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Construcción

De

CARRETERAS
Jóvenes:
Insisto en lo recomendado a los becarios hace ya 10 años, cuando
les entregaba los primeros ocho Capítulos: esto no es un libro. Sirve para
evitarles la responsabilidad de atender y registrar al mismo tiempo, y los
ayuda como ordenador de temas.

Ahora estoy completando los temas que considero necesitan para


poder llevar adelante la asignatura Construcción de Carreteras que
comprende: desde determinar la cota donde debe ser apoyada la estructura
del pavimento en la etapa de anteproyecto; el estudio y ejecución de cada
capa, hasta que se la demarca horizontal y verticalmente y se la habilita al
tránsito vehicular.

Esos primeros -Capítulos 1 a Capítulo 8- que iniciamos hace 10 años


fueron periódicamente ampliados, revisados y puestos al día. Y es mi intención
seguir haciéndolo, lo mismo que estos otros 7 capítulos que he agregado para
incluir los temas que conforman los conocimientos que pretendemos
adquieran para afrontar la Construcción de Carreteras.

No crean que con esto bajo el brazo serán proyectistas, inspectores


y constructores, y espero que ustedes lo entiendan y no lo intenten.
Solamente espero incentivarles la curiosidad para descubrir los
pasos que deben ir dando para transformar un monte, una montaña o un
desierto en un camino confortable y seguro por donde circularán las riquezas y
los sueños de quienes necesiten transitarlo.

Consideren este trabajo como lo que es, un material que les servirá
de apoyo en el que fui volcando; desde las clases de mis profesores, las
experiencias recogidas en estos 40 años, y la interpretación de los temas
incluidos de: libros, publicaciones y trabajos de investigación que asumo les
serán de utilidad.

Los libros y trabajos figuran en la bibliografía, y a ellos deben


recurrir para aclarar o ampliar cada tema.

Estoy a disposición de cada uno de ustedes, para las aclaraciones


que necesiten. Cordialmente

Norberto J. Cerutti

Buenos Aires, Julio de 2002


ORDENAMIENTO DE TEMAS

Capítulo 1 : Formación de los Suelos

Capítulo 2 : Fases del Sistema

Capítulo 3 : Trabajos de Campo

Capítulo 4 : Trabajos de Laboratorio – FASE SÓLIDA

Capítulo 5 : Trabajos de Laboratorio – FASES SÓLIDA-LÍQUIDA

Capítulo 6 : Clasificación de los Suelos

Capítulo 7 : Trabajos de Laboratorio – FASES SÓLIDA-LÍQUIDA-GASEOSA

Capítulo 8 : Estabilidad de los Suelos


Hasta aquí es Geotecnia para Obras Viales

Capítulo 9 : Materiales Asfálticos

Capítulo 10 : Movimiento de Suelos

Capítulo 11 : Estabilizaciones

Capítulo 12 : Revestimientos Asfálticos

Capítulo 13 : Mezclas Asfálticas en caliente

Capítulo 14 : Diseño Estructural de Pavimentos Flexibles

Capítulo 15 : Diseño Estructural de Pavimentos Rígidos

En preparación : Evaluación y Rehabilitación de Pavimentos


SUELOS

GEOTECNIA PARA OBRAS VIALES


Estimados Becarios:
Estas anotaciones, que se complementan con los Capítulos correspondientes
a Ingeniería de Fundaciones, van a servirles de guía del curso de Mecánica de Suelos que
desarrollamos anualmente en la Escuela de Graduados de Ingeniería de Caminos.
No pretende, de ninguna manera, reemplazar los textos que indicamos como bibliografía por
cuanto aquellos tienen un desarrollo ordenado a un curso completo y el nuestro es parcialmente
dirigido a quienes realizan este curso de la Escuela.
En él trato de transmitirles referencias prácticas que usualmente no encuentran en aquello,
aunque necesariamente deberé incursionar en conceptos generales, imposibles de soslayar.

Veamos como organizaremos el curso.


