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Prevención del Consumo de


Sustancias Psicoactivas
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Aprendamos acerca de las sustancias psicoactivas

¿Qué son las sustancias psicoactivas y como se clasifican?


Según el Ministerio de salud es toda sustancia licita o ilícita que introducida en el organismo por cualquier
vía de administración (ingerida, fumada, inhalada, inyectada, entre otras) produce una alteración del
funcionamiento del sistema nervioso central del individuo, la cual modifica la conciencia, el estado de
ánimo o los procesos de pensamiento.
Según la OMS las sustancias psicoactivas son diversos compuestos naturales o sintéticos, que actúan
sobre el sistema nervioso generando alteraciones en las funciones que regulan pensamientos, emociones
y el comportamiento. De igual manera puede causar problemas crónicos de salud a nivel físico,
desarrollando enfermedades pulmonares, Cáncer, embolias entre otras.
Existes diversos tipos se sustancias psicoactivas y de igual manera formas de clasificación, sin embargo,
se han establecido tres grandes grupos que nos permiten identificarlas mejor, estos son:
✓ Según sus efectos en el cerebro pueden ser: Depresoras o estimulantes del sistema nervioso o
alucinógenas.
✓ Según su origen: Naturales, como por ejemplo el cannabis, los hongos, el tabaco, sintéticas como
lo son los estimulantes, las anfetaminas, el éxtasis y semisintéticas llamadas así porque son
extraídas de elementos naturales como por ejemplo la cocaína que es producida a partir de la
hoja de la planta de coca.
✓ Según la normatividad: Legales como el alcohol o ilegales como la heroína y el basuco.
Existen diferentes tipos de consumo de las sustancias psicoactivas, dependiendo del contexto y las
motivaciones, que pueden ser diversas. Estos tipos son:
❖ Consumo experimental: Es el contacto inicial con la sustancia, puede darse por la curiosidad de
conocer sus efectos, en este tipo puede darse el abandono de la misma o que se vaya dando un
aumento de consumo.
❖ Consumo ocasional: sucede de forma intermitente, el consumidor puede pasar largos periodos
sin ingerir la sustancia, normalmente conoce el efecto de la sustancia en su organismo y lo
controla.
❖ Consumo recreativo: Es un consumo motivado por el placer, la persona busca divertirse,
normalmente lo hace al compartir alguna actividad con amigos.
❖ Consumo Habitual: La sustancia de consume de manera frecuente, puede conducir a formas de
consumo que pueden afectar al individuo.
❖ Consumo compulsivo: En este caso ya la persona es adicta a la sustancia, consume de manera
constante, sin tener en cuenta los efectos que producen en ella.
❖ Consumo problemático: Es todo consumo que incida negativamente en la salud, en las relaciones
con la familia, los amigos, en el desempeño cotidiano ya sea en el trabajo o en el estudio. De igual
manera todo consumo que sea por parte de mujeres en estado de embarazo, en periodo de
lactancia, de niños o adolescentes es considerado problemático.
❖ Y por último la dependencia
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Aunque puede ser un término más conocido recordemos que la Dependencia, a las sustancias psicoactivas
ya sean licitas o ilícitas, se define como el consumo de estas de manera constante y compulsiva, hasta el
punto de que el individuo es incapaz de dejar de consumirlas pese a todos los conflictos que le puede
ocasionar.
Se evidencia claramente con lo expuesto hasta el momento, que el abuso en el consumo de sustancias
psicoactivas puede generar un deterioro significativo en la salud del individuo, incidiendo negativamente
en el componente físico y mental de la misma.
A nivel físico uno de los órganos que se afecta es el cerebro siendo este vital para nuestro funcionamiento.
Conocer y analizar cómo funciona el cerebro, no es nada sencillo. Sin embargo, compartiremos algunos
aspectos generales que nos ayudaran a reconocer como se afecta el mismo cuando está expuesto al
consumo de sustancias psicoactivas.
El Cerebro y el Consumo de Sustancias Psicoactivas
El cerebro se divide en dos grandes hemisferios y cada uno de ellos por cuatro lóbulos frontal, parietal,
temporal y occipital, según y cada uno aporta al cumplimiento de las diferentes funciones, por ejemplo,
el lóbulo frontal planifica y oriente nuestros actos a partir de la información recibida desde otras partes
del cerebro, el parietal es fundamental para integral toda clase de información sensorial para guiar
nuestros movimientos, en el lóbulo temporal se le da significado a la información sensorial auditiva y
visual que incide en los procesos relacionados con el lenguaje.
En este lóbulo está ubicado el hipocampo que es fundamental para desarrollar procesos de aprendizaje y
de memoria y en el lóbulo occipital se procesa la información visual.
Cada una de estas partes este compuesto por circuitos neuronales los cuales conforman unas redes en
donde se intercambian señales entre si desde distintas partes del cerebro siendo estas las responsables
de coordinar y cumplir con funciones mencionadas anteriormente.
A partir de esta información se hace evidente lo indispensable que es el buen funcionamiento del cerebro
para el desarrollo de nuestra vida en general. Como diría el psiquiatra y neurobiólogo Javier Aizpiri `toda
nuestra vida, nuestra felicidad y todo nuestro futuro depende de tener un buen sistema neuronal. `
¿Qué pasa entonces con nuestro cerebro y sus funciones cuando ingresan las sustancias psicoactivas?
Según estudios realizados por el Instituto Nacional de Salud de Estados unidos se produce una gran
interferencia, la forma en que las neuronas reciben y procesan la información se ve afectada notoriamente
deteriorándose, la comunicación normal entre estas. Si tenemos en cuenta lo mencionado anteriormente,
nos encontramos que toda nuestra capacidad de recibir información, de hablar, de movernos, de
aprender, de sentir se ve afectada. Por ejemplo, drogas como la cocaína puede llevar al cerebro a liberar
cantidades anormales de neurotransmisores lo que evita el reciclamiento normal de esta sustancia en el
cerebro alterando nuestras respuestas ante los diferentes estímulos.
El componente mental y emocional también se ve afectado
Las personas sanas mental y emocionalmente gestionan sus pensamientos, sentimientos y
comportamientos, establecen buenas relaciones personales y sociales pueden manejar de manera
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adecuada las problemáticas que se le presenten. Trastornos como la ansiedad, la depresión puede
generarse a partir del consumo de sustancias psicoactivas alterando este buen funcionamiento.
Según la doctora Irene Pérez Zapico, psiquiatra de la clínica de salud mental SAMU Wellness en Sevilla
Todas las drogas pueden tener algún efecto sobre la salud mental», especifica que, pueden desencadenar
un trastorno mental o agravar un trastorno preexistente. Con frecuencia, están asociadas a trastornos
afectivos (depresión, ansiedad…) y, en casos más graves, a trastornos psicóticos (donde se pierde el
contacto con la realidad). Sin embargo, los efectos son variables según cada droga.

