El ajolote tiene la apariencia de un renacuajo gigante con patas y cola.

Se caracteriza por tener tres pares

de branquias, las cuales salen desde la base de su cabeza y van hacia atrás, ojos pequeños, piel lisa y patas
cuyos dedos son finos y puntiagudos, pero que no desarrollan uñas. La coloración del ajolote es muy variable:
en estado silvestre, la mayoría son de color café oscuro con el dorso negro, el vientre más claro, y manchas
oscuras débiles y poco visibles en flancos y dorso.

El ajolote tiene la apariencia de un renacuajo gigante

Es una especie de anfibio caudado de la
familia Ambystomatidae. Se encuentra
en peligro crítico de extinción por la
pérdida de hábitat, introducción de
peces exóticos, sobreexplotación,
contaminación y su consumo como
alimento. Es una especie neoténica, y al
contrario que la mayoría de anfibios no
pasa por un proceso de metamorfosis.
con patas y cola. Se caracteriza por tener tres pares
de branquias, ojos pequeños, piel lisa y patas cuyos
dedos son finos y puntiagudos, pero que no
desarrollan uñas. La coloración del ajolote es muy
variable: en estado silvestre, la mayoría son de color
café oscuro con el dorso negro, el vientre más claro,
y manchas oscuras débiles y poco visibles en flancos
y dorso.

Es endémico del Valle de México. También se

encuentran distribuidos por Tlaxcala, en el municipio
de el Carmen Tequexquitla. Su hábitat son lagos o
canales de aguas poco profundas con mucha
vegetación acuática. Es una especie completamente
acuática.
Su dieta es muy variada y en vida libre incluye
pequeños peces, alevines y acociles. En cautiverio, se
les alimenta comúnmente con gusanos tubifex,
lombrices de tierra, tenebrios, gusanos y pequeños
trozos de carne cruda de pavo, pollo o res.