UNA VIDA EN PRISIÓN, UN MUNDO DISTINTO AL

NUESTRO
¿Alguna vez se preguntaron cómo es la vida de un recluso?, no es necesario
preguntar a alguien o buscar en fuentes de internet para saber ello, ya que
podemos obtener la respuesta en una obra muy famosa, tal como lo es “EL
SEXTO” publicada en 1961 por el gran escritor Peruano José María Arguedas,
nacido en Andahuaylas (Apurímac) el 18 de enero de 1911 y que tuvo un trágico
fallecimiento en 1969. Aquel personaje desempeñó muchos e importantes roles
en su vida y en el país y se ganó gran reconocimiento a nivel nacional y mundial.

En prisión, suceden muchos actos en contra de los derechos humanos de cada

recluso, ¿está correcto esto?, la respuesta es ¡NO!, está mal desde cualquier
punto que la veamos, si bien es cierto que estas personas pueden cometer
acciones no correctas que los llevan a estar en esta condición sin embargo no
es motivo para que sean violentados ni injustos con ellos más aun sabiendo que
todos somos iguales, que todos somos peruanos.

La obra de José María Arguedas comienza con el ingreso de Gabriel al penal

“EL SEXTO”, donde pudo observar los problemas que existían dentro de este
establecimiento. Narra que el penal se divide en pisos según la condición de
cada recluso, y solo al comienzo puede observarse la injusticia y corrupción que
existe en prisión, donde los vagos son los más débiles y los políticos tienen gran
preferencia y beneficios. Asimismo, el dominio de éste es uno de los problemas
más grandes, perjudicando a muchas personas. La violencia, el maltrato, la
injusticia, son problemas muy graves que sufren los reclusos día a día en las
prisiones, y esto se puede confirmar por lo relatado en la obra, donde los líderes
y dominantes abusan con el poder que tienen. Al preguntarnos si solo son estos
los únicos problemas que suceden, estamos muy equivocado,que por errores,
necesidades o malas decisiones, se encuentran atados a esta vida “sin
derechos”.

Si tendríamos que comparar esta vida con la de una persona libre, es evidente
la diferencia, ves el mundo de una manera totalmente distinta, no vives sujeto a
reglas que al no cumplirlas puedes sufrir maltratos y no poder expresarte
libremente, hacer las cosas que te gustan sin tener que preocuparte por sufrir
agresiones físicas o emocionales, de alguna u otra manera se podría decir que
son mundos totalmente distintos.

El maltrato y la violencia no parte solo de los “amos” de los penales, sino viene
desde más allá: la corrupción por parte de las autoridades encargadas de estos
centros penitenciaros, tal como Arguedas nos lo narra en su obra, relata que
aquellos que tenían el poder, estaban en convenio con las autoridades y
guardias. El caso de Maraví; el amo del SEXTO, quien, junto a Puñalada, Rosita,
y otros que dominaban en esta cárcel, da mucho que hablar, ya que estos
siempre fueron apañados por el guardia e incluso por el sargento, esto genera
gran indignación ya que muestra la desigualdad e injusticia que genera la
corrupción, a la ves es motivo de múltiples conflictos.

Podemos confirmar que la corrupción es uno de los problemas más graves de

nuestro país que se encuentran incrustados en todos los sectores la mismas que
es la responsable del poco desarrollo del país.

A través de esta obra podemos confirmar que existe un alto índice de violencia
y maltrato en la cárcel. EL SEXTO narra todo el abuso que sufren algunos
presos, tal como lo es el caso del japonés, El pianista, el delincuente Clavel,
entre otros, quienes a diario soportaban diferentes formas de maltrato por parte
de puñalada y otros amos de este cruel lugar, aquí involucran a otro problema,
que es el hecho de que las autoridades y guardias no hacían nada al respecto
incluso si conocían bien el tema. Este hecho generaba gran indignación a
Arguedas que en la obra tiene el nombre de “Gabriel”, quien junto a algunos
presos que compartían sus ideas buscando la forma de acabar con todo eso.
Para que puedan tener una vida digna y sin maltratos.

Muy a parte de los maltratos físicos, éstos terminan con problemas psicológicos,
llegando al extremo de convertirse en personas aisladas, tímidas que como
consecuencia llegan al suicidio al no poder soportar todo lo que pasan día tras
día. Pero la vida que llevamos los que estamos fuera de esas paredes también
está llena de conflictos con la diferencia que te puedes defenderte y buscar
aliados.
Imagínense pasar por esto, pasar por este mundo lleno de actos crueles, ¿creo
que a nadie le gustaría eso verdad?, una persona fuera de estos aterradores
lugares tiene más probabilidades de encontrarle sentido a la vida, ¿en cambio
los presos que?, ellos simplemente se sumergen en la oscuridad, en la
desesperación, buscando una forma de acabar con ese sufrimiento, con tantos
días de dolor, esperan ese día donde puedan decir, “al fin después de tanto
esperar, regresé al mundo real”.

