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Parcial 1 (DEM)

Universidad Nacional de Colombia


Departamento de Ingeniería – Ingeniería Civil

Elaborado por:
Mateo Parada Dimate

Trabajo realizado como requisito parcial para la aprobación de la


asignatura:
Geología (2015956)

A cargo de los Docentes:


Héctor Julio Fierro Morales (Geólogo)
Harol Gustavo Moya Berbeo (Docente)

Bogotá D.C – 2022


Movimientos en Masa (Usaquén)

En la presente entrega busca afianzar la mayoría de los conocimientos otorgados por la


asignatura en un caso de estudio real, del cual se recuperó información técnica de las
autoridades competentes y se realizó un modelo digital del terreno (DEM), con el fin de
evidenciar los procesos geológicos que interfirieron en los movimientos en masa
ocasionados en la localidad de Usaquén, Bogotá D.C los cuales han proporcionado
grandes afectaciones a la comunidad que allí reside, como también se busca determinar
las implicaciones de la Ingeniería sobre esta urbanización.
Para la elaboración del modelo digital se implementó el mapa de sombras generado por
la ASF (Alaska Satellite Facility) y el software QGIS, el cual permite generar los
lineamientos que se consideren y procesar esta información para generar mapas de calor
y diagramas que evidencien el comportamiento de la región.
Zona de Estudio: 1
Para realizar un amplio análisis se selecciona un cuadro de un rango de 60 km * 60 km
con epicentro en los cerros orientales ubicados en la localidad de Usaquén, Bogotá,
Colombia. La zona enmarcada por el recuadro rojo, indica la zona específica de estudio.

Imagen 1.1 DEM Ubicación geográfica Cerros Orientales – Usaquén


Tomado de Google Maps 2022
DEM (Mapa de sombras)

Imagen 1.2 DEM descargado de base de datos ASF (Configuración seleccionada) Escala 1:5000.

Sismicidad

En Colombia el cubrimiento de sismos data desde 1610 y han logrado identificar


alrededor de 130 eventos considerables, pero para la región de estudio en específico
sólo se toman en cuenta los que tienen una cobertura no mayor a 60 km, ya que es
nuestra área de control. El catálogo de sismos de Colombia registra antes de 1926, tres
sismos con efectos significativos en la región del norte de Bogotá y a distancias
moderadas de ella, en 1644 (Espinosa 2003), 1743 y 1917 (CERESIS 1985). Estos
eventos se analizan junto a otros fenómenos de relevancia para el contexto de la
investigación y se presentan a continuación.
Sismo de marzo 16 de 1644:

Documentos históricos encontrados por Espinosa (1994, 2003), describen daños severos
en la iglesia y viviendas del pueblo de Tunjuelo, licuación en las vegas del río Tunjuelo
deslizamientos y caída de rocas "hacia los boquerones de Ubaque y Chipaque" y un
deslizamiento "abajo del Salto de Tequendama", ocasionados por el sismo. Los efectos
descritos en Ubaque y Chipaque sugieren para este evento un epicentro localizado al
sureste de Bogotá.

Sismo de octubre 18 de 1743:

Este sismo afectó principalmente el área de Fómeque, Cáqueza, Choachí, Fosca y


Ubaque, además causó daños menores en Chipaque, Usme y Une y deslizamientos en
Bogotá (e.g. Ramírez, 1975; Álvarez, 1987; Espinosa, 2003; Sarabia & Cifuentes,
2007). Los efectos asociados a este evento son contundentes en señalar un epicentro al
sureste de Bogotá.

La movilidad de la falla Algeciras, en su historia sismológica como límite de bloques


continentales, ha producido los sismos históricos de 1785, 1827, 1917 y 1967, todos los
cuales arrojaron pérdidas de vidas y destrucción de construcciones para Bogotá.
8Revista Colombiana de Geografía, 2015)

Sismo de agosto 31 de 1917:

El epicentro instrumental de este sismo de magnitud Ms=6.9 (Pérez & Scholz, 1984)
fue localizado al este del Páramo de Sumapaz en 4°N y 74°W (Gutenberg & Richter,
1949), al SSE de Bogotá. Este epicentro puede tener algunas decenas de km de
incertidumbre, asociada a la limitada distribución de las estaciones sismológicas
globales y a la ausencia de estaciones sismológicas en el país para la época. Los daños
más significativos se ubican en una extensa región que abarca los actuales
departamentos de Meta, Cundinamarca, Tolima y Boyacá. Las intensidades más altas
(IX) evaluadas en Villavicencio y San Martín, los deslizamientos ubicados en el flanco
oriental de la Cordillera Oriental a la latitud aproximada de 4°N y la distribución de
intensidades menores sugieren también un epicentro al SSE de Bogotá (Cifuentes et al.,
2005, Sarabia et al., 2010).