El primer paso lo dirigiremos a conocer el material que queremos estudiar; si es algo natural,
de donde proviene, como se forma, como está compuesto, hasta donde lo conocemos.
Llegado este punto veremos que el estudio que deseamos encarar tiene por lo menos dos
etapas: una en el campo donde pueden ejecutarse algunas determinaciones y/o extraer
muestras; la otra en el laboratorio en donde se someten estas muestras a estudios que permiten,
identificarlos, agruparlos si es posible y valorar su posterior comportamiento; diferente, según el
uso que se le pretenda dar y a las acciones a que será sometido.
Una tercera etapa consiste en le ordenamiento y evaluación de los resultados obtenidos en
las etapas anteriores.
No es la finalidad de este curso que los asistentes se transformen en especialistas, aunque si
a alguno le interesara el tema será bienvenido y estoy a su disposición para asistirlo hasta que lo
logre. Debe aceptar desde un principio que el camino que deberá recorrer es áspero y sinuosos;
no porque se trate de estudios profundos sino porque, salvo trabajando a diario con el material,
difícilmente se lo conoce.
Mi interés es brindarle conocimientos mínimos para que, usando su buen criterio, puedan
evaluar si el trabajo que haga un especialista es el necesario, del tipo requerido y en cantidad
conveniente; y si los resultados a que arriba tienen sustento técnico.
Este tipo de trabajos se presta para que profesionales sin muchos escrúpulos y olvidando lo
que es la ética, engañen a sus comitentes basándose en su desconocimiento, su ignorancia o su
timidez.
Tengo la pretensión de dar, aún a los más tímidos, los conocimientos para que sepan: que
tienen que pedir, que deben esperar recibir y que pueden exigir a quien ejecute los trabajos
geotécnicos.

Quiero dejar en claro que los estudios geotécnicos no los hacen solamente genios ni se
requiere aplicar métodos exotéricos; no es una ciencia oculta.
Trataré de hacerlos amigos de los suelos y si insisten en la investigación van a llegar a
conocerlo como tal. Siempre hay una serie de valores de campo y laboratorio que cierran el
círculo.
Un error que no deben cometer es echarle la culpa a una mala praxis, cuando un resultado no se
encuentra dentro del rango que esperan.
Repitan el ensayo; y si vuelve a darles un valor extraño, prueben con otro tipo de ensayo, y con
otro más.... Si los ensayos mantienen los valores, han descubierto algo distinto; no lo duden esto
es así. Los ensayos están bien y ese suelo en particular no entra en los cánones conocidos. Es
una posibilidad cierta y bastante frecuente. No se asusten.
Animo y Adelante.

Norberto J. Cerutti

Buenos Aires, Marzo de 1993


Toda obra de ingeniería cumple una función, originada en una necesidad del
Hombre.

Antes de materializar esa obra se deben cumplir cinco etapas prácticamente


insoslayables. Muchas veces, en países como el nuestro, se tratan de imbricar alguna de ellas
pensando en economizar. Este error tan común es siempre contraproducente: se termina
gastando mucho más. No debe ahorrarse en estudios; debe aplicarse ingeniería, conocimientos
generales, experiencia y honestidad. Así se ahorra.

Etapa 1 - Estudios de Prefactibilidad

En esta etapa, enfrentados a una necesidad, el ingeniero tiene que establecer dos
cuestiones: si la necesidad existe, si es tal; y en el caso que lo fuera si la ingeniería es capaz de
efectuar una obra que la satisfaga.

Etapa 2 - Estudios de Factibilidad

Con respuestas afirmativas en la etapa anterior, se comienzan los reconocimientos


preliminares con investigaciones muy someras, que permitan establecer en forma aproximada:
ubicación, probables problemas, aspectos negativos como impacto a la naturaleza o al
hombre; y lo fundamental si la relación -COSTO vs. RENDIMIENTO o BENEFICIO-, es
aceptable.

Etapa 3 – Anteproyecto

Con los elementos de la etapa anterior; decidida la ejecución de la obra, se encara esta
etapa profundizando los estudios anteriores, buscando definiciones.

Etapa 4 – Proyecto

La obra quedó globalmente definida. Se acometen los estudios finales que


complementen, ratificando o rectificando, los realizados para concretar la obra. Se elaboran
las Especificaciones Técnicas. Solo faltan los detalles constructivos.

