creo que es lo mejor.- dijo Lydia y Malia
estuvo de acuerdo.

*
Las ramas golpeaban las ventanas de Eichen, había llegado una gran tormenta a
Beacon Hills, con todo y rayos, relámpagos y vientos fuertes. Jordan levanto la vista
al techo, al oír el trueno, la luz del foco tintineo.

-Esta fuerte la tormenta.- comento Deucalion.

-Si, si sigue así, podría dejarnos sin luz.- añadió Jordan, volviendo a mirar, pues otro
trueno había sonado.

-Parrish.- uno de sus compañeros se acerco a su celda.- Tenemos una reunión con el
jefe por la tormenta, nos ha pedido que te quedes a vigilarlos a todos.-

-¿Yo? Claro, haré mi ronda ahora.- accedió Jordan.

-Perfecto, no creo que tardemos mucho.- dijo el guardia, para luego irse.

-Parece una trampa.- comento Deucalion, a lo que el guardia lo miro.- Es que si se va


la luz, estarías solo tú indefenso ante varios seres sobrenaturales.-

-Pero no creo que eso pase, a parte, si eso sucediera, tú me salvarías, ¿verdad?-
pregunto Parrish.

-Claro que si. Ten cuidado.-

Jordan sonrió al alpha, para luego salir de su celda, paso por la de Lydia, donde la
joven ya estaba durmiendo, le agradaba ver a la chica más tranquila, relajada, el color
volvía a su rostro, y sabia que la causante de eso, era Malia. Siguió su camino,
verificando que todo estuviera en calma, al pasar por donde estaban todos los Hale,
los descubrió jugando a adivinar las cosas, se tomo el tiempo de jugar un rato con
ellos, para luego seguir su camino.

Llegó hasta la celda de Malia, quien ya estaba roncando a viva voz, para luego seguir
con Kira quien lo saludo con una gran sonrisa, y él respondió igual, entonces llegó
hasta la celda de Theo, a quien encontró dando vueltas por su celda, mientras
renegaba sobre algo.

-¿Estas bien Theo?- pregunto Jordan.

-Jordan, ¿que hace por acá?- pregunto el chico extrañado.

-Los otros guardias están en reunión, y yo me quede cuidando todo acá abajo.-
respondió el guardia.- ¿Que pasa contigo?-

-Es por culpa del estúpido Argent, todo es su culpa. Estúpido Argent, estúpidos
sentimientos.- dijo la quimera empezando a renegar, a lo que el otro decidió huir
antes de verse envuelto en mas drama.

Siguió con su “paseo”, hasta que llego a un callejón sin salida, y frente a él, estaba un
tipo horroroso y con cara de perro rabioso, en verdad daba miedo, a penas lo vio, el
tipo empezó a gruñirle, lo que le indico a Jordan que debía alejarse de ahí con
rapidez, pero entonces, un fuerte trueno sonó y las luces de todo Eichen se apagaron,
las sirenas empezaron a sonar y frente a él, la celda del tipo rabioso empezó a abrirse.

Deucalion, quien se encontraba en su celda, sin salir, escucho el grito horrorizado de


Malia, y luego el llamado de auxilio de Jordan, dejando su bastón a un lado salio de
su celda, antes de llegar a la esquina, un cuerpo salio arrojado, y el alpha supo por el
olor que se trataba de Derek.

-Derek, ¿que sucede?- pregunto Deucalion acercándose.

-Es Radow, creo que no le dan un buen tranquilizante, se ensaño con Jordan, Peter
esta peleando con él, mientras Cora y Malia protegen a Jordan. Mierda, creo que me
rompió una costilla.- se quejo Derek.

El alpha dejo al beta descansar y fue hacia donde estaba el sonido, al llegar un cuerpo
se estrello contra él, era Peter.

-Peter- Deucalion intento despertarlo.

-Creo que lo herí, pero el también me hirió.- dijo el otro alpha.- No puedo más, aún
hay residuos en mi sangre del acónito. No puedo vencerlo.-

-Tranquilo, yo me encargare.- dijo el alpha levantándose y cambiando el color de sus


ojos.- Oye Radow, para llegar a ese guardia, tendrás que pasar sobre mi cadáver.-

-Y lo haré, derrotare al gran Deucalion.- dijo el que alguna vez fue un feroz
berserker.

Deucalion empezó a cambiar de forma, hasta que tomo su forma final de alpha, y
entonces ambos empezaron a pelear, y aunque por el tamaño, parecía que Radow
ganaría, en cinco minutos Deucalion lo tuvo en el suelo, desmayado, casi sin vida. El
alpha feliz por su victoria, dejo salir un gran rugido, justo cuando los guardias y el
director llegaron.

-Pero, ¿que rayos?- pregunto el director.

-Hice su trabajo, me encargue del problema.- dijo Deucalion mirándolo.- Y no se


atrevan a usar sus armas conmigo, o lo verán, mejor atiendan a los heridos que este
iluso dejo. Jordan, conmigo, ahora.-

Jordan, quien estaba detrás de Malia y Cora, se abrió paso y llego al lado del alpha,
quien lo tomo por la cintura.

-Ahora todos entren a sus celdas. Jordan vamos a la nuestra.-

Tras la conmoción todos volvieron a sus respectivas celdas, no hubo castigo para
nadie, y Derek y Peter fueron curados, bueno a Peter lo curo su novio, porque no iba
a permitir que nadie tocara a su pareja. Por su lado, Theo se tiro en su cama,
pensando en la ultima vez que se encontró con su constante pesadilla, Chris Argent.

Flash Back

Theo se había cansado de estar afuera en el patio, sobre todo porque los Argent
habían llegado, y Chris ahora lo andaba ignorando, haciendo como si la quimera no
existiera, y eso estaba molestándolo.

-Vaya, vaya, pero si es Theo Raeken.- la quimera se paro al oír esa horrorosa voz.

-Bronski, ¿que quieres?- pregunto volteándose y mirando al enfermero.

-Huy querido, cuidado como me hablas, no te conviene ser tan maleducado


conmigo.- le advirtió Bronski.

-¿Así? Pues con gente como tú, solo queda hablarles así.- respondió Theo casi
gruñendo.

-Theo, Theo, tú quieres ser castigado, ¿verdad?- pregunto el enfermero acercándose,


a lo que la quimera retrocedió casi por inercia.- ¿Me tienes miedo Theo? Puedo ser
muy peligroso si es necesario, y te recuerdo que tengo la llave para entrar a tu celda,
así que, mejor compórtate.-

-¿Eso es una amenaza? ¿Me estas amenazando Bronski?- la quimera se impuso ante
el hombre, quien sonrió.

-¿Que sucede aquí?- Chris había llegado, y no le había gustado nada, que Theo
estuviera cerca de ese tipo.

-Solo hablaba con este interno, le recordaba cual era su lugar.- respondió el
enfermero.

-Theo, acompáñame a tu celda.- Chris tomo el brazo de la quimera y lo jalo hasta la


celda.

-Hey, yo puedo caminar solo, ¿ahora te interesas en mi? ¿Por que? ¿Por que Bronski
estuvo hablando conmigo?- pregunto la quimera molesta.- Tal vez debería volver a ir
con él.-

-Aléjate de ese hombre, no te quiero cerca de él.- dijo Chris molesto.

-¿Por que?-

-Porque tú eres mio.- dijo el cazador para luego besar al chico.

Fin Del Flash Back


Capitulo 10

Deucalion entro a su celda, jalando de la mano a Jordan, para luego sentarlo en la


cama, y con una sola mano, cerrar la puerta de la celda. Mientras que Parrish solo lo
miraba, expectante de saber que pasaría ahora, nunca había visto tan enojado al alpha,
así que estaba un poco asustado.

-¿Estas herido?- pregunto Deucalion sin mirarlo.

-No, solo me golpee un poco, pero no es nada grave.- contesto Jordan.- ¿Como estas
tú?-

-Sanare, pero ahora debes encerrarme.- dijo el alpha.

-¿Encerrarte?- Parrish lo miro.

-Si, encerrarme, ahora mismo tengo ganas de agarrarte y hacerte mio, y no quiero
hacerte daño, así que por favor, enciérrame.- pidió Deucalion.
-¿Y si no quiero hacerlo? Y si, ¿quiero que me hagas tuyo?- pregunto el guardia
acercándose, a lo que el otro lo miro confundido.- Yo quiero estar contigo.-

-Jordan, no estas hablando en serio, ¿verdad?- pregunto el alpha preocupado.

-Claro que si, me gustas Deucalion, me gustas mucho.- confeso Parrish con un leve
sonrojo.

-¿Desde cuando?-

-Creo que empezó desde la primera vez que nos vimos, solo que yo no lo sabia en ese
momento.- contó el menor.- Pero ahora se, que me gustas mucho, y siéndote sincero,
me excite mucho al verte pelear con ese tipo.-

Deucalion sonrió con una mirada llena de diversión, para luego acercarse al guardia y
después de mirarse un momento, el mayor inicio un suave beso que fue
transformándose poco a poco en un beso cargado de pasión. En poco tiempo, ambos
se empezaron a deshacer de sus vestimentas, aunque siendo sinceros, Deucalion fue
más rápido, después de todo, su vestimenta era un polo y un pantalón de deporte, en
cambio el joven guardia, bueno, el tenia que sacarse muchas cosas.

-Detesto la ropa del trabajo.- se quejo Jordan mientras se quitaba el cinturón.

-Desde mañana vestirás ropa deportiva.- gruño Deucalion, a lo que Parrish sonrió.

Cuando el guardia al fin estuvo desnudo como el alpha, el mayor hizo que el menor
se recostara en la cama, para que así él pudiera empezar a besar cada parte desnuda
de su cuerpo, poniendo un poco más de atención en los pezones de Jordan. Mientras
los lamia, Parrish trataba de aguantar sus gemidos, no quería que todo el mundo lo
oyera.

Deucalion estaba disfrutando del pre juego, y también le divertía como su chico,
porque si, Jordan ya era su chico, intentaba detener sus gemidos, decidió que era
momento de llegar a otro nivel, por lo que dejo salir sus colmillos y con ellos y con
cuidado, empezó a recorrer su pecho, logrando su cometido, un pequeño grito de
sorpresa salio de la boca de Parrish.

Contento con su travesura, el alpha siguió recorriendo el cuerpo de Jordan con sus
colmillos, a los que sumo rápidamente sus garras, hasta que llego al lugar que tanto
ansiaba, sin usar sus manos, Deucalion acerco su boca abierta al miembro erecto de
Parrish y empezó a deslizar sus colmillos al rededor del miembro, lo que hizo que el
guardia se encorvara para luego dejarse caer en la cama.

-¿Te gusto?- pregunto Deucalion haciendo desaparecer sus colmillos y garras.

-Vas a matarme.- respondió Jordan sonriendo.

-Si, pero de placer.- lo corrigió el alpha.


Tras unos minutos atendiendo el miembro del menor, el mayor se levanto y usando
un poco de saliva (la vieja confiable cuando no hay lubricante), embadurno su
miembro, para luego ponerse a preparar a su chico. Mientras que Jordan no podía
dejar de gemir con cada intromisión que el mayor hacia en su cuerpo, en poco
tiempo, Parrish estaba listo para la siguiente fase.

Deucalion puso su miembro en la entrada del guardia, quien dio un respingo al


sentirlo, ante esto, el alpha dejo salir una sonrisa.

-¿Nervioso?- pregunto Deucalion acercándose.

-Si.- admitió Jordan mordiéndose el labio inferior.

-Tranquilo, solo confía en mi.- lo calmo el alpha acariciando su rostro.

Un poco más calmado, Jordan se relajo ante las caricias del mayor en su rostro y en
su cuerpo, tras ver que su chico estaba más calmado, Deucalion tomo su miembro y
empezó a empujar con fuerza, logrando meter la cabeza de este dentro de Jordan,
quien dejo salir un pequeño grito de sorpresa.

Sin esperar mucho, volvió a arremeter contra el cuerpo del joven, quien esta vez si
dio un señor grito que resonó con fuerza en todo el corredor, logrando despertar a
algunos residentes. Deucalion tuvo que retener la salida de sus garras y colmillos, la
sensación de estar dentro del cuerpo de Jordan era demasiado excitante, hasta sentía
ganas de marcarlo como suyo, pero no quería dejarle una marca fea.

Tratando de controlar su respiración, Deucalion empezó a moverse lentamente, con


lo que Jordan dejo de gemir de dolor para empezar a gemir con excitación, poco a
poco, el alpha empezó a aumentar la rapidez de sus movimientos, gimiendo y casi
rugiendo en el proceso, lo que increíblemente excito aún más a Jordan.

-Más, maaaasssss.- pedía Parrish.

El alpha gruño en respuesta, y aumento las arremetidas al joven, en medio de la


excitación del momento, Deucalion empezó a sentir mucho calor, pero lo atribuyo a
la situación, sin saber que en verdad se trataba de algo más.

Después de unos cinco minutos, el lobo sintió que muy pronto se correría, y por la
expresión de Jordan, parecía que el joven guardia también estaba a punto de correrse,
entonces con unos movimientos más rápidos, el alpha se corrió en el interior de
Parrish, mientras que este ultimo se corrió sin haberse tocado, manchando con semen
la barriga de Deucalion.

-Me encantas Jordan Parrish.- dijo Deucalion antes de caer rendido.

Eran las 3 de la mañana cuando Jordan despertó, se quedo mirando la oscuridad hasta
que un pequeño haz de luz ilumino la habitación, al mirar a su costado vio a
Deucalion durmiendo plácidamente, para luego ver su cuerpo totalmente desnudo, y
ahí se le vino encima la conciencia que había estado silenciada durante todo el acto.

Se había acostado con Deucalion, había tenido sexo con Deucalion, con el hombre
que estaba cuidando, ¿en que rayos estaba pensando? Dios mio, lo despedirían, lo
echarían de Eichen, pero aún más importante, ¿como miraría a Deucalion a la cara?
¿Que tal si el alpha se arrepentía de lo que habían hecho? No es que él se arrepintiera,
lo había disfrutado, así que no se arrepentía.

Felizmente, al día siguiente tendría su día libre y podría escapar del alpha. Tratando
de no hacer mucho ruido, se levanto de la cama y tomo su toalla, abrió la celda y
empezó a caminar hacia las duchas, tenia que limpiarse, lo curioso de todo el asunto,
es que se dio cuenta de que no le dolía al caminar, ni siquiera sentía dolor en ese
lugar.

Estaba ya apunto de llegar a la ducha, cuando una de los vidrios de una celda fue
tocado, al voltearse se encontró con la sonrisa de diversión de Peter.

-¿Pasaste una buena noche Parrish?- pregunto el otro alpha con diversión.

-Buenas noches Peter.- saludo Jordan con un gran sonrojo en el rostro.

-Por ese gritito que dejaste escapar, si parece que pasaste una buena noche.- siguió
molestando el lobo.

-Si claro, ¿sabes? Me voy a bañar.- dijo Parrish.

-Sabes que tendrán que hablar de lo que paso, ¿verdad?- pregunto Peter mirándolo
esta vez con seriedad.- Deucalion es un hombre que ha sufrido mucho, no creo que
seas del tipo que jugaría con él, pero por si las dudas, no juegues con él.-

-No sería capaz, solo que ahora mismo no se que es lo que pasara, y eso me aterra.-
confeso Jordan.

-Deja que las cosas pasen con naturalidad, solo deja que todo transcurra con
normalidad. Ahora ve a ducharte, que aún con esta separación, huelo el aroma de
Deucalion en ti.- le aconsejo el mayor.

Parrish se sonrojo y aferrándose a su toalla siguió su camino, tomo una ducha


excesivamente larga, mientras pensaba en lo que ocurriría cuando amaneciera. Volvió
a la celda, y vio a un Deucalion aún dormido, tenia ganas de echarse a su lado, pero si
lo hacia podía despertar al hombre y no estaba listo para esa charla.

Así que tomando algo de ropa se vistió, y se fue a echar a la cama que era de
Deucalion, y aunque él mismo se decía que no iba a dormir, le tomo poco tiempo
caer en los brazos de morfeo.

-Ethan, abre la puerta.- grito Aiden quien estaba viendo muy entretenido la televisión.
-Tú estas más cerca- dijo Ethan quien se encontraba en la cocina.

-Si, pero tu estas parado, en cambio yo, estoy echado, hay que aprovechar que estas
de pie y ve a abrir la puerta.- le dijo su hermano sonriendo.

-Eres un vago.- comento el otro gemelo limpiándose las manos y yendo hacia la
puerta, pero antes de abrir aspiro con fuerza, queriendo saber si el aroma era
conocido o desconocido, y vaya que era conocido.- Aiden.-

-¿Que pasa?- pregunto el mencionado.

-¿Hay alguna posibilidad de que padre se haya escapado de Eichen?- pregunto Ethan.

-¿Que? ¿De que hablas?- pregunto Aiden parándose del sofá.

-La persona que esta al otro lado de la puerta, huele a padre.- contesto su hermano, a
lo que el otro gemelo se acerco con rapidez, y olio, llegando a la misma conclusión
que su hermano.

-¿Quien es?- pregunto Aiden un poco alto.

-Soy Jordan.- dijeron al otro lado, por lo que los gemelos se miraron, y abrieron la
puerta, encontrándose con Jordan Parrish.- Hola chicos.-

-Jordan, ¿por que hueles a padre?- pregunto Ethan mirando extrañado.

-¿Huelo a su padre?- pregunto Parrish.

-Si y mucho.- añadió Aiden.

-Hay Dios, pero si me bañe por un buen rato.- se quejo el guardia.

-Jordan, ¿que paso entre nuestro padre y tú?- preguntaron los gemelos al mismo
tiempo.

-Mmmm, pues, resumiendo, él y yo nos acostamos.- confeso Parrish.

-Dios mio.- dijo Ethan y Jordan temió su reacción, pero al final termino sorprendido.-
¿Eres mi nuevo papi?-

-Ah, pues no lo creo, no se, en verdad no hemos hablado después de hacerlo.- dijo
Jordan sintiéndose avergonzado.

-Ok, eso es algo que ustedes deben conversar así que, dejemos el asunto ahí, ¿es tu
día libre?- pregunto Aiden.

-Si, y quería verlos y también hablar de algo con ustedes.- dijo Parrish con seriedad.

Los gemelos lo dejaron entrar, cuando estuvo sentado en el sofá, el guardia empezó a
mandar mensajes a ciertas personas, en unos minutos, el timbre de la casa volvió a
sonar, Aiden fue a abrir, encontrándose con el sheriff Noah y su hijo, miro hacia
Jordan quien asintió y entonces los dejo pasar.

Tras unos segundos, el timbre volvió a sonar, pero esta vez, se trataba de Tara y el
padre de Kira, para que al final el padre de Malia, el señor Tate llegara.

-¿Que sucede Jordan?- pregunto Tara cuando todos estuvieron sentados.

-No puedo más con esto, tenemos que hacer algo.- empezó Jordan, lo que confundió
un poco a los demás.- Tenemos que sacarlos de Eichen.-

-¿Sacarlos de Eichen? ¿Estas loco? No podemos hacerlo, ellos jamás nos dejarían
sacarlos.- dijo el señor Yukimura.

-Pues no encuentro otra forma, en ese lugar los maltratan, los tratan horrible, si no
hubiera sido por Peter, Derek y Deucalion, muchos hubiéramos muertos, habían
dejado a un interno caminar libremente sin precaución alguna.- les contó Parrish.- Y
lo peor es que cuando Deucalion se hizo cargo y pidió que llevaran a Derek y Peter a
la enfermería, no lo hicieron, su excusa, ellos pueden curarse solos.-

-¿Como esta Derek?- pregunto Stiles preocupado.

-Bien, en la madrugada cuando pase por su celda, estaba descasando mirando una
foto.- contesto Jordan, a lo que el menor se sonrojo.

-Esa foto es mía.- confeso el chico y todos sonrieron.

-Miren, se que es imposible sacarlos de ahí, pero algo debemos hacer, no podemos
dejar que sigan en ese horrible lugar, ellos tienen que salir.- dijo decidido Parrish
mirando a los demás.

-Nuestro padre se quedo ciego por intentar hacer una estúpida alianza con el peor tipo
del mundo, y luego se sacrifico por nosotros, dejándose llevar a Eichen con tal de que
no nos tocaran.- dijo Ethan y Aiden asintió.- Ayudaremos a sacarlos.-

-Perdí a mi esposa, no perderé a mi hija.- dijo el señor Yukimura.- Cuentan


conmigo.-

-Theo es mi familia, y él sabe que pelee con uñas y mordiscos para que no se lo
llevaran, y volveré a pelear para sacarlo de ahí.- comento Tara sonriendo, pero luego
su mirada se poso en Aiden, quien la esquivo rápido.

-Los Hale son nuestra familia.- dijo el sheriff.- Y por sobre todo, Derek es el novio de
mi hijo, hay que sacarlos.-

-Necesito a mi hija conmigo.- dijo el señor Tate, a lo que Jordan sonrió.

-Bueno Jordan, ¿que hay que hacer?- pregunto Tara.