Adriana Marcela Correa Muñoz y Augusto Pérez Gómez, en el estudio Relación e impacto del consumo de
sustancias psicoactivas sobre la salud en Colombia concluyen que cuatro grupos de trastornos
(dificultades psiquiátricas, neurológicas, cardíacas y respiratorias) resultaron significativos entre
consumidores de droga. Los trastornos psiquiátricos comprendían ataques de pánico, euforia excesiva,
ansiedad general, desmotivación, depresión y alucinaciones; los problemas neurológicos, aumento o
disminución de la sensibilidad, pérdida de memoria y dificultades motoras.

El mismo estudio pone de manifiesto que el consumo de sustancias psicoactivas afecta enormemente la
salud mental de las personas; resulta bastante interesante ver cómo el 94% de los no consumidores no
presenta ningún trastorno psiquiátrico mientras que la gran mayoría de los consumidores padecen más
de una enfermedad, síndrome o síntoma importante.

Es importante tener presente que el consumo de sustancias psicoactivas incide en la perdida de la salud
mental, pero problemas de salud mental también pueden llevar al inicio del consumo de sustancias
psicoactivas. En definitiva, el procurar mantenernos sanos de manera integral nos ayudara a prevenir el
incurrir en este tipo de consumos.
No es difícil entonces deducir que las personas que consumen sustancias psicoactivas sufren una
alteración total de su comportamiento, afectando su desarrollo personal.
A nivel familiar también se presentan una serie de alteraciones que transforman las dinámicas de las
familias, presentándose situaciones como:
✓ Violencia intrafamiliar
✓ Dificultades económicas
✓ Incitación al consumo por parte de otros miembros de la familia, sobre todo cuando hay menores
de edad.
✓ Se quiebran los canales de comunicación
✓ Se pierde el respeto y el cumplimiento de normas
✓ El estrés y la ansiedad puede afectar a otros miembros de la familia.
Cuando estas situaciones se presentan es muy probable que las familias necesiten la intervención de
terceras personas que les ayuden a superar la problemática, porque la experiencia que están viviendo no
les permite encontrar solos la salida.
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¿Cuáles son estos indicadores de consumo?


Existen comportamientos o actitudes que pueden indicarnos que una persona está en contacto con
sustancias psicoactivas, a estos se les denomina indicadores se consumó. Este tipo de actitudes se
evidencia en los diferentes escenarios donde vive su cotidianidad, ya sea la familia, el trabajo, la
comunidad en general. Para una mayor comprensión de estos vamos a agruparlos en 5 categorías:
1. Cambios en el estado de ánimo: la persona
✓ Se irrita fácilmente o sin motivo
✓ No le interesan las cosas que antes le gustaban
✓ Es indiferente
✓ Muestra distanciamiento afectivo
✓ Decae su estado de animo

2. Cambios en la conducta: La persona


✓ Inasistencia a clase/trabajo
✓ Incumplimiento de sus responsabilidades
✓ Disminuye la capacidad de memoria y atención
✓ Asume comportamientos agresivos