Etapa 5 -Proyecto ejecutivo

Se estudian en profundidad los detalles y ubican los materiales necesarios. Se da apoyo


a la construcción, salvando los obstáculos técnicos que irremediablemente se presentan.

Ahora bien, en todos estos estudios, no importa la etapa de que se trate, hay dos
trabajos que no se deben dejar de lado. Y aclaro no se deben, porque se pueden, de hecho las
malas prácticas a que estamos acostumbrados lo hacen, por son fundamentales. Uno es
viejísimo, de las primeras profesiones conocidas, es la topografía o con más entidad la
agrimensura; el otro es la geotecnia.

No se puede pensar en hacer ninguna obra si no se conoce su ubicación planialtimétrica,


relacionada con hechos existentes; y los materiales de apoyo con las posibilidades que nos
permiten. A esta última nos vamos a dedicar nosotros.
CAPÍTULO 1

Formación de suelos
v. 02 – Rev 2003
INDICE

1 CAPITULO 1 - FORMACIÓN DE LOS SUELOS .............................................................. 2


1.1 EROSION 5
1.1.1 Erosión Mecánica 6
1.1.2 Erosión Química 9
1.1.3 Acción de factores Biológicos 9
1.2 PERFIL DEL SUELO 10
1.2.1 Textura, Color y Estructura 10
Referencias Bibliográficas del Capítulo 1 ............................................................................. 14
1 CAPITULO 1 - FORMACIÓN DE LOS SUELOS

En este capítulo daremos una definición del material con el cual vamos a trabajar. No
incursionaremos en las definiciones que les dan distintas disciplinas, por cuanto cada una
encara el estudio de un mismo sujeto desde ángulos diversos, poniendo el acento en aquellas
propiedades que considera más útil para su propia labor; y nos abocaremos solamente a la
que nos interesa para los estudios de ingeniería vial.

No significa esto que dejemos de lado la interpretación que pueden darle los geólogos,
los arquitectos, los biólogos, los químicos, los agrimensores o ingenieros geodestas-
geofísicos; con los cuales existe, y no puede ser de otra forma, una inter-relación necesaria,
lógica e imprescindible; sino mas bien que cuando se trate de estudios geotécnicos, para
que el resultado de nuestra labor se convierta en un conjunto homogéneo y útil para los fines
requeridos, contando con la apropiada apoyatura de las diferentes especialidades,
intentaremos llevarlos a nuestra interpretación de fenómenos y definiciones.

Con esta aclaración podríamos dar ya una primera definición de SUELO usada durante
los últimos 40 ó 50 años pero prefiero dejarla para algunos párrafos posteriores porque
entraríamos inmediatamente en colisión con los conocimientos y estudios desarrollados desde
entonces hasta nuestros días. Y esto es así porque si bien el uso de este material para
construcciones y las mas variadas aplicaciones superan largamente el alba de los tiempos de
nuestros conocimientos, el descubrimiento de algunos comportamientos anómalos no
imaginados u otros que resultaron asombrosos cuando la circunstancia obligó a emplearlos
en emergencias y desconfiando de su eficacia, permitió desarrollar ramas de la ingeniería
tales como la Mecánica de Suelos y la Mecánica de Rocas que persiguen el objetivo
concreto de estudiar; investigar; y aprender a manejar, podríamos decir en forma
“científica”, de la mejor manera posible estos materiales como: apoyo, constitutivo en forma
natural o procesada, o como matriz corregida o estabilizada en obras de ingeniería.

Dentro de estas ramas se trata en forma específica los estudios y procedimientos mas
adecuados para cada utilización que se vaya a dar a los materiales, según se trate de vías
de comunicación, fundación de estructuras, construcciones hidráulicas, desagües, etc. No
obstante veremos que diferenciando los procedimientos de investigación y obtención de
muestras; los distintos ensayos necesarios y la evaluación que de esos resultados se efectúa,
para nuestra especialidad convergen hacia un mismo destino: el conocimiento de la parte
superior de la corteza terrestre donde será implantada nuestra obra vial, y con pocas
variantes una aeropista o una vía ferroviaria.

