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¿Dónde está la casa de mi amigo?

Universidad autónoma de Chihuahua


Comprendiendonos desde la ficción
Jorge Alexandro Domínguez Bustillos
351480
Prof: Jonathan Sánchez
¿Dónde está la casa de mi amigo? Es una película iraní de 1987 dirigida por Abbas
Kiarostami. Es la primera parte de la trilogía que le ganó fama internacional al director.

La trama nos presenta la historia de Ahmed, un niño quien en la escuela presencia los
regaños y amenazas sufridas por su compañero Mohammed Reza que vive en un pueblo
cercano por no haber hecho su tarea en su cuaderno. Más tarde ya en su casa Ahmed
encuentra que se llevó por error el cuaderno de su compañero y por lo tanto no podrá hacer
su tarea. Entonces Ahmed decide ir a buscar a su compañero para devolverle su cuaderno.

Durante toda la película seguimos a nuestro protagonista mientras se aventura por los
callejones del pueblo vecino, buscando la casa de su amigo.

La película se desarrolla en distintos escenarios, los principales siendo: el salón de clases al


inicio y al final sirviendo de telones a la película, en Koker el pueblo de Ahmed en donde por
única vez la cámara se aleja de nuestro protagonista y se concentra en una conversación
entre adultos, Poshte el pueblo de Mohammed característico en el film por sus pasillos
laberínticos entre edificios y casas altas que se extienden por todo el pueblo.

Dada la relativa simplicidad de la trama, el espectador puede concentrarse más en los


escenarios y conversaciones entre los distintos personajes. Hay una toma en específico que
durante la cinta sirve como puente entre Koker y Poshte, también como puente entre la
zona de confort y la aventura de Ahmed. Esta escena es la de la colina. El camino que
recorre Ahmed para subir está colina está en Zig Zag, lo cual resulta interesante por su
innecesario rodeo, en vez de haber un camino recto o curvado hacia la cima, se presenta en
Zig Zag, representando la aventura de Ahmed, la cuál ante los ojos del adulto puede
resultar un mareo innecesario la búsqueda incesante por la casa de Mohammed, sin
embargo Ahmed lo recorre a como dé lugar.

Durante todo el film Ahmed busca ayuda de todo el que encuentre, sin embargo de todos
los adultos recibe el mismo trato: la indiferencia. Este mundo es un mundo de adultos y la
película nos lo menciona a través de las puertas. Un tema recurrente en las conversaciones
de los personajes son las puertas, en la escena mencionada anteriormente por su desvío
del protagonista, algunos adultos hablan mientras Ahmed va a conseguirle unos cigarros a
su abuelo. Durante su intercambio se menciona mucho la significancia de las puertas.
Podemos observar como un adulto relativamente joven diálogo con un anciano sobre el
cambio de su puerta por una nueva puerta metálica más resistente. El anciano cuya puerta
es de madera, se muestra resistente ante la utilidad de las nuevas puertas, no les encuentra
un sentido, ni ve importancia en el ser recordado. Tomando esto en mente podemos
considerar a las puertas metálicas como un significante de la adultez en contraposición con
las puertas de madera representantes de la vejez, o las antiguas generaciones. Desde esta
perspectiva el inicio de la película adquiere una especial significancia ya que lo primero que
vemos, mientras rolan los créditos, es una puerta metálica del salón de clases de nuestros
protagonistas, indicándonos de manera de telón de entrada, que este es un mundo de
adultos. Todo esto queda aún más claro considerando la primera escena, en la que el
profesor entra al salón de clases hostigando con su autoritarismo a los niños, ejerciendo su
poder sobre ellos, dejándonos aún más en claro que este es un mundo de adultos.

Continuando con la historia de Ahmed, casi al final del film finalmente recibe ayuda de una
persona, un adulto mayor lo escucha realmente e intenta ayudarlo llevándolo por la ciudad
hasta la que según él es la casa de Mohammed. Durante todo el recorrido el anciano le
habla sobre su profesión: hacer puertas y ventanas de madera, y a lo largo de su paseo
pueden verse los reflejos de las vidrieras sobre los edificios, todo a su alrededor fue
construido por los ahora ancianos, y uno de ellos un humilde carpintero ahora batalla
incluso para caminar rápido entre los callejones de su ciudad. Queda pues significada la
ayuda de la vejez hacia la nueva generación, en contraste con la indiferencia de la adultez
por la niñez. Sin embargo el anciano termina llevando a Ahmed a una casa a la que él ya
había acudido, ante lo cual Ahmed termina por retirarse y volver a Koker.

Podría entonces interpretarse la película de está manera, en un mundo de adultos los niños
quedan abandonados, y aunque la vejez les ayude, los infantes deben descubrir su propio
camino y combatir las adversidades. La película cumple una gran función que es la de
hacernos empatizar, no sólo con el protagonista sino con los niños en general, en el llanto
de Mohammed al principio cuya cara se vuelve el centro de la imagen, por la composición
de la toma se vuelve bastante difícil no desear tranquilizar al niño y empatizar con él,
además de que podemos ver lo difícil que es para estos niños realizar sus deberes por el
trabajo que deben hacer en casa. Todos estos elementos realmente causan una
desesperación ante la falta de empatía de los adultos por su situación.

La película es muy entretenida, tiene tomas bellísimas e impactantes, entre cuyos silencios
es imposible no reflexionar sobre la infancia, la adultez y todos los cambios que representan
esas etapas.

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