*
Deucalion se sentó en su cama, cuando despertó ese día, Parrish ya no se encontraba
en la celda, pensó lo peor, como que hubiera decidido irse de Eichen, pero entonces
encontró una nota en su cama, poniendo sus ojos de lobos, la leyó:

“Deucalion, hoy es mi día libre, así que saldré a la ciudad, iré a ver a Aiden y Ethan,
cuando vuelva, hablaremos, si es lo que quieres. Regreso pronto”

Aunque la nota no demostraba odio ni resentimiento, aún así Deucalion sentía miedo,
no sabía que podía decirle el joven, que tal si le decía, que lo que habían echo había
no le había gustado, que todo había sido producto por la excitación del momento.

Estuvo todo el día así, y aunque Peter y Liam intentaron calmarlo, diciéndole que
todo lo que pensaba estaba mal, el pobre alpha seguía atormentándose, y solo se
calmaría cuando hablara con Parrish.

La noche llego muy pronto, y Deucalion se preparo para dormir, al día siguiente
tendría la que sería la charla más incomoda del mundo, por eso se sorprendió cuando
la puerta de su celda se abrió y por ella entro el joven guardia.

-¿Que haces aquí?- pregunto el alpha.

-Pues, trabajo aquí.- respondió Jordan dejando su maletín en la cama.

-Se suponía que vendrías mañana.- comento Deucalion.

-Si, quise volver hoy, ¿es un problema?- pregunto Parrish.

-No, al contrario, me alegra que estés aquí. Hay algo que debemos hablar.- saco el
tema el alpha, y al instante noto como Jordan se ponía nervioso.

-Pero antes, ¿podemos hablar de otra cosa?- propuso el guardia.

-¿De que?-

-Hoy me reuní con tus hijos, con Stiles y el sheriff, con el señor Tate, el señor
Yukimura y con Tara. Les conté lo que sucede aquí, de los abusos contra ustedes, y
quedamos con una sola idea, tenemos que sacarlos de aquí.- le contó al otro.

-Es difícil sacar a alguien de aquí, sobre todo si se trata de nosotros.- respondió
Deucalion mirando seriamente a Jordan.

-Lo se, esa es la parte difícil del plan, ver como vamos a sacarlos de aquí.- dijo
Parrish haciendo una mueca.

-Tienen mucho trabajo por delante.- menciono el alpha.- Supongo que eso es todo lo
que querías decirme, ahora podemos hablar de lo que paso ayer.-

-Bien, hablemos.- acordó Jordan.


-Ayer, tú y yo tuvimos sexo.- empezó Deucalion y el guardia asintió.- Yo no quería
hacerlo, bueno si quería, pero no quería obligarte, pero entonces tú, me dijiste que
deseabas esto, así que lo hicimos. ¿Estas arrepentido?-

-No- contesto Parrish.

-¿Me odias?- pregunto el alpha, y Jordan levanto el rostro.

-¿Por que te odiaría?- pregunto.

-No lo se, porque por mi calentura, te viste obligado a tener sexo conmigo.- propuso
Deucalion.

-Nadie me obligo a hacer nada Deucalion, yo quise tener sexo contigo, y no me


arrepiento, no te odio, no te aborrezco. Es solo que....-

-¿Que cosa? ¿Que te preocupa?- pregunto el alpha.

-Después de esto, ¿que sucederá con nosotros? ¿Seguiremos normal? ¿Tendré que
pedir mi cambio? ¿No volveremos a hablar del tema? ¿Que pasara?-

-¿Que quieres que pase?- Deucalion se acerco a Jordan- ¿Quieres que sigamos con
normalidad? O ¿quieres...-

-Me gustas Deucalion, me gustas mucho, y no quiero que esto se olvide como si no
hubiera pasado, porque no puedo olvidar algo que me encanto.- confeso Parrish
mirándolo.

-Entonces, supongo que ahora estamos juntos.- dijo el alpha mirándolo.

-Eso creo.-

-Las relaciones son muy complicadas.- bromeo Deucalion.

-Demasiado complicadas.- concordó Jordan riendo.

-Jordan, ¿puedo besarte?- pregunto el alpha.

-¿En serio tienes que preguntarlo?- pregunto Parrish sonriendo.- Bésame ya, tonto.-

Deucalion tomo el rostro de Jordan entre sus manos, para luego acercarlo hasta su
rostro, luego junto sus labios con los del menor, sellando un beso que desde la noche
anterior había tenido ganas de darlo. Que suaves se sentían los labios de Jordan, pero
sobre todo se sentía que lo que estaban haciendo, la elección, había sido la mejor.

En medio del beso, Deucalion recordó la primera vez que vio a Jordan Parrish, y
como dentro de él, su lobo aullaba con regocijo, indicándole que el guardia ahora les
pertenecía, que era solo de ellos, que debía ser de ellos. Y después de todo, el deseo
del lobo, se cumplió, ahora Jordan era de ellos, ahora el joven guardia estaba unido a
Deucalion, pero no por algo tan banal como una relación, no, porque su unión era
algo más especial.

El lobo de Deucalion en medio del clímax de la noche anterior había echo lo que el
otro no se había atrevido, había marcado a Jordan como suyo, mordiéndolo. Ahora
Jordan Parrish, se había convertido en la pareja de Deucalion.

Capitulo 11

Deucalion avanzo por los pasillos de Eichen agarrado a Jordan y a su bastón, estaban
en su tiempo libre, y aunque por varios días habían preferido quedarse en la celda y
conversar, o mejor dicho estar besándose y haciendo otras cosas, decidieron que ya
era tiempo de ver a los demás.

-Ahí están los tórtolos- dijo Peter al verlos entrar, por lo que Liam, quien estaba
sentado encima de él, lo golpeo suavemente en el estomago.

-Peter, siempre queriendo ser gracioso, lastima que no puedes lograrlo.- devolvió
Deucalion con una sonrisa.- Aún no entiendo que es lo que el pequeño Liam ha visto
en ti, querido Liam, es cierto que el amor es ciego, tú eres la prueba existente.-

-Pero si tú eres el ciego.- se quejo Peter.- El del amor ciego, eres tú.-

-Peter cariño, mejor cállate, antes de que te estampen contra la pared.- le advirtió
Liam.- ¿Como has estado Jordan? Tiempo sin verte.-
-Vamos Liam, ni que me hubiera desaparecido por un mes, solo fue una semana.- se
avergonzó Jordan.

-Pues, ¿nos dirán que ya están o que?- pregunto Malia quien estaba echada en las
piernas de Lydia, mientras esta le peinaba el cabello.

-¿Estamos juntos Jordan?- pregunto el alpha, mientras jugaba con sus dedos.

-Eres muy molesto, si, estamos juntos.- confeso el guardia.

-Que bien, hacen una hermosa pareja.- comento Lydia con una sonrisa.

-Gracias Lydia.- dijo Deucalion.- Jordan tiene interesantes noticias.-

-Ah si, bueno en mi ultimo día libre, me reuní con algunas personas.- contó Parrish.-
Stiles y el sheriff, Ethan y Aiden, el señor Yukimura, y el señor Tate.-

-¿Mi padre?- pregunto Malia levantándose.

-Así es, ah y Tara.- termino Jordan.

-¿Mi hermana?- Theo había aparecido al oír el nombre.

-Si, hable con ellos, de lo que sucede aquí en Eichen, los maltratos, todo, y todos
quedamos en una sola idea, tenemos que sacarlos de aquí.- dijo Jordan en un susurro
que ellos oyeron fácilmente.

-¿Sacarnos?- pregunto Peter.- ¿Como rayos harán eso? No lo permitirían, imagínate,


Liam es menor de edad, y aún así no lo dejan salir.-

-Bueno, esa es la cosa, aún no sabemos como lograr tal hazaña. El señor Yukimura
tuvo la idea de que Kira quemara los circuitos, y así se quedarían sin energía, las
puertas se abrirían y bum, todos libres.- explico.

-No es una mala idea.- dijo Deucalion.- Pero, si hace eso, otros seres, que son
peligrosos, como cierto ex-berserker podría salir, lo que sería extremadamente
peligroso para Beacon.-

-Exacto, y no solo se trata de ese tipo, hay muchos seres que son demasiado
peligrosos, dejarlos sueltos seria la ruina de Beacon, muertes de todo tipo, no
quedarían humanos vivos.- comento Peter pensando.- A parte, tenemos el pequeño
problema que son los Argent.-

-Creo que yo puedo encargarme de los Argent.- dijo Jordan llamando la atención de
todos.- Es que note algo que los podría poner de nuestro lado.-

-¿Hablas de mi?- pregunto Kate.

-De ti y de alguien más. Déjenme eso a mi.- dijo Parrish con una sonrisa.
*

La noche llegó con rapidez, todos los internos se encontraban en sus respectivas
celdas, Jordan había cerrado la puerta de su celda, y cuando las luces se apagaron,
abrió la puerta de la celda de Deucalion, para luego volver a su cama.

Tras unos minutos, el alpha se levanto de su propia cama y avanzo hasta la cama del
guardia, quien se hizo a un lado y le dejo espacio, para que se echara. Al ya estar al
lado de su pareja, Deucalion beso su frente de forma cariñosa.

-Peter es muy molestoso.- dijo Jordan.

-Los Hale siempre han sido así.- contesto Deucalion.

Jordan observo el rostro de su ahora novio, paso su mano por su mejilla y viendo que
los parpados del hombre estaban cerrados, paso su pulgar por encima de ellos.

-¿Que sucede? Hueles a nervios.- dijo el alpha.

-Es que, me preguntaba, ¿como quedaste ciego?- pregunto Parrish.

-Es una historia antigua, de hace mucho tiempo.- contesto Deucalion.

-¿Podrías contármela?-

-No me acuerdo de la fecha exacta, pero Peter era joven, casi adolescente, y yo me
veía como estoy ahora, ventaja de ser lobo. La guerra con los cazadores nos estaba
costando muchas vidas, pero fue cuando mataron a un beta de Ennis que todo se
descontrolo.-

-¿Ennis tiene manada?- pregunto Jordan.

-La tenia, al igual que Kali. Hable con Talia, mi amiga y madre de Derek y Cora,
quería llegar a un acuerdo con Gerard, dejar la guerra, vivir en paz. Deaton me
advirtió que no confiara en ese hombre, en ese tiempo creía que todos podían tener
algo bueno, incluso Gerard Argent.-

-¿Organizaste la reunión?-

-Así es, seríamos unos cuantos de mi manada y sus hombres de confianza, sin armas,
sin garras. Solo hablaríamos.- siguió contando el alpha.- Cuando llegamos todo
parecía cumplir las letras, hable con Gerard, le pedí que esta guerra entre cazadores y
lobos terminara, le dije que tenia una visión, una visión llena de paz. Él parecía
interesado en la propuesta.-

-¿Que más paso?- Jordan estaba interesado en lo que le contaba.

-Gerard empezó a hablar, dijo que la idea era buena, pero entonces añadió que
lamentablemente, no podía confiar en nosotros, que los lobos no eramos confiables.
Sin notarlo había llegado hasta una válvula de vapor del sitio donde estábamos, la
abrió, lo que nos dejo sin poder ver a todos, pero yo atisbe a mirar algo....-

-¿Que era?-

-Por algo los cuerpos de los chicos muertos no tenían garras, por algo se las habían
arrancado. Había creado un bate incrustado de garras de hombre lobo, empezó a
atacar a todos, sus cazadores, mis lobos. Aún debilitado por el vapor, salí a rastras de
ese lugar, no conté con que Gerard me seguía. Al darme la vuelta, le repetí que tenia
una visión de paz, pero él se burlo, diciéndome, que me faltaba más visión, tras eso,
tomo una de sus flechas con chispas, que ya de por si dañan nuestra vista, y me las
clavo en los ojos, dejándome ciego.-

-Ese hombre es un monstruo.- se expreso Jordan.

-Pero eso no era todo, aún preparaba más. Tras mi ceguera, me sumí en el odio,
gracias a Dios, llegaron Ethan y Aiden a mi vida, esos niños me devolvieron la
ilusión de un mundo lleno de paz. Mientras yo criaba a mis nuevos hijos, las manadas
de mis dos amigos iban desapareciendo.-

-¿Que paso con la tuya?- pregunto el guardia.

-Mi primer beta, mi mano derecha al enterarse de lo que me había pasado, me dijo
que ya no tenia lo necesario para seguir siendo un alpha, intento matarme.- contesto
Deucalion.- No lo mate, aunque quise hacerlo, simplemente decidí dejarle el mando,
pero no mi poder, él podría hacerse cargo de mi manada, y podía largarse a donde
quisiera.-

-Ellos se fueron, ¿verdad? Te dejaron.-

-Así es, tiempo después me entere que todos habían muerto, eran buenos chicos, pero
se dejaron llevar por la codicia y la envidia.- contesto Deucalion.- Como te dije,
cuando las manadas de Kali y Ennis desaparecieron, ellos vinieron a mi, querían
venganza y parecían muy decididos, así que hice lo primero que se me ocurrió,
invente una excusa para salir de mi casa, y los deje cuidando a mis hijos.-

-Dios.- exclamo Jordan, pues en su mente, se imaginaba a unos furiosos Ennis y Kali
con ganas de sangre, mirando a unos pequeños bebes.

-Si, esperaba esa reacción, créeme, si volvía y mis hijos estaban muertos, ellos
sabrían que aún podía aterrarlos. Pero cuando volví, Ennis estaba jugando con Aiden,
enseñándole como se llamaban las cosas que sostenía, y Kali estaba cantándole una
canción de cuna a Ethan, entonces supe que mi plan había funcionado, sabia que la
dulzura de dos niños podrían calmar la sed de venganza de dos lobos.-

-Entonces, desde ese momento, ellos vivieron contigo y los chicos.- supuso Parrish.

-Exacto, hasta que Gerard y los inútiles de Eichen se atrevieron a meterme aquí.-

-Todo lo que me dijeron fue mentira, tú no mataste a tu manada, ni siquiera deberías


estar aquí.- dijo el guardia molesto, por lo que el alpha sonrió.- Ahora si con más
ganas, necesito sacarte de aquí.-

-Y lo harás, lo se, pero ahora es momento de dormir amor.- dijo Deucalion


acariciando el rostro del menor.- Aunque algo bueno salio de estar metido aquí.-

-¿Que cosa?-

-Poder conocerte.- dijo el lobo con una sonrisa.

Un rayo cayo desde el cielo, lo que hizo que las luces del piso se apagaran y
prendieran, Jordan quien se encontraba afuera de su celda, observo a sus compañeros,
quien también miraban las luces.

-¿No te gustan las tormentas?- pregunto Jordan a su compañero.

-No es eso, es que si se va la luz tendríamos que contener a todos los internos, y
sinceramente no quiero hacerlo.- contesto el otro.

Jordan no dijo nada más, sabia que las cosas estarían fuera de control si los internos
escapaban, no eran tantos guardias, a parte, estaba el hecho de que algunos ni siquiera
estaban tan drogados como deberían.

-¿Que hacen aquí los Argent?- pregunto el otro guardia, y Jordan volteo a ver que
pasaba, efectivamente, los Argent se encontraban ahí, acompañados por Valack.

-Doctor.- lo saludo Jordan cuando llegaron hasta ellos.

-Parrish, una noche de cuidado.- comento el doctor y el Parrish asintió.- El señor


Argent y su hija se quedaran esta noche con nosotros, debido a la fuerte tormenta.-

-¿Donde dormirán señor?- pregunto Jordan.

-En la celda vacía de la esquina, claro que ellos no estarán encerrados como los
internos.- explico el doctor.- Bueno caballeros, antes de ir a acostarse, por favor
aseguren bien todas las puertas, no queremos ninguna fuga.-

-Si señor.- respondieron ambos guardias.

-Que tenga una buena noche Parrish.- dijo Allison.

-Igual usted señorita Argent.- contesto Jordan sonriendo.

Tras una media hora más, el guardia de al lado se retiro y Jordan se aseguro de que
todas las celdas estuvieran bien cerradas y de que cada internos estuviera bien. Tras
eso, se acerco a la celda donde los Argent dormirían, donde solo encontró a Allison.

-¿Y tu padre?- pregunto el guardia.


-Fue a dar una vuelta, le costaba conciliar el sueño, que te digo, se pasa horas y horas
vagando en casa, antes de dormir.- contesto la chica.

-¿Estará bien él solo?-

-Si, tranquilo, después de todo, las celdas están aseguradas, ¿verdad?- pregunto
Allison.

-Si, tienes razón, bueno, dulces sueños Allison.- se despidió.

-Oye.- lo llamo la chica y él se volteo.- Eres un buen tipo Parrish, quisiera poder ser
como tú.-

-¿Por que dices eso?- pregunto Jordan.

-Porque a ti no te obligan a meter gente inocente en este sitio.- contesto la chica con
mirada triste.- La vida de un cazador es horrible, pero lo es más, cuando tu abuelo es
quien manda.-

-Oye, no es que sea malo, pero recuerda que le queda poco tiempo de vida.- dijo
Parrish, cosa que hizo sonreír a Allison.- ¿Tú no querías meter a nadie aquí?-

-No, claro que no, ¿crees que es fácil que te odien en la escuela? Recuerdo que
después de haber traído a Isaac, los que sabían que era él, bueno, ya no voy a clases
por el bulling.-

-Allison, y si te dijera que quiero sacar a los que merecen ser sacados de aquí, ¿que
me dirías?- probo Jordan.

-Te diría, ¿como puedo ayudar?- pregunto la chica entusiasmada.

-Necesito que convenzas a tu padre de ayudarnos.-

-Créeme, eso sera fácil, mi padre tiene una debilidad aquí, y haría lo que fuera por
sacarlo.-

Chris camino por los largos pasillos, fijándose en los distintos seres sobrenaturales
que dormían plácidamente. Paso frente a la celda de Peter, el cual dormía
cómodamente abrazado a Liam, después de que Valack le explicara al director que si
separaba a Peter y Liam, el alpha se volvería incontrolable, el hombre había decidido
que por el bien de todos, el joven beta debía dormir con su pareja.

Siguió su camino, pero se detuvo de inmediato, cuando se dio cuenta de que estaba
yendo hacia la celda de Theo, hacia tiempo que no se hablaban y eso lo mataba,
quería estar cerca del chico, la primera vez que lo había visto, le había parecido el
chico más guapo del mundo, y eso lo había hecho sentir mal, pues tan solo unos
meses antes había perdido a su esposa.
Utilizaba las visitas a su hermana para poder ver al chico, y le alegro que su hermana
dijera que él la había metido a Eichen, porque así el chico le prestaba atención con
insultos, pero eso le agradaba.

Dejando sus recuerdos atrás, Chris siguió su camino, sorprendiéndose de ver que la
luz de la celda de Theo, estaba encendida. Avanzo un poco, y entonces vio como un
cuerpo más grande estaba encima del chico que le gustaba, y este estaba forcejeando.
Inundado de una gran furia, se acerco al tipo, lo tomo del polo y lo obligo a separarse
del chico, descubriendo que Theo tenia el pantalón a medio bajar, y el polo
remangado.

Se giro para ver al tipejo y no le sorprendió ver la cara asustada de Bronski, el


maldito había intentado violar a Theo, de un solo golpe en la cara, lo estrello contra la
pared. Tomando su intercomunicador, aviso a Parrish para que se acercara.

En cuestión de minutos, Jordan llego acompañado de un par de guardias y de Valack,


Chris les explico a groso modo lo que había sucedido, y los guardias llevaron a
Bronski a donde el director. Solo Parrish y Valack se quedaron, el último porque
quería revisar a Theo.

-No se acerque, no quiero que me vea así, váyase.- pidió el chico, quien se
encontraba sentado en una esquina abrazando sus piernas.

-Esta bien Theo, me iré, mañana vendré a verte.- dijo Valack, y se retiro.

-Yo también me voy, Deucalion querrá saber que ha pasado.- dijo Jordan.

Chris los observo irse, para luego girarse y mirar a Theo, quien seguía en la misma
postura, dejando salir un suspiro se preparo para cerrar la celda.

-¿Puedes quedarte?- pregunto Theo sin levantar la vista.

-¿Quieres que me quede?-

-Por favor.- pidió la quimera.

Chris miro al chico, había levantado su rostro, y tenia en sus ojos, una mirada llena
de temor, no podía dejarlo en una situación así. Cerro la celda desde adentro, y apago
la luz, guiándose por los rayos que iluminaban el cielo, avanzo hasta la cama del
chico y se sentó a un lado, dándole el espacio necesario.

Entonces, sin previo aviso, Theo se había movido hacia él, pegando su cuerpo al del
mayor, como queriendo un abrazo, con cuidado de no ser rechazado, Chris lo abrazo
y pudo sentir como el joven se recargaba con un suspiro de alivio.

-¿No dejaras que él se acerque?- pregunto Theo en la oscuridad.

-Jamás, si él quiere llegar a ti, tendra que pasar sobre mi cadáver.- dictamino el
mayor.
-No te vayas, no me dejes solo.-

-Theo, no me iré a ningún sitio, estaré contigo, solo descansa.- le dijo mirándolo.

