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A.:L.:G.:D.:G.:A.:D.:U.

“Estudio de lo esencial que aporta la masonería en el perfeccionamiento del


masón”.

Es difícil en pensar ¿qué es lo esencial que necesita un ser humano para


perfeccionarse? Pués partimos de la base que el ser es humano, es primero, y
masón más tarde. Bajo este precepto, entendemos que la persona viene con un
determinado seteo, (hablando informáticamente), es decir, ya con determinadas
características de cuna, escolar y socialmente resuelto. Al momento de ingresar a
la O.: se nos dice en el ritual de iniciación, en la respuesta a la consulta hacia el
profano, en su primera parte ¿qué idea tenéis de nuestra Institución? : “Nuestra
Orden elige hombres, los educa, los organiza y disciplina; esto es, corrige en ellos,
cuanto es posible, los defectos de herencia;………..purifica por medio del estudio,
por el ejercicio de la justicia y por la actividad del trabajo………(termina esta parte
diciendo) …… en medio del oleaje de las evoluciones y revoluciones de la
humanidad”.
Nuestro Ritual nos habla en este acápite sobre lo esencial a aportar por
parte de la institución, a un hombre que viene llegando a nuestras filas, dice
claramente que nuestra Orden; elige, educa, organiza, disciplina, corrige, enseña,
purifica, ejercita en justicia, investiga, nuevamente: enseña y educa, planifica
(“comienza su obra en los Hermanos, y por consecuencia lenta, pero eficaz y
profunda, la termina en la sociedad profana”.) Inspira solo altos ideales, ofrece
adaptación, (“Puede así adaptarse a las evoluciones sucesivas de la civilización en
cada tiempo y en cada país.”) Nuestro Ritual es claro en lo que la Masonería puede
y debe aportar al hombre dentro y fuera de sus muros. Está totalmente encasillada
en el valor de la enseñanza o docencia, es la piedra angular que sostiene la
Institución, su docencia es la encargada de perfeccionar al hombre que por un
decantamiento natural, influirá en el bienestar de toda la sociedad.
En nuestra constitución, en el apartado de los principios, en su segundo
párrafo, nos ilustra: “Promueve (La Institución) entre sus adeptos la búsqueda
incesante de la verdad, el conocimiento de sí mismo y del hombre en el medio en
que vive y convive”.
Recordando una escultura de Albín Polásek, “artífice de su destino”, una de
las tantas escultura que muestran a un hombre autoesculpiéndose, me refiere que:
lo esencial es el tener presente en conciencia, que el autoperfeccionamiento
siempre se encontrará en el camino de todo ser humano, y ahí es donde se hace la
diferencia por un masón, este entenderá que el constante trabajo en uno mismo, es
lo esencial, para cualquier meta, objetivo e ideal. Es este conocimiento el que se
develará ante el que quiera o sepa verlo. He ahí lo esencial de la Masonería.

S.:F.:U.:

Andrés León Villanueva.

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