El sismo del 24 de mayo de 2008:

El sábado 24 de mayo de 2008, a las 14:20 hora local, 21 estaciones de la RSNC


registraron un evento sísmico. El epicentro se localizó a 8.6 km al Noreste de la
cabecera
municipal de Quetame (Cundinamarca), en las coordenadas 4,3992 N y 73,8142 W,
profundidad superficial y magnitud local 5,7 (magnitud Richter, calculada a partir de la
amplitud máxima del registro). El Grupo de Sismología de la Universidad de Harvard
estableció una magnitud Mw = 5,9. La diferencia en magnitudes se explica porque las
escalas consideran diferentes fases y tipos de registro de la señal sísmica.

Sismicidad en el periodo instrumental moderno (1964 en adelante)

En este periodo el sismo más relevante con epicentro cercano a la zona de este estudio
es el de septiembre 4 de 1966 que causó daños significativos en el sur de Bogotá.
Posterior a este es Servicio Geológico Colombiano recopila 3 sismos no mayores a 3pts
en escala Richter.

Tabla 1.1 Sismos con Epicentro en Bogotá desde 1996

Los sismos mencionados podemos evidenciarlos en el mapa sismicidad del Catálogo


Sísmico Integrado, ofrecido por el SGC:

1826

1923
1644 1966 1988

1743

2008 1988

Imagen 1.3 Mapa de historial sismológico (60 km alrededor de Bogotá D:C) Fuente: SGC

Se debe tener en cuenta los sismos considerados, ya que estos afectaron al pasado
Bogotá, y entender sus consecuencias, es clave para entender el comportamiento de la
los movimientos en masa en los cerros nororientales, por lo cual el análisis busca
estimar los daños y el escenario de desastre probable para un área mucho más grande, la
cual, además del centro y el sur, tiene presente la ocupación que, para los últimos
cincuenta años, se ha extendido hacia el noroccidente de la Sabana de Bogotá (Instituto
Distrital de Cultura y Turismo, IDCT 2009)

Fallas Geológicas

Gómez, J., Montes, N.E., Nivia, Á. Atlas Geológico de Colombia 2020. Escala 1:500 000. SGC

La Sabana Bogotana está configurada geomorfológicamente por el Sistema de Fallas de


la Falla Frontal de la Cordillera Oriental -en adelante, SFFFCO- que, según Paris y
Romero (1994) es el límite entre el bloque andino y la placa suramericana, por lo que es
una zona de alta movilidad tectónica debido al empuje que la placa de Nazca, que
subduce bajo Suramérica, produce en este sector del continente.

“Los sistemas de fallas generadoras se asocian a una tectónica que se caracteriza por
pliegues de arrastre y cambio de bajo ángulo, con rumbo N-NE. También se observa
una tectónica involucra al basamento representado por medio de diversos altos, como
los macizos de Garzón y Quetame, que afloran gracias al proceso de inversión tectónica
que sufrieron fallas normales de alto ángulo y rumbo N-NE durante el lapso Paleógeno
tardío-Neógeno, cuando la placa de Nazca inició su proceso de subducción bajo el
margen noroccidental de Suramérica” (Chicangana y Vargas-Jiménez 2013). Estas
fallas, para el presente, tienen una cinemática con el componente horizontal
predominantemente destral.

Gráfico 1.1 Tomado y modificado de Gómez et al. (2007).

Mapa geológico de la región de estudio en el que se muestran las principales fallas


(Trazos negros) y unidades estratigráficas. La escala de colores corresponde con: 1.
Mesoproterozoico indiferenciado. 2. Mesoproterozoico indiferenciado. 3. Unidades
Cámbrico -ordovícicas. 4. Unidades devónicas -carboníferas. 5. Jurásico indiferenciado.
6. Cretáceo indiferenciado. 7. Paleógeno. 8. Neógeno. 9. Pleistoceno inferior. 10.
Pleistoceno medio. 11. Pleistoceno superior. 12. Holoceno.

Tomado de Chicangana et al. (2007).

Bosquejo general en 3D de la disposición tectóno-estratigráfica A la derecha, perfiles


A-A´, B-B´, y C-C´ dispuestos en sentido E-W, los cuales se ubican en la figura de la
izquierda. FGC: Falla Guaicaramo; FGY: Falla Guayuriba; FM: Falla Mirador; FMA:
Falla Manzanares; FRCh: Falla Río Chiquito; FRG: Falla Gallo; FS: Falla Servitá; FSJ:
Falla San Juanito. BMProtA: Basamento Meso-Proterozoico Andino.
DEM (Fallas Geológicas de extensión superior a 15 km, realizadas a través de la interpretación del
gráfico 1.1)

Fallas Consideradas

La Falla de Bogotá

En la plancha 228-Bogotá noreste se ubica en la esquina suroccidental y continúa al sur


en la plancha contigua, 247-Cáqueza. Bordea los Cerros Orientales de Bogotá, razón
probable para elegir el nombre de Falla de Bogotá que le asignan Montoya & Reyes
(2005). Es una falla inversa con vergencia al occidente, con rumbo promedio N10°E.