3. Cambios en la presentación personal: el individuo


✓ Descuida su apariencia
✓ Cambia sus hábitos de higiene
✓ Tiene los ojos rojos o vidriosos
✓ Esta somnoliento
✓ Puede tener aliento a alcohol
Estos no se presentan todo el tiempo y dependen del tipo de droga que se consuma.
4. Cambios de hábitos: la persona
✓ Tiene el sueño más prolongado de lo habitual
✓ Cambia los horarios de alimentación
✓ Deja de hacer ejercicio o practicar un deporte
✓ Llega tarde a su casa o al trabajo
Debemos tener presente que cada individuo tiene diferentes hábitos y que cualquiera de estos puede
modificarse ante el consumo de sustancias.
5. Cambios en las relaciones familiares o cercanas: La persona
✓ Cambia la forma de interactuar y compartir con su familia
✓ Incumple con los compromisos adquiridos
✓ Prefiere compartir con personas distintas a su grupo de amigos.
En la medida que avanza el consumo se van haciendo más evidentes los indicadores que hemos
mencionado. De igual manera es importante aclarar que este tipo de comportamientos pueden
presentarse ante otras situaciones de la vida, por lo tanto, por sí solos no son suficientes para determinar
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que una persona consume o no sustancias psicoactivas, se debe complementar información atreves del
uso de instrumentos de evaluación, técnicas como entrevistas, exámenes químicos que confirmen el
posible caso de consumo.
Las causas por las cuales un ser humano inicia el consumo de sustancias psicoactivas son múltiples, puede
ser por curiosidad, presión social, inadecuadas habilidades sociales, disfunción familiar, repetición de
patrones, normalización del consumo. Lo que hace necesario que reconozcamos los factores que incitan
al consumo o que previenen el mismo.
Para una mayor comprensión definiremos factores como aquellos atributos o características individuales,
familiares o sociales que posibilitan o reducen el consumo de sustancias psicoactivas. estos son llamados
factores de riesgo o factores protectores.
Conozcamos los factores de riesgo
✓ A nivel individual están asociados a la baja tolerancia a la frustración conductas agresivas, baja
auto estima, baja habilidad para tomar decisiones, inseguridad.
✓ A nivel familiar el consumo de sustancias psicoactivas por parte de otros miembros de la familia,
violencia intrafamiliar, debilidad en los vínculos afectivos.
✓ A nivel social encontramos disponibilidad de las sustancias psicoactivas, no contar con redes de
apoyo, la normalización del consumo y no contar con programas que promuevan la prevención
del consumo
Hablemos de factores protectores
✓ A nivel individual están las habilidades sociales, la capacidad de afrontar problemas, la empatía,
autoestima alta
✓ A nivel familiar encontramos un buen nivel de comunicación, relaciones basadas en el respeto y
la confianza
✓ A nivel social tenemos la participación en actividades comunitarias, el acceso a los servicios de
salud, la existencia de programas de prevención de consumos por parte de las entidades
encargadas de abordar el tema.
Con lo expuesto hasta el momento logramos reconocer aspectos básicos sobre el tema de sustancias
psicoactivas, lo negativo que puede ser su consumo en la vida de las personas e inclusive algunos
indicadores que son una alerta para identificar casos de consumo. Sin desconocer lo importante que es
identificar esta información, en una sociedad donde según el observatorio de drogas de Colombia un 9,7%
entre los 12 y 65 años de la población ha consumido sustancias ilícitas (lo que equivale a un 2,3 millones
de personas), un 30,1% de los ciudadanos consume actualmente bebidas alcohólicas (aproximadamente