Entonces antes de definir el material o materiales que pretendemos estudiar


determinemos el marco que restringirá el ámbito donde desarrollaremos nuestra porción de
ingeniería.
Para ello aceptaremos a Clarke que limita la corteza terrestre a la capa que se
extiende desde la cumbre de las montañas hasta 15 Km. por debajo del nivel del mar.
Desde luego que no pretendemos desarrollar nuestros estudios a semejante espesor,
normalmente nuestra limitación práctica va desde un par de metros a no mas de 70 a 150
m. del N.N.T. (Nivel Natural del Terreno); y como límite no práctico lo extendemos a 500
m..

Aclarado lo anterior vayamos a la vieja definición de SUELO: “Es la formación


natural, de estructura suelta o removible, y de espesor variable, resultante de la
transformación de la roca madre subyacente, bajo la influencia de diversos procesos físicos,
químicos y biológicos”.

En lo que a nuestras investigaciones concierne esta definición mantiene su vigencia,


salvo que deben agregarse las rocas; con esto queremos indicar que cuando en un estudio
detectamos el nivel superior del manto rocoso, no podemos darnos por satisfechos y
debemos continuar la investigación para establecer si se trata del macizo o de una fracción
de gran tamaño, su estado, su origen y el comportamiento que podemos esperar frente a la
obra que vamos a desplantar sobre ella.

Ahora bien, como en masa o disgregada nuestro material proviene de las rocas
que han tenido la oportunidad de alumbrar a la superficie, comenzaremos por hacer un
muy breve recuento de su clasificación y composición; solo en lo que es eminentemente
necesario, puesto que ustedes tienen una materia específica (Geología) en que lo verán
“in extenso”.

Podemos decir que las rocas que se encuentran pertenecen a dos clases: IGNEAS o
ERUPTIVAS y SEDIMENTARIAS. En distintas proporciones según consideremos nuestros
espesores prácticos o los 15 Km. definidos por Clarke.

En los 200 m. superiores el 75 % corresponde a rocas sedimentarias y el 25 % a


ígneas. En cambio en la totalidad de la corteza terrestre solo el 5 % corresponde a rocas
sedimentarias y el 95% a ígneas.

Las rocas IGNEAS son las resultantes del enfriamiento del magma fundido, que no
han experimentado cambios en su composición y estructura original; dependiendo de la
velocidad con que se produjo el enfriamiento su aspecto y estructura.

Un enfriamiento lento da lugar a la cristalización separada de los minerales que la


componen, conformando una estructura intrusiva, abierta de granos gruesos; podemos
mencionar como ejemplos mas salientes y probablemente mas conocidos a los granitos.

Como ejemplo de enfriamiento rápido mencionaremos a los basaltos; de grano fino y


estructura extrusiva densa.
Las velocidades medias de enfriamiento dan lugar a los pórfidos; con masa de
grano fino y algunos cristales mayores, su estructura extrusiva podemos clasificarla como
semidensa.

Tabla 1 - 1

Las rocas SEDIMENTARIAS son resultantes de la disgregación por diversos tipos


de erosión, de las rocas ígneas. El sedimento puede presentarse consolidado por efectos de
reacciones químicas, de presión o de temperatura; o sueltos que no son otra cosa que los
diferentes suelos, definidos anteriormente.

Tabla 1 – 2 (a)
No debemos dejar de mencionar un tercer grupo formado por rocas que se
diferencian de las anteriores por su textura. Se las conoce como rocas METAMORFICAS y
son aquellas ígneas o sedimentarias que han soportado el efecto de presión y/o
temperatura elevada, lo que ha producido la metamorfosis de la roca original que la
caracteriza.

