Está en la página 1de 1

Cuando abatida yo estoy

y no siento que estás conmigo Oh Señor.


Me compadezco al no saber
que siempre atento estás para saber si cuando
sea probada con fuego, cual oro yo brillaré.
Oh, Señor, se conmigo en las pruebas y así,
junto a ti, yo podré, ser cual quieres de mi.

Guíame, Señor, guíame Señor,


para que perfecta en tu amor llegue a ser.
Guíame, Señor, guíame Señor,
para que perfecta en tu amor llegue a ser.

Cuando pregunte ¿por qué?


Muéstrame que yo debo de confiar en ti.
Tú sabes qué es lo mejor
y confiando en ti podré así descansar.
Y con mi fe puesta en ti,
mis culpas se alejan ya.
Oh, Señor, se conmigo en las pruebas y así,
yo podré, junto a ti, ser cual quieres de mi.

También podría gustarte