unos 7,1 millones de personas) y un 9,7% (equivalente a 2,3 millones de personas) de los encuestados
consume actualmente tabaco evidenciándose a través de estas cifras que en Colombia existe un alto
índice de consumo lo que afecta el bienestar la salud y el desarrollo de las capacidades de los ciudadanos.
Esta situación deja en evidencia la importancia de prevenir el consumo de sustancias psicoactivas, sin
desconocer que una persona que consume tiene posibilidades de rehabilitarse, siempre será más efectivo
evitar consuma sobre todo de manera habitual, compulsiva problemática y dependiente.
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¿Como prevenimos el consumo de sustancias psicoactivas?
La prevención del consumo de sustancia psicoactivas son un conjunto de acciones que tienen como
objetivo eliminar o modificar los factores de riesgo y fomentar los factores protectores procurando que
el consumo no se produzca, lograr que se prolongue su inicio o que no genere conflicto para el individuo
en su entorno familiar y social.
Si analizamos detalladamente el pretender modificar los factores de riesgo y fomentar los factores
protectores, implica que nos reconozcamos como seres integrales en donde la familia y el entorno inciden
en nuestro accionar. Es decir, si quiero evitar el consumo de sustancias psicoactivas debo tener en cuenta
que características de mi familia y mi comunidad favorecen o dificultad el alcanzar este propósito.
Como sujetos autónomos y responsables de nuestras acciones podemos decidir la práctica de una serie
de actividades que incidan positivamente en nuestra vida personal familiar y social que nos permitirán
estar alejados del consumo de sustancias psicoactivas y procurar tener una vida sana y estable, como, por
ejemplo:
❖ Practicar hábitos de vida saludable como hacer ejercicio, comer sanamente, descansar, tener
momentos de recreación y esparcimiento.
❖ Fortalecer la capacidad de tomar decisiones, de canalizar de manera adecuada las emociones y
desarrollar intereses y talentos.
❖ Procurar establecer canales adecuados de comunicación con los miembros de la familia, con los
compañeros de trabajo procurando siempre establecer normas de convivencia clara y específicos.
❖ Planear las actividades laborales teniendo en cuenta los objetivos por cumplir y los tiempos
requeridos para alcanzarlos y evitar así el cumulo de actividades, que genera agotamiento,
frustración y estrés.
❖ Participar en actividades comunitarias, generando momentos de esparcimiento y recreación
desarrollando actividades que nos permitan disfrutar la vida.
❖ Establecer redes de apoyo, generando vínculos con personas con las que podemos compartir,
aprender, socializar nuestro sentir y pensar frente a diferentes situaciones de la vida.
Es necesario que tengamos en cuenta, al momento de querer aplicar estas prácticas, el entorno y la cultura
en la cual vivimos nuestra vida, muchos comportamientos que pueden ser factores de riesgo frente al
consumo de sustancias se normalizan y hace que sea muy difícil reconocer que esa práctica puede incidir
para que consuma sustancias psicoactivas o que lo haga de una manera no controlada. Por ejemplo, el
consumo de alcohol cada vez es iniciado a una edad más temprana y en muchas ocasiones son los mismos
padres que incitan a los hijos para que lo hagan, porque consideran que de esa manera puede divertirse
más, entre otras razones.
Debemos procurar siempre mantener nuestra salud y nuestro bienestar lo que nos ayudara disfrutar
verdaderamente la vida.

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