Antes de que el cazador pudiera añadir algo más, la quimera lo estaba besando. Cosa
que lo sorprendió, pero que no rechazo, si no que respondió.

Chris abrió los ojos después de una larga siesta, al querer girar se dio cuenta de que
su brazo estaba atrapado, al mirar vio al joven Theo que dormía aferrado a él,
entonces recordó todo lo que había pasado, el intento de Bronski, como Theo le había
pedido que se quedara con él, el beso.

Tratando de no despertar al menor se movió con cuidado, hasta que logro estar libre,
se levanto de la cama y se alisto un poco, la noche anterior para poder dormir, se
había quitado el cinturón y sus armas, sabia que podía confiar en Theo, él no le haría
daño.

-¿Te vas? Dijiste que no lo harías.- Theo se había levantado.

-Tengo que irme, no creo que el director me permita quedarme más tiempo.- contesto
el hombre acercándose.- Volveré pronto, lo prometo, al menos puedes estar tranquilo
de que Bronski ya no estará aquí.-

-No lo creo, te aseguro que él seguirá trabajando aquí, al director no le importamos


nada.- lo corrigió la quimera.

-Tranquilo, todo estará bien. Te lo prometo.-

-Vuelve pronto, por favor.- pidió el chico y Chris asintió.

El cazador salio de la celda y fue a encontrarse con su hija, quien lo lleno de


interrogatorios, y tras unas breves y rápidas explicaciones, ambos salieron de Eichen,
pero antes, Chris se sorprendió al ver que Bronski efectivamente aún seguí trabajando
ahí. Antes de salir se acerco a Parrish.

-¿Por que Bronski sigue trabajando aquí?- pregunto el cazador.

-No lo se, creímos que lo sacarían de aquí, estoy igual de sorprendido.- contesto
Jordan.

-Podrían poner un guardia cerca de Theo, si ya lo intento una vez, podría intentarlo
otra vez.- dijo Argent.

-Si claro, hablare con mi compañero, a él tampoco le gusto lo que paso.- lo calmo el
guardia.

-Gracias Parrish.-
-Quiere mucho a Theo, ¿verdad?- pregunto Jordan, a lo que Chris solo sonrió.

Capitulo 12

-Ethan, voy a ir a la tienda, ¿vienes?- pregunto Aiden mirando a su hermano, quien


desde que habían ido a Eichen no paraba de sonreír, como si recordara algo que le
hizo feliz.

-No hermanito, estoy bien, gracias.- contesto Ethan mirándolo.- ¿Que compraras?-

-Chocolates, de ahí iré a buscar regalos para padre y Jordan.- explico su hermano.

-Ah, bueno, suerte.-

-¿Que es lo que te pasa? Desde el día que fuimos a visitar a padre estas así, es
frustrante.- se molesto Aiden.

-No me pasa nada, solo estoy feliz, nada más. Ya ve a comprar tus cosas.-

Aiden se encogió de hombros ante las palabras de su hermano gemelo y salio de su


casa, sabia que su hermano estaba enamorado, claro que lo sabia, era obvio, ¿y como
lo sabia él? Pues, porque a él también le había pasado lo mismo, se había enamorado
de Tara Raeken, una chica mayor y que obviamente, jamás se fijaría en él.
-Aiden.- el chico se detuvo al oír la voz femenina, no era necesario que se girara,
sabia quien era, su mayor pesadilla.

-Hola Tara.- saludo Aiden tratando de lucir calmado.

-¿Que haces por aquí?- pregunto la chica mirándola con una sonrisa.

-Eh, iba a comprar los regalos para navidad.- contesto el menor.

-Oh, ¿puedo acompañarte? Quiero comprarle algo a Theo.- le contó Tara.

-Si vamos.- accedió el lobo.

-No es genial que Eichen nos permita pasar navidad con ellos, mi abuelo vendrá para
esas fiestas y podremos ir a verlo juntos.- le contó la chica muy animada.- ¿Y Ethan?-

-Se quedo en casa.- contesto Aiden, le aterraba hablar con Tara.

-Mira ese peluche.- dijo Tara mirando un escaparate donde estaba un gran peluche de
oso.- Es hermoso.-

-¿Te gustan ese tipo de peluches?-

-Los amo, tengo mi colección de peluches de oso.- contesto la mayor.

-Pero, ese es gigantesco. ¿Donde lo pondrías?- pregunto el lobo.

-Umm, podría dormir conmigo, si, abrazado a mi gran peluche.- dijo Tara riendo.-
No importa, vamos a las tiendas.-

Aiden observo el gran peluche y luego saco el dinero que tenia guardado, quería
comprarle el peluche a Tara, pero si lo hacia, no podría comprar ningún regalo a su
familia, ¿que podía hacer?

-Aiden vamos.- dijo la hermana de Theo, extendiendo su mano, para que él la tomara,
cosa que el lobo hizo.

-No me jales, que no camino rápido.- se quejo Aiden.

-Perdón, me vuelvo entusiasta en navidad, es mi época favorita.- contesto la chica


emocionada.

Estaban a punto de entrar al centro comercial, cuando el guardia de la puerta los


detuvo.

-No puedo dejarlos entrar.- dijo el hombre.

-¿Por que no?- pregunto Tara molesta.


-Porque primero tienen que cumplir con la tradición.- indico el guardia, señalando
con su dedo algo que estaba atado encima de la puerta.

-Muérdago.- Aiden miro horrorizado la planta. ¿Acaso Tara lo besaría? ¿Su crush lo
besaría?

-Ah, no hay problema.- dijo Tara tomando el rostro del menor, para luego darle un
tierno y sutil beso en los labios.- Listo, vamos Aiden.-

(Flash Back)

-Derek, Stiles vino de visita.- dijo Peter parado en la puerta del departamento que los
Hale tenían en la ciudad.

-Hola Stiles.- saludo Derek llegando con rapidez.

-Hola Derek, estaba preguntándome, me preguntaba porque estaba echado en mi


cama, y pensé en ti.... pero no de esa forma, digo, no quiero decir que no pienso de
esa manera en ti, porque lo hago, pero no lo hice esta vez, o tal vez, no, no, no, no, no
estaba pensando de esa manera.- Stiles se estaba haciendo todo un trabalenguas, por
lo que Derek miro a su tío, quien estaba aguantando las ganas de reírse, por el
bochornoso papel que estaba haciendo el chico.

-Stiles, respira.- le dijo Peter tratando de calmarlo.

-¿Que?- pregunto el chico mirando al adulto.

-Que respires, o vas a terminar confundiendo a Derek.- le explico el hombre


sonriendo.- Toma aire y ordena tus pensamientos, ahora ¿que es lo que querías hablar
con mi sobrino?-

-Quería invitar a Derek a salir.- dijo Stiles mordiéndose el labio.

-Ah, era eso, ¿Derek?- dijo Peter mirando a su sobrino, después de todo, no podía
escaparse, estaba en el medio de la situación.

-Claro que me gustaría salir contigo Stiles.- contesto Derek mirando con cariño al
menor.

-Perfecto, ahora, largo los dos.- Peter tomo a su sobrino y lo saco del departamento,
empujándolo contra el menor.- Disfruten de su cita.-

Derek miro hacia la puerta ya cerrada de su departamento, algunas veces, en serio


detestaba a su tío. Aunque pensándolo mejor, podría pasar el tiempo con Stiles, y eso
le gustaba.

-Bueno, ¿a donde vamos?- pregunto Derek manteniendo prudente distancia del


menor, para evitar asustarlo.
-No se, ¿que quieres hacer?- Stiles estaba muerto de miedo, había ido con la
intención de invitar a salir a Derek, pero no creía que el otro diría que si. Ahora no
tenia idea de a donde ir.

-¿Te parece bien si vamos a ver una película?- propuso Derek y Stiles asintió
entusiasmado.- Una de terror.-

-¿Terror? Mejor una comedia.- propuso el menor con un poco de temor, detestaba las
películas de terror.

-Bien, entonces una comedia sera.- Derek se acerco un poco al menor, quien
retrocedió por inercia un paso, pero luego se mantuvo quieto.

-Derek.- pronuncio Stiles, antes de que el mayor lo besara.

(Fin Del Flash Back)

-Derek.- Stiles se levanto de su cama todo agitado, era la quinta vez en la semana que
soñaba ese mismo recuerdo.

-Hijo, ya me voy a trabajar, deberías alistarte.- su padre había entrado a su


habitación.- ¿Estas bien?-

-Volví a soñar lo mismo, otra vez soñé con Derek.- le contó el menor a su padre.

-¿Soñaste la misma cita?- el sheriff ya sabia de que trataban los sueños de su hijo.

-Si, es que después de eso, solo paso un mes, y ellos fueron llevados a Eichen.-
recordó Stiles.- Ellos no hicieron nada y de todas formas se los llevaron. Papá,
extraño a Derek.-

-Hijo.- Noah abrazo a su hijo, detestaba verlo triste, suponía que esa noticia lograría
alegrarlo.- Tengo buenas noticias para ti.-

-¿Así? ¿Conseguiste novia?- bromeo su hijo.

-Gracioso, no, me llego una invitación de Eichen, ciertos internos han sido escogidos,
para que sus familias puedan pasara navidad con ellos ahí.- le contó el hombre.

-¿Estas diciendo que podremos pasar navidad con Derek y los demás?- pregunto
Stiles entusiasmado y su padre asintió, por lo que el menor se puso a saltar en su
cama.

Ethan se levanto de su cama, era ya tarde, y su gemelo no había vuelto, aunque no le


preocupaba mucho, sabia que siempre se perdía mirando cualquier otra cosa, y
tardaba horas y horas en volver. Decidido a no seguir más tiempo tirado en la cama,
se alisto para salir, pero no sabia a donde ir, en lo único que podía pensar era en
Jackson, el chico de Eichen, que había logrado cautivarlo.

-¿Quien eres Jackson?- se pregunto mientras esperaba a que el semáforo cambiara.

-Ethan.- el joven lobo se giro al oír la voz familiar, era su ex, Danny, ¿que rayos
hacia ahí? Se supone que se había ido.

-¿Danny? ¿Que haces aquí?- pregunto sorprendido.

-Vine a pasar fiestas con mi familia, y quise verte.- contesto Danny con una sonrisa.-
¿Como has estado?-

-Bien, todo bien, ¿que tal todo?- era extremadamente incomodo tener esa
conversación.

-Genial, mi novio se quedo allá, pero vendrá para año nuevo. Tú, ¿encontraste a
alguien?- pregunto el chico.

-Se podría decir que si, pero es imposible que estemos juntos.- contesto Ethan,
después de todo, hablar con Danny era como si volviera a los días de escuela donde
ese chico era su mejor amigo y quien lo oía y aconsejaba.

-¿Por que? ¿Tiene novia?- pregunto Danny, pero Ethan negó.- ¿No es gay?-

-No lo creo, la vez que converse con él, estoy seguro de que era gay, por lo lanzado
que se portaba.- analizo Ethan.

-Entonces, ¿cual es el problema?-

-Esta encerrado en Eichen.- dijo el lobo.

-Oh, eso es un gran problema.- coincidió Danny.- ¿Como se llama?-

-Jackson Whittemore.-

-¿Jackson Whittemore? ¿Esta en Eichen? Pero, sus padres dijeron que lo habían
llevado a Londres.- dijo el humano sorprendido.

-¿Conoces a Jackson?-

-Era mi mejor amigo, pero cuando cumplió los 14 desapareció, sus padres dijeron que
lo habían llevado a Londres, mintieron.- dijo el chico con el ceño fruncido.- Quiero
verlo, quiero ver a mi amigo.-

-Tranquilo, hay una forma de que lo veas.-

Chris Argent había vuelto a Eichen House, pero esta vez lo hacia solo, no quería
meter en problemas a su hija, a parte, él tenia unos asuntos muy importantes que
tratar con el director de esa institución.

Pasando por seguridad, y tras decir el motivo de su visita, subió hasta la oficina del
director, toco la puerta un par de veces, hasta que oyó un adelante. Entro, y observo
al hombre que estaba revisando unos papeles.

-Sr. Argent, ¿a que debo su visita?- pregunto el hombre con una sonrisa.

-Quisiera hablar con usted sobre ciertos asuntos pasados.- contesto el cazador.

-Por supuesto, ¿cuales son esos asuntos?-

-¿Por que Bronski aún sigue trabajando aquí? ¿Acaso se le olvido que estuvo a punto
de violar a un chico?- pregunto Chris molesto.

-Eso es lo que dice la quimera, Bronski dice que solo se acerco y el chico se puso a
gritar como loco.- respondió el director.

-Pues sepa que no es solo lo que la quimera dice, yo vi a Bronski encima de Theo,
manoseándolo.- dijo el cazador molesto.

-Bueno, igual no podía despedirlo, es un error mínimo, no voy a despedir a alguno de


mis enfermeros por un error minúsculo.-

-Bien, ya veo como son las cosas aquí.- dijo Chris parándose.- Entonces yo también
cambiare mis políticas.-

-¿A que se refiere?- el director lo miraba confundido.

-La próxima vez que vea a Bronski cerca de Theo Raeken, una de mis balas ira
directamente a su cabeza, y si intenta acusarme, diré que actúe en defensa del menor,
y créame, me creerán mas a mi, que al director de un hospital psiquiátrico, que tan
solo lleva dos años aquí, en cambio, yo he vivido toda mi vida aquí. Así que dígale a
su protegido que ande alerta.-

Chris salio de la oficina sabiendo que había movido muy bien sus fichas, asegurando
su arma, bajo hasta el sótano, donde Jordan le permitió la entrada y lo puso al tanto
de todo.

-Mi compañero dice que Bronski no se acerco, pero que Theo a estado deprimido.- le
contó el guardia.

-Iré a verlo ahora.- dijo Chris emprendiendo camino, hasta que llego a la celda del
chico.

Al verlo, el guardia que lo custodiaba asintió en forma de saludo y se alejo, sabia de


alguna forma que debía dejar a esos dos a solas. Argent entro a la celda, mientras que
Theo le daba la espalda, antes de que pudiera decir algo, tenia a la quimera
golpeándolo en el pecho.
-Te odio, te odio tanto.- decía el chico casi llorando.

-¿Por que me odias?- pregunto Chris aceptando los golpes, suponía que el chico
merecía desahogarse.

-Porque por tu culpa estoy sintiendo esto, y lo detesto. Detesto estar enamorado de
ti.- confeso Theo.- Lo detesto porque se que saldré lastimado, porque se que jamás
estarías con una quimera como yo.-

-Theo, no saques conclusiones apresuradas.- comento Chris por lo que el chico lo


miro.- Me gustas Theo Raeken.-

La quimera miro al hombre con sorpresa, no se había esperado una respuesta así, pero
se sorprendió aun mas cuando el mayor lo beso.

-¿Que significa esto?- pregunto Theo cuando se separaron.

-Ni idea, quizás que me gustas y que quiero estar contigo, y que como a de lugar
tratare de sacarte de aquí, y al hacerlo, nos iremos lejos.- le dijo Chris.

-¿Quieres irte conmigo? Pero, tu eres un cazador, y yo un sobrenatural.- dijo el


menor.

-Lo se, lo que es la ironía.- dijo el mayor riendo.- Te quiero Theo, y quiero pasar el
resto de mi vida contigo, claro, si tu me aceptas.-

Como respuesta el chico se atrevió a besar al mayor, ambos disfrutaban el beso, como
si lo hubieran necesitado desde que se conocieron. Con rapidez mientras se besaban,
Chris empezó a pasar sus manos por debajo del polo del menor, acariciando con
cariño su espalda, a lo que Theo empezó a quitarle el cinturón, para luego
desabrochar su pantalón y también poder bajar su cremallera.

A medida que esto pasaba, el cazador ya había logrado empujar hacia la cama al
menor, por lo que se posiciono encima, para después quitarse la camisa que llevaba
ese día, dejando a la vista de Theo, su abdomen bien trabajado, a lo que la quimera
estiro una de sus manos, para poder tocarlo.

-¿Te gusta lo que ves?- pregunto Chris mirando con una sonrisa al menor, quien con
todo y sonrojo asintió.

Tras eso, el cazador se acerco a besar una vez mas a la quimera, mientras intentaba
sacarle el polo, cosa que no logro, hasta que el mismo Theo lo hizo, y Chris tuvo que
admitir que tenia un cuerpo de infarto. Regocijado por la vista, el mayor se acerco
más al menor, para luego disponerse a besar cada parte del pecho de Theo, mientras
el otro se aferraba a su espalda con sus manos, dejándose llevar por la excitación del
momento.

-¿Quieres seguir?- pregunto Argent, podía estar excitado y todo eso, pero no iba a
violar al menor.
-¿Que clase de pregunta es esa? Claro que quiero seguir. Ahora, apúrate.- le dijo la
quimera con el ceño fruncido.

Chris sonrió ante la insistencia del menor, podía ser un poco controlador, pero lejos
de disgustarle, esa parte le encanto aún más. El cazador se saco el resto de su ropa, no
quería que ninguna tela se entrometiera entre su chico y él. Tras eso, se acerco a la
quimera y empezó a desnudarlo, hasta que el chico quedo completamente desnudo
ante sus ojos.

Sin esperar mucho, Chris se volvió a acercar, pero esta vez no fue hacia el pecho de
Theo, no, esta vez fue más abajo, fue de frente al miembro del menor, lo tomo entre
sus manos y empezó a masturbarlo, arrancándole pequeños gemidos que hicieron que
el cazador se excitara más, y que de su miembro empezara a salir liquido pre-seminal.

-Ya, ya, mételo ya.- pedía Theo mientras se aferraba a las sabanas de su cama.- Hazlo
ya.-

Argent no se hizo esperar mucho, en menos de lo que canta un gallo ya estaba encima
del menor, sabia lo que tenia que hacer, había visto unos cuantos vídeos porno, así
que siguiendo los pasos del vídeo que había visto, se lleno los dedos de saliva y
mirando fijamente al menor, empezó a meter un dedo, lo que hizo que Theo se
tensara, pero luego se relajo.

Viendo que el menor ya estaba relajado, el cazador empezó a estirar poco a poco la
entrada de Theo, para luego meter otro dedo más, tras un buen rato preparando al
menor, saco ambos dedos del interior del chico y posiciono su miembro en la entrada
de Theo, y sin aviso alguno, empujo, entrando por completo, y arrancando un gran
grito de parte del otro.

Después de unos minutos en los que Chris tuvo que aguantar las ganas de moverse, al
fin pudo hacerlo, disfrutando de la agradable sensación que el interior del menor le
proporcionaba. Sus movimientos aumentaron cuando noto que la quimera buscaba
que las penetraciones fueran más fuertes, muy pronto la celda se lleno de gemidos y
gruñidos. Ambos estaban a punto de llegar al clímax, por lo que Chris tomo al menor
y lo volteo, quería ver su rostro al correrse.

Tras unas estocadas más, Chris se corrió dentro del menor, mientras que Theo se
corrió en medio de los dos. Cansado, el cazador cayo encima del menor, quien lo
abrazo y acaricio con una sonrisa.

-Que buen regalo de navidad adelantado me diste.- dijo Theo a lo que el otro dejo
salir una risa.

-Te aseguro, que en navidad lo pasaras mucho mejor.-


Capitulo 13

-No sabían que adornaban.- dijo Parrish mientras ayudaba a su compañero a poner las
guirnaldas.

-El año pasado empezamos a hacerlo, descubrimos que el muérdago debilita a


nuestros internos, así que ahora lo usamos cada que podemos, y las fiestas son el
momento perfecto.- le explico el chico.- Aunque si es nuevo, que el director haya
permitido la visita de los familiares.-

-Si, a Deucalion también le sorprendió, pero lo agradece.- comento Jordan.

-¿Sabes? Oí rumores de que fue a causa de un importante donador, que dono cierta
cantidad de dinero, y que lo único que quería a cambio era que los internos,los que
mejor se portan, tengan la oportunidad de pasar navidad con sus familiares.- le contó
el otro guardia.

-¿Quien habrá sido?- se pregunto Parrish.

-Ni idea, listo, ya terminamos aquí, creo que ya podemos volver a nuestro sitio.- dijo
su compañero.
-Bien, nos vemos después.-

Jordan camino de regreso a la celda que compartía con su ahora novio Deucalion,
pero al regresar, paso por la celda de Theo, quien desde cierta visita de un cazador,
andaba muy alegre.

-Buenos días Theo.- saludo Jordan deteniéndose por un momento.

-Jordan, buenos días, ¿como te ha tratado el día? A mi, de maravilla.- contesto el


chico con una sonrisa.

-Lo note, estas muy animado.- comento Parrish.

-Todo se debe gracias a Chris.- dijo Theo en voz baja, pero igual Jordan lo oyó.

-Me alegra que hayan solucionado todo y que ahora estén juntos.- dijo Jordan, a lo
que la quimera sonrió.

-A mi también, va a venir para navidad. Y dijo que tenia algo especial para mi.-

-Bueno, te dejo, que si no regreso rápido a la celda, Deucalion se molestara.-

Jordan siguió su camino, saludando a cada momento a cada uno de los internos, hasta
que llego a su celda, donde su ahora novio estaba leyendo un libro en brailee, pero al
percatarse de su llegada, alzo la cabeza y sonrió.

