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En primer lugar, todos tenemos derecho a tener una vida digna al igual que una muerte digna,

nadie merece sufrir.

Según el artículo 3 de la declaración universal dice “Todo individuo tiene derecho a la vida, a la
libertad y a la seguridad de su persona”. Entonces cuando se está en una situación continua
del sufrimiento a causa de un tipo de enfermedad, no se puede llamar vida y es aquí cuando la
eutanasia se muestra como una salida a este sufrimiento. La vida no es un valor supremo, vivir
es un derecho más no una obligación.

Según el artículo 2 del convenio de derechos humanos establece que todo el mundo tiene el
derecho, pero también que no podrá ser torturado o sometido a situaciones de liga para los
favorables de las ganancias. No hay nada más denigrante que ser obligado a vivir esas
circunstancias. Una vida que no se puede vivir no es un privilegio, sino un castigo.

¿Qué sucede si no optamos por la eutanasia?


Al dejar vivir a una persona con una enfermedad terminal lo único que se logra es alargar su
sufrimiento, debemos de aprender a dejar ir, pues mantener duele, pero más duele el ver como
tu ser querido solo sufre y se desgasta, por lo tanto, la eutanasia nos permite prevenir aquel
sufrimiento y a no ser tratado de una forma cruel y humillante e incluso inhumano.

Si mencionan que la eutanasia es un asesinato.


Un asesinato es matar a una persona contra su voluntad y por otras razones la eutanasia es lo
contrario, es ayudar a una persona por amor y piedad. Esto ayuda a las personas que no tienen
los recursos económicos suficientes para seguir con los tratamientos necesarios. Para
mantener a una persona con vida no se debe intentar prolongar una vida si ya no se puede
vivir, porque la vida es un privilegio y en esas condiciones es un castigo porque nos dice que la
libertad está en ser dueños de la propia vida.

El derecho a participar en las decisiones médicas está relacionado con que todos los seres
humanos tienen el derecho a elegir el tratamiento médico que quieran recibir y así evitar lo que
se llama el encarnizamiento terapéutico, el empeño de mantener con vida al paciente usando
los medios que el médico proporciona.

Respuesta a la pregunta de Libni:

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