Tabla 1 - 3

Numerosos investigadores han establecido la composición de las rocas que


alumbran en la superficie, y puesto que arriban a resultados por demás coincidentes,
seguiremos refiriéndonos a los determinados por Clarke.
Desde nuestra necesidad de conocimiento, los indicamos con la finalidad de distinguir
en el comportamiento de los distintos suelos, los elementos, óxidos o compuestos que
influyen en las características esenciales. - Láminas 1 - 4 y 1 – 5

Llegados a esta altura comenzaremos a indicar como a partir de las rocas llegamos al
material que nos ocupa. Ya habíamos indicado que entre los sedimentos resultantes de la
alteración de rocas ígneas aparecían los diferentes suelos; veamos cuales son los factores de
transformación.

1.1 EROSION

Las rocas que, fenómenos geológicos mediante, han llegado a la superficie quedan
expuestas a la acción de factores físicos, climáticos y químicos que en forma individual o
combinada provocan su alteración y/o desintegración.
Calificaremos como EROSION MECANICA a todas aquellas acciones que dan como
resultante la desintegración o subdivisión de la roca en unidades menores, sin que pierda
cada una las características propias de los minerales que la constituyen.

Llamaremos EROSION QUIMICA a aquellas acciones que se traducen en la


descomposición de las rocas, dando lugar a la formación de nuevas especies; requiere
siempre la presencia de humedad.

El clima del lugar tiene una influencia primordial en el desarrollo del tipo de erosión. La
desintegración mecánica predomina en regiones frías y desérticas, aunque la poca humedad
presente permite que se verifique algún tipo de erosión química. En zonas áridas con mayor
temperatura también predomina la erosión mecánica. Recién en regiones más lluviosas y con
temperaturas medias mas elevadas predomina la erosión química, sin que esto lleve a pensar
que la erosión mecánica esté totalmente ausente.

1.1.1 Erosión Mecánica

Estas acciones dan lugar a la formación de las partículas más gruesas de los suelos:
desde los cantos, pasando por los distintos tamaños de gravas hasta las arenas gruesas,
medianas y finas.

Las variaciones de temperatura, la acción de la gravedad, la acción del agua y la


acción del viento son los factores que provocan esta erosión.

El proceso se inicia en la mayoría de los casos por acción de la variación de


temperatura. En climas secos, la falta de humedad en la atmósfera hace que la radiación
resulte importante dando lugar a gradientes diarios de temperatura mayores de 60 °C.
Durante el día las temperaturas oscilan entre los 50 y los 60 °C, descendiendo por la noche a
temperaturas bajo cero. La reiteración de este proceso provoca resquebrajamiento de las
rocas expuestas, magnificándose en las cristalinas, que son rápidamente disgregadas. Esto
da lugar a que una nueva superficie quede expuesta y se reiteren las acciones.

En climas templados la causa principal es el congelamiento del agua retenida en el


interior de las rocas, estimada entre un 15 y un 20 %. El aumento de volumen que se produce
al pasar del estado líquido al sólido provoca la separación de diaclasas, grietas y del espacio
dejado por los planos de fractura, lo que permite que se infiltre mas agua repitiéndose el
proceso. Este a su vez se ve favorecido por la intrínseca heterogeneidad mineralógica, ya que
la diferencias entre los respectivos coeficientes de dilatación acentúa el efecto desintegrador.

Cuando esta primera subdivisión ocurre en lugares elevados, o las partículas quedan
en equilibrio inestable, se presenta otro de los factores mencionados que es la acción de la
gravedad. En estas condiciones las partículas se deslizan o caen, chocando entre si o con
otras rocas y friccionando contra el suelo. Esto provoca una nueva subdivisión en partículas
menores con mayor o menor dispersión según se trate de rocas duras, tenaces, frágiles, etc.

Es altamente probable que el destino final de las partículas sea el lecho de un


curso de agua, el que arrastrará partículas de tamaños variados, según la velocidad con que
se desplace la vena fluida. Esta acción del agua, otro de los factores mencionados, más que
disminuir las dimensiones de las partículas le redondea los bordes, porque si bien se
producen choques el efecto importante es el rodar que provoca el arrastre.
ROCAS
No son de composición homogenea.