-¿Te quedaras todo el tiempo ahí o vendas a darme un beso?- pregunto el alpha.

-Vaya parece que estamos muy demandantes hoy.- dijo Jordan acercándose para
besarlo.- ¿Me extrañaste?-

-Claro que si, ¿terminaron de adornar el patio?- pregunto el alpha, mientras el guardia
se sentaba en sus piernas.

-Si, de todas maneras nos obligaron a poner muérdago, pero pusimos poco, nada
dañino.- contesto el otro.

-Ya estoy ansioso porque llegue noche buena.- hablo emocionado Deucalion.

-Los chicos deben estar más emocionados, felizmente Kali y Ennis también podrán
venir.- comento Parrish.- Va ser una bella navidad, lastima que no podre regalarte
nada, hasta después.-

-Mi mejor regalo eres tu, Jordan.- dijo el lobo besándolo.- Eres lo mejor que me ha
pasado, a parte de mis hijos.-

-¿Ya esta todo listo?- pregunto Stiles a su padre.


-Si, en esta maleta están los regalos, y aquí en la otra esta nuestra ropa.- contesto
Noah, levantando ambas maletas.

-Perfecto, ahora ¿que suéter debo ponerme?- pregunto Stiles mirando un suéter rojo
con un árbol navideño y otro suéter verde con una nariz roja.

-¿Por que no llevas un suéter normal?- pregunto su padre.

-Porque a Derek le gusta lo anormal, y quiero hacerlo reír, aunque no le guste reír.-
dijo el chico.- Quiero que sepa que tiene algo por lo que reír, y ese es su adorable
novio.-

-Le va a encantar, lleva el de la nariz de Rodolfo.- le aconsejo su padre.- Es él más


gracioso.-

-Perfecto.- dijo Stiles poniéndose el suéter.

-Muy bien, ahora antes de irnos, por favor recuerda que los Argent también estarán
ahí, y que uno de ellos sale con Theo.- le dijo su padre, hacia unos días había hablado
con Jordan, y él le había contado las ultimas cosas que habían pasado en Eichen, y
una de ellas era la nueva relación de Chris y Theo.- Ellos tampoco quieren hacer eso,
pero están maniatados, hasta que Gerard Argent estire la pata.-

-Si, si, lo se, oye ya deje de tratar mal a Allison, no es como si le hablara, pero ya no
la trato tan feo.- se defendió Stiles a lo que su padre lo miro.- Bien, seré amable,
aunque no se si Ethan y Aiden lo sean.-

-Bueno, eso es arena de otro costal, solo espero que Kali y Ennis hablan con ellos.-

-Nos comportaremos.- dijeron Ethan y Aiden a la vez.

-Es en serio chicos, miren que los Argent tienen el voto de confianza de Jordan.- dijo
Kali.

-Es en serio tía, vamos a comportarnos bien, y trataremos con amabilidad a los
Argent.- dijo Aiden.

-Bien, Ethan ¿a que hora vendrá tu amigo?- pregunto Ennis.

-No debe tardar en llegar.- contesto el mencionado.

-Es raro que lleves a tu ex, a ver al chico que te gusta ahora.- lo molesto Aiden.

-Jackson no me gusta.- se quejo Ethan.- Y Danny quiere ver a su amigo, eso es todo.
Lo hago por ser amable, y para que Jackson tenga a alguien que lo visite.-

-Huy si claro, entonces anoche no te estabas masturbando mientras repetías el


nombre de Jackson.-
-Te juro que te mato.- Ethan quiso irse encima de su hermano, pero su tío Ennis se lo
impidió.

-Ya muchachos, compórtense, por favor.- les pido el hombre, justo cuando el timbre
sonaba, y Kali se acercaba a abrir.

-Hola Danny.- saludo la mujer.

-Hola Kali, es un gusto volver a verte.- saludo Danny dándole un beso a la mujer.-
Ennis.-

-Danny muchacho.- saludo Ennis aún cargando a su sobrino.- Bien, ¿ahora se


comportan para poder irnos?-

Allison miro sentada en su sillón como su papá se arreglaba frente al espejo,


terminaba de arreglarse y se fijaba en la ropa que tenía puesta, ya estaba así un buen
rato.

-Papá, te ves bien, a parte, no es como si a Theo le importara lo que vistes, solo
quiere verte a ti.- le dijo la chica ya rindiéndose.

-Alli, se sincera con tu padre, ¿estoy bien así?- pregunto mientras se miraba de pies a
cabeza, o pecho, que era hasta ahí donde podía verse.

-Si, estas guapísimo padre, por favor, podemos irnos ya, mira que tenemos que pasar
por el doctor Geyer.- dijo la chica parándose y tomando su bolso.- Papá.-

-Ya, ya, bien, vamos que tenemos una hermosa navidad que pasar.- dijo Chris
también tomando su bolso.

-Es increíble que mi nuevo padre, tenga mi edad, que familia más rara.- comento
Allison, mientras su papá se quedaba parado.- ¿Ahora que?-

-Tienes la misma edad que Theo.- dijo Chris con cara de miedo.

-Por Dios, aquí vamos de nuevo.-

Tara Raeken se paro frente a las grandes rejas de Eichen, era noche buena, y por fin
podría pasar navidad junto a su hermano, y no solo eso, también venia con regalo
incluido.

-¿Así que este es el lugar?- pregunto un señor de unos 60 años.

-Si, hasta desde afuera es aterrador.- comento Camden, hermano mayor de Isaac
Lahey.
-Miren, ahí vienen los gemelos.- dijo Tara mirando con una sonrisa a Aiden, quien no
se había dado cuenta de los otros, pues venia conversando con sus tíos.- Hola Aiden.-

-Tara.- dijo Aiden quedándose helado, desde el beso, no se habían vuelto a hablar.

-Hermanito, te comió la lengua el ratón.- molesto Ethan con diversión.

-Buenas tardes.- saludo Chris al llegar, a lo que los demás lo miraron.

-Buenas tardes señor Argent.- saludo Tara con una sonrisa, su hermano mediante
Jordan, le había contado lo que paso, y aunque le había sorprendido, se puso feliz al
saber que estaban juntos.- Trajo muchos regalos para mi hermano, ¿verdad?-

-Demasiados diría yo.- contesto el cazador con una sonrisa.

-Hola Allison.- saludo Ethan a la chica, quien estaba detrás de su padre.

-Hola Ethan.- contesto la cazadora, sorprendiendo a los gemelos, era raro que alguien
los reconociera rápido.

-¿Como..- empezó Aiden.

-Es por sus personalidades, Aiden nunca hubiera tomado la iniciativa de hablarme.-
explico Allison, y Ethan asintió.

-Al fin llegas Stiles.- dijo Aiden viendo como el sheriff y su hijo llegaban.

-Lo siento, lo siento. ¿Ya estamos todos?- pregunto mirando al grupo.

-No, faltan el profesor Yukimura y el señor Tate.- dijo Allison aunque luego bajo la
cabeza.

-Cierto, no lo había notado, gracias Allison.- dijo Stiles a lo que la chica sonrió.

-Ahí vienen.- indico el sheriff viendo a los dos hombre llegar.

Al ya estar todos juntos, entraron al local, luego de que les revisaran las maletas y
objetos, un guardia los guío hasta el sótano, donde otra vez, tuvieron que pasar por
una revisión, para que después, uno por uno, pudieran ir pasando.

-Jordan.- Ethan había sido el primero en pasar y ver a su nuevo papi, y se lanzo a
abrazarlo.

-Hola pequeño, y bienvenido.- saludo Jordan, para luego tener encima a Aiden.- Mis
muchachos, no voy a poder caminar con ustedes encima.-

-¿Como has estado Jordan?- saludo Noah.

-Muy bien señor, bueno, ahora los llevare a cada uno a las celdas donde se quedaran,
es un pabellón libre, así que podrán descansar con tranquilidad, y también tendrán la
libertad de pasear por los pasillos con tranquilidad, las únicas celdas abiertas son de
los internos con visitas.- explico Parrish y todos asintieron.- Primero acomódense
bien y luego pueden visitar a sus familias y/o novio, amigos, etc.-

Jordan los guió hasta el pabellón donde se quedarían hasta la mañana del 26, el
guardia les asigno a cada uno sus “habitaciones”.

-Bueno, creo que la mayoría sabe donde están las celdas que quieren visitar, así que,
siéntanse libres de ir a ellas, les recuerdo que hemos reinstalados a otros internos a
otros pisos, pero igual para su seguridad, habrá cuatro guardias a sus disposiciones.-
les dijo Jordan con una sonrisa.- Bien, me retiro, Aiden, Ethan, su padre y yo los
esperamos.-

-En un rato vamos.- dijeron los gemelos desde su “habitación”.

-¿Es por aquí?- pregunto Danny, mientras Ethan lo guiaba.

-Si, recuerdo que estaba cerca de los baños.- contesto el otro.

-Pero, miren quien es, hola niño bonito.- saludo Jackson desde una celda.

-Jackson, que alegría encontrarte.- dijo el lobo, a lo que el omega sonrió.

-Me halagas niño bonito, no sabia que te gustaba tanto.- molesto Whittemore.

-Ya quisieras.- dijo Ethan sonrojándose, a lo que Danny levanto una ceja, nunca
había visto ese lado de su ex.

-Oh vamos, es una bromita. ¿Como has estado?- pregunto el otro.

-Bien, ¿tu celda tiene llave?- pregunto Ethan.

-No, lo que es raro, no se ni siquiera que hago aquí, ah no ser que mis padres vengan
a verme, y lo dudo, ya deben estar bien lejos de aquí.- dijo Jackson.

-Pues yo si se porque estas aquí, es más traje la razón por la que estas aquí.- dijo el
lobo emocionado abriendo la celda.- Ven.-

-Hola Jacks.- saludo Danny entrando a la celda.

-¿Danny? ¿Eres tú? ¿En verdad eres tú?- Jackson se levanto de su cama y avanzo
hasta su amigo, quien le sonrió.- Si, eres tú.-

-Amigo.- Danny y Jackson se fundieron en un largo abrazo.- Pero, ¿que haces aquí?
¿Como es que ustedes se conocen?-

-Pues, Ethan y yo salimos por un tiempo.- le contó Danny, y el lobo miro al otro,
quien sonrió.- Y hace unos días que nos vimos, el menciono tu nombre, y pues aquí
estoy.-

-¿Salieron? ¿Fueron novios?- Jackson se había quedado solo con la primera parte de
la noticia.

-Si, fue hace un año.- contesto Ethan.

-¿Y por que terminaron?-

-Yo me fui de la ciudad...- contesto Danny, pero su amigo y Ethan sabían que había
algo más ahí.

-Bueno no importa, me alegra que estés aquí.-

-Ethan, Aiden, dejen de corretear.- les riño Kali, al verlos como corrían mientras se
jugaban bromas.

La noche había llegado rápido, y todos habían ido al pequeño patio techado, en una
esquina se encontraba un árbol de navidad, y Jordan había ido por el pavo y las
demás guarniciones para la cena.

-Entonces, ¿los trataron bien?- pregunto Theo, quien estaba sentado en medio de
Chris y Allison.

-Si, fueron muy amables.- contesto Allison con una sonrisa.- Sobre todo tu hermana,
fue muy linda.-

-Ahí donde la ves, Tara puede ser muy odiosa.- dijo Theo mirando a su hermana,
quien le saco la lengua.

-Bueno, no es que este muy de acuerdo, pero veo que su cariño es sincero por mi
nieto.- dijo Isaias Raeken quien estaba sentado frente a su nieto.- Supongo que solo
me queda decir, bienvenidos a la familia.-

-Le aseguro señor y Tara, que lo que siento por Theo es muy sincero, me encanta este
chico y daría mi vida por él. Y lo mismo digo yo, bienvenidos a la familia Argent.-
dijo Chris sonriendo.

Por otro lado Stiles estaba sentado encima de las piernas de Derek, mientras le
arreglaba el cabello a Cora, quien a su vez, tenia bien abrazada a Hayden.

-Me encanta este ambiente familiar.- dijo Cora mientras miraba a su tío, quien no
dejaba de darle besos a Liam.- Y ver a Peter feliz, es agradable.-

-Te amo pequeño.- dijo Peter a Liam, a lo que el otro sonrió y lo beso.

-Mi yerno es de mi edad.- se dijo a si mismo el doctor Geyer.


-Hay papá, ya acostúmbrate, igual, no envejeceré rápido.- dijo Liam.

Mientras el doctor Geyer se fundía en el sillón, Deucalion estaba bien abrazado a sus
hijos, mientras Jordan los miraba con una sonrisa, sentado junto a Kali y Ennis.

-Papá, ¿cuando te casaras con Jordan?- pregunto Aiden.

-Aiden, ¿que cosas dices?- pregunto Deucalion poniéndose nervioso.

-Por favor, el olor que Jordan tiene es el tuyo, es obvio que estas juntos y que hacen
algunas cosas.- dijo Ethan.

-No intenten negarlo- sugirió Kali.- Ya sabes como son.-

-Bueno, esta bien, Jordan y yo estamos saliendo, pero aún es muy pronto para
casarnos.- hablo el alpha.

-Pero, ¿podemos decirle a Jor, papá?- pregunto Aiden mirando a Jordan.

-Yo no tengo ningún problema con eso.- contesto Jordan.

Los minutos avanzaron, quedaba poco tiempo para que las 12 llegaran y con ella la
navidad, ya habían cenado entre risas y anécdotas, y ahora estaban reunidos frente al
árbol.

-Antes de que llegue la navidad, quiero decir que estoy feliz por poder pasar navidad
con todos ustedes, y es la verdad. Hacia bastante tiempo que no pasaba estas fechas
junto a mis hijos.- dijo Deucalion.- Todos los que estamos aquí nos hicimos como
una gran familia. Y ahora todos los demás, todos ustedes que han llegado, se han
vuelto parte de nuestra familia, de nuestra manada.-

Todos aplaudieron ante las palabras del hombre, pero Jordan hizo algo más, tomo el
rostro de Deucalion y acercándose, lo beso.

-¿Nos permitirán casarnos en Eichen?- pregunto el guardia a lo que el lobo solo


sonrió.

-Ya esta cerca.- anuncio Aiden.- Cinco, cuatro, tres, dos, uno. Feliz navidad.-

Deucalion y Jordan atrajeron en un gran abrazo a los gemelos, para luego abrazar a
Kali y a Ennis. Por otro lado, Peter abrazo a su nuevo suegro, a sus sobrinos y luego
se dedico a besarse con su novio. Stiles no dejo de besar a Derek, ni aun con su padre
intentando abrazarlo.

Jackson abrazo a Danny y luego jalo a Ethan, para besarlo frente a todos, tomándolos
por sorpresa. Isaac y Camden se abrazaron y lloraron, Tara y Theo se fundieron en un
abrazo con su abuelo, para que luego Theo fuera a abrazar a los Argent, dedicándole
un beso a Allison en la frente, a Kate en la mejilla y a Chris en los labios.

Cora abrazo con fuerza a Hayden, quien se aferro a su novia. Mientras que Malia y
Lydia se besaron frente a la orgullosa mirada de Henri. En ese momento, no parecía
que estuvieran encerrados en ese lugar, estaban disfrutando a lo máximo la llegada de
la navidad, junto a las personas que más querían.

Capitulo 14

Jordan toco la puerta de la casa de Ennis y Kali, pero quien le abrió fue Ethan, quien
al verlo se le fue encima.

-Jordan.- dijo el chico abrazándolo.

-Hola pequeño, no pensé encontrarte aquí, ¿no fuiste a la escuela?- pregunto Jordan,
entrando a la casa.

-Me reporte enfermo, digo, sería extraño que yo siempre este yendo a clases y nunca
me haya enfermado, aproveche que hay una epidemia de gripe y mentí un poco.-
explico Ethan como si nada.

-Pero, ¿tu hermano si fue?-

-Ah si, es que el pobre Aiden no quiere encontrarse con cierta persona en esta
reunión.- contesto el lobo.

-¿Que persona?- Jordan estaba confundido.

-Su peor pesadilla, Tara Raeken.- explico Ethan sonriendo.


-¿Por que es su pesadilla? Que yo sepa, Tara es una persona adorable.- dijo Parrish

- Es que mi a Aiden le gusta ella.- dijo el menor.

-Oh.-

Tras eso, estuvieron hablando de como Ethan había descubierto sobre los gustos de
su hermano, y sobre el beso robado que Jackson le había robado al beta.

-Entonces, ¿están saliendo? Porque eso me mando a preguntar tu padre.- dijo Jordan.

-Ni idea, solo fue un beso, no dijo nada más, ¿puedes creerlo? Hubiera esperado algo
como “Ethan me gustas”, pero no, solo me beso y de ahí hablo con Danny y yo quede
como un tonto parado esperando.- dijo el menor indignado.- Pero, Danny me explico
que él siempre ha sido así, juguetón con todo el mundo, supongo que eso hizo
conmigo, jugar.-

-Hey, tranquilo, quizás, solo quizás, se dio cuenta de lo que hizo y tuvo vergüenza.-
Jordan trato de defender al otro, pues ya había conversado con Jackson, y justamente
así estaba, avergonzado.

-¿Tú crees?-

-Estoy seguro de que así es.- dijo el guardia sonriendo.

Antes de que Ethan pudiera añadir algo más, el timbre de su casa sonó, por lo que se
levanto del sillón donde estaba sentado junto a Jordan y fue a abrir la puerta,
encontrándose con Argent.

-Bienvenidos- saludo el menor, dejándolo entrar.

-¿Llegue muy temprano?- pregunto Chris entrando.- Hola Parrish.-

-Chris, que alegría verte. Toma, Theo te la envía.- dijo Jordan dándole una carta.

-Gracias, si no les importa, la leeré ahora.- dijo el cazador.

-Mejor no, según Theo, dijo que es mejor que la leas en privado.- le aconsejo Parrish,
a lo que primero Chris no entendió, pero luego capto la indirecta.

-Vaya señor Argent, su novio es un pervertido.- se burlo Ethan con una sonrisa.

-¿Por que crees que me gusta Ethan?- pregunto el cazador guiñándole el ojo.

Después de eso, empezaron a llegar los demás, los siguientes en llegar fueron los
Stilinski, a quienes Jordan les dio una carta, o mejor dicho solo le dio la carta a Stiles,
pues era de Derek. Los siguientes en llegar, fueron Allison y Aiden.

-Creí que tardarías más en venir.- dijo Ethan al ver a su hermano.


-La profesora no vino, y salimos temprano- respondió Aiden, para luego susurrar.-
¿Tara?-

-Aún no llega, tienes tiempo de esconderte.- le dijo su hermano, pero antes de que el
otro pudiera responder, tocaron la puerta.

-Yo voy.- se ofreció Aiden imaginándose que podría ser el padrastro de Liam, pero
que equivocado estaba, porque al abrir, se encontró con Tara.

-Aiden.- la chica se lanzo en un abrazo al chico, quien no sabia que hacer.- Saliste
temprano.-

-¿Eh? Si, es que una profesora no vino.- explico el menor cuando se despegaron.-
Pasa.-

-Gracias.- Tara entro a la casa, pero antes de seguir avanzando, tomo la mano de
Aiden y lo jalo con él, hasta un sillón libre.- Siéntate conmigo.-

Jordan y Ethan miraban toda la escena, intentando no reírse de la incomoda situación


del otro. Tras unos minutos, todos estuvieron reunidos en la casa, por lo que Parrish
se levanto, llamando la atención.

-Me alegra que todos hayan venido y gracias a los Argent por venir.- dijo mirando a
Chris y a Allison, quienes sonrieron.- Los pondré al tanto, hemos formado este
pequeño grupo, porque queremos sacar a la gente que nos importa de Eichen, porque
sabemos que no merecen estar ahí, si no, que merecen estar junto a nosotros, sus
seres amados.-

-¿Que? ¿Padre ya te pidió matrimonio?- molesto Ethan a lo que Jordan le metió un


golpe en la cabeza.- Au, un simple no, hubiera bastado.-

-Como decía, tenemos que sacarlos de Eichen, no pueden seguir ahí, no es bueno
para ellos.- termino Jordan.

-¿Han pensado ya en como sacarlos?- pregunto Allison.

-Muchas maneras, pero ninguna es buena, todas terminarían en que la gente de


Eichen contrataría a otros cazadores y los mandarían a buscar.- explico Ennis.

-Si, y eso conllevaría a irnos a otra ciudad, mudarnos, pero no es como si fuéramos
dos o tres, somos varios, los que tendríamos que huir.- siguió Kali.- No seria nada
fácil.-

-Entonces, estamos atados de manos.- dijo el sheriff y Stiles bajo la cabeza.

-No hay que rendirnos, miren yo no me voy a rendir, hasta agotar el ultimo plan.- dijo
Jordan decidido.- He encontrado al hombre perfecto, y no voy a dejar que se pudra en
ese lugar.-

-Estoy de acuerdo con Jordan.- dijo Chris.- Theo no puede seguir ahí ni un segundo
más.-

-Igual que los Hale.- dijo Stiles parándose.