“Vergara (1997) identifica ciertos indicios de sismicidad en los trazos de la Falla de


Bogotá, que por su incertidumbre apenas permiten catalogar la actividad de la falla
como incierta, siendo necesarios estudios detallados. Con la misma orientación al NE,
se identifican hacia el sur de la Sabana, las fallas del río Tunjuelito y de La Cajita.”
(Boletín de Geología Vol. 24, No. 39)

Anticlinal de Bogotá

McLaughlin & Arce (1972) cartografiaron el Anticlinal de Bogotá en los cerros


Orientales de la Sabana de Bogotá; Montoya & Reyes (2005) unen el Anticlinal de
Bogotá con el de Usaquén, con base en que se puede continuar la forma anticlinal hacia
el norte hasta la vereda Hato Grande, al oriente de Cajicá, sólo interrumpida por fallas
de poco desplazamiento. El eje de la estructura tiene orientación de N10°E.
Sinclinal de Usme

Estructura al sur de la Sabana. El flanco orienta está afectado por la falla de Bogotá
ocasionando inversiones de estratos y por ende una estructura asimétrica, el flanco
occidental solo esta fallado en la porción más norte mientras al sur presenta
buzamientos suaves (Bayona, G., et al, 2010).

Falla del Río Tunjuelo:

Rumbo general de N5E y un plano inclinado al occidente (Chicangana, et al., 2014).

Lineamientos

Como Ejercicio de análisis del terreno surgieron 1473 lineamientos de los cuales se
dispone la información en forma de histograma generado automáticamente por el
software Qgis para analizar la tendencia general de las fallas y agrietamientos generados
por la dinámica de estos, a continuación, se presenta el DEM con las capas obtenidas y
sus respectivos histogramas de frecuencia de magnitud y dirección de las fallas,
revisadas minuciosamente en escala y con diferentes orientaciones de iluminación.
Lineamientos
Convenciones

DEM (Lineamiento generados en capa Qgis)

N N
34°
33°

W W E
E

S S

Histograma de dirección (Fallas Extraídas) Histograma de dirección (Lineamientos)

Análisis y Conclusiones
La ciudad de Bogotá es altamente vulnerable ante a un sismo con Mw > 6.0, cuyo
epicentro se localice a menos de 250 km. La naturaleza y el papel geológico del sistema
de fallas y, en particular, para el sistema de fallas Algeciras-Uribe y Servitá, que son las
más próximas a Bogotá.

En el estudio los movimientos en masa de Usaquén se deben considerar las fallas


longitudinales como las de Bogotá, Río Tunjuelito y La Cajita, y con fallas transversales
como la del Río Bojacá y Río Juan Amarillo, ya que se pueden clasificar como activas o
potencialmente activas; sin embargo, no existen estudios detallados que permitan
certificarlo.

Se plantea una hipótesis de que las líneas rectas referenciadas en el DEM corresponden
a grietas o fracturas en el relieve montañoso, producto de la elevación de la cordillera
Oriental. La mayor cantidad de estas “fracturas” presentan dirección aproximadamente
de N 33° E, el mismo rumbo de las fallas, pero van presentando algunas alteraciones en
la dirección posiblemente por la intervención de un cuerpo montañoso con otro.

Podemos notar un patrón de líneas rectas de un mismo sentido en zonas con baja
presencia de fallas, pero al momento de acercarnos a estas, podemos ver que las líneas
rectas empiezan a tomar la misma dirección o a inclinarse en sentido de las fallas,
cambiando su dirección aproximadamente a N 34° E, casi la misma frecuencia de
dirección de las fallas.

La población que reside en los cerros orientales de Usaquén (Especialmente en las UPZ
Verbenal, La Uribe, San Cristóbal Norte y Santa Barbara) habitan en una región de alto
riesgo de movimientos en masa por la actividad de las fallas de rumbo y normales
persistentes en todo el sistema de la Cordillera Oriental, además s deben considerar los
efectos por minería en zonas específicas como el “Barrio Las Delicias”.

Se deben considerar adicionalmente los efectos por pluviosidad en la estabilidad del


terreno. Sin embargo, el componente de fallas y sismicidad nos indica es de gran
importancia para el estudio de esta región.
Referencias

ACOSTA, J. & ULLOA, C. (2001): Memoria explicativa Geología de la Plancha 246 Fusagasugá escala
1:100.000. INGEOMINAS. Bogotá, 76 p.

ÁLVAREZ, A. (1987): Contribución al conocimiento de la sismicidad histórica en Colombia. Facultad de


Ingeniería Civil, Universidad de los Andes. Bogotá.

CERESIS (1985): Catálogo de Terremotos para América del Sur. Eds. Askew, B. & Algermissen, T. 4: 269.

Angela Olaya1, Cristina Dimaté2, & Kim Robertson3


1 Depto. de Geociencias, Universidad Nacional de Colombia, Sede Bogotá angela@enovaresources.com,

Instituto Distrital de Cultura y Turismo, IDCT 2009

Revista Colombiana de Geografía (2015),24(2): 73

GEOLOGÍA DE LA PLANCHA 228 BOGOTÁ NORESTE

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