Están constituídas por un conjunto de minerales

perfectamente separables. A modo de ejemplo damos

una composición bastante típica:

Potásico Ortoclasa
K2 O, Al2 O3, 6 Si O2

Sódico Albita
FELDESPATOS de 58 a 65 % Na2 O, Al2 O3, 6 Si O2

Silicatos dobles de Aluminio Cálcico Anortita


y otro metal Ca O, Al2 O3, 2 Si O2

Sodo - Cálcico Andesita


(Ca O, Na2 O) Al2 O3, 4 Si O2

CUARZO de 12 a15 % Anhidrido Silícico puro Sílice


Si O2

Blanca Moscovita
MICAS de 4 a 7 % (K2 O, Fe O)Al2 O3, 3 Si O2, (O H)2

Silicatos dobles de Aluminio Negra Biotita


y Potasio con Fe O (K2 O, Fe O, Mg O)Al2 O3, 3 Si O2, (O H )

MINERALES de 17 a 20 % Piroxena; Anfibola; Olivino


FERROMAGNESIANOS

Lá mina 1-4
FORMACION

ELEMENTOS Estado de OXIDOS

Oxigeno O 49,2 % Anh. Silícico Si O2 58,2 %

Silicio Si 26,0 % Ox. Aluminio Al 2 O3 16,0 %

Aluminio Al 7,4 % Ox. Férrico Fe2 O3 3,4 %

Hierro Fe 4,2 % Ox. Ferroso Fe O 3,8 %

Calcio Ca 3,3 % Ox. Magnesio Mg O 3,8 %

Magnesio Mg 2,5 % Ox. Calcio Ca O 5,2 %

Potasio K 2,4 % Ox. Potasio K2 O 3,2 %

Sodio Na 2,4 % Ox. Sodio Na2 O 3,9 %

Hidrógeno H 1,0 % Ox. Titanio Ti O2 1,0 %

Carbono C 0,3 % Agua H2 O 1,5 %

Titanio Ti 0,6 %

Azufre S 0,3 %

Fósforo P 0,2 %

Cloro Cl 0,2 %

Observese que el elem ento que Las com binaciones oxigenadas de los

m as abunda en la corteza es el elem entos m as abundantes dan el 58,2

OXIGENO, que es el agente m as % de Sílice, correspondiendo el 13,0%

poderoso en su quím ica. al Cuarzo (Si O2 libre) y el 45,2 %

En cantidad le sigue el SILICIO. a silicatos (Si O2 com binado)

Lá mina 1-5
El efecto eólico es solo de transporte de las partículas mas finas; se lo incluye en este
tipo de erosión, aunque en realidad actúa sobre partículas que han sufrido cambios por
cualquiera de los tipos de desintegraciones probables.

1.1.2 Erosión Química

La diferencia más importante con la erosión anterior es que los productos resultantes
son diferentes a los minerales que integran las rocas de la cual provienen; son otras
sustancias. Como ya ha sido indicado para que se ponga de manifiesto esta erosión es
imprescindible la presencia de agua a temperaturas mayores a 0 °C, es decir en estado
líquido o gaseoso.

La erosión química se produce por disolución, oxidación, hidratación o hidrólisis de


determinados minerales y/o compuestos que dan lugar a nuevos compuestos.

La disolución es la posibilidad de formar soluciones. Si bien la mayoría de los


minerales constituyentes de las rocas son insolubles en agua, cuando el fluido tiene disuelto
alguna sal como cloruro de sodio, o anhídrido carbónico, y se los mantiene en contacto el
tiempo suficiente en atmósfera propicia, la solubilidad aumenta considerablemente. La
solución deshidratada es la nueva sustancia formada.

El oxigeno, especialmente en climas húmedos, es un poderoso formador de


sustancias; ataca principalmente a los compuestos de menor valencia, en especial a los de
hierro y manganeso.

La hidratación se produce sobre algunas sales en estado amorfo que admiten la


incorporación de agua pasando a un estado cristalino.

El agua actúa sobre silicatos complejos insolubles, desdoblándolos en algunas


sustancias complejas diferentes y otras simples. Este desdoblamiento conocido por hidrólisis
necesita de tiempo y superficie de ataque, por lo que es tanto mas efectiva cuanto mayor sea
la superficie específica de los granos. Por esta razón el efecto es más eficaz sobre partículas
pequeñas que ya han sido erosionadas mecánicamente.