-Ni Kira.-

-Entonces, hay que seguir buscando la manera de sacarlos de ahí.- dictamino Kali.

-Pero aún así, a nadie se le ocurrió algo.- contó Jordan a todos, mientras estaban en su
hora libre.

-Kali tiene razón, si escapamos, va a ser muy difícil mover a todo el mundo.- dijo
Derek.- Porque algo es seguro, nos hemos acostumbrado mucho a estar juntos, y
vamos a querer seguir frecuentándonos.-

-¿Que opinas?- pregunto Jordan a Deucalion.

-Sera difícil encontrar un buen plan, que evite que nos casen.- dijo el alpha y todos
asintieron.

-¿Por que no probamos con otra cosa?- pregunto Peter, y todos lo miraron.

-¿Como que?- pregunto Liam a su novio.

-Bueno se que hay alguien que ha estado mucho tiempo en Eichen, más que nosotros,
es como si conociera el lugar de pies a cabeza.- explico Peter.- Es una banshee.-

-¿Como yo?- pregunto Lydia interesada.

-Si, pero a ella... la lastimaron mucho, tanto que parece perdida en sus pensamientos.-

-Entonces, ¿como podría ser de ayuda?- pregunto Jackson, quien se había unido al
grupo, a pedido de Deucalion.

-Hubo un tiempo en el que me bajaron al sótano, ya saben a “ese nivel”.- explico


Peter.

-No entiendo.- dijo Jordan a Deucalion.

-Hay un nivel más, que pocos conocen, en ellos están los mas salvajes de todos
nosotros, bestias que nunca volverán a ser humanos peligrosos hasta para ellos
mismos.- explico el alpha ciego.- Son bestias, ya no les queda lado humano alguno.-

-¿Y por que te bajaron a ti?- pregunto Liam a su pareja preocupado.

-Ah, es que me había convertido recién en alpha y estaba hecho rabia por lo de Laura,
y pues casi todo el tiempo, paraba convertido en la bestia alpha.- explico el lobo
como si no fuera nada.- Así que hasta que me calmara, me mandaron para allá abajo.-
-Bueno, ¿que paso mientras estabas ahí?- pregunto Deucalion interesado, ni siquiera
a él, que lo consideraban un alpha despiadado, lo habían bajado al sótano, quizás
tenia que ver, que el se había comportado como era debido.

-Tuve la suerte, tal vez, de ser encerrado al lado de Meredith, la banshee.- explico el
alpha.- Ella no me temía, era la única que me hablaba, entonces ella me contó algo
que me pareció interesante. Ella hablaba sobre un sabueso del infierno....-

-¿Un hellhound?- pregunto Derek, y todos lo miraron con confusión.-Un hellhound


es un ser sobrenatural conectado a la muerte, se que siempre ha cuidado a los seres
sobrenaturales.-

-Pues si, Meredith decía que un día el sabueso del infierno congelado seria liberado y
todo en Eichen cambiaría.- termino de contar el alpha.- Nunca supe a que se refería,
pero quizás nuestro guardia pueda intentar hablar con ella.-

-¿Yo?- pregunto Jordan.

-Si, tú eres guardia, puedes bajar ahí, nosotros estamos encerrados.- le recordó Peter.

-Si no quieres hacerlo, no hay problema.- dijo Deucalion a su pareja.

-No, lo haré, tal vez esa sea la solución que estamos esperando.-

-¿Estas seguro?- pregunto el guardia Bohen.- Ese no es el mejor lugar para estar, ni
siquiera un minuto.-

-Tranquilo, solo hablare con Meredith y volveré, no me tardare nada.- dijo Jordan y
su compañero lo miro inseguro.- Mira, los internos no merecen un trato como este,
viste lo que paso con Theo, su casi violador sigue andando libremente, no es justo
para él, ¿no crees?-

-¿Y Meredith es la solución?- pregunto el guardia.

-Ella sabe de algo, algo que podría ayudar- contesto Parrish.

-Bien, tienes 10 minutos, apúrate.-

Jordan asintió hacia lo dicho por su compañero, y teniendo cuidado de que nadie lo
viera, abrió la puerta que lo llevaría al sótano de Eichen. Bajo las escaleras con
cuidado, pues solo unas luces verdes iluminaban el camino, al llegar se encontró
frente ante diez celdas, seis de ellas con internos. Sabia por su amigo, que Meredith
era la única mujer de todos ellos, aunque no sabían porque la habían puesto ahí,
porque no era peligrosa, ni agresiva.

-Quizás no quieren que ella hable de más.- pensó Jordan avanzando, hasta que llego a
la celda de Meredith.- ¿Meredith?-
En la celda se podía ver a una chica encorvada de cabello corto y delgada, algo en
ella le resultaba familiar al guardia, pero todo quedo aclarado cuando ella giro al oír
su nombre.

-¿Meredith?- dijo Jordan asombrado, era la chica que le había atendido en la pizzeria
cuando él había llegado a la ciudad.

-Jordan Parrish.- Meredith se había levantado del suelo y se había acercado a la


puerta de la celda.- Así que, aún sigues aquí.-

-Dijiste que fuiste interna, pero en verdad, te escapaste, ¿verdad?-

-Así es, sabia que venias y tenia que advertirte sobre este sitio.- explico la chica.

-¿Como sabias que iba a venir? ¿Como sabes mi nombre?- pregunto Jordan
acercándose.

-Las voces me lo dijeron.- contesto ella.- Ellas dijeron que debía advertirte sobre este
lugar, sobre lo que hay encerrado. Tu nombre, él me lo dijo.-

-¿Quien es él?- Jordan se acerco más.

-Él vive en ti, él te eligió y te trajo aquí.- Parrish no entendía nada de lo que había
dicho.- Lo conociste cuando esa bomba exploto.-

-Meredith, ¿quien vive en mi?-

-No tiene nombre, es como un ente, que necesita de alguien más para vivir, y tú eres
ese alguien.- Meredith miro directamente al guardia.- Pero, no has venido por eso,
¿verdad?-

-Dice Peter que tu le hablaste de alguien que podría acabar con todo lo que pasa en
Eichen.- dijo Jordan mirándola, a lo que la chica sonrió.

-Ese alpha tiene buen oído. Así es, existe alguien que puede acabar con todo esto, y
liberar a tus amigos, pero el esta congelado. Es más, esta en esa habitación.- dijo
Meredith señalando algo detrás de Jordan.

Parrish se giro y camino hacia la puerta, pero esta estaba cerrada y no tenia ni una
sola ventana o agujero, era solo una gran puerta de metal.

-Su nombre es Halwyn, es un hellhound, y es el que construyo Eichen House.-


explico Meredith llamando la atención de Jordan.- Estuvo a cargo de este sitio por
mucho tiempo, pero sus empleados se fueron contra él, y lo congelaron.-

-¿Por que le hicieron eso?- quiso saber Parrish.

-Porque no creían que un sobrenatural debiera estar a cargo de un sitio que encerraba
a los suyos. Es más, el hombre que lidero ese encierro aún sigue aquí, tu lo conoces,
es el director.-

-¿El director encerró al dueño? Rayos, ese hombre es aterrador.- dijo Jordan con una
mueca.

-Si quieres que todos tus amigos sean libres, tienen que liberar a Halwyn.- dijo la
chica.- Es la única manera.-

-¿Como lo podemos liberar?- pregunto Jordan, pero al terminar, escucho como


golpeaban la puerta por la que había entrado, lo que significaba que debía irse.-
Meredith.-

-Vete ya Jordan.- le dijo la chica volviendo a sentarse en la cama.

El guardia miro a la chica por una vez más, para luego subir las escaleras y salir de
ahí.

-¿Lograste hablar con ella?- pregunto Bohen al verlo.

-Si, ahora tengo que hablar con Deucalion, gracias amigo.- le dijo al otro, y este
asintió.

-Ya veo, así que tenemos que sacar a Halwyn de ahí, y listo, seremos libres.- dijo
Deucalion, después de que Jordan le contara todo, aunque tal vez no todo, puesto que
el guardia se había guardado lo que Meredith le había dicho sobre si mismo.

-Así es, pero Meredith no me llego a decir como podíamos liberarlo.- dijo Jordan.

-Tal vez los demás puedan ayudarte.- dijo el alpha, pero luego se quedo callado, y
justo cuando Jordan iba añadir algo más, lo calló.

-¿Que pasa?- pregunto Parrish en un susurro.

-Alguien nos esta oyendo.- dijo Deucalion, por lo que Jordan se levanto de la cama y
camino con tranquilidad hacia la puerta, como si fuera a dar una vuelta, y vio a
Bronski a unas dos celdas.

-Es Bronski.- dijo Jordan al volver.

-Debe ser el director, debió mandarlo para que nos espiara. Hay que actuar rápido, o
tú también estarás en peligro.-

Jordan se paro en una esquina de las calles de Beacon, había estado caminando
mucho, pero no por gusto, no, había descubierto que estaban siguiéndolo, y eso no
era bueno para lo que quería hacer, tenia que idear algo, porque quien sea que lo
estuviera siguiendo, no iba a arriesgarse a llevarlo con los gemelos.
Pensando en algo que pueda hacer, un lugar donde puedan reunirse sin que meta en
problemas a los demás, entonces, el foco se le prendió. Saco su celular y marco un
número.

-Hey Chris, ¿puedo ir a visitarte?- pregunto cuando el otro contesto.

-¿Parrish? Creí que nos veríamos en casa de Ennis y Kali.- dijo Chris extrañado.

-Me están siguiendo.- contesto Jordan sin elevar mucho la voz.- Les enviare un
mensaje a los demás, para que nos esperen en tu casa, que Allison les abra la puerta,
mientras nosotros vamos.-

-Entiendo, Allison les enviara el mensaje a todos.- dijo el cazador.- ¿Donde estas tú?
Para irte a buscar.-

Jordan le dio la dirección y colgó, se puso a revisar su celular, había fotos de Peter y
Liam jugando, varias fotos de Theo, que le mandaba a Chris, y había una carpeta
especial, de fotos de él y Deucalion cuando estaban echados en la cama, u otras
donde el alpha se quedaba dormido y el guardia aprovechaba para tomarle fotos.

-Pronto estarás libre.- dijo mirando la foto de quien se había convertido en el sentido
de su vida.

-Jordan.- Chris llego desde atrás, y rápidamente dio una mirada a todo el entorno del
guardia.- Conozco al tipo que te esta siguiendo.-

-¿Quien es?- pregunto Jordan.

-Un guardia antiguo de Eichen, el lame botas del director.- dijo Chris, para luego
sacar su celular.- Ya están todos en la casa. Vamos en un taxi.-

-Perfecto, tengo una forma de sacarlos, pero hay que investigar mucho.- dijo Parrish
entrando al taxi.

-Bueno, para eso tenemos hartas cabezas, para que piensen.-


Capitulo 15

-Ya llegaron.- dijo Tara viendo por una de las ventanas de la sala de los Argent.-
Ethan, ¿hay alguien observando?-

-Nadie, creo que no pudieron seguirlos.- hablo el omega.

-¿Los siguieron?- pregunto Allison cuando su padre y el guardia entraron a la casa.

-No, le hice dar varias vueltas al taxi.- explico Chris y todos asintieron.- ¿Están
todos?-

-Si, al padre de Liam le mandaremos un mensaje, pues tuvo una operación de


emergencia.- explico Stiles.

-Bueno, Jordan diles todo.- dijo el cazador sentadose y dejando solo de pie al guardia.

-Gracias a Peter, hice una pequeña excursión, al sótano de Eichen.- empezó a explicar
Jordan.- Este sitio, cuenta con diez celdas, y están muy aseguradas, son para internos
especiales.-

-¿Que tan especiales?- pregunto el padre de Kira.

-Internos extremadamente peligrosos, de esos a los que no se pueden controlar.-


contesto Parrish y todos se miraron entre si.- Bueno, siguiendo con mi relato, Peter
me contó que la vez que estuvo ahí....-
-¿Peter estuvo ahí?- pregunto Stiles.

-Fue después de lo que sucedió con Laura, no podía controlarse.- explico Jordan y
todos asintieron, los Stilinski con pena, porque sabían lo duro que había sido para los
Hale perder a Laura.

-Sigue Jordan.- le pidió Aiden.

-Ok, Peter me dijo que una chica llamada Meredith, le había contado sobre alguien
quien cuando fuera liberado, todo en Eichen cambiaría.- dijo Jordan.

-¿De quien se trata?-

-No lo sabia en ese momento, por eso baje a preguntárselo a Meredith, ella me contó
sobre Halwyn, el dueño de Eichen, el que construyo ese sitio, y luego sus empleados
encabezados por el ahora director, lo encerraron.-

-¿Como es posible que hayan echo algo así?- pregunto Tara molesta.

-Pues así fue Tara, Meredith me dijo que si liberamos a Halwyn, él se encargaría de
liberar a los que fueron metidos injustamente, que el decidiría quienes se quedarían
dentro de Eichen, y quienes podrían salir y ser libres.-

-Eso es bueno, ¿que esperamos para liberarlo?- pregunto Ethan.

-Ese es el problema, no se como hacerlo. Antes de que Meredith me dijera como


podemos liberarlo, mi compañero me saco, porque venia alguien.- contesto Jordan.

-¿Entonces?- pregunto Stiles.

-Tenemos que investigar por nuestra cuenta como sacarlo de ahí.- termino el guardia.

-Esto va ser complicado, ¿al menos sabemos que es?- pregunto Allison.

-Si, Meredith me dijo que se llamaba, hellhound.- contesto Parrish.

-¿Que es un hellhound?- pregunto el sheriff.

-¿Papá?- pregunto Allison mirando a su padre, y al instante todos lo miraron.

-Son seres mitológicos, de hace años, décadas, siglos, es muy difícil encontrar a
algunos, de alguna manera están atados a las banshees, serian algo así como los
perros guardianes de las banshees, y protectores de lo sobrenatural.- contesto Chris,
para luego ponerse pensativo.- La única manera de detener a un hellhound, seria
congelándolo.-

-¿Por que congelándolo?- pregunto Tara.

-Porque los hellhound son fuego, derriten lo que sea, son un poco aterradores.
Congelarlos es la única manera de que no molesten por un tiempo. Me sorprende que
aún no se haya descongelado solo.-

-Tal vez no puede.- sugirió Aiden.

-Si no puede él mismo, habrá que encontrar una manera de ayudarlo.- dijo Ethan.

-Creo que ese sera nuestro trabajo, investigar sobre ellos.- dijo Kali, y todos
asintieron.

-Bien, Allison y yo nos encargaremos de ver quien es el que te esta siguiendo, y ver
si le podemos sacar algo.- se ofreció Chris y Jordan asintió.

-Jordan, el director te espera en su oficina.- le dijo la mujer de la recepción cuando lo


vio.

-¿A mi?- pregunto Jordan extrañado.

-Si cariño, y no parece feliz.- dijo la mujer preocupada.

-¿Crees que sepa algo?-

-Por tu bien, y el de los internos, espero que no.-

Jordan asintió y tomando sus cosas subió las escaleras que lo llevarían hasta la
oficina de su jefe, rogaba y esperaba que el hombre no haya descubierto lo que quería
hacer.

Al llegar a la puerta de su jefe, toco un par de veces, desde adentro se escucho un


adelante, y el joven guardia entro. Lo primero que diviso, fue al hombre sentado en
su escritorio, con los brazos sobre el y sus manos entrelazadas, con la mirada fija en
él.

-Parrish, pasa, adelante.- le dijo con una sonrisa, que a Jordan se le hizo falsa.

-Señor, ¿quiere hablar conmigo?- pregunto Jordan entrando y sentándose frente al


hombre.

-Si, ¿hay algo que no te haya quedado bien sobre tus funciones?- pregunto el hombre.

-¿Disculpe? No entiendo su pregunta.- contesto Parrish.

-Quiero saber, si algo no te quedo claro.- recalco el director.

-Todas mis funciones me han quedado sumamente claras, señor.-

-Bien, bien, entonces explíqueme, ¿por que es amable con los internos?- pregunto el
hombre.
-No entiendo que tenga que ver eso con mis funciones.- contesto Jordan frunciendo el
ceño.

-Parrish, no debe olvidarse de que ellos son monstruos, no sus amigos.- dijo el
hombre.

-Bueno señor, a mi me enseñaron a tratar a todos con amabilidad, sean lo que sean.
Lamento si eso lo molesta, pero no dejare de tratar a los internos de esa manera. Pero,
puede despedirme si quiera, aunque tal vez no le guste la demanda que le imponga si
lo hace, y la policía vea su pequeño secreto.-

El director miro con sorpresa al joven guardia, mientras que Jordan sonreía
internamente, al fin había sacado las garras, y eso lo ponía orgulloso, nunca más se
dejaría pisotear, y tampoco iba a dejárselas fácil a ese hombre.

-Bien Parrish, puede tratar a los internos como le de la gana, pero una cosa más,
tenga cuidado con lo que hace, cualquier intento de fuga que haya, y lo mandare a la
calle.- le advirtió el hombre.- Ahora, puedes irte.-

Jordan se levanto del asiento y con un asentimiento de cabeza, salio de la oficina.


Mientras caminaba hacia la celda de Deucalion, hizo puño su mano, quería golpear el
rostro del hombre, en serio quería hacerlo.

-Hey, ¿por que ese aura asesino?- pregunto Deucalion cuando entro a la celda.

-Te juro que quiero matar a ese tipo.- dijo Jordan enojado.

-¿Hablas del director?- pregunto el alpha.

Y así Parrish le contó todo lo que el hombre le había dicho, pero mientras el guardia
hacia eso, Deucalion usando su vista de alpha, noto algo inusual, en el cuerpo de su
novio, este emanaba calor, y estuvo seguro de que vio, pequeñas llamas aparecer en
sus hombros.

Allison revisaba minuciosamente el articulo que había encontrado en internet, aunque


estaba pensando seriamente mandarlo a la mierda, pues eran puras cosas inventadas
sobre los hellhound, no tenían base, y se contradecían a cada segundo.

-¿Tuviste suerte?- pregunto Chris al ver que su hija dejaba la laptop a un costado.

-Nada, internet no sabe nada.- se quejo la chica.- ¿Y tú?-

-No hay nada en el bestiario de la biblioteca.- dijo el mayor.- Pero se quien podría
saber de él.-

-No, no, no, quedamos en que no volveríamos a hablar con él, nunca más. Lo
prometiste papá.- dijo Allison mirando seriamente a su padre.
-Pero cariño, ¿que más podemos hacer? Tal vez él sepa algo que nosotros no.- intento
razonar Chris.

-Si, y también quizás nos de la forma de supuestamente liberar a ese hellhound, y


después terminaríamos matándolo. No, seguiremos buscando, tú más bien ponte a ver
quien sigue a Jordan.- mando la menor, a lo que su padre la miro con una sonrisa.-
¿Que?-

-¿Cuando creciste y te convertiste en la líder de esta familia?-

-Cuando tú empezaste a interesarte en un chico de mi edad, andas en las nubes,


alguien aquí tiene que ponerse los pantalones y ser la líder, decidí que tenia que ser
yo.- contesto la chica.

-Te quiero Alli.-

-Hay papá, no te vengas a poner sentimental.- dijo Allison mirándolo con una
sonrisa.- Dejemos los “te quiero”, para cuando tengas a Theo aquí.-

Antes de que Chris pudiera responder, el timbre de la inmensa casa Argent sonó, al
estar más cerca, Allison se levanto y al abrir se encontró con un agitado Ethan.

-Ethan, ¿que paso? ¿Te atacaron?- pregunto preocupada Allison.

-¿Que? No, tienes que venir conmigo a la escuela. Stiles tiene una idea, y
necesitaremos a mucha gente que lea.- explico el lobo.- Hola Sr. Argent.-

-¿Que tal Ethan?-

-Papá, ¿puedo ir con Ethan y los demás?- pregunto Allison mirando a su padre.

-Claro, después de todo, van a ir a la escuela. Solo tengan cuidado.-

Allison tomo su chaqueta y subió a su carro junto a Ethan, pues Aiden se había ido en
su auto a recoger a Tara, para también llevarla al colegio.

-¿Cual es el plan de Stiles?- pregunto Allison mientras seguía conduciendo.

-Bueno, básicamente, vamos a entrar ilegalmente a la escuela con un sopla llamas,


para abrir una puerta escondida en la pared, y así poder entrar a la bóveda oculta de
los Hale.- explico el hijo de Deucalion.

-Si, es obvio que es un plan de Stiles, solo a él, se le ocurren planes tan estúpidos.
¿Como vamos a cubrir el gran hueco que dejaremos?-

-Con una tela del mismo color de la pared.-

-Estoy rodeada de genios.-


*

-Hasta que por fin, Aiden y Tara llegaron mucho antes que ustedes.- se quejo Stiles al
ver llegar a Ethan y Allison.

-Bueno, es que nosotros no somos tontos Stiles, y estacionamos el auto alejado de la


escuela, no como otros.- contesto Ethan, por lo que los demás se miraron entre ellos.

-Si me disculpan, tengo que ir a hacer algo.- dijo Stiles, para luego salir corriendo, y
justo detrás de el, iba Aiden.

