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Construccion de Carreteras
Construccion de Carreteras
De
CARRETERAS
Jóvenes:
Insisto en lo recomendado a los becarios hace ya 10 años, cuando
les entregaba los primeros ocho Capítulos: esto no es un libro. Sirve para
evitarles la responsabilidad de atender y registrar al mismo tiempo, y los
ayuda como ordenador de temas.
Consideren este trabajo como lo que es, un material que les servirá
de apoyo en el que fui volcando; desde las clases de mis profesores, las
experiencias recogidas en estos 40 años, y la interpretación de los temas
incluidos de: libros, publicaciones y trabajos de investigación que asumo les
serán de utilidad.
Norberto J. Cerutti
Capítulo 11 : Estabilizaciones
Quiero dejar en claro que los estudios geotécnicos no los hacen solamente genios ni se
requiere aplicar métodos exotéricos; no es una ciencia oculta.
Trataré de hacerlos amigos de los suelos y si insisten en la investigación van a llegar a
conocerlo como tal. Siempre hay una serie de valores de campo y laboratorio que cierran el
círculo.
Un error que no deben cometer es echarle la culpa a una mala praxis, cuando un resultado no se
encuentra dentro del rango que esperan.
Repitan el ensayo; y si vuelve a darles un valor extraño, prueben con otro tipo de ensayo, y con
otro más.... Si los ensayos mantienen los valores, han descubierto algo distinto; no lo duden esto
es así. Los ensayos están bien y ese suelo en particular no entra en los cánones conocidos. Es
una posibilidad cierta y bastante frecuente. No se asusten.
Animo y Adelante.
Norberto J. Cerutti
En esta etapa, enfrentados a una necesidad, el ingeniero tiene que establecer dos
cuestiones: si la necesidad existe, si es tal; y en el caso que lo fuera si la ingeniería es capaz de
efectuar una obra que la satisfaga.
Etapa 3 – Anteproyecto
Con los elementos de la etapa anterior; decidida la ejecución de la obra, se encara esta
etapa profundizando los estudios anteriores, buscando definiciones.
Etapa 4 – Proyecto
Ahora bien, en todos estos estudios, no importa la etapa de que se trate, hay dos
trabajos que no se deben dejar de lado. Y aclaro no se deben, porque se pueden, de hecho las
malas prácticas a que estamos acostumbrados lo hacen, por son fundamentales. Uno es
viejísimo, de las primeras profesiones conocidas, es la topografía o con más entidad la
agrimensura; el otro es la geotecnia.
Formación de suelos
v. 02 – Rev 2003
INDICE
En este capítulo daremos una definición del material con el cual vamos a trabajar. No
incursionaremos en las definiciones que les dan distintas disciplinas, por cuanto cada una
encara el estudio de un mismo sujeto desde ángulos diversos, poniendo el acento en aquellas
propiedades que considera más útil para su propia labor; y nos abocaremos solamente a la
que nos interesa para los estudios de ingeniería vial.
No significa esto que dejemos de lado la interpretación que pueden darle los geólogos,
los arquitectos, los biólogos, los químicos, los agrimensores o ingenieros geodestas-
geofísicos; con los cuales existe, y no puede ser de otra forma, una inter-relación necesaria,
lógica e imprescindible; sino mas bien que cuando se trate de estudios geotécnicos, para
que el resultado de nuestra labor se convierta en un conjunto homogéneo y útil para los fines
requeridos, contando con la apropiada apoyatura de las diferentes especialidades,
intentaremos llevarlos a nuestra interpretación de fenómenos y definiciones.
Con esta aclaración podríamos dar ya una primera definición de SUELO usada durante
los últimos 40 ó 50 años pero prefiero dejarla para algunos párrafos posteriores porque
entraríamos inmediatamente en colisión con los conocimientos y estudios desarrollados desde
entonces hasta nuestros días. Y esto es así porque si bien el uso de este material para
construcciones y las mas variadas aplicaciones superan largamente el alba de los tiempos de
nuestros conocimientos, el descubrimiento de algunos comportamientos anómalos no
imaginados u otros que resultaron asombrosos cuando la circunstancia obligó a emplearlos
en emergencias y desconfiando de su eficacia, permitió desarrollar ramas de la ingeniería
tales como la Mecánica de Suelos y la Mecánica de Rocas que persiguen el objetivo
concreto de estudiar; investigar; y aprender a manejar, podríamos decir en forma
“científica”, de la mejor manera posible estos materiales como: apoyo, constitutivo en forma
natural o procesada, o como matriz corregida o estabilizada en obras de ingeniería.