1.1.3 Acción de factores Biológicos

Finalmente no deben desecharse la influencia de factores biológicos en la formación


de los suelos. El calor y la humedad descomponen restos animales y vegetales que se
incorporan al suelo, dando lugar a materia orgánica en cantidades variables según el clima.
Hasta aquí hemos tratado de hacer una apretada síntesis de la forma en que se llega a
obtener esos materiales que ustedes pisan, que laborean para cultivar o mezclan con agua y
luego hornean para hacer vasijas, mas como se imaginarán una vez formado el material no se
queda estático ni podemos encontrarlo separadamente.

1.2 PERFIL DEL SUELO

Las deposiciones acaecidas en los millones de años que lleva formándose, dan lugar
a un ordenamiento que dimos en llamar perfil del suelo. En el distinguimos tres horizontes
principales, que pueden contar con subhorizontes, reconocidos: El superior u horizonte A es
de formación ELUVIAL, uno intermedio u horizonte B es de formación ILUVIAL y el horizonte
C o ROCA MADRE, material propio del lugar y generalmente origen de los anteriores.

Al Horizonte A se le asigna ese nombre por estar generado por eluviación que es el
traslado de materiales disueltos, en suspensión coloidal o en dispersión de un nivel, en
general, superior a otro inferior. El movimiento puede ser inverso por sequedad de la
superficie.
El horizonte B es el receptor de los materiales eluviados. Se le asigna el nombre de
ILUVIAL por ser el depósito, donde se acumulan los materiales extraídos del horizonte
anterior.

1.2.1 Textura, Color y Estructura

Establecer los límites entre ambos no es una nimiedad. Se requiere sólida experiencia
y estar en condiciones de distinguir algunas características como la textura, el color y la
estructura, singulares de los suelos de uno u otro horizonte.
No obstante es relativa la importancia que debemos dar desde nuestra óptica a esta
separación, si bien puede orientarnos sobre su comportamiento posterior hemos avanzado en
el conocimiento y contamos con recursos que nos permiten independizarnos, en cierta
forma, de saber si el suelo que debemos usar pertenece a uno u otro horizonte. Insisto: es
una ayuda saberlo, mas no fundamental. Solo orientativo.

La textura nos orienta sobre el grado de evolución alcanzado en la formación del suelo.
Distinguiremos como Textura Real a la que presenta el suelo en su estado natural, previo a
toda manipulación en el laboratorio; y como Textura Elemental a la que resulta una vez que
se han separado las partículas según su tamaño.

Pareciera obvio aclarar que en nuestros trabajos es mas importante la Textura Real
porque es la que va a presentar el suelo cuando apoyemos en el una carga; o cuando
utilicemos el suelo para formar una capa, que aún cuando tratemos de adaptarla a nuestras
necesidades las modificaciones o correcciones que introducimos sirven para resaltar o inhibir
ciertas características propias del material natural, probablemente actuando sobre algunas
partículas solamente pero raramente destruyan totalmente la Textura Real , logrando variarla
algo en el mejor de los casos.

La Textura Elemental nos interesa cuando tenemos que identificar al suelo o cuando,
para concebir un nuevo material, intentamos mezclarlo con productos que reaccionan solo con
algunos de los granos del suelo, entonces a escala de laboratorio es necesario estudiar la
respuesta sobre la Textura Elemental, aunque después a escala de obra el producto actúa
sobre la Textura Real.

El Color nos orienta acerca de algunos minerales o sustancia presentes en el suelo.


Ello nos puede alertar sobre ventajas o inconvenientes que pueden presentarse, solo a título
informativo.
Podemos encontrar suelos en una amplia gama de colores, que abarca todos los tonos
y matices desde el blanco de algunos suelos salinos; los grises, grises verdosos y grises
azulados que denotan la presencia de sodio, manganeso y potasio; los pardos denotan
presencia de calcio, con tinte rojizo la presencia de hematita (óxido de hierro no hidratado) o
con tinte amarillento la presencia de limonita (óxido de hierro hidratado); hasta el negro de
suelos con elevado contenido de materia orgánica (carbono).
Ahora bien, ¿qué significa para el ingeniero vial que un suelo tenga tal o cual color? En
realidad no mucho. Salvo que si es negro seguramente contiene suficiente materia orgánica
como para decidir sanearlo, que un suelo sea muy claro no significa que sea salino, ni uno
verdoso que es expansivo o uno marrón claro que es colapsible. Por si solo el color no
informa demasiado.

