Buenos días, con su venia diputado presidente, Emilio Antonio

Contreras Martínez de Escobar, compañeras y compañeros diputados,

y a quienes nos siguen de las redes sociales.
Este siglo se ha caracterizado, entre otras cuestiones, por reivindicar
los derechos de la mujer, con el fin de buscar un marco legal más
equitativo: la perspectiva de género es parte de una agenda que ya no
tiene punto de retorno y, entre los diversos pendientes está, sin duda
alguna, revisar también lo relativo en lo que respecta a la violencia en
sus distintas clases: económica, psicológica, sexual y a ésta
agreguemos el componente de nuestros tiempos: la violencia digital,
que deriva del acoso y el uso de las tecnologías. Es un tiempo para
visibilizar lo que no era invisible, pero que la sociedad se negaba a
ver.
La violencia en el ámbito sexual no se limita a los delitos en contra del
normar desarrollo psicosexual, sino que, mediante el uso de las
tecnologías de la información, se han encontrado otras formas a las
que se denomina violencia digital.
Por tal motivo, el Estado Mexicano ha establecido, en diversos marcos
jurídicos federales y locales, propuestas legislativas para sancionar,
prevenir y atender el problema de forma integral.
La aprobación a nivel federal fue un paso importante porque nos
permitió avanzar a la aprobación para poder destinar recursos públicos
y crear políticas públicas para la prevención, atención y erradicación
de estas violaciones a derechos de las mujeres.
La preocupación pública sobre este fenómeno ha aumentado
significativamente, y la propuesta que ha tenido mayor trascendencia
tanto a nivel mediático, como con tomadores de decisiones y grupos
feministas a nivel local, ha sido la adopción de reformas legislativas
para reconocer esta forma de agresión como un delito en los Códigos
Penales estatales.
Las iniciativas presentadas ante el Pleno de este Honorable Congreso,
implican tipificar estas conductas, buscar brindar mayor protección a la
mujer como grupo vulnerable cuando se trata de delitos sexuales en
los que se utiliza la tecnología para cometer el ilícito. Y estas
propuestas legislativas llevan consigo, tres grandes aspectos:
• Tipificación de delitos contra la intimidad sexual.
• Inclusión de la difusión del contenido sexual como una
conducta ilícita
• Reconocimiento de la existencia de la violencia digital y
mediática como una nueva modalidad del delito.
El móvil de esta iniciativa es resaltar que la difusión de contenidos
íntimos, sin autorización de quien legalmente puede otorgarla, es
violencia sexual y digital por lo que se busca que mediante es se
reconozcan los derechos humanos a la vida privada, intimidad y
dignidad de las personas en el ámbito digital. Por ello, se busca ajustar
en tipos penales los actos de violencia ejercidos mediante Tecnologías
de la Información y la Comunicación.
Teniendo claras las obligaciones del Estado Mexicano en relación con
la prevención, investigación y sanción de la violencia contra las
mujeres, la importancia de implementar medidas legislativas para
prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en
espacios digitales, así como el marco de libertades fundamentales de
las personas, concretamente las libertades y la intimidad sexuales
como bienes jurídicos a tutelar, se vuelve relevante determinar, con
claridad y bajo los principios del derecho penal, cuáles son las
conductas socialmente reprochables y que son susceptibles de
convertirse en hechos punibles, precisamente por vulnerar la libertad,
la intimidad sexual y el derecho a la libre decisión o consentimiento.
Las y los integrantes de las Comisiones dictaminadoras de este
Honorable Congreso, después de realizar el análisis de los
argumentos vertidos por las diputadas y el Ejecutivo del Estado de
Tabasco, coincidimos en cuanto a la necesidad de legislar en materia
de violencia digital contra las mujeres y adecuar la normatividad a la
realidad social que lamentablemente se vive en el estado,
específicamente en lo que concierne a la violencia que se ejerce
contra las mujeres y niñas en el espacio digital y de comunicación.
Quienes integramos estas Comisiones, en el contexto del desarrollo
de nuevas tecnología de la información y comunicación, estimamos
urgente construir un marco normativo que contemple las formas de
violencia de las que las mujeres son víctimas, la violencia digital y/o
mediática que representa para éstas un obstáculo para su acceso y
uso de las tecnologías, comunicación e información digital, aunado a
ello genera consecuencias psicológicas, emocionales y sociales para
las víctimas y limita el pleno ejercicio de los derechos humanos.

En cuanto a la legislación local especifica en materia de violencia

contra las mujeres y las niñas en el ámbito digital, desde 2014, la
activista Olimpia Coral Melo ha sido promotora de reformas de ley en
los congresos estatales, que se conocen como "Ley Olimpia". Hasta el
momento, son 27 entidades las que han aprobado normas en este
sentido y hay reformas presentadas en otros estados en el mismo
sentido de regular la violencia que se ejerce en el ámbito digital,
particularmente en internet.
Hoy es un día muy importantes, pues se hizo realidad la Ley Olimpia
en Tabasco, esta Ley no solo es un conjunto de reformas legislativas,
es la primera piedra para construir una ruta que permita la erradicación
de la violencia digital sexual, es un avance legislativo sumamente
importante que sin lugar a dudas brindará protección a las mujeres y a
las niñas.