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EL REPORTE CORONELL

Juan Andrés Baracaldo Guerrero

Daniel Coronell es mayormente conocido por sus críticas contra el uribismo, explicadas en
sus columnas y en su portal de opinión Los Danieles. He aquí el problema. Daniel Coronell
solo publica lo que le favorece y lo que deja en ridículo a la Revista Semana y a los
miembros más importantes de la misma, así como a otros políticos, inversores, empresarios,
entidades de gobierno importantes, entre otros.
El periodismo en Colombia tiene ciertas personas que dicen llamarse periodistas, pero que
en muchos casos actúan y se ven como todo lo contrario, una persona mal informada con
deseos de entablar polémica y calumniar a personas y empresas que no les agraden, así
como publicar columnas en contra de su propio periódico dentro del mismo, algo poco ético.
En su portal de opinión, Los Danieles, Coronell afirma que “La juez 49 penal del circuito de
Bogotá encontró evidencias de que Palacino se apropió de dineros públicos que debían estar
destinados a tratamientos médicos de los afiliados a SaludCoop”. En las 318 páginas de
sentencia escrita por Juan Pablo Lozano Rojas (no fue una juez), en ningún momento
aparece esta afirmación hecha por Daniel Coronell. La afirmación que hizo Coronell es
imposible. Palacino fue acusado de un solo cargo: entre los años 2000 y 2004 hacer
inversiones beneficiarias para SaludCoop. (Alberto Donadío, Semana, 2023). Este es un
pequeño ejemplo de lo que ha venido haciendo Daniel Coronell, tergiversa la información a
su favor, dejando en mal puesto a la persona implicada.
Mencionado anteriormente, es poco ético que un periodista publique una columna en contra
del periódico para el que trabaja (el caso de Daniel Coronell). Un periódico que por tantos
años puso comida en su mesa, que le debe, en una pequeña pero importante parte, su éxito.
Solo lo hace ver como un ingrato. Como dice el adagio popular “quien muerde la mano del
que le da de comer”.
Se debe saber cómo manejar la libertad de prensa, se debe saber cómo publicar una
columna y saber cuándo no publicarla. Publicar de una manera sutil, para no generar
conflictos, revuelos, pánico, confusión, entre otros. El periodismo tiene principios y hay que
cumplirlos. Veracidad, imparcialidad, objetividad, ser éticos, honestidad. Estos son algunos
de los principios del periodismo, y de los cuales algunos, Coronell carece.
Sabiendo que estamos en un país en el cual la gente cree todo lo que le dicen, Daniel
Coronell saca provecho de eso para redactar sus columnas y, además, tiene de cómplices a
la Corte Suprema de Justicia en cuanto a cualquier demanda en contra de los Uribe, ya que
la Corte se deleita al escuchar ese apellido. Lo pudimos notar en la difamación hecha por
Coronell hacia Tomás Uribe (hijo del expresidente Álvaro Uribe) y Javier Socarrás (caso de
hace más de 14 años en el que acusa a Tomás Uribe de tráfico de influencias). (José Manuel
Acevedo, Vanguardia, 2009).
Daniel Coronell es un experto en manipular y hacer creer a las personas que todo lo que dice
él es la completa verdad, que no se ha ocultado nada. Se toma el tiempo de buscar todas las
evidencias posibles para actuar en contra de la persona o entidad que va a acusar, pero
cuando encuentra toda la verdad, se guarda lo que no le favorece y pública únicamente lo
que el pueblo quiere saber. Engaña a las personas que lo apoyan, que lo apoyaron y lo
defendieron tras su salida de Semana y las acusaciones que le hacían de difamar. Solo le
importa su propio bien y que la gente piense de la misma manera en la que él lo hace, piensa
y hace pensar que le ha abierto los ojos a las personas que lo siguen y les hace creer que
solo ellos saben la única verdad. Pero no, no es así, las personas solo saben un pequeño
porcentaje de cómo son en realidad las acusaciones hechas por Coronell y, como escribí
anteriormente, se guarda la información que no le favorece.
Daniel Coronell es, a pesar de todas las difamaciones y acusaciones que ha hecho, un buen
periodista, y lo ha demostrado, pero no debe dejar caer esa imagen en la que las personas lo
tienen (algo muy complicado porque el momento en el que publique toda la verdad sobre
algo y no lo que la gente quiera saber y lo que piensan que va a publicar, perderá todo el
respeto por parte de la población Colombiana que lo sigue), no debe hacer de este país un
lugar en el que a los periodistas se les traten de mentirosos, vendidos, periodistas que no
son objetivos, sino que siempre tratan de hundir al que creen que es su enemigo, al que no
les favorece y al que no tiene su misma opinión o ideología política.
Colombia es un país que se ha caracterizado principalmente por su falta de libertad de
expresión, porque el que dice la verdad lo acaban asesinando, un país en el que los políticos
y personas importantes están envueltas en corrupción y/o con narcotraficantes que les
ayudan a subir al poder. Al redactar columnas en contra de esas personas, estamos dándole
la razón a los que piensan así, que Colombia es un país que no tiene cambio, que en todo
siempre hay alguien peor detrás de los otros. Nosotros, como personas que compartimos la
misma sangre colombiana, tenemos que apoyarnos unos a otros, no exponer a los demás a
la luz. No estoy diciendo que escribamos mentiras sobre los demás para hacerlos parecer
santos, estoy diciendo que podemos publicar aquellos escándalos, pero con la pura verdad,
que la gente sepa que es lo que hay realmente detrás de todo, que sepan el por qué y que
cada uno saque sus propias conclusiones, al fin y al cabo, es lo que todos (y aún más el
periodismo) queremos, la libertad, sea de expresión, prensa, pensamiento, opinión. Es lo que
nos une como pueblo, una única idea, libertad y no asesinar.

Referencias
Alberto Donadío. (2023). Daniel Coronell, fabricante de corruptos. Semana, párr. 1.
Recuperado de https://www.semana.com/opinion/articulo/daniel-coronell-fabricante-de-
corruptos/202300/
José Manuel Acevedo. (2009). Las convenientes mentiras de Coronell. Vanguardia, párr. 2.
Recuperado de https://www.vanguardia.com/opinion/columnistas/jose-manuel-acevedo/
las-convenientes-mentiras-de-coronell-DWVL40270

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