La Estructura como orientación para conocer a que horizonte pertenece el suelo es la


mas importante de las tres, aunque aislada tampoco sirve en forma determinante a nuestros
fines, y para identificar las mas interesantes que son las de suelos finos necesitamos el auxilio
de microscopios electrónicos o difractores de ondas, de información indirecta quedando
sujeta a la interpretación particular de un especialista.

Diremos nada más que la Estructura que presenta el suelo se debe a la forma y
tamaño de las partículas, puesto que de acuerdo a éstas se manifiesta la preponderancia de
las fuerzas actuantes entre los cristales.

Cuando el tamaño de los granos es grande y de forma equidimensional, las fuerzas


predominantes son netamente gravitacionales; ello da lugar a Estructura Suelta si los bordes
son redondeados y el tamaño uniforme; a Estructura Granular cuando presenta aristas vivas
y tienen tamaños variados y a Estructura Terronosa cuando la anterior tiene algunos finos
que le den cierto grado de cementación.

Cuando el tamaño es pequeño las partículas tienen forma laminar, con una o dos
dimensiones predominantes sobre las restantes. En estos casos las fuerzas predominantes
son las electromagnéticas; la intensidad de las cargas depende de los minerales aunque en
general se ha establecido que hay una concentración de cargas positivas en las aristas y de
cargas negativas en las superficies planas.
Esto da lugar a que cada partícula atraiga a cationes positivos que terminan rodeando
la misma, inclusive partículas de agua orientadas en forma definida firmemente adherida.
Esto a su vez hace que otros iones se orienten según su carga, dependiendo ello del medio
donde se desarrolla.

De esto concluimos que los suelos finos se estructuran siempre en forma compleja.
Son sinceramente raras las estructuras simples como la Estructura Panaloidea; la
Estructura Floculenta; la Estructura en Castillo de Naipes o la Estructura Dispersa en general
poco estables, constituyendo subestructuras de una compuesta por la adhesión ordenada de
aquellas. Estas estructuras complejas pueden por otra parte ordenarse en forma laminar
dando lugar a la Estructura Laminar o en forma prismática originando la Estructura
Prismática.

En las - Láminas 1 - 6 y 1-7 - podemos observar esquemáticamente estos


ordenamientos.
Digamos entonces finalmente que el conocimiento conjunto de la estructura, la textura
y el color sirve de guía para orientarnos sobre algunos comportamientos esperados del suelo
que se trate, independientemente de que nos permita establecer si pertenece a tal o cual
horizonte.
Referencias Bibliográficas del Capítulo 1

• Perforaciones y Sondeos - H. Cambefort - Edit. Omega.

• Mecánica de Suelos - E.Juarez Badillo, A.Rico Rodriguez ;Edit. Limusa.


• Tomos I - Pag. 33 a 37

• Geotecnia y Cimientos - J.A. Jimenez Salas, J.L.Justo Alpañez ;Edit. Rueda.


• Tomos I - Pag. 1 a 27

• Conocimiento y Estudio de Suelos - L. Hervot -Lab. Inv. Viales - Esc. Grad.


Ingeniería de Caminos.

• Traité de Mécanique des Sols - Caquot y Kerisel.

• La Ingeniería de Suelos en las Vías Terrestres - A.Rico, H.Del Castillo ; Edit. Limusa.
Tomo I - Pag. 93 a 111

• Engineering Properties of Soils and Rocks - F. G. Bell -Edit. Whitstable.

• Mecánica de Suelos - T.W.Lambe, R.V.Whitman -Edit. Limusa. Pag. 39 a 45

• Ingeniería de Carreteras - P.H.Wright -Edit. Limusa. Pag. 499 a 500

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