Las personas sin importa el lugar donde nos encontramos merecemos un estilo
de vida que nos asegure una buena salud, , sin embargo en esta obra podemos
observar la carencia de uno de los servicios más importantes diría yo , que son
los servicios higiénicos , pues los presos comunes sufren mucho al estar en un
ambiente donde ni siquiera pueden defecar ya que la mayoría de los baños no
tienen siquiera una puerta ni mucho menos son lugares cerrados, son solo
agujeros, donde los demás pueden verlos.

Otro gravísimo problema también es el tema de las violaciones e incluso hay

reclusos que son objetos sexuales de otros y que por más que detesten y no
soporten eso, no pueden hacer nada al respecto. Ser violado, un término que se
usa constantemente, y que todos están en contra de ello, pero, ¿Qué pasa si se
habla de la cárcel?, ahí es donde todos se hacen como si no supieran nada,
como si no pasara nada, es donde todos están a favor de eso, pero nadie se
pone a pensar en aquello que esa persona está pasando, incluso podría estar
pensando en quitarse la vida al no poder soportarlo, pero nadie se da cuenta de
eso, solo ven los errores cometidos en el pasado, ¡eso es lo que hace la sociedad
de hoy en día!, solo se fija en los errores de los demás para juzgarlo y tomarlos
como malas personas. Estos actos de crueldad se pueden evidenciar claramente
en la obra, donde un delincuente que había llegado, era prostituido a cambio de
cosas, y por más que los guardias y autoridades lo sabían, lo dejaban pasar,
porque es tanta la falta de empatía que existe en nuestra sociedad que hace que
no seamos capaces de ayudar a los demás.

Muchos casos de homicidios y suicidios suceden en estos lugares, y esa es la

triste realidad, es eso a lo único que lleva la violencia, el maltrato y la injusticia.
La obra literaria “EL SEXTO ” no es una simple obra, en verdad relata con hechos
reales la gran mayoría de problemas y situaciones de los reclusos día tras día, y
digo gran mayoría porque esto no es todo lo que pueden sufrir estas personas,
sino que existen más situaciones en las que sus derechos vienen siendo
vulnerados y se ven afectados cada día más en estos crueles lugares y también
fuera de ella en pocas palabras, se podría decir que la vida no es vida

Finalmente debemos comprender que la vida y los derechos de una persona no

tienen por qué estar sujetos a condiciones puestas por otros que simplemente
ignoran la realidad, por aquellos que viven sumergidos en pensamientos
violentos y dominantes, un preso no puede dominar sobre la vida de otro, como
tampoco fuera de ella, por el simple hecho de no tener a nadie que los defienda
o que haga algo al respecto, simplemente esperar a aquel día que su condena
termine, aquel día donde termine la pesadilla, donde pueden sentirse libres de
nuevo, llevándolos a reflexionar sobre sus malas acciones, pero no será así de
fácile ya que esto va a ser consecuencia de los traumas psicológicos que tienen
ahora. Estos traumas cambian significativamente a las personas, muchos
pueden decir que es “para bien”, pero no es así, si se pusieran a pensar sobre
esa realidad, sobre esa cruel vida, sobre esos momentos donde la existencia no
tiene sentido, no sentirían lo mismo, también suelen decir “se lo merecen”,
¿Merecer qué?, ¿una vida llena de maltratos e injusticia que solo te causan
daño?, no debe ser así, cada persona tiene sentimientos y pensamientos como
cualquier otra; por lo tanto, aquello que pasan le puede pasar a cualquier otro,
nadie está libre de pasar por estas situaciones , nunca debes estar a favor de
este tipo de acciones, ya que esto también refleja la personalidad de cada uno,
como persona y como ciudadano y, la contribución en la sociedad.

Con todo esto quiero dejar en claro que la cárcel es solo un lugar donde la vida
para muchos no toma sentido, pero que debemos reflexionar en base esto. Sobre
todo, esto se podría confirmar que estos son dos mundos totalmente distintos,
donde la convivencia y la vida tiene tanta desigualdad en ambos casos, nuestro
mundo, el de nosotros los que estamos libres, debemos hablar por aquellos del
otro mundo que debido a las situaciones ya mencionadas no tienen voz,
hagamos que todo sea igual y que la vida sea realmente vida para todos.