Dentro de estas ramas se trata en forma específica los estudios y procedimientos mas
adecuados para cada utilización que se vaya a dar a los materiales, según se trate de vías
de comunicación, fundación de estructuras, construcciones hidráulicas, desagües, etc. No
obstante veremos que diferenciando los procedimientos de investigación y obtención de
muestras; los distintos ensayos necesarios y la evaluación que de esos resultados se efectúa,
para nuestra especialidad convergen hacia un mismo destino: el conocimiento de la parte
superior de la corteza terrestre donde será implantada nuestra obra vial, y con pocas
variantes una aeropista o una vía ferroviaria.
Ahora bien, como en masa o disgregada nuestro material proviene de las rocas
que han tenido la oportunidad de alumbrar a la superficie, comenzaremos por hacer un
muy breve recuento de su clasificación y composición; solo en lo que es eminentemente
necesario, puesto que ustedes tienen una materia específica (Geología) en que lo verán
“in extenso”.
Podemos decir que las rocas que se encuentran pertenecen a dos clases: IGNEAS o
ERUPTIVAS y SEDIMENTARIAS. En distintas proporciones según consideremos nuestros
espesores prácticos o los 15 Km. definidos por Clarke.
Las rocas IGNEAS son las resultantes del enfriamiento del magma fundido, que no
han experimentado cambios en su composición y estructura original; dependiendo de la
velocidad con que se produjo el enfriamiento su aspecto y estructura.
Tabla 1 - 1
Tabla 1 – 2 (a)
No debemos dejar de mencionar un tercer grupo formado por rocas que se
diferencian de las anteriores por su textura. Se las conoce como rocas METAMORFICAS y
son aquellas ígneas o sedimentarias que han soportado el efecto de presión y/o
temperatura elevada, lo que ha producido la metamorfosis de la roca original que la
caracteriza.
Tabla 1 - 3
Llegados a esta altura comenzaremos a indicar como a partir de las rocas llegamos al
material que nos ocupa. Ya habíamos indicado que entre los sedimentos resultantes de la
alteración de rocas ígneas aparecían los diferentes suelos; veamos cuales son los factores de
transformación.
1.1 EROSION
Las rocas que, fenómenos geológicos mediante, han llegado a la superficie quedan
expuestas a la acción de factores físicos, climáticos y químicos que en forma individual o
combinada provocan su alteración y/o desintegración.
Calificaremos como EROSION MECANICA a todas aquellas acciones que dan como
resultante la desintegración o subdivisión de la roca en unidades menores, sin que pierda
cada una las características propias de los minerales que la constituyen.
El clima del lugar tiene una influencia primordial en el desarrollo del tipo de erosión. La
desintegración mecánica predomina en regiones frías y desérticas, aunque la poca humedad
presente permite que se verifique algún tipo de erosión química. En zonas áridas con mayor
temperatura también predomina la erosión mecánica. Recién en regiones más lluviosas y con
temperaturas medias mas elevadas predomina la erosión química, sin que esto lleve a pensar
que la erosión mecánica esté totalmente ausente.
Estas acciones dan lugar a la formación de las partículas más gruesas de los suelos:
desde los cantos, pasando por los distintos tamaños de gravas hasta las arenas gruesas,
medianas y finas.
Cuando esta primera subdivisión ocurre en lugares elevados, o las partículas quedan
en equilibrio inestable, se presenta otro de los factores mencionados que es la acción de la
gravedad. En estas condiciones las partículas se deslizan o caen, chocando entre si o con
otras rocas y friccionando contra el suelo. Esto provoca una nueva subdivisión en partículas
menores con mayor o menor dispersión según se trate de rocas duras, tenaces, frágiles, etc.
Potásico Ortoclasa
K2 O, Al2 O3, 6 Si O2
Sódico Albita
FELDESPATOS de 58 a 65 % Na2 O, Al2 O3, 6 Si O2
Blanca Moscovita
MICAS de 4 a 7 % (K2 O, Fe O)Al2 O3, 3 Si O2, (O H)2
Lá mina 1-4
FORMACION
Titanio Ti 0,6 %
Azufre S 0,3 %
Fósforo P 0,2 %
Cloro Cl 0,2 %
Observese que el elem ento que Las com binaciones oxigenadas de los
Lá mina 1-5
El efecto eólico es solo de transporte de las partículas mas finas; se lo incluye en este
tipo de erosión, aunque en realidad actúa sobre partículas que han sufrido cambios por
cualquiera de los tipos de desintegraciones probables.
