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¿QUÉ TENDEMOS A HACER AL VERNOS EN MEDIO DE UNA
SITUACIÓN O PROBLEMA?
Lo que muchos hacen es tomar decisiones sin primero consultar a Dios.
En otras palabras, lo hacemos bajo nuestros impulsos nuestras emociones carnales y
no bajo la voluntad de Dios.
Cuando se habla se ir a la presencia de Dios esto significa estar constantemente en
relación con Él [5].
En el Antiguo Testamento que la presencia de Dios se encontraba dentro del arca.
Pero el Nuevo Testamento nos enseña que ahora tenemos el paso directo con nuestro
Padre, solo es colocarle lo que se vive y el Señor lo ejecutara.
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III. MI FORTALEZA ES DIOS Y EN ÉL TENGO LA VICTORIA
La historia cuenta que David encontró a los amalecitas, y los derrotaron.
La palabra nos dice que ninguno se escapó excepto 400 que eran jóvenes y huyeron en
camellos.
David recupero todo, esposas hijos y todos los bienes de su pueblo, y hasta las
pertenencias de los amalecitas.
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El Señor tiene todo bajo control, si lo prometió él lo cumplirá.
La solución está en las tus manos. Dios es tan grande que tenemos unas armas muy
poderosas y entre ellas es la oración.
En otras palabras, la comunicación directa y asertiva que tenemos con nuestro Señor.
Y también tenemos la palabra de Dios que nos ayuda a pelear con sabiduría y
entendimiento.
DIOS TE AYUDARÁ EN LOS TIEMPOS DE ANGUSTIA. Solo debes acudir a
Su presencia.
Declara ahora, Dios es mi fortaleza.
Dios te habla a diario a través de Su palabra, pero tienes que estar atentos. Debes
escuchar la voz del Señor, esto es esperar en el tiempo perfecto de Dios. Él es nuestra
fortaleza en los tiempos de angustia.
Los dejo con un versículo para reflexionar: Salmos 118:4 “Mi fortaleza y mi
cántico es JAHY él me ha sido por salvación.”