-Lo repito, estoy rodeada de genios.- dijo Allison con sarcasmo.- Puros genios.-

Tras unos breves minutos, los dos “genios” regresaron, tras eso, Stiles tomo el sopla
llamas que pidió “prestado” de la oficina de su padre, y poniéndose un casco de
protección, empezó con su trabajo, mientras los demás comentaba sobre las cosas que
habían encontrado sobre los hellhound.

-En si, nada de nada.- comento Tara y los demás asintieron.

-A este paso, va ser difícil sacarlos a todos de ahí.- comento Allison.

-Termine.- grito Stiles con alegría. Para que luego se escuchara como algo pesado
caía.

Al acercarse los chicos vieron un agujero mediano, por donde hasta los gemelos
podían entrar con tranquilidad. Siguiendo a Stiles, entraron a la bóveda de los Hale, y
lo observaron con rapidez.

-Bien, manos a las obra, a buscar los malditos libros.- dijo Stilinski, y cada uno de
sus amigos se dividieron y tomaron todos los libros que encontraron.

-Tal parece que nos quedaremos un buen rato aquí.- comento Tara, mientras se
sacaba la chaqueta y se quedaba simplemente con su polo manga cero, atrayendo la
mirada embobada de cierto gemelo hetero.

Stiles tomo el libro más cercano que tenia y lo abrió, pero no había palabras en este
libro, no, estaba lleno de fotos. Observo cada una de las imágenes, hasta que al llegar
a la pagina 10, vio la gran sonrisa de Derek, un pequeño Derek que era cargado por
su tío Peter.

El menor sonrió ante la imagen que se le mostraba, y anoto mentalmente, que debía
llevarse ese álbum a su casa, claro, después de devolver el sopla llamas “prestado”.
Dejando el álbum a un lado, tomo el siguiente libro, y este si hablaba de las criaturas
sobrenaturales, lo ojeo por un buen rato, hasta que por fin encontró lo que buscaba.

-Hey, aquí hablan de los hellhound.- anuncio, y al instante tuvo a todos sus amigos
rodeándolo.

-¿Que dice?- pregunto Allison.


-Pues habla de que los hellhound son protectores de lo sobrenatural, que es raro
encontrar a mas de tres, porque como viven por mucho tiempo, más que los lobos, no
hay muchos.- dijo Stiles mientras leía la pagina.

-¿Dice algo sobre como descongelar a uno de ellos?- pregunto Tara.

-Déjame ver, como detener a un hellhound, como se reproducen los hellhounds, hey,
dicen que hasta se pueden reproducir con lobos.- leyó Stiles con gracia.

-Stiles, al punto.- le recordó Ethan.

-Cierto, disculpen. ¿Como descongelar a un hellhound? Aquí esta.- dijo el humano


con una gran sonrisa.

-Ahora si, los de Eichen se han jodido.- dijo Aiden animado.- ¿Como lo hacemos?-

-La única manera de descongelar a un hellhound, es que otro hellhound lo haga.- la


sonrisa que tenia Stiles al iniciar la lectura se borro al leer el final.

-¿Como que otro hellhound?- pregunto Allison.- Solo conocemos a uno, y ese es el
que esta congelado.-

-En otras palabras, nunca podrán salir de Eichen.- dijo Aiden sentándose en el piso,
por lo que Tara se acerco y lo abrazo.

-Encontraremos una manera de sacarlos.- lo consoló la chica, a lo que el lobo tomo la


mano de la hermana de Theo, para luego dedicarle una sonrisa.

-Oigan, no hay que dar perdido nada.- dijo Allison.- Quizás haya otro hellhound en
Eichen, Jordan podría buscarlo. De igual forma, puedo hablar con mi padre y ver si
alguno de nuestros contactos saben sobre la existencia de algún hellhound.-

-Allison tiene razón, aun hay muchas cosas que debemos intentar.- dijo Stiles.- No
vamos a descansar hasta que todos estén libres.-

-¿Dices que tiene que hacerlo otro?- pregunto Jordan mientras conversaba por
teléfono con Ethan.

-Si, es la única manera de despertarlo- contesto el menor, siempre teniendo cuidado


de no hablar de más, no sabían quien podía estar escuchándolos.

-Mierda, no se si hay uno de esos aquí.-

-Pregúntale a padre, a Peter, a Lydia, ellos deben saber algo.- aconsejo Ethan.

-Si, eso haré, pero dejando eso, ¿como están? ¿Como esta Kali y Ennis?- pregunto el
guardia, pues eso quería saber su pareja.
-Todo tranqui, tío Ennis esta aprendiendo a cocinar, dice que no es justo que solo tía
Kali cocine, aunque en verdad creo que lo que intenta hacer, es tratar de salvarnos de
la horrible comida de tía Kali.- le contó el menor, haciendo reír levemente al mayor.-
¿Como esta padre? ¿Él y tú planean hacer más bebitos?-

-¿Disculpa? ¿Que dijiste?-

-Mas bebitos, no me molestaría tener uno o dos hermanos más.-

-Ethan, sabes que eso no es posible.- le dijo Jordan.

-Bueno, en Wattpad si lo es.- murmuro el menor.

-¿Que es Wattpad?- pregunto Parrish.

-Nada, olvídalo. Bueno, te dejo que tengo que ir a reunirme con Allison, tenemos que
entregar un trabajo juntos. Salúdame a papá, te quiero papi Jordan.-

-Y yo a ti pequeño. Adiós.-

Jordan colgó la llamada y camino de regreso a su celda, lo que había dicho Ethan le
había preocupado, ¿como iban a encontrar a otro hellhound? ¿Y si lo encontraban
fuera de Eichen? ¿Como iban a meterlo para que descongelara al otro hellhound?

-¿Y? ¿Como están los chicos?- pregunto Deucalion cuando sintió la presencia del
joven.

-Bien, dice que Ennis esta tomando clases de cocina.- le contó Jordan.

-Si, Kali no cocina tan rico. ¿Que te preocupa?-

-¿Como lo sabes? Sabes que, mejor ni me respondas. Los chicos averiguaron como
liberar al hellhound.- contó.

-Eso es genial, ¿que hay que hacer?- pregunto entusiasmado el alpha.

-Encontrar a otro hellhound.- contesto Parrish.

-Oh mierda, estamos jodidos. Aquí no hay otro hellhound.-

(Nota de la autora: ¿Estas seguro mi querido Deucalion? Ah, las vueltas de la vida
xD)
Capitulo 16

~Sueño~

-Jordan.- escucho el guardia en ese oscuro lugar.- Jordan.-

-¿Quien es?- pregunto Jordan intentando buscar al dueño de la voz.

-¿Quien soy? Ni yo lo se, solo puedo decirte que he estado contigo desde hace mucho
tiempo.- contesto la voz.

-¿Por que no puedo verte?-

-Porque no conoces mi verdadera forma, si yo me muestro, no sabrías como


imaginarme.- explico.

-Al menos ¿tienes un nombre?- pregunto Parrish.

-No, nunca me dieron un nombre.- contesto la voz.

-¿Puedo darte un nombre?-

-No veo porque no.-

-Mmmm, si dices que has estado conmigo desde hace tiempo, puedo llamarte Jorrish,
una unión de mi nombre y apellido.- propuso Jordan, a lo que Jorrish soltó una risa.

-Original, me gusta. Por cierto, me alegra que el lobo este con nosotros, siempre me
han gustado los lobos, pero nunca había podido encontrar uno, quien diría que lo
encontraría contigo.- comento Jorrish.

-¿Tú eres el que vive dentro de mi? ¿Del que me hablo Meredith?- pregunto Jordan.

-Si, esa chica es dulce y adorable, no merece ser tratada así.- comento el otro.- Pero
si, yo soy del que te hablo ella.-

-¿Que eres tú?-

-Soy lo que están buscando, soy la solución a todos sus problemas, soy el que liberara
a Halwyn, soy, no, tú y yo, somos uno. Somos un hellhound.-

~Fin Del Sueño~

Jordan se levanto con rapidez de la cama, notando que recién estaba amaneciendo, a
su lado, Deucalion lo tenia agarrado de la cintura, como si temiera perderlo.

Tratando de no despertar al otro, se libero como pudo del agarre de su novio y salio
de la celda, ¿su sueño era real? O es que ¿acaso estaba tan desesperado por buscar a
un hellhound que sentía la necesidad de creer que él mismo era uno?

-¿Que sucede?- Deucalion lo había atrapado entre sus brazos sin que el otro se diera
cuenta, y lo había devuelto a la celda.

-Tuve un mal sueño.- contesto Jordan tirándose un poco hacia atrás.- ¿Y tú? ¿Por que
te despertaste?-

-Porque no estabas a mi lado.- contesto el alpha con normalidad.

-¿No puedes dormir sin mi?- pregunto Parrish.- ¿No te estas volviendo un poco co-
dependiente?-

-Con alguien como tú, vale la pena volverse así.- dijo Deucalion con una sonrisa.-
¿Quieres contarme sobre tu sueño?-

-No, fue algo tonto, no es nada importante, mejor regresemos a la cama.- dijo Jordan
saliendo del abrazo de su novio, para luego tomarlo de la mano y llevárselo a la
cama.

-Creo que somos una pareja muy extraña.- comento el lobo.

-¿Por que lo dices?-

-Peter se burla de mi, diciéndome que ya debí haberte echo mio mas veces, se burla
porque solo lo hicimos una vez.- le contó Deucalion echándose al lado del guardia.

-Pues yo no tengo ningún problema en hacerlo otra vez.- comento Jordan como si
nada.

-Jordan, no me tientes.- amenazo el mayor.


-¿Que pasaría si lo hago?- pregunto el chico riendo.

El alpha no respondió ante lo dicho por su novio, si no, que en vez de eso, tuvo una
mejor idea, tomar el cuerpo del menor, que para el hombre, no pesaba tanto, y
ponerlo sobre el suyo, mientras que disimuladamente (si wey, ni tu te la crees) puso
sus dos manos en el suave y redondito trasero de su pareja.

-Oye, al menos avisa.- le riño Jordan.

-Voy a hacerte mio, ¿es suficiente ese aviso?- pregunto Deucalion.

-Claro que si.-

-¿Estas segura de esto?- pregunto Chris a su hija.

-Tenemos que encontrar una manera de sacarlos, y él es nuestra ultima esperanza.-


dijo Allison mientras miraba una puerta blanca.- Aquí vamos.-

-¿Quien es?- escucharon al entrar, y pronto vieron a un hombre sentado al lado de


una ventana, con varias bolas de papel tiradas en el piso.

-No sabes la alegría que me da verte así.- dijo Chris mirando con desprecio a su
padre.

-Ah, pero si es mi familia.- dijo Gerard a la vez que tosía en un papel.

-Créeme, no queremos ser tu familia.- dijo Chris.

-Pero igual, vienen a mi.-

-Si, pero es porque necesitamos información, si no quieres dárnosla, nos da igual,


pero recuerda quien paga tu hospitalización.- le recordó Allison con seriedad.

-Toda una Argent.- halago su abuelo.

-No quiero tu halago, bien ¿que has decidido?- la chica no estaba para juegos.

-Bien, daré mi información, ¿que quieren saber?- pregunto el hombre.

-¿Cuantos hellhounds conoces?- pregunto Chris.

-¿Aquí en Beacon? Uno, el que esta congelado en Eichen.- contesto Gerard.

-¿No hay otro por ahí? Que no este en Eichen.- pregunto Allison.

-Es muy difícil encontrar a mas de un hellhound, no son muy populares, incluso los
lobos creen que son de mal augurio.-
-Entonces, no hay ninguno cerca.- dijo Chris a su hija, a lo que ella hizo una mueca.

-No, piensa viejo, debe haber alguno que hayas conocido, y que no este muerto o
encerrado.- insistió la chica.

-Oí un rumor (ja, referencia), de que hace tiempo un oficial del ejercito estuvo
desarmando una bomba, pero no logro hacerlo a tiempo, y estallo, lo curioso es que
sus compañeros aseguran que se levanto y se fue caminando, cuando intentaron
detenerlo, vieron fuego en sus ojos.-

-¿Quien era?- pregunto su hijo interesado.

-Ni idea, el ejercito no quiso soltar su nombre, pero sus iniciales eran J.P.- contesto el
viejo.- ¿Por que buscan un hellhound?-

-No es de tu incumbencia.- dijo Allison alejándose del hombre.- Va ser difícil


encontrar a ese hombre.-

-Si, pero algo es algo.- contesto Chris, para luego mirar a su padre.- ¿Cuanto tiempo
te queda?-

-Medio año más, eso dicen los doctores.- contesto Gerard.- ¿Le darás un abrazo a tu
padre?-

-No, una noticia.- dijo el hombre con una sonrisa.

-¿Noticia?- pregunto el anciano, a lo que Allison sonrió.

-Felicidades, tienes un yerno.- dijo Chris a lo que su padre frunció el ceño.

-¿Kate?-

-No padre, yo, si estoy saliendo con un hombre, y no es cualquier hombre, es una
quimera.- dijo el cazador.

-Christopher, no puedes hacerle esto a la familia, no puedes unirte con una rata como
esa.-

-La única rata aquí eres tú, y si, me uniré a mi quimera, se convertirá en mi esposo, y
en padre de Allison.- recalco Chris.

-Genial, ya hasta le digo papi.- dijo Allison para luego salir del cuarto.

-Disfruta el infierno Gerard.- dijo Chris para luego cerrar la puerta.

-No veo la hora de salir de aquí.- se quejo Peter mientras tenia sentado en sus piernas
a su pequeño novio.
-Hay que tener paciencia, mira que no es fácil encontrar a un hellhound.- le recordó
Derek, quien estaba apoyado en la pared.

-Derek tiene razón, por cierto, ¿donde esta Cora?- pregunto Malia.

-Ah, por allá, intenta conversar con esa chica.- dijo el lobo señalando a una mesa.

Efectivamente Cora estaba hablando con una chica de cabello negro y mirada
perdida, pero de vez en cuando se fijaba en la loba, que hablaba de cualquier cosa.

-¿Y esa chica quien es?- pregunto Lydia.- Es nueva, ¿verdad?-

-Si, llego hace poco, es la ultima quimera que llego.- dijo Theo apareciendo al lado
de Derek.- La pobre no la esta pasando bien.-

-¿Quien la pasa bien aquí?- pregunto Malia.

-Lo se, pero a ella le inculparon la muerte de su hermano, la anterior ayudante del
sheriff.- contesto Theo.

-¿Que paso con su hermana?- quiso saber Deucalion.

-Según el testigo, ex novio de su hermana, Hayden se transformo y la mato, porque le


dijo que iba a meterla en Eichen.- comento la quimera.- Pero, es mentira.-

-¿Que dijo Hayden?- pregunto Peter.

-El novio era un lobo, su hermana había terminado con ella y ese día le había pedido
hablar con ella a solas, obvio que la mujer fue con Hayden, cosa que el otro no sabia,
intento violarla, y pues Hayden salio en defensa de su hermana, el tipo logro
vencerla, y al ver sus garras, mato a la mujer y culpo de todo a Hayden.-

-Que tipo más asqueroso, si salimos, lo buscare y lo matare.- dijo Peter, y varios
asintieron.- Ahora, alpha de alphas....-

-No soy alpha de alphas, Peter.- interrumpió Deucalion.

-Vamos, es una bromita, sabes que te quiero, pero ya, ¿me puedes decir porque
nuestro Jordan no esta aquí entre nosotros?- siguió Peter.

-¿Nuestro Jordan?- pregunto el alpha más adulto con una mueca.

-Si, si, si, es tu Jordan, pero también nuestro, lo queremos.- explico el otro lobo.- No
me des vueltas, dime ¿donde esta?-

-En la puerta, dijo que ayudaría a su amigo a cuidar.- explico el alpha, y todos
miraron hacia la puerta, y era cierto, ahí estaba el joven guardia.

-¿Se pelearon?- pregunto Liam preocupado.


-No, pero esta extraño desde hace días, como si algo lo aquejara.- contesto
Deucalion.

-¿Has hablado con él?- pregunto Derek.

-Lo intente, le pregunte que le pasaba, y solo me dice, son cosas de mi cabeza, no es
algo que deba preocuparte. Pero si preocupa, ayer no durmió conmigo, si no que lo
hizo en su cama.-

-Ok, eso ya es serio.- dijo Peter.- Mi shipp favorito no puede terminar tan rápido.-

-Oh Dios, Peter.- se quejo Liam.

-¿Que es un shipp?- pregunto Lydia.

-Es cuando eres seguidor o admirador de una pareja, ¿han oído del Larry Stylinson?-
pregunto el alpha.

-Yo si.- dijo Malia.- Es la pareja de Louis Tomlinson y Harry Styles, de One
Direction.-

-Bueno, eso es un shipp, una pareja que te gusta seguir, y yo amo el Deurrish, osea,
ellos son vida, y también es lo único divertido que pasa aquí.-

-¿Deurrish?- pregunto Deucalion.- Espera, ya lo entendí.-

-¿Nosotras como nos llamamos?- pregunto Lydia interesada.

-Malydia, da. El mejor shipp de lesbianas del mundo, una pelirroja y Malia.- dijo a lo
que la mencionada le saco la lengua.- Derek y Stiles son Sterek, candentes y
cariñosos.-

-Peter, cállate o te mato.- amenazo Derek.

-Ya no aguantan nada, es mi única diversión, no es mi culpa que aquí a todos se les
moje la canoa.- se quejo el Hale.

-Liam, ¿y con él quieres casarte?- le pregunto Theo, a lo que el chico sonrió.

-Si Theo, a parte es adorable.- dijo Liam para luego mirar a su novio a los ojos.- ¿Y
nosotros?-

-Piam Halebar, la perfecta combinación de nosotros dos.- dijo Peter mirándolo


también.

-Me encanta.- comento Liam antes de besarlo.

*
-Buenas noches.- dijo Jordan cerrando la puerta de la celda.

-Jordan, ¿que es lo que pasa contigo?- pregunto Deucalion sentado en su cama.

-Nada, ya te lo dije.- contesto el guardia.

-¿Ya no me quieres?- pregunto el alpha con miedo, y si lo tenia, había encontrado al


hombre perfecto y ahora podía perderlo, humanos.

-¿Que? No, claro que no, yo te quiero mucho Deucalion.- dijo Jordan con seriedad.

-Entonces, ¿que es lo que te pasa? Necesito saber porque mi novio esta tan esquivo,
porque ya no quiere dormir conmigo, si hice algo malo. Necesito respuestas.-

-No se que me pasa, desde hace días estoy que tengo este sueño y esta cosa me habla,
pero no solo en sueños, también lo hace cuando estoy despierto.- se quejo Parrish.

-¿De que cosa hablas? ¿Quien te habla?- pregunto el alpha preocupado.

-Yo lo llamo Jorrish, dice que esta conmigo desde la explosión en Afganistán.-
explico el menor.

-¿Explosión?-

-¿No te conté? Estaba desarmando una bomba, pero no logre hacerlo a tiempo, así
que explote. Mis compañeros me contaron, que tras eso me levante y salí caminando
como si nada, que intentaron detenerme, pero nada funcionaba, hasta que me
noquearon. Sinceramente no recuerdo nada de eso, solo recuerdo haber despertado en
la enfermería, con todo ok, no tenia fracturas, ni huesos rotos, ni quemadas, nada,
estaba bien. A pesar de eso, me sacaron del ejercito.-

-Jordan, ¿puedo entrar a tu mente?- pregunto Deucalion.

-¿Como dices que dijiste?- pregunto el guardia. (referencia)

-¿Que si me dejas entrar en tu mente? Puedo hacerlo a través de mis garras, tranquilo,
tengo mucha experiencia haciendo esto, no te haré daño.- explico el mayor.

-Bueno, pero antes de que lo conozcas, él me dijo una cosa más.- dijo Jordan.

-¿Que cosa?-

-Que él nos ayudaría a descongelar a Halwyn.- contesto el guardia.

-¿Y como podría hacerlo?- pregunto el alpha incrédulo.

-A través de mi, soy un hellhound.-

*
-Así que el alpha al fin se digno a venir.- dijo una voz en la oscuridad.

-¿Eres Jorrish?- pregunto Deucalion.

-Ah, Jordan te dijo sobre mi divertido nombre, si, soy Jorrish.- contesto la voz.

-Entonces, ¿es cierto? ¿Jordan es un hellhound?- pregunto el alpha.

-Efectivamente.- contesto la voz.

-¿Como paso esto?-

-Los hellhound somos entes que necesitamos habitar un cuerpo para sobrevivir y
adaptarnos. Mi ultimo cuerpo fue un hombre de Afganistán, buen tipo, pero era viejo
cuando entre en él, su cuerpo no iba a servirme por mucho tiempo. Y así fue, el
cuerpo marchito y tuve que salir de él.-

-¿Eso le pasara a Jordan?- pregunto Deucalion preocupado.

-No, Jordan es joven, su cuerpo es mas fuerte, poco a poco lo voy convirtiendo en
alguien inmortal, vivirá mucho tiempo.- contesto Jorrish.

-¿Por que lo escogiste a él?-

-Deambulaba sin sentido, esperando encontrar un cuerpo de algún soldado que me


fuera de utilidad, y entonces lo vi, Jordan estaba desarmando una bomba, vi su rostro,
y me vi en él.-

-¿A que te refieres?-

-Me vi, era yo, Jordan era la viva imagen de mi cuerpo original, sabia que tenia que
ser él, él era el indicado. Segundos antes de que la bomba explotara entre en su
cuerpo y me apodere completamente de él, por eso cuando la bomba exploto, Jordan
no salio lastimado, había activado mi poder de hellhound, y lo había salvado.-

-Le dijiste a Jordan que querías ayudar a liberar a Halwyn, ¿es cierto?-

-Claro que si, Halwyn es mi hermano, y no quiero que siga en este sitio, fue por esa
razón que traje a Jordan a Beacon Hills, para liberar a mi hermano.- contesto el
hellhound.- Pero eso si, sería la única que vez que me mostraría como hellhound, mi
vida de defender a lo sobrenatural ya acabo, prefiero descansar, liberare a Halwyn y
eso sera todo.-

-Eso sera suficiente.-


Capitulo 17

-Dices, ¿que Jordan es un hellhound?- pregunto Peter sorprendido.

-Así es.- contesto Deucalion con tranquilidad.

Tras su breve conversación con el hellhound de Jordan, Deucalion le contó todo a su


pareja, como era obvio, el menor termino sorprendido, y molesto, pues todo este
tiempo habían estado buscando un hellhound, y él lo era.

-¿Y por que no lo dijo antes?- pregunto Theo.

-Porque no lo sabia, recién el hellhound se ha manifestado.- explico el alpha.- Pero


eso no importa ahora, el hellhound me ha dicho que solo tomara control del cuerpo
de Jordan una vez, para liberar a Halwyn, porque después de eso, no volverá a salir
jamás. Así que hay que aprovechar la ocasión.-

-Bien, ¿cual sera el plan?- pregunto Lydia.

-Yo lo se.- dijo Jordan apareciendo de la nada, asustando a la mayoría.

-No hagas eso.- le dijo Liam agarrándose el pecho.

-Lo siento, pero los escuche hablar, y yo se como sacar a Halwyn.- dijo el guardia.

-¿Nos escuchaste desde allá?- pregunto Malia, señalando la puerta principal del lugar,
que estaba hasta el otro extremo.

-Aún estoy acostumbrándome a mis nuevas habilidades, no quise espiar.- se disculpo.


-No, esta bien Jordan. Dinos, ¿cual es tu plan?- pregunto Derek.

-Miren, el lugar donde tienen a Halwyn y los otros, no se rige por la energía eléctrica
que alimenta Eichen, creo yo, para evitar en un caso de corte de luz, que esos internos
escapen.- explico Jordan y todos asintieron.- Así que, para sacar a Halwyn,
necesitamos entrar ahí, y cortar la electricidad, así podre sacarlo con tranquilidad.-

-Pero, piensen, si no desconectamos la luz de Eichen, sera muy difícil ayudarte a


controlar a los otros internos.- pensó Theo.

-Mierda, es cierto. ¿Que haremos ahora?- pregunto Liam preocupado.

-Yo puedo ocuparme de los dos.- se ofreció Kira- Pero sera difícil pasar hacia la sala
de mantenimiento sin que me vean.-

-Cierto.- dijo Lydia.- Porque después de hacer eso Kira, necesitaría volver, para
cortar la energía del lugar donde esta Halwyn, y va a ser difícil, con todos los
internos y guardias que habrán desperdigados por todos lados.-

-Creo que alguien puede ayudarnos con eso.- dijo Theo, para luego alejarse del
grupo, mientras conversaba con un grupo de chicos.

-¿Que hace?- pregunto Cora mirando curiosa.

-Son quimeras.- dijo Hayden, quien estaba sentada al lado de la loba.

-¿Lo son?- pregunto Peter.- Creí que las únicas quimeras aquí, eran Theo y tú.-

-No, somos muchos, son los tres chicos que encontraron, cuando mataron a los
doctores, se que la chica es mitad Kanima, uno de los chicos es una quimera y el otro
es un kitsune eléctrico.- explico Hayden.

-¿En serio? ¿Por que nos enteramos recién?- pregunto Peter indignado.- Oigan, ya
debemos dejarnos de secretos.-

-Nosotros nos enteramos hace unos días, Theo hablo con ellos, ya sabes, todos
pasamos por los doctores, y él intento hacer amistad con ellos, y funciono.- contesto
la chica.

Theo termino de hablar con los chicos y se acerco con dos de ellos.

-Ellos son Corey y Josh, nos ayudaran.- dijo Theo, a lo que los otros chicos dejaron
salir una sonrisa.

-¿Y que hacen ellos?- pregunto Deucalion.

-Corey puede camuflarse él y a otros, eso nos ayudaría a llevar a Kira hasta arriba,
para que pueda cortar la luz principal, mientras Josh se encargara de arruinar la luz de
las celdas de abajo.- dijo la quimera orgulloso de su plan.
-Excelente, con esto, solo tenemos que cuidarnos de los guardias.- dijo Peter.-
Mientras no nos topemos con ninguno de ellos, no habrá problema alguno.-

-Bueno, entonces hay que alistarnos. Peter, tú que tienes a Liam contigo, enséñale
discretamente a defenderse.- indico Deucalion.- Jackson, tu paralizante podría
servirnos mucho.-

-Por supuesto, pero estoy muy alejado de ustedes, casi al comienzo de la entrada, va a
ser difícil que llegue a ustedes.- dijo el menor.

-No hay problema, yo estoy cerca de Jackson.- dijo Hayden con tranquilidad.- Puedo
ayudarlo.-

-Y yo, puedo hacer algo también.- dijo Lydia llamando la atención de todos.- Bueno,
puedo gritar muy fuerte.-

-Esa es mi chica.- dijo Malia abrazándola.

-¿Cuando lo haremos?- pregunto Jordan, cuando Deucalion le contó sobre el plan.

-Queremos que sea una noche lluviosa y de tormenta, para que no piensen que pudo
haber sido Kira.- explico el alpha.- ¿Como podremos sacar a Kira? Tú no puedes
alejarte de mi.-

-Y si le digo a mi amigo, bueno, esta buscando una manera de ser despedido.-


comento Jordan a lo que el otro lo miro.- Ya se canso de estar aquí.-

-Bien, él puede ir a sacar a Corey y luego a Kira.- dijo Deucalion.

-Iré a hablar con él, espera aquí.-

Jordan salio de la celda y camino hasta su amigo, él único guardia que le caía bien.
Con disimulo lo llamo y este se acerco.

-Y ese es el plan.- le dijo al terminar todo.

-¿Como pasare por la puerta sin que sospechen?- pregunto el otro.

-Mira, saca a Corey y Kira, ellos se harán invisibles, luego cuando estés por llegar a
la puerta, hazte el agitado y di, que viste dos celdas vacías en la sección más alejada,
que por la tormenta no podías comunicarte.- explico Jordan.- Lo más seguro es que te
pidan que te quedes y ellos vayan a ver, entonces, llevas a los chicos arriba.-

-Bien, puedo hacer eso. Pero, se activara el circuito de cerrado, y ahí si no podremos
salir.- dijo el guardia.
-Tranquilo, alguien se encargara del circuito, tengo hombres afuera.- dijo Jordan y el
otro asintió.- Te avisare cuando ocurra todo.-

-Estaré listo.-

Tras eso, Jordan volvió a la celda, y usando su celular, le envió un mensaje detallado
a los gemelos, ellos se encargarían del mecanismo de cierre de Eichen, y luego
entrarían a ayudar, junto a Kali y Ennis, y cierto grupo de policías que el sheriff
llevaría.

-Todo listo.- dijo Jordan sentándose en la cama de la celda de Deucalion.

-Al fin podremos salir de aquí.- dijo Deucalion con una sonrisa.- Seré libre.-

-Bueno, ¿por que no disfrutamos de esta noche?- propuso Jordan a la vez que iba
hacia su cama y tomaba la sabana, con un poco de ingenio, tapo las paredes
transparentes de la celda de su novio.

-Jordan, ¿que tramas?- pregunto el alpha.- Sabes que no veo.-

-Pues activa tu vista de alpha, y mira mi travesura.- respondió el guardia.

Obediente, Deucalion cambio el color de sus ojos y visualizo a su novio parado frente
a él, totalmente desnudo, por lo que el alpha trago saliva, aún con el color rojo,
Jordan se veía erótico.

-Que travieso eres, pequeño Jordan.- lo alago.

-Y eso no es todo.- respondió Parrish, y teniendo cuidado al agacharse, se arrodillo


frente al alpha.- Párate.-

Deucalion hizo caso, y en un segundo, su pantalón y calzoncillo estuvieron en sus


pies, por lo que se deshizo de ellos rápidamente. Con un suave empujón, Jordan lo
hizo sentarse de nuevo.

-Solo disfruta querido.- dijo el guardia, para luego tomar entre sus manos, el gran
miembro erecto del alpha

-Rayos Jordan.-

El alpha se recostó levemente, mientras observaba como su joven pareja, empezaba a


lamer su miembro, casi hasta parecía disfrutarlo, y él, bueno, también lo estaba
disfrutando.

-Alguien esta muy animado hoy.- dijo Jordan levantándose.

-¿Que rayos te paso?- pregunto Deucalion, pues esta era una nueva faceta de su
novio.

-¿No te gusta como me comporta ahora?- pregunto Parrish bajando su cara.


-No, no, no, me encanta, pero ¿que paso con mi Jordan?- el alpha lo miro.

-Quise probar algo nuevo, ¿esta bien?-

En vez de contestar, Deucalion se levanto y tomo el rostro del más alto, en ese
momento, no le gustaba mucho el echo de que Jordan fuera mas alto que él por
centímetros. Levanto el rostro del menor y le sonrió, para luego acercarlo y besarlo
profundamente.

-Todo de ti, incluso tus ideas me encantan.- dijo cuando se separaron.

Jordan sonrió ante lo dicho por su pareja, para luego echarse en la cama y levantar
sus piernas, esperando a su pareja.

-¿No quieres que te prepare antes?- pregunto el alpha.

-¿No se supone que me curo?- pregunto el guardia con una sonrisa.

Deucalion gruño como respuesta y se lanzo hacia la cama, se posiciono entre las
piernas de su pareja y con su miembro en mano, empezó a tantear el “terreno”,
cuando encontró el “tesoro”, empezó a introducirse lentamente, observando como su
novio se mordía los labios, no quería lastimarlo, pero necesitaba entrar en el lo más
pronto, o moriría de angustia. No sabia que necesitaba tanto tener este momento con
su joven novio.

Con un empuje fuerte, termino de entrar en el cuerpo de su novio, y se quedo quieto,


intentando no venirse en ese momento, (bueno, ¿que esperaban? El pobre no había
tenido sexo desde hace rato).

-Muévete ya.- gimió Jordan mientras clavaba sus uñas en el colchón.

Ni corto ni perezoso, Deucalion empezó a moverse, pero no lento, no señor, él se


movió tan rápido y fuerte, como si de eso dependiera su vida. Mientras que Jordan no
podía dejar de gemir, se estaba haciendo sangrar los labios, de tanto tener que
aguantar los gritos que obviamente quería dejar salir.

Hasta que en una fuerte embestida del alpha, el joven guardia dejo de morderse y
pego un grito lleno de éxtasis, que hasta Deucalion pensó que Peter, quien estaba
bastante alejado, lo había oído. Tras eso, Jordan ya no se guardo nada y empezó a
gemir sin restricciones, luego cambiaron de posición (la perrito wey), y después de
unos minutos, Deucalion se vino en el interior del joven, quien en esa posición, dejo
caer su cuerpo en la cama.

-¿Estas bien?- pregunto Deucalion sin salirse.

-Estoy muerto.- dijo Jordan echado en el colchón, mientras las gotas de sudor caían
por sus parpados.- Si que no te controlaste nada, pregunta ¿por que me arde la
espalda?-
-Lo siento, por la excitación termine arañándote levemente.- dijo Deucalion mientras
miraba las rasguñada espalda de su novio con una mueca.- Lo bueno, es que pronto
desaparecerán.-

La lluvia caía como aguacero, los rayos iluminaban los oscuros pasillos de Eichen, y
el fuerte viento movía los arboles afuera del lugar. Jordan observaba todo desde su
celda, estaba nervioso, esa era la noche, esa noche todos serian libres.

-¿Listo?- pregunto su compañero acercándose.

-No, pero hay que hacerlo de una vez.- dijo Jordan.- Hora de actuar.-

-Bueno Jordan, iré a dar mi vuelta.- dijo el otro guardia un poco más alto, y se fue
caminando.

Camino varios minutos, hasta que llego hasta donde estaba la celda de Corey y la
abrió, para luego hacer lo mismo con la de Kira.

-¿Puedes sostenerlo por mucho tiempo? No se cuanto nos vamos a tardar.- dijo el
hombre a la quimera.

-Si, puedo hacerlo.- dijo seguro el menor.

Con un asentimiento de cabeza, Corey tomo de la mano a Kira y ambos


desaparecieron, con un poco de temor, el guardia siguió avanzando, hasta que llego a
la puerta principal donde dos guardias se encontraban vigilando.

-Andrews, ¿que haces aquí?- pregunto uno de los guardias.

-Me turne con Parrish para hacer un recorrido, y vine lo más rápido posible, las
celdas de Yukimura y Bryant están vacías.- dijo todo agitado. (que buen actor)

-Mierda, esos dos no pueden estar libres.- dijo el otro.- Andrews quédate aquí,
mientras nosotros vamos por esos dos.-

-Si señor.- dijo el guardia y se aseguro que ambos estuvieran afuera, para luego pasar
su tarjeta por la ranura de la puerta.- Vamos chicos, pasen ustedes.-

Espero unos segundos y cuando sintió un toque en su brazo, supo que ellos ya
estaban afuera. Se apresuro en caminar hacia el segundo piso esperando que los
chicos lo siguieran, pero al querer entrar al cuarto de las redes eléctricas, se
encontraron con la mujer que recepcionaba Eichen.

-Andrews, ¿que haces aquí?- pregunto la mujer.

-Lo siento, pero tengo que ayudarlos.- dijo el guardia abriendo la puerta, por lo que
Corey dejo a Kira y ambos quedaron a la vista de la mujer.
-No se de que hablas, porque yo no vi nada.- dijo la mujer como si nada,
sorprendiendo a los tres.- Suerte.-

-Rápido chicos.- dijo Andrews, cuando la mujer se fue.

Kira entro junto a Corey y miro el panel, solo tenia que sobrevolar los controles, la
luz se iría y lo demás dependería de los otros.

-¿Lista?- pregunto Corey, si algo no salia bien, todo se iría a la mierda.

-Estoy lista.- dijo la kitsune mientras ponía sus manos en los cables, sin que estos la
dañaran, cerro los ojos por unos momentos.

Corey quien miraba todo, vio como la electricidad emanaba de las manos de la chica
e iba directo a los gruesos cables, para que luego la corriente empezara a bajar, hasta
que después todo se apago.

-Chicos, salgan ya.- dijo Andrews en medio de la oscuridad, mientras intentaba que
la puerta no se cerrara.

El camaleón tomo a Kira, despegándola de los cables y la jalo hacia afuera del cuarto,
antes de que la puerta se cerrara

-Bien, esperemos que todo les vaya bien a los demás.- dijo Andrews mientras cargaba
su arma, esperando no tener que usarla alguna vez.

-Es hora.- dijo Deucalion cuando las luces se apagaron.

Jordan salio de la celda acompañado de Deucalion, varios internos pasaron frente a


ellos, seguidos de algunos guardias quienes al ver a Jordan junto al alpha, intentaron
atacarlos, pero no contaron con que atrás de ellos estaba Jackson y ya los había
paralizado.

-Bien hecho Jackson.- dijo Jordan al ver caer a sus compañeros de trabajo.

-Es bueno ser de utilidad.- dijo el chico con una sonrisa.

-Suéltenme.- los tres se giraron y vieron como dos guardias tenían agarrado a Josh.

-Jackson, veamos que tan hábil eres con esa cola.- propuso Deucalion.

El menor sonrió ante lo dicho por el hombre, y empezó a correr hacia los guardias,
quienes al verlo llegar, soltaron a Josh y quisieron sacar sus armas, pero la cola del
ex-kanima se les adelanto y con un rápido movimiento las voto hacia las paredes.

-No debieron hacer eso.- dijo el chico parándose frente a ellos, para luego mostrarles
sus garras.- Créanme, esto me llena de mucha satisfacción.-
Con una rápida maniobra, clavo las garras en los brazos de ambos hombres, para que
luego estos se cayeran al suelo.

-Amigo, das miedo.- le dijo Josh a lo que Jackson se encogió de hombros.

-Vamos chicos.- dijo Jordan llamando la atención de los dos.

Los cuatro se encaminaron hacia la parte subterránea de Eichen, era momento de


liberar a cierto hellhound. Al llegar, Josh abrió la puerta de los cables eléctricos y
miro a los otros.

-Tu puedes.- lo animo Parrish.

Tomo los cables y pronto de estos empezaron a salir electricidad que se extendió por
todo el cuerpo de la quimera, estaba lográndolo, hasta que la luz roja dentro del
cuarto se prendió.

-Bien hecho Josh.- lo felicito Deucalion.

La puerta se abrió y el alpha junto al guardia entraron, al bajar, las otras celdas
estaban abiertas, pero ninguno de los internos había salido, extrañado, Jordan se giro
a mirar a Meredith.

-Les dije lo que sucedería, y no quieren interrumpir. Suerte.- explico la chica.

Deucalion se puso frente a la gran puerta metálica y la miro, para luego mirar a su
pareja, tenía que transformarse en su forma final de alpha, si no, no podría abrir la
puerta. Se quito las gafas y empezó a cambiar, su piel empezó a cambiar de color a la
vez que su cara tomaba forma entre un rostro humano y uno animal, sus músculos se
agrandaron un poco más, y sus garras crecieron aún más.

-Wow.- fue lo único que salio de la boca de Jordan.

Sin mucho tiempo, Deucalion cerro sus puños y golpeo con fuerza la puerta,
haciéndole dos hendiduras, de donde se agarro y ejerciendo bastante fuerza la quito
lanzando-la al piso, el aire helado los envolvió.

-El bloqueo se abrió.- informo Jackson desde la puerta.

-Es tu turno amor.- indico el alpha.

Jordan entro a la celda, que más parecía el polo norte, y ahí en el medio, estaba una
especie de escultura de hielo, era el otro hellhound.

-¿Estas listo?- pregunto Jordan.

“Déjame todo a mi”, respondió el hellhound.

Desde la puerta, Deucalion observo como su novio se empezaba a incendiar,


literalmente, estaba ardiendo en llamas. Para luego ver como se acercaba a la
escultura de hielo y poco a poco la derretía, hasta que el hombre congelado, se
levanto mostrando sus ojos de hellhound. Lo habían logrado, habían liberado a
Halwyn de su prisión, pronto todos serían libres.

Capitulo 18

-¿Halwyn?- llamo Deucalion al otro hellhound.

El mencionado miro al alpha, y luego miro al otro hellhound que estaba en frente de
él, parpadeo varias veces, para que luego de un momento a otro, elevara su brazo y
empezara a ahorcar a Jordan.

-Deucalion.- grito Jordan.

Con gran rapidez, el alpha clavo sus garras en la nuca del hellhound, mostrándole
todo lo que habían vivido en Eichen, desde que había sido congelado. Tras unos
segundos, Deucalion saco sus garras agitado, siendo recibido por su novio.

-¿Que hiciste?- Jordan había vuelto a la normalidad.

-Le mostré todo, todo lo que hemos vivido en Eichen.- contesto Deucalion.- Abra que
ver si me ha creído.-

Parrish observo como el otro hellhound mantenía aún los ojos cerrados, como si
estuviera procesando la reciente información, se notaba calmado, pero aún así, su
hellhound se mantenía alerta, por si ocurría algún ataque.

-¿Donde esta?- pregunto Halwyn, asustando a los otros dos.

-¿Disculpa?- pregunto Jordan.

-¿Donde esta el hijo de puta que me metió aquí?- pregunto de nuevo, pero esta vez se
giro a mirarlos.

-Lo más seguro es que debe estar escondiéndose como la rata que es.- dijo Deucalion
parándose.

-Debe estar en su oficina, bueno, en tu oficina.- corrigió Parrish.

-Lleven me a él.- pidió el hellhound.

Jordan miro a su novio, quien asintió, si querían salir de ese lugar, tenían que ayudar
a Halwyn. Los tres salieron del lugar, encontrándose en la puerta con Josh y Jackson,
quienes al ver al legitimo dueño de Eichen, se hicieron para atrás.

-¿Quienes son ellos?- pregunto Halwyn, mirando a los chicos.

-Jackson y Josh, ellos ayudaron en tu liberación.- explico Deucalion.

Halwyn se acerco a Jackson, quien lo miro directamente, para luego alejarse y mirar a
Josh, quien temeroso no bajo la vista en ningún momento.

-Son buenos chicos, ¿por que están aquí? Ninguno tiene aura de asesino.- comento el
hellhound.

-Resumiendo, a Jackson lo dejaron aquí sus padres, y a Josh, él fue traído tras la
muerte de sus creadores, los doctores del miedo.- explico Jordan.

-¿Aún siguen dando molestias esos?- pregunto el hellhound, mientras seguían


avanzando.

-¿Los conociste?- pregunto Deucalion.

-Los vote de Eichen en más de cinco ocasiones, pero insistían en volver. ¿Que les
paso?-

-Los mataron.- contesto Jordan.

-Eso me alegra.-

Siguieron su camino, encontrándose en cierto momento con Peter, quien estaba


apoyado en la puerta de una celda.

-¿Que haces Peter?- pregunto Deucalion.

-Evito que algunos inútiles escapen- contesto para luego patear la puerta.- Dieron un
poco de trabajo, pero todo esta controlado.-

-¿Y Liam?- pregunto Jordan al no ver al menor.

-Él esta con Derek, los esperan arriba, atraparon a la rata mayor.- comento,
refiriéndose al director.

-Gracias por el aviso.- agradeció Halwyn.


-Ah, por cierto, los Argent están custodiando la puerta principal.- añadió Peter
mientras los otros se iban.

-¿Quienes son los Argent?- pregunto el hellhound.

-Son una familia de cazadores, que nos ayudan.- añadió rápido Jordan.

-Ya veo, ¿no son malos?-

-Bueno, solo uno, pero ya se esta muriendo.- comento Deucalion.

Siguieron avanzando hasta que llegaron a la puerta que los llevaría hasta la recepción,
Theo sonrío al verlos pasar, lo mismo con Corey y Kira, quienes levantaron los
pulgares en señal de que todo estaba bien.

-Deucalion, ¿es él?- pregunto Derek al verlos llegar.

-Si, ¿donde esta ese idiota?- pregunto el alpha.

-Con Liam y Chris, esperándolos.- les dijo y les abrió la puerta hacia la oficina del
director.

-Exijo que me dejen salir de aquí.- dijo el hombre mirando a Liam y a Chris.- La
policía llegara pronto, y todos ustedes, estarán confinados sin poder salir, y a usted,
Argent, lo espera la prisión.-

-Al único que le espera la prisión es a usted, y eso, si es que él decide enviarlo a la
prisión.- dijo Chris sonriendo.

-¿De quien hablas?- pregunto el hombre.

-De quien tiene muchas ganas de hablar contigo, hace mucho tiempo que quiere
hablar contigo.- respondió Liam con una sonrisa.

Antes de que el director pudiera seguir hablando, tocaron la puerta, a lo que Liam se
acerco a abrir la puerta.

-Hey, lo lograron.- dijo el menor, al ver al otro tipo parado con ellos.

-Tú tampoco tienes ojos de asesino, ¿por que estas aquí?- pregunto Halwyn.

-Mi madre me metió aquí.- respondió el menor. - Pero no importa, después de todo,
aquí encontré algo mejor.-

Halwyn asintió y entro al cuarto, al verlo, el director se pego a la pared, en sus ojos se
podía ver el terror.

-No, no, no, ¿que fue lo que hicieron? ¿Por que lo liberaron? ¿Como pudieron
liberarlo?- pregunto el hombre intentando camuflarse con la pared.

-Gracias a mi.- confeso Parrish mirándolo.- Sin querer, contrataste a un hellhound.-

-¿Que?-

-Y lo liberamos, porque no merecemos el trato que nos das.- contesto Deucalion.

-Te atreviste a congelarme, y usurpar mi lugar, y no contento con eso, metiste a gente
inocente a este sitio, sabiendo bien, que Eichen fue echo para los asesinos.- Halwyn
se impuso ante el hombre.

-Todos ellos son monstruos, ninguno es inocente. Monstruos como tú, deben ser
encerrados para siempre.- dijo el hombre.

-Llévense al niño, no quisiera que vea lo que va a pasar.- pidió Halwyn.

-Chris, llévate a Liam.- pidió Deucalion.

El cazador tomo al beta del brazo y lo saco de la habitación, mientras que Deucalion
y Jordan se quedaban en una esquina, después de todo, Halwyn no les había dicho
que se fueran.

-Jordan, que tu hellhound proteja a Deucalion.- dijo el otro.

-No creo que pueda hacerlo, me dijo que solo mostraría su poder para liberarte, y
luego volvería a dormir.- explico Parrish.

-Pues, si no lo protege, su novio se va a quemar.- advirtió Halwyn.

“Me haré cargo”, respondió el hellhound de Jordan.

-Bien, dice que se hará cargo, al parecer las amenazas funcionan con él.- dijo Jordan.

Halwyn asintió ante lo dicho por el otro hellhound, y se fue acercando lentamente
hasta el por el momento, aún director de Eichen.

-Vas a pagar todo lo que le hiciste a estas personas, porque querido, yo lo se todo
ahora. Se los maltratos que mandaste que hicieran a la banshee, de como defendiste al
que estuvo a punto de violar al chico.- dijo el hellhound acercándose más.

-Aléjate de mi.- pedía el hombre.

-No, lo que te va a pasar, te lo mereces, nunca más volverás a atormentar a alguien en


tu vida.-

Deucalion, uso su vista de lobo y observo como Halwyn se empezaba a encender, las
llamas quemaban los papeles que estaban cerca, hasta el mismo alpha sentía el gran
calor de la habitación.
-Inteligente, la habitación conserva el calor, pero no permite que se incendie.-
observo Jordan, o mejor dicho Jorrish.- Bien, llego el momento de cubrirte, ¿podrías
hacerte bolita?-

-¿Disculpa?- pregunto Deucalion extrañado.

-Halwyn va a quemar a ese hijo de perra, y no quiero que te quemen, seré tu escudo
anti quemaduras, ahora, hazte bolita.-

Mientras el alpha ciego hacia caso, Halwyn ya había tomado al director de las
muñecas, sus uñas empezaron a alargarse, hasta que se le clavaron en los brazos
haciéndolo gritar.

-Adiós.- dijo el hellhound, antes de que las llamas lo envolvieran por completo, a él y
al director.

-¿Estos son todos?- pregunto Halwyn mirando a los guardias y enfermeras que
estaban frente a ellos.

-Si, todos.- respondió Peter.

-Bien, mi nombre es Halwyn, y soy el dueño de Eichen House, el hombre al que


servían, era un impostor, un empleado más, que junto a otros que ya no están aquí,
me congelaron e hicieron lo que quisieron en este lugar.- empezó a hablar mirando a
todos.- Desde ahora, Eichen quedara a mi cargo, y a ustedes, les doy la oportunidad
de elegir, quedarse y hacer caso a mis reglas, o irse.-

Los guardias y enfermeros se miraron entre ellos, pero Bronski solo miraba a Theo.

-¿Que pasara con los internos?- pregunto una mujer.

-Evaluare cada uno de sus casos, y dependiendo de eso, veré si los libero o si deben
seguir aquí.- dictamino el hellhound.

-¿La quimera se quedara?- pregunto Bronski, señalando a Theo, por lo que Chris se
puso delante de él.

-¿Cual es tu nombre?- pregunto Halwyn.

-Bronski.- respondió el hombre.

-Claro, el violador.- dijo el hellhound.- Christopher, llévalo a su celda.-

-Con gusto.- dijo el cazador dejando su arma con su novio.

-¿Como que celda?- Bronski empezó a poner resistencia.- ¿Por que me vas a meter a
una celda?-
-Porque es lo que mereces, intentaste violar a Theo, no mereces ni ser liberado, ni
seguir trabajando aquí.- dijo Halwyn.- Ayuden a Christopher.-

Dos guardia se pararon y ayudaron a llevar a Bronski hasta a una de las celdas, y lo
dejaron ahí, al volver, los dos guardias hablaron con el hellhound, y le dijeron que
ellos querían seguir trabajando ahí, pero tratando con respeto a los internos.

Los demás fueron eligiendo, un buen numero decidió quedarse, para seguir
trabajando en Eichen, mientras que los que quedaban, unas 10 personas, decidieron
irse de ahí, ya habían tenido suficiente de ese sitio. Increíblemente, en el grupo que se
quedaba, estaba el guardia que era amigo de Jordan.

-Creí que querías irte.- le dijo.

-SI, eso quería, pero luego pensé, los internos que se queden, me van a necesitar, para
que aprendan a confiar en los otros.- contesto.- ¿Que hay de ti? ¿Te quedaras?-

-Creo que ya tuve suficiente de Eichen, a parte, afuera me espera mi nueva familia.-

-Bien, aquellos que se están quedando, les agradezco por la confianza y por las ganas
de querer seguir trabajando aquí. Los internos deben ser tratados con respeto y
cariño, nunca con malas intenciones.- explico Halwyn.- Ahora, veremos la liberación
de varios, que fueron injustamente traídos aquí.-

-¿Como hará eso señor?- pregunto uno de los guardias.

-Bueno, se que hay internos que son peligrosos, a esos los dejaremos en donde están.-
dijo el hellhound.- Los que consideren estar injustamente metidos aquí, vengan en
fila, hasta la puerta de salida y los escuchare, y veré si les creo y los dejo salir.-

Peter se acerco a su “pandilla”, quienes ya empezaban a reunirse.

-¿Y si no pasamos la prueba?- pregunto Liam.- Mi padrastro esta esperándome


afuera, no quisiera que se fuera sin mi.-

-No lo hará.- dijo Peter calmándolo, mientras ponía sus manos en los hombros de su
joven pareja.- Diremos la verdad, le contaremos nuestras historias, seremos sinceros,
estoy seguro que seremos libres.-

-Peter tiene razón. No hay que temer.- comento Deucalion.

Se formaron en la fila, siendo Peter el primero en pasar al frente de Halwyn, el


hellhound lo miro esperando a que empezara, y eso hizo el hombre, le contó todo lo
que habían vivido, el incendio de su casa, el sacrificio de su sobrina, y su injusto
encierro en Eichen. Tras eso, Derek y Cora le contaron lo mismo a Halwyn.

-Los Hale.- llamo Halwyn, y los tres nombrado se acercaron.- No me queda duda, de
que fueron encarcelados injustamente, por lo que, son libres.-

-¿En serio? ¿Nos podemos ir de aquí?- pregunto Cora ilusionada.


-Si, no merecen estar aquí, no más.- contesto el hellhound con una sonrisa.

Mientras los Hale, alistaban sus cosas, Liam y Theo fueron los siguientes en ir con el
hellhound, el resultado fue positivo, también podrían irse, Liam al saber de esto fue
en busca de Peter, mientras que Theo se le colgó encima a Chris, quien no dejo de
besarlo, mientras a un lado, Allison se sonrojaba, y decía entre risitas “Son mis
papás”.

El sheriff veía como su hijo se movía de un lado a otro, mientras que por otro lado
estaban los gemelos hablando entre ellos. A su lado, tenia al padrastro de Liam, quien
no dejaba de mover el pie nerviosamente. Tara Raeken, estaba mirando al cielo,
como si estuviera haciendo alguna plegaria, el padre de Kira estaba sereno, tanto que
el sheriff pensó que podía estar durmiendo con los ojos abiertos.

-¿Por que tardan tanto?- pregunto Stiles.

-Dales tiempo Stiles.- lo calmo el hermano mayor de Isaac.- Estoy seguro que ya
vienen.-

Stiles asintió y volvió a su rutina de estar moviéndose de aquí para allá, hasta que se
escucho como la puerta se abría y todos se quedaron estáticos. Vieron salir a los
Argent junto a Kate, quien venia sonriente, detrás Chris traía bien abrazado a Theo,
por lo que Tara al ver a su hermano, corrió hasta él.

-Theo.- Tara abrazo a su hermano, mientras las lagrimas caían por sus ojos.

-Tara, al fin soy libre.- dijo Theo devolviendo el abrazo, mientras miraba a Chris.

Los siguientes en salir fueron Malia junto a Lydia, el señor Tate se acerco a las dos
chicas y las abrazo por igual, después de todo, había decidido, que Lydia iba a vivir
con ellos.

-No saben lo feliz que estoy por verlas libres al fin.- les dijo.

-Papá, ¿Lydia puede quedarse con nosotros?- fue lo primero que Malia pregunto, por
lo que el hombre sonrió.

-¿Bromeas? Ya les compre una cama matrimonial a las dos.- contesto Henri, a lo que
su hija se lanzo a abrazarlo, para que luego, la banshee hiciera lo mismo.

Tras ellas, vinieron las quimeras, quienes se pusieron a un lado, no sabían donde
quedarían, es más, no sabían donde iban a vivir. Pero pronto, obtendrían su respuesta,
Peter, junto a Liam y a sus sobrinos, salieron por la puerta, esta de más decir, que
Stiles corrió hacia Derek y se le subió encima, y sin dejarlo decir ni pío, empezó a
besarlo.

-Papá.- Liam corrió hacia donde estaba su padrastro, y lo abrazo.


-Sheriff.- Peter saludo al hombre con un abrazo.- ¿Hizo lo que le pedí?-

-Claro, totalmente reconstruida.- dijo el hombre.

-Es padre.- Ethan y Aiden corrieron hacia su padre, tumbándolo en el proceso.

-Mis niños.- Deucalion beso las frentes de sus hijos, y los abrazo.

-¿Y papá Jordan?- pregunto Ethan.

-Viene con los demás.- dijo el alpha.

Efectivamente, Jordan venia, con Erica, Isaac, Jackson y Brett. Ethan al ver al ex
kanima, fue a abrazarlo, por lo que el otro se sorprendió, pero igual correspondió al
abrazo.

-Isaac.- Camden abrazo a su hermano con fuerza.

-¿Que sera de nosotros?- pregunto Hayden, ella no tenia a nadie ahí.

-Bien, bien, escuchen me.- pidió Peter y todos lo miraron.- Se que, ustedes las
quimeras, Jackson, y Brett, no tienen a donde ir, por lo que se quedaran conmigo, en
la mansión Hale.-

-¿No se había quemado?- pregunto Tara.

-Así es, pero la mande a reconstruir, con ayuda del sheriff. Así que, ¿por que no
vamos todos ahí ahora?- propuso el alpha y todos aplaudieron.
Capitulo 19

(Dos Semanas Despues)

Ethan abrio los ojos y observo el techo de su cuarto, no tenia muchas ganas de
moverse de su cama, no cuando por fin habia recuperado su cuarto para el solo. Se
estiro, logrando que sus sabanas quedaran al final de la cama.

-Ethan, ¿puedo pasar?- escucho que preguntaban al otro lado de la puerta.

-Adelante- dijo el chico.

Por la puerta aparecio Jordan con una sonrisa, entro al cuarto y se acerco hasta la
cama del menor.

-¿Que tal amaneciste?- pregunto el ex guardia.

-De maravilla, aunque admito que extrañe un poco a Aiden, pero de ahí todo esta
genial.- respondió el chico.

-En tal caso, feliz cumpleaños.- Jordan se abalanzo sobre el menor y le dio un fuerte
abrazo, cosa que Ethan correspondio con alegria.

Despues de que todos fueron liberados de Eichen, Ennis y Kali se mudaron de la casa
de Deucalion, al departamento de Jordan, pues este no iba a vivir más ahí, no señor,
viviria en casa con Deucalion y los gemelos, despues de todo, ya era el otro papá.

-Gracias papi, ¿ya saludaste a Aiden?- pregunto cuando se separaron.

Si Jordan no habia saludado a Aiden, el podría restregarle a su hermano, que él era el


favorito de papi Jordan. Y es que desde que Parrish estaba viviendo en la casa, los
gemelos habian estado en una competencia por descubrir quien era el favorito del
hellhound, pero este se habia negado a decir algo.

-No, si esta dormido como tronco. Tu padre intenta despertarlo justo ahora.- contesto,
para que luego ambos oyeran un fuerte rugido que resono en toda la casa, hasta hizo
que el reloj despertador de la mesa de Ethan se moviera.

-Creo que ya lo desperto.- comento Ethan, para luego escuchar pisadas apresuradas.

-No.- Aiden miro a Jordan bien sentado en la cama de su hermano gemelo.- ¿Lo
saludaste primero?-

-Tú estabas durmiendo.- se defendio Jordan.- Pero igual tengo guardado un abrazo
para ti.-

Aiden sonrio y corrio hacia los brazos abiertos que su papi le ofrecia, en donde se
fundio en un tierno abrazo.

-¿En serio? Ahora se que Jordan es su padre favorito.- se quejo Deucalion desde la
puerta.- Claro y a mi, que me parta un rayo, yo, que me pase años metido en Eichen,
sin poder tener el amor de mis hijos.-

-Quieren ir a abrazar a su padre, antes de que haga más drama y empiece a llorar.-
aconsejo Jordan sonriendo.

-Papá, no te pongas así.- Aiden se acerco y abrazo a su padre, mientras su hermano se


acercaba.

-Si, te amamos, pero es que nunca hemos tenido a un papi, y supongo que podemos
comportarnos como unos niños engreidos que quieren atenciones de parte de sus
papás.- dijo Ethan añadiendose al abrazo.

-No puedo enojarme con mis niños.- dijo el alpha sonriendo.- Feliz cumpleaños
mocosos.-

-Gracias papá.- contestaron los gemelos al uniso.

-Bueno, dejemos los abrazos y cariños para despues, que tenemos que planear una
fiesta de cumpleaños a lo grande.- dijo con animos Jordan.

-Theo.- Tara entro al cuarto que su hermano compartía con Chris y se tiro en la cama,
“aplastando” a ambos.

-Hay, pesas.- se quejo Theo.

-Buenos días Tara.- saludo Chris acomodando su almohada.

-No, no Chris, lo que tienes que decir es: ¿que mierda haces aca?- pregunto la
quimera.
-Que humor hermanito, cuñado ¿no que tú lo mantenias contento?- pregunto Tara
sonriendo.

-Hago lo que puedo, querida Tara.- respondio el cazador.

-Ya, ya, dejden de hablar de mi como si no estuviera. Ahora, ¿que haces aquí
estorbo?- pregunto Theo, mientras se apoyaba en el pecho descubierto de su novio.

-Rayos, ¿por que tienen que ser sexys juntos?- se quejo la chica haciendo un puchero.

-Deja tus sueños de fujoshi, y habla.-

-¿Fujoshi?- pregunto Chris confundido.

-Luego te explico.- respondio Theo.

-Bueno, ¿saben que día es hoy?- pregunto Tara entusiasmada.

-¿Sabado?- pregunto su hermano sin entender.

-Si, pero hoy es cumpleaños de los gemelos.-

-Oh, Deucalion debe estar preparandoles algo.- penso Chris.

-Si, ya me enviaron un mensaje. Sera en la casa de Peter.- comento la chica.

-Mansión, querida, se dice mansión, porque esa cosa no puede ser una simple casa.
Simple, es esta casa, lo de Peter es querer ser un rey.- corrigio Theo.

-Si, si, dejemos tus celos sobre la casa del alpha, y ayudame a buscar un regalo para
los gemelos.- le pidio Tara.

-Segura que es para los gemelos, no sera que buscas un regalo solo para Aiden.- la
molesto su hermano, a lo que la chica le peñizco en la pierna.-Hay, cortate las uñas.-

-Nop, si no, como podría molestarte, ¿me ayudaras o no?- pregunto la chica.

-Si, si, pero dejame cambiarme y desayunar. Anda, shu, shu, fuera, fuera.-

Tara se levanto de la cama y con una sonrisa se fue del cuarto, dejando solos a su
hermano y cuñado.

-¿En que momento pensamos que era bueno que esa loca viviera con nosotros?-
pregunto Theo mirando a su novio.

Chris sonrio, despues de su salida de Eichen, Theo habia estado quedandose en la


casa de los Lahey, junto a su hermana, el cazador iba a verlo, tenian citas, hasta que
despues de una semana, Chris habia ido a la casa, y le habia pedido a ambos Raeken
que se mudaran con él y su familia, que no pensaba estar sin Theo un minuto más.
Al día siguiente, ambos hermanos se mudaron y ahora los cinco vivian juntos, para
Allison fue algo genial, pues al fin tenia con quien hablar de chicos, porque hablar
con su tía Kate no era lo más ideal, mientras que Tara era mas contemporanea de la
joven. En cuento a Chris y Theo, a ellos les encantaba la privacidad que tenian en su
propia habitación, el cazador ya habia perdido la cuenta de cuantas veces le habia
echo el amor a su joven pareja, pero no le importaba, lo haría mil veces más.

-Bueno, dejemos de ser perezosos, que tengo que ir a buscarle un buen regalo de
cumpleaños, para mi cuñado, que aún no es mi cuñado.- dijo la quimera
levantandose.- ¿Seguiras en cama?-

-No, Jordan me pidio ayuda para algunas cosas de la fiesta.- dijo Chris levantandose
tambien, por lo que escucho un silbido, así que miro a su pareja.

-Lo siento cariño, pero que bien estas.- halago Theo, le encantaba mirar el cuerpo de
su novio. Podría tener sus añitos, pero no habia duda de que Chris Argent aún se
mantenia, y entraba perfectamente en la definición de “Sugar Daddy”.

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