La diferencia más importante con la erosión anterior es que los productos resultantes
son diferentes a los minerales que integran las rocas de la cual provienen; son otras
sustancias. Como ya ha sido indicado para que se ponga de manifiesto esta erosión es
imprescindible la presencia de agua a temperaturas mayores a 0 °C, es decir en estado
líquido o gaseoso.
Las deposiciones acaecidas en los millones de años que lleva formándose, dan lugar
a un ordenamiento que dimos en llamar perfil del suelo. En el distinguimos tres horizontes
principales, que pueden contar con subhorizontes, reconocidos: El superior u horizonte A es
de formación ELUVIAL, uno intermedio u horizonte B es de formación ILUVIAL y el horizonte
C o ROCA MADRE, material propio del lugar y generalmente origen de los anteriores.
Al Horizonte A se le asigna ese nombre por estar generado por eluviación que es el
traslado de materiales disueltos, en suspensión coloidal o en dispersión de un nivel, en
general, superior a otro inferior. El movimiento puede ser inverso por sequedad de la
superficie.
El horizonte B es el receptor de los materiales eluviados. Se le asigna el nombre de
ILUVIAL por ser el depósito, donde se acumulan los materiales extraídos del horizonte
anterior.
Establecer los límites entre ambos no es una nimiedad. Se requiere sólida experiencia
y estar en condiciones de distinguir algunas características como la textura, el color y la
estructura, singulares de los suelos de uno u otro horizonte.
No obstante es relativa la importancia que debemos dar desde nuestra óptica a esta
separación, si bien puede orientarnos sobre su comportamiento posterior hemos avanzado en
el conocimiento y contamos con recursos que nos permiten independizarnos, en cierta
forma, de saber si el suelo que debemos usar pertenece a uno u otro horizonte. Insisto: es
una ayuda saberlo, mas no fundamental. Solo orientativo.
La textura nos orienta sobre el grado de evolución alcanzado en la formación del suelo.
Distinguiremos como Textura Real a la que presenta el suelo en su estado natural, previo a
toda manipulación en el laboratorio; y como Textura Elemental a la que resulta una vez que
se han separado las partículas según su tamaño.
Pareciera obvio aclarar que en nuestros trabajos es mas importante la Textura Real
porque es la que va a presentar el suelo cuando apoyemos en el una carga; o cuando
utilicemos el suelo para formar una capa, que aún cuando tratemos de adaptarla a nuestras
necesidades las modificaciones o correcciones que introducimos sirven para resaltar o inhibir
ciertas características propias del material natural, probablemente actuando sobre algunas
partículas solamente pero raramente destruyan totalmente la Textura Real , logrando variarla
algo en el mejor de los casos.
La Textura Elemental nos interesa cuando tenemos que identificar al suelo o cuando,
para concebir un nuevo material, intentamos mezclarlo con productos que reaccionan solo con
algunos de los granos del suelo, entonces a escala de laboratorio es necesario estudiar la
respuesta sobre la Textura Elemental, aunque después a escala de obra el producto actúa
sobre la Textura Real.
Diremos nada más que la Estructura que presenta el suelo se debe a la forma y
tamaño de las partículas, puesto que de acuerdo a éstas se manifiesta la preponderancia de
las fuerzas actuantes entre los cristales.
Cuando el tamaño es pequeño las partículas tienen forma laminar, con una o dos
dimensiones predominantes sobre las restantes. En estos casos las fuerzas predominantes
son las electromagnéticas; la intensidad de las cargas depende de los minerales aunque en
general se ha establecido que hay una concentración de cargas positivas en las aristas y de
cargas negativas en las superficies planas.
Esto da lugar a que cada partícula atraiga a cationes positivos que terminan rodeando
la misma, inclusive partículas de agua orientadas en forma definida firmemente adherida.
Esto a su vez hace que otros iones se orienten según su carga, dependiendo ello del medio
donde se desarrolla.
De esto concluimos que los suelos finos se estructuran siempre en forma compleja.
Son sinceramente raras las estructuras simples como la Estructura Panaloidea; la
Estructura Floculenta; la Estructura en Castillo de Naipes o la Estructura Dispersa en general
poco estables, constituyendo subestructuras de una compuesta por la adhesión ordenada de
aquellas. Estas estructuras complejas pueden por otra parte ordenarse en forma laminar
dando lugar a la Estructura Laminar o en forma prismática originando la Estructura
Prismática.
• La Ingeniería de Suelos en las Vías Terrestres - A.Rico, H.Del Castillo ; Edit. Limusa.
Tomo I